Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Características generales
[1] Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional.
[2] Ley 7191. (30 de octubre de 1984). Ley de Martilleros y Corredores Públicos. Legislatura de la Provincia de Córdoba.
[3] Ley 26994. (1 de octubre de 2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la Nación.
4. Video conceptual
5. Referencias
6. Descarga el PDF
LECCIÓN 1 de 6
El remate público particular. Características generales
Presentación del caso
La martillera Alejandra López ha decidido incursionar en la subasta particular. Tiene el desafío de
organizar la venta en un ámbito de poco empleo en su jurisdicción, pero toma el desafío para lograr
experiencia. Como primera medida debe estudiar el modelo de contrato que empleará con sus
comitentes.
La parte más compleja para generar la relación contractual de la autorización para subastar es el
aspecto legal o jurídico de los bienes. Tiene que tener plena certeza de que estos son de propiedad del
comitente, o bien ver el modo de que quede expresamente asentado en el contrato la relación de
propiedad.
Asimismo, dentro del conjunto de bienes que han ingresado a su casa de remates, tiene dos elementos
que, por su aspecto, parecieran corresponder con un extinto fondo de comercio. No obstante, consulta
en el colegio profesional si de todas maneras debe realizar la publicación que ordena la Ley 11867 4.
Ella estima que sí.
[4] Ley 11867. (9 de agosto de 1934). Establecimientos Comerciales. Honorable Congreso de la Nación.
Por otro lado, la ley de profesional le impone que debe llevar asiento cronológico de todas sus
gestiones, por lo que comienza en la organización de comprobantes para evitar tener inconvenientes a
futuro. Debe confeccionar con total claridad el contrato para resguardar sus derechos y, con claridad,
asumir sus obligaciones. Es un desafío importante para López, ya que es la primera subasta particular
que organiza.
El remate público particular. Características
generales
Referirse a remate o subasta es hablar de una gestión que se caracteriza por realizar ventas “a viva
voz” de manera pública a fin de adjudicar el bien —luego de varias ofertas— a la mejor e insuperable
postura.
Hay diferentes ámbitos de trabajo en donde se puede llevar adelante esta tarea. Si bien la clasificación
general de dichos ámbitos comúnmente se expresa en tres: judicial, oficial y particular, cabe agregar
que siempre y en todos los casos el carácter será: comercial, porque lleva una finalidad lucrativa,
y público, porque es anunciada la venta por distintos medios, totalmente abierta a la comunidad.
Cuando se señala que el remate es privado, se hace desde la perspectiva de que el comitente
autorizante proviene de ese sector, es decir que es una persona humana o jurídica que no está en
relación con ni depende de organismos del Estado o la administración pública que caractericen, en ese
caso, al remate como judicial u oficial.
Dinamizar, organizar y gestionar subastas privadas es una tarea propia del martillero, por lo que deberá
muñirse de información, experiencia y estrategias para lograr el objetivo, que es la venta:
en localidades del interior, en virtud a los usos y costumbres, martilleros en relación con negocios de
compra venta organizan efectivas “romerías populares” durante periodos programados, caracterizando
así al remate en un verdadero encuentro social, en donde luego de concluido, el “mundo pueblerino”,
mantiene durante un buen tiempo los comentarios del acontecimiento, hablando de los objetos que se
vendieron, los vecinos que compraron y los precios pagados, logrando el remate particular, un efecto
positivamente social (Ibáñez, 2012).
Económico
Los aspectos enunciados no implican una enumeración taxativa, sino que, por un lado, conforman una
propuesta que tiende a brindar un orden en los pasos que se deben realizar, y por el otro, permiten
visualizar elementos que deben tenerse presentes.
Asimismo, la Ley 20266 expresa: “Son facultades de los martilleros: a) Efectuar ventas en remate
público de cualquier clase de bienes, excepto las limitaciones resultantes de leyes especiales” 5, por lo
que, en cada caso en particular, se deberá observar lo establecido en la presente ley, más lo
reglamentado en la ley profesional de la jurisdicción del martillero.
[5] Art. 8, Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional.
Te has brindado la oportunidad de participar, asistir, colaborar u observar —entre otras acciones— en
una subasta particular de tu provincia. ¡Te invitamos a que te sumes! Es un desafío importante para
que puedas experimentar la acción.
¿Cuáles son los ámbitos de gestión profesional del martillero?
Los ámbitos de gestión comúnmente son tres: judicial, oficial y particular, y están
regulados por la ley de colegiación. X
Los ámbitos de gestión comúnmente son dos: judicial y particular, y los determina
el profesional actuante o su mandante.
Los ámbitos de gestión comúnmente son cuatro: judicial, oficial, particular e
internacional, que dependen del CCCN.
El ámbito de gestión profesional de un martillero es el judicial, que depende del
Código Procesal Civil y Comercial de la Nación (CPCCN).
El ámbito de gestión del martillero comúnmente es el público, tal como se norma en
la Ley 20266 que regula la actividad.
ENVIAR
Correcto
Los ámbitos de gestión comúnmente son tres: judicial, oficial y particular, y constan regulados
en la ley de colegiación. En cuanto a lo regulado en la ley nacional ciertamente se basa en el remate
particular, y toma previsiones para los otros ámbitos: judicial y oficial. En el caso del remate oficial se
debe considerar que este dependerá de las resoluciones y leyes especiales del Estado.
INTENTAR DE NUEVO
¿Qué aspectos se deben tener presentes para la subasta en el ámbito particular?
Correcto
Aspectos que considerar: jurídico (objeto/sujeto), económico (lugar/tiempo) y operativo.
Conforman una base de organización para subasta. No implican una enumeración taxativa, sino que
son solo una propuesta de gestión que considera “paso a paso” todos los elementos que deben
observarse.
LECCIÓN 2 -
Autorización para subastar. Organización del remate
LECCIÓN 2 de 6
Autorización para subastar. Organización del remate
La autorización para subastar debe ser de manera expresa, por lo que materializa el contrato (de
mandato o consignación), en virtud de que en él se establecen no solo las obligaciones, sino también
los derechos del profesional. Por ello, dentro de las obligaciones del martillero, tenemos:
“Convenir por escrito con el legitimado para disponer del bien, los gastos del remate y la forma de
satisfacerlos, condiciones de venta, lugar de remate, modalidades del pago de precio y demás
instrucciones relativas al acto”6.
[6] Art. 9, inc. c), Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional.
El contrato-autorización será la base para el despliegue de todas las gestiones pertinentes para logar la
venta en pública subasta. Asimismo, los martilleros deben llevar archivo o asiento cronológico7 de
todas las gestiones pertinentes al remate, aquello que se inicia desde la autorización y concluye con la
entrega del bien adjudicado.
[7] Art. 18, Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional.
Para tener muy presente: debes recordar lo que regula el Código Civil y Comercial sobre los
siguientes contratos: mandato (a partir del art. 1319) y consignación (a partir del art. 1335). En este
último caso, no hay que olvidar relacionar la función de la comisión de garantía (art. 1343)
considerada dentro de la Ley 20266 en “derechos”, artículo 11, inciso a)8.
[8] Art. 11, inc. a), Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional.
