Sentencia por impedimento de contacto padre hijo

En la ciudad de La Plata, el día 11 de noviembre de 2022, de conformidad con lo resuelto

durante la audiencia de debate, con el objeto de fundar el VEREDICTO y dictar la
correspondiente SENTENCIA de acuerdo a lo prescripto por los arts. 371 y 380 del C.P.P., en
la presente causa n° 3202-20 seguida a Angelina Mailen Romero respecto al delito de
impedimento y obstrucción ilegal de contacto del hijo menor de 10 años con el padre no
conviviente, resuelvo plantear y decidir las siguientes

CUESTIONES
Primera: ¿Se encuentra acreditada la existencia del hecho en su exteriorización material y en
qué términos?
Con la prueba testimonial producida durante la audiencia de debate y la oportunamente
incorporada al mismo por su lectura, se acreditó que cuanto menos desde principios del año
2016, una persona del sexo femenino, con domicilio inicial en calle 24 de septiembre nº464 de
la localidad de Cañuelas, impidió y obstruyó ilegalmente, de manera continua y sistemática -
con aislados intervalos-, el contacto de su hijo menor de 10 años, conviviente, con su padre
biológico, Nicolás Ramón Cuarenta, habiendo cumplido el niño recién los 11 años de edad el
día 23 de mayo del corriente año.
La materialidad ilícita que doy por legalmente acreditada surge de la prueba que trataré a
continuación, sobre la que asiento mi convicción sincera acerca de la certeza que cabe atribuir
a la reconstrucción histórica anteriormente efectuada.
1. Declaración testimonial prestada durante la audiencia de debate por Nicolás Ramón
Cuarenta, quien en lo que resulta de interés manifestó lo siguiente: Que los conflictos con
Angelina Mailen Romero, madre de su hijo Giovanni Tobías Cuarenta, comenzaron con el
nacimiento de este último, habiendo dejado de convivir 6 o 7 meses más tarde. Expuso el
declarante que firmaron un acuerdo con Angelina respecto al régimen de visitas respecto a
Tobías, el cual, si bien había sido homologado judicialmente, la nombrada no lo ha cumplido,
impidiendo de esa manera que el declarante pudiera ver a su hijo, a quien desde el año 2016
solo ha podido visitar tan solo en 10 oportunidades, contando su hijo en el corriente año 2022
con 10 años de edad.
Explicó Cuarenta, que el régimen de visitas convenido establecía que él retiraría a Giovanni del
domicilio materno los días martes y viernes a las 17 hs., restituyéndolo allí a las 21 hs., en tanto
los días sábados lo retiraría del mismo lugar a las 14 hs. y lo restituiría a las 21 hs.
Agregó a su vez, que en el año 2020 Angelina Romero llevó a Tobías a vivir a la casa de sus
abuelos maternos, radicados en Miramar, sin haber existido un acuerdo previo con el
declarante.
Expuso haber realizado infinidad de denuncias penales, como también presentaciones ante los
distintos Juzgado de Paz que fueron interviniendo a lo largo de los años -Cañuelas, Lobos, y
General Alvarado- organismos estos últimos que no pudieron lograr que Angelina cumpliera
con el régimen de visitas acordado judicialmente.
Expresó también que frente a la imposibilidad de ver a Giovanni a pesar de la infinidad de
presentaciones y denuncias judiciales efectuadas, debió recurrir al apoyo de los medios de
comunicación donde el declarante había expuesto su desesperante situación frente al hecho de
no poder ver a su hijo.
Agregó a su vez, que frente a la actitud asumida por Angelina -quien impedía al declarante ver
a su hijo-, durante un tiempo documentó a través de filmaciones y audios lo sucedido en el
momento en que el declarante concurría junto a su madre Sonia González al domicilio donde
vivía Giovanni junto a Angelina, con el objeto que quedara ilustrada lo que ocurría al concurrir
allí con el fin de retirar a Giovanni conforme fuera acordado en el régimen de visitas firmado de
común acuerdo entre ambas partes, documento este que se encontraba homologado
judicialmente por el Juzgado de Paz interviniente.
Asimismo, el testigo mencionó haber concurrido al mismo domicilio acompañado por personal
policial, como así también en otras oportunidades también lo hizo con una trabajadora social
del Juzgado e incluso con la propia Jueza, siempre persiguiendo el mismo objetivo, esto es,
tener la posibilidad de estar con su hijo.
A esta altura de su relato el declarante se detuvo en un episodio relacionado a los intentos por
ver a su hijo, en el marco del cual hacia el mes de diciembre del año 2020 Angelina sí le
permitió al declarante visitar a Giovanni al nuevo domicilio ubicado en Miramar donde vivían los
abuelos maternos de su hijo. Expuso así el declarante, haber disfrutado mucho de ese
encuentro con su hijo, para luego agregar que al finalizar aquella visita sintió tristeza no solo
debido a la finalización de la misma, sino por los pocos momentos como ese que había podido
compartir con Giovanni.
Cabe agregar a esta altura que la documentación fílmica referida por el testigo y que
acompañara como prueba en CDs incorporados al debate como prueba a fs. 29/31 y 110, se
encuentran desgrabados a fs. 159/168. Asimismo se observa que los hechos descriptos por el
testigo se relacionan con las 32 denuncias penales por impedimento de contacto iniciadas por
él entre los años 2016 a 2018, las cuales dieran origen a las correspondientes investigaciones
penales preparatorias acumuladas a la presente causa y que se encuentran individualizadas en
el registro obrante a fs. 187/188.
