Las 4 fases del

Onboarding

Las organizaciones tienen que ir más allá para atraer a

empleados de calidad. Optimizar el proceso de
incorporación es una estrategia clave para mejorar su
marca de empleador y reclutar mejores candidatos.

Fase 1: Pre-Onboarding
Comienza en cuanto el candidato acepta su oferta y continúa
hasta su primer día de incorporación. Ayuda a los empleados
a completar todo el papeleo necesario. Asegúrate de darles
tiempo suficiente, ya que es posible que estén terminando las
tareas de salida en su anterior organización.

Fase 2: ¡Bienvenidos, nuevos

empleados!
Mantén el primer día lo más sencillo posible. Durante la
orientación, ayúdales a comprender mejor tu cultura
organizativa y muéstrales cómo tus prácticas de trabajo
están en consonancia con esta cultura. Habla de temas como
el tiempo libre, la asistencia, el seguro médico y las nóminas.

Fase 3: Formación específica

para el puesto
La fase de formación es una de las más importantes de la
integración, y está directamente relacionada con el éxito de
los nuevos empleados en su trabajo. Sin una formación
formal, es posible que tus empleados no sepan lo que se
necesita para triunfar.

Fase 4: Facilitar la transición a

su nuevo rol
La última fase de la integración tiene por objetivo ayudar a
los empleados a pasar del rol de recién contratado al de
empleado. Anima a tus jefes a establecer expectativas
claras para los nuevos miembros de su equipo, para que
sepan de qué son responsables.

Realizado por Rosa Pamela