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l.Jenero
Utopía trágica
o subve1~sió11 c·ultural
APC
"~
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,
INDICE
5
PRÓLOGO
Hace pocas horas la Corte Constitucional Colombiana
despenalizó el aborto. El presidente de tal órgano judi-
cial mostró su rechazo frente a las críticas de numerosos
sectores de la opinión pública que señalaban la existen-
cia de presiones de los órganos multilaterales para que
la decisión se tomara como se tomó. No quiero hacer un
juicio al respecto puesto que tales circunstancias son bien
conocidas por la opinión medianamente informada sobre
el tema:(: y además rebasa el objeto del presente trabajo.
7
Se trata de una verdadera revolución cultural que asume
las más diversas facetas: en algunas oportunidades, se
manifiesta como la ideología de género muy bien utiliza-
da como instrumento para demoler los últimos vestigios
de la constitución cristiana de la familia; en otras, como
"el nuevo derecho", muy eficaz estrategia utilizada con
pedagogía cínica para disolver el orden jurídico interno,
y desde luego, que todo ello siempre se justifica acudien-
do al libre desarrollo de la personalidad, lo cual no es
más que el ejercicio de derechos sin deberes.
Estamos frente al fundamentalismo libertario avalado por
las decisiones judiciales.
Es menester reconocerlo, esto no es un drama en el que
aisladamente está envuelta la sociedad colombiana, es el
precio que al parecer tendrán que pagar todos países por
ingresas a la aldea global o al nuevo orden mundial. Las
cosas hay que llamarlas por su nombre. Estamos in-
mersos en la más gigantesca revolución cultural, la cual
se impone por vía de la cosa juzgada. Para implementarla,
los diseñadores de la aldea utilizan los tribunales consti·
tucionales, que con el pretexto de los bloques de constitu-
cionalidad, homogenizan las instituciones locales, sacri-
ficando nuestras tradiciones y nuestra cultura.
Las decisiones judiciales que se profieran en el futuro
sobre los temas anotados, nada tendrán que ver con la
intangibilidad del ordenamiento constitucional. Ello hoy
es parte de la arqueología, no del derecho constitucio-
nal. Desde luego, que ese será el pretexto para obtener
los propósitos mencionados.
"Bienvenidos al futuro".
8
t. ANTONIO ,GRAMSCI Y LA
.
REVOLUCION CULTURAL
-
.... ~
·.~
11
Como se observa fúciln1L'lltt,L'S un vrn.bdl-ru ;tntitr~tsccn
dentalisn1o. Lo que Ir preocupa ¡d 111arxisnl() L'S el tr~ts
cendenta\\sn1o religioso en las n l~tsas pupu b res, sobre
todo en los países hispano<1n1criclllos rn su gr~tn tnílyo.
ría católicos.
1.2. LA
, SOCIEDAD CIVIL Y LA SOCIEDAD
POLITICA
Una de las originalidades de Gran1sci es la ilustrativa dis-
tinción que establece entre lo que llanu1 sociedad civil y la
sociedad política, siendo la pritncra el conjunto de orga-
nismos privados que crean un modo de pensar en el pue-
blo. Tales organismos son la escuela, la familia y la Igle-
sia, que tienen, por tanto, hegemonía intelectual sobre
la sociedad, crean un sentido común, 3 el sentir común de
la gente. La sociedad política es el conjunto de organis-
mos que ejercen una función coercitiva y de dominio di-
recto en el campo jurídico, político y n1ilitar, es sobre todo,
el Estado. Distinguimos entre hegemonía y dominio; la
hegemonía es lo propio de la sociedad civil; el dominio,
lo propio de la sociedad política, que tiene las armas, los
policías y los tribunales, todo lo que es coacción. La he-
gemonía y el dominio son los dos brazos que controlan
una sociedad determinada. Como el actual sentido co-
mún está impregnado de los valores tradicionales
y es tan refractario a la concepción marxista, se
percibe la necesidad de que la cosmovisión mate·
12
rialista de la vida vaya llegando poco a poco luJsta
las últimas rendijas del sentir popular. Una tarea de
tal envergadura no se improvisa, habrá de ser preparada
y llevada a cabo por los «trabajadores de las ideas», es
decir, por los intelectuales. Sin ellos no será posible revo ..
lucionar la sociedad civil.
13
1.3. LA MUTACIÓN DE LA §OCIEDAD CIVIL
MEDIANTE LA REVOLUCION CULTURAL
Gramsci está convencido de que no hay revolución du-
radera sin una previa toma de la sociedad civil. No es
cambiando las relaciones económicas como vamos a ha-
cer la revolución -allíla diferencia con Marx-, sino creando
ante todo una nueva hegemonía que trasforme la so-
ciedad; luego vendrá la conquista del Estado, pero ésta
deberá pasar por la transformación de la sociedad civil
en la que el Estado se apoya. Tal es la originalidad de
Gramsci en el campo del marxismo. Mediante el proyec-
to que presenta, la sociedad política será un día absorbi-
da por la sociedad civil, puesta bajo una nueva hegemo-
nía, la hegemonía marxista, la verdadera, y ello será así
hasta que la cultura entera transpire naturalmente la con-
cepción materialista, inmanente y moderna del mundo.
Gramsci, a diferencia de los patriarcas marxistas que le
dieron en su filosofía política toda la relevancia a lo eco-
nómico, pondrá su acento en lo cultural, en lo ideológi-
co, en la concepción del mundo y por ello sus más pre-
ciados agentes serán los intelectuales. Gracias a ello to-
mará distancia de todo determinismo exagerado, dejan·
do la historia más abierta, más fluida.
14
La experiencia histórica así lo prueba. La sociedad tradi-
cional, la Sociedad Cristiana, supo llegar a las masas más
que a través de la violencia, a través de la impregnación
lenta, paciente, cultural e intelectual. Sabe Gramsci que
fueron los intelectuales y no otros, los «inspiradores», el
grupo dirigente, en orden a impregnar de evangelio la
sociedad medieval. Y así, los intelectuales lograron for-
mar lo que Gramsci denomina un «bloque Histórico».
Emplea esta fórmula para describir la situación en que se
realiza la hegemonía de una clase sobre el conjunto de la
sociedad. Lo expresivo del término bloque, bloque ideo-
lógico, bloque histórico, recordemos en el actual
constitucionalismo los «Bloques de Constitucionalidad»,
reside en su intuitiva representación de algo macizo, con-
solidado, sin rendijas, compacto. Pues bien, la argamasa
de este bloque, de este edificio histórico, no es otro que
la ideología. El bloque histórico es un bloque ideológico,
los elementos soldadores que trabajan con tal ideología
son los intelectuales. Ellos no sólo son el arma de la lu-
cha de clases, son la misma lucha de clases en el interior
de la inteligencia, en el interior de la cultura. La revolu-
ción, antes que nada, es cultural.
La receta de Gramsci es clara: Conquistar «el mundo de
las ideas», para que lleguen a ser las ideas del mundo.
Le corresponderá entonces a la revolución hacer el trán-
sito irreversible desde la visión arcaica de la vida, orien-
tada por un fin trascendente de la existencia histórica,
hacia una cosmovisión moderna, inmanentista y secular.
El gran proyecto del marxismo Gramsciano es la instau-
ración del espíritu de la inmanencia, la instauración de la
modernidad, trasladar a este hombre arcaico, que no vive
el espíritu del mundo moderno, del mundo idealista, al
15
ámbito de la modernidad, de la ~nmanen:ia. Estas dos
palabras modernidad e inmanenci~ ent~n?Jdas como ex.
clusión absoluta de la trascenden~t~ rehgtosa, valen ?ara
Gramsci más que las ideas tradtct~nalmente marxtstas
de «clase» 0 de «proletariado». Lo tmportante es el con-
cepto moderno de la vida.
Para Gramsci, el forjador de la opinión, del pensamiento
hegemónico será «El partido», depositar~o de la verdad
para la nueva sociedad, el que desempena un papel se-
mejante al que desempeñó la Iglesia en la edad media.
16
resquebrajando, tratar de que comiencen a fallar los me-
canisnlos de Ja so<.;icdad civil en vigor:
17
1 ,
18
Gram~ci piensa, que mientras el Catolicismo siga con~
)trvando ~u influjo en el sentido común, no hay perspec~
tiva para el marxismo; considera que toda su estructura
t=xterna, toda su caparazón podrá mantenerse pero con
un contenido inmanentista, conservará incluso el lenguaje
teológico, pero dándole una nueva significación, este es
un tema muy importante para entender su estrategia.
19
2. LA ONU Y LA REVOLUCIÓN
CULTURAL
Para alcanzar el gobierno mundial es necesario quitar de
las mentes de los hombres su individualismo, la lealtad a las
tradiciones familiares, al patriotismo nacional, y a los dor·
mas religiosos.
Broclc Claisolm 4
21
de ley pura legalizar el aborto ha sido ~errotado en el
ténnino de 21 uños en nueve (9) oportuntdades Yel apro-
bulorio de \u uni(>n homosexual fue igualmente negado
por el Congreso Colombiano en el año 2003 Y1~ mismo
ha sucedido en otros países de tradición hispántca Yca-
tólica. l)cntro del esquema gramsquiano, para re~o:~r
tales obstáculos, se ha venido sensibilizando a la optnton
ml!c.liantc la adopción en los proyectos educativos5 de lo
4ue han denominado «La filosofía o perspectiva de gé-
ncro»,6 instrumento muy eficaz para obtener cambios cul-
turales que la aldea global requiere en materia de familia.
El gran reto de la revolución cultural hoy, es disolver los
principios y valores sobre los que se funda la familia cris-
tiana, su carácter heterosexual, monógamo, indisoluble
y fecundo; son obstáculos que quieren remover a toda
costa mediante la aprobación, en principio, del divorcio,
la anticoncepción, el aborto y el matrimonio homosexual,
primera fase que está por concluir. Después, vendrá la
eutanasia y la eugenesia, es una verdadera guerra con
.. una auténtica planificación estratégica, táctica y operativa,
desde luego que en el esquema gramsquiano adaptado a
la realidad presente no será el partido quien forje la opi-
nión, el sentido común y el pensamiento hegemónico, esa
función magisterial le corresponde a los organismos
multilaterales -ONU, UNESCO, UNICEF, QMS,
PNUD- y a una constelación de organizaciones no gu·
bernamentales que son los exclusivos dispensadores de
la nueva ortodoxia pública conocida como el «pensa·
miento políticamente correcto». Ellos disolverán Y
22
los Tribunales Constitucionales aplicando directamente
los. tratados internacionales mediante los bloques de
constitucionalidad coagularán, rediseñando todas las
instituciones con un contenido radicalmente inmanen-
tista, será la consolidación definitiva de «La aldea glo-
bal>>, que es en lo económico radicalmente liberal, y en lo
cultural, sectariamente marxista. El fin de la historia pre-
visto por Fukuyama no es sino un «Paraíso Socialista»
cibernéticamente organizado, muy bien designado por
algunos como un «socialismo-tecnocrático». 7 Curiosa-
mente esta subversión cultural se está imponiendo por
vía de autoridad, como espero señalarlo en este ensayo.
Muchos son los autores que coinciden en esta afirma-
ción, basta apenas observar nuestro diario acontecer, los
acontecimientos son tozudos y no podemos tapar el sol
con las manos.
«Hace unos días concluyó la Asamblea Gene-
ral de la Organización de las Naciones Unidas
(ONU), que celebró los 60 años del organis-
mo, contando con la participación de 180 je-
fes de Estado y de gobierno, siendo la de este
año 2005 la cumbre más grande de la Histo-
ria. Cada vez más la estructura de la ON U
adquiere un mayor poder a través de sus pro-
gramas y organismos, tales como el Programa
Mundial de Alimentos (PMA), el Fondo de las
Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF),
el Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (PNUD), el Programa Conjunto de
24
Con toda esta r:nentalidfld sincretista s~rgen ·
pues unos nuevos derechos humanos que :.. ¡.
, ,
2.2. LA FAMILIA COMO OBSTACULO PEDAGO·
GICO:
26
ntita de padres a hijo «u.n estrecho espíritu de
fatnilia «que sólo contribuye a una «esclerosis
tnental» 11
Con1o tnás adelante señalaré, la familia de «La aldea glo-
bal>> no podrá ser una, n1onógama, heterosexual, pródi·
ga y jerárquica; cada una de esas propiedades será o
n1ejor, está siendo triturada sin contemplación alguna,
por vía de autoridad, ejercida hoy por los organismos
n1u\tilaterales señalados.
* «Oue los padres adn1itan su equivocación,
para lo cual se habilitará cuidadosamente «la
instrucción de las mismas familias>>, por me-
dio de escuelas de padres y otras instituciones
semejantes. Los padres sienten inquietud con
todas las medidas con que progresivamente les
reducen su libertad de elegir las actividades
escolares. A ntedida que los deberes, las res-
ponsabilidades y los compromisos financieros
del Estado se desarrollan, su control y su polí-
tica se imponen, a menudo los padres están
ciegos» 12
Conocido lo anterior, fácil es comprender la perspectiva
ideológica de las actuales campañas antivida y antifamilia
impulsadas por las Naciones Unidas -Léase UNICEF,
PNUD, OMS, FM, FNUAP-. Es un descarado colonia-
lismo cultural sin antecedentes en la historia. Son incal-
27
culables los millones de dólares destinados a tales cama
pañas, me refiero, a las que promueven la le~alización
del aborto o del matrimonio homosexual. Ou1en se en.
cuentre medianamente informado sobre dichos temas
conoce que la organización internacional Planed Parent-
hood Foundation (IPPF), cínicamente designada en nues-
tro país como PRO- FAMILIA, ejecutora del proyecto
antivida onusiano, tiene hoy un presupuesto para tales
efectos de 120.000 millones de dólares.