Actualmente, la venta de todo tipo de bienes efectuada por subasta pública particular constituye un
“atractivo de curiosidad”, al margen del interés propio de algunas personas que están pendientes de las
oportunidades que genera la compraventa. Hay quienes siempre están dispuestos a participar al
enterarse de una noticia de remate, ya que
“el cliente comprador comprende absolutamente las distintas modalidades de comercialización y las
ventajas económicas que se pueden obtener en una subasta” (Ibáñez, 2012, p. 227).
A continuación, rescatamos elementos que integran el contrato. Cabe agregar que las pautas son
totalmente modificables conforme a la actuación y relación del martillero con su comitente y con las
circunstancias del mercado.
Descripción inicial
Lugar y fecha. Nombre, DNI (documento nacional de identidad) y domicilio del comitente o
mandante. Nombre, DNI, matrícula profesional y domicilio del martillero o mandatario.
Primera
El mandante (o comitente). Sr.…, titular (responsable, apoderado, dueño, etc.) del comercio
(denominación), por el presente acto contrata los servicios profesionales del Sr.…, martillero público
MP…, a los efectos de que efectúe la venta en pública subasta de los objetos que son de su propiedad.
Acompaña inventario de bienes.
Establece fecha de remate para el día…, a las… horas, en…
Segunda
El mandante Sr.… expresa que los objetos que subastar saldrán a la venta en el estado visto en que se
encuentran y que no reconocen gravamen ni otro impedimento legal para su venta.
La exhibición se realizará los días… en el horario… en el sitio determinado para la subasta.
Tercera
El mandante exhibe inventario detallado de los objetos que subastar. El martillero conformará la
organización de los lotes y el orden sugerido para que salgan a la venta. Una vez ratificado el
inventario de bienes que se van a subastar, quedará a cargo del mandante la determinación de las bases
y posturas mínimas, así como la forma de pago (dinero en efectivo, contado, financiado, tarjeta de
crédito, cheque, moneda extranjera, etc.) a cargo del comprador.
Un modo de ejemplo: El cobro del precio por la venta en el acto de remate queda a cargo del
mandante, quien se responsabiliza de entregar el recibo de compra correspondiente al comprador.
Cuarta
Ejemplo de un modo: quedará a cargo del mandante la contratación de publicidad y propaganda del
remate. Una vez conformado el inventario y su loteo, el martillero deberá presentar un bosquejo para
volantes de publicidad y para el cartel del frente del salón en donde se realizará el acto, así como un
texto con los contenidos formales y legales para radiodifusión del remate.
Quinta
Se estipula el tema de honorarios y gastos en cuanto a los preparativos previos o bien el profesional se
satisface por el pago de comisión en el acto del remate. El martillero debe tomar previsiones para
determinar quién, en el caso de una subasta desierta, se hará cargo de los gastos.
Sexta
En un caso de fuerza mayor o situación fortuita que le impida al martillero autorizado estar presente en
el acto del remate, para que no se frustre el acto este debe proponer que el subastador sea el Sr.… MP,
con domicilio..., que acepta las condiciones y responsabilidades del presente contrato ratificándose en
este acto el mandante/autorizante. Por lo tanto, en cuanto a la cláusula quinta, los honorarios serán
liquidados a quien efectúe la subasta.
Séptima
Para todos los efectos legales emergentes de este contrato, las partes constituyen domicilio especial,
establecido ut supra, donde serán válidas todas las notificaciones e interpelaciones judiciales o
extrajudiciales que se efectúen (cierre de estilo, con detalle de lugar, día, mes y año). Firmas.
Objeto que subastar: efectuar análisis de la situación del bien en los aspectos
jurídicos y económicos; es decir:
claridad jurídica del dueño de la cosa y el objeto en sí mismo;
mercado, observar la plaza de comercialización, el poder adquisitivo,
etcétera, a los efectos de fijar una fecha ideal para la venta en subasta
pública.
Nota destacada: ley 11867. Si los bienes son o han pertenecido a un fondo de
comercio, el profesional sí o sí debe realizar la publicación que señala la ley, ya que
corre el riesgo de hacerse responsable de la deuda y no podrá alegar en su defensa
desconocimiento de la ley de aplicación.
2
Programará la secuencia o modo de salir a la venta de acuerdo con el valor del lote.
Los lotes se caracterizan por su estado de conservación, antigüedad y uso, por lo
que se van estimando las condiciones posibles para la venta de cada uno de ellos,
por ejemplo, con o sin base.
3
Condiciones de venta: estas se podrán presentar con o sin base y con posturas
mínimas. El comprador podrá abonar con dinero en efectivo (moneda nacional o
extranjera), cheque certificado o tarjeta de crédito (o débito). También puede
suceder que se fije una seña y el resto se abone en cuotas.
Rendición de cuentas: hay que efectuar la rendición dentro de los cinco (5) días
posteriores al remate9, salvo que en el contrato se hubiese acordado otro plazo, pues
así lo prevé la ley nacional. No obstante, se debe tener presente lo que indica la ley
de colegiación profesional para el caso de la subasta particular.
[9] Art. 9, inc. j), Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional.
En los tiempos actuales, la mujer cumple un rol preponderante dentro de las actividades profesionales
y en la de rematador, subastador o martillero también está presente brindando su aporte en la gestión,
adaptándose a las circunstancias que demanda el comercio y como corresponde junto a sus colegas
jerarquizando la profesión.
LECCIÓN 3 -
Dos consideraciones para bienes registrables (inmueble/automotor)
LECCIÓN 3 de 6
Dos consideraciones para bienes registrables (inmueble/automotor)
A diferencia de lo propuesto para la organización de la subasta de bienes muebles no registrables, se
establece tener presentes los siguientes puntos:
Tabla 4. Dos consideraciones para bienes registrables
INMUEBLES AUTOMOTORES
INMUEBLES
Solicitar la publicidad registral (tener a la vista la matrícula y la copia de escritura), conocer su
condición catastral y requerir planos de las mejoras. Ver si existen deudas por impuestos y servicios.
Contar con una descripción precisa de las mejoras, en cuanto a superficie cubierta, antigüedad, calidad,
estado de conservación, etcétera, y poseer un estudio del mercado de comercialización.
Subastado el inmueble, se deberán observar con precisión las cláusulas del contrato de compraventa,
lo que generará las obligaciones para las partes, sobre todo aquellas atinentes a la forma de pago. Si se
deja seña, se debe establecer el día para cancelar el precio en escribanía.
AUTOMOTORES
Verificar la situación jurídica del vehículo en cuanto a su estado de dominio y contar con la respectiva
verificación (Formulario 12). Observar si posee deudas por impuestos, faltas de tránsito y demás
elementos que puedan influir por poseer características propias, como por ejemplo, para el equipo de
combustión a gas, que tenga la oblea que habilita o bien corroborar su ITV, etcétera.
Subastado el automotor, se deberán observar con precisión las cláusulas del contrato de
compraventa, lo que generará las obligaciones para las partes, sobre todo aquellas atinentes a la forma
de pago. O bien directamente convenir el día para la transferencia en el registro del automotor y luego
la entrega de posesión del vehículo.
