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https://www.youtube.com/watch?v=P2574dU20vM
Un nuevo estudio ha revelado que la música puede tener los mismos efectos que la
medicación en los niños con TDAH. Dicho estudio fue dirigido por William J. Pelham, director del
centro de para niños y familias de la Universidad Internacional de Florida.
La intención inicial de Pelham era examinar cómo afectaban a los niños con TDAH
distracciones como la música o la televisión.
“Si un niño con TDAH está viendo la tele y dice que puede prestar atención al mismo
tiempo, probablemente no está diciendo la verdad. Algo diferente ocurre con la música, hemos
descubierto que no afecta a la distracción en los niños con TDAH”. En el estudio, Pelham observó
que algunos niños se distrajeron con la música, pero la mayoría no. “Incluso ha habido casos en los
que la música ha ayudado a niños con TDAH a finalizar las tareas; en este grupo, la música fue tan
efectiva como la medicación. En lugar de asumir que es mejor para un niño con TDAH hacer sus
tareas en completo silencio, puede ayudar a su concentración hacerles escuchar música. Si como
padre o madre quieres saber si escuchar música ayuda a mejorar el rendimiento de tu hijo en la
escuela, deberías probarlo. Básicamente, es ensayo y error. Si el rendimiento del niño mejora
después de probar la música por un período de tiempo, entonces eso es un buen indicador de que
el niño pertenece al subgrupo de niños que se benefician de la música “.
Cuando escuchamos música, ejercitamos nuestro cerebro de una forma única. «Existe
suficiente evidencia científica que nos dice que la experiencia musical, el entrenamiento musical,
todas esas cosas cambian nuestro cerebro…entrena y mejora funciones cerebrales que nada
tienen que ver con la música”, explica el Dr. Charles Limb, profesor de la Universidad de Hopkins,
quien ha investigado sobre el tema y escrito varias publicaciones al respecto.
Asimismo, es sabido que la música clásica y dentro de ella la música barroca, con su ritmo
y tonos graves, redunda en una mayor facilidad para consolidar el aprendizaje, restableciendo
conexiones neuronales que nos permiten alcanzar mejores estados de atención y concentración.