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8.2.

El impacto de los acontecimientos internacionales: Marruecos, la


Primera Guerra Mundial y la Revolución Rusa.
A partir del comienzo de la Primera Guerra Mundial (1914-18), el sistema político en España
comenzó a decaer y no salió de este declive hasta la dictadura de Primo de Rivera (1923-
30). Además, supondrá el periodo más crítico del reinado de Alfonso XIII con la crisis de
1917 y la Guerra de Marruecos.
La Guerra de Marruecos comenzó debido a varias cuestiones. En primer lugar, Francia
influía en el Norte de África, lo que incordiaba a las potencias europeas. Por lo que
apoyaron la celebración de la Conferencia Internacional de Algeciras (1906), por la que
Francia y España se repartían la tutela sobre Marruecos. Por otro lado, Francia intervino
rápidamente por lo que España debía hacer efectiva su ocupación. Esta intervención
beneficiaba al Ejército y a algunas empresas y particulares. Las primeras expediciones
españolas se introdujeron en el Rif, una zona habitada por tribus bereberes. Las tropas
españolas estaban formadas por reclutas inexpertos y desanimados ante esta intervención.
Además, las emboscadas fueron constantes. Posteriormente, las tropas españolas tuvieron
que enfrentarse a diferentes líderes como a Abd-el-Krim, un líder nacionalista y republicano
que lideró un movimiento independentista de masas. Esta intervención se inició en 1909
cuando los rifeños atacaron a los obreros del ferrocarril que España estaba construyendo
entre Melilla y las minas del Rif. En el Barranco del Lobo se produjo un enfrentamiento.
Continuaron avanzando, sin embargo Marruecos les derrotó en el desastre de Annual (julio-
agosto de 1921). En este altercado el general Manuel Fernández Silvestre, se alejó de
Melilla y a su vez los españoles cercados por Abd el-Krim en Annual, huyeron hacia Melilla.
Finalmente, este conflicto supuso la pérdida de las posiciones españolas en Marruecos.
La guerra de Marruecos tuvo una serie de consecuencias. Los militares, hartos de las
críticas, reprochaban a los políticos su falta de recursos para ganar la guerra. Además, el
ejército quedó dividido entre Africanistas, partidarios de seguir la guerra en Marruecos, y
Peninsulares o junteros, partidarios de abandonar el conflicto. Por otro lado, se usó la
polémica sobre las responsabilidades del desastre para desacreditar el régimen de Alfonso
XIII. Por último, el desastre de Annual fue difícilmente tolerable para las clases medias y
humildes.
La Primera Guerra Mundial (1914-1918) afectó a España social y económicamente. Por un
lado, aumentó la industria y las exportaciones. Sin embargo, las condiciones económicas
disminuyeron, produciendo protestas populares. Cuando finalizó los países beligerantes
adoptaron medidas proteccionistas, lo que perjudicó a la industria española. Asimismo, la
desaparición de los imperios europeos y el estallido de la Revolución Rusa, animaron a los
republicanos españoles y al movimiento obrero.
La crisis de 1917 estuvo causada por las huelgas, la crítica de los intelectuales a la España
caciquil, Marruecos y la supresión de las garantías constitucionales. También causado por
un triple proceso. En el ámbito militar, se crean en 1916 las Juntas de Defensa, unas
organizaciones corporativas militares que surgen debido al malestar provocado por la
pérdida de poder adquisitivo y la política de ascensos. Su origen se debió a las pruebas de
aptitud que exigía Romanones, por lo que los militares perjudicados presentaron al rey el
Manifiesto de las Juntas. García Prieto contrario a las Juntas, lo que supuso su caída y por
ello los conservadores (Eduardo Dato) las reconocieron. Así como el rey lo que manifestó
su favoritismo hacia el Ejército y la revitalización del protagonismo militar. En el ámbito
parlamentario, los partidos marginados del sistema formarán la Asamblea de
Parlamentarios reclamando separación de poderes, soberanía nacional, mayor
democratización, etc. No obstante, el gobierno no lo aceptó y las acabó disolviendo debido
a la falta de apoyo del ejército y los desacuerdos internos.
En el ámbito social, la crispación social, la inflación, el descenso de poder adquisitivo de los
trabajadores, la congelación salarial y las desigualdades sociales provocaron un intentó de
huelga general por parte del proletariado. Triunfó en algunas zonas pero fue reprimida por el
propio ejército. Sin embargo, supuso el aumento de los sindicatos y la crisis del sistema
turnista canovista.
El triunfo de la Revolución bolchevique en Rusia en 1917, entusiasmo a las organizaciones
obreras en Andalucía, en dónde surgieron una serie de actividades revolucionarias,
provocada por la situación de miseria de los jornaleros agrícolas. Promovieron huelgas,
ocuparon campos, se repartieron tierras y se tomaron ayuntamientos. Finalmente, la
declaración del estado de guerra y una dura represión pusieron fin a la revuelta social de
1920.
Tras el fracaso de la huelga general de 1917, aumentó la agitación social en Cataluña. La
patronal catalana respondió con igual dureza, frente a las distintas adversidades que se
presentaron durante la crisis. Este clima propició la “ley de fugas”. Además de lo que afectó
la gripe española.

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