Compartimos contigo —a modo de cierre— una cita del martillero Eduardo L. Lapa:
Será la victoria definitiva y más hermosa del profesional honrado y robustecido por una sólida
conciencia moral, que al saberla reflejar en cada uno de sus actos profesionales le granjeará el respeto
individual y la consideración general de la comunidad, de esa misma comunidad donde por otra parte
se perpetuarán inevitablemente de un modo u otro los frutos que rindiera antes o ahora su profesión,
recta y notablemente ejercida (2005, p. 13).
Los que regula el CCCN sobre los siguientes contratos: mandato (a partir del art.
1319) y consignación (a partir del art. 1335). En este último caso, no se debe
olvidar relacionar la función de la comisión de garantía. X
Los que regula el CPCCN sobre los siguientes contratos: compraventa (a partir del
art. 1319) y locación (a partir del art. 1335). En este último caso, no se debe olvidar
relacionar la función de la garantía del locatario.
Los que regula el CCCN sobre los siguientes contratos: corretaje (a partir del art.
1319) y gestión administrativa (a partir del art. 1335). En este último caso, no se
debe olvidar relacionar la función de la fianza profesional.
Los que regula la Ley 20266 sobre los siguientes contratos: asociativos y
estatutarios. En este último caso, no se debe olvidar relacionar la función de la
comisión profesional que impone la misma ley.
Los contratos que autoriza cada colegio profesional de jurisdicción, en virtud de
tener el gobierno de la matrícula profesional, imponen una modalidad de gestión
única para todo tipo de remate particular.
ENVIAR
Correcto
Los que regula el CCCN sobre los siguientes contratos: mandato (a partir del art. 1319) y
consignación (a partir del art. 1335). En este último caso, no se debe olvidar relacionar la función
de la comisión de garantía. Ciertamente, el CCCN es el contenido legal donde se señalan todos los
contratos que generan las obligaciones personales y los derechos. Para este tipo de gestión profesional,
se destacan dos tipos de contratos: de mandato y de consignación.
INTENTAR DE NUEVO
LECCIÓN 4 -
Video conceptual
LECCIÓN 5 de 6
Referencias
Lapa, E. L. (2005). Manual del Martillero Público y del Corredor. Buenos Aires, AR: Lexis Nexis.
Ley 7191. (30 de octubre de 1984). Ley de Martilleros y Corredores Públicos. Legislatura de la
Provincia de Córdoba. Recuperado de
http://web2.cba.gov.ar/web/leyes.nsf/85a69a561f9ea43d03257234006a8594/
f293fc777841fe3c032572340063673f
Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional. Recuperado de
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/verNorma.do?id=56724
Ley 26994. (1 de octubre de 2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso
de la Nación. Recuperado de http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/verNorma.do?
id=235975
LECCIÓN 6 -
Descarga el PDF
La presente lectura interactiva te brinda toda referencia general sobre la subasta de hacienda,
que se considera como un proceso especial de organización, ya que actúa normalmente como
persona jurídica al canalizarse la venta por una entidad consignataria.
Aquí conocerás una faceta del martillero público de hacienda, quien se rige no solo por la Ley
202661, la ley de colegiación provincial y el Código Civil y Comercial de la Nación (CCCN) 2, sino
que en la gestión además impactan normativas especiales de acuerdo con el tipo de bien que se
comercializa.
[1] Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional.
[2] Ley 26994. (1 de octubre de 2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable
Congreso de la Nación.
3. El remate feria
4. Referencias
5. Descarga el PDF
LECCIÓN 1 de 5
El remate de hacienda. Historia del remate feria
Encontrándose en las actividades de la feria ganadera, no comprendía el uso del DTE (documento de
tránsito electrónico) o certificado guía, por lo que le consultó tanto al colega de la firma consignataria
como, en el municipio, al empleado a cargo del trámite.
Para conocer mejor el producto y su finalidad, comenzó a indagar sobre las distintas maneras de
vender en feria y, de igual modo, cómo cambian los nombres en publicidad de acuerdo con el
producto.
Hoy visualiza que es una gran “empresa en marcha” la organización de un remate feria.
Procedimiento y organización
La subasta de hacienda en remate feria se caracteriza fundamentalmente por el tipo de bienes que
ofrece a la venta. Son “cosas” que responden al nombre de semovientes, y así lo ratifica la etimología
del vocablo que proviene del latín: se movens, se está moviendo. Cabe decir que una de las acepciones
del término, según la Real Academia Española (RAE), es “res doméstica” (s. f., https://dle.rae.es/?
w=semoviente).
En el ámbito jurídico, el término semoviente se refiere de modo exclusivo a los animales en general y,
entre ellos, al ganado y las caballerizas, que son en especial de mayor utilidad para el beneficio del ser
humano, aquel que es identificado y clasificado dentro de la respectiva normativa. Nuestro Código
Civil y Comercial solo identifica dos tipos de bienes: muebles e inmuebles, por lo que el semoviente
estaría dentro del primer orden.
Figura 1. Subasta de hacienda
Fuente: [Imagen sin título sobre subasta de hacienda]. (s. f.). Recuperado de
http://www.softhuella.com.ar/por-primera-vez-se-realizo-en-la-feria-un-remate-por-television/
Dentro de los antecedentes históricos, tenemos al Código Rural de Valentín Alsina, donde literalmente
emplea el vocablo semovientes (aunque también se emplea en el Código Procesal Civil y Comercial de
la Nación [CPCCN]) por lo que se expresa, a modo de ejemplo: “Art. 3.9 Propiedad rural, es la
consistente en bienes raíces, muebles ó semovientes, existentes ó radicados en estancias, chácaras,
quintas ó pueblos de la campaña, ó bien establecimientos ó industrias especiales” (Alsina, 1985, en
Serres, 1965, p. 43).
Te invitamos a leer el Código Rural de Alsina, el cual, como documento histórico, te sorprenderá
en información general y vocabulario de la
época: http://repositoriosdigitales.mincyt.gob.ar/vufind/Record/SEDICI_51821b84479c512bf001
4317cbded746
Por su parte, se debe tener presente en la materia lo que nos brinda Eduardo Lapa (2005) como una
breve reseña histórica de nuestra legislación en cuanto a la situación de venta de semovientes. Dice al
respecto que la Ley 205353 creó la Junta Nacional de Carnes en nuestro país, derogando los decretos y
leyes anteriores. Esta normativa había absorbido toda reglamentación existente al respecto con el fin de
solucionar inconvenientes observados hasta entonces sobre la comercialización de ganado. Hoy posee
distintas modificaciones y se integra con resoluciones.
Para poder ampliar esta información, te recomendamos leer sobre la norma en el siguiente
enlace: http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/verNorma.do?id=230077
Eduardo Lapa (2005) expresa que, a partir de la Resolución J. 1729 del 4/12/80, en que la Cámara
Argentina de Consignatarios de Ganado solicitó la unificación de la terminología empleada en la citada
norma para designar a quienes efectúan ventas de hacienda recibidas en consignación, se destacó la
conveniencia de introducir otras modificaciones a fin de que coadyuvaran a simplificar los requisitos
de inscripción de los consignatarios de hacienda. Por esto quedó sin efecto la obligación de estar
inscripto en la junta como martillero de hacienda, de modo que en la actualidad solo se requiere la
constancia de inscripción en la matrícula correspondiente a la jurisdicción, conforme a los
ordenamientos legales locales que se determinen sobre el organismo que posee el gobierno de la
matrícula.
