Eduardo Gestido Castilla

4º de DERECHO.

PRÁCTICA 2
Casos prácticos de Derecho del Comercio
Internacional

APELLIDOS Y NOMBRE:
GESTIDO CASTILLA, EDUARDO

CURSO: 4º GRADO EN DERECHO

GRUPO DE PRÁCTICAS: P1
Eduardo Gestido Castilla
4º de DERECHO.

PRÁCTICA 2: LOS SUJETOS DEL COMERCIO INTERNACIONAL: LAS SOCIEDADES

INTERNACIONALES

1.- Determine qué juzgados tienen la competencia judicial internacional en los

siguientes supuestos:
a) D. Luís Pérez, español con domicilio en Madrid, ex consejero delegado
de una sociedad constituida conforme al Derecho alemán, con domicilio social
en Bremen, y sucursales en España e Italia, fue apartado de su cargo mediante
un acuerdo de la junta de socios. El citado Sr. Pérez, considerando que el acuerdo
fue adoptado sin respetar lo establecido en los estatutos de la compañía, decide
interponer demanda instando la nulidad del mismo.

Aplicamos el Bruselas 1 Bis, porque se cumplen todos los ámbitos de aplicación

(territorial: se quiere litigar en un estado miembro UE; temporal: después del
año 2015; material: civil y mercantil, sin entrar en excluidas; personal: domicilio
del demandado dentro de un país UE).
Como se trata de una materia de competencia exclusiva del art. 24.2, aplicamos
el foro que versa sobre la nulidad o validez de acuerdos sociales y órganos de
administración, el cual sigue el criterio de atribución de la competencia a los
Juzgados y Tribunales del lugar donde se encuentre domiciliada de la sociedad.
Nos dice el art. 24.2 que el órgano jurisdiccional aplicará sus propias normas
DIPr para establecer el domicilio de la persona jurídica. Esto nos lleva al art. 9.11
cc, norma de conflicto para determinar la ley aplicable, la cual es la ley nacional
de la sociedad.
En el caso se nos dice que su domicilio social (o sea, el que consta en sus
estatutos) está situado en Brennen, por lo tanto, aplicando el art. 24 Bruselas 1
BIS, conocerían los Juzgados alemanes.

NOTA: En este caso no aplicamos el artículo 62 Bruselas I BIS para la

determinación del domicilio social porque el propio artículo 24.2 nos dice que se
determinará en base al ordenamiento jurídico interno del Estado en que esta diga
tener su domicilio social.

b) Dos empresas italianas, una domiciliada en Roma y la otra en Verona,

depositaron en una entidad financiera española el importe al que ascendía el
valor de las acciones sociales que pretendían suscribir en el acto de constitución
de una sociedad anónima española. La sociedad se constituyó, y se fijó el
domicilio social en Barcelona, sin que las empresas italianas consten entre los
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socios de la entidad, motivo por el que deciden interponer una demanda instando
la nulidad del acto de constitución, ya que consideran que fueron excluidas del
mismo indebidamente.
Aplicamos el Bruselas 1 Bis, porque se cumplen todos los ámbitos de aplicación
(territorial: se quiere litigar en un estado miembro UE; temporal: después del
año 2015; material: civil y mercantil, sin entrar en excluidas; personal: domicilio
del demandado dentro de un país UE).
Como se trata de una materia de competencia exclusiva del art. 24.2, aplicamos
el foro que versa sobre la validez de sociedades, el cual sigue el criterio de
atribución de la competencia a los Juzgados y Tribunales del lugar donde se
encuentre domiciliada de la sociedad.
En el caso se nos dice que su domicilio social (o sea, el que consta en sus
estatutos) está situado en Barcelona, por lo tanto, aplicando el art. 24 Bruselas
1 BIS, conocerían los Juzgados españoles.

c) Demanda por incumplimiento de contrato frente a una sucursal

española de una sociedad belga constituida con arreglo al Derecho belga y
domicilio social en Bruselas.
Aplicamos el Bruselas 1 Bis, porque se cumplen todos los ámbitos de aplicación
(territorial: se quiere litigar en un estado miembro UE; temporal: después del
año 2015; material: civil y mercantil, sin entrar en excluidas; personal: domicilio
del demandado dentro de un país UE).
El foro que podemos aplicar es el del domicilio del demandado, del art. 4. Lo que
nos llevaría a los juzgados belgas. No obstante, como queremos litigar en
España, podemos aplicar el foro especial alternativo del art. 7.5), que trata sobre
litigios relativos a la explotación de sucursales, agencias o cualquier otro
establecimiento, que atribuye la competencia al órgano jurisdiccional en el que
se hallen sitos.
Teniendo en cuenta que la sucursal está situada en España, podremos litigar
ante los tribunales españoles.

