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PHAINOMENON-ISSN:1819-1983 e-ISSN 2708-5023

Vol.22 N.1 Ene- Jun 2023, e2773


http: //doi.org/10.33539/phai.v22i1.2773
Julián Ramiro Numpaque García

FILOSOFÍA Y RETÓRICA: LA CRÍTICA DE


PLATÓN A LOS SOFISTAS

Philosophy and rhetoric: Plato's critique of the sophists

Julián Ramiro Numpaque García


Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia. Facultad de Ciencias de la Educación.
Tunja-Boyacá-Colombia.
https://orcid.org/0000-0001-6869-8247

Fecha de recepción: 29/11/2022 Fecha de aceptación: 04/01/2023


Fecha de publicación: 17/05/2023

Resumen

El presente artículo pretende señalar que la crítica de Platón a los sofistas y a la


retórica no es una condena a éstos, sino una toma de distancia ante la retórica
tradicional para introducir su propia propuesta de una retórica filosófica. Para este
objetivo se busca: 1) esbozar la definición de los conceptos ‘retórica’ y ‘sofística’, y
caracterizar los principios de la ‘retorica sofistica’; 2) Abordar la crítica de Platón a los
sofistas a partir del Gorgias, señalando los argumentos con los cuales Platón critica
a la retórica y a los sofistas; 3) Analizar el método dialógico del sofista (erística) y la
manera en que se opone al método del filósofo (dialéctica); 4) Finalmente, indicar,
a partir del Fedro, los fundamentos de Platón para la consolidación de una ‘retórica
filosófica’, es decir, de un genuino diálogo filosófico que funge como superación
de la retórica tradicional.

Palabras clave:
Platón; filosofía; retórica; sofistas; erística.

Abstract
This article aims to point out that Plato’s criticism of Sophists and rhetoric is not a
condemnation of them, but a distance from traditional rhetoric in order to introduce
his proposal for a philosophical rhetoric. For this objective, the aim is to: 1) outline the
definition of the concepts ‘rhetoric’ and ‘sophistic’, and characterize the principles
of ‘sophistic rhetoric’; 2) To address Plato’s criticism of the sophists from the Gorgias,
pointing out the arguments with which Plato criticizes the rhetoric and the Sophists;
3) To analyze the dialogical method of the Sophists (eristics) and how it opposes the
philosopher’s method (dialectic); 4) Finally, to point out, starting from the Phaedrus,
Plato's foundations for the consolidation of a ‘philosophical rhetoric’, that is, of a
genuine philosophical dialogue that serves as an overcoming of traditional rhetoric.

Keywords:
Este es un artículo
Open Access publicado
Plato; philosophy; rhetoric; sophists; eristic.
bajo la licencia Creative

1
Commons Atribuición 4.0
International. (CC-BY 4.0) Filósofo - julian.numpaque@uptc.edu.co
PHAINOMENON

INTRODUCCIÓN de falsos especialistas, incapaces de


enseñar aquello que pretenden.
El mundo griego de mediados del
siglo V a. C., junto a las transformaciones Sin embargo, la reflexión platónica
políticas que impulsaron una participación en torno a la retórica no contempla
directa de los ciudadanos en la esfera sólo crítica y condena, sino que va
pública, fue la cuna de principios y mucho más allá, como en el Fedro donde
reglas del discurso y la palabra, que se esquematiza las condiciones y elementos
agruparon bajo el nombre de retórica. para desarrollar una retórica que esté
Esta nueva disciplina se consolidó como ajustada a la filosofía, que no ignore la
el “arte de la palabra”, y buscaba una verdad, sino que sea ciencia, enseñanza
expresión eficaz en el lenguaje oral, así y, en definitiva, un verdadero arte del
como también alcanzar la persuasión discurso.
de los oyentes a partir del desarrollo de
habilidades en el orador y de principios 1. La retórica
orientadores en la elaboración del
discurso. Las transformaciones políticas de
Atenas en el curso del siglo V y IV a. C.
Sin embargo, la retórica y los sofistas configuraron un panorama que exigía
(que ejercieron como los principales el desarrollo de la capacidad oratoria,
maestros de esta disciplina) encontraron por ejemplo, la participación directa de
gran oposición a su saber y a sus los ciudadanos en el marco judicial y
enseñanzas. Es justamente Platón quien político; la creación de tribunales para
realiza una de las mayores críticas y litigios privados y públicos, así como
condenas a los sofistas y a la retórica. para asuntos penales o administrativos;
En diálogos como Gorgias, por ejemplo, la instauración de órganos políticos
arremete contra la retórica señalándola fundamentales como la asamblea y el
de inmoral, de ser una apariencia del consejo, entre otras. De este modo, el
saber (459 c), un mero truco para ciudadano griego tenía la necesidad de
producir agrado y placer en el oyente dirigir su palabra al pueblo, de hablar
(462 c-d), de valerse de la ignorancia del ante un auditorio y, además, influir en la
auditorio para aparentar sabiduría (459 toma de decisiones a través del discurso
b-c), de ser un tipo de adulación y una (Pernot, 2013, pp. 51-53).
simulación de arte (463 b-464c).
Este nuevo panorama político hizo
Para Platón la retórica tiene un necesario el surgimiento de un tipo de
fin equivocado al buscar el éxito y el formación y educación que se ajustaran al
enriquecimiento económico y al ignorar nuevo escenario de la vida pública, debido
la verdad, el bien y la justicia, por lo a que el hombre que deseara tener éxito
que en definitiva resulta innecesaria y destacarse en ésta tenía que “saber
para el hombre justo. El filósofo ante todo imponerse en las reuniones
critica, asimismo, los procedimientos y asambleas del pueblo por su actitud
argumentativos de los sofistas (como personal, por sus palabras y gestos ante
puede verse en la discusión suscitada la masa de sus conciudadanos” (Capelle,
con Eutidemo y Dionisodoro) (Eutidemo, 1992, p. 114).
275c-304b) y su concepción relativista
del mundo y el lenguaje, tildándolos Al ser Atenas una democracia directa,