Para ampliar información de referencia, te invitamos a leer las siguientes páginas en la web:
https://www.agroindustria.gob.ar/sitio/areas/equinos/normativa/
http://www.senasa.gob.ar/normativas/decreto-ley-nacional-22939-1983-senasa-
servicio-nacional-de-sanidad-y-calidad-agroalimentaria
También te invitamos a leer este pequeño manual en la web que hace referencia a la historia y al
proceso del remate de hacienda:
http://www.produccion-animal.com.ar/libros_on_line/08-remates_ferias_historia/
01-remates_ferias.pdf
Atención: es muy importante estar atentos a las modificaciones y resoluciones que constantemente se
introducen en políticas de ganadería en nuestro país. La recomendación es aprovechar las páginas
oficiales en la web, donde el Estado argentino, mediante instituciones como el Senasa, va actualizando
la información general para el sector productivo.
LECCIÓN 2 -
Contrato de consignación. Comisión de garantía
LECCIÓN 2 de 5
Para poder considerar los contenidos contractuales, es necesario que conozcas lo que regula el CCCN
en materia de contrato de consignación a partir del art. 1335 y, principalmente, que tengas en cuenta la
comisión de garantía regulada en el art. 1343, prevista en la Ley 20266, artículo 11, inciso a).
Tabla 1. Elementos interrelacionados en la función del martillero de hacienda
LOCAL DE REMATE-FERIA
LA GUÍA
Los formularios guías son otorgados por la municipalidad del lugar en donde se acredita la compra y
cuentan con los siguientes datos: numeración del formulario, lugar y fecha, nombre y domicilio del
propietario del ganado, medio por el cual se traslada, tipo y cantidad de animales, posee un casillero
para las marcas y otro para las señales, número de distintas marcas, destino de los animales, número de
registro y constancia de haber pagado el impuesto correspondiente. Cabe decir que, cuando el
productor quiere vender o hacer algún movimiento de hacienda, solicita el respectivo permiso de
tránsito (DTA o Documento para el Tránsito de Animales), que luego es visado por la municipalidad
(Senasa, s. f. b).
SANIDAD ANIMAL
Cada campo posee una tarjeta con un número de registro que lo individualiza (RENSPA). En él se
asientan las vacunaciones obligatorias y a dicho control lo realiza el Senasa. Son vacunas obligatorias:
aftosa y brucelosis. Son optativas o voluntarias: antiparasitarios, carbunclo bacteridiano, queratitis,
neumoenteritis, mancha y gangrena, leptospirosis, vibriosis, etcétera.
¿Cuál es el primer antecedente legal compilado en Argentina para la regulación del sector rural?
LECCIÓN 2 -
Contrato de consignación. Comisión de garantía
LECCIÓN 3 de 5
El remate feria
Pablo Junyent Bas (en Aguada et al., 2007), martillero y corredor público, especialista en la
comercialización de hacienda, expresa que es de práctica usual que el productor ganadero se
comunique con el martillero (o feriero) de la firma consignataria de su confianza para que envíen un
“recorredor” que inspeccione la hacienda que se desea vender en remate. Luego de la revisión, este
asesora y aconseja sobre la conveniencia de clasificación de los animales para el tipo de remate o
“salida” a venta (por ejemplo, remate de invernada y cría), y además le otorga una estimación
aproximada del precio que se puede obtener.
Esta función previa es sirve para mostrar un panorama correspondiente sobre los animales que posee el
productor y la situación propia del mercado de comercialización para evitar gastos innecesarios. Pero
esta información previa de conocer la cantidad y calidad de hacienda con la que se contará para el día
del remate también es útil para el feriero, ya que le permite organizar y publicitar el evento en debida
forma.
Remate-feria: la hacienda llega a las instalaciones de la feria un día antes del remate para asegurar el
“desbaste”. Esto se debe a que el animal ingresa al predio rural y en ese tiempo elimina líquidos y
materia; es decir que el peso vivo informado al día siguiente para el remate será aquel que surge luego
del desbaste. Los animales son recibidos y controlados, y se comprueba su cantidad, calidad, categoría
y documentación presentada. Una vez concluida la primera etapa, se procede al loteo, separándolos en
distintos corrales, clasificándolos por categoría, clase, estado, etcétera, y se deja asentado en el
cuaderno o libro de entradas el nombre del vendedor, el número del corral, la categoría y la clase de los
animales, las condiciones de venta (precio y plazo aproximados) y el orden en que saldrán a la venta.
La subasta comienza cuando el rematador recibe a la “tropa en la pista” y, a viva voz, con las
características propias del profesional, destaca las cualidades de los animales e incita a los potenciales
compradores a realizar ofertas. El martillero tiene bien en cuenta a quién dirige la puja, pues de
antemano ya conoce los intereses de los compradores (qué tipo de animal busca y, sobre todo, el poder
adquisitivo del oferente). Rematado el lote de animales exhibido en pista, se los arrea hacia una manga
o brete, instancia en donde le colocan en el lomo o anca —con pintura— un número que corresponde
al comprador, otorgado por el feriero antes del inicio del remate. Esto sirve para identificarlos y
brindar así agilidad en la rotación de animales para la venta. Luego son pesados y, finalmente, se los
ubica en un nuevo corral, en el que se concentrará el resto de lotes comprados por el mismo oferente.
Al concluir el remate, se confeccionan los DTA de despacho a nombre de los compradores, con su
respectivo destino. Los animales que no se venden vuelven al lugar de origen como remanente. Toda
documentación de los animales para la salida de la feria es realizada por un agente municipal del lugar
y personal del Senasa para recién cargar los camiones que transportarán la hacienda hacia su nuevo
destino con la documentación correspondiente.
Hay que tener presente que la organización del remate en feria requiere una logística muy particular y,
ciertamente, la empresa se constituye con una serie de recursos que no deben faltar: desde operarios en
campo (acarreo de tropa, peso, marca, cuidados en bienes animal), y asesoramiento legal, contable y
sanitario hasta el margen de la destreza de comercialización que demuestra el subastador de hacienda.
Ver información de RENSPA en web de
Senasa: http://www.senasa.gob.ar/cadena-vegetal/ornamentales/informacion/renspa
Remate de gordos
Se realiza en el mercado concentrador. Por ejemplo, en Buenos Aires: Liniers; en Córdoba: Ferreyra.
Se rematan animales gordos y conservas con destino a faena para cubrir las necesidades de consumo
en la población.
Remate de conservas
Faena: las vacas conservas son productos con destete hiperprecoz que fueron criadas y terminadas
exclusivamente en pastura natural. Ingresan a la venta en subastas ordinarias. Para “faena” es la venta
de animales que han llegado a la edad y aptitud conveniente para ubicar el producto para el consumo
humano.
