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FACULTAD SAN CARLOS

CARRERA: AGRONOMÍA

ASIGNATURA: BIOQUÍMICA

EL ZINC Y VITAMINA C

INTEGRANTES:

- José Carlos Benítez


- Jonatan Pereira
- David Cortaza
- Martin Vera
- Luis Wyder
- Aracely Ojeda

2023
Introducción:
La vitamina C y el zinc son dos nutrientes esenciales para el correcto
funcionamiento del cuerpo humano. Juntos, desempeñan roles fundamentales
en el mantenimiento de la salud y el fortalecimiento del sistema inmunológico.
En esta introducción, exploraremos la importancia de la vitamina C y el zinc,
sus funciones individuales y cómo su combinación puede potenciar sus
beneficios para el organismo.

La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, es una vitamina


soluble en agua con propiedades antioxidantes. Esta vitamina es esencial para
la síntesis de colágeno, una proteína crucial para la salud de la piel, los huesos,
los vasos sanguíneos y otros tejidos conectivos. Además, la vitamina C
desempeña un papel vital en el sistema inmunológico, ayudando a combatir
infecciones y protegiendo al cuerpo contra el daño causado por los radicales
libres.

Por otro lado, el zinc es un mineral esencial que participa en una amplia
variedad de procesos biológicos. Este elemento es crucial para el
funcionamiento adecuado del sistema inmunológico, la síntesis de proteínas y
el mantenimiento de la integridad celular. Además, el zinc desempeña un papel
importante en la cicatrización de heridas, el metabolismo y la función adecuada
de los sentidos del gusto y el olfato.

