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UNIVERSIDAD ALFA Y OMEGA

COMPRAS, ABASTECIMIENTO Y SERVICIO

MAESTRÍA EN ADMINISTRACIÓN Y ALTA DIRECCIÓN

REPORTE
TEMA: SÍNTESIS DE LECTURA

P R E S E N T A:
LUIS ENRIQUE OLÁN HERRERA

CATEDRATICO:
DAAD Juan Luis Ramos Martínez

VILLAHERMOSA, TABASCO, 31 DE AGOSTO 2023


La importancia de los valores

En las organizaciones, los valores permiten una interacción armónica entre los miembros y facilitan
la consecución de objetivos. En una comunidad, las normas compartidas son esenciales para un
funcionamiento satisfactorio. Cuando hay falta de valores compartidos, puede haber incoherencia
entre palabras y acciones, como cuando líderes insultan a quienes difieren en opiniones mientras se
intenta enseñar tolerancia a los hijos.
La promoción de valores como la tolerancia y el respeto se vuelve difícil si no hay ejemplos
coherentes en la sociedad, como líderes que no los practican. Los principios compartidos son
fundamentales para el funcionamiento adecuado de comunidades como la familia, el trabajo y la
sociedad en general. La cultura organizacional de una empresa también se basa en valores,
influyendo en actitudes y comportamientos de los empleados. Si los valores no son comunes, el
ambiente laboral puede volverse tenso y los clientes pueden verse afectados.
En una empresa, los valores deben ser definidos, promovidos y divulgados constantemente para que
los empleados comprendan su significado y los apliquen en su trabajo diario. En resumen, los valores
desempeñan un papel fundamental en la cohesión social, el funcionamiento de organizaciones y en
la forma en que las personas interactúan en diferentes contextos.

Para qué sirven los valores

Los valores sirven como guía para nuestro comportamiento diario y forman parte de nuestra
identidad. Orientan nuestras acciones en casa, en el trabajo y en cualquier ámbito de nuestras vidas.
Actúan como una brújula que nos indica cómo comportarnos en diferentes situaciones,
independientemente de deseos o impulsos. Los valores proporcionan coherencia en nuestras
acciones y decisiones.
Por ejemplo, la cortesía y la consideración hacia los demás son valores que influyen en si cedemos o
no nuestro asiento en el transporte público a una mujer embarazada. Los valores son la base de
nuestras acciones y nos hacen sentir bien con nuestras decisiones, ya que actuamos por convicción
personal, sin importar la opinión de los demás.
Cuando seguimos valores como la honestidad, lo hacemos porque creemos en el respeto por la
propiedad de otros, no porque nos estén observando. Los valores nos permiten proceder según lo
que consideramos correcto o incorrecto para nosotros mismos, sin esperar recompensas externas, lo
que resulta en satisfacción personal y coherencia en nuestra personalidad en diferentes situaciones.
En roles de liderazgo, la práctica consistente de valores es fundamental para transmitir su significado
concreto en términos de comportamiento y fomentar principios de conducta en otros, como hijos,
alumnos o empleados. En resumen, los valores son pilares fundamentales que guían nuestras
acciones, independientemente de las circunstancias, y contribuyen a una vida coherente y
satisfactoria.

Cómo son utilices en las organizaciones

Los valores juegan un papel esencial en la eficiencia y efectividad de las organizaciones cuando
tienen un significado común para la mayoría de sus miembros, son compartidos, practicados por los
líderes y recordados diariamente. En este contexto, los valores permiten a los miembros de la
organización relacionarse mejor, ser más coordinados, previsivos en su planificación y lograr
objetivos con eficacia.
Los valores organizacionales también facilitan que los integrantes tengan una dirección y propósito
claros a corto, mediano y largo plazo. Esto conduce a un aumento de la creatividad y eficacia en la
resolución de desafíos tácticos y estratégicos. Como resultado, los miembros se sienten realizados,
valoran sus propios comportamientos y están más comprometidos con la organización.
En organizaciones con valores compartidos, los integrantes son más comprometidos, cumplen mejor
con sus responsabilidades y contribuyen con mayor creatividad, ya que sienten realización personal
a través de sus acciones. Los valores organizacionales también forman la base de la cultura de la
organización, lo que promueve la integración y el crecimiento personal de sus miembros.
Sin embargo, la coherencia entre lo que se dice y se hace en una organización es lo que determina la
calidad del desempeño y la armonía. Por tanto, invertir en una cultura basada en valores
compartidos, practicados diariamente por la mayoría, es altamente beneficioso para cualquier
organización.

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