Remates especiales:
1
Exposiciones: en estos se rematan animales de pedigrí o inscriptos en los
respectivos registros de cada asociación de criadores de raza. Se destinan a
reproducción y cría (machos o hembras, jóvenes y seleccionados). Serán empleados
como mejoradores de rodeo de inferior calidad.
2
Muestras: son similares a las exposiciones, pero no es indispensable que los
animales que se vayan a rematar tengan pedigrí o se encuentren inscriptos en los
respectivos registros, es decir que, por lo general, poseen un menor grado de
calidad. Tienen estas características los animales de cabaña, certificados por
excelencia de calidad en exposiciones de la Sociedad Rural, etcétera, además de que
deben cumplir normas internacionales de producción en cortes magros, como la
cuota Hilton.
Remates particulares: son especiales similares a los de exposición y muestras, en los que se rematan
animales de pedigrí, registrados o de buena clase. Son organizados y promovidos por los
establecimientos denominados cabañas, en donde se crían animales puros. Se pueden realizar en el
campo de la cabaña o reunirse varias cabañas y realizarse en una feria o lugar estratégico para obtener
mejores precios de venta.
https://www.veterinariargentina.com/revista/2010/08/valorizacion-de-la-
%E2%80%9Cvaca-conserva%E2%80%9D/
https://www.agroindustria.gob.ar/sitio/areas/bovinos/informacion_interes/
informes/_archivos//000005=Faena%20y%20producci%C3%B3n%20de%20carne
%20bovina/000001_Informe%20MENSUAL%20de%20faena%20bovina.pdf
Exigencias de calidad en producto bovino. Cuota Hilton:
http://www.senasa.gob.ar/cadena-animal/bovinos-y-bubalinos/industria/
establecimiento-industrializador/calidad-diferenciada
Razas bovinas en la Rural Argentina (2018):
https://www.lanacion.com.ar/economia/campo/conoce-el-origen-de-los-razas-
bovinas-presentes-en-la-rural-nid2154934
Para el 2020: https://www.infocampo.com.ar/continuan-los-preparativos-para-
argencarne-2020/
LECCIÓN 4 -
Referencias
LECCIÓN 4 de 5
Referencias
Aguada, Á. A., Ibáñez, M. A., Urcegui, G., Junyent Bas, F., Cornelli, H., Teruzzi, H. y Rostagno,
V. C. (2007). Manual Integral de Tasador. Córdoba, AR: Advocatus.
Ley 20266. (10 de abril de 1973). Martilleros. Poder Ejecutivo Nacional. Recuperado de
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/verNorma.do?id=56724
Ley 26994. (1 de octubre de 2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la
Nación. Recuperado de http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/verNorma.do?id=235975
Pernigotti, D. (s. f.). [Imagen sin título sobre remate presencial]. Recuperado de
http://danielpernigotti.com.ar/wp-content/themes/theme-pernigotti/images/remates.jpg
Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa). (s. f. a). Junta Nacional de
Carnes. Recuperado de http://www.senasa.gob.ar/tags/junta-nacional-de-carnes
Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa). (s. f. b). RENSPA. Recuperado
de http://www.senasa.gob.ar/cadena-vegetal/legumbres/informacion/renspa
LECCIÓN 5 -
Descarga el PDF
Asimismo conocerás otra faceta del martillero dentro de un espacio singular como el arte, ya que
abordar esta especialidad en la subasta implica un conocimiento más profundo del producto y su
creador.
3. Referencias
4. Descarga el PDF
LECCIÓN 1 de 4
Remates públicos especiales
Alejandra López es una activa gestora de procesos para subastar bienes. Ya matriculada, toma como
desafío personal participar en todo tipo de subasta posibles. Hoy ha sido citada para la venta de
pinturas temáticas en un salón del Jockey Club de su ciudad. Debe conocer al curador de la muestra y
atender sugerencias para la organización de la muestra colectiva.
Lo más importante que considera observar es la autenticidad de las obras, por lo que verifica la
relación de estas con su autor. No obstante, consultará con los convocadores/organizadores del evento
las condiciones de venta.
Dentro del mismo ámbito de gestión, se encuentra con un colega amigo que tendrá a cargo la venta de
apuestas hípicas en subasta. Él le comentó que le está haciendo falta un asistente para su palco porque
será una jornada de mucho movimiento. Además, le contó que le asignaron un palco y que deberá
subastar en todas las carreras, por lo que comenzó a estudiar, de cada carrera, cuál es el caballo
favorito para poder retirarlo de la venta y darles una oportunidad de apuesta a los otros competidores.
El ámbito de trabajo es muy especial, de responsabilidad singular y se debe prestar atención a las
normas impuestas y al código de ética.
El martillero también puede ser parte de la organización de las carreras, aportando sus conocimientos y
experiencia y guiando a la comisión organizadora para que el acto de la subasta se desarrolle con
éxito.
Las asociaciones que representan a los hipódromos (oficializados) en el país y, de igual manera, los no
oficializados o cuadreras conforman un calendario de carreras a principio de cada año para lograr una
mayor eficacia y no superponer agenda empleando los mismos días, debido a que cada institución tiene
una fecha clave para un evento destacado, tal como la fundación de la ciudad, la fiesta “patronal” o
actividades culturales, etcétera, por lo cual se programan eventos ordinarios y, de igual manera, pueden
suscitarse competencias extraordinarias.
Te invitamos a leer el siguiente contenido legal que impacta en el ámbito de las apuestas hípicas:
“HIPÓDROMO ARGENTINO. Decreto 274/98. Modifícanse los porcentajes que gravan la venta de
boletos del mencionado hipódromo a que se refiere el Decreto Nº 1887/85 y sus modificatorios y
Decreto Nº 292/92” recuperado de
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/45000-49999/49733/norma.htm
El remate
Llegado el día indicado, el martillero ya ubicado en el palco junto a sus asistentes, con “fusta” en mano
y tabilla exhibidora de los números de caballos que correrán la carrera en minutos, es el encargado de
llevar la oferta turfística a los apostadores, que en este caso se constituyen en los demandantes de las
apuestas.
Dentro de las clases de apuestas, podemos enumerar a título informativo las que se consignan bajo el
sistema martillo cerrado (que son adjudicadas sin tomar otra propuesta) y las apuestas abiertas (que
son las adjudicadas al mejor postor). Apuesta es el derecho a cobrar que tiene la persona que apostó a
caballo ganador entre varios apostadores de una determinada serie de remate. Mandrille (2012) expresa
al respecto que
“es el desafío más grande para el martillero lograr en los apostadores una jugada equilibrada” y dice
con esto que, “si en una carrera de cinco caballos las apuestas por caballo se venden cada una en cifras
iguales, el martillero ha logrado su objetivo primordial”.
