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Cine Militante de los nov~nta.

El cine y sus posibilida-


des de transformar la realidad
Por Ma:riroiliaoo de la Puente y Pablo Russo

Desde princip ios de la década del noventa , el cinc militante, de larga y


fructífera tndició n tanto en la Argent ina como en el resto del mundo, resurgió en
nuestro país a la par de la agudiza ción de los conffictos sociales en general, y de
la revalorización del género docume ntal en particular. Es en estos años cuando
crece el interés por el cine docume ntal, y en paralelo con el docume ntal de autor, 1
comienzan a formars e colectiv os de cine social y político, con algunas caractcristi-
cas similares, y otras diferen tes a las de los grupos de los años sesenta y setenta.

Conside ramos el cine militan te como aquel que hace explícitos sus ob-
jetivos de contra.i nforma ción, búsque da de cambio social y toma de conáen cia,
al elaborar, a través de sus películas, nn discurso crítico de distintos aspectos de
la realidad Entre las características generales de los grupos de cine militante se
destacan, por un lado, la utilización del cine como herram ienta para la transfor-
mación social -al cual le asignan un fuerte valor contrai nforma tivo-; y por el otro
lado, una metodo logía de produc ción emerge nte y una búsque da de modos de
exlnoición alternativos al cine industri al o comercial. Una particularidad funm-
mental que diferencia las práctica s de los grupos actuales respect o de las fonna--
ciones de los años sesenta y setenta, :es la ocupac ión del espacio público por parte
de las producc iones contem poránea s. Proyectar, presenciar, interact uar -y aun
foment ar- en las asamble as, en las fábricas recuperadas, en las manifestaciones
políticas, en los cortes de ruta, se ha vuelto una constan te entre los nuevos grupos
de cine militante. Como sostien e Leonor Arfuch, en los últimos años, "la alle
fue transfo rmándo se en escenar io obligad o de participación y experimentación,
en el territorio por excelencia de la comple ja aleación entre arte, compro miso y
política" (Arfuch, 2004: 114). Las práctica s en el espacio público son así el terreno

1
Consideramos como tales a aquellos film¡ que cuestionan el documental e.'\.-positivo tradicional, a
U:Oéa de formas nprcaivu dadas, entre otros factores, por las intervenciones expliciw de las subjeti-
vidades de loa realizadores en NI películas, lo que ocasiona una mayor conciencia de su utificialidad;
esto es, de ICl' sólo una lectura poaible, entre tantas, de la realidad Películas como Los rubios (2003),
de Albcrtina wri y N (2007), de Nicolás Prividera, aon ejemplos paradigmáticos de este tipo de
documentu.
138 • Ci ne Militante de los
noventa . El cine y sus posibilidades
de transformar la realidad

habitual de lo s gr up os de ci
ne de in te rv en ci ón po lít ic
. .
do a las du ra s co nd ic . . a. En lo s años set
io ne s re pr es iv as 1
ttn pu es ta s po r as dictadu enta, deb'1
· er an · ealiz bl
experiencias ras milita •
irr a es. res, estas
Algunos de lo s gr up os qu
e su rg ie ro n en es te pe rio
fluencia de la Capital Fe de ra do , en el área d .
l y eIGra n Bue no s Ai.re s,
en 1999), Bo ed o Films (199 so n: Ci ne Insurgente (se~
2), O jo O br er o (2001), Co
(1996), Venteveo Vi de o (200
1), Pr im er o de M ay o (199
nt ta im ag en (1997),
8) y Mascaró Cine Ame-
Ala~:
ricano (2002). Se fo rm ar on
ta m bi én-o tra s ag ru pa ci on
co m o po r ejemplo: O jo Iz es en el interior del país,
qu ie rd o (1999),. de la pr ov
(1992), de-Jujuy, y Sa nt a Fe in ci a de Neuquén; Wayruro
D oc um en ta (2003), de Sa
fueron expresiones tempora nt a Fe. Algunos grupos
les, qu e na ci er on al ca lo r
rápidamente se disolvieron de la crisis .de 2001,2 y que
. O tro s se co ns tit uy er on co
trabajo y de en cu en tro en lo m o colectivos, espacios de
s qu e con.fluían di sti nt os gr
producciones comunes: po up os , co n el fin de realizar
r la calidad y ca nt i~ d de
Ar de (2001) y Ki no Nu es tra su s realizaciones, Argentina
Lu ch a (2002) so n lo s ej em
pl os m ás destacados.

