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C/Giancarlo

DELITO: ABUSO SEXUAL (ABSUELTO)


RUC : 1.701.045.364-k
RIT : 138-2023

Santiago cinco de agosto de dos mil veintitrés.

VISTO, OÍDO Y CONSIDERANDO:

PRIMERO: Individualización. Que ante sala de este Sexto Tribunal de Juicio Oral en lo
Penal de Santiago constituido por las magistradas doña Virginia Rivera Álvarez, en su calidad de
Presidente de Sala, doña Pamela Silva Gaete como jueza redactora, y doña Silvana Vera Riquelme
como tercera jueza integrante, se llevó a efecto los días 26, 27, 28 y 31 de julio, juicio oral en causa
Rol Único 1.701.045.364-k, Rol Interno del Tribunal N° 138-2023, seguida en contra de EMILIO
FRANCISCO SALDIVIA SANHUEZA, chileno, casado, cédula nacional de identidad N°
17.694.267-3, nacido en Valdivia el 8 de Febrero de 1991, 32 años, soltero, peoneta, con domicilio
en pasaje Hermano Eliodoro N° 0109, villa Lasalle, comuna de Puente Alto, Región Metropolitana.
Sostuvo la acusación el Ministerio Público representado por la fiscal adjunto doña Claudia
Álvarez Lister, y la adhesión a la acusación, la abogada representante de la parte querellante doña
Claudia Araya Pino, en representación del acusado compareció el abogado defensor penal público
don Juan Pablo Gómez Concha, todos con domicilio y forma de notificación registrada en el
Tribunal.
SEGUNDO: Acusación. Que el Ministerio Público al deducir acusación en contra del
acusado, a la cual se adhirió la parte querellante, según se lee en el auto de apertura de juicio oral, la
fundó en los siguientes términos:

“En una oportunidad ocurrido en el año 2017, en el domicilio ubicado en


DIRECCION000, comuna de DIRECCION001, el imputado EMILIO FRANCISCO SALDIVIA
SANHUEZA, realizó actos de significación sexual y relevancia, mediante contacto corporal, contra

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el menor Gianfranco, nacido el día NUM000 de 2012, de 05 años de edad en el momento referido,
consistente en tocar con sus manos, por debajo de la ropa el pene de la víctima”. (sic)

A juicio del Ministerio Público, los hechos consignados precedentemente configuran el


delito de abuso sexual contra persona menor de 14 años, previsto y sancionado en el artículo 366 bis
en relación con el artículo 366 TER del Código Penal, encontrándose el ilícito en grado de
desarrollo consumado. Atribuyéndole participación al acusado en calidad de autor conforme a lo
que establecen los artículos 14 N° 1 y 15 N° 1 ambos del Código Penal, concurriendo a su respecto
la atenuante de responsabilidad contemplada en el artículo 11 N° 6 del código punitivo.
Considerando el delito en cuestión, su grado de desarrollo y la participación que le cabe al
imputado en el mismo, aplicando el artículo 50 del Código Penal; la extensión del daño producido
conforme al artículo 69 del Código Penal, y el reconocimiento de circunstancias modificatorias de
responsabilidad penal, el Ministerio Público solicita se aplique al acusado la pena de 4 años de
presidio menor en su grado máximo, por el delito de abuso sexual de persona menor de 14 años, la
accesoria contemplada en el artículo 29 del Código Penal, inhabilitación absoluta perpetua para
derechos políticos y de la inhabilitación absoluta para cargos y oficios públicos durante el tiempo de
la condena; con expresa condena en costas en conformidad al artículo 47 del Código Procesal Penal,
la incorporación de la huella genética en el Registro de Condenados, conforme lo dispone la Ley N°
19.970, la inhabilitación absoluta perpetua para cargos, empleos, oficios o profesiones ejercidos en
ámbitos educacionales o que involucren una relación directa y habitual con personas menores de
edad, de conformidad al artículo 372 del Código Penal y la accesoria especial contemplada en el
artículo 372 TER del Código Penal, esto es, la prohibición de visitar el domicilio, el lugar de trabajo
o el establecimiento educacional del ofendido y la prohibición de aproximarse al ofendido o a su
familia respectivamente.
TERCERO: Alegatos de apertura. Que, en su alegato de apertura el Ministerio
Público, en resumen, la fiscal refiere que durante el juicio se conocerá lo que le ocurrió a
Gianfranco de 5 años al 2017, quien fue víctima de tocaciones por debajo de su ropa en el domicilio
ubicado en DIRECCION000 de la comuna de DIRECCION001, hijo mayor del matrimonio
compuesto por Escarlet y Julio, ambos de nacionalidad peruana. Quien quedaba al cuidado de doña
Marianela quien vivía cerca del domicilio de la familia, entre las 14:00 a 18:30 de la tarde, y es en
el domicilio de la señora Marianela donde ocurren los hechos, qué relación tiene la víctima del
acusado, era la pareja de la hija de la señora Marianela, conocido por el niño como “el tío Emilio”,
y estos hechos fueron revelados por el niño a instancia de la señora Marianela, ocasionaron un
cambio en la rutina y dinámica de Gianfranco y la familia, para ir a trabajar y el hecho de tener un
hermano menor. Anuncia que tal vez no se contará con el relato del niño en el juicio, han

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transcurrido más de seis años y los padres se han preocupado de que no exista una revictimización.
Pide que este caso sea evaluado además desde la óptica de los tratados internacionales que
garantizan derechos humanos de niñas, niños y adolescentes, y que se deje atrás los estereotipos de
víctimas y testigos perfectos. Al final del juicio podrá solicitar que el acusado sea condenado como
autor del delito por el cual se le acusó.
La abogada de la parte Querellante; se adhiere a lo dicho por la fiscal en cuanto a cómo
acontecen los hechos, una familia que dejan a su hijo al cuidado de terceros para ir a trabajar, son
extranjeros, personas humildes, que no tienen ningún interés en términos en cuanto a hacer una
acusación en contra del acusado, más que esclarecer los hechos. Será de importancia la prueba
pericial que se incorpora a través de la cual se descarta ganancias secundarias, dará cuenta la perito
que estamos en presencia de un relato válido que contiene elementos de una experiencia vivida por
un niño de 5 años, quien no tenía la capacidad de inventar la situación vivida, quien presentó
alteraciones en su comportamiento habitual. Otro elemento importante, será aquel que entregue la
profesora del niño, testimonio que dará cuenta de las conductas posteriores del niño a la realización
del hecho, retraído, hacia ruidos extraños. Escucharemos a quienes tomaron declaración al niño y a
los padres.
A su turno la defensa anuncia que sostendrá la absolución de su representado de los
cargos formulados en contra de su representado. La defensa no tiene obligación de dar explicación
de la imputación, siendo lo relevante en el presente caso, que no se acreditara más allá de toda duda
razonable que su representado haya realizado los actos que se imputan en la acusación. Anuncia que
su representado prestará declaración.
CUARTO: Que en la oportunidad contemplada en el artículo 326 del Código Procesal
Penal, el acusado Emilio Francisco Saldivia Sanhueza, en presencia de su abogado defensor y de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 326 del Código Procesal Penal, se le dio a conocer por
la juez presidenta de sala su derecho a guardar silencio o declarar, optando por declarar, informando
en su relato espontáneo, no recordar el día en que pasó lo que se le imputa, lo único que sabe es que
llegó el niño, tipo dos de la tarde, se sentaron a la mesa a almorzar, estaban comiendo y viendo la
teleserie con la señora Marianela y en un momento el niño dice que le tocaron el potito en el
colegio, con la señora Marianela se miraron y decidieron hablar con los papás cuando que llegan del
trabajo, siempre llegaban como las siete. Pasó la tarde, jugó con los niños, llegaron los papás y
decidió contarles delante de la señora Marianela que al niño le tocaron el potito en el colegio. Luego
los papás conversaron un rato sobre cómo puede ser y dijeron que verían eso en casa. Pasaron 3 a 4
días y llegó la PDI preguntando por él por el delito por el cual se le está acusando.

A las preguntas de la fiscal, dice que no recuerda fecha, tampoco recuerda año ni mes.

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Informa que la señora Marianela es su exsuegra. Tenía una relación con Mila, hija de doña
Marianela. No recuerda el día y año en que comenzó la relación con Mila, estuvo con ella 3 a 4
años, pasaron unos cuatro meses de los hechos y finalizó la relación.
Informa que la casa era de la señora Marianela, vivía en ella la señora Marianela con su
marido, la hija Dana con dos hijas, la Mila y sus dos hijos, también vivía una familia de tres
personas, la pareja y el niño, vivían en la misma dependencia.
| En ese tiempo trabajaba de 8 a 6 de la tarde, tenía dos horas de colación.
El día en que le cuenta a los papás del niño fue en la tarde.
Informa que ese día se levantó para ir al trabajo, lo fue a dejar el cuñado de Mila para poder
almorzar, en eso llega el niño, después se va a trabajar y después vuelve nuevamente. A la hora de
almuerzo estuvo como una hora y media en esa casa. En esa casa también vivía, iba todos los días a
almorzar.
Expresa que la señora Marianela cuidaba como 6 niños de 2 a 6 años aproximadamente,
entre ellos Gianfranco, no recuerda el nombre de los otros niños, no recuerda una niña de nombre
Melanie.
Cuando estaba en la hora de la colación, además de almorzar se iba a la pieza a lavar los
dientes, ordenaba un poco, jugaba con los niños a hacer un barco o un auto, jugaban en la sala de
estar o en el patio. De manera particular no jugó nunca con Gianfranco.
Dice que él le contó lo dicho por el niño a los papás, delante de la señora Marianela, para
tener testigo, les dijo lo que señaló el niño “que en el colegio le estaban tocando el potito” (sic),
estaban almorzando cuando el niño dijo eso, estaba la señora Marianela, el niño y él. No había más
niños ese día, estaban en el colegio, entraban en la tarde.
En la tarde habitualmente había 8 niños en la casa, las dos niñas de Dana, el hijo de la Mila
y los demás niños cuyo nombre no recuerda, no tenían parentesco con doña Marianela.
Refiere que ese día estaban almorzando cuando el niño contó lo ya dicho, no sabe a
propósito de qué contó eso, “no sé dijo no más” (sic). No le preguntó nada más al niño, no sabe si la
señora Marianela habló con el niño después, en ese momento sí le dijo “cómo” (sic) y el niño
repitió lo mismo, y ellos preocupados, decidió contarles a los papás, pero delante de la señora
Marianela.
Después que se van los papás de la casa de la señora Marianela, no recuerda qué pasó. No
volvió a ver a los papás de Gianfranco en casa de la señora Marianela, a los 3 o 4 días llegó la PDI a
la casa a buscar información de lo sucedido. Dice que declaró con la policía, Ei también declaró con
la policía al igual que la señora Marianela.

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Expresa que después siempre veía a los padres del niño en la feria, no conversó nada en
relación con esto.
Los otros 5 niños cuyos nombres no recuerda, iban siempre a la casa.
Antes que el niño contara “eso en el almuerzo”, nunca tuvo un problema con los padres del
niño ni con el niño. No sabe si la señora Marianela tuvo algún problema con los papás o con el niño.
Mila no tuvo nunca problemas con los padres ni con el niño.
A las preguntas de la abogada Querellante: ese día estaban almorzando, en la casa
cocinaba Mila, Mila, en ese momento, ese día Mila estaba dejando a los niños en el colegio. La casa
estaba ubicada en DIRECCION001, en DIRECCION000, no recuerda numeración. Ese día estaba
la señora Marianela, él y el niño, estuvo hasta las 15:30 horas en la casa. Después que almorzaron
se lavó los dientes, ordenó un poco el cuarto donde estaba vivía, en ese momento el niño estaba en
la mesa comiendo, cuando terminó de comer no sabe dónde se fue el menor, la señora Marianela
estaba en la mesa, después estaba ordenando, el niño sentado en la mesa comiendo, después que
terminó no sabe dónde se fue.
El niño dijo que le tocaban el potito en el colegio, eso lo dijo cuando estaban almorzando,
eso lo dijo de la nada. Describe al niño como súper tranquilo, no hablaba con nadie, era esquivo.
Solo contó eso, indica que esa vez almorzó con el niño, en otras oportunidades cuando llegaba a la
casa a almorzar, el niño estaba jugando con sus juguetes u otros niños, las otras veces no almorzó
con el niño, las otras veces almorzaba solo, en la parte del patio donde los niños estaban jugando.
Recuerda que antes que el niño dijera eso, estaba hablando con la señora de comedias, siempre
hablaban de comedias, estaban hablando y de repente el niño dijo que le tocaban el potito en el
colegio,
A las preguntas del defensor; indica que efectivamente lo que relata corresponde al año
2017, a los hechos que leyó la magistrada al inicio del juicio. No recuerda el mes.
QUINTO: Que los intervinientes no arribaron a ninguna convención probatoria que
considerar.

SEXTO: Medios de Prueba de cargo y descargo. Que, para los efectos de acreditar su
teoría del caso, en relación con los hechos y circunstancias objeto de la acusación el Ministerio
Público y la parte querellante rindió prueba de testigos, pericial, documental y fotografías. La
defensa presentó la misma prueba, además de prueba testimonial y pericial. En su oportunidad todos
los intervinientes hicieron uso de su facultad de interrogar a los testigos y peritos aportados.

I.- PRUEBA DE CARGO.

A.- PRUEBA TESTIMONIAL

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1.- Evelyn Verónica Hermosilla Gutiérrez, cédula de identidad N° 18.773.848-2, cabo segundo
de Carabineros de la 31 Comisaría San Ramón, 8 años en carabineros, ha trabajado 6 años en la
12°comisaría de San Miguel, y 2 años a la fecha en la 31° comisaría de San Ramón.
Conoce el motivo de su comparecencia, por una denuncia que acogió en el año 2017, el 4
de noviembre, a las 01:30 horas, se presentó con ella la denunciante la señora Escarlet con su hijo
menor de edad Gianfranco, quien dijo que el día 3 de noviembre, aproximadamente a las 19:00,
mantuvo conversación con su hijo el que le manifestó que en casa de la señora Marianela, cuidadora
del niño cuando sus padres trabajan habría llegado el tío Emilio quien le habría realizado tocaciones
con sus dedos anales y masturbaciones en sus genitales, indicando que no conocía otro antecedente
de las personas.
Añade que toma contacto telefónico con la fiscalía sur, con el fiscal de turno, quien instruyó
trasladar al niño SML, tomar declaración por personal de la 35 comisaría y luego volver a tomar
contacto con él para seguir con el procedimiento.
Indica que ese día trabajaba en el hospital Exequiel González cortes de turno de noche, la
12° comisaría salud cubre ese centro de salud, a ese lugar llega la madre, al centro de urgencia y se
comunica con ella. Le tomó declaración a la madre del menor, lo relatado el día de hoy es lo que
dijo en esa declaración. El fiscal también instruyó el traslado del menor al servicio médico legal,
entregó teléfonos a la madre del cuadrante de su comuna, y dio cuenta de dos rondas diarias por
Carabineros diaria como medida de protección.
Explica que el menor fue trasladado al SML donde llegó durmiendo, al ingresar donde
estaba la funcionaria de la 35 comisaría para tomarle declaración, el menor estaba durmiendo, no se
le pudo tomar declaración, la madre trató de despertarlo y no despertó. Eran las 4 y fracción de la
mañana cuando el menor llegó al SML. Luego volvieron a trasladar al menor y a la denunciante a la
comisaría para finiquitar el procedimiento, retirándose la madre con el niño a las 6 a 7 de la mañana
aproximadamente.
Querellante no pregunta
A la pregunta de la defensa; afirma que no entrevistó al menor.
2.- Rosa Angélica Silva Zúñiga, cédula de identidad 10969803-2, suboficial mayor de Carabineros
de dotación de la 35° comisaría de delitos sexuales, quien indica que desde que se creó esta unidad
trabaja allí, más de 10 años, es jefa de patrulla y hace labor investigativa.
Conoce el motivo de su comparecencia, en febrero de 2018, en cumplimiento de una orden
investigar por el delito de abuso sexual de menor de 14 años, de la fiscal Nadia Moglio Navarrete
de la fiscalía especializada de vif y delitos sexuales, parte denuncia N°NUM001 de la 12° comisaria
de san Miguel, del 4 de noviembre de 2017, en el cual conforme el relato de los hechos la

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denunciante doña Escarlet, lo que lo recuerda, es que ella el día 3 de noviembre a las 19:00 horas
estaba en su domicilio con su hijo Gianfranco de 5 años quien le había comentado que el tío Emilio
le había tocado el pene y su potito con los dedos y que también había sufrido masturbaciones,
refiriendo que había concurrido al hospital Exequiel González Cortes para constatar lesiones, que la
doctora no le había encontrado nada, pero que se había hecho la denuncia.
Tomó declaración a doña Escarlet en calidad de testigo, quien manifestó que llevaba 8 años
en Chile, que desde el día 2 de septiembre de 2018 la señora Marianela cuidaba a su hijo
Gianfranco, de lunes a viernes desde las 14 a las 18 horas, porque el niño asistía al jardín en horas
de la mañana, a las 18 horas ella o su esposo retiraba al niño en la casa de señora Marianela.
También señala que a mediados de octubre de 2017 su hijo le habría dicho que no quería ir más a la
casa de la tía Marianela y que quería que otra tía lo cuidara, ella le había manifestado que no porque
la tía Marianela era quien lo cuidaba, en ese momento el niño se puso a llorar, pero había aceptado
eso. Luego indica que desde que tuvo esa conversación con su hijo, el niño cambio de conducta, se
irritaba con facilidad, estaba rebelde, no le hacía caso y despertaba en la noche diciendo que tenía
sueños feos, ella lo tomaba y se lo llevaba a su pieza, pero nunca le preguntó qué soñaba. Dice que
el niño siempre habló bien de la tía Marianela, que lo trataba bien, que le daba coyak y que era
buena. Asimismo, la denunciante indica que el día 3 de noviembre de 2017 fue a retirar al niño a la
casa de la señora Marianela y ella le dijo que su hijo estuvo en el día diciendo puras lesera “concha
tu madre para arriba, concha tu madre para abajo y que le había contado a su yerno Emilio que en el
jardín, un compañerito le hacía así mostrando su dedo en su ano y que también le así, como
masturbación en su pene, que esto se lo decía para que ella fuera a conversar en el jardín, para que
contara lo que estaba pasando, también, le dijo que ella le había dicho a Gianfranco que le tenía que
contar a la mamá, pero que el niño le dijo que no porque ella le pegaba” (sic) la testigo dice que ella
quedó “helada” primero porque ella no le pegaba a su hijo sino que lo retaba por el cambio de
conducta que había tenido y le respondió que el día lunes concurriría al jardín. Posteriormente,
indica la denunciante que llegó a la casa le conversa está situación a su esposo y que juntos le
preguntan al niño qué le pasaba, ella tenía a su hijo en los brazos y el niño se había quedado callado,
entonces su esposo le dijo “yo voy a ir a hablar con la tía Marianela, en eso su hijo se soltó de los
brazos de la testigo y le dijo sí, yo te acompaño” (sic). Luego, regresó su esposo con el niño a la
casa y le manifiesta que la señora Marianela con su yerno Emilio cuando fueron a la casa, la señora
Marianela le había dicho que el niño decía concha tú madre y cosas así, y que repitieron lo mismo,
y que el papá se da cuenta que cuando su hijo ve a esta persona, al tío Emilio, agachó la cabeza y se
quedó todo el rato callado. Y delante de la señora Marianela y de su Yerno, le había preguntado qué
quién le había enseñado a su hijo a decir a su hijo garabatos, “huevón, la palabra era huevón”

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dándose cuenta de que la señora Marianela se enrojeció diciendo que ella le había enseñado a decir
garabatos, huevón, era como de amigo, señalando que al niño lo estaban molestando en el jardín.
Frente a todo lo anterior los padres deciden concurrir al hospital para constatar lesiones y una vez
que estaban en la sala de espera la denunciante advirtió que el niño estaba raro, fue al baño con él y
le preguntó qué le pasaba, dice que le preguntó textualmente “ dime, tengo un regalo, un premio,
qué tienes con la tía Marianela, y que el niño le habría dicho que el tío Emilio le habría tocado así
con el dedito, su potito” (sic) salen del baño y le cuenta a su marido lo ocurrido, que él le pregunta
nuevamente al niño y habría contado lo mismo.
Añade, que la denunciante también señala en su declaración que la doctora que atendió al
niño no encontró nada, pero sí hicieron la denuncia. A los días estaba afuera de su casa y al pasar
una patrulla de carabineros, el niño le dijo “mamá a él se lo llevaron” (sic) y la testigo le habría
preguntado “a quién” (sic) indicando el niño “al tío Emilio pues” (sic).
Continuando con las diligencias realizadas, se tomó declaración a don Julio, quien señala
que el día 3 de noviembre de 2017 al llegar a su domicilio estaba su señora con su hijo Gianfranco,
contándole su señora lo que le había dicho doña Marianela, que a Gianfranco lo estaban
masturbando y haciendo tocaciones en su ano, y que junto con su señora le preguntaron al niño qué
le había ocurrido y dijo lo mismo, se había quedó callado, y decide ir con su hijo a la casa de la
señor Marianela, al llegar estaba el yerno Emilio y la señora Marianela le repitió lo mismo que él ya
sabía, y en ese momento se percata que el niño estuvo todo el rato callado con la cabeza agachada y
que la señora Marianela lo miraba, y él le habría dicho a su hijo a ver Gianfranco quien te está
enseñando a decir garabatos y en ese momento la señora Marianela se había enrojecido, diciendo
que ella le había enseñado para defenderse porque lo estaban molestando en el jardín. Luego,
deciden concurrir al hospital donde su señora va con el niño al baño y al salir su señora venía
llorando, contándole lo que el niño le había dicho en el baño, le dijo “que el caballero le había
hecho tocaciones al niño” (sic), hicieron la denuncia y no se habló más del tema.
Posteriormente, dando cuenta de las diligencias, informa que concurrió al domicilio de la
señora Marianela, en DIRECCION000 comuna de DIRECCION001, donde se le informa el motivo
de la concurrencia de carabineros, se le da a conocer el artículo 302 del Código Procesal Penal,
quien se acoge a ese artículo y en la misma declaración se le pide autorización para fotografiar el
inmueble por ser el lugar de ocurrencia de los hechos, ella accede. Luego en la misma declaración
se le tomó declaración a la señorita Mila, conviviente de don Emilio Saldivia Sanhueza quien
también se acoge al artículo 302. En el mismo lugar, se entrevista con el imputado don Emilio
Saldivia, le da a conocer en forma detallada de los derechos que le asisten, lo apercibe conforme el

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26 CPP y él hace uso de su derecho a guardar silencio indicando que prestará declaración una vez
que sea citado a la fiscalía.
Ante la autorización a la fijación fotográfica del domicilio, el suboficial Franco Urrutia
Carrión realiza fijación fotográfica del inmueble.
Dentro de las diligencias que informa a la fiscalía, por la fecha, estaban en febrero, solicita
una instrucción particular para concurrir al jardín infantil que concurría el niño Gianfranco.
Puntualiza a la fiscal, que en el mes de febrero y marzo de 2018 realiza las diligencias, la
denuncia es de fecha 4 de noviembre de 2017.
Expresa que cuando le toma declaración a la madre del niño indica que la percibió muy
angustiada. Cuando la madre va a retirar al niño el 3 de noviembre, no le menciona con quién iba
acompañada. Ese día la señora Marianela le dijo a la señora Escarlet que tenía que hablar con ella,
contándole que “su hijo Gianfranco anduvo todo el día diciendo leseras, concha tu madre para
arriba, concha tu madre para abajo, y que a su yerno Emilio le había contado que un compañerito le
hacía con el dedo, indicando el ano, y con el otro dedo lo masturbado” (sic) que ella le contaba esto
para que fuera al jardín a conversar lo que estaba pasando y que ella también le había dicho al niño
que se lo tenía que contar a la mamá, y que el niño le había dicho que no porque la mamá le pegaba,
diciéndole la madre que el día irá al jardín a conversar la situación.
Informa que la persona que le habría contado a la señora Marianela lo que le habría hecho
un compañero en el jardín a Gianfranco es su yerno Emilio.
Explica que, los gestos que ha realizado y que le refiere la denunciante, dan a entender que
el niño fue víctima de abuso sexual. La madre “quedó helada, no sabía qué hacer”, dijo que nunca le
había pegado a su hijo, que sí lo retaba por el cambio de conducta.
Agrega que, dentro de su declaración la señora Escarlet indicó que al final de la
conversación la señora Marianela había hecho un comentario “que no fuera a ser como lo que le
había pasado a la Melanie” (sic), una niñita que ella había cuidado anteriormente, que la madre
había inventado un cahuín, había dicho que la Melanie no iba más a su casa porque ahí la habían
tocado” (sic) le habían tocado el poto, por eso no habría llevado más a la niña a la casa de la señora
Marianela. Luego la madre se va a la casa con Gianfranco, al llegar le cuenta a su esposo lo que
había ocurrido, y entre los dos le preguntan al niño qué le había dicho al yerno de la tía Marianela, y
el niño se queda callado, le pedían que les contara lo que le había contado al tío Emilio, luego el
niño va con el papá a la casa de la señora Marianela. Al regreso el padre le cuenta a la señora
Escarlet que el niño decía concha tú madre y cosas así, que eso le había dicho la señora Marianela a
don Enrique, al papá.

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En el hospital, en un momento la madre lleva al niño al baño, donde el niño le dice a la
madre “que el tío Emilio le hacía así con el dedo y que él lo había acusado a la tía Marianela y a la
tía Mila” (sic), preguntándole la mamá si la tía Mila era la tía del jardín, y el niño le dice no, es la
esposa de Emilio, y que solo lo habían retado.
Explica que cuando dice que le hacía así, se refiere a que el niño fue tocado, se cometió
abuso sexual, “que el niño con el dedo le apuntaba el ano” (sic).
En cuanto a la declaración del padre Julio, señaló que cuando llega a su casa su señora le
cuenta que la señora Marianela le dijo “que Gianfranco le había contado a su yerno que en el
colegio había un compañerito que lo había tocado, había tocaba su potito con los dedos y le había
hecho masturbación” (sic). El padre no relata sí pensó algo en ese momento, solo dijo que entre los
dos le preguntaron al niño qué le había pasado y que contara lo que le había contado al tío Emilio,
yerno de la señora Marianela, el niño se queda callado y es ahí donde el papá dice yo voy a ir donde
la señora Marianela, el niño de forma espontánea se suelta de los brazos de la mamá y le dice “sí yo
te acompaño” (sic) y salieron ambos en dirección a la casa de la señora Marianela, y allí ella le dice
“que el niño le habría contado a su yerno Emilio que un compañerito lo estaba tocando, y que
también hablaron con respecto a por qué el niño decía huevón “ (sic) indicando el papá al niño yo
quiero saber quién te está enseñando a decir huevo, y es cuando la señora Marianela se enrojeció y
espontáneamente le dice que ella le había enseñado a decir huevón como una forma de defenderse
porque lo estaban molestando. En esa conversación estaban don Gianfranco, su hijo, la señora
Marianela y el yerno Emilio.
Expresa, además, que el padre luego de saber lo que le cuenta la madre en el hospital lo que
le dijo el niño en el baño, dice que no sabe cómo reaccionar y se pone a llorar.
Informa la declarante que el sargento Franco Urrutia Carrión realizó la fijación fotográfica,
él entró al domicilio, ella debe haber ingresado al antejardín o hasta el living comedor, por ser dos
dispositivos cuando uno entra el otro queda al cuidado del dispositivo.
Al informar la orden sugirió una nueva instrucción particular para hacer diligencia en el
jardín del menor
Querellante no pregunta.
A las consultas de la Defensa, indica que toma declaración a la madre y al padre del
menor, no toma declaración al menor, no estaba incluido.
En relación con la declaración de la madre en el primer momento en que la señora
Marianela le describe a la madre lo que estaba sucediendo con el niño, que decía concha tu madre
para arriba, concha tu madre para abajo, en ese momento el nombre de tío Emilio no aflora como
autor. En ese momento tampoco dijo el niño que el tío Emilio lo había tocado. Después la madre se

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retira a su domicilio y allí conversa con su esposo y ambos le preguntan al niño qué le estaba
pasando, pasando, en ese momento tampoco dijo el niño que fuera el tío Emilio.
El padre concurre al domicilio de la tía Marianela, le pregunta de lo ocurrido, en ese
momento tampoco dijo que había sido el tío Emilio quien lo tocaba el niño, se mantuvo callado todo
el rato. Afirma que luego van al hospital, y en el baño la mamá le ofrece un regalo al niño, y en ese
momento aflora el nombre del tío Emilio como quien lo había tocado, “ la señora dice que estaban
en el baño y le pregunta de nuevo que es lo que le pasaba y le dice tengo un premio, dime que tienes
con la tía Marianela, y ahí el niño le cuenta que el tío Emilio le había hecho así “ (sic) Le hace una
pregunta que le pasaba, le hace una pregunta directa, tengo un premio dime que tienes con la tía
Marianela y ahí el niño le dice que el tío Emilio le había hecho así con el dedo” (sic) ( juez
presidenta deja constancia que la testigo levanta mano derecha y con un dedo apunta hacia el ano)
Añade que, la madre no refirió en qué consistía el premio ofrecido al niño, el papá no
comentó de la situación del premio. Dice que el papá no supo que la mamá le había ofrecido un
premio al niño. No le preguntó a la mamá por qué no le contó la oferta del premio al papá.

3.- Escarlet, cédula de identidad N°NUM002, nacida en Lima Perú, quien indica que tiene dos
hijos, Gianfranco el mayor y Gustavo, de 10 y 8 años. El padre de sus hijos es Julio.
Concurre por lo que le sucedió a su hijo Gianfranco cuando tenía 5 años. Informa que
cuando su hijo estaba en el jardín y ella estaba trabajando, no tenía con quien dejarlo después de
clases, en el jardín averiguó si conocían a una persona de confianza que lo pudiera cuidar, y la
apoderada de una compañera, de Melanie, le dio el dato de la señora Marianela. Fue hablar con la
señora para que lo viera después de que saliera del jardín PERSONA_JURIDICA000, estudiaba de
8:00 a 14 horas. Gianfranco iba al jardín y el más pequeño de sus hijos lo llevaba al trabajo, como
no podía ella retirarlo del jardín tuvo que buscar una persona para retirarlo y cuidarlo desde las
14:00 a 18 horas. En septiembre de 2017 contacta a la señora Marianela, la casa estaba ubicada en
DIRECCION000, cerca de su domicilio y del jardín, de su casa a 4 cuadras y del jardín más o
menos lo mismo, es en la misma recta de la casa de la señora Marianela.
Explica que fue a la casa de la señora Marianela a conversar con ella, le explicó que cuidaba
más niños, que no tenía problema en cuidar a su hijo, le inspiró confianza, era una señora de edad,
no sabe la edad, además cuidaba a una compañerita de su hijo, Melanie.
En septiembre de 2017 Gianfranco comenzó a ir a la casa de la señora Marianela, antes lo
cuidaba su mamá, pero viajó a Perú. Trabajaba en una casa donde llevaba a su hijo menor y su
mamá cuidaba a Gianfranco.

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Cuando fue a la casa de la señora Marianela le mostró el comedor de su casa que era donde
estaban los niños y comían, no le mostró la parte de atrás ni otras partes del inmueble, solo
conversaron en el comedor.
Informa que el papá retiraba a Gianfranco de la casa de la señora Marianela. Los primeros
días que el niño se quedaba en casa de la señora Marianela el niño llegaba normal, solo decía que
había varios niños, no les comentaba ninguna otra cosa. Iba contentó, la señora Marianela tenía una
pecera, decía que le gustaba ir porque tenía peces. Le dijo que lo trataban bien, le invitaban coyak.
Refiere que Gianfranco estaba yendo al jardín desde el medio menor como de 3 años y
medio, estuvo allí hasta que terminó el kínder en el 2017. Cuando llegaba del jardín llegaba muy
contento, era un niño muy alegre, llegaba feliz, con el jardín siempre tuvo comunicación de cómo se
sentía, decía que le gustaba el jardín, le gustaba estar ahí.
Indica que Gianfranco comenzó a ir a la casa de la señora Marianela en septiembre y a
mediados de octubre no quiso ir a la casa de la señora Marianela, “así como llorando me dijo yo
quiero que me cuide la tía, un familiar de mi marido” a lo cual le respondió, pero hijo si lo estás
pasando bien, a lo cual dijo el niño no quiero ir, nunca pensó que algo le estaba sucediendo,
continuó yendo a la casa de la señora Marianela hasta noviembre de 2017. Un día viernes salió más
temprano del trabajo, era 3 de noviembre fue a recoger a su hijo a la casa de la señora Marianela, al
llegar salió la señora y le dijo que quería conversar con ella, indicando “ su niño Gianfranco a
estado hoy día hablando puras leseras”, le respondió por qué, a lo que la señora le dijo “diciendo
chucha su madre para arriba chucha su madre pa abajo”, y vaya a hablar al jardín porque le están
haciendo bullying porque dice que con la mano le están cogiendo su pene, enseñándole con la mano
( lleva la testigo una mano al frente y con la otra la frota de arriba hacia abajo y de abajo hacia
arriba) como que le estuvieran frotando sus partes íntimas en el jardín de su hijo, se preocupó y la
señora Marianela le dijo que fuera a hablar al jardín, le respondió que iría. Al salir de la casa de la
señora Marianela vio a su hijo raro, tenía los ojos como llorosos, y al llegar a la casa lo abrazó y se
puso a llorar, ella le preguntó “hijo qué te pasa”, a lo que respondió “cuando llegue mi papá les voy
a contar”, llamó a su marido para saber dónde estaba, le dijo que cerca por llegar a casa, al llegar le
contó lo que dijo la señora Marianela, él dijo que iría a hablar con la señora Marianela, el niño se
alegró y dijo que también iría con su papá a conversar con la señora. Juez presidenta deja constancia
del gesto realizado por la testigo con sus manos según la información que le entregó la señora
Marianela, levanta un dedo y con la otra mano hace como una fricciona de arriba hacia abajo, de
abajo hacia arriba.
Puntualiza que en la conversación con la señora Marianela solo estaba con ella, su hijo
pequeño estaba en el coche, su hijo Gianfranco no estaba en ese momento, estaba conversando en la

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puerta con la señora Marianela, no vio el gestó que le hizo la señora Marianela. Antes de irse a su
casa con sus hijos, la señora Marianela le dijo que fuera a hablar al jardín, “no vaya a ser que se
haga un cahuín como el de la niña que estuvo acá, la compañerita, la Melanie, que dijo que alguien
le tocó el poto en su casa” (sic). Le llamó la atención que la señora le estuviera diciendo todo eso, se
fue con sus hijos a la casa, en el camino Gianfranco se afirmó del coche y bajó la cabeza no le dijo
nada. En la casa conversó con él, le preguntó hijito qué te pasó, por qué estas así”, diciéndole “tú
mamá me vas a castigar, voy a esperar que llegue mi papá”.
Cuando llega su marido a la casa, ella le contó lo comentado por la señora Marianela, él la
vio preocupada, estaba llorando, él le dijo que iría donde la señora Marianela a conversar qué era lo
que sucedía, para saber qué estaba pasando, ella le dijo que encontró a Gianfranco con los ojos
llorosos en la casa de la señora Marianela, su hijo en ese momento reaccionó con una cara de
felicidad, “sí vamos, se sintió como protegido por su papá”, ella no fue, se quedó con su hijo menor
en casa, su marido fue con Gianfranco donde la señora Marianela. Al regresar su marido, le dijo que
conversó con la señora Marianela, quien le dijo que le había enseñado defenderse en el jardín, que
le enseñó a decir huevón, en ese momento “cogí a mi hijo para llevarlo al hospital” (sic), para salir
de cualquier duda. La señora Marianela le enseñó a decir Huevón para que se defendiera en el
jardín.
Detalla que llevaron a su hijo al Exequiel hospital de niños, mientras esperaban que los
atiendan, su hijo estaba callado, asustado, no decía nada, y ella insistía en preguntar qué le había
pasado, él decía nada, hasta que en un momento dijo que quería ir al baño, lo acompañó, se arrodilló
y le dijo “mírame mi amor qué te está pasando” (sic), le dijo “nada mamá” (sic) llevando su cara a
un costado, ella le dijo “qué te pasó” (sic), el movió su cabeza de lado a lado, no queriendo decir
nada, a lo cual ella le dijo “ si tú me cuentas todo lo que pasó ese día, yo tengo un premio” (sic) no
es que en ese momento le diera el premio, se lo dijo para que cambiara su carita y tuviera la
confianza de contarle lo que le estaba sucediendo, en ese momento le dijo “que en casa de la señora
Marianela, el tío Emilio le cogió el pene y el poto, en la pieza donde juegan play, los niños” (sic).
Le preguntó si le dijo a la señora Marianela, dijo sí, a la tía Mila, pensó que era una profesora del
jardín que se llama Mila, indicando su hijo que Mila era la esposa de Emilio. Dijo que lo contó y la
tía Mila lo retó, no dijo nada más.
Añade que, regresaron con su hijo Gianfranco donde estaba el papá con su otro hijo, le
contó lo que su Gianfranco le había dicho, que el tío Emilio le había tocado el pene y el poto, no lo
podía creer, se puso a llorar, abrazó a su hijo y esperó que el doctor los llamara para que lo
revisaran. Su marido también reaccionó mal, no podía creer, estaba preocupado, abrazó al niño, le
dijo tranquilo, vamos ayudarte, su carita cambió cuando lo abrazo, cambió su cara hasta antes que le

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contara lo que había sucedido, antes estaba muy triste, era callado, no decía nada, no quería hablar,
no decía nada, solo vamos al hospital, pero luego cuando contó comenzó a conversarle, a soltarse, a
contarle de sus compañeros del jardín.
Luego, esperaron que los atendiera el doctor, les dijo que no hubo penetración, que pudo ser
solo toqueteo en sus partes íntimas. Inmediatamente se fue a hacer la denuncia, en el mismo
hospital estaban carabineros, se acercó e hizo la denuncia. Después los llevaron a hacer exámenes a
su hijo al médico legista, lo revisaron, no recuerda qué más pasó. Al SML llegaron con los
carabineros, no recuerda si su hijo estaba dormido o no, ya era de madrugada. Cree que le tomaron
declaración a su hijo.
Después, se fueron a la casa, con posterioridad, una vez que fue a retirar a su hijo del jardín,
vio pasar a los carabineros y su hijo le comentó “y le detuvieron “, le dijo que sí y como que se
alegró, nunca más hablaron del tema hasta que lo vio una psicóloga, primero lo vio una que estaba
al frente de la municipalidad de La Cisterna y luego una que está en la Granja en San ramón. Antes
que comenzara la pandemia fue todo ese tiempo, desde que le sucedió eso a su hijo, no recuerda con
qué frecuencia, aún no lo dan de alta, todavía está en tratamiento.
Manifiesta que su hijo nunca mencionó a una persona distinta que Emilio como la persona
que realizó estos hechos.
Dice que desde que habló con la señora Marianela nunca habló con Emilio, no conoce a esa
persona.
No sabía qué personas vivían en esa casa, la señora Marianela le comentó de su hija, pero
nada más.
Desde que la señora le contó lo sucedido a su hijo nunca más habló con la señora
Marianela. Antes del 3 de noviembre no había tenido ningún problema con la señora Marianela
respecto del cuidado de su hijo. El niño desde que estaba siendo cuidado por la señora Marianela
nunca le mencionó algún problema con ella, tampoco en el jardín infantil.
Informa que el lunes siguiente al 3 de noviembre de 2017, que fue viernes, fueron el lunes
siguiente al jardín a hablar con la directora, le contó lo comentado por la señora Marianela que le
habían hecho un cahuín en el jardín, la directora dijo que eso no había sucedido nunca, en el jardín
están pendiente de los niños, no podía pasar algo así allí, es un jardín chico. En esa conversación la
directora mencionó algo de la compañerita Melanie, dijo que la niñita que llegaba al jardín muy
callada no recuerda que más dijo.
También refiere que antes del 3 de noviembre su hijo era participativo en el jardín, tenía un
cuaderno con la tía donde le informaba si trabajaba o no, si compartía con los compañeros si le
gustaba hacer las tareas, la tía le decía que era muy alegre, participativo. Después que fue hablar

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con la directora, hubo un cambio con su hijo Gianfranco, no quería trabajar, no quería hacer las
tareas, peleaba con sus compañeros, tenía pesadillas, se levantaba llorando, para que no tuviera
miedo lo hacía dormir con ella. Esto se produjo hasta que comenzó a ir a la psicóloga, a minorar las
pesadillas, a levantarse en las noches y pasarse a su cama.
Informa que con su marido optaron por qué su hijo no declare, ha pasado mucho tiempo, es
suficiente con la psicóloga que lo está viendo, ya lo vio la abogada, los carabineros, “con lo que ha
avanzado no queremos que retroceda” (sic).
Refiere que Gustavo, su hijo menor, fue al mismo jardín PERSONA_JURIDICA000, el
mismo que Gianfranco, lo llevaba allí porque tenía dificultades de lenguaje, confiaba en ese jardín
porque a Gianfranco le fue bien en ese jardín, tenía buenos profesores, lo puso allí porque le
inspiraron confianza, porque es un buen jardín.
A las preguntas de la abogada Querellante; señala que su hijo no le dijo con quién
almorzaba en la casa de la señora Marianela. Dijo que cuando él estaba en la casa, estaba la tía
Mila, el esposo de la señora Marianela, y cuando le habló de un tío Emilio le preguntó quién era él y
le respondió que era el esposo de la tía Mila, le habló muy pocas veces del tío Emilio, más de una
sí.
No le preguntó a su hijo con quién almorzaba, ni qué cosas almorzaba ya que almorzaba en
el jardín. Cuando llegaba donde la señora Marianela le daba colaciones, ella le daba a la señora
Marianela las colaciones, su hijo llegaba donde la señora Marianela tipo dos de la tarde, no sabe
exactamente a qué hora le daba las colaciones. Su hijo le comentaba de los peces y de una pieza
donde los niños jugaban play, unos juegos, más no le comentó su hijo.
Informa que su hijo le señaló que lo ocurrido con el tío Emilio fue en una pieza, en cual la
verdad no recuerda, le dijo que estaba el tío Emilio y otros niños más, parece.
Efectivamente el niño comenzó a quedarse en septiembre en casa de la señora Marianela, en
octubre le comentó del tío Emilio, cuando comenzó a decir que no quería quedarse donde la tía
Marianela, le dijo a su marido que le preguntara a la señora Marianela quién era el tío Emilio,
cuando fue a hablar con ella no estaba este tío Emilio. Su hijo le dijo que el tío Emilio les enseñaba
juegos que había en la casa, play, eso.
A las preguntas de la Defensa; indica que cuando llevaron al niño al hospital y lo llevaron
al baño, fue cuando le ofreció un regalo, un premio para que le contara. No le dijo que le daría un
premio porque tenía algo con la señora Marianela, “yo le dije a mi hijo, algo te ha sucedido en la
casa de la tía Marianela, para que él le soltara algo y le contará, no porque yo haya hecho
intercambio que él me tiene que decir algo o no” (sic)

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A la pregunta, Cuando le dice que le va a dar un regalo o un premio, sino que también le
indica que algo había pasado con Marianela o en casa de Marianela (sic) señala la testigo “yo le dije
a mi hijo te voy a dar un premio si me cuentas qué te ha pasado en la casa de la tía Marianela, pero
no con la señora Marianela, en la casa de la señora Marianela” (sic)
Afirma que cuando se entera de los hechos en la casa de Marianela le dijeron que las
tocaciones habrían ocurrido en el jardín, también afirma que cuando habla con su hijo nunca le
ofreció un premio para que le dijera lo que le pasó en el jardín, la única vez que le ofrece un premio
a su hijo lo hace en relación con la casa de la señora Marianela, no al jardín.
También afirma que después acompañó a su hijo a declarar, él fue a declarar, en esa
declaración no recuerda si ella estaba presente.
Se procede a exhibir declaración de fecha 19 de diciembre de 2017, declaración prestada en
fiscalía por el menor, donde aparece acompañando a su hijo, aparece su nombre y firma, donde
además se deja constancia de algo que ella refirió en ese momento lo cual se destacó y que leyó
para sí.
Refiere que efectivamente ese día en que su hijo declaró, no recuerda si ella también habló
Afirma que el día que declaró su hijo estaba presente y aportó información, le preguntaron a qué
hora dejaba a su hijo y si conocía a Emilio, cuando le preguntaron eso su hijo no está presente, fue
el mismo día, primero interrogaron a su hijo y luego a ella. Dice que no estaba presente cuando su
hijo declaró.
Efectivamente le dieron un regalo a su hijo, pero no ese momento, sino que transcurrieron
los días para cambiarle la carita, ese día estaban en el hospital no tenía ningún regalo, ese regalo fue
un juguete.
A una nueva pregunta conforme el artículo 329 del Código procesal Penal a la fiscal;
señala que ese día en la fiscalía hicieron ingresar a su hijo para que le hicieran la declaración,
cuando terminó no recuerda qué pasó.
Cuando le entregó el regalo a su hijo le dijo toma hijito para que puedas jugar, pero no le
mencionó lo que él le había contado, fue para cambiarle la carita triste. Se lo entregó a la semana o
dos semanas.
Indica que la casa de la señora Marianela tiene por fuera una reja, una puerta, al ingresar
está el comedor y una salita, es una casa de un piso.
Exhibe set fotográfico, indica que en la N° 2 observa el frontis de la casa de la señora
Marianela, fachada pintada de rojo por lo que recuerda, al ingresar a mano izquierda está la salita y
comedor, N° 3 entrada a la casa pasillo, una vez la puerta abierta a mano izquierda recuerda que

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había una pieza y luego el comedor; N° 4 comedor de la señora Marianela, solamente conoció lo
que ha descrito.
A las preguntas de la abogada querellante conforme el artículo 329 del Código
Procesal Penal; dice que cuando le ofreció un premio a su hijo, le preguntó por lo que le había
pasado en la casa de la señora Marianela y no en el jardín, eso fue por todo lo que le dijo la señora
Marianela, por lo que le habría pasado a la compañerita, que su hijo decía garabatos, siendo que en
el jardín siempre le comentaban todo, que se cayó o que un compañerito lo empujó, por eso le
pareció raro todo lo que le comentó la señora Marianela, sabía que algo le había pasado a su hijo en
la casa de la señora Marianela, nunca pensó que fuera algo que pasó en el jardín, le comentaban
siempre todo. La señora le dijo vaya a hablar al jardín para que no me vayan a hacer un cahuín en el
jardín como el que me hicieron con la niña Melanie, que dijo que le habían tocado el poto en su
casa, eso se lo contó la señora Marianela.
A una nueva pregunta del defensor conforme el artículo 329 del Código Procesal
Penal; señala que esta información de la niña Melanie que le comenta la señora Marianela, la mamá
de la niña Melanie nada le dijo, ni antes ni después, nunca le dijo que le hubiesen tocado el poto a
Melanie en la casa de la señora Marianela, en ese momento en que habla con Marianela se enteró
que ya no estaba cuidando a la niña. Efectivamente por la mamá de Melanie llegó donde la señora
Marianela, ella se la recomendó, Melanie era compañera con su hijo, así conoció a la apoderada. La
mamá de Melanie ni antes ni después de conversar con la señora Marianela le dijo nada, nunca más
conversó con la mamá de Melanie
Efectivamente no le ofreció a su hijo un regalo por algo que le pudiera haber pasado en el
jardín, sino que en la casa de la señora Marianela, porque cuando vio a su hijo ese día salir de la
casa de la señora Marianela con todos los ojos hinchados, bajoneado entendió que algo le había
pasado allí, pareciéndole sospechoso lo que le dijo la señora Marianela que tú hijo le están haciendo
bullying, por eso lo llevó al médico.
Dice que hasta lo que le contó la señora Marianela no había sospechado nada, sino que
hasta que le habló del cahuín, que le estaban haciendo bullying a su hijo, le ofreció un premio a su
hijo para que se soltara un poco más, tenía la cabeza agachada, algo quería decir, pero no podía
decir, le dijo yo sé que algo te ha pasado en la casa de la señora Marianela, cuéntame yo te tengo un
premio, lo pensó, me miró, y me dijo te voy a contar y me contó.
4.- Sol, cedula de identidad N° NUM003, indica que conoce el motivo de su comparecencia, era
profesora de Gianfranco en el año 2017, estaba en pre kínder, recuerda que era muy alegre tranquilo
participaba muy bien de las actividades pedagógicas y de un tiempo a otro comenzó a cambiar, citó
a la mamá y de hecho hicieron un cuadrito en su cuaderno para registrar sus comportamientos que

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tenía día a día, pasa un tiempo, iba llegando al colegio y estaba el papá de Gianfranco afuera y le
dice que quiere hablar con ella, no tenía horario de atención, lo vio mal, que lo atendió, no recuerda
las palabras exacta que él utilizó, pero el contexto era que la cuidadora del niño estaba diciendo que
se había golpeado el trasero y que al parecer ese comportamiento ese comportamiento lo estaba
imitando desde la escuela, ante lo cual le comentó al papá que eso no ocurría en la escuela, que era
muy poco probable que haya ocurrido durante clases o la hora de recreo o en la hora del baño ya
que por la edad de los niños nunca estaban solos, trabajaba con una asistente, estaban con ella, con
la asistente o con ambas, además, en el colegio hay cámaras, le propuso al papá que revisara las
cámaras para que se diera cuenta de lo que ocurría en el colegio en general, se invita al padre a
hablar con la directora, lo cual hizo, desconoce esa conversación.
También recuerda que le preguntaron si podía participar como testigo ante la denuncia
efectuada por los papas, debido al cambio de comportamiento del niño.
Fue dos años, 2017 y 2018 profesora de Gianfranco, después no tuvo más información de
investigación, pero ya en el 2018 Gianfranco dejó de estar al cuidado en la casa de esa señora,
volviendo a tener el comportamiento del niño que era en un inicio, en 2017, ya que incluso hacía
burlas cuando ella hablaba. Cuando dice como era al inicio, ella llegó al jardín en mayo de 2017,
era muy alegre, amoroso, muy participativo, niño que hace las actividades pedagógicamente bien,
después eso cambió, no quería participar, se burlaba.
Afirma que Gianfranco no tuvo problemas con otros niños en el jardín o un adulto. Peleas
como cualquier niño sí, pero cómo lo comentado por el padre de darse golpes en el trasero, eso no
ocurría.
La familia durante los dos años fue muy participativa, muy responsable, muy buena
relación entre apoderado y profesora, y ellos como familia. El otro hijo también fue a la misma
escuela, no fue la profesora, estuvo en medio mayor y pre kínder.
Indica que no recuerda quién retiraba al niño del jardín, si la mamá o se iba en furgón.
Querellante; los niños almorzaban en la escuela.
5.-Franco Denis Urrutia Carrion cédula de identidad N° 14.022.343-3, suboficial de carabineros
de Retén Convento de Longaví. Indica que hace 23 años de servicio en Carabineros de Chile, hace 6
meses está en el retén Convento, antes estuvo en la 35° comisaría de delitos sexuales donde estuvo
6 años, realizaba labores investigativas en la sección de investigación policial.
Conoce el motivo de su comparecencia, dando cuenta que en la 35° comisaria recibieron
una orden de investigar de la fiscaliza local de San Miguel, donde la fiscal Nadia Moglio solicitaba
realizar diligencias en causa por abuso sexual a menor 14 años, tomar declaración y fijar sitio del
suceso. Con los antecedentes adjuntos a la orden de investigar con la Oficial Rosa Silva, jefa de

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patrulla, fueron el 23 de febrero de 2018 al domicilio ubicado en DIRECCION000 de
DIRECCION001, en ese lugar la oficial tomó declaraciones en el interior del inmueble y al finalizar
le señala que la señora Marianela autorizó fijar fotográficamente el lugar que estaba siendo
sindicado como sitio del suceso. En presencia de la propietaria del inmueble doña Marianela realizó
la fijación del frontis del inmueble, acceso al interior, lugar en que se ubicaba el living comedor y
ella le indica el lugar que mantenía habilitado para que jugaran los niños que cuidaba. Esas fueron
las fotografías, sin fijar lugar puntal del sitio del suceso que indicará la denunciante u otro testigo.
Incorpora set fotográfico señala que en la imagen N° 2 observa el frontis del domicilio de
DIRECCION000 de la comuna DIRECCION001, casa habitación de 1 piso, donde la denunciante
indica haber recibido en la develación de su hijo haber sufrido la agresión sexual en el interior del
inmueble; N° 3 foto del exterior hacia el interior del domicilio, ve pasillo de acceso hacia el interior
del inmueble; N°4 vista desde el living comedor hacia el dormitorio de la señora Marianela; N° 5 ve
el living del inmueble, se observan fotografías de la familia, cuadros; en la N° 6 ve el living
comedor se ven sillones, fotografías; la imagen N° 7 está orientada del living comedor hacia el patio
habilitado como zona de juego de los niños que cuidaba la señora; N° 8 foto especifica de la zona
de juegos habilitada, se ven sillones, silla para niños para que se sienten y jueguen.
Además, informa, que no realizó otras diligencias que no fuese la fijación fotográfica y un
mapa que corresponde a la foto N° 1, se aprecia la distancia entre el domicilio de la víctima hasta el
domicilio donde cuidaba la señora Marianela al menos, a unas 5 cuadras aproximadamente, donde
se ve como una estrella está el domicilio de la señor Marianela.
6.- Julio, cédula de identidad N°NUM004, nacionalidad peruana. Indica que es casado Escarlet,
tienen dos hijos, Gianfranco y Gustavo de 10 y 8 años respectivamente. Comparece por lo sucedido
a su hijo Gianfranco, “a mi niño sexualmente fue tocado” (sic) por lo cual acudieron a las revisiones
y junto con su esposa, escucharon la versión de su hijo cómo sucedió.
Explica que supo de los hechos el 3 de noviembre de 2017, ese día llegó tarde del trabajo, y
al llegar a la casa su esposa le cuenta que Gianfranco se había portado mal, había dicho malas
palabras. Llegó a la casa alrededor de las seis de la tarde, estaban sus hijos y su esposa, al entrar su
esposa le cuenta lo que había pasado en casa de la señora Marianela, que le había dicho que
Gianfranco estaba muy mal criado, que había dicho malas palabras, respondiendo él voy a verlo,
diciendo su hijo sí papá, vamos” fueron y encontró a la señora Marianela quien le dijo que
Gianfranco sacaba la madre, se ha portado muy mal.
Antes de ir a la casa de la señora Marianela su esposa le dijo que la señora Marianela había
dicho que Gianfranco estaba muy mal, que había dicho malas palabras, y que en colegio le habían
hecho con el dedo donde estaba, que lo habían tocado en las partes íntimas, esas cosas” (sic). Las

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malas palabras eran concha tú madre, huevón, y que en el colegio le tocaron la parte del trasero con
el dedo “le hicieron así” (sic) le tocaron con el dedo partes íntimas, en la parte del trasero, “en la
cola, con el dedo cogiéndole el pene” (juez presidenta deja constancia que levantó el mano derecho
y movió uno de los dedos hacia abajo) no recuerda mucho más. Con esa información que le dice su
esposa fue donde la señora Marianela, su hijo le dijo “ya vamos papá” (sic). La señora Marianela le
dijo lo que andaba diciendo Gianfranco, pero que a ella no le había dicho, sino al caballero que
estaba ahí, a Emilio, le pide si lo puede ir a buscar, se acercó el caballero y habló con él, diciendo la
señora “nosotros le hemos estado enseñando al niño a defenderse con la palabra huevón o
ahuevonado, algo así” en su casa nunca se han dicho esas palabras por eso le parecía raro que su
hijo hable con la madre, en su casa no hay esos principios, le inculca valores a sus hijos, son
cristianos. Puntualiza que cuando llegó a la casa de la señora Marianela primero habló con ella, le
dio cuenta de lo que le dijo su esposa que su hijo habla malas palabras, que se ha portado mal,
diciendo la señora “sí aquí se ha portado mal diciendo muy malas palabras, y aquí ha contado cosas
del colegio que le han hecho” (sic) preguntándole a quién le ha contado, respondiendo que a
Emilio, le pide a la señora llamar a esa persona, el caballero salió y hablaron, allí donde tienen una
pecera, debe ser la sala, un lugar donde había muebles una pecera, ahí habló con los dos. La señora
Marianela dijo que el niño le contó a Emilio lo que pasó en el jardín, que no le contaba a ellos, “a
ustedes como padres, porque le pegan, lo castigan, por eso vayan a averiguar al colegio” sic) en ese
momento agradeció a ellos, su hijo salió con la cabeza agachada, triste. Informa que mientras
hablaban con la señora Marianela y el caballero su hijo estaba agachado pero tranquilo, cuando le
comenzó a preguntarle quién te ha enseñado a decir huevón, respondió su hijo “la señor Marianela”
(sic) respondiendo ella sí, que le enseñó para defenderse, ella como que se enrojeció, diciendo que
lo hicieron para que se defienda en el colegio, ante lo cual estaba desconcertado, en la casa nunca le
han enseñado esas cosas.
También informa que, en el trayecto de la casa de la señora Marianela a su casa su hijo
estaba triste, conversó con su esposa y decidieron llevarlo al médico por todo lo que les dijeron y
porque su hijo estaba triste, lo llevaron a un hospital, no recuerda el nombre ni la dirección, está
ubicado a una media hora de su casa. Al hospital con su hijo Gianfranco, su esposa y su hijo
pequeño. Al llegar, su esposa fue al baño con su hijo Gianfranco y al rato ella sale llorando, le
pregunta qué te pasó, y le dice que Gianfranco “le dice que el tal Emilio le ha cogido las partes,
dónde, adentro en un cuarto” (sic), pasaron unos carabineros y su hijo dijo “papá ahí que lo lleven,
que lo lleven, porque a mí me cogió” (sic) y su esposa se puso a llorar.
Fueron al baño porque Gianfranco quería ir al baño y su esposa lo acompañó, al salir su
esposa le dice que su hijo le ha dicho adentro en el baño que “Emilio lo ha cogido en sus partes”

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(sic) dijo que le habían cogido el pene le había cogido, Emilio, en un cuarto, luego comento cuando
pasaron los carabineros dijo mamá ya se lo llevaron y ella le dijo que sí. Ese día su hijo fue
examinado por un médico, a la 01:00 hicieron la denuncia en el mismo hospital porque había
carabineros. Con posterioridad, vieron un psicólogo ya que empezó a orinarse en la cama y a tener
pesadillas.
El día en que se enteran de lo ocurrido trasladaron a su hijo a carabineros, en San Miguel.
Dice que cuando el niño salió del baño con su esposa, escuchó de su hijo lo que ocurrió, ya
que le volvieron a preguntar, dijo que Emilio le había cogido la parte de adelante del pene. A la
pregunta dijo cuándo, responde, eso se lo contó el 3 de noviembre.
Añade que su esposa vio todo para que la señora Marianela cuidara a su hijo, eso fue en
septiembre de 2017, comenzando en esa época el niño a ir a la casa de la señora desde las 14:00 a
las 17:30 horas, antes de ese horario su hijo estaba en el jardín escuela PERSONA_JURIDICA000,
ubicado en la comuna DIRECCION001, cerca de su casa, ellos vivían en DIRECCION002, estaba
cerca del metro Lo Ovalle el jardín, a unas 5 cuadras, el horario del jardín era 7:30 a 14:00 horas, lo
retiraba la señora Marianela, no recuerda bien. A la casa de la señora Marianela él lo iba a buscar.
Da cuenta también, que hasta antes del 3 de noviembre la señora Marianela siempre le decía
que su hijo se portaba bien, la última vez lo recogió su esposa, nunca le dijo a él la señora Marianela
que se portaba mal. En el jardín su hijo se portaba bien, era un niño sano, tranquilo, compartía,
nunca recibió algún reporte de que se portara mal en el jardín.
Informa que, a don Emilio no lo conocía con anterioridad al 3 de noviembre de 2017,
después de esa fecha nunca más habló con él. Asevera que nunca tuvo algún problema con la señora
de Marianela antes de esa fecha, su hijo tampoco, cada vez que lo iba a recoger le decía la señora
que Gianfranco se portaba bien. Cuando recogía a su hijo escuchaba que adentro estaban otros
niños, afuera le entregaban a su hijo, en la puerta de entrada a veces donde estaba la pecera. Su hijo
en las tardes entiende que estaba para adentro de la casa donde había un cuarto. Sabía que vivían en
esa casa la señora Marianela, su esposo y su hija, nada más.
Puntualiza que su esposa llegó a contactar a la señora Marianela por medio de una señora
que su niña también iba al jardín, no conoce el nombre de la señora, la niña era Melanie, nunca vio
a la niña cuando fue a retirar a su hijo, no conocía a la niña.
Agrega que, que después que su hijo contó esto, ya no quería dormir solo, se orinaba, estaba
como triste, como padre se preocupó, incluso le comentó a su jefa y ella le mandó una asistente
social que le llegó unos regalos unos cuentos infantiles para leer, y le recomendó una psicóloga, su
hija estaba recién siendo atendido por una psicóloga.

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Dice que, el 3 de noviembre cuando escuchó el relato de su hijo, él estaba como retraído
estaba como con miedo, explicó que le habían cogido el pene, entonces pasaron los carabineros y
dijo hay que hacer algo para que se lo lleven, como papá le dijo que sí
Después de ese día su hijo no fue nunca más fue a la casa de la señora Marianela.
Comunica que a la fecha su hijo está con psicólogo, están tratando que se vaya superando,
aún a veces tiene sueños, “esperamos que más adelante no ocurra nada con mi niño” (sic).
Dice que su esposa fue a hablar al jardín infantil con la tía Sol. Después él también se entrevistó con
la tía Sol quien le dijo que no podía ocurrir algo así en el jardín ya que están todo el rato pendiente
de los niños, en la hora del recreo, en la sala, recuerda que fue el día lunes, a la brevedad posible, no
dejaron pasar, ni dormimos esos días” (sic) la profesora le dijo que eso que le hayan cogido el pene,
que le hayan metido el dedo en la cola, no pudo pasar en el jardín, ni garabatos decía su hijo, se
había ganado hasta diplomas en el jardín , ella dijo que en el jardín no podía ocurrir eso, tampoco
pasaba eso de las malas palabras. Cuando habla de la cola se refiere al poto, al ano. Su hijo iba de
lunes a viernes a la casa de la señora Marianela.
Querellante no pregunta
A las preguntas de la Defensa; afirma que cuando fue a hablar con la señora Marianela a
propósito de las malas, reconoció que ella le había enseñado eso, que le había enseñado para que se
defendiera porque un compañero lo molestaba, no le dio el nombre, sí le dijo que un compañero en
el jardín estaba molestando a su hijo, “que le estaba haciendo en el pene, en la cola con el dedo”
(sic) (mueve el dedo) y que a ella no le había contado nada, sino que fue a Emilio.
A la pregunta, ¿cuándo fue su señora a hablar al hablar al jardín no le dijeron que un
compañero estaba molestando a su hijo? indica que no.
Informa frente a la pregunta ¿Es cierto que su señora le ofreció un regalo o un juguete para
que le contara lo que pasaba en la casa de la señora Marianela? que cuando estaban en el hospital
para que revisaran a su hijo, su señora le dijo te voy a dar un regalo, pero en ese momento no había
qué regalar ni nada, pero eso sí le dijo.
Defensa; no pregunta.
B. – PRUEBA PERICIAL
Romy Natalia Espinoza Martínez; cédula de identidad 15831620-5, psicóloga, quien indica que
con fecha 22 de diciembre del año 2017 se le solicita practicar informe pericial al niño de nombre
Gianfranco que en ese entonces tenía 6 años y fue promovido a primer año básico. Dicha
evaluación fue realizada el 3 de enero del año 2019, la solicitud de la Fiscalía, específicamente, era
en relación con la credibilidad del relato y daño psicológico emocional.

22
Respecto de la metodología utilizada, se realizó análisis de la copia de la carpeta
investigativa de manera de generar hipótesis atingentes a la causa. Además de ello, se realizó
entrevista con la madre del niño y con el niño en conjunto. Para conocer antecedentes del desarrollo
de Gianfranco y de la causa se mantuvo entrevista con la madre y posteriormente se efectuó la
entrevista con Gianfranco de manera de realizar un psicodiagnóstico que permitiera valorar el
desarrollo cognitivo, social y emocional.
Por otra parte, también se hizo lectura en relación con el consentimiento informado para
poder efectuar el peritaje. También se realizó análisis a través de juicio de experto por parte de los
peritos de la unidad de psiquiatría infanto-juvenil del servicio médico legal. Además de ello, se
utilizó para realización de la evaluación del relato de Gianfranco el modelo SVA, el cual consta de
3 pasos, una entrevista semiestructurada, análisis de contenidos basados en criterios del CBCA y el
estado de validez.
Por otra parte, en cuanto a los antecedentes relevantes del desarrollo de Gianfranco, la
madre indica en relación con el ámbito de información perinatal, el evaluado no presentó
dificultades en su desarrollo, donde Gianfranco no tuvo ningún tipo de enfermedad ni pre ni post
natal que afectarán un apropiado desarrollo. Por otra parte, en cuanto a los antecedentes del
crecimiento, Gianfranco tuvo un buen desarrollo en general, por ejemplo, en el logro de la marcha,
el habla y el control de esfínter en las etapas adecuadas, sin existir descontroles posteriores con
relación a esto último. Además, la madre señala que durante el proceso de desarrollo el niño no
presentó en el jardín infantil dificultades en su aprendizaje.
En cuanto a los antecedentes de la causa la madre señala que al regresar el niño del jardín
quedaba al cuidado de una señora de nombre Marianela, la que fue recomendada por una amiga o
una conocida, lugar donde el niño habría permanecido aproximadamente por un mes y medio al
cuidado de aquella señora durante la tarde hasta alrededor de las 18:30 horas, mientras que ella y el
padre se encontraban trabajando. Menciona también la madre que principalmente era el padre quien
iba a buscar al niño por la tarde a casa de la señora Marianela donde ella reportaba al padre que
Gianfranco mantenía un buen comportamiento. Señala que un día que ella lo va a buscar, la señora
Marianela le dice que ese día Gianfranco comenzó a decir garabatos y que al parecer en el jardín le
estaban haciendo bullying y le habrían tocado el pene, que le decía eso para pudiera averiguar eso
en el jardín. Señala la madre que posteriormente, al llegar a la casa, le llama la atención esto porque
Gianfranco no decía garabatos y porque del jardín no le habían reportado ningún cambio o situación
en ese sentido ya que contaba con una agenda de comunicación directa con las tías del jardín para la
casa y no había ningún reporte al respecto. En relación con lo indicado por la señora Marianela la
madre le dice que le preguntó a su hijo qué le pasó en el jardín y Gianfranco baja la cabeza y no

23
quiso contar nada. Posteriormente, señala de que hay una conversación junto con el papá y el niño y
posteriormente el padre junto con Gianfranco se dirigen a la casa de doña Marianela para
confrontarlos, indicando la madre que en ese momento Gianfranco habría tenido una actitud como
de empoderamiento, por decirlo así. Cuando va el padre y el niño a la casa de la señora Marianela a
confrontarlos, ellos niegan cualquier tipo de situación ocurrida en dicho domicilio. Posteriormente,
indica la madre que, por voluntad propia, se trasladan al hospital Exequiel González Cortés donde
en el baño de dicho lugar, ella le pregunta al niño qué es lo que le habría pasado, y es ahí donde el
niño le menciona que una persona le habría tocado el pene y que el niño reconoce a esa persona con
el nombre de Emilio. Frente a esta situación es que posteriormente se hace la denuncia y se inicia el
proceso en esta causa. Se le pregunta también a la madre con respecto a si conocía a esta persona
que Gianfranco lo reconoce como Emilio, ella dice que no, que desconocía que esta persona viviese
en ese lugar. Indica también, que al ser consultada la madre si advirtió cambios en el
comportamiento habitual de Gianfranco, señala que habría presentado alteración en su conducta,
tornándose más agresivo con sus compañeros, siguiendo menos instrucciones por parte de las tías
del jardín, y también habría presentado pesadillas durante esa semana que la madre menciona que
habrían ocurrido los hechos. Indica la madre que todas estas conductas y comportamientos no se
habrían presentado anteriormente y ella de alguna manera los correlaciona con los hechos que
habría estado expuesto en este caso el niño.
Agrega la perito que, en cuanto a la evaluación efectuada a Gianfranco, puede señalar que
en primera instancia se realiza una entrevista que es a solas con Gianfranco, donde se le pregunta
con respecto a sus preferencias de manera de generar con la finalidad de lograr un clima de
confianza en el proceso pericial, señalando elementos como que le gusta correr, correr rápido, que
tiene muchos amigos, de hecho dice primero 50 y después dice 1000 después de 1050.
Posteriormente, señala que sus tías del colegio lo trataron bien, no reportando ninguna situación
conflictiva. Cuando se le consulta con respecto a las figuras parentales, tanto con la madre como
con el padre, el niño no reporta como conflictos específicos que fueran de gravedad o de
connotación que pudieran dar cuenta de algún problema importante en la relación del sistema
familiar. Por otra parte, con respecto a cómo se describe él, él solamente señala que es simpático.
Posteriormente, se le pregunta si él conoce el motivo por el cual se encuentra ahí, responde que sí,
porque dice que pasan cosas buenas y cosas malas. Posteriormente se le pregunta qué cosas son las
que pasan y él dice que anteriormente había ido a la casa de la señora Marianela y que en esa casa
había una persona llamada Emilio y que esa persona le habría tocado el pene. En ese sentido, él lo
señala y lo califica como qué ocurrió algo malo. Se le pregunta con qué parte del cuerpo esa
persona le habría tocado el pene, señalando con las manos. Posteriormente, se le pide que cómo

24
hubiese sido esa situación y él bajo la mesa que se encontraba sentado, el niño hace un gesto, el cual
no pude observar y se le pide que lo pueda hacer por encima de la mesa, y él encoge su mano y la
empieza a apretar. (perito muestra el gesto empuña y aprieta la mano) esa habría sido la forma que
es la persona le habría tocado el pene (juez presidenta deja constancia que la perito levanta la mano
derecha y como que aprieta los dedos) “lo hace de esa manera en el informe yo puse que encoge la
mano y la aprieta” (sic). Frente a eso, posteriormente se le pregunta si esto le ocurrió una o más
veces y él señala que fue solo una vez. Aparte de ello, también se le pregunta si esto fue por encima
o por debajo de la ropa, él dice que por debajo. Nuevamente se le consulta si esto fue por encima o
por debajo de la ropa interior, él dice por debajo de la ropa interior. Otro elemento importante que
menciona Gianfranco en su relato es que él dice que esto se lo cuenta a la señora Marianela y que la
señora Marianela habría retado a Emilio, señalando que él se lo habría contado de forma inmediata
a la mamá y que habrían llegado los carabineros.
Agrega la perito en cuanto a su pericia, que en base al relato que entrega Gianfranco, y en
base al análisis efectuado en relación a los criterios del CBCA se pudieron encontrar los siguientes a
nivel de características generales. Presentó una estructura lógica, una producción inestructurada con
detalles en cómo acontecieron los hechos. Por otra parte, con respecto a los contenidos específicos,
presentó un adecuado engranaje contextual, es decir, el peritado logró ubicar en el lugar donde
habrían acontecido los hechos, señalando que fue en una habitación de la casa de la señora
Marianela, y por otra parte, también señala reproducción de conversaciones y descripción de
interacciones. En cuanto a las peculiaridades del contenido, enseña detalles superfluos. Por último,
en cuanto a las características de la ofensa, menciona que la dinámica que se habría dado habría
sido de tipo asimétrica, es decir, que habría existido un aprovechamiento del vínculo considerando
la diferencia de edad entre la figura acusada versus, en este caso, Gianfranco, de 6 años, en el
momento de la evaluación.
Asimismo, señala la perito que en base a lo antes señalado, también puede indicar
específicamente en relación a las variables de validez, Gianfranco durante el proceso de evaluación
muestra características psicológicas, es decir, a nivel cognitivo suficientes para poder brindar un
testimonio. Sumado a ello, presenta un adecuado lenguaje que le permite expresar de forma
apropiada de manera concreta y precisa hechos a los que habría estado expuesto. Por otra parte,
también Gianfranco se mostró con una baja subjetividad, señalando, por ejemplo, cuando se le
inducía errores, él los corregía, por tanto, se descartó la hipótesis de incapacidad en ese sentido. Por
otra parte, con respecto a la entrevista en sí misma, esta se dio sin la utilización de preguntas
sugestivas, lo que, valida la metodología, existiendo por parte del peritado, una adecuación global.
Por otra parte, con respecto a una motivación de ganancia secundaria o motivación para denunciar

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falsamente, no se identificaron indicadores que dieran cuenta de dicha premisa debido a que, en
primer lugar, la madre desconocía que existía una persona llamada Emilio dentro del domicilio de la
señora Marianela. Y, en segundo lugar, Gianfranco manifestó siempre en el transcurso de su relato,
la existencia de esta persona en el mismo lugar, sin cambiar de lugar, como por ejemplo el jardín.
Por otra parte, también puedo señalar que existe consistencia con las declaraciones anteriores,
manteniéndose el tema central, específicamente, en relación de que el niño reconoce a esta figura
llamada de Emilio, quien residía en la casa de la señora Marianela. Existe consistencia en que
estaba en la casa de la señora Marianela y aparte de que también reconoce en todo momento el
nombre de Emilio como la persona que habría hecho este accionar y, también de que habría sido
una transgresión donde le habían tocado su pene.
En cuanto al daño, específicamente, este se hace a través del análisis del reporte entregado
por la madre, por lo referido por Gianfranco y por el análisis efectuado por la perito. En relación
con ello, pudo identificar que existió alteración en este caso a través de pesadillas en Gianfranco,
además de un cambio en el comportamiento habitual quien se habría tornado con dificultades y un
poco de descontrol en el ámbito de la agresividad con sus compañeros en el jardín, cómo esos
elementos específicamente, y que esos elementos no se habrían dado previamente a los hechos
denunciados.
En conclusión, puedo mencionar que a partir del análisis efectuado se puede descartar
desplazamiento de autor, ganancia secundaria, así como también motivación para denunciar
falsamente. Por lo tanto, de acuerdo con lo referido y los criterios presentados, muestran que habría
sido una experiencia vivida. Respecto del daño, específicamente se identificó que existió una
alteración en su desarrollo psico emocional el cual estaba siendo tratado en ese momento en proceso
de terapia.
A las preguntas de la fiscal; señala que es psicóloga desde el año 2006, el peritaje lo
realizó cuando trabajaba en el SML desde el 2014 a 2019, donde efectuó evaluaciones perciales de
credibilidad del testimonio y daño sicológico por hechos denunciados y en causas de tribunales de
familia por medidas de protección y contenciosas. Mensualmente efectuaba 7 a 8 pericias de este
tipo en el SML

En la actualidad ejerce de forma privada, se dedica a realizar estas evaluaciones periciales,


anteriormente desde el año 2007, siempre efectuó este tipo de evaluaciones, ya que se especializó
también en ese ámbito, por lo que ha tenido siempre experiencia, con anterioridad a su ingreso al
SML fue directora de un programa donde también se efectuaban estas evaluaciones. Haciendo
revisión y supervisión de casos también.

26
En cuanto a su especialización refiere tener un diplomado en intervención y mediación
familiar, un diplomado en psicología jurídico forense, un post título de familia, infancia y
adolescencia y además de cursos especializados en temáticas de psicología del testimonio y también
de las nuevas leyes que han estado teniendo en este último tiempo también para estar al tanto de lo
que está pasando a nivel nacional.

En lo relacionado con las capacidades cognitivas del niño, como indicó contaba con
capacidades acorde a su edad. Al no observar algún tipo de retraso, realmente se puede indagar y
profundizar en otras preguntas, las cuales, como dijo, fueron comprendidas y por tanto no era
necesario aplicar alguna prueba psicológica que midiera, por ejemplo, inteligencia.

En cuanto a pruebas cognitivas que se puedan aplicar en niños de la edad de Gianfranco, las
más conocidas son el wisc tres, que es justamente una prueba que tiene una batería
aproximadamente de 24 ítems, pero cada uno con distintas preguntas y de formulación tanto de
ejecución manual como ejecución verbal. Y en ese sentido, Gianfranco en como lo mencionó, él no
manifestó ninguna dificultad en esa en esa línea. Cognitiva específica.

Para realizar estas pericias no fue necesario aplicar una prueba en los términos
mencionados, él respondió correctamente a las preguntas formuladas. El justamente mantenía un
lenguaje. Concordante expresando ideas de forma clara y específica. Por lo tanto, no se consideró
necesario. Además, también que se reporta por parte de la madre de que no habrían existido
dificultades en su aprendizaje. Entonces debido a aquello y lo reportado por la madre el peritado, no
se consideró necesario efectuar una prueba tan desgastante como es la de coeficiente intelectual
para medir coeficiente intelectual para un niño de 6 años.

Expresa que en la metodología queda a criterio también del perito, si el perito ve que
efectivamente fuere necesario la aplicación de pruebas complementarias., por ejemplo, si se hubiese
visto algún déficit, como lo mencioné anteriormente, hubiese sido necesario claramente poder
aplicarlo. En el caso, por ejemplo, de Gianfranco, todavía no cursaba la enseñanza básica, ya que en
el año que lo evaluó había sido promovido a primer año básico. En general, se hace una revisión de
los certificados anuales de estudios, por la fecha en que hizo el informe no se podía contar con esa
información.

Reiteró que el área cognitiva en un niño de la edad de Gianfranco se puede aplicar el test ya
indicado, en lo que respecta a otras esferas, por ejemplo, si hablamos en el ámbito de evaluación
emocional, por la edad de preescolares refiere que es casi nula la posibilidad de aplicación de
pruebas, ya que no existen estandarizaciones por la edad de los niños, si se requiere evaluar daño

27
emocional, las pruebas en general están para niños desde los 12 en adelante. En este caso a
Gianfranco por su edad no se le podía aplicar ninguna prueba específicamente para evaluar ámbito
emocional. Hay una prueba que se llama de los muñecos anatómicamente correctos., pero esa
prueba, por ejemplo, es inductora, por tanto, es muy cuestionada. Por otra parte, hay pruebas
gráficas, que a la fecha son muy cuestionadas en relación con la aplicación y fiabilidad de la prueba
en sí misma. Por tanto, no era viable aplicar alguna prueba por la edad, en este caso de Gianfranco.
32:00

En cuanto a los Criterios del CBCA, en estructura lógica se evalúa el relato en su totalidad
para ver si hay una coherencia en lo que refiere el peritado, ese criterio sí se cumplió. Por otra
parte, cuando habla de producción inestructurada es cuando Gianfranco, por ejemplo, en una
primera instancia habla sobre los hechos por los cuales estaba y posteriormente habla de que había
hablado con la señora Marianela y que también había estado carabineros, por tanto, por decirlo así,
hay una desorganización del relato, pero si uno lo une, forman un todo completo. En cuanto a la en
este caso que logra dar detalles, tiene relación específicamente cuando él menciona que estos
hechos habrían ocurrido en el domicilio de doña Marianela, y a parte también menciona que Emilio
le habría tocado el pene, el menciona eso específicamente. Respecto al adecuado engranaje
contextual, el peritado, en este caso, es enfático en señalar en el lugar donde ocurrió el hecho, en
todo momento en sus declaraciones mencionó que fue en la casa de la señora Marianela y en el
relato que le otorga en la pericia menciona además una habitación. En cuanto a la descripción de
interacciones tiene que ver específicamente cuando el niño indica que Emilio le toca el pene y en
cuanto a la reproducción de conversaciones, a él se le pregunta se le pregunta si él, en este caso
Gianfranco, le dijo algo a Emilio, responde que sí que por qué estaba haciendo eso y que la otra
persona le habría respondido, porque sí, y es ahí donde el niño dice que lo acusa a la señora
Marianela. Respecto a los detalles superfluos, el niño habla en un principio de que pasan cosas
malas y cosas buenas. Los detalles superfluos en general no se relacionan directamente con los
hechos. En cuanto a los detalles característicos de la ofensa, fue lo que mencionó en relación con
cómo se da la dinámica de tipo asimétrica y eso es lo que también da nuevamente la presencia de
ese criterio.

Explica que cuando se refiere a que este relato era consistente se refiere a que el niño
menciona que estos hechos ocurran en la casa de la señora Marianela. Es consistente en que el relata
de que él fue tocado por esta persona llamada Emilio es su pene, y esos son los elementos que
finalmente terminan siendo consistentes y mantienen el tema central de investigación, que era lo
que se está queriendo abordar en este momento.

28
En relación con el pensamiento del niño, considerando su edad se encontraba ubicado en la
etapa preoperacional. Es decir, que tiene una visión más bien egocéntrica en el sentido de que él
percibe el mundo solo desde su propia visión, por tanto, es mucho más acotado en ese sentido. Otra
cosa importante también en relación con su propio lenguaje, el relato que entrega Gianfranco es
breve, no es un relato extenso, pero es un relato que es acorde con su edad, donde es concreto,
muestra elementos específicos, que dan cuenta y caracterizan una situación que él la considera
como mala, de transgresión de la esfera sexual, en relación con cuando él menciona que esta
persona había tocado su pene.

En cuanto al juicio experto como parte de la metodología, explica que consiste en que un
perito al azar del servicio médico legal, de la unidad de psiquiatría infanto-juvenil revisa el informe
y posteriormente puede hacer observaciones, si es que existen ese tipo de observación. En este caso,
no expuso en el informe si hubo o no observaciones, ya que la persona que revisó su peritaje no
hizo observaciones.

Indica que, el relato que obtiene de Gianfranco sí fue transcrito escrito completamente
desde que se toma en relación con los hechos específicamente, desde ese ese momento es donde
comienza a grabar y es un audio que quedó en carpeta en el servicio médico legal para que se
pudiera utilizar en el momento en que se requiriera.

Asimismo, refiere la perito que el relato de la víctima lo comparó con otras piezas de la
carpeta investigativa que tuvo a la vista, tiene que hacer análisis de la carpeta investigativa con lo
que tuvo a la vista en ese momento, recuerda que estaba el parte denuncia y la declaración de
Gianfranco en Fiscalía. Esos fueron los elementos principales que estaban en la copia de la carpeta
investigativa cuando se realizó el peritaje. Y en tal sentido, tal como lo señaló anteriormente como
conclusión, es un todo cuando hace la conclusión con relación a una experiencia vivida por parte de
Gianfranco, es justamente poder hacer ese análisis en su totalidad con los antecedentes tenido a la
vista, más todo lo analizado dentro del propio peritaje.

Efectivamente, también realizó una pericia de daño con la pericia de credibilidad de


testimonio, esa fue la solicitud realizada del Ministerio Público, ello está acorde con la metodología
y también está establecida con la normativa técnica del servicio médico legal, la cual hay ninguna
parte aparece que no se puedan realizar ambas en su conjunto.

En cuanto al daño observado, puede señalar como indicadores específicamente la existencia


en el niño de una alteración, específicamente, en este caso en el sueño a través de pesadillas,
comportamiento más disruptivo en el área educacional, tendencias también más agresivas en

29
Gianfranco, conductas que como mencionó anteriormente, no habían sido evidenciadas previamente
a los hechos denunciados. Asimismo, reitera que estos indicadores pueden afectar en el ámbito de
relaciones con sus pares, en el jardín infantil, por ejemplo, donde él mantenía este tipo de conductas
más disruptivas.

Añade que también se evalúan otras áreas de la persona para poder evaluar el daño, en este
caso, al ser un niño más pequeño, se evalúa con el sistema familiar donde también él estaba
presentando estas conductas más bien disruptivas, lo cual fue de alguna manera tratado y trabajado
por los terapeutas, los cuales también ayudaron a que eso no fuera en aumento.

Explica que al momento en que evalúa al niño, el daño que observa en Gianfranco era un
daño más bien de tipo agudo, donde presentaba una recuperabilidad positiva debido a que fue un
evento único, sumado a que el sistema familiar estaba presente para poder apoyar todo el proceso de
Gianfranco.

Informa que recuperabilidad positiva significa que no va a haber una secuela importante, ya
que ha sido trabajado desde pequeño y mantiene y presenta figuras que pueden ayudarlo y aportar
positivamente, a un desarrollo estable en el ámbito psicoemocional.

También reporta el perito, que recuerda que posteriormente se le pidió un informe


complementario como en el año 2020 (salió en el 2019 del SML) donde se le pedía que describiera
los criterios, que los pudiera señalar como los explicó anteriormente. Además, se le pedía indicar si
en base a los antecedentes si se podían formular nuevas hipótesis, a lo cual da cuenta que respondió
que “sí existía la posibilidad de que el lugar donde el niño indica hubiese sido uno distinto, como
por ejemplo el jardín infantil, el cual descarte porque el niño en todo momento ha mencionado que
los hechos habrían ocurrido en el lugar de la casa de la señora Marianela, y que habían sido
efectuados por la persona antes mencionada Emilio”.

Al efectuar el informe complementario, recuerda que tuvo a la vista una declaración de


Gianfranco, además de un uniforme del jardín al que asistía el niño, un informe policial de las
declaraciones de doña Marianela, don Emilio y de una hija de la señora Marianela cuyo nombre no
recuerda, en las cuales se acogían a su derecho a guardar silencio. De don Emilio también se acogió
el mismo derecho, lo cual se habría efectuado en el mismo domicilio a las tres personas.

Manifiesta que elementos esenciales para llevar a cabo esta metodología y acabo esta
pericia, son los elementos que señaló anteriormente, que tiene que ver en primer lugar, hacer lectura
de la copia de la carpeta investigativa, donde en esa copia de carpeta investigativa mínimo se debe
contar con el parte de denuncia y con una declaración de la presunta víctima, en este caso de

30
Gianfranco. Además de ello, también tiene que contar con la realización de una entrevista con
adulto responsable, entrevista a solas. Por otra parte, también una entrevista, obviamente con el
peritado, y en el caso de ser necesario, como mencionó anteriormente, si es o no posible efectuar
pruebas psicológicas que amerite el caso, eso va caso a caso. Esos elementos son los más
importantes para un proceso metodológico, y que también se ajustan a la normativa técnica del
servicio médico legal.

Informa que para poder realizar esta labor de comparación del testimonio que entrega la
víctima, para cumplir con la metodología, desde un punto específico que tiene que ver con las
variables, se hace justamente a partir de la declaración de Gianfranco versus la declaración que él
otorga al momento de la evaluación pericial.

En cuanto a la develación, metodológicamente hablando, se puede catalogar, ella se da


conforme a la literatura especializada, de una forma incitada , es decir, de que a través de preguntas
de adultos, porque se observaron cambios en las conductas de Gianfranco, en se quiso indagar
respecto de por qué estaba este cambio, de hecho, la madre, en entrevista en primera instancia, le
pregunta a Gianfranco qué es lo que le habría pasado en el jardín, no en la casa de la señora
Marianela, entonces eso también muestra que efectivamente se quería buscar cuál era el motivo del
cambio de esa conducta.

Al ser consultada la perito en qué momento la madre realiza la pregunta qué te pasó en el
jardín, la habría realizado cuando Gianfranco se devuelve con la madre de la casa de la señora
Marianela y van a la casa de ellos.

A las preguntas de la querellante; en cuanto a la declaración que da Gianfranco en la


fiscalía y que estaba en la carpeta investigativa y el relato que le entrega en la entrevista con ella se
efectúa una comparación, en lo cual se compara específicamente que de acuerdo a como en el
lenguaje que lo expresa Gianfranco, hay similitudes en relación a lo dicho, por ejemplo, y como lo
mencionó anteriormente, tiene que ver por ejemplo, con que expresa el lugar en que ocurren los
hechos, señalando en todo momento que estos fueron en la casa de la señora Marianela. El niño,
además, señala dentro de esta consistencia que menciona que habrían existido ocasiones en la zona
de su pene. Si hay consistente en relación a lo que dijo de haber sido tocado en la zona del pene, en
la entrevista que se le hizo en fiscalía se le preguntó también esto mismo, y él dice que estas
tocaciones en la zona del pene fue por encima de la ropa, ella en la entrevista que mantuvo con el
niño le pareció importante aclarar si estas fueron por encima o por debajo, y él en ese sentido,
menciona que fueron por debajo y él hace la aclaración, tal como lo manifestó, gráficamente, con

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sus manos hace el gesto de lo que habría ocurrido en ese momento. La consistencia se explica aun
cuando en un momento dijo que le tocaron el pene de una manera y luego de otra, en ese sentido,
como dijo, se mantiene el tema central, que es el tema de la transgresión que el niño está
mencionando. La diferencia fue en cómo se toma la declaración en ese sentido. Por eso ella insiste
en que quiso especificar porque pasa justamente que hay niños que hay que especificar, por eso le
pregunta si fue por encima o por debajo de la ropa, y posteriormente le pregunta si fue por encima o
por debajo de la ropa interior, porque para ellos las preguntas tienen que ser muy concretas y
específicas, entonces, por lo menos desde ese sentido, existe una consistencia porque él hace
alusión de que la persona que él mencionó reiteradamente, hizo una transgresión que él también la
considera mala. Por eso terminaste siendo consistente.

Efectivamente el informe le fue solicitado el 22 de diciembre de 2017 denuncia fue


aproximadamente el 4 de noviembre de 2017, la evaluación la hizo el 4 de enero de 2019,
claramente pasó más de un año. Expresa que dentro de lo posible se espera que la evaluación se
haga lo más pronto posible para efectuar el peritaje. Ahora frente al tiempo transcurrido puede
ocurrir que se entreguen menos detalles, en el en este caso, Gianfranco mantuvo temas centrales
importantes y relevantes para la causa. Por lo que yo en este caso no pude ver que existiera una gran
relevancia en relación al tiempo transcurrido, en este caso específicamente. 1:05

En cuanto a la extensión del relato, como lo mencionó anteriormente Gianfranco da un


relato que no fue extenso, sino más bien breve, donde especifica elementos muy concretos, que dan
cuenta justamente de elementos que también cuando se comparan con las declaraciones anteriores,
también son breves y eso responde mucho a la etapa del desarrollo en la cual se encontraba en este
momento, donde claramente uno lo puede ver en expertos, en literatura especializada, por ejemplo,
que señala que los niños, a ciertas edades claramente dan relatos más breves, y de acuerdo a lo que
pudo observar en el Gianfranco, así se dio.

Cuando habla de la zona se refiere específicamente al pene, porque el niño dice que es el
pene.

Indica que los participantes que participan en la revisión del informe son peritos de la
unidad infanto juvenil del SML, en esa época eran 10 peritos si mal no recuerda. Un perito experto
revisa el informe, no puso que en el peritaje que hubo observaciones, ya que no se hicieron.

En cuanto a lugar de ocurrencia de los hechos, al efectuar la comparación y dar a conocer la


consistencia del relato, ha sido consistente Gianfranco en mencionar en el transcurso del proceso
mismo y en sus declaraciones que estos hechos ocurrieron en la casa de la señora Marianela, él

32
menciona en una habitación de un hermano, nombra a un hermano llamado Santino recuerda que
allí habría ocurrido que esa persona habría tocado su pene en la forma que lo manifestó
anteriormente.

A las preguntas de la defensa; Indica que para que el menor le entregará el relato no le
ofreció ningún premio, porque estamos en un contexto pericial, es una perito que tiene que trabajar
de forma objetiva y esa no es la forma para que el niño le dé, en un contexto pericial, un relato.

En el caso que se le ofrezca un premio para que dé un relato el menor, se debe especificar
en qué contexto se hace ofrecimiento para poder contestar. Si fuese ella quien ofrece el premio para
que le cuente lo que le pasó, como perito claramente eso sería erróneo ya que no es que un perito le
tenga que ofrecer un premio a un niño por contar lo que le pasó. Insiste, un perito debe ser objetivo
en relación a qué es lo que debe de hacer para obtener información e investigar respecto de un
proceso. Distinto sería si me pregunta si aquello es en un contexto familiar primero tenemos que ver
qué le quiere ofrecer como un premio para poder entender que se debe entender como un premio, ya
que siempre desde la psicología qué es lo que puede entender como un premio es para “ señalar”
reforzar una conducta positiva y no negativa, por ejemplo en un proceso de terapia le dice a los
padres, por ejemplo, si hay un buen comportamiento de este niño, usted puede darle un premio, pero
si él no cumple con los objetivos, ese premio no se da. Por eso es necesario aclarar en qué contexto
se está proponiendo esto del premio.

Añade la perito, si un familiar le dice al menor cuéntame y yo te doy un premio, un regalo,


un juguete más que inducción en los términos que se le pregunta, cuando uno le otorga un premio a
un niño a la edad de Gianfranco , está premiando por una buena conducta, es decir, por ponerlo en
estos términos, porque está diciendo la verdad, no podría premiarlo si está diciendo una mentira
sino que el refuerzo de haber dicho la verdad ante una situación que el adulto que le consulta
conoce lo ocurrido siendo la respuesta del niño verdadera. Ejemplo dime si te lavaste los dientes, la
madre sabe que se los lavó, y el niño responde que sí, entonces es un reforzador positivo y no un
reforzador negativo.

Reiteró que en el contexto de una pericia no se puede otorgar un premio a un niño, tiene que
mantener una objetividad respecto del proceso mismo, no corresponde que un perito hiciera esa
acción.

En el contexto pericial para que el menor relata el evento abusivo un perito no puede hacer
preguntas sugestivas, preguntas aclaratorias sí. Las preguntas aclaratorias son en base a lo dicho por
el niño, niña o adolescente.

33
En relación al relato del menor y en específico si le tocaron o no por encima o por debajo de
la ropa, refiere la perito que fue una aclaración donde la pregunta si lo tocaron por encima o por
debajo de la ropa, no fue una afirmación, sino una aclaración. Lo anterior a partir de que el niño
dice que le tocaron el pene. Insiste en que le parecía necesario aclarar si lo tocaron por encima o por
debajo de la ropa para poder entender y comprender desde la visión de Gianfranco, como él había
vivenciado los hechos.

En cuanto a la valoración de los criterios que mencionó que se estaban presentes, la


valoración de la concurrencia o no de esos criterios, guardan relación al relato abusivo del menor, es
cierto. El análisis de contenido basado en criterios se hace en base al relato del peritado.
Efectivamente para poder determinar si los criterios son válidos no pueden ser obtenidos de una
pregunta sugestiva, de ser así no pueden calificar, pero como lo ha mencionado anteriormente, las
preguntas no fueron subjetivas, sino aclaratorias.

En relación a la pregunta sí le preguntó o no al menor “lo que te pasó con Emilio te puso
triste” (sic), refiere que esta pregunta alude específicamente, en el momento cuando ella comienza a
preguntar respecto de la afectación emocional, entonces no tiene relación con el análisis de los
criterios que hizo anteriormente. Esa pregunta fue hecha así para ver si había alguna afectación
emocional en Gianfranco, no recuerda sí esa pregunta la formuló en los términos que le plantea el
defensor.

Se exhibe peritaje, reconoce que es su peritaje, luego de leer para sí el párrafo destacado, la
perito señala que la pregunta formulada empieza, “consideras tú “que si lo que te pasó con Emilio te
puso triste” la cual no fue una pregunta sugestiva ya que justamente le está preguntando a él su
consideración, distinto habría sido si le hubiese dicho en la pregunta “a ti te afectó lo que te pasó
con Emilio, cierto” (sic) eso hubiese sido una pregunta subjetiva.

En relación con el relato que el menor le entregó del evento abusivo, él no le refirió
tocaciones en el ano, lo mencionado es sólo lo que refirió Gianfranco en el relato. Efectivamente el
menor en su relato cuenta que cuando le sucedió lo ocurrido, le contó a la señora Marianela y que
ella lo habría retado, “no al niño, sino que a Emilio.

En cuanto a la metodología del informe pericial efectivamente existe una revisión de pares,
de “juicio experto”, en efecto el informe solamente está suscrito por ella, justamente en el servicio
médico legal lo hacen de esa manera para que el otro perito no sea también llamado a audiencia en
relación a la cantidad de peritos, tiene que ver más bien con algo administrativo, por eso no aparece
un segundo perito firmando el informe. Efectivamente señaló que no se le hicieron observaciones,

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en el informe no hay un acápite en que se menciona que no se hicieron observaciones. No recuerda
quien hizo en momentos la revisión, han pasado varios años, no podría mencionar a nadie si no lo
recuerda.

A las preguntas del Ministerio Público conforme el artículo 329 del Código Procesal
Penal, indica que el niño en el relato que le entregó no le dijo que le tocaron el ano, pero sí en la
copia de la carpeta investigativa sí estaba en la declaración del menor. Que el niño dijera esto en el
relato que le entrega hubiera sido relevante porque daría más detalles, pero también se entiende que
de acuerdo a la evaluación, lo que recuerda es lo que mencionó.

En cuantos a los requisitos de la pericia al interior del SML para ser remitido luego a la
fiscalía, en el administrativo, se hace el informe, luego la revisión, se ve si hay o no observaciones,
luego se remite al área administrativa donde se hace el formateo y luego lo pasan a firma, y se va a
la oficina de partes para que lo despachen. Le consta que la pericia fue revisada, no recuerda quién
lo hizo, pero con aquello se cumplió.
Respecto a las preguntas que puede formular en su evaluación de testimonio y la pericia de
daño, la diferencia en la forma de formular las preguntas tiene que ver con considerar justamente
como se pasa a una temática distinta, en relación a las preguntas específicamente por eso
mencionaba que en este caso se le consulta a Gianfranco si esta situación le había afectado o no, se
está pasando a una temática distinta que tiene que ver con el ámbito psicoemocional y poder dar
respuesta a lo que se le estaba preguntando. En la evaluación del testimonio las preguntas deben ser
abiertas, que invitan a la narrativa. Y posteriormente se deben realizar preguntas aclaratorias para
ver si se entendió lo que estaba diciendo Gianfranco. En la evaluación de daños se hacen preguntas
que permitan conocer si hay o no daño en relación con los hechos, pueden ser abiertas, aclaratorias.
C.- DOCUMENTAL.

1.- Certificado de Nacimiento de la víctima Gianfranco emitido por el Servicio de Registro Civil e
Identificación.
2.- Informe Emocional Social de fecha 15 de octubre de 2019, emitido por Silvana, Directora de la
Escuela PERSONA_JURIDICA000, el que se refiere a la situación emocional observada en la
víctima durante el año 2017.

D.-Otros Medios de Prueba.

- Set fotográfico compuesto por 7 fotografías que retratan el frontis del domicilio ubicado en
DIRECCION000 comuna de DIRECCION001 y algunas de sus dependencias, exhibido al testigo
Franco Urrutia y doña Escarlet.

35
II.- PRUEBA DE LA DEFENSA

A.- PRUEBA TESTIMONIAL

1.- Marianela, cédula de identidad N° NUM005, quien indica conocer el motivo de su citación.
Conoce a la persona en contra de quien se dirige el juicio.
Informa que “llegó la PDI a la casa porque habían acusado a Emilio de tocaciones con el
niño que yo cuidaba, Gianfranco, pero está segura de que no fue, cuando llegó del furgón se sentó a
almorzar con el niño y contó que, en el colegio, en jardín lo habían tocado, yo no quise preguntarle
más para no ponerlo incómodo porque era chiquito” (sic), cuando lo fue a buscar el papá como las
siete de la tarde le dijeron con Emilio lo había pasado, pero ellos lo interpretaron de mala manera.
Puntualiza que está hablando del niño Gianfranco, no recuerda el apellido, fue hace tanto
tiempo.
Cuando habla de Emilio se refiere al acusado, en ese tiempo vivía en su casa, fue amigo de
su hija, luego pololos, y estuvo un tiempo viviendo en la casa, no sabe cuánto tiempo.
En cuanto a la rutina de Emilio, indica que se levantaba temprano, trabajaba con un yerno
de su marido, salía temprano, luego lo iban a dejar como la 13:00 para almorzar y luego lo iban a
buscar a las 14:00 para ir nuevamente a trabajar, y después lo iban a dejar como la siete de la tarde.
Entre las 13 y 14 se iba a la pieza de atrás donde vivía con su hija, lo llamaba a almorzar porque
almorzaban todos juntos. Ese día recibió al niño y llegó contando que le tocaron en el colegio el
potito. Emilio cuando estaba en la casa se iba a la pieza de atrás donde vivía con su hija, a esa pieza
tenía acceso también su nieto.
En esa época se dedicaba y se dedica a la fecha a cuidar niños en su casa. En aquella época
tenía varios niños, 3 de pañales, eran muchos los niños que había (sic).
Cuando dice el niño llegó del furgón, llegaba del colegio PERSONA_JURIDICA000 en
furgón, ella lo recibía, se refiere a Gianfranco. Siempre llegaba como diez para las dos a las dos, ese
día ella lo recibió, le daba un besito en la cabeza cuando llegaba, le sacaba la mochila de la espalda,
la colgaba en el patio, les decía que se lavaran las manitos y se sentaran a almorzar. Le calentaba la
comida, siempre llevaba comida, y se sentaban a almorzar, llevaba arroz con poroto, comidas raras
como son de Perú y a veces llevaba sopas. Ese día estaban sus nietas en la mesa, son tres nietas que
tiene en la casa, estaba el Emilio, ella le estaba revolviendo la comida al niño cuando conversó que
le habían tocado el potito en el colegio, en ese momento estaban con él Emilio, estaba sentado en la
mesa Emilio, el niño también estaba sentado a la mesa, “ yo estaba sentado al lado del niño” (sic) y
dijo que le tocaron el potito, ella le preguntó “por encima o por abajo”, dijo el niño “ yo me agache
y me tocaron la partecita de atrás de la colita” (sic) “él dijo el potito y yo dije la colita” (sic). Le dijo

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que comiera se le iba a enfriar la comida, no le dijo nada más para no confundirlo. Los demás niños
que estaban en la mesa eran chicos, su marido andaba dándose vueltas en la casa para traer las
ensaladas en ese momento que el niño dijo lo señalado. En la mesa estaban los niños, Emilio y ella,
después que el niño dijo eso, en el momento que escucharon se miraron con Emilio y después le
dijo a Emilio que le iba a decir al papá cuando llegara.
Agrega que, efectivamente cuando llegó el papá como las 6:30 a 7:00 de la tarde y le contó,
llegó sólo a buscar al niño, se acercó a la puerta, Emilio ya había llegado del trabajo y le dijo
digámosle los dos y ahí le conversaron. Ella le cuenta y después Emilio le dijo lo mismo que le dijo
ella. “Yo le dije al papa que el niño había contado que le había agarrado el potito en el jardín” (sic)
Emilio le dijo casi lo mismo que ella al papá. El papá le preguntó al niño en su presencia,
“estábamos ahí yo le estaba entregando al niño, el caballero los quedó mirando, no dijo nada, solo
que iba a conversar con su señora, tomó al niño y se fueron” (sic), no hablaron de otra
circunstancia.
Expresa que ese día el niño se portó como todos los días, él era muy tranquilo, se iba a jugar
play con su nieto.
Después que conversó con el papá del niño, al otro día le fueron a dejar al niño normal, ahí
habló con la señora y le dijo lo mismo que le dijo al papá de lo que había dicho el niño.
Se mantuvo como una semana más al cuidado del niño hasta que la mamá le dijo que iba a
llegar su mamá de Perú a cuidar al niño.
No recuerda qué día de semana era cuando le contó al papá lo que dijo el niño, era como
mitad de semana, no recuerda año. Sí recuerda que esto fue mucho antes de la pandemia. 26:31
Cuando dice que a su casa llega la PDI, no recuerda cuándo fue, no sabe cuánto tiempo
después de lo que dice el niño, su marido los hizo pasar, les pidieron los datos, le tomaron una
declaración esa vez. Le pidieron los datos personales, le dijeron lo que estaba pasando sobre el niño,
a ella le dio pena se puso a llorar lleva más de 40 años cuidando niños nunca le había pasado una
cosa así, no recuerda más tiene como bloqueado eso. Se puso a llorar porque se asustó nunca había
pasado por una cosa así, le dijeron que había habido un abuso, le dijeron que se quedara tranquila
que no llorara. En ese momento no le dijeron quién había sido el afectado del abuso, después supo.
Tampoco le dijeron quién había cometido ese abuso. A los años supo lo demás, cuando le llegó una
citación, pensó que esto había quedado ahí. No recuerda cuando se enteró que estaban acusando a
Emilio de una situación de abuso.
Puntualiza que el niño cuando dijo que lo habían tocado, dijo que fue en el jardín, no dijo en
qué dependencia, es era chiquito apenas saben hablar, no dijo quien lo tocó, ni si era un adulto o no.

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A las preguntas de la fiscal; indica que tiene 3 hijos, Enrique, Mila y Dana. Mila y Dana
vivían con ella cuando cuidaba a Gianfranco, Mila tenía dos hijos Christian y Mirko, de 29 y 14
años en la actualidad, las hijas de Dana Matilde y Pascuala de 14 y 12 años.
Informa que Gianfranco jugaba con Mirko, después que almorzaban se iban a la pieza a
jugar un ratito, a la pieza de Mirko, jugaban play. Sus nietos en ese tiempo iban al colegio, Matilde
iba en la mañana, salía a la 13 o a las 13;45 a veces, Pascuala iba en la tarde, entraba a las 14 y salía
a las 19 horas las dos iban en el mismo colegio PERSONA_JURIDICA001; Mirko estaba en el
mismo colegio, iba en la mañana con Matilde. Ella los iba a dejar y a buscar al colegio. En ese
tiempo su hija Mila trabajaba en la casa, tiene un taller de costura en la casa, Dana trabaja en una
oficina de contabilidad.
Informa al describir su casa que al abrir la puerta de entrada hay un pasillo a los costados a
la entrada está su dormitorio al frente el de su nieto mayor, luego el de sus nietas al frente living
comedor, luego puerta del patio cocina baño y taller de su hija y al costado el departamento de Mila
que es un dormitorio grande con un baño. Christian vivía con ella en esa época, dormía en el
dormitorio que está al frente al suyo, Mirko dormía con Mila antes que viviera con Emilio, luego
dormía con su hermano Christian.
No recuerda cuánto tiempo cuidó a Gianfranco en su casa. La madre llegó por una
recomendación, la recomendaron y llegó a su casa. En ese tiempo cuidaba a Melanie, el hermanito
de la Melanie, Alfredo, Valeria, Angélica, más de alguno se le queda en le en el tintero eran más de
8. No iban todos en el mismo jardín, Alfredo y el hermano de la Vichy eran de pañal, no iban al
jardín. Melanie iba en el mismo jardín que Gianfranco, también recuerda a Santino del mismo
jardín.
Afirma que la niña Melanie dejó de ir a su casa para que la cuidara porque la mamá
trabajaba en el metro y se quedó sin trabajo.
Cuando habló con la mamá de Gianfranco no le dijo que fuera a inventar un cahuín como la
mamá de Vichy.
La PDI fue a su casa, era de sexo femenino, era una mujer policía, no le autorizó que sacara
fotos de su casa, no recuerda que hayan sacado fotos.
Indica que la comida que comía Gianfranco la mandaban los papás, todo lo mandaban los
papas. Gianfranco llegaba entre 13:50 y 14:00 a su casa. En la hora de colación que Emilio estaba
en la casa además de almorzar se quedaban conversando en la mesa y luego se iba.
Regularmente almorzaban todos los que menciona, era según la hora de llegada de los
niños.
Dice que lo que ha contado hoy, no lo contó antes la policía, tampoco en la fiscalía.

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Hasta antes que ocurriera esta situación particular, nunca había tenido un problema con el
niño ni con los padres.
Cuenta que el niño en la casa se ponía a jugar, se resbalaban en el pasillo, le gustaba, se
ponía a mirar los peces de una pecera grande y jugaba con los demás niños.
El día en que se entera de esta situación estaba revolviendo la comida, al lado del niño en la
mesa, se la estaba enfriando. Además de Gianfranco estaba Emilio y ella, tenía al hermano de
Melanie en una sillita, no recuerda cuántos niños más estaban.
Después que el niño hace el comentario se puso a jugar normalmente. No recuerda a qué
hora lo pasaron a buscar, Gianfranco estaba hasta como las siete en su casa o un poco más, a veces
la llamaban los papas y le decían que iban atrasados, a Gianfranco lo iba a buscar el papá y a veces
la mamá con su hermanito chico. Ese día fue el papá a buscar a Gianfranco y le contó lo que le dijo
el niño en la puerta de la calle, el niño estaba atrás de ella y Emilio también estaba en la puerta de la
calle cuando ella le contó al papá.
Indica que en la casa no se le enseñaban garabatos al niño. Ese día no le preguntó el papá
por los garabatos. Ese día el papá fue solo una vez a la casa, cuando fue a buscar al niño.
No sabe quién le pidió que viniera a declarar, le llegó la citación, el abogado de
Emilio le dijo que viniera hoy.
No sabe cuánto duró la relación entre su hija y Emilio, no tienen hijos, hoy no hay
relación con Emilio de ella ni de su hija.
Informa que en toda su casa ejercía la labor de cuidado de los niños, andaban por
todos lados de la casa, en el patio tenía una salita para jugar donde hay columpios y cama elástica,
ahí los llevaba un ratito a jugar.
Además de Mirko y Gianfranco, Rafael otro niño que cuidaba, también jugaba play, su
marido no jugaba play.
A las preguntas de la abogada querellante; dice que ninguno de los niños almorzaba en
el colegio. A los más chicos que cuidaba los iban a dejar a su casa en furgón y a los más grandecitos
los iba a buscar al colegio.
Informa que Gianfranco era muy tranquilo, era muy para adentro, hablaba poco. Cuando
jugaba play con los niños hablaba más. Con los adultos no hablaba.
No recuerda cuántas veces le tocó almorzar al niño, Emilio y ella, fue más de una vez, más
de 5 veces, se juntaban a almorzar seguido.
No recuerda cuánto tiempo cuido al niño, sí más de un mes. Cree que almorzaba Emilio 1 o
2 veces por semana, a veces no coincidían los horarios.

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Dice que se enteró de un abuso cuando le fueron dejar una citación, “la citaban a los
tribunales de aquí”, no recuerda hace cuánto tiempo le llegó la citación, después vino lo de la
pandemia, se entera que tiene que venir al juicio ya que después le llegó otra citación. Con la
citación se entera que había habido un abuso, no recuerda si con la citación se entera quién era la
víctima. A su hija también le llegó una citación, conversaron respecto a la citación, conversaron del
tema que está pasando ahora, no recuerda qué conversaron, fue hace tanto tiempo.
Efectivamente cuidó a Melanie, tenía entre 3 a 4 años, la niña dejó de ir a su casa porque la
mamá trabaja en el metro y quedó sin trabajo, después nunca más la volvió llevar a su casa, el papá
de sus hijos no quiso que siguiera trabajando, la mamá dejó de trabajar para cuidar a los niños, no
los vio más, vendieron el terreno en que vivían, no sabe dónde se fueron.
Dice que no se enteró que la madre Melanie había inventado un cahuín de que algo había
pasado en su casa.
A las preguntas del Tribunal; indica que el hermanito de la niña Melanie estaba a la mesa
en una silla de guagua cuando Gianfranco contó lo que le pasó en el colegio, Melanie estaba en el
baño en ese momento si mal no recuerda.
Cuando dice que la madre de Melanie dejó de mandar a los niños porque quedó sin trabajo
en el Metro, después de eso solo los mantuvo como 1 mes más ya que tenía que hacer muchas
diligencias, eso fue después que Gianfranco contó lo que le había pasado en el jardín.
Explica que el niño, Gianfranco, dijo que le tocaron el potito, él hablaba poquito y era para
adentro, quiere decir que no hablaba muy bien, muy claro, y era como para adentro, en ese día
estaba jugaba con las manitos, estaba como nervioso y comenzó a contar.
A las preguntas de la defensa conforme el artículo 329 del Código Procesal Penal;
indica al dar cuenta de la rutina de su hija Mila en aquella época cuando cuidaba a Gianfranco, dice
que su hija “hacía de furgón iba a dejar a otros niños a otro colegio más lejos que yo no alcanzaba a
ir a dejarlos” (sic)ella tiene su taller de costura, después se ponía a coser un rato y luego cocinaba,
almorzaban y salía a recoger a los niños más grandes que cuidaban, todavía tiene la misma rutina.
A una nueva pregunta del Ministerio Público; indica que el niño comía solito. El día que
comenta lo ocurrido estaba comiendo solito, estaba a su lado, ella le calentó la comida, se la estaba
enfriando cuando él le contó.
2.- Mila, cédula de identidad N° NUM006, conoce el motivo de su citación, le llegó una orden, una
citación. Sabe de qué trata este juicio, se enteró cuando llegó PDI a la casa sobre caso de posibles
tocaciones a un niño, a Gianfranco, al cual cuidaba en ese tiempo su mamá, lo cual involucraba a
Emilio.

40
Explica que Emilio en ese tiempo era su pareja, vivía con ella. No recuerda cuánto tiempo
fueron pareja y vivieron juntos. Comenzaron relación en diciembre de 2016 y se fue a vivir con ella
en marzo de 2017, no recuerda cuándo se fue de la casa.
No recuerda la fecha exacta cuando llegó la PDI. Estaba en su casa, su mamá abrió la puerta
y llamó diciendo que buscaban a Emilio, y la entrevistaron a ella y a su mamá para darles
información de una acusación. En ese momento Emilio vivía con ella. Una comisaría llegó a
conversar con ellas, les preguntó sus datos, no recuerda si escribió algo, iban a entrevistar a su papá,
pero es adulto mayor, no lo entrevistaron. Andaban con una carpeta. No recuerda si le mostraron el
contenido de la carpeta. Añade que, la comisaría dijo que había una acusación en contra de Emilio
por una posible tocación, nombraron que el niño era Gianfranco. No recuerda si les dijeron en qué
circunstancias habría ocurrido aquello o en qué fecha. Expresa que con su mamá quedaron
asombradas, había muchos niños cuya mamá cuidaba su mamá, ella le ayudaba a cuidarlos, y
siempre que llegaba Emilio jugaba con él a la pelota, a la escondida, a bailar. Cuando dice él se
refiere a Emilio. Esto era cuando llegaba a la colación, almorzaba, y mientras esperaba que lo
fueran a buscar para llevarlo al trabajo.
No recuerda muy bien la conversación con PDI.
Añade que después esta situación que les comentó PDI, la conversó con su mamá,
realmente le sorprendía su madre siempre cuidaba niños, vivían con ellas sus sobrinas y sus hijos,
durante estuvo Emilio en la casa nunca hubo una situación incómoda para ellos. Pensaban que podía
ser del colegio la situación del niño Gianfranco, había mamás que decían que tenían problemas con
el fonoaudiólogo del colegio, pero no llegó a demandar nada de eso.
Precisa que cuando el niño le comentó a su mamá y a Emilio lo que le ocurrió, estaban
sentados en la mesa almorzando ella andaba dejando niños en el colegio y cuando llegó de ir a dejar
a los niños, su mamá y Emilio le comentaron sobre lo que había dicho el niño, cuando llegó el niño
estaba sentado en la mesa, pero luego se paró y se fue a jugar con los otros niños. Ella había ido a
dejar niños al colegio, eso fue el día en que Gianfranco les comentó que en el colegio le habían
tocado su potito, eso le comentó su mamá, incluso ella había ido a dejar a una compañera de
Gianfranco en ese colegio también. No recuerda el día ni el año en que Gianfranco contó eso. Si
recuerda que había ido a dejar a una niña al colegio.
Puntualiza que ese día llegó a la casa a las 14:30 horas, cuando llegó a la casa estaban
sentados en el comedor, se sirve almuerzo y al sentarse le comentaron lo que Gianfranco había
dicho, eso se lo comentó Emilio y su mamá, que el niño les había dicho que en el colegio le habían
tocado su potito. Terminó a almorzar, Emilio se fue a lavar los dientes lo pasaron a buscar para ir al
trabajo y ella se fue a trabajar a su taller de costura que tiene en la casa, no quiso preguntarle nada al

41
niño para no causarle una molestia, su mamá le dijo que ella le contaría a los padres, supo que le
contó al papá en la tarde al momento de entregar al niño Gianfranco al papá, ellos, su mamá y
Gianfranco hablaron con el papá, su mamá le dijo que le señaló al papá que tuviera cuidado con el
colegio ya que el niño había llegado diciendo que le tocaron su potito en el colegio, no supo la
reacción del papá.
A las preguntas de la fiscal; en esa época vivía, papá, mamá, Emilio, ella, su comadre
Melanie, su hijo viviente, que vivía atrás con su marido, su hermana Dana, sus sobrinas.
Precisa que vivía en una pieza atrás la comadre, en ese lugar hay dos dormitorios, la de ella
y la de su comadre.
Dice que tiene dos hijos Mirko, en ese tiempo tenía nueve años, y Christian que ahora tiene
29.
Al describir su casa, indica que entrando a mano izquierdo la habitación de sus padres, a
mano derecha la habitación de su hijo mayor, están frente a frente, a continuación, la habitación de
su hermana y dos sobrinas al frente living comedor, al pasar una puerta especie de mampara a mano
derecha la cocina, el baño, terraza y luego su taller de confección al frente su dormitorio y el de su
comadre Valentina y Máximo, que tiene hijo a Santino que ahora tiene 14.
No recuerda cuánto tiempo Gianfranco fue cuidado por su mamá en la casa.
Recuerda una niña de nombre Melanie que su mamá cuidaba, no recuerda cuánto tiempo la
cuido, puede ser un año, también cuidaba a su hermano chico, era un bebe de pañales.
Informa que su hijo menor iba en la mañana al colegio de 8 a 13:45; sus sobrinas la más
pequeña iba en la tarde y la mayor en la mañana de 8 a 13:45. Su madre cuidaba a Gianfranco y
otros niños, eran muchos, como 6 fuera de sus sobrinos, eran 3 bebés de pañales y más 4 contando a
Melanie. Puede ser que su mamá cuido a Gianfranco más de 6 meses.
Describe que Gianfranco era un niño muy introvertido, no jugaba mucho con los demás
niños, era callado. El niño llegaba a la casa en furgón, salía a las 14 horas del colegio, llegaba a las
14:15, estaba cerca. Cuando llegaba se ponía a jugar con los otros niños, le gustaba jugar con su
hijo menor que tenía un play, jugaban en su dormitorio que era el que quedaba atrás, también
jugaba Santino, Matilde, los que estaban en la tarde.
La pecera se ubica en el living comedor de su casa.
La rutina de Gianfranco al llegar a la casa era ir a jugar play casi todo el día, cuando se
aburría jugaba a la pelota con Santino que era el niño más sociable de todos a esa época tenía 9
años, solo eso hacía.
En la tarde el papá iba a buscar al niño. No recuerda si alguna vez lo retiró la mamá, su
madre era la encargada de entregar a sus niños.

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Antes del día en que Gianfranco hizo el comentario, no tuvo problema con su mamá o con
otro niño, tampoco con él o con Emilio u otro integrante de las personas que vivían en su casa. No
recuerda si el niño almorzaba en la casa, sabe que la mamá le mandaba colaciones, frutas, yogurt, se
las comía en la tarde como las 16 o 17 horas. No escuchó que Gianfranco dijera garabatos, no supo
si decía garabatos.
Dice que los otros niños también estaban en el patio o en su taller mientras ella trabajaba o
en la pieza jugando play con su hijo.
Explica que el día que Gianfranco cuenta la situación, no vio a la persona que fue a buscar
al niño. Después su mamá le dijo que le dijo al papá que tuvieran cuidado en el colegio porque el
niño dijo que le habían tocado su potito, su mamá le comentó que solo fue el papá de Gianfranco a
la casa ese día, el papá sólo fue a buscarlo. No sabe si su mamá habló con la madre de Gianfranco
sobre lo que el niño contó.
Reitera que por la PDI se enteró de esta situación, no recuerda cuando fueron a su casa, no
recuerda cuántos funcionarios fueron, solo recuerda que habló con la comisaría, la que también
habló con su mamá y con Emilio. No se dio cuenta si sacaron fotos de su domicilio ese día. Por el
papel que le llega se entera que tiene que declarar, no recuerda fecha en que le llegó. Dice que sólo
ella y su mamá están citadas al juicio, solo hablaron con el abogado defensor diciéndole que tenía
que venir hoy, hablaron por celular, se imagina que obtuvo su número porque se lo dio a PDI.
Cuando se enteran de que eran testigos del juicio, habló con su mamá que era difícil
acordarse de las fechas exactas por tanto tiempo que ha pasado, cuando el niño habló, cuando fue
PDI, y decir lo que cada una sabía, conversaron de lo que cada una se acordaba.
A las preguntas de la querellante; indica en relación con el día en que niño cuenta, su
papá estaba en la casa, no recuerda dónde estaba, su papá almorzaba en el comedor con ellos, con
todos. Almorzaba a las 14 o 13; 45 dependía de la hora en que ella iba a dejar a los niños. Había
solo una mesa para almorzar. Ese día cuando salió estaba su mamá y Emilio almorzando y parece
que su papá está atrás en el patio, sus hijos en el colegio todavía, sobrina chica almorzando y la
mayor en el colegio, Gianfranco todavía no llegaba. Gianfranco solo llevaba colaciones consistentes
de fruta y yogurt.
Dice que se entera de esto por la PDI, no recuerda bien quienes estaban cuando llegaron,
papá, mamá, Emilio y los niños, no recuerda hora en que llegaron los PDI, dijo que a la comisaría
contó lo que sabía, que se asombraron ya que Emilio nunca estaba solo con los niños, después la
comisaría llamó a su mamá y ella se retiró, esto fue en el comedor. Entregó sus datos personales,
nombre, teléfono, no recuerda si firmó algo. La señora de la PDI le comentó sobre la acusación en
contra de Emilio y ella le dijo que era extraño ya que Emilio nunca quedaba solo con los niños, fue

43
como todo lo que le dijo. Le pidieron sus datos y teléfono, entregó el número de la casa y no
recuerda si el de celular también.
Expone que ayer habló con el abogado para que viniera hoy, el miércoles cuando vino al
tribunal le dijeron que la contactaría el defensor para ver otra citación, la contactó a su celular el
defensor.
A la pregunta aclaratoria del Tribunal; indica que el niño Santino con el cual jugaba a la
pelota Gianfranco cuando se aburría de jugar play era el hijo de su comadre.
A la pregunta de la defensa conforme el artículo 329 del Código Procesal Penal, indica
que no recuerda si el niño almorzaba en la casa
Cuando llegó el niño se paró de la mesa, no recuerda qué estaba haciendo en esa oportunidad.
A una nueva pregunta de la fiscal; no recuerda si a la comisaría le contó más cosas como
las relata hoy. Dice que no ha ido nunca a la fiscalía.
A una nueva pregunta de la querellante; dice que no recuerda si se acogió a guardar
silencio con la funcionaria de la PDI.
Se lleva a efecto ejercicio del artículo 332 del Código Procesal Penal, para refrescar
memoria con declaración prestada ante carabineros de la 35° comisaría con 23 de febrero de 2018,
reconoce su firma. Da lectura para sí al párrafo destacado, indicando que en la oportunidad que
conversó con la funcionaria dijo que no iba a declarar y que iba a guardar silencio ya que si firmó
ese documento es por qué sí.
No recuerda si dio su número celular.
Mismo ejercicio del artículo 332 del Código Procesal Penal, luego de dar lectura al párrafo
destacado, dice que no otorgó su número de celular.
B.- PRUEBA PERICIAL.

Leonardo Mauricio Zúñiga Ogueta, cédula de identidad N° 12.263.690-9, Psicólogo, Perito


Forense, con domicilio en Curauma norte N° 807, quinta región, Valparaíso. El perito depondrá
sobre Informe Pericial psicológico, credibilidad del relato y daño de la víctima y sus conclusiones.
Indica que por requerimiento de la Defensoría Penal Pública por la unidad de estudio se le
designa como perito para realizar análisis técnico a los objetivos, metodología y resultados del
informe pericial de credibilidad de relato y daño emocional realizado por la ex perito del SML
psicóloga Romy Espinoza en la persona del niño Gianfranco
Para dar cumplimiento al requerimiento que se conoce como metapericia se utilizó la
metodología de metaanálisis, científicamente válida la cual permite hacer una comparación técnica
entre el procedimiento realizado por la perita y el estándar científicamente válido a nivel nacional
como internacional en relación al requerimiento pericial. Siendo de vital importancia que el

44
estándar de comparación sea conocido por la perito y segundo vinculante al trabajo de la perito del
SML. Solo se utilizó como estándar de comparación los documentos oficiales de la fiscalía nacional
en cuanto al análisis de relato y a la evaluación de daño. También se consideró como estándar de
resolución, la guía normativa técnico pericial la guía 856 del SML, criterios daubert contenido en el
estudio nacional de peritajes en Chile, ordenado por la Corte Suprema, además de estar publicado y
ser material de formación de los sentenciadores en la academia judicial.
Se analizó las piezas de la carpeta investigativos referidos por la perito del SML en el
informe, no se pudo acceder por no estar contenido en copia de carpeta investigativa al
consentimiento informado firmado ni a ningún tipo de pruebas psicométrica ya que la perito no
aplicó, se accedió a registro de grabación de la entrevista pericial, que tuvo una duración de 6
minutos.
En cuanto al análisis de los objetivos periciales del informe del SML estos son
absolutamente pertinentes y parsimoniosos dado que se pide solo credibilidad de relato y daño
emocional, era pertinente a la fecha dada la edad del niño, en ese momento tenía 6 años. Sin
embargo, es dable señalar que la evaluación de daño emocional no corresponde al ámbito forense,
sino que es un procedimiento de naturaleza clínica que tiene por objetivo el tratamiento, lo que al
asociarlo o mezclarlo con el análisis de relato, genera lo que se denomina conflicto epistemológico,
son enfoques distintos de la psicología, que no se relacionan entre sí.
Es decir, el conflicto que se genera en estos dos objetivos es un choque de naturaleza
epistemológica y metodológica, por una parte, credibilidad del relato como un procedimiento
absolutamente forense con normas de control de sesgo y sobre todo de manipulación, con la
evaluación de daño que es del ámbito clínico, y que no tiene hipótesis de control alguna, no se
puede controlar la manipulación en el daño.
En cuanto a la metodología la perito da cuenta de la utilización del SVA como metodología
de análisis de relato, lo cual es una elección adecuada dado que dicha metodología es válida en
nuestro país, sin embargo para que esa validez pueda ser reconocida es necesario aplicar el
procedimiento de forma correcta, la perito hacía referencia a entrevistas, con lo cual observamos el
primer error metodológico resuelto a la fecha a través de la ley 21.057, es decir, qué técnica de
entrevista ya está zanjada, es el protocolo de Nichd, que no se observa en el entrevista de la perito
del SML. Tampoco hace referencia al uso de instrumento psicométrico, primero, para poder evaluar
la real capacidad del niño en dos momentos, el primero específicamente, a la fecha de ocurrencia de
los hechos investigados y la segunda al momento de la realización de la pericia. Tampoco aplicó
ningún instrumento para poder determinar el daño emocional.

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En cuanto a los resultados, es dable indicar que la perito al analizar el relato ella plantea en
su informe, que es en extremo breve, duró tan solo 6 minutos, refiere que al utilizar el CBCA,
análisis de contenido basado en criterios, solo refiere o nombra 8 criterios, siendo esa práctica de la
perito algo habitual ya aquella copiaba y pegaba de forma sistemática en distintos informes
periciales ( que tuvo a la vista en otros casos), los mismos criterios, de la misma forma, de hecho, el
cuestionamiento no es solo que no es la forma no correcta, cortar y pega, sino que también,
nombrar solamente los criterios, hay que nombrarlos, explicarlos y justificarlos, ello se refleja en el
mismo requerimiento de la fiscalía, que le pide al SML que la perito explique que justifique dichos
criterios, respondiendo SML que ya no es funcionario, pero fiscalía la contacta y aquella emite una
explicación o justificación de los criterios. Sin embargo, el problema técnico es que la perito sólo da
cuenta de 8 criterios y el mínimo técnico son de 13, lo que se traduce inmediatamente en que el
relato es indeterminado, no se puede analizar dado su baja calidad, sin embargo, la perito analiza
utilizando el listado de validez, siendo absoluta o metodológicamente irracional, ya que el listado de
validez se sustenta en base al relato, y si el relato es indeterminado, obviamente no se puede
contrastar. Observamos que el razonamiento de la perito es delito tautológico, es decir, explica a
partir de que el relato es válido o creíble, sin embargo, lo más llamativo es lo que no aparece en el
informe que son específicamente inconsistencias evidentes, por ejemplo, el niño en su declaración
en fiscalía indica que el imputado le habría tocado el pene por debajo de la ropa, a la perito le indica
por sobre la ropa, la madre del niño en instancia de reparación le dice a la psicóloga que el niño le
dijo que el imputado le habría tocado el pene y el ano, lo cual no se consigna en el informe, lo que
evidencia sesgo confirmatorio.
En cuanto al daño se basó solo en auto reporte dada inexplicable ausencia de pruebas
psicométricas.
En cuanto a los autos reportes, estos están contraindicados en el documento
interinstitucional de fiscalía nacional, es obvio que la evaluación no se puede basar solo en la
narrativa del niño peritado y de su madre, debiendo contrastarse con elementos científicamente
válidos como pruebas psicométricas.
En cuanto a las conclusiones finales de su metapericia, en primer lugar, el procedimiento,
no cuenta con los criterios mínimos de cientificidad, la entrevista no corresponde a los protocolos
válidos para la aplicación de SVA, la perito copiaba y pegaba el análisis de CBCA. sin argumentar,
aun así, tan solo identifica 8 criterios lo cual hace que el relato sea indeterminado, siguiendo las
mismas instrucciones del requirente, es decir, de la fiscalía nacional, donde también formó parte el
SML. En cuanto al daño, no existe un conjunto de operaciones científicamente válidas más allá de

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la percepción de la perito, del auto reporte, para determinar que exista daño y que este incluso
pueda ser asociado a los hechos materia de investigación.
A las preguntas de la defensa; indica ser psicólogo universidad de Valparaíso, con grados
de maestrías en materias penales y de familia, además de diplomados, antecedentes curriculares de
los cuales quedó constancia en la pista de audio respectiva.
En lo que respecta a su experiencia en pericias de metaanálisis tanto a nivel nacional como
internacional, ha sido en establecer metodología para las metas pericias, específicamente las de
metaanálisis, a la fecha ha realizado más de 500 meta pericias a nivel de todo chile. Y en el ámbito
de metaanálisis al sistema de CAVAS, DAM, que realizan peritos adjuntos y privados.
Para realizar el análisis de la metodología aplicada utiliza la normativa del SML, siendo
esas pautas el documento institucional de análisis de relato de la fiscalía nacional del 2019, donde
formó parte el SML, donde se determinan los lineamientos técnicos para el análisis técnico de
relato, incluso se adicionó el CAVAS Inscrim; también un documento institucional de 2010 donde
también formó parte el SML donde se generan los lineamientos técnicos para la evolución de daño.
Y el tercer documento, es la resolución específica es la resolución 856 del SML guía normativa
técnico pericial que regula el trabajo pericial en Chile del año 2018, creo que la cambiaron hace
poco. El resto son pie de página, pero no son vinculantes al trabajo de la perito.
Exhibe peritaje para refrescar memoria en cuanto a otra pauta que se tomó en
consideración, exhibiendo el metaanálisis realizado. Da lectura a párrafo destacado para sí.
Responde que al leer el metaanálisis consigna también como pauta metodológica, la GEV
guía de evaluación de víctimas, que técnicamente indica que no tiene el nivel de vinculación de las
otras tres ya mencionadas, por eso no se acordaba, es del año 2015. La perito no hizo referencia a la
GEV si tiene elementos interesantes en relación a la entrevista. Esa guía de entrevista existía al
momento en que se realizó la pericia analizada. Explica que la GEV tenía como objetivo principal
direccionar o entregar herramientas técnicas a los fiscales para realizar la entrevista que ya no
existe, sin embargo, hay muchos peritos que usan la GEV como técnica de entrevista.
En cuanto a los objetivos del peritaje analizado, eran de credibilidad de relato y de daño
emocional. Las observaciones que plantea en cuanto a que se hagan en una misma pericia, es que
tiene un error epistemológico, es decir, son enfoques de la psicología como ciencia que son
contradictorios entre sí, no se pueden mezclar por puntos de naturaleza técnica, uno es clínico y el
otro forense, y en tal sentido la diferencia radica en que el elemento central para un juicio, es que la
psicología clínica parte de la base de la ocurrencia del hecho traumático, el modelo establece que
hay daño porque ocurrió un hecho traumático y ese es una vulneración sexual. En el ámbito de la
psicología forense se trabaja desde el “falsacionismo” eso quiere decir que para controlar el sesgo

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confirmatoria los hechos son materia de evaluación, la persona peritada, es una persona peritada no
existe la víctima y el autor, existe el peritado el peritado y existen hechos que son materia de
investigación.
En cuanto a mecanismo de control de sesgo confirmatorio cuando un perito realiza en un
mismo informe de credibilidad y daño, indica que no existe mecanismo de control para el sesgo
confirmatorio desde el enfoque clínico, incluso no existe peritado, existe paciente con el cual yo
establezco una relación de confianza y ella se sustenta en el secreto profesional, por lo tanto, es
absolutamente imposible realizar un procedimiento que controle el sesgo confirmatorio, por lo tanto
se da esta situación. Adicionalmente a ello la no presencia de daño no excluye la ocurrencia del
hecho, lo que da un razonamiento no objetivo, es sesgado. Si hay un indicador de daño se asocia al
hecho materia de investigación y si no lo hay no se descarta el hecho materia de investigación, sino
que se indica que ocurrió, pero con mecanismos complejos como la disociación, no se expresa ese
síntoma, por eso es un procedimiento que es sesgado.
Refiere que la ausencia de confirmación del sesgo confirmatorio es un tema tratado, está
relacionado en un razonamiento tautológico, es decir que si existe daño existe el hecho y se existe el
hecho existe el daño, y así uno observa los razonamientos o las fundamentaciones que hacen los
peritos en su informe, por ejemplo en este caso se plantea en el listado de validez donde se valida
porque el relato es creíble entonces el sesgo de indicadores de daño, genera este razonamiento
tautológico absoluto descontrol de la hipótesis alternativa .
En cuanto a los criterios, refiere que la metodología en general en Chile son 13 puntos, en el
extranjero 14 a 15, establece una media, incluso hay sistemas que son más complejos que
determinan que deben estar presentes ciertos para determinar la calidad, no que el relato sea creíble
o no, sino que la calidad del relato. Los 13 criterios son la cantidad de criterios a nivel nacional para
que el relato cuente con el mínimo de criterios para ser analizable, de lo contrario tenemos un
problema lógico que un relato podría tener dos criterios y terminar siendo creíble lo cual no es error
de la metodología, sino que sesgo confirmatorio, o desconocimiento del procedimiento, por eso que
hay un mínimo.
Los criterios del CBCA son 19 de los cuales debemos tener a lo menos a los menos 13 (a
nivel internacional 14 a 15 ) para dar como establecida la calidad mínima para poder ser analizable
un testimonio, aquí muchas veces se confunde que el mínimo es para que el relato sea creíble, pero
no, el resultado que el relato sea creíble o no se basa en el SVA completo, los 13 criterios es el
mínimo para poder establecer que el relato tiene calidad suficiente para ser analizable y eso
corresponde a la categoría de relato indeterminado, de 13 para abajo.

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Explica que el SVA contiene la técnica estandarizada de entrevista que a la fecha sabemos
que es el protocolo de Nichd. El CBCA es para analizar el contenido y determinar la calidad de este,
después se analizan los 11 criterios del listado de validez, y todo esto finalmente se analiza
nuevamente con las hipótesis alternativas, ese es el SVA.
Para efectuar el análisis de la validez debe haber una determinación de calidad mínima,
primero debe tener una técnica de entrevista validada, segundo un mínimo de criterios que son 13 y
de ahí pasamos al listado de validez y después finalmente todo eso lo analizamos con la hipótesis
alternativa.
Indica que la grabación duró 6 minutos y ahí se hace alusión al cuerpo de la entrevista, sólo
a los hechos materia de investigación. Dice que escuchó la grabación, corresponde plenamente a la
transcripción que la perito hace en su informe pericial.
Esa grabación no se adjunta al informe policial, esto fue anterior a la promulgación de la ley
21.057, pero tuvo acceso a través del defensor. Lo relativo al evento abusivo es lo que dura 6
minutos, eso es lo que se entregó, solo la parte cuando se le indica si sabe lo que viene hablar con la
perito.
En relación a la entrevista el método, como se deben hacer las preguntas, a la fecha resuelto
por la ley 21.057 sobre el uso correcto del protocolo de Nichd, cualquier otra técnica es errada, la
razón es muy sencilla, si uno hace una comparación entre la entrevista de la perito del SML y una
entrevista investigativa videograbada va a observar el direccionamiento que realiza la perito del
SML, paradojalmente limitando el relato. Justamente una de las cosas positivas de la entrevista
investigativa es que amplía a partir de preguntas abiertas, aquí la perito es direccionar con preguntas
de profundización, eso es claramente un direccionamiento, y en segundo lugar limita el lenguaje
sobre todo a un niño pequeño. La metodología la forma correcta es lo que hace la entrevista
investigativa “cuéntame más de lo que me acabas de decir, cuéntame todo lo que me acabas de
contar” y una vez que ya se satura, entonces se le pregunta “tú me dijiste que te habían tocado,
cuéntame todo eso” eso permite una amplitud por eso se mejora el relato, en este caso en particular,
técnicamente, en un porcentaje importante de la narrativa es debido al uso de una técnica de
entrevista no estandarizado. Muchas veces el perito no quiere direccionar, pero pasa al intentar
focalizar rápidamente la pregunta.
Preguntas concretas en que la perito estaba direccionando el relato, en este caso, “cómo te
tocó, qué parte te tocó, si fue por arriba o por debajo” preguntas que no fueron necesariamente de
aclaración, podría haber eso mismo en la narrativa libre si se le hubiera dicho al niño “ cuéntame
todo, desde que partió hasta que terminó”, apareciendo eso en la narrativa del niño y de ahí la perito

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puedo profundizar parafraseando, “cuenta me tú me dijiste esto, cuéntame más acerca de esto que tú
me estás contando” son direccionamientos muy finos, no son tan groseros.
Refiere que la respuesta de una pregunta direccionada, el problema del direccionamiento
apunta al cumplimiento de los criterios. El entrevistador no hace análisis de relato, por lo tanto, no
conoce los criterios, el perito conoce los criterios, puede ir direccionando las preguntas, incluso
preguntas abiertas para el cumplimiento de estos criterios, eso está considerado específicamente en
el listado de validez, donde se tiene que analizar el tipo de entrevista realizada, nunca ha visto que
un perito diga que realizó una entrevista directiva, una entrevista sin alguna técnica válida, son
todas perfectas. El perito puede ir generando la existencia del criterio a través de una pregunta
direccionada.
Cuando se realiza una pregunta direccionada, obtiene una respuesta de esa pregunta
direccionada y esa respuesta la considera adscrita a la existencia de un criterio, en dicho caso está
absolutamente errado porque se requiere la utilización de una entrevista estandarizada que no
permita justamente aquello.
Al hablar de inconsistencias evidentes, deja en claro que las ejemplifica en relación con lo
que dijo la madre en fiscalía y aquello que le dijo a la psicóloga diciéndole a la psicóloga que su
hijo le habría tocado el pene y el ano.
Aquello se encuentra directamente relacionado con que el sistema SVA es un sistema de
contrastación es una metodología forense por lo tanto no se centra en las consistencias, sino que se
centra en las inconsistencias, intentando falsear, por lo tanto, es más importante detectar esas
inconsistencias y esas aparecen en varios criterios, de hecho aparece en el 19 del CBCA en el 11 del
listado de validez, y es el elemento central de la hipótesis alternativa, es decir, atraviesa a lo menos
tres etapas del sistema SVA, es el elemento central, es aquel que por sesgo subjetivo e
institucionales se pasan por alto. Por sesgo confirmatorio se centran en las congruencias y se saltan
las inconsistencias, esto invalida automáticamente las conclusiones, el elemento central del enfoque
forense no es propiamente la metodología de SVA sino que es el enfoque, si yo claramente tengo un
enfoque clínico o sesgado como lo ha tratado el profesor Ducci en nuestro país, ese sesgo lo que
hace es que yo voy a ver lo que quiero ver y voy a obviar aquello que no es sincrónico a mi
hipótesis, y cuál es mi hipótesis, la que los hechos ocurrieron, ese es el riesgo, que
metodológicamente invalide, por ejemplo, los peritos no entrevisten o no intenten entrevistar al
imputado o terceros, eso es otra forma de control del sesgo confirmatorio, por algo no lo hago, no lo
hago porque me van a introducir información asincrónica a la teoría de que los hechos ocurrieron.
En cuanto a la etapa de falseamiento, indica que la falsación está específicamente propuesta
por Popper conocida por el sentenciador, operamos de la misma manera en ese aspecto, el enfoque

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forense se centra específicamente en poder falsear para controlar el sesgo confirmatorio. Este
procedimiento de falsación nos lleva a procedimientos de contrastación de los antecedentes, como,
por ejemplo, el listado de validez ahí aparece el análisis de los antecedentes y la triangulación entre
la narrativa y todos los antecedentes, obviamente la hipótesis alternativa es el elemento de análisis
forense absoluto.
Refiere que el procedimiento de generación de hipótesis alternativas en el contexto de la
metodología, son justamente los elementos que controlan el sesgo confirmatorio, se generan
alternativas distintas a la comisión del hecho por parte del imputado, como por ejemplo hipótesis de
incapacidad, hipótesis de engaño, hipótesis de desplazamiento de autor, es decir, una forma de
explicación distinta a la ocurrencia de los hechos materia de investigación y esas son las hipótesis
que hay que tratar de validar, no la hipótesis de comisión de los hechos porque eso es sesgo
confirmatorio. Hay más hipótesis, deben ser atingentes al caso en particular, y dada la edad del
niño, una hipótesis de engaño por sí misma es bastante pertinente, o sugestión por parte de terceros
eventualmente podría ser, sobre todo ante ganancias secundarias a partir de la develación,
inoculación de contenidos a partir de los procesos de terapia o de intervención, son elementos que el
perito debe tener en consideración y explicar a partir de esas hipótesis y no la de ocurrencia de los
hechos.
Indica que en el peritaje no se hizo del trabajo de formular hipótesis de sugestión o
ganancias secundarias, si se accede sólo a los medios probatorios por el órgano persecutor que llega
a la convicción de una hipótesis acusatoria, el perito con las mismas herramientas va a arribar a la
misma conclusión, no tiene otros elementos distintos que los que están contenidos en la carpeta, en
la práctica, en teoría porque la guía técnico pericial permite entrevistar otras personas sin necesidad
de pedir autorización, siempre y cuando estén dentro del ámbito de la ley, lo cual quiere decir que la
perito puede entrevistar al imputado o a terceros que le pudiesen entregar una información distinta
para armar una hipótesis de manera distinta, es un problema de razonamiento lógico en la forma en
cómo nosotros armamos la hipótesis. Añade, en Chile es imposible crear una hipótesis alternativa
de calidad.
Dentro de los antecedentes que aparecían relacionados en el informe pericial no visualiza
claramente a la formulación de hipótesis porque accede al mismo material que revisó la perito.
Eventualmente las inconsistencias que ella omite, las puede considerar en el ámbito de la hipótesis
de qué algo ocurrió hay una inconsistencia que la perito no consigno. Pero no puede desarrollar
técnicamente lo que se le pide, sino estaría haciendo la pericia.
Otra de las hipótesis alternativas es el desplazamiento del autor la cual se refiere a que
eventualmente un hecho pudo haber ocurrido de la misma forma en que está siendo narrado por una

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niña, niño o adolescente, sin embargo, la identidad del autor es cambiada por la de otra persona,
pudiendo existir muchas razones para ella, pero generalmente está vinculada al ámbito afectivo en
relaciones de naturaleza intrafamiliar. Teóricamente lo que sea visto en la práctica es mucho más
fácil para un niño e incluso a un adolescente responsabilizar a un tercero ajeno y no a mi papá o a
mi hermano porque me afecta mi dinámica familiar, afecta mi afectividad no así esta persona que
está más distante, lo que ocurre con el desplazamiento del autor es que se devela el hecho, genera
liberación emocional, hay cierto nivel de ajuste. Para poder identificar desplazamiento de autor, los
elementos principales es el análisis forense, no el relato propiamente tal sino el listado de validez y
la hipótesis alternativa, eso nos permite identificar y los hechos que están narrando no pueden haber
sido cometidos por esta persona porque a modo de ejemplo, no se encontraba en chile.
En relación a las circunstancias de cómo se devela el hecho que aparece en el informe y en
los antecedentes es algo que no queda muy claro el contexto en el análisis pericial, en la entrevista a
la mamá del niño en términos generales recuerda que el niño estaba a cargo de la señora Marianela
y cuando lo van a buscar la señor Marianela dice que había tenido un problema su hijo, se van con
la mamá y ahí según lo que dice la mamá le habría contado que el imputado le habría tocado el
pene, y que posterior a ello hay un tema que se devuelven conversan con la familia, le dan un
premio al niño, no queda claramente detallado como ocurre propiamente la develación en el
informe policial de la perito.
Esta circunstancia que le da un premio al niño refiere que fue indicado en el contexto de la
develación, como para que le contara todo, ello por parte de la mamá.
Refiere que esta circunstancia que le da un premio para la develación, pudo plantearse
como un tipo de hipótesis alternativa, es muy complejo, debió quedar muy bien descrito el contexto
de la develación, y al aparecer esa circunstancia en particular la perito debió haber profundizado
para indagar qué tan importante había sido esa variable porque a un niño se le ofrece algo, y si se le
dice “yo te voy a dar algo si me cuentas todo y te doy un premio, y después le digo cuéntame más y
te daré más premio “ se puede establecer una contaminación del relato, pudiendo claramente haber
sido incluida en el informe, más aún cuando en otras instancias existen inconsistencias que se
visualizan como me toco arriba de la ropa, debajo de la ropa, me toco el poco, luego me tocó el
pene, que son distintas entre sí, eventualmente podría haber influido.
Efectivo advirtió que el informe era un copiar y pegar respecto a otros informes periciales,
como perito de la defensoría penal pública realiza procedimientos de metaanálisis de Arica a Punta
Arenas, entonces tiene la posibilidad de ver muchos peritajes, y cuando detecta un error como por
ejemplo que solo se describen los criterios, le llama la atención. Entonces cuando aparece otra
pericia de la misma perito con el mismo procedimiento y las mismas palabras, obviamente que lo

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informa de forma directa primero a los defensores y luego hace presente en juicio, y se lo indica
directamente a la fiscalía cuando declara, esto era frecuente en el trabajo de la perito, copiaba y
pegaba, de hecho le llamó la atención a la fiscalía que solicita una extensión indicando haga una
correlación y explique los criterios y aparece esta extensión de informe. Esto lo advirtió por lo
menos en 10 informes, en su meta pericia plasmó 3 con RUC y número de causa.
A las preguntas de la fiscal; indica que lo referido son los criterios daubert, que están en el
estudio nacional de la corte suprema aparecen como un están de la prueba pericial. Da cuenta de la
evaluación de los peritajes en chile, de la validad de los peritajes en chile, que los sentenciadores al
SML le otorgan mayor credibilidad en comparación con otros informes periciales, es un documento
extenso, se llevó a cabo a través de una investigación, se llama documento de evaluación de
informes periciales en Chile, no recuerda la fecha de publicación, está consignado en su informe
pericial.
Las fuentes de información que tuvo para realizar su metaanálisis fueron indicadas al
defensor, son 4 guías más la GEV que no recuerda bien porque la puso en teoría. La guía de la
Corte Suprema que acaba de mencionar no está en esas cuatro ya indicadas.
Efectivamente hizo un informe pericial por escrito, no puede ser que diga que hace su
informe en representación del acusado, sí a requerimiento de la defensoría penal pública.
A fin de evidenciar una contradicción se exhibe informe metaanálisis técnico, se le exhibe
el documento, reconoce que es su informe, reconoce su firma lee donde dice objetivo pericial “por
requerimiento de la unidad de estudio de la DDP en representación del imputado señor Emilio
Saldivia se procede a realizar análisis técnico e informe pericial emitido por la señora Romy
Espinoza en la persona del niño previamente identificado”.
Para hacer el metaanálisis, tuvo los mismos antecedentes de la carpeta investigativa que
tuvo la perito, entre ellos la declaración del niño en dependencias de la fiscalía local, ese es el que
recuerda, pero está plasmado en su informe. También señaló que la perito realizó un complemento
de la pericia, no recuerda qué antecedentes tuvo a la vista para realizar la ampliación.
En enero de 2019 la perito evaluó al niño, la fecha del complemento de la perito Romy no
la recuerda.
El informe de la perito es de febrero de 2019
Respecto a los hechos señalados en el informe de la perito Romy no le quedó claro en qué
consistía la develación.
Cuando ocurren los supuestos hechos, se dice que el niño estaba en la casa de la señora
Marianela, donde vivía junto la hija de la señora Marianela, y el imputado, parece que no vivía
nadie más. Su pericia la realizó en agosto del año pasado.

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No recuerda la fecha en que se produce la develación.
Su mamá fue a buscar al niño a la casa de la señora Marianela. No recuerda qué le dijo la
señora Marianela a la mamá cuando fue a buscar al niño.
Parece que la señora Marianela le dijo algo a la madre en relación a los garabatos.
No recuerda si la señora Marianela le dijo a la madre que fuera a preguntar al jardín, no
recuerda ese nivel de detalles, no era objetivo de su pericia el informe no era el análisis técnico del
relato, era el procedimiento, por eso no se centra en los detalles.
La perito no utilizó adecuadamente el CBCA ni el listado de validez.
La primera pregunta que le realizó al niño estaba relacionada con que si sabía a qué venía a
conversar con ella, no recuerda qué le preguntó a continuación, no recuerda específicamente el
contenido de la entrevista. Accedió al registro de audio de la entrevista.
En su informe como conclusión se refirió a las conclusiones que arriba la perito del SML,
tienen que ser dos relacionadas con la credibilidad y daño, y un tercer punto relacionado con la
atemporalidad de sus conclusiones.
Se exhibe nuevamente peritaje a fin de evidenciar contradicción en cuanto a la cantidad de
conclusiones consignada en su metaanálisis. Da lectura indicando que hay dos conclusiones, y en la
tercera parte aparece la atemporalidad.
En cuanto a test de nivel complementario indica que la perito debió utilizar los que utiliza el
SML aquellos que tienen confidencialidad a nivel psicométrico.
No existe un catálogo de test como le pregunta la fiscal. La guía normativa técnico pericial,
indica que es libertad del perito aplicar los instrumentos que determine cuando tengan confiabilidad
y validez psicométrica y estén relacionadas al caso. Por eso no existe obligación de aplicar
determinado instrumento, sino aquel que determine el perito aplicar.
No es correcto lo que dice la fiscal, lo que aparece en el informe, es que la perito, ya no
funcionaria del SML, a ella sí aplica instrumentos psicométricos como por ejemplo el SCL90 y
otros test de ansiedad. Ella en el SML no aplicaba instrumentos, en el mundo privado sí. Eso lo sabe
porque los múltiples meta peritajes que ha realizado donde aparecen informes de la perito Romy,
aparece rut a pie de página. Esa prueba específicamente es para adolescentes. La escala de
autoestima de Rosenberg lo nombra en su informe porque la perito lo menciona en su informe, pero
dicho test no se aplica a niños.
En relación con el daño tiene incidencia los recursos personales de una persona para poder
determinar el tipo de daño y si existe, el daño no está en el hecho traumático, sino que en las
herramientas con que se vivencia esa situación traumática. Cuando se utiliza la metodología de

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credibilidad del relato, no necesariamente hay un relato, depende de la técnica de entrevista que el
perito vaya a utilizar.
Sí hay una técnica de entrevista que no contempla el relato libre del peritado, el del CAVAS
utiliza una forma de entrevista mayoritariamente policial no lo hace con el protocolo de Nitch.
El SML no utiliza como metodología obtener un relato libre y espontáneo del peritado.
Dice que no recuerda los 19 criterios, puede dar algunos.
Tampoco recuerda de memoria los 11 criterios de validez, para eso está la literatura.
En relación con su curriculum, dice que le hizo llegar su curriculum a la defensoría, el que
se va validando todos los años, complementando con sus nuevos estudios. Nunca ha trabajado en
carabineros ni en la 35 ° comisaría, tampoco en el SML, ni en el CAVAS. Sí trabajo en el
Gendarmería de Chile, también trabajó en la liga contra el alcoholismo, también como psicólogo de
seguridad ciudadana en Viña del Mar, también como director de la comunidad terapéutica
Salesiana, asimismo trabajó en la ONG Centro tratamiento ambulatorio Quillota CONACE, creó la
comunidad terapéutica intramuros en el complejo penitenciario Valparaíso.
SÉPTIMO: Alegatos de término y réplicas. Que, llegada la etapa de sostener las
consideraciones de clausura, los intervinientes manifestaron lo siguiente:

La representante del Ministerio Público indica en el alegato de clausura que comenzará


su intervención formulando unas preguntas al tribunal, “ustedes consideran que con la prueba
rendida no sé de derribó la presunción de inocencia (sic)”, el Ministerio Público cree que sí, ya que
con los elementos de prueba rendidos durante el juicio se logró acreditar y responder las siguientes
preguntas ¿qué pasó? El acusado tocó el pene de la víctima, eso lo señalaron ambos padres y la
perito Romy Espinoza ¿Cuándo ocurren estos hechos? Ocurren en el período comprendido entre
septiembre y el 3 de noviembre del año 2017 ¿Cómo ocurren estos hechos? La víctima estaba en la
casa de la señora Marianela mientras ella estaba ejerciendo labores de cuidado respecto del niño en
una habitación de esta casa. En esa oportunidad el acusado toca a la víctima debajo de la ropa en su
pene ¿Dónde ocurren estos hechos? en el domicilio de la señora Marianela, ubicado en
DIRECCION000, comuna de DIRECCION001 ¿En qué contexto ocurren estos hechos? La víctima,
después de que terminaba su jornada en el jardín infantil al que asistía, desde las 14:00 horas de la
tarde hasta más o menos entre las 6 y las 19:00 horas era cuidado por la señora Marianela en el
domicilio de ella, y en ese contexto, mientras estaba al cuidado del niño, estando en este domicilio
ubicado en la comuna de DIRECCION001, es cuando el acusado, le toca estas partes íntimas ¿quién
cometió estos hechos? el tío Emilio, y quién es el tío Emilio, es la pareja de la hija de la señora

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Marianela, que en ese entonces también vivía en el mismo domicilio. ¿Cuántas veces ocurren estos
hechos?, una sola vez

Ahora bien, en cuanto a la valoración de la prueba rendida durante el juicio, el Ministerio


Público cree que se rindió prueba suficiente y contundente para tener por acreditados los hechos y la
participación en ella dolosa del imputado. Formula otra pregunta ¿la declaración de la víctima es el
único medio de prueba apto para que se pruebe un hecho? bastante lógica es la respuesta, no y
además categórica ¿por qué? porque el legislador estableció un sistema de pruebas libre en el
artículo 295 y este sistema le otorga el deber a los jueces de ponderar la prueba conforme las reglas
de la sana crítica, previsto en el artículo 369 bis del Código Penal, es decir, se tienen que pronunciar
respecto a cada medio de prueba, indicando en la sentencia, se estiman que este medio de prueba
sirvió para acreditar o desacreditar un punto, un hecho. Ahora bien, lo importante es cómo se
determina esto, cómo realizar esta valoración de determinar si este medio de prueba es apto para
producir fe o no lo es, y ahí en ese momento es cuando se deben abandonar los estereotipos, es
decir, las preconcepciones, y esto es lo que exige la normativa tanto internacional como nacional.
Además, el legislador estableció amplitud respecto de los medios de prueba, y con esto se refiere a
que el artículo 323 señala en su parte final que cualquier medio de prueba será considerado como
tal, en la medida que sea capaz de producir fe. Por otra parte, el legislador no establece ningún
orden de prelación, un medio de prueba por sobre otro, lo que permite entonces inferir que, un
medio de prueba unido a otro medio de prueba y así sucesivamente se logra formar una cadena que
en conjunto permite derribar esta presunción de inocencia, que es una garantía establecida en favor
del acusado, pero que además esta garantía se debe contrapesar con el principio de veracidad del
relato de la víctima y que dice relación a por qué tenemos que poner en duda lo que nos relata la
víctima de este caso, cuando se trata de una víctima de robo, ponemos en tela de juicio su
testimonio, alguien se cuestiona, plantea que es mentira lo que dice la víctima, por qué para los
delitos sexuales se parte o se considera esa premisa, esta presunción de veracidad del relato de la
víctima, unido a que la familia de la víctima da cuenta a que no existían problemas previos entre la
señora Marianela, Gianfranco o algún integrante de su familia. Aquí la madre de Gianfranco, indica
que ya en el mes de octubre el niño había señalado que no quería seguir yendo a la casa de la señora
Marianela, que hubo un cambio de actitud, de comportamiento de la víctima, precisamente durante
este periodo en que lo diga empezó a quedarse donde la señora Marianela, estos cambios no se
visualizaron antes ni por el jardín ni por los padres de la víctima. Unido a lo anterior, se debe tener
en consideración cómo se gesta esta develación. El acusado indica que fue él quien devela la
situación de abuso, él es quién le dice a la señora Marianela que hay que hablar con ambos padres,
Gianfranco solamente le mencionó al acusado los hechos, nunca le había dicho antes nada a los

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padres hasta ese día. Por lo tanto, qué ganancia podríamos ver en esta forma de develación por parte
de Gianfranco o su familia, ninguna. Cuál fue la respuesta de la señora Marianela y del acusado
frente a esta denuncia, exponer a Gianfranco exponerlo diciendo además delante de sus padres, por
lo menos delante de su madre, que estos hechos habían ocurrido por otra persona y en el jardín
infantil. Pero, a pesar de ello, Gianfranco siempre se mantuvo en los mismos términos respecto de
quién era el autor de estos hechos, el tío Emilio.

Añade que, la teoría de la defensa de desplazamiento de autor se basa en suposiciones, las


cuales fueron aclaradas durante el juicio oral, como por ejemplo que la madre había estado presente
durante la declaración de Gianfranco en la Fiscalía, lo que no ocurrió. La perito Romy fue muy
enfática en explicar que la víctima tenía las competencias testimoniales, contaba con capacidad
cognitiva para comprender las preguntas y tenía buen vocabulario para poder explicarse, y explicar
qué era lo que le había ocurrido. Luego se refirió a los criterios del CBCA observados, y después a
el listado de validez, descartando las hipótesis alternativas de ganancias secundarias, sugestión,
desplazamiento de autor y consideró como válida que estos hechos correspondían a una vivencia
personal de la víctima.

