Está en la página 1de 85

Historia de América.

Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

1. CONSIDERACIONES GEOHISTÓRICAS
1. ¿Cómo y desde dónde aprender a pensar la historia de América?
La perspectiva desde la que se estudia la Historia de América es de vital importancia, pues la
percepción de este estudio es diferente, por ejemplo, para un indígena de latinoamérica que para un
español (descendientes de invadidos vs descendientes de invasores).
La «conquista» de América podría definirse mejor como un proceso, no de conquista propiamente,
sino de invasión, con ciertas colaboraciones por parte del mundo indígena.

2. Periodización y fuentes
La periodización histórica para América se diferencia de la que suele usarse en Europa. De esta
manera, podemos hablar de los períodos Paleoindio, Arcaico, Formativo, Clásico y Postclásico.

3. Comprensión geohistórica del acceso al territorio


La Geografía es un condicionante muy relevante para entender dónde se ubicaron las sociedades
originarias de América, cómo se relacionaban con el medio, si guardaban comunicabilidad entre
ellas, etc.

3.1. Vacío y comunicabilidad de los espacios marítimos


El continente americano está aislado del resto de continentes por el Pacífico y el Atlántico, lo que,
junto con la inexistencia de archipiélagos en los que hacer escala (a excepción de las Azores o las
Canarias) impidió su conocimiento por parte del resto del mundo hasta que no existieron las
condiciones técnicas necesarias en cuanto a navegación en Europa.
Las personas que llegaron a América entraron por el Estrecho de Bering desde Asia, aunque las
últimas teorías afirman que pudieron llegar también de las islas del Pacífico. Una vez allí, dado el
aislamiento del territorio, estas comunidades americanas se desarrollaron ajenas a las influencias
europeas, africanas o asiáticas.

BARRERAS NATURALES
Dentro de América, podemos destacar varias barreras naturales que dificultaban la comunicabilidad
y habitabilidad.
Hablamos de zonas como el Amazonas, donde se desarrollaron amplias culturas mayormente
nómadas; la barrera orográfica de los Andes, que recoge la cultura Tihuanaco, a una gran altitud; o
la del desierto del norte de Chile. También hay desiertos en México, donde se desarrolla la gran
cultura Mexica, mientras que encontramos climas subtropicales en el área Caribe, que está
formada por las Antillas mayores (Cuba, La Española, Jamaica y Puerto Rico) y menores. Las
diferencias térmicas también son notables en zonas como Chile. En cuanto a los ríos, los del
Amazonas son navegables y permiten la comunicabilidad, mientras que los de Costa Rica y Panamá
no lo son. Las zonas de manglares dificultan la comunicabilidad.
Que América tenga esta heterogeneidad y aislamiento, no sólo con el resto de continentes, sino
también en su interior, ocasionó que las comunidades desarrolladas fueran muy diferentes. Cabe
destacar cómo el ser humano fue capaz de adaptarse a todos estos ambientes, difíciles de habitar. La
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

falta de comunicabilidad aparente podría no haber existido, dadas ciertas fuentes arqueológicas
que puedan rebatirla, no habiendo quizá una comunicación fluida entre lugares muy lejanos, pero sí
cierta relación (Piedra Spondylus).

3.2. La tiranía del espacio y la distancia


Por otro lado, América tiene como problema el espacio y la distancia, contando con unos
20.446.080 km2. Se trata, pues, de un espacio enorme, mucho mayor de lo que pueden ser otros
conjuntos geográficos como Asia o Europa, si bien, dados sus diversificadores orográficos,
hablamos de un territorio que no es homogéneo ni compacto, surgiendo una gran diversidad de
ecosistemas y paisajes que abarcan todos los tipos de clima (manglares, paisajes subtropicales, salar
de altura…).
Dicho esto, diferenciamos dos grandes masas continentales: América del Norte y América del
Sur, conectadas por Centroamérica. Encontramos cinco grandes regiones culturales:
• Mesoamérica
• El Caribe
• Las tierras altas de Centroamérica
• Los Andes
• La región amazónica
El territorio no fue abarcado como una unidad antes de la llegada de los europeos, de manera que
existían diversos paisajes humanos aislados unos de otros por factores como la distancia o las
barreras orográficas, climáticas y geográfico-físicas. Además, los contactos no eran motivados
desde un punto de vista económico, ya que salvo la sal, algunos metales, piedras preciosas y
artículos ceremoniales, no había grandes estímulos para intercambiar productos.
No obstante, no podemos hablar de un desconocimiento absoluto de unos grupos con otros, pues sí
parece que hubo cierto movimiento. Por ejemplo, en las yungas (valles del norte y centro de la
costa peruana), el inca tenía intercambios para consumir hoja de coca con otras comunidades.
Estas comunicaciones debían realizarse por vías de paso naturales que les permitieran superar las
limitaciones del terreno, como los grandes ríos navegables, los valles de comunicación entre tierras
altas, las corrientes marinas, los corredores costeros o los espacios litorales e interiores, así como el
istmo centroamericano que conectaba el sur del norte del continente. Destacan en este aspecto la
corriente fría de Humboldt, que ayudaba a la navegación desde el sur de Sudamérica hacia el norte
de Perú.
En muchas ocasiones, un aliciente para sobrepasar el problema del espacio y la distancia era el
encuentro con lo sagrado, realizando grandes viajes místicos hacia sitios ceremoniales. En la región
andina, sin ir más lejos, podían recorrerse miles de kilómetros con este fin, superando las trabas
orográficas de la zona. Incluso se ha descubierto en un volcán de Santiago de Chile la momia de un
niño que podría indicar que se encontraba en un centro ceremonial. Otros destacables son los apus,
Copacabana, el centro de la diosa madre Tonantzin (en el santuario de la Virgen de Guadalupe),
etc. En estos lugares se hacían sacrificios al sol, para que lloviera o dejara de llover, etc.

3.3. Regiones ecológicas y ecología humana


Los europeos recién llegados a América tuvieron que desarrollar una nueva concepción del espacio
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

al ver estos problemas. Pronto verán que las distancias de este continente no pueden medirse en
leguas, sino en días, semanas o meses, y que hay altitudes de hasta 7000m, nada comunes en su
lugar de origen.
Estos conquistadores desembarcaron, en primer lugar en el mar Caribe, al que tomaron como el
Mediterráneo americano, un espacio accesible. A diferencia de ellos, el continente, al que entrarán
por zonas como Florida o Yucatán, sería más difícil de atravesar, dada la variedad de climas y
paisajes con los que se encontrarían, destacando:
➢ Clima subtropical: Clima muy húmedo y con vegetación muy densa, siendo poco
accesible. Otros problemas que acarrearían serían los insectos, como los mosquitos, que
podían transmitir enfermedades como la malaria, luego llevada por los africanos. Ejemplos
de clima subtropical serían Florida o Yucatán.
➢ Zonas tropicales: Estos paisajes se despliegan entre el Trópico de Cáncer y el de
Capricornio, en sectores mexicanos, centroamericanos, antillanos y gran parte de
Sudamérica.
➢ Desiertos: Estos espacios no fueron colonizados hasta que los conquistadores no se dieron
cuenta de la existencia de minas de oro y plata, las cuales harían que fuera rentable vivir allí
pese a los escasos recursos. Como ejemplos, tenemos el desierto de Sinaloa (en el que había
indígenas nómadas), el de Sechura (Perú) o el de Atacama (Chile). Los Andes, Mesoamérica
y Sudamérica.
➢ Cordilleras de gran altitud: Prefirieron permanecer en otras zonas, a ser posible, como
Ciudad de México, localizada en una meseta de menor altitud.
➢ Bosques densos: América templada.
➢ Espacios geográficos transicionales: Allí pueden prosperar especies pertenecientes a
climas tropicales y templados. Son las tierras piedemontanas y altas de México, América
Central y América andina septentrional y ecuatorial, así como el sur brasileño, paraguayo y
noroeste argentino.
➢ Paisajes neárticos y subantárticos: Neárticos en el norte y centro de México; subantárticos
en el sur de Argentina y Chile. Ambientes fríos de difícil habitabilidad.
En todas estas zonas, tuvieron que enfrentarse a desastres naturales, como terremotos, volcanes,
torrenteras… Asimismo, se encontraron con fauna y flora desconocidas, de las cuales pudieron
aprovecharse en algunas ocasiones. Un ejemplo sería la quínoa, proveniente de Perú, o la hoja de
coca, de la que no se empezaría a extraer cocaína hasta el siglo XIX. Esta última resultó ser de gran
efectividad, ya que la hoja de coca, cultivada en las yungas, servía como estímulo para trabajar en
las minas sin cansarse, ya que quita el hambre y la fatiga. No tiene sabor y es diurética, por lo que
es muy saludable tomarla, especialmente en grandes altitudes. Otros productos, de origen mexicano,
sería el cacao o el tomate.
Esta variedad de ecosistemas del continente americano hará que haya una falta de comunicabilidad
también entre los asentamientos de los colonizadores. En menos de 50 años, se conquistan más de
2.000.000 de km2, habiendo, pues, una gran distancia entre los distintos puntos de asentamiento,
como por ejemplo Lima y Cusco; o Valdivia (tres veces arrasada por los indígenas y reconstruida) y
Santiago de Chile.
Además, al darse cuenta de la vasta extensión del territorio, tendrán una obsesión por encontrar un
paso para llegar hasta Oriente, su objetivo inicial, si bien esto no sucederá hasta descubrir el Cabo
de Hornos. Dicho accidente será atravesado por Magallanes Elcano en 1520, lo que supone una
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

referencia geohistórica, aunque el uso de esta vía, que suele tener tormentas y corrientes muy
fuertes en la zona, no se normalizará hasta tiempo después. Hasta ese momento, el tan deseado paso
no será útil, teniendo que recurrir al estrecho de Panamá, por el Camino de las Tres Cruces.
Además, una opción para bajar la mercancía de oro y plata desde Potosí era llevarla a lomo de indio
o de mula hasta Buenos Aires.

4. El valor de la toponimia. De Abya-Yala al nombre femenino: América


4.1. De Abya-Yala al nombre femenino: América
El nombre de «América» fue dado por Martin Waldseemüller, cartógrafo alemán que en 1507
publicó una obra con un mapamundi que incluía, por primera vez, este territorio. Eligió este nombre
en honor a Américo Vespucio (nacido en Florencia, aunque tiempo después se nacionalizó
español), quien fue el primero en considerar que América se trataba de un nuevo continente y no de
las Indias, después de varios viajes al lugar.
No obstante, debemos ser conscientes de que el nombre de este territorio no es una invención
europea. Antes de que llegaran los colonizadores, los indígenas eran conscientes de la tierra en que
vivían, llamándola Abya-Yala en muchos casos. Los chichimecos de México, por otro lado, en su
lengua (nahuatl) lo llamaban Cem Anahauac («Lo uno entre dos aguas»).
De esta manera, debemos ser conscientes de que hay toda una corriente historiográfica que defiende
la vuelta al término de Abya-Yala, con el resurgir del movimiento indigenista, que también prefiere
hablar de latinoamérica sobre hispanoamérica.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

2. EL ESPACIO CARIBE
1. Introducción. Los españoles le asignan un nombre
Para analizar a las sociedades que los europeos encuentran en América, se tienen en cuenta dos
criterios. El primero es la capacidad del ser humano para actuar sobre la naturaleza; y el segundo, el
grado de diferenciación social al interior de esa sociedad (igualitaria, desigualitaria, jerarquizada...).
A partir de estos criterios, se vio que, en América, había al menos 3 niveles de complejidad social:
tribal, cacicazgo y civilización o altas culturas.
• Tribal:
◦ Se limita a la depredación y captación para asegurar la subsistencia. Cultivo de la roza.
◦ La ciudad territorial es la aldea y el grupo doméstico es la base de la producción y el
consumo, pudiendo estar formada por una familia extensa.
◦ Sin derechos a la propiedad privada, aunque sí al uso comunal de la tierra.
◦ En la composición del grupo priman los lazos de parentesco y la diferenciación social se
limita al sexo y a la edad.
◦ Sociedad no permanente, sino que va rotando la jefatura.
◦ Sin fronteras fijas, se mueven de un sitio a otro, sin ciudades.
• Cacicazgo:
◦ Estadio intermedio entre lo tribal y las altas culturas.
◦ Se percibe mayor diferenciación social.
◦ Extensión territorial variable, con amplitud suficiente como para desarrollar la
agricultura, más extensa que en la tribu.
◦ Aparece la figura del cacique, que dirige al grupo, organiza la producción, controla los
recursos y lo que se tiene que trabajar en las unidades domésticas, las actividades
guerreras, encabeza las ceremonias, etc.
◦ La diferenciación social sigue siendo mínima, aunque la consideración de las mujeres y
los menores es inferior a los varones adultos, aunque habrá mujeres que lleguen a ser
cacicas (se hereda el cacicazgo por línea materna), al quedarse viudas o sin hombre que
pueda dirigir (p.e. Anacaona).
◦ También hay cautivos o esclavos.
• Altas culturas
◦ Se denominan así a los grupos humanos que presentan una mayor complejidad cultural y
organización del trabajo.
◦ Especialistas en las ramas de producción, tareas de gobierno, etc. La estructura social
está jerarquizada.
◦ Incas y Aztecas.
◦ La defensa de los intereses comunes y los privilegios son los que rigen los altos puestos
diferenciados.
◦ Sistemas patriarcalistas en los que había una división del trabajo según los roles según el
determinismo biológico.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

◦ Gobierno estatal que establece códigos normativos y vigilan que se cumplen. Se reserva
el poder de la fuerza y las ceremonias religiosas.
◦ La base económica es la agricultura intensiva con tecnología bastante avanzada.
◦ Cuanto más conexión de los ecosistemas, mayor la supervivencia del ser humano y el
crecimiento demográfico. Tras ello, empieza una estructura política y social ordenada y
reglamentada, y aparecen los corpus normativos.
◦ Surgen las ciudades como lugar de intercambio por oposición al campo, separación clara
de ambos.
◦ El paso de un estado caciquil a una alta cultural puede llevar siglos (aunque en la región
andina fue rápido) y tiene que ver con el control de los ecosistemas, tener la máxima
capacidad de acceso a los nichos ecológicos
Las tres van a coexistir. Cuando llegan los europeos, se encuentran el máximo desarrollo de algunos
como los Aztecas, los Incas, los Arahuacos o en los Caribes. Otro caso distinto serían los Mayas,
que en el siglo XVI estarán en un proceso de involución.
Los tres niveles estaban presentes cuando llegan los españoles en 1492. Las sociedades originarias
accedieron por dos rutas: el norte, y, más tarde, el sur, por el océano Pacífico. Desde el norte, los
primeros grupos se diversifican hacia el sur y se van asentando para desarrollar las culturas que
luego encontrarán los europeos.
En la región mesoamericana, en el 2500 antes de nuestra era empiezan a desarrollarse multitud de
culturas. Estas irán evolucionando hasta llegar a dos grandes altas culturas. Es destacable el hecho
de que los españoles tardaron 20 años en acabar con las culturas tribales y cacicales, y sólo 3 en
eliminar el Imperio Inca, que podía llegar a tener muchos más soldados. Esto podría tener que ver
con la concentración del poder en un sólo jefe, de forma que acabando con este, se convence al
resto de la población de que deje de luchar.

2. La región Caribe: unidad y diversidad


2.1. Territorios insulares y continentales. Espacio histórico y cultural independiente.
El espacio Caribe está compuesto por una parte insular y una continental. La insular incluye las
Antillas Mayores (La Española, Cuba, Puerto Rico y Jamaica) y las Antillas Menores, el arco de
islas que van desde Puerto Rico hasta las costas venezolanas. Estas se subdividen, por un lado, en
las islas de Sotavento, al norte, y las de Barlovento, al sur; y en las islas próximas al continente.
La parte continental estaría constituida por la zona septentrional de Colombia, Venezuela y demás
territorios bañados por el Mar Caribe. Estas particularidades harán que el Caribe, pese a encontrarse
entre las grandes masas continentales de América del Sur y del Norte, desarrolle características
históricas y culturales independientes.

2.2. Unidad. Un mar interior: el Caribe. Espacio de relación y migración.


El marco de referencia que une y separa la región será el mar interior al que los españoles
denominaron Caribe por los Caribes que habitaban las Antillas Menores. Por ese mar los diferentes
grupos étnicos navegaron, intercambiaron productos y se relacionaron de forma pacífica o violenta.
El éxito de estos grupos tribales y cacicales es que dominaron el Caribe y los ecosistemas en los que
vivían, los cuales podían incluir, hasta la línea de costa, desiertos, selvas tropicales, llanuras
tropicales o abruptas cordilleras.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

2.3. Diversidad y complementariedad ecológicas: ecosistemas. Bosque tropical húmedo y el


manglar
La región es muy húmeda y cálida debido a los vientos alisios, lo que provoca el surgimiento de los
ecosistemas principales: el bosque tropical húmedo y los manglares.
El bosque tropical suele llegar hasta la costa, y su crecimiento es permitido por la gran humedad de
estas zonas. Es uno de los principales ecosistemas del Caribe, ya que de ahí conseguían animales
para la caza y plantas (quema de rozas y agricultura). Alcanza prácticamente todas las islas y las
costas de las zonas continentales.
Los manglares están en las zonas subtropicales, hundiendo las raíces en la tierra con aguas dulces o
saladas, en las desembocaduras de los ríos, ofreciendo una gran diversidad de crustáceos y
moluscos. Poder acceder a estos dos ecosistemas ofrecía una gran diversidad de recursos a una
sociedad que no tenía por qué ser compleja, dada su accesibilidad.
Las sociedades originarias, por tanto, estaban acostumbradas a este medio, no como los europeos,
que se encontraron ante un paisaje completamente distinto al que solían ver.

3. Las sociedades étnicas caribeñas se fueron asentando a través de procesos migratorios.


Causas que llevaron a los neoindios (etnias arahuaca y caribe) a iniciar empresas migratorias.
Se estima que las migraciones, en nuestra era, fueron protagonizados por lo que se conoce como
neoindios, que incluían dos grupos étnicos que llegaron al Caribe en dos oleadas: los arahuacos y
los caribes. Los primeros ocuparon las Antillas Mayores, mientras que los segundos llegaron
después a las Antillas Menores y costas del este venezolano.
Ambos proceden del norte y noreste de América del Sur, aunque poseen notables diferencias.

4. Espacios culturales caribeños a fines del siglo XV. Insulares: Arahuacano y Caribe.
Continentales.
4.1. Arahuacos
Procedían del Amazonas medio e inferior, pasando por el Orinoco y subiendo hasta la costa este de
Venezuela para llegar a las Antillas Mayores. Primero se establecieron en Puerto Rico, desde donde
pasaron a La Española, sedentarizándose allí los grupos más numerosos. Luego, desde esta isla, se
dispersaron hacia Cuba y Jamaica. Primero buscaron las costas, pero después se adentraron en las
selvas, valles y sabanas del interior de las islas, donde pudieron desarrollar la agricultura.
Las razones de esta migración se debe a la presión por parte de otros grupos del sur selvático y a la
movilidad a la que obligaba su cultivo de tala y roza, que consistía en quemar un trozo de selva
para plantar en la capa de ceniza que quedaba. No obstante, el suelo de la selva es poco fértil, y al
poco tiempo debe buscarse otra zona para repetir esta acción.
Así pues, se encontraban en búsqueda de tierras que les permitiese cultivar y almacenar, lo que les
haría pasar de un estado tribal a caciquil. Será en las Antillas Mayores (La Española) donde
consigan una sedentarización efectiva, con la aplicación de la técnica de los conucos.
Los conucos constituyen una forma sostenible de cultivar. Consistía en amontonar humus, hacer
agujeros para que la tierra respirara y cultivar en los montículos. A ambos lados, se ponen unos
límites para que la tierra no se desparrame. Luego se remueve el suelo con una profundidad de unos
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

15 cm, se van cultivando las plantas con fertilización de animales o de la propia tierra. Además, se
plantan diferentes especies en el mismo sitio (carahotas o frijoles negros, luego maíz, ñame o yuca,
plátanos y otras plantas más permanentes, frutales…).
La yuca puede ser dulce o amarga. La amarga es venenosa. Ambas son la base alimenticia de la
dieta de estas comunidades, así como el cazabe o la chicha (se hace con maíz). La chicha se
fermenta con la saliva.
El conuco fue el máximo nivel de control de nicho ecológico que llevaron a cabo los arahuacos en
las Antillas Mayores. Ello, sumado a lo que podían traer de las selvas tropicales, como monos,
crustáceos y otros animales, les proporcionaba suficientes nutrientes para sobrevivir y almacenar.
Los arahuacos, distribuidos en grupos familiares extensos y con poblados que podían llegar a las
2000 personas, tenían como relaciones de producción la tierra extendida y trabajada como recursos
comunal, y no como individual. La fabricación de los conucos respondían a una división sexual y
jerarquizada del trabajo, que se aplicaba en mucho otros ámbitos. En este, pues, los hombres eran
los que montaban los conucos (además de cazar), pero eran ellas las que sembraban y deshierbaban.
Por otro lado, los cacicazgos debían haberse traspasado por vía materna, heredando por la madre
todo el poder político, religioso, económico y militar. Asimismo, el resto de la sociedad estaba
constituida por una aristocracia guerrera de taínos, unos sacerdotes (moján, mohanes) y una masa de
siervos llamados «naborías». Sus fronteras estaban bien delimitadas por sus tierras de cultivo.
En la producción artesanal, destacan utensilios domésticos (budares o plancha de cazabe), canoas
para transportar personas, intercambios comerciales y defensa. Su orfebrería en oro (machacaban
este mineral con piedras) fue la obsesión de los castellanos, lo que produjo el asombro de los
arahuacos por su distinta forma de entender la riqueza.

4.2. Caribes
Las migraciones de los caribes fueron posteriores a las de los Arahuacos. Ejercieron una verdadera
invasión sobre ellos, de carácter más agresivo, provocando el desplazamiento de estas primeras
comunidades mediante el saqueo y el robo. Apenas contaban con técnicas de cultivo, por lo que se
les suele considerar tribales.
Se localizaron en las Antillas Menores, las costas orientales de Venezuela y la isla de Trinidad. En
las primeras oleadas se quedan en la zona continental y luego en unas segundas llegan a las islas.
No buscaban terrenos para cultivar, sino que iban siguiendo a los arahuacos para asaltarlos y
capturar los excedentes de producción y a las mujeres, que sabían plantar en los conucos, para que
cultivasen para ellos. Además, les permitían reproducirse sin ser endogámicos, si bien los hijos eran
legítimos dentro de la propia tribu. Cuando llegan los españoles, en los caribes se encuentran casas
de mujeres y casas de hombres, hablando lenguas diferentes (arahuaco y caribe).
La forma de relacionarse de los caribes con otras comunidades fue a través de la guerra. Los caribes
conocían el arco y la flecha y utilizaban los venenos de la selva y de los sapos, cosa que los
arahuacos no, ya que usaban la lanza. De esta manera, los arahuacos ganaban sólo si eran muy
superiores en número, si no, morían en cantidades inmensas al no ser guerreros.
La imagen que esta tribu dio a los españoles con sus costumbres guerreras y antropófagas, hizo
considerar a los españoles dos clases diferentes de indígenas:
a) «Indios de razón» → no ofrecían resistencia y eran dóciles, así que eran esclavizados y
repartidos entre los invasores. La mayoría de ellos morían por la explotación a la que se les
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

sometía y las nuevas enfermedades traídas de Europa contras las que no estaban
inmunizados.
b) «Caribes o indios de guerra» → eran considerados salvajes, antropófagos, dirigidos por el
diablo y hechiceros idólatras. Debían ser exterminados por su ferocidad.
Realmente, la clasificación sólo determinaba el modo en el que iban a morir, ya que el dominio de
los invasores llevó a todos a la extinción. Unos cincuenta años después de 1492, prácticamente la
totalidad de estos pueblos habían desaparecido. Sus orgullosos caciques habían sido asesinados, sus
conucos primero explotados por los últimos indígenas hasta su exterminio final y luego,
abandonados; las fértiles montañas explotadas para extraer maderas talando sus frondosos bosques;
y sus campos convertidos en cementerios, donde fueron enterrados más de dos millones de
cadáveres.

4.3. Continentales
En cuanto al Caribe continental, las sociedades se desarrollaron en la medida en que pudieron
adaptarse mejor con el medio y, sobre todo, alcanzar el manejo de ciertos cultivos.
Aunque hay desacuerdo entre los especialistas en cuanto a las primeras sociedades agrarias en estas
zonas continentales, está claro que algunas de ellas evolucionaron hacia formas de cacicazgo, que
manejaron simultáneamente los ecosistemas de la montaña tropical y de la costa, que establecieron
relaciones más o menos violentas de dominación sobre otros grupos cercanos y subordinados en un
estadio de evolución inferior, y que estuvieron permanentemente en guerra con otros cacicazgos
similares pero con los que, al mismo tiempo, mantuvieron fluidas relaciones de intercambio.

CULTURA ZENÚ
Entre las sabanas colombianas y la costa, en torno a los ríos Sinú y San Jorge, se extendió la
cultura Zenú. Ocupó las llanuras tropicales del Caribe, al oeste de la actual Cartagena de Indias,
combinando ciénagas, estuarios y sabanas. Se dividía en tres provincias que desarrollaban
actividades productivas y económicas complementarias: tubérculos, maíz, manufacturas, oro nativo,
caza, pesca y recolección. Sus jefes respectivos, siempre del mismo linaje, controlaban la
distribución.

CULTURA DE TAIRONA
Otro complejo cultural es el de Tairona. Situado en la costa caribe colombiana, en las alturas de la
Sierra Nevada de Santa Marta, produjo un importante desarrollo urbano único en toda la región.
Dada la diversidad de alturas, la zona presenta una gran variedad ecológica, desde los arenales
costeros hasta las nieves de altura. La región estuvo muy densamente poblada. Aún en nuestros
días, sus descendientes conservan buena parte de sus rasgos culturales.

AGRICULTURA Y ECONOMÍA: LOS CAMELLONES


En estas zonas de la actual costa colombiana, nos encontramos a estos grupos de mayor entidad
cultural y productividad agrícola, que habían desarrollado una red de canales y camellones de
cultivo. Los camellones son lomadas de tierra entre canales en los que se sembraba, ubicados
principalmente en las zonas inundadas de los ríos. Este sistema es muy eficaz: modifica el
ecosistema para obtener recursos más diversos y cultivos durante todo el año, incluidas las épocas
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

de inundaciones. Los excedentes permitieron un aumento demográfico e intercambio con otros


grupos, por lo tanto es un modelo de producción tremendamente eficiente que permitió que las
sociedades se expandieran.
Además, tuvo también consecuencias sociales, que desencadenaron en una organización social más
compleja. Debía de haber una persona que controlara los excedentes, la época de cultivo y las
especies cultivadas. Las tierras eran comunales y la unidad familiar era la que se encargaba de su
explotación. El cultivo de camellones fue desestructurado con la llegada de los españoles, que no
sabían cómo hacer uso de estas técnicas y preferían implantar los cultivos y modelos agrícolas
europeos (que fracasaron).
Actualmente, existen camellones tradicionales de herencia indígena, como en la zona del Beni, en
Bolivia, como estrategia para conseguir una producción más eficiente en zonas inundables y acabar
con la pobreza. Aunque la mayoría de proyectos que se implantaron fracasaron porque los
responsables de dirigirlos no tuvieron en cuenta que estas comunidades siguen una organización
comunal, donde el cacique o curca reúne al grupo y deciden qué se cultiva y cuándo. Las mujeres
son las que se encargan de estos camellones, lo que supone, además, una diferenciación de género.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

3.1. EL ESPACIO CONTINENTAL (MESOAMÉRICA)


1. Introducción
El término de «altas culturas» se acuñó para organizaciones políticas y sociales de gran
envergadura con distintos estatus, cuerpos militares grandes, grandes transacciones, etc. Son
aquellos grupos, pues, que presentan una complejidad cultural, política, económica e incluso
religiosa mayor que las tribus y cacicazgos.
Una característica fundamental es que existe una especialización y complejización de las tareas de
gobierno, de tal forma que nos encontramos con una élite gobernante que dirige una sociedad muy
jerarquizada donde predomina la división y especialización del trabajo en las distintas ramas de
producción. Encontramos diferenciación en los distintos aspectos culturales.
La extensión de estas altas culturas es mucho mayor que la de tribus y cacicazgos. En México-
Tenochtitlán vivían unas 200.000 personas que se organizaban en torno a los intereses comunes de
estas grandes ciudades-estado y a la obtención de privilegios, pues habrá clases privilegiadas y
otras que no lo sean. Podemos decir que son sociedades de «castas» donde no existe la movilidad
social.
Asimismo, son sociedades patriarcales, pues la jefatura reside en el «pater familias». De esta forma,
nos encontramos con una sociedad jerárquica y desigual desde el punto de vista de las relaciones
hombre-mujer y de las clases sociales.
En las altas culturas, los datos sobre los estamentos son precisos. Existe lo que denominamos como
«nobles». Las mujeres fueron ofrecidas en matrimonio para afianzar las alianzas entre grandes
familias nobles, es decir, que vemos que hay estrategias matrimoniales para asentar élites también
en América. En este caso, la virginidad pudo tener un papel simbólico y real para estas sociedades.
Cabe destacar que lo más característico es la existencia de un gobierno «estatal» que se reserva el
ejercicio de la fuerza, dirige las milicias, organiza las ceremonias y la base de estas altas culturas, la
agricultura intensiva, con aplicación de tecnología muy avanzada y un calendario agrícola.
Además, surge la ciudad como lugar de intercambio como oposición al campo donde radica la
producción, de tal forma que hay grandes ciudades como Tiahuanaco, Tenochtitlán, Chimú, Santa
Marta, etc.
El paso de una forma de organización a otra (de tribus a cacicazgo a altas culturas) es un proceso
lento y no sincrónico (no se produce en el mismo tiempo), por ello cuando llega Colón se encuentra
diversas formas de organización social en todo el territorio americano. En el caso de las altas
culturas americanas, los cambios no siempre fueron en el mismo sentido, sino que se han estudiado
los procesos cíclicos de evolución, detenimiento e involución. La conclusión es que los 3 niveles
estaban presentes en el continente americano en 1492.

1.1. Significados y periodización de Mesoamérica


Se entiende por Mesoamérica una extensión geográfica-cultural con mismas formas de organización
política, cultivos cultivados, etc. Así, distinguimos una Mesoamérica nuclear (Triple Alianza) y
una Mesoamérica «marginal» al norte y al sur. Esta región geográfico-cultural no ocupaba todo
México e incluye a las actuales Belice, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Guatemala y Honduras.
Mesoamérica vivió el surgimiento y desarrollo de una serie de civilizaciones que como resultado de
una herencia histórica común van a crear un grupo de rasgos culturales (materiales, económicos…)
que definen el área geográfica mesoamericana. Estos grupos humanos se asentaron en esta zona
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

desde el 500 a.C., y hasta el 1520 (llegada de Hernán Cortés) tendrán continuidades de migraciones,
formas de organización, cultura material, etc., lo que nos lleva a decir que Mesoamérica es una
región cultural que ha ido cambiando sus límites a lo largo del tiempo sin depender de un factor
geográfico, como en el caso del espacio Caribe o los Andes, sino de factores culturales ideológicos.
MESOAMÉRICA 500 A.C.
1. Costa del Golfo
2. Altiplano Central
3. Región oaxaqueña
4. Región maya

MESOAMÉRICA 1520 D.C.