A lo anteriormente expuesto cabe señalar que en el expediente nº 5674 que tramitara ante el
Juzgado de Paz Letrado de Cañuelas -agregado ditigalmente a estos autos con fecha
10/11/22- se encuentran agregadas cada una de las denuncias referidas -efectuadas a lo largo
de los años 2016/2017-, dando ello lugar a un posterior acuerdo que finalmente fuera
homologado judicialmente conforme será tratado en el punto 5 del presente decisorio.
A modo ilustrativo, teniendo a la vista las piezas incorporadas por su lectura obrantes a fs 4/5 -
relacionada a la denuncia por impedimento de contacto formulada por Cuarenta contra Romero
con fecha 23/3/2016 y la denuncia obrante a fs. 27/vta., efectuada por Cuarenta con fecha
14/1/2017, me detendré brevemente en esta última, efectuada en la superintendencia de
Políticas de Género de Cañuelas, en la que Cuarenta expresara lo que manifestara en todas
las denuncias realizadas respecto a la misma problemática de impedimento de contacto,
sosteniendo lo siguiente: Que mantuvo una relación de noviazgo con Angelina Mailen Romero,
habiendo tenido un hijo en común llamado Giovanni Tobías Cuarenta de 5 años de edad. Que
había un acuerdo de régimen de visitas realizado con intervención del Juzgado de Paz de
Lobos en el año 2013 en el cual se establecía que los días martes y viernes de 17 a 21 hs y
sábado de 14 a 21 hs, Nicolás Cuarenta debía retirar a Giovanni de su domicilio ubicado en
calle 24 de Septiembre n° 464 de Cañuelas. Que en cumplimiento del acuerdo se constituyó
junto a su madre dentro del día y horario previsto con el fin de retirar a Giovanni, no siendo
atendido por persona alguna, motivo por el cual formulaba la denuncia en orden al delito de
impedimento de contacto con su hijo.
2. Declaración testimonial prestada durante la audiencia de debate por la Sra. Sonia Silvana
González, quien en lo que resulta de interés manifestó lo siguiente: Que es la madre de Nicolás
Ramón Cuarenta, habiendo concurrido con el mismo "miles de veces" al domicilio de calle 24
de septiembre n° 464 de la ciudad de Cañuelas -donde residía la madre de su nieto Giovanni
junto al mismo-, con el fin de poder ver al niño los días previstos en el acuerdo judicialmente
aprobado, lo cual nunca ocurrió por cuanto no eran atendidos por nadie a pesar de tratarse de
la hora en que Nicolás tenía derecho a retirarlo para estar con él. Expuso también que ante el
incumplimiento por parte de la madre del niño, la declarante junto a su hijo concurrían a la
Comisaría de la Mujer de Cañuelas a los fines de formular la correspondiente denuncia,
recordando la testigo a su vez, haber concurrido al domicilio antes citado, junto a Nicolás,
acompañados por funcionarios policiales e incluso la declarante lo ha hecho junto a una amiga
suya de nombre Inés Arce, quien luego la acompañó a formular la denuncia frente al
incumplimiento del acuerdo de visitas establecido en el que incurría Angelina.
Continuando con su relato la testigo se refirió, con indignación, a una situación ocurrida hacia el
mes de diciembre del año 2015, en la cual, con motivo de un accidente vial sufrido por su hijo
Nicolás, el mismo estuvo internado, en coma, por más de 20 días. Expuso la testigo que hacia
aquella fecha Nicolás tampoco estaba pudiendo ver a Giovanni debido al accionar de Angelina,
pero justamente, mientras su hijo se encontraba atravesando ese difícil momento, Angelina se
comunicó con la declarante para preguntarle la razón por la cual Nicolás no iba a buscar a
Giovanni, lo cual la testigo tomó como una actitud provocadora por cuanto ella no solo sabía lo
que le había ocurrido a Nicolás, sino que hasta ese momento impedía que su hijo o ella
pudieran ver a Giovanni.
A mi criterio, las declaraciones precedentemente tratadas en los puntos 1 y 2 a los efectos de
su valoración deben ser analizadas en forma integral con la prueba que trataré a continuación y
que se encuentra incorporada por su lectura al debate, permitiendo la valoración conjunta de
todas aquellas piezas concluir respecto a la veracidad de los testimonios prestados por Nicolás
Cuarenta y su madre .
3. Certificado de nacimiento obrante a fs. 24, constando que Giovanni Tobias Cuarenta nació el
día 23/5/2011, siendo hijo de Nicolás Ramón Cuarenta y Angelina Mailen Romero
4. Copia certificada del Acuerdo celebrado entre Nicolás Ramón Cuarenta y Angelina Mailen
Romero, firmado con fecha 10/7/2013 en los autos Cuarenta Nicolás Ramòn C/Romero
Angelina Mailen s/Medida Autosatisfactiva que tramitara ante el Juzgado de Paz de Lobos bajo
el nº 775, en el que se establece que Cuarenta tendrá consigo a su hijo Giovanni los días
martes y viernes de 17 a 21 hs y los sábados de 14 a 21 hs., pieza esta que se encuentra
agregada a fs. 21 de la presente causa, acuerdo este que fuera homologado con fecha
12/9/2013.
