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UNIVERSIDAD NACIONAL DE CAÑETE

FACULTAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES

ESCUELA PROFESIONAL DE ADMINISTRACIÓN DE TURISMO Y


HOTELERÍA

RESUMEN

“Identidad Cultural”

Integrantes:

Sanchez Quispe Medalid Mirna

Gutiérrez Yachi Dalia

Contreras Polanco Eduardo Junior

Gutiérrez Ancasi Alexis Germán

Gutiérrez Yachi Alonso Cosme

Docente: . Ilsse Bedoya Gomez

Asignatura:

Antropología del turismo

CAÑETE, 2023
Cultura e Identidad
La cultura, el concepto de la cultura, se refiere a la interacción entre el hombre y el
medio, y a la relación de los hombres entre sí. Desde el punto etimológico, la palabra
cultura proviene del latín "cultus", significa cultivo. La cultura se caracteriza por su
función ordenadora, proporcionar las herramientas necesarias para lograr el dominio del
medio y garantizar la perdurabilidad de la especie. La herencia, el traspaso de una
generación a otra de las practicas culturales, también es característico de la cultura. La
noción de cultura ha evolucionado durante los siglos, desde extremos reduccionistas
hasta el holismo absoluto. Las definiciones antes presentadas no agotan la instancia de
conceptualización de la cultura, pero se ha modificado en diferentes estadios, como los
romanos, que asociaban el termino cultura a criterios estéticos y reservados a ciertos
grupos sociales elitistas con grado de refinamiento y educación.

En el siglo XIX surgió una visión más integral de los fenómenos culturales, definiendo
la cultura como un conjunto de manifestaciones y expresiones de la creación humana.
Este concepto se basa en corrientes evolucionistas e historicistas, que asocian el
conocimiento con las prácticas y la producción sociales. El antropólogo Bronislaw
Malinowski, en el marco de la teoría funcionalista, define la cultura como un conjunto
integral compuesto de bienes de consumo, normas sociales, ideas, artes, creencias y
costumbres.

Hoy en día, el término "cultura" tiene un significado más amplio, reconociendo


diferentes tipos de culturas sin sobrevalorar unas sobre otras. También integra las
culturas populares como una alternativa, no sólo mejor o peor que las tradicionales. La
UNESCO reconoce una tendencia hacia una definición socioantropológica de cultura,
incorporando los rasgos que definen a todas las comunidades involucradas, integrando
la multiplicidad de expresiones en cada comunidad.

La teoría de la cultura de Melville Herskovits se centra en el proceso de aprendizaje, la


endoculturación y la relación entre los componentes biológicos, ambientales,
lingüísticos e históricos de la existencia humana. También enfatiza que la cultura es
susceptible de ser estructurada, es decir, que puede ser moldeada por diversos factores,
como factores sociales, económicos y políticos.
La cultura puede ser dividida en aspectos como la cultura material, las instituciones
sociales, los sistemas de creencias y control del poder, la estética y el lenguaje. Esta
teoría establece el dinamismo y variabilidad de la cultura, que se basa en la diversidad
cultural de la humanidad en su conjunto y en la diversidad de comportamiento entre los
miembros de una misma sociedad. La cultura es el medio por el cual el proceso de
socialización del individuo permite integrarse al medio y dar sentido de pertenencia,
dotándolo a su vez de capacidad creadora.
Según Ralph Linton, el contenido de la cultura de cualquier sociedad homogénea puede
dividirse en tres categorías: factores universales, especialidades y factores alternativos.
Los factores universales incluyen todas las creencias, hábitos, costumbres y emociones
comunes a todos los adultos de la sociedad, como el idioma, la organización familiar y
las formas de vestir. Las especialidades hacen referencia a la apropiación diferencial de
ciertos elementos de la cultura por parte de ciertos individuos que ocupan una posición
determinada en la sociedad o pertenecen a una determinada categoría social. Los
factores alternativos son elementos de la cultura compartidos por ciertos grupos y no
por toda la sociedad, pero teniendo en cuenta que dichos grupos no pertenecen a las
categorías socialmente reconocidas que manejan las especialidades.
La identidad personal o individual puede ser definida como el conjunto de
circunstancias y rasgos que caracterizan una persona y la diferencian de las demás. El
proceso de identificación es fundamental en la formación de la identidad personal, y se
transforma mediante un modelo de referencia.
La cultura puede ser dividida en aspectos como la cultura material, las instituciones
sociales, los sistemas de creencias y control del poder, la estética y el lenguaje. Esta
teoría establece el dinamismo y variabilidad de la cultura, que se basa en la diversidad
cultural de la humanidad en su conjunto y en la diversidad de comportamiento entre los
miembros de una misma sociedad. La cultura es el medio por el cual el proceso de
socialización del individuo permite integrarse al medio y dar sentido de pertenencia,
dotándolo a su vez de capacidad creadora.
Según Ralph Linton, el contenido de la cultura de cualquier sociedad homogénea puede
dividirse en tres categorías: factores universales, especialidades y factores alternativos.
Los factores universales incluyen todas las creencias, hábitos, costumbres y emociones
comunes a todos los adultos de la sociedad, como el idioma, la organización familiar y
las formas de vestir. Las especialidades hacen referencia a la apropiación diferencial de
ciertos elementos de la cultura por parte de ciertos individuos que ocupan una posición
determinada en la sociedad o pertenecen a una determinada categoría social. Los
factores alternativos son elementos de la cultura compartidos por ciertos grupos y no
por toda la sociedad, pero teniendo en cuenta que dichos grupos no pertenecen a las
categorías socialmente reconocidas que manejan las especialidades.
La identidad personal o individual puede ser definida como el conjunto de
circunstancias y rasgos que caracterizan una persona y la diferencian de las demás. El
proceso de identificación es fundamental en la formación de la identidad personal, y se
transforma mediante un modelo de referencia.
La identidad postmoderna se refiere a la adaptabilidad, el capacidad de reordenamiento
constante de los elementos constitutivos de la misma para responder a los desafíos
planteados por el contexto. Esto es un enfoque que se utiliza para realizar la
investigación aplicada en este trabajo, considerando que la identidad no debe asociarse a
una reliquia ya que debe ser venerada en ciertas ocasiones, sino asociada con el
quehacer diario de la comunidad involucrada y que se encuentra en movimiento
permanente.
La identidad cultural es asociada a los modos y estilo de vida que permiten reconocer a
una cultura en el tiempo. La identidad cultural es un tipo de identidad colectiva, ya que
una cultura involucra a un conjunto amplio de personas. La identidad puede ser
concebida como el proceso de construcción del sentido de una comunidad en función de
ciertos elementos culturales.
Cheikh Anta Diop desarrolla el concepto de identidad sobre la base de tres pilares
fundamentales: el factor histórico, el lingüístico y el psicológico. La identidad cultural
de un pueblo va a estar condicionada en primer lugar por un pasado compartido, el
lenguaje, el psicológico, y las constantes culturales. Es posible afirmar la existencia de
un doble registro conceptual, uno de carácter especifico y otro nivel de registro más
general.