1. Costa del Golfo
2. Altiplano Central-Centro México
3. Región oaxaqueña
4. Región maya
5. Occidente de México y Guerrero (sur)

RASGOS GENERALES DE ESTA REGIÓN CULTURAL


En cuanto a la agricultura, giraba alrededor de una serie de vegetales que, de acuerdo a diferencias
climáticas y en relación a pisos ecológicos diversos, formaba parte de la dieta de la mayor parte de
los grupos indígenas al momento de la invasión. Su variedad era de las más ricas y complejas de
América, apoyándose en aquellos vegetales como el maíz (fundamental), que proporcionaba
carbohidratos; el frijol y las semillas de calabaza, que aportaban proteínas vegetales; y los
aguacates, que aportaban la grasa y el aceite. Desarrollaron diversas formas de cultivo de riego y
humedad, con sistemas de asociación vegetal bastante complejos, como también las chinampas.**
Respecto a la religión, en Mesoamérica y el Valle Central era de una extremada complejidad y el
panteón estaba compuesto de las diversas divinidades que se fueron agregando y superponiendo en
el curso de las distintas oleadas migratorias y conquistas (las divinidades de los grupos étnicos
dominados no se eliminaron, sino que se asimilaron al panteón en una posición secundaria). En el
momento de la Triple Alianza, es decir, de la invasión europea, destacan dos figuras divinas de
diverso origen que ocupaban un lugar dominante en el panteón: Quetzalcóatl, la serpiente
emplumada, era la más antigua y su origen se relaciona con la civilización tolteca, es una figura
compleja, un héroe civilizador; y Huitzilopochtli, dios mexica del sol y de la guerra, traído desde el
norte, que ocuparía el centro del panteón desde el siglo XV en el marco de la Triple Alianza.
En cuanto a la evolución cultural, durante el período cultural «posclásico» o de los «señoríos
militaristas» (los aspectos militares aparecen sobredimensionados), que antecede a la invasión
europea, nos encontramos en el Altiplano Central la presencia de los grupos tolteca y más adelante
mexica; en Michoacán, los tarascos; en Oaxaca, los mixteca; y en Yucatán, los mayas. Es necesario
llamar la atención sobre un elemento que sería de capital importancia en el momento de la invasión
europea y que, por supuesto, le daría una fuerte impronta al sistema de dominio colonial impuesto

* Apartado no muy importante.


Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

por los vencedores: la mayor parte de las sociedades mesoamericanas anteriores a la invasión se
hallaban estructuras según un modelo típico de dominación ejercido por un reducido estamento
«nobiliario» sobre una gran masa campesina tributaria. Como parece obvio, esto tendría una
influencia enorme en el período posterior a la llegada de los europeos. Asimismo, es necesario
recordar que la estructura social de estas comunidades autóctonas no estaba tan alejada de la que los
castellanos conocían en sus tierras.

MEXICA
En el contexto de la Historia de México, debemos recordar que empezamos en el Postclásico Tardío
(1400-1521). En esta época es cuando los mexicas ocupan el Valle Central de Mesoamérica en un
contexto de migraciones.
El Valle Central o el Valle de México es una cuenca lacustre compuesto por una serie de lagos y
lagunas con varias áreas pantanosas y emplazado en una meseta entre altas montañas. El clima del
valle y su conformación geomorfológica tendría una influencia muy grande en el tipo de utilización
agrícola.

2. Peregrinaciones y migraciones
Estos grupos tuvieron su origen de migraciones en el norte (Toltecas, Tlascaltecas, Mexicas
finalmente…) y lucharán entre sí por ocupar el espacio o establecerán relaciones de convivencia.
En el caso de los mexicas, encontramos evidencia de estas migraciones en los relatos y códices,
como el Códice Boturini o Tira de la Peregrinación, un manuscrito elaborado en una larga tira de
amate doblado en 22 láminas que, unidas, conforman un conjunto de 5 metros de longitud; en ella
se registra la historia de los mexicas desde su salida de Aztlán (garzas blancas) hasta poco tiempo
antes de la fundación de Tenochtitlán. Los mexicas fueron la última gran peregrinación chichimeca
(pueblos al norte del Valle de México).
Desde un punto de vista histórico, en el Valle Central, durante el Período Preclásico temprano, nos
encontramos con sociedades aldeanas, y poco a poco los grupos se van complejizando, dando lugar
a una jerarquización social. Durante este transcurso de tiempo irán apareciendo diversos grupos
étnicos como los olmecas, a la vez que van desapareciendo otros, como los teotihuanacos, ya
inexistentes antes de la llegada de los españoles.
Los mexicas (también llamados aztecas y otras denominaciones), al llegar al Valle Central, se
internarán dentro del señorío de los tepanecas de Azcapotzalco. Los tepanecas permiten a los
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

mexicas asentarse en sus territorios a cambio de que se conviertan en tributarios y queden sujetos al
señorío de Azcalpotzaclo. El pueblo mexica tuvo que batallar con muchos grupos étnicos
(tepanecas, culhuas, chichimecas de Texcoco…) para hacerse por fin con una región propia y
convertirse en un imperio que dominaba el Valle Central, la costa del Golfo de México y Oaxaca en
torno a 1500.

CARACTERÍSTICAS RESULTANTES DE LAS MIGRACIONES


Las migraciones de los mexica, que comienzan en 1150 en Tula (tras su caída) hasta llegar a
México-Tenochtitlan, se traducen en los siguientes rasgos:
1. Grandes movimientos de población del norte al sur.
2. Cambios en el orden sociopolítico
3. Sociedades militarizadas: Construcción de Estados e imperios que atrajeron los recursos
de inmensas regiones y extendieron constantemente sus fronteras por medio de guerras y
conquistas.
4. Integración de zonas simbióticas a través del comercio y la conquista. En cierta forma esta
simbiosis se reflejó en sacar provecho de la vida en común, de forma pacífica o diplomática
u obligatoriamente.
5. Importante papel de la clase sacerdotal, pero subordinado al de los guerreros.
6. Diversificación de la sociedad al incluir poderosos gremios de comerciantes y artesanos.
7. En la religión, imposición de los dioses de la guerra, al exigir sacrificios humanos en gran
escala. Es decir, una religiosidad muy presente.
8. Perfeccionamiento y afianzación de la tradición del sentido urbanístico: las nuevas
ciudades tenían mejor planimetría y una mayor monumentalidad y número de población.
9. Dominio y control de sistemas de irrigación y cultivo: durante el postclásico tuvo lugar la
intensificación de los sistemas hidráulicos, sobre todo, en la cuenca de México (Altiplano
Central), donde alcanzaron grandes proporciones, permitiendo ampliar el potencial
productivo).
10. Culturas con testimonios escritos, tanto de contenido histórico como de otros temas
(aunque la escritura formaba parte de una tradición de muchos siglos del postclásico).
Otros aspectos de los grupos étnicos del Valle Central que llegarán a su culmen en torno al 1400
serían su calendario, la estrategia de conquistar para obtener tributos, su carácter militarizado, la
construcción de grandes ciudades como Totihuacán, Chichen Itzá, Méjixo-Tenochtitlán, etc. Los
mexicas fueron extendiendo sus conquistas, encontrándose en el proceso de hacerse con Tarasco
cuando llegan los europeos.
Se les puede llamar Aztecas por procedes de Aztlán (el lugar de la blancura o de las garzas), o
nahuatl porque en el Valle Central hablaban la lengua madre del nahuatl. Pero se suelen llamar
mexicas porque el dios que les protege, Huitzilopochtli, les da el nombre.
Los mexicas se dividen en tenochcas (que fundaron Tenochtitlán) y tlatelolcas.

3. Fundación de Tenochtitlan: mito y realidad histórica. El águila se posa sobre el nopal.


Cuando hablamos de las sociedades que habitaron el valle, no podemos desechar el origen mítico de
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

su aparición, no muy alejado del real.


Los mexicas habrían sido guiados por su dios Huitzilopochtli hasta el lugar elegido para
establecerse en el valle central. Según el mito, debían llegar a un lugar lacustre lleno de agua, donde
predominaran las plantas y animales de color blanco, símbolos toltecas relacionados con la blancura
que los mexicas hacen suyos.
Posteriormente, Huitzilopochtli se apareció en sueño a uno de los mexicas y le recuerda que el
mítico príncipe Cópil había sido derrotado y su corazón arrancado y arrojado en medio del lago. El
corazón había caído sobre una roca y de ella había crecido un tunal o nopal (higuera de pala) donde
tenía su nido un águila que devoraba pájaros (símbolo del triunfo del dios solar sobre sus
enemigos); ese sería el lugar señalado para fundar la ciudad.
Según varias crónicas, el 13 de abril de 1325 se produjo la fundación de la ciudad de Tenochtitlán,
coincidiendo con un eclipse total de sol. Un fenómeno de esta naturaleza tuvo que tener un impacto
enorme en una sociedad que, como la mexica, estaba pendiente de los movimientos celestes. Los
eclipses eran considerados como la lucha entre el Sol (Huitzipochtli ***) y la Luna (Coyolxauhqui),
de la que, finalmente, el primero salía triunfante. No sería de extrañar que este acontecimiento diera
pie para que el año 1325 apareciera como fundación de la ciudad, haciendo los ajustes necesarios
para que así quedara recogido en sus códices y relatos, pues hay indicios de que la ciudad se
estableció algunos años antes.
Desde un punto de vista histórico, en el Valle Central, durante el Período Preclásico temprano, nos
encontramos con sociedades aldeanas, y poco a poco los grupos se van complejizando, dando lugar
a una jerarquización social. Durante este transcurso de tiempo, irán apareciendo diversos grupos
étnicos como los olmecas, a la vez que van desapareciendo otros como los teotihuanacos, ya
inexistentes antes de la llegada de los españoles.
Como ya se ha mencionado, los mexicas constituyeron la última gran migración chichimeca hacia
el Valle Central, donde se internan dentro del señorío de los tepanecas de Azcapotzalco. Los
tepanecas permiten a los mexicas asentarse en sus territorios a cambio de que se conviertan en
tributarios y queden sujetos al señorío de Azcapotzalco. El pueblo mexica tuvo que batallar con
muchos grupos étnicos (tepanecas, culhuas, chichimecas de Texcoco…) para hacerse con una
región propia y convertirse en un imperio que dominaba el Valle Central, la costa del Golfo de
México y Oaxaca en torno a 1500.
Las características que comparten estos grupos étnicos del Valle Central y que llegarán a su culmen
en torno a 1400 son:
- Su calendario
- La estrategia de conquistar para obtener tributos
- Su carácter de sociedades militarizadas.
- La construcción de grandes ciudades como Totihuacán, Chichén Itzá, Méjico-Tenochtitlán, etc.
Los mexicas fueron extendiendo sus conquistas, encontrándose en el proceso de hacerse con
Tarasco cuando llegan los europeos.
Vemos cómo los mitos mexicas combinan mitología y realidad, pues sería Huitzilopochtli quien les
habría instado a caminar hacia el Valle Central y establecer allí su ciudad. Estas migraciones
ocurrieron realmente, y el pueblo mexica tuvo que batallar con muchos grupos étnicos (tepanecas,
culhuas, chichimecas de Texcoco…) para establecerse en la zona y convertirse en el imperio
dominante.
* Huitzilopochtli nace del desmembramiento de la diosa de la Luna (su hermana), ataviado para la guerra.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

3.1. Planificación de la ciudad de Tenochtitlán: concepción mítica y dato histórico


Tras haber ocupado el lugar, los mexicas reciben las órdenes de su dios para que comiencen la
construcción de la ciudad. Según las fuentes históricas, lo primero que hacen es construir un templo
sencillo a Huitzilopochtli sobre el tunal y utilizando los materiales que encontraron en el lago
(maderas, cañas, paja…), pues no podía edificar sobre un suelo que no era de su propiedad, sino de
los de Azcapotzalco y de los de Texcoco.
Lo siguiente fue dividir el lugar de asentamiento en cuatro partes o cuadrantes a modo de barrios,
dejando el templo en el centro. Los canales de agua servían para delimitar estos cuatro espacios
(ambiente lacustre sobre el que está asentada la ciudad). A su vez, cada uno de los cuadrantes se
divide en otros pequeños barrios a los que se les va asociando dioses menores.
De esta forma, la ciudad queda dividida en dos espacios: el sagrado y el profano. El primero estará
constituido por la plaza principal de la ciudad (zócalo) y los templos a sus dioses, siendo el más alto
e importante el Templo Mayor, dedicado a Huitzilopochtli. El segundo estará constituido por las
residencias de los nobles (más próximas al centro) y el pueblo, dividido en barrios o calpullis. Los
cuatro barrios principales serán los de Moyotlán, Teopán, Atzacualcoy Cuepopán.
A su vez, cuatro grandes calzadas van a salir desde el espacio sagrado orientadas hacia los rumbos
del universo: la del Tepeyac al norte, la de Iztapalapa al sur, la de Tacuba al oeste, y otra de
menores dimensiones hacia el este.
Con esta distribución, la ciudad es una imagen del cosmos, de la estructura universal, patrón que
siguen muchas ciudades de la Antigüedad. Destacamos la representación pictórica de Tenochtitlán
encargada por Cortés y publicada en Nuremberg en 1524, donde se aprecian perfectamente los
espacios sagrado y profano, y su carácter de ciudad lacustre con acueductos y puentes para
comunicarse con tierra firme. Cabe mencionar que, en el momento de la invasión, estos canales
serán desecados por los castellanos usando eucaliptos (absorben mucha agua), ya que sus técnicas
constructivas no funcionaban en terrenos anegados y la ciudad debía adaptarse a las formas
castellanas.
Por último, sobre la denominación de México-Tenochtitlán, el primer vocablo se presta a discusión
y se interpreta como «el lugar de Mexi», un sacerdote que venía en la peregrinación; pero otros lo
traducen como «el ombligo de la Luna». En cuanto a Tenochtitlán, se dice que es «el lugar de
Tenoch», otro sacerdote que encabezaba el grupo, además de referirse por su nombre mismo como
«el lugar del tunal».
En el momento de la invasión, cuando Hernán Cortés llega a Tenochtitlán, se encuentra una ciudad
muy organizada y grande que nada tenía que ver con las ciudades castellanas como Sevilla o
Salamanca.

4. La Triple Alianza. 1430. Organización política y territorial


Después de permanecer asentados algunos años, un grupo decide separarse y trasladarse un poco
más al norte, sobre unos islotes conocidos como Xaltilolco. Allí, fundan en el año 1337 una ciudad
gemela de Tenochtitlán a la que llamaron Tlatelolco. A partir de este momento Tenochtitlán
destacará como sede de los poderes políticos y religiosos, y Tlatelolco lo será del comercio (en
Tlatelolco se encontraba el mayor mercado).
A pesar de sus rivalidades y debido a los abusos y exceso de cargas tributarias por parte de los
tepanecas del señorío de Azcapotzalco, Tenochtitlán y Tlatelolco se alían junto con la vecina
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Texcoco y derrotan a los tenapeca, independizándose de ellos y creando en 1430 una nueva Triple
Alianza, encabezada por los señoríos de Tenochtitlán, Texcoco y Tacopan. En esta asociación, el
líder mexica o tlatoani (ahora Moctezuma) impondrá su preeminencia, aunque bien es cierto que la
autonomía de cada uno de los otros dos aliados era muy grande.

4.1. Organización territorial


En cuanto a su organización territorial, la Triple Alianza dominaba varios reinos: el reino
principal (altepetl) estaba integrado por las tres ciudades aliadas (Tenochtitlán, Texcoco y
Tacopan), pero en torno a 1521 existían otros reinos o señoríos (tlahtocayotl) bajo su control,
integrados en 38 provincias.
Además, esta Triple Alianza se sostenía gracias a una red de tributos de estos señoríos que iban
ampliando mediante la guerra, y que les permitía acceder a recursos de diversos nichos ecológicos
de regiones que se encontraban fuera del Valle Central. A medida que se extendían las campañas
militares, se iban recibiendo más tributos de distintos grupos étnicos a través de un sistema en el
cual un funcionario, el calpixe, se ocupaba de administrar los tributos debidos al segmento
dominante.
Sin embargo, el dominio del territorio era discontinuo, lo que se explica debido a la resistencia
presentada por algunos señoríos combinada con la búsqueda de recursos diversos por parte de los
mexicas, cuyo objetivo era llegar hasta la costa del Océano Pacífico (además de cobrar los
impuestos) accediendo así a diferentes nichos ecológicos. Estos señoríos que quedaron fuera del
dominio mexica eran independientes totalmente, tanto política como económicamente.
Por lo tanto, debe quedar claro que esta expansión de la Triple Alianza se realizó con el objetivo de
conseguir tributos y acceder a recursos, incluidos a aquellos de diferentes nichos ecológicos
cercanos al Océano Pacífico, no para conseguir poder político.
De los señoríos a los que tenían dominados, también recibían como tributo esclavos (hombres,
mujeres, niños y niñas sin distinción) para sacrificarlos a los dioses, cuyos cráneos se exhibían en
una empalizada dentro del espacio sagrado llamada Tzompantli (cabe destacar que una de las cosas
que hicieron los mexicas en los primeros momentos de lucha contra los conquistadores fuer
cortarles las cabezas a los enemigos, pero también a sus caballos, ya que nunca habían visto
animales como esos y les causaban temor).
SACRIFICIOS
Los sacrificados también podían ser capturados en batalla o, incluso, personas que habían
traicionado a la Triple Alianza. Los sacrificios a los dioses y diosas tenían diversas motivaciones
relacionadas con lo mítico y el mundo agrícola: buenas cosechas, lluvia, fertilidad entre hombres y
mujeres, tributos, etc.
Además, había muchas variedad a la hora de hacer los sacrificios: recogían la sangre para bebérsela,
sacaban el corazón para que los sacerdotes o el tlatoani lo comieran (fundamentalmente los mayas),
pues pensaban que, si comías ciertas partes del cuerpo, se obtenía fuerza para victorias militares
(hígado) u otros objetivos. Es por ello que los mexicas y el resto de señoríos que lo realizaban
contaban con un gran conocimiento del cuerpo humano, órganos, circulación de la sangre…
Por otro lado, también se llevaban a cabo sacrificios durante fiestas como la Panquetzaliztli, en
honor a Huitzilopochtli. Se celebraba en torno al 20 de diciembre, y consistía en varias actividades
antes del sacrificio final. En primer lugar, nueve días antes de que llevara a cabo el sacrificio de
esclavos y cautivos de guerra, se bañaba a los primeros en un manantial y se pintaba su cuerpo de
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

color azul y el rostro con líneas azules y amarillas. Tras esto, cinco días antes, los dueños de los
esclavos y los ancianos de la ciudad ayunaban. El día anterior de los sacrificios, los esclavos subían
al Templo Mayor y daban vueltas alrededor de la piedra de sacrificios y después comían tamales. Al
día siguiente, se hacía descender la figura de uno de los dioses (Painal) de lo alto del templo hasta
el recinto del juego de la pelota, y allí se mataban a cuatro cautivos que eran arrastrados desde
Tlatelolco hasta el Templo Mayor de Tenochtitlán, pasando por los barrios de la ciudad, mientras
que se representaban escaramuzas guerreras entre los esclavos y la gente del barrio.
De vuelta al templo, un sacerdote bajaba con una antorcha de tea que representaba a la «serpiente
de fuego», el arma que usaba Huitzilopochtli en su mundo cosmogónico. Después de esto se
sacrificaba, con un cuchillo de obsidiana, primero a los cautivos y luego a los esclavos, cuyos
cuerpos eran arrojados por las escaleras. Tras esto, las fiestas continuaban varios días.
Cuando Hernán Cortés fue recibido por Moctezuma II con gran agasajo en el espacio sagrado y
tanto sus huestes como él fueron hospedados en las habitaciones de este recinto, pudieron conocer
la práctica de los sacrificios. Según las crónicas de Bernal Díaz del Castillo, los castellanos
pensaron que los indígenas eran unos bárbaros que mataban a gente, pero realmente habría que
reflexionar sobre qué entendían los castellanos por barbarie, y qué entendían los mexicas o los
mayas, ya que también los invasores cometieron muchas acciones violentas.

4.2. Organización social


En cuanto a la organización social dentro de esta Triple Alianza, es muy importante dado el papel
que desempeña cada grupo (pago de tributos, producción agrícola, artesanía, textil, etc.) en la
sociedad mexica y en toda Mesoamérica en general. Se diferencian tres grandes grupos basándonos
en sus obligaciones: élite o privilegiados, grupos intermedios y grupos no privilegiados. En la
sociedad mexica se podía tanto ascender como descender de grupo social, y dentro de los diferentes
grupos había diferencias en cuanto a funciones.
1. Élites: estaban compuestas por el huey tlatoani («el gran señor», gobernante máximo,
autoridad judicial y gran sacerdote en determinadas ceremonias), los tlatoanis o señores y
los pipiltin o nobles (pilli en singular). Se van a diferenciar del resto por sus méritos
militares (batallas, captura de esclavos), base de su estatus, poseían tierras propias y
cobraban tributo por ellas.
2. Grupos intermedios: se distinguían por su oficio, por lo que la base de su estatus son las
actividades económicas. Encontramos, por tanto, en este grupo, a pochteca o comerciantes
(gran poder), mercaderes, orfebres, médicos, pintores, poetas, etc. En cuanto a sus
obligaciones, pagaban tributo pero estaban exentos del servicio personal y del trabajo
agrícola.
3. Grupos no privilegiados: estaban formados por macehuales o campesinos tributarios y
esclavos (cautivos de las campañas militares o personas que bajaban su estatus por traición o
no pagar tributos). Pagaban tributos, prestaban servicios personales (transportistas → no
rueda ni animales de carga) y servicio militar (integraban los ejércitos), además de trabajar
la tierra.

5. Modelos agrícolas, técnicas de irrigación y obras hidráulicas.


5.1. Producción agrícola
El Valle Central o Valle de México es una cuenca lacustre compuesta por una serie de lagos y
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

lagunas con varias áreas pantanosas y emplazado en una meseta entre altas montañas (más de
2000m de altitud). El clima del valle y su conformación geomorfológica tendría una influencia muy
grande en el tipo de utilización agrícola.
En cuanto a su régimen hídrico, las precipitaciones se acumulan en una estación lluviosa, muy
irregular en su distribución geográfica dentro de la cuenca, así como en su frecuencia a lo largo del
año (época de lluvias que dura en torno a 5 meses). Este régimen hídrico tiene consecuencias
obvias: en algunas partes del valle llueve mucho, pero de una forma torrencial y, por otra parte,
llueve más donde la instalación y la ocupación para el uso agrícola de las sociedades humanas es
menos sencilla.
Una de las primeras consecuencias de este hecho en relación con la ocupación humana de este
espacio fue la realización progresiva de un sistema de irrigación, que combinó la construcción de
terrazas de cultivo (para la utilización agrícola de los terrenos en declive y la conservación de la
humidificación), con la puesta a punto de diferentes formas de almacenamiento y de conducción del
agua de los torrentes y surgentes montañosos. De este modo, la producción agrícola del área creció
de forma progresiva y estas terrazas ampliaron la capacidad de producción maicera del valle.

CHINAMPAS
Sin embargo, el principal problema era el aprovechamiento del sistema lacustre del valle, para lo
que utilizaron las chinampas, unas áreas de cultivo de gran productividad ganadas poco a poco al
lago, que se fueron extendiendo de forma progresiva hasta ocupar la extensa superficie que
habitaban en la época de la expansión europea. La definición de chinampa es: terreno de poca
extensión construido en un lago (isla artificial) mediante la superposición de una capa de piedra,
otra de cañas y otra de tierra, que permite formar una base nutritiva para cultivar verduras y flores.
La chinampa recibe la humedad filtrada desde los canales, donde se favorece la cría de peces y aves
acuáticas, que ayudan a la fertilización del agua. Una hilera de árboles les sirven de refuerzo a
ambos lados.
Las chinampas surgieron desde el principio de la colonización mexica de los lagos de Texcoco,
Xochimilco y Chalco, en el siglo XII d.C. Conforme Tenochtitlán creció, también lo hizo el área del
lago ocupada por las chinampas, ya que estas cumplieron una función de urbanización para
extender la ciudad y ganarle terreno al lago, no fueron sólo un agrosistema. Cuando llegaron los
españoles en 1519, consideraron que las chinampas eran un método de agricultura poco eficiente y
las desdeñaron. No obstante, nunca desaparecieron por completo, y aún hoy se utilizan en varias
zonas del resto de México, como en el Lago de Xochimilco, donde podemos ver plantaciones de
rábanos con este sistema.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Han sido rescatadas por su valor como tecnología sostenible. Son una manera adecuada de cultivar
la tierra sin afectar permanentemente al paisaje. Además, ya que se aprovechan de los nutrientes y
el agua del entorno, no hace falta añadir fertilizantes a sus cultivos, ni desviar los nutrientes y el
agua del entorno, no hace falta añadir fertilizantes a sus cultivos, ni desviar fuentes de agua. Eso sí,
las chinampas no son eficaces en la agricultura a gran escala, que es lo que necesita el mundo
actual. Probablemente funcionen para pequeñas poblaciones, pero no son la solución a los
problemas de distribución que aquejan al mundo.
Además, el sistema lacustre ofrecía una gran ventaja para civilizaciones que no conocieron la rueda
y no domesticaron animales para el acarreo y la tracción: los lagos y canales posibilitaron la
creación de un sistema de transporte eficaz y muy barato en términos de ahorro de energía
humana. Las mercancías eran transportadas por canoas de carga, así la producción agrícola podría
llegar a los núcleos urbanos de forma rápida y económica.

5.2. Oficios (organización social + economía)


La organización social de los pueblos del Valle Central en el momento de la invasión europea era
sumamente compleja y jerarquerizada. Es muy importante tenerla en cuenta por el papel que
desempeña cada grupo (pago de tributos, producción agrícola, artesanía, textil, etc.) en la sociedad
mexica y en toda Mesoamérica en general. Se diferencian tres grandes grupos basándonos en sus
obligaciones: élites o privilegiados, grupos intermedios y grupos no privilegiados. En la sociedad
mexica se podía tanto ascender como descender de grupo social, y dentro de los diferentes grupos
había diferencias en cuanto a funciones.
Las élites estaban presididas por el huey tlatoani, «el gran líder», que cumplía funciones políticas
y, sobre todo, religiosas y ceremoniales como interlocutor privilegiado del propio dios
Huitzilopochtli; así como funciones redistributivas sobre las 38 provincias dependientes de la Triple
Alianza. Además, el huey tlatoani también participaba del sistema tributario, ya que tenía como
tequitl el ejercicio del gobierno y la protección de la población (es una obligación, que entra dentro
del concepto de tequitl/tributo), mientras que los tlatoanis menores se encargaban de conservar el
templo.
Los miembros del linaje del tlatoani recibían el nombre de pilli (singular) o pipiltin (plural), los
nobles, cuyas función básica, aunque no la única, era la guerra, que se constituía como la actividad
de división social más eficaz del período prehispánico en Mesoamérica y de la que podían emanar
obligaciones, premios y castigos. La guerra era una de las formas de «ascenso social» más
habituales, de hecho muchas casas señoriales surgían a partir de la actuación guerrera de algún pilli
(incluso hay autores que piensan que era válido también para los macehuales). Los pilli poseían
tierras y cobraban tributos en ellas.
En los grupos intermedios los encontramos con los tributarios no campesinos, cuyos oficios eran
diversos: artesanos, cazadores, médicos, orfebres, comerciantes, pintores, poetas, etc. Los grupos
intermedios se distinguían por su oficio, por lo que la base de su estatus son las actividades
económicas. Realmente tributaban con el producto de su oficio, por ello la palabra utilizada
generalmente para tributo era «tequitl», que resulta mucho más amplia como concepto, pues abarca
trabajo, oficio, tarea y también tributo, incluyendo así todo tipo de obligaciones.
En el sector opuesto nos encontramos con los grupos no privilegiados, compuestos por los
campesinos tributarios, los macehualtin o macehuales, que debían sostener con su trabajo a las
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

autoridades inmediatas (los responsables de los calpolli), a los nobles y al tlatoani. También se
encontraban en este grupo los esclavos, que eran cautivos de las campañas militares o personas que
bajaban su estatus por traición o por no pagar tributos.
Los integrantes de este grupo estaban obligados a prestar servicios personales como por ejemplo el
de transportistas por la ausencia de animales de carga; a pagar tributos, a trabajar la tierra y a
integrar los ejércitos.

6. Circulación de bienes y energía humana: intercambio comercial, redistribución y


tributación
La circulación de bienes y de energía humana va a tener la misma estructura que en el
Tahuantinsuyu, y es un elemento central en el funcionamiento de las sociedades mesoamericanas.
Estará conformada por el sistema tributario, la redistribución y el sistema de mercados, todos
elementos bastante complejos.
Hay que señalar que, ya en el Período Preclásico Tardío, existe un precedente de estas actividades,
donde el comercio de obsidiana ocupó un lugar fundamental, cuyos restos materiales son perfectos
indicios de intensos sistemas de intercambio en este período. A continuación, nos centraremos en el
Período Posclásico, que abarca desde el 1200 hasta la invasión europea.

6.1. Circulación de bienes mediante tributos: trabajo y productos


El tributo era la forma básica de apropiación del excedente producido por los campesinos y por los
señoríos dominados, e incluye a todos los individuos de esos grupos, exceptuando a las élites. El
sistema tributario, llamado tequitl o tequio por los castellanos, tiene unos cimientos fuertes en las
campañas militares y en la expansión. La palabra tequitl, generalmente utilizada para designar
«tributo», es un concepto bastante amplio, ya que abarca «trabajo», «oficio», «tarea» y también
«tributo», por lo que incluye todo tipo de obligaciones.
Algo que hay que tener en cuenta es que la guerra, como medio de apropiación económica, estaba
dirigida, no tanto a hacerse de tierras de las provincias lejanas ni tratas de imponer el culto a
Huitzilopochtli, sino que estaba dirigida a apropiarse de la fuerza de trabajo. Al Estado mexica no
le interesaba que las tierras de las grandes regiones alejadas que conquistaban pasaran a ser de su
propiedad, sino que estas quedasen en manos de los conquistados. Lo que importaba era aprovechar
la mano de obra y apropiarse de la fuerza de trabajo, para que le sirviera económicamente.
El tributo se divide en dos formas fundamentales: en trabajo y en productos.

TRIBUTO EN TRABAJO
El tributo en trabajo era prestado de forma rotativa por las distintas comunidades que formaban
parte de la Triple Alianza y se trataba, en general, de trabajo no especializado, como el de obras
«públicas» (acueductos, calzadas, canales de irrigación, pirámides y grandes monumentos
religiosos); también una parte se prestaba en acarreo de productos, es decir, los tlamenes o
cargadores, que tenían una importancia enorme en una sociedad que no conoció ni la rueda ni los
animales de tiro. Asimismo, en ocasiones se prestaba tributo en trabajo agrícola en las tierras
asignadas a los templos o al palacio.

TRIBUTO EN PRODUCTOS
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

El tributo en productos era entregado directamente, a través de la acción del calpixe que lo
administraba a cada lugar, a la autoridad central, es decir, las tres capitales de la Triple Alianza que
se lo repartían de forma desigual (2/5 para Tenochtitlán y Tlatelolco y 1/5 para Tlacopan).
Este tributo consistía en alimentos (maíz, chile), algunas materias primas muy especiales (algodón,
maderas finas, plumas de ave, oro, grana cochinilla), en productos acabados, mantas de algodón,
trajes de guerreros, láminas de oro, piezas de cobre, piezas de estaño, pieles de animal y,
finalmente, en un producto que jugaría un papel de semimoneda: el cacao (también parece que las
mantas e incluso el oro desempeñaron un papel en este sentido).