NOTA: Debemos especificar por qué entendemos que se aplica el 7.5: el contrato
tiene que ver directamente con la sucursal española (que es quien tiene que
llevar a cabo la ejecución del contrato).
En otro caso, deberíamos justificar la aplicación del artículo 7.1: la sucursal no
es directamente la responsable del incumplimiento, sino que la demanda se
dirige contra la sociedad belga y se presenta ante la sucursal española.
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d) El consejero delegado de una sociedad constituida conforme al Derecho

español, con domicilio social en España, y filiales en varios países de la U.E.,
decide formalizar un contrato de línea de crédito con una sucursal española de
una entidad financiera francesa domiciliada en París. La sociedad española
decide instar la nulidad del contrato, al considerar que el consejero delegado se
ha extralimitado en las facultades que le fueron concedidas.
Aplicamos el Bruselas 1 Bis, porque se cumplen todos los ámbitos de aplicación
(territorial: se quiere litigar en un estado miembro UE; temporal: después del
año 2015; material: civil y mercantil, sin entrar en excluidas; personal: domicilio
del demandado dentro de un país UE).
El foro que podemos aplicar es el del domicilio del demandado, del art. 4. Lo que
nos llevaría a los juzgados franceses. No obstante, como queremos litigar en
España, podemos aplicar el foro especial alternativo del art. 7.1 a), que trata
sobre litigios relativos a la materia contractual, que atribuirá la competencia al
órgano jurisdiccional del lugar en el que se haya cumplido o deba cumplirse la
obligación que sustenta la demanda. En este caso, como entendemos que es la
prestación de un servicio (según el apartado segundo del citado artículo), sería
el lugar del Estado miembro en el que, según el contrato, debían haberse
prestado los servicios.
Teniendo en cuenta que el contrato de línea de crédito era para una sucursal
situada en España, entendemos que la obligación debía darse en España, por lo
que podremos litigar en los tribunales españoles.

NOTA: ESTÁ MAL. HABLA DE NULIDAD DEL CONTRATO, NO DE

INCUMPLIMIENTO.
Hay que aplicar el > Artículo 7.5 RBIB: ““Una persona domiciliada en un Estado
miembro podrá ser demandada en otro Estado miembro: 5) si se trata de litigios
relativos a la explotación de sucursales, agencias o cualquier otro
establecimiento, ante el órgano jurisdiccional en que se hallen sitos”.

¿Y APLICMOS EL ART. 24.2 BIB? NO, el 24.2 habla de decisiones/ACUERDOS del

órgano, no de contratos.

2.- Determine la “lex societatis” de las siguientes entidades:

a) Sociedad constituida en Lisboa con arreglo al derecho español y
domicilio social en Madrid.
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Para conocer la ley nacional de las sociedades, debemos acudir en primer lugar
al art. 9.11 cc, que nos dice que “La ley personal correspondiente a las personas
jurídicas es la determinada por su nacionalidad, y regirá en todo lo relativo a
capacidad, constitución, representación, funcionamiento, transformación,
disolución y extinción”.
Asimismo, en virtud del art. 9.2 y 8 LSC, serán españolas las sociedades que
tengan domicilio en España, por lo que la lex societatis será española.

b) Sociedad constituida con arreglo al Derecho de las Islas Vírgenes y

domiciliada en la capital de las citadas Islas, dirigida desde España donde,
además, realiza el 99% de su actividad mercantil.
Para conocer la ley nacional de las sociedades, debemos acudir en primer lugar
al art. 9.11 cc, que nos dice que “La ley personal correspondiente a las personas
jurídicas es la determinada por su nacionalidad, y regirá en todo lo relativo a
capacidad, constitución, representación, funcionamiento, transformación,
disolución y extinción”.