28
rara los hombres y a los pueblos para «transfe-
rir la soberanía íntegra de las naciones a una
organización mundial». 16 «Enseñad·las acti-
tudes que finalmente darán por resultado la
creación del gobierno mundial para el pueblo,
del pueblo ypor el pueblo>>. 17 «El conflicto cen-
tral de nuestra época está entre el nacionalis-
mo y el internacionalismo, entre el concepto
de muchas soberanías nacionales y una sola
soberanía mundial.» 18
*«La misión permanente de la educación si-
gue siendo formar en todo ser humano la per-
sonalidad que le permita marchara la conquis-
ta de los bienes de este mundo. Para ello, ob-
viamente, hay que terminar con «el peso de
dogmas y de usos superados, explicaciones abs-
tractas de principios pretendidos universa-
les.» 19
Cuando la UNESCO habla de dogmas y usos supera-
dos, debe leerse, la Religión, la Familia y la Patria.
29
democracia internacional». «En una sociedad
socialista, ninguna clase sufre explotación, así
se pueden curar heridas ... La democr~cia c?-
munista es sencillamente la democracta soctal
plenamente desarrollada, también prohíbe
todo lo que esté fundamentalmente en des-
acuerdo con los derechos humanos.» 21
Es una democracia Marxista la que nos propone la
UNESCO.
30
matrimonio homosexual es un dere9ho humano funda-
mental, a esto se refiere la UNESCO cuando señala que:
«la creencia en la existencia de la naturaleza humana
ha generado incomprensiones personales, socia:Jes y
políticas.»
En esa revolución cultural promovida por la ONU e~ta
mos inmersos; el hombre producto de esa revolución ni
siquiera posee naturaleza de tal, tampoco facultad reflexi-
va; sin filiación divina, sin familia y sin patria, lo han .coa-
vertido en un manojo de reacciones controlables y con~-, ·
dicionales. Ese monstruo lo está creando la más alt~a
autoridad educativa mundial, ese es el tipo humano .que
nos proponen para las próximas generaciones. Lo más
cínico es que se pretende hacerlo en nombre de los de¡;e•
chos del hombre, de su dignidad y prerrogativas. 23
33
contundencia resulta suficientemente reveladora, no de.
jando la n1enor duda sobre lo que es Y pretende el referj.
do movimiento:
34
dos hayan reconocido legalmente tales .uniones, incluso
tus tnisn1us nonnas legales están exigiendo, como vere-
nlos 1nás adelante, que en los planes educativos se depu-
ren Jc todo estereotipo y de toda imagen específica de
gL~ncro, porque su inclusión sería discriminatoria en la
educación, concretamente se ha señalado que constituye
conducta discritninatoria «incluir en los textos escolares
estereotipos de vida».
35
«no existe un hombre natural o una mujer natu-
ral, no hay conjunció71 de características de una
conducta exclusiva de un sólo sexo, ni siquiera
en la vida psíquica». 25 Así, «la inexistencia de
una esencia femenina o masculina nos pennite
rechazar la supuesta superioridad de uno u otro
sexo, y cuestionar en lo posible si existe una
forma natural de sexualidad humana». 26
36
tual, al lenguaje, los documentos y programas
de los sistemas de las Naciones Unidas, los
intentos actuales de varios Estados Miembros
de borrar el término género en la Plataforma
de Acción y reemplazarlo por sexo es una ten-
tativa insultante y degradante de revocar los
logros de las mujeres, de intimidarnos y de blo-
quear el progreso futuro». 28
Recientemente el director de la OMS -Organización
Mundial de la salud 29 - definió el concepto de género en
los siguientes términos:
37
En resumen, podemos concluir que la perspectiva de gé.
nero es una filosofía o mejor una ideología mediante la
cual se pretende desconstruir los conc~ptos de familia,
matrimonio y sexo, tal como los concebtmos desde hace
2000 años, negando la existencia de un orden natural
previo a la voluntad humana y determinante de la natu-
raleza de las cosas. Es, en suma, una revolución 31 contra
todo orden que no sea creado y manipulado por los
detentadores del poder financiero.
Este movimiento nada tiene que ver con la igualdad mo-
ral y legal de los sexos, ellas fueron las banderas iniciales
del movimiento feminista; hoy lo que se pretende es des-
truir la familia normal para reconstruir un concepto de
familia nuevo, contrario al orden natural. Saben muy
bien que si la familia es la célula vital de la sociedad, es
necesario dar la vuelta a ella como a un calcetín, si se
quiere, de acuerdo al esquema gramsquiano, manipular
la sociedad civil.
. ..
ft:l «urcuicu)) concepto de sexo quedó entonces superado
por el «rnL>dcrno e lnnov~dor» concepto de g6nero, ~~.y
con1u eH un concepto rud1calmcntc Innovador, ae lo in-
tcntu incurporur u lu totalidad de la cosmovisión socia~
tncdiuntc es tu tnancro especial de ver el mundo, todas las
vic.ius cut.cgorfu~ educativas, laborales, familiares y juri-
dicus, cucn estrepitosamente ante este caba11o de Troya
que cncicrru consecuencias incalculables, toda la realidad
pasará uhora por el prisma de la perspectiva de género. u
39
Desafortunadamente la realidad es otra, Colombia ha fir-
mado numerosos tratados internacionales que incluyen
tal ideología, especialmente «La convención para la erra-
dicación de todas las formas de discriminación»-CEDAW.
así como su protocolo opcional, convenios que ya fue-
ron ratificados por el Estado Clombiano mediante la ex-
pedición de la ley que sancionó el Presidente de la Repú.
blica hace algunos meses, haciendo caso omiso a nume-
rosas solicitudes de diversos sectores de la opinión que
entendían de qué se trataba. Estos instrumentos de de-
recho internacional mediante el expediente de los bloques
de constitucionalidad -artículo 93 de la e. P.- prevalecen
en el orden interno frente a nuestro ordenamiento jurídi-
co; los tribunales constitucionales, carecen de autono-
mía para interpretar tales normas en sentido diferente a
lo señalado por los diversos órganos de las Naciones
Unidas, incluso, los informes de los relatores especiales
y los conceptos de los grupos de trabajo de la comisión
de derechos humanos de la ONU son criterios «cada vez
más obligatorios» de interpretación judicial. En algunas
sentencias de la Corte Constitucional se les considera
parte de los bloques de constitucionalidad.
40
dos nuestro Estatuto Constitucional si consideran que
algunas de nuestras instituciones contrarían la perspec-
tiva de género.
Este comité, creado en el artículo 17 de la Convención
señalada y fortalecido por el protocolo facultativo, facili-
ta la reinterpretación feminista de los derechos humanos
y se convierte en un instrumento de su difusión. Esta
ideología -debe entenderse la de género- se impondrá al
resto de los documentos de derechos humanos ya que
sus recomendaciones serán consideradas como las ema-
nadas de la Corte Penal lnternacional; 34 eso quiere decir,
para un buen entendedor, que sus determinaciones como
ya quedó dicho se aplican directamente por la vía de los
bloques de constitucionalidad o en su defecto los Esta-
dos estarán obligados a legislar en función de sus reco-
mendaciones.
Para que comprendan el tono ideológico de ese comité
constituyente supranacional, 35 traigo algunas de las
más recientes recomendaciones que dicho comité ha rea-
lizado a algunos de los Estados signatarios del conve-
nio, incluido el nuestro:
1- En el año 2002 recomendó a Ecuador modificar la
constitución para facilitar el aborto.
2- En el año 2005 recomendó modificaciones a la legis-
lación paraguaya para permitir el aborto.
~1
3. Igualmente, en el año de 1999 manifestó al Estado e .
0
lombiano su preocupación por la ilegalidad del aborto.
42
1O- Pretende recomendar a los diversos países poner fuera
de la ley a las personas que se opongan a tal filosofía; en
tal sentido recomendó al gobierno argentino llevar una
lista de los padres de familia que en los colegios se opon-
gan a la 111:encionada «perspectiva de género» contenida
en los programas de educación sexual, por eso no es ex-
traño que en el proyecto de ley «Estatutaria de la Igual-
dad» que presentará la Defensoría del Pueblo para su
tramitación y aprobación en el Congreso de la Repúbli-
ca, en sus artículos 38 a 44 se establezcan sanciones ad-
ministrativas, laborales, disciplinarias, pedagógicas y
patrimoniales, por disentir de esta revolución cultural
denominada «perspectiva de género.» Pronto, sin lugar
a dudas, vendrán las penales. Estamos en manos de los
inquisidores posmodernos.
Cualquier ciudadano puede tomarse el trabajo de leer,
por ejemplo, los proyectos de leyes tanto de origen gu-
bernamental como parlamentario que se presentan en el
Congreso Nacional, así como las decisiones de la Corte
Constitucional que tengan relación con el libre desarro-
llo de la personalidad, o acudir al «Plan Nacional de
Educación Sexual» y comprobar que unas y otras incor-
~oran, de un modo u otro, esta ideología a distintas rea-
lidades, veamos sólo algunos ejemplos. · . ··
. -
( :.. . . ·~ ·-·
4. EL PROYECTO DE LEY
ESTATUTARIA ,DE LA IGUALDAD
, Y
LA IDEOLOGIA DE GENERO EN
COLOMBIA
45
Artículo 16: Discriminación en Educación.
Se entiende como discriminación en el sector
de la educación.
46
2. Brindar educación o elaborar textos escola-
res basados en estereotipos negativos sociales
y culturales para mujer o para hombre.
47
Es indudable que coloca en un mismo pie de igualdad a
cualquier tipo de pareja, no sólo la. ~ue hasta el momen.
to hemos conocido como una famtha, o sea la unión es-
table y más o menos fiel entre un hombre Yuna mujer. En
virtud de la «Tolerancia» -entendida no como el respeto
al otro sino como la aprobación de todas las conductas
del otro sin importar las aberraciones en que puedan es.
tar incursos-, se está abriendo una puerta ancha para la
pareja homosexual, lesbiana u ocasional. Es una ética
relativista quedando aprobados todos los abusos. 37
En este mismo proyecto, se prevé modificar el Código
Penal, adicionando algunas normas, con los siguientes
tipos:
B. Incitación a la discriminación o a la
intolerancia. El que basado en prejuicios por
razones de raza, color, origen familiar, sexo, re-
ligión, edad, nacionalidad, opiniones políticas,
identidad de género, idioma, orientación
sexual, condición social, discapacidad o en-
fermedad, incite a la discriminación, a la hos-
tilidad o a la violencia, incurrirá en prisión de
uno (1) a cinco (5) años y multa de diez (10)
a mil (1. 000) salarios mínimos legales men-
suales vigentes.
J7 • N ;onal de
JIME~EZ CADENA, Alvaro S.J. Lectura Critica del Proyecto ac
Educación Sexual. Aborto. P. 32
48
pos o asociaciones e~ relación a su ideo-
logía. religión o creenctas, raza, color, origen
fanúliar, sexo, religión, edad, nacionalidad,
idiotna, identidad de género, orientación
sexual, condición social, discapacidad o en-
fennedad.
Encontramos en consecuencia, ni más ni menos, que «El
delito de opinion» ha sido resucitado por la ideología
de género, muy bien mimetizado bajo el ropaje de la no-
discrimanción. 38
49
1
5. PLAN NACIONAL DE. EDUCA-
CIÓN SEXUAL Y, LA IDEOLOGÍA
.
o·E GENERO
51
no sólo al matrimcini~ cat~lico sino a la ~i~~: institu.
ci6n familiar y al matrtmonto meramente ctvtl.
El mismo proyecto textualmente señala cuál es la modifi .
cación pretendida:
«La educación sexual no debe reducir el ejer-
cicio del placer erótico de la sexualidad de la
pareja legítimamente constituida; la unión li-
bre, las diferentes formas de unión se deben
respetar sin que su práctica tenga que impli-
car discriminación, clandestinidad o culpa.»
Lo que implícitamente propone el Estado Colombiano
es que se acepten como normales toda clase de compor-
tamientos sexuales: homosexualismo, autoerotismo,
amor libre, bestialismo, zoofilia, sodomía y necroftlia. El
mismo Freud y muchísimos siquiatras, calificaron estos
comportamientos como «aberraciones sexuales», por
cuanto producen desviaciones en el fin y el objeto sexual;
ahora, se les da la honrosa categoría de parafilias 40 y se
les proponen a la juventud colombiana como diversas
alternativ.:as de disfrutar su sexualidad41 , colocados en un
mismo pie de igualdad por el gobierno colombiano. 42 Gra-
duahnente se va creando un ambiente de desprestigio para
la famUia, la fidelidad va perdiendo su sentido, la pro-
miscuidad desde el despertar de la adolescencia puede
oonvertirse en norma social, 43 lo que ha producido una
....
53
st acud:""os
n ·. .
rero uu
a las cartillas46 de• divulgación
,...
elabora-
das por el Ministerio y de obli~atorta ensenanza t~nto en
la educación pública como pnvada_la cosa no es d~~eren
te, conozcamos lo que se les ensena a nuestros ht]os:
1- Que los niños nacen asexuados, hasta determina-
da edad.
2_ En el cuaderno creatividad se les incita a buscar y
experimentar nuevas formas de satisfacción: anal, oral
y otras aberraciones.
3- Eso sí, se afirma que la tradición y la moral conven-
cional suelen ser dos grandes obstáculos para la ínti-
ma creatividad de la pareja. Eso quiere decir que debe-
mos expulsar la moral cristiana de nuestra vida privada.
4- Ninguna relación sexual afectiva es por sí misma
censurable.
5- Introducir todos los medios de control natal in-
cluidos los abortivos y los microabortivos.