MATRÍCULA DE TRIBUTOS
El documento conocido como «Matrícula de Tributos» registra en escritura pictográfica los
tributos que los pueblos pagaban a México-Tenochtitlán, Texcoco y Tacuba en el momento de la
conquista de México por los españoles. La matrícula fue probablemente copiada o elaborada a partir
de un original prehispánico alrededor de 1522-1530, por orden del conquistador Hernán Cortés,
quien quería aprender más sobre la organización económica del imperio de la Alianza.
Cada página de la Matrícula representa una de las 16 provincias tributarias. La ciudad principal de
cada provincia aparece primero, en el extremo inferior izquierdo de la página, seguida hacia arriba
por los pueblos o altepetl que pertenecían a ella. Cada altepetl está representado por un glifo
toponímico. Cuando el margen izquierdo está completo, sigue el margen derecho, y finalmente la
fula superior. Dentro de ese marco de glifos toponímicos, los artículos que la región pagaba se
representaban visualmente, en filas, y la cantidad esperada de cada ítem se registra utilizando
registro tributario.
La Matrícula de Tributos es un valioso documento para el estudio de la geografía política y
económica de la Mesoamérica de la pre-conquista, los nombres de los lugares nahuatl, el sistema
numérico náhuatl y la riqueza económica del imperio.
Cabe mencionar que, en general, se solicitaban como tributo productos locales, pero a veces no era
así, y los tributarios debían de acudir a los mercados para procurarse productos más exóticos. Ahora
bien, muchos de estos bienes que circulan primero como tributo, lo harán más tarde a través de
mecanismos no mercantiles como el de redistribución.

6.2. Circulación de bienes a través de la redistribución


Una vez entregado el tributo, los tlatoani de México-Tenochtitlán organizaban las llamadas «fiestas
redistributivas», banquetes en los que ofrecían una parte de los bienes acumulados a los señores de
los señoríos tributarios (joyas de oro, ricas mantas, collares, armas, comida, cacao, etc.). De esta
forma, una parte sustancial de los bienes entregados como tributo era a su vez redistribuida y volvía
nuevamente a circular a través de mecanismos no mercantiles. Esta práctica también era realizada
por los pochteca o mercaderes que se enriquecían, y además les permitía mostrar al resto su
prosperidad e incrementar su prestigio.
Esta circularidad de los productos constituye el fundamento mismo del sistema social y económico
de la época prehispánica en Mesoamérica, un sistema en el que ni la tierra ni el trabajo eran
mercancías y en el cual la mayor parte de los bienes circulaban intensamente, pero no lo hacían a
través de mecanismos mercantiles.
Estos sistemas redistributivos se romperían por completo con la llegada de los europeos, pues a
partir de ese momento los distintos señoríos tributarán a la Corona a cambio de nada.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

6.3. Circulación de bienes mediante mercados: locales y larga distancia


Por último, nos referimos a los sistemas de circulación basados en mercados, donde comprobamos
que existían dos formas bien diferenciadas: en primer lugar, tenemos los mercados «locales», y en
segundo lugar, los mercados «de larga distancia». A pesar del distinto funcionamiento de estos tipos
de mercados, los dos sistemas podían tener conexiones muy estrechas en algunas ocasiones.

MERCADOS LOCALES
Los mercados locales pueden variar desde aquellos pequeños en aldeas hasta el enorme mercado de
Tlatelolco, pues las facilidades para el transporte por vía acuática en el área lacustre hicieron que
algunos de estos mercados urbanos fueran realmente impresionantes. El cronista Bernal Díaz del
Castillo compara el mercado de Tlatelolco con las ferias de Medina del Campo, y el propio Hernán
Cortés calcula que era el doble de grande que la Plaza Mayor de Salamanca.
En estos lugares, la operación fundamental parece ser el trueque de un producto por otro, lo que
permite al campesino procurarse dos tipos de productos:
a) Los que necesita para su subsistencia o vestimenta y que él no posee en ese momento o
todos esos que, por razones ecológicas, no pueden ser producidos localmente en una
comunidad determinada.
b) Aquellos que integran «el tributo» en los diversos niveles de obligaciones a los que estaban
sometidos y que, por las mismas causas ecológicas, no podían ser resultado de su trabajo.
La presencia de los granos de cacao agilizaba el intercambio en estos grandes mercados, pues al
pasar por una semimoneda, es decir, un elemento que, en cierta forma, jugaba de «equivalente de
todas las mercancías»; la operación resulta mucho más simple.
Algunos de los artesanos o vendedores que podíamos encontrar en los mercados locales eran los
siguientes: «mujeres que vendían el cacao hecho», ya que se creía que la espuma de cacao hacía
más fértiles a mujeres y hombres, por lo que se podía ver a mujeres espumando cacao en los
mercados. La espuma del chocolate tenía un significado ritual para las culturas mesoamericanas,
por lo que se consideraba como la parte más deseable de la bebida, parte que consideraban que
estaba viva gracias a una fuerza llamada «pée», asociada a la fertilidad. Para producir espuma, se
utilizaba la técnica del transvasado (una porción del líquido es vaciada continuamente de un
recipiente a otro hasta la producción de espuma). En el caso de las preparaciones de bebidas de
chocolate, el contenido de cacao juega un papel importante en la generación de espuma, pues con el
mayor contenido de cacao se incrementa la producción de espuma, y es preferible el chocolate sin
azúcar. También nos encontramos mucha venta de maíz, que como sabemos, era un alimento
principal en la dieta del Valle de México y de muchas otras partes del continente; así como los
plumeros, diestros en seleccionar distintas plumas para crear piezas de gran calidad y exquisitez,
como el penacho de Moctezuma.

MERCADOS DE LARGA DISTANCIA


Los mercados de larga distancia constituían sistemas de circulación que podían abarcar miles de
kilómetros y estaban basados sobre todo en los »puertos de intercambio», en donde se establecían
los contactos de los mercaderes del valle de México con sus homólogos mayas, que tuvieron una
función primordial en esta trama de intercambios.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Estos mercados parecen ser el resultado de grupos de mercaderes especializados en diferentes tipos
de productos, que permitían la expansión de mercancías de alto valor por todos los mercados que
participaban en el sistema de ciruclación prehispánico; aunque las formas de intercambio eran
reguladas por los poderes políticos en este tipo de mercados.
Estos mercaderes, pochteca en el caso mexica, además se hallan enmarcados en un sistema social
peculiar de tipo «clánico», y además parecen haber tenido funciones de espías y enviados políticos
de la Triple Alianza. Los mercaderes parecen haber alcanzado hacia finales del período mexica una
importancia particular.
El control y la gestión de las rutas y de los productos comerciales fue una estrategia política para el
crecimiento del imperio azteca. Los gobernantes mexicas encaminaron sus esfuerzos hacia la costa,
el Golfo de México y el sur, donde se hallaban las provincias más productivas, y este interés
implicó al ejército y a los comerciantes que intentaron mantener un equilibrio de fuerzas que, con el
tiempo, parece ceder a favor de los pochtecas, amenazando el estamento militar.
Cabe reflexionar que la existencia de un intenso sistema de circulación, sea mediante tributo o
gracia a los mercados, no implica necesariamente la existencia de un sistema mercantil debido al
hecho de que la tierra y el trabajo están completamente fuera de toda forma de transacción mercantil
y se hallan institucionalizados, y además, muchos de los bienes circulan a través de mecanismos no
mercantiles, como son la reciprocidad y la redistribución.
Un ejemplo sobre este sistema de tributos o tipetl es el del altepetl de Chalco. Desde su fundación,
aproximadamente en el siglo XIII hasta el siglo XV, los chalcas gozaron de total independencia. De
acuerdo con fray Diego Durán, la situación de los chalcas cambió cuando Moctezuma I, decidió
construir un templo dedicado a Huitzilopochtli, el cual tenía que ir acorde con su grandeza.
Asimismo, este acontecimiento coincidió con una política expansionista por parte de los mexicas.
De tal suerte, para llevar a cabo este proyecto, Moctezuma requería de una gran cantidad de piedras,
por lo cual pidió ayuda a los señores de Chalco, aunque los chalcas se rehusaron a dar lo que pedían
los mexicas y comenzaron los enfrentamientos. A pesar de la resistencia, los chalcas fueron
vencidos y quedaron bajo el dominio de los mexicas.
Así, bajo la dominación que ejerció Tenochtitlán sobre los pueblos a los que sometió se caracterizó
por la entrega de tributos a los integrantes de la Triple Alianza. Cada grupo sometido estaba
obligado a proporcionar cierta cantidad de un producto en específico, y en el caso de los chalcas fue
el maíz y la piedra para la construcción, madera y guerreros para continuar con el avance
expansionista.
El sometimiento que vivieron los chalcas, y los demás grupos mesoamericanos, persistió hasta el
gobierno de Moctezuma II (1466-1520). A pesar de que las diferentes comunidades mantuvieron su
independencia en la forma de gobierno, esperaban el momento de liberarse del sometimiento al que
estaban sujetos. En esta coyuntura llegó Cortés en 1519 a Mesoamérica y aprovechó el descontento
que existía en el territorio para aliarse con los enemigos de los mexicas.

7. Etnografía de la cotidianidad
Algunos códices como el Durán (1579) del dominico Diego Durán, o el Códice Florentino (1540-
1585) aportan valiosas noticias sobre las costumbres y tradiciones de los pueblos mesoamericanos,
pone de manifiesto el interés de algunos colonizadores españoles por el pasado (antes de la
invasión) y el presente (periodo colonial) de México. Estos códices cobran aún más valor por su
aparato gráfico de coloridas láminas.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

También destacamos el Códice Mendoza, ordenado por el virrey Antonio de Mendoza para obtener
el panorama económico, político y social de la tierra recién conquistada. Fue creado en 1542 y
desde 1659 se encuentra alojado en la Biblioteca Bodleiana de Oxford (Reino Unido). Según la
autora de uno de los estudios más completos sobre el códice es el más completo de los códices
mesoamericanos conocidos, ya que combina la historia de las conquistas imperiales, las cuentas de
los tributos de las provincias y una crónica etnográfica de la vida cotidiana de la historia
prehispánica de México.
El Códice Mendoza también se considera una de las fuentes primarias para comprender cómo se
representaba el conocimiento en los códices mesoamericanos antes de la conquista. Las glosas en
español para cada una de las páginas anotadas, son una fuente invaluable para entender cómo
funcionaban estos objetos culturales. La yuxtaposición entre iconografía y glosa en español, no es la
única oposición entre dos sistemas de pensamiento: el códice fue pintado por escribas mexicanos
sobre papel español, en vez de papel amate o alguna piel de venado. Además, fue encuadernado
como los libros españoles.
Algunas costumbres mexicas a destacar son:
La fiesta de Tozi, la madre de los dioses, o fiesta Ochpaniztly. Se trataba de una fiesta solemne
que celebraban los mexicas al principio del cuarto mes de su calendario, coincidiendo con el 30 de
abril del calendario castellano. Su duración era de 20 días.
Era una fiesta para purificar a las madres paridas y según el Códice Durán “circuncidar” a los niños,
práctica que se conocía de los judíos pero que no se denominaba así por los indígenas ni tenía la
misma significación. A los niños se les presentaba al templo y se ofrecía a la diosa diversos
productos como corderos, tórtolas, gallinas, mantas, etc., molía maíz y elaboraban un pan llamado
“tamalli” con pan y miel, al que los castellanos denominaban “bollitos”, que no solo se hacía para la
ofrenda y para comer ese día.
Las madres previamente a la ceremonia habían tejido mantas y camisas para vestir a las mujeres y
hombres de sus familias que les acompañaban. Cada mujer tejía en cantidad y calidad según sus
posibilidades económicas
Llegada la víspera de la fiesta, cuando se ponía el sol, los sacerdotes del templo hacían una señal
agitando los caracoles (cáscara de un fruto que dentro tiene la semilla y al moverse suena) y bocinas
y con el tañer del tambor daba inicio la ceremonia. Las madres previamente habían alquilado a un
indio y a una india. Al indio se le daba un hachero de tea encendido (antorcha) para que alumbrara
el camino, y a la india al niño para que lo cargara. La madre llevaba las ofrendas a cuestas y el
conjunto se dirigía desde la casa familiar pasando por distintas ermitas de los barrios de la ciudad
donde iban dejando una ofrenda. Al llegar al templo mayor de Huitzilopochtli realizaban la ofrenda
principal a los sacerdotes, los cuales purificaban a las mujeres con palabras y ceremonias y
quedaban así limpias del parto.
Tras esto el sacerdote tomaba al niño y con una navaja de piedra (seguramente obsidiana) que traía
la madre, le hacían un pequeño corte en el prepucio y en la oreja. A la madre también le realizaba la
misma operación pero solamente en la oreja. Terminada esta ceremonia la navaja era arrojada a los
pies de la figura del dios y la madre pedía un nombre para su hijo, que dependía de su rango social:
si era de los grupos privilegiados le ponía un nombre de alto rango como “Moctezuma” (aunque si
la el bebé parecía triste y melancólico también le ponían este nombre porque Moctezuma II era
visto como un gobernante pusilánime que había permitido la entrada de los castellanos), pero si era
un macehual o campesino se le ponía el nombre del día en el que había nacido. Después de la
ceremonia del nombre, la madre ofrecía su ofrenda (según sus posibilidades) y se iba purificada a su
casa donde ofrecía comida a los que le habían acompañado y los vestía con ropa que les había
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

tejido, para agradecerles la honra que le habían hecho.


En cuanto a la estructura familiar, entre los aztecas el matrimonio monogámico era la regla
general, pero existía la poligamia, pues podía haber personas con varias esposas o esposos. La
estructura era patrilineal, así que la esposa se incorporaba al grupo o calpulli del esposo y si
enviudaba tenía que ser desposada por un hermano del difunto. Los hijos heredaban del padre y las
hijas de la madre.
En cuanto al ritual de matrimonio, el matrimonio era concertado entre las familias mediante un
contrato que fijaba el rango de cada contrayente. La ceremonia se celebraba en casa del hombre al
atardecer y estaba precedida de baños ceremoniales, intercambio de ofrendas, comida y danzas,
todo ello antes de retirase a orar y ofrecer sacrificios a los dioses durante cuatro días antes de
consumar el matrimonio. En el momento previo a la consumación se realizaba un banquete donde
estaban presentes suegras y suegros y se intercambiaban regalos, tras esto se anudaba la ropa del
matrimonio y se les colocaba sobre una esterilla donde una vez solos pasaban la noche juntos. Esta
esterilla se guardaba y se realizaba una ceremonia a los cuatro días de la consumación.
El divorcio estaba permitido, pero no el adulterio, que fue severamente castigado, incluso penado
con la muerte, tanto para el hombre como para la mujer y la tercera persona que había participado
en la deslealtad.
Para algunos autores, el matrimonio era parte de una estrategia política que engarzaba las diferentes
partes del imperio que se discutían el poder, y en esta estrategia la nobleza femenina actuó como
bisagra esencial que no sólo afianzaba los compromisos adquiridos sino que contribuyó a la
fundación de nuevos linajes y a la legitimación de estirpes.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

3.2. EL ESPACIO CONTINENTAL (ANDES)


1. El espacio en el mundo andino
1.1. El espacio físico
La región andina es uno de los ecosistemas más complejos que encontramos sobre la Tierra. Está
constituida principalmente por la Cordillera de los Andes, por la estrecha franja costera paralela a
su lado occidental y al litoral pacífico, y por la zona (más ancha) de piedemonte (yungas y valles
interandinos) y selva, situada en su zona oriental, que desciende en una suave pendiente hacia las
cuencas de los grandes ríos como el Amazonas en los llanos tropicales. Así, costa, sierra y selva
son tres paisajes muy diferentes entre sí pero íntimamente relacionados que configuran el espacio
andino, el cual está vertebrado por la cordillera de la que recibe el nombre.

IMPORTANCIA DE LA ALTITUD Y NICHOS ECOLÓGICOS


Las altas culturas que se van a encontrar los españoles en la Meseta de México vivirán en unos 2240
metros de altitud, y entre 2000 y 4000m en la región del Tawantinsuyu, donde estarían los incas.
En los Andes, distinguimos los Andes de Páramo y los Andes de Puna (alta montaña). En ambos,
serán importantes los diversos nichos ecológicos que se desarrollan según la altitud (piso de
algodón, piso del maíz, piso de la papa, piso del pastoreo), habiendo un gran control de ellos en
verticalidad.
Por tanto, lo importante para su orientación y habitabilidad serían los cálculos de distancias por
horas o días, el uso del este y del oeste (nunca norte y sur representado) y, sobre todo, «el arriba y
abajo».

Su organización política y social irán orientados al control de estos nichos ecológicos, aunque el
cómo variará en Mesoamérica y la región del Tawantinsuyu. Buscarán los excedentes para crecer
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

como grupo étnico y expandirse por toda la zona andina.

LA SIERRA
La sierra está conformada por la Cordillera de los Andes (5000-6000 metros), que se extiende
desde las costas del Caribe hasta el Estrecho de Magallanes al final del continente. La cordillera
articula todo el conjunto y en ella se hallan algunas de las cumbres más elevadas de la Tierra.
Además, entre cumbres encontramos la zona del Antiplano Andino, donde se desarrollaron las
grandes civilizaciones y se concentraba la mayor parte de la población (valles interandinos).

LA COSTA
En cuanto a la costa, es seca y desértica, pues en ella hallaremos algunos de los desiertos más
extremos del planeta como el de Sechura (desierto de costa) y Atacama (desierto de altura).

LA SELVA
En el caso de la selva, es húmeda y de vegetación exuberante. En ella se inician algunas de las
cuencas fluviales más importantes de la hidrografía mundial (Orinoco, Amazonas, Pilcomayo,
Bermejo, Salado) que discurren por los llanos tropicales, y donde destacamos la zona de la
Amazonía, vasta región de la selva tropical de la cuenca del río Amazonas.

LA VERTICALIDAD
El espacio andino, aunque, como vemos, está conformado por paisajes muy diferentes, se
caracteriza por la verticalidad o por lo que algunos autores han denominado como «el horizonte
vertical andino». En él podemos encontrar todo tipo de niveles o «nichos ecológicos» generados
por diversos factores que interactúan entre sí como la temperatura, la humedad, la altitud, la
intensidad y dirección de los vientos, las horas de insolación, el grado de inclinación y orientación
de las laderas, la pluviosidad, las características edáficas del terreno (características del suelo)…
Estos factores están en buena medida determinados por la altura, cuya variación provoca diversos
cambios en el paisaje: en cotas inferiores a los 1000 metros la tropicalidad determina las
condiciones de vida; por encima de los 3000 metros va desapareciendo la vegetación y el aire se
vuelve más seco; y a 4000 metros encontramos los páramos o punas, donde solo hallamos un pasto
ralo llamado ichu, salares de altura milenarios (ej.: Salar de Uyuni) y las nieves perpetuas.

EL CLIMA
En cuanto al clima, también dependerá de la altura y no de las estaciones, existiendo oscilaciones
térmicas diarias en ocasiones superiores a los 30 ºC, como ocurre en el Sala de Uyuni (Bolivia), a
3600 m, donde durante el día se llega a temperaturas altas pero durante la noche se pueden alcanzar
los -20 ºC.
Otro ejemplo es que si viajamos desde la ciudad de Cusco (3400 m) hasta la ciudad de Puno (3800
m), la temperatura irá descendiendo conforme aumente la altura, sin embargo durante el mediodía,
cuando el sol se encuentra más vertical, la temperatura en la zona más elevada rondará en torno a
los 20 ºC llegando incluso a provocar quemaduras solares (estamos muy cerca del sol).
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

CONCLUSIÓN
A pesar de estas hostiles y cambiantes condiciones, los hombres y mujeres andinos (los runas),
supieron adaptarse a este ambiente tan diverso y complejo y supieron cómo sacar ventaja de él.
Aplicaron métodos y sistemas de explotación de recursos que no solo les permitió sobrevivir y
multiplicarse sino generar el excedente necesario para desarrollar grandes civilizaciones,
principalmente en el Altiplano Andino. Las sociedades alcanzaron un alto nivel de autonomía
económica y una gran diversidad productiva basándose en la complementariedad de los
ecosistemas.
Por lo tanto, el área Andina es el territorio ocupado por los pueblos cuya relación con su medio
ambiente se resolvía por medio de la integración mar-cordillera-bosque tropical, un eje transversal
que configuraba una racionalidad económica constante en toda el área pero con una articulación
diferente según el periodo al que nos refiramos.

1.2. El espacio conceptual y simbólico: el Tawantinsuyu


Los incas configuraron su imperio a partir de una particular visión del mundo y del espacio, que fue
anterior a la constitución de este imperio. Su mundo y su universo no fueron solamente geográficos,
sino fundamentalmente conceptuales y simbólicos.
Su imperio era el Tawantinsuyu, que significaba «las cuatro partes del mundo»:
Tawa: 4; Suyu: Parcialidad:
• Hanansaya:
◦ Chinchaysuyu
◦ Andesuyu
• Urinsaya:
◦ Collasuyu
◦ Contisuyu (capital = Qusqu)
Este concepto no hacía referencia exclusivamente a una división geográfica, sino que era algo más,
ya que estas «cuatro partes» nos e correspondían con los cuatro cuadrantes generador por los puntos
cardinales manejados en el mundo occidental; únicamente el este y el oeste eran entendidos en la
cosmovisión andina como orientación y referencia calendárica por la salida y la puesta del sol.
En el espacio andino es mucho más importante el uso de la verticalidad, como ya se ha mencionado.
El mundo es vertical y, por tanto, existen dos localizaciones básicas: lo que está arriba, Hanan, y lo
que está abajo, Urin; que constituyen dos mundos contrapuestos pero coordinados (el mundo de
arriba o Hanansaya y el mundo de abajo o Urinsaya.
A su vez, estos mundos de arriba y abajo se dividen en dos partes: el Chinchaysuyo y el Andesuyo,
ambos de arriba; y el Collasuyo y el Condesuyo, ambos de abajo. El conjunto de estas partes forma
el Tawantinsuyo: el mundo; y la ciudad de Cuzco es el corazón del mismo u «ombligo del mundo»,
como su nombre indica en quechua («Qosqo»). En esta ciudad sagrada se halla el eje desde el que
parten los «ceques», líneas imaginarias que dividen el mundo en estas cuatro partes y que van desde
este punto central hasta el confín de la Tierra. Cuzco además se dividía en dos partes o suyos,
Cuzco de arriba o Hanancusco, y Cuzco de abajo o Urincusco.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Estos conceptos adaptados a nuestras formas actuales de entender la geografía quedarían de la


siguiente manera:
El Chinchaysuyo comprendería el territorio desde Cusco hacia el
noroeste, pasando por la sierra central y Cajamarca hasta Ecuador; el
Andesuyo comprendería la tierra situada desde Cusco al norte hacia la
selva y las cuencas de los grandes ríos amazónicos; el Collasuyo,
siguiendo la cordillera hacia el sureste, hacia la región del Collao (de ahí
el nombre), las tierras altas del Titicaca y la actual Bolivia; y el
Condesuyo, hacia los valles, la costa y el desierto. Los dos suyos más
importantes, los más grandes, ricos y poblados eran el Chinchaysuyo y el
Collasuyo, es decir, toda la cordillera a partir de Cusco hacia uno y otro
lado.

2. Sociedades preincas
Anteriores a los incas, nos encontramos en el espacio andino con una gran cantidad de señoríos y
grupos culturales de los que destacamos dos focos regionales que tuvieron una gran influencia en el
futuro: Moche y Tiwanaco.
En los valles de Trujillo y Lambayaque se desarrolló la cultura mochica. El desarrollo agrícola de
esta región llevó a los señores de moche a convertirse en los más importantes y poderosos de la
zona. El regadío se aplicó intensamente extendiendo los cultivos, a lo que se sumó una gran
actividad pesquera. Además, pusieron en práctica una política militar muy agresiva que les permitió
capturar miles de esclavos entre los grupos vecinos, por lo que las castas sacerdotales y militares
acabaron fundiéndose en un señorío teocrático con una intensa actividad social, polírica y militar.
Sin embargo, no existieron grandes ciudades, salvo los enormes complejos ceremoniales
construidos en adobe y pintados de vivos colores. La guerra y el continuo trajín de hombres,
tributos y mercancías caracterizaron la vida en esta región.
En los alrededores del lago Titicaca, nos encontramos con la cultural regional de Tiwanaco, que
tuvo una extraordinaria influencia en todo el sur andino. Tuvieron que combinar diversas estrategias
de cultivo y manejar un complicado sistema calendárico, ya que la elevada altitud (por encima de
los 4000 metros), la gran aridez y pluviometría estacional necesitó la complementariedad de
productos procedentes de diversos microambientes como valles y punas (ganadería de altura), a los
que accedían a través de intercambio, construir terrazas escalonadas para aprovechar las laderas,
explotar los salares de altura para conservar la carne, poner en uso canales de riego y crear
almacenes para guardar el excedente. Estas técnicas permitieron no sólo mejorar la producción
arícola, sino el establecimiento de grandes contingentes de población en altura. Pero, sobre todo,
hay que señalar que el núcleo principal de esta cultura no residió en estas u otras realizaciones
materiales, sino en el conocimiento y el manejo de los calendarios, que resultaban básicos para
regular las siembras y las cosechas, aprovechando los períodos de humedad y sequía.
El templo, del que destacamos el de Pumapunku, observatorio astronómico y centro de este
conocimiento, consistía el eje en torno al cual giraba la vida, mientras la población se diseminaba
por los terrenos de cultivo. La relación íntima del hombre con los dioses se hacía a través de los
sacerdotes, que leían en los astros, en los vientos, en las lluvias, en las tormentas y en los temblores
los mensajes de su divinidad, lo que se hizo consustancial a la supervivencia y al modelo cultural
Tiwanaco.
Esta cultura regional tuvo una importante influencia sobre los incas, quienes decían proceder
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

también del Titicaca, e incorporaron buena parte de los elementos aportados por Tiwanaco.
Agricultura estandarizada, sistemas y técnicas de regadío, construcción de terrazas, almacenes para
guardar el excedente, intercambio de productos con otras zonas, manejo intensivo de los diversos
microambientes, especialización productiva de una parte de la población ganadera en las zonas de
altura, métodos de conservación de los alimentos, notable alfarería polícroma, telares cada vez más
perfeccionado, son algunas de las características comunes de todas estas culturas preincas que
influyeron bastante sobre los incas, quienes incorporaron buena parte de los elementos aportados
por Tiwanaco, fundamentalmente.
En torno al siglo VI, podría afirmarse que, a grandes rasgos, los desarrollos regionales
evolucionaron hacia formas cada vez más belicistas: poco apoco, los señoríos teocráticos se
transformaron en señoríos militares que, en su afán por acumular mayores recursos, más tierras y
más servidores, expandieron su poder sobre sus vecinos por la fuerza de las armas. La
multiplicación de los centros urbanos a partir de los centros ceremoniales ofrecía grandes beneficios
a quienes emprendieran su conquista: mucha población concentrada, almacenes copiosos, riquezas
acumuladas… Las ciudades y santuarios fueron así objetivos prioritarios de estos pueblos en
expansión.
Uno de estos grupos étnicos en forma de señorío militar es el de la ciudad de Wari, que inició una
veloz expansión que les llevó a ocupar (si no siempre militarmente sí a influir en lo político y lo
económico) el inmenso espacio situado entre el sur de la línea ecuatorial y el lago Titicaca, es decir,
una expansión dirigida fundamentalmente hacia las zonas de mayor actividad agrícola. Aunque no
conocemos con exactitud las razones de su expansión, parece que la fomentó un desarrollo urbano
originado por el aumento de la producción artesanal, fundamentalmente textil, que necesitaba una
gran cantidad de productos agrarios para mantenerse.
Cabe destacar que, en sus campañas de invasión, los grupos Wari trasladaron a pueblos completos
hacia zonas donde les fueran de mayor utilidad, usándolos como mano de obra más o menos
forzada. Esta población trasladada era conocida como mitimaes, en quechua «colonos», y fue un
sistema que luego los incas utilizaron profusamente. Además, los Wari trazaron una importante red
vial que comunicaba las ciudades entre sí con los centros productivos, y manejaron la tributación
como un instrumento fundamental en la construcción del Estado, ejemplo que más tarde también
seguirían los incas.
Wari fue evolucionando en la medida que las culturas sobre las que se asentaron, por conquista o
por sometimiento político, influyeron sobre su modelo social, especialmente Mochey Tiwanaco
(mayores niveles de organización social, política y religiosa), de quienes se incorporaron recursos
materiales, humanos, dioses, conocimientos y técnicas. Más tarde, cuando se produjo el declive de
Wari y comenzaron a surgir de nuevos señoríos étnicos de alcance regional, muchos de ellos
contaron con una influencia Wari muy marcada. Por tanto, tras el declive de Wari, los incas
aparecieron como el nuevo poder centralizados e integrador de todas estas realidades regionales en
el Tawantinsuyu, incluyendo a las anteriores Moche y Tiwanaco, a Wari y a todos los grupos
culturales que había absorbido; todos estos grupos preincas les aportaron conocimientos sobre
técnicas agrícolas y aprovechamiento de los microambientes, el modelo de intercambio de
productos con otras regiones, los sistemas de regadío, conocimientos sobre la conservación de los
alimentos y almacenaje, y el modelo de expansión de carácter político-militar que se basaba en el
uso de mitimaes o colonos.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

3. Expansión del imperio inca y consolidación del Tawantinsuyu


El mundo inca es un mundo mítico, por lo que para explicar su origne crearon una leyenda que le
sproporcionó buena parte de sus señas de identidad. Decían proceder del lago Titicaca, desde donde
una pareja original inició un largo periplo hasta encontrar un lugar donde sus cuatro hijos se
asentaron, el que terminó siendo una cueva cerca de Cusco. Dos de ellos fueron los indicadores del
linaje, cuyos descendientes serían incas, pero todos los futuros miembros de este grupo formaban
parte de las panacas imperiales(familias). Desde esta pareja hasta el inca mandado matar por
Francisco Pizarro (Atahualpa), la tradición nos habla de doce generaciones, doce incas, cada uno
de los cuales con su propia panaca.
La expansión incaica fue militar, pero también política. En muchos casos, los pueblos eran
sometidos, lo que implicaba una tributación y seguramente un cambio en las autoridades, aunque
también era posible establecer alianzas a través de matrimonios de las princesas incas con los
señores étnicos locales. Era un proceso de expansión de un señorío étnico similar al de Wari
(señorío étnico preinca que había dominado la región andina), pero con más éxito organizativo,
militar, político, económico y religioso.
El primero de estos grandes señores (Manco Cápac) inició la conquista del Valle de Cuzco,
expulsando y sometiendo a los otros pueblos que allí vivían. Esta ocupación marca el inicio de la
expansión que en dos generaciones les hizo dueños del Valle Sagrado y otras zonas agrícolas
importantes de los alrededores. Así, buscando las mejores y más pobladas áreas productivas,
llegaron hasta el lago Titicaca y a la sierra central, la cual estaba controlada por los chancas, un
señorío étnico al que tuvieron que vencer por las armas, y aque constituían otro señorío en
expansión similar al de los propios incas pero con un nivel de organización política y militar
menor. Pero la victoria se cobró la destrucción de Cuzco, lo que permitió su refundación y el
establecimiento del Tawantinsuyu: la plasmación física y política del nuevo Estado centrado en la
ciudad de Cuzzo. Este hecho supuso el inicio de un nuevo tiempo, en la cronología incaica, que
corresponde en la cronología occidental con el año 1438.
No obstante, la fuerza de los señoríos étnicos tradicionales continuó perviviendo por debajo de la
dominación inca, por lo que en muchos territorios andinos existió sometimiento pero no
claudicación. Además, uno de los problemas que encontraron en esta expansión fue la hostilidad de
los grupos indígenas no serranos, sino de las yungas de la costa. Para los incas estos pueblos eran
bárbaros que no se dejaban dominar, asaltaba las fronteras del incario, asolaban poblaciones,
quemaban cosechas y robaban los almacenes. Para terminar con estos saqueos, los incas
organizaron frecuentes operaciones de castigo en los límites del Imperio y construyeron fortalezas
en todas las fronteras para poder defenderse de estas incursiones que supusieron un gran problema.