Es evidente que, ante la presentación de una carrera de caballos, siempre existe el favorito de parte de
la gente por tratar de apostar a un determinado caballo que se destaca del resto en la carrera, ya sea por
su pedigrí, por su desempeño en pista, por sus carreras ganadas o por cambio de categoría, etcétera, y
que el resto de los competidores no reciba interés alguno por parte de los apostadores. Aquí el
martillero que trabaja con amplias facultades dentro de su palco de remates retira al caballo favorito
de las apuestas y lo deja sin efecto, es decir que realiza la subasta sin la participación en la jugada de
ese caballo favorito, ya que es “una fija”. Con esto determina la posibilidad de los apostadores de
“jugarse” por otros caballos, en caso de que gane la carrera ese caballo favorito, el cual no tenía
apuestas o había quedado fuera de ellas. Esto significa que estaría dando el derecho a cobrar el
producido de dinero en esa serie de remate a la persona que apostó al caballo que salió segundo en esa
carrera, relata Adrián Mandrille (2012).
Asimismo, Sergio Ribero (2012) nos dice que, en toda carrera de caballos, la subasta presenta una
curva de valores en las apuestas. Se comienza subastando la apuesta en valores bajos y, a medida que
los apostadores se van reuniendo frente al palco de remates, la demanda por apostar crece hasta llegar
a un pico máximo donde se obtienen los valores o precios más altos en las apuestas. Es entonces
cuando el martillero debe aprovechar al máximo a ese público interesado o apostador usando todos sus
conocimientos y habilidades profesionales, proponiéndoles “remates armados” —propuestas de pujas
— que no beneficien ni perjudiquen a ninguno de los apostadores, tratando de seducir al jugador para
que efectúe su apuesta y exprese al máximo nivel posible el interés que posee ese público apostador en
la carrera anunciada. Luego la curva de valores en las apuestas decrece porque el público va perdiendo
el interés o se va terminando la disponibilidad de dinero que ese apostador tiene programado invertir
en dicha carrera.
¿Qué es lo que regula le ley de colegiación en tu provincia? En dicha norma, ¿se consideran las
subastas hípicas? ¿Está incluida la gestión profesional en los aranceles para la actividad en el turf?
Ética
El profesional debidamente matriculado y con fianza al día en la institución que lo colegia no solo
ofrece una actitud competente —de acuerdo con la destreza de su actuar profesional—, sino que
además conlleva en sí mismo la formación e información necesaria que brindará a sus clientes, lo que
en este tipo especial de subastas se refiere a propietarios y cuidadores de los caballos que compiten,
miembros de las entidades organizativas de las carreras, apostadores y público asistente en general.
El certero cumplimiento —en tiempo y forma— de su rol le otorgará el debido respeto en el ámbito
social donde desempeña la función. Si bien rigen las normas éticas y disciplinarias de control sobre la
profesión, no cabe ninguna duda de que el martillero, en su relación de reciprocidad en su trabajo,
superará ampliamente cualquier inconveniente y siempre cumplirá toda reglamentación. Su labor será
impecable para obtener la merecida consideración social para futuros remates, y el éxito estará
garantizado para la comunidad del turf que le depositó la confianza.
El profesional debe comprender que esta especialidad posee características muy particulares, por lo
que implica un doble compromiso: no solo por administrar en ese mismo instante un dinero ajeno, sino
por estar vinculado a la apuesta y al juego. Esto, si se realiza en el ámbito “oficializado” y autorizado,
será conforme a derecho; en caso contrario, sería pasible de sanciones penales, por lo que no debe
faltar vital observancia en dicho aspecto.
Para que las apuestas hípicas sean equilibradas en la subasta, ¿qué acción realiza el martillero?
Ya que no solo administra en el instante un dinero ajeno, sino que está vinculado a
la apuesta y al juego. X
Ya que debe anotar todos los apostadores e informar a la Administración Federal de
Ingresos Públicos (AFIP). De igual modo, el dinero de apuestas se deposita.
ENVIAR
Correcto
La opción correcta es la a: “Ya que no solo administra en el instante un dinero ajeno, sino que
está vinculado a la apuesta y al juego”. Es muy especial la actuación del profesional en este espacio
donde se insta la puja para una apuesta. Las personas no son identificadas mientras pujan, sino solo
cuando abonan la apuesta, por lo que el martillero debe liquidar al ente organizador y obtener la
autorización de pago al apostador ganador si correspondiere.
INTENTAR DE NUEVO
LECCIÓN 2 -
El remate de bellas artes. Aspectos generales
LECCIÓN 1 -
Remates públicos especiales
LECCIÓN 2 de 4
La subasta en bellas artes es una de las más finas y delicadas especializaciones que puede lograr el
profesional, pues en la ejecución de la venta al mejor postor no solo se transmite la propiedad del arte
específico —que tiene una singular apreciación económica—, sino que esto conlleva una serie de
sensaciones subliminares expuestas por el creador de la obra, las cuales son admiradas y deseadas por
su comprador, y al momento de la comercialización impera una subjetividad latente en el gusto de las
personas.
El subastador —debidamente preparado en el conocimiento del arte y su historia, así como en los
campos de comercialización— que decididamente organice remates en este ámbito cumple tácitamente
el rol de marchante, por lo que alcanza todas las condiciones necesarias y legales a los efectos de estar
debidamente habilitado para llevar adelante este tipo de subastas especiales.
El perfil del público que acude a las subastas es bastante disímil, y depende de la jornada. Obviamente,
el comprador de arte es una persona con un bolsillo abultado, que, ya sea como inversión o por el mero
y sencillo disfrute del arte en sí, está dispuesto a inmovilizar una gran cantidad de dinero durante un
tiempo, que puede ser 15 años si quiere vender la pintura o la escultura de nuevo y reingresarla al
mercado, o toda una vida y pasarla a sus descendientes como parte de su herencia. (Putruele, 2018,
https://www.infobae.com/tendencias/2018/10/27/jovenes-y-arte-el-desafio-de-las-casas-de-subastas-
para-atraer-compradores-de-las-nuevas-generaciones/).
Las galerías de arte, por su parte, también producen un efecto inmediato en la comercialización, pues
suman el sello de autenticidad de las obras expuestas en sus “tiendas” y también ejercen, mediante un
especialista calificado en arte, la “curatela” al momento de seleccionar y organizar las respectivas
exposiciones y posteriores ventas en subasta, así como el detalle en catálogos de aquellas obras que
permanecen en “trastienda”. Es totalmente factible, cabe decir, que el profesional martillero pueda
abordar toda esta tarea previa, que concluirá en definitiva con la acción de “bajar el martillo”.
La venta exitosa en remate, tiene como punto de partida al autor y su obra, siendo incidencia en sus
potencialidades económicas el “marchante”, aquel originario intermediario en las relaciones del snob
artístico que comercializaba en forma privada (…)
Hoy, los nuevos aires post contemporáneos prefieren emplear el término “galerista”, como resultado
más solvente y seguro a la economía de los compradores de arte, al relacionar y depender este sujeto
con una galería, casa o firma reconocida, que prestigie la comercialización (Ibáñez, 2012).
Te invitamos a ingresar en algunas webs de este ámbito que cuentan con las firmas más importantes a
nivel mundial, como Sotheby’s y Christies, con sucursales y representantes en todo el mundo.
También podemos destacar la Tate Gallery y, en nuestro país, Bullrich Gaona Wernicke en Buenos
Aires (http://bullrichgaonawernicke.com/index.htm) o Vía Margutta en Córdoba, entre otros.