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cada hombre tenía la oportunidad de y al desarrollo de esquemas intelectuales


adquirir reconocimiento e influencia si y, sobre todo, políticos (Cassin, 2008, pp.
era capaz de expresarse adecuadamente 103ss). Por otra parte, la retórica suponía
(cfr. Borrelli, 2020, en torno a la noción de un estudio de las formas del discurso y
pertenencia del hombre a la polis). Para de elementos tales como la gramática,
participar en algún órgano administrativo el estilo, o la eficacia del lenguaje oral:
o tomar parte en litigios judiciales, todo “la retórica era un saber productivo, un
hombre debía entonces cultivar sus conjunto de conocimientos y de reglas
capacidades oratorias (cfr. Nietzsche, que permitían una ejecución verbal eficaz”
2000, pp. 179-215). Para un hombre (Pernot, 2013, p. 21).
ateniense de la época era necesario saber
discutir, argumentar y juzgar. Tradicionalmente la retórica fue
definida como la capacidad o el poder de
Así mismo, el mundo griego desarrolló persuadir mediante el uso de la palabra,
ampliamente el arte de la palabra y teorizó bien sea en ámbitos políticos, civiles
sus elementos y funciones. La palabra o en conversaciones privadas. De esta
ocupó un lugar preponderante en Grecia, forma los discursos de un orador estaban
lo que llevó a desarrollar sistemas de encaminados a obtener el asentimiento
reglas y de uso práctico del lenguaje, así y la adhesión del auditorio, valiéndose
como métodos razonados para el buen de las técnicas retóricas (pp. 19-20).
hablar, que constituyeron un arte (τέχνη) La retórica se perfiló, en consecuencia,
de la palabra, es decir, la retórica en tanto como una técnica para producir discursos
disciplina. persuasivos a partir del desarrollo de
habilidades en el orador y de principios
Ahora bien, como señala James J. orientadores en la elaboración del discurso
Murphy, la retórica, en tanto análisis del (cfr. Aristóteles, Retórica I, 2, 1355b 25-
discurso y disciplina que fija los preceptos 1358a 35). El conjunto de estas técnicas
de este y su funcionamiento adecuado, engloba también una reflexión sistemática
es un fenómeno enteramente occidental, sobre la naturaleza misma del lenguaje y
pues entre los pueblos antiguos, el griego sus funciones. A su vez, las habilidades del
fue el único en analizar la comunicación orador y los preceptos del discurso eran
humana (1989, p. 9). Grecia es, entonces, susceptibles de ser enseñados, para lo que
el lugar en el que nace el arte del discurso, se recurría a una amplia gama de ejercicios
que abarca tanto la retórica como la teóricos y prácticos, como por ejemplo las
gramática y la lógica (1989, pp. 9-10). actividades de memorización, repetición,
declamación, dicción, composición y
A partir del siglo V y IV a. C. los análisis del discurso.
griegos elaboraron tratados de análisis y
exposición del discurso y la comunicación. Asimismo, la reflexión en torno a
Estos tratados, y la enseñanza de sus la relación entre lenguaje y persuasión
correspondientes sistemas, permitieron ocupa un lugar central en la práctica
reunir un conjunto de reglas, pautas y retórica, ya que no deja de ser intrigante
disposiciones que guiaban al orador la potencialidad que tiene la persuasión,
(Murphy 1989, p. 10). El conjunto de estos pues, tal como afirma Gorgias, “la palabra
preceptos se conoció con el nombre de es un poderoso soberano que con un
retórica (ρητορική), la cual estaba ligada a cuerpo pequeñísimo lleva a término las
factores sociales, a condiciones históricas obras más divinas. Pues es capaz de hacer

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cesar el miedo y mitigar el dolor, producir de enseñanza en Atenas, provenía de


alegría y aumentar la compasión” (Encomio diferentes ciudades griegas (Pernot, 2013,
de Helena §8). Es precisamente por esta pp. 39-40). Es justamente el panorama
razón que el sofista de Leontinos equipara ateniense lo que impulsó la actividad
la persuasión a los encantamientos de la intelectual del sofista, ya que estos
hechicería y reconoce que la persuasión, extranjeros encontraron en Atenas el lugar
cuando genera impresión en el alma del propicio para el desarrollo de su actividad.
oyente, es capaz de obligarlo a obedecer
aquello que se enuncia como si se Si bien los sofistas no constituían
estuviera usando la fuerza (§10, 12, 13). propiamente una escuela organizada,
existen elementos comunes que permiten
Por otra parte, la creación de agruparlos bajo una misma identidad, ya
técnicas sistemáticas del lenguaje que, aunque tenían intereses intelectuales
hablado se corresponde con los cambios específicos, compartían el objetivo de
intelectuales producidos en el siglo V, enseñar a sus discípulos a destacarse
pues en este periodo las reflexiones se socialmente mediante el uso de la
distanciaron de la física para centrarse palabra, a hablar en público y a defender
en el hombre y la razón: “pasa del las ideas frente a un auditorio; en
universo al hombre, de la cosmogonía a resumen, los sofistas eran principalmente
la moral y a la política” (Romilly, 1997, p. maestros de retórica.
27). Hasta ese momento, los intereses
intelectuales estaban dirigidos al mundo En la vertiente retórica de su enseñanza
de la naturaleza externa (cosmología, (que era un rasgo característico del sofista),
animales, plantas), pero en este siglo se pretendía ilustrar en el “arte” de hablar
cambia la dirección del pensamiento en público con persuasión. Para alcanzar
(Reale y Antiseri, 1988, pp. 75-77) y este objetivo era necesario la práctica
surge interés por el hombre, la moral y de la argumentación y la ejercitación
la política, dejando en un segundo plano en diferentes tipos de debates; algo
a la filosofía natural (Guthrie, 1993, p. imprescindible en el panorama político y
353). Sin embargo, cabe aclarar que judicial ateniense, en el cual se requería
este cambio en el panorama filosófico del dominio de la palabra y del discurso.
es un matiz y no una regla general y
tajante, pues es posible encontrar, por Antes de la sofística la educación
ejemplo, reflexiones éticas en algunos ateniense tenía un carácter aristocrático
presocráticos. Por otra parte, aunque (se concebía que la virtud era una herencia
Sócrates es considerado como el familiar). La novedad introducida por
punto de inflexión de esta sucesión de los sofistas fue aportar una educación
intereses, en su época se continuó con renovada a todo el que dispusiera de
las investigaciones físicas, por ejemplo, los medios económicos para pagarlo
como en el atomismo de Demócrito. (Romilly, 1997, p. 20).