Cuando se combinan, la vitamina C y el zinc pueden tener efectos sinérgicos,


potenciando sus beneficios individuales. Esta combinación es especialmente
conocida por su capacidad para fortalecer el sistema inmunológico, ayudando
al cuerpo a defenderse contra enfermedades y infecciones. A lo largo de esta
exploración, examinaremos más a fondo los beneficios específicos de la
vitamina C y el zinc, así como las fuentes alimenticias y suplementos que los
contienen en cantidades significativas. En resumen, la sinergia entre la
vitamina C y el zinc se presenta como una estrategia prometedora para
mantener y mejorar la salud general del organismo.
¿Qué es el Zinc?
El Zinc (Zn) es uno de los micronutrientes que las plantas necesitan para tener
crecimiento y reproducción normales. Sin embargo, a pesar de su importancia,
el Zn es el micronutriente más deficiente en todo el mundo, aun cuando las
necesidades de los cultivos son muy pequeñas. Actualmente se habla de
deficiencia de Zn en un 40% de los suelos cultivados en todo el mundo y donde
aproximadamente el 50% de los suelos agrícolas del mundo con producción de
cereales presentan carencia de este elemento.
El Zn es un micronutriente que desempeña un papel vital en funciones claves
como la estructura de la membrana, fotosíntesis, síntesis de proteína y defensa
frente a sequias y enfermedades.
El Zn en los suelos:
Diversos investigadores han reportado que la concentración de Zn total en los
suelos es del orden de 55 mg.kg-1 (ppm), donde el rango típico oscila entre las
10 a 300 ppm.
Este contenido total se encuentra distribuido en tres fracciones. Estas son: Zn
soluble (presente en la solución del suelo); Zn intercambiable (adsorbido a los
coloides); y Zn fijado. De las tres fracciones sólo la que está en solución del
suelo y el que puede ser fácilmente desadsorbido es disponible para las
plantas (4 a 270 µg.L-1), pero también es fácilmente lixiviado como sucede en
los suelos tropicales con altas precipitaciones pluviales.
Los factores del suelo que afectan la disponibilidad de Zn en las raíces son:
alto nivel de carbonatos (CaCO3), pH elevado, suelos arcillosos, bajo contenido
de materia orgánica, baja humedad del suelo y altos niveles de óxidos de Fe y
Al. Los altos contenidos de fósforo y bajos contenidos de Zn, provocan una
severa deficiencia de este último.
Las deficiencias suelen aparecer en una etapa temprana en el ciclo de
crecimiento, particularmente cuando los suelos están muy húmedos, esto se
debe al lento crecimiento radicular comparado con el crecimiento de la parte
aérea de la planta. Otra causa adicional de deficiencia de Zn es la
intensificación de la agricultura, debido a las altas extracciones de este
nutriente por parte de los cultivos y como consecuencia su constante
agotamiento en el suelo, además, en general solo un reducido número de
productores suele aplicar alguna fuente de fertilizante con este elemento.
Funciones del Zn en las plantas:
Una de las funciones más reconocidas del Zn está relacionada con su impacto
en el correcto funcionamiento y estabilidad estructural de muchas proteínas,
donde cerca del 10 % de ellas necesitan a este elemento (2,800 proteínas
aproximadamente) para desarrollar acciones reguladoras, catalíticas y
estructurales. Por lo tanto, la integridad estructural y funcional de las
membranas biológicas depende de una cantidad suficiente de Zn.
Es fundamental tener una disponibilidad continua de Zn en la zona de raíces
durante el crecimiento de las plantas, para que actúe sobre las membranas de
las células radicales, de no ser así, éstas pierden su estabilidad y se vuelven
permeables. Como consecuencia de estos trastornos estructurales en las
membranas, las raíces siendo permeables exudan varios compuestos ricos en
carbono (por ejemplo, azucares y aminoácidos) desde las raíces al suelo, que
alimentan a los patógenos, y por ende, existe mayor susceptibilidad al ataque
de estos organismos. Por esta razón, un adecuado aporte de Zn permite
controlar la exudación de estos compuestos, y en consecuencia la infección de
raíces por patógenos se reduce drásticamente.
El Zn es esencial en los sistemas de defensa de las células en contra de los
radicales libres altamente tóxicos, ya que ofrece protección frente al daño foto-
oxidativo. Las plantas que se desarrollan en condiciones de deficiencia de Zn
no son capaces de utilizar toda la energía luminosa absorbida durante el
proceso de fotosíntesis, lo que genera un exceso de esta energía en las células
de las hojas, generando radicales libres de oxígeno, sumamente peligrosos que
dañan la clorofila y los lípidos, dando lugar a un rápido desarrollo de clorosis y
necrosis, sobre todo en días largos y con alta luminosidad.
Lo anterior se debe a que una de las enzimas clave que ayuda a desintoxicar a
la planta de radicales libres de oxígeno, el superóxido dismutasa, es
sumamente dependiente del Zn, y la falta de este nutriente provoca mayor
susceptibilidad de las plantas a la alta intensidad de la luz. Por ejemplo, la
clorosis por deficiencia de Zn en cítricos se presenta sobre todo del lado donde
les da el sol a los árboles. Una planta con un nivel adecuado de Zn genera
mayor tolerancia a los factores de estrés ambientales, por ejemplo, el estrés
por sequía La deficiencia de Zn vuelve a las plantas altamente sensibles a la
alta intensidad de luz y al calor. (Cakmak, 2014)
Existe evidencia de que el Zn también participa en la biosíntesis del ácido
indolacético (AIA), así como en su protección al ataque oxidativo por radicales
libres. El AIA es una fitohormona y se requiere esencialmente para el
crecimiento y elongación de la célula. La elongación de los brotes y la
expansión de las hojas están reguladas por las auxinas, donde el Zn tiene
influencia, ya que participa en la síntesis del aminoácido triptófano, el cual es
un precursor del AIA. La reducción en la elongación de los brotes de
crecimiento y la formación de hojuelas son síntomas característicos de la
deficiencia de Zn. Por lo tanto, un reducido crecimiento de la planta y de las
hojas es consecuencia de deficiencias severas de Zn, misma que se atribuye
probablemente a bajos niveles de auxinas en la planta. Otra función del Zn, no
menos importante, es el rol que juega para llevar a cabo una adecuada
polinización y viabilidad del polen, lo que en términos prácticos significa una
adecuada formación de semillas. Los granos de polen tienen una alta demanda
de Zn, donde se pueden encontrar hasta 80 mg de Zn.Kg-1 de polen, mientras
que las hojas con un adecuado nivel de Zn contienen aproximadamente 30 mg
de Zn.Kg-1. De acuerdo a lo anterior, los efectos de la deficiencia de Zn son
más perjudiciales en el rendimiento del grano que en el desarrollo vegetativo.
También es posible que una planta esté sometida a una deficiencia de Zn sin
que presente síntomas visibles en las hojas, a lo que se denomina “deficiencia
oculta de zinc”, sin embargo, los rendimientos se ven fuertemente afectados,
hasta en un 20 % sin síntomas aparentes.