5. Piezas obrantes a fs. 211/vta., 259 y 260, tratándose de copias certificadas de la causa nº
5674 caratulada "Cuarenta Nicolás Ramón C/Romero Angelina Mailen S/Incidente de
Incumplimiento del Régimen de Comunicación con los Hijos" que tramitara por ante el Juzgado
de Paz de Cañuelas, cuyo correspondiente expediente digitalizado incorporado por su lectura al
debate se encuentra agregado con fecha 10/11/22, piezas de las cuales surge que con fecha
18/8/2017 (ver fs. 260) fue homologado el acuerdo celebrado el día 5/7/2017 (ver fs. 259) por el
cual se transformaba en difinitivo el acuerdo provisorio celebrado el día 31/5/2017 (ver fs 211)
por el cual las partes citadas, Cuarenta y Romero, establecían que Giovanni permanecería con
su padre los días martes y viernes quien lo retiraría del domicilio materno a las 17 hs. y lo
restituiría a las 21 hs., en tanto los fines de semana, en forma alternada, sábados y domingos,
lo retiraría a las 14 hs. y lo restituiría a las 21 hs.
6. Expedientes n° 30885, 30882, 30880 y 1897 remitidos digitalmente por el Juzgado de Paz de
General Alvarado con fecha 10/11/22 -incorporados por su lectura al debate-, conteniendo los
incidentes por incumplimiento del Régimen de Comunicación iniciados por Nicolás Ramón
Cuarenta contra Romero Angelina Mailen, de cuya lectura extraigo las siguientes circunstancias
de interés en relación al hecho en juzgamiento:
En primer lugar corresponde señalar que a los citado expedientes se encuentran acumulados a
su vez los incidentes que oportunamente tramitaran por incumplimiento del Régimen de
Comunicación ante los Juzgados de Paz Letrado de Cañuelas (nº 5674 y nº 9599) y de Lobos
nº 9325.
Del citado Incidente nº 5674 -además de las piezas precedentemente individualizadas en el
punto 5-, surge que la Sra. Angelina Romero, con fecha 16/3/17, mediante decisorio obrante a
fs. 167 (ver 7º archivo del expediente digital remitido), fue intimada por el Juez de Paz de
Cañuelas -luego de recepcionarse a lo largo de los años 2016/2017 reiteradas denuncias de
impedimento de contacto por parte del Sr. Nicolás Cuarenta, padre de Giovanni Tobías
Cuarenta-, a dar "estricto y debido cumplimiento del Régimen comunicacional pactado y
homologado por sentencia firme, respecto del niño y su padre Nicolás Ramón Cuarenta, bajo
apercibimiento de aplicársele una multa diaria.
6.2. Actuaciones del incidente nº 9599 llevadas adelante entre el 26/9/2019 hasta el 7/7/20, que
permiten apreciar que ante el quiebre del vínculo del niño Giovanni con su Padre Nicolás
Cuarenta se dispuso la realización de una terapia de revinculación, en el marco de la cual la
Sra. Romero incumplió las órdenes impartidas a esos fines, lo cual llevó a que la Jueza
interviniente intimara a la nombrada a cumplir con lo ordenado bajo apercibimiento de aplicar
astreintes. Asimismo, en el citado marco de revinculación con fecha 4/2/20 se impuso a la Sra.
Romero, frente a la reticente actitud asumida en el proceso, la obligación de ser colaboradora
respecto a la citación que realice la Asesoría Pericial, apercibiéndosela nuevamente con
astreintes y exigiéndosele el cumplimiento del tratamiento psicológico respecto a Giovanni,
decisorio este que es reiterado con fecha 2/3/20, sin éxito. Finalmente, con fecha 6/7/20, la
Jueza de Paz señala en el primer punto de su decisorio, frente a las reiteradas e infructuosas
intimaciones efectuadas a la Sra. Romera, incluso bajo apercibimiento de aplicación de
astreintes, que la misma ha asumido en el proceso "una clara postura de falta de colaboración
e interés para lograr la revinculación de padre-hijo...".
Asimismo, en el punto 3 del decisorio en tratamiento, se deja constancia que el fracaso de la
revinculación de Giovanni con su padre Nicolás Cuarenta estuvo inducida por los comentarios y
acciones de los adultos de su entorno quienes "desvalorizan al padre, y hacen al niño, partícipe
de sus conversaciones y críticas, operando Giovanni como vocero de ellos...".
Hallándose esta última circunstancia corroborada por los testimonios prestados durante la
audiencia de debate por Miriam Osorio y Daniela Delgado, quienes fueron contestes en
manifestar haber intervenido en su carácter de personal técnico del Servicio Local de la Niñez
de la Municipalidad de Cañuelas -siendo la última nombrada psicologa de la citada
Dependencia- en el marcho de la cual, con motivo de una derivación efectuada por la
Comisaría de la Mujer entrevistaron al niño Giovanni Tobías Cuarenta quien hacia aquella
fecha (5/1/2017) contaba con 5 años de edad, oportunidad en la que las especialistas pudieron
apreciar que el niño se hallaba influenciado por los adultos que en ese momento vivían con él.
Habiéndoseles exhibido la pieza obrante a fs. 502 oportunamente incorporada por su lectura al
debate, las mismas reconocieron las firmas estampadas como pertenecientes a su puño y letra
7. A mi criterio, con las pruebas anteriormente tratadas se acredita en la forma
precedentemente expuesta al describir la materialidad ilícita, que desde el año 2016 la Sra.
