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REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LOS LLANOS


OCCIDENTALES EZEQUIEL ZAMORA
UNELLEZ - APURE

EL Derecho
Hereditario Romano

FACILITADOR (A): BACHILLERES:

 Daniel Bohórquez

 Abg. Pedro Bastista.  Greimar Rangel

 Rafael Jiménez

 Yohana Vargas

ELORZA, OCTUBRE DEL 2018.


Derecho Hereditario en Roma

El Derecho hereditario es un derecho que corresponde al heredero, y que


consiste en la transmisión patrimonial de los bienes del difunto. En Derecho
romano fue consagrado como una forma hereditaria el concepto de sucesión
universal, adquisición universal del patrimonio, que se halla presidida por una alta
idea.

Mediante el testamento, autoriza al propietario para realizar plenamente su


derecho de libre disposición, a la hora de la muerte, haciendo que su propiedad
personal prevalezca sobre los derechos de los familiares. Y así, frente a la
herencia intestada. Única conocida por el Derecho antiguo se alza la herencia
testamentaria. Sin embargo, la libertad del testador no es omnímoda:
el Estado vela para impedir que sin justa causa, abusivamente, excluya a los más
próximos familiares de la herencia y concede a éstos en tal coyuntura derechos
hereditarios contra el testamento: herencia forzosa.

A través de una larga evolución histórica, que sólo nos es dable reconstruir en sus
rasgos más salientes.

Técnicamente, la sucesión universal es una modalidad de la adquisitio per


universitatem; es decir, la adquisición en bloque, como unidad, de todos los
derechos comprendidos en un patrimonio o hacienda, por medio de un acto
jurídico personal, producida en un instante y por virtud de un título jurídico único.
Más de suyo, como simple variante de los modos de adquirir, produce solamente
una adquisición. Lo cual no quiere decir que se limite a transferir los bienes
activos, con exclusión del pasivo hereditario; transmite también las deudas del
difunto, pero el adquirente no responde de ellas en persona, sino con los bienes
mismos heredados. O, por mejor decir, es la herencia quien responde. La
sucesión universal pura y simple se reduce, de este modo a una sucesión
universal en los derechos; es por consiguiente, una adquisición universal en la

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estricta significación de esa palabra; un acto jurídico adquisitivo, aun cuando la
cuantía de lo adquirido resulte mermada por las deudas de que responde.

Los derechos hereditarios versan siempre sobre el patrimonio en su totalidad,


comprendiendo activo y pasivo, bienes, créditos y obligaciones: inuniversum ius
defuncti. Es como si cada heredero en la medida que le corresponde se adquiere
todos los derechos y todas las deudas; con responsabilidad solidaria, si éstas son
indivisibles.

Las obligaciones aquí se transmiten, al igual que se transmiten los derechos,


como valores patrimoniales independientes y no como simples menoscabos de la
adquisición y aun cuando no existiese adquisición alguna es decir activo como en
la práctica acontece, se transmitirían. Porque el heredero responde de las deudas
del difunto, no sólo con los bienes que de él recoja sino personalmente, con los
suyos propios, como si por él mismo hubieran sido contraídas las deudas
heredadas

En los demás pueblos, la herencia no traspasa los confines de la simple


adquisición universal .Fue la ley romana quien abrió aquí los cauces del progreso,
demostrando de esta suerte su ideal superioridad sobre el régimen hereditario de
los germanos, y esta superioridad le aseguró el triunfo en el Derecho de
Pandectas y en los modernos Códigos.

La idea inspiradora de la herencia en las Fuentes romanas toma por punto de mira
e idea fundamental los derechos hereditarios de los hijos. Éstos –los sui heredes–
continúan la personalidad del paterfamilias muerto, subrogándose, con este
carácter, en sus deberes de culto y hospitalidad, así como en las relaciones
patrimoniales; y lo mismo ocurre al heredero extraño, llamado en lugar del hijo. En
el rumbo ulterior que toman las instituciones hereditarias, desempeña papel
preponderante el interés práctico de los acreedores de la herencia. Aquel
concepto de sucesión en la personalidad tenía para ellos grandes ventajas, toda
vez que les ofrecía un nuevo deudor personalmente responsable, como el antiguo.
Y a éste se une el interés de los deudores, puesto que ahora pueden abrir crédito

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a la persona sin el temor de que, al morir ésta, la deuda caduque; para los efectos
del derecho privado, la personalidad patrimonial se inmortaliza. He ahí todas las
posibilidades que se encierran en este fundamental principio del Derecho romano.

En el Derecho Hereditario atraviesa por dos fases.

 La Delación

Es el llamamiento y otorga a una persona, en el caso concreto, el derecho a


heredar, le defiere u ofrece a la herencia.

 La Adquisición

Constituye la libre resolución de aceptarla, y por ella el heredero adquiere


condición de tal, realizando su derecho hereditario latente.