Síntomas de deficiencia de Zn en las plantas


Uno de los primeros síntomas de deficiencia de Zn es la presencia de plantas
pequeñas que resultan de una escasez de reguladores de crecimiento. En
general, los síntomas de deficiencia de Zn pueden incluir: plantas pequeñas,
áreas de color verde claro entre las nervaduras de las hojas nuevas, hojas
pequeñas, entrenudos cortos. En el cultivo de maíz y sorgo se manifiesta en
forma de bandas anchas de color blanco a cada lado de la nervadura central en
las hojas jóvenes. En el cultivo del trigo las deficiencias provocan manchas
necróticas de color café. En el arroz, cuando la deficiencia inicia se aprecian
puntos de color rojizo en las hojas, posteriormente se aprecian manchas más
grandes de este color.
La deficiencia de Zinc en las personas:
Hoy en día en el mundo existen cerca de 2 mil millones de personas que están
afectadas por la deficiencia de este nutriente y es un problema sumamente
importante en los niños, especialmente en las zonas rurales. Lo anterior se
debe a que el Zn tiene funciones bioquímicas, inmunológicas y clínicas en el
desarrollo humano. Los principales efectos en la salud provocados por la
deficiencia de Zn son: disminución del crecimiento, afectación al sistema
inmunológico y el desarrollo neurológico, aumento de riesgo en partos
prematuros, aumento de los riesgos de sufrir diarrea, enfermedades
respiratorias y mortalidad, especialmente en la población infantil. Deficiencia de
Zn en el cultivo de maíz donde puede observarse bandas anchas de color
blanco a cada lado de la nervadura central.
Las causas de la deficiencia de Zn en las personas se deben principalmente a
su baja ingesta en la dieta, ya que, en muchos países en desarrollo, los
cereales contribuyen con casi el 75 % de la ingesta diaria de calorías, y estos
particularmente tienen bajos contenidos de este nutriente, además de que casi
el 50 % de los suelos destinados a la agricultura tienen algún grado de
deficiencia de este elemento. a los factores de estrés ambientales, por ejemplo,
el estrés por sequía Las soluciones para erradicar las deficiencias de Zn en la
dieta de las personas son: suplementos de este nutriente, a través de pastillas;
fortificación de los alimentos; diversificar la dieta; y, biofortificar los cultivos
agrícolas a través de la aplicación de fertilizantes con Zn y el fitomejoramiento.
Cabe destacar que la población infantil requiere de 10 a 15 mg de Zn
diariamente y que el cuerpo humano no puede sintetizar este elemento, por lo
que se requiere ingerirlo mediante los alimentos.
De las posibles soluciones mencionadas anteriormente, la más viable a corto
plazo es la fertilización de los cultivos con Zn, esto daría como resultados
corregir la deficiencia en la planta, aumentar en el contenido en grano,
incrementar los rendimientos y las utilidades de los agricultores. Los
fertilizantes con Zn que se recomiendan aplicar deben ser hidrosolubles, tanto
en suelos ácidos como alcalinos, y en aplicaciones foliares se debe realizar una
aplicación de este nutriente después de la floración, lo que provoca un
incremento del contenido de este nutriente en el endospermo del grano,
mejorando su rendimiento y calidad nutrimental. Reportes de deficiencia de Zn
en humanos.
Al garantizar un suministro adecuado de zinc en los cultivos, se aumenta la
productividad, la seguridad alimentaria y la calidad nutricional, que traen
importantes beneficios para la salud, así como beneficios sociales y
económicos.
¿Qué es la vitamina C?
La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, juega un papel
significativo en varias funciones relacionadas con el crecimiento y desarrollo de
las plantas. Aunque las plantas no necesitan vitamina C de la misma manera
que los animales, esta vitamina desempeña funciones antioxidantes y tiene
efectos beneficiosos en la salud de las plantas.
¿Como la vitamina C influye en la agronomía?
Antioxidante y Protección contra el Estrés Oxidativo: La vitamina C actúa
como un antioxidante en las plantas, ayudándolas a combatir el estrés oxidativo
causado por factores como la radiación ultravioleta, la contaminación
atmosférica y otros factores ambientales. Este papel antioxidante es crucial
para mantener la salud de las células vegetales y su capacidad para realizar
fotosíntesis de manera eficiente.
Síntesis de Pared Celular: La vitamina C contribuye a la síntesis de la pared