2. La Sofística Las referencias indican que los sofistas


más reconocidos recaudaron grandes
Bajo el término de ‘sofista’ se agrupa sumas de dinero con las lecciones que
un número de pensadores de mediados impartían. Así, por ejemplo, Sócrates
del siglo V a. C., que no obstante el hecho afirma, en Hipias Mayor, que Gorgias “en
de desarrollar su actividad intelectual y sesiones de exhibición y dando lecciones

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a los jóvenes consiguió llevarse mucho distintos, pues la instrucción sofística


dinero de esta ciudad” (282c) y también tenía un carácter más general y educaba
Pródico, con la misma actividad, “recibió a nivel político y ciudadano, mientras que
cantidades asombrosas de dinero” (282c- la formación retórica recaía meramente en
d). A su vez, en el mismo diálogo se expresa elementos del discurso y el debate, ambas
que Hipias, un sofista menor, era capaz resultan estrechamente vinculadas debido a
de recibir grandes sumas de dinero (281c, que la actividad educativa del sofista estaba
282e). En Menón, por ejemplo, Sócrates atravesada por la enseñanza de la retórica.
afirma: “Sé, por ejemplo, que un solo Como se afirmó anteriormente, el sofista
hombre, Protágoras, ha ganado más dinero era principalmente un maestro de retórica.
con este saber [sofística] que Fidias –tan
famoso por las admirables obras que El elemento central de la educación
hacía– y otros diez escultores juntos” (91d). que ofrecía la sofística era la preparación
para tomar parte en los debates suscitados
El hecho de que los sofistas enseñaran en la esfera pública. Esta preparación que
a cambio de una retribución económica ofrecía el sofista no sólo contemplaba
es, en primer lugar, un rasgo característico elementos formales, ejercicios prácticos
de la sofística y, en segunda instancia, una y principios y recetas retóricos, sino que
de las principales causas de escándalo y también abarcaba un ejercicio mental y un
condena que éstos suscitaron. análisis detallado de los temas a debatir,
así como de los argumentos esgrimidos
Sin embargo, a pesar del escándalo en las discusiones.
que supuso el hecho de cobrar por
su enseñanza, es posible identificar, La visión sofística del mundo y
siguiendo a Jacqueline de Romilly, por un del lenguaje se caracterizaba por un
lado, la prueba del extraordinario éxito de distanciamiento de los valores inmutables
los sofistas y, por otro, la novedosa idea y de las realidades fijas, dando paso a
de la transmisión de conocimientos y el una concepción relativista del mundo y
carácter útil de estos (pp. 21-22). del lenguaje. Por otra parte, el panorama
intelectual modificado por la sofística
La instrucción del sofista era práctica, posicionó a la experiencia humana como
eficaz y se asemejaba a una técnica criterio (p. 24). En el contenido retórico la
profesional (p. 48), pues a partir de una τέχνη argumentación se cimentaba en el concepto
oratoria, los sofistas buscaban transmitir su de verosimilitud, adecuando las situaciones
enseñanza como si fuese cualquier otra y cambiando el sentido según el momento.
técnica con reglas y principios fijos, fáciles En el enfoque hacia la verosimilitud es
de aprender. En síntesis, el sofista poseía notorio que la verdad y las pruebas de algún
una τέχνη, en materia oratoria, que se asunto discutido eran dejadas de lado, lo
caracterizaba por su eficacia, su utilidad y que generaba obviamente el rechazo de la
su carácter transmisible, con miras al éxito filosofía hacia la retórica.
y a fines prácticos.
Un concepto central en la retórica
3. La retórica sofística sofística es la noción del Kairós (tiempo
oportuno) (Melero, 1996, p. 25), lo que
Debido a la propuesta formativa de supone tomar alguna postura de acuerdo
los sofistas, retórica y sofística resultan al momento actual, pues las concepciones
inseparables. Si bien son dos conceptos de la sofística contemplaban que no existe