Identidad cultural
La identidad cultural se encuentra en permanente construcción, configurada a partir de
elementos históricos, geográficos, territoriales, sociales, económicos, políticos, étnicos,
religiosos, lingüísticos, etc. Esta identidad se encuentra en tres formas: Legitimadora,
Identidad de Resistencia, y Identidad Proyecto. La identidad de resistencia es el más
importante de nuestra sociedad, ya que involucra actores excluidos del plano social
dominante. La identidad proyecto, en su vez, es un proyecto de vida que busca
transformar la sociedad.
La identidad cultural puede ser entendida en dos sentidos: sincrónico y diacrónico.
Sincrónico se identifica a partir de la singularidad, el cual se encuentra aislado, mientras
que diacrónico se identifica a través de su autenticidad. El grupo cultural portador de
una identidad determinada no se encuentra aislado, sino que está inmerso en un
contexto social mayor donde existen otros grupos con otras identidades. Esta relación
puede ocasionar conflictos, ya que se encuentra en el plano del conflicto.
El conflicto sincrónico se refiere a la ampliación de una cultura, logrando un
reconocimiento y el perda de patrimonio. La identidad cultural se encuentra en el
proceso de la identidad cultural, ya que se encuentra en el mercado de la cultura y el
movimiento de la sociedad.
El conflicto diacrónico surge de la contradicción entre los aspectos estáticos y
dinámicos de la cultura. Una cultura busca preservar sus propios logros y está
estrechamente vinculada a la tradición, que combina constantemente aspectos
dinámicos, transformadores y creativos. Los conflictos pueden resolverse o regularse, y
las soluciones y regulaciones se logran mediante equilibrios entre los elementos en
juego. La globalización y la diversidad cultural han llevado a un proceso de mayores
interacciones políticas, económicas, sociales y culturales, lo que ha resultado en la
globalización de las sociedades. La globalización propone la reconstrucción de la
identidad abordando la nacionalidad que se afirma en su contra. Este concepto se basa
en la teoría de Rubert de Ventos, que considera la existencia de estados pluralistas a
través de la interacción histórica de cuatro factores: primarios, generativos, inducidos y
reactivos. Este concepto se centra en la defensa de las identidades oprimidas y de los
intereses de los grupos sociales dominantes, conduciendo a la búsqueda de identidades
alternativas en la memoria colectiva.

La recreación y el turismo
La recreación y el turismo son actividades que permiten satisfacer cinco necesidades
humanas: experiencias nuevas, dominión del medio, expresión de las emociones,
relajación, y socialización. El tiempo libre se refiere a la autocondicionamiento, el
capacidad del individuo de generar acciones que satisfacer sus necesidades propias sin
ningún tipo de influencia externa que determina su comportamiento.
El tiempo libre es el conjunto de ocupaciones que puede entregarse el individuo para
descansar, divertirse, ampliar su información, educación o participación social al
margen de las obligaciones profesionales, familiares y sociales. Esta concepción incluye
tres elementos básicos: el descanso, la diversión y el desarrollo de la personalidad.
El descanso se relacionado con la necesidad del individuo de reponerse de la fatiga
física que implica la labor diaria, la diversión implica la posibilidad de romper con la
rutina y hacer algo distinto, y el desarrollo de la personalidad esta ligado a la liberación
de la capacidad creadora del hombre.
El término recreación se definirá por el placer, ya que si una actividad es placentera, el
individuo participa voluntariamente y experimenta una satisfacción inmediata y directa.
La recreación permite satisfacer cinco necesidades humanas: experiencias nuevas,
dominio del medio, expresión de las emociones, relajación y socialización.
El turismo es un fenómeno social que implica el desplazamiento y estadía en un lugar
distinto al de residencia habitual. La cultura es una cultura en la que las personas
enfrentan el difusión y la libertad, lo que es el objetivo de la recreación y el turismo.
El elemento consecuencial del turismo se relaciona con las repercusiones físicas,
sociales y económicas que se generan como consecuencia del turismo. Es importante
aclarar que cada subsistemas posee su propia capacidad de alcance y debe tener un
equilibrio que asigna la misma prioridad a todas. El sistema turístico más allá de la
demanda está formado por otros factores que constituyen la oferta turística o recreativa.
Los atractivos son elementos del sistema, motivadores del flujo turístico, y el destino
debe brindar condiciones de seguridad y higiene para asegurar la permanencia del
visitante. La infraestructura es una parte fundamental del sistema turístico, ya que se
divide en dos grandes grupos: directamente relacionados con el turismo y
indirectamente con la actividad turística. La superestructura regula la actividad turística
y los intereses de los actores sociales responsables de los elementos del sistema.
La demanda turística o recreativa es fundamental para generar propuestas y tener una
identificación clara de sus características, es decir, su perfil. Esto está dado básicamente
por dos factores: las características socioeconómicas del turista y las características de
su comportamiento. En el primer caso, se deberá tener en cuenta la edad, el sexo, el
nivel de ingresos, las experiencias anteriores, el nivel educativo, etc., pero no existe una
relación determinante entre estos elementos y el comportamiento del turista. La estudio
de las motivaciones turísticas se vuelve algo fundamental.
Teorías de estudio de las motivaciones turísticas se han desarrollado para identificar los
distintos factores que impulsan a la gente a viajar. R. McIntosh identifica cuatro
factores: 1) motivaciones físicas: relacionadas con el descanso físico, 2) motivaciones
culturales: relacionadas con el deseo de conocer otros países, 3) motivaciones
interpersonales: relacionadas con el deseo de conocer nuevas personas, visitar amigos o
familiares, salir de la rutina, alejarse de la familia y del lugar donde se reside, o hacer
nuevas amistades.
Estas teorías acerca de la motivación turística son sólo dos de las tantas que se han
desarrollado sobre este tema. La comprensión de los factores motivacionales del turista
y de los demográficos y socioeconómicos es fundamental para ofrecer un producto
turístico o recreativo adecuado y seleccionar los medios de promoción más eficientes.