Asimismo, en virtud del art. 9.2 LSC, se establece que las sociedades de capital
cuyo establecimiento o explotación principal radique en España deberá
domiciliarse en España, dirigiéndonos obligatoriamente al art. 8 LSC, donde nos
dicen que las sociedades domiciliadas en España serán de nacionalidad española
y deberán regirse por la LSC.
Por lo mismo, la lex societatis es la ley española.

c) Sociedad constituida con arreglo al Derecho de las Islas Caimán y sede

estatutaria en George Town, realiza la totalidad de su actividad comercial entre
España, Francia y Reino Unido, país este último al que pertenecen la mayoría de
sus socios.

El art. 9.11 cc nos dice que la ley personal de una sociedad coincide con su
nacionalidad.
Para saber la nacionalidad de esta sociedad, tenemos diferentes teorías:
- Sede real: según esta teoría, su centro de organización y dirección estaría
en UK, pues todos sus socios son de ahí.
- Lugar de constitución: ha sido constituida con arreglo al Derecho de las
Islas Caimán.
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- Domicilio social: tiene su sede estatutaria en George Town, capital de Islas

Caimán.

Con estos datos, podríamos aplicar la teoría de la sede real y decir que la lex
societatis coincide con su sede real. No obstante, también podríamos optar por
las otras dos opciones, que son mayoritarias y ofrecen más certeza y seguridad
en el ámbito del comercio internacional.
No obstante, nada le impide realizar actos de comercio en España, según el art.
15 ccom.

NOTA: podemos aplicar el 9.2 LSC y lo obligamos a cambiar la sede a España,

aplicando luego el art. 8 LSC, por lo que la lex societatis sería española.

d) Sociedad con sede estatutaria en Atenas y constituida con arreglo al

Derecho griego, que realiza frecuentes transacciones en España.

Según el artículo 9.11 del Cc: “La ley personal correspondiente a las personas
jurídicas es la determinada por su nacionalidad, y regirá en todo lo relativo a
capacidad, constitución, representación, funcionamiento, transformación,
disolución y extinción”.
Para determinar o conocer la nacionalidad de una sociedad, contamos con
distintos criterios:

• Sede real: centro de sus actividades económicas.

• Constitución: ley elegida para su constitución (derecho griego).
• Domicilio social (derecho griego).

A pesar de que la sociedad realiza frecuentes transacciones en España, no tiene

su centro de actividad principal en nuestro país, por lo que no podemos aplicar
el artículo 9.2 de la LSC (están formulados ad intra), que nos remitiría, en su
caso, al artículo 8 de la LSC.
Por lo tanto, la lex societatis sería griega, puesto que atendiendo al resto de
criterios (domicilio social y constitución) nos remite a Grecia.
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NOTA: NO MENCIONAMOS LOS ARTÍCULOS 49 Y 54 DEL TFUE DADO QUE HABLA

DE SIMPLES TRANSACCIONES, Y NO DE LA APERTURA DE SUCURSALES NI HAY
UN TRASLADO DE CENTRO A ESPAÑA, SIMPLEMENTE SE COMERCIA.

3.- Varios socios de una entidad mercantil se plantean ejercer una acción
relativa a la validez de un acuerdo de la junta de socios, a través del cual se
otorgó a un tercero un poder general, al considerar que en su adopción no se
respetó el sistema de mayorías previsto en los estatutos sociales. La sociedad
se constituyó en una Notaría de Francia, con arreglo al Derecho español, y tiene
su domicilio social en Gerona, si bien la actividad comercial la desarrolla entre
Francia y España:

a) Determine si tendrán competencia judicial los tribunales españoles

para conocer de este asunto.

Aplicamos el Bruselas 1 Bis, porque se cumplen todos los ámbitos de aplicación

(territorial: se quiere litigar en un estado miembro UE; temporal: después del
año 2015; material: civil y mercantil, sin entrar en excluidas; personal: domicilio
del demandado dentro de un país UE).
Como se trata de una materia de competencia exclusiva del art. 24.2, aplicamos
el foro que versa sobre la nulidad o validez de acuerdos sociales y órganos de
administración, el cual sigue el criterio de atribución de la competencia a los
Juzgados y Tribunales del lugar donde se encuentre domiciliada de la sociedad.
En el caso se nos dice que su domicilio social (o sea, el que consta en sus
estatutos) está situado en Gerona, por lo tanto, aplicando el art. 24 Bruselas 1
BIS, conocerían los Juzgados Españoles.

b) Ley aplicable al fondo del asunto.