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una verdad definida por completo a la 1982) y cómo designar a este último
cual el discurso deba fijarse, sino que, al en función de lo que enseña (Gorgias
contrario, consideraban que la verdad 447c-448c). Se afirma, entonces, que se
se construía a partir del discurso (Pernot, trata del arte de la retórica y, por ende,
2013, p. 40). Es por ello que los sofistas se Gorgias es orador y maestro de retórica
jactaban de revertir cualquier argumento o (449a-b) (cfr. Wardy, 1998, pp. 25-44, en
encontrar puntos de vista opuestos sobre torno a la propuesta retórica de Gorgias).
un mismo asunto; los sofistas “con el poder Sin embargo, Sócrates insiste en precisar
de su palabra, hacen aparecer grandes las de qué se ocupa la retórica, por lo que
cosas pequeñas, y las pequeñas grandes, la discusión se dirige a definir, por una
lo nuevo como antiguo, y lo antiguo como parte, que la retórica se ocupa de algunos
nuevo” (Fedro 267a). De este modo, la tipos de discursos, de la capacitación
sofística es proclive a la persuasión (Πειθώ) para hablar y pensar sobre lo que se
y el engaño (Απατη). habla, y, por otra parte, que la retórica se
distingue de las artes manuales al alcanzar
La retórica sofística, que se basa en su eficacia por medio de la palabra
argumentos de verosimilitud, se fijaba (449d-450e).
entonces en la manera en que se suscitan
emociones en el auditorio: “El logos Posteriormente, Sócrates desea saber
sofístico es, pues, un instrumento de en qué recae la eficacia de la retórica,
persuasión, no de conocimiento de la es decir, de qué tratan los discursos de
realidad” (Melero, 1996, p. 34). Esta esta disciplina. Ante esto Gorgias afirma,
actitud deja entrever un desprecio de lo dando una primera definición, que la
verdadero y justo, pues la preocupación retórica se ocupa del mayor bien para
de la retórica sofística es la persuasión, los hombres, que les concede libertad
el convencimiento, y de esta manera se y dominio sobre otros: el “ser capaz de
distancia de la verdad y la justicia. persuadir, por medio de la palabra, a los
jueces en el tribunal, a los consejeros en
Las afirmaciones de la retórica sofística el Consejo, al pueblo en la asamblea y en
contienen una reflexión sobre la palabra toda otra reunión que se trate de asuntos
en aquellas situaciones donde la verdad públicos” (452 d-e). En este punto de la
no puede ser alcanzada de antemano discusión, en la que se deja entrever que
y, también, en las discusiones que se la retórica no tiene una definición concisa
basan en valores y probabilidades y no y que todo intento por definirla no está
en afirmaciones ciertas o demostraciones exento de dificultad, se fija que la retórica
científicas, lo cual resulta más claro si se es el arte de la persuasión y, más adelante,
tiene en cuenta el papel de la retórica en las que es específicamente la persuasión en
discusiones del ámbito judicial o político, tribunales y asambleas acerca de lo justo
donde no preexiste la verdad, sino que esta y lo injusto (454b). No obstante, en las
se enuncia una vez concluido el debate palabras de Gorgias es posible identificar,
(Pernot, 2013, p. 41). por un lado, la mera utilidad que tendría
la palabra para el orador y, por otro, que
4. La crítica de Platón a la retórica con el enfoque de la persuasión hay un
defecto respecto a la justicia.
El punto de partida del Gorgias es la
pregunta de Sócrates acerca de cuál es el Para demostrar que la retórica no es
arte que enseña Gorgias (cfr. Filóstrato, un saber, sino una apariencia de saber,

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Sócrates parte de la diferencia entre la lo injusto (460a). Ahora bien, al aprender


creencia (que puede ser verdadera o falsa) un arte se adquiere la cualidad que su
y la ciencia (que siempre es verdadera), a conocimiento le confiere (los ejemplos
partir de lo cual establece dos tipos de referidos por Sócrates (460b) son: el que
persuasión: una que produce la creencia ha aprendido construcción es constructor,
sin el saber; otra que origina la ciencia el que ha aprendido música es músico,
(454e). La retórica genera el primer tipo si aprendió medicina es médico, y así
de persuasión, de ahí que no enseñe qué sucesivamente con otras artes), de este
es lo justo o injusto. De esta manera, el modo el que conoce lo justo es justo, por
orador persuade, pero no instruye. ende, obra con justicia. En consecuencia,
si el orador conoce lo justo, debe ser
Ahora bien, Gorgias señala que la justo y obrar de tal modo. Sin embargo,
retórica tiene potencia y dominio sobre Gorgias afirmó anteriormente que hay
otras artes, pues, por ejemplo, si un oradores que se sirven injustamente de
médico y un orador compiten ante una la retórica, con lo que permite identificar
asamblea para ser elegidos como médico, una contradicción en sus palabras.
no hay duda de que ganaría el orador,
dado que habla con mayor persuasión En este punto, Polo retoma la discusión
(456b-c). A su vez, Gorgias concluye con Sócrates y, desde el inicio de su
que es preciso emplear la retórica como intervención, renuncia a considerar que el
cualquier método de combate y si se orador deba conocer lo justo, afirmando
usa injustamente, no se debe condenar que Gorgias sintió vergüenza al admitir
al maestro o al arte en sí, sino al que que el orador desconoce lo justo, lo
la emplea de manera errónea. Afirma, bello y lo bueno (461 b-c). Seguido a esto
entonces, que la retórica debe emplearse Sócrates define la retórica no como un
con justicia. arte, sino como una práctica o experiencia
(ἐμπειρία) de producir agrado y placer.
Posteriormente, se establece que También considera que ésta es parte
ante la multitud (sobre la cual se da por de la adulación (κολακεία) y que es una
sentado que es ignorante), el orador simulación de arte, al igual que la culinaria
es más persuasivo que aquel que en o la cosmética (462c-463c). Al respecto
verdad sabe. De este modo, el orador y la A. E. Taylor aclara, por un lado, que el
retórica no conocen realmente los temas término κολακεία no debe traducirse
que abordan, sino que sólo inventan un sólo como adulación, pues el orador a
procedimiento de persuasión que ante los veces obtiene mejor resultado injuriando o
ignorantes hace parecer sabio al orador vituperando con su palabra a la audiencia
(458e-459c): la retórica es una mera y no sólo adulándola (1955, p. 110). Por
apariencia del saber. otro lado, Taylor establece la semejanza
entre oratoria y culinaria diciendo:
A continuación, Sócrates indaga si
el orador también desconoce lo justo e In this respect it is like confectionery.
injusto y si sólo persuade aparentando ser The confectioner pleases the
sabio o si, por el contrario, el conocimiento palates of his customers by a clever
acerca de la justicia debe ser previo al combination of flavours, and the
aprendizaje de la retórica. Al respecto, orator in the same way “tickles the
Sócrates y Gorgias concluyen que el ears of the groundlings” by attractive
orador debe conocer tanto lo justo como combinations of words and phrases.