Los gr up os se au to de ún en

¿Q ué pi en sa n de l ci ne lo s di
sti nt os gr up os de cine mili
en los años noventa? Si bi tante que surgieron
en no existe un espacio pe
de discusión teórica en tre rm an en te de encuentro Y
to do s lo s gr up os , en el in
g en ~ reflexiones a pr op ós te rio r de cada colectivo se
ito de sus pro~uccio~es y de
plano estético co m o en el po su accionar, tanto en ~
lítico. Es ta s dc lib er aa on es
de manifiestos_, volantes, pu se pu ed en rastrear a partir
blicaciones partidarias, pági
integrantes de lo s grupos, nas webs, entrevistas a los
y también en 1~ im po rta nt e
en lo s últimos años to m ó _producción académica que
a este tip o de eme co m o 0 hJ
eto de estudio.3
2 En diciembre de 2001 1c pro
du jo un estallido po p~ ar
po lió ca, ncolibctalcl qu e co mo ,co~ sce uen cia de la
pro fun diz aro n la crisis s? agu diz aci ón de las
dí u de ese año se suce4icro °a l y e~ ~~ :~ ca en la Ar gen
tin a. En los úJtifll<>S
n cin co pre sid ent es, ffilentras
101 piquetel y asa mb lcu po e alles de tod o el paí s se mu
pu lar es. ltiplicaban
, De 1a abundante ~• rc i6
. . n aca dém ica de Jos úl~ · s año s co n res p
o lí .
los agm ent .e1 : "Nuer..
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s doc de int e:r ven cio n po bca.. derechos ect o a est e terna. cab e des
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n" de Gabricla Bu sto s; "M , lec tiv a, cin colectivohU rnano -
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Y em on a co hri. . Doe da
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drea de la política en el audio 0" de C sti an ro Lo , e JaVJer Ca mn o•
Cine documt:ntal, mt :m Or Íll visual de los 9 ' . J vie r Ca mp o y Chris · s tre s --· t' •
"E nc ua ·
Y d~ ho .,; humano.~. a tian D ~ PUeden con sul tar en
.1 aro (co mnc \ 0
Maximiliano de la Puente y Pablo Russo • 139

Ojo Obrero, en su manifiesto fundacional del 29 de mayo del 2001, sos-


tiene que los medi~s masivos de_ ~omunicació~ son utilizados por la burgu~~ía
obJ.ettvo: la obtenoon de ganancias por un lado, y la penetraoon
con un doble
ideológica y cultural acorde a sus intereses como clase dominante por otro. Por
eso sostiene:

[... ] como grupo de cine nos proponemos utilizar el arma con la que contamos (la
realización audiovisual) para cooperar desde nuestro lugar con el camino que está
emprendiendo hoy la clase trabajadora. Las luchas, los cortes de ruta, las ocupacio-
nes, las huelgas, las movilizaciones, las asambleas... ahí vamos a estar. 4

En cuanto a su modo de funcionamiento, destacan un acuerdo ideológico


por sobre uno estético: para definir objetivos y bases de acción, en lugar de partir
de una definición de tipo cultural, consideran que deben elaborar una caracteri-
zación político-social. La contrainformación no se les plantea como-un fin en
sí mismo, sino como una herramienta para lograr un objetivo superior, que · es
buscar una salida política propia de los trabajadores.

El grupo Alavío toma posición sobre el fenómeno del cual forma parte pro-
poniendo aportar desde lo audiovisual a la participación activa en la lucha de clases,
entendiendo que la contribución desde la realización es constituyente de subjetivi-
dad. Plantean recrear simbólicamente representaciones-del mundo desde la óptica
e intereses de la clase trabajadora, así como realizar aportes tanto estéticos como
térnicos a ttavés del tratalníento dél lenguaje audiovisual. La democratización de la
producción audiovisual implica, para el grupo Alavío, la posibilidad de generalizar y
difundir las hemímientas audiovisuales y valorar la diversidad de miradas, intentan-
do que los propios protagonistas sean quienes narren sus historias.

Cine Insurgente también expresa sus rasgos identitarios a través de la web,


definíéndose como grüpo · de prdducción, distribución y reflexión en tomo al
fenómeno audiovisual:

:~torial Nuestra América, '1iYJ7. Es para destacar el artículo de Guillermo De Carli "Desterra-
~ S , os, Presentes, visibles. Apuntes acerca del documental en Argentina", en Revist1l Zigurat,
de ~umero s. Carrera de Ciencias de la Comunicación, FSOC-UBA, Prometeo libros, diciembre

• E.n-.. .
- ww.o,oobrcro.org
140 • Gne MiliWltc de
los noventll..
El cine y sus po
sibilidades d
e transfor
mar \a realidad

Creemos qu
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mcricana a lo · tración m o n
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bito de la p d . ' d y anca in · te · .
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convertido e on e scu n
n el a rm a m , o d rso audio. V1.S en su Clpre
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su nrovecto a s p erosa q~ . el . ua l l,,.} La im


