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Universidad Nacional de Salta

Escuela de Letras
Prácticas críticas
2023 - 2° cuatrimestre
Lic. Juan Manuel Díaz Pas (Aux. Doc. 1° Dedic.
Equipo de semiexclusiva)
cátedra

Estudiant Anthony Valdivia Valencia LU/DNI


e 70817643
Título del TRABAJO PRÁCTICO N° 2: Temporalidades indígenas Par lectora:
trabajo en el Gran Chaco
Fecha de lunes 04 de septiembre presencial impresa o Nota:
entrega manuscrita en la clase

Objetivos:

 Iniciar el recorrido por el corpus literario de autoría indígena


 Identificar tópicos y estructuras narrativas que configuran temporalidades diversas y
heterogéneas
 Redactar un comentario crítico del texto “El sueño de Nifwotaj” de Díaz y Villagra

ACTIVIDADES:

1. Considere los apuntes de clase para identificar algunos núcleos semánticos de las
literaturas indígenas contemporáneas presentes en “El sueño de Nifwotaj” de Díaz y
Villagra (oralidad y escritura; traducción cultural y lingüística; relación con otros
convivientes “más que humanos”; genocidio fundante; relevo generacional;
futurancestralidad).
2. Redacte un breve comentario en donde recupere los aspectos anteriores, siempre y
cuando sean pertinentes para la lectura, y analice ejemplos extraídos del cuento.
LA MEMORIA VIVA: CUENTOS WICHÍS EN EL SIGLO XXI
Wichí - memoria - herencia – saber – experiencia
Los orígenes de nuestra identidad como sujetos latinoamericanos deben remitirse al pasado
indígena que recorre nuestras venas. Este pasado es inevitable y sobre él gravitan los pilares
que sostienen nuestro presente. En el caso de la Argentina, debemos pensar en la cultura
wichí asentada en el norte de su territorio, específicamente en las provincias de Formosa,
Chaco, Salta y el departamento boliviano de Tarija. Como muchas de las producciones
artísticas prehispánicas, fue la oralidad el principal soporte discursivo que permitió la
transmisión y conservación de sus ideas —ya que la tecnología de la escritura fue poco o
nulamente desarrollada por estas comunidades—. Es por esa razón que muchas historias y
expresiones artísticas indígenas fueron desapareciendo, ocultas bajo la sombra de la
escritura que era un instrumento más de dominación colonizadora. Ante este panorama, es
importante contar con recuperaciones de la memoria wichí, como el cuento «El sueño de
Nifwotaj», ya que nos permite acceder al mundo simbólico indígena contemporáneo e
identificar en ellos sus núcleos semánticos más relevantes. En el presente trabajo,
analizaremos el tema de la futurancestralidad y el relevo generacional en las acciones y
motivaciones principales del protagonista del cuento; así como el papel de la memoria, la
herencia, el saber y la experiencia que se manifiestan a lo largo de la narración.
En el primer párrafo del cuento, el narrador nos plantea el móvil principal de la historia:
«Nifwotaj (…) sueña ser un gran melero». Hay aquí una aspiración por alcanzar el saber.
Esta actividad, además, es muy importante en su comunidad, por lo que representa un logro
relevante. Este saber, de igual forma, otorga un «ser» a quien lo posee; es decir, le da un rol
distintivo. A continuación, después de este marco, el texto nos indica el inicio del texto a
partir de dos títulos: RASTRO DEL PASADO, DULCE PRESENTE. EL MELERO. En
este enunciado, se nos introduce la idea de un tiempo pretérito, el cual tiene cierta
repercusión en el presente mediante la figura del «rastro»; además, el «dulce presente»
podemos entenderlo de dos maneras: dulce entendido como una actualidad benefactora y
agradable, y también relacionada con el oficio de recolectar miel. En el primer párrafo del
cuento se nos presenta la figura del melero experimentado y conocedor no solo de su oficio,
sino también de una multiplicidad de actividades que refuerzan la idea del «saber». Este
saber especializado remarca la importancia que representa el pasado ancestral en la vida
actual. De igual manera, los actos como «buscar chaguar», «recolectar frutos», «reconocer
lugares para pescar» o «encontrar miel» se logran mediante la acumulación de la
experiencia, y no mediante un ejercicio intelectual. Son actividades que logran dominarse
después de un ejercicio repetitivo, constante y memorioso. Saber y experiencia son
presentadas en esta primera parte.

En el segundo párrafo, el narrador nos sitúa en un día específico a través de un marcador


temporal (hoy). El hecho de indicar la exactitud de una fecha nos muestra que para el
protagonista ese día será de vital importancia. Posteriormente, se nos presenta al primer
hijo, quien ocupa el puesto de heredero principal, por lo que los conocimientos del padre
serán transmitidos a él. En esta parte del cuento se introduce el verbo «transformar», que es
lo que la ancestralidad produce en las personas que asumen su influencia: una
transformación. La futurancestralidad construye otro futuro, pero también otra persona; en
este caso, «el mejor melero de la comunidad».

En el siguiente párrafo, el narrador nos muestra pares semánticos a través de la figura de


padre e hijo como experiencia e inexperiencia, conocimiento e ignorancia. El pequeño
Nifwotaj sigue los pasos de su padre para encontrar la miel, y mientras lo hace, piensa en
comparaciones y aspiraciones. La brecha que existe entre ambos personajes es muy grande
y en ese momento parece infranqueable. El padre representa la memoria viva del pueblo, ya
que en su ser se contienen el tiempo y la experiencia; es decir: el pasado. Así también, es
aquí cuando el cuento nos sitúa en un espacio delimitado: el territorio chaqueño; por lo que
podemos construir un sentido de pertenencia entre los protagonistas y la naturaleza que los
circunda. En el siguiente párrafo, se continúa con el ejercicio de búsqueda de la miel y
transformación en melero, solo que aquí se mencionan otras habilidades que el pequeño
Nifwotaj ya ha dominado. El narrador nos dice: «Deben prender fuego y sabe que su padre
le dirá que sea él quien lo haga». Y después nos remarca: «Ahora él es un especialista en
encender el fuego porque su padre se lo enseñó». Aquí confluyen los conceptos más
relevantes considerados para este análisis: memoria, herencia, saber y experiencia.
Nifwotaj, en el acto de saber prender el fuego, encarna la memoria de su padre, así como la
herencia de su conocimiento y la experiencia que distintas salidas anteriores le han
permitido dominar ese acto.

En el último párrafo, el narrador nos indica que ya se ha producido la transformación


producida por la ancestralidad. El futuro modificado por el pasado se expresa de la
siguiente forma: «Nifwotaj regresa haciendo pasos más grandes, más sabio, más adulto,
más hombre, con la esperanza de algún día ser como su padre». La «esperanza» nos indica
un tiempo ulterior, que todavía no existe, pero que está por venir. De igual manera, la
ancestralidad cobra mayor importancia si se tiene en cuenta el compromiso social que
existe en Nifwotaj, ya que él desea seguir los pasos de su padre para «cumplir con su deber
de ser un hombre Wikyi».

Después de haber leído este relato ancestral wichí, se ha podido identificar conceptos
relevantes para entender dos núcleos semánticos más importantes en las literaturas
indígenas contemporáneas: la ancestralidad y el relevo generacional. Niwfotaj es un
pequeño niño wichí que representa la inexperiencia y el desconocimiento, pero que siente
un gran deseo por alcanzar el saber que el pasado y la memoria contienen. Finalmente, es a
través de la experiencia que reafirma su futuro y la importancia que tendrá en su
comunidad.

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