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UNIVERSIDAD NACIONAL DE BARRANCA-UNAB

``AÑO DE LA UNIDAD, LA PAZ Y EL DESARROLLO``

ESTUDIOS GENERALES

TEMA:
TRABAJO DE INVESTIGACION N.º 04
ESTUDIANTES:

REQUENA JULCA MYREYLLA


RETUERTO PINTO ANGELO
RIOS VILLAREAL ARACELY
RIVERA ARGUINIGO YULISA
RODRIGUEZ SOLIS ANGELICA
ROSALES LOBATON FARID

DOCENTE:
VICTOR DURAND RUIZ

AREA:
BIOLOGIA
SECCION: 11

BARRANCA_2023
INTRODUCCION

El sistema cardiovascular es uno de los sistemas más importantes del cuerpo humano,

ya que es el encargado de transportar oxígeno y nutrientes a todas las células del

cuerpo y retirar los desechos metabólicos. Este sistema está compuesto por el corazón,

los vasos sanguíneos y la sangre que circula por ellos. Además, el proceso de

producción de energía en las células también es fundamental para el correcto

funcionamiento del cuerpo humano. En este informe, se explorará en detalle el papel de

los glóbulos rojos en el transporte de oxígeno y nutrientes, así como otros elementos

importantes de la sangre y su función en el sistema cardiovascular.

Los glóbulos rojos, también conocidos como eritrocitos, son células sanguíneas

especializadas que transportan oxígeno desde los pulmones a los tejidos del cuerpo y

eliminan el dióxido de carbono producido por el metabolismo celular. Los eritrocitos

contienen una proteína llamada hemoglobina, que se une al oxígeno en los pulmones y

lo libera en los tejidos que lo necesitan. Además, los eritrocitos también transportan

nutrientes como la glucosa y los ácidos grasos a las células del cuerpo.

El ciclo de Krebs, también conocido como ciclo del ácido cítrico, es un proceso clave en

la producción de energía en las células. Este ciclo se lleva a cabo en las mitocondrias,

que son orgánulos celulares encargados de la producción de energía. Durante el ciclo

de Krebs, los nutrientes como la glucosa y los ácidos grasos se descomponen en

moléculas más pequeñas, liberando energía que se utiliza para producir ATP, la

molécula de energía utilizada por las células.


1. GLÓBULOS ROJOS

La sangre es un líquido de color rojo que circula por

el sistema vascular sanguíneo y está formada por

plasma y elementos como los eritrocitos, leucocitos y

plaquetas. Así mismo, dentro de sus funciones se

encuentra el transporte de elementos nutritivos,

oxígeno, y dióxido de carbono, así como proteger el

organismo. Los glóbulos rojos, también conocidos como eritrocitos o corpúsculos rojos, son un

tipo de célula sanguínea que se encuentra en la sangre y son portadores de oxígeno a todas

las partes del cuerpo. Los glóbulos rojos tienen su origen en la medula ósea, que es la semilla

de la sangre. Allí, un célula con núcleo denominada eritroblasto, que procede de la célula

madre de la serie eritropoyética, pasa por diferentes estadios de diferenciación, maduración y

proliferación.

Los eritrocitos se producen en la médula ósea roja, desde allí también son producidas las

plaquetas del organismo, estos se fabrican específicamente en la zona esponjosa de los

huesos largos, como el fémur, y de los huesos planos, como los del cráneo, las vértebras, las

costillas y el esternón. La formación de los eritrocitos está regulado por la hormona

eritropoyetina producida desde las células de los riñones y su función es estimular a la médula

ósea roja para que fabrique los glóbulos rojos.

1.1 Función

Su función principal de lo eritrocitos es transportar oxígeno a

los tejidos del organismo y realizar el intercambio por dióxido

de carbono, el cual es dirigido hacia los pulmones donde es


eliminado. Los glóbulos rojos se producen en la médula ósea roja de los huesos, y su

formación está regulada por la hormona eritropoyetina producida desde las células de los

riñones. Tienen una alta concentración de hemoglobina, una proteína que se une al oxígeno de

los pulmones y le da a la sangre su color rojo. Estas células tienen un tiempo de vida de 90 a

120 días, durante los cuales recorre unos 300 Km a través de la circulación sanguínea,

impulsados por la fuerza de la bomba que es el corazón, una vez cumplido este tiempo son

eliminados a través del bazo e hígado. Gran parte de su recorrido lo realiza por las arterias y

arteriolas de tamaños superiores, que suponen los conductos vasculares de transporte, y que

permiten un tráfico fluidos de los eritrocitos.