Tipos de Turismo
La cultura es una modalidad de turismo que se divide en seis categorías: étnico, cultural,
histórico, ambiental, recreativo, y comercial. El étnico es el viaje para observar las
expresiones culturales y estilos de vida de pueblos exóticos, el cultural es el viaje para
experimentar y participar en un estilo de vida a punto de extinguirse, el histórico es el
circuito de museos y catedrales que recuerdan glorias del pasado, el ambiental es el
viaje para apreciar sitios de gran valor natural, el recreativo es la participación en
deportes, baños curativos, baños de sol y contactos sociales, y el comercial es el circuito
de convenciones, reuniones o seminarios.
El turismo cultural se basa en las motivaciones que impulsan una persona hacia la
actividad recreativa y/o turística. Esta variedad de opciones de viaje y recreación buscan
satisfacer estas demandas. McIntosh y Gupta agrupan esta variedad en seis categorías de
turismo: etnico, cultural, histórico, ambiental, recreativo, y comercial. El turismo
cultural se vale del patrimonio cultural de la región en cuestión, constituido por
elementos tanto material como intangible. El patrimonio cultural se encuentra en un
grupo de turistas adecuados, es decir, el grupo que explícita lo que exige el producto de
turismo cultural.
la planificación y promoción del turismo cultural son fundamentales para la satisfacción
de los intereses de los turistas y los residentes. Se debe considerar las particularidades
del turismo cultural, como la interés del público y la calidad de la información brindada
en el destino.
Conocer los elementos o objetos culturales también implica fomentar la visita de estos
sitios por parte del turismo, garantizar los recursos económicos para su subsistencia.
Esto se refiere a dos tipos de turistas: asiduos y ocasionales, que diferencian en la
persistencia o incidencia de su interés por la cultura. Los asiduos o persistentes se
clasifican en especialistas o generalistas, mientras que los ocasionales se caracterizan
por su disposición, entorno, instancia, incluso la casualidad.
El turismo cultural puede realizarse de manera localizada o itinerante, ya sea en las
ciudades o en lugares itinerantes. La programación determinada con antelación es
inherente en el caso del turismo cultural itinerante. Los recursos culturales pueden ser
naturales o culturales, y se pueden clasificarse en materias y inmateriales.
Los recursos culturales son elementos productos de la actividad humana que generan un
interés tanto turístico como recreativo, motivando la visita por parte de los residentes de
la localidad. Estos recursos pueden ser naturales o culturales, y se pueden clasificarse en
materias y inmateriales. Los recursos culturales pueden desagregarse en diferentes
categorías, como museos, monumentos, sitios y lugares históricos, folklore,
realizaciones contemporáneas, y ruinas y lugares arqueológicos.
Los recursos culturales presentan una serie de problemáticas, como el emplazamiento,
preservación, capacidad de carga, comercialización, y capacidad participativa. Los
recursos culturales muebles o inmuebles no pueden ser transportados y deben ser
ubicados en ambientes con condiciones controladas para evitar deterioro. La capacidad
de carga y la psicológica dependen del recurso en particular afectado. La
comercialización es un problema para promover aspectos intangibles de una cultura, y
la capacidad participativa es difícil de transmitir a través de medios como gráficos o
esencia de una cultura.
En los últimos años se han producido cambios en la demanda de viajes y turismo,
impulsados ​por factores como la expansión de destinos europeos, períodos vacacionales
más cortos, una mayor relación calidad/precio y motivaciones cambiantes. Los viajeros
ahora buscan productos turísticos alternativos como aventura, ecoturismo y deportes.
Estas tendencias son fundamentales ya que marcan las necesidades de la demanda y
brindan oportunidades para satisfacer a los viajeros. La identidad cultural juega un papel
importante como atractivo turístico.