Es una educación sexual para la muerte del otro, puesto
que·promueve el aborto, y para el placer hedonista, puesto
que lo desvincula del deber y de la vida. Todo lo anterior
es apenas consistente con la filosofía de género que de·
sarrolla y que como queda visto se impone a nuestra ni·
ñez y juventud contra la voluntad de sus padres que ig·
JlQran lo anterior, haciendo el Estado Colombiano caso
'omiso del artículo 68 de nuestra Constitución que le re·
conoce a los padres de familia «El derecho de escoger
el.,tJpo de .educación para sus hijos menores.»
.
.
~
. '\ ~ . .
. ~;;-t- r_ •• . _·
lii
El mismo artículo prohíbe más adelante la enseñanza de
la educación religiosa obligatoria en los planteles oficia-
les, pero establece por vía del Plan Nacional de Educa-
ción Sexual la obligación de recibir ésta, sin importar que
ella sea contraria a las convicciones religiosas de lama-
yoría de los colombianos, y a la misma moral natural.
56
,
6. EL LENGUAJE, Y LA IDEOLOGIA DE
GENERO
«Se ha escrito que la nueva to"e de Babel se distingue de la
original en que en el episodio veterotestamentario no se dice
en absoluto que los escritores no comprendieran siquiera su
propia lengua, sino solamente que no se comprendían entre
ellos.
57
lo que hace referencia a la co~1stituci~~n cri~tiana de la
familia. Tales denuestos se extienden Incluso" aquel\,l\
personas e instituciones que sulanlt.>.ntc dcfiendc.n la,¡_
gencia del orden natural en \a suciedad. po.r_ c_¡cn1r\l,.
quien no sea partidario del aborto. d.c la un1~n humu.
sexual, de la eutanasia o de la eugenesia. es un 1gnorantc·
reaccionario, fascista, fundan1enta\ísta. desadaptad\_\
cavernícola de sospechosas fijaciones. O u icn se d tre\ d ;:
defender la unidad familiar y se resista a cquipararla cl 111
la unión de hecho es un «Ultra conserYador ortodu\u .
Contrastando con el anterior vocabulario sur~c utru. lau-
datorio o de alabanza, para designar a quicnc~ prufc~~ 111
criterios o asumen conductas contrarias a bs antcriurl'".
por ejemplo, los partidarios del aborto. Jc \a L'utana~i" ~~
de la unión homosexual son de avanzada. progrc"ist~l".
ejemplo de moderación, pluralistas. coherentes. En re-
sumen, si se quiere agredir a alguien, dcscalificarlu. ~e k
señalará como fascista, que significa el conjunto ck tu·
dos los males, sin mezcla de bien alguno y si se le quicl\'
elogiar, basta con que se le designe con1o detnócrata. quL·
significa el conjunto de todos los bienes, sin n1czcla Lk
mal alguno. 50
50GAMBRA, Rafael. "El Lenguaje y los Mitos". Ed. Nueva Hispanidad, Buenos
Aires. 2001.
Slfb., p. 89-90-93-94.
52 Darle a las palabras un significado diferente y muchas veces contrario 01
58
.. cton
., mental que se opera ante nuestros ojos. Algunas de
:, sus reflexiones, son verdaderamente esc.l~r:cedoras y .no
[ puedo dejar de citarlas, ellas nos permttlran una meJor
1 comprensión del tema:
'
. . .
«Las nuevas generaczones pzensan. szenten y
valoran de acuerdo con categorías distintas -a
menudo opuestas- a las deltnundo espiritual
en que nacieron. Pero tan1bíén hablan un len-
guaje diferente en el que multitud de palabras
y expresiones han cambiado de significación y
otras muchas han trasmutado su resonancia
emocional.
59
«Ese poder de preformación mental que posee
el lenguaje ha sido destacado hasta su lbnite
por la escuela estructura/isla actual. La ob-
servación es de Juan Milet: «diríase que el
sujeto, al utilizar una palabra, sufre una
especie de fascinación ante ella: la ab-
sorbe pasivamente y recibe sin poder evi-
tarlo los efectos sicológicos de la signifi-
cación que le entrega. Su acción sobre
el subconsciente es directa, profunda y
estimulante. La palabra introduce por
su solo empleo esquemas de pensatnien-
to que el sujeto adopta aún sin darse
cuenta ...
«Quizá hoy más que nunca sea el hon1bre cons-
ciente de la influencia del Lenguaje sobre el
pensamiento y la personalidad, pero ta1nbién
más permeable a su influencia sicológica y en
mayor grado víctima de ella. Es ese conoci-
miento precisamente la condición y el acicate
para su empleo más a fondo, en 1nayor lnedi-
da tecnificado. Aceptar un ténnino para su
empleo habitual es aceptar una idea, por más
que el sujeto la rechace inicialmente en supla-
no intelectivo. La utilización de un código ex-
presivo -un lenguaje- es ya de por sí abrirse a
toda la carga de sentido y actitud que encierra
como producto cultural.
«La utilizacipn metódica del lenguaje como
medio de manipulación mental ha correspon-
dido -y corresponde- al marxismo. En parte por
60
una necesidad expresiva de la propia Jnentali-
dad dialéctica del hegelianismo marxista, que
no se aviene con el lenguaje ordinario basado
en el principio identitario 53 del ser. El mis1no
sistema trastnuta los térrrzinos para su adecua-
da expresión, y el posterior e1npleo de ese len-
guaje, inunda de ambigüedades al lenguaje con
un sentido proclive a su di a lectización ...
61
Lo que Albert Camus llamó «la Revolución del
Siglo XX>> ha adquirido técnicas muy superio-
res a las que pudo utilizar la Revolución del
XVIII-XIX. Esto es lo que las diferencia de és-
tas y lo que la erige en culminadora de todo un
proceso. No va a constituir una lucha de cuer-
pos sino de almas: no se tratará ya de subyu-
gar o de eliminar a hombres, sino de condi-
cionar y colonizar las almas.
El arma principal como vimos, será el lengua-
je, y más precisamente aquella función lnfti-
co-mágica; el factor emocional y sugestivo que
cada palabra o cada término pueden conlle-
var. Este aspecto de/lenguaje se presta a utili-
zaciones muy sutiles y difícilmente denun-
ciables, que alcanzan hasta variar reabnente
la semántica del término y su significado con-
junto en las frases.
Si se logra que alguien -un hombre o un gru-
po- acepte en su habla habitual determinados
términos y expresiones, se habrá abierto un
portillo para trocar su pensamiento y su alma.
Se trata de una estrategia comparable a la que
emplea la serpiente con su víctima: antes de
atacarla la inmoviliza con su mirada, la priva
de reflejos .Y del impulso de defensa.
:_~.'
. .....~~ .transmutación insensible de palab;as vulgares,
de uso común, para inocular o alentar una
tnentalidad nueva y la praxis correspondiente.
«Ouizá la historia Bíblica de la torre de babel -
la confusión de las lenguas- no sea ,\Ólo un re-
lato ancestral. sino una profecía en vías de
CLU11 pfi 111en 1O.»
63
cio de cada alma, demos respuesta a las virtudes tea.
logales: fe, esperanza y caridad» 54
6.1. Discriminación:
64
La convención interamericana de Belem de Para -firma-
da por el Estado Colombiano- obliga a los Estados par-
tes a adoptar en forma progresiva, medidas específicas,
inclusive progratnas para modificar los patrones socio-
culturales de conducta de hombres y mujeres, incluyen-
do el diseño de programas de educación formales y no
fonnales ... para contrarrestar prejuicios y costumbres ...
que legitimen o exacerben la violencia contra la mujer.
Para ellos, son patrones culturales discri-minatorios,
la masculinidad y la feminidad. No olvidemos que han
llegado a considerar que el hombre nace sexualmente
neutro.
1ncluso, aunque usted no lo crea, se llega a afirmar que
es discriminatorio que las mujeres den a luz y los hom-
bres no. Ello es una extravagancia y podría pensarse que
es una aseveración interesada de los detractores de la
ideología de género para ridiculizarla, haciéndole perder
respetabilidad, pero basta con leer la siguiente cita de una
de sus más conocidas ideólogas:
«La igualdad feminista radical significa, no
simplemente igualdad bajo la ley y ni siquiera
igual satisfacción de necesidades básicas, sino
más bien que las mujeres -al igual que los hom-
bres- no tengan que dar a luz. La destrucción
de la familia biológica que Freud jamás
visualizó, permitirá el surgimiento de mujeres
y hombres nuevos, diferentes de cuantos han
existido anteriormente» 56 -Subrayado fuera del
texto-.
6§'
' •'
Para combatl·r la discriminación . referida, llegan a afir .
e la transmisión de la vtda humana es un rol so .
mar qu . .dd ,
1a socte
·
cta1 y que en otros estadtos de , . . . avanza .
a mas
L
dos, podría realizarse con otras tec~t~as. a s.tgutente cita
corrobora la escalofriante afirmacton antenor, que por
supuesto es contraria ~ orden. natural, aunque para la
ftlosofía de género, aquel no ex1ste, es otro de los tabúes
utilizados para alienarnos e impedir el libre desarrollo de
nuestra personalidad.
«La forma en que se propaga la especie es de-
terminada socialmente. Si biológicamente la
gente es sexualmente polimorfa y la sociedad
estuviera organizada de modo que se permi-
tiera por igual toda forma de expresión sexual,
la reproducción sería resultado sólo de algu-
nos encuentros sexuales: los heterosexuales. La
división estricta del trabajo por sexos, un in-
vento social común a toda sociedad conocida,
crea dos géneros muy separados y la necesi-
dad de que el hombre y la mujer se junten por
razones económicas. Contribuye así a orien-
tar sus exigencias sexuales hacia la realización
heterosexual, y a asegurar la reproducción bio·
lógica. En sociedades más imaginativas,
la reproducción biológica podría asegu·
rarse con otras técnicas.» -Subrayado fue-
ra del texto- 57
.'n
Es que han llegado incluso a afirmar que la distinclO 1
57 HERMANN ·
, Herdf.1
The Unhappy Marrfage of Marxism and Femmrsm"'
• • women
and Revolution, South End Press, Boston, 1981, p. 5.
66
di(, se accptu, no resulta extraña la anterior afirmación,
.
es apenas su consccuencw.
67
delito de ·hornofobia 'sx cualquier negativa a
reconocer a las parejas ho1nosexuales los rnis-
n1os derechos que a un n1atrimonio».
, ~
68
sión de la UE de los países que «no se adhie-
ran a la legislación anti Discriminación».
6.2. Mito:
69
su lenguaje a los términos mitificar Ydes~itificar. El pri .
mero reviste siempre un sentido peyo~atJvo; lo segundo
positivo. Lo mítico o mitificado se extiende para el mar .
xismo a cuanto no brota inmediatamente de la evolución
dialéctica materialista, interpretado por los escrutadores
oficiales del proceso histórico. Así el marxista hablará del
mito del matrimonio, del mito de la filosofía, de la moral
burguesa, del sexo. Lo mítico será algo irreal, en orden
siempre a la desmitificación. 60
En la perspectiva de género los objetivos primordiales
son la «desmitificación» -entendida como la entiende el
marxismo- de la familia, el matrimonio, y el sexo, y la
equivalente «remitificacion», o mejor, la sacralización de
la «filosofía de género» con todo lo que ello implica. Se
considera un mito la familia monógama, el matrimonio
entre un hombre y una mujer, su indisolubilidad, lo mis-
mo que la relación heterosexual y su estructura jerárqui-
ca. Todo lo anterior ha sido superado por la promis·
cuidad como virtud social primordial. El artículo se-
gundo de la resolución 03 53 de 1993 expedida por el
mismo Ministerio, que como ya comentamos está satu-
rada de tal filosofía, señala como finalidad de la educa-
ción sexual:
70
Los mitos y tabúes en torno al «hecho sexual» que será
necesario desmitificar, será todo lo que nos enseña la
moral católica, que para la ideología de género es un tabú
y un mito; no olvidemos, atrás ya lo cité, pero es necesa _
rio volverlo a recordar, que para el Ministerio de Educa-
ción «la tradición y la moral convencional suelen ser dos
grandes obstáculos para la íntima creatividad de la pare-
ja».6' Para buen entendedor pocas palabras bastan; es a
esa tradición y a esa moral a las que se refieren cuando
hablan de mitos y tabúes sexuales, y esa en Colombia no
es otra que la moral cristiana que a propósito es la que
hoy verdaderamente está siendo perseguida y discrimi-
nada -en la acepción marxista- por el Estado Colombia-
no, en el comentado Plan de Educación Sexual, que ac-
tualmente se imparte a nuestra juventud.
71
6.3. Alienación:
En sentido clásico, significa locur~; .al.ienado,. loco, ena.
jenado, el que no está en su sano JUICIO. A abenación Se
opone cordura; a alienado,. ~uerdo. En 1~ cosmovisión
marxista el término ha adqutrtdo otro sentido. Es el des.
conocimiento de la situación histórica colectiva, o el error
sobre la misma; alienado es el que no se da cuenta de esa
situación, ni adopta una actitud consecuente, alienante
es cuanto aparta al hombre de aquella supuesta concien.
cia de su situación colectiva. Alienante es por ejemplo la
religión, que sitúa la mente humana en la esperanza de
un porvenir eterna) y lo aparta de este mundo-único,,rea}.
y de sus objetivos económicoS. 62
Comprenderán fácilmente que todo aquello o todo aquel
que obstaculice la disolución de la familia y del matrimo-
nio, que defienda la vida desde la concepción, que no
admita toda c1ase de relaciones sexuales contra-natura,
que censure la unión homosexual como un desorden
moral o que se atreva a censurar la eutanasia o la euge-
nesia, en resumen, que no profese un pensamiento «po·
líticamente correcto», será un alienado, o una doctrina
alienante la que profesa aquel que se atreva a sostener
tan «escandalosas» posiciones, 63 o quien no se dé cuen·
ta del sentido de la historia y se resista a admitir la pro·
miscuidad plurisexual, o mejor, la ideología de género
como un estadio superior de la evolución social.
72
6.4. Tolerancia:
73
,;d' que se reconocen a )a familia tradícionéil h(J r}r
jurt teas . . . . ,; . . . ' f!-
n o dtscnmtnacton, que no e~ 1-,1ncJ léi dct··,r·
texto de la IJ .
. ,; de homosexualidad que encontramos en el tuadt
cton 1 M' . . :r.
nillo «Tolerancia», editado por e ,; .1n1stcno de Educ~.
ción más específicamente en la pa.g1na 17: ~~e~ una up.
ción. de vida privada o una de las dtvcrsas éiltcrnativa~ dt
la vida sexual». No deja dudas: LCuálcs son las divcr~a'.
alternativas? Podemos inferirlas fácilmente dcspuéf., de
analizar tanto los textos de la mentada ideología, comcJ
algunos acuerdos internacionales, incluyendo por ~u.
puesto el Plan Nacional de Educación Sexual. Conclui-
mos que dichas alternativas son: la heterosexualidad, la
homosexualidad, la zoofilia, la pedofilia y otras.
74
1.,.,.1cntarán leyes
11 e -
que prohíban a la esposa dedicarse . .
1 h' . a
lu v1 '·J·t hogarena como ,
o tcteron nuestras madres 1
y a ..
. .
gunc. · •ts esposas
. de lahepoca moderna,
. . .. entre
, ellas la m'ta.
McJiJas fiscales o asta po1tctvas, fiJaran muy segura-
mente algún impuesto por p~rmanecer en el hogar crian-
Jo los hijos.. Fu~ la pres~denta de Islandia, Vigdis
Finnbogadotttr, quten. afirmo e~ una conferencia prepa-
ratoria a la Conferencia de Pektn organizada por el Con_
se jo Europeo en febrero de 1995: «Urge desconstruir no
·Óio la familia sino también la educación. Las niñas de-
~cn ser orientadas h~cia áreas no tradicionales y no se
las debe exponer a la .Imagen de la mujer como esposa 0
madre, ni se les debe Involucrar en actividades femeninas
tradicionales». En el mismo sentido encontramos una
declaración del Consejo Europeo para la Familia: «Ya es
hora de dejar en claro que los estereotipos de géneros
son anticuados: los hombres ya no son únicamente los
machos que sostienen la familia ni las mujeres sólo es-
posas y madres. No debe subestimarse la influencia psi-
cológica negativa de mostrar estereotipos femeninos». 65
75
1nente co11stituida; la unión libre, las diferetrtes
formas de unió11 se debe11 respetar, sin que Sil prác.
tica tenga que implicar discriminación, clandesti.
nidad y culpa» 66
* No se tolera que los hotnbres y las mujeres se compor-
ten como tales, que tengan hijos -n1uchos hijos-. La pers-
pectiva de género tiene como propósito esencial el de
«desmaternizar» a la mujer, por considerar la n1aterni-
dad como algo opresivo, discriminatorio y alienante, ase-
verando que la maternidad es una forma y la más abomi-
nable de la esclavitud femenina, por eso, las estigmatiza
por ser sólo esposas y madres, incluso llegan a afirmar
que el instinto materno es un mito. Elizabeth Badinter,
en su libro el amor materno, asevera que éste no se pue-
de dar por supuesto, ha llegado la hora de desmaternizar
a la mujer, para llegar a una cultura unisex. Como resul-
ta ya lugar común en esta literatura, se sostiene la
bisexualidad original de todas las personas, es un proce-
so general en el cual se propone androginizar no sola-
mente la familia sino toda la cultura. En resumen no se tole-
ra a la mujer esposa y madre.
76
que no reconozcan jurídicamente las uniones ho mosexua-
les o a las personas que los discriminen.
77
ra, lo que se me venga en gana, sin ¡~portar~~ naturale.
el otro el bten comun. Desde
za de \as cosas, e\ deber , ' .
luego, dentro de tal perspectiva, resulta Inaceptable
fundamentalismo afirmar que la libertad es para el bien y
\a verdad.
Como niegan \a existencia del orden natural, ello sería
un tremendo atentado contra el libre desarrollo de nues-
tra personalidad~ lo único que me puede limitar es mi
propio capricho. Dentro de tal esquema mental, al abor-
to lo denominan autonomía procreativa, incluso se
llega hasta afirmar que entre la autonomía de la ma-
dre y la vida del nasciturus, prima la autonomía de la
madre. Algún magistrado 69 de la Corte Constitucional
en ejercicio de funciones, afirmó que el artículo del Códi-
go Penal que penaliza el aborto, debe declararse
inexequible, pues cuando se protege a la vida penalizan·
do dicho homicidio, se está privilegiando tal derecho ·
entiéndase el de la vida-, sacrificando la autonomía de la
madre, lo cual, ·continúa el Magistrado-, resulta inad·
misible en una democracia constitucional configurándo·
se un sacrificio insoportable.
78
7. EL, VOCABULARIO
, DE LA , IDEO-
LOGIA DE GENERO: ¿uN LEXICO
CIFRADO PARA INICIADOS?
79
dóra f'm' lt~s persmws del otro sexo por natura~e~~·
sirao pm· imposici6ll social. pudiendo entonces dmg1r
e\ d~sl:o s~xuu\ hudu cualquiera. Así, cons.id~r~n que es
prl'ctso dcdurnr \u guerra u las diferencias btologtcas, por-
l.\ u~ <<\o nutu ru1 n0 es siempre un va 1or hu mano».
(S hu\mnith Fircstone, «The Dialectic of Sex»)·
80
-papeles como «madre», «padre», «nlarido « y «mujer».
e) Ocupaciones o profesiones: la sociedad los asigna a
J uno u otro sexo.
:. 7.4. Homofobia:
7.S. Hegemonía:
Ideas aceptadas universalmente como tales, pero que en
realidad son construcciones sociales. Tal es el caso de la
tradicional diferenciación sexual.
7.8. Parafilias:
82
dos los abusos y desviaciones sexuales como opciontH
válidas y eso es lo que se les enseña a nuestros hijos. y(t
no tienen el calificativo que el mismo Freud les dio «abe·
rraciones sexuales», ahora se les denomina con el eufc .
mismo de parafllias; en el «cuaderno conciencia críti·
ca» varias veces citado, editado por el Ministerio de Edu-
cación Nacional, que entre otras cosas se ha convertido
en uno de los dispensadores locales de tal ideología, en-
contramos la siguiente afirmación:
«Dentro de esta variabilidad hay algunas con-
ductas que se alejan mucho más de lo común y
que se deno1ninan parafilias. Antes se llama-
ron con criterio moral y no científico, desvia-
ciones y aberraciones, basándose en una men-
talidad precientífica y maniquea de «lo bue-
no» y «lo malo»; «lo normal>>, y «lo anormal>>;
«lo aceptable» y «lo inaceptable» 72
Como si todas las aberraciones o desviaciones sexuales
fueran ahora buenas, normales y aceptables.
Y añade que «la mayoría de las para filias son inofensi-
vas» 73
Por eso promueven las relaciones pedofílicas y zoofílicas.
Si quieren comprobar el talante corruptor del Ministerio
de Educación Nacional en esta materia, basta con leer el
varias veces citado cuaderno «Conciencia Crítica», 74 en
lo que concierne al sexo con animales, página 26.
Uno de los autores más recon0cidv~ ·~.::);rl"; -::í !.t;-;;1;., .' '1 ';.~·::r.
Anche U, 75 advierte que:
84
jos, pero muy seg~ramente
si se le pusiera de presente
que desde los S anos se les está insistiendo sobre temas
como: gustos y sensaciones, placer, abrazar y aca-
riciar, sexualidad no coital: caricias, besos, sentir
y no sólo tocar, parafilias, proxenetismo, violación,
abuso sexual, incesto, bigamia y aborto, n aunado
con la pornografía que diariamente ven en la televisión,
permitida por unos padres irresponsables a Jos que pre-
viamente se les ha insensibilizado con el consabido argu-
mento de la tolerancia, siendo incapaces de saber qué
pueden o no ver los hijos, seguramente encontraría en
ello la explicación del impresionante aumento de viola-
ciones, abortos, promiscuidad, sida, enfermedades vené-
reas, embarazos indeseados, maltrato infantil. La res·
puesta del Estado Colombiano ha sido el aumento de
penas por la violación o el maltrato infantil. ¿No será
que está buscando el ahogado río arriba?
85
Ahora se propone entre otras cosas, desculpabilizar ~~~
' 'd' · · uc lo practl-
conciencias de los padres, de los me tcos ~, ..
. . ·
can o de la soc1edad permtstva, por tal accton
. homicida.·
Por eso, se han inventado esa frase para refcnrsc al aborto,
en donde la objetividad de la acción no se expresa ~or
ninguna parte; por el contrario, en vez de un. :ontcn1do
peyorativo posee un contenido amable Y. post~tvo, no se
refiere a la muerte sino a la salud y a la vtda. tOh para-
doja! es el único caso en el que el derecho a la salud -
dicha reproductiva- equivale a la muerte. iQué Horror!.
Nótese cómo, para obtener rápida e imperceptiblemente
la desculpabilización de las conciencias, se ha venido sen-
sibilizando a la opinión para que sin darse cuenta, la de-
nominación ya no se refiera al homicidio realizado en las
entrañas maternas, ello viene aparejado con la caída deba-
rreras axiológicas frente a ese acontecimiento criminal.
Veamos la rápida pero imperceptible mutación gramati-
cal y axiológica:
Durante siglos se·le denominó aborto -muerte volunta-
ria e intencional del feto-, después cuando iniciaron las
primeras envestidas abortistas en las campañas publici·
tarias y en los proyectos de ley que proponían su legali-
zación -hasta el momento en Colombia lo han intentado
en 25 oportunidades- se le empezó a designar como «la
interrupción voluntaria del embarazo». Ello indica
cierta neutralidad frente a la vida del feto y se torna ne·
bulosa la imagen del hijo degollado por una aspiradora
o por una cubeta o algo peor, envenenado por una solu·
ción salina. Paralelamente y con el mismo propósito, se
le designaba como «procreación responsable)>, haciextr,.
do ello parte de «La economía doméstica» o del «Creti~
86
lllicntu l';uniliur sustrnihh.')), hasta lll'gar a la dcno 1nina-
c j l,lll HL'( l1 a1, 1U l1 y l' ll f1..' 11\ lS t ir tll 1\ l' 1\ t l' S l' Ú¡\}a d ¡ \ e0 1110 «S a -
ltul t•t•¡Jrotluctit'll».
87
7. 14. rl.:OIIOUI ÍU clotué~t h.: U:
88
, ,
8. IDEOl..OGIA DE GENERO Y JURIS-
PRUDENCIA CONSTITlJCIONt\L
89
Si ello no se detiene, más temprano que tarde la socie .
dad colombiana será irreconocible. Lo que está en peli.
gro es nuestra propia identidad nacional, sustituida por
un multiculturalismo diseñado desde los laboratorios de
los actuales centros de poder global, que para su cons0 •
lidación deberá disolver previamente -estamos en eso-,
las tradiciones nacionales.
Una de las finalidades políticas de la ideología de género
y del multiculturalismo es precisamente esa. No sobra
decir que tales ideologías han sido elevadas hoy a la ca-
tegoría de dogmas; estamos inexorablemente frente a un
pensamiento único que nos conduce raudamente hacia
la desintegración social y hacia el oscurecimiento de la
naturaleza humana. 80 Por supuesto que la ideologizada
presentación oficial. lo señala como: «una etapa superior
o cualificada de la evolución social».
Parece desconocerse que c·ada pueblo es único e irrepeti-
ble, se asumen esquemas mundialistas que laceran dra-
máticamente nuestra identidad y que no tienen relación
alguna con nuestra realidad. Ante la superstición
libertaria que todo lo avasalla, no se podrá proponer
como respuesta sino la Tradición, que según Vásquez de
Mella, «Es el sufragio Universal de los Siglos». Nunc~
antes, como ahora, había comprendido la sentencia doc-
ta de Don Eugenio D'Ors: <<Todo lo que no es tradi·
ci6n •• plt~gio».
La Corte Constitucional dócilmente viene reproducien·
do esta mitma id~ología en algunos de sus fallos. Veá·
.MOCOS
•.
IUHÁHDEZ, Jos~ MIJrtf;n. ~~ Multlcultu~alfsmo como lmpoSifló~
ltJMJIIIIl• V 81 ·EIIIGJftllloJt con fl Hfhfbsmo Ontológrco". Revisto Arvfl, Hume .
,.
.••••
', .. .
rnosla ~ analicem~s l~s si~uientes textos proferidos c..·r 1
sentenctas de constJtucJonahdad y en decisiones de tutclll:
- Sentencia C- 3 71 de 2000.
91
ca de la mujer; 81 el negar de plano a la pobla-
ción femenina el acceso a la única escuela de
cadetes del país; 82 que una entidad de seguri-
dad social permita a los hombres, y no a las
mujeres, afiliar a sus cónyuges; 83 el exigir que
el matrimonio se celebre exclusivamente en el
domicilio de la mujer; 84 que a ésta se le prohíba
trabajar en horarios nocturnos. 85 En todos es-
tos eventos, la Corte ha concluido que las dife-
rencias en el trato, lejos de ser razonables y pro-
porcionadas, perpetúan estereotipos cultura-
les.>> -Subrayado fuera del texto-
Recordemos que para la ideología de género y al parecer,
para la Corte, tales estereotipos culturales que tanto se
estigmatizan, se refieren a todas aquellas instituciones
heredadas de la tradición hispánica y cristiana, especial-
mente, las relativas a la familia, al matrimonio y a la de-
fensa de la vida, las cuales están sufriendo terribles em-
bestidas legales y judiciales: -aborto, eutanasia, eugene-
sia, matrimonio ·homosexual-. Desafortunadamente,
numerosos y recientes precedentes judiciales no permi-
ten tener mayores esperanzas; muy seguramente la vida
y la familia serán objeto de nuevos agravios, eso sí, con la
apariencia de juridicidad.