Los eritrocitos se producen en la médula ósea roja, desde allí también son producidas las

plaquetas del organismo, estos se fabrican específicamente en la zona esponjosa de los

huesos largos, como el fémur, y de los huesos planos, como los del cráneo, las vértebras, las

costillas y el esternón.

1.2 Forma

Tienen forma de esfera hueca y aplanada en ambos extremos, y contienen una sustancia rica

en hierro denominada hemoglobina encargada de transportar el oxígeno. La forma discocitaria

de los glóbulos rojos hace que estos tengan abundante

superficie con relación a su volumen. Así, son capaces de

realizar intercambios eficientes con su exterior, y por lo tanto

liberar la cantidad optima de oxígeno a las célula.

En el otro extremo están los “esferocitos”, son glóbulos rojos

esféricos que se encuentran en una patología de eritrocitos que ocurre con una enfermedad

hemolítica llamada esferocitosis hereditaria. Las esferas son formas con la menor superficie

para un volumen determinado.


1.3 Importancia

Es importante decir que tener un consumo de alimentos que incluyan estos nutrientes de hierro,

vitamina B12, ácido fólico y la vitamina B-6 permite la formación y el aumento de los glóbulos

rojos en el organismo debido que la médula ósea necesita de estos elementos para su trabajo

eficaz.

El recuento normal de eritrocitos va de la mano con el conteo de la hemoglobina y los

hematocritos, estos parámetros permiten obtener el volumen de glóbulos rojos en la sangre.

Los eritrocitos deben ser de 4,5 millones por milímetro cúbico en los hombres y de 4 a 5,5

millones en la mujer. La hemoglobina en los hombres debe ser de 14 a 18 gramos por 100

mililitros de sangre y de 12 a 16 en las mujeres. Si los resultados se encuentran por debajo del

rango normal se denomina anemia y puede producirse por deficiencia en vitaminas, hierro o

pérdida de sangre. Si por el contrario los valores son mayores de lo normal se denomina

eritrocitosis y puede asociarse a una enfermedad como la policitemia vera o una enfermedad

cardíaca.

Además mencionamos algunas enfermedades que afectan a los glóbulos rojos como es la

anemia producto de una disminución de la

hemoglobina, también pueden presentarse otras

enfermedades como la leucemia que es un tumor

maligno de las células de la sangre, originado en la

médula ósea y que puede afectar a los tejidos

del sistema inmune (ganglios, hígado, bazo) u otros órganos a los que invade a través del

torrente sanguíneo (médula espinal, cerebro, etc.).

La sangre y sus componentes han sido y son uno de los fluidos biológicos mejor investigados

por su fácil accesibilidad. El glóbulo rojo ha sido analizado desde numerosas perspectivas:
Citológica, hematológica, inmunológica, así como también desde los enfoques de la biología

molecular, de la reología y de las ciencias físico químicas y matemáticas.

GLÓBULOS BLANCOS

Según el Instituto Nacional del Cáncer (NIH), un leucocito o glóbulo blanco se define como un

tipo de glóbulo sanguíneo que se produce en la médula ósea y se encuentra en la sangre y en

el tejido linfático. Los linfocitos son parte del sistema inmune y combaten infecciones y otras

patologías.

Los glóbulos blancos son células móviles y, a diferencia de los eritrocitos, no contienen

pigmentos. Por esta razón se los conoce popularmente como glóbulos blancos.

Características

Documentos públicos nos indican algunas de las características generales más llamativas de

los glóbulos blancos. Entre ellas encontramos las siguientes:


 Quimiotaxis: poseen la capacidad de moverse hacia una sustancia química. Este tipo

de compuestos que generan el interés de los glóbulos blancos son productos

microbianos, componentes de otros leucocitos y partes de células tisulares dañadas.

 Diapédesis: la diapédesis se define como el paso de los elementos formes de la sangre

a través de los vasos sanguíneos para acceder a los tejidos y órganos. Sin esta

capacidad, los leucocitos no podrían actuar contra las infecciones de manera local.

 Movimientos ameboides: algunos de estos cuerpos celulares poseen un tipo de

movimiento ameboide, en base a la extensión y retracción de unos pseudópodos.

