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Una vez realizada esta pequeña introducción comenzaré en primer lugar, analizando cual es el
ENFOQUE de esta área. Para ello, veremos que, tal y como se recoge en el artículo 8 del Real Decreto
126/2014, al tratar la organización de la Etapa, el enfoque del área será global e integrador.
Este enfoque globalizador está sustentado en las cuatro fuentes del currículo. Veámoslo mas
detenidamente.
Desde una perspectiva psicológica, las matemáticas ayudan al desarrollo en el niño de un pensamiento
concreto y formal, pues permite estructurar el conocimiento que se obtiene de la realidad. Además,
ayudan al niño a desarrollar y afianzar la capacidad lógico-concreta y prepara para el acceso a la
capacidad lógica abstracta.
Desde una perspectiva sociológica, el conocimiento matemático es una exigencia social. El niño
comunica, expresa, representa o resuelve problemas que se le presentan en la sociedad.
Por otro lado, desde una perspectiva epistemológica, el currículo del área posee un carácter
interdisciplinar, ya que integra conocimiento de diversos campos del saber y de diferentes áreas
educativas.
Por último, y desde una perspectiva pedagógica, la pedagogía del área se debe centrar en la experiencia
concreta y practica del niño para progresivamente servir como instrumento para analizar situaciones
variadas. A lo largo de la escolaridad básica, el aprendizaje de las Matemáticas ha de ir dirigido a
enriquecer sus posibilidades de utilización.
Estas cuatro perspectivas que caracterizan el currículo del área se articulan de forma globalizada, pues
tienen, como hemos visto, relación de dependencia. Este enfoque globalizador también se manifiesta en
las CARACTERISTICAS del currículo del área.
El currículo establecido en el Decreto 103/2014 destaca que la enseñanza del área de Matemáticas
permite conocer y estructurar la realidad, analizarla y obtener información para valorarla y tomar
decisiones necesarias para la vida cotidiana, para aprender a aprender, y por lo que su aprendizaje aporta a
la formación intelectual general y su contribución al desarrollo cognitivo.
El uso de las herramientas matemáticas permite abordar una gran variedad de situaciones, ya que, son un
conjunto de saberes asociados a los número y a las formas y constituyen una forma de analizar diversas
situaciones, además incorporan una serie de características que les han sido tradicionalmente asignadas y
que se identifican con la deducción, precisión, rigor, seguridad etc. a las cuales se les han ido sumando la
inducción, estimación, aproximación, probabilidad etc, mejorando así la capacidad de enfrentarse a
situaciones abiertas.
En primer lugar destacamos la doble funcionalidad teórica y práctica donde el aprendizaje de las
matemáticas es útil en otros ámbitos y por lo que su aprendizaje aporta a la formación intelectual general.
En segundo lugar podemos destacar el alcance de una eficaz alfabetización numérica entendida como la
capacidad para enfrentarse con éxito a situaciones en las que intervengan los números y sus relaciones.
En tercer lugar destaca el sentido experiencial del área, donde los niños y niñas deben aprender
matemáticas utilizándolas en contextos funcionales relacionados con situaciones de la vida diaria, para
adquirir progresivamente conocimientos más complejos.
Y por último, destacar la resolución de problemas como uno de los ejes principales de la actividad
matemática, que deben ser fuente y soporte principal del aprendizaje. En la resolución de un problema se
requieren y se utilizan muchas de las capacidades básicas: leer comprensivamente, reflexionar, establecer
un plan, modificar el plan si es necesario, comprobar la solución y comunicar los resultados.
Del análisis del enfoque y las características del área se deduce la importancia de proporcionar
PROPUESTAS DE INTERVENCIÓN EDUCATIVA generales y otras más específicas acordes a las
mismas.
El currículo básico se ha formulado partiendo del desarrollo cognitivo y emocional en el que se encuentra
el alumnado de esta etapa, de la concreción de su pensamiento, de sus posibilidades cognitivas, de su
interés de aprender y relacionarse con sus iguales y con el entorno.
Ahora bien, una adecuada intervención educativa en el área de matemáticas debe partir de los principios
de intervención educativa generales que se desprenden del análisis curricular. Estos principios, derivan de
la teoría cognitivo-constructivista, con aportaciones de autores como Piaget, Ausbel, Vigotsky, Novac…
Entre estos principios podemos destacar:
En primer lugar, partir del nivel de desarrollo del alumno y sus conocimientos previos y a partir
de ahí sugerir y propiciar patrones matematicos que amplíen las posibilidades de comunicación e
integración social.