4. La organización del Imperio Inca


4.1. Gobierno territorial, funcionarios, red de comunicaciones, mita y anaconas
La organización de todo este inmenso territorio es lo más importante y relevante del período
incaico. La suma de experiencias y realidades, de un modo de producción andino, de unas formas
de relación andinas, de una cosmogonía y cosmovisión andinas, cobró cuerpo en el incario y se
homogeneizó hasta transformarse en un modelo común que afectó a millones de habitantes y a
regiones muy diferentes.
Esta organización comienza en su centro: Cuzco. El conjunto de ayllus (familias étnicas que
controlaban un territorio) anteriormente instaladas en lo que luego sería el Cuzco incaico, fue
sometido con rapidez e incorporado el paisaje urbano. La ciudad imperial de Cuzco, refundada por
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Pachacuti, tenía la forma de un puma y suponía una gran extensión poblada sobre la que se
ubicaban los templos, los palacios, las plazas y el caserío urbano con calles trazadas linealmente en
torno a la gran plaza central (Huacaypata) que sorteaban los cursos de dos ríos y de la intrincada
red de canales de la ciudad que se convirtieron en una de las claves del éxito agrícola de Cuzco.

EDIFICIOS
En cuanto a los edificios, el templo más importante era la coricancha o «casa del sol», centro desde
el cual se trazaban los ceques o líneas invisibles que dividían el mundo en cuatro «suyos» y que
comunicaban este templo con los adoratorios o huacas diseminados por la geografía cusqueña y sus
alrededores (en los cerros que rodeaban la ciudad). Los palacios eran igualmente importantes, no
sólo la «casa del Inca» donde vivía el Inca, primera autoridad y jefe supremo de carácter divino;
sino que cada inca y otros miembros de las panacas reales fueron construyendo su propio recinto.
En la parte más elevada de la ciudad se alzó la inmensa fortaleza de Sacsahuanan, un recinto
ciclópeo de piedras colosales con muros escarpados que servían al mismo tiempo como resguardo
de la ciudad y como santuario.

PROVINCIAS
Sin embargo, aunque la geografía andina quedó centralizada en Cuzco, la expansión incaica sobre
tantas y lejanas regiones, y el sometimiento de pueblos y señoríos tan diversos, obligó al
establecimiento de un complicado sistema de gobierno territorial: el espacio andino quedó
dividido política y administrativamente en un mosaico discontinuo de «provincias» con muy
distintos tipos de gobierno, autoridades y especializaciones productivas. Estas provincias eran de
distinto tipo, conformando un sistema bastante complejo:
• Provincias reconocidas como la tierra de determinadas parcialidades, grupos étnicos o
antiguos reinos o señoríos con quienes se había establecido algún tipo de pacto: lupakas,
pacajes, chupaychus, carangas, urus… Estas provincias tributaban directamente a Cuzco.
• Provincias que pertenecían al inca o al culto de una deidad, y les tributaban directamente a
ellos.
• Provincias bajo el dominio de una panaca (donde tenían las tierras de su propiedad), a la
que tributaban.
• Provincias creadas ex profeso por determinados motivos, bien para asegurar su posesión en
un territorio difícil o bien para producir bienes específicos. Estas provincias fueron pobladas
con mitimaes, es decir, familias o grupos de colonos (herencia de Wari, como ya habíamos
visto antes) que eran llevados hasta allí procedentes de otra región. En los primeros tiempos,
estos colonos procedían de la región de Cuzco, y los trasladaban a otras para asegurar su
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

dominio o, si se trataba de buenas zonas agrícolas, para implementar cultivos, aumentar la


producción y remitirla a la capital o a otras regiones donde fuera necesaria. Más tarde,
conforme la expansión alcanzó a territorios más alejados, se trasladaron pueblos completos
de cualquier región y a muy largas distancias, bien para evitar alzamientos de los mismos
llevándolos a otras zonas, o bien mezclando grupos de población en toda la región andina,
pero tuvo el efecto de extender y homogeneizar el modo de producción, agrícola y pecuario
y de una especialización manufacturera, más exitoso. Fue, sin duda, el mayor impacto que el
incario tuvo sobre la región, más allá del dominio político; y evidentemente, lo que más
perduró.
En muchas de estas provincias se simultanearon y superpusieron los cultos imperiales en antiguos
centros ceremoniales, como en Pachacamac, cerca de Lima. En algunas de ellas también se
implantó el sistema de ceques en santuarios que regularon la actividad agrícola mediante un sistema
muy similar al cusqueño.
Este complicado sistema de «provincias» dispersas exigía una poderosa, numerosa y eficiente
organización estatal: un número importante de funcionarios regularon producciones, recolecciones,
almacenamientos, envío y tributaciones no sólo hacia Cuzco, el inca o los santuarios, sino entre las
diversas regiones. Estos funcionarios utilizaron un sistema de contabilidad bastante complejo de
base decimal y un instrumento de cálculo y anotación llamado quipu. El sistema funcionó como
siguiendo el «horizonte vertical andino», comprendiendo a toda la región, como por ejemplo: zonas
especializadas en manufacturas textiles enviaban sus productos a otras áreas, recibiendo de ellas
maíz, papas u otros productos; áreas sometidas a desastres naturales (seísmos, sequías, derrumbes,
inundaciones, heladas) recibían de otras regiones lo necesario para su recuperación. La
reciprocidad y la redistribución operaban a escala imperial.

RED DE COMUNICACIONES
Además, se necesitaba una red de comunicaciones que enlazara todo el Tawantinsuyu. La trama de
caminos incaicos (y en especial el «cápac ñan» o gran camino) constituyó otra de sus más
importantes aportaciones a la integración andina. Los «chaquis» o mensajeros, situados a cierta
distancia unos de otros, se encargaban de transmitir o portar la información que, por estos caminos,
hacían correr la noticia o llevar el mensaje, que así podía llegar con rapidez de un lugar a otro. En
estos caminos se situaban, perfectamente escalonados y a la manera de posadas, «tambos» o
apostaderos en los que existía una reserva de comida y otras ayudas para los viajeros.

MITA
Los servicios y prestaciones que necesitara el inca de sus súbditos debían ser aportados por estos
mediante la mita (turno), una especia de obligación de servicio temporal para realizar una actividad
concreta. La comunidad o el grupo sujeto a esta tributación debía ofrecer un número determinado de
«mitayos» por un tiempo y para una tarea específica (construir caminos, terrazas, canales, abastecer
a los tambos, cultivar determinadas parcelas…).
La mita entraba también en el sistema de redistribución del incario y se entendía como una
contraprestación más de la relación de reciprocidad entre el inca y sus vasallos. De la mita se
obtenían también contingentes necesarios para conformar el ejército imperial, marchando al
combate los mitayos aportados por los diferentes ayllus con sus señores al frente.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

YANACONAS
Las yanaconas (yana, criado) eran los sirvientes o siervos exclusivos del inca, y no se debían a
ningún otro señor ni servicio. Constituían un grupo especial entre los trabajadores como
privilegiados por servir al soberano. Estos yanaconas contaban con especiales exenciones, y estaban
distribuidos por todas las provincias.

En resumen, lo más interesante del período incaico fue que lograron en muy breve plazo la
articulación de un enorme espacio en torno a una hegemonía política y religiosa concreta y, aún más
importante, la homogeneización de un modo de producción y de relaciones.

4.2. El ayllu
Este modelo que acabamos de comentar tenía como cédula básica de la sociedad, raíz o nudo
articulador básico el ayllu, cuya existencia era muy anterior a los incas y parece que muchos de
ellos con sus señores naturales pasaron a formar parte del imperio.
El concepto es complejo, pero básicamente el ayllu estaba constituido por un conjunto de
productores más o menos dispersos, unidos por lazos cooperativos, a través de los cuales el grupo
conseguía la autonomía económica. Además, estos lazos se reforzaban con la aceptación por parte
de todos de que pertenecían a la misma familia étnica, de que tenían un linaje común (en la medida
en que se identificaban entre ellos y ante otros como descendientes de un mismo antepasado, real o
mítico); también por estar ligados a una tierra o medio físico concreto, cuyos elementos naturales
les aportaba las señas de identidad colectiva que los consolidaba como miembros de la misma
«familia», por compartir una misma lengua, también vestían con tejidos y colores similares,
compartían unas formas alimenticias concretas, un mismo tipo de cerámica, etc.
No tenían un tamaño en concreto, a veces podía estar compuesto por pocas unidades familiares u
hogares y otras veces podían estar compuestos por pequeños ayllus que formaban uno grande, a la
manera de una red de hogares o familias. En este proceso de identificación colectiva,
incorporándose un mayor número de hogares, transitamos desde el ayllu a la comunidad, al grupo
étnico o al señorío. Estas relaciones de parentesco conferían a sus integrantes una sensación de
unidad y cohesión que llegaba a constituir un férreo caparazón ante cualquier influencia externa
(incluso las relaciones eran endogámicas).
La tierra y sus bienes potenciales, los pastizales, las aguas, los animales, los frutos, pertenecían al
dominio colectivo del ayllu, o de la comunidad compuesta por varios de ellos. El acceso y
explotación de estos diversos microambientes eran llevados a cabo por cada uno de los ayllus o en
colaboración con otros ayllus, de tal forma que todos los integrantes tenían un objetivo común,
supusiera más o menos esfuerzo conseguirlo. Además, desde el ayllu se tenía derecho a los bienes,
y si estos crecían el grupo entero aumentaba su prestigio. Estamos, pues, ante un sentido colectivo,
no individual, de la movilidad social y el progreso económico en función del éxito obtenido en el
manejo de los recursos disponibles. Con los dioses y las huacas locales sucedía lo mismo:. Eran
parte de la colectividad y nadie podía usufructurarlos por sí solo. Lo religioso era una parte
fundamental de lo colectivo.
En el interior del ayllu no sólo se trataba de compartir recursos. El trabajo o, mejor dicho, la fuerza
de trabajo, era igualmente repartido. El esfuerzo colectivo destinado al trabajo era lo que llamaron
«mingas», a las que se acudía para realizar tareas comunitarias en momento señalados. Al igual que
se intercambiaban los bienes aportados por el esfuerzo de cada hogar o grupo de hogares en los
diferentes nichos ecológicos, también se distribuía entre ellos el trabajo de forma compensada. En la
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

medida en que este tipo de relación podía extenderse a las articulaciones entre diversos ayllus,
aumentando la fuerza de trabajo, se posibilitaba alcanzar mayores y más lejanos recursos o
emprender tareas colectivas más ambiciosas. Esto fue lo que permitió, por ejemplo, la construcción
masiva de andenes de cultivo o canales de riego con el consiguiente aumento de la producción.
Estos intercambios de bienes o servicios debían ser equitativos en función del principio regulador
de la reciprocidad: el ayni(«retorno»), entendido como mutualidad, trabajo recíproco. Incluso
existía un aynicamayok, un guardián o juez de estas relaciones equilibradas, pues debía de
controlarse que uno diera el otro lo mismo que recibía. Además, se aplicaba el término tinku: lo
unido, lo completo, lo equilibrado. Ayni y tinku regularon así los intercambios recíprocos de otdo
tipo, las obligaciones mutuas. Esta reciprocidad se ajustaba también no sólo entre los miembros de
ayllu, sino entre el ayllu como colectivo y sus integrantes, es decir, debían de trabajar para la
comunidad en la medida en que la comunidad trabajara para cada uno de ellos.
Sin embargo, existían asimetrías marcadas en estas relaciones, que generaron estratificaciones en el
interior de los ayllus y las comunidades. No todos los hogares eran iguales en tamaño y, por tanto,
en capacidad productiva, por lo que el aporte al ayllu se realizaba desde una posición de
desequilibrio en cuanto a la carga laboral que a cada uno correspondía aportar, lo que provocaba
que unos tuvieran que trabajar más que otros. Por lo tanto, el sentido de lo comunitario y la
aplicación de los conceptos ayni y tinku, no conlevaba necesariamente un régimen igualitario de
deberes, obligaciones y derechos. Esto también afectaba en los grupos más numerosos a la hora de
mantener mayor lealtad al ayllu original o al colectivo superior, lo que repercutía en el prestigio que
el ayllu adquiriese dentro de la comunidad, el trabajo que debían portar y los bienes y servicios que
debían recibir.
El regulador de todas estas complejas relaciones era el curaca, jefe de la comunidad o del pueblo, o
incluso del ayllu si era muy grande. Debía pertenecer al linaje fundador y su autoridad le venía dada
a través de la sucesión de su parentela directa. El prestigio de su liderazgo lo obtenía en función de
cómo manejara el complejo sistema de obligaciones y derechos. Sus funciones eran las siguientes:
representaba la identidad colectiva, organizaba el trabajo y repartía las tierras, se encargaba de
enviar trabajadores a los distintos nichos productivos, velaba por el almacenamiento y consumo de
los bienes comunales, defendía los intereses colectivos en sus relaciones con otros grupos y dirigía
rituales religiosos. Las contrapartidas que recibía eran laborales y productivas: la comunidad le
trabajaba la tierra, le entregaba productos procedentes de otros nichos ecológicos, le tejía la ropa, le
ofrecía ofrendas por su dedicación a sus responsabilidades con motivo de las fiestas religiosas, le
construía su vivienda, etc.
Pero su mecanismo fundamental de poder lo constituía el otro gran principio articulador del mundo
andino junto con la reciprocidad: la redistribución. El curaca era el que redistribuía los bienes
obtenidos colectivamente, especialmente durante días señalados (siembras y cosechas, festividades
relacionadas con las huacas locales o el calendario solar). En estas ceremonias de redistribución
también se mantenían los principios ayni y tinku, aunque no se aplicaban con un sentido
completamente igualitario para todos los miembros de la comunidad.
Esta redistribución tenía que ver con principios de jerarquía, con la cantidad de tierra asignada
para el trabajo, con la cantidad de mano de obra aportada por los mismos, con la dificultad o el
tiempo asignado a algunos hogares o individuos de varios hogares en tareas de mitmaqunas de otros
nichos ecológicos, o en trabajo para la comunidad, con el mayor o menor cantidad de tributo que se
les exigiera por parte de otro señor étnico superior o por el inca, o para el culto de los dioses locales
incaicos… en otras palabras, el curaca normalmente tenía muchas posibilidades de ir manejando la
redistribución a favor de unos y otros, de manera que generaba red de lealtades a su persona y a su
grupo cuando no a todo un ámbito clientelar. Con este sistema, el curaca se aseguraba en el futuro
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

mayores aportaciones de productos que aumentaban su poder porque los volvía a situar en el
circuito de redistribución.
Este juego de lealtades generaba también conflictos de autoridad en el seno de las comunidades, de
manera que las relaciones de poder se mantuvieron siempre en un equilibrio que, si en algunos
momentos fue precario /sobre todo cuando se produjeron interferencias externas como las
invasiones Wari), en otros no hicieron más que consolidar el papel protagónico de los curacas en el
manejo político y social de las comunidades.
Si ponemos esto en relación con lo anteriormente explicado sobre la superposición de la hegemonía
incaica en el espacio andino, entenderemos mucho mejor el juego de alianzas que conformaron la
base de su poder y de su imperio; un juego que duró relativamente poco tiempo y que vino a
descomponerse con la invasión y la conquista europea.
Un ejemplo práctico para entender este sistema andino de redistribución, control de recursos y
circulación de bienes, es el de los intercambios de los Chupaychus, un grupo étnico del que estaba
ubicado en el Perú actual, compuesto por unas 2500 o 3000 unidades domésticas.
Su grupo étnico, es decir, el lugar donde se concentraba el mayor número de unidades domésticas,
estaba situado en la sierra (3000 metros aprox.), y allí se encontraban los recursos más importantes,
como los tubérculos y las diversas variedades de maíz. A unos tres días de marcha, hacia las alturas
de la puna, a más de 4000 metros, estaban los rebaños de camélidos y las salinas; mientras que en
los valles y las yungas se hallaban los cocales, el ají, el algodón, maderas y otros productos de la
selva. Estos recursos más alejados estaban controlados por pequeñas colonias chupaychu que se
hallaban asentadas de forma permanente en el lugar (como satélites del grupo étnico).
Uno de los elementos clave de este modelo de circulación es que las colonias alejadas del núcleo
solían estar acompañadas de otros grupos étnicos, formando así colonias «multiétnicas», pues esos
nichos ecológicos donde se explotaban determinados productos eran competidos con los mitimaes
(colonos) de varios grupos, cuyos núcleos se hallaban también en la sierra.
La circulación de los diversos productos se realizaba a través de las diversas formas de reciprocidad
ligadas al parentesco; así, varias veces al año, los mitimaes «bajarían» de la puna o «subirían» de
las yungas hasta el núcleo étnico para intercambiar la lana, la cosa o los ajíes por papas, maíz o
quinua con sus parientes y aliados que
vivían en los valles serranos, quienes a
su vez intercambiarían con otros
parientes y aliados del propio núcleo
étnico. Los productos circulan,
atraviesan grandes distancias, pasan de
mano en mano, pero lo hacen sin que
ello dé lugar a que surja, al menos en
el área central del mundo andino, un
sistema de mercados.
Cabe destacar que este sistema de
control vertical de varios pisos
ecológicos también funcionaba con
señoríos étnicos muchos más grandes,
no sólo con grupos demográficamente
limitados como los chupaychus.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

4. LA OCUPACIÓN DEL ESPACIO CARIBE


El proceso de expansión de los pueblos ibéricos a finales del siglo XV vino a ser la culminación de
un deseo, largamente sentido, de la sociedad europea de finales de la Edad Media. Así lo
demuestran relatos, la existencia de mitos y de creencias que formularon durante siglos un
imaginario que incentivó los deseos de expansión y de apetencias de lo exótico, ubicado en el
Oriente. Pero es que, además, dicho proceso vino a constituirse en uno de los fenómenos más
transcendentales de la historia de la humanidad. Nunca antes ni después, unos pocos hicieron tanto
en tan poco tiempo. Como veremos, en menos de 50 años, Castilla se anexó casi dos millones de
km², territorio sobre el que de alguna manera se hace sentir la presencia, el poder de la Monarquía
Hispánica.
Por numerosas circunstancias la Península Ibérica tenía la situación geográfica precisa, además de
los hombres y los medios necesarios para afrontar tamaña empresa.
Las puras casualidades o “los conocimientos previos” de Cristóbal Colón, y la rapidez con que se
afrontó la exploración y conquista de las islas más importantes del Caribe, colocaron desde el
primer momento, a los conquistadores españoles en la más optima de las situaciones estratégicas
para poder afrontar la expansión continental. Empresa que se abordó mediante una serie de etapas
escalonadas y desde una serie de núcleos o centros expansivos.
El primero las Islas del Caribe, concretamente desde la Isla Española (Santo Domingo). Desde allí,
entre los años 1492 a 1528, las expediciones de conquista se dirigen al resto de las Islas (Puerto
Rico, Jamaica y Cuba) y después hacia Tierra Firme donde se funda Santa María la Antigua del
Darién dando lugar a la creación de la Gobernación de Castilla del Oro, desde donde se proseguirá
la expansión hacia la Costa Mexicana y hacia el norte de la actual Venezuela.
Un segundo núcleo expansivo lo constituye la Antigua Panamá entre los años 1509 a 1519. Desde
esta zona la influencia española llegará por el Norte a los territorios cercanos de Centroamérica, se
descubrirá la Mar del Sur y por ese nuevo camino se llegará al Perú.
Conquistada la Capital del Imperio Azteca (México), la capital del que será el Primer Virreinato se
convierte en el tercer gran núcleo expansivo. Desde allí se recorre América central, el resto del
territorio del actual Norte de México y gran parte del sur de los futuros Estados unidos de
Norteamérica.
Sometido el Imperio Inca, el Perú, de 1532 a 1535 se constituye en el cuarto núcleo de expansión
continental. Desde allí y hacia el norte se llega al reino de Quito y a la Nueva Granada; por el sur se
recorre y conquista lo que sería el alto Perú y gran parte de Chile, por lo menos hasta la frontera que
constituye el río Bio-Bio.
Además de estos grandes núcleos, se constituyen otros centros expansivos secundarios: La isla de
Cuba que sirve de plataforma para la expansión por la Florida. Quito que servirá para lo mismo,
pero hacia el Amazonas y Asunción que se ocupará de la cuenca del Río de la Plata, Buenos Aires y
toda la vertiente suroriental de la Cordillera de los Andes".

1. El mundo europeo en la expansión atlántica. El «descubrimiento» de América y sus causas


El mundo europeo en el momento de la conquista de América estaba caracterizado por la obsesión
de las potencias europeas de la expansión comercial a través de las rutas marítimas, y
particularmente por la rivalidad entre Castilla y Portugal para conseguir este objetivo: a finales del
siglo XV, el océano había dejado de ser un misterio y los navíos portugueses y castellanos
pugnaban por llegar antes y más lejos. La búsqueda de nuevas y ricas reservas de metales y riquezas
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

había disparado la imaginación acerca de su ubicación, siempre mar adentro; por eso aparecen en
los mapas de la época nombres míticos de tierras teóricamente situadas más al oeste.
Lamentablemente, para llegar a ellas se decía que había que adentrarse muchas leguas en unas rutas
que aún no era conocidas ni manejadas.
Portugal había comenzado a expandirse por la costa africana, a lo largo de la cual iba creando
feitorias (puntos de entradas concretos donde se abastecían de productos y esclavos), y se convirtió
en la primera potencia en circunnavegar entes continente y ostenta así el monopolio de la ruta hacia
la India, donde comerciaba con las mercancías que había conseguido. La guerra luso-castellana de
1475-1479 por la sucesión al trono de Castilla, llevó a la futura Isabel I a conceder patentes de
corso mediante la fórmula de la «capitulación» a aquellos particulares que quisieran emprender
acciones contra los portugueses, con el fin de estorbarles el tráfico o para hacer «recates»
(intercambios de productos de mucho valor) en las costas de control lusitano. Se crearon así las
llamadas «sociedades de armada» que asociaban a los miembros de la tripulación con mercaderes
que financiaban las empresas marítimas a cambio de una parte del beneficio, del cual 1/5 pasaba a
la hacienda Real. Este modelo se seguirá manteniendo durante la conquista del Caribe.
La rivalidad entre castellanos y portugueses por el tráfico oceánico (presente con o sin guerra),
había ido revolviéndose en varios tratados firmados entre las dos coronas. Uno de los más
importantes fue el Alcaçovas (1479), por el que se prohibía a los castellanos navegar al sur de las
Canarias, que quedaban para Castilla mientras que Portugal poseería Madeira, las Azores, Cabo
Verde y la Mina de Guinea. La línea que marcaba los límites para ambas potencias existió, pero las
disputas siguieron y las denuncias por parte de los portugueses debidas a las violaciones del tratado
fueron frecuentes.
Este es el contexto que lleva a Cristóbal Colón, un comerciante genovés, a proponer a los reyes de
Castilla y Aragón una ruta alternativa desde las Canarias hacia el oeste buscando la India y sin
vulnerar la línea de Alcaçovas. Colón había vivido en Madeira y Lisboa, donde había ganado
experiencia y conocimiento de la mano de los navegantes portugueses en sus rutas por el Atlántico,
océano que se llevaba surcando profusamente desde 1450; además, había estudiado en la escuela de
navegantes de Sagres y conocía los mapas de Toscanelli, quien ya le había planteado al rey de
Portugal una posible ruta hacia las islas de las especias en dirección oeste. Colón también le ofreció
la idea a Juan II de Portugal, pero este la rechazó, pues ya tenían asegurada la ruta africana. El
objetivo de Colón, además de demostrar su teoría, era de tipo comercial, ya que tenía relaciones con
uno de los más poderosos hombres de negocios del sur, el duque de Medinaceli, y con Jacobo
Berardi, un rico mercader florentino afincado en Sevilla, por lo que es muy probable que a estos
también les hubiera ofrecido la empresa, pero estaba claro que debía capitularse directamente con al
Corona.
El principal aliciente d ellos Reyes Católicos para aceptar este planteamiento era que, si los
cálculos de Colón eran correctos, Castilla podía adelantarse a Portugal en la Carrera de la India y
llegar a las islas de las especias en menos tiempo sin tener que realizar el largo camino africano, por
lo que podría aportar grandes beneficios para la Corona castellana. Además, al contrario de lo que
podríamos pensar, no se hallaron grandes imposibilidades geográficas, ya que la mayor parte de los
cosmógrafos de la época ya aceptada la esfericidad de la Tierra. Sí que es cierto que se veía un
problema en el viaje de regreso por el desconocimiento de los vientos que pudieran conducir las
naves de nuevo a la península, los contraalisios (los alisios soplaban fuertemente al oeste y ya se
conocían, por lo que el viaje de ida era seguro); pero Colón supo combinar la experiencia y los
conocimientos que se tenían de los viajes portugueses para encontrar estos vientos en la latitud de
las islas Azores (en el Caribe a la altura de Cuba).
Cuando los Reyes aceptaron autorizar el viaje aplicaron la misma fórmula de la «capitulación» ya
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

utilizada anteriormente. Las Capitulaciones de Santa Fe (capitulaciones de descubrimiento y de


conquista) le otorgaron a Colon grandes poderes como almirante y virrey de las futuras islas y
tierras descubiertas, y suponían un beneficio del quinto del real de los beneficios (en verdad, Isabel
le dio todos estos poderes porque, en teoría, no iba a describir mucho y en la India ya había un
gobierno, así que Colón no se beneficiaría mucho).
Además, como Cristóbal Colón carecía de una sociedad de armada personal y de una flota, se
encargó la realización de la travesía a los marineros y navegantes del suroeste andaluz,
concretamente a los de los puertos de Palos y Moguer, que eran quienes más experiencia tenían en
las aguas atlánticas y estaban en deuda con la Corona (por haber causado conflictos a los
portugueses y cruzar la línea de Alcaçovas). Los hermanos Pinzón, excelentes conocedores de la
navegación hacia Canarias y el norte de África, fueron sumando a la empresa y aportaron sus
embarcaciones (dos carabelas y una nao).

1.1. Los viajes de Colón*


A continuación, vamos a centrarnos en los cuatro viajes que hizo Colón entre 1492-1502:
1. Primer viaje: 2 de agosto de 1492 – 12 de octubre de 1492
2. Segundo viaje: 25 septiembre 1493
3. Tercer viaje: 30 de mayo de 1498
4. Viajes menores o andaluces

PRIMER VIAJE
El itinerario seguido por Colón en este primer viaje demostró que tenía experiencia como navegante
y se ajustó a su planteamiento inicial, a excepción de una desviación al noroeste que realizó tras
más de veinte días de navegación siguiendo los alisios desde que habían abandonado las canarias,
ya que seguían sin tocar tierra. Esta corrección del rumbo les llevó a las Bahamas, al norte de
Cuba. En concreto, llegaron a la isla de Guanahaní (actual San Salvador); después descendieron
hacia el sur y hallaron otras islas que fueron bautizadas como Santa María de la Concepción,
Fernandina, Isabela, Juana (Cuba, aunque
no fue consciente de su tamaño) y, por fin,
La Española, la que consideró más grande
y poblada y donde permaneció más tiempo
en este primer viaje.
El regreso fue perfecto. Colón desembarcó
en las Azores y allí fue detenido junto con
su tripulación por tratarse de castellanos en
aguas portuguesas según el Tratado de
Alcaçovas. Tras ser liberado, siguió rumbo
oeste y llegó a la capital portuguesa el 4 de
marzo. Decía haber tardado 30 días en
llegar y 28 en regresar.

* Lucía ha dicho que esto no le interesa mucho, si acaso el primero.


Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Tras este viaje, parece que se demostraba la teoría de Toscanelli de llegar a las islas de las especias
por el oeste; además, también se ponía de manifiesto que la brújula, el astrolabio y las tablas de
declinación permitían una navegación de altura abandonando las costas, lo que hacía que el mundo
fuera circunnavegable (aunque se le concedía a la esfera terrestre un diámetro menor que el real).
Este primer viaje simbolizó el inicio del florecimiento de la Europa atlántica.
Además, también supuso el punto de partida para nuevas expediciones autorizadas por los Reyes: al
ser recibido en Barcelona por Isabel y Fernando, colón los convenció de que debía regresar
inmediatamente con una gran expedición de colonos para obtener riquezas y llevar a cabo la
conversión al cristianismo de los «infieles» que habitaban en las islas, lo que le granjeó a la Corona
de parte del papa Alejandro VI todas aquellas islas por derecho de descubrimiento (a cambio de la
evangelización). Como un presagio de lo que iba a suceder, Colón ya había dejado escrito en su
diario «estos indios son buenos para les mandar y hacer trabajar».

SEGUNDO VIAJE
La segunda expedición colombina repitió la ruta de las Canarias y siguió de nuevo los alisios. Esta
vez no se desvió tanto hacia el norte y llegó en muy poco tiempo a las Antillas Menores,
encontrando La Española sin dificultad. Según lo planeado, esta vez llevaba a las nuevas tierras un
buen número de colonos, animales y herramientas en el afán de establecer en La Española un
emplazamiento perdurable: una especie de factoría según el modelo que el mismo almirante había
conocido en sus viajes con los portugueses; una factoría cuyos socios principales serían la Corona
de Castilla y la familia Colón, y que se dedicaba al rescate y acopio de productor para remitirlos a
Europa.
Sin embargo, el carácter de estos primeros colonos no parecía encajar en el proyecto colombino de
factoría comercial, sino que estos deseaban seguir el esquema tradicional conformado a lo largo de
«ocho siglos de reconquista», según el cual cada poblador se transformaría con rapidez en señor de
tierras y siervos para vivir holgadamente de las rentas que estos produjeran. Por ello, el
mercantilismo colombino tuvo que ceder su lugar a una especie de ahidalgamiento y
enseñoramiento, en aquellas tierras y con aquellos indios, de los hasta ayer rústicos campesinos y
marineros, alegando que no habían cruzado el mar y abandonado los campos para continuar
trabajando, sino que para eso ya estaban los nativos.
Mientras aumentaba el descontento entre los colonos, Colón se dedicaba a capturar indios y
remitirlos a Castilla para pagar las deudas contraídas con los comerciantes en Sevilla (no había
hallado ro ni riquezas); también continuaba con sus exploraciones, descubriendo nuevas islas como
Jamaica y deteniéndose en las costas de Cuba.