 Fagocitosis: dos de estos tipos celulares, los neutrófilos y los macrófagos, son capaces

de ingerir a los elementos patógenos y destruirlos.

Forma

Un leucocito es una célula móvil de entre 8 y 20 micrómetros, que se traslada a través de

seudópodos. Presenta núcleo, mitocondrias y otros orgánulos celulares, y puede salir de los

vasos sanguíneos gracias a un mecanismo que se conoce como diapédesis que le permite

prolongar su contenido citoplasmático; De acuerdo a la forma del núcleo, los glóbulos blancos

pueden dividirse en linfocitos, monocitos, neutrófilos, basófilos o eosinófilos. Según las

características tintoriales, por otra parte, puede hablarse de granulocitos, agranulocitos,

neutrófilos o basófilos.
Función

Su función esencial es proteger el organismo de infecciones producidas por gérmenes. Son

una especie de guerreros que flotan en la sangre esperando poder atacar a invasores, como

los virus y las bacterias.

Los leucocitos pueden atravesar las paredes de los capilares (los más diminutos vasos

sanguíneos) para atacar, destruir y consumir a los gérmenes invasores. Los granulocitos

contienen pequeños gránulos en su citoplasma o materia celular, y pueden clasificarse como

neutrófilos, basófilos y eosinófilos. Los granulocitos reconocen ciertas señales que mandan los

gérmenes cuando invaden el cuerpo.

Importancia

Los glóbulos blancos, desempeñan un papel esencial como centinelas clave y poderosos

defensores contra los patógenos invasores. Entre los tipos más destacados se encuentran los

neutrófilos, que constituyen la mayoría de los glóbulos blancos y se encargan de ingerir y

destruir bacterias y hongos invasores mediante un proceso llamado fagocitosis. Los leucocitos,

a pesar de su baja proporción con respecto a otros cuerpos celulares, son esenciales para el

mantenimiento y bienestar del organismo. De su síntesis y eficacia depende de forma directa la


respuesta inmune ante agentes patógenos, por lo que su valor es incalculable.

2 EL SISTEMA CARDIOVASCULAR

Todas las células de nuestro cuerpo, ya sean del cerebro o de un músculo de las

piernas, necesitan oxígeno y nutrientes para realizar su función. El sistema cardiovascular

podemos decir que es la estructura por la que se van a transportar estas sustancias a cada una

de todas las células; y retirar de ellas las sustancias de desecho, para permitir así que nuestro

cerebro piense o nuestras piernas nos permitan caminar, por ejemplo.

El sistema cardiovascular está constituido por el corazón, los vasos sanguíneos

(arterias, capilares, vénulas y venas) y la sangre que circula por ellos. Su adecuado

funcionamiento es esencial para que tengamos buena salud.

Un individuo adulto tiene aproximadamente 5 litros de sangre. Disueltos en esa sangre

se transportan el oxígeno y los nutrientes a cada rincón del cuerpo humano. Además, la sangre

también se encarga de recoger el dióxido de carbono y desechos celulares. La sangre rica en

oxígeno y nutrientes es de color rojo brillante, se denomina sangre arterial, y discurre por las

arterias. La sangre que vuelve con poco oxígeno y con desechos celulares, es de un color rojo

más oscuro, y se denomina sangre venosa.


El sistema arterial se va a ramificar progresivamente formando una extensa red de

arterias cada vez más finas para formar los capilares, que alcanzan cada una de las células de

nuestro organismo. Él circuito venoso es justo lo contrario. Las sustancias de desecho se

vierten en las venas más finas (llamadas vénulas), que en su camino de vuelta confluyen unas

con otras formando venas cada vez más gruesas hasta retornar al corazón.

Cuando hablamos de vasos sanguíneos, nos referimos tanto a las arterias como a las

venas. Si se unieran todos los vasos sanguíneos que tiene un individuo adulto, y se colocaran

en línea recta, cubrirían una distancia de más de 96.000 kilómetros, lo suficiente como para dar

más de dos vueltas a la tierra.

La aorta es la principal arteria que sale del corazón, y transporta sangre rica en oxígeno

y nutrientes. Las venas cavas devuelven al corazón sangre pobre en oxígeno que será enviada

a los pulmones donde se eliminará el dióxido de carbono y se cargará de oxígeno. La sangre

oxigenada vuelve al corazón para iniciar de nuevo el recorrido.

