La educación física en la enseñanza primaria Castañer.

Camerino Edi INDE

Fundamentos teóricos
el niño vive su corporalidad en relación con toda una serie de procesos personales: la verbalización,
la imaginación, la emoción y el razonamiento y sus consecuencias, que se entremezclan para dar
lugar a un conjunto de producciones motrices. Ante tal postulado, y a la vista de los marcos de
tratamiento que se han sugerido de la educación física escolar, llegamos a un punto en que cabe
plantearse si ¿es justo que aislemos y empobrezcamos la actividad motriz infantil sólo por nuestras
ansias de estructuración analítica de contenidos? No hay comportamientos estancos, como
pretendieron ciertos enfoques anteriores, puesto que en las expresiones motrices de los niños todo
tiene una relación y es vivido de forma total y espontánea.
Revisión de los procedimientos analíticos en la educación física: estos son erróneos y parciales y se
relacionan con: las prácticas psicomotricistas, y un enfoque exclusivo de aprendizajes físico
deportivos y de acondicionamiento físico.
con la finalidad de llegar a elaborar una concepción amplia del tratamiento de la motricidad infantil,
diseñamos un seguimiento de interpretaciones procedentes de la concepción de desarrollo evolutivo
(apartado 1.2), que sustenta la importancia de carácter evolutivo de la motricidad humana, y de los
estudios de neurofisiología (apartado 1.3) que conectado con la interpretación cognitiva (apartado
1.4) de la motricidad, nos llevarán a concluir en el enfoque global (apartado 2) Este último es el único
que entiende la motricidad infantil como una expresión del sistema inteligente.
La interpretación evolucionista: vemos una evolución de las adquisiciones motrices en un sentido
ascendente, a modo de jerarquización de estadios. Vemos en este cuadro una correspondencia de
períodos cronológicos por ciudad con fases del desarrollo motor llegando a los 14 años a la fase de
habilidades motrices especializadas, esto lo debemos tener en cuenta además del historial familiar
de cada niño.
Componentes del desarrollo evolutivo a medida que el niño crece disminuye el rol de la maduración
para dar más importancia a los aprendizajes de tipo conscientes e inconscientes que serán
diferentes para cada niño llevando todo esto a una creciente independencia individual. Vemos así
que no coincide con la etapa o tardíos de la psicología evolutiva. También vemos el contexto social y
cultural puede determinar actitudes y formas de comportamiento análogas entre la población infantil.
La pequeña infancia: va hasta los seis años, en el desarrollo físico no tienen una motricidad del todo,
controlada conscientemente pero si una necesidad insaciable de movimiento. En el desarrollo
psíquico está en una fase de inestabilidad en el plano emocional y del comportamiento, entran en
juego los procesos de asimilación y acomodación de Piaget, que permiten que el niño realice tareas
cada vez más complejas, producto de una intencionalidad más o menos autoexigida, pero que aún
se mantienen en fases de tanteo y de ensayo y error. En lo socio afectivo tienen poca continuidad de
las relaciones con otros niños y adultos pero su alto grado de espontaneidad le permite generar
nuevas relaciones como hacerlas efímeras.
Infancia: Seis a 12 años. En cuanto al desarrollo físico se va manifestando los caracteres sexuales
en el desarrollo muscular y crecimiento óseo determinando características de motricidad propias de
cada sexo. En cuanto al desarrollo psíquico se mantiene la espontaneidad y actividad exploratoria
aumentando el control cognitivo de la conducta de acción motriz. Es el inicio de la motricidad con
carácter planificador se empieza ser necesario las reglas en la actividad lúdica. La diferencia de
intereses entre niños y niñas comienza a hacerse evidente. En cuanto al desarrollo socio afectivo las
relaciones sociales son menos efímeras, se genera un espíritu del grupo y socialización creciente
exigiendo del docente mayor capacidad para establecer relaciones inter individuales.
Prepubertad y pubertad: