DOCENTE: Dr. Walter Llique ROTACIÓN: Neurología FECHA: 13/10/2023 TEMA: MENINGITIS BACTERIANA Y TUBERCULOSA La meningitis es una infección grave de las meninges del cerebro o la médula espinal que suele tener un origen viral o bacteriano, aunque también son posibles causas fúngicas, parasitarias y no infecciosas. En la clase de hoy se abordó las infecciones no víricas enfocándonos tanto en la meningitis bacteriana y tuberculosa. Es de suma importancia tener en cuenta el modo de transmisión, la edad, las comorbilidades, antecedentes, etc, que nos pueden orientar qué tipo de familia sería el responsable de la infección y poder dar un tratamiento más dirigido. Asimismo antes de dar los fármacos, debemos pedir los exámenes correspondientes como vendrían a ser el hemocultivo, la punción lumbar, según las características que presente el LCR podemos determinar que agente causal está provocando la infección e instaurar lo más pronto posible el tratamiento. Por ello, es importante tener presente el presente cuadro:
Primero hablando de la meningitis bacteriana, con respecto a las vías de
transmisión, tenemos tanto hematógenas (Meningococo, neumococo, H. influenzae), por inoculación directa (postraumáticas-quirúrgicas), contigüidad de focos sépticos craneales (sinusitis, forúnculos, otitis media). Con respecto a la edad nos podría orientar que tipo de germen causal sería, en la siguiente tabla resumen se puede observar a continuación:
0-4 semanas Streptococcus agalactiae (SGB)
Escherichia coli Listeria monocytogenes
1-3 meses Streptococcus agalactiae (SGB)
Escherichia coli Listeria monocytogenes 3 m - 18 años Neisseria meningitidis Streptococcus pneumoniae Haemophilus influenzae
18-50 años Streptococcus pneumoniae
Neisseria meningitidis Haemophilus influenzae
> 50 años Streptococcus pneumoniae
Neisseria meningitidis Listeria monocytogenes También es importante los factores de riesgo, ya que si el paciente presenta alcoholismo, DM, trasplante renal, tumores hematológicos está asociado a L. monocytogenes. En cambio se tratase de procedimientos neuroquirúrgicos, se asocia a S. aureus y S. epidermidis. Asimismo, es importante tener en cuenta clínica, la tríada clásica (fiebre, trastorno del sensorio y signos meníngeos) y debemos realizar los exámenes mencionados anteriormente y así poder dar el tratamiento adecuado presentado:
Con respecto a la meningitis tuberculosa, hay que tener en cuenta el
antecedente de que presente como infección tuberculosis pulmonar o ya sea por inhalación por contacto estrecho y prolongado como en el caso de los hacinamientos. En la clínica, primero tendremos entre 2-4 semanas síntomas inespecíficos que corresponden a la fase de pródromo y luego la aparición de la tetrada (fiebre, cefaleas, signos meníngeos, alteración de la conciencia). Para el diagnóstico se debe solicitar el LCR y el ADA (≥6 o ≥ 9 UI/L según analítica). Para el tratamiento se debe dar el tratamiento empírico de 2 fases: 1° fase → HRZE diario por 2 meses (50 dosis) y 2° fase → HR diario por 10 meses (250 dosis) Finalmente, tanto en ambos tipos de meningitis se debe dar de manera profiláctica para la hipoacusia neurosensorial corticoides como prednisona o dexametasona. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS: ● P. Farreras, C. Rozzman. Medicina Interna. 19a ed. España. Elsevier: 2020 ● Harrison` s T, et al. – Principios de Medicina Interna. 20 ed, México: Edit. McGraw Hill Interamericana Editores S.A., 2018. ● Ganesh Raghu y Fernando J. Martinez.Goldman-Cecil. Medicine.6Ed.2020.Elsevier.