2.1 El corazón

El corazón es un órgano muscular formado por dos

aurículas (aurícula izquierda y aurícula derecha) y dos

ventrículos (ventrículo izquierdo y ventrículo derecho).

Ocupa un lugar central en este sistema de tuberías, y

tiene la misión de bombear la sangre para que circule sin

descanso durante toda nuestra vida.

Para entender cómo el corazón realiza su función, debemos estudiar por separado la parte

derecha y la parte izquierda pues son circuitos separados. La parte derecha del corazón

(aurícula y ventrículo derecho) reciben la sangre pobre en oxígeno procedente del cuerpo a
través de las venas principales (representada como sangre de color azul), y la envían a los

pulmones donde el dióxido de carbono es el expulsado.

Una vez oxigenada la sangre regresa a la parte izquierda del corazón Desde la aurícula

izquierda, la sangre rica en oxígeno (representada en color rojo) pasa al ventrículo izquierdo,

que la impulsa por la arteria principal (denominada arteria aorta) para seguir avanzando hasta

cada rincón de nuestro cuerpo. En el siguiente vídeo se puede observar este proceso a nivel

del corazón.

El motivo por el cual el corazón se divide en aurículas y ventrículos es el modo en que la

naturaleza puede garantizar que la sangre circule de forma constante. La parte inferior llamada

ventrículo, más fuerte y es la que, en última instancia, se encarga de bombear la sangre a

través de las arterias principales. La parte superior, denominada aurícula digamos que funciona

como una cámara accesoria donde se acumula la sangre que llega al corazón mientras el

ventrículo se está contrayendo.

Cada aurícula y su ventrículo correspondiente deben estar coordinados entre sí para que la

función de bombeo sea óptima. Cuando el ventrículo se contrae (sístole), la sangre que sigue

llegando al corazón se va acumulando en las aurículas. Una vez se han llenado las aurículas, y

el ventrículo ha tenido tiempo para relajarse (diástole), las aurículas se contraen y hacen que la

sangre llene los ventrículos antes de que éstos se vuelvan a contraer (sístole). Este ciclo se

repite sin descanso, ente 60 y 70 veces cada minuto.

Cada aurícula se separa del ventrículo de su lado por medio de las válvulas cardíacas.

Gracias a que las válvulas cardíacas se abren en un solo sentido, y también a la coordinación

existente entre las aurículas y los ventrículos, se garantiza que la sangre circule en una sola

dirección, y que las interrupciones entre cada contracción ventricular sean mínimas. A modo de
síntesis, podemos decir que las estructuras que forman el

corazón son cuatro:

2.2 Músculo cardíaco

También llamado miocardio, se encuentra formando las

aurículas y los ventrículos, y con su contracción y relajación

son los que en última instancia bombean la sangre para que recorra el sistema circulatorio. El

pulso no es más que la percepción del empuje rítmico de la sangre en las arterias cada vez que

el ventrículo se contrae. Las enfermedades que afectan al músculo cardíaco pueden hacer que

éste se contraiga con menos fuerza y no garantice el aporte adecuado de oxígeno y nutrientes

a todas las células.

2.3 Válvulas cardíacas

Estructuras finas pero enormemente resistentes que permiten que la sangre circule en

un solo sentido. Existen válvulas entre las aurículas y los ventrículos (válvula mitral y válvula

tricúspidea) y también existen válvulas entre los ventrículos y las arterias principales (válvula

aórtica y válvula pulmonar). Cuando la cámara se contrae,

la sangre impulsada abre las válvulas; y cuando la cámara

se relaja, las válvulas se cierran impidiendo que la sangre

refluya hacia atrás. Las enfermedades que afectan las

válvulas del corazón pueden dificultar el paso de la sangre

a través de las mismas o en otras ocasiones pueden no cerrar adecuadamente y permiten que

la sangre refluya en lugar de moverse en un solo sentido. Sistema eléctrico cardíaco:

constituido por fibras nerviosas que funcionan de modo autónomo. Se encargan de regular la

frecuencia a la que se contrae el corazón y también de la adecuada coordinación entre la


contracción de las aurículas y la de los ventrículos. El estímulo inicial se genera en las

aurículas, y, después de un pequeño intervalo de tiempo se transmite a los ventrículos, de esta

forma las aurículas se contraen e impulsan la sangre a los ventrículos y, una fracción de

segundo después, el impulso llega a los ventrículos (que ya han tenido tiempo de llenase de

sangre procedente de las aurículas), y éstos se contraen impulsando la sangre a través de las

arterias. Cuando una enfermedad afecta a este sistema eléctrico, el corazón puede latir mucho

más lento o en otras ocasiones de forma irregular; ambas situaciones comprometen la

adecuada función de bombeo del corazón.