92
_ Sentencia T-26H de 2000
93
mente para anatematizar a los homo-
sexuales, no otorgan validez a las leyes
que los convierte en objeto de escarnio
público» 90 -Subrayado fuera del texto-
94
_ f.,t lglt'sia afinna. a .la l~z d~ ,las evidencias
. )/c)uicas que la tnclznacLon homosexual
¡/1(10 11 ( ·t-
lt'·' "u/J)et ¡1·a t1ZCil te desordenada» (C~t. I?l. Ca t.
91
http: 11 www. aciprensa. coml controversias/ideologia.htm.
Mo.ns. Reig P/a es Obispo de Segorbe-Castellón, Presidente de la Subcomisión
Eprscopal de Familia y Vida, Vicepresidente de la Comisión Episc~pal de Apos-
tolado Seglar, Miembro de ta Comisión Episcopal para la Doctnna de la. Fe,
D~cano del Pontificio Instituto Juan Pablo 11 para estudios sobre el Matnmo-
nro y la Familia Y dependiente de la Pontificia Universidad Lateranense de
Roma.
95
gún el Obispo, ésta es la estrategia p~l~tica para
convencer a los políticos de la rentabllrda~ :lec-
toral y, por tanto, política de hacer gurnos y
concesiones legislativas al lobby, homosexu~l.
Pretende cambiarlo todo a traves de .camb~os
legislativos que redefinan .las evldencras
antropológicas. Quiere camb1ar las leyes para
poner fuera de la ley, encarce~a~ en su c~so Y
privar de todos los derechos crvrles, a qurenes
afirman que los actos homosexuales constitu-
yen una grave depravación. Acusa de horno-
fobia a quienes, respetando a las personas, no
comparten sus opiniones respecto a la inclina-
ción y los actos homosexuales. Sin duda toda
una estrategia mediática.
La «cultura gay>> es el fin último al que desea
llevarnos el lobby gay. Es una civilización gay
donde sea «natural>> y universalmente acepta-
da y practicada la homosexualidad o, al me-
nos, la bisexualidad. Esta cultura sugiere pro-
piciar legislativamente que se explique a los
niños en los colegios que la homosexualidad
es «natural» y por lo tanto, cuando en ciencias
naturales se explique a los niños y niñas los
detalles anatómicos y fisiológicos de la sexua-
lidad heterosexual humana: el aparato genital
masculino y femenino, la cópula, la fecunda-
ción, el parto y demás. Habrá que explicar, tam-
bién, la anatomía, la fisiología y los procedi-
mientos mecánicos necesarios de las prácticas
homosexuales (la sodomía y demás prácticas).>>
96
A re'llt!lL)n scgu ido. la Corte cx¡J/ic )/ ~ . .
" e
d;ld •> \. p1anrca e1p¡tpcl cJel EsUHJo. t., 1, rcrmmo
.
«scxuc.III-
. .
dn e d~ «UJVCrS'JS o ·•
r~lL i u 11 e.-.. s e xua1es » : · ' , n en -
91
9} eCorte Constitucional.
orte Constitucional.
Sentencia C-431 de 1999.
Sentencia C-098!96.
97
<<Así las cosas, el Estado, como garante del ejer..
cicio plural de los derechos en una colectivi-
dad, debe pennanecer en principio neutra/94 ante
las manifestaciones sexuales diferentes como la
homosexualidad, sin pretender imponer crite-
rios ideológicos o morales específicos.» (... )
Esto es falso. El Estado no es neutral, por el contrario,
impone criterios ideológicos y morales específicos. Hoy,
la Corte Constitucional, mediante los precedentes judi·
ciales y el Ministerio de Educación Nacional, mediante el
Plan Nacional de Educación Sexual, pretenden imponer
una ortodoxia pública agnóstica, relativista, hedonista y
anticristiana, desconociendo, entre otros, el artículo 68
de la Constitución Política. Más que como autoridades
estatales, fungen como Iglesia que trasmite una moral, la
que acabo de señalar.
lbldem.
94
98
En este caso se decidió que la cateaor'
. ,. 1 a ra
«orientacron ,. sexua » está contenida en
la categorra «sexo», consagrada en el artí-
culo 26 del Pacto, por lo que se convierte tam-
bién en una categoría sospechosa, que no pue-
de se!Vir de criterio de diferenciación en per-
juicio de los hontosexuales. Ahora bien, reite-
rando la fuerza interpretativa que otorga el
artículo 93 de la Constitución a los tratados
internacionales, este precedente se convierte en
una razón más para concluir que el texto
constitucional colombiano, cuando ha-
bla de sexo, también incluye orientación
sexual.»
<<La orientación sexual es un criterio de di-
ferenciación prohibido que no puede servir de
base para restringir el principio de universali-
dad en el goce del derecho a la salud de quien
convive de manera comprobadamente estable
con una persona de su mismo sexo.» 96
El siguiente salvamento nos confirma Io.que hasta ahora
hemos venido sosteniendo, que los constructores de la
aldea global son los diseñadores de nuestras institucio-
nes mediante el instrumento de los «Bloques de Constitu-
cionalidad». Ese es el sistema jurídico actualmente impe-
rante, por eso, estamos presenciando impotentes el pro-
gresivo colapso de nuestra identidad cultural. Basta con
la existencia de una norma internacional que vincule al
Estado, para que inmediatamente sea desplazado todo
el ordenamiento jurídico interno.
96
Salvamento de Voto, a la sentencia su-623 de 2001.
99
• Sentencia C-507 de 2004.
Los comentarios realizados respecto al anterior salva·
mento son perfectamente aplicables a la sigui~nte sen-
tencia, donde se insiste nuevamente en combatir las tra-
diciones religiosas y culturales, removiendo estereotipos
que se convierten en actitudes discriminatorias, tal como
lo ha establecido la ideología de género; insisto que lo
que se pretende es realizar una reingeniería social
anticristiana de la familia como ellos mismo lo han reco-
nocido; la constitución cristiana de la familia es un obs-
táculo para consolidar el proyecto homogenizador del
nuevo orden .
«En cuanto a la igualdad de género, el PDCP
(Pacto Internacional· de Derechos Civiles y
Políticos) establece que los Estados Partes se
«comprome~en a garantizar a hombres y mu·
jeres la igualdad en el goce de todos los dere·
chos civiles y políticos» que el mismo Pacto re-
conoce .... «La desigualdad que padecen las
mujeres en el mundo en el disfrute de sus de-
rechos está profundamente arraigada en la tra-
dición, la historia y la cultura, incluso en las
actitudes religiosas. (... )Los Estados Partes
deben cerciorarse de que no se utilicen
las actitudes tradicionales, históricas,
religiosas o culturales como pretexto para
justificar la vulneración del derecho de la
mujer a la igualdad ante la ley y al disfru-
te en condiciones de igualdad de todos los
derechos previstos en el Pacto. (..•)»97
100
!vtás adelante la misma sentencia llega al paroxismo al
considerar como ~resuncion de Inconstitucionalidad la
.L • "' • '
101
.
mente discriminatoria, tienen que concurrzr
claras razones que expliquen su empleo, pues
de no existir esas justificaciones especiales, y
en virtud de la presunción de inconstitu-
cionalidad, el juez constitucional deberá reti-
rar del ordenamiento esas regulaciones.» (Cur-
siva fuera del texto original)» 98
Estamos frente a una verdadera utopía que adquiere la
connotación de trágica, al pretender de manera siste-
mática imponerse como parte de la realidad.
...... -- -
....
......
~-ll
' . -
1
t
....
_,.;.. :d
__
-
''
, ,
9. LA IDEOLOGIA DE GENERO y EL
ORDEN NATURAL
/. LEWIS
Cuando se afirma:
• Que el hombre nace sexualmente neutro.
• Que es una injusta discriminación que solamente la
mujer dé a luz.
• Que es la cultura la que verdaderamente crea la
naturaleza del individuo.
• Que no se tiene naturalmente atracción por perso-
nas de otro sexo.
• Que la relación sexual con animales o con niños es
una opción sexual normal.
• Que los hombres y las mujeres no son expresión
natural de un plano genético, sino un producto cul-
tural.
• Que el aborto en un derecho fundamental.
• Que los homosexuales pueden contraer matrimo-
nio y adoptar niños.
103
• Que se debe destruir la familia para ser verdadera .
mente libre.
• Que el matrimonio podrá contraerse entre Varios
• •
hombres con vartas muJeres.
• Que existe un derecho humano fundamental a la
eutanasia.
• Que existe un derecho humano fundamental a la
eugenesia.
• Que la Patria Potestad atenta contra el derecho a la
confidencialidad de los hijos.
• Que la Patria Potestad atenta contra el libre desa-
rrollo de la personalidad.
104
recho, en suma, la cultura occidental y cristiana f d
. . d , un a-
da en e1reconocimiento
. e un orden
. natural ere ado por
Dios, lo pnmero. que se. debe 1objetar o mejor negar , para
que no tenga tnconvententes a demolición ulterior e 1
existencia del orden natural como matriz del orden·p~si~
tivo. Y a buena cuenta que lo están consiguiendo. Lea-
mos qué nos dicen al respecto en uno de sus más cono-
cidos textos:
' 00 Shulamith Firestone. The Dialectic o{ Sex. Bantam Books. New York, 1970,
p. 10
' 0 '"Liama la atención que un movimiento que considera que nuestras concep·
ciones del hombre y de la mujer son "construidas socialmente" quiera incul·
car obligatoriamente a todos sus alumnos sus peculiares puntos de vis~a.
¿"Formar en género" no es también una construcción social? ¿La perspect1va
de género como enseñanza trasversal de toda disciplina, no es un instru-
mento par~ construir un tipo de ser humano acorde con una cierta idea ~e la
sociedad? Es cómodo suponer que las ideas de los demás son co~strucclones
sociales impuestas, mientras que las propias son neutrales Y 11beradora~.
Pero, en todo caso, una cosa es ofrecerlas y otra trans{o~marlas en en~eña ·
za obligatoria". /gnacfo Avechaga. "Género libre Y asrgnatura obhgato-
ria". ln{oprensa. enero.2006.
105
mos para tal feminismo es la desigualdad natural, es, la
diferencia. Estamos ante una cruzada contra la natura.
leza y por supuesto, el autor de ella, que cre6 8erea
diferentes.
106
g,l. ¿Existe un orden natural? lCómo se prueba?
107
Para que haya cambio debe haber ~lgo que ca m-
bió, es decir, un sujeto del can1bzo. De lo con-
trario, no habría cambio alguno.
La filosofía cristiana opone a estos errores una
concepción muy distinta y confonne a la e~~pe
riencia. Más allá de todo catnbio, hay realzda-
des permanentes: la esencia o naturaleza de
cada cosa o ser. La evidencia del cambio no
sólo suprime esa naturaleza sino que la presu-
pone necesariamente. La experiencia cotidia-
na nos muestra que los perales dan siempre
peras y no manzanas ni nueces, y que los ol-
tnos no producen nunca peras. Por no sé qué
deplorable estabilidad «las vacas siempre tie-
nen terneros y no jirafas ni elefantes y, lo que
es más escandaloso, los terneros tienen sien1-
pre una cabeza, una cola y cuatro patas ... Y
cuando en alguna ocasión aparece alguno con
cinco patas o con dos cabezas, el buen sentido
reclama espontáneamente.» iQue barbaridad,
pobre animal, qué defectuoso! «Reacciones que
no hacen más que probar que no sólo hay na-
turaleza, sino que existe un orden natural. La
evidencia de este orden universal, es lo que nos
permite distinguir lo normal de lo patológico,
al sano del enfermo, al loco del cuerdo, al mo-
tor que funciona bien del que funciona mal, al
buen padre del mal padre, a la ley justa de la
. .
ley tn]usta, 105
a l derec ho de la barbarie, a la
utopía de la realidad.»
105 SACHERI, Carlos A. "El orden Natural". Ed. Cruzamante, Buenos Aires
1980. p. 22.
108
¿YLA CJELVC!A? ¿TAMBIÉN LO PRUEBA?
109
" l de
orden bien estructurado. Una sola n1o lecua
albúmina incluye decenas de núles de rnillo-
nes de átomos, agrupados ordenadamente en
una estructura disimétrica. Hoy sabemos que
un ser vivo está constituido principalmente por
moléculas de proteínas que cor1tienen en~re
300 y 1000 aminoácidos. Las transforn1aczo-
nes químicas de la célula son cata/izadas por
enzimas, que a su vez poseen estructuras par-
ticulares. Un solo organisn1o unicelular posee
una multitud de proteínas, a más de lípidos,
azúcares, vitaminas, ácidos nucleicos. ¿Cómo
explicar entonces a la luz de estas consta-
taciones que la estructura íntima de la mate-
ria en sus niveles más elementales exige un or-
denamiento tan perfecto, tan delicado, tan
constante, para poder producir el más simple
de los seres vivos? Si a ello sumamos la exis-
tencia no de uno sino de millones de millones
de organismos monoseculares y la complejidad
pavorosa de los organismos más complejos:
¿cómo sostener que un azar ciego preside tanta
maravilla? El moderno cálculo de probabili-
dades prueba 'la imposibilidad de una pura
combinación fortuita.
110
10. LA IDEOLOGÍA DE GÉNERO· EN
TRE EL LIBERALISMO MALTHusiAN¿
EL MARXISMO FREUDIANO y EL '
EXISTENCIALISMO SARTRIANO
f:
Pfldora del día siguiente y otros, impuestas por la ONU, el Banco Mundial .el
:'ando Monetario Internacional, son inspiradas por ·lo Doct~~tll Ma!tuslai!JII,,.