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It is meant that neither confectionery rehúsa considerar como un verdadero


nor oratory is really an application poder, pues esto último es un bien para
of rational principles; you cannot lay el que lo posee.
down rules for either, since both are
mere tricks of gratifying the tastes of Oradores y tiranos, dice Sócrates,
a body of patrons, and in each case no hacen lo que quieren, sino lo que
the trick depends on nothing more les parece mejor y hacer esto último
scientific than a tact which cannot es un mal si se hace privado de razón.
be taught but only picked up by long De este modo, cuando el orador o el
personal experience of successes and tirano condenan o destierran creyendo
failures. There is thus nothing “fine” obtener algún bien con esto, y por el
about either; they are both branches contrario en realidad es algo peor, están
of a ‘knack’ for which the proper name haciendo lo que les parece y esto puede
is κολακεία, ‘humouring the moods of ir en contra de su verdadera voluntad
a patron’, ‘acting the parasite’ (1955, (466b-468e). Si los actos de un tirano u
p. 110). orador son injustos, más que envidiarlos
hay que compadecerlos, ya que desde la
Sócrates estima que la retórica es un perspectiva socrática cometer injusticia
simulacro de una parte de la política. Para es el mayor mal, por lo que es preferible
explicar esto, parte de considerar dos sufrirla que cometerla: esta es, además,
artes relacionadas al bienestar del alma y la tesis fundamental de la doctrina ética
del cuerpo: 1) la política, que se divide en de este diálogo.
legislación y justicia, 2) no posee nombre
definido, pero se divide en gimnasia y Polo considera que hay hombres
medicina. Ahora bien, para estas cuatro injustos que son dichosos, y se opone a
artes, que juntas procuran bienestar al la postura socrática que define a ese tipo
cuerpo y al alma, hay cuatro partes de de hombres como desgraciados (470d).
la adulación que fingen ser estas artes, y Sin embargo, Sócrates reafirma su punto
que producen engaño, centrándose en el de vista a partir de la identificación, y no
placer y pasando por alto el ‘bien’(463d- a partir de una separación como lo hace
464d). De este modo la cosmética finge Polo entre lo bello y lo bueno, y entre
ser gimnasia, la culinaria medicina, la lo malo y lo feo. A partir de lo anterior
sofística legislación y la retórica justicia. Sócrates concluirá que cometer injusticia
Así, por ejemplo, ante los ignorantes el es peor que recibirla y que para el hombre
cocinero brindará más cuidado al cuerpo injusto es mejor recibir el castigo que
que el médico. A su vez, se aclara que escapar de este, pues al recibir un castigo
esta adulación es una práctica y no un merecido está recibiendo justicia, es decir,
arte, pues no conoce el fundamento de algo bueno y bello, con lo cual recibe un
las cosas que ofrece ni sus causas (465a). beneficio (473a-474d). El que paga por su
culpa recibe, entonces, un bien y su alma
Posteriormente, Sócrates muestra que se beneficia. En consecuencia, el culpable
los oradores, contrario a lo que parece, que es castigado se libera de la injusticia
no son hombres poderosos. Si bien los y la maldad del alma.
oradores también pueden “condenar a
muerte al que quieran y despojar de sus Ahora bien, si el mayor mal es ser
bienes y desterrar de las ciudades a quien injusto, lo que hace que pagar la culpa
les parezca” (466c), es algo que Sócrates sirva para liberarse de este mal, y que, por

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el contrario, no pagarla sea persistir en En este punto Sócrates plantea la


el mal de la injusticia, entonces, emplear posibilidad de una buena retórica, que
la persuasión al hablar y usar la retórica sin embargo para él aún no ha sido
en litigios judiciales para defenderse y desarrollada. Esta nueva retórica no
evadir el castigo es un acto despreciable. consiste en adulación y oratoria popular,
En consecuencia, Sócrates no ve ninguna sino que consiste, por un lado, en que las
utilidad en la retórica, a no ser que se almas de los oyentes se hagan mejores y,
emplee tanto para acusarse a sí mismo por otro, en expresar lo más conveniente
como a amigos o familiares ante una aun cuando esto sea desagradable al
falta. De este modo, Sócrates afirma que oyente. Este orador hipotético debe
la retórica no tiene gran utilidad para el dirigirse a las almas, buscando que surja
hombre justo (479b-480d). la justicia, se produzca la moderación y se
arraiguen las virtudes.
Posteriormente, Calicles remarca
la distinción entre νόμος y φύσις al 5. Crítica al método erístico y la
sostener que las leyes son establecidas oposición de este a la dialéctica
por los débiles y la multitud. También
afirma que es justo que el más poderoso En un primer momento puede que
arrebate bienes al menos poderoso, que no sea clara la distinción entre erística
el aventajado domine al inferior y que y dialéctica, pues ambos son métodos
el más apto posea más que el inepto. dialógicos y operan mediante preguntas y
Calicles considera que la intemperancia, respuestas. Sin embargo, existe una gran
el libertinaje y el desenfreno constituyen diferencia según los fines perseguidos. Por
la virtud y la felicidad, y estima, asimismo, una parte, la dialéctica socrático-platónica
que los deseos deben ser satisfechos de se presenta como método de búsqueda y
cualquier modo. Esto resulta opuesto al conocimiento de la verdad; su orientación
punto de vista de Sócrates, para quien el es hacia un saber universalmente válido y
hombre moderado es más dichoso que el verdadero. Por otra parte, la erística busca,
desenfrenado y la represión de deseos y principalmente, derrotar al adversario y
pasiones es más provechosa para el alma. salir victorioso en la discusión. Su finalidad
es la mera victoria en la argumentación sin
Sócrates, por otro parte, indica a auténtica preocupación por la verdad.
Calicles que el bien es diferente al placer y Asimismo, emplea falacias, ambigüedades
que hay placeres (cfr. Grube, 1987, pp. 90- o cualquier tipo de argucia para confundir
140) buenos y malos, aunque distinguirlos al interlocutor. Eduard Zeller ha señalado
requiere esfuerzo. Asimismo, sostiene al respecto que:
que hay prácticas que conducen solo al
placer y otras que, en cambio, diferencian Lo que les interesa a los erísticos
lo bueno y lo malo. Esta tendencia, a su no es un resultado verdaderamente
vez, remite a la elección entre dos modos científico, sino desconcertar al
de vida: por un lado, una vida dedicada adversario o interlocutor y envolverlo
a la política y a la retórica y, por otro, en dificultades de las cuales no
la vida dedicada a la filosofía. Sócrates sepa salirse y de suerte que toda
señala posteriormente que existe un contestación que pueda dar se
procedimiento de búsqueda y adquisición presente como inexacta; no importa
del bien y otro del placer y, a su vez, si el resultado se obtiene mediante
retoma la distinción entre arte y práctica. raciocinios correctos o se arranca