Vasos sanguíneos del corazón: al igual que cualquier otro tejido de nuestro cuerpo, el

corazón también necesita un sistema de vasos sanguíneos por los que circule sangre que le

aporte oxígeno y nutrientes.

Las arterias que llevan sangre oxigenada al músculo cardíaco se denominan arterias

coronarias. Las enfermedades que afectan a las arterias del corazón pueden producir

estrechamiento de las mismas y reducir así la cantidad de oxígeno y nutrientes que llegan a

cada parte del corazón produciendo una angina de pecho o incluso un infarto de miocardio. El

mal funcionamiento de cualquiera de estos 4 componentes repercutirá negativamente en la

función cardíaca en su conjunto.

3 EL CICLO DE KREBS

El ciclo de Krebs, también conocido como ciclo del ácido cítrico o ciclo de los ácidos

tricarboxílicos, es una serie de reacciones bioquímicas fundamentales que ocurren en las

células de los seres vivos, incluyendo los humanos. Este ciclo juega un papel crucial en el

metabolismo celular, ya que es una vía central para la producción de energía en forma de

adenosín trifosfato (ATP).


El ciclo de Krebs se lleva a cabo en la

matriz mitocondrial, una estructura ubicada

en el interior de las mitocondrias, que son

los "centrales energéticas" de la célula.

Este ciclo es una parte fundamental de la

respiración celular aeróbica, un proceso en

el que los organismos utilizan el oxígeno

para descomponer las moléculas de

glucosa y otras sustancias orgánicas y

obtener energía.

El ciclo de Krebs consta de una serie de reacciones enzimáticas interconectadas que

descomponen la glucosa y otros sustratos metabólicos en dióxido de carbono (CO2), liberando

electrones y protones en el proceso. Estos electrones y protones son transportados por

coenzimas como el nicotinamida adenina dinucleótido (NAD+) y el flavín adenín dinucleótido

(FAD) hacia la cadena de transporte de electrones, donde se genera ATP mediante la

fosforilación oxidativa.

El ciclo de Krebs comienza cuando el grupo acetilo, derivado de la glucosa u otras

fuentes de combustible metabólico, se une a una molécula llamada oxaloacetato para formar

citrato. A partir de ahí, el citrato es sometido a una serie de reacciones que liberan dos

moléculas de CO2 y generan energía en forma de NADH y FADH2. Estas moléculas de energía

rica luego participan en la cadena de transporte de electrones, donde se utiliza su potencial

reductor para generar ATP.

Además de la producción de ATP, el ciclo de Krebs también es importante en la síntesis

de precursores metabólicos. Varias moléculas intermedias del ciclo de Krebs pueden ser
desviadas hacia otras vías metabólicas para la síntesis de aminoácidos, lípidos y otros

compuestos esenciales para el funcionamiento celular.

El ciclo de Krebs está regulado por una serie de factores, incluyendo la disponibilidad de

sustratos metabólicos, la presencia de oxígeno y la actividad de las enzimas que catalizan las

reacciones. Además, ciertas hormonas y señales metabólicas pueden modular la actividad del

ciclo de Krebs para adaptarse a las demandas energéticas del organismo.

El catabolismo oxidativo de glúcidos, ácidos grasos y aminoácidos puede dividirse en

tres etapas, de las cuales el ciclo de Krebs es la segunda. En la primera etapa, que incluye a

las vías catabólicas de ácidos grasos y a la glucólisis se genera acetil-CoA (2C). Los

aminoácidos pueden dar indirectamente acetil CoA , o directamente intermediarios del ciclo de