Identidad cultural y recreación


La diversidad cultural es un factor importante en el desarrollo de las prácticas turísticas,
ya que atrae a personas motivadas por comprender diferentes culturas. Las ciudades se
caracterizan por subculturas étnicas y culturales, cada una con su propia identidad y
costumbres. Esta diversidad se observa a menudo en áreas urbanas específicas, donde
viven minorías étnicas como una forma de protección y asistencia mutua. Esta
diversidad genera curiosidad no sólo en la demanda turística sino también en el resto de
la población, haciendo de la recreación una parte esencial de la experiencia turística.
Tanto el turismo como la recreación son agentes de transformación social, ya que
involucran a una persona más, un miembro de otra sociedad o grupo, y la comunidad
que visita.
La identidad es un valor que especifica a los grupos humanos y se construye y produce
en un proceso complejo. El turismo, por su parte, demanda procesos identificorios, ya
que es una actividad que necesita crear imágenes y representaciones. La imagen es una
construcción mental basada en un conjunto de impresiones, abarcando tres niveles
diferentes: lo real, lo imaginario y lo simbólico. La identidad cultural puede constituir
un atractivo de valor recreativo, ya que se enfoca en la información que se brinda al
visitante. La sociedad local produce imágenes que la identifican, orientan su desarrollo
y definen. El turismo se individualiza generando un sistema de relaciones propia, un
campo que se independiza progresivamente, se especifica y se materializa en una
sociedad particular. Esto proceso de creación y conflicto de imágenes puede ser
analizado en etapas o modelos territoriales. La identidad cultural como factor de
atracción es una clave en la actividad turística-recreativa, ya que se enfoca en la
construcción de valores locales y la cultura.
La identidad cultural es un factor de atracción recreativo y/o turístico que implica el
desarrollo de la comunicación en la experiencia del visitante. Esto significa que se debe
hacer un esfuerzo para que el recreacionista pueda interpretar e internalizar el contenido
de dicha identidad. Se aprehenda el contenido inmaterial a través de referentes físicos o
visuales, tales como museos, edificios de significación cultural, festividades, comidas
típicas, música y danzas tradicionales. Estos son referentes culturales que hacen a la
identidad de un grupo y deben ser brindados al turista acompañados con un elemento
comunicacional que los integre para que el visitante puede acceder a dicha identidad.
La identidad cultural de un grupo se basa en elementos como el espacios de
significación cultural, la producción material de la comunidad, las fiestas, las danzas y
la música, y la gastronomía. Los elementos culturales pueden ser edificios, museos,
monumentos, edificios, eventos, fiestas, danzas y música, y la gastronomía. Los
elementos culturales pueden ser el lingüístico, el que puede transmitir el significado y
sentido de estos elementos en relación a la identidad cultural. La cultura es una cultura
en que las personas y culturas se encuentran en una sociedad, ya que es el lugar de vida,
mercados, calles, y ritmo. La cultura es una cultura en que las personas y culturas se
encuentran en una sociedad y en una sociedad en que las personas y culturas se
encuentran en una sociedad y en una sociedad en que las personas y culturas se
encuentran en una sociedad
La identidad cultural puede ser considerada un recurso turístico / recreativo, pero
también se puede constituir un factor determinante de las prácticas recreativas y
turísticas de individuos portadores de dicha identidad. La identidad como fuente de
sentido establece una escala de valores para una comunidad, lo que es el motivante del
turismo y la recreación.
El fenómeno turístico implica el contacto de dos grupos, los turistas y los residentes,
que se encuentran en un mismo espacio y tiempo, pero con motivaciones y intereses
completamente diferentes. Se hace necesario prestar especial atención a la forma en la
que esta interacción, para que la misma no afecte la experiencia del recreacionista y
mucho menos las pautas socioculturales de la comunidad receptora.
Efectos socioculturales del turismo y la recreación provocan alteraciones en la calidad
de vida, la estructura poblacional y el comportamiento social en el grupo de residentes.
Los efectos pueden ser beneficiosos, como la inserción de empleos y la generación de
migraciones de trabajadores de áreas rurales. La estructura poblacional puede ser
modificada por las características de los trabajos relacionados con el sector, migraciones
de trabajadores y el mercado laboral turístico.
El turismo y la conducta moral a menudo se asocian con un turista, pero estas
actividades no necesariamente surgen del turismo en sí. El aumento de población y la
disponibilidad de dinero asociado al turismo pueden incrementar la actividad. El efecto
de demostración también está presente en los centros turísticos, donde los miembros de
la comunidad local adoptan ciertos comportamientos de los turistas. Este fenómeno
afecta a los jóvenes quienes tienen más probabilidades de adoptar comportamientos
diferentes, mientras que los adultos mayores están más acostumbrados a las prácticas
tradicionales.
El proceso de globalización ha llevado a una mayor interdependencia entre las naciones,
tanto económica, social, cultural y políticamente. Esto ha resultado en una globalización
de la cultura que ha estimulado contramovimientos. Simultáneamente a estas diferencias
se están produciendo procesos homogeneizadores, trayendo relevancia al nacionalismo
y al localismo.
El localismo ha sido una de las escalas más importantes en el desarrollo de las
actividades turísticas, implicando un horizonte no internacional. El nivel local de
atracción es el primer y más poderoso elemento en la organización del circuito turístico
a escala global. El proceso de globalización no ha restado relevancia a la escala local,
sino que ha reforzado su papel en dos sentidos: el proceso de homogeneización, que
favorece la globalización y ha sido criticado por las grandes empresas turísticas, y los
cambios más recientes, como la crisis de la concepto de Estado-nación, que permiten
una nueva relevancia de la escala local.
Las ciudades, al igual que las naciones, no son unidades naturales sino también
productos de procesos históricos y fenómenos relativamente recientes. Las "tradiciones"
se imbrican en procesos dinámicos, reconstruyéndose y resignificandose en el tiempo.
El culto a la tradición está estrechamente vinculado a la modernidad y el progreso, y las
comunidades desarrollan procesos a través de sus fronteras culturales y construyen su
identidad.