'flUe la PCJdemos encontrar en su conocido texto ''El DlltNID Huma.no • ·
· . ., , , . una fábrica de ideologías autorita .
nlan. \a ian1t 1td es. « ll .
. · , _mentales conservadoras, y ta er tdeo ..
rtas y estructuras . . d
~ . d 1 d social» 10~ Tales estereotipos eben di-
logtco e or en 1 ·/
1 / , 1·do corrosivo de la revo ucton sexual
so\verse con e ac . _. ·
, . ~use recoge toda esa verttente filosofica
No en vano, M 1 dl e .
_ 1a de Ft·ancfort
de 1a c~cuc '"
v se convtertc en el gran refe-
.r • • .
-, t, doctrinario del n1ovin1iento anarqutsta panstno de
rcn e
68. lo que hay que demoler es 1a f'an11.1.ta, por eso el
19
111 encionado autor afinna:
112
Asumir «la revolución feminista», acaband
1
.~ d' . al d 1 o con 1a
concepcton tra acaon e a mujer como fundamen-
talmente esposa y madre de familia.
1 «Asumir la lucha reivindicativa de los homosexuales)>,
• Nudismo
• Disgregación del Estado. 111
11l
Uno de Jos discípulos más aventajados de Marcuse, Pierre
Fougeyrollas devela con pasmosa exactitud los propó ·.
tos de esta agresión a la familia; con ello, saben que d81 _
rán el «tiro de gracia>> a nuestra civilización y a nuest~a
cultura y: ¿Quién se atrevería a negar que lo están consi-
guiendo?
(<Una revolución de las formas de sentir, de
actuar y de pensar, una revolución de las for-
mas de vida colectiva e individual, en suma
una revolución de la civilización». ¿cómo?
Con «La revolución sexual, o sea la abolición
de las relaciQnes actuales entre los sexos, acom-
pañada de una transformación radical de las
relaciones entre hijos y padres, jóvenes y adul-
tos, que debe acompañar el curso de la revolu-
ción económica, social y política» 112
El afán por desmaternizar a la mujer y ridiculizar cual-
quier manifestación de feminidad y ternura, lo llegan a
plasmar los activistas del feminismo freudiano y pontífi-
ces de la ideología de género, de Ja manera más cruel,
cruda y dramática. Confieso que se me agotan los adje-
tivos para describirlo, pero nos son de gran utilidad para
continuar develando Jos horrores de dicha ideología.
1f5
No en vano Engels afirma: «La liberación de la muJ·
' 1 F ·¡· 1ls
pasa por la destr~cci~n _de a amtta», por ello, el
er
revisionismo marxtsta tnstste en que su fracaso se orig¡ .
nó en creer que las soluciones eran económicas y no ata .
caron directamente a la familia en donde se originaban
realmente las clases. Desde su misma acta fundacional .
El manifiesto del partido comunista-, se propuso lo an .
terior. La pretendida abolición de la familia se traducía
en una radical evolución igualitaria que llevara a la asun.
ción de nuevos roles familiares, 116 hasta encontrarnos con
la mutación de la lucha de clases, en la lucha de géneros:
como la cultura es opresora y discriminadora de la mu.
jer, esas estructuras opresivas tendrán que ser des-cons-
truidas, y para lograrlo crean «nuevos derechos» libe-
radores de la mujer, los cuales son promovidos o impues .
tos por los organismos internacionales 117 y mediante los blo-
ques de constitucionalidad, instrumentos jurídicos internos
que resultan muy eficaces para tales propósitos.
Hoy, nos encontramos ante un nuevo proletariado, inte·
grado por todos los sectores excluidos de la sociedad·
minorías étnicas, emigrantes, homosexuales, prostitu·
tas, travestís, punks, raqueros, intelectuales de vanguar·
dia, traficantes, drogadictos, indocumentados, presidia·
rios y demás-, que han logrado en el camino de la revolu·
ción cultural mayores resultados que los obtenidos du·
rante 90 años de lucha armada marxista -leninista. Esos
son los nuevos ejércitos que pretenden elevar a para·
" 5 ENGELS,Federico. El Origen de la Familia, la Propiedad y el Estado.
CALDERÓN BOUCHET, Rubén. Revista Arvil. P.
116
116
digmas sus conductas
. . . personales, extra)'endo d e
allí valores y prtnctptos en los que se funden cotn-
portamientos sociales los cu~les deben ser recono-
cidos como derecltos convertidos desde luego en un
referente cultural.
de Género".
117
Después de encontrar tanta coincidencia y tanta paterni-
dad doctrinaria, no dudo al afirmar que el laicismo mi-
litante, el feminismo radical y el marxismo freudiano son
los motores de esta inusitada agresión a nuestras tradicio.
nes cristianas, constitutivas de nuestra identidad nacional.
119Estos son sólo algunos ejemplos, pero podria escribir todo un libro, co·
mentando hechos similares:
"El 25 de agosto del año anterior un juzgado de Brasilia condenó a un sacer·
dote por llamar "abortista" a una antropóloga que promueve el aborto le·
gal, sentando un peligroso y absurdo precedente contra los que defienden la
vida en Brasil, al condenar a un sacerdote a pagar una multa por usar la
palabra "abortista" para referirse a la antropóloga Débora Diniz
Rodrigues, conocida defensora del aborto y directora del Instituto de Bioétlca,
Derechos Humanos y Género. La noticia aparecida en ACI prensa, señaló lo
siguiente: "La semana pasada, la 1° Vara de Recursos de los Juzgados Espe·
ciales de Brasilia condenó al Presidente de la Asociación Pro-vida de Anápolis,
Padre Luiz Carlos Lodi da Cruz, a pagar una indemnización de cuatro mil 200
reales (unos tres mil dólares) por supuestos daños morales contra Diniz.
Además, los jueces prohibieron al P. Lodi utWzar la palabra "abortista" para
califkar a quien defiende el aborto. Al conocer la sentencia, el consternado
sacerdote no tuvo más remedio que preguntar qué "adjetivo utilizar enton·
ces para alguien que defiende el aborto, pues ciertamente quien defiende el
divorcio no se ofende al ser llamado divorcista, ni el partidario del comunis·
mo por ser llamado comunista".
Según el P. Lodt, ''faltó indicar a los magistrados cuál es palabra aceptada~~
nuestra lengua que tenga el mismo significado sin ser ofensiva, para des g
nar a quien es abiertamente defensor del aborto".
118
11. EL SISTEMA JURÍDICO IN-
TERNACIONAL Y LOS NUEVOS
DERECHOS HUMANOS , EN LA
~
IDEOLOGIA DE GENERO
119
de todas las cosas; pero la reingeniería s_o~!al y cultural
practicada por la ONU, requiere una vtston nueva del
hombre y del lugar que ocupa en ~1 mundo; hoy, el hom-
bre como centro del mundo ha stdo desplazado y reem-
120 • d . 1
plazado por la madre naturaleza, resurgten o 1nc uso
el mito pagano de la Diosa Gaia; el hombre entonces,
como consecuencia, debe someterse a los imperativos
ecológicos. 121
Rápidamente el hombre sacral de la premodernidad,
desacralizado por la modernidad, terminó deificando la
naturaleza, haciendo parte de ella como un ser más en la
evolución de la materia.
Hoy ese valor objetivo, me refiero a la dignidad humana
como fundamento del ordenamiento jurídico, ha sido
igualmente reemplazado por el consenso. Claro, como
no existe nada diferente al orden positivo creado por la
110 Me remito a la Carta de la Tierra, proyecto éste que según afirma el Padre
Michel Schooyans, y otros estudiosos del tema: viene siendo promovido por
la Naciones Unidas en sus programas para el desarrollo y para el medio
ambiente. Afirma igualmente que se requiere una ética menos
antropocéntrica y más circular, debiendo la carta, convertirse en el decálo·
go de la nueva ética global, que sustituya los diez mandamientos. Esta carta
deberá establecer un código universal de conducta y reemplazar los códigos
morales de las religiones tradicionales. Ni más ni menos. El documento
destaca igualmente que el hombre siendo sólo el producto de una evolución
material, debe someterse a los imperativos del mundo que lo rodea, de la
naturaleza, de la ecología, el hombre debe aceptar no ser más el centro del
mundo. Para lograr lo anterior, es indispensable para la ONU eliminar ese
cuerpo intermediario que es el Estado Nacional.
111 La preocupación ecologista manifestada en la proliferación de ONGS con
120
voluntad. ., o la razón humana. ' resulta aper1as, 1og1ca
- ·
esa
conclusion. No hay valor, dicen, que se imponga por la
sola fuerza de la verdad -otro de sus dogmas-. Los dere-
chos humanos, para la ONU, vale decir, para la aldea
global, como hasta hace muy poco pensaban las den10 _
cracias liberales, no son más la expresión de una verdad
inherente a la persona, que los ostenta por el hecho de
ser tal. Surgen entonces nuevos derechos humanos que
nada tienen que ver con e1 orden natural, ni siquiera con
la dignidad humana en su acepción liberal. Son el pro-
ducto de los acuerdos internacionales, son lo que digan
los tratados y las circulares de los organismos multi -la-
terales. Una vez se llegue al consenso, se adoptan con-
venciones internacionales, que firmadas por los Estados
miembros, tienen plenos efectos jurídicos internos.
121
• Derecho al matrimonio homosexual.
• Derecho a la eutanasia.
• Derecho a la eugenesia.
• Derecho a la libertad sexual.
• Derecho al aborto.
• Derecho a la equidad sexual.
• Derecho al placer sexual.
• Derecho a la expresión sexual emocional.
• Derecho a la libre asociación sexual.
• Derecho a la autonomía reproductiva, o a la salud
reproductiva. Así designan hoy los tratados inter-
nacionales -CEDAW- al aborto y a cualquier forma
de contracepción abortista. 122
• Derecho a múltiples modelos de familia.
• Derecho a las relaciones sexuales no abusivas. Léase
derecho a la pederastia.
• Derecho a la confidencialidad de los hijos contra el
ejercicio de la patria potestad de los padres, que
más adelante comentaremos.
Un estudioso del tema Michel Schooyans, 123 al comen-
tar uno de los más importantes documentos onusianos:
«La Carta de la Tierra», 124 expresa la misma inquietud:
122Asambleas de la ONU. El Cairo 1995, Beijing 2000, Nueva York 2000, Belén
de Para 1997.
123 Sacerdote Belga, profesor de la Universidad de Lovaina.
124 Próximamente se convertirá en declaración universal de la tierra, reem·
122
lugar, se debe debilitar a las. naciones soberana s, pues
ellas son genera1mente 1as pnmeras en proteger los d _
chos inaliena~les de sus ciudadanos. Luego, en las as::.
bleas internact~nales, s~ debe obtener el mayor consenso
posible, recurnendo, st es necesario, a la corrupción, al
chantaje o a la amenaza. Una vez adquirido, el consenso
puede ser invocado para hacer adoptar convenciones in_
ternacionales, que adquieren fuerza de ley en los Esta_
dos que las han ratificado. Este tipo de globalización,
sostenida por una concepción puramente positivista del
derecho, justifica las más vivas inquietudes ... » 12s
Debilitados los Estados, mediante los referidos mecanis-
mos, más tarde serán paralizados por la acción coordi-
nada de cientos de ONGS expertas en el normativismo
mundialista, que sabrán utilizarlo para disolver los últi-
mos vestigios del viejo orden.
Dos son las características del actual sistema jurídico glo-
bal:
. Centralización del poder -político, jurídico y fi.
nanciero- en cabeza de los organismos
multilaterales, léase: ONU, OEA, TPI, UNICEF,
OMS y demás.
· Exaltación de la individualidad, hasta llegar al
paro~smo hedonista, entiéndase: derechos huma-
nQs ilimitados e ilimitables.
De esa manera, se estructura un sistema positivo
SJpra:estatal, donde las normas internas tendrán validez
tn~;l~ m~dida que no contradigan los acuerdos interna-
-·":f,·4.,· . . . "
)ll~ta de 111 ONU" y ~La ONU y 1~ Glo/JQifzoción". Revisto Arvil # SO.
123
cionales; las últimas instancias judiciales nu son los ór.
ganas nacionales, que a. pr~¡~úsito tienden a ch.:sap<trc.
cer sino los organisn1os JUdlcwks del superestadu mun.
dial, que imponen globaln1cntc el rnulticulturalismo y la
ideología de género.
La garantía judicial planetaria de este pensamiento úni-
co, será el Tribunal Penal 1ntcrnacional -T. P. l.-, al cual
serán sometidas las personas y las naciones que no sean
dóciles frente al nuevo orden y a sus consensuados dere-
chos humanos. Los Estados serán excluidos de la aldea
global y las personas judicializadas y acusadas de
fundamentalistas, acusación suficiente para estigmatizar-
las y poner en duda su ciudadanía cósmica.
124
J
to final, pero como era de esperarse, por tal inconvenien _
te, este propósito no podía desaparecer de la agenda
política global.
125
«En otros casos, serian necesarias instituciones comple.
tamente nuevas, las cuales podían incluir: por ejen1plo.
una policía mundial permanente q~te pud lera citar a las
Naciones a comparecer ante el Tnbunal Penal Interna.
cional de Justicia o ante otras cortes creadas especial-
mente. Si las naciones no respetaran los fallos del Tribu.
nal, sería posible aplicar sanciones, tanto n1ilitares como
no militares» 128
En el anterior sentido han sido muchos los avances de\
globalismo, los mecanismos jurídicos ya han sido crea-
dos, bastará simplemente ponerlos en ejecución. La si-
guiente declaración, resulta bastante reveladora:
~- n~Jbli·
texto completo aparece en: "Human Development Report, 19 9"• ~
tza El
cad~ por el ~NUD, Nueva York y Oxford, 1994. Citado por Luis Eduardo
~~drlla en: El Nuevo Orden Mundial". Página 277. 0 lD
Cuando se habla de prácticas tradicionales dañinas se está refiriendOdtbl
patria potestad, que la ONU considera como una institución familiar qur
ser desconstruida en los países católicos e hispánicos.
