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Texto argumentativo

Diego Alejandro Penagos Rodríguez

Profesora Magda Meneses

1102

15/08/2023

Colegio Gimnasio Cervantes


La obra del famoso artista que sumerge una serie de animales en formol como una manera de

reflexionar sobre la vida y la muerte puede ser considerada arte debido a su capacidad para generar

desconcierto y cuestionamiento profundo, aunque también plantea dilemas éticos relacionados con la

explotación de seres vivos con fines artísticos.

Esta obra en específico la podemos relacionar a la idea de la "estética del choque" propuesta por

Octavio Paz, esta corriente dice que el arte debe romper con lo común, generando asombro y desafiar

nuestras ideas. En este sentido, la obra del artista al sumergir animales en formol cumple perfectamente

este principio, la presencia de seres vivos en un estado de conservación genera una impresión visual

intensa que obliga al espectador a cuestionar la naturaleza de la vida y la muerte, la confrontación

directa con la fragilidad de la existencia humana y animal provoca una reflexión profunda sobre la

finitud y la trascendencia.

Como segunda idea tenemos que la "ética del arte" propuesta por Arthur Danto destaca la

importancia de considerar la intención y el contexto detrás de una obra al evaluar su valor artístico. En

este caso, la intención del artista parece ser la de instigar un diálogo profundo sobre temas

fundamentales de la existencia, al sumergir animales en formol, el artista busca transmitir un mensaje

visualmente impactante en el cual nos invite a contemplar la vida y la muerte desde una perspectiva

inusual, desde este punto de vista, podría argumentarse que el uso de esta técnica forma parte de una

búsqueda de expresión artística, ya que su objetivo es despertar pensamientos y emociones complejas en

el público.

Además de a pesar de su intención reflexiva, la obra no se salva de críticas éticas, el uso de

animales muertos para la creación artística plantea preocupaciones sobre el respeto a la vida y la

moralidad de utilizar seres vivos como objetos para crear arte además de provocar una reacción
emocional, argumentar en contra de la consideración de esta obra como arte se basa en que el arte debe

ser una forma de expresión ética y respetuosa con todas las formas de vida.

La obra que sumerge animales en formol se inscribe en una tradición de explotación artística que

desafía los límites comunes, a lo largo de la historia del arte, diversos movimientos y artistas han

buscado cuestionar y expandir la definición de lo que puede ser considerado arte, desde los ready-mades

de Marcel Duchamp hasta las obras de los artistas del arte conceptual, además la experimentación con

materiales y conceptos ha sido algo que se ha visto durante mucho tiempo, en contexto con la obra, esta

obra pone en discusión el hecho de poder ser una extensión de esta tradición al romper barreras acerca

de la vida, la muerte y la moralidad, esta perspectiva considera que la función del arte no solo es

complacer visualmente, sino también provocar reflexiones significativas y en algunos casos incomodos

para algunas personas.

En resumen, la obra que involucra la inmersión de animales en formol plantea una dualidad

intrigante entre su capacidad para impactar emocionalmente y generar reflexiones profundas, y las

inquietudes éticas que provoca, a través de los argumentos presentados, se ha defendido su validez como

expresión artística debido a su capacidad para perturbar la percepción y promover debates más que todo

filosóficos, sin embargo, estas cualidades deben sopesarse cuidadosamente frente a las consideraciones

éticas en relación con el respeto a la vida animal, como un última instancia, el debate sobre si esta obra

es arte depende de cómo veamos sus efectos emocionales y conceptuales en comparación con las

preocupaciones éticas que plantea.

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