Seguidamente, nos encontramos con la construcción de aprendizajes significativos y funcionales
que permita establecer relaciones entre los conocimientos y experiencias que ya conoce y los que
va a aprender. Han de ser utilizados en circunstancias reales de modo que pueda comprobar el
interés y la utilidad de lo aprendido.
Otro principio importante es la contribución al desarrollo de la capacidad de aprender a aprender
donde la intervención educativa debe promover la autonomía en el proceso de aprendizaje,
realizando investigaciones, búsquedas guiadas en la biblioteca o en la Web…
También haremos referencia al principio de enseñanza individualizada, donde el profesorado
deberá tener en cuenta los ritmos de aprendizaje e intereses para atender a la diversidad de sus
alumnos a través de una serie de estrategias, ya que, el bagaje lingüístico no es el mismo para
todos los niños.
Además, otro de los principios a tener en cuenta es la promoción de la actividad constructiva del
alumno como un proceso de reflexión sobre sus aprendizajes, mediante inferencia, paráfrasis,
análisis y síntesis de textos orales y escritos.
Por otro lado, podemos encontrar el fomento del aprendizaje en grupo, es decir, el fomento del
aprendizaje cooperativo, el cual permite impulsar las relaciones entre iguales y fomentar la
socialización en debates, proyectos de investigación, intercambio de ideas…
Y por último, destacamos también como principio básico a tener en cuenta, el juego como
recurso didáctico, ya que las actividades lúdicas comunicativas serán fundamentales en el
proceso de enseñanza-aprendizaje, rompiendo la aparente oposición juego-trabajado.
Además de estos principios, cobra especial importancia el enfoque globalizador, en el cual, el maestro
organiza y presenta los contenidos de manera que ayuden a los alumnos a establecer conexiones entre
ellos, favoreciendo así el aprendizaje cooperativo.
Sin perjuicio de su tratamiento específico, desde el área de Matemáticas, también tendremos que trabajar
una serie de elementos transversales como la comprensión lectora, la comprensión oral y escrita, las TIC,
la educación cívica y constitucional y, prestando especial atención a la competencia emocional.
Además, teniendo en cuenta el marco de referencia que constituye la LEEX, también tenderemos que
prestar atención a:
Por un lado, la educación en valores (art. 73) donde se propugnará como eje transversal una
educación fundamentada en los principios, derechos y valores propios de una sociedad
democrática y de la convivencia ciudadana.
Por otro lado, las TIC (art. 79) que se impregnarán de manera especial en el desarrollo curricular
de las diferentes áreas y materias de todos los niveles y etapas educativas.
Así como, la lectura en el ámbito escolar, donde los centros elaborarán planes de lectura,
escritura y acceso a la información con el objetivo de potenciar el desarrollo de las
competencias. En este contexto, la biblioteca debe ser considerada como núcleo generador de
actividades de e/a. Se considera un espacio privilegiado para los alumnos, en el que se pongan en
prácticas metodologías activas y participativas basadas en la indagación y búsqueda de
información que favorezcan el interés por conocer y ampliar la visión del mundo que rodea al
alumno, la motivación hacia el aprendizaje, el desarrollo de su autonomía, así como el trabajo
individual y en equipo.
Se deberá atender también a la competencia emprendedora (art 81) donde los centros fomentarán
en el alumnado la capacidad emprendedora, la iniciativa personal, la creatividad y la
imaginación para llevar a cabo tareas que transformen las ideas en acciones.
Y por último, la competencia emocional (art. 82) que permitirá favorecer la autoestima, empatía
y control emocional. La acción educativa buscará el adecuado desarrollo emocional del
alumnado, contribuyendo a su propio conocimiento y al de los demás.
Decir también que, se atenderá a la diversidad del alumnado que deberá inspirar la intervención educativa
en estas etapas. De esta manera la atención a la diversidad y la personalización del proceso de e/a, que
debe ser un principio preferente a la hora de seleccionar una metodología determinada.
Por lo que respecta a orientaciones y técnicas más concretas para favorecer la intervención educativa en el
área cabe destacar las siguientes pautas:
En primer lugar, partir en una primera fase de razonamiento inductivo, para posteriormente pasar
a un razonamiento deductivo.