Debemos determinar la lex societati para determinar cuál será la ley que
aplicaremos al fondo del asunto. En esta materia debemos acudir al derecho
autónomo, pues hablamos de la ley personal de las sociedades y no existen otras
fuentes para determinarlo.
Para conocer la ley nacional de las sociedades, debemos acudir en primer lugar
al art. 9.11 cc, que nos dice que “La ley personal correspondiente a las personas
jurídicas es la determinada por su nacionalidad, y regirá en todo lo relativo a
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capacidad, constitución, representación, funcionamiento, transformación,

disolución y extinción”.
Para determinar la nacionalidad de una sociedad, debemos atender a los
diferentes criterios que existen:
1) La sede real: centro de sus actividades económicas.
2) Lugar de constitución: la ley elegida para su constitución.
3) El lugar donde esté establecido su domicilio: allá donde tengan su
domicilio social.
En esta ocasión coinciden los tres criterios en España, pues el centro de sus
actividades se encuentra en España (y Francia), se ha constituido al amparo del
ordenamiento jurídico español, tal y como exigen los art. 9.2 y 8 LSC.
Por lo que la lex societatis, o sea, la ley a aplicar al fondo del asunto será la ley
española (LSC concretamente si es una sociedad de capital o el Ccom en otro
caso).

4.- Dos ciudadanos españoles y uno belga, con residencia habitual en Santa
Cruz de Tenerife, deciden constituir una sociedad conforme al Ordenamiento
Jurídico de Bélgica, fijando su domicilio social en Lieja en el despacho
profesional de un familiar de ciudadano belga. La sociedad no va a realizar
actividad alguna en ese país.
Posteriormente, la sociedad abre en España una sucursal (por lo tanto,
jurídicamente dependiente de la sociedad matriz e idéntica nacionalidad que
ésta), solicitando su inscripción en el Registro Mercantil de Santa Cruz de
Tenerife. Será en España donde la entidad desplegará prácticamente el 100%
de su actividad.

a) ¿Cuál sería su “lex societatis”?

En esta materia debemos acudir al derecho autónomo, pues hablamos de la ley
personal de las sociedades y no existen otras fuentes para determinarlo.
Para conocer la ley nacional de las sociedades, debemos acudir en primer lugar
al art. 9.11 cc, que nos dice que “La ley personal correspondiente a las personas
jurídicas es la determinada por su nacionalidad, y regirá en todo lo relativo a
capacidad, constitución, representación, funcionamiento, transformación,
disolución y extinción”.
Eduardo Gestido Castilla
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La lex societatis seguirá siendo belga, pues cumple el criterio de constitución y

domicilio social (se ha constituido al abrigo del derecho belga, y su domicilio
social se encuentra en Lieja, Bélgica), en virtud del art. 49 TFUE en relación con
el 54 TFUE, que nos prohíbe limitar el derecho del libre establecimiento entre
países miembros de la UE, pues la libre circulación y de establecimiento que se
reconoce para las personas físicas, se extiende a las sociedades, siempre y
cuando esa sociedad se haya constituido con arreglo al OJ de un Estado parte de
la UE y se quiera establecer en otro Estados partes de la UE, como es nuestro
caso.

b) ¿Puede el Registro denegar la inscripción de la sucursal? Razone

jurídicamente la respuesta teniendo en consideración lo establecido
en nuestro Ordenamiento Jurídico en materia nacionalidad y domicilio
de las sociedades, así como la Jurisprudencia del TJUE sobre la
libertad de establecimiento.

Según la jurisprudencia del TJUE de marzo de 1999, asunto C-212/97, un Estado

Miembro no puede negarse a la inscripción de una sucursal de una sociedad
constituida de conformidad con la legislación de otro Estado Miembro (en este
caso, belga), en el que tiene su domicilio sin ejercer en él ninguna actividad
comercial, como es el caso, cuando la sucursal está destinada a permitir que la
sociedad en cuestión ejerza toda su actividad en el Estado donde quieren
establecerse (España).
Hacerlo de esta manera, elude la creación de una nueva sociedad al calor del
ordenamiento jurídico español, que puede contener normas sobre constitución
de sociedades más rigurosas que las belgas, en materia de desembolso de un
capital social mínimo.
Por ello, el art. 15 del ccom nos permite que una sociedad extranjera realice
actos de comercio en España, y el art. 81 del RRM, en su apartado 1. K) nos dice
que será obligatoria la inscripción en el mismo de las sucursales de sociedades
extranjeras y de otras entidades extranjeras. Y en esta materia, aplicaremos las
normas contenidas en los art. 295 y ss RRM.