TERCER VIAJE
En su tercer viaje, Colón encontró la desembocadura del Orinoco, la isla de Trinidad y las costas de
la futura Venezuela. Sin embargo, al regresar a La Española le esperaba una sublevación de
colonos, la ruina del proyecto de factoría y un administrador real, Francisco de Bobadilla, que lo
envió preso a Castilla por mala gestión general y descontento de los colonos. Bobadilla, conocedor
de la idiosincrasia castellana, repartió tierras e indios utilizando la vieja fórmula medieval de la
encomienda (se había desarrollado en Castilla durante el enfrentamiento con los musulmanes), lo
que supuso el inicio de la explotación integral de los recursos humanos y naturales del mundo
americano.
Contemporáneamente a este momento se comenzaron a producir expediciones hacia el oeste por
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

parte de otras monarquías europeas como Inglaterra y Francia, que veían en la apertura de la nueva
ruta de Occidente y el hallazgo de las islas al otro lado del océano una oportunidad para
enriquecerse. Portugal también se vio interesado en estos territorios, y el rey mandó que uno de los
navíos que retornaran de la India, desviara su ruta hacia el oeste a la altura de Cabo Verde para ver
qué hallaba. En 1500 los portugueses desembarcaron en Brasil, a la que llamaron Terra de Santa
Cruz.
Una vez que el resto de potencias europeas conocieron de la existencia de estas nuevas tierras, la
“India” se hizo plural: Indias orientales e Indias Occidentales, y la ruta del oeste comenzó a
llamarse la “Carrera de Indias”.

VIAJES MENORES O ANDALUCES


Entre el 3 er y el 4º viaje de Cristóbal Colón se produjeron una serie de “viajes menores” que
contaban con capitulaciones de descubrimiento y de rescate. Es importante destacar que Coñón
tenía amplios poderes por las Capitulaciones de Santa Fe, que le daban el monopolio y control de
todas las tierras descubiertas, y los Reyes Católicos empezaron a darse cuenta de ello y de que
debían de tener cuidado. Entre los viajes encontramos a:
a) Alonso de Ojeda, Américo Vespucio y Juan de la Cosa, que fueron a fiscalizar a Cristóbal
Colón a la Costa Venezolana y Colombiana.
b) Pedro Alonso Niño y Cristóbal Guerra (Perlas isla Margarita. Mito del Dorado).
c) Vicente Yáñez Pinzón, Diego Lepe (costa brasileña y Orinoco).
d) Rodrigo de Bastidas (Santa Marta, Cartagena, Panamá).
Las capitulaciones concedidas consistían en lo siguiente: eran un sistema mediante el cual dos
partes se ponían de acuerdo en algo, en este caso, la Corona, como dueña patrimonial, y la iniciativa
privada, la que tiene el dinero. De esta forma la Corona permitía a la iniciativa privada descubrir,
conquistar y poblar a cambio de unos beneficios. (a ver esto de las capitulaciones no lo pregunta
como tal en la guía didáctica pero lo pongo por si acaso).
El descubridor-conquistador-poblador pagaba la expedición, pagaba el 20% del valor de lo
conquistado, defendía con sus armas el territorio, controlaba los levantamientos internos de los
indígenas y expandía la evangelización.
La Corona legitimaba el descubrimiento, conquista y poblamiento; nombraba al capitulante
(gobernador o alcalde mayor del territorio) y le daba los correspondientes privilegios; le concedía al
capitulante la merced del trabajo de los indios y recibir el tributo (no de por vida); a veces le
concedía exenciones fiscales. Por lo tanto, la Corona no realizaba gastos, eran los descubridores y
conquistadores los que lo pagaban todo.

CUARTO VIAJE
Colón realizó su cuarto y último viaje ese mismo año, a lo largo del cual recorrió numerosas islas
(Martinica, Puerto Rico, Jamaica, Cuba) y las costas de Centroamérica. Parece que ya buscaba un
camino en aquel conjunto de islas, pero estas formaban una barrera infranqueable que le impedía
seguir más al oeste. Quizás era consciente de que la verdadera India quedaba muy lejos o quizás no.
Murió en Valladolid en 1506 seguramente sin saberlo.
Para entonces, la eterna rivalidad entre Castilla y Portugal por el control oceánico había derivado en
un nuevo y más grave problema: la ruta portuguesa por África quedaba obsoleta si era cierto que a
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

la India se llegaba antes por Occidente, de ahí que comenzaran las presiones lusitanas sobre Castilla
y sobre el papado para lograr una línea de exclusividad para Portugal, similar a la que obtuvieron en
Alcáçovas. Por su parte, Castilla no dejó de presionar a su vez sobre Portugal para que se alejara de
las nuevas islas y continuara desarrollando su ruta de África. La solución a estas disputas fue el
acuerdo de trazar una nueva línea de exclusión recíproca, esta vez norte-sur, a partir de las
posesiones portuguesas más occidentales: Cabo Verde.
En un nuevo tratado, el de Tordesillas, el año 1494, la extendieron hasta 370 leguas más allá de
Cabo Verde. El monarca portugués quedó satisfecho porque al este de la línea de Tordesillas
aparecieron las míticas tierras de Brasil y, sobre todo, porque eso le permitía navegar también hacia
Occidente con libertad. Si el tratado resultó un éxito para Portugal, porque les abría la ruta hacia las
Indias Occidentales, no lo fue menos para Castilla, que obtenía la exclusividad y la donación
pontificia del resto de las tierras, desde luego muchos más extensas que las portuguesas. Y ahí entró
el Caribe, al oeste de la línea de Tordesillas. El Caribe, ya desde entonces un Mediterráneo para los
navegantes, comerciantes y colonos españoles.

2. Tratados de delimitación. Las Indias se adscriben a Castilla. Alcaçovas, II bula


intercaetera, Tratado de Tordesillas.
La rivalidad entre castellanos y portugueses por el tráfico oceánico, había ido resolviéndose en
varios tratados firmados entre las dos coronas.
Uno de los más importantes fue el de Alcaçovas (1479), por el que se prohibía a los castellanos
navegar al sur de las Canarias, que quedaban para Castilla, mientras que Portugal poseería Madeira,
las Azores, Cabo Verde y la Mina de Guinea. La línea que marcaba los límites para ambas
potencias existió, pero las disputas siguieron y las denuncias por parte de los portugueses debidas a
las violaciones del tratado fueron frecuentes.
Tras los descubrimientos colombinos, los Reyes Católicos se encontraron con algunos problemas
como el de la incorporación de las Indias a la Corona de Castilla y el derecho a ocupar nuevas
tierras. Para resolverlos, se crearon una serie de bulas y tratados nuevos.
Aunque los territorios ganados por el matrimonio formado por Isabel y Fernando y podían
anexionarse tanto a Castilla como a Aragón, en 1493, de mutuo acuerdo, decidieron anexarlas sólo a
Castilla, de tal forma que el rey Fernando sólo se quedó con el 50% de las riquezas y a título
personal (no podían pasar a ser patrimonio aragonés). De tal forma, en la I Bula Intercaetera,
fechada el 3 de mayo de dicho año, se señaló que las Indias pertenecían a los «Reyes de Castilla y
león para siempre». La razón de esta decisión pudo radicar en que tendrían que negociar con
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Portugal unos límites de lo descubierto en el Océano, para lo cual Castilla, y no Aragón, contaba
con un tratado básico que era el de Alcaçovas-Toledo (o sea, que había anexionado a Castilla las
nuevas tierras porque así Portugal no les podía reclamar nada al no meter a Aragón de por medio,
con quien no tenían un acuerdo).
Por este motivo, los Reyes Católicos pidieron al papa Alejandro VI una serie de bulas, junto a la
Primera Bula Intercaetera, que otorgaban la posesión de las nuevas tierras descubiertas y por
descubrir a Castilla. Estos privilegios plantearon problemas y controversias pro ser documentos
antedatados (sus fechas no corresponden al día, y a veces ni al mes, en que se expidieron). Eran
cinco: la Primera y la Segunda Bula Intercaetera, la Piis Filedium, la Eximiae devotionis, y la
Dudum siquidem.
La más importante es la Segunda Bula Intercaetera, porque dividió el océano en dos partes,
mediante una línea de polo a polo (un meridiano) trazada a 100 leguas al oeste de las islas Azores y
Cabo Verde. Las tierras al occidente de dicha línea serían para Castilla y las de oriente portuguesas.
Esta bula llevaba una contrapartida que consistía en que los Reyes tenían la obligación de adoctrinar
a los indígenas en la fe católica.
Sin embargo, el rey Juan II de Portugal no aceptó la línea papal de demarcación, lo que puso en
marcha una larga negociación diplomática entre Castilla y Portugal. Juan II propuso que en vez de
un meridiano se trazara un paralelo oceánico, reservando a los portugueses la zona austral y dejando
la septentrional a los castellanos. Finalmente se acordó en colocar el meridiano inicial a 370 leguas
al oeste de Cabo Verde a través del Tratado de Tordesillas, firmado el 7 de junio de 1494. Las
tierras descubiertas o que se descubrieran al oeste de dicha línea serían castellanas, y las situadas al
este serían portuguesas. La nueva línea, que caería luego hacia la desembocadura del Amazonas,
permitió la ocupación de Brasil por parte de Portugal.
Vemos la rapidez con la que se hicieron todos estos tratados (durante los dos años siguientes a la
llegada de Colón a las Antillas), y aque tanto Castilla como Portugal quería participar en la
conquista de nuevos territorios y asegurarse los futuros beneficios, dentro de dicho contexto de
rivalidad comercial.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

3. Introducción a las grandes conquistas: principales núcleos de expansión

Como resultado de la firma del Tratado de Tordesillas y las consiguientes empresas de expedición,
en menos de cincuenta años, Castilla se había anexionado casi dos millones de kilómetros
cuadrados. La empresa de la expansión continental se abordó mediante una serie de etapas
escalonadas y desde una serie de núcleos o centros expansivos:
1. Islas del Caribe → en concreto La Española (Santo Domingo). Desde allí, entre los años
1492-1528, las expediciones de conquista se dirigieron al resto de las islas (Puerto Rico,
Jamaica y Cuba) y después hacia el continente, donde se funda Santa María la Antigua del
Darién, que será el punto de partida hacia la costa mexicana y el norte de la actual
Venezuela.
2. Antigua Panamá → 1509-1519- Desde esta zona, la influencia española llegará por el norte
a los territorios cercanos a Centroamérica, se descubrirá el mar del Sur (Océano Pacífico) y
bordeando la costa se llegará a Perú. Cabe destacar que, a pesar de la poca distancia (80km)
de la zona de Panamá, se tardó muchísimo tiempo para llegar desde el Caribe hacia el
Océano Pacífico, ya que la vegetación era selvática y muy densa y se encontraron con
grupos étnicos que les atacaron con flechas envenenadas.
3. México-Tenochtitlán → Capital del imperio azteca, conquistada en 1519 y convertida en la
capital del primer virreinato: Nueva España. Desde allí se recorre América Central, al resto
del actual norte de México y gran parte del sur de los futuros EEUU.
4. Actual Perú → donde el Imperio Inca fue sometido en 1532. Desde allí y hacia el norte se
llega a Quito y a la Nueva Granada; por el sur se conquista lo que sería el Alto Perú y gran
parte de Chile, entre los años 1532-1535.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Además de estos grandes núcleos, se constituyen otros centros expansivos secundarios: la Isla de
Cuba sirve de plataforma para la expansión por la Florida; de Quito al Amazonas; y desde Asunción
hacia la cuenca del Río de la Plata. Buenos Aires y toda la vertiente suroriental de la cordillera de
los Andes.

4. Los modelos económicos colombinos


Lo que caracteriza a la época colombina es que no hubo un plan de colonización premeditado, ni
por parte de la corona ni de los conquistadores, ya que no esperaban encontrar indígenas, sino
indios, que ya contaban con un gobierno central. Además, la Corona de Castilla no contaba todavía
con un alto grado de centralización en la Península, sino que todavía intentaba organizarse tras la
disolución del Reino Nazarí de Granada, y carecía de experiencia para organizar un territorio lleno
de personas de cuya idiosincrasia desconocían (no sabían cómo se organizaban ni cómo tratar con
ellos).
De esta forma, en las Antillas se comienza a experimentar con algunos modelos de organización
socio-política y económica dispuestos Cristóbal Colón y sus hijos Diego y Hernando:

4.1. Primer modelo colombino


Este primer modelo era exactamente igual al modelo portugués de factorías, con el que se buscaba
adquirir mercancías para redistribuirlas en Europa y no exigía la colonización. Los intercambios se
realizaban mediante rescate (trueque para conseguir mercancías de alto valor a cambio de otras de
menor valor para que fuera entable), ya que al no encontrar especias en estas islas se buscó como
alternativa el oro, y a cambio de él se intercambiaban cuentas de vidrio.
Las dificultades que planteó este modelo es que no había grandes cantidades de oro (no había
minas, sino oro aluvial), por lo que la factoría no era viable.

4.2. Segundo modelo colombino


El segundo modelo se basaba en la mano de obra indígena, y en los tintes como el «negocio» del
Nuevo Mundo, dos mercancías bastante cotizadas en el mercado europeo.
Los indígenas fueron esclavizados como mano de obra, ya que los europeos no querían ponerse a
trabajar (lo que habíamos visto antes de los colonos) para conseguir oro, por lo que partiendo de la
consideración de que eran «infieles» apresados en «guerra justa», la esclavitud era una estrategia
viable que no suponía remodelar la estructura social.
Sin embargo, en 1504 Isabel I suprimió la esclavitud motivada por varias razones: en primer lugar,
porque se estaba poniendo en cuestión el monopolio de la Corona que había adquirido las Indias por
bula a cambio de evangelizarlas, cosa que le producía un conflicto moral; en segundo lugar porque
comenzó a reflexionar sobre el monopolio y los amplios poderes con los que contaba Colón; en
tercer lugar, porque tras reunirse con una junta de teólogos y juristas se llegó a la conclusión de que
los indígenas no eran infieles al no tratarse ni de judíos ni de musulmanes, sino que eran paganos,
por lo que se les debió de transmitir los principios de la religión católica y de no aceptar sí que se
esclavizarían (de acuerdo con la legislación del momento, aunque la realidad, como nos podemos
imaginar, es que esto no se cumplió a rajatabla y hubo más esclavos); y en cuarto lugar, porque
siguiendo este modelo, los beneficios que se podían extraer de América eran mínimos.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

4.3. Tercer modelo colombino


Se puso en marcha una nueva estrategia que convertía a los indios en vasallos de la corona y les
obligaba a pagar tributo: cada indio mayor de edad debía pagar una cierta cantidad de oro y algodón
y contribuir con su trabajo a cultivar la tierra.
Sin embargo, este modelo también trajo dificultades, ya que el primer año fue de escasa producción
y surgió el descontento de los colonos que querían ampliar sus beneficios y autonomía, dejando de
ser funcionarios de la factoría y pasando a participar en el «negocio».
Además, la Corona quería recuperar el control de los espacios descubiertos y reducir los privilegios
otorgados a Colón en las Capitulaciones de Santa Fe, ya que se dieron cuenta de que le habían
concedido demasiadas prerrogativas. Poco a poco se fue imponiendo el control real en las nuevas
tierras, creándose un modelo de colonización que buscaba lucrarse con las riquezas (oro)
encontradas (la justificación era la de evangelizar), y permitiendo la realización de otros viajes
menores (los «andaluces») mediante capitulaciones de descubrimiento y rescate.

5. El Caribe. La primera frontera


5.1. Consolidación de las Antillas: Plan de 1501. Del idilio a la tragedia
¿POR QUÉ MANDA LA CORONA A OVANDO CON EL PLAN DE 1501?
Las dificultades de la Corona con Cristóbal Colón, manifestadas ya desde los primeros momentos y
que aconsejaron la presencia del pesquisidor Francisco de Bobadilla y el regreso a la península del
almirante, habían iniciado el descrédito de Colón. Bobadilla envió un informe donde relataba la
mala gestión colombina y cómo estaba desencadenando en conflictos entre los mismos colonos y
entre ellos y los indígenas.
Esto hizo que la corona decidiera poner en marcha un nuevo sistema de organización de tipo
colonial que comenzaría por enviar a La Española en 1501 a alguien de confianza, Nicolás de
Ovando, que pasaría a ser el primer gobernador. El objetivo era que pusiera fin al todopoderoso
gobierno de Colón, reduciéndole las prebendas otorgadas en las Capitulaciones de Santa Fe y
sustituyendo la administración colombina por la de la Corona. No obstante, a Colón se le permitió
seguir realizando viajes de exploración de nuevos territorios, aunque al mismo tiempo, ya desde
1495, la corona permitió toda una serie de viajes mediante capitulaciones de descubrimiento y
rescate, conocidos como los viajes andaluces de los que hemos hablado anteriormente.
Las instrucciones dadas a Ovando eran muy precisas e iban encaminadas al ordenamiento social y
económico de la colonia, abandonando el sistema de factoría y fomentando la expansión de un
nuevo modelo basado en la presencia de colonos castellanos y en el sometimiento de los indígenas.
El plan de 1501 incluía los siguientes aspectos:
• Pacificar la situación de descontento tras el mal gobierno de Colón y establecer el régimen
de autoridad real sobre los distintos bandos en que estaban divididos los españoles.
• Velar por todos los medios para convertir a los indios a la fe católica y lograr la protección
de estos y que los españoles no les hicieran «mal daño».
• Asentar el sistema de realengo a través de la creación de la figura del gobernador y de tres
gobernaciones: la insular de la Española, y dos continentales, la de Coquivacoa, otorgada a
Alonso de Ojeda y la del Amazonas para Vicente Yáñez Pinzón. Estas dos últimas
fracasaron.
• Hacer productiva la isla a través de una política de poblamiento que lograra la reactivación
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

de la extracción de oro y el fomento agrícola y ganadero.

¿QUÉ DOS MEDIDAS SE TOMARON EN 1503?


Al plan de 1501 se le añadieron otras dos medidas de gran importancia tomadas en 1503: la
creación de la Casa de Contratación y la institucionalización de la encomienda.
La Casa de la Contratación fue creada por los Reyes en Sevilla para asegurar la fiscalización y el
control de todo el proceso de institucionalización y de expansión continental.
La encomienda indiana fue la mayor institución de control de los indígenas que consistió en
repartir a los indios adscribiéndoles a lotes de tierra que encomendó a los colonos para que al
tiempo que hacían productiva la tierra, vigilaran a los indígenas, les obligaran a trabajar y les
adoctrinasen en la fe cristiana, eso sí, tratándolos siempre como hombres libres vasallos de la
corona.
La encomienda fue el resultado de la necesidad de utilizar a los indígenas como fuerzas de trabajo
para hacer productiva la tierra y recomponer la economía implantando una producción agrícola y
ganadera, a la que por supuesto los castellanos no atendían (ya hemos dicho en repetidas ocasiones
que los colonos no iban allí a trabajar) y de mantenerlos controlados al mismo tiempo.
Previamente, Ovando había intentado solventar los conflictos entre colonos e indígenas (los colonos
habían capturado a multitud de indios para hacerles trabajar y así conseguir riquezas y esto
obviamente había causado el descontento de los segundos que realmente habían sido considerados
hombres libres en 1501) estableciendo un salario para los indígenas a cambio de su trabajo para
apaciguarlos y poder adoctrinarlos.
Pero esta medida no había tenido mucho éxito, ya que la mentalidad indígena desconocía el valor
del dinero y de la economía del consumo. En consecuencia, Ovando tomó la medida de la
encomienda, que se convirtió en una de las más terribles instituciones que la Corona española
impuso en las tierras americanas, ya que realmente era un sistema de esclavitud encubierta y desde
su inicio se prestó a innumerables abusos que esquilmaron la población.

¿SOY CAPAZ DE EXPLICAR LA POLÍTICA INDIGENISTA QUE PUSO EN MARCHA


NICOLÁS DE OVANDO?
Debido a la situación penosa en la que vivían los españoles recién llegados, cuyo descontento iba en
aumento debido al fracaso minero, a la escasez de alimentos y a la falta de mano de obra (a la alta
mortalidad indígena se unió la huida y la resistencia armada), Ovando decidió poner en marcha la
política de fundaciones y de sometimiento de los núcleos rebeldes indígenas.
En 1504, organizó dos campañas militares contra la población aborigen en los dos extremos de la
isla. Las campañas de sometimiento fueron crueles y en ellas se forjaron algunos personajes que
después destacarían en otros procesos de conquista, donde aplicarán la misma política de guerra a
sangre y fuego frente a la hostilidad indígena (destaca la cacica Anacaona que arengó a su gente
para que se sublevaran) que hacía gala de su derecho a la defensa.
Las consecuencias de estas campañas fueron que los indios supervivientes quedaron esclavizados,
se introdujeron indios traídos de otras islas y se repartieron, constituyendo estos la mano de obra
que permitió a Ovando poner en marcha una incipiente producción agrícola y ganadera, explotar el
oro aluvial e iniciar el cultivo y fabricación del azúcar, obligó a Ovando y a los sucesivos
gobernadores de La Española a promover la conquista de islas cercanas como fuetne potencial de
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

mano de obra, y después, desde 1520, a la introducción de esclavos provenientes de África.

5.2. Resultados de la época ovandina: conquista de las Grandes Antillas


¿POR QUÉ SE CREA LA JUNTA DE BURGOS Y CUÁLES SON SUS OBJETIVOS?
Durante los últimos años de la gobernación ovandina en La Española se sucedieron otros
acontecimientos en la península. En 1504, moría la reina Isabel, la gran protectora de Colón, que
ese mismo año regresaba de su cuarto viaje; y el rey Fernando, como regente, al año siguiente
convocó la Junta de Toro, procedente de la de Burgos, a la que acudieron expertos navegantes de
la primera etapa, como Vicente Pinzón y Américo Vespucio. Desde la junta, se decidió continuar la
política de descubrimiento con un doble objetivo: poblar y colonizar la Tierra Firme, y buscar el
paso hacia las Islas de la Especiería antes que los portugueses.
No obstante, hasta 1508 no se pondría en marcha aquella política, después de reunir en Burgos
8Junta de Burgos), en ese mismo año, a los que acudieron a la anterior, más Juan de la Cosa y
Juan Díaz de Solís. Aquí se decidió la creación del cargo de piloto Mayor de la Casa de
Contratación, cuyo primer titular fue Américo Vespucio, con los objetivos de unificar la cartografía
del Nuevo Mundo y orientar adecuadamente las navegaciones, enviando así expediciones a Tierra
Firme (el continente) para poblarla hacia el norte y sur con la idea de buscar el paso a las islas de la
Especiería.

6. El gran debate: justificación moral y jurídica de la conquista. Su polémica. Justos títulos.


La Guerra Justa.
¿Puedo explicar de forma razonada la importancia del problema ético que supuso el discurso de
Fray Antón de Montesinos en La Española en 1511?
La brutalidad con la que se trataba a los indígenas y la falta de eficacia de los monjes franciscanos,
únicos religiosos en La Española desde 1502, provocaron la denuncia de los frailes dominicos,
llegados a la isla en 1510, que plantearán el gran problema ético de las relaciones entre españoles e
indígenas. Fue fray Antonio de Montesinos, quien en un sermón dado en la Navidad de ese mismo
año, acusó duramente a los españoles, dirigidos por el virrey Diego Colón, por el trato que se le
estaba dando a los indios.
A partir de este momento se plantea la cuestión de la legalidad o ilegalidad de la institución de la
encomienda y se cuestiona el derecho para estar en América desde un punto de vista jurídico y
político, dos cuestiones muy relacionadas entre sí. Esto provocó que los encomenderos apoyados
por el virrey Colón enviaran una protesta formal a la Corona, y que el rey Fernando convocara una
junta de teólogos y juristas que, tras examinar ambas posturas con todo detalle, propuso una
solución que tomó forma de ley, las llamadas Leyes de Burgos de 1512.
El problema sobre la legalidad de la encomienda indígena, es decir, debatir si los españoles tenían
derecho a convertir a los indios en sus siervos (más bien esclavos) se resolvió exponiendo el
argumento del jurista Ginés de Sepúlveda de que la sociedad americana estaba dividida entre
individuos racionales y civilizados, los castellanos, e individuos menos racionales e incivilizados,
los indígenas; por lo tanto, los primeros tenían derecho a dominar a los segundos y someterlos a la
servidumbre y al trabajo hasta que alcanzaran el grado de racionalidad, es decir, la evangelización,
pues aunque no eran civilizados eran hombres libres y racionales (aunque menos que los
castellanos) que debían de ser instruidos en la fe. La única novedad es que se comenzó a exigir a los
encomenderos darles un buen trato: pagarles un salario justo, respetar su descanso y su modo de
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

vida, incluso sus casas y tierras, y se insiste mucho más en la evangelización. Además, se envió a
fray Antonio de Montesinos la Real Provisión de 1503 otorgada por Isabel I para legalizar la
institución de la encomienda.
Sobre este tema debemos tener en cuenta algunas consideraciones: para poder solucionar la cuestión
sobre la legalidad de esta institución, la Corona, la Iglesia y los encomenderos debían llegar a un
acuerdo. Esto se debía a que la Iglesia pretendía evangelizar y la Corona debía sufragar los costos
de la evangelización, pero si los particulares-encomenderos no obtenían beneficios se marcharían y
el costo de la empresa indiana recaería en la Corona. La Corona necesitaba los fondos de las Indias
para acelerar el proceso de centralización política en la Península y para ello no podía acudir a las
Cortes a pedir “financiación” porque la nobleza exigiría prerrogativas y derechos a cambio. Esto
convertía al oro americano en la fuente de ingresos para ello.
Y es por esto, que los Reyes decidieron someter la conquista a la iniciativa privada, y no dudaron en
ofrecer recompensas y privilegios (aunque más tarde los reduciría). Además, la Corona tenía que
tener en cuenta que el monopolio de la empresa indiana estaba ligado a la evangelización (bulas).
Por otra parte, la Iglesia necesitaba la presencia de colonizadores para expandir su fe y también la
participación de la Corona para frenar a los colonizadores y restarles los privilegios concedidos en
las capitulaciones (no se niega la intención evangelizadora y humanitaria de la Corona). Esta fueron
las razones por las que la Corona y la Iglesia se asociaron en esta empresa.
Lo que pasó realmente es que la Corona utilizó los argumentos de Montesinos sobre el maltrato a
los indígenas para frenar las pretensiones señoriales de los colonos y así expandir la administración
real. De este modo, se realizaron las leyes de Burgos de 1512.
Este asunto de la encomienda planteaba otro de más calado, de carácter jurídico y político: el
fundamento (los “justos títulos”) de la conquista y dominación de aquellas tierras y sus habitantes
por parte de los castellanos. Este problema se resolvió aportando la donación papal de la Segunda
Bula Intercaetera que cedía los territorios descubiertos a la Corona de Castilla con la contrapartida
de evangelizar en la fe católica a las gentes que allí se encontraran. Así se estaba justificando el
sometimiento de los indios, la presencia de la Iglesia en América y el hecho de la propia conquista;
aunque realmente la causa principal era el interés comercial y los beneficios que la conquista de
América generaba a la Corona de Castilla.
Sobre la problemática jurídica del dominio de la Corona española en América, debemos hacer
también otras consideraciones:
Aunque el problema indígena perdió fuerza en las Antillas por la progresiva desaparición física de
ellos mismos, el tema de fondo suscitó una larga discusión con tres posturas (las dos primeras
reflejan el enfrentamiento entre la visión del dominio Las Casas y la de los juristas pragmáticos,
representados por Ginés de Sepúlveda. La tercera fue la más serena, corresponde a la de la Escuela
de Salamanca, especialmente al dominico Francisco de Vitoria).

POSTURA DE GINÉS DE SEPÚLVEDA


Esta doctrina partía del pensamiento aristotélico clásico, que dividía la sociedad humana en seres
racionales y civilizados y en otros que lo son menos, entre los que hay algunos que rozan la
irracionalidad, los bárbaros. Los primeros tienen derecho a dominar a los segundos y a someterlos a
servidumbre hasta que alcancen el grado de racionalidad. Sobre esta base, Sepúlveda justificaba
plenamente el derecho de los españoles a la conquista y el sometimiento de los indios, así como el
del Papa para cristianizarlos. Y en esto se basarían lo encomenderos en su combate con los
dominicos.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

POSTURA DE BARTOLOMÉ DE LAS CASAS


Una de las personas claves en este asunto fue el fray Bartolomé de Las Casas, un sevillano hijo de
uno de los acompañantes de Colón en su segundo viaje, que además había embarcado para las
Indias con Ovando él mismo. Se encontraba en Cuba gozando de una encomienda y formando parte
de la hueste de Velázquez en Cuba cuando le llegó el eco del sermón de Montesinos que le causó
gran impacto, y a partir de este momento decidió dedicar su vida a la defensa del indio. Primero se
ordenó de sacerdote y luego ingresó en la orden dominicana. Aunque era un polemista legal y un
hábil político, el éxito de sus discursos en defensa del indio se debió en buena medida al ambiente
intelectual del humanismo cristiano en que se habían formado los regentes de Castilla (Cisneros,
Adriano de Utrecht, futuro Papa Adriano VI).
Los puntos de defensa de Las Casas eran los siguientes:
• Los indios son racionales y libres (algo que ya había sancionado la reina Isabel en 1495 al
prohibir la esclavización, pero que se había tergiversado completamente al aprobar el
repartimiento y encomienda).
• Los indios tienen derecho natural a poseer sus tierras y organizar sus vidas, incluida su
comunidad política.
• Niega que el Papa tuviera potestad para repartir territorio entre los príncipes cristianos, de
modo que la llamada donación papal sólo tenía validez para evangelizar.
De esos tres principios deducía que los castellanos no tenían derecho alguno de dominación sobre
los indios (ni política por la que se debían respetar sus reinos, ni personal, por lo que la encomienda
era injusta) y su presencia allí sólo estaría justificada por la tarea evangelizadora. No obstante,
reconocía la “menor edad” de los indios, es decir, no habían alcanzado el grado de civilización por
lo que estaba justificado un gobierno por parte de los europeos, pero cómo esto no era posible por
medio de autoridades civiles, tal como se había demostrado, ese gobierno tendría que estar en
manos de religiosos.
Como era de esperar, Cisneros (regente de la corona) actuó en la línea sugerida por Las Casas,
prohibiendo continuar con los repartimientos y encomiendas. Tras esto, decidió un gobierno
colegial para La Española formado por tres frailes jerónimos que fueron escogidos por Bartolomé.
No obstante, una vez que vieron que sus actuaciones no surgían efecto en la actitud de los
encomenderos decidieron aplicar las Leyes de Burgos para al menos suavizar el trato a los
indígenas. Permanecieron allí desde 1516 a 1518 y lo único que cambió en la práctica fue que se
incrementó la introducción de esclavos negros mientras que la rápida desaparición de indígenas por
viruelas y epidemias restó importancia al problema sobre su trato.