Angelina Romero ha recurrido a diversos mecanismos dirigidos a impedir y/u obstruir la
posibilidad para que el Sr. Nicolás Cuarenta pudiera mantener un contacto fluido con su hijo
Giovanni, procurando de esa manera generar un progresivo distanciamiento entre padre e hijo,
el cual culminó con una serie de acertadas decisiones por parte de la Juez de Paz por entonces
interviniente, dirigidas a lograr la revinculación padre-hijo, objetivo este que fracasó con motivo
de la deliberada falta de colaboración de la mentada Angelina Romero. quien a pesar de las
reiteradas intimaciones efectuadas desoyó las mismas.
Entiendo a su vez que los testimonios prestados tanto por Nicolás Cuarenta, como por su
madre, Sra. Sonia González (ver puntos 1 y 2 precedentemente tratados),resultan sinceros,
hallándose corroborados por la totalidad de los incidentes de incumplimiento del régimen
comunicacional a los que me refiriera anteriormente, en el marco de los cuales se aprecian los
esfuerzos realizados por Cuarenta por acercarse a su hijo respetando las indicaciones
impartidas por el juzgado, sometiéndose a las pericias psicológicas y psiquiátricas ordenadas,
respetando los tiempos que demandaba el proceso dirigido a reconstituir el vínculo paterno -los
cuales corresponde señalar fueron por demás excesivos-, el cual no pudo concretarse, tal
como fuera expresado anteriormente, en orden al accionar de la imputada Romero.
Entiendo que las apreciaciones precedentemente efectuadas se encuentran consolidadas con
los informes psicológico y ambiental agregados a fs. 73/74 del incidente de incumplimiento de
régimen de comunicación nº 9599 que tramitara ante el referido Juzgado de Paz de Cañuelas,
los cuales fueron efectuados por la perito psicóloga Olveira Perotto y la trabajadora social
Sandra Perez en el mes de agosto del año 2019, dando cuenta de las circunstancias que
estimo de interés y que transcribiré a continuación:
"...DINAMICA DE LA ENTREVISTA/Nicolás nos informa que desde la re vinculacion que
habíamos realizado en el año 2017, se firmó un régimen de comunciacion en el que veía a su
hijo tres veces por semana. Expresa. `à Gio lo vi 5 o 6 meses desde la re vinculación´...Luego
relata que la causa se fue a Lobos y expresa `hubo 16 audiencias en Lobos y no fue a ninguna
´Refiere estar cansado y desesperado por ver a su hijo, ...nos muestra diferentes notas
televisivas que le realizaron por su situación/Apreciaciones profesionales y CONCLUSIONES:
El señor Nicolás Cuarenta se mostró con muy buena predisposición a recibirnos y responder
nuestras preguntas, se lo ve preocupado y desesperanzado.../...sugerimos que:/Se realice
nuevamente una re vinculación entre Giovanni y su papá/Se pueda pactar un nuevo régimen de
visitas, instando a la familia materna a cumplir con lo pactado/Escuchar al niño y de considerar
necesario, sugerir que realice una terapia psicológica, para ayudarlo a transitar las diferentes
situaciones que le tocan atravesar (no ver a su papá, revincularse, mandatos familiares, tomar
una postura diferente a la de sus padres, etc.)...".
8. Respecto a la declaración prestada por la imputada Angelina Romero:
8.1. En oportunidad de prestar declaración en carácter de imputada la Sra. Angelina Romero,
tanto a fs. 403/404, como durante la audiencia de debate, negó haber impedido u obstruido el
contacto de Giovanni con su padre Nicolás Cuarenta, para luego atribuir a este último la
mentada falta de comunicación con su hijo, esgrimiendo a esos fines que Giovanni había
sufrido desilusiones de parte de su padre; que a su vez este último la ha denigrado como mujer
ejerciendo contra ella violencia psicológica y física; que la declarante había obtenido varias
perimetrales respecto a Cuarenta; Que la Jueza de Paz jamás escuchó que la declarante tenía
perimetrales a su favor; Que tenía miedo que le quitaran la custodia de su hijo por no tener
trabajo, motivo por el cual estudió derecho -egresando en el año 2016-, habiendo comenzado
un curso de policía poco antes, trabajando en la actualidad en Ezeiza como policía de
Seguridad Aeroportuaria; Que el único acuerdo que hubo era el originariamente acordado por
el cual Cuarenta retiraba a Giovanni de su domicilio de calle 24 de sptiembre nº 464 los días
martes y viernes de 17 a 21 hs. y los sábados de 14 a 21 hs. Que la declarante cumplió con
todas las ordenes impartidas en el marco de los expedientes que tramitaron ante los Juzgados
de Paz; Que en algún momento el régimen de visitas no podía cumplirse debido a los nuevos
horarios escolares de Giovanni. Respecto a esto último la Sra. Agente Fiscal preguntó a la
declarante respecto al motivo por el cual no había puesto en conocimiento de esta última
circunstancia al Juzgado de Paz, respondiendo la declarante que su abogado le había dicho
que eso lo tenía que pedir el Sr. Cuarenta.
8.2. Teniendo en cuenta la prueba precedemente tratada y valorada, entiendo que la versión
traída por la imputada a este proceso se ha tratado de un vano intento por colocarse en una
mejor situación procesal frente al hecho que se le atribuía. su versión se encuentra desmentida
por la totalidad de los indidentes de incumplimiento del régimen de comunicación de Nicolás
Cuarrenta respecto a su hijo, en el marco de los cuales pudo comprobarse la reticente actitud
por parte de la Sra. Romero para que el padre pudiera mantener un contacto fluido con su hijo
Giovanni, impidiéndolo u obstruyéndolo.