Añade, en la audiencia de juicio oral los testigos de oídas dieron cuenta del testimonio de la
víctima, refiriendo que primeramente habló de tocaciones en el ano y en el pene, y luego esto fue lo
que sostuvo el 3 de noviembre de 2017, pero ya al momento de la pericia en enero de 2019, que fue
cuando se evalúa su relato, Gianfranco ya había disminuido las acciones que él había recibido por
parte del acusado, limitándose solamente a tocaciones en el pene. Esto significa que no hay
consistencia, no, la perito fue enfática en señalar que esto es normal y esperable, que ocurre con
diversas razones, entre ellas, el desarrollo evolutivo, tipo de pensamiento, fenomenología propia de
los delitos sexuales, transcurso del tiempo. Por lo tanto, la fiscal vuelve a preguntas, ¿significa que
un niño de 5 años inventó un relato de esta naturaleza? La perito explicó respecto a las
circunstancias en relación a que estas tocaciones fueron por encima o por debajo de la ropa, y lo
importante es que un niño de 5 años es capaz de explicar que transgredieron las esferas de la
sexualidad y eso es lo que ocurrió, tocaciones en su pene. Ambas situaciones han tratado de
relevarse por la defensa a una importancia sustancial y no lo tiene, ya que como bien señaló la
perito la consistencia para un niño de 5 años se debe medir conforme a ese parámetro y no al de la
defensa, parámetro que establece de acuerdo con sus concepciones, a sus creencias y a su
estereotipo, sobre lo que debe declarar una víctima de este tipo de delitos. Por ello es indispensable
utilizar la metodología de perspectiva de género, ya que no se le puede exigir a esta víctima que sea
una víctima perfecta y que cumpla con los estereotipos del señor Defensor, ya que nunca estuvo en

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la misma situación que el acusado, lo cual se explicará más adelante. Agrega, otro punto importante
para señalar es en relación a esta presunción de veracidad en el relato de la víctima y que dice
relación que durante el desarrollo de este juicio escuchamos a la madre, escuchamos al padre,
escuchamos al perito y hasta el mismo acusado señalar que no había conflictos previos, ni con el
acusado, ni con otro integrante del grupo familiar, entonces, que sentido tuviere para Gianfranco
inventar algo así, por qué lo haría, por qué inventaría un abuso sexual que no es propio de un niño
de esa edad, adicionalmente, qué gana la madre o el padre de Gianfranco con esta denuncia, nada.
Por qué inventarían algo así. Si esto fuese como intentó la defensa hacerlo ver, por qué los padres
siguieron llevando al niño al jardín, no es suficiente que la profesora del jardín haya venido a
prestar declaración indicando que se descartaron los hechos porque siempre hay un adulto a cargo
de los niños que los estaban vigilando y había cámaras, situación diametralmente opuesta que
ocurría en la Casa de la señora Marianela. Se aportó prueba de la defensa que permite desvirtuar el
relato de la víctima, no, por el contrario, el MP estima que la declaración del acusado lo sitúa en el
lugar de los hechos, este delito es posible conforme a lo que él expuso, se ubicó incluso en la mesa
almorzando con el niño, lo que sabemos que no es efectivo ya que el niño almorzaba en el colegio,
situación que reporta la profesora que no tienen ningún interés en el juicio, y la madre del niño.
Ahora no solamente se sitió compartiendo la mesa, sino que también habría sido en ese momento
cuando el niño devela esta situación. Ahora, por qué el acusado decide hablar con los padres
respecto a lo que supuestamente le dijo Gianfranco ese día, sobre este punto el acusado dice que
habló con ambos padres, lo que también sabemos que no es así ya que fueron en forma distinta y
separados cada uno de ellos. Por el acusado conocimos su horario de colación y qué hacía durante
este horario, él almorzaba todos los días en la casa de la señora Marianela, es decir, es posible este
delito fácticamente. Él tenía acceso a la víctima, señala además que no recuerda a Melanie que es la
otra niña que según lo que refiere doña Marianela a la madre de Gianfranco esa niña fue retirada
porque en la casa de la señora le tocaban el poto. El acusado solo recuerda a Gianfranco y no a otro
niño de la casa. Dice que todos los que vivían en la casa prestaron declaración con personal de la
PDI, pero fue Carabineros, lo que tampoco es efectivo, pese a que estaban en la casa, el acusado,
doña Marianela y Mila, estos adultos se sitúan haciendo quehaceres ya sea en el interior de la casa o
yendo a dejar a otros niños como en el caso de la señora Mila al colegio, por tanto, Gianfranco no
estaba en todo momento bajo la supervisión de la señora Marianela, siendo posible que este delito
se haya cometido.

También refiere la fiscal, que los únicos que aportan información que estos hechos habrían
ocurrido en el colegio, son la señora Marianela, el acusado y doña Mila, quienes al momento de los
hechos estaban unidos por una relación de parentesco. Asimismo, compareció la profesora del

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jardín quien señaló los cambios que presentaba la víctima, aseverando esta situación descrita por
Gianfranco nunca ocurrió en el jardín.

Respecto a su Señoría, la prueba en la defensa, absolutamente contradictoria. Según la


versión del acusado y doña Marianela, el niño se sentó a almorzar el día 3 de noviembre y que eso
ocurría siempre. Por el contrario, la madre, la profesora y la pareja de la Posada, Doña Mila,
indicaron que el niño no almorzaba en la casa de Doña Marianela. Es tan falsa la declaración de
doña Marianela que señaló que el niño llevaba a la casa almuerzo, arroz, carne, entre otras cosas y
comida peruana que no sabía cómo se llamaban, sin embargo, la propia hija de doña Marianela,
Mila, refiere que el niño no almorzará en la casa y que lo único que traía eran colaciones,
básicamente frutas. Son contradictorias las versiones en cuanto a quienes vivían en la casa, qué
cosas jugaba estar en el interior de la casa, y con quién jugaba, que solamente jugaba en el living, en
el patio de juegos, sino que también lo hacía en las habitaciones, que jugaban play, juego que
conforme lo declarado por la señora Mila estaba en el dormitorio del acusado, es decir, donde se
dirigía después que terminaba de almorzar y antes que lo pasaban a buscar.

En cuanto a los testigos de la defensa, señala la fiscal que si tienen interés en el juicio ya
que la señora Marianela aún sigue cuidando niños en su casa y obviamente no desea que su negocio
se estropee ya que es su fuente de ingresos. El acusado obviamente tiene un interés que es no ser
condenado. Por su parte doña Mila también tiene interés de no perder su bienestar económico ya
que sigue viviendo con su madre y se pueden ver afectados con el término de este negocio.

En lo que respecta al perito de la defensa, estima que quedó demostrado su falta de


conocimiento sobre la pericia de credibilidad del testimonio, menciona fuentes de información que
no es capaz de indicar con precisión, habló de criterios del CBCA pero no sabe ni siquiera como se
llaman. Habló de los indicadores del listado de validez que tampoco sabe cómo se llaman. Da
cuenta de labores completamente distintas aquellas que se requiere para realizar esta metodología,
nunca ha practicado peritajes con niñas, niños y adolescentes, es más, al momento al referirse que la
perito Romy Espinoza copiaba y pegaba, perito por cierto con vasta experiencia no solo en el
método sino que también a peritados, es decir, a personas, ella realmente realiza pericias quedando
demostrado en estrados que era capaz de responder todas y cada una de las preguntas efectuadas por
la fiscalía, querellante y defensa, cuestión que no ocurrió con el perito de la defensa. Ahora bien,
este copiar y pegar que alude el perito de la defensa dice relación en un momento a los test o
pruebas complementarias que debió haber hecho la perito, sin embargo, al consultarle a qué grupo
etario se debe hacer las pericias que él nombró refiere que a niños mayores en adolescencia y al
consultarle qué test se puede aplicar a niños de la edad de Gianfranco, no mencionó ninguno.

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Al inicio del alegato de apertura solicitó que observara a la víctima en relación a lo que se
iba a declarar bajo el prisma de lo contenido en los tratados internacionales, solicitando en este
momento que se valore la prueba y se dicte una sentencia condenatoria conforme a ese parámetro
internacional, recogido en nuestra normativa interna, se refiere a la convención que regula y
establece los derechos de los niños , niñas y adolescentes, declaración universal de los derechos
humanos y lo resuelto jurisprudencialmente por la corte interamericana de derechos humanos,
específicamente se refiere al principio de diligencia reforzada en delitos sexuales, y a los criterios
de categorías sospechosas, eso es lo que debemos aplicar, acogen principios fundamentales que son
igualdad y no discriminación. Normas que regulan qué se entiende por violencia de género, y que
es, un término utilizado para designar cualquier daño que se cometa en contra de una persona y que
resulta de las desigualdades de poder, que se basa en roles de género, y eso es precisamente lo que
se observa cada vez que se comete un delito sexual respecto de un niño, niña o adolescente. La
víctima en esta causa es Gianfranco que nació el año 2012, tenía 5 años a la fecha de los hechos,
actualmente 11 años, durante el desarrollo del juicio pudimos observar las declaraciones de los
testigos y particularmente la situación de vulnerabilidad o categoría sospechosa en que se
encontraba la víctima, al momento de los hechos la víctima tenía 5 años de edad, existe una
diferencia de edad entre imputado y víctima abismante, asimetría entre víctima e imputado en
cuanto a la contextura física, al desarrollo de pensamiento, en cuanto a las experiencias de vida,
como también a las experiencias sexuales. La víctima además proviene de una familia de
emigrantes y de bajos recursos económicos. Habla de estas categorías sospechosas y circunstancias
de vulnerabilidad no sólo porque eran conocidas por el agresor, sino que también porque se
aprovechó de ellas para cometer el delito. Finalmente pregunta, el costo de evitar la revictimización
de Gianfranco lo debe asumir él, hay igualdad entre víctima y acusado. Esta es la oportunidad que
el estado a través de sus órganos que imparten justicia repare esta desigualdad generada por el
acusado, restablezca el derecho conculcado y aplique justicia sustantiva. Esto que le ocurrió a
Gianfranco nunca se le olvidará. El bien jurídico protegido en esta clase de delitos es muy
importante y personalísimo, la indemnidad sexual. Solicita se dicte veredicto condenatorio y se
condene a las penas señaladas en la acusación fiscal.

Al replicar señala que, toda la alegación que hace la defensa parte de un supuesto que es
lógico para el abogado defensor, la verdad es que la actitud o lo que hizo el colegio al ver a la
madre y no al padre, ya que fue ella a buscarlo, es lo que se conoce vulgarmente “colocarse el
parche ante de la herida” al percatarse que la niña ya había develado los hechos, le dice a la señora
Marianela que tenían que conversar esto, él dice yo le dije a la señora Marianela que debíamos
conversar esto con el padre, porque era habitual que fuese él a buscar al niño, pero ese día fue la

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madre con el dijo menor y el cochecito porque llevaba ahí a su hijo. Qué pasó en ese momento, el
imputado, que si tenía un interés en desplazamiento de autor y lo mismo la señora Marianela porque
se acaba su negocio ya que de antes existía este antecedente que a la otra niña la habían sacado
porque le habían tocado el trasero, deciden contarle esta situación a la madre. Y que es lo que la
madre piensa cuando escucha lo que lo que le dijo la señora Marianela, que el niño se portaba mal ,
que había dicho que supuestamente lo tocaban en el jardín, que hablaba con garabatos y una serie de
otras cosas que a la madre le pareció demasiado extraño, se quedó sorprendida, se fue a su casa con
su hijo, le pregunta qué es lo que le pasa, el niño no quería hablar, dijo que tenía que esperar a su
papá, llegó el papá conversaron con él, contó lo que estaba pasando a medias, se fueron al hospital
y en el hospital su madre desesperada y con la finalidad de darle confianza al niño, y no con un
ánimo de que le niño le entregara cierta información para perjudicar al imputado, porque eso hace
ver la defensa, él espontáneamente le dice “ el tío Emilio me toca”, y por qué la mamá le pregunta
por la casa de la señora Marianela, es porque no le cuadraba que la libreta del jardín donde se veía
cómo se portaba el niño estaba perfecto, salvo algunos cambio de actitud que venían desde que el
niño comenzó a ir a la casa de la señora Marianela . La madre dijo en estrados, yo no le he enseñado
a mi hijo esos valores. Entonces quién es el que está tratando de incoar un relato en el niño distinto
a lo que ocurrió, es la señora Marianela con el acusado, los que tienen interés en que el acusado
salga absuelto, un interés económico y que no sea condenado, que gana un niño con haber dicho
que supuestamente el tío Emilio lo tocó, el regalo, un premio. Pero el relato del niño lo mantiene
más de un año y medio cuando se hizo la pericia de credibilidad del relato, ese mismo relato es el
que sostuvo en la fiscalía y después con la perito, imputando al mismo acusado, al tío Emilio. No
parece que la lógica precisamente que invoca el abogado defensor es precisamente la opuesta
porque no solamente los involucrados en el delito, la señora Marianela, doña Mila y el acusado son
los que tratan de decir desesperadamente esto me dijo en el jardín, ese día la mamá escuchando los
de la señora Marianela y Emilio el niño se mantuvo mudo, agachado, triste, acongojado, si lo están
enfrentando con la persona que lo abusa, no sabe qué es lo que espera el defensor en realidad. El
relato del niño tiene coherencia interna y externa, el relato de la madre tiene coherencia interna y
externa, a cada uno se le puede medir con una vara distinta, uno es un niño de 5 años y el otro es un
adulto, esa es la misma vara que solicita que se utilice a través de la perspectiva de género y los
criterios de interseccionalidad se apliquen respecto de la víctima y el acusado.

Cuando la defensa se ríe y se mofa por la presunción de veracidad del relato en la víctima
que no existe y no tiene consagración legal, efectivamente no la tiene en nuestro país como una
norma expresa, pero esto sí tiene una consagración jurisprudencial y doctrinaria y lo ha referido
reiteradamente la doctora en derecho María Acale profesora de la universidad de Cádiz en España.

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Este principio de veracidad apunta a que los estereotipos frente a un delito sexual, nos llama a decir
dejemos esos estereotipos afuera es una víctima porque debemos dudar de su relato en relación con
víctimas de otros delitos, como por ejemplo de un robo, porque se cuestiona su relato, de sus
hechos, de su vivencia, a eso se refiere el principio de veracidad de un relato, que se presuma
verídico.

Por último, respecto de la pericia, la perito de cargo explicó latamente que las preguntas que
hizo luego de obtener un relato espontáneo fueron aclaratorias, lo cual forma parte de la
metodología, incluso para lo que se establece para entrevista investigativa videograbada, que se
puedan hacer preguntas aclaratorias. Ahora porque se eliminó esta pericia de credibilidad y daño, la
principal razón es porque se dictó la ley 21.057, que es para evitar la revictimización secundaria,
esa es la principal razón y no lo señalado por el defensor. Por último, formula la pregunta esta
teoría que da cuenta la defensa de razón suficiente, lógica que debe considerar el tribunal, tiene un
sustento que también tiene un sustento como el propuesto con la querellante, que es la objetividad,
respaldada por los tres carabineros que le toman declaración a la madre y por la profesora.

La abogada de la parte querellante en su alegato de clausura señala que se adhiere a lo


señalado por el MP y agrega tanto la parte querellante como el Ministerio público tienen la carga de
prueba de poder establecer de una convicción en este tribunal de la existencia del delito de abuso en
la persona de Gianfranco, un niño de 5 años. Para se dio cuenta de una investigación en el cual se
recabaron medios de prueba que fueron presentados al juicio, y que permitieron formar esta teoría
del caso por la cual se está pidiendo que se condene al acusado.

Refiere, primero declaró doña Evelyn Hermosilla quien le toma declaración a la madre el
mismo día que se entera de los hechos, cuando van al hospital Exequiel González Cortés, donde en
el baño le pregunta al niño qué te pasó, cuéntame, dándole el niño un relato, efectuando de
inmediato la denuncia, la cual en definitiva es la declaración más pura que hace la madre a menos
de una hora que toma conocimiento de los hechos, ella en ese momento tenía una buena relación
con la señora Marianela, ni siquiera sabía que vivía el acusado en esa casa, esa declaración fue sin
que nada interfiriera, escuchó a su hijo y fue donde carabineros en el hospital. Luego declara la
señora Rosa Silva, también le toma declaración a la madre Escarlet y al señor Gianfranco, en esta
declaración repite lo mismo, pudimos observar que cuando declara la señora Rosa ella da cuenta los
términos en que toma la declaración, donde la madre mantiene su relato, denunciando el abuso de
su hijo. También aparece dentro de la declaración de doña Escarlet ante Rosa Silva que hay una
teoría ya de la defensa que estaba siendo creada, en el sentido que el niño decía muchos garabatos,
el niño había sido supuestamente abusado en el jardín, pero eso no coincidía con lo que había el

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padre y madre del niño en cuanto al jardín, nunca tuvieron un reclamo, cualquier observación desde
el jardín conforme a los antecedentes recabados en el juicio, en especial lo declarado por la
profesora Sol, era anotado en un cuadernito, cualquier cosa, observación de conducta era informado
a los padres a través de ese medio.

Agrega, también aparece otro elemento importante, había otro antecedente de una
compañera del jardín de la víctima, una tal Melanie, que también había cuidado la señora
Marianela, quien dijo en algún momento que le habían tocado el potito. Posteriormente,
escuchamos a la señor Escarlet que nos ratifica todo lo anterior, manteniendo su relato, el que es
puro, limpio, se mantiene y es consistente a lo largo del tiempo. Señala elementos de importancia
como el hecho que el niño no almorzaba en esa casa, esta teoría de la defensa que almorzaba se
descarta con todas estas declaraciones, en especial de la señora Escarlet y los propios testigos de la
defensa. La madre declara sintiéndose a ratos complicada, da una declaración sin ninguna intención,
solo contó lo que pasó, siendo creíble y consistente con lo declarado por las funcionarias de
Carabineros, no existió contradicción con ellas en sus dichos. Luego declara la señora Sol, la
profesora, quien señaló que no había ocurrido nada en el colegio y que el niño almorzaba en el
colegio.

A continuación, presta declaración la perito Romy Espinoza de una larga trayectoria, quien
aplica el CBCA y SVA a un relato libre que, a pesar de ser breve, contenía los elementos necesarios
para aplicar el CBCA, estableciendo que el relato es creíble, existiendo criterios de validez
conforme el SVA descartando desplazamiento de autor, siendo aquello la principal alegación de la
defensa al inicio del juicio, no hay antecedente en que pueda acreditarse un traslado de autor.

Es importante tener presente que cuando declara la perito da cuenta de una consistencia con
lo que había declarado la mamá y el papá ante los funcionarios policiales, lo cual resulta
concordante con los hechos materia de la acusación. Por otro lado, es relevante lo que dice la perito,
un niño de 5 años no tiene conocimiento de sexualidad, por lo tanto, lo que estaba contado era una
experiencia vivenciada absolutamente. Asimismo, declaró el señor Franco Urrutia que presenta las
fotografías incorporadas, luego declara el padre.

Añade que todos los elementos de prueba presentados permitieron fortificar la teoría del
caso del Ministerio Público y de esta parte querellante. La defensa presentó dos testigos, un perito,
y la declaración del imputado. El ministerio Público se hizo cargo de las inconsistencia y
contradicciones en la declaración del acusado, quien dice que el niño almorzaba en la casa, mientras
que la señora Mila dice que el niño llevaba colación, frutas u otros, y por otro lado la señora

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Marianela dijo que llevaba comida desde la casa, la pregunta es qué era lo que pasaba entonces,
cuál es la verdad de la teoría de la defensa. Luego uno dice que salieron los dos a recibir el papá,
otro dice que salió uno y luego el otro, qué fue lo que pasó en esa casa, toda la prueba de la defensa
testimonial y declaración del acusado son inconsistentes contradictorias, no sirvieron para derribar
la teoría del caso del MP y de la parte querellante en cuanto a la existencia de los hechos y
participación del acusado. Este niño no tenía por qué inventar algo que no había vivenciado, no hay
elementos de la declaración del imputado, señora Marianela, señora Mila que ponga en duda la
declaración o develación de estos hechos.

En cuanto al perito Leonardo Zúñiga, el ministerio Público se hizo cargo de su testimonio, y


de su credibilidad, llama mucho la atención a esta parte un punto, si bien ya no se pide esta pericia
de credibilidad, y considerando el conocimiento que tenemos de delitos sexuales, señala el perito
que se requieren 13 criterios para que el relato de un niño sea creíble, lo cual no es así. Por lo tanto,
tal aseveración es contraria a todo conocimiento que tenemos respecto a los delitos sexuales.

Así las cosas, estima que la defensa no logró derribar la teoría del caso de los persecutores,
resultando suficiente la prueba incorporada para acreditar la existencia del delito y participación del
acusado.

Al replicar la abogada de la querellante indica la defensa alude que las diferencias entre
sí estaba comiendo, almorzando, no almorzando, si jugaba o no, no eran relevantes, sí lo son, son
relevantes las contradicciones, porque cuando son tantas en la prueba que presenta la defensa, es
evidente que no hay una verdad, no dicen la verdad, tenían tres versiones distintas. Pero no hay
duda de que los testigos de cargo son contundentes.

Por otro lado, la defensa dice que la madre tiene sospechas y ofrece un regalo al niño, le
dice qué pasó en la casa de la señora Marianela, pero este niño podría haber dicho me pegó un
amigo, no me comí la comida, me pegaron una palmada, pero que dice que le tocaron el pene, la
lógica nos dice que da el relato de algo vivenciado, tenía 5 años, eso es lógico.

En relación a la coherencia interna y externa, llama la atención como la defensa puede


valorar aquellos en relación al relato del niño si este no “estuvo acá”, quien lo valoró fue la perito y
ella pudo dar cuenta de sus dichos, mostrando en su curriculum la expertis que tiene, es un tercero
ajeno de un organismo público SML totalmente imparcial, con años de experiencia en esta
temática. No se pudo destruir el peritaje de la perito, la profesional dio respuesta a todo lo que se le
consultó, haciéndose cargo de todo.

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A su turno la defensa del acusado, indica que al igual que la colega del Ministerio Público
tiene preguntas que formular al tribunal. La primera pregunta que surge dice relación con un tema
fundamental con un tema que el Tribunal también tiene que responder y dice relación con la lógica.
Cuál es la lógica de una persona, supuestamente abusador, vaya y se entreviste con el padre para
referir un evento abusivo de su hijo, aquello no parece dentro de los principios de la lógica, no
parece razonable que un sujeto que ha cometido aquel acto pida entrevistarse con el padre para
comentarle la situación que ocurrió. Por el contrario, sí resulta lógico y razonable, que una persona
que no ha estado involucrado en la comisión de un hecho, pero del cual si se entera de las palabras
de un niño, se lo refiera posteriormente a su padre, y fue lo que acá ocurrió , las diferencias si estaba
comiendo o no, la verdad no le parece a la defensa relevante, sí es relevante es que el niño estaba en
la mesa, había adultos también en la mesa y en ese contexto el niño refiere “ en el jardín le habían
tocado el potito” esa circunstancia la que motivó a los adultos que escucharon en ese momento, el
acusado y la señora Marianela para posteriormente comentárselo al padre. Por qué esa circunstancia
aparece como cierta y validada, porque esa circunstancia viene referida efectivamente por los
padres en el sentido que escucharon esa información tanto del acusado como de la señora
Marianela, existió ese diálogo, y porque también Mila, la otra testigo de la defensa, cuando llega a
la casa, refiere, aquí no hay contradicción como señala la fiscalía en cuanto a que dijera Mila que
cuando llega no estaban almorzando, no, Mila dijo que no se acordaba y luego a la repregunta de la
defensa sobre la base de información que ya había señalado, dice que cuando llega a la casa el niño
estaba sentado y cuando llega el niño se para y se va, lo que ella ve es que el niño estaba sentado en
la mesa, no recuerda si estaba comiendo o no, estaba sentado. Si estaba comiendo o no, si eran
lentejas, si eran porotos o fruta eso es irrelevante, lo que sí es relevante es el hecho que el niño en la
mesa dijera que en el jardín le habían tocado el poto, esa circunstancia existió. Y también existió la
circunstancia que su representado se entrevistó con los padres para indicarle lo que había escuchado
en la mesa, a lo mejor no fue claro al decir “los padres” fue más clara la señora Marianela cuando
dice “al padre” pero lo cierto es que la información se entregó y se entregó por parte de su
representado. Entonces resulta lógico que un abusador le cuente lo que pasó a un padre o que, por el
contrario, resulta lógico que lo que verdaderamente ocurrió fue que el niño, en la mesa, dijo que en
el jardín lo habían tocado, y como adulto le cuenta esta información a otro adulto, parece que eso sí
resulta coherente con una cierta lógica. Y aquí nos trasladamos a otro punto que el tribunal debe
resolver, y esto es, que al momento de resolver lo debe hacer conforme a las reglas de la lógica y
uno de ellos es el principio de la razón suficiente que indica que todo lo que ocurre tiene una razón
suficiente para que sea así y no de otra manera. Entonces el tribunal está en una encrucijada, es la
tesis del MP la única valida y existente en términos que el acusado fue la persona que tocó al niño

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o existen antecedentes que dan cuenta que lo que pudo haber ocurrido fue otra situación, que al niño
efectivamente lo hayan tocado, pero lo hayan tocado en el jardín. Conforme a este principio,
existentes antecedentes que no dicen en definitiva no es claro que sea su representado quien haya
tocado al niño, hay antecedentes también que dan cuenta que había sido una situación ocurrida en el
jardín. Ahora porque la sindicación a su representado, y ahí nos topamos con un punto que
lamentablemente no fue del todo desarrollado en la investigación, no fue del todo desarrollado por
la perito del MP y que dice efectivamente con un aspecto ganancial en el relato, y este aspecto
ganancial tiene que ver con la sospecha que instaló, sin intención obviamente, pero sí una sospecha
que la madre reconoce que ella tenía sospecha respecto de la casa de Marianela y por eso le ofrece
un regalo al niño, pero no es un regalo para cambiarle la carita como lo dijo sino que, en sus propias
palabras “ofrecí un regalo para que me contara lo que pasaba en casa de Marianela” y ahí está
instalando parte de un relato ya deja de ser algo que ocurrió en el jardín y pasa a ser algo que
ocurrió en casa de Marianela, es lamentablemente la madre quien instala esa sospecha en el
lenguaje del menor, y el niño hasta ese momento a pesar que había sido consultado en reiteradas
ocasiones por la madre como por el padre, en ningún momento había referido nada que hubiese
ocurrido en la casa de la señora Marianela, pero cuando existe esta oferta de un regalo, de un
premio que efectivamente se terminó materializando en un juguete, entonces el relato se condiciona
a la casa de Marianela, y quienes habitan en la casa de Marianela, uno de ellos es el acusado con
quien el niño en alguna oportunidad había jugado con el menor.

Por tanto, acá lo que resulta relevante es por una parte analizar la credibilidad interna o
externa en el relato, si bien no tuvimos la posibilidad de contar con el relato del menor , cuestión
que en sí no contradice, no hay norma que diga que debemos escuchar al menor, sí es función del
tribunal algo que la fiscalía parece que quiere soslayar en las declaraciones, y esos análisis de
declaraciones deben hacerse conforme a ciertos parámetros y eso tiene que ver con la coherencia
interna y externa de un relato. Acá no existe lo que la fiscalía quiere, una presunción de veracidad
del relato, qué tipo de presunción, una presunción legal de relato, de derecho, no existe presunción
de veracidad de relato, que existe es que hay que valorar la prueba y la manera de hacerlo es con la
coherencia interna y externa, y acá en el relato del menor no hay una coherencia interna porque en
sí se contradice, en un momento que ocurrió en el jardín y en otro momento dice que ocurrió en la
casa de Marianela, en un momento dice que le tocaron solo el ano y en otro momento dice que le
tocaron el ano y el pene, en un momento dice que fue sobre la ropa y en otro dice que fue bajo la
ropa, entonces no existe una coherencia interna en el relato. Tampoco existe una coherencia externa
toda vez que no se correlaciona con las demás declaraciones, en efecto, están los dos testigos que lo
escuchan decir que había sido en el jardín. Por otro lado, la significación que realiza que

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prácticamente le habrían introducido un objeto en el ano, la verdad es que tampoco se condice con
lesiones, no existió relato de algún especialista, pero eso da cuenta que no existió.

Así, lo que tenemos es que no existe una coherencia interna y externa y que desde la
perspectiva también de los principios de la lógica, de la corroboración tampoco existe la posibilidad
de corroborar. Tenemos por cierto que no hay testigos presenciales, sino de oídas, lo que escuchó la
madre respecto del menor, lo que escucho la señora Marianela, pero que además viene corroborado
por la declaración del acusado que fue en el mismo sentido, bajo las mismas circunstancias,
contexto espacial, misma dinámica, detalles más, detalles menos, pero atendido el transcurso de
tiempo, del 2017 a la fecha uno puede entender esa diferencia.

Para la defensa, desde esa perspectiva, el tribunal al hacerse cargo de los antecedentes no
queda claro de una manera prístina, de la manera que exige el legislador, más allá de toda duda
razonable que efectivamente haya sido el acusado el autor. Por el contrario, existió una
contaminación del relato y eso pudo tener incidencia en las declaraciones.

En cuanto a la prueba pericial, efectivamente queda claro que acá que la metodología en sí
se ha ido abandonando por varias razones y por eso las críticas que sostiene el perito son aquellas
que hemos conocido siempre, esto que se analice bajo un mismo tanto credibilidad como daño
siendo que cada una tiene enfoques distintos, el enfoque del daño parte de la base que el delito
existió y entonces no hay forma de poder controlar el sesgo, pero al pedirle a un perito que haga
esos dos análisis de manera conjunta de alguna manera estamos limitando la posibilidad de
controlar el sesgo, y lo que se ve a acá es que había un sesgo confirmatorio, el cual no solamente
estaba en lo que el perito indicó sino que también en lo que la propia profesional reconoció, que
había preguntas que en su lenguaje eran direccionadas, en el lenguaje de la defensa eran sugestivas,
y las preguntas sugestivas en el contexto de revelar el hecho abusivo la verdad es que inhabilita en
si el procedimiento. Por otro lado, no fue controvertido por la profesional del SML el mínimo al que
alude el profesional de la defensoría, efectivamente tiene que existir un mínimo de criterio para los
efectos de entender que el relato cuenta con las características suficiente para poder pasar a la otra
etapa, y por lo demás, el análisis que hace la perito del SML, lo hace solamente sobre la base del
auto reporte, en información que la madre y el niño entrega, sin corroboración en otras fuentes, por
ejemplo, en la sola circunstancia de decir que el relato era coherente, la verdad es que nunca tuvo en
el conocimiento, a diferencia del tribunal, que el niño había hecho una descripción de evento
abusivo en una situación distinta, que era en el jardín, por lo que no habría podría arribar a la
conclusión que el niño mantiene un relato coherente porque esa otra versión nunca estuvo a su
disposición, como sí lo tiene el tribunal. Que la profesional copia, lo hizo, y lo dijo el perito de la

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defensa, en torno a cómo describió la existencia de los criterios y no como lo dice la fiscalía en que
habría copiado en torno a las pruebas solicitadas.

Por tanto, la defensa entiende más allá de toda duda razonable que su representado allá
efectuado aquel acto de tocar al menor en su zona genital, no resulta acreditado y por el contrario
existen antecedentes que explican que lo que pudo existir acá es otra situación. En concepto de la
defensa, sí existe un aspecto ganancial del colegio en tono a no reconocer esta circunstancia, es
obvio, el colegio no va a querer decir que un menor en sus dependencias pudo ser objeto de
vocación, pero que ellos lo desconozcan y que haya venido al juicio una profesora y diga que eso no
ocurrió, la verdad es que poco aporta a resolver este caso.