Krebs. En la tercera etapa el poder reductor aportado por el ciclo de Krebs es drenado hasta el

oxígeno a través de los transportadores de cadena respiratoria (NADH.H, FADH2, CoQ y

citocromos) y parte de la energía liberada se emplea en la síntesis de ATP por fosforilación

oxidativa

3.1 En las células aerobias distintas vías catabólicas convergen en el ciclo de

Krebs

El ciclo de Krebs (de los ácidos tricarboxílicos o del ácido cítrico) es una vía metabólica

presente en todas las células aerobias, es decir, las que utilizan oxígeno como aceptor final de

electrones en la respiración celular. En los organismos aerobios las rutas metabólicas

responsables de la degradación de los glúcidos, ácidos grasos y aminoácidos convergen en el

ciclo de Krebs, que a su vez aporta poder reductor a la cadena respiratoria y libera CO2 (figura

1).
Figura 1. Visión panorámica de la convergencia de las vías catabólicas de glúcidos, aminoácidos y
ácidos grasos al ciclo de Krebs. Los hidrógenos presentes en esas moléculas son los que abastecen a la
cadena respiratoria desde el NAD o FAD, hasta combinarse con el oxígeno y formar agua. Los carbonos
se eliminan como CO2.

• El ciclo de Krebs es una ruta anfibólica: participa en procesos catabólicos y anabólicos.

El ciclo proporciona α-cetoglutarato y oxalacetato para la síntesis de glutamato y aspartato

respectivamente, entre otras moléculas fundamentales para la célula.

3.2 El piruvato genera la principal molécula abastecedora del ciclo: el acetil

coenzima A

• La reacción de oxidación - descarboxilación del piruvato es el nexo entre la glucólisis y

el ciclo de Krebs. Esta reacción irreversible es catalizada por un complejo enzimático (piruvato

deshidrogenasa) localizado en la matriz mitocondrial de eucariotas, y en el citosol de

procariotas (figura 2).

• El piruvato pierde el grupo carboxilo como CO2, y los dos carbonos restantes unidos a

la CoA conforman la acetil-CoA (figura 2). En la reacción se reduce un NAD a NADH.H que a su

vez cede los H a los otros transportadores de cadena respiratoria, con la consecuente

formación de 3 ATP.
Figura 2. Reacción resumen de la descarboxilación oxidativa del piruvato. PDH (piruvato
deshidrogenada).

3.3 Una visión panorámica del ciclo de Krebs

• La acetil-CoA generada por los diferentes catabolismos se condensa con el oxalacetato y


genera citrato. A través de 7 reacciones de oxidación y descarboxilación sucesivas (de la 2 a la
8, figura 3) se regenera oxalacetato, capaz de iniciar un nuevo ciclo

Figura 3. Representación del ciclo de Krebs. Cada reacción se indica con un número.

 En cuatro reacciones del ciclo ocurren oxidación de intermediarios y reducción de

coenzimas de cadena respiratoria: tres NAD y un FAD (figura 3). Esas moléculas

reducidas que integran la cadena respiratoria se reoxidan, y parte de la energía liberada


se usa para fosforilar el ADP a ATP. En el ciclo propiamente dicho se produce una

fosforilación a nivel de sustrato que produce un GTP, que equivale energéticamente a

un ATP.

El ciclo se puede resumir en la siguiente ecuación:

Acetil-CoA + 3NAD + FAD + GDP + Pi CoA-SH + 3 NADH.H + FADH2 + GTP + 2 CO2

BIBLIOGRAFIA

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por un ingeniero. “Revista de obras públicas”, pág. 7-18.
https://upcommons.upc.edu/handle/2117/189202
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Botham K.M., & Kennelly P.J., & Weil P(Eds.), Harper Bioquímica ilustrada, 31e.
McGraw Hill. https://accessmedicina.mhmedical.com/content.aspx?
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 Sistema inmune y la sangre, Infermera Virtual. Recogido a 3 de enero en
https://www.infermeravirtual.com/files/media/file/102/Sangre.pdf?1358606076
 Tema 23., glóbulos blancos, efervescente.com.
http://www.enfervescente.com/privado/wp-content/uploads/2013/02/Tema-23.-Gl
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https://www.genome.gov/es/genetics-glossary/Linfocito#:~:text=Los%20linfocitos
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https://www.sogacar.com/el-sistema-cardiovascular/

 BIBLIOGRAPHY J. Monza, S. D. ( 2000). CICLO DE KREBS. McGraw Hill – Interamericana


https://cleuadistancia.cleu.edu.mx/cleu/flash/PAG/lecturas/estudios/CICLO%20DE
%20KREBS.pdf

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