POSTURA DE FRANCISCO DE VITORIA


Francisco Vitoria fue el que sentó la doctrina que sirvió para legitimar la conquista y a la vez para
fundar el derecho internacional moderno. Para Vitoria toda nación tenía derecho legítimo a viajar y
comerciar por la tierra, y la licencia otorgada por el Papa (como representante de Dios) a los
castellanos para evangelizar era legítima. Sin embargo, las conquistas solo se debían hacer por una
causa justa, entre las que señala: ayuda a naciones amigas, protección de nativos conversos, ir en
contra de pueblos que tiranizan a otros, o por la libre aceptación por parte de un pueblo de la
autoridad de otro. Concluía que la conquista tal como se había hecho era injusta, pero que el hecho
consumado no debía interrumpirse sino reconducirse con buenas leyes y asegurar su cumplimiento.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Como conclusión diremos que en el desarrollo de la polémica, el papel más relevante le


correspondía a Las Casa durante el reinado de Carlos I, que le protegió. Fruto de esa protección
fueron las Leyes Nuevas o de Valladolid, de 1542, que prohibieron la encomienda, y cuya
aplicación provocó una rebelión general de encomenderos en América: en México, las autoridades
las suspendieron, con un buen sentido práctico, pero en Perú como veremos, dio lugar a una
rebelión en toda regla que obligó a la corona a enviar un ejército para aplastarla. La gravedad de la
reacción llevo a suspender la medida, pero se limitó su disfrute hereditario lo que, a la larga,
impidió el desarrollo de un sistema señorial como había sucedido en la península.
La importancia de esta cuestión y su discusión radica en su relevancia histórica universal, ya que
por un lado fue la única vez que una potencia colonial aceptó plantearse a fondo la justificación de
su dominio, y, por otro, la solución a la que se llegó sentó las bases del derecho internacional. De
todas maneras, este “gran debate” se convirtió en una de las principales armas propagandísticas de
“los enemigos” de la monarquía hispánica.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

5. LAS GRANDES CONQUISTAS CONTINENTALES


Y FRONTERIZAS (c. 1520 – c. 1570)
1. La primera globalización. Al fin el paso: de Díaz de Solís a Elcano
Como vimos, la Junta de Burgos (1508) había decidido continuar con la búsqueda del paso a las
islas de la Especiería. En 1515 se organizó una expedición dirigida por Juan Díaz de Solís que sólo
llegó hasta la desembocadura del Río de la Plata, ya que al descender a tierra fueron atacados por
los indígenas que provocaron la muerte de Solís entre otros miembros de la tripulación.
Habría que esperar hasta 1519 cuando el veterano marino portugués Fernando de Magallanes, le
propusiera al emperador Carlos un viaje para descubrir el paso a la Especiería por América que sí
llegó a tener éxito. La expedición recorrió la costa de Brasil hasta el estuario de la Plata, donde
confirmaron que no se trataba del paso. Tras esto se dirigieron a la Patagonia donde pasaron el
invierno austral y se dio el primer episodio de rebelión en el que participó Juan Sebastián Elcano, y
que acabaría con la ejecución de algunos y el abandono de otros. Reanudada la marcha recorrieron
un laberinto de estrechos que condujo a las naves hasta el “Gran Mar”, el Pacífico; y tras un penoso
viaje de más de tres meses que acabó con buena parte de la tripulación, alcanzaron las actuales
Filipinas a principios de 1521. Desembarcaron en la isla de Cebú, donde Magallanes pretendió
demostrar la superioridad de los castellanos interviniendo en las rencillas entre caciques locales, lo
que acabó costándole la vida y pasando la dirección de la expedición a Elcano. Finalmente llegaron
a su destino en Timor (islas Molucas o de las especias) en noviembre de 1521.
Tras el éxito de esta primera expedición, en 1525 salió otra dirigida por Elcano y García Jofre de
Loaisa, pero la expedición fue más dura que la anterior y de los 7 buques que salieron solo 1 llegó a
las Molucas y otro a México, de donde salió otra expedición a las Molucas, que se encontró con un
enfrentamiento entre portugueses y españoles. Este duró 8 años y se resolvió con la firma del
Tratado de Zaragoza en 1529, donde los españoles les cedían las Molucas a Portugal a cambio de
las Filipinas, que aún no se habían ocupado, hecho que se consiguió en 1564 tras una expedición
dirigida por Miguel López de Legazpi.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

2. Hacia el continente
2.1. «Tierra firme» y costa venezolana
Una vez consolidado el dominio de las Antillas mediante el establecimiento de un sistema
administrativo centrado en La Española, algunos particulares consiguieron mediante capitulación la
autorización de la corona para llevar a cabo una serie de empresas llamadas de “descubrimiento,
poblamiento y rescate” con el objetivo de explorar el territorio de Tierra Firme (la costa atlántica de
Colombia y Centroamérica), del que ya se tenían noticias por Juan de la Cosa y Rodrigo Bastidas en
1502.
De esta forma, en 1508 Alonso de Ojeda y Diego de Nicuesa obtuvieron los títulos de gobernadores
de Urabá o Nueva Andalucía y Veragua respectivamente, para poder llevar a cabo la conquista de
estos lugares. La conquista de este lugar fue difícil debido a la espesa selva y a las tribus de indios
flecheros, que llegaron a matar al propio Juan de la Cosa. Tras esto asumió el mando Vasco Núñez
de Balboa, que fundó la ciudad de Santa María la Antigua del Darién en 1510 en Panamá, primera
ciudad fundada del continente, y fue elegido alcalde. En 1513, tras varias expediciones y tras trabar
amistad con diferentes tribus, se llevó a cabo una expedición desde esta ciudad por el istmo que
permitió alcanzar la costa del Pacífico, al que llamaron Mar del Sur. Además del descubrimiento
del océano, se encontró un territorio rico en oro, que sería bautizado como Castilla de Oro.
Tras las denuncias por abuso y mala gestión de Núñez de Balboa, Fernando el Católico organizó
una gran expedición al mando de Pedro Arias de Ávila para que controlara la situación. Esta
expedición fracasó y se aprovechó de los recursos de los indígenas con los que Balboa había tenido
buena relación. Pedro Arias logró quitar a Balboa el título de adelantado del Mar del Sur y
finalmente en 1517 fue ejecutado, acusado de traición.
Con casi 90 años, Pedro Arias consiguió hacerse con el control y fundó en 1519 la ciudad de
Panamá, añadiéndole en la década de 1520 el territorio actual de Nicaragua, de la que finalmente se
convertiría en gobernador en 1526.

2.2. El Requerimiento
La experiencia de lo sucedido en las Antillas produciría importantes modificaciones en la conquista
de Tierra Firme y Centroamérica. Una de ellas fue la inauguración de un nuevo instrumento jurídico
para justificar el dominio hispano sobre la población aborigen: el Requerimiento, un documento
elaborado por juristas y teólogos de la corte, que daba legalidad a la ocupación de nuevos
territorios.
Se trataba de un texto en el que se explicaba a los indígenas los derechos que poseía Castilla sobre
sus tierras y se les exhortaba a aceptar el catolicismo como religión verdadera y a reconocerse como
súbditos de la Corona española. Obviamente, la lectura de tal documento, hecha con toda
solemnidad a los caciques indígenas, dejaba a estos indiferentes pues no lo podían entender; pero
esa actitud bastaba para interpretarla como resistencia, lo que a su vez justificaba hacerles la guerra
y la posterior conquista del territorio.

3. La conquista de México
3.1. Preludio: Hambre de tierra
La expedición que dará como resultado la conquista del imperio azteca y la consiguiente expansión
castellana en Mesoamérica, tuvo dos viajes precursores, ambos enviados por el gobernador de Cuba
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Diego Velázquez.
El primero de ellos estaba dirigido por Hernández de Córdoba y partió desde Santiago de Cuba en
1517 con el objetivo de ocupar todas las tierras que descubrieran, informarse de sus riquezas y
rescatar oro con los indios. Supuso el descubrimiento de la Península de Yucatán y el contacto con
la cultura mayo-tolteca, cuya belicosidad hacia los españoles les impidió una entrada más profunda,
pero también mostró un nivel cultural superior al encontrado en las Antillas.
El segundo de ellos, en 1518, estaba dirigido por Juan de Grijalva. Fueron recibidos en son de
guerra por algunos grupos, pero también entablaron buenas relaciones con caciques como el de
Tabasco, lo que les permitió intercambiar objetos de oro. Recorrieron gran parte del territorio
mexicano y por primera vez entraron en contacto con el mundo mexica, donde oyeron hablar de la
existencia de un señor, Moctezuma, que era dueño de todo y a quien todos temían y obedecían.

3.2. Interludio: ambición y coyuntura


El regreso de Grijalva con noticias sobre las riquezas y la existencia de un gran imperio situado en
el interior de lo que parecía un enorme y poblado territorio, hizo que Velázquez preparara de
inmediato otra expedición, en este caso dirigida por Hernán Cortés. Cortés había marchado con
Velázquez a Cuba en 1511, desempeñando los cargos de secretario del gobernador, tesorero y más
tarde alcalde de Baracoa. El 18 de febrero de 1519 Cortés salió desde La Habana rumbo al oeste sin
despedirse de Velázquez para evitar un cambio de parecer del gobernador respecto a la expedición.
Antes de llegar a Yucatán, hicieron escala en la isla de Cozumel, donde se encontraron con dos
antiguos supervivientes de un naufragio que ahora vivían entre los mayas, uno de ellos se unió a la
hueste y les fue muy útil por su conocimiento de la lengua maya. Una vez ya en Yucatán tuvo que
hacer frente a varias escaramuzas de los nativos, pero finalmente logró la sumisión del cacicazgo de
Tabasco, quienes le ofrecieron riquezas y mujeres indias entre las que se encontraba la que será
conocida como Doña Marina o Malinche. La Malinche fue tomada como compañera por Cortés y
se convirtió en su fiel auxiliar por su conocimiento de las lenguas maya y náhuatl, hasta el punto
que actualmente se denomina malinchismo a todo aquel o aquello que se abre ante el extranjero y
traiciona a su país. Siguiendo la ruta llegaron a San Juan de Ulúa, donde encontraron embajadores
de Moctezuma que, creyendo que los hombres blancos llegados del mar estaban encabezados por su
dios Quetzalcóatl, lo recibieron con gran acatamiento y presentes.
En este momento Cortés decidió desligarse del mando de Velázquez y procedió a fundar la Villa
Rica de la Veracruz y a crear en ella un cabildo del que se convirtió en Justicia Mayor y Capitán
General. Para asegurar su hueste e impedir el regreso a Cuba (Velázquez había mandado una orden
para que regresara), Cortés decidió ir al encuentro de Moctezuma.
En 1519 México era un mosaico que estaba unido por la fuerza. La tribu mexica había logrado,
gracias a sus tlatoanis, colocarse en una posición ventajosa y consolidar sus conquistas. Moctezuma
era el huey tlatoani en este momento, líder temporal y religioso. Era considerado estricto y firme,
respetado y temido, ya que tenía sometido a su pueblo y a más de treinta tlatoques (caciques de
otros pueblos) y otros lugares de menor importancia.
Pero a su vez, era supersticioso, conocía las profecías de su pueblo y estaba muy imbuido en la
cosmología mexica, por lo que creía firmemente en que las sociedades estaban hechas de
peregrinaciones, y que al igual que ellos habían sido los últimos en llegar al Valle Central, vendría
otro grupo con el que tendrían que pactar e incluso batallar para consolidar su poderío. De esta
forma pensó que los castellanos eran ese grupo e incluso que Hernán Cortes era un dios. En el
contexto descrito resulta casi fácil comprender cómo debieron sentirse Moctezuma y sus gentes
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

frente a los recién llegados y, aunque ello no explique exhaustivamente todo lo que ocurrió, se hace
imprescindible para entenderlo.
Dejando Veracruz en manos de Juan Gutiérrez de Escalante, partieron el 16 de agosto de 1519 hacia
Tlaxcala, pueblo enemigo de los aztecas, con la pretensión de establecer una alianza estratégica. De
esta forma los tlaxcaltecas se convirtieron en los mejores aliados de Cortés. En esta ciudad Cortés
recibió mensajeros de Moctezuma, liberó a los cautivos destinados a sacrificio y prohibió la
antropofagia.
Siguiendo la ruta guiada por los tlaxcaltecas, se encontró con pueblos fieles a Moctezuma que
querían frenar su paso, pero Cortés atacó por sorpresa y llevó a cabo una auténtica masacre que se
justificó como escarmiento y anuncio de lo que se esperaba a todo el que se opusiera a la voluntad
de los conquistadores, y de hecho parece que causó un efecto paralizante en Moctezuma.

3.3. Tenochtitlán
El 8 de noviembre de 1519 se avistó Tenochtitlán. Cuando los castellanos llegaron a Tenochtitlan se
dieron cuenta de la impresionante y grande que era la ciudad. Esta estaba en medio de un inmenso
lago conectada al exterior con grandes avenidas: hacía el norte Tepeyacac, a poniente la de
Tlacopán y al sur la que llegaba a Tulyehualco con un ramal a Ixtapalapa. Por esta último pasearon
los castellanos y fueron recibidos por Moctezuma, que los condujo al palacio de su padre
Axayácatl.
En los días siguientes, Cortés insistió a Moctezuma para abandonar los ritos religiosos que llevaba a
cabo, lo que le hizo ver que los conquistadores no procedían del dios Quetzalcóatl. Viendo que
Moctezuma podía actuar contra él y sus hombres, Cortés actuó y apresó a Moctezuma, que ahora
actuaría como calidad de rehén, a la vez que repartió los bienes del botín entre sus hombres.
En este momento, Cortés recibe la noticia de que Pánfilo de Narváez se dirigía a Veracruz por orden
de Velázquez para acabar con la rebeldía de Cortés. Este se llevó a un número de hombres consigo,
pero dejo a otro número en la ciudad azteca al mando de Pedro de Alvarado. Este, mientras Cortés
estaba fuera, permitió una fiesta celebrada en el Templo Mayor que finalmente disolvió masacrando
a los reunidos por miedo a que se sublevaran, lo que llevó posteriormente a una revuelta que acabó
con la victoria mexica. A la vuelta de Cortés, este le pidió a Moctezuma que apaciguara a sus
hombres, pero los sublevados respondieron a su emperador con un apedreamiento que le causó la
muerte.
Con esta situación, decidieron evacuar la ciudad la noche del 30 de junio, la que se conoce como la
“Noche Triste”, ya que cuando los castellanos estaban saliendo fueron sorprendidos por los aztecas
y murieron de ambos bandos. Los castellanos que lograron sobrevivir se retiraron a la ciudad de
Tlaxcala y allí se rearmaron para volver a atacar la ciudad y entablaron nuevas alianzas.
Cuauhtémoc, el nuevo Tlatoani, sería el encargado de dirigir la última pero magnifica resistencia
contra los conquistadores. En mayo de 1521 Cortés puso sitio a la ciudad y desabasteció a los que
se encontraban dentro de ella. Los soldados castellanos avanzaban de casa en casa y destruían y
saqueaban lo que se encontraban a su paso, sumando numerosas bajas a ambos bandos. Finalmente,
el 13 de agosto de 1521, con la captura de la canoa en la que iba Cuauhtémoc, terminó la lucha.
Cortés recibió pronto la confirmación real de la conquista, siendo nombrado Gobernador y Capitán
General. Sobre las ruinas de la antigua ciudad, emprendió casi de inmediato la reconstrucción de la
nueva Tenochtitlan, con el propósito de convertirla en la capital de la Nueva España. Mientras
tanto, procedió al enviar distintas expediciones de sometimiento de los pueblos y cacicazgos del
gran valle de México, estableció las primeras autoridades en la nueva ciudad y repartió solares,
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

tierras e indios entre los miembros de la hueste.

3.4. Consecuencias de la conquista de México: la expansión


El éxito de la conquista produjo un proceso expansivo en todas direcciones, tanto por mar como por
tierra. Sería Cortés quien tomaría la iniciativa y desde la costa Pacífica organizaría una expedición
hacia las Molucas (islas de las especias) y en una serie de viajes exploraría todo el Golfo de
California, que pasó a llamarse Mar de Cortés. En expediciones posteriores incorporó el norte de
México a sus territorios.
En 1523 Pedro de Alvarado conquistó el territorio actual de Guatemala y El Salvador. Pero una de
las empresas más destacables fue la ideada por Cortés en la región norte de Honduras, la región de
las Hibueras, y comandada por Cristóbal de Olid. Este traicionó a Cortés, lo que provocó que el
propio Capitán General marchara con un enorme ejército de rehenes entre los que se encontraba
Cuaúhtemoc. La expedición se convirtió en un verdadero desastre debido al intransitable camino
selvático y a la climatología adversa, y decepcionado por el fracaso Cortés regresó a México y
después a España. A su vuelta en 1530, ostentaba el título de marqués del Valle de Oaxaca, pero
había sido desprovisto de su poder político. En todo caso, la consecuencia de la conquista de
México fue que hacia 1550 se había logrado el dominio efectivo de la mayor parte de
Centroamérica.

4. La conquista de Perú
La conquista del Perú es otro capítulo, quizás el más interesante, del largo y complejo proceso de
conquista de la región Andina. Dicho capítulo, aglutina elementos tan diversos como los elementos
estructurales propios de la región y los intereses antagónicos de los diversos grupos y huestes
conquistadoras.

4.1. Hacia Cajamarca


Tras el descubrimiento y toma de posesión de la Mar del Sur por Núñez de Balboa en 1513, sólo era
cuestión de tiempo la exploración del litoral pacífico de Sudamérica, hecho que se catalizó con los
insistentes rumores que hablaban de un riquísimo imperio situado al Sur, el país de Virú o Perú.
El protagonista de esta empresa conquistadora sería el extremeño Francisco Pizarro, que había
llegado a las Indias con Ovando en 1502 y había gozado de encomiendas en Panamá. Junto con su
asociado Diego de Almagro emprendió su primera ruta hacia el sur desde la ciudad de Panamá en
1524, expedición que resultó decepcionante. En 1526 organizaron una segunda expedición que les
permitió entrar en contacto con los señoríos costeros de la cultura inca de las costas ecuatorianas,
confirmando que Perú existía y se ubicaba en algún lugar de las impresionantes montañas que
veían desde la costa. Prosiguieron hacia el sur y llegaron a la rica ciudad de Tumbes que pertenecía
el imperio de los Incas, donde se hicieron con riquezas. Sin embargo, de vuelta a Panamá, el
gobernador Pedro delos Ríos desautorizó la empresa conquistadora y Pizarro se vio obligado a
volver a la Península para obtener de la Corona el respaldo oficial para la conquista de lo que él
llamaba la Nueva Castilla.
En Toledo logró una capitulación donde se incluía el título de gobernador y Capitán General, la
facultad para fundar ciudades y fortalezas y la de repartir solares e indígenas entre sus huestes. A
Almagro sin embargo, se le concedía tan solo el mando de una fortaleza en Tumbes. La capitulación
obtenida por Pizarro refleja bien la experiencia indiana del conquistador, que le llevó a asegurarse
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

por concesión real la exclusividad de la dirección de la empresa conquistadora, lo que supuso un


agravio con su socio Almagro y su hueste.
La nueva expedición partió de Castilla en 1530 y desembarcó en la actual costa ecuatoriana. La
hueste desembarcó y siguió a pie por la costa hasta Tumbes, de donde obtuvieron un importante
botín de oro y plata, y la noticia de la guerra civil por la mascapaycha (corona imperial) y el
dominio del Tawantinsuyu entre Huáscar y Atahualpa. Este enfrentamiento se presentaba como una
nueva oportunidad para la conquista. Tras esto Pizarro fundó el primer asentamiento europeo en
aquella tierra, San Miguel de Piura, donde dejó a unos sesenta españoles para afianzar el dominio
castellano y emprendió con el resto la marcha hacia la cordillera, al centro u ombligo del imperio
Inca. En el camino Pizarro supo aprovechar la situación de inestabilidad política y estableció
alianzas con algunos de los señores más importantes, que le ofrecieron los medios necesarios para la
rápida y definitiva aniquilación del poder imperial (como los tlaxcaltecas habían hecho con Cortés
en México).

4.2. En Cajamarca
Conocedor de la presencia de extraños y confiando erróneamente en su superioridad, Atahualpa
envió a un embajador invitando a Pizarro a entrevistarse con él en Cajamarca, a donde llegaron el
15 de noviembre de 1532. Los recién llegados obtuvieron permiso para alojarse en los mejores
aposentos de la ciudad, en su plaza principal, y se concertó una entrevista entre el Inca y Pizarro.
Para entonces los españoles ya habían llegado a la conclusión de que su única posibilidad de salir
bien de aquel encuentro era capturar al líder, y planearon una emboscada en la propia plaza
principal: cuando el padre Vicente Valverde salió a leer el contenido del Requerimiento, Atahualpa
le preguntó que dónde decía todo eso, a lo que el sacerdote le mostró la Biblia, pero Atahualpa la
cogió, se la acercó al oído y como no escuchó nada la arrojó. Este hecho inicio un ataque feroz y
despiadado par parte de los castellanos que, en medio de la tremenda confusión, lograron capturar
al Inca. Capturado el soberano, el ejército nativo quedó paralizado.
A sabiendas del gran interés de los conquistadores por el oro y los metales preciosos, Atahualpa les
ofreció un fabuloso rescate a cambio de su vida y su libertad; y prohibió a sus generales que
llevaran a cabo cualquier maniobra contra los invasores, como si temiera que pudieran acabar con
su vida sin miramientos. Las razones de su conducta frente a la invasión en el momento más
decisivo de su biografía personal (recientemente había sido nombrado Inca) y el de la configuración
de su país, han dado pie a todo tipo de respuesta e hipótesis.
Desde todos los rincones del imperio fue llegando un río de metal para intentar solventar la
situación; Pizarro ordenó la función de todo el oro y la plata (11 toneladas!!!!) y repartió el botín en
lo que pasó a llamarse “el reparto de Cajamarca”. Sin embargo, de poco sirvió esta donación de
riquezas, ya que los castellanos no cumplieron con lo pactado, y alegando un supuesto avance de un
general inca para librar la ciudad, se acusó a Atahualpa de traidor y se procedió a ejecutarle en la
misma plaza de Cajamarca tras un juicio con acusaciones amañadas para ofrecer un viso de
legalidad. Los cronistas nos dan cuenta de su arrepentimiento antes de morir. Pizarro justificó la
decisión de su muerte apelando al miedo de sus hombres y a la posible pérdida de “tan excelentes
dominios como aquí tiene Su Majestad”.

4.3. Cusco
Sin embargo, Atahualpa no se llevó a la tumba el problema de la gobernabilidad y soberanía del
Tawantinsuyu; y Francisco Pizarro aprovechó las luchas y rivalidades entre las distintas facciones
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

de los señores de la guerra.


La alianza con uno de los miembros de la panaca imperial, Manco Inca, le abrió las puertas de la
ciudad de Cusco. Conquistada la capital imperial, comienza una nueva fase en la invasión europea
caracterizada por la disminución de los enfrentamientos entre los sectores en litigio y por la
expoliación de la capital y de los grandes santuarios (voracidad expoliadora).
Tras esto, Pizarro comenzó a buscar una conexión por mar con Panamá, estableció la nueva capital
del Perú en la Ciudad de los Reyes (Lima) a orillas del río Rimac, y Manco Capac pasó a ostentar la
corona de nuevo Inca. Así pues, a finales de 1534, la conquista del Perú parecía finiquitada.

5. Rebelión indígena en Vilcabamba


Aprovechando el conflicto entre pizarristas y almagristas (“Guerras Civiles de Perú”), y cansado de
aguantar las continuas ofensas de los españoles, el joven Manco decide ponerse al frente de su
pueblo, descontento y horrorizado por el comportamiento de los invasores, para expulsar a estos del
Perú. El Inca será capturado y más tarde logrará escapar para organizar una rebelión indígena de tal
magnitud que se extendió por todo el territorio, dejando históricas batallas como la de
Ollantaytambo (derrota española) o la de Sacsahuamán; y culminó con el cerco de los españoles en
Cusco en 1536. Sin embargo, la intentona inca de reapoderarse del dominio peruano se verá
frustrada.
Entonces el Inca decide retirarse a un refugio inaccesible y desconocido por los castellanos:
Vilcabamba, la “ciudad perdida”, desde donde planearía una última intentona contra sus enemigos
que le llevará a controlar gran parte del espacio andino ocupado por los españoles, junto con otros
jefes incas. Sin embargo, Francisco de Chaves y Gonzalo Pizarro sofocan esta última rebelión. El
imperio había acabado de vivir su última aventura, pero los conquistadores no correrían mejor
suerte debido a los enfrentamientos entre uno y otro bando.

6. Conquistadores conquistados: las guerras civiles del Perú


El conflicto entre pizarristas y almagristas resurge en 1535 como consecuencia de la ambigüedad de
los límites de la gobernación de Nueva Toledo (sur del imperio inca), que se había concedido a
Almagro. Pizarro logra “capear el temporal” propiciando la salida de su opositor hacia las tierras de
Chile, al mando de una expedición. Sin embargo la calma durará poco, ya que dos años más tarde
Almagro regresará y ocupará la ciudad de Cusco con su ejército, la cual consideraba suya por
derecho de conquista. Poco después los pizarristas arremeterán contra el territorio almagrista,
capturarán a su líder y lo condenarán a ser ejecutado en la Plaza de Armas de Cusco.
Sin embargo, el 26 de junio de 1541, un grupo de almagristas asaltó la casa del gobernador en Lima
y asesinó a Francisco Pizarro. Al magro “el mozo”, hijo mestizo de Almagro, es nombrado
gobernador de Perú por los triunfadores del momento que se dedican a perseguir pizarristas. Duró
poco la euforia, ya que el emperador Carlos envió un ejército que derrotó a los almagristas y asesinó
a su líder al igual que había ocurrido con su padre y predecesor.

7. Resistencia en las fronteras. El caso de la rebelión del Mixtón (Nueva Galicia)


En la segunda mitad del siglo XVI el mundo colonial apenas podía representarse sobre un mapa
como un conjunto de pequeñas manchas diseminadas por la geografía americana, limitándose
solo a las costas y a los grandes núcleos prehispánicos. Más allá se encontraba otro tipo de culturas
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

indígenas muy heterogéneas y con niveles de organización menores que impidieron a los españoles
establecer sobre ellas sólidos y permanentes mecanismos de control a no ser que las sometieran de
forma violenta.
En este contexto estallaron conflictos similares a los de la región andina antes tratados. En la lejana
Nueva Galicia, en la zona conocida como el Mixtón, fuera de control de los españoles, los
sacerdotes indígenas anunciaron (ritos adivinatorios basados en el uso de alucinógenos como el
peyote) el regreso de Tlatol, una antigua deidad relacionada con los cantos. Tlatol volvería
acompañado de todos los antepasados para vengar la afrenta de que los españoles habían realizado
sobre su tierra sagrada y para castigar a aquellos indígenas que hubieran aceptado su dominio. Por
ello, los creyentes debían de someterse a un proceso de purificación, librarse del estigma del
bautismo y emprender la lucha armada contra los invasores; solo así sería posible el inicio de una
nueva era en la cual los indígenas puros serían invencibles.
En 1541 todo el norte mexicano se incendió, pues los mixtones y los tarascos quemaron iglesias y
mataron a los doctrineros; incluso la ciudad de Guadalajara fue destruida. El virrey Mendoza envió
contra ellos varias expediciones pero todas fueron rechazadas, y la sofocación definitiva de la
revuelta se consiguió cuando envió un ejército mayoritariamente compuesto por indígenas fieles a
los españoles, que a sangre y fuego acabaron con los sublevados y con los sacerdotes que les
instigaban.
De poco sirvió esta solución, ya que dos años después todo el norte estaba incendiado y los
indígenas obstaculizaban las tareas de extracción de plata en las minas de Zacatecas, en el norte
del Valle de México, asaltando las caravanas que llevaban el mineral extraído, ya que el camino que
iba hacia las minas cruzaba la región conocida como Gran Chichimeca, poblada por estos indígenas
alzados. El río de plata que llegaba desde el norte era fundamental para las autoridades españolas,
por lo que los indígenas fueron considerados como los más temibles enemigos de Nueva España,
declarándose contra ellos la “guerra justa”, es decir, podían ser eliminados y esclavizados por todo
aquel que tuviera oportunidad de hacerlo (relación con el tema de los caribes que los consideraban
salvajes y con el tema de los modelos colombinos y las instrucciones de Ovando). Los chichimecas
demostraron ser hábiles guerreros contra los españoles, adoptaron sus formas de combate, sus armas
y el uso del caballo, con los que cada vez se hicieron más temibles; y contra ellos fueron
movilizados grandes contingentes de soldados e indios aliados de los españoles.
En este contexto surgió un personaje de frontera: el mestizo convertido en cabecilla de un grupo
de aventureros que vivía de capturar indios y venderlos en las minas; con este dinero adquirieron
propiedades que con el tiempo se transformaron en haciendas de ganado con el que abastecían a los
complejos mineros. Este modo de vida y modelo cultural basado en la frontera perdurará mucho en
el tiempo. También fueron llevados hasta la región otros grupos de indígenas ya aculturados a
quienes se les hizo entrega de tierras para que las cultivasen, de manera que se lograría el
asentamiento de las parcialidades indígenas más belicosas.
Si la guerra en la zona pareció irse apaciguando en un proceso que duró casi cien años, conforme la
frontera avanzó hacia el norte se fue desplazando también la violencia: todas las tribus nómadas
de Nuevo México y Nueva Vizcaya (apaches, comanches, navajos) entraron en conflicto con los
españoles por su mera presencia, y mantuvieron la frontera encendida hasta años después de la
independencia.
Todo esto se muestra en el mapa de Nueva Galicia, donde se reflejan las fronteras y conflictos
mencionados anteriormente:
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

8. Consecuencias del choque de la invasión


8.1. Crisis demográfica: Cadena casual: violencia-ritmo de trabajo-dieta-epidemia-desgano vital

En lo que se refiere al problema del estado de la población americana anterior a la invasión existe
una de las grandes discusiones de la historiografía americanista. La conquista ibérica tuvo un fuerte
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

impacto demográfico en las sociedades americanas, especialmente en los siglos XVI y XVII. Las
últimas estimaciones, presentan para México central, una población en torno a 25,3 millones de
habitantes en el momento de contacto (1519), que se redujo a apenas un millón en torno a 1605.
Las causas de este fenómeno son diversas:

IMPACTO BÉLICO
En primer lugar cabe destacar el impacto bélico de la conquista que se cobró numerosas víctimas,
especialmente cuando se enfrentaban grandes ejércitos producto de las alianzas con pueblos
enfrentados al núcleo imperial que se combatía. Este factor de violencia es denominado por la
historiografía como la “tesis homicida”, que además de las guerras también incluye todo tipo de
violencia contra los pueblos indígenas. Destacamos en este asunto las grandes bajas acontecidas
durante la toma de México-Tenochtitlán, donde la guerra se cobró unas 200.000 almas indígenas;
así como durante la conquista de Perú, donde la mortalidad masculina llegó al 80%.

EPIDEMIAS
En cuanto a las epidemias, son consideradas como una de las principales causas de mortalidad
indígena, si no la principal. El impacto epidemiológico se vincula a las defensas inmunológicas
desarrolladas por los americanos que carecían de respuestas adecuadas frente a las enfermedades
importadas de Europa; por lo que el proceso de “unificación microbiana del mundo” tuvo efectos
terroríficos. En concreto, en las Antillas hubo una mayor incidencia de bajas debido al mayor
aislamiento de estas comunidades al vivir en islas. La viruela, el sarampión y la gripe fueron
devastadores.

VIRUELA
La viruela se cebó con buena parte de la población de La Española en 1519 y también golpeó
México-Tenochtitlán desde donde se propagó a América Central. También azotó Perú en 1524. En
cuanto al sarampión, la primera epidemia en América tuvo lugar a partir de 1531, en Panamá y La
Florida. Y en cuanto a la gripe, azotó tanto a los expedicionarios como a los nativos de La Española
durante el segundo viaje de Colón, produciendo un gran número de víctimas.