126
virtiá tc.unbién, que «la corte criminal interna-
cional podrá usurse para forzar la sumisión de
los países, ~¡ue 1zo cuntplan con las pretensio-
lles de la ONU, a La convención de los dere-
chos del niiio.»no
110 Noticias
Globales # 743 octubre 27 ·OS. http://www.noticiasglobales.org
mlbfdem. · ·
127
lnteramericana contra el ra~ismo y to?a f~rma de
discriminación e intolerancia, que obhgana, entre
otras cosas, a los miembros de la Or~anización de
Estados Americanos a reconocer social y jurídica .
mente al homosexualismo. Uno de los puntos en
los que más se insiste en los. proyectos de la con .
vención, es justamente en la censura de mensajes
de correo electrónico y páginas web para evitar
«todo tipo de discriminación por orientación
sexual» hacia la «minoría» gay-lésbica. Con el agra.
vante de que la convención obligaría a los Esta.
dos a juzgar y castigar no sólo los hechos con.
cretos que podrían ser calificados de «discrimi·
natorios» sino el «animus homofóbico o discri-
minatorio. Ese animus, se puede fácilmente supo-
ner de toda persona que respete la ley natural, mu-
cho más de los católicos fieles a las enseñanzas de
la Sagrada Escritura y al Magisterio de la Iglesia, y
también de los fieles y ministros de otras confesio-
nes cristianas.
En Brasil, por ejemplo, estando prohibido el «casa·
miento» homosexual, dos ONG's, una de Brasilia
(ONG Estrutura~áo) y otra de Goiania (AGLT,
(Associa~áo Goiana de Gays, Lésbicas, Travestis e
Bissexuais), están elaborando la lista negra de los
que se niegan. (Folha de San Pablo, 15-01-06). 132
128
que condena como hom~fóbicos a los Estados
miembros de la Unión que se opongan al reconoci-
miento social y jurídico del homosexualismo, y les
reclama, en virtud de una perversa interpretación
del principio de no discriminación, medidas «edu-
cativas, administrativas, judiciales y legislativas»,
para «garantizar la protección de la comunidad
LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transexuales),
frente al lenguaje de odio y violencia homofóbica».
Como informamos reiteradamente, los activistas
homosexuales interpretan como lenguaje de odio
la predicación cristiana, el comentario de la Sagra-
da Escritura, la enseñanza del catecismo de la Igle-
sia Católica y demás» 133
129
~ • l ~
,.
12. ¿~ACIA UNAS NUEVAS FORMAS
POLITICAS AL MARGEN DE LOS
ORDENAMIENTOS
CONSTITUCIONALES?'J4
·-
132 .·- ......~
nuevas formas políticas las cuales carecerán d E d
de Constituciones, es un poder planetario que see sta .0 s Y
f¡ d . organzza y
gobierna co~ un amento en tratados internacionales y en
autoridades Igualmente planetarias.
L 133
nentales, como resulta patente en las Consti-
tuciones de/liberalismo, hay que discernir ele-
mentos de distinta naturaleza: un complejo de
garantías, limitaciones, frenos y atem.
peramientos, impuestos al poder estatal, según
los paradigmas típicos del constitucionalismo,
indicados en conjunto bajo la etiqueta de "es-
tado de derecho", en sentido propio restringi-
do; un orden de poder político, monárquico 0
bien, más a menudo, popular democrático.
Con la Constitución para Europa, incluso con
adaptaciones, se prevé que las reglas de organi-
zación constitucional y las garantías de los dere-
chos humanos entren en vigencia con un orde-
namiento de nuevo tipo, en el que falta un orden
de poder político comparable al de la organiza-
ción de los viejos estado_s. En tal sentido parece
discernirse un elemert(B·/·::····.auténtico en las re-
currentes afirmacionetJIHerca del llamado défi-
cit democrático de las ·. ituciones europeas"tJ9
'\
1Ub ~fti
V.~~/.,
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.Jt . . 'J. ·u~i·
c..;, •. v-a,.
_, :·~t\M ~ t()-
~ ~"lt:.(\L
-~.~~ ?.r.'
.. - ' ·,
.).ij
--l'tl\ r J 'Jts~ .
139
Pietro Gtusep~e Gras~. "El problema del constitucionalismo después del
estado moderno · Madrrd, España Ed Ma · l n
· ·
n • • 70
rC1a rons, ragrna , , .
134
13. LA NUEVA AXIOLOGÍA: EL
MULTICULTURALISMO
, , Y LA
IDEOLOGIA DE GENERO
«Dos peligrosas tendencias provenientes del marxismo, y asumi-
das, sustentadas e impuestas ideológica y educativamente por
agencias de la ONU, están determinando decisivamente la cons-
trucci6n axiol6gica de la sociedad: Multiculturalismo e ideolo-
gía de género. Es la ideología de género, la que desnaturaliza
radicalmente a la familia>> 140
135
El gobierno mundial considera que ha Uegado el mome
. .1 1 b 1 142 b d
, .
de implantar una «ettca ctvt go a» asa a en va]onto
, d , res
extraídos de la ideologta e genero Y en el muhicu],
turalismo, siendo éste, presentado, a menudo, como una
etapa superior del pluralismo. Como consecuencia, cua}.
quier costumbre, cualquier ~ctit~~ .o c~~lquier forma de
vida proveniente de cualquter ctvtltzacton, de cualquie
, . 1 r
cultura y de cualquier etnia, senan tgua mente respeta-
bles sin interesar si son o no contrarias al orden natural
0 a la dignidad humana, que para el multiculturalismo
no existe o es relativo. Estas verdades oficiales se impo.
nen por coerción, por «educación» o por censura; 14 3 por
eiJo, no se encuentra reparo alguno en reconocer igual
valor jurídico a derechos que se excluyen entre sí; por
ejemplo, se reconoce derecho a la vida del no nato, pero
igualmente el derecho a la madre de abortar; se establece
como obligación del Estado, la sociedad y la familia la
protección y asistencia de las personas de la tercera edad,
pero a la vez se establece la eugenesia como política del
Estado; se consagra constitucionalmente la obligación
de proteger a los disminuidos físicos, sensoriales y psí-
quicos, pero a su turno se establece la eutanasia con el
pretexto de reducir el dolor; se reconoce el derecho a los
hijos de tener una familia y a Jos padres el de destruir la
misma, o el derecho a Jos hijos de tener padre y madre y
a los homosexuales de adoptar hijos; de manera similar
se reconoce el derecho a la salud pero también a causar-
se daño mediante el consumo de la dosis personal de
droga.
142
Our Global Neighborhood ·Nuestro Vecindario Global- OxFord UniversitY
press, 1995. · J'
143 BROCOS FERNANDEZ J ' ,. .. · ·'
Id ló · ' . ose Mana. 'El Multiculturalismo como /mposlCtOn
eo grca Y su EnsamblaJe con el Nihilismo Ontológico". En: Revista Arvil # 98·
136
Como no resulta «políticamente correcto» que las so · _
.d "d d cte
dades posean 1 ent1 a cultural, se realizan todos Jos
esfuerzos posibles para lograr que aquéJJas tradiciones
que han _fo~mado la identidad ~~cional sean progresiva_
mente ddutdas. Con ta~ propos1to, se diseñan e imple·
mentan todas las estrategias que hemos venido analizando.
144
SARTORI, Giovanni. Pluralismo Multiculturalismo e Inmigración. 11 Giorno,
1519101. ,
137
«El multiculturalista coloniza, fragrnenta y
desconstnJve internan1ente la sociedad, a la par
que proscribe la civilización occidental cristia-
na al igualarla con otros «subproductos cultu-
rales» producidos bien en civilizaciones 1nás
prinútivas y que n1enoscaban la dignidad de
la persona hLunana.
La concepción vital del multiculturalista está
constreñida a unas detenninadas pautas y va-
lores unidireccionales con pretensión de om-
nipresencia social. Esta visión reducida de la
realidad, la permanente hostilidad a los valo-
res occidentales de raíz cristiana y la no acep-
tación de referentes sólidos que aporten senti-
do a la vida como es la asunción de «imperati-
vos rnetajuridicos y metahistóricos» (Razón Es-
pañola, 2002:131 }, de un marco común de
convivencia integradora arraigado en un or-
den moral natural, por esencia permanente e
inalterable, y que sólo puede darse desde el
iusnaturalismo, lleva a la «relativización axio-
lógica», pues nada es definitivo para mi, y fi-
naliza en lo que el multiculturalista trata de
evitar, en la deshumanización de la cultura
pues «sólo el horizonte de lo divino permite
desplegar al máximo las potencialidades de la
cultura» (Gutiérrez García, 2001 :222), y en
una «absolutización ontológica de lo relativo>>. 145
138
Concluyendo, podemos afirmar que la ideología de género
y el multiculturalismo ~onducen raudamente a la socie-
dad occidental, como dace Bracos Fernández, a la anomia,
8 la disolución social y al oscurecimiento de la naturale-
za humana.
139
,_
1'
- 1 1 -
t4. FAMILIA E IDEOL_!)GÍA DE GÉNERO
HACIA LA ABOLICION DE LA PATRIA
POTESTAD
«La igualdad feminista radical significa, no simplemente
igualdad bajo la ley y ni siquiera igual satisfacción de nece-
sidades básicas, sino más bien que las mujeres -al igual que
Jos hombres- no tengan que dar a luz. La destrucción de la
familia biológica que Freud jamás visualizó, permitirá el sur-
gimiento de mujeres y hombres nuevos, diferentes de cuantos
han existido anteriormente» 146
141
... ~ .. · .., _. . • .... 7"' -- .. _:. '~ · ' '"na ·
. _ · tu j.:: ... 3 :11 e-:~ L: e~ : . . J .. · '" .. .. , -- ... .. - - · ~ ~ores.
la~ \lr - .. ,, ·- - ..-"'-~~ ... ,,'\ l'""-2"'"""-~" ~"'1'~ .. .3
"l am(!r al ~J,:n!l.:;~. J.·l . \~ :- .... ~~ .. ~.' ....... ~ ,.._ "'n una
t: ..¡ j . . "' . ., l . . .. -' ' . ('1 ~ ~ '
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e'Lu-Ja . . r Ll-a·..o.rnJdJ . . '• ~:~:
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. . ::~~~l\...0 . .,,\ .. ·"'"¡ ... l..~o.nstan.
- ... .
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1 "~
1 ""~a\ a
1 -f ,
142 ·~
parte legitim~a.d a ?tras itastituciones de
la sociedad cn1l . .\uestras fanrilias son
las que nos enseria11 pritnero la religión,
a ser bue11os ciudadanos. r,zn l'Onlplctu es
la hegenzonía de la clase donzinanre en la ¡~1 -
milia. que se nos enseña que ésta enc~r
na el orden natural de las cosas. Se basu
en pa11icular en una relación enrre ellzotnhre
v fa mujer que reprinze la sexua lid ud. especia 1-
~nence la se.\11alidad de la nzujerH I.J'"
9
RIDDIOUGH, Christine. Socialism, Fem;nism and Gayl Lesbian Liberation.
!(
143
Jc~c. urne.ntos dond: .aparecen l;:~s conclusiones del
rlanean11ento estrateg~eo para el ano 2006, explican en
detal1c entre otras cosas que:
Fnday Fax, Boletín de C-Fam, del 19. 12.03, vol 6, n' 52, citado ptX .kiffi
'/_¡
144
tan la edad del consentimiento de las relaciones sexua-
les. Incl~so, otra ONG denominada RAMBLA, tiene
como objeto prom?ver la pederastia, su sigla traduce aso-
ciación norteamericana
. para
. el amor entre hombres y nt·_
ños. Estas aberractones tngresarán pronto a la lista de
los nuevos derechos humanos, promovida e impuesta por
las Naciones Unidas. iNo lo dude!
146
para formarse un juicio propio, tenga el dere-
cho de expresar su opinión libremente en to-
dos los asuntos de salud que lo afecten.
147
En el Art. 25, dentro del dcrt"clto a l;t ·.;dtJ~I ·.,. ''~' 111 /¡· ,. 1
«derecho a la cunfidencitalidad en lu f('LIIJvt, ;, . '' ·.;d,,,¡
sexual y rcproductivan, lo qut e:~. llllét UJJI.'·,I;11J11· ,., 1 ,.¡ Pt<,
yecto de dcstrucciún de fa farnilia.'····
148
Entonces: ¿será atentar contra los derechos de los ni-
ños no entregarles anticonceptivos a espaldas de sus
padres? O ¿Que éstos los eduquen en su fe y en sus con.
vicciones éticas y morales?
.. ' - ....:·:. .: . . . . . ..
.
-
. .
~ .
-
- .,
' -· . '~: ':·;,_ .... - • ......... ~; .
·:- .
:~' ·:.~ {:_~~--:<:-~,
·.-- ' . - - '-
. ·-··_. i:- ;.,..,... _, .. -1 :1 . · · : ••• .. ::-:--·:''
. -- .. . :.: . : ~--..:.:-~:1 -· -~ .' -: ---. ·,. ·:. .. ;; ;. ; .
· 1de Derechos del Niño, en la que
lntcrnactona ,. . se evalua ·
ran 1os ·tn for mes presentados por .la. Repubhca Demo-
crática de Corea, República Domtnt~ana, El Salvador,
Francia, Liberia, Myanmar, Pana.ma, Ruand~, . Santo
Tomé y Príncipe. Al término de la mts~a el Co~1te .publi-
có las recomendaciones que esos patses debenan tncor.
parar, de acuerdo con las «fall~~» que el Comité detectó
en la aplicación de la Convencton.
