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¿Cómo era la educación pública en el México independiente?

Durante buena parte del siglo XIX, en México no hubo un sistema formal de
enseñanza pública, por lo que esta quedó en manos de asociaciones de
beneficencia y academias particulares nacionales o extranjeras. Tras obtener su
independencia en 1821, México mantuvo parte de la estructura educativa de la
época virreinal.
¿Qué es la educación independiente?

Implica la posibilidad de que cada alumno tome sus propias decisiones con
relación a la organización de su tiempo y a su ritmo de aprendizaje, por ello
requiere un alto grado de responsabilidad para aprovechar al máximo los recursos.

La Educación en el México Independiente

En los primeros años del México Independiente nuestro país intenta romper con
un sistema de gobierno impuesto por el dominio español. Las primeras décadas se
distinguen por el enfrentamiento entre dos grupos políticos que tratan de imponer
la forma de gobierno que ellos creen que es la adecuada para el país, este no
encuentra la forma apropiada de gobernar, se observa al ensayar distintos tipos de
Gobierno como la monarquía, la república federal, la república central y
nuevamente la república federal.

Las invasiones de Francia, las pérdidas territoriales con Estados Unidos y los
constantes enfrentamientos entre liberales y conservadores permitieron que una
generación de mexicanos, que ubicamos en las dos primeras décadas del siglo
XIX, tomara conciencia de lo mexicano, se sintiera orgullosamente nacionalista y
se preparara intelectualmente para enfrentar a las instituciones retrógradas del
país con el fin de destruirlas en forma definitiva: el clero y el ejército. La educación
privada en México se inicia desde tiempos de la colonia cuando los llamados
preceptores se ocupaban de la educación individual de niños, niñas y jóvenes.
La educación en nuestro país continúa siendo tema de interés por sus situaciones
económicas, sociales, filosóficas, morales, pedagógicas y sobre todo políticas. En
cada Sexenio el presidente en turno junto con el gabinete imprima los cambios
que son pertinentes así en el pasado desde los orígenes de nuestra nación ha
habido cambios de interés político e ideológico de los partidos políticos que
pretenden imponer su proyecto de nación.

La independencia no interrumpió la continuidad del proceso de reforma de


educativa que promovieron la Corte de Cádiz, ni tampoco frenó otros proyectos
como la creación de un plan de enseñanza pública general y la formación de un
órgano estatal que centralizara y organizara las actividades en este ramo. Esto se
explica en tanto que esas tareas estaban encaminadas a dar cohesión y sentido a
la nueva nación y con ello a legitimar su permanencia. En 1821 cuando México se
independiza públicamente, se puede considerar como el inicio de la historia de su
educación institucional. Asimismo, se inicia una serie de intentos de reforma
económica, política y social.

En 1823 se inicia el primer proyecto de Reglamento General de Instrucción


Pública, donde se decía que la instrucción debe ser pública y gratuita. También se
ordena la creación de escuelas para niñas y para adultos. Este primer proyecto
mostró que los gobernantes deseaban que la educación llegara a un público
formado por niñas, niños, jóvenes y adultos. Sin embargo, la situación política que
atravesaba el país no permitió que este ambicioso plan se llevara a cabo. En el
proyecto del Reglamento General de Instrucción Pública de 1823 se decía que
"todo ciudadano tiene facultad de formar establecimientos particulares de
instrucción en todas las artes y ciencias, y para todas las profesiones, pero el
Estado se reservaba la autoridad de supervisar y asegurarse de que los maestros
de estas escuelas tuvieran las aptitudes y preparación necesaria para la
enseñanza". La instrucción era uno de los medios más poderosos de prosperidad,
por tanto, la educación no debería concretarse a enseñar, a leer y escribir, sino
dotar a los ciudadanos de una forma moral y política.
Es a partir de la promulgación de la Constitución de 1824 cuando comienza a
integrase un proyecto político que implica a la educación como instrumento de
Estado, reflejando ya en ella aspiraciones sociales y económicas, así como sus
intereses y orientaciones, es decir, su ideología.

Las reformas llevadas a cabo por Valentín Gómez Farías en 1833 reiteraban la
obligación que tenía la Iglesia para abrir escuelas de primeras letras en parroquias
y casas de religiosos haciendo hincapié en que tenían que ser gratuitas, razón por
la cual formaban parte del sistema público de educación.

El concepto de educación particular empieza a adquirir sentido más por razones


de pertenencia a un estrato social determinado que sólo por cuestiones
ideológicas. Hacia 1830 empiezan a abrir escuelas reforzadas con la llegada de
maestros franceses para un alumnado capaz de sostenerlas, sin recibir ningún
subsidio del gobierno. Estos establecimientos se consideraron entonces como
escuelas privadas, en tanto que las de la Compañía Lancasteriana y las de los
conventos y parroquias eran gratuitas y por lo tanto públicas. Esta distinción
económica no las excluía de la vigilancia del Estado, en el sentido de que no
podían enseñar nada contrario a la moral ni a las reglas del gobierno.

