DE LOS EFECTOS DEL DERECHO

XII: LOS DISCURSOS Y SU EFICACIA:

El problema de la eficacia de las normas en la sociología jurídica se relaciona con la dificultad de

determinar si una conducta es efecto de un discurso. Para resolver esto, se necesitan convenciones
científicas que permitan atribuir la causa de la conducta a la compulsión generada por la norma o al
consenso del actor. Kelsen hablaba de la representación que el sujeto se hace de la norma como la
causa de la conducta, mientras que Weber hablaba de la orientación de la conducta por las normas.
Si la sociología jurídica acepta esta aproximación, difícilmente se diferenciará de la psicología
política, por lo que deberá utilizar métodos de investigación para establecer el vínculo causal entre
el discurso normativo, su impacto en la conciencia del ciudadano y las conductas observables de
este.

XIV. EFECTIVIDAD DE LAS NORMAS

Este fragmento de texto aborda la diferencia entre la efectividad y la eficacia de las normas legales.
La efectividad se refiere al cumplimiento de las normas, mientras que la eficacia se refiere a si se
logran los objetivos previstos por el legislador. Es posible que una norma sea efectiva pero ineficaz,
como en el caso de una penalización del aborto que no logra suprimir esa práctica. También es
posible que una norma sea inefectiva pero eficaz, como en el caso de las normas que obligan al
policía de tránsito a detener el vehículo de los infractores, que en realidad fomentan la corrupción
policial.

El autor distingue dos aspectos de la efectividad: el cumplimiento por parte de los ciudadanos y la
aplicación por parte de los funcionarios. En el primer caso, el cumplimiento puede darse por
consenso o por temor al castigo. En el segundo caso, se distingue entre la aplicación formal y la
aplicación material de las normas.

Finalmente, el autor concluye que la aplicación material de las normas es más efectiva que la
aplicación formal, ya que en el primer caso los funcionarios son celosos defensores de la legalidad y
logran reprimir las conductas prohibidas, mientras que en el segundo caso la aplicación de las
normas es solo formal y no tiene una significación real.

XV. EL ESTUDIO DE LA EFECTIVIDAD DE LA LEY POLITICA.

En este texto, el autor critica la idea de que las ciencias jurídicas son apolíticas y utiliza la sociología
jurídica como ejemplo para demostrar que cualquier interpretación de la ley o de la conducta en
relación con la ley es en sí misma un acto político. El autor argumenta que establecer que una
conducta es aplicación de la ley implica hacer un juicio acerca de si el individuo que produjo esa
conducta es el funcionario señalado como tal por la norma, lo que es en sí mismo un acto de
interpretación y, por lo tanto, un acto político. Además, el autor utiliza el ejemplo del asalto al
palacio de justicia de Bogotá para ilustrar que incluso determinar si una acción es efectiva o no en
relación con la ley es un acto político. En resumen, el autor sugiere que las ciencias jurídicas no son
apolíticas y que cualquier interpretación de la ley o de la conducta en relación con la ley es un acto
político.
XVI. EFICACIA DE LAS NORMAS:

En este texto se discute la definición de eficacia en relación con los objetivos de las normas y los
objetivos políticos del grupo en el poder. La eficacia puede referirse a las intenciones subjetivas del
legislador o a los efectos u objetivos de las normas más allá de la voluntad personal de los individuos
que participan en su formulación. Se distingue entre eficacia subjetiva y eficacia objetiva, y se
discute la necesidad de establecer funciones objetivas de las normas para poder evaluar su eficacia
en este sentido. Se sugiere que la eficacia objetiva implica la posibilidad de que la norma produzca
efectos no previstos o no confesados por el legislador, y que su evaluación debe tener en cuenta
diferentes perspectivas sociales. En definitiva, el autor plantea la importancia de estudiar la eficacia
de las normas de manera objetiva y crítica para evitar una apología del gobierno.

XVII. LA EFECTIVIDAD COMO APLICACIÓN Y COMO CREACIÓN DE DERECHO:

El texto plantea la dificultad que existe para estudiar la efectividad de la ley en el tiempo, ya que las
normas tienen un tiempo de validez determinado y pueden hacer obligatoria una conducta que
necesita cierto tiempo para realizarse. El sociólogo debe definir los límites de su investigación y el
significado que dará a las comprobaciones de distinto grado de efectividad en distintos momentos.
Además, el tiempo ofrece un problema adicional en el caso de normas que obligan a mantener
ciertas conductas durante cierto tiempo, ya que un estudio podría arrojar como resultado que los
obligados sólo obedecen esas normas en ciertas ocasiones. En resumen, el tiempo es un factor clave
en el estudio de la efectividad de la ley y el sociólogo debe considerar las distintas variables que
intervienen en su aplicación.

XX. EL GRADO DE EFECTIVIDAD:

En primer lugar, no hay un concepto unánimemente aceptado sobre la efectividad total de una
norma. El problema de los grados de efectividad es complejo y puede haber distintas variaciones en
la obediencia y aplicación de las sanciones. Por ejemplo, una norma puede ser obedecida en un 60%
de los casos, pero aplicada la sanción en el 100%, o puede ser obedecida en el 60% pero aplicada la
sanción solo en el 70% de los casos presentados ante la autoridad. El grado de efectividad de las
normas aún no es una ciencia constituida.

XXI. EFICACIA Y HEGEMONÍA:

En resumen, el tema de la eficacia de las normas es complejo y no existe un concepto

unánimemente aceptado sobre lo que es una norma totalmente efectiva. El problema del grado de
efectividad de las normas se complica aún más al considerar diferentes variables como la
desobediencia, la aplicación y el cumplimiento de la conducta obligatoria. Además, la sociología
jurídica se ocupa de estudiar la hegemonía que mantiene o no un grupo en el poder a través de la
efectividad de las normas, lo que la convierte en una de las ciencias políticas más importantes para
el estudio empírico de este fenómeno.