TRABAJO OBLIGATORIO
Otra de las causas fue el trabajo indígena obligatorio, fomentado por el repartimiento, la
encomienda, la mita y la tributación. En este caso nos estamos refiriendo a nuevas condiciones de
trabajo y el ritmo del mismo impuesto a sociedades que tenían una concepción del uso del tiempo
muy peculiar y bastante alejada del europeo. Además, en todas las sociedades indígenas, la
categoría “trabajo” casi no tenía existencia fuera de determinadas condiciones sociales: no existe la
forma abstracta del trabajo desvinculada de las relaciones familiares y sociales, sino que se trabaja
para el cura, para el Inca o para un familiar que lo solicita (reciprocidad).
Los conquistadores sometieron a las economías de subsistencia indias a un esfuerzo sobrehumano y
creciente, mientras que el pago de tributos, prácticamente constante, debía soportarlo un número
cada vez menor de individuos. Esto suponía un incremento considerable en la explotación de la
mano de obra indígena, a lo que habría que agregar los sistemas de trabajo forzado desarrollados en
diversas regiones.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

MESTIZAJE
Un cuarto factor sería el mestizaje, consecuencia de la inmigración, tanto española como africana.
Hasta 1492, el mundo americano estaba habitado únicamente por población nativa, aunque con una
gran diversidad étnica entre los grupos. Pero poco a poco fueron llegando otros grupos, europeos
blancos y africanos negros que alteraron totalmente la realidad demográfica y redujeron el
porcentaje de población indígena. El hijo entre una persona de etnia blanca y una persona de etnia
amerindia era considerado mestizo; mientras que el hijo de una persona de etnia negra con una
persona de etnia amerindia era considerado zambo.

DESGANO VITAL
Además, hay que sumar un factor al que denominamos «desgano vital», es decir, la pérdida de un
mundo que se ha desconfigurado y ha perdido toda lógica según los parámetros de las sociedades
indígenas. Es decir, la conquista tuvo un impacto psicológico que tuvo repercusión principalmente
en las sociedades caribeñas de las Antillas.

EXPANSIÓN GANADERA
Esto está muy relacionado con el último factor, la introducción de nuevos recursos y la expansión
ganadera ovina y vacuna, que cambiaron tanto el paisaje humano como la dieta de los indígenas
(la presencia de ganado redujo la cantidad de recursos vegetales disponibles entre otras cosas por la
multiplicación de los pastos).

Todos estos factores se interrelacionan entre sí y configuran lo que podemos llamar una cadena
causal que contribuye a explicar estos hechos. La cadena está compuesta por los siguientes
elementos principales: ritmo de trabajo-dieta-epidemia, todo ello condicionado por un marco
general en el que reina la violencia desatada por los invasores y en el cual se halla omnipresente ese
estado anímico al que hemos denominado «desgano vital».
En otras palabras, ante la exigencia de ritmos de trabajo agotadores y ajenos al sistema de valores
del universo cultural indígena, frente a la dieta muchas veces empobrecida (en cantidad, calidad y
diversidad) por efecto de la perdida progresiva del acceso a determinados recursos y también, con
frecuencia, a causa del impacto ambiental ocasionado por la irrupción europea, los ataques de las
epidemias resultarán mucho más mortíferos en una población que debía de hacer frente a crisis de
subsistencia y a su propia desmoralización. Cada uno de estos elementos reactúa en forma de
acelerador el descenso de la población.

8.2. Crisis ecológica: el derrumbe de la elación del ser humano con el ecosistema americano. El
caso del Valle de México
El problema del medio ambiente también debería ser considerado entre las consecuencias del
choque de la conquista. Acerca de las relaciones entre la irrupción europea y el medio ambiente
americano se ha escrito bastante en los últimos tiempos y sólo ofreceremos algunos ejemplos de las
diversas situaciones.
Veamos el caso del Valle de México. Sabemos que a la llegada de los europeos, el valle albergaba
una densidad poblacional altísima y una parte importante de esta población era urbana, viviendo en
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

las ciudades que se hallaban en medio de los lagos, de las cuales México-Tenochtitlán pudo haber
alcanzado los 200.000 habitantes. Alimentar a una población de estas dimensiones exigiría, hoy
mismo, de la movilización de ingentes recursos agrícolas. La solución de las sociedades del valle
para ello tiene que ver con el carácter lacustre del emplazamiento y las técnicas agrícolas adaptadas
al medio que allí se emplearon, fundamentalmente las chinampas.
Alexander von Humboldt, el célebre naturalista y viajero alemán, se decepcionó durante su
primera visita a la ciudad de México (1803) al observar que las aguas del lago se habían retirado y
disminuido y ahora la urbe se encontraba a casi 5 kilómetros del lago de Texcoco (o sea que el lago
era más pequeño y lo que quedaba de él estaba alejado de la ciudad). Estas declaraciones se
contraponen con aquellas de Francisco López de Gómara en 1553, quien a pesar de no haber estado
nunca en México, recibía la información del propio Hernán Cortés entre otros; y describió la ciudad
como una Venecia americana, emplazada sobre el lago y con múltiples canales y puentes. También
el cronista Bernal Díaz del Castillo dio en torno a 1570 una imagen similar de la ciudad.
La respuesta a la pregunta ¿qué ha pasado entre estos dos cronistas del siglo XVI, que nos describen
esa compleja red de calzadas, canales y ciudades simbióticamente integradas a un mundo acuático y
el testimonio desilusionado de Humboldt en 1803?, la respuesta es que pasaron tres siglos de
desenfrenada lucha de los conquistadores y los colonizadores europeos contra el agua de las lagunas
del valle. Lo explicamos más detenidamente a continuación:
El valle de México era una vasta extensión compuesta por una serie de lagos y lagunas y por varias
áreas pantanosas. Una de las primeras consecuencias de este hecho con respecto a la ocupación
humana es la necesidad de poner en marcha un sistema de irrigación y de técnicas agrícolas
adaptadas al medio lacustre como las chinampas (explicado en el tema 3). De este modo la
producción agrícola del área creció de forma progresiva.
Así pues, en la época prehispánica existía una cierta simbiosis entre los habitantes del valle y el
agua; pero cuando llegaron los españoles en 1519 tuvieron la actitud exactamente opuesta: en vez
de adaptarse al medio y «convivir con el agua», pusieron su empeño en desarticular todo este
sistema y «luchar contra el agua». El detonante de esta actitud fue la primera gran inundación del
periodo hispano a mediados del siglo XVI, pero esta oposición al agua ya se dilucidaba desde los
primeros enfrentamientos con los indígenas: destruyeron calzadas, canales, esclusas, albardones, así
como los hermosos jardines con juegos acuáticos y diversidad de especies animales y vegetales que
mantenían los señores y nobles de las ciudades del valle.
Pero el proceso más lento (y a la larga, más destructivo) fue la progresiva e ininterrumpida
desecación del sistema lacustre del valle. Los invasores no estaban dispuestos a convivir con el
agua en la que consideraban ahora su ciudad y, dado que ellos no obtenían ninguna ventaja de ese
medio acuático, decidieron buscar una salida a esa cuenca endorreica para acabar con las
inundaciones (sin comprender quizás que eso acabaría con el complejo sistema de recursos
indígenas que giraba alrededor de la vida lacustre). Esta tarea (el “desagüe de Huehuetoca”) se
arrastró por varios siglos y consumió además la vida de miles de indígenas obligados a realizar el
trabajo.
La desecación del sistema lacustre tuvo varias consecuencias. Por un lado fue amenazando
lentamente el área chinampera que, poco a poco, se fue quedando “sin agua” y retirándose cada
vez a zonas alejadas. Y junto a los lagos se fueron acabando también los ingentes recursos en
proteínas animales y en vegetales del sistema lacustre que facilitaban la supervivencia de gran
parte de la población indígena, entre ellos muchas variedades de peces, anfibios y aves (ejemplo: el
anfibio ajolote). Es éste ejemplo típico del empobrecimiento de la dieta ocasionado por el impacto
ambiental al que hemos hecho mención en el apartado anterior.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Por otro lado, las aguas de los lagos al retirarse progresivamente dieron nacimiento a diversos tipos
de ocupación humana. En algunas partes los maizales reemplazaron a las aguas, pero en otras las
tierras no era aptas para la agricultura y no fueron ocupadas, formándose amplias extensiones de
pantanos salitrosos semidesecados que, cuando en la estación seca soplaba los vientos dominantes,
daban lugar a tormentas de tierra (tolvaneras) que se cernían sobre la ciudad debido al polvo y
detritos que se acumulaban en ellos.
Pero no solamente la destrucción de las obras hidráulicas prehispánicas fue el elemento que atentó
contra el sistema lacustre y su extensión. También la progresiva deforestación de los bosques en las
faldas de las sierras (madera para construcción y leña) y la conversión de una gran parte de las
tierras en zonas agrícolas explotadas mediante los sistemas de aratura europeos (los arados tirados
por bueyes dieron mayores rendimientos en los inicios, pero deslavaron las tierras en pendiente por
efecto de las precipitaciones torrenciales en la época de lluvias).
Estos fueron factores que contribuyeron a transformar negativamente el medio ambiente del valle y
a acelerar los mecanismos de desecación del sistema lacustre.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

6. LA CREACIÓN DE UNA ESTRUCTURA IMPERIAL DE PODER.


ADMINISTRACIÓN, GOBIERNO, HACIENDA E IGLESIA.
1. El rey quiere saber. Geografía y poder administrativo
Desde el descubrimiento de América, la Corona tuvo claro que debía controlar y administrar los
territorios invadidos, ahora convertidos en reinos integrados en la monarquía hispánica. Sin
embargo, el intento de configurar la administración indiana estuvo caracterizado por el ensayo y
error debido a diversas variables entre la que destacamos la resistencia inicial de los conquistadores.
En los primeros años de ocupación del espacio Caribe resultó inviable aplicar el modelo
administrativo metropolitano que consistía en gobernar las colonias desde la Península, ya que los
organismos creados en la metrópoli para dirigirlas y gestionarlas eran insuficientes; e incluso el
modelo portugués de feitorias.
Es por ello que se pensó en crear otros organismos nuevos que estuviesen implantados en el
territorio y que cortaran de raíz cualquier posibilidad de construir una sociedad señorial en América.
De esta forma el rey quería saber todo en relación a sus dominios en América, la cartografía
(dimensión territorial de sus colonias, Tierra Firme e islas, distancias en leguas de un pueblo a otro),
los pueblos y gentes que la habitan, tanto indígenas como españoles y mestizos, etc. para aplicar un
modelo político administrativo no sobre un concepto difuso de las colonias (desde un punto de vista
jurídico las Indias tenían las mismas características que los reinos restantes integrados en la Corona
española, por lo que se les negó la de la “vulgar” consideración de colonias), sino para gobernar
sobre una realidad poblada y conocida.
Como
ya
hemos

señalado, el objetivo de la monarquía en el siglo XVI fue cortar de raíz cualquier posibilidad de
construir una sociedad señorial en América, lo que la enfrentó con los encomenderos que pretendían
construir una sociedad colonial a su imagen y semejanza reforzando especialmente la figura del
cabildo.
La Corona tenía como objetivo una administración centralizada y controlada por el monarca, que
implicaba un duro control sobre los funcionarios establecidos en América con el fin de limitar los
efectos de la corrupción y el despotismo sobre la población americana y en particular sobre los
indígenas. Para evitar esto se utilizaron dos instrumentos: la sanción de las Leyes Nuevas de 1542 y
la elaboración de un programa por parte de la Junta Magna de 1568 que instauraba en Indias el
poder absoluto del monarca. Los virreyes Francisco de Toledo en Perú y Martín Enríquez en
México fueron los principales instrumentos del plan.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

LAS LEYES NUEVAS DE 1542


Suponían una exhaustiva revisión de la normativa y de la administración americana, con tres
objetivos principales por parte de la Corona: controlar y reorientar el papel de los conquistadores y
pobladores españoles en América, reconciliar las relaciones de la Corona con sus súbditos indígenas
y frenar el descenso demográfico. Estos objetivos estaban desglosados en 39 leyes organizadas en
cuatro bloques temáticos:
• Reestructuración del Consejo de Indias
• Creación del virreinato del Perú
• Trato debido a los indígenas
• Reforma del sistema tributario

JUNTA MAGNA DE 1568


Entre otras cosas se ordenó a los virreyes de Perú (Francisco de Toledo) y México (Martín
Enríquez) llevar a cabo una profunda reorganización de las Indias basada en los siguientes
objetivos:
• Centralismo con el fin de controlar y limitar las funciones de los burócratas, ya fueran
virreyes o alcaldes de Cabildo.
• Quitar el poder absoluto que estos burócratas, incluida la Iglesia, ejercían sobre los mundos
indígenas y negros.
• La monarquía quiso ser ella la cúspide de la pirámide en el control de la población (blanca,
criolla, mestiza, negra, indígena…).

2. Características del modelo administrativo indiano en la etapa fundacional de las indias


Los conquistadores pronto ensayaron la implantación en las Indias de un sistema de gobierno
inspirado en el modelo metropolitano. Los nuevos territorios conforme iban siendo pacificados,
fueron siendo incorporados progresivamente a la Corona de Castilla (ej.: Nueva Galicia o Nueva
Toledo) dentro del conjunto que se denominará Indias Occidentales.
En un inicio, cuando no se conocía de manera efectiva la realidad de América, se quiso gestionar
todo este amplio territorio desde la propia península y usando sus instituciones como el Consejo de
Castilla o la Casa de Contratación (esto ocurrió después de que fracasaran los tres modelos
colombinos que vimos en el tema 4). Dos características que conviene destacar en esta etapa
fundacional de las Indias que llega aproximadamente hasta la década de los años 70 del siglo XVI
(1570) son:

LA SIMULTANEIDAD DEL PROCESO CONQUISTADOR CON EL PROCESO


VERTEBRADOR DE LAS INSITUCIONES
Es decir, al mismo tiempo que se descubre una zona, se está poblando otra. Los tiempos fueron
diferentes en todo el territorio americano. Estos desajustes temporales y a política de ensayo y error
reflejan claramente una idea que con frecuencia es olvidada, la segunda característica.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

EL MODELO POLÍTICO ADMINISTRATIVO INDIANO NO NACIÓ PERFILADO


Por el contrario, se fue delineando y fraguando conforme se desarrollaban los acontecimientos y se
incorporaban nuevas tierras, pues hasta 1520 las Indias Occidentales se reducían solo al ámbito
antillano, por lo que la Corona podía gobernar este pequeño territorio con algunos funcionarios del
Antiguo Consejo de Castilla, de la Casa de Contratación de Sevilla o con un simple gobernador. Sin
embargo, cuando en 1519-1522 se tiene constancia de la gran inmensidad continental americana
con la primera vuelta al mundo de Magallanes-Elcano, además de con la conquista de México, se
admite la necesidad de crear unos órganos específicos que administren y canalicen el poder real en
un nuevo escenario que es muy amplio. Se produce entonces la creación del Real y Supremo
Consejo de Indias en 1524 como respuesta institucional a este problema, donde tendrá un papel
fundamental el cosmógrafo. Esto le permitirá al rey conocer de manera efectiva la realidad
geográfica de América.

3. Administración indiana. Instituciones peninsulares


El aparato administrativo que regía el funcionamiento de las Indias dependía de una doble
estructura jerarquizada, que estaba sometida a la autoridad del rey, máxima e indiscutible. Por un
lado estaban las instituciones metropolitanas (Casa de Contratación y Consejo de Indias como
máximo órgano de los asuntos americanos); y por otro se encontraba la administración indiana en
Indias (por orden de importancia: virreinato, Audiencia, Gobernación, Real Hacienda y cabildos).
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

3.1. Instituciones de gobierno metropolitanas


En cuanto a las instituciones de gobierno metropolitanas nos encontramos con Consejo de Indias y
la Casa de contratación:
El Consejo de Indias (1524) fue el máximo órgano en cuanto a asuntos americanos. Este no sólo
aconsejaba al monarca y dictaba la política general del reino, sino que también desempeñaba
funciones administrativas, legisladoras, consultivas (resolver asuntos específicos) y de justicia en el
grado de tribunal supremo en los pleitos civiles, dirigía la Hacienda y de la Iglesia. Surgió en 1524
por la necesidad de la existencia de un consejo separado del Consejo de Castilla que estuviera
especializado en asuntos indianos.

La creación del Consejo de Indias respondía al esquema polisinodial de la monarquía en el que


cada reino agregado disponía de un Consejo como órgano máximo especializado en sus asuntos.
Más concretamente “polisinodial” hace referencia a un sistema de organización del gobierno basado
en Consejos y Juntas (característico de la monarquía española en los siglos XVI y XVII); significa
pues que cada territorio conserva su independencia y altas capacidades de autogestión: leyes,
costumbres y prácticas de gobierno propias, y que el rey gobierna en cada uno de los territorios
individualmente, como señor exclusivo de cada uno de ellos. (Este es un sistema fundamental en
una monarquía absolutista donde todos los poderes están concentrados en el rey pero obviamente él
solo no se puede hacer cargo de ellos y tiene que delegar las responsabilidades).
El Consejo de Indias contaba con la siguiente estructura: contaba con un presidente, cargo que
ocuparía Juan de Ovando, cuatro o cinco consejeros letrados, un fiscal, un secretario, un cronista
(fundamental para conocer la idiosincrasia americana y actuar en consecuencia, ya que los
trabajadores del Consejo nunca habían ido a las Indias), un cosmógrafo (fundamental para el
conocimiento de la geografía y la especificidad americana y actuar en consecuencia, ya que los
trabajadores del Consejo nunca habían ido a las Indias) y unos pocos funcionarios más. Juan de
Ovando adoptó el funcionamiento del Consejo a la especificad andina, y ante el caos legislativo de
las medidas adoptadas para el gobierno de las Indias, intentó redactar un verdadero código o libro
de Ordenanzas que de un modo ordenado recogiera todas las normas dictadas para dicho gobierno.
Sin duda la labor de Ovando supuso el máximo esfuerzo llevado a cabo para ordenar la vida jurídica
colonial y para encauzar el Derecho Indiano, de manera que los funcionarios del Consejo de Indias
pudieran aplicar la ley. Los primeros libros de Ordenanzas se redactaron entre 1569 y 1571. Sin
embargó acabó el proyecto se abandonó tras su muerte en 1575.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

El Consejo de Indias perdería su influencia cuando en el siglo XVIII se crearon las Secretarías de
Estado.
El segundo órgano de importancia en la Península era la Casa de Contratación (1503), que
funcionó en Sevilla y posteriormente en Cádiz a partir de 1717. Sus funciones eran las de actuar
como órgano fiscalizador y administrador de las expediciones de descubrimiento y conquista y
también del comercio colonial y de la emigración a las colonias, de esta forma se encargaba de
gestionar asuntos económicos (tratos, contratos, tráfico de mercancías), controlar las remesas de
metales preciosos que llegaban a España, controlar y registrar la emigración (licencias, permisos,
pasaportes), organizaba las expediciones a América, cobraba ciertos impuestos, se encargaba de
gestionar y fiscalizar el monopolio comercial transatlántico hasta mediados del siglo XVIII.
Después de 1524 su funcionamiento pasó a depender del Consejo de Indias. Llegó a tener en un
momento dado competencias judiciales, pero entraron en contradicción con las del Consejo de
Castilla que luego pasarían al Consejo de Indias, y con las de las audiencias americanas. Fue
cerrada definitivamente en 1790.

3.2. Instituciones de gobierno indianas


Veamos una breve explicación de las instituciones de gobierno que se encontraban en territorio
americano o indiano (a ver, esto es una ampliación por si acaso pregunta algo de esto pero no lo
pone en la guía didáctica como tal, supongo que con saber el nombre de cada una o el esquema que
aparecía a principio del punto 3 vale):
1. Virreyes: los virreyes eran la representación del rey en América y por lo tanto la máxima
autoridad política que reforzaba el poder central del monarca. Acumulaban atribuciones de
hasta cinco ramas gubernamentales: gobierno o administración civil, justicia, ejército,
hacienda e Iglesia. La figura del virrey concretamente tenía el privilegio de nombrar cargos
de magistrados y funcionarios locales, aunque los cargos de oidores de las audiencias y
gobernadores eran cubiertos desde la península. Normalmente pertenecían a la nobleza
castellana y ocupaban su cargo durante unos 6 o 10 años de media. Algunos ejemplos de
virreinatos eran el de Nueva España, fundado en 1535, y el de Perú en 1543.
2. Gobernadores: El segundo nivel de poder, estaba constituido por las gobernaciones, que no
coincidían con las capitales de los virreinatos. En las gobernaciones más importantes había
audiencias y al igual que sucedía con los virreyes, los gobernadores compaginaban distintas
funciones. Sin embargo, la creación en el siglo XVIII de las intendencias alteró el esquema
inicial. Durante los primeros años de la conquista fueron los representantes de la Corona.
3. Audiencias: Tribunales supremos de justicia. La mayoría de los oidores (siglos XVI y
XVII) estaban unidos a los intereses de las élites locales indianas.
4. Alcaldías mayores, corregimientos: unidades político-administrativas menores. Los
alcaldes mayores de las jurisdicciones más importantes eran designados por la Corona y el
resto por un virrey. Debían ocupar el cargo por un tempo limitado y no podían ser
hacendados o encomenderos en su misma zona.
5. Adelantados
6. Cabildo: presidido por el alcalde y compuesto por los regidores, tenía las funciones de
justicia (primera instancia), legislativa (ordenanzas locales, control de precios), gobierno
(regulación de la vida local) y defensa (control militar del territorio). Las élites llegaron a
dominarlo, por lo que se convirtió en el baluarte de sus pretensiones autonómicas.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

7. Real Hacienda
8. Visitas, residencias: fueron los mecanismos usados por la Corona para conocer la situación
real de los territorios americanos. Todo aquel que hubiese ocupado un cargo público se tenía
que someter al final de su mandato a un “juicio de residencia” a fin de conocer su
comportamiento personal y público. Cuando el rey lo consideraba oportuno nombraba un
visitador para que investigara la actuación de una institución (“visita”) o todo un virreinato
(“visita general”).

4. «América», concepto territorial difuso para poder aplicar un modelo político-


administrativo consolidado (1492-c1570)
A lo largo de todo el período colonial el desarrollo institucional dependía de la actividad
conquistadora y explotadora del continente americano. Este proceso consistía en que conforme se
consideraba pacificada una zona, quedaba desgajada del núcleo de origen para ser elevada a unidad
de gobierno autónomo con autoridades propias españolas (como ejemplo la profesora dice que de
América se fue cogiendo cachito a cachito y añadiendo a la administración colonial que cada vez se
iba desarrollando más). Cabe destacar que el modelo político y administrativo solo puede
considerarse consolidado en las décadas finales del siglo XVI, cuando para la Corona, América ya
no es un concepto difuso, sino una realidad poblada y conocida a través de los diferentes pedidos y
deseos del rey a los virreyes que consistían en (según las instrucciones de la Corona dadas al Virrey
de México, Antonio de Mendoza en 1536):
• Una traza o pintura de los principales pueblos y puestos de México tanto del interior como
de la costa, intentando evitar la geografía fantástica o inventada que se había generado hasta
este momento.
• El contabilizado de los pueblos incluyendo las leguas que hay entre cada uno.
• Anotación de las tierras e islas que descubrió el marqués Hernán Cortés.
• Además, el virrey debía mandar a visitadores con cosmógrafos para que informaran y el rey
fuera avisado de lo que allí se podía hacer a través de informes y pinturas.
Estos deseos estaban motivados porque, desde 1492 hasta la década de 1560, el Consejo de Indias
no disponía ni de mapas actualizados de los reinos ultramarinos ni de noticias uniformes y
homogéneas de sus gentes, ciudades, poblados o puertos; o estos mapas eran erróneos.

5. Cartografías para consolidar el poder del rey en Indias (tres ejemplos)


Para los contenidos explicados a continuación hay que situarse aproximadamente en la década de
1570. En este marco cronológico es cuando Juan de Ovando presta sus servicios en el Consejo de
Indias como presidente de la Institución; dentro del mismo Consejo, Alonso de Santa Cruz, su
cosmógrafo oficial, había acopiado material y confeccionado mapas de las provincias indianas.
Parte de su labor la dio a conocer en una obra que se llama Islario (no se sabe con certeza la fecha
de creación, pero estaría alrededor de 1539-1560), una mezcla de atlas y de tratado geográfico,
donde, en una de sus partes, describe el “Nuevo Mundo”, lo que permitió al rey ir conociendo el
territorio americano. A continuación la portada de la obra:
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Estos son dos de sus mapas:

En este primer mapa, uno de los primeros sobre el continente americano, vemos que aparece
perfilado el territorio comprendido desde California, por la costa pacífica hacia el estrecho de
Panamá; y parte de la costa peruana y ecuatoriana. También podemos ver Florida, la Península de
Yucatán, Montes de Venezuela y Colombia y la Región Antillana.
Además aparece el nombre de todos los cabos de las costas tanto Pacífica, como Atlántica y
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

caribeña; y es interesante cómo el autor va dibujando las ciudades.

En este segundo mapa observamos parte de Sudamérica, especialmente la costa atlántica; así como
es visible la línea del Tratado de Tordesillas que deja a la derecha el territorio de Brasil,
perteneciente a Portugal. Dentro de las posesiones españolas cabe destacar la desembocadura del
Río de la Plata, y lugares como Asunción, Nueva Toledo…
Es interesante vislumbrar en estos primitivos mapas la orografía y los poblados que hubiera; así
como los nombres de estos lugares, ahondado en la información que la Corona buscaba.
Sin embargo, seguía siendo urgente lograr un conocimiento actualizado de la realidad americana, ya
que en el Islario mostraba el continente de forma muy difusa y con información bastante
insuficiente, como hemos comprobado en estos mapas primitivos, aunque fueran bastante detallados
en comparación con mapas anteriores. Esta inquietud la transmitió Juan de Ovando al Consejo de
Indias, que acabó redactando las nuevas Ordenanzas del Consejo en 1571.

6. Ordenanzas de 1571 (Consejo de Indias)


La preocupación que comentaba anteriormente sobre el conocimiento del continente americano se
vio reflejada en varios artículos, en los que “ordenan y mandan’’ que se estudie y se procure tener
hecha una “descripción y averiguación cumplida ya cierta de todas las cosas del estado de las
Indias” en lo que respecta a la tierra del continente, a los mares, indígenas, eclesiásticos y seglares,
tanto del presente (1571) como del pasado, conociendo las costumbres del pasado de las sociedades
originarias. Con toda esta información el objetivo era escribir un libro que contuviera todas las
descripciones para que el Consejo de Indias pudiera informar al rey y este a su vez actuar.
En las mismas Ordenanzas del consejo de Indias se crea el cargo de cosmógrafo-cronista,
vinculado a una misma persona, siendo Juan López de Velasco el primero nombrado para
desempeñarlo, una figura de una gran relevancia, especialmente por su obra. A partir de este
momento, todas las noticias que llegaran al Consejo tendrían que ser remitidas al nuevo cosmógrafo
y cronista para ser asentadas en lo que llamaron el Libro de las Descripciones.
El Consejo de Indias se convertía así en un auténtico centro de investigaciones científicas sobre el
reino de las Indias en donde se comenzó a hacer acopio de información sobre la Geografía, Historia
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Natural, Etnológica, etc. de aquellas tierras. Se podría decir que era el esbozo de una gran
enciclopedia americana planificada con gran sentido de la modernidad, es decir, tener conocimiento
de la realidad pasada y presente con el objetivo de responder a los deseos del rey (“el rey quiere
saber”), quien no solo necesitaba mapas si no también información del sitio.
Sin embargo, de mucho mayor alcance fue el proyecto conjuntamente impulsado por Juan de
Ovando (presidente del Consejo de Indias) y Juan López de Velasco (Cosmógrafo-cronista) de
enviar cuestionarios impresos a las Indias con preguntas que debían ser contestadas por las
autoridades indianas, civiles y eclesiásticas. Sin embargo, aunque se enviaron varios modelos de
cuestionarios, tuvieron escaso alcance, pues apenas hubo quienes las mandaron cumplimentadas (no
llegaron a más de 30). Una de las razones es que se llegó a alcanzar el numero de 200 preguntas que
exigían meses e incluso años para responderlas, pues para ello había que realizar visitas por las
circunscripciones civiles y religiosas para averiguar, por ejemplo, el número de indígenas que
habitaban en las encomiendas, o los que habían sido cristianizados, o censos de población, o
cantidades de metales que se extraían de cada mina, o número de caminos y las distancias que los
recorrían, o número de haciendas y su ubicación incluyendo lo que producían, etc.; es decir, una
labor excesiva e inabarcable teniendo en cuenta la realidad americana (que ya se ha explicado en
temas precedentes y que se irá ampliando en sucesivos: largas distancias, diferencias de paisajes,
climas, grupos étnicos, alturas, etc.).
Ante el pobre, muy pobre resultado que Ovando y López de Velasco obtuvieron, comenzarían a
trabajar en la tarea de redactar un cuestionario más conciso y claro, pues cada vez era más urgente
la existencia de una obra compendio en la que se pusiese al día el estado de los conocimientos de
las Indias (recordamos que el Rey quiere saber para poder administrar, gobernar y controlar desde
principios absolutistas, pues tenía la idea de que América debía ser enderezada para llevar a cabo un
buen gobierno).
Haciendo un análisis histórico y cogiendo perspectiva, podríamos decir que América funcionaba,
pero de “aquella manera”, señalando las siguientes irregularidades:
• Las minas estaban en producción y parte de los minerales se mandaban a los Corona, pero
otra se quedaba en América para comerciar.
• Los indígenas estaban siendo diezmados, y los que quedaban escapaban, se rebelaban o
estaban en encomiendas y reducciones, o estaban aprendiendo a reacomodarse.
• Ante la crisis demográfica indígena se comenzó a desarrollar la trata negrera desde África
y la esclavitud.
• Los clérigos regulares y seculares estaban adoctrinando “pacíficamente” a los indígenas, o
que otros pretendían paliar el trato al “indio”.
• América estaba plagada de encomiendas, reducciones y haciendas, en manos de los
peninsulares y criollos.
• Los peninsulares habían puesto a trabajar al indígena en sus negocios.
• Se había creado todo un espacio de producción y circulación en la economía americana.
• El poder de las altas instituciones estaba en manos de peninsulares y de algunos criollos.
• Se estaba creando una estructura social clasista-racista, en la que el escalón más bajo
estaba ocupado por los esclavos, le seguía la población negra libre, luego la indígena,
después la mestiza y arriba del todo estaban las mujeres y hombres blancos criollos, pero
más arriba las personas de origen peninsular.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

• Entre los funcionarios había «obedientes» pero otro más «díscolos».