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subrepticiamente mediante sofismas, se evidencia de manera diferenciada


si el interlocutor queda refutado real el tipo de procedimiento y de recursos
o sólo aparentemente, si él mismo empleados por estos dos sofistas y por
se siente vencido o sólo parece serlo Sócrates.
ante los oyentes, si se le reduce a
silencio o se lo pone en ridículo. Si la Eutidemo inicia preguntando a Clinias
discusión resultara incómoda para el ¿quiénes aprenden: los que saben o los
sofista, éste se desvía; se le pide una que ignoran? Y tal como Dionisodoro
respuesta y él insiste en preguntar; si comenta a Sócrates (275e), sea cual
se pretende obviar preguntas ambiguas sea la respuesta de Clinias, esta será
concretando su significado, él requiere refutada. Cuando la respuesta es que
que se conteste sí o no; si el piensa aquellos que saben son quienes aprenden,
que el otro sabe contestar, se prohíbe Eutidemo refuta preguntado si los
de antemano todo lo que el otro discípulos cuando aprenden ya conocen
pueda decir; si se le demuestra que aquello que aprenden. Ante la evidente
incurre en contradicción, se defiende respuesta negativa a esta pregunta,
alegando que son cosas [hace tiempo] se concluye que son los hombres que
descartadas, y cuando no sabe salir ignoran quienes finalmente aprenden. Sin
del paso de otro modo, apabulla al embargo, Dionisodoro toma la palabra y
adversario con discursos cuya necedad pregunta si en las lecciones del gramatista
excluye toda réplica (1950, p. 70). aprenden los discípulos que saben o, por
el contrario, los ignorantes. Al responder
Ya al inicio del Eutidemo, Sócrates Clinias que quienes aprenden son los
equipara el saber de Dionisodoro y discípulos que ya saben, se concluye lo
Eutidemo (la erística) al pancracio, y aclara contrario a lo sostenido anteriormente:
que estos dos hombres “Son capaces aprenden quienes saben.
de luchar valiéndose de todo tipo de
recursos” (Eutidemo 271c), y “son los Posteriormente, Eutidemo pregunta
más atrevidos en afrontar las disputas si los que aprenden están aprendiendo
jurídicas y en enseñar a los demás a aquello que conocen o aquello que no
exponer y componer discursos adecuados conocen. Clinias opta por la última opción,
para los tribunales” (272a), con lo cual que es refutada al señalar Eutidemo, por
han desarrollado un tipo de pugilato de un lado, que Clinias ya conoce las letras del
la palabra. alfabeto y, por otro, que cuando se dicta
algo, en última instancia, se dictan letras.
Luego de que Dionisodoro y Eutidemo Esto quiere decir que al conocer todas las
afirman enseñar la virtud mejor y más letras se aprende algo que ya se conoce.
rápido que cualquiera (273d) y que se Por otra parte, la respuesta contraria se
presenten como los más aptos para refuta al señalar que aprender es adquirir
persuadir acerca de la importancia y un conocimiento que adquieren aquellos
enseñanza de la virtud, así como para que no lo poseen. En consecuencia, los
exhortar a los jóvenes a la filosofía y a la que no conocen son los que aprenden.
práctica de la virtud (274e, 275a), surge una
discusión que funge como demostración Sócrates afirma que estas enseñanzas
de esta capacidad, para persuadir al joven sólo son juegos que no permiten conocer
Clinias sobre la necesidad de filosofar y las cosas, sino que sólo sirven para
ocuparse de la virtud. En esta discusión divertirse con los demás “haciéndoles

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zancadilla y obligándolos a caer al suelo” A continuación, los sofistas deben