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• 1 n n uestras cabe sistema para - ,, e n se ha
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grupos se e x p e ri e n c ia
c o m o la s in h a n n u tr id s d e Gleyze
fluencias li o de una can r y So.
te ra rias, e n tr e ti d a d h e te r o g é n e a
e\ n o m b r e d o tr as. Boedo d e exptesiones,
e l c o le c ti v o F il m s , p o r
e n la d é c a d d e ri v a d e la e je
a del 20 y c a g r u p a c ió n m plo, afuma qu
u y a te m á ti c d e e s c r it o r
e s
e
t:rah2.jos d e a e s tá a rg e n ti n o
B o e d o F il m c o m p r o m e ti
d a c o n la re
s que surge
cumentales s r e s c a ta n
y ficcionales e s e a n c la je q u e a li d a d social Los
. Y como f s e p la s m a
que g ru p a lm o r m a d e tr a e n re alizaciones d
e n te s e p u e b a jo s o s ti e o.
n s jerátquic de hacer u n e q u e
as, d o n d e e n la r g o m e tr a je , " c o m probamos
tipo d e refere l té c n ic o e o p o n ié n d o
ncias e s M a s u n s im p le e m n o s a las estructu
s c a r ó , C in e p le a d o " .6 O -
canea. de In A m e r tr o g ru p o
v e s ti g a c ió n ic a n o , c o m con este
de Mayo. Su P e ri o d ís ti c p u e s to p o r
s in te g ra n te a d e la U n iv e r s e g re sados de la
h o m e n a je a s e x p li c a n id a d P o p u la
l e s c ri to r d e q u e e li g ie ro n id r M a dres de Plaza
novela, Afa s a p a re c id o e n ti fi c a rs e
scaró, e l Caz H a r o ld o C o n c o n ese nombte
ador americ ti y a lo q u en
u n circo va a no (197 5), e e re p re s e n ta su ú
provocand n la c u a l, a ltima
o pequeñas l p a s o d e ca
re v o lu c io n da pueblo,
es.
Leyendas Y
~~• de Ju tradiciones
ta m b ié n d a
n s e n ti d o a
juy, s e p re s e lo s g r u p o s
invesngación n ta c o m o u n audiovisuale
Y deaau ollo a a g r u p a c ió s:
~ como del noroes
te a rg e n ti
n de comu
n ic a c ió np
m
biatoáa Y ctno ovimiento s p o p u la re s , c a m n o , q u e tr a b a ja e n ámbitos o p ~,
-d e s a rr ollo. p e s in a d o , ta n di-
S o b r e el o ri derechos h
gen del nom u m a n o s , sa
b r e , e x p li c lud,
E l Wayruro a n que:
ca u n a sem
grupos aym illa d e fuert
ana Y quech e c o n te n id
uas del áre o mítico-re
cenuo-,uc, q a a ligioso d e n
ue juntando n d in a. E s cre tr o de \os
IC repro e stas semilla e n c ia d e n tr o d
ducen , crec s rojinegras e los ande s
en e n ta m a e n u n recip
ñ o y cantid ie nte, las mism
ad ... D e ah as
'E .n . í n u e s tr o n
WWW.cmcin o m b re , bajo
a urg entc.org \a
~en
WW W,b o c d o ñ
ln ., c o m ., a r

L
Maximiliano de la Puente y Pablo Russo • 141

idea de juntarnos, discutir y crecer en busca de una socied d d d 1 al


. . . a on e os v ores
como la solidandad,
. . la igualdad
. . y la justicia sean los 1es sobre 1os cu ales se

7
realicen las distintas act:1v1dades.

Retoman_do ~rácticas d~ los años sesenta y setenta, los grupos actuales


organizan expenenoas ~temattvas ~- la producción y distribución, utilizando el
documental coi_no medio ~e expres1on para sus ideas políticas, a partir de las
facilidades relativas que bnndan los avances tecnológicos. Como señala Michael
Chanan, "el documental constituye una toma de contacto con el espacio público
que puede efectuarse al margen de patrones y normas preestablecidas y a espal-
das de la censura gracias a· la ayuda que · proporcionan las nuevas tecnologías"
(Chanan, 2008: 95). No es posible entonces comprender el funcionamiento y las
producciones que realizan estos grupos desde un plano exclusivamente cinema- ·
tográfico, sino que es necesario adoptar una concepción integradora de la estética
y la política, amalgamada en po$ de una búsqueda de transformación del estado
de las cosas. Siempre tomando en cuenta que el derrotero que siguen los grupos
militantes ..:..así ·como las coyunturas .en las· que ejercen su accionar-· es variado,
dinámico, cambiante; y que la praxis que desarrollan se encuentra fundamental-
mente en la calle, en el espacio público, en las luchas popQlares.

Bibliogtaña:

AA.VV. (2004), Revista Grupo ~4larrío, número 1, Buenos Aires, febrero.

Arfuch, Leonor (2004), ''Arte, memoria, experiencia: políticas de lo real", Revista


Pensamiento de los Confines, número 15, Buenos Aires.

Chanan, Michael (2007-2008), ''El documental y el espaci~ ~úblico", en ~-trchivos


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rmnoteca. "t:Spues ue 10 re;:u,
Valen~ España, Volumen l.

De la Puente, Maxirniliano y Pablo Russo (2007) , El comr,nañero que lleva la cáma-

ta. Cine militante argentino, Buenos Aires, Tierra del Sur.

7 En
WWw.wayruro.blogspotcom

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