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Propósito:
Promover la práctica del juego de quemados en entornos educativos y recreativos es
fomentar el desarrollo integral de los estudiantes, enfocándose en el fortalecimiento de
habilidades físicas, sociales y emocionales. A través de esta actividad lúdica, se busca
impulsar la actividad física, mejorar la coordinación motora, promover la interacción social
y fortalecer el trabajo en equipo, contribuyendo así al bienestar y desarrollo personal de los
estudiantes.
QUEMADOS
El juego de quemados, también conocido como "dodgeball" en inglés, es un juego popular
y dinámico que se practica en grupos. Suele jugarse en espacios abiertos como patios
escolares o parques. El objetivo principal del juego es eliminar a los jugadores del equipo
contrario lanzándoles una pelota de goma o similar y lograr que esta rebote y sea atrapada
por otro jugador antes de tocar el suelo.
Las reglas pueden variar dependiendo de la versión del juego y de las preferencias de los
jugadores, pero generalmente incluyen algunas de las siguientes características:
3. Finalización del juego: El juego puede finalizar cuando se elimina a todos los
jugadores de un equipo, o bien, cuando se alcanza un límite de tiempo
predeterminado y gana el equipo con más jugadores restantes en el campo.
El juego de quemados no solo es una actividad física divertida, sino que también fomenta
habilidades como la coordinación, la estrategia, la agilidad y la cooperación en equipo. Sin
embargo, es importante tener en cuenta la seguridad de los participantes y establecer
reglas claras para evitar lesiones.
1. Promoción de la actividad física: El juego de quemados implica movimientos
constantes, como correr, esquivar y lanzar, lo que fomenta la actividad física y ayuda
a mantener un estilo de vida activo. Al participar en el juego, los jugadores están
constantemente en movimiento, lo que contribuye a la salud cardiovascular,
fortalece los músculos y mejora la resistencia física.