Está en la página 1de 4

1

La Importancia de la Música en la Gastronomía

La música está considerada entre los elementos que causan más placer en la vida. Libera

dopamina en el cerebro como también lo hacen la comida, el sexo y las drogas. Todos ellos son

estímulos que dependen de un circuito cerebral subcortical en el sistema límbico, es decir, aquel

sistema formado por estructuras cerebrales que gestionan respuestas fisiológicas ante estímulos

emocionales; particularmente, el núcleo caudado y el núcleo accumbens y sus conexiones con el

área pre-frontal. Los estudios que muestran activación ante los estímulos mencionados revelan un

importante solapamiento entre las áreas, lo que sugiere que todos activan un sistema en común.

www.elpais.com

Teniendo en cuenta esta información, podemos experimentar juntando dos cosas que nos

generan más dopamina en nuestro cerebro (la comida y la música), provocando ciertos cambios

químicos en este, los cuales llegan a realzar nuestros sentidos y relajarnos para degustar mejor un

platillo, lo cual nos lleva a tener más en cuenta la importancia de la música en la gastronomía.

Para empezar, estudios referentes a la relación entre gastronomía y música son muy

recientes. Mas allá de los ingredientes utilizados y la destreza de los fogones, Sheperd (2013)

afirma que es en el cerebro donde se generan realmente tanto el gusto como el sabor de los

alimentos. Además, sostiene que el sabor de lo que se come y se bebe puede verse alterado al

manipular las señales que llegan al cerebro. Esto abre la puerta a la experimentación de la

condimentación sónica, que según Charles Spence (2017) consiste en alterar los gustos y sabores

de los alimentos, utilizando determinados sonidos o músicas. Por ende, la importancia de la

música en la gastronomía es fundamental, ya que con ella podemos realzar los sabores de los
2

platillos que estamos degustando. Según un estudio de la universidad de Arkansas un grupo de

individuos admitió sentir más satisfacción al comer chocolate mientras escuchaban música jazz y

hip-hop, por lo que estos géneros podrían estar más asociados a realzar los sabores dulces en

nuestro sentido del gusto.

En segundo lugar, la música tiene un alto grado de conexión con nuestro cerebro; Aunque

todavía es un tema abierto, dentro del procesamiento de la música podrían existir canales

separados para los elementos temporales (ritmo), melódicos (tono, timbre, melodía), memoria y

respuesta emocional. Los casos particulares de oído absoluto, amusia congénita y adquirida,

epilepsia musicogénica y alucinaciones musicales también han contribuido al conocimiento del

procesado cerebral de la música. El cerebro de los músicos profesionales muestra peculiares

cambios en la anatomía y funcionalidad. Escuchar y practicar música puede tener beneficios

educacionales y terapéuticos.

La música también puede ser un apoyo para lidiar con el estrés; escuchar cualquier tipo de

música que sea agradable para la persona, ayuda a reducir el estrés, sobre todo si se trata de su

música favorita o clásica. Innumerables estudios han demostrado que los efectos de relajación de

la música se pueden ver reflejados en cualquier persona, inclusive en recién nacidos. Algunos de

sus efectos o beneficios de este tipo de relajación son: Reduce las emociones negativas; pueden

ayudar a que el individuo se sienta mucho más optimista y positivo, lo cual ayuda a liberar el

estrés y hacer que la persona se sienta mucho más “libre”. Reduce la depresión y también es un

excelente tratamiento para el insomnio, así como el caso de las personas que sufren presión

arterial alta, puede ayudarles a reducirla con una sesión de música clásica con solo treinta

minutos al día. La música también nos ayuda a relajar el cuerpo; esta también nos beneficia al
3

promover la relajación de los músculos tensos, lo que fácilmente libera la tensión acumulada

después de un largo y estresante día.

Por otra parte, nuestra creatividad también se ve estimulada por la música; un estudio ha

comprobado que al escuchar música alegre y con un tempo rápido (100 – 120 bpm) potenciamos

nuestra creatividad aumentando nuestra flexibilidad de pensamiento, disminuye las inhibiciones y

estimula el riesgo, además de aumentar nuestra capacidad de asociar informaciones

aparentemente inconexas. La música tranquila, triste o asiógena no afecta nuestra inventiva. Este

estímulo de creatividad es beneficioso para un chef, a la hora de modificar platillos, o hacerlos

desde cero.

Además, la música también nos ayuda en la ingesta de los alimentos, esto se ha

demostrado ya que el organismo absorbe mejor los nutrientes cuando está tranquilo, por lo que la

música es el elemento perfecto para liberarse de agobios y nerviosismos a la hora de comer, junto

a esto, el ritmo de la música también nos es beneficiosa al comer, ya que este nos ayuda a

masticar los alimentos el tiempo necesario, marcando un ritmo saludable.

Finalmente, la música evita distracciones innecesarias, las cuales pueden provocar que

comamos de más, es decir, podemos comer de manera más consciente al escuchar música. Esto

nos beneficia, ya que, le da al cuerpo el tiempo necesario para reconocer que está satisfecho y

mejora nuestra digestión.

Como se ha podido comprobar, la música es de gran beneficio en la gastronomía ya que

nos ayuda a relajarnos, liberándonos del estrés, la tensión muscular y pensamientos negativos,

además de estimular nuestra creatividad, lo cual nos es de gran ayuda a la hora de modificar o

inventar platillos. La música también nos beneficia en la ingesta de alimentos, relajándonos, lo


4

cual nos permite tener una correcta absorción de nutrientes; también nos ayuda a masticar los

alimentos de manera adecuada, marcándonos un ritmo optimo y sano para la misma absorción de

nutrientes. La música ha sido objeto de muchos estudios recientes, como la condimentación

sonora, la cual sostiene que con ciertas melodías podemos realzar los sabores de las comidas,

haciéndolos más notorios y conectando mejor lo que degustamos con nuestro cerebro.

Referencias

¿Qué le hace la música a nuestro cerebro?

https://elpais.com/elpais/2015/08/31/ciencia/1441020979_017115.html

Sheperd, G. M. (2013). Neurogastronomy: how the brain creates flavour and why it

matters. Columbia University Press [Versión Kindle].

https://www.amazon.es/dp/B006BAJBUS/ref=dp_kinw_strp_1

Spence. C (2017). Gatrofísica: La nueva ciencia de la comida. Paidós [Versión Kindle]

https://www.amazon.es/Gastrof%C3%ADsica-nueva-ciencia-comida-Contextos/dp/

8449333547

Clydes, M. (1982) La música, el estrés y el cerebro. Recuperado de

https://urangea.com/videos-y-musicas/

También podría gustarte