En segundo lugar, se tratarán experiencias sencillas y cotidianas, vinculadas a recursos y
materiales manipulativos como ábacos, bloques lógicos etc.
En tercer lugar, los contenidos del aprendizaje de las matemáticas se presentarán en un contexto
de resolución de problemas, además se deben presentar de forma cíclica, siempre relacionados
unos con otros.
En cuarto lugar, el uso de las Tic permitirá afianzar, presentar u operar con conceptos
matemáticos o la utilización de la calculadora para resolver determinadas operaciones.
Y por último, destacar la adquisición de una actitud positiva hacia las matemáticas, el gusto por
ellas y la confianza en la capacidad para aprender y utilizarlas.
Estas orientaciones se pueden completar con una serie de TECNICAS como por ejemplo los proyecto de
investigación, las búsquedas guiados, las operaciones sencillas de cálculo, los juegos de azar y
probabilidad…
Una vez visto el enfoque y las características propias del área veremos que son las competencias básicas y
LA CONTRIBUCIÓN DEL ÁREA A LA CONSECUCIÓN DE DICHAS COMPETENCIAS.
En primer lugar he de decir que la LOMCE en su art. 6 recoge las competencias clave como uno de los
elementos básicos del currículo.
Por otro lado, en línea con la Recomendación 2006/962/EC, sobre las competencias clave para el
aprendizaje permanente, el Real Decreto 126/2014, basa la potenciación del aprendizaje en competencias,
integradas en los elementos curriculares para propiciar una renovación en la práctica docente y el proceso
de e/a, que han de suponer un importante cambio en las tareas que han de resolver los alumnos y en los
planteamientos metodológicos innovadores.
La competencia supone una combinación de habilidades prácticas, conocimientos, motivación, valores
éticos, actitudes, emociones y otros componentes sociales y de comportamiento que se movilizan
conjuntamente para lograr una acción eficaz. Se contemplan, como un conocimiento adquirido a través de
la participación activa en prácticas sociales que se desarrollan tanto en el contexto educativo formal como
en los contextos educativos no formales e informales.
Por su parte, el DECRETO 103/2014, en su artículo 4.2 señala que: “Las competencias son entendidas
como aquellas capacidades para aplicar de forma integrada los contenidos de cada enseñanza, con el fin
de lograr la realización adecuada de actividades y la resolución eficaz de los problemas complejos”.
Completando su definición en el art. 5 donde expone que “Las competencias clave son un elemento
fundamental del currículo a la hora de determinar los aprendizajes que se consideran imprescindibles para
el alumnado.”
Ahora bien, atendiendo a la ORDEN ECD/65/2015, vemos como las competencias clave deberán estar
estrechamente vinculadas a los objetivos. De esta manera, para una adquisición eficaz de las
competencias y su contribución al logro de los objetivos y desde un carácter interdisciplinar y transversal,
requiere del diseño de actividades de aprendizaje integradas que permitan avanzar hacia resultados de
aprendizaje de más de una competencia al mismo tiempo.
Por otro lado, tenemos que tener en cuenta que los criterios de evaluación deben servir de referencia para
valorar lo que el alumnado sabe y sabe hacer. Estos criterios de evaluación se desglosan en estándares de
aprendizaje evaluables, observables y medibles, los que, al ponerse en relación con las competencias
clave, permitirán graduar el rendimiento o desempeño alcanzado en cada una de ellas.
El conjunto de estándares de aprendizaje evaluables dará lugar a su perfil de área o materia que permitirán
identificar aquellas competencias que se desarrollan a través de esa área o materia.
Por tanto, las competencias se conceptualizan más que como un “saber hacer”, como un “hacer” que se
aplica a la diversidad de contextos académicos, sociales y profesionales.
Por otro lado, he de decir que en la actualidad se adopta la denominación de las competencias clave ya
que estas vienen definidas por la UE y son entendidas como aquellas que todas las personas precisan para
su realización y desarrollo personal, así como para la ciudadanía activa, la inclusión social y el empleo.
Se identifican de esta forma siete competencias clave esenciales para el bienestar de las sociedades
europeas, el crecimiento económico y la innovación y son las siguientes.
Comunicación lingüística
Competencia digital
Aprender a aprender.