celular en las plantas. La pared celular es esencial para la estructura y la
integridad de las células vegetales. Un adecuado contenido de vitamina C
puede mejorar la resistencia de las plantas a enfermedades y patógenos al
fortalecer la barrera física de la pared celular.
Mejora de la Tolerancia al Estrés Abiótico: La vitamina C también se ha
asociado con la mejora de la tolerancia de las plantas al estrés abiótico, como
temperaturas extremas, sequías y salinidad del suelo. Al ayudar a las plantas a
combatir el estrés, la vitamina C puede contribuir a un crecimiento más
saludable y a una mayor resistencia a las condiciones adversas.
Activación de Enzimas: La vitamina C participa como cofactor en varias
reacciones enzimáticas dentro de las plantas. Estas enzimas desempeñan
funciones críticas en diversos procesos metabólicos, incluida la fotosíntesis y la
síntesis de compuestos secundarios.
Importancia de la vitamina c:
Es importante señalar que las plantas pueden sintetizar su propia vitamina C a
partir de compuestos relacionados, como el ácido D-galacturónico. Además, la
presencia y la cantidad de vitamina C en las plantas pueden variar según la
especie, el estado de desarrollo y las condiciones ambientales. La investigación
continua en este campo contribuye a comprender mejor el papel específico de
la vitamina C en la agronomía y su aplicación práctica para mejorar la
producción de cultivos y la resistencia de las plantas a condiciones adversas.
Relación del Zinc y la vitamina C:
La relación entre la vitamina C y el zinc es indirecta ya que estos son nutrientes
esenciales para el crecimiento y desarrollo de las plantas, pero la vitamina C no
se encuentra típicamente en las plantas de la misma manera que se encuentra
en los organismos animales. Sin embargo, ambos desempeñan funciones
importantes en el metabolismo y la fisiología de las plantas, y su disponibilidad
puede afectar el rendimiento de los cultivos. Aquí hay algunos aspectos clave:
Antioxidante y Estrés Oxidativo:
Vitamina C: Aunque las plantas no producen vitamina C de la misma manera
que los animales, sí sintetizan compuestos relacionados que tienen
propiedades antioxidantes. Estos compuestos ayudan a las plantas a combatir
el estrés oxidativo causado por factores ambientales.
Zinc: Actúa como cofactor para varias enzimas antioxidantes en las plantas,
contribuyendo a la defensa contra el estrés oxidativo.
Desarrollo de Pared Celular y Estructura Celular:
Vitamina C: Contribuye a la síntesis de la pared celular al participar en la
formación de enlaces cruzados en las cadenas de polisacáridos.
Zinc: Es esencial para la formación y estabilidad de proteínas y enzimas
estructurales en las células vegetales.
Activación de Enzimas y Metabolismo:
Vitamina C: Puede actuar como cofactor para algunas enzimas en las plantas.
Zinc: Es un cofactor esencial para muchas enzimas involucradas en procesos
metabólicos, incluyendo la fotosíntesis y la síntesis de proteínas.
Resistencia a Enfermedades y Patógenos:
Vitamina C: Contribuye a la resistencia de las plantas a enfermedades al
fortalecer la pared celular y promover respuestas de defensa.
Zinc: Participa en la activación de proteínas de defensa y puede mejorar la
resistencia de las plantas a patógenos.
Tolerancia al Estrés Abiótico:
Vitamina C: Puede mejorar la tolerancia de las plantas al estrés abiótico, como
la sequía y las altas temperaturas.
Zinc: Contribuye a la tolerancia de las plantas al estrés abiótico al regular
diversos procesos metabólicos.
Aunque la vitamina C no es considerada un nutriente esencial para las plantas,
los estudios sugieren que su presencia o la de compuestos relacionados puede
tener impactos positivos en la salud de las plantas. En sistemas agronómicos,
la aplicación de zinc puede mejorar la eficiencia del uso de nutrientes y la
calidad de los cultivos. Es crucial entender las interacciones complejas entre
estos nutrientes para optimizar la nutrición de las plantas y, por ende, mejorar
la productividad agrícola.
Conclusión
En conclusión, la vitamina C y el zinc desempeñan roles fundamentales tanto
en la salud humana como en la agronomía, aunque su relación es más directa
en el contexto de la nutrición humana. Ambos nutrientes, cuando se combinan,
pueden tener efectos sinérgicos, especialmente en el fortalecimiento del
sistema inmunológico.