Así las cosas, por todas las consideraciones antes indicadas, la defensa reitera la solicitud de
absolución del imputado.

Al hacer uso de su derecho a réplica, indica la defensa de manera insistente el MP acusa


a veces a la defensa de estereotipos, y acá por el contrario lo que uno observa son estereotipos de la
fiscalía plasmados por ejemplo cuando dice “el parche ante la herida” no es más que eso. Cuando
alude que no hay ganancias secundarias porque no habría ninguna situación en donde la madre
tuviera problemas con la señora Marianela o el padre o ambos con el acusado, lo que apunta la
fiscal es el estereotipo es que esta ganancia debe ser con un aspecto de vindicación de venganza de
animadversión, pero la defensa no habla de eso, cuando hablamos de ganancia también nos
referimos a cuando un relato ha sido implantado, y en este caso ha sido implantado por la promesa
de un regalo. Y no le atribuye una mala intención en la madre en aquello, incluso puede ser hasta
entendible desde la lógica de una madre, lamentablemente, y es por esa la razón por la cual muchas
de las entrevistas deben ser realizadas por profesionales que traten de evitar la contaminación del
relato y eso es en lo que en definitiva esta promesa una contaminación del relato, y es a eso a lo que
apunta la defensa.

Por otro lado, hay una imprecisión de la fiscalía y de la querellante, no fue su representado
quien dictaminó como tenía que hacerse y qué tenían que contarle al padre, eso fue prácticamente
instrucción de la señora Marianela cuando estaban en la mesa y escucha lo que dice el menor, ella
dice que no había que preguntarle al niño, no ahondaron en esa circunstancia de lo que estaba
relatando el niño porque eso era algo que le correspondía a los padres, y cuando conversa con el
padre que había ocurrido esta circunstancia y que lo converse también en el colegio, por tanto, no
hay un direccionamiento no es el imputado que se ponga el parche ante la herida y determina cómo,
cuándo, eso en los hechos no aparece referido.

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El Ministerio Público reprocha cuando se hace un cuestionamiento a un relato y aquella
práctica iría contra el principio de veracidad de un relato. Al respecto forma parte de los métodos,
incluso método científico, de averiguación de poder llegar a información de mayor calidad la
falseación y de hecho fue lo que explicó el perito de la defensa, es parte incluso del método SVA
hay una etapa en que el profesional se pone en el escenario de que esto sea falso, pudiendo ser falso
por varios circunstancias, esa labor es la que también el tribunal realiza y que la defensa también
hace, y cuando el MP pretende que esa labor no se realice porque existe una presunción de
veracidad lo que en definitiva está queriendo es instalar la idea que la información a la cual el
tribunal pueda acceder a información de mala calidad y con eso las resoluciones no serán legítimas.

Por otro lado, cuando alude el MP que en la prueba de cargo había algo que la prueba de la
defensa no tiene, que es la objetividad, que centraba en la declaración dos funcionarios policiales y
una profesora, perdón, un funcionario policial solamente sacó fotos, y la otra funcionaria policial no
entrevistó al menor, y la profesora tampoco entrevistó al menor, entonces de qué objetividad
estamos hablando. Y la abogada querellante también refiere que no podemos hacer nosotros un
análisis de coherencia interna y externa, pues eso lo hace el perito, perdón, entonces démosle el
martillo al perito para que él juzgue por lo que está pretendiendo la abogada es que una labor tan
crucial, como poder determinar si un relato al momento de formular una resolución, hacer una
análisis de los testimonios eso no puede hacer el tribunal y tenga guiarse de lo que dice un
profesional que tampoco tuvo toda la información que el tribunal sí tiene, porqué esa profesional no
tuvo la versión de la señora Marianela, de Mila y del acusado. Es más, ni siquiera esa profesional
habló de idoneidad interna y externa.

Finalmente, cuando los persecutores refieren que el perito de la defensa no se supo los
criterios, no es eso lo que ocurrió, sino que luego de un constante bombardeo de preguntas, no
dejándolo incluso contestar, y luego de casi dos horas declarando, no señaló todos los criterios, nada
de eso cuestiona el valor de su opinión que era nada más controvertir el rigor científico de la pericia
del SML.

OCTAVO: Delito por el cual se acusó. Que el Ministerio Público dedujo acusación en
contra de Emilio Francisco Saldivia Sanhueza por el delito de abuso sexual impropio, previsto en
el artículo 366 bis del Código Penal, en relación al artículo 366 ter del mismo cuerpo legal, y que
castiga al que realice una acción sexual distinta del acceso carnal, consistente en actos de
significación sexual y de relevancia que requieran contacto corporal con el sujeto pasivo, que debe
tener menos de 14 años, imputación a la cual se adhirió la parte querellante.

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Ahora, desde el punto de vista del hechor, este delito exige, una actitud eminentemente
dolosa, que tiene que ser probada y no simplemente presumida, toda vez que el dolo, se traduce en
el ánimo libidinoso de consumar el actuar abusivo de parte del hechor cuando la víctima se trata
de un niño, niña o adolescente menor de 14 años, y bajo ese supuesto legal transgredir la esfera de
intimidad e indemnidad sexual, cuestión que en el caso de marras no fue probada por el Ministerio
Público y por la parte querellante, con los medios rendidos en juicio, logrando la defensa allegar
elementos que generaron dudas razonables para dar por ciertos los factores del relato obtenido del
niño, y diligencias investigativas no exploradas.
Que añadido a lo anterior, en concepto de estas sentenciadoras, lo medular de los hechos ha
permanecido en una nebulosa muy difícil de despejar, por cuanto no se ha contado con antecedentes
suficientes para lograr convicción sobre la ocurrencia del hecho punible y participación culpable,
considerando que la duda surgida, es de una entidad tal que ha generado en el Tribunal un estado de
indeterminación entre dos versiones, diametralmente opuestas, situación de indefinición que no le
permite salir de aquel estado airosamente, sino optando por la decisión que parece más adecuada
con su íntimo parecer, esto es, la absolución. Dicho de otra forma, los mismos antecedentes han
sembrado en el tribunal un manto de dudas razonables de tal magnitud e importancia, que estos
juzgadores han determinado consignarlas en este fallo para dejar de manifiesto que la prueba
rendida en este juicio oral sólo puede conducir, por unanimidad, a la absolución del acusado al no
haberse logrado acreditar, más allá de toda duda razonable, que se ha cometido el hecho típico y
antijurídico, materia de la acusación.
NOVENO: Análisis de situaciones de contexto relevantes para el examen de los hechos
imputados.
1. Que la acusación formulada por el Ministerio Público se encuentra básicamente acotada a
la presunta ocurrencia de un hecho que el acusador estima constitutivo de un delito de abuso sexual
impropio del artículo 366 bis del Código Penal, perpetrado en la menor Gianfranco llamado durante
el juicio con su nombre de pila Gianfranco.
2. El niño Gianfranco es hijo de Escarlet y Julio, y nació el NUM000 de 2012, tenía 5 años.
3. Que, Gianfranco asistía al jardín infantil de nombre “PERSONA_JURIDICA002” entre
las 08:00 a las 14:00 horas, de lunes a viernes.
4.- Que, Gianfranco después de la jornada de clases, era cuidado por la señora Marianela en
su domicilio, ubicado en DIRECCION000 comuna de DIRECCION001, quien cuidaba a otros
niños.
DÉCIMO: Valoración de la prueba y fundamentos de la absolución. Que, en concepto
de la totalidad de los integrantes del Tribunal, los antecedentes probatorios rendidos por los

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acusadores no resultaron suficientes para establecer, más allá de toda duda razonable, la existencia
de la acción sexual que se describió en la acusación. Que para arribar a tal conclusión el Tribunal
ha tenido en consideración una serie de argumentos, fundamentalmente en lo que respecta a aristas
de investigación, que surgen del cruce de información que entregan los testigos presentados al
juicio, las que durante la etapa de investigación no fueron mayormente investigadas, y la omisión
por parte de la madre del niño Gianfranco de información surgida dentro del contexto en que se
produce la develación lo que habría permitido a la profesional del SML que practica la pericia de
credibilidad del relato y daño psicológico emocional despejar otras hipótesis, todo lo cual,
finalmente, redunda en la confiabilidad del relato del menor en cuanto a que haya sido el acusado
Saldivia Sanhueza el autor de hechos que finalmente tuvo el tribunal por establecidos, según se
dirá.
En primer término, debe señalarse que la principal prueba de la imputación lo constituye el
testimonio del niño Gianfranco nacido el NUM000 de 2012, conforme aparece del respectivo
certificado de nacimiento, quien no presta declaración durante el juicio, incorporándose su
testimonio a través de la declaración prestada por su madre doña Escarlet, y por la perito
doña Romy Natalia Espinoza Martínez.
En efecto, la madre de la víctima refiere, en un primer momento, como antecedentes de
contexto, que su hijo durante el año 2017 asistía al jardín infantil “PERSONA_JURIDICA000”
entre las 8:00 y 14:00 horas, época en la cual, el niño tenía 5 años de edad, y que debido a que ella
como su marido Julio, padre del menor, trabajaban, su hijo era cuidado después de clases, entre las
14:00 y las 18:00 por la señora Marianela en el domicilio de esta, ubicado en DIRECCION000 de
la comuna de DIRECCION001, persona a la que contactó en septiembre de 2017, por
recomendación de la mamá de una compañerita de su hijo de nombre Melanie, al no tener quien lo
cuidara después de clases. Fue así como Gianfranco desde septiembre de 2017 luego de clases, era
trasladado por un furgón desde el jardín infantil hasta la casa de la señora Marianela desde donde
era retirado por su padre.
Posteriormente, y ya dando cuenta de los hechos materia de la causa, doña Escarlet,
refiere en un primer momento, que el día 3 de noviembre de 2017, un viernes, salió temprano de
su trabajo y fue a buscar a Gianfranco a la casa de la señora Marianela en compañía de su hijo
menor, al llegar, doña Marianela le reporta que su hijo había estado hablando puras leseras
“diciendo chucha su madre para arriba, chucha su madre para abajo” (sic) y que fuera a hablar al
jardín porque le estaban haciendo bullying, ya que había dicho que con la mano le “están cogiendo
su pene” (sic) se asustó con lo que le dijo la señora, respondiéndole que iría al jardín a preguntar.
Advierte la madre, que en esa conversación estaban en la puerta de entrada a la casa con la señora

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Marianela, que estaban las dos y su hijo pequeño en el coche, que Gianfranco no estaba junto a
ellas. Acto seguido, frente a esta misma escena, la madre recuerda que antes de retirarse de la casa
de doña Marianela junto a sus hijos, está le habría dicho que fuera a hablar al jardín “no vaya a ser
que se haga un cahuín como el de la niña que estuvo acá, la compañerita Melanie que dijo que
alguien le tocó el poto en su casa” (sic). Asimismo, la madre indica que al salir su hijo de la casa
de la señora Marianela lo vio raro “como con los ojos llorosos” se tomó del coche, bajó la cabeza y
se fueron caminando hasta la casa, ya en la casa le preguntó “hijito qué te pasó, por qué estás así”
(sic) respondiéndole el niño “tú mamá me vas a castigar, voy a esperar que llegue mi papá” (sic).
Al llegar su marido la vio preocupada, estaba llorando, le contó lo que la señora Marianela le había
dicho, señalándole su marido que iría a la casa de doña Marianela para conversar bien lo que había
sucedido, diciendo en ese instante el niño que acompañaría a su papá, advirtiendo la madre un
cambio en el rostro de su hijo, como de alegría, cómo “se sintió como protegido por su papá” (sic)
concurriendo ambos a la casa de la señora Marianela, informando a su marido al regresar a la casa,
que conversó con la señora Marianela, y que está le habría dicho que le enseño a Gianfranco a
decir garabatos, “huevón” para defenderse en el jardín, y es en ese momento que “ coge a su hijo
para llevarlo al hospital, para salir de cualquier duda” (sic).
Lo anterior, en lo sustancial, se encuentra en concordancia con el testimonio prestado por
el padre del niño, don Julio al informar que el día 3 de noviembre de 2017 al llegar a su domicilio
se entera por su esposa que la señora Marianela le había dicho al retirar al niño de su casa que
estaba muy mal criado, que había dicho malas palabras concha tu madre y huevón, y que en el
colegio le habían tocado la parte del trasero con el dedo, “ en la cola, con el dedo, cogiéndole el
pene” (sic). Informando que decide ir a la casa de la señora Marianela para aclarar lo sucedido,
señalándole su hijo que lo acompañaba diciendo “vamos papá” (sic). Agrega el padre que al llegar
a la casa de la señora Marianela, conversa con ella, quien le reiteró lo que andaba diciendo su hijo,
precisando que aquello no se lo había dicho a ella sino que “al caballero que estaba ahí, a Emilio”
(sic) pidiéndole si lo podía ir a buscar, se acercó el caballero, conversaron, indicando la señora
Marianela, al consultarle a su hijo quien le enseñaba a decir garabatos, “nosotros le hemos estado
enseñándole al niño a defenderse con la palabra huevón o ahuevonado, algo así” (sic), advierte al
tribunal el declarante, que en su casa nunca se ha dicho garabatos, por eso le parecía extraño que
su hijo dijera malas palabras, son personas cristianas que inculcan valores a sus hijos. Asimismo,
dio cuenta que en la conversación que mantuvo con la señora Marianela, le dijo que el niño le
había contado a Emilio lo que le pasó en el jardín, porque él y su señora le pegaban, lo castigaban,
y que por eso ella le pedía que fueran a averiguar al jardín lo que había pasado. También el padre
indica que mientras conversaban estaba presente su hijo, estaba tranquilo, pero que luego en el

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trayecto a casa se veía triste. Al llegar, conversó con su esposa y decidieron llevar al niño al
hospital para que un médico lo examinara.
De lo señalado en los párrafos que anteceden se puede colegir la preocupación que
provocó lo señalado por doña Marianela a ambos padres, en un primer momento al conversar con
la señora Escarlet, y luego con don Gianfranco, acompañada en este caso, de Emilio. Inquietud
que desbordó por instantes a la madre, dando cuenta que al llegar a su casa su marido la vio
“preocupada y llorando” le contó lo que había dicho doña Marianela, conversaron en presencia
del niño, recordemos que ambos indican que cuando el padre decide ir a hablar con la
señora Marianela, el niño de inmediato dice “ yo te acompaño papá, antecedente que repite
la suboficial Rosa Silva Zúñiga a dar cuenta de las declaraciones que tomó a los padres en
cumplimiento de una orden de investigar, destacando que conforme a los dichos de la mamá,
en ese momento el niño habría cambiado la carita, diciendo que acompañaría a su papá. Es decir,
los padres no obstante estar ante un tema delicado, exponen al niño a una conversación de adultos,
ante el descontrol de la madre frente a la situación. Y es en dicho contexto, de preocupación, de
desazón, que no obstante regresar el padre con la misma información que tenían de parte de
doña Marianela, “que el niño decía garabatos y había dicho que en el jardín le tocaban el
poto” la madre dice que lo toma a su hijo y lo llevan al hospital para ser auscultado por un
médico, sin perjuicio de preguntarle varias veces antes qué le pasaba, a lo que el niño
respondía que nada.
Continuando con el análisis de la declaración prestada por ambos padres durante el juicio,
y situándonos en el instante en que se produce la develación de los hechos traídos a juicio, y
bajo qué circunstancias, se contó con lo declarado por la madre de Gianfranco doña Escarlet,
quien informa – en un primer momento- que luego de regresar su marido y su hijo de hablar con
doña Marianela “cogió a su hijo para llevarlo al hospital, para salir de cualquier duda” (sic).
Puntualizando ante las preguntas de la fiscal, que junto a su marido llevaron a su hijo al hospital de
niños de nombre Exequiel y que mientras esperaban que los atendieran, ella insistía en
preguntarle a su hijo “qué le había pasado”, respondiendo el pequeño “que nada”, hasta que
en un momento, el pequeño dijo que quería ir al baño, lo acompañó y describe doña Escarlet
que en dicho lugar, se arrodilló frente al niño y le dijo “mírame mi amor que te está
pasando” (sic) volviendo a responder Gianfranco “que nada”, volteando la cabeza hacia un
lado, ante lo cual la madre refiere que le dice “ si tú me cuentas todo lo que pasó ese día, yo
tengo un premio” (sic) explicando al tribunal que no es que en ese momento tuviera un premio
para darle, sino que le habría dicho aquello para que cambiara la carita a su hijo, ya que lo veía
triste, y además, para que le tuviera confianza y le dijera qué era lo que le estaba sucediendo,

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respondiendo en ese momento Gianfranco, “que en casa de la señora Marianela, el tío Emilio le
cogió el pene y el poto en la pieza donde juegan play los niños” (sic) y aquello se lo habría dicho a
la señora Marianela y a la tía Mila, quienes lo retaron. Manifiesta la madre, que en ese momento
pensó que la tía Mila a la cual se refería el niño, era una tía del jardín, aclarándole de inmediato el
menor que era la esposa de Emilio. Inmediatamente, después de escuchar lo indicado por el niño
en el baño, la madre refiere que se dirigió con su hijo hasta donde los esperaba su esposo, le cuenta
lo dicho por el Gianfranco en el baño, su esposo abraza al Gianfranco y le dice que lo van a
apoyar, apreciando la madre en ese instante, que de inmediato le habría cambiado la carita de
Gianfranco, ya que antes estaba triste, no quería hablar, como que se soltó y comenzó a hablar
cosas de sus compañeros del jardín mientras esperaban ser atendido. Al respecto, también se
escuchó el testimonio del padre del niño, don Julio quien refiere que, al llegar al hospital, su
señora fue con el niño al baño y al rato ella sale llorando, le pregunta qué pasó, contándole
doña Escarlet lo que Gianfranco le dijo en el baño, esto es, que “Emilio lo ha cogido en sus partes”
(sic) agregando, “el pene le había cogido Emilio, en un cuarto” (sic).
De lo anterior, se logra apreciar una vez más la desesperación de la madre por obtener una
respuesta de su hijo frente a las consultas que le realizaba, no bastando para ella lo que el niño le
había dicho a doña Marianela, y que está le transmitió al ir a buscarlo (situación contra dicha por
lo declarado por doña Marianela, quien indicó que fue el padre, como todos los días a retirar al
niño, a quien le cuenta lo que había dicho el niño, en presencia de Emilio) sino que necesitaba
escudriñar y escuchar de su boca qué era lo que le había pasado.
En relación a las circunstancias en que se produce la develación de los hechos y la
sindicación del acusado en los mismos, que dan cuenta los padres y que se consigna en el
párrafo anterior, es necesario destacar, en este instante, sin perjuicio de lo que se dirá más
adelante, que tanto el padre como la madre, en un primer momento, nada dicen del
ofrecimiento de un regalo o un premio de parte de la madre al niño, en el baño del hospital,
para que le contará lo que le pasó en la casa de la señora Marianela. Pues bien, tanto en el
interrogatorio de la fiscal como en el de la querellante, no se refieren a aquello, ni de manera
espontánea ni mediante preguntas formuladas por tales por las mencionadas intervinientes, sino
que, aquella situación es revelada en el juicio ante las preguntas formuladas por la defensa
en el contrainterrogatorio, tanto a la madre como al padre. Al respecto, la madre, la señora
Escarlet indica que cuando llevaron al niño al hospital, y mientras esperaban ser atendidos, llevó al
menor al baño, ofreciéndole en ese instante un regalo, un premio para que le contara lo que le
había pasado en la casa de la señora Marianela, señalando “yo le dije a mi hijo te voy a dar un
premio si me cuentas qué te ha pasado en la casa de la tía Marianela, pero no con la señora

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Marianela, en la casa de la señora Marianela” (sic). Luego indica a la fiscal ante las preguntas
formuladas conforme a lo que establece el artículo 329 del Código Procesal Penal que, tal
ofrecimiento lo hizo, para cambiarle la carita triste a su hijo, si bien no tenía un regalo en ese
momento, se lo dio días después, fue un juguete. Por otro lado, el padre en su relato espontáneo
y ante las preguntas de la fiscal y la abogada querellante, nada dice en torno a tal
ofrecimiento de un regalo por parte de la madre al niño, hecho que sí confirma que ocurrió,
ante la última pregunta que le formula el abogado defensor en el contraexamen y que reza:“ Es
cierto que su señora le ofreció un regalo o un juguete para que le contara lo que le pasó en la
casa de la señora Marianela” a la que responde: “pero en ese momento no había qué regalar
ni nada, pero eso sí le dijo” (sic).
En este mismo orden de ideas, ambos padres refieren ante las preguntas de la defensa, que
tal ofrecimiento, de un regalo o un premio por parte de la madre al niño, nunca se hizo en torno a
pedirle al menor que le contara qué le había pasado en el jardín infantil, no obstante haber
informado doña Marianela, “que el niño dijo haber sido tocado en el jardín con la mano en el
pene”, refiriendo puntualmente la madre, que luego que salió ese día de la casa de doña Marianela,
le llamó la atención que aquella no sólo le dijera que fuera a consultar al colegio por lo que decía
el niño que le habían hecho, sino que también, le haya indicado la cuidadora “ no vaya a ser que se
haga un cahuín como el de la niña que estuvo acá, la compañerita, la Melanie, que dijo que alguien
le tocó el poto en su casa”, frente a lo cual supo o intuyó, que algo le había pasado a su hijo en la
casa de doña Marianela y no en el jardín, sustenta además su conjetura en el hecho que en la
libreta o cuaderno que mantenía con las profesoras del jardín como vía de comunicación, nada se
había reportado al respecto, desestimando que a su hijo le hubiese pasado algo en el jardín. Y
es así, en dicho contexto, que formula una denuncia ante personal de Carabineros que se
encontraba de turno en el mismo hospital donde fue atendido Gianfranco, luego de descartar el
médico una penetración.
De lo señalado precedentemente, se puede colegir que la madre ante el ofrecimiento
de un regalo o premio que le hace a Gianfranco “para que le contara lo que le ocurrió en la
casa de doña Marianela, “condiciona” la entrega del regalo o premio a que el niño le dijera o
respondiera a su requerimiento a algo que necesariamente debió ocurrir en la casa de la
señora Marianela y no en otro lugar, de lo contrario el niño no recibiría el agasajo ofrecido,
contaminando, de alguna manera el testimonio de su hijo, lo cual puede ser explicable en razón del
nerviosismo y desazón que experimentaba en ese momento. No olvidemos que indicó haber
llorado frente a su hijo, en más de una oportunidad, cuando estaba en la casa con sus hijos
esperando a su marido para contarle lo que había dicho la señora Marianela, insistió en más de una

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ocasión en preguntarle a su niño qué era lo que había pasado, para luego, en el baño del hospital,
volver a consultarle, pero esta vez, haciéndole un ofrecimiento de un premio o regalo para que le
contara, de manera puntual “ qué era lo que le había pasado en la casa de la señora Marianela”.
Del mismo modo, en consonancia con lo indicado por los padres, en cuanto haber
efectuado una denuncia en el mismo hospital Exequiel González Cortés, se escuchó la
declaración de la cabo segundo de Carabineros doña Evelyn Verónica Hermosilla Gutiérrez, quien
dio cuenta haber acogido una denuncia el día 4 de noviembre de 2017 a las 01:30 horas, mientras
se encontraba de turno en el hospital Exequiel González Cortés, identifica a la denunciante como
doña Escarlet, a quien por instrucción del fiscal de turno, le tomó una declaración en la que refiere
que el día 3 de noviembre, aproximadamente a las 19:00, mantuvo una conversación con su hijo,
manifestándole que en la casa de la señora Marianela, quien cuidaba al niño mientras los padres
trabajaban, habría llegado el tío Emilio le efectuó tocaciones con sus dedos en el ano y
masturbación en sus genitales, sin conocer otros antecedentes de aquella persona. Asimismo, la
funcionaria señala que dentro de las diligencias instruidas por el fiscal de turno, se trasladó al niño
y a sus padres al SML y toma de declaración al menor por personal de la 35° comisaría, diligencia
que no se pudo realizar ya que el niño se mantuvo dormido, sin poder la madre despertarlo, siendo
alrededor de las 04:00 de la madrugada. Da cuenta, además, que se decretaron medidas de
protección en favor del niño, finalizando el procedimiento cerca de las 07:00 de la mañana, sin
entrevistarse con el menor.
Continuando con el análisis de lo reportado por los padres en sus declaraciones
durante el juicio ambos dan cuenta de haber concurrido el lunes siguiente a la fecha en que
se develan los hechos a hablar con la directora del jardín infantil al que asistía Gianfranco.
Informa doña Escarlet que le contó a la directora lo comentado por la señora Marianela tanto con
relación a su hijo como a la niña Melanie conforme a lo que le refirió del cahuín que le habían
inventado, que la niña habría dicho que en su casa le tocaron el poto, a lo que le respondió la
directora que eso no había sucedido en el jardín, que están siempre pendientes de los niños, que no
podía pasar algo en dicho establecimiento educacional, ya que era un jardín pequeño. Asimismo,
la madre al declarar en estrados trajo a colación algo que le habría dicho la directora con relación a
la niña Melanie, que la niñita llegaba al jardín muy callada, sin entregar mayores detalles al
respecto, por no recordar bien lo que dijo la directora. También se refirió a que antes del 3 de
noviembre, su hijo era participativo en el jardín, tenía un cuaderno con la tía donde le informaba si
trabajaba o no, si compartía con los compañeros si le gustaba hacer las tareas, la tía le decía que
era muy alegre y participativo, pero que después que fue hablar con la directora, hubo un cambio
con su hijo Gianfranco, no quería trabajar, no quería hacer las tareas, peleaba con sus compañeros,

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tenía pesadillas, se levantaba llorando, y para que no tuviera miedo lo hacía dormir con ella,
circunstancias que aminoraron cuando el niño comenzó a ir a la psicóloga. A su turno, el padre
del niño, don Julio, corrobora lo dicho por su esposa en cuanto a que fue a hablar al jardín infantil
con la tía Sol, profesora de su hijo acerca de estos hechos, y que después, él también se entrevistó
con la tía Sol, indicando ella que en el jardín no pudo ocurrir que a su hijo le hayan tocado el pene
y el poto, ya que están en todo momento pendiente de los niños, en la hora del recreo y en la sala,
tampoco pasaba eso de las malas palabras, “ni garabatos decía su hijo”, se había ganado hasta
diplomas en el jardín. Recordó que fue el lunes siguiente a la develación de los hechos, “a la
brevedad posible, no dejaron pasar, ni dormimos esos días” (sic) a hablar al jardín.
En cuanto a lo señalado por los padres como respuesta de las profesionales del Jardín
infantil, al concurrir a informar lo acontecido a su hijo, se contó además con la declaración de
doña Sol quien se presentó ante el tribunal como la profesora de Gianfranco en el año 2017 en la
escuela “PERSONA_JURIDICA000”, donde cursaba pre kínder, recuerdo que era muy alegre
tranquilo participaba muy bien de las actividades pedagógicas y que de un tiempo a otro comenzó a
cambiar- no precisa periodo de tiempo- que citó a la mamá e hicieron un cuadrito en su cuaderno
para registrar sus comportamientos diarios. Agrega que transcurrido un tiempo, iba llegando al
colegio y se encuentra con el padre del niño quien le pide hablar, si bien no tenía hora de atención,
lo vio tan “mal” (sic) que lo atendió, informando el padre, que la cuidadora del niño estaba diciendo
que le habían golpeado el trasero y que al parecer ese comportamiento lo estaba imitando desde la
escuela, dando cuenta que le indicó en esa ocasión al papá de Gianfranco “que eso no ocurría en la
escuela, que era muy poco probable que haya ocurrido durante clases o en la hora de recreo o en la
hora del baño, ya que, por la edad de los niños nunca estaban solos” (sic). También, informa que
trabaja de manera conjunta con una asistente por lo tanto si lo nos niños no están con ambas, están
con una u otra, y que, además, en el colegio hay cámaras, por lo que le propuesto al papá que las
revisara, invitándolo a hablar con la directora, lo cual hizo, desconociendo el tenor de esa
conversación. Igualmente informa la testigo que, por dos años, 2017 y 2018 fue profesora de
Gianfranco, después no tuvo más información de investigación, “pero ya en el 2018 Gianfranco
dejó de estar al cuidado en la casa de esa señora” (sic) volviendo a tener el comportamiento del niño
que era en un inicio, en 2017, ya que incluso hacía burlas cuando ella hablaba.
A la luz de la prueba analizada precedentemente, es posible concluir, además, de manera
razonable que:
1.- Los padres de Gianfranco, no obstante aseverar que escucharon y creyeron en el relato entregado
por su hijo luego de ofrecerle la madre un regalo o un premio para que le dijera lo que le había
pasado en la casa de la señora Marianela, formulan una denuncia dirigida en contra del acusado

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Emilio Saldivia Sanhueza, y luego, al día hábil siguiente concurren al jardín infantil
“PERSONA_JURIDICA000” a dar cuenta de los hechos, e informar lo que les habría
comunicado la señora Marianela, esto es, que el niño había dicho que le tocaban el poto, el ano o
la cola en el jardín por un compañerito, circunstancia que por cierto, rechaza de plano la
profesora del menor y la directora, por la edad del niño y de sus compañeritos del curso al
que asistía, dando cuenta que los niños siempre están en compañía de un adulto, por la tía o la
asistente o por ambas, y además “por el tamaño del jardín”, porque era pequeño. Información
que habría resultado satisfactoria para los padres, y al parecer también para los investigadores de la
presente causa, por cuanto no se dio cuenta de diligencias investigativas que permitieran descartar a
ciencia cierta qué hechos de la naturaleza denunciada, pudieron haber ocurrido al interior del jardín
infantil ya sea por un par del niño o por algún adulto. Resultando para los padres satisfactorias, las
simples explicaciones dadas por docentes, no obstante haber dado cuenta la suboficial mayor Rosa
Silva Zúñiga que al informar la orden de investigar que trabajó, solicitó a la fiscalía una instrucción
particular para concurrir al jardín infantil como parte de la investigación.
2.- Que la madre, no obstante hacer ver que sus sospechas de qué algo le pasó a su hijo en la casa de
la señora Marianela, surgen de la misma información que le da la señora Marianela, principalmente,
de aquella relacionada con a la niña Melanie, esto es, “con el cahuín que le habrían inventado al
decir la niña que le habrían tocado el poto en su casa”, por el cual concluye que la niña ya no era
cuidada por la mujer al día 3 de noviembre de 2017, nada averigua al respecto, con la madre de
Melanie, considerando que fue ella quien le dio el dato de la señora Marianela para que le cuidara a
Gianfranco, lo que hace pensar de manera lógica, que alguna cercanía o conocimiento mutuo tenían,
en términos de poder contactar o intentar contactarla para consultarle qué era lo que le había pasado
a su hija frente al rumor o cahuín que había escuchado, más aún, considerando que algo de lo que
había escuchado, le podía estar pasando también a su hijo. Pero nada de aquello se dio cuenta
durante el juicio, ni por la madre, ni por otro medio de prueba de cargo. No obstante, lo anterior, la
defensa presentó el testimonio de doña Marianela quien dio cuenta de los antecedentes que informó
al papá de Gianfranco un día al recogerlo, esto es, que el niño había dicho en la mesa, mientras
almorzaban, “que en el colegio le tocaban el potito”. Explica que en ese momento se encontraban
otros niños que cuidaba en la mesa, su ex yerno Emilio y ella, que al decir el niño tales expresiones
ella y Emilio se habrían mirado y no le habrían dicho nada más al menor, decidiendo que cuando
fuera el padre a buscarlo le conversaría, aseverando que fue así, y que al día siguiente le fueron a
dejar al niño como todos los días, que habló con la mamá lo mismo que le dijo al padre, no siendo
efectivo que le haya dicho a la madre de Gianfranco de un cahuín en relación a la niña Melanie,
señalando que a la fecha en que el niño dijo lo que le pasó en el jardín, aún cuidaba a Melanie y a su