Así pues, las competencias clave en el currículo han de servir para integrar los diferentes aprendizajes,
además de marcar un sentido funcional y orientar la enseñanza en el sentido de identificar los contenidos,
los criterios de evaluación y estándares de aprendizaje evaluables que tienen carácter imprescindible.
En la competencia matemática y competencias básicas en ciencia y tecnología, tres son las líneas
generales de incidencia del área para el desarrollo de esta competencia: el desarrollo de habilidades y
actitudes útiles para interpretar y producir información, la ampliación de conocimientos cuantitativos y
esenciales y la resolución de problemas de la vida cotidiana. Todo ello, supondrán el incremento de la
seguridad y confianza personal en el tratamiento de situaciones con elementos matemáticos.
En el desarrollo de la competencia digital, el mundo futuro se mueve hacia las nuevas Tecnologías de la
Información y la Comunicación. La utilización de herramientas de cálculo y organización de la
información debe ser una práctica, habitual, definiendo una contribución necesaria al desarrollo de la
competencia digital.
En el desarrollo de la competencia sentido de iniciativa y espíritu emprendedor, la aportación del área al
logro de esta competencia está vinculada a la resolución de problemas, ya que, en el trabajo matemático
se ponen en juego actitudes como la perseverancia, la confianza, el diseño, la creatividad y flexibilidad…
actitudes fundamentales para desarrollar una mayor autonomía, iniciativa personal y espíritu
emprendedor.
El currículo básico de las diferentes áreas se organiza partiendo de los objetivos propios de la etapa y de
las competencias que se van a desarrollar a los largo de la educación básica, mediante el establecimiento
de bloques de contenidos, criterios de evaluación y estándares de aprendizaje evaluables. Pero veámoslos
más detenidamente:
Comenzaremos con el análisis de los objetivos, que el currículo extremeño nos los define como aquellos
referentes relativos a los logros que el alumno debe alcanzar al finalizar el proceso educativo, como
resultado de las experiencias de E/A intencionalmente planificadas para tal fin.
Atendiendo a los objetivos generales de la etapa presentes en el art. 17 de la LOMCE podemos encontrar
una seria de objetivos relacionados con los fines del área de matemáticas, destacando: g) desarrollar las
competencias matemáticas básicas e iniciarse en la resolución de problemas que requieran la realización
de operaciones elementales de cálculo, conocimientos geométricos y estimaciones, así como ser capaces
de aplicarlos a las situaciones de su vida cotidiana.
Ahora bien, con la modificación de la LOE realizada por LOMCE, observamos que ya no se proponen
objetivos para las diferentes áreas o material curriculares. Los únicos objetivos que aparecen son los de la
etapa.
De todas formas, el DECRETO 103/2014, en su ANEXO I, al hablar del área de matemáticas observamos
como del análisis del currículo se desprenden una serie de finalidades que se dirigen al alumno:
- Interprete datos y problemas sobre fenómenos del entorno natural.
- Identifique formas geométricas.
- Use los medios tecnológicos.
- Reconocer el papel de las matemáticas en la vida cotidiana y su valoración crítica.
Estas finalidades junto con los estándares de aprendizaje evaluables van a ayudar a responder la cuestión
de ¿Qué evaluar?
Otro elemento curricular a tratar son los contenidos, entendidos como el conjunto de conocimientos
habilidades, destrezas y actitudes que contribuyen al logro de los objetivo de cada enseñanza y a la
adquisición de competencias.
El currículo del área de Matemáticas, muestra los grandes bloques de contenidos que sintetizan los
saberes del área. Responden a la cuestión curricular ¿Qué enseñar? Y se presentan integrando los tres
tipos de contenidos: conceptos, procedimientos y actitudes.
La organización en bloques de contenido responde a las destrezas básicas que debe manejar el alumno.
Así, el área se estructura en cinco bloques de contenidos.
El bloque 2: números y operaciones, abarca tanto el desarrollo del concepto de número como la destreza
en el cálculo mental y el uso de algoritmos. El aprendizaje debe iniciarse haciendo a los alumnos
manipular material concreto o didáctico y pasando luego una representación pictórica que se reemplaza
por símbolos.
El bloque 3: medidas, pretende que los estudiantes identifiquen las características de los objetos para
poder compararlos y ordenarlos. Buscan que sean capaces de seleccionar y usar la unidad apropiada para
medir tiempo, capacidad, distancia y peso, utilizando los instrumentos de medida acordes con lo que se
está midiendo.