Asimismo, entiendo que las denuncias por supuestas violencias ejercidas por Nicolás Cuarenta
contra la Sra. Romero, no solo no hallan respaldo en las correctas intervenciones efectuadas
por Cuarenta ante los distintos expedientes que tramitaran ante la Justicia de Paz -recuérdeses
que la única persona que ha sido reiteradamente intimada a cumplir medidas desobedecidas
en el marco de los mismos ha sido la Sra. Romero-, sino que ninguna de aquellas denuncias ha
tenido resolución favorable. Lo expuesto, teniendo en cuenta las características de
personalidad de la imputada, hace suponer que las mentadas denuncias respondían a una
nueva estrategia dirigida a desacreditar al padre de su hijo. Refuerza lo anteriormente expuesto
el informe psicológico presentado con fecha 7/7/20 respecto a este último, en el marco del
expediente 9599 que tramitara ante la Justicia de Paz de Cañuelas, en el cual se dictaminara
textualmente, en lo pertinente "...En su discurso no aparecen características agresivas y puede
describir situaciones sin exaltarse. Por momentos se muestra ansioso o acelerado en su decir,
lo cual es esperable ya que coincide su modo de expresión con el relato de este proceso que
lleva más de tres años sin poder resolverse...". (el resaltado me pertenece).
En el mismo sentido, en la pericia psiquiátrica practicada al nombrado Nicolás Cuarenta con
fecha 21/5/20 en el marco del citado expediente 9599 se dictaminó que el mismo no
presentaba particularidad psiquiátrica alguna, no obstante lo cual, teniendo en cuenta la
situación que el mismo se hallaba atravesando como consecuencia de no poder mantener
contacto con su hijo, se sugería al nombrado la realización de un tratamiento que le "posibilite
una mejor tramitación subjetiva de la presente situación subjetiva...".
Consolida la valoración que efectúo respecto a la versión traída por la imputada, la pericia
psicológica obrante a fs 78/91 del citado expediente nº 9599, practicada a la nombrada Romero
con fecha 23/9/19, en el marco de la cual se dictaminara, en lo que resulta de interés y en
forma textual, que a su respecto "...se evidencian rasgos histéricos, con altas defensas yóicas
que la llevan a evadir los conflictos o resolverlos de manera infantil..." (el resaltado me
pertenece), sugiriendo la profesional que la nombrada Angelina Romero realice un tratamiento
dirigido a trabajar el rol materno, la idea de familia, la resolución de conflictos, la aceptación de
otras posturas y la vida futura.
Corresponde señalar también que, a mi criterio, la respuesta brindada por la imputada a la
pregunta formulada por la Agente Fiscal -respecto a la razón por la cual no había anoticiado al
imputado o al Juzgado de Paz respecto al cambio de horarios escolares-, no resulta creíble,
evidenciando una vez más un mecanismo para justificar lo injustificable.
Sostener como lo ha hecho la Sra. Angelina Romero, que era el Sr. Cuarenta, y no ella, la
persona que debía comunicar aquella circunstancia al juzgado de Paz interviniente no resiste el
menor análisis, no solo por su condición de abogada y policía, sino por cuanto el régimen de
visitas de Giovanni se encontraba judicializado desde hacía mucho tiempo, habiendo existido
para aquel momento infinidad de conflictos generados por la imputada Romero para su
ejecución.
Por último, teniendo en cuenta que la Sra. Defensora, en oportunidad de formular sus alegatos,
con el fin de estigmatizar a Nicolás Cuarenta como una persona violenta, se refirió al
comportamiento del mismo durante las jornadas de debate, habré de discrepar con la misma. A
mi criterio, el Sr. Cuarenta, mantuvo en todo momento un comportamiento correcto, a pesar de
haberse escuchado manifestaciones por parte de la imputada Romero que pudieron haberle
resultado hirientes, o bien irritantes, más lejos de haber reaccionado frente a las mendaces
expresiones ventiladas, el Sr. Cuarenta demostró un muy ajustado aplomo frente a aquellas
circunstancias.
Por los fundamentos expuestos resuelvo la primera cuestión por la afirmativa, por ser mi
sincera convicción (arts. 210, 371 inc. 1º, 373, 376 y concs. del Código Procesal Penal).
Cuestión Segunda: ¿Cuál ha sido la participación de Angelina Mailen Romero en el hecho
descripto en la cuestión precedente.
Entiendo que la nombrada resulta ser autora del hecho anteriormente tratado, extremo que
encuentro acreditado con las directas imputaciones dirigidas por Nicolás Cuarenta y su madre
(ver puntos 1 y 2 de la cuestión primera a la que me remito en honor a la brevedad), como así
también con las propias actuaciones llevadas adelante en los mencionados incidentes de
incumplimiento del régimen comunicacional que tramitaran ante los Jugado de Paz de
Cañuelas, Lobos y ahora, General Alvarado, a los cuales ya me refiriera en la cuestión anterior
a la cual me remito.
Por los fundamentos expuestos resuelvo la segunda cuestión por la afirmativa por ser mi
sincera convicción (arts. 210, 371 inc. 2º, 373, 376 y concs. del Código Procesal Penal).
Cuestión Tercera: ¿Proceden en el caso de autos eximentes de responsabilidad?