Esta explicación no le hubiera satisfecho al rey. Sin embargo, la urgencia de remediar el problema
del desconocimiento de las Indias no permitía esperar a que llegaran las respuestas del nuevo
cuestionario más breve, y ante la impaciencia del rey, el cosmógrafo-cronista López de Velasco
elaborará un adelanto o redacción de dicha geografía americana denominado Geografía y
Descripción Universal de las Indias (1571-1574) sin contar claro con las respuestas de los
cuestionarios, que comenzarían a llegar al Consejo de Indias después de 1577. Para la realización de
este adelanto trabajó a partir de los materiales de los que dispuso en el Consejo de Indias
recopilados por sus antecesores en el cargo de cosmógrafo. El resultado de su labor hoy sigue
siendo, a pesar de ser una geografía de despacho, asombroso (o sea que no se basa en la práctica
porque ni él había ido a América ni le habían llegado los cuestionarios).
Esta obra de Velasco solamente tiene dos mapas, parecidos a los vistos anteriormente:

Encontramos en estos mapas extensas descripciones. Como la de una de las zonas a la derecha del
mapa: En toda esta costa, desde el río dulce (se refiere al río Amazonas) hasta el cabo de San
Roque no se ha hallado cosa de provecho. Fue una o dos veces bojada (navegada y medida) luego
de que se descubrieron las juvias (árbol de la familia de las mirtáceas, que puede alcanzar hasta 40
metros, cuyo fruto mide unos 12 cm que contiene de 15 a 25 semillas comestibles o secas, de las
que se extrae aceite), desde entonces no se ha vuelto a esta costa. El río Marañón (afluente del
Amazonas) es muy grande entran en él navíos por agua dulce 20 leguas. Con esto nos indica que se
ha navegado y medido únicamente 2 o 3 veces esta zona. Probablemente porque no hubiese en este
lugar oro ni plata ni recursos naturales que le satisficieran; así mismo se describen los ríos para
saber si son navegables.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

En este segundo mapa se describe el río de la Plata, se dice que es navegable, haciendo mucho
hincapié hasta donde se podía navegar ya que era una salida de mercancías que iban con destino a la
Península.
De este mapa encontramos un texto que hace referencia a la tierra de Fernando de Magallanes: Los
que habitan en esta zona donde hallo el Estrecho de Magallanes son hombres de grandes cuerpos,
casi gigantes, visten de pieles de animales, la tierra es estéril y de ningún provecho. Aquí estuvo
Fernando Magallanes en el puerto de San Julián, que está a 50 grados donde vengan los indios a
las naos, a los cuales les gustó el pan y vino que las naos les dieron… aquí usan flechas los indios.
Es un mapa etnográfico ya que no solamente aporta información geográfica si no que da
información de las personas que allí habitaban, de sus características físicas, de algunas de sus
costumbres, etc. Nos habla de que son hombres de grandes cuerpos, y menos civilizados que los de
las altas culturas (indios que usan flechas).

7. La audiencia, fuente de información


En el mismo libro de López de Velasco encontramos unos apartados, que ocupan prácticamente la
totalidad de la obra, correspondientes a la división de las audiencias, pues como índice López de
Velasco coge las audiencias para su libro como delimitación territorial. La Audiencia fue una de las
delimitaciones fundamentales que se utilizaron para obtener información en las encuestas
mandadas.
La Audiencia fue uno de los órganos administrativos de mayor poder en América: eran tribunales
supremos de justicia (jurisdicción civil y criminal), siendo el máximo tribunal judicial en América;
Su importancia recaía en que impartir justicia era una obsesión de la Corona. Estas audiencias
correspondían a una delimitación física por territorios, habiendo entre 11 y 12 dependiendo del año.
Además de ejercer estas funciones judiciales, también las ejercían de gobierno, lo que las hace ser
aún más una pieza clave en la administración en América, ya que representaban al rey y por lo tanto
a se le encomendaron funciones de reemplazar o sustituir al virrey y gobernador por muerte,
enfermedad o ausencia de estos.
En cuanto a su funcionamiento interno estaban integradas por un presidente y oidores o jueces. El
presidente era la máxima autoridad política y militar de la zona en cuestiones legales. Por otro lado,
los oidores o jueces oían a las partes y a las autoridades y dictaban sentencia según la legislación.
Los integrantes de estas Audiencias no podían tener relación familiar ni económica, ni compartir
propiedades en la región de la Audiencia que presidían (un señor presidente de Audiencia de Lima
no podía tener relaciones familiares ni comerciar ni tener propiedades con nadie que viviera en
Lima, pero en la práctica estos presidentes de audiencia o estos jueces van a establecer fuertes lazos
comerciales e intereses económicos en esa misma región y acumularan muchísimo poder). Cabe
destacar que antes del siglo XVI todos los cargos de esta institución debían ser de origen peninsular,
sin embargo a partir de 1550 aproximadamente los oidores podían ser de procedencia indiana y de
la región propia.
Además, a partir de 1680 se comienza a permitir la venta de cargos dentro de la Audiencia, con el
objetivo de llenar las arcas de la Real Hacienda ante la “crisis” financiera del siglo XVII. Esto
provocará que los criollos se dediquen a hacerse con los cargos y a tomar así el control del
continente, dando lugar a una “criollización de las Audiencias”. La razón es que para estos
americanos criollos era muy importante la Audiencia y la pertenencia a esta debido a que cuando el
gobernador y el virrey se ausentaban por diversas causas, era la Audiencia la que pasaba a gobernar.
El siglo más propiamente americano será por todo esto el siglo XVII, ya que el poder real estaba en
manos de los criollos de América.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

COMPETENCIAS DE LA AUDIENCIA COMO TRIBUNAL DE JUSTICIA


• Tribunal supremo de Justicia: máximo tribunal de justicia en América (como ya hemos
dicho antes impartir justicia era una obsesión de la corona).
• Alertaba al rey sobre actos impropios del virrey u otros funcionarios. Es decir, hacía de
“chivato”.
• La Audiencia desempeñaba un papel tutelar respecto a la población indígena, los
hombres y las mujeres indígenas estaban exentos de pagar las cargas procesales (cuando
iban a juicio) y la Audiencia podía proveer procuradores para defender sus causas (aunque
en la práctica esto no siempre se cumplía). Irónicamente, la consideración de la población
indígena como miserables y menores implicaba un determinado “privilegio” fruto de la
aplicación de un derecho protector y paternalista.

La Audiencia tuvo muchas más competencias, pero con esto es suficiente para aproximarnos a
entenderla. Sin embargo, no podemos acabar este apartado sin mencionar que “en América la ley se
cumple, pero no se obedece”, lo que quiere decir que la Audiencia tenía la capacidad de legislar, de
lo que emanaba un gran poder que le permitía violar esta legislación: si legislaba y además impartía
justicia se poda permitir la licencia o el lujo, de interpretar la ley a su conveniencia o a conveniencia
de lo quienes le pagaran; incluso podían paralizar leyes e instrucciones del propio rey, y no digamos
del virrey.
Finalmente, cabe destacar que el interés por el conocimiento de la realidad geográfica de América
llevaría a Felipe II a nombrar en 1575 como sucesor de López de Velasco en el puesto de
Cosmógrafo mayor y cronista del Consejo de Indias a Abraham Ortelius, de origen flamenco. Su
principal obra es Theatrum Orbis Terrarum, considerada el primer atlas moderno y con la que se
llegó a la cumbre de la cartografía mundial, ya que no solamente refleja cartografía americana, de la
que sólo encontramos dos planos en esta obra, si no que encontramos mapas de muchas partes
diferentes del mundo.
El primer mapa está bastante bien en cuanto que permite ver lugares pequeños que están bien
reflejados. El segundo mapa, un mapamundi, supone para Felipe II conocer la geografía de todos
sus dominios repartidos por todo el mundo: un imperio en el que nunca se ponía el sol.

8. El rey ya sabe
¿Para qué quería saber el Rey? Un ejemplo: En la década de 1560 la región Andina está sumida en
una crisis que pone en peligro el establecimiento y continuidad del recién establecido poder
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

colonial. La solución al problema pasaba por aumentar y asegurar las remisiones de plata, para lo
que había que poner al servicio de una economía de extracción de minerales, los territorios y
sociedades del antiguo Tawantinsuyu, Ello, a su vez exigía la inmediata reorganización, o mejor
desestructuración, del mundo indígena.
El virrey del Perú, Francisco de Toledo, llegó a la conclusión de que la clave estaba en crear
unidades poblacionales nuevas: los “pueblos de indios” que tendrían la misión de concentrar a la
población indígena dispersa, para así tasarla y, facilitar el cobro de tributo y la organización de las
cuotas mitayas (movilización obligatoria de fuerza de trabajo, lo que habíamos visto en el tema 3.2
sobre la mita). Tal medida quebraría además las dinámicas comunitarias existentes y provocaría la
crisis de la mediación étnica.
Toledo puso en práctica un vasto programa de "reducción", que reagrupó alrededor de 1,5 millones
de "indios" en 6oo reducciones durante las décadas de 1570 y 1580: población indígena que vivía
dispersa por los diferentes nichos ecológicos, evitando la doctrina cristiana, el pago del tributo, y
manteniendo a escondidas los cultos a sus ancestros y a otros huacas.
Las reducciones se establecieron con un absoluto desconocimiento de los antiguos patrones de
asentamiento indígena basados en la movilidad estacional por distintos archipiélagos productivos
verticales, sostenidos en el trabajo comunitario.

9. Hacienda
La gestión fiscal de las colonias estaba a cargo de la Real Hacienda. Su principal cometido era
recaudar el dinero generado por la economía colonial a través de la producción de plata, el comercio
transatlántico u otras actividades que implicaban ganancias para el fisco. Toda esta actividad y los
importantes ingresos que emanaban de ella obligaron a la Corona a construir un aparato de
recaudación, administración y control tanto en América como en las cabeceras peninsulares del
sistema de flotas y galeones.
En la Península, inicialmente la gestión fiscal se encargó a la Contaduría Mayor de Castilla,
responsable de la recaudación de impuestos, para pasar posteriormente al Consejo de Indias en el
momento de su fundación (1524); por su parte, la Casa de Contratación era el lugar donde llegaba el
dinero americano y donde se pagaban los impuestos comerciales.
Desde mediados del siglo XVI los ingresos indianos comenzaron a ser significativos, llegando a
suponer la cuarta parte de los ingresos anuales de la Corona; además, la difícil situación financiera
que se atravesó durante el reinado de Felipe II se tradujo en un aumento de las exigencias a las
colonias, de tal forma que a finales del siglo XVI, las rentas indias aportaron 2.500.000 ducados a
las arcas reales.
Por último, cabe destacar que en América, la fiscalidad marcó las diferencias étnicas de las sociedad
colonial, ya que mientras los españoles no pagaban impuestos directos, éstos sí debían ser abonados
por los indígenas como tributo (relacionar con lo que con la llegada de los españoles el sistema de
tributos cambió y ya no había reciprocidad ni redistribución ya que se tributaba a la Corona a
cambio de nada).

10. Iglesia
La Iglesia se hizo presente en el “Nuevo Mundo” prácticamente desde el principio y tuvo un calado
bastante importante. Ya en el segundo viaje de Colón estuvieron presentes algunos religiosos, y fue
la Santa Sede a través del Pape Alejandro VI y de sus famosas bulas la que justificó judicial y
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

teológicamente los derechos españoles sobre las tierras descubiertas y por descubrir. La expansión
de la fe también justificó el sometimiento y la explotación de los indígenas, inclusive documentos
como el Requerimiento (lo de leerle un papel a los indígenas diciéndoles que el territorio ahora era
castellano pero ellos no se enteraban de nada). Esto permite señalar que la Iglesia católica fue un
factor central en la conquista y colonización de América y sin ella no se entendería lo que los
antropólogos denominan el proceso de aculturación de los indígenas conocido como
occidentalización.
El papel de la Iglesia en la expansión europea en general y en la conquista de América en particular
se puede explicar desde varios puntos de vista:
• La Religión como motor de grupos humanos que veían América como una tierra
prometida que pretendían evangelizar (ya vimos en el tema 4 que esta era la justificación
porque realmente quería obtener beneficios. Habría otros grupos como franceses e ingleses
que sí que se puede decir que tenían un ideal religioso cuando llegaron a América, pero no
es el caso español).
• Otra parte de la historiografía ve la evangelización de los indígenas como un reto de las
monarquías castellana y portuguesa para expandir sus territorios y aprovechar los
privilegios que les había dado el papado. El instrumento para conseguirlo será el Patronato
Regio, según el cual el Papa concedía a los reyes castellanos la posibilidad de convertirse en
patronos de la Iglesia católica en América y en vicarios del pontífice en asuntos relativos a
la evangelización, ya que la Segunda Bula Intercaetera tenía la contrapartida de la
evangelización de América (tema 4).

10.1. El patronato regio


Sin embargo, no quedó muy claro cómo se realizaría la evangelización, pero en 1508, Fernando el
Católico (ya había muerto Isabel) como regente de Castilla, establecerá con el Papa Julio II una
nueva bula según la cual les cedía la administración eclesiástica en América; por lo que entre las
nuevas responsabilidades de la Corona estaba la manutención de los eclesiásticos para que
destinaran su tiempo a evangelizar, y la de construir sedes eclesiásticas (iglesias, conventos,
colegios, catedrales…). Este será el principal fundamento del Patronato Regio en las Indias.
El Patronato se desarrolló a partir de la imposibilidad del Vaticano de hacer frente al conjunto de
los gastos que implicaban la evangelización de los indios americanos. Por eso, como compensación
a la Corona por afrontar una tarea semejante, se le otorgaron estos privilegios relativos a la
administración eclesiástica. La principal contrapartida recibida por la Corona fue la concesión de
tierras descubiertas, que no serían administradas directamente por sus descubridores sino por la
Corona. Estos privilegios solo se aplicaron en las Indias.
El diseño del Patronato quedó completado en 1574 con la promulgación de la Magna Real Cédula
que otorgaba a la Corona la administración de todos los diezmos de Indias, la posibilidad de
presentar candidatos en aquellas diócesis vacantes que debía ser cubiertas y la potestad de fijar los
límites de las nuevas diócesis que se crearan (además de las funciones anteriores de mantener a
eclesiásticos y levantar sedes).
Todas estas prerrogativas del patronato en América eran gestionadas por el Consejo de Indias. A
partir de 1573 se prohíbe que las sentencias eclesiásticas de Indias fueran apeladas ante el Vaticano,
es decir, cualquier sentencia eclesiástica tenía que ser apelada ante el Consejo de Indias, y por tanto
el papado no tenía que hacer nada. Vemos como en América, la Corona buscaba mayor autonomía
respecto al Vaticano para construir una Iglesia capaz de colaborar activamente en la conquista,
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

colonización y evangelización.
De esta forma la Iglesia evitaba los gastos de la evangelización pero se aseguraba que se
adoctrinaba a los indígenas, mientras que la Corona ganaba la justificación de dominio de las Indias
y toda una serie de privilegios; por lo que podríamos decir que se trataba de un pacto que era
beneficioso para ambas. Este patronato regio se convirtió en un instrumento eficaz para establecer
de forma rápida el poder de la Corona y la Iglesia, cuya sólida alianza pasará a la Historia.

10.2. El retorno a las huacas y las campañas antiidolátricas


La evangelización forzada fue un proceso que se llevó a cabo a la misma vez que la conquista
militar y territorial, y fue llevada por órdenes religiosas cuya presencia en América fue casi
inmediata y se convirtieron en los vehículos de aculturación más importantes, destruyendo y
alterando la cosmovisión indígena y el mundo religioso de las sociedades originarias. Todo se vio
alterado por la imposición de una nueva religión que llevó forzosamente a la población indígena a
mantener un equilibrio complicado entre la religión impuesta y los antiguos cultos, que terminaría
por romperse generando un enfrentamiento entre ambas posiciones, especialmente a partir de 1560.
Cabe destacar que incluso hoy en día se sigue manteniendo este equilibrio (culto a la Pachamama).
La identificación o no de la administración colonial por parte de las jefaturas indígenas
tradicionales como tales autoridades, originó multiplicidad de posiciones en el interior del mundo
indígena: hubo situaciones y momentos en los cuales los curacas y caciques participaron como
agentes de penetración y solidificación de la nueva cultura y religión; pero también hubo otros
casos en los que constituyeron un núcleo de resistencia firme y resistente, ya sea de forma activa o
pasiva.
Una de las formas más características de resistencia fue el regreso a lo antiguos cultos de algunos
grupos étnicos que rechazaban el modelo cristiano, fenómeno que algunos autores han denominado
para la región andina como «el retorno a las Huacas» (espacios de adoración en los que incluso se
enterraban a los muertos, montículos o mesetas con oro dentro), es decir, el retorno a los viejos
dioses prehispánicos y en los viejos adoratorios. Esto fue un fenómeno general en el continente
después de 1550 y 1560, que fue entendido por parte de las autoridades coloniales, las eclesiásticas
y las civiles como resistencia, insumisión, rebelión y desórdenes ante el pretendido nuevo orden
colonial. Además, provocará que los eclesiásticos que se habían mantenido al margen del castigo a
los indígenas comiencen a participar de forma directa en ello, por considerar este fenómeno como
una negación al derecho a predicar.
Comenzaron entonces las campañas antiidolátricas (no se consideraba a los indígenas como
infieles sino como idólatras paganos), conocidas como “extirpación de idolatrías”, cuyo objetivo era
la erradicación sistemática de todo culto prehispánico tanto público como privado, y tanto físico
(ídolos, adoratorios, representaciones) como cultural (actitudes, fiestas, ritos), así como la
eliminación de las jerarquías sacerdotales. Curas, doctrineros, frailes y obispos se aplicaron a ello
con rotundidad y con un claro propósito ejemplarizante.
Sin embargo, aunque para 1550-1560 existen informes de que en prácticamente todos los territorios
conquistados la población indígena parecía haber asumido el cumplimiento de las formas de liturgia
cristiana, no es menos cierto que en estos mismos territorios fueron más que corrientes las
denuncias por prácticas ocultas de los antiguos rituales y ceremonias prehispánicos. Los indígenas
tuvieron una capacidad de adaptarse impresionante, ya que la mayoría se aculturó solo
aparentemente. De hecho hoy en día como se siguen practicando prácticas ancestrales (culto a la
Pachamama), al mismo tiempo que siguen las prácticas cristianas (bautismo, van a misa…).
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

Finalmente, estas campañas de extirpación lograron décadas después el efecto deseado: por
eliminación, por temor o por consenso, la nueva religión terminó imponiéndose entre la población
indígena. De esta forma la religión fue un vehículo fundamental de imposición, transmisión y
arraigo de los nuevos valores y del sistema colonial, y sirvió para destruir el mundo indígena en uno
de sus aspectos más emblemáticos: el ideológico y el religioso. Sin embargo, cabe destacar que,
aunque el catolicismo había tenido más éxito entre los cultos imperiales, los cultos locales habían
quedado menos erradicados. Para combatir esto, los colonos y curas doctrineros empezaron a
construir capillas e iglesias sobre estructuras y santuarios prehispánicos. A nivel local se produjo
una yuxtaposición de religiones que dificultó la extirpación de antiguos cultos. Podríamos definir
este fenómeno como que en los 50 años posteriores a la conquista, el mundo indígena siguió
observando al colonial a través de sus puntos de vista, pero siendo conscientes de que no podían
escapar a la llegada del colonialismo, aunque manteniendo antiguas tradiciones.
Por otra parte, hay que tener presente que todo este proceso de aculturación va a ir acompañado de
lo que se llamó en Méjico «congregaciones» y en Perú «reducciones». Siguiendo el modelo
europeo de ciudades o pueblos, se obligó a la población a abandonar el tradicional hábitat disperso
prehispánico, base del aprovechamiento de los recursos y de la organización del trabajo, para
concentrarla en núcleos eminentemente indígenas donde las únicas personas “blancas” eran el
corregidor y el cura, con un poder abrumador sobre la población. Este hecho se basaba en una
separación desde el punto de vista legal entre españoles e indígenas. Ello conllevó la ruptura de los
antiguos ayllu o de los calpulli, la remoción de autoridades, la dislocación de entramados familiares,
la ruptura de los antiguos modos de asentamiento, producción, relación e intercambio, reciprocidad
y redistribución, es decir, las bases del mundo prehispánico.
Una de las situaciones que mejor caracterizó esta resistencia indígena y que hizo la situación más
compleja fue el caso de Huamanga en la década de 1560, donde se desarrolló un movimiento del
carácter milenarista. Los frailes empezaron a tener noticias de que en la sierra de Perú se estaba
gestando una gran sublevación que preparaban los antiguos sacerdotes. Las informaciones que
llegaban a Lima hablaban del Tanky Onkoy, la «enfermedad del canto», según la cual los
indígenas comenzaban a cantar y bailar haciendo rituales y oraciones a sus dioses en un estado de
trance colectivo que se transmitía de pueblo en pueblo como una epidemia. Informes más
exhaustivos afirmaron que se trataba de la acción de «brujos» indígenas que predicaban el fin de la
dominación blanca porque, afirmaban que las Huacas destruidas volverían a la vida, lucharían
contra el Dios cristiano y le vencerían, expulsando a los españoles y castigando a aquellos indígenas
que habían practicado la religión católica sino se arrepentían y hacían penitencia. Las Huacas
salvarían a mundo indígena y comenzaría otro tiempo: si el Imperio Inca había sido fundado en el
año 565, en 1565 terminaban los mil años del ciclo. El Tanky Onkoy no significó in
posicionamiento activo de la población indígena en cuanto a la toma de armas y luchar contra los
españoles, sino que era una guerra de las maltratadas Huacas contra los dioses invasores.
El principal encargado por la Iglesia limeña para eliminar la insurrección fue Cristóbal de Albornoz,
quien persiguió a los antiguos sacerdotes, supuestos promotores del movimiento, hasta acabar con
ellos mediante escarmientos y castigos ejemplares en las plazas y espacios públicos delante de todos
los indígenas, en una represión que se extendió por toda la sierra peruana coincidiendo con la
captura y decapitación del inca rebelde de Vilcabamba, Túpac Amaru en 1572. Con la muerte del
último inca y la quema de las sagradas momias de sus antepasados sin que las viejas Huacas lo
impidieran, el fin del Tanky Onkoy significó el fin del mundo prehispánico. La resistencia en
adelante debía desarrollarse de otro modo.
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

10.3. Denuncia del maltrato, robo y desmanes al que fueron sometidos los indígenas
Felipe Guaman Poma de Ayala, escribe una crónica en Perú en 1615 llamada “Primer nueva
crónica y buen gobierno” donde denuncia y pone al descubierto los desmanes de robo y maltrato a
los que fueron sometidos los indígenas por parte de la Iglesia y, en conjunto, pone en evidencia el
mal gobierno de cristianización de las órdenes religiosas. Este hombre descendía de un linaje inca
por parte de padre y madre y se dedicó durante toda su vida a recorrer la región andina para
denunciar el cambio en el modo de vida antes y después de la conquista, ya que buscaba que el
gobierno volviera de nuevo a los antiguos indígenas.
El libro tiene más de mil páginas de texto y unas 300 imágenes. Este documento se encontró a
principios del siglo XX en la Biblioteca Real de Dinamarca. Se sabe que, esta crónica era para
mandarla a Felipe III, pero apareció en la biblioteca del Conde Duque de Olivares y parece ser que
el embajador danés compro la obra.
Ejemplos en textos (pág. 128 de los apuntes):
1) En este fragmento se refleja de forma general los diferentes oficios de los indios que
trabajaban para los curas doctrineros y el trato que se les daba (no se les pagaba y se les
explotaba laboralmente); además nos cuenta cómo los curas que están amancebados con las
indias, les hacen trabajar sin pagarles y con violencia y por ello además las indias no quieren
casar y tener hijos con los indios porque “van detrás de los curas”. Cabe destacar que el
autor también se quejaba de que las indias así lo que conseguían era no perpetuar la especie
india si no multiplicar los mestizos.
2) En este otro ejemplo habla sobre cómo los curas doctrineros se atiborraban de comida que
los indígenas les proporcionaban sin pagarles por ello o pagándoles una miseria. Va
repitiendo constantemente que los pueblos de indios se están despoblando por culpa de los
desmanes sufridos a manos de los evangelizadores. El autor quiere que el gobierno sea de
los antiguos incas que conocen y saben gobernar el territorio pero que siga formando parte
de la Corona española.
3) En este tercer ejemplo sobre los padres habla sobre cómo los padres de las doctrinas se
pierden por meterse tanto en asuntos judiciales. Es decir, los curas no podían ejercer de
justicieros sin embargo lo hacían, dando mal ejemplo. Además, tenían que acudir a pleitos
debido a que las indias habían interpuesto demandas contra algunos de los padres por
tenerlas amancebadas, en su gran mayoría obligatoriamente. El autor dice que si estos curas
se comportan de esta manera no deberían serlo, ni poder confesar ni absolver pecados, ya
que ellos los cometen ferozmente.
4) En este otro caso vemos como los padres casaban a la fuerza a hombres y mujeres en contra
de su voluntad ya que una de sus funciones era que los indígenas llevaran a cabo el
sacramento del matrimonio y los preceptos de la iglesia católica, o debido a que el cura ha
dejado embarazada a la india y la obliga a casarse con un indio.
5) En otro ejemplo vemos que una mujer está confesándose y a la vez el cura le proponiendo
que a cambio de la confesión ella debe realizarle trabajos sexuales. El autor se queja de que
durante las confesiones que hacen los curas aporrean a las indias preñadas, a los indios y a
las viejas. Así como de las solteras que no se confiesan y que lo hacen en escondrijos
oscuros y sucios.
6) En este otro ejemplo critica que los modos de vida y las vestimentas de los padres eran
refinadas y ricas. Además, estaban adquiriendo un gran poder cuando realmente debían
llevar una vida sin lujos y dedicada a predicar la palabra de Dios, dando ejemplo a los
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

súbditos.
7) En esta imagen vemos un cura castigando a un indígena que está desnudo y lleno de señales
de latigazos. El autor dice que el padre es un verdugo que castiga afrentosamente a un
hombre sin miramientos sea un indio principal, pobre o una india. Habla del castigo y el
maltrato que sufren los indios por parte de los principales cargos de la administración
colonial.
8) En este ejemplo vemos un cura y a un indio cargante que lleva a sus espaldas a un niño que
va desnudo y que tiene extensas marcas de azotes. También vemos un grupo de niños
sentados que según el autor son cruelmente castigados. Habla sobre sus obligaciones con la
doctrina católica y el trabajo.
9) En este ejemplo vemos un cura apaleando a un cacique. Los caciques tendrán un papel muy
importante al ser los intermediarios con la comunidad indígena y la fe católica. Cuando
estos caciques daban la cara y defendían a sus familiares y a su comunidad frente a los
abusos de los curas doctrineros estos respondían con más violencia hacia ellos por quejarse.
10) Aquí vemos cómo el cura doctrinero contrata a un arriero para que lleve a todos sus hijos,
engendrados con indias, y que son mesticillos/as a otra ciudad. Esto lo hace si no consigue
casar a dicha india con la que mantiene relaciones con otro indio. Además, alega que son
sobrinos o familiares.
11) En este otro ejemplo vemos que los curas deben adoctrinar a todos los indios
independientemente de su género, enfermedades, etc. y a cambio estos deben darles a los
curas riquezas y demás.
12) Por último, este ejemplo vemos un cambio en las quejas del autor donde refleja que sí que
hay otros frailes que cumplen con su trabajo como este que está predicando con la cruz y
además dando de comer a un pobre (hay algunos ejemplos parecidos a este de curas
ofreciendo limosna). El autor comenta que todo sería perfecto si todos los curas dieran
limosna y no la recibieran e impusieran como norma. Este en concreto es un fraile
franciscano.

10.4. Ofrenda a la Pachamama («despacho») y Altomisayoq


OFRENDA O DESPACHO A LA PACHAMAMA
La ofrenda a la Pachamama se hace el día 1 y 2 de agosto en el Sacsahuaman, un lugar sagrado y
en la zona alta de la ciudad de Cuzco, que en época del Imperio Inca constituía una zona donde se
hacían ceremonias así como de fortaleza para refugiar a la ciudad. Las ofrendas se realizan en una
planicie de este recinto a la que se accede a través de buses desde la ciudad de Cusco u otros centros
de la región. Los motivos para realizar una ofrenda a la Pachamama son muy diversos, pero
principal y tradicionalmente es para que los cultivos de septiembre sean fértiles y provechosos. En
este ritual todo el mundo participa y es todo muy cotidiano. Es una fiesta comunitaria, el bullicio, el
interés y el sentimiento lo profesa toda la población y es algo del día a día, algo público, nada
silencioso. La religiosidad y la simbología forman parte de la vida cotidiana.
Realmente a las ofrendas a la Pachamama se les llaman «despachos», y estos son realizados
generalmente por hombres, los llamados pacocs. Sin embargo, puede que exista alguna mujer
pacoc, aunque es muy inusual. Los pacocs traen consigo una serie de productos para que cada
persona les solicite que introduzca en su despacho aquellos deseados; pero también la persona que
quiere hacer una ofrenda puede llevar estos productos o comprar paquetes de contenido variado
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

disponibles en las tiendas. En estos despachos se incluyen muchas cosas, entre ellas son muy
importantes las hojas de coca, bendecidas por el pacoc que lo realiza (no todos los productos se
bendicen, pero este en concreto sí), y también la grasa de llama o alpaca, también bendecida.
Aunque los pacocs son los que tradicionalmente realizan los despachos, realmente cada uno puede
hacer el suyo, como el caso de muchas familias que hacen su propio despacho, e incluso los niños,
pues no hay edad para ello, la clave está en creer en lo que se está haciendo y estar imbuido en la
cosmogonía andina.
A la Pachamama se le deben ofrecer las cosas que le gustan para que conseguir aquello que deseas,
y por eso se tiende a decir que “la Pachamama es muy golosa”, ya que le gustan las cosas dulces,
calientes, de colores muy vivos y brillantes. Los productos de los despachos varían en mayor o
menor medida, aunque siempre habrá algunos indispensables en la ofrenda y otros que dependan
del motivo de la ofrenda (por ejemplo: si vas a pedir fertilidad en tus cultivos pones hortalizas/frutas
y plantas verdes en general, o si pides algo sobre el ganado pues colocas mucha carne cruda).
Algunos de estos productos son:
• Hoja de coca (indispensable, es uno de los vegetales más importantes de la región andina y
de los más cultivados desde el Imperio Inca).
• Elementos de vivos colores.
• Elementos brillantes, que no suelen faltar en las ofrendas
• Telas, ovillos (para que la Pachamama esté caliente)
• Grasa de llama.
• Chcucherías, cereales (dulces, en general)
• Carne cruda
• Hortalizas, frutos
• Flores
• Plumas, que representan a la parte de la Amazonia
• Velas, se prenderán y alumbrarán a la Pachamama cuando se encienda el fuego.
• Dinero, a la Pachamama le gusta mucho el dinero.
• Alcohol, con el cual se rocía todo. Generalmente con cerveza que es el más barato. Algunos
licores se venden también en el mismo lugar de la ofrenda.
• Además, también se puede incluir carne de feto de llama, pero no es una práctica tan
extendida porque para que tenga efecto en la Pachamama hay que elegir a una llama viva y
embarazada de unos 5 o 6 meses, abrirle el vientre provocando su muerte y la del feto, y
extraer el feto vivo. El feto se deja secar en altura y de la madre se aprovecha la carne. Sin
embargo, actualmente existe una regulación muy específica para que solamente cuando
muere una llama que estuviera gestando se pueda coger el feto, aunque en algunas
comunidades se permite que se sacrifiquen ciertas llamas o alpacas para sus rituales. Esta
fue una costumbre que los españoles la perseguían como una idolatría, las personas eran
castigadas y matadas porque el culto a la Pachamama no era permitido y realizar este ritual
sangriento lo consideraban como u verdadero pecado, pero se mantuvo en la clandestinidad.
Tras haber colocado cuidadosamente cada uno de los productos, se lían en papel y se atan
fuertemente con una cuerda. Los oferentes hacen cola a lo largo de una zona vallada hasta llegar a
un hoyo marcado en amarillo (lugar ritualizado) donde se depositan los despachos y más
Historia de América. Siglos XV-XVII
Grado en Historia, Universidad de Murcia
Profesora: Lucía Provencio

productos que se rocían con alcohol; además, más adelante, existe un montículo marcado con
polvo rosa donde depositan más elementos y flores. La Pachamama se encuentra bajo la