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UNIDAD 12

Considerada como una contrapeso de la


huelga, el paro patronal constituye una de las
instituciones menos abordada en la
enseñanza del Derecho del Trabajo. Se trata
de una medida que tiene por objeto la
defensa de los intereses de la empresa, en
beneficio de su subsistencia y por tanto, de la
conservación de una fuente de trabajo.
} Nuestra referencia más significativa se ubica en 1906,
año en el cual los empresarios textiles de Puebla,
Veracruz y Tlaxcala forman la organización patronal
denominada “El Centro Industrial”, argumentando que
ello se creaba en defensa de los posibles ataques del
Círculo de Obreros Libres. Como primera acción
formulan un Reglamento Interior que en forma
arbitraria endurece aún más las condiciones generales
de trabajo de sus obreros.

} Los obreros reaccionan contra las injustas


disposiciones del citado reglamento iniciando una
huelga industrial-textil, acción que fue combatida por
las empresas con un generalizado paro patronal, que
se tradujo en cierres masivos de centros de trabajo;
registrándose oficialmente como el primer paro
patronal en la historia de nuestro país.
} Un arbitraje presidencial culmina oficialmente
el conflicto, favoreciendo totalmente a los
empresarios y ordenando el reinicio de
labores. El descontento obrero generó los
acontecimientos de Río Blanco, movimiento
que culminó con la intervención del Ejército
Federal, el asesinato y encarcelamiento de un
sinnúmero de trabajadores, estigmatizando
aún más al gobierno del Gral. Díaz.

Ello motivo que en la redacción del artículo 123


constitucional (1906-1907) se condicionará el paro
sólo a: exceso de producción , previa autorización
de los órganos competentes.
} La fracción XX del Apartado “A”, del artículo
123 constitucional establece:

“Los paros serán lícitos únicamente


cuando el exceso de producción haga
necesario suspender el trabajo para
mantener los precios en un límite
costeable, previa autorización de los
tribunales laborales”.
} El Título VII de la LFT, dedicado a la
regulación de las relaciones colectivas de
trabajo, en su capítulo VII de la Suspensión
Colectiva de las Relaciones de Trabajo, se
refiere en forma implícita a la existencia y
regulación del paro patronal, al citar (art.
427=III) como causal de la suspensión
colectiva de las relaciones de trabajo “el
exceso de producción con relación a sus
condiciones económicas y a las circunstancias
del mercado”.
} Sin embargo, podemos también considerar lo dispuesto por
el resto de las fracciones del citado art. 427, como
circunstancias o causales motivadoras de un paro patronal:

- La fuerza mayor o el caso fortuito no imputable al patrón


- La incapacidad física o mental del patrón,
- La muerte del patrón
- La falta de materia prima no imputable al patrón
- La incosteabilidad de naturaleza temporal, notoria y
manifiesta de la explotación
- La falta de fondos y la imposibilidad de obtenerlos para la
prosecución de los trabajos, si se comprueba plenamente
por el patrón
- La falta de ministración por parte del Estado de las
cantidades que se haya obligado a entregar a las empresas
con las que se hubiese contratado trabajos o servicios,
siempre que aquellas sean indispensables.
- La suspensión de labores o trabajos que declare la
autoridad sanitaria competente, en caso de contingencia
sanitaria
} Se trata de una figura convencional surgida en años
recientes, que implica la puesta en marcha de
diversas medidas pactadas con el sindicato en épocas
de crisis recurrentes (previos estudios financieros
avalados por ambas partes), que permitan la
supervivencia de una empresa; pudiendo a tal efecto
convenirse la no contratación de trabajadores
temporales, la disminución de jornadas de trabajo,
reajustes en la planta laboral, adelanto de vacaciones,
prohibición de tiempo extra, etc.

} Esta práctica inició en nuestro país en el sector


laboral, pero ha permeado a distintos campos.
Actualmente, ante crisis económicas, el propio Estado
apoya los paros técnicos brindando ayuda económica
y jurídica para la redacción de los citados convenios.
} Como se ha indicado, sólo el exceso de
producción, y en todo caso las causales
previstas por el artículo 427 de la LFT,
justifican el paro patronal; la ausencia de
estos requisitos y la no existencia de los
convenios que requieren los llamados “paros
técnicos”, motiva la consideración de ilegal la
suspensión de actividades, equiparándose a
un despido injustificado colectivo, con todas
las consecuencias económicas que para ello
prevé la LFT.
} El paro patronal constituye así una garantía a
favor del patrón, en forma tal que, más allá
de las sanciones económicas impuestas al
patrón por un cierre temporal considerado
como ilegal (pago a sus trabajadores de
indemnización constitucional, finiquito y
salarios caídos), el patrón esta en su derecho
de negarse a reabrir su centro de trabajo.

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