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el ambiente laboral
Creado el Domingo, 18 Junio 2017.
¡Atención millennials! una nueva cuadrilla de chicos de la generación Z está lista para salir de la
universidad y están listos para hacer lo necesario para incorporarse profesionalmente a la fuerza
laboral.
Los nacidos entre 1994 y el 2010, conocidos como la generación Z, siguen engrosando
profesionalmente la fuerza laboral y traen consigo un cambio de actitud y perspectiva, según un
nuevo estudio de Accenture. Estos chicos están dispuestos a comprometerse pero a cambio
quieren reconocimiento su grado de estudios, evitando sentirse subestimados como a medida el
54% de sus predecesores se sienten.
Sus actitudes reflejan una actitud que no rivaliza con los valores más tradicionales de los lugares
de trabajo, como el deseo de una trayectoria de carrera o la estabilidad. Estos empleados
potenciales no son de la vieja escuela. Sin embargo, otras actitudes demuestran que estos chicos
traen cambios en un futuro, en forma de habilidades digitales y mentalidad, a cualquier
empleador.
Para alcanzar sus metas, los Z son congruentes con sus actitudes y muestran marcadas
preferencias por compañías grandes. Después de años de declive en estas decisiones laborales, en
el 2017, según Accenture, los chicos de esta generación están más interesados en trabajar para
una gran empresa, a diferencia de los millennial.
Nacieron y crecieron con la tecnología pero padecieron los estragos de las crisis económicas que
afectaron sus entornos e influyeron en sus personalidades de forma crítica. De hecho según un
video publicado por Accenture que complementa el estudio, los sueldos a los que aspiran son
bajos y su relación con el dinero ha cambiado, tal vez más aún que los millennial.
Crear un ambiente en donde sea más fácil participar en proyectos conjuntamente; un modelo de
que rompa las barreras organizacionales que permita a los nuevos trabajadores aprender de
múltiples áreas de la empresa.
Hacer conectar las metas de cada empleado con las del sistema de valores empresariales. Las
empresas pueden mostrar a cada empleado cómo sus contribuciones apoyan el propósito y los
objetivos de la organización.
Formalizar el proceso de asignar a los entrenadores de los nuevos empleados para ayudar a
aprovechar sus fortalezas, guiar las trayectorias profesionales y proporcionar un punto de
contacto personal más allá de su liderazgo de equipo.