150
4. ONU día Mundial de la población
El Día Mundial de la Población, J 1 de julio, tendrá est
año como objetivo someter a mil millones de adolescen~
tes del mundo a los servicios ~e salud reproductiva, que
incluyen el aborto: un paso mas del Nuevo Orden Mun-
dial para consolidar la destrucción de la familia. Ampa-
rándose en una torcida interpretación de los derechos a la
confidencialidad, a la privacidad, y a la no discriminación ,
se excluye radicalmente a los padres de los temas relaciona-
dos con la salud y la educación sexual de sus hijos. 15 7
151
• El 9 de agosto pasado, se llevó a cabo e~ la Biblioteca
Nacional, el Seminario Nacional, «Mortalidad materna:
un problema de salud pública y derechos humanos>>.
Fue organizado por el Consejo Nacional de la Mujer, la
Unidad Coordinadora y Ejecutora de Programas Mater.
no- Infantiles y Nutricionales del Ministerio de Salud, Ja ·
Secretaría de Políticas Sociales del Ministerio de Desa.
rrollo Social, la OPS (Organización Panamericana deJa ;
Salud) y la UNICEF. Su objetivo: -fortalecer el diseño Y' :
la implementación de políticas públicas intersectoriales, ;
orientadas a la reducción de la morbimortalidad mater.. · 1
' ·'
qu• rigfrt lc1 l'ida del l'u11junto
t'CIS de la
sotildad.
•l)Ur.rllltinac:ión ~" ra:óu de edad (J). (... )
irHJ*Ilr ePI tJCC.'elo a los .~ervic:ios de salud
sexual y reproductia'a a los/as adolescen-
tiS 111 ru:611 de su edad es un acto
tliscrilfainatorio. Por el cotatrario, garanti-
zar s•rvicios que respeten la confiden-
ciGlidad y prl1•acidad de los/as adolescen-
tes •s ate11der sus derechos humanos fun-
damelltales. '"u
-Propuestas para hl redacción de Leyes de Salud
Reproductiva y/o Procreación Responsable (5). El rol de
terceros. La autorización paterna/materna. A medida que
los niños/as crecen, desarrollan inteligencia, habilidades
y madurez de forma que pueden recibir responsabilida-
des sobre diferentes actividades y decisiones de sus vi-
das. La Convención de los Derechos del Niño establece
que es necesario prestar atención a las capacidades evo-
lutivas de los niños, niñas y adÓlescentes. Aunque los/as
adolescentes adquieran total emancipación luego de los
21 años. acceden a derechos civiles y a la posibilidad de
ejercer determinadas actividades a los 18 años, Y aún
antes de esa edad. A nivel de la prestación de salud no
existe limitante para recibir un tratamiento médico, Y,no
se explicita una edad para el consentimiento. Pero la prac-
tica indica que de no mediar impedimentos como una
discapacidad mental, el consentimiento puede ser d~~o
cuando media la plena comprensión de la informaclon
recibida, los alcances. beneficios y contraindicaciones de
153
una práctica médica. Un médico que se negase a enten.
der a un/ a adolescente que requiera información sobre
salud sexual y reproductiva en razón de su edad puede
incurrir en abandono de persona.
De la misma forma que puede violar el
derecho a la confidencialidad y la
privacidad de los actos si informara a
los padres o requiriera la autorización
previa del padre, madre o tutor. Si el/la
adolescente no solicita autorización pa-
terna para iniciar una vida sexual acti-
va, y se considera maduro/a y prepara-
do/a para la consulta médica para in-
formarse sobre su salud sexual y repro-
ductiva, el impedir el acceso a la infor-
mación y servicios adecuados a su edad
y necesidades puede constituir una vio·
lación a sus derechos.
-Confidencialidad ... si un adolescente no
está plenamente seguro de la
confidencialidad de la consulta médica,
puede verse desalentado/a a realizarla,
en razón de la preocupación acerca de
la posibilidad de que su actividad sexual
sea revelada a los adultos mayores, tan·
to en el hogar como en la escuela. Los/
as profesionales deben garantizar la
confidencialidad de la información que
poseen sobre los pacientes, salvo reque·
rimiento judicial. 161
155
,
15. LA OBJECION DE CONCIENCIA:
OPCIÓN O DEBER
<(La ley, si no es justa, no parece que sea ley. Por eso tales
leyes no obligan en el fuero de la conciencia» 161
157
La soberanía de los Estados hoy. hace parte Jnás de la
arqueología que del derechL1 ~o.nstitucional: con1o reite-
radamente lo hen1os ,-enido dtcJendo. en la hora presen-
te. la Yalidez de las normas internas se deriva de las nor-
n1as internacionales. Basta con que tales derechos sean
reconocidos por tratados públicos, incluso, ni siquiera
reconocidos por tales instrutnentos jurídicos, basta con
que aparezcan en las resoluciones o en las recomenda-
ciones o en la jurisprudencia de las Cortes Internaciona-
les para que automáticatnente ingresen a nuestro orde-
namiento jurídico. Esa es la realidad.
158
libertad de dccciót~ de lo~ ~cn~ú" uhliga a cada u llu í.l pr~_:-- _
cindir de ~us prupta~ convH.:ctune~ para ponL·r~~..: ~1 \l'n·i _
do de cualquier petición de lo~ ciudadano\ que la" k\l''
reconocen y tutelan. é.H.:cptanJo cutnu único critcriu n.lu-
ral para el ejercicio de las propias funcione~ lu C'ltabkci-
do por las nlistna~ leyes. De este modu. la rc~pon~ahi\i _
dad de la persona se delega a la ley civil, abdicando dl' la
propia conciencia tnural aln1cnos en d átnbito Jc la ac-
., pu'bl'H.;~>>.
eton ..., 1tl4
Evangelio VItae 11 69
' 64
SÓFOCLES. Antlgona en "Las Siete Trag«llas", Porrúo, México, 19l6, P.
165
195
159
Creón argumenta, cual.moder.no ,c~ltor ~~?~ la intang;.
bilidad del ordenamiento JUndJCO», Invocando e)
orden y la seguridad:
«Un mal mayor que la anarquía no existe. Ella aniquila
las ciudades. Ella derriba a los hogares por tierra ... Oue
se mantenga incólume eltnandato estatuido ... Nunca se
diga que hemos sido vencidos por una mujer ... » 167
160
«Nunca es lícito observar estas leyes, porque es
necesario obedecer a Dios antes que a los hom-
bres» 170
161
• 1·.1 JIU' l., ·dnc•.~tlwl dt' f,·y, puede juri...,prudt·n-
lll'l
j
··.~?
.
'
.
·-..
162
•
lb. , EL FUNDAMENTALISMO, DE
GENERO O LA INQUISICION
POS MODERNA
163
tectoras del objetor de conciencia que dejan .a salvo la
conciencia cristiana de médicos, farmaceutas o JUeces que
se resistan a dar aplicación a leyes an!ivida o ant.ifamiJia),
entonces optaron desde hace una decada por tmponer-
los mediante la coerción a los Estados o a las personas
que se sustraigan a los dictados de la nueva «ética civil»
del mundialismo Onusiano.
164
Up· Paris and Sneg) la inmunidad parlamentaria, tan
defendida en otros casos, sobre todo cuando se trata
de \a subversión del orden natural, no existe 173 o
. . .,
b. lnqutstcton gay en accton.
.,
Sólo a modo de ejemplo recordemos:
En Irlanda, el lobby gay amenazó con denunciar al cle-
ro católico irlandés por distribuir los documentos de
la Congregación para la Doctrina de la Fe sobre la ac-
tuación de los católicos en la vida pública y sobre los
legisladores católicos ante los proyectos de ley de unio-
nes homosexuales (The lrish Times, 02-07-03) o
tn N
, 4 Dtleias Globaln 11 7SSo Enero 9 de 2006o
166
1. Arrepentimiento bomosaual.
En octubre de 2001: fue mul~ado el pastor inglés Harry
Hammond (550 dólares, mas 725 en gastos legales).
Se le acusaba de incitar a la violencia y alterar la paz~
por ir por la calle con un cartel pidiendo a Jos homo-
sexuales que se arrepintiesen. El cartel enfureció a una
banda de homosexuales que le golpearon {pero nun-
ca fueron juzgados).
b. Reorieatael6n homosexual.
i. lneitaci6a a la violcaeia.
168
k. USA: Convicciones morales o profesión.
170
ncob, fue ab~uelto del cargo de «Ínv,asión» de propie-
dad estataL Recor~e.mos ~ue des pues de agotar todas
las instancias admtnistrattvas, Parker entró en el cole-
gio de su ~ijo con el fin de presenciar una de esas per-
versas sestoncs.
171
MíJ '1 ~' di r Íg i~ fl de J··:e ;' j 1H. t .e, , 11J JI rj t 11 1; 1rt r ¡ . 1' 1 1d ¡,. ,
j( j,
1 -
aougá dU'-J ;\' J.LJr- 1·, ' f't'·
' ·tfl.rllll,, CJIH" t:l P;nl;llrwrdr. ,¡,. J
1' ' . • . •
172
ferP&Oil, al mejor estilo masónico, llegó a recla
la intromisión del Estado en la Iglesia para evitar;~~
ésta .viole los derechos humanos excluyendo del
sacerdocio a las mujeres; o calificando de inmoral a
las uniones maritales que no sean entre un hombre v
una mujer, etc•. Abogó para que se legisle un «códig~
de práctica 'ética' de las religiones,, al que todas las con_
fesionel religiosas Y sus ministros deban adaptarse».
17<4
vicciones personales con la doctrina del catecismo de
la Iglesia católica, según la cual, la tendencia homo-
sexual es un defecto y su ejercicio práctico un pecado.
Esta confesión fue el motivo del rechazo de su can di.
datura. Lo que significa, tanto en alemán como en
español, que un católico cuyas convicciones coincidan
con la doctrina moral de la Iglesia Católica, sólo por
ese motivo, no está cualificado para ocupar un puesto
de dirección en la Comunidad Europea.
176
j
OBRAS CONSULTADAS
BUTLER, )udith. El Problema del Género: El Feminismo y la Sub-
versión de la identidad. Gender Trouble: Feminism and the Subversion
of ldentity, Routledge, New York.
1'17
·" los Mito~. Ed. NuevéJ lli'->panldéid
GAMBRA. Rafael. El LenguaJe y ,
Buenos Aires. 200 l.
_ L R olución Búsquedas Histórica~n. 1877.
G/\UME l\1onsenor. « a ev
, A ~ de la Libertad de Enseñar y de la Enseñan-
GENTA. Jordan 8 . cerca
za de la Libertad. Buenos Aires. 1981 ·
GILBER. Lucy y WEBSTER. Pauta. The Dangers of Feminity, Gender
Diffcrcnccs: Sociology of Biology ·
HARMANN, Heidi. The Unhappy Marriage of Marxism and
Feminism. Women and Revolution, South End Press, Boston, 198 l.
178 J
OnnóÑEZ
1\V
MALDONADO, Alejandro. FJ Nuevo (Jcrcdl(' y 1"·'
. J l) . 'd d S e: 1'1 \U;
't'O orden Mundla . mverSJ a anto Tonuh, Bucnrarrmn~a. 20(J'l)
179
ARTÍCULOS DE PRENSA, DIARIOS,
REVISTAS y SEMANARIOS CONSULTA-
DOS
ACI PRENSA Perspectiva de Género: Síntesis de sus Raíces, Alcan-
ces v Consecuencias.
180
O'LEARY, Dale. La Desconstrucción de la Mujer. En: Aci prensa.
112
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(1926-1950)
Enrique Bautista González
• Apuntes para la Historiografía de la Cristiada 2
(1951-1975)
Enrique Bautista González
• Héctor. Novela Histórica Cristera
Jorge Gram
CONTEMPORÁNEOS 1
'
'
HISTORIA
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Mn11w·l V(Jrrl(lll d'~ la Tr1rre
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J,~ Hu~lrs
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vlé1lca y la Supervivencia de la Vocación de Rusia
Ve >I.UMI :N 11
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Grignion de Montfort
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Mareo Crau:le~~-Boet'e~·
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Padres
Carlos Biestro
• Nostalgia de Dios
Pieter van der Meer Walcheren
• Las Glorias de Maria
San Alfonso Maria de Ligorio
• 8 Tesoro Escondido de la Santa Misa
San Leonardo de Porto Maurizio
• Catecismo en Ejemplos l. Doctrina de Fe
Francisco Spirago
• Catecismo en Ejemplos 2. Doctrina Moral
Francisco Spirago
• Catecismo en Ejemplos 3. La Perfección Cristiana
Francisco Spirago
• Catecismo en Ejemplos 4. Doctrina de Santificadón
Francisco Spirogo
• Catecismo en Ejemplos 5. Apéndice
Francisco Spirago
• El Abandono Confiado a la Divina Providencia
San Claudia de la Colombiere, S. J.
• El Secreto Admirable del Santo Rosario
Son Luis Maria Grignion de Montfort
• La Virgen Maria de Guadalupe. Reina de México Y
Emperatriz de las Américas
Emilio Siluo de Castro
• FJ Asombroso Ayate de Juan Diego
Armando Sfsala .fbredes
• B Siglo XX a la Luz de Fátima
Moría Teresa Márquez
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_....,_,,S. J. t~J
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• Exp l.tcaeton
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• Antonio de Oliveira Salazar
Alfredo Sáenz, S. J.
• G. K. Chesterton
Miguel Ángel Fuentes
• Cristóbal Colón
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• Gabriel García Moreno
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• Santa Teresa de Jesús
Alfredo Sáenz. S. J.
• Santo Toribio de Mogrovejo
Alfredo Sáenz. S. J.
• fJ Cardenal Pie
Alfredo Sáenz. S. J.
• La Invención Republicana de una Tiranía. La Monar-
quía de lturbide 1822-1823
Hugo González Murillo
• Miguel Miramón. Héroe Mexicano. Olvidado y Vitu-
perado
MCJlluel Vargas de la Torre
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