En el periodo post independentista, el sistema educativo no cambió


significativamente, las dificultades que enfrentaba la recién establecida nación
mexicana fueron un factor definitivo en el estancamiento al momento de proponer,
establecer y desarrollar un sistema educativo nacional.

Hacia 1830, cuando el estado de la educación era crítico debido a las múltiples
carencias de la educación elemental y a la postración de la educación superior en
colegios y universidades, Lucas Alamán propone una serie de reformas educativas
respecto a la segunda enseñanza cuyo objetivo es quitar lo superfluo y establecer
lo necesario. Sin embargo, el proyecto de Alamán nunca llegó a realizarse y Mora
impugnó las ideas de Alamán.
La corriente liberal que habían accedido al poder una vez concluido el movimiento
que dio independencia al país, propuso en 1833 una reforma liberal que proponía
suprimir la participación de la iglesia en la educación, propuesta que no fue bien
vista por los sectores conservadores de la población y como consecuencia esta
idea se abandonó al año siguiente, sin embargo, las ideas de libertad seguirían
apareciendo en los años subsecuetes. (educacion, 2021)

Partes 2

En el contexto del México Independiente nuestro país intenta romper con un


sistema de gobierno impuesto por el dominio español. Las primeras décadas se
distinguen por el enfrentamiento entre dos grupos políticos que tratan de imponer
la forma de gobierno que ellos creen que es la adecuada para el país. La
independencia no interrumpió la continuidad del proceso de reforma de educativa
que promovieron la Corte de Cádiz, ni tampoco frenó otros proyectos como la
creación de un plan de enseñanza pública general y la formación de un órgano
estatal que centralizara y organizara las actividades en este ramo. Esto se explica
en tanto que esas tareas estaban encaminadas a dar cohesión y sentido a la
nueva nación y con ello a legitimar su permanencia. Cuando México se
independiza políticamente a partir de 1821, se puede considerar como el inicio de
la historia de su educación institucional, si bien de manera aislada y mostrando
apenas intentos organizativos y a pesar de que se dictaron disposiciones al
respecto que tuvieron poco efecto concreto. Es a partir de la promulgación de la
Constitución de 1824 cuando comienza a integrase un proyecto político que
implica a la educación como instrumento de Estado, reflejando ya en ella
aspiraciones sociales y económicas, así como sus intereses y orientaciones, es
decir, su ideología. (Soto Lescale, 1997) Castillo ( 2007) nos narra que en el
discurso pronunciado en el Congreso Constituyente del Estado de México, en
1824, el doctor José María Luis Mora resumía sus ideas educativas de la siguiente
manera "Nada es más importante para un Estado que la instrucción de su
juventud. Ella es la base sobre la cual descansan las instituciones sociales de un
pueblo cuya educación religiosa y política está en consonancia con que el sistema
ha adoptado para su gobierno: todo se puede esperar, así como todo debe
temerse, de aquel cuyas instituciones políticas están en contradicción con las
ideas que sirvan de base a su gobierno; la experiencia de todos los siglos ha
acreditado esta verdad de un modo incontenible". En el periodo post
independentista, el sistema educativo no cambio significativamente, las
dificultades que enfrentaba la recién establecida nación mexicana fueron un factor
definitivo en el estancamiento al momento de proponer, establecer y desarrollar un
sistema educativo nacional. Hacia 1830, cuando el estado de la educación era
crítico debido a las múltiples carencias de la educación elemental y a la postración
de la educación superior en colegios y universidades, Lucas Alamán si hizo cargo
de los asuntos educativos por cuarta vez e informa que se carece de datos
fidedignos sobre el estado de la "ilustración" y menciona que el sistema de
enseñanza mutua no ha producido todos los resultados que eran de esperarse.
Ante ello, propone una serie de reformas educativas respecto a la segunda
enseñanza cuyo objetivo es quitar lo superfluo y establecer lo necesario.
(Meneses, 1998). El proyecto de Alamán nunca llego a realizarse y Mora impugnó
las ideas de Alamán y señaló con certeza la razón fundamental de la educación:
"El elemento más necesario para la prosperidad de un pueblo es el buen uso y
ejercicio de su razón, que no se logra sino por la educación de las masas, sin las
cuales no puede haber gobierno popular. Si la educación es el mono polio de
ciertas clases y de un número más o menos reducido de familias, no hay que
esperar ni pensar en sistema representativo, menos republicano y todavía menos
popular" (Meneses, 1998) La corriente liberal que habían accedido al poder una
vez concluido el movimiento que dio independencia al país, propuso en 1833 una
reforma liberal que proponía suprimir la participación de la iglesia en la educación,
propuesta que no fue bien vista por los sectores conservadores de la población y
como consecuencia esta idea se abandonó al año siguiente, sin embargo, las
ideas de libertad seguirían apareciendo en los años subsecuentes
https://www.milenio.com/opinion/alfonso-torres-hernandez/apuntes-pedagogicos/
la-educacion-en-el-mexico-independiente

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