Está en la página 1de 4

LA LECTO ESCRITURA EN LA PEDAGOGÍA WALDORF

Adquirir la lectura y la escritura es una de las grandes tareas de la educación, la que


abre todas las otras puertas que vendrán en la etapa escolar y en la vida. En las
escuelas donde se vivencia la Pedagogía Waldorf, este proceso comienza con la
llegada del 2° septenio, no antes ya que deben darse algunos aspectos para comenzar
a potenciar lo cognitivo.
Al cumplir los siete años, surge un nuevo nacimiento en la vida humana, nace el
cuerpo etérico. El cuerpo físico está listo para explorar nuevos caminos, o mejor
dicho, adopta una nueva postura sobre la tierra. Parece dispuesto a recibir
conocimientos de una figura de autoridad cariñosa, mientras que antes asimilaba la
vida a través de la imitación. Hasta ahora, sus afectos mayores son suspadres y esla
imitación su mayor herramienta para el aprendizaje. Ha desarrollado nuevas
capacidades necesarias para aprender y absorber conocimientos, su cuerpo está listo
para hacer relaciones, asociaciones, deducciones y también muestra nuevas
capacidades en su vida afectiva y en su sistema rítmico, y busca amigos y amigas con
quienes puede tener relaciones más profundas y más duraderas.

En su interior surge la imaginación, que debe alimentarse con historias e imágenes.


Físicamente también han ocurrido muchos cambios y en los movimientos del infante
observamos un dominio de las manos y pies que no existía antes. Todavía se
reconoce con claridad la individualidad única, pero el cuerpo en el que se encuentra
ha pasado por considerables cambios.

Este camino no comienza con la llegada del segundo septenio, es en el Jardín de


Infancia donde a partir de los juegos, las labores, el movimiento, el ritmo y la
imitación, se comienzan a asentar las habilidades previas para lograr los nuevos
aprendizajes.

También los cuentos, canciones, versos, la ronda, los dibujos, van colaborando para
ir adentrándonos en este desafío que es la llegada de las letras y con ellas la
comprensión del mundo.

El alfabeto se va presentando poco a poco, a esta edad niños y niñas tienden a usar
la imagen como primer elemento donde prestan atención, de la imagen surge la
letra.

Se comienza presentando las vocales, las que según Steiner expresan los estados
emocionales que al ser humano le producen los objetos o acciones; a cada vocal le
corresponde una emoción específica. Este principio es más evidente aún en las
exclamaciones, como, por ejemplo: ¡Ah!, para expresar admiración o sorpresa; o
¡Eh!, para expresar cierta antipatía o necesidad de crear distancia. Las vocales "viven"
de manera natural en nosotros.
Diferente es el caso de las consonantes. Éstas, surgieron de la imitación de objetos,
actividades y procesos del entorno y de la naturaleza.
Los maestros y maestras en las escuelas Waldorf, haciendo uso de su imaginación,
crean las imágenes a partir de la letra, así como una historia o cuento para
introducirla.
Es así como se va construyendo un alfabeto pictórico, es increíble como descubren la
V escondida en el cráter de un volcán o la B en el mástil del barco.

En esta edad todavía el interés está puesto en la fantasía, por lo que el


alfabeto ilustrado se desarrolla con cuentos, y de ahí surge la escritura
de oraciones sencillas que ellos mismos van creando.
Por ello cuando se inicia el periodo de lectoescritura cada día se narra
un cuento del alfabeto, y se va introduciendo de manera imaginativa
cada letra. Así, una /G/ se transforma en un gato, o una /K/ en un
karateka, o una /S/ en una serpiente.

Símbolo, sonido y cualidad forman una unidad, y a través de la imagen se otorga la


posibilidad de aprender las letras con mayor facilidad y gusto.
Con cada vocal estamos aproximadamente tres días. El primer día, se narra el cuento
de las vocales hasta la parte de la vocal A, y se representa con un gesto, abriendo las
piernas y levantando los brazos, a la vez que emitimos el sonido de la vocal. Al día
siguiente recordamos la historia, hacemos el gesto y comenzamos a vivenciarla. Esto
se puede hacer modelando la vocal con cera de abeja, recorriéndola sobre una
cuerda en el suelo, dibujando la A con el dedo en el aire, en el arenero, en un
recipiente con agua, sobre la espalda de un compañero o compañera. Por último,
pueden dibujarla en la pizarra. Al tercer día volvemos a recodar la historia, la
hacemos en el aire y la trasladamos al cuaderno, pero antes de plasmarla en el
cuaderno, la hace sobre la hoja con el dedo y después la escribe. Este mismo día se
narra la parte de la vocal E, correspondiente al cuento de las vocales, y repetimos el
proceso. Así sucesivamente con todas las vocales.
Las consonantes hay que verlas como imitación de objetos exteriores, en ellas
resuenan las cosas, son los sonidos de afuera.
Para las consonantes también escribimos un cuento donde vayan apareciendo los
sonidos con su imagen, de una historia pueden aparecen varias consonantes. Ej: la S
de serpiente, T de torre, R de rueca, M de montaña.
El primer día se narra la historia e incidimos en las palabras que contengan la
consonante que vayamos a trabajar. Al siguiente día, recordamos la historia,
vivenciamos la forma de la consonante, decimos palabras en las que aparezca la
consonante. Después hacemos un dibujo del cuento donde esté la imagen que hemos
creado para esa consonante, (ej: parte del cuento donde aparece una serpiente)
marcamos la S de la serpiente y luego la plasman en la hoja, y escriben palabras con
las S.
Podemos introducir rimas que les aporte más conciencia del fonema, del sonido,
asociando el grafema con el fonema. Se escriben pequeños textos, por ejemplo: MI
MAMÁ AMA LA MONTAÑA.
Se enseñan primero las letras en mayúsculas (hermanas mayores) por estar más
vinculadas con las imágenes anteriormente mencionadas. Además, las mayúsculas
están compuestas de las dos formas geométricas fundamentales: la recta y la curva. Al
escribirlas, dividimos el espacio en derecha-izquierda, arriba-abajo e incluso en
diagonal en delante-detrás; de este modo, el niño recapitula la orientación espacial.

La vivencia del espacio, que en sus primeros años de vida el niño manifestó en sus
dibujos/garabatos, ahora es ejercitado; a partir de los 6 años esta facultad debe
transformarse en capacidad de creación de imágenes internas.

Luego se introducen las hermanas menores o minúsculas, las que comienzan a


combinarse con las mayores en pequeños cuentos.

Este ejercicio se realiza sobre una base que contempla 3 líneas de 3 colores distintos:

Celeste que representa al cielo


Verde que evoca al pasto o la vegetación
Rojo o café que se relaciona con la tierra

Se habla de letras altas (que usan el espacio celeste) por ejemplo: L, F, P….letras
medias que se escriben solo en el espacio de la vegetación como la m, n, s…y la
letras bajas que llegan al fondo de la tierra. Entre esas están la p, j, g

Acá algunos ejemplos de las fichas que pueden usarse por cada letra:
Acá se muestra el alfabeto completo (excepto la ch) considerando letras imprentas
mayores (mayúsculas) y menores (minúsculas)

Luego de ir presentando el alfabeto, se van combinando letras para formar palabras,


siempre con las letras que ya conocen. Finalmente crean pequeños cuentos.

También podría gustarte