Estudio de la comunidad del Puerto del mar de plata


El documento aborda la identidad cultural del Puerto de Mar del Plata, una comunidad
específica que se centra en el desarrollo de estos ejes. Se reaffirma que el concepto de
identidad cultural tiene una perspectiva múltiple, como factor de atracción turístico
recreativo y condicionante de las prácticas de tiempo libre de la agrupación portadora de
dicha identidad.
El grupo de pescadores del puerto de la ciudad de Mar del Plata se selecciona como
objeto de estudio, y se tratará de hallar un paralelismo entre su identidad cultural y el
uso del tiempo libre. Esto se considera a partir de su evolución a lo largo de los años,
procurando trazar el perfil sociocultural del pescador y observar su relación con la
disponibilidad y aprovechamiento del tiempo de ocio.
Una de las principales dificultades en la investigación es la ausencia de material
documentado sobre la evolución de la comunidad del puerto, desde el punto de vista
social y cultural. La recopilación de información se realizó íntegramente, realizando
entrevistas a informantes claves pertenecientes a diferentes ámbitos de la comunidad.
La ciudad de Mar del Plata fue fundada en 1874 por Don Patricio Peralta Ramos, cuya
origen verdadera se remonta a mediados del S. XIX. En 1865, Meyrelles vendió sus
tierras a Don Patricio Ramos, quien adquirió el saladero para explotarlo. Desde
entonces, se tuvo la intención de fundar un pueblo en la zona y, tras varios intentos
fallidos, se dividió el partido de Balcarce y nació un nuevo, el de General Pueyredón,
cuya cabecera fue Mar del Plata.
Los métodos y técnicas de pesca en Mar del Plata se limitaron a sus limitadas
posibilidades. Algunos pescadores utilizaban redes de pesca, mientras que otros
utilizaban embarcaciones rudimentarias. La creación del Hotel Bristol en 1888 permitió
a los pescadores desarrollar su actividad como atractivo turístico. El establecimiento de
fondos, tabucos y tabernas en las zonas de Torreón y Las Chacras propició el desarrollo
del turismo. El enfrentamiento entre pescadores y visitantes persistió durante varios
años, resistiéndose los primeros pescadores a las disposiciones legales y siendo
reubicados en Tierra del Fuego y La Pescadilla. La primera forma de comercialización
se basó en la limpieza del pescado para su venta en fresco. A medida que aumentó el
número de visitantes se fueron creando una serie de servicios turísticos como
balnearios, gastronomía y hoteliería. A medida que crecieron las posibilidades de pesca,
algunos pescadores incorporaron a sus familias a sus actividades.
El puerto nuevo de Mar del Plata fue creado en 1909 por la ley 6499 del Congreso
Nacional. El gobierno nacional aprobó bases para el concurso de proyectos y licitación
de las obras del puerto de ultramar y cabotaje, con participaron empresas particulares.
En 1910, se llevo a cabo la apertura de propuestas y el proyecto de los señores Allard,
Dolfus, Sillard, y Wiriot, quienes habían construido el puerto de Montevideo.
La obra construyó dos edificios en los que se usó principalmente la piedra, como la casa
matriz de la empresa y el otro edificio conservado. Los pescadores tenían un espacio
dentro del puerto nuevo, pero no se acercaron en forma inmediata, y en 1922, el puerto
terminó. La "barriada" del puerto era un barrio pobre y abandonado por las autoridades,
y el puerto era un barrio como el "barriada" del puerto. Los pescadores trabajaron "a la
parte", recibir una mayor o menor parte de la ganancia.
La pesca en la República Argentina, en particular en Mar del Plata, tuvo un despegue
económico desde la década del ´40. Sin embargo, la captura "costera" fue la modalidad
de mayor desarrollo, ya que se encuentra en la esfera de la industria conservera. Las
guerras mundiales generaron nichos de mercado para la industrialización de la pesca en
conserva, salada o enlatada. Esta situación produjo un circulo virtuoso entre la industria
y la flota costera que se realimentó en forma continua. El Puerto de Mar del Plata está
formado por dos sectores: comercial y portuario. El sector sur es comercial y tiene tres
espigones: ultramarino (espigón 3 local) y de pescadores (espigón 1) así como una posta
de inflamables sobre el lateral interno de la escollera sur. El sector sur también tiene un
puerto de inflamables ubicado sobre el lado interno de la escollera sur, especialmente
para operaciones petroleros y gas en conexión directa con los tanques de
almacenamiento ubicados en la zona de la reserva natural.
El barrio de "El Puerto" está delimitado por calles Bouchard al sur, Juan B. Justo al
norte, Martínez de Hoz al este, y la calle Triunvirato al oeste. La interior se encuentra
atravesada por dos arterias principales: calle 12 de Octubre y la avenida Edison paralela
a esta última. A lo largo de la avenida Edison se asientan parte de las instituciones que
hacen a la dinámica del barrio y sus pobladores, como la Casa de Italia, las oficinas de
la Cooperativa Marplatense de Pesca e Industrialización Limitada (Coo.Mar.Pes.), la
Asociación Argentina de Capitanes de Patrones de Pesca, la Obra Social de Patrones
Pescadores, y las plantas elaboradoras de conservas.
El barrio del puerto se distribuye en una área detallada por las calles Magallanes, Juan
B. Justo, Martínez de Hoz y Padre Dutto, ocupada por las dos primeras generaciones de
inmigrantes italianos y una tercera generación. La segunda sector, conformedo por el
asentamiento al sur del barrio, es habitado por grupos provenientes del norte de país. El
último cordón periférico se integra hacia el oeste con los barrios aledaños, donde se
pueden encontrar aquellos que han abandonado el asentamiento y algunos inmigrantes
de países limítrofes.
De el punto de vista arquitectónico, el barrio se caracteriza por la casi inexistencia de
inmuebles que superen los tres pisos, especialmente en el espacio construido. Las
edificaciones de mayor envergadura son aquellas que pertenecen a plantas procesadores
de pescado o albergan instituciones de mayor relevancia para el barrio.
En la conjunto de viviendas de familias de origen italiano, se observa una constante que
se repite en la mayoría. Se agregan una tercera y hasta una cuarta vivienda en cada
terreno, incluyendo casas de material adicionadas a las construcciones originales. Esta
tendencia a concentrar en un mismo terreno más de una vivienda tiene estrecha relación
con la organización familiar.
El trabajo, la familia, la economía y la religión son claves de la estructura social de esta
comunidad. La familia era la unidad socioeconómica básica, y la mujer era importante
para administrar los ingresos familiares. La estructura familiar se encuentran
estrechamente relacionados, y las hijas mujeres suponían un doble esfuerzo para la
familia.
La familia Mellino, formada por cuatro hermanos que llegaron a Argentina después de
la Segunda Guerra Mundial, se instaló inicialmente en Buenos Aires antes de trasladarse
a Mar del Plata. Comenzaron centrándose en la pesca y luego diversificaron sus
actividades, incluyendo una fábrica de refrigeración, un restaurante y un mercado de
pescado local. Sin embargo, debido a dificultades económicas y conflictos entre
miembros de la familia, la familia fue declarada en quiebra en 1999. En 2000, la familia
vendió el pescado a Giorno SA y ahora sólo mantiene un mercado de pescado local y
algunos artefactos artesanales. La familia Amalfitano, que no es pescadora, se dedica a
las actividades pesqueras familiares desde hace casi 60 años. La historia de la familia es
común, con generaciones dedicadas a la pesca, la vida familiar y las creencias
religiosas. Sin embargo, algunos miembros han pasado a la educación superior y han
seguido carreras en la pesca, con el objetivo de continuar sus actividades pesqueras y
lograr crecimiento.
La vida familiar es una vida en la que el patrimonio y el respeto de los miembros de
mayor edad son claves. La familia es una suerte de empresa, y la mayoría se dedica a la
pesca artesanal, ya que se remonta a las lanchas amarillas. La mujer deja de ser ama de
casa para comenzar a trabajar, ya que marca un ritmo dentro del seno familiar y una
mayor apertura hacia el resto de la comunidad. El barrio alberga a casi todos los
miembros del grupo, y la organización en colectividades renova el vínculo permanente
con la tierra de sus antepasados. La religión y la familia son dos valores de esta
comunidad que no han perdido importancia con el correr del tiempo, incluso los más
jóvenes participan activamente y con el afecto de los miembros de la familia.

La Economía
La economía es un punto de importancia en la identidad cultural de todo grupo, ya que
se basa en la actividad que le permite subsistir. La pesca, en la que se basa la economía
de la comunidad, se enfoca en la década del '40, cuando la Segunda Guerra Mundial
interrumpió el comercio internacional, afectando el ingreso de productos pesqueros
extranjeros. La guerra requería vitamina A para la supervivencia de los combatientes, y
el hígado de tiburón constituía una fuente inigualable de la misma. La flota pesquera se
diversificó y produjo un incremento de la capacidad productiva de la comunidad. La
flota mayor se continuó su crecimiento hacia la década del 70, pero no existieron líneas
de crédito y subsidios para el sector artesanal. La pesca se desarrolló lentamente,
destinando esencialmente a abastecer al mercado interno. La política de vedas de carnes
influyó en la actividad pesquera, y a partir de la década del '60 se desarrolló otra
industria relacionada con la pesca, la industria de aceites y harina de pescado. La
crecimiento de la actividad en la época del '60 se encontró en las líneas hacia finales de
la misma.
La pesca en la época del '70 ha tenido una resión temporal, a pesar de la demanda en el
mercado externo y la agotamiento de los caladeros tradicionales. Desde 1980, la pesca
enfrentó una crisis debido a la caída de los precios internacionales, la competencia de
países productores a precios subsidiados, y la grave situación económica interna. La
actualidad es difícil, básicamente provocada por el riesgo de colapso de las especies de
mayor valor comercial. La crisis del sector redundará en el ingreso de divisas y en
puestos de trabajo. La Ley Federal de Pesca es un marco legal que no se ha aplicado
como mecanismo de control de la actividad. Los propietarios de los barcos costeros más
sufren consecuencias, y la disminución del recurso se traduce en una disminución de la
rentabilidad. La identidad cultural también se ha tornado en riesgo, ya que no se estaría
renovando la población dedicada a la pesca artesanal.
La Cooperativa Marplatense de Pesca e Industrialización Limitada es una organización
en la comercialización del producto del trabajo diario. Se entrega el producto a los
vendedores de la cooperativa que fijan un precio a la mercadería y se reúnen con los
compradores. El sistema de remuneración de los pescadores es en desuso, y el
remuneración "a la parte" es el producto de la pesca de divide en una determinada
cantidad de partes iguales, asignando en cantidades diferenciales de acuerdo al puesto
que se ocupa. La Sociedad de Patrones Pescadores ha desarrollado un proyecto llamado
Lanchas Amarillas, en el que se pretende poner en valor la pesca artesanal, con el
objetivo de mejorar el precio de venta en parte de su pesca diaria a través de la venta
directa al consumidor final de pescado fresco, bajo un marca reconocida y disminuir los
efectos nocivos de la concentración económica.
El proyecto se propone lograr y los beneficios que llevaría, incluyendo revierte la
situación de Emergencia Económica declarada por Ley 12.501 de todas las
embarcaciones artesanales con asiento en Mar del Plata, aumentar el consumo per capita
de pescado, generar hábito al pescado y garantizar calidad, fortalecer el mercado interno
y crear conciencia marítima.