Téngase en cuenta, para comprender este mecanismo, que en el derecho romano


la herencia, no solo acarreaba ventajas, si no que llevaba también aparejaba la
carga de responder personalmente y sin limitación alguna, hasta el derecho
justinianeo.

La "Herencia Yacente"

Encierra derechos y obligaciones, y puede inclusive adquirir nuevas


obligaciones o nuevos derechos. Sirvan como ejemplo de lo segundo la
adquisición de frutos, los negocios jurídicos celebrados por esclavos hereditarios y
el remate de una usucapión pendiente a favor de la herencia; de lo primero, la
gestión, por parte de un tercero, de ciertos negocios hereditarios, los delitos
cometido

Los efectos de la adquisición de la herencia se retrotraen al momento de la muerte


del causante. Y esta misma norma permite resolver el problema, a primera vista
tan difícil, de quién sea el titular de los derechos y obligaciones que encierra la
"herencia yacente". Es la misma herencia, según la opinión dominante, su propio
sujeto, recibiendo para estos efectos consideración de persona jurídica, análoga
en cierto modo a la fundación. Según otros, la hereditasiacens carece
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interinamente de titular; los derechos y obligaciones que la constituyen se hallan
privados de sujeto. Os por un esclavo, etc.

El Derecho Romano Primitivo admitió el principio de transmisión del patrimonio


por mortis causa, en unidad a persona determinada heredero. Al morir el sujeto de
las relaciones jurídico patrimoniales, una serie de derechos se extinguirían, los
vinculados a la persona, pero otros pasaban al heredero con todas las
responsabilidades inherente de ese título oneroso. Tanto el activo como el pasivo
delo patrimonio transmisible se transformara a titulo unilateral a los derechos
testamentarios o abintestatos

El problema del destino y la traslación de derechos de un apersona en el momento


de su muerte es un problema legado a la organización familiar y a las condiciones
sociales y económicas, en un momento, en una sociedad. Los germanos decían
que la sucesión era una suerte de posesión combinada con dominio que a la
muerte del jefe de familia era continuada por sus herederos de sangre. El
heredero adquiría los bienes en mérito a esa copropiedad preexistente es que éste
resultaba un sucesor en los bienes, si necesidad de acudir al artificio de la
continuación de la persona.

El objeto de la Herencia.

La herencia comprende todas las relaciones jurídicas de que era titular el " de
cujus" (difunto), salvo las de carácter personal o las que se extinguen con la
muerte del titular y no pueden transmitirse. No eran transferibles las facultades de
la patria potestad, la manus y la tutela. En el ámbito de los derechos reales, estos
en general son transmitibles, con excepción de aquellos de carácter personal,
como son el usufructo y el uso y la habitación. En las obligaciones, es transmitirle
la stipulatio de daré, pero no la de acere, aunque se podía extender a los
herederos en el acto estipula torio. El Plazo para decidirse hay que distinguir a
este respecto, el Derecho antiguo, el Derecho pretoriano y el Derecho de
Justiniano.

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Derecho Antiguo

La ley no imponía al heredero ningún plazo. Pero, en su testamento, el testador


podía señalarle uno instituyéndole cum cretione. En tal caso, estaba obligado a
decidir en el término de cien días, después de la muerte del difunto.

Derecho Pretoriano

A solicitud de los acreedores hereditarios, el pretor imponía al heredero la


obligación de resolver en cien días, después de los cuales se presumía que se
había renunciado a la sucesión.

Derecho de Justiniano

Justiniano llevó el tiempo para deliberar, tempusdeliberandi, a nueve meses y aun


hasta a un año con rescripto imperial. Después de este plazo, el heredero que no
decidía nuda se tenía por aceptado presuncionalmente.

Fideicomisos de Herencia

Se tiene un fideicomiso de herencia en los casos en que el difunto, al instituir un


heredero en su testamento, encarga a este heredero transmita todos sus bienes, o
una parte alícuota de ellos, a un fideicomisos.

Sucesión Universal Mortis Causa

Sucesión por causa de muerte, conocida como herencia o sucesión universal,


comprende el libre poder de disposición del páter, pero en ésta el causante
dispone en vida para después de su muerte de sus bienes

La sucesión hereditaria es una consecuencia necesaria de la adquisición del título


de heredero, el cual viene a ser, por lo tanto, una verdadera condición subjetiva de
capacidad para la adquisición universal del patrimonio

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La institución de heredero debe ser hecha en modo solemne que consiste en la
atribución de la cualidad de heredero hecha en forma imperativa:” Ticio sea
heredero” o “ordeno que Ticio sea heredero”. En todo caso la forma tenía que ser
imperativa para distinguir la institución de heredero del fideicomiso, que se hacía
en forma de ruegofunto."

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