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El peor día de mi vida

El día 17 de Abril del año en curso, tras regresar de vacaciones mí familia y yo


fuimos invitados a festejar el ascenso de un vecino en su trabajo el cual iba a tomar
lugar en el Lago de Guadalupe. En dicho lugar había renta de caballos, bicicletas y
cuatrimotos así que después de haber pedido permiso a mis padres accedieron a
rentarme esta última.

Sin embargo, resultó ser que la cuatrimoto era inestable además que el
camino no ayudaba mucho al ser montañoso, lo que culminó en una caída tras
intentar subir una montaña, en primer lugar fui yo quien cayó seguida de la
cuatrimoto, la cual, me golpeó fuertemente en la cabeza contra el piso. Lo siguiente
que recuerdo fue haber cubierto mi cabeza con las manos y sentir sangre escurrir
por mi cuello, posteriormente mi padre corrió hacia mi preocupado aún más al ver la
sangre al igual que mi mamá, al principio no sabían que hacer pero algo era claro,
tenían que llamar a una ambulancia que terminó siendo una vecina quien la
realizara.

Tras no llegar la ambulancia en un lapso de 5 minutos mis vecinos junto con


mi padre decidieron llevarme al hospital por su cuenta usando una mesa plegable
como camilla de esta forma llegando al hospital más cercano que resultó ser privado
donde me hicieron el primer chequeo, el cual no daba buenas impresiones pues se
trataba de un escalpe, que prácticamente es cuando se levanta la piel del cráneo
quedando este expuesto, por lo que nos recomendaron ir a otro hospital más grande
y con especialistas, seguido de suminístrame una dosis de ketorolako para el dolor y
de vendarme.

Al salir de ahí nos dirigimos al hospital Bicentenario, allí me atendieron


inmediatamente realizándome ecografías para descartar una posible fractura craneal
la cual no tenía por muy aparatosa que era la herida aunque no se dejó de lado la
idea de que podría provocar convulsiones en un futuro por lo que me mantuvieron en
constante revisión. Cuando llegó el momento de suturar los doctores se percataron
de otras dos heridas una pequeña y una más grande que había sido provocada por
el choque contra el piso quedando así una del lado derecho y dos del izquierdo pero
no afectó en nada así que la saturación transcurrió sin problemas.
Tras comer y observar que mi sistema nervioso no rechazaba la comida se
me dio el alta con dos semanas en reposo absoluto y una con moderado. En el
transcurso de la primera semana las visitas por familiares no cesaron lo cual me
subía el ánimo, sin embargo, el sueño era abundante a causa de la incomodidad al
dormir pero posteriormente se resolvió. Cuando se cumplieron los 9 días del
accidente se me mandó a hacer placas para observar que no existiera esguince
alguno en el cuello para así al día siquiente retirar los puntos los cuales resultaron
ser más de 40.

Después de eso lo único que hice fue descansar por dos semanas para
regresar sin ningún problema a la escuela, lo cual fue increíble ya que pude regresar
con mis amigos y por fin salir de la casa. Ahora me encuentro saludable y con tres
nuevas cicatrices que me recuerdan que nunca más me debo subir a una cuatrimoto
sin usar protección (casco).

Gutiérrez Sarabia, Valeria


UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

COLEGIO DE CIENCIAS Y HUMANIDADES PLANTEL NAUCALPAN

TLRIID-I

FINAL ALTERNATIVO

Nombre: Gutiérrez Sarabia, Valeria

No. de cuenta: 323182605

Profesora: Galaviz Sandoval, Gabriela

Fecha de entrega: 28 de Octubre del 2022

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