(278b). Examina seguidamente, entonces, hacer un ejercicio semejante. Su punto de
esta argumentación sofística, señalando el partida es el siguiente: desear que Clinias
doble uso del verbo μανθάνω: aprender sea sabio es desear que deje de ser lo que es
y comprender. Es por esta razón que es actualmente, y dejar de ser es equivalente
posible emplear el término “aprender” a morir, por lo que, en conclusión, se
para designar tanto el proceso de adquirir estaría deseando que Clinias muera.
un conocimiento que no se tenía de La falacia de los sofistas es tomar en
algún objeto, como también para aludir primer lugar un enunciado particular (no
a quien ya posee el conocimiento y, ser sabio) para luego convertirlo en una
por consiguiente, se vale de este para afirmación de carácter absoluto (no ser)
analizar el objeto. De este modo, el (cfr. Aristóteles, Refutaciones sofísticas, 167a).
mismo término “se aplica a hombres que Posteriormente, Eutidemo y Dionisodoro
se encuentran en situaciones opuestas” sostienen que no es posible mentir ni
(278a), esto es, al que sabe (en el sentido contradecir, si se identifica algo que es
de comprender) y al que no sabe (en como existente y algo que no es como
sentido de aprender). Los sofistas exigen inexistente. Ahora bien, no es posible
a Clinias elegir únicamente entre dos hablar de algo que no es y, por ende, es
alternativas, cuando lo necesario es, imposible mentir o contradecir. Es decir,
como lo hace Sócrates, definir los matices los dos sofistas mezclan “lo que no es”
e identificar las ambigüedades en las (en sentido general: inexistente) con lo
expresiones. que no es en un caso concreto.

Con el mismo objetivo de exhortar En la parte subsiguiente del diálogo,


a Clinias a cultivar el saber y la virtud, los sofistas Eutidemo y Dionisodoro
y empleando también preguntas desarrollan un amplio número de
y respuestas, Sócrates elabora su argumentos falaces; toman algunas
argumentación y concluye que para ser afirmaciones particulares como absolutas;
dichoso hay que tener bienes (salud, emplean ambigüedades del lenguaje,
riqueza, justicia, prudencia…), entre los muy ligadas a matices del idioma griego,
cuales cabe destacar el saber y el éxito usándolas primero en un sentido y luego
o la buena fortuna (εὐτυχία), que no en otro; no permiten que se aclaren y
son independientes del saber, sino que especifiquen los matices.
son proporcionados por este. Ahora
bien, para ser dichoso no basta sólo con Los dos sofistas llegan a afirmar,
poseer bienes, sino que se deben emplear por ejemplo, que si Sócrates conoce
correctamente y para esto es necesario algo entonces tiene conocimiento, pero
el conocimiento. Si la ignorancia guía los como no es posible tener conocimiento
bienes poseídos, estos terminan siendo y simultáneamente no tenerlo, Sócrates,
aún más perjudiciales que los mismos y cualquier otro, lo conocen todo. Otros
males, pero si los guía el saber, son argumentos, que rozan lo absurdo, son,
bienes mayores. Sócrates concluye de por ejemplo: 1) como el padre de Sócrates
esta manera que la ignorancia es un mal (Sofronisco) no es padre de Patrocles (el
y que el saber es un bien y es lo único hermano de Sócrates por parte de madre)
que hace feliz al hombre, por lo que se no es, entonces, ‘padre’, de lo que se sigue
hace necesario que cada hombre busque que Sócrates no tiene padre; 2) Ctesipo
alcanzar el mayor saber posible. tiene un perro y este es padre de unos

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cachorros y como este perro es padre y mayoría de los hombres “no sabe lo que
es de Ctesipo, entonces el perro es padre son, realmente, las cosas”, con lo cual
de Ctesipo (297e-298e). no hay un mutuo acuerdo al inicio de las
indagaciones que se desean hacer y, por
A. E. Taylor ha observado que la tanto, se generan errores (cfr. Guthrie
regla de la erística, según la cual se debe 1971, pp. 110-122).
responder a cada pregunta tal como esta
ha sido formulada, sin objetar su forma Esta concepción de Sócrates resulta
o sin distinguir matices precisos, crea la opuesta al punto de vista aceptado,
posibilidad para la generación de falacias. referido por Fedro, según el cual la
A su vez, Taylor considera que gran parte persuasión viene de las apariencias y no
del diálogo es una crítica al método de de la verdad (260a). Sin embargo, lo que
‘pregunta-respuesta’ considerado como corresponde es adquirir la verdad antes de
vehículo de la filosofía. Ya que este método aproximarse al arte de la palabra, pues tal
es incierto a no ser que el interrogador como afirma Sócrates el arte de la palabra
tenga inteligencia y buena fe, en manos que ofrece un hombre que ignora la verdad
de Sócrates es una poderosa arma de y sólo persigue opiniones es algo burdo
crítica mientras en las de Eutidemo y y ridículo (262c). Al describir el proceso
Dionisodoro es un mero instrumento de mediante el cual un retórico hace aparecer
sofistería (1955, p. 100). lo mismo unas veces como justo y otras
como injusto, y al identificar que esto es
6. La retórica filosófica de Platón un engaño gradual a partir de cosas que
difieren muy poco entre sí, se concluye
Platón propone en el Fedro la posibilidad que este proceso del retórico implica
de desarrollar un verdadero arte del distinguir la semejanza y desemejanza de
discurso. En este diálogo señala las bases las cosas, lo que es imposible si se ignora
de una retórica ajustada a la filosofía y con la verdad.
una fundamentación propia. Platón fija los
elementos y condiciones para establecer Una retórica filosófica debe apuntar
una nueva y verdadera retórica que no a la precisión de los conceptos, pues
ignore la verdad, sino que sea ciencia y tal como sostiene Sócrates, hay algunos
enseñanza, y que esté sujeta a la filosofía. conceptos que no admiten discusión,
pero otros que sí. Por ejemplo, al hablar
En primer lugar, se considera necesario del hierro siempre se evoca la misma
saber de qué tratan las deliberaciones idea, pero al hablar de lo justo e injusto
con el fin de que estas no caigan en error. se suscitan muchas discusiones y matices
Asimismo, se debe conocer la verdad en torno a su significado. En aquellos
de aquello que se dice (Fedro 237c). conceptos que admiten discusión y que
Sócrates estima que “para que esté bien generan disentimiento entre unos y otros,
y hermosamente dicho lo que se dice, el es donde se presenta mayor posibilidad
pensamiento del que habla deberá ser de engaño y, como responde Fedro, donde
conocedor de la verdad de aquello sobre la retórica común (a la que Platón critica)
lo que se va a hablar” (Fedro 259e), es por tiene mayor poder. Sócrates afirma, por
esto que en la primera parte del diálogo esta razón, que el retórico debería dividir
inicia su discurso indagando acerca de sistemáticamente ‘conceptos’, ‘ideas’,
qué es el amor y en qué consiste su ‘temas’ etc. e identificar características de
poder, luego de haber señalado que la los conceptos que generan divagaciones

