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¿Es la Pena Permanente Revisable un modelo de disuasión de la criminalidad para la

sociedad?
La prevención general, aspira a disuadir de la comisión de delitos al conjunto de la
sociedad; continuando en esta línea, la prevención general positiva de Günter Jakobs,
establece que las normas configuran la estructura del orden social, el delito es
entendido como una defraudación de expectativas del sistema social y la pena tiene el
significado de mantener dichas expectativas, la imposición de la pena es la forma que
tiene el sistema social de tratar las defraudaciones a costa del infractor, y el mal que se
impone con la pena tiene que ver con su fin preventivo-general: asegurar la
probabilidad de seguimiento de la norma. Según mi opinión, encaja en la critica
contractualista, ya que los individuos de la sociedad intentan reconducir la conducta
del delincuente para que este no vuelva a delinquir, basándose en una fidelidad al
derecho. Se trata de adquirir de forma natural una fidelidad al ordenamiento, y por
tanto, evitar la comisión de delitos.
Según esta corriente, tiene una gran importancia la función que el derecho tiene sobre
los ciudadanos fieles, y tratar por tanto el derecho como una obligación natural
inherente al hombre y no como una imposición por miedo a las penas.
Se podría entender, que la imposición de una pena de mayor grado seria indiferente y
no condicionante para la conducta de los ciudadanos, ya que estos simplemente no
harían hechos constitutivos de delitos por su propia ética y moral interna, y no por un
factor externo, que en este caso seria la PPR, cuya pena es mayor que el resto de las
tipificadas. Aunque esto tampoco podría afirmarlo completamente, porque lo que él
entiende es que las penas no tienen carácter intimidatorio, pero sí tienen un carácter
preventivo; siguiendo esta línea considero que la PPR no sería un modo de disuasión de
la criminalidad, ya que no hay una coacción por parte del sistema, pero si sirven para
orientar la conducta del ciudadano. Para lograr la fidelidad necesaria que el busca de
los ciudadanos a las normas se necesita aparte de una visión normativa, la realidad
social.
La prevención general negativa, que se refiere a que las penas tienen un carácter
intimidatorio frente a la sociedad, entendiendo que el que no es fiel al derecho es el
enemigo. Sin embargo, la pena ya no es proporcional a la lesividad social o gravedad
del hecho, si no a lo necesario para que se conserve la fidelidad normativa y no es
posible desvincularse de las características vigentes del sistema político, social y
jurídico para la imposición de una pena.

Lo importante es influir en las dinámicas sociales, para prevenir futuras conductas


delictivas, e imponer una pena que tenga éxito para que los individuos sean fieles al
derecho y por tanto que sea compatible con la realidad. Se ha demostrado que la pena
no depende tanto de la sanción en si misma, si no que depende de como el Estado
reaccione frente a esos hechos contrarios a ley, manifestando su desaprobación
jurídica.
La imposición de una pena mas dura como es la PPR no genera la seguridad de que en
un futuro no se vayan a cometer hechos delictivos o que disminuya la delincuencia, si
no asegurar con la pena que siga existiendo un cierto orden social y normativo. Tener
en cuenta la realidad social para que el derecho siga teniendo carácter impositivo, y
satisfacer los deseos de la sociedad en la medida de lo posible, para prevenir la
desintegración del orden social y en específico del Estado social y democrático del
derecho.
Considero que la PPR tiene la finalidad de satisfacer el ansia de la sociedad por
combatir contra la delincuencia, aunque esto no demuestra que sirva para la
estabilización del orden social, si no para la estabilización de la sociedad.

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