La religión
La religiosidad en la comunidad del Puerto de Mar del Plata se basa en cuatro pilares:
familia, laboral y económico. Los italianos se caracterizaban por ser extremamente
anticlericalistas, creando en el patrono del lugar donde habían nacido y se vinculaban
con él a través de imágenes que materializaban. La iglesia como institución ingresó a la
comunidad del puerto a través de dos vías: la Comisión Auxiliar de Damas Vicentinas y
la entrada de los sacerdotes de la orden de Don Orione.
La Comisión de Damas Vicentinas buscaba el mejoramiento edilicio y "moral" de la
comunidad del puerto, formada por mujeres de la elite porteña. Su función era hacer
contenedor social, tratando de evitar que las malas condiciones de vida de los sectores
carenciados de la sociedad se transformaron en una fuerza que amenazara con el orden
establecido. Las Damas Vicentinas tenían una enorme capacidad de movilizar recursos a
través de la caridad, como el Colegio Profesional de Varones y la Escuela Profesional de
Niñas.
El entrada de los sacerdotes orionitas a la comunidad del puerto no fue sencilla, sino
que se aprovecharon el idioma y esa religiosidad popular practicada por los pescadores.
La iglesia católica comenzó a tener un rol más importante dentro de la dinámica social
de la comunidad del puerto, como la instalación de la Parroquia de la Sagrada Familia.
El cronograma de festejos religiosos de la comunidad cuenta con una docena de
celebraciones, cada una dedicada a un santo patrono que nuclea a una colectividad
distinta. La organización de los festejos tienen una estructura común en las diferentes
colectividades, todas cuentan con una comisión de fomento que es la encargada de
materializar la celebración.
Otro elemento que le confiere entidad al barrio son sus instituciones importantes para
mantener la identidad de la comunidad objeto de este estudio. La Casa de Italia, o
Asociación Italiana del Puerto, es un organismo importante que comenzó a agrupar a
inmigrantes italianos en 1955 para estrechar vínculos de amistad y camaradería. La
sociedad ha tenido varias sedes provisorias y se inauguró su sede propia en 1967.
Aparta de la Casa D' Italia, la comunidad italiana se nuclea en otras instituciones,
algunas tienen sede en ella y otras tienen sede propia. Regionales asociaciones agrupar a
"paisanos" de una misma región de Italia. Los italianos que integran la comunidad del
puerto provienen casi en las regiones del sur, Calabria, Sicilia, Basilicata, Campania,
Pugliese, Molise y Sardegna.
Para las agrupaciones regionales, encontramos las Comisiones Religiosas, que
organizan la fiesta patronal anual. Todas estas instituciones tienen una importancia
capital en el mantenimiento de la identidad cultural de la comunidad, ya que son
encargadas de dar continuidad a las tradiciones y mantener el vínculo permanente con
Italia. La Parroquia de la Sagrada Familia apoya y brinda su espacio físico en la
realización de las fiestas patronales.
La Sociedad de Patrones Pescadores y la Cooperativa Marplatense de Pesca e
Industrialización Ltda. son entidades clave para la cultura y la religión de la comunidad
de pescadores propietarios de las lanchas costeras. La Sociedad de Patrones Pescadores,
fundada en 1948, es una entidad de lucro y es el único que recibe remuneración por su
labor. La Cooperativa Marplatense de Pesca e Industrialización Ltda., entraente a la
Sociedad de Patrones Pescadores, tiene como objetivo la comercialización del pescado
y la conservación de la mercadería. La Cooperativa facilita el acceso de elementos
necesarios para el desenvolvimento de sus tareas, y el entidad de la Sociedad de
Patrones Pescadores es la Organización Nacional de los Pescadores.
La identidad cultural de la comunidad del puerto de Mar del Plata se enfoca en dos
ópticas: singularización y autenticidad. Se analiza en el caso de la comunidad objeto de
estudio, que se enfoca en su singularidad, como la pesca, y en su autenticidad, como la
organización familiar, el respeto por los miembros, el valor a la experiencia, y su
capacidad de trabajo y ahorro.
En la actualidad, se aborda la identidad cultural desde la concepción proteica o
multiforme, proponiendo como característica sobresaliente la adaptabilidad. En la
comunidad del puerto, es posible observar cierta adaptabilidad, aunque son más los
aspectos que permanecen que aquellos que se modifican o incorporan. En un primer
momento, el móvil principal de la inmigración era permanecer en este lugar para ganar
dinero y regresar a Europa, lo que hizo esta comunidad trasladar su cultura. Una vez
llegados al país comenzaron a desarrollar actividades conocícas y desinterés para
comenzar una nueva vida.
Un primer signo de adaptabilidad manifestó el abandono por parte de algunos
pescadores de la actividad pesquera para dedicarse a la prestación de servicios turísticos
en la villa balnearia. Esto constituía un factor de importancia desde el punto de vista de
la identidad. El segunda oleada inmigrada, el aislamiento espacial de la comunidad se
refiere a la cultura y la cultura del puerto.
Cheikh Anta Diop desarrolla el concepto de identidad a partir de tres pilares
fundamentales: el factor histórico, el lingüístico y el psicológico. En la comunidad del
Puerto, el primer factor es la historia común de estos grupos en la fase premigratoria, en
función de ella se agruparon al llegar a estas tierras como un medio de aumentar la
cohesión grupal. La historia y tradición de cada colectividad son claves para la
construcción de una nueva forma de cohesión que incluye todo el grupo más allá de su
lugar de origen.
El segundo factor planteado por este autor es el lingüístico, ya que también es
observable en este grupo, ya que también los miembros mayores de esta comunidad
continúan expresándose en italiano y dialectos propios de sus lugares de origen. El
idioma es un elemento inculcado en las generaciones más jóvenes desde la niñez a
través del sistema de educación formal.
El psicológico tiene que ver con las constantes culturales, es decir, los rasgos culturales
que permiten reconocer a un grupo. La familia es un elemento característico de este
grupo, ya que es el elemento que estructura la vida personal de sus miembros y la vida
productiva.
Al analizar el devenir histórico de esta comunidad, se pone de manifiesto la
construcción de una identidad de resistencia en una fase inicial, en la cual la ciudad
creció de espaldas a la barriada del puerto, teniendo que sobrevivir en medio de una
pobreza absoluta y sin ningún tipo de servicio básico.
La identidad cultural de la comunidad del Puerto como Atractivo Turístico / Recreativo
no constituye un atractivo turístico ni recreativo, pero se reconoce un potencial que
requiere un trabajo profundo y mancomunado de todos los actores sociales
involucrados.
a planificación de itinerarios y la promoción del producto es una cuestión prioritaria
para la identidad de la comunidad del puerto. Se debe identificar la demanda y crear la
oferta, como presentar los atractivos y combinarlos para transmitir la significación de lo
que visita y conectarse con la vida cotidiana. La promoción es un elemento crítico, ya
que más allá de la oferta no está totalmente organizada, y los intentos de poner en valor
la identidad como recurso cultural han sido fallidos. Se verifica la necesidad de acciones
promocional por parte del entorno de turismo.
El estudio analiza la evolución histórica de la comunidad del Puerto de Mar del Plata,
centrándose en su identidad cultural y vida cotidiana. Para promover el turismo es
fundamental considerar espacios físicos y ciertos elementos que atraigan a los
visitantes. Se discutirá la clasificación propuesta de estos referentes en el tercer capítulo
del marco teórico, clasificándose los recursos culturales según el segundo capítulo.
Entre los espacios culturales se encuentra el Museo del Hombre del Puerto de Mar del
Plata Cleto Ciocchini, que alberga una importante colección de fotografías, documentos
y objetos relacionados con la vida y costumbres de los primeros habitantes de la zona.
Los monumentos incluyen la escultura del Hombre de Mar, el monumento al Pescador y
el monumento al Naval Obrero.
Sitios and historical landmarks include the Parroquia and Colegio La Sagrada Familia,
the Grruta de la Virgen de Lourdes, the College of Inmaculada Concepción, the Escuela
Provincial Nro. 12, the Vieja Usina del Puerto, and the Casa de la Empresa.
El estudio también destaca la importancia de los sitios históricos del Puerto de Mar del