En tu jurisdicción, ¿ya visitaste una galería de arte? Pueden ser tanto las públicas (museos o espacios
comunales) como las privadas. Consulta quién es el curador, su currículum, el galerista y si allí se han
realizado actividades de subasta en algún momento.
Fuente: [Imagen sin título sobre subasta en Sotheby’s]. (s. f.). Recuperado de
https://velvet-mag.lat/2019/05/16/arte-latinoamericano-subasta-sothebys/
Contenidos referenciales en arte
Hablar de arte significa, en la práctica, hacer algo que sea bello y estético, que trascienda
subliminalmente a los efectos de que toda la subjetividad del creador se manifieste y fluya para que sea
apreciada por otros. Estas manifestaciones internas expresadas por el sujeto en su obra implican una
satisfacción intelectual del creador y un goce de belleza para el espectador. Se propone la siguiente
clasificación:
1
Artes de representación material: arquitectura y escultura.
2
Artes de representación perceptiva: pintura y música.
3
Arte de representación del pensamiento: literatura. Con esta se relacionan
aquellas que se refieren a la expresión oral, como la oratoria, la declamación,
etcétera.
¿Qué es el arte?
El arte de hoy no es totalitario ni totalizador, sino que se plantea como un tipo de utopía que sirve de
principio orientador para evaluar experiencias y así se proyecten cambios en la sociedad. Por lo tanto,
sin llegar al nivel de una macroutopía, se presenta como una utopía relativista, hecha de pequeños
actos revolucionarios. Conocer el arte nos lleva indefectiblemente a entender la humanidad.
Tomás Ezequiel Bondone, curador de la muestra en Universidad Siglo 21. (Bondone, en “Universidad
Siglo 21 presenta una colección de arte basada en la inclusión”, s. f.,
https://www.diariodecultura.com.ar/home/universidad-siglo-21-presenta-una-coleccion-de-arte-
basada-en-la-inclusion/).
Es por ello que el martillero, en el rol de subastador de arte, necesariamente debe tomar el más amplio
conocimiento en lo referente a
la historia y los procesos evolutivos del arte;
el vínculo referencial y subjetivo que le otorga el autor a su obra, es decir, deberá
conocer a fondo la vida artística del creador de la obra y las características propias
de ella;
el mercado de comercialización, a los efectos de poder contar con la información
económica para establecer las bases del remate en las condiciones de venta.
Antes de realizar la subasta —en casas de remate o galerías de arte—, se realiza una estimación para
poder establecer la base económica de venta y el cálculo del posible precio que se puede alcanzar. Esa
valoración previa intenta ser una “guía prospectiva” para los compradores a los efectos de estimular la
venta. No obstante, luego, en la dinámica de la subasta, se generarán nuevos precios de martillo
diferentes a los estimados, en donde en definitiva será la demanda del mercado en ese momento y sus
factores determinantes los que establezcan el precio real.
Un referente importante en temáticas de subasta de arte es el Banco Ciudad de Buenos Aires, ya que su
misión es brindar créditos pignoraticios a la comunidad, y la prenda comúnmente se constituye sobre
bienes suntuosos. Tiene un prestigio indiscutido en materia de “liquidación” de bienes ante el supuesto
del no cumplimiento de la obligación. Es su caso, el banco ejerce la retención del bien tras el préstamo
y otorga plazos para cancelar y rescatar la prenda. Vencido este e incumplida la obligación, se subasta.
fundamental...
LECCIÓN 3 -
Referencias
LECCIÓN 3 de 4
Referencias
Lapa, E. L. (2005). Manual del martillero público y del corredor. Buenos Aires, AR: Lexis Nexis.
Putruele, M. (2018). Jóvenes y arte: el desafío de las casas de subastas para atraer compradores de
las nuevas generaciones. Recuperado de https://www.infobae.com/tendencias/2018/10/27/jovenes-y-
arte-el-desafio-de-las-casas-de-subastas-para-atraer-compradores-de-las-nuevas-generaciones/).
Universidad Siglo 21 presenta una colección de arte basada en la inclusión. (s. f.). Diario de
cultura. Recuperado de https://www.diariodecultura.com.ar/home/universidad-siglo-21-presenta-una-
coleccion-de-arte-basada-en-la-inclusion/
LECCIÓN 4 -
Descarga el PDF
1. Ámbito oficial
3. Referencias
5. Descarga el PDF
6. Teleclase Práctica
LECCIÓN 1 de 6
Ámbito oficial
Presentación del caso
La martillera Alejandra López viajó a la Capital Federal para asistir a la subasta de la aduana
organizada por el Banco Ciudad de Buenos Aires. En la exhibición —realizada con anterioridad a la
subasta—, pudo apreciar todos los objetos importados exhibidos. No pudo obtener un catálogo.
López buscó ser atendida por algún asistente a los efectos de poder informarse sobre el procedimiento
de venta y la resolución del organismo que la llevaba adelante. Mucha información no pudo obtener,
por lo que abordó el contenido legal que regula el Código Aduanero.
Se le generó una confusión en cuanto al proceso de venta y el profesional asignado para subastar. Pero,
en la búsqueda de asesoramiento, comprendió la jerarquía legal de la norma de fondo, por sobre las
normas profesionales de cada jurisdicción. Aquí quien determina las reglas es el Estado nacional
mediante sus entidades.
Luego de estudiar el tipo de subasta y el impacto normativo en este caso especial, la martillera López
no desestimó para un futuro la posibilidad de integrar o ser sencillamente una subastadora de una
persona jurídica que esté vinculada con este tipo de proceso.
Es conveniente conocer lo relativo a la subasta de aduanas, ya que es otro de los roles que puede
desempeñar el profesional martillero. Si bien el ámbito es oficial-estatal nacional, puede que en alguna
circunstancia el profesional independiente —ya sea de modo individual o asociado— también actúe en
este tipo de subasta.
Son innumerables las posibilidades en materia de remates que el profesional puede realizar en nuestro
país, si bien los ámbitos son tres (particular, judicial y oficial), ya que las alternativas de realizar una
venta o comercialización a viva voz y al mejor postor, con o sin empleo de tecnologías, son muchas,
como se puede apreciar. Veamos, por ejemplo, otra variante en subastas, como la de asignar el “coto
de caza”, que se realiza en un contexto mixto de autorización: Estado e instituciones privadas
deportivas.
Ver ejemplo de condiciones: https://www.rionegro.com.ar/cotos-del-parque-lanin-se-remataran-en-
san-martin-EEHRN02012020201027/
En lo que respecta puntualmente a la subasta de aduana, como primera medida es necesario conocer la
norma de reglamentación, si bien es menester tener presente que la ley establece que aquellas
mercaderías que quedan bajo la custodia de la aduana, por las circunstancias que establece la Ley
224151, deben ser comercializadas en subastas públicas y que, para ello, la aduana contratará los
servicios de entidades bancarias autorizadas. Por esto se puede decir que la aduana nunca lo realiza por
su cuenta con martilleros propios, aunque cabe agregar que hay antecedentes de subastas solicitadas
por zonas francas a grupos de martilleros organizados para tales fines.