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y de aquellos que no, para luego “percibir que acabarán transmitiéndole convicción
con agudeza a cuál de los dos géneros y excelencia” (270b).
pertenece aquello que intenta decir”
(263c). La retórica deberá, entonces, precisar
la naturaleza del alma, pues es necesario
Sócrates afirma asimismo que los conocer el alma de los oyentes, así como
discursos deben tener un orden y una conocer el alma en sí misma. Se debe
estructura adecuada. Considera que examinar, por ejemplo, si esta es simple o
“todo discurso debe estar compuesto compuesta, su poder, su capacidad para
como un organismo vivo, de forma que actuar y padecer, qué es lo que puede
no sea acéfalo, ni le falten los pies, sino hacer y de qué modo y por efecto de quién
que tenga medio y extremos, y que, al puede padecer (270b-270d). En suma, la
escribirlo, se combinen las partes entre sí retórica debe describir y conocer el alma
y con el todo” (264 c). Sócrates considera, con exactitud, debido a que el poder de
por ejemplo, en torno al discurso de Lisias la palabra reside en su capacidad de guiar
(leído por Fedro al inicio de este diálogo), a ésta. De esta manera, quien pretende
que sus partes han sido elaboradas ser retórico debe estar en condiciones de
desordenadamente, y que suscita la conocer lo que ella es.
impresión de que el escritor plasmaba lo
que sobrevenía a su mente y que, además, Una vez identificados los tipos de
la parte inicial del discurso se asemeja a discursos y de almas (con sus pasiones),
un final (264a-b). el orador deberá adecuar el discurso al
tipo de alma que posee el oyente, pues
A su vez, se fijan los dos métodos algunas de estas se dejan persuadir por
que esta nueva retórica debería emplear: un tipo determinado de discurso y otras
1) llegar a una idea que en una visión de por otros. El orador deberá reconocer esto
conjunto abarque la totalidad de lo que en los casos concretos e identificar qué
está diseminado, y de esta manera cada tipo de alma o carácter tiene enfrente,
cosa que se enseñe se clarifique al ser y qué tipo de discurso debe, entonces,
delimitada (265d); 2) dividir las ideas, emplear para persuadir. A su vez, deberá
o la forma general, según las partes o comprender cuál es el momento oportuno
“articulaciones” naturales (265e). Sócrates para hablar o para callar, para hablar breve
estima que estas uniones y divisiones, a lo o enfáticamente o para usar cualquier
que da el nombre de dialéctica, permiten otro recurso, siempre sabiendo cuál es
hablar y pensar. el momento adecuado. De este modo se
podrá afirmar que el orador habrá “llegado
Por otra parte, Sócrates estima que a la belleza y perfección en la posesión del
los recursos técnicos para la elaboración arte” (272a), tarea que, evidentemente, no
de un buen discurso (266 d) –que se es fácil de lograr, pero que, como afirma
enseñaban en la instrucción retórica– Sócrates, es “ser capaz de decir lo que es
son herramientas previas al arte de la grato a los dioses” (273e).
palabra, pero no son el arte mismo.
Una verdadera retórica debe precisar la 7. Consideraciones finales
naturaleza del alma (ψυχή) (cfr. Grube,
1987, pp. 189-231, en torno al concepto El presente artículo pretendió: 1)
platónico de alma) si se pretende dar al esbozar una definición del concepto de
oyente “palabras y prácticas de conducta retórica, así como señalar algunas de las

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condiciones y cambios sociales y políticos Gorgias (2011). Encomio de Helena (M.


necesarios para el surgimiento de esta Davolio y G. Marcos, Trads.) Buenos
disciplina en el mundo griego; 2) identificar Aires: Ediciones Winograd.
los rasgos característicos de los sofistas
y señalar, por un lado, las cualidades Grube, G. M. A. (1987). El pensamiento de
de su propuesta educativa y, por otro Platón. Madrid: Gredos.
lado, el papel que ellos desempeñaron
en la sociedad ateniense; 3) mostrar Guthrie, W. K. C. (1993). Historia de la filosofía
la confluencia entre los conceptos de (vol. II). Madrid: Gredos.
sofística y retórica, y, asimismo, indicar
algunas características generales de los Guthrie, W. K. C. (1971). Socrates. Cambridge:
puntos de vista de la retórica sofística; 4) University Press.
resaltar los puntos principales de la crítica
que hace Platón a la retórica y a la sofística Melero, A. (1996). Introducción. Sofistas.
en Gorgias; 5) distinguir y confrontar el Testimonios y fragmentos. Madrid Gredos.
método erístico (propio del sofista) con el
método dialéctico (propio del filósofo) a Murphy, J. (1989). Sinopsis histórica de la
partir del seguimiento de las discusiones retórica clásica. Madrid: Gredos.
suscitadas en Eutidemo; 6) señalar los
fundamentos, presentes en Fedro, a partir Nietzsche, F. (2000). Escritos sobre retórica.
de los cuales Platón propone una retórica Madrid: Trotta.
que se ajuste a la filosofía y se distancie
de aquello que el filósofo critica en la Pernot, L. (2013). La retórica en Grecia y Roma.
retórica sofística. México D. F.: Universidad Nacional
Autónoma de México.
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