78
hermanito “que era de pañales” (sic), que el chiquito estaba ese día también sentado a la mesa y
Melanie en el baño si mal no recuerda. Informa, además, que dejó de cuidar a esos hermanitos,
porque la mamá quedó sin trabajo, y luego de eso, decidieron los padres que la madre se quedaría
en la casa para cuidarlos. Y que a Gianfranco lo cuidó alrededor de una semana más desde que dice
lo que le pasó en el jardín, indicando la madre que llegaría su mamá de Perú para cuidar a los niños.
Al contar con relatos tan contrapuestos, habría resultado favorable contar con la declaración
de la madre de Melanie, o al menos con alguna diligencia que reportara haber efectuado gestiones
en torno a dar con su individualización, paradero, entrevista o declaración en torno a aclarar o
confirmar los planteamientos de los persecutores al alero del contexto en que se desencadenan los
hechos y su develación, ya sea para confirmar la hipótesis fáctica propuesta o no.
3.- Por otro lado, llama la atención que la profesora del jardín doña Sol diga que el niño
Gianfranco ya en el año 2018 dejó de estar al cuidado de esta “señora” volviendo a tener el
buen comportamiento del inicio del 2017, si la madre refiere que desde el 3 de noviembre de
2017 el niño nunca más volvió a la casa de doña Marianela, antecedente como ya se indicara
fue además contra dicho por la prueba de la defensa, con el testimonio de la señora
Marianela, quien indica que luego que le contó al padre lo dicho por Gianfranco - ya que tanto ella
como el acusado indican que ese día fue el padre a buscar al niño- posteriormente le fueron a dejar
al niño de manera normal, habiendo hablado con posterioridad con la mamá de lo
acontecido informando lo mismo que le dijo al papá.
En concordancia con lo reflexionado en el numeral 1 precitado, en relación a que los
padres no obstante dar pábulo a lo relatado por Gianfranco luego del ofrecimiento de un regalo o
premio por parte de la madre para que le contara lo que le había pasado en la casa de la señora
Marianela, concurrieron al jardín infantil a dar cuenta de lo ocurrido e indagar acerca de la
información que entregó doña Marianela, esto es que el niño estaba siendo tocado en el potito
por un compañerito, se tuvo a la vista “ informe emocional social” emanado de la “Escuela
PERSONA_JURIDICA000 a nombre de Gianfranco en el que se consigna como fecha de informe
situación consultada: 2017, informante Sol en el que se consigna: “ Se informa que durante las
últimas dos semanas de octubre del año 2017, Gianfranco comenzó a presentar cambios de
conducta, pasando de ser un niño sociable y participativo, a un menor en ocasiones retraído, muy
pasivo en las experiencias de aprendizaje, haciendo ruidos extraños con su boca, burlándose de sus
compañeros, reaccionando molesto a los llamados de atención de la profesora a cargo. Se comenta
esta situación con la madre, quien señala que comentará con su hijo, producto ella también
evidencia cambios en su conducta similares a las narradas en la escuela. Al pasar los días, aprox.
El día 6 de noviembre del año 2017, el padre solicita una entrevista con la profesora exponiendo

79
una situación en que supuestamente había sucedido en la escuela, que le informó la cuidadora de
Gianfranco, que tenía que ver con hechos en que sus pares le golpeaban sus partes íntimas en el
baño. Se investiga la veracidad de estos hechos lo que se desestima por el motivo que son niños
menores de 5 años y que por su edad evolutiva no existe otra intención que la interacción y que
además los estudiantes no van solo al baño y esos hechos no han sido observados ni por la
profesora y asistentes técnicos. Cabe destacar que el estudiante Gianfranco sigue asistiendo a
nuestra escuela este año 2018 en el 2° nivel de transición, notando su cambio de conducta a
positiva, destacando su participación amistosa y activo” (sic) documento suscrito por Silvana
directora, y Sol educadora diferencial, ambas profesionales de la escuela
PERSONA_JURIDICA000, documento fechado 15 de octubre de 2019.
Ahora, bien en lo que respecta al informe emocional social, y a lo declarado por la
profesora o tía del jardín Sol llama la atención a estas jurisdicentes que se reporten cambios de
conducta en el niño en las dos últimas semanas del mes de octubre de 2017, es decir, con
antelación a la fecha de la develación 3 de noviembre de 2017, considerando que si bien los
persecutores apuntan en su propuesta fáctica, a un hecho único ocurrido en el 2017,
circunscribe la fiscal en la clausura el evento abusivo, en el día en que se produce la
develación. Es más, la madre en su declaración en el tribunal refiere que si bien el niño a
mediados de octubre de 2017 le habría dicho que no quería ir donde la tía Marianela diciendo que
quería que lo cuidara un familiar de su papá ( lo cual también relató a la funcionaria de
Carabineros Rosa Silva Zúñiga) la misma madre dice ante el tribunal que anteriormente al 3
de noviembre su hijo era participativo en el jardín, tenía un cuaderno con la tía donde le
informaba si trabajaba o no, si compartía con los compañeros si le gustaba hacer las tareas,
la tía le decía que era muy alegre, participativo. Después que fue hablar con la directora –
esto es el lunes siguiente al 3 de noviembre de 2027, fecha de la develación- hubo un cambio
con su hijo Gianfranco, no quería trabajar, no quería hacer las tareas, peleaba con sus
compañeros, tenía pesadillas, se levantaba llorando, para que no tuviera miedo lo hacía
dormir con ella. Esto se produjo hasta que comenzó a ir a la psicóloga, a minorar las
pesadillas, a levantarse en las noches y pasarse a su cama.
Con la finalidad de dar cuenta de las diligencias investigativas decretadas en la
presente causa, se contó con la declaración de la suboficial mayor de Carabineros doña Rosa
Angélica Silva Zúñiga, quien dio cuenta que en cumplimiento de una orden de investigar por el
delito de abuso sexual a menor de 14 años tomo conocimiento de la denuncia formulada el 4 de
noviembre de 2017 ante funcionarios de la 12 ° comisaría, por doña Escarlet quien dio cuenta que el
día 3 de noviembre a las 19:00 horas estaba en su domicilio con su hijo Gianfranco de 5 años quien

80
le había comentado que el tío Emilio le había tocado el pene y su potito con los dedos y que
también había sufrido masturbaciones, refiriendo que había concurrido al hospital Exequiel
González Cortes para constatar lesiones, que la doctora no le había encontrado nada, pero que se
había hecho la denuncia. Dio cuenta la funcionaria que tomó declaración a la denunciante madre
doña Escarlet, al padre Julio, no tomó declaración al niño. Destaca que desde el día 2 de septiembre
de 2017 la señora Marianela cuidaba al hijo de la denunciante, de lunes a viernes desde las 14 a las
18 horas, el niño asistía al jardín en horas de la mañana, y ella o su esposo retiraba al niño en la casa
de señora Marianela. Dice que el niño siempre habló bien de la tía Marianela, que lo trataba bien,
que le daba coyak y que era buena. Asimismo, la denunciante indica que el día 3 de noviembre de
2017 fue a retirar al niño a la casa de la señora Marianela y ella le dijo que su hijo estuvo ese día
diciendo puras lesera “concha tu madre para arriba, concha tu madre para abajo y que le había
contado a su yerno Emilio que en el jardín, un compañerito le hacía así mostrando su dedo en su
ano y como masturbación en su pene, que esto se lo decía para que ella fuera a conversar en el
jardín, para que contara lo que estaba pasando, también, le dijo que ella le había dicho a Gianfranco
que le tenía que contar a la mamá, pero que el niño le dijo que no, porque ella le pegaba” (sic)
habiendo quedado la madre “ helada” (sic) manifestándole que no le pegaba a su hijo y que le
habría dicho a la cuidadora que iría al jardín a preguntar. Posteriormente, refiere la testigo, que la
denunciante que llegó a la casa, conversa está situación con su esposo y que juntos le preguntan al
niño qué le pasaba, y el niño se había quedado callado, entonces su esposo le dijo “yo voy a ir a
hablar con la tía Marianela, en eso su hijo se soltó de los brazos de la madre ya que lo tenía en
brazos y le dijo “sí, yo te acompaño” (sic). Luego, regresó su esposo con el niño a la casa y le
manifiesta que la señora Marianela con su yerno Emilio cuando fueron a la casa, la señora
Marianela le había dicho que el niño decía concha tú madre y cosas así, y que repitieron lo mismo,
pero que él se da cuenta que cuando su hijo ve a esta persona, al tío Emilio, agachó la cabeza y se
quedó todo el rato callado. Y delante de la señora Marianela y de su Yerno, le había preguntado qué
quién le había enseñado a su hijo a decir a su hijo garabatos, “huevón, la palabra era huevón”
dándose cuenta la señora Marianela que ella le había enseñado a decir garabatos, huevón, era como
de amigo, señalando que al niño lo estaban molestando en el jardín. Frente a todo lo anterior los
padres deciden concurrir al hospital para constatar lesiones y una vez que estaban en la sala de
espera la denunciante advirtió que el niño estaba raro, fue al baño con él y le preguntó qué le
pasaba, dice que le preguntó textualmente “ dime, tengo un regalo, un premio, qué tienes con la tía
Marianela, y que el niño le habría dicho que el tío Emilio le habría tocado así con el dedito, su
potito” (sic) salen del baño y le cuenta a su marido lo ocurrido, que él le pregunta nuevamente al
niño y habría contado lo mismo. Añade, que la denunciante también señala en su declaración que la

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doctora que atendió al niño no encontró nada, pero sí hicieron la denuncia. A los días estaba afuera
de su casa y al pasar una patrulla de carabineros, el niño le dijo “mamá a él se lo llevaron” (sic) y la
testigo le habría preguntado “a quién” (sic) indicando el niño “al tío Emilio pues” (sic). En lo que
respecta a declaración que le entregó el padre del niño don Julio, en lo sustancial concuerda con lo
relatado por su esposa, deciden concurrir al hospital donde su señora va con el niño al baño y al
salir ella estaba llorando, contándole lo que el niño le había dicho en el baño, “que el caballero le
había hecho tocaciones al niño” (sic), hicieron la denuncia y no se habló más del tema. Aseveró la
funcionaria frente a las preguntas del abogado defensor, que en la conversación que mantuvo la
madre con la señora Marianela el día en que le cuenta de la conducta del niño y de lo que le estaban
haciendo en el jardín, el nombre de tío Emilio no aflora como autor. En ese momento tampoco dijo
el niño que el tío Emilio lo había tocado. Después la madre se retira a su domicilio y allí conversa
con su esposo y ambos le preguntan al niño qué le estaba pasando, y en ese momento tampoco dijo
el niño que fuera el tío Emilio. De igual manera, en el momento en que el padre concurre al
domicilio de la tía Marianela, y le pregunta de lo ocurrido, en ese momento tampoco dijo el niño
que había sido el tío Emilio quien lo tocaba, se mantuvo callado todo el rato. Afirma la funcionaria
que conforme al relato de ambos padres, luego de eso van con el niño al hospital, y en el baño, la
mamá le ofrece un regalo al niño, y en ese momento aflora el nombre del tío Emilio como quien lo
había tocado, “ la señora dice que estaban en el baño y le pregunta de nuevo que es lo que le pasaba
y le dice tengo un premio, dime que tienes con la tía Marianela, y ahí el niño le cuenta que el tío
Emilio le había hecho así “ (sic) juez presidenta dejó constancia de la acción realizada por la testigo,
esto es, que levanta mano derecha y con un dedo apunta hacia el ano. Añade que, la madre no
refirió en qué consistía el premio ofrecido al niño, el papá no le comentó de la situación del premio.
Dice que el papá no supo que la mamá le había ofrecido un premio al niño. No le preguntó a la
mamá por qué no le contó la oferta del premio al papá. Advierte la suboficial, que, al momento de
informar la orden de investigar, solicitó a la fiscalía una instrucción particular para concurrir
al jardín infantil al que asistía el niño Gianfranco, sin dar cuenta de la recepción de aquélla o
que otros funcionarios la hayan recibido. Diligencia investigativa que a la luz de los
antecedentes reunidos durante el juicio sin lugar habría ayudado a despejar hipótesis en torno
a que los hechos pudieron ocurrir al interior del establecimiento educacional ya sea por un
par o por un adulto. Asimismo, de lo señalado por la testigo Silva Zúñiga queda claro que la
referencia que le hizo la madre en su declaración en cuanto al ofrecimiento de un premio o
regalo al niño no fue en los términos dados durante el juicio, esto es, “si me cuentas lo que te
pasó en la casa de la tía Marianela te doy un regalo.

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De igual manera, señala la funcionaria Silva Zúñiga que concurrió al domicilio de la señora
Marianela, ubicado en DIRECCION000 de la Comuna de DIRECCION001 con la finalidad de
tomarle declaración a ella, a su hija Mila y al acusado, procediendo todos a acogerse a su derecho a
guardar silencio, una vez dados a conocer sus derechos. Advierte que la señora Marianela autorizó
que se fijará fotográficamente el domicilio, diligencia que verificó el suboficial Franco Urrutia
Carrion, quien también prestó declaración procediendo a incorporarse al juicio las fotografías
numeradas de la 2 a la 8 en las que observó el frontis del domicilio de DIRECCION000, y
dependencias tales como la puerta de entrada, un pasillo de acceso al inmueble, living comedor, sala
habilitada para juegos, además de un mapa, foto N° 1 que muestra la distancia entre el domicilio de
la señora Marianela y de la víctima.
Que, como se había esbozado anteriormente, en estos delitos, como la experiencia
demuestra de modo casi uniforme, sólo se cuenta con los dichos de la víctima como prueba
fundante, ya que, tratándose de abusos sexuales, no hay huellas físicas, objetivamente
demostrables, que los corroboren. Así las cosas, la declaración del o la menor afectada suele ser
el único medio de establecimiento de lo ocurrido y siendo una prueba singular debe cumplir con
ciertos parámetros tales como seriedad, consistencia en el tiempo y verosimilitud. Máxime
cuando está enfrentada, como en este caso, a la negativa rotunda del encartado, quien desconoce
todas las conductas que se le atribuyen. En estas circunstancias es relevante que la declaración
del menor pueda ser considerada como válida, creíble, posible y, dentro de cada caso particular,
esté refrendada por otros antecedentes indirectos.
Plasmado lo anterior, sin perjuicio de lo razonado en los párrafos que anteceden, y ya
entrando al análisis del peritaje de la psicóloga Romy Natalia Espinoza Martínez, profesional
del Servicio Médico Legal a la época en que practicó la pericia, quien examinó a Gianfranco a
fin de pronunciarse acerca de la credibilidad de su relato y daño emocional, en éste se concluye que
el testimonio tiene criterios de credibilidad, mencionando que posee una estructura lógica,
producción inestructurada, cantidad de detalles, incorporación del contexto, descripción de
interacciones, detalles inusuales, detalles superfluos, descripción de experiencia subjetiva, detalles
característicos de cómo ocurren las ofensas. En cuanto a la validez del testimonio, señala que es
libre y espontáneo, que no se formularon preguntas coercitivas ni subjetivas, lo que da cuenta de la
validez del testimonio, y los detalles hablan de la calidad de este, entendiendo que es entregado por
alguien que vivenció lo que relata. Descarta un ánimo ganancial para declarar en falso, la
inoculación de terceros, pues el niño intenta explicar lo sucedido de acuerdo con sus vivencias. De
igual manera se descartan ganancias secundarias, indicando que no hay ningún beneficio asociado a

83
la denuncia. Y en relación con el daño, expresa que se perciben cambios conductuales asociados a
los hechos que describe, conforme al reporte que entrega la madre.
Que si bien la defensa formuló reparos en cuanto a la forma de utilización de la
metodología aplicada por parte de la perito Romy Espinoza, y que sustenta en la metapericia
evacuada por el psicólogo Leonardo Mauricio Zúñiga Ogueta, lo referido por el profesional en
estrados, en nada altera lo que se ha venido razonando, considerando, como ya se ha dicho, la
perito Espinoza fue vedada de antecedentes de relevancia para su pericia por parte de la
madre del menor, información en relación al contexto de la develación que el niño le hace a la
madre, donde sitúa por primera vez al acusado como la persona que le habría tocado sus partes
íntimas, condicionando de alguna manera la entrega de un premio o regalo para el niño,
diciéndole “ te voy a dar un premio si me cuentas qué te ha pasado en la casa de la tía Marianela”
(sic), es decir, la madre le daría el premio al niño en la medida que éste le dijera que algo le había
ocurrido en la casa de la tía Marianela, requisito sine qua non, para que se verificará la entrega del
regalo o premio. Regalo que en definitiva recibió el niño, y que consistió en un juguete como
indicó la madre. Si bien doña Escarlet refiere no haberle dicho al niño cuando le entregó el regalo,
“este es el regalo que te ganaste por haberme dicho lo que te pasó en la casa de la señora”, sí se lo
entregó a los días de verificada la develación para que jugara, indicando, “toma hijito para que
juegues” (sic). Información, que en concepto de estas sentenciadoras era de real importancia para
la perito, habría permitido a la profesional, despejar otras hipótesis.
Es más, la omisión de información de la madre en los términos ya indicados, mancilla de
alguna manera su relato, pierde fuerza, seriedad y confiabilidad, habiendo sido este el que da inicio
a la presente causa, a través del cual se replica en las distintas instancias procesales, el relato que el
niño le habría dado, sin señalar de manera virtuosa, el contexto en que su hijo expresa lo que le
habría ocurrido, sindicado como autor al acusado. Pues bien, como escuchamos de la suboficial de
carabineros Rosa Silva, la madre del niño en la declaración que le toma, le da cuenta de un
ofrecimiento de un regalo, habiéndole dicho al niño “ tengo un premio, dime que tienes con la tía
Marianela” (sic), es decir, la madre no le revela a la oficial correctamente la formulación de la
pregunta que le hace y las circunstancias que la rodearon, omisión que también efectúa ante la
perito del Servicio Médico Legal, y tal como se ha venido diciendo influyeron en el despeje de
otras hipótesis
Por otro lado, y dentro del mismo contexto, si bien la perito refiere que luego de evacuar el
informe pericial, se le pidió un informe complementario donde además de pedirle que describiera
los criterios, se le solicitaba que en base a los antecedentes nuevos que se allegaron (consistentes
en una declaración de Gianfranco, un uniforme del jardín al que asistía el niño, un informe

84
policial de las declaraciones de doña Marianela, don Emilio y de una hija de la señora Marianela
cuyo nombre no recuerda, en las cuales se acogían a su derecho a guardar silencio, lo cual se
habría efectuado en el mismo domicilio a las tres personas) informara si existía la posibilidad que
el lugar donde el niño indica que ocurrieron las tocaciones fuese uno distinto, como por ejemplo el
jardín infantil, hipótesis que indicó haber descartado porque el niño en todo momento ha
mencionado que los hechos habrían ocurrido en la casa de la señora Marianela, y que aquellas
tocaciones fueron efectuados por la persona antes mencionada, Emilio. En el reporte que da la
profesional, frente a lo que se le solicitó, no da cuenta de haber sido informada de la pregunta que
le efectuó la madre a su hijo para obtener un relato y una imputación dirigida a una persona
determinada, en este caso al tío Emilio, antecedente que sí debió noticiar madre, ya que fue ella,
estando a solas con el niño en el baño del hospital Exequiel González Cortés que lo conmina a que
le diga qué le había pasado en la casa de la señora Marianela y no en otro lugar a cambio de
hacerle entrega de un premio o regalo, dato que finalmente el padre también conocía. Si bien el
abogado defensor formuló durante el contra examen preguntas a la perito relacionadas con el
ofrecimiento de un premio o regalo para la obtención de un relato, primero, por parte de un perito
y luego, dentro de un contexto familiar, la profesional respondió sin tener tampoco completa la
información respecto de la cual se buscaba tener una respuesta, indicando que ofrecimiento de un
premio o regalo puede ser para reforzar una conducta positiva y no negativa, por ejemplo, en un
proceso terapéutico cuando se le dice a los padres “si hay un buen comportamiento de este niño,
usted puede darle un premio, pero si no cumple con los objetivos, usted no se lo da” (sic) o cuando
el niño dice la verdad, “ si te lavaste los dientes te doy un premio” (sic) explica, si el niño dice sí,
la madre entrega el premio porque sabe que el niño está diciendo la verdad porque se lavó los
dientes. Añadiendo, que, cuando uno le entrega a un niño a la edad de Gianfranco un premio, uno
está premiando por una buena conducta, explicación que en concepto del tribunal, no logra
explicar la hipótesis de condicionamiento que la madre incoa al formular la pregunta “te doy un
premio o regalo si me dice que te pasó en la casa de la tía Marianela”, razonablemente, el niño
entendió que si no otorgaba una respuesta en los términos que le pedía su madre, no recibiría el
premio ofrecido, contaminando el relato del niño su madre, lo cual no significa que su testimonio
no sea cierto en cuanto a que lo hayan tocado en su poto y/o en su pene, pero de qué manera,
quién, son interrogantes a las que no se logra dar respuesta durante el juicio. A lo anterior, se
suman rubros no explorados durante la etapa de investigación en los términos ya señalados en
relación al jardín infantil al que asistía el niño, resultaba de capital relevancia, sobre todo, que esta
última circunstancia, haya sido estudiada y analizada en detalle por la profesional llamada
precisamente a plantearse hipótesis alternativas plausibles que pudieran también, de una manera

85
razonable y lógica, explicar los términos de la denuncia formulada, lo que no se hizo, de acuerdo a
lo que se ha venido argumentando.
Que, sin perjuicio de lo anterior, se debe subrayar que la construcción de los estándares
de credibilidad debe verificarse íntegramente en el juicio, de conformidad a lo establecido en
los artículos 309, 296 y 340 del Código Procesal Penal. En efecto, es el tribunal, quien por
mandato imperativo de los artículos recién citados, el llamado a analizar la credibilidad o falta de
ella, de las personas - sean testigos o peritos - que declaren en estrados, función que no le es posible
renunciar o delegar, sin perjuicio del carácter de referencia que pudiere otorgarse a las conclusiones
del peritaje, fundamentalmente en este caso, pues los dichos de la perito, en cuanto se refieren, a su
vez, a un relato proporcionado a ella por el presunto ofendido de un supuesto hecho ilícito,
necesariamente, para ser considerado como un antecedente probatorio de peso en el juicio, deben
ser corroborados por otros, o cotejados con distintos medios de prueba, producidos todos ellos en
audiencia, de manera tal, que conllevan directamente a los sentenciadores a la certeza requerida
para condenar, lo que no se verificó en la especie.
Lo mismo ha sido reconocido por la doctrina procesal nacional al decir “Los peritajes de
veracidad caen típicamente dentro de la categoría de opiniones expertas” que no son necesarias en
el primer nivel de análisis ya explicado. En efecto, la evaluación de la credibilidad de relatos de
víctimas y testigos en juicio es algo que por excelencia corresponde de manera exclusiva al
trabajo de los jueces llamados a resolver el caso. Una de las funciones centrales de un juez de
juicio es valorar la credibilidad de los relatos a partir de la información obtenida en juicio y
percibida directamente. Admitir a un testigo experto para declarar sobre ello significa invadir la
parcela de un trabajo que es de responsabilidad exclusiva del juzgador y en, alguna medida,
sustituirlo en su función. De hecho, cuando se observa la metodología utilizada en la elaboración de
estos peritajes, se puede apreciar que ella consiste básicamente en el tipo de trabajo que debiera
hacer un juez en juicio para valorar la prueba y resolver el asunto. Dicha metodología apunta a
identificar dentro del testimonio en análisis criterios agrupados en categorías que permiten
discriminar la veracidad de los relatos, como, por ejemplo, estructura lógica, detalles de los hechos,
correcciones espontáneas, entre otros. Como se apuntaba, esto es precisamente lo que el sistema
exige al juez realizar, no sólo en relación al testimonio mismo, sino que, vinculándolo, además, con
el resto de las pruebas presentadas en el juicio. Un juez podría considerar que un peritaje de este
tipo es útil para resolver el caso y, por eso, admitirlo a juicio, pero como hemos visto, la simple
utilidad del peritaje no es motivo suficiente para ello sino lo que se exige es la necesidad de
conocimiento experto y típicamente juicios de credibilidad son el trabajo del propio juez.” (Tomado

86
del apunte del autor Mauricio Duce “La prueba pericial y su admisibilidad a Juicio Oral en el nuevo
proceso penal,” página 22).
Así las cosas, como se vislumbra, es posible concluir que durante la etapa de investigación
no se estudió alguna hipótesis contraria, descansando las pretensiones de los acusadores en la
pericia de doña Romy Espinoza, quien refiere, frente a los datos que maneja y evaluó, que no
existía ganancia secundaria porque la denuncia solo le trajo pesar emocional a la víctima y a
su familia, sin conocer la profesional de aquellos antecedentes que rodearon la develación de
los hechos en el baño del hospital en que la madre le ofrece un regalo a cambio de que le diga
qué fue lo que le pasó en la casa de la señora Marianela, instante en que refiere la progenitora
que el niño sindica por primera vez al acusado como la persona que habría tocado en su zona
genital.
De todo lo expuesto, surge claramente la idea que debía analizarse la situación expuesta por
la madre en relación con el ofrecimiento del regalo con todos los ribetes que expuso durante el
juicio, y demás aristas de investigación que permitieran. El estudio de hipótesis alternativas es
fundamental en el análisis de la validez pericial de un relato, y la conclusión de que un testimonio
es creíble, conlleva, necesariamente, el descarte de las hipótesis alternativas en base a un sólido e
irrebatible fundamento, lo que en este caso, no sucedió pues, ante la omisión de información a la
profesional que llevó a cabo la respectiva pericia, y el hecho que esta temática no haya sido
abordada de manera seria por la perito- no por negligencia suya- necesariamente, afecta la
confiabilidad de sus conclusiones. No pudiendo descartar estas sentenciadoras la hipótesis de
sugestión.
Que por otro lado, solo puede afirmarse, gracias a la prueba rendida, que existen
algunos elementos que permitirían sostener que es factible que el niño Gianfranco, nacido el
día NUM000 de 2012, de 05 años de edad, haya sido tocado en su zona genital, pero aquello no
resultan suficiente para estas sentenciadoras para ser calificado como un delito de abuso sexual
contra persona menor de catorce años, previsto y sancionado en el artículo 366 bis en relación con
el artículo 366 ter ambos del Código Penal, en los términos pretendidos por los persecutores, por no
conocerse las circunstancias de los mismos, ante la ausencia de diligencias investigativas que
permitieran descartas otras aristas de investigación.
DÉCIMO: Conforme a lo dispuesto en el artículo 340 del Código Procesal Penal,
constituye un obstáculo insalvable a la formación de una decisión de condena la existencia de, al
menos, una duda razonable que se oponga a la tesis de la acusación. Así las cosas, tal fórmula legal
fija un estándar de prueba; estándar que califica de exigente y que supone “… un grado de
corroboración mayor a la preponderancia relativa para que una hipótesis pueda tenerse por

87
probada.” (Accatino, Daniela, Certezas, dudas y propuestas en torno al estándar de la prueba penal.
Revista de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso XXXVII, Chile 2º semestre
de 2011, pág. 487). Que, por su parte, la referencia a dudas razonables, con la cual se estructura
estándar, debe ser dotado de “… un sentido normativo (o contra fáctico) conforme al cual lo
relevante no es la presencia o ausencia subjetiva de dudas, sino la presencia o ausencia en el
conjunto de elementos de pruebas de condiciones que justifican una duda… lo que importa no es
que la duda se presente de hecho en el ánimo del juzgador, sino que la duda haya debido suscitarse
a la luz de las evidencias disponibles”. (Accatino, ibídem, pág. 503). Como consecuencia de la
presunción de inocencia que ampara al acusado, la carga de la prueba corresponde a quien ejerce la
acción penal, de manera tal que, si esta no satisface el estándar probatorio impuesto por la ley
procesal, no es posible arribar a una decisión condenatoria.
Así las cosas, la convicción que el Tribunal debe formarse para apoyar una decisión de
condena, descansa sobre la base de la prueba rendida durante el juicio oral, y en lo que respecta al
caso que nos reunió, la prueba de cargo incorporada no fue suficiente, allegando la defensa
elementos de prueba contribuyeron a generar dudas razonables.
UNDÉCIMO: Prueba de la defensa desestimada. En cuanto a lo declarado por La
testigo Mila, hija de la señora Marianela, quien mantenía una relación de convivencia con el
acusado a la época en que el niño Gianfranco da cuenta de las tocaciones en su cuerpo, a la luz de
lo que se ha venido razonando en los acápites que anteceden su testimonio en nada contribuye a la
decisión del tribunal, su declaración más bien otorga datos de contexto en cuanto a las personas que
vivían en el domicilio de su madre, y las actividades que cada uno realizaba a diario.
Si bien esta testigo refiere que el niño no almorzaba en la casa de su madre, sino en el
colegio, y que llevaba colaciones a la casa de doña Marianela la que comía cerca de las 16:30
horas, contradiciendo de alguna manera lo referido por la cuidadora del niño, en cuanto a que sí
almorzaba en la casa, que se sentaba a la mesa al llegar del colegio. Conforme a lo indicado por los
testigos nada obsta a que el niño pudiera comer en la casa de su cuidadora comida que esta le daba
o los restos de comida que le quedaran del colegio, ya que, si bien la madre como la tía del jardín
dijeron que el niño almorzaba en el colegio, ninguna dijo que fuera comida que se le diera por parte
del establecimiento educacional. No obstante, lo anterior, a la luz de lo razonado en los
considerandos que anteceden dicho antecedente tan debatido durante el juicio, no fue parte de las
circunstancias tenidas en vista por el tribunal para arribar a la decisión adoptada.
DUODÉCIMO: Costas. Que sin perjuicio de lo establecido en el artículo 48 del Código
Procesal Penal, se eximirá al Ministerio Público y a la querellante del pago de las costas de la causa
por estimar que tuvieron motivos plausibles para litigar.

88
Por estas consideraciones y visto, además, lo dispuesto en los artículos 1, 18, 366 bis y 366
ter del Código Penal; y artículos 1, 8, 47, 292, 295, 297 y siguientes, 325 y siguientes, 340, 341,
342, 343, 344 y 348 del Código Procesal Penal, se declara:
I.- Que se ABSUELVE a EMILIO FRANCISCO SALDIVIA SANHUEZA, ya
individualizado, de los cargos formulados por el Ministerio Público y la Querellante en su contra
como autor del delito consumado de abuso sexual contra menor de 14 años, previsto y sancionado
en los artículos 366 bis en relación con el artículo 366 ter ambos del Código Penal, presuntamente
ocurrido en fechas indeterminadas en el año 2017, en la comuna de La Cisterna en la persona de
Gianfranco
II.- Que no se condena en costas al Ministerio Público ni a la Querellante por estimar que
tuvieron motivos plausibles para litigar.
Procédase a la anonimización de la sentencia a fin de que se pueda acceder al contenido de
la misma cuidando de los datos personales de la víctima y otros datos sensibles, en los términos del
acta N° 44-2022 de la Excelentísima Corte Suprema.
Ejecutoriada que sea la presente sentencia, dése cumplimiento a lo dispuesto por el artículo
468 del Código Procesal Penal, y a lo prescrito en el artículo 17 de la Ley 18.556, modificado por la
Ley 20.568
Redactada por la magistrada Pamela Silva Gaete.

RUC : 1.701.045.364-k
RIT : 138-2023

SENTENCIA DICTADA POR EL SEXTO TRIBUNAL DE JUICIO ORAL EN LO PENAL


DE SANTIAGO, SALA INTEGRADA POR DOÑA VIRGINIA RIVERA ALVAREZ EN
CALIDAD DE JUEZ PRESIDENTE DE SALA, DOÑA PAMELA SILVA GAETE COMO
REDACTORA Y DOÑA SILVANA VERA RIQUELME COMO TERCERA JUEZ
INTEGRANTE.

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