Plata, como la Iglesia de San José, la Santería y la Capilla. También se menciona a la
Universidad de Buenos Aires y al Instituto Portuario de Educación.
En conclusión, el estudio resalta la importancia de la comunidad del Puerto de Mar del
Plata en términos de sitios culturales, históricos e históricos.
La comunidad del puerto de Mar del Plata se encuentra en tres núcleos: el primero,
construido por la Comisión Auxiliadora Conferencia San Vicente de Paul, ubicado en
las manzanas de Posadas, Rondeau, Magallanes y Ayolas; el segundo conjunto
arquitectónico, formado por las casillas de chapa y madera de los primeros pobladores
del puerto; y el tercero que corresponde a las construidas por la empresa constructora
del puerto.
Otros sitios de interés incluyen la casa atelier de Cleto Ciocchini, el edificio Carnicería
Nro.1, la Delegación Municipal del Puerto, un viejo galpón que pertenece a la empresa
francesa, la Piedra Fundamental del Puerto y la banquina de pescadores.
Las realizaciones contemporáneas se consideran elementos y utensilios necesarios para
el desarrollo de las actividades que le dan sustento económico a la comunidad. Se
incluyen las lanchas amarillas, barcos de color rojo utilizados para la pesca de altura,
astilleros, artes de pesca, lampara o red de cerco, y escuela Nacional de Pesca
"Comandante Luis Piedra Buena".
Festividades y celebraciones populares de la comunidad del puerto de Mar del Plata son
motivadas por la devoción de los pobladores por los santos patronos de las distintas
zonas del sur de Italia, como Capri, Sorrento, Sicilia, Ischia, Puglia, etc.
La música es la expresión artística más representativa de la comunidad del puerto,
caracterizada por el gusto de los cantores populares italianos y en menor medida por la
ópera. La tarantela es la danza típica del sur de Italia, se baila en parejas a la música de
panderetas, castañuelas y tambores, con diferentes adaptaciones a las diferentes
regiones. La tarantela recibe su nombre en referencia a la tarántula, insecto que provoca
una serie de convulsiones durante el baile al compás de la alegre música.
Gastronomía es una cultura distintiva en la comunidad, con distintas comidas en el
centro comercial del puerto y en las cantinas en el corazón del barrio. Los elementos
citados son referentes de la identidad de la comunidad del puerto y constituyen
atractivos turístico y recreativo.
La identidad cultural de las familias de pescadores ha habido una pérdida considerable,
ya que la actividad pesquera, especial la pesca costera, ha provocado el abandono de la
actividad por las generaciones más jóvenes. Esta pérdida implica un alto impacto sobre
la identidad cultural de la comunidad, teniendo en cuenta el valor simbólico que posee
la pesca costera y el valor económico como fuente de sustento de la comunidad. La
sanción de la Ley de Pesca Artesanal es de importancia para brindar un marco legal
específico y fomentar la actividad orientándola a segmentos específicos del mercado.
Desde la Sociedad de Patrones Pescadores, se reclama el apoyo de los organismos
gubernamentales para poder hacer la pesca artesanal, no sólo una actividad
económicamente sustentable para quienes se dedican a ella, sino también un atractivo
turístico y cultural para la comunidad.
La identidad cultural como un recurso turístico revivió un alto grado de complejidad, ya
que el turista y el recreacionista debe comprender e interpretar el significado que los
mismos tienen para la comunidad. La identidad cultural podría constituir una buena
oferta para este tipo de turistas, pero se debe considerar la necesidad de realizar toda la
actividad y las necesidades de la cultura.
El sistema turístico en Argentina es compuesto por la demanda, atractivos,
equipamiento, infraestructura, comunidad local y superestructura. La identidad cultural
es un potencial factor de atracción turístico-recreativo, pero es importante tener en
cuenta que es necesario esfuerzo para materializar ese potencial. La oferta de atractivos
del puerto es infrautilizada, y mucho de estos atractivos no pueden ser integrados en la
oferta turística del barrio. El Museo del Hombre del Puerto Mar del Plata Cleto
Ciocchini es un proyecto que aborda la identidad cultural como atractivo recreativo,
transmitiendo las vivencias de este grupo de inmigrantes. Sin embargo, esta propuesta
no supera la fase de proyecto, ya que se requiere mejoras en los atractivos y recursos
humanos calificados. La institución requiere el apoyo de profesionales voluntariamente,
pero no es suficiente para implementar las acciones proponenas.
El Puerto de Mar del Plata tiene una oferta de equipamiento rudimentaria,
especialmente en servicios gastronómicos, paseos marítimos y pesca embarcada, y
pocos locales de esparcimiento. La oferta no contiene referencia a la identidad cultural.
La necesidad de concreción puede ser programable y se tienen diferentes grados de
prioridad. La cuestión más urgente es la instalación de centros de información al turista
en sitios estratégicos del barrio y la adecuada señalización de los espacios de valor
desde el punto de vista de la identidad. La proyección de construcción de una Terminal
de Cruceros en el Puerto de Mar del Plata requiere una inversión de 60 millones de
dólares y un plazo de concesión inicial de 30 años. La concreción se prevé en diferentes
etapas, con un plazo mínimo de 30 meses y uno máximo de 4 años para su finalización.
La infraestructura debe ser prioritizada para satisfacer las necesidades del barrio y la
cultura del pueblo.
La reconstrucción y renovación de las instalaciones marítimas, en particular la chica
banquina, es crucial para promover la identidad cultural y atraer visitantes. La
comunidad local juega un papel crucial en la promoción del turismo y el
establecimiento de acuerdos con inversores. Esto puede ayudar a establecer un límite
entre la exposición al turismo y la turistificación de la identidad cultural. En el pasado,
había poco interés en desarrollar el turismo, pero ahora hay interés en transformar la
pesca en una atracción turística, permitiendo que el turismo complemente la economía
pesquera artesanal y prolongue su continuidad. Esta iniciativa, procedente del sector
menos permeable, puede ser un buen punto de partida para un proyecto turístico
centrado en la identidad cultural.
El proyecto turístico en la comunidad del puerto es fundamental en su éxito, ya que es
requirido por la superestructura del sistema turístico, el municipio y el aparato
gubernamental. La comunidad del puerto tiene una amplia gama de asociaciones, y el
trabajo en el Museo del Hombre de Mar ha sido especialmente relevante.
La identidad cultural y las practicas recreativas de la comunidad del Puerto han sido
limitadas en los primeros años. La comunidad era físicamente escaso, y las prácticas de
los pescadores se encontraban en dos factores: el tiempo libre era físicamente escaso, y
la vida familiar se encuentra en grupos homogéneos según la edad. La incorporación de
la familia a la comunidad del puerto influyó en las actividades que se realizaban, ya que
básicamente se sustentaron en la religión.
En la actualidad, estas festividades no sólo poseen significación religiosa, sino también
constituyen un ámbito de socialización y refuerzo de la identidad cultural. La cultura y
las prácticas recreativas de la comunidad del Puerto son específicas y deben ser
aprobadas para satisfacer las necesidades de la comunidad.
El barrio ha desarrollado con el correr de los años en un centro comercial paralelo y casi
independiente del de la ciudad. Se ubica sobre calle 12 de Octubre, como en las más
variados rubros, y es un sitio de paso obligado en los paseos de los miembros de dicha
comunidad. El uso del tiempo de ocio se difieren en funciones y actividades básicas
según el componente generacional del grupo. La mayor parte de este es dedicado al
encuentro con la familia y la organización de las festividades religiosas. La mayoría de
las generaciones han circunscrito su ámbito de acción exclusivamente al barrio. Desde
la tercera y cuarta generación, se han generado otros hábitos en la vida cotidiana y en el
tiempo libre. La integración de estas generaciones es importante en las instituciones que
cuenta la comunidad, ya que realizan reuniones y almuerzos para la solidaridad entre los
miembros de la comunidad. La mayoría de las generaciones jóvenes han incorporado
pautas recreativas, pero no las han substituido, ya que hay valores vinculados a la vida
familiar, la economía y la religión.