En el ámbito de la agronomía, el zinc es un micronutriente esencial para el


crecimiento y desarrollo normal de las plantas. La deficiencia de zinc en el
suelo puede afectar significativamente la salud de los cultivos, disminuyendo la
productividad y la calidad nutricional de los alimentos. La aplicación adecuada
de zinc a través de fertilizantes puede corregir estas deficiencias y mejorar los
rendimientos agrícolas.

Por otro lado, la vitamina C, aunque no es esencial para las plantas de la


misma manera que lo es para los humanos, también desempeña funciones
importantes en la agronomía. Actúa como antioxidante, contribuyendo a la
protección de las plantas contra el estrés oxidativo y mejorando su resistencia a
enfermedades y condiciones ambientales adversas.

En resumen, la relación entre la vitamina C y el zinc en la agronomía es


indirecta pero crucial para el desarrollo saludable de las plantas. La
comprensión de las funciones específicas de estos nutrientes en los sistemas
agronómicos es esencial para optimizar la nutrición de las plantas, mejorar la
productividad de los cultivos y garantizar la calidad nutricional de los alimentos
que consumimos. Además, la relación sinérgica de la vitamina C y el zinc en la
salud humana destaca la importancia de una dieta equilibrada y la
consideración de estos nutrientes tanto en la producción de alimentos como en
la nutrición humana.
Bibliografía
María Nieves García-Casal, Maritza Landaeta, Gertrudis Adrianza de
Baptista, Carolain Murillo, Mariela Rincón, Lizet Bou Rached, Arantza
Bilbao, Hazel Anderson, Doris García, Julia Franquiz, Rafael Puche, Omar
García, Yurimay Quintero y Juan Pablo Peña-Rosas, (2013),Valores de
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venezolana
https://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0004-
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Cakmak, I. V. 2014. ¿Por qué las plantas necesitan zinc? 3er. Congreso
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https://www.intagri.com/articulos/nutricion-vegetal/nutricion-cultivos-zinc
Ernest Kyrkby y Volker Römheld, 2023, Micronutrientes en la fisiologia de
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https://exa.unne.edu.ar/biologia/fisiologia.vegetal/
MicronutrientesenlaFisiologia.pdf

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