No concurriendo eximentes ni habiendo sido invocadas resuelvo la presente cuestión por la
negativa por ser mi sincera convicción (arts. 210, 371 inc. 3º, 373, 376 y concs. del Código
Procesal Penal).
Cuestión Cuarta: ¿Concurren circunstancias atenuantes computables en favor de la
procesada?
En el mismo sentido expuesto por la Sra. Agente fiscal valoro como circunstancia atenuante de
responsabilidad la ausencia de condenas previas conforme se desprende de los informes del
Registro Nacional de Reincidencia y de antecedentes penales provinciales respectivamente
agregados con fechas 22 y 23 de septiembre de 2022.
Por lo expuesto, resuelvo la presente cuestión por la afirmativa por ser ello mi sincera
convicción (arts. 40 y 41 del Código Penal, 210, 371 inc. 4º, 373, 376 y concs. del Código
Procesal Penal).
Cuestión Quinta: ¿Concurren circunstancias agravantes computables en contra de la
procesada?
Habré de computar como circunstancia agravante del hecho la continuidad del ilícito accionar
por parte de la Sra. Romero a lo largo de más de 5 años -desde el año 2016-, con aislados
breves momentos en que la nombrada cumplió con el régimen de visitas.
Como circunstancia agravante de responsabilidad habré de computar la formación y
preparación de la Sra. Romero, quien por su instrucción general en orden a su condición de
abogada y de policía de seguridad aeroportuaria se hallaba en una situación que le permitía
advertir los graves daños que con su accionar causaba, no solo al Sr. Cuarenta, sino también,
a su hijo Giovanni Tobías Cuarenta, al mantenerlo alejado del afecto, cuidado, y
acompañamiento que pudo haberle brindado su padre a lo largo de tantos años.
Por lo expuesto resuelvo la presente cuestión por la negativa por ser ello mi sincera convicción
(arts. 40 y 41 del Código Penal, 210, 371 inc. 4º, 373, 376 y concs. del Código Procesal Penal).

VEREDICTO
De acuerdo a como han sido resueltas las cuestiones precedentemente tratadas pronuncio
VEREDICTO CONDENATORIO para la procesada Angelina Mailen Romero en el hecho que
diera motivo a estas actuaciones.

Conforme a lo resuelto en el Veredicto que se ha dado en autos y a lo dispuesto en los

artículos 375 y 376 del Código Procesal Penal, corresponde plantear y votar las siguientes
CUESTIONES
Primera: ¿Cómo debe calificarse el hecho respecto al cual se encuentra demostrada la
culpabilidad de la procesada Angelina Mailen Romero que fuera descripto en la primera
cuestión del Veredicto?
1. El hecho de referencia constituye el delito de impedimento y obstrucción, ilegal, de contacto
del hijo menor de 10 años con el padre no conviviente, previsto por el artículo 1º, segundo
párrafo, de la ley nº 24.270.
Conforme fuera tratado al analizar la cuestión primera del veredicto se encuentra probado que
el ilegítimo accionar desplegado por la Sra. Angelina Romero ha importado a lo largo de más
de 5 años (con excepción de aislados momentos) la frustración, impedimento, y obstrucción del
contacto del Giovanni Tobías Cuarenta con su padre Nicolás Cuarenta desde que el niño
contaba con tan solo 5 años de edad.
2. Si bien la Sra. Agente fiscal en oportunidad de formular su alegato final acusatorio amplió su
acusación susbumiendo el hecho también en la figura prevista por el art. 2º de la ley nº 24.270 ,
sosteniendo que la Sra. Romero había mudado en el año 2020 a Giovanni sin autorización
judicial, entiendo que no corresponde hacer lugar a la ampliación acusatoria. Ello por cuanto,
de haber tenido la Representante del Ministerio Público Fiscal intenciones de ampliar la
acusación a los fines de no afectar el derecho de defensa, debería haber recurrido al
mecanismo procesal específicamente previsto por el art. 359 del C.P.P.
Por lo expuesto califico el ilícito en la forma precedentemente expuesta en el primer párrafo del
punto 1 de la presente cuestión (arts. 210, 373, 375 inc. 1º, 376 y conc. del C.P.P.).
Cuestión Segunda: ¿Que pronunciamiento corresponde dictar?
1. De conformidad con la adecuación que se hiciera del hecho y luego de ponderar las
circunstancias atenuantes y agravantes tratadas en las cuestiones cuarta y quinta del veredicto,
considero que corresponde imponer a Angelina Mailen Romero la pena de NUEVE MESES DE
PRISION, con costas (art. 530 y 531 del C.P.P.).
2. Considero además, que las circunstancias atenuantes valoradas, y la naturaleza del hecho
atribuido, demuestran la inconveniencia de aplicar de modo efectivo la privación de libertad
teniendo en cuenta el fin perseguido por la misma, debiendo ser dejada en suspenso de
conformidad con lo normado por el artículo 26 del C.P. (arts. 40, 41, y 1º -Segundo Párrafo- de
la ley nº 24.270; y 25 inc. 1º y 7º, 210, 373, 375 inc. 2º, 376 y concs. del C.P.P.).
3. Por considerar que resultan adecuadas para prevenir la comisión de nuevos delitos y
teniendo en cuenta el hecho en tratamiento, se dispone que durante el plazo de dos años la
condenada cumpla como reglas de conducta las siguientes reglas de conducta:
3.1. Fijar residencia y someterse al control del Patronato de Liberados de la Provincia de
Buenos Aires, debiendo presentarse bimetralmente en la Delegación que le corresponda de
acuerdo a su domicilio.