[1] Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
Entonces, en cuanto a las subastas en aduanas, la regla impone que son requeridas a bancos oficiales,
quienes llevan adelante la organización de la venta, con las exigencias de que publiciten un catálogo
detallado de las mercaderías que integran los lotes que se van a subastar y las condiciones generales de
la venta para cada operación.
La Dirección General de Aduanas no puede disponer la venta directa ni pública a personas o
comercios, empresas o instituciones, ya que las mercaderías (sin titular conocido, sin declarar o en
rezago; o bien en abandono o por comiso) se deben comercializar absolutamente por medio de la
subasta, de acuerdo con las disposiciones legales vigentes.
Fuente: [Fotografía sin título sobre aduana de Buenos Aires]. (s. f.). Recuperada de
http://www.arcondebuenosaires.com.ar/aduana-direccion-naciional_2.htm
En las subastas de la aduana, la regla impone que estas son requeridas a bancos oficiales, quienes
LECCIÓN 2 -
Ley 22415: Código Aduanero
LECCIÓN 2 de 6
[2] Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
[3] Art. 417, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
[4] Arts. 180 y 184, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
2
[5] Arts. 199, 218 y 222, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación
Argentina.
3
[6] Art. 214, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
4
[7] Art. 398, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
5
[8] Art. 502, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
6
[9] Art. 541, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
Por art. 1° de la Ley N° 25.603 B.O. 12/7/2002, se dispone el servicio aduanero procederá a anunciar
la existencia y situación jurídica de la mercadería durante un (1) día en el Boletín Oficial, indicando el
número, marca y envase u otras características suficientes para su individualización en las situaciones
previstas en este artículo. Vigencia: a partir del día siguiente a su publicación 10.
[10] Art. 541, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
salvo los supuestos previstos en el artículo 421, el servicio aduanero dispondrá la venta de la
mercadería previa: verificación, clasificación y valoración de oficio cuando:
a) hubiere transcurrido el plazo de 60 días para acreditar y solicitar destinación, sin perjuicio a pago de
multa, según lo dispuesto en el art. 418;
c) hubiere vencido el plazo para cumplir la destinación aduanera o la restitución a plaza que se hubiere
solicitado respecto de mercadería sometida al régimen de depósito provisorio de exportación, de
conformidad con lo previsto en el artículo 399;
una vez dispuesta la venta (…), no se admitirá diferente destinación que la definitiva que se fijare en el
acto que ordenare la venta, caducando todos los derechos que el interesado hubiere dejado de ejercer
respecto de los actos ya practicados12.
[12] Art. 420, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
1. Se considerará que se ha hecho abandono de la mercadería a favor del Estado nacional, sin admitirse
con posterioridad reclamación alguna, si hubiere vencido el plazo previsto en el artículo 418 sin que se
hubiera solicitado alguna de las destinaciones autorizadas en cualquiera de los siguientes supuestos:
a) si en depósito o en cualquier otro lugar de la zona primaria aduanera se hallare mercadería respecto
de la cual se desconociere su titulare conformidad con lo previsto en el artículo 214);
b) si la importación para consumo de la mercadería en cuestión se hallare afectada por una prohibición
de carácter económico.
[13] Art. 421, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
La venta a que se refiere el artículo 419 se realizará en pública subasta o por oferta bajo sobre
cerrado, salvo que, mediando causas fundadas que así lo justifiquen, la Administración Nacional de
Aduanas:
[14] Art. 422, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
En todos los casos, es muy importante considerar las resoluciones oficiales que tienden a realizar una
actualización del proceso con la única finalidad de garantizar el éxito de la operación y cubrir todos los
gastos e impuestos correspondientes.
También es considerada la modalidad de venta bajo sobre; no obstante, se debe tener presente que el
Estado se reserva el modo de liquidar los bienes. Si bien está prevista la forma mediante una subasta
pública, ello no implica que necesariamente en todos los casos así se resuelva.
Te invitamos a seguir leyendo el Código Aduanero, a modo informativo. No obstante, será oportuno
que, ante la situación de anuncio de subastas en este ámbito, consideres asistir e informarte acerca de
los procesos.
[16] Art. 447, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
[17] Art. 448, Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina.
Nota: se sugiere complementar la información general con lo normado en el Código Aduanero de la
Nación.
El remate aduanero es la gestión que surge por resolución oficial de la Administración Nacional de
Aduanas —hoy en conjunto con AFIP—: ofrece a la venta en pública subasta mercaderías que serán
adjudicadas al mejor postor, quien deberá cumplir con las condiciones publicitadas previamente. A los
interesados se les otorgará la debida seguridad jurídica y el acto se materializará mediante entidad
bancaria oficial.
Fiscales: existe una obligación tributaria causada que debe ser satisfecha. La
subasta es un medio legal de extinción de la obligación.
El acto de remate —según ley— estará organizado a través de una entidad bancaria oficial que preverá
absolutamente todo lo concerniente al evento. Llevará adelante la difusión y publicidad precisa de las
condiciones, conforme a lo establecido en la resolución que ordena la medida. Establecerá a qué tipo
de público está dirigida la subasta (persona física o jurídica, condiciones ante la AFIP). “En la
actualidad, conforme a convenios celebrados expresamente, casi todos los remates son efectuados por
intermedio del Banco Ciudad de Buenos Aires” (Lapa, 2005, p. 410).
Ver calendario de subastas: http://www.afip.gob.ar/rematesySubastas/#ver
impuestas…
LECCIÓN 3 -
Referencias
LECCIÓN 3 de 6
Referencias
Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). (s. f.). Control de Mercaderías [PPT en
línea]. Recuperado de
http://www.afip.gob.ar/informacionVisual/documentos/infoControMercaderias.pdf
[Fotografía sin título sobre aduana de Buenos Aires]. (s. f.). Recuperada de
http://www.arcondebuenosaires.com.ar/aduana-direccion-naciional_2.htm
Lapa, E. L. (2005). Manual del Martillero Público y del Corredor. Buenos Aires, AR: Lexis Nexis.
Ley 22415. (2 de marzo de 1981). Código Aduanero. Presidente de la Nación Argentina. Recuperado
de http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/15000-19999/16536/texact.htm
LECCIÓN 4 -
Revisión del módulo
LECCIÓN 4 de 6
Revisión del módulo
Hasta acá aprendimos
El remate público particular
–
Aprendimos mediante los contenidos abordados cómo se desarrolla la subasta pública privada, tras la
puesta en escena de contenidos referidos a la organización de la subasta con el respectivo impacto
normativo.
El remate de hacienda
–
Comprendimos el desarrollo e impacto de normas especiales que debe tener presente un martillero en
el ámbito de subastas de hacienda, asimismo lo que señala el CCCN en cuanto al contrato de
consignación y comisión de garantía.
Remates públicos especiales
–
Estudiamos los aspectos generales de dos tipos de subastas en ámbitos especiales, como es el caso de
las apuestas hípicas y las subastas de arte, con la finalidad de evidenciar distintos marcos de gestión
profesional.
Ámbito oficial
–
Abordamos referencias de una norma especial que regula sobre la subasta oficial y la posible relación
de gestión que puede tener una martillero ante esta posibilidad de gestión.
LECCIÓN 5 -
Descarga el PDF