Conclusiones
El investigador de la identidad cultural y el turismo plantea un diagnóstico sobre la
situación de este fenómeno en función del hecho turístico o recreativo. Se observa una
escasez de bibliografía que analice la temática de la identidad cultural desde el punto de
vista turístico exclusivamente. Esto se analiza desde disciplinas como sociología,
psicología, antropología, y en muchas ocasiones desde la óptica del turismo.
La identidad cultural de un grupo es un fenómeno con un grado de complejidad elevado
desde el punto de vista analítico. Sin embargo, no es imposible lograr el momento de
poner en valor la identidad cultural de un grupo como atractivo turístico. En el caso de
la comunidad del puerto de Mar del Plata, es posible comprobar lo que se planteaba en
el marco teórico, acerca de la falsa "contraposición" entre lo global y lo local. Si bien la
ciudad de Mar del Plata no escapa al fenómeno de la globalización, no por lo ha
desaparecido el carácter particular de dicha colectividad.
La cultura y la identidad de un pueblo son factores dinámicos que se reconstruye día a
día, y pretender asociar dicha identidad a un momento histórico determinado es
absurdo. La identidad cultural como atractivo turístico y/o recreativo es un problema
que se plantea en el municipio y el turismo.
A partir de los últimos dos años, se observará una remota intención de "explotar"
turísticamente una parte de la comunidad, como la pesca artesanal. Esto puede llegar a
celebrar acuerdos de cooperación entre el municipio y la Sociedad de Patrones
Pescadores.
La propuesta de un museo es el último en el proceso de interpretación del identidad
cultural en el barrio de Mar del Plata. Se escrito como un centro de interpretación,
adecuado a las características topográficas del terreno. La guía especializada en todas
las etapas del recorrido es necesaria. La barrio tiene un potencial como atractivo
recreativo desde la identidad cultural, y se escrito en una propuesta para llevarlo a cabo.
Las líneas de acción incluyen revalorar los espacios, generar una estructura de
promoción, y tener una estructura de aprendizaje para aprender a los visitantes y generar
la motivación de su visita. La identidad cultural es un proceso dinámico y determinante
de la historia y tradición.

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