3.2. Cumplir estrictamente con las medidas ordenadas por el Juzgado de Paz interviniente, en
relación al régimen de visitas de Giovanni Tobías Cuarenta con su padre Nicolás Ramón
Cuarenta, como así también con las delicadas y complejas medidas que el citado órgano
deberá adoptar en adelante con el fin de procurar progresivamente la revinculación del padre
con su hijo con el objeto de lograr progresivamente regularizar el régimen de visitas.
Respecto a este punto habré de señalar las siguientes circunstancias que estimo de interés:
a) Ha quedado claro a partir del relato prestado por el Sr. Nicolás Cuarenta, que no es su
intención que la madre de su hijo, Sra. Angelina Mailen Romero, tenga que cumplir la pena
impuesta privada de la libertad, habiendo peticionado sí, poder tener la posibilidad de
vincularse fluidamente, como padre, con su hijo Giovanni Tobías Cuarenta.
b) Conforme fuera acreditado al analizar la cuestión primera del veredicto, el impedimento y
obstrucción del vínculo entre Nicolás Cuarenta con su hijo Giovanni Tobías Cuarenta se
extendió a lo largo de más de 5 años, con excepción de breves y aislados periodos, tiempo
durante el cual el Juzgado de Paz interviniente intentó llevar adelante procesos de
revinculación del hijo con su padre, los cuales fracasaron una vez más por las obstrucciones
generadas por la madre del niño.
c) A lo largo del referido extenso periodo de tiempo en que el padre vio impedida y/u obstruida
la posibilidad de tener un contacto fluido con su hijo, y la circunstancia de hallarse conviviendo
el pequeño con el núcleo familiar materno, fue generando en el niño, debido a la posición
adoptada por su madre, un sentimiento de rechazo hacia su padre e incluso hacia el resto del
núcleo familiar paterno.
En los distintos incidentes de incumplimiento de contacto con el hijo no conviviente que
tramitaron ante la Justicia de Paz, a los que me refiriera al tratar la cuestión primera del
veredicto, pudo apreciarse a través de lo dictaminado en diferentes pericias psicológicas la
influencia del núcleo familiar materno sobre el niño conviviente, contexto este que lo fue
predisponiendo en contra de su padre, resultando ilustrativo apreciar como secuela de aquel
accionar el informe confeccionado con fecha 5/1/17, agregado a fs. 502 de la presente causa,
al cual se remitieron al prestar declaración durante la audiencia de debate la psicóloga social
Daniela Delgado y la Sra. Miriam Osorio -prestando ambas funciones en el Servicio Local de
Promoción y Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de la Municipalidad de Cañuelas-,
quienes señalaron la forma en que el niño repetía respecto a su padre expresiones propias de
los mayores convivientes, pudiéndose leer en forma textual en el mentado informe la siguiente
frase que permite confirmar la negativa influencia construida respecto al núcleo familiar
paterno: "...A continuación relata sin hacerle este equipo ninguna pregunta `...vos lo tenés que
gritar...´ (SIC), haciendo referencia al personal que lo estaba llamando a la policía por parte de
su padre/....En relación a otros integrantes de la familia se le pregunta como es la relación con
su abuela paterna, el manifiesta `no la quiero porque es gorda y me trata mal, me dice
pelotudo...´SIC...".
Asimismo, a fs. 455/456 vta. se encuentra agregado un dictamen pericial, también incorporado
por su lectura al debate, efectuado con fecha 25/10/2019 por la licenciada Mariana Andrea
Mendoza en su carácter de perito psicóloga del Cuerpo Técnico Auxiliar del fuero de
Responsabilidad Penal Juvenil del Departamento Judicial de La Plata, en el marco del cual se
concluyera, entre otros aspectos, que el niño Giovanni Tobías Cuarenta se encontraba inmerso
en el conflicto parental, quedando ubicado como objeto en dicha conflictiva, agregándose que
al referirse el niño a esta última presenta un vocabulario adulto, juicios cristalizados que en
ocasiones no puede explicar, ansiedad, tic en el rostro, elevado tono de vos, ubicándose por
momentos como vocero de las demandas maternas.
Me he detenido en el aspecto precedente para relacionarlo con lo que en su momento se
denominaba Síndrome de Alienación Parental, término este utilizado por el psiquiatra Richard A
Gardner, quien fuera citado por Graciela N Manonellas en su libro "La Responsabilidad penal
del padre obstaculizador" (Ed. Ad Hoc, Primera reimpresión noviembre 2007, pag. 44),
considerando relevante destacar los siguientes conceptos del denominado síndrome citados en
la mentada obra: Se trata de un "disturbio que afecta al menor, tanto en lo que se refiere al
progenitor no conviviente, como al otro. El niño se obsesiona por desaprobar y criticar a uno de
sus progenitores, con más frecuencia al padre en caso de que conviva con la madre. Cree que
este no hace nada bien. Lo que el chico expresa es invariablemente exagerado, y por lo mismo,
injustificado. Su distorsión de la realidad no se limita a esto, sino que, al mismo tiempo, la
misma exageración la emplea al elevar sin motivo el concepto con que califica al otro
progenitor, a quien le otorga un voto de confianza, creyendo que hace todo bien...Se distancia
todavía más este síndrome del lavado de cerebro, en el hecho de que en él no aparece sólo la
influencia del progenitor no conviviente sino que incluyen, sobre todo, factores que surgen
internamente en el chico, independientemente de la contribución parental, que ahonda el
desarrollo del síndrome. Lo habitual es que el niño demuestre su obsesión en un rumbo que
puede expresarse como odio al padre. No se trata de un odio neto, sin otros componentes, sino
que se encuentra atravesado por muchos sentimientos en los que no están ausentes la ternura
y el amor que el propio síndrome no le permite manifestar...no es extraño , tampoco, que el
chico pronuncie las frases previstas, glosando las opiniones del padre conviviente...Con el
transcurso del tiempo, y enfrentando a la necesidad de dar cuenta de su conducta, sacará a
relucir episodios intrascendentes y les otorgará una gravedad que nunca tuvieron, buscando
justificar su odio. Se trata de hechos casi siempre triviales, que en la inmensa mayoría de los
chicos pasan a ser rápidamente olvidados...".