El bloque 4: geometría, pretende que los estudiantes reconozcan y dibujen figuras. El estudio del
movimiento de los objetos busca desarrollar tempranamente el pensamiento espacial de los alumnos.
El bloque 5: estadística y probabilidad, responde a las necesidades de que todos los alumnos registren,
clasifiquen y lean información. Para lograr este aprendizaje, es necesario que conozcan y apliquen
encuestas y cuestionarios por medio de la formulación de preguntas basada en sus experiencias y después
registren lo obtenido y hagan predicciones a partir de ellos.
Por otro lado, he de decir que en el D. 103/2014 encontramos una concreción de los contenidos del área
de matemáticas de cada uno de los bloques de contenidos distribuidos para todos los niveles.
Vistas las competencias clave, objetivos y contenidos se plantea el análisis de los últimos elementos
curriculares. Los criterios de evaluación y estándares de aprendizaje evaluables.
El RD. 126/2014 nos define los criterios de evaluación como el referente específico para evaluar el
aprendizaje del alumnado. Describen aquello que se quiere valorar y que el alumnado debe lograr, tanto
en conocimientos como en competencias, respondiendo a lo que se pretende conseguir en cada asignatura.
Por otro lado, los estándares de aprendizaje evaluables son definidos como especificaciones de los
criterios de evaluación que permite definir los resultados de aprendizaje y que concretan lo que el alumno
debe saber y comprender y saber hacer en cada asignatura; deben ser observables, medibles y evaluables
y permitir graduar el rendimiento o logro alcanzado.
Ambos responde pues a la cuestión curricular del ¿Qué evaluar? Así pues, la orden 6 de agosto de 2014
señala que la evaluación es entendida como el estadio final que permite valorar con propiedad el proceso
de aprendizaje y el grado de adquisición de competencias clave por parte del alumnado.
De esta manera, los referentes para la comprobación del grado de adquisición de las competencias y el
logro de los objetivos de la etapa y objetivos didácticos del área Matemáticas, serán los criterios de
evaluación y estándares de aprendizaje evaluables que figuran en el ANEXO I del DECRETO 103/2014,
los cuales viene secuenciados para cada uno de los niveles de la etapa.
A continuación voy a plantear un posible análisis de estos criterios de evaluación, los cuales podemos
encontrar en el D 103/2014. De esta manera podemos encontrar criterios de evaluación que valoran:
Por otro lado, en lo que se refiere a los estándares de Aprendizaje, destacamos que están referidos a los
criterios de evaluación; de esta forma, de cada criterio de evaluación se deducen una serie de estándares
de aprendizaje evaluables.
5.1.1. Registra datos de situaciones familiares utilizando tablas de doble entrada sencillas y/o
gráfica de barras.
De cara a la utilidad práctica, los estándares de aprendizaje evaluables pueden ser útiles para varios
aspectos de la práctica:
Observamos de esta forma que la diferencia entre los estándares de aprendizaje evaluables y los criterios
de evaluación están en que aquellos son una referencia más concretos y deben ser observables, medibles y
sobre todo, son una graduación para la consecución del criterio de evaluación
Por último, y antes de finalizar con mi exposición, me gustaría señalar los beneficios de la incorporación
de las TIC al currículo del área.
Los programas educativos informáticos así como los programas de gestión e internet, deben servir de
complemento a la construcción del conocimiento y facilitar la integración de los contenidos,
procedimientos y actitudes. La utilización de estas tecnologías reafirma el uso de la lengua con fines
comunicativos, favoreciendo la adquisición de destrezas orales y escritas.
Así pues, la incorporación de las TIC al contexto educativo, supone un proceso de innovación y de
adecuación a la realidad actual. Por tanto, es necesario revisar los planteamientos metodológicos para que
den cabida a las nuevas formas de aprendes que se generan desde la utilización de las TIC en el aula.
Todo ello sobre la base de que las TIC, en ningún caso, serán un fin en sí mismas, sino un medio o
recurso para crear ambientes de aprendizaje enriquecidos por las múltiples alternativas pedagógicas que
plantean.
Además tendremos que tener en cuenta que este proceso de incorporación de las TIC a cada área conlleva
la necesaria planificación de su uso a lo largo del desarrollo didáctico.