4. Las reglas precedentemente individualizadas en los puntos 3.1. y 3.2. deberán cumplirse por
parte de la causante, bajo apercibimiento de revocar la condicionalidad de la condena de
prisión impuesta (arts. 26, 27 bis, 40, 41 del C.P.; y 25 inc. 1º y 7º, 210, 373, 375 inc. 2º, 376 y
concs. del C.P.P.).
POR ELLO, y de conformidad con la normativa citada RESUELVO en causa Nº 3202/20
I. CONDENAR a Angelina Mailen Romero - D.N.I. nº 35.903.269, de estado civil soltera,
instruida, argentina, de ocupación funcionaria pública, nacida el día 4/4/1991 en Cañuelas,
Provincia de Bs. As., en el hecho que diera motivo a las presentes actuaciones, a la pena de
NUEVE MESES DE PRISIÓN DE EJECUCIÓN CONDICIONAL por resultar autora penalmente
responsable del delito de impedimento y/u obstrucción de contacto de menor de 10 años con su
padre no conviviente (art. 1º, segundo párrafo, de la ley nº 24.270, segundo párrafo, del C.P.),
hecho ocurrido a partir del año 2016, del que resultara víctima el Sr. Nicolás Ramón Cuarenta.
CON COSTAS (arts. 530 y 531 del C.P.P.).
II. IMPONER a la condenada como condiciones propias del artículo 27 bis del C.P., durante el
Plazo de DOS AÑOS, las siguiente:
3.1. Fijar residencia y someterse al control del Patronato de Liberados de la Provincia de
Buenos Aires, debiendo presentarse bimetralmente en la Delegación que le corresponda de
acuerdo a su domicilio.
3.2. Cumplir con las medidas ordenadas por el Juzgado de Paz interviniente en relación al
régimen de visitas de Giovanni Tobías Cuarenta con su padre Nicolás Ramón cuarenta, como
así también con las delicadas y complejas medidas que el citado órgano deberá adoptar en
adelante con el fin de procurar progresivamente la revinculación del padre con su hijo.
III. De conformidad con lo normado por el art. 3º -último párrafo- de la ley nº 24.270 se dispone
la inmediata remisión digital de la presente sentencia al Juzgado de Paz de General Alvarado,
órgano este que actualmente se encuentra interviniendo en relación a la problemática
relacionada al cumplimiento del régimen de visitas oportunamente peticionado por el Sr.
Nicolás Ramón Cuarenta en su carácter de padre de Giovanni Tobías Cuarenta, a los fines que
estime corresponder, en el supuesto de peticionar ante ese órgano, el referido Nicolás
Cuarenta, el inicio del proceso de revinculación que oportunamente quedara interrumpido con
motivo de la falta de colaboración de la madre del niño, Sra. Angelina Aailen Cuarenta.
IV. Regular los honorarios profesionales del Dr. Claudio Jesús Fabián Venchiarutti y de la Dra.
Marina Laura Coler, respectivamente, y en su carácter de defensores de la imputada, en cuanto
en forma conjunta han intervenido en eses carácter durante la audiencia de debate, en la
cantidad de 25 Jus para el Dr. Venchiarutti, y 35 Jus para la Dra. Coler, por sus labores totales
en la presente causa.
Asimismo se regulan los honorarios de la Dra.Nicolasa Boccarratto en su carácter de abogada
patrocinante del Sr. Nicolás Ramón Cuarenta en la cantidad de 90 jus, valorándose a esos
fines las siguientes intervenciones de la profesional citada: solicitud de medidas formuladas a
fs. 325/326; prueba aportada a fs. 408; oposición al sobreseimiento peticionado efectuado a fs.
513/514; ofrecimiento de prueba efectuado con fecha 7/9/21; intervención en las audiencias
celebradas con fecha 8/11 y 23/11 del corriente año; intervención durante todas las jornadas de
juicio oral celebradas a partir del 29/11/22.
Asimismo, a todas las cantidades precedentemente individualizadas deberá adicionarse el 10
% a que alude el art. 12 inc. A) de la ley nº 8455 y modificatorias (arts. 9 -I, 3-; 15; 16; 33; 51;
54 y 57 de la ley nº 14.967).
IV. LIBRAR oficio dispuesto por el art. 22 del Ac. 2840/98 a la S.G.A. de la Cámara Penal de
Apelaciones y Garantías.
Regístrese. Notifíquese.
Firme, practíquese el cómputo de pena en la forma prevista por el art. 500 del C.P.P., firme el
cual, se practicarán las comunicaciones previstas por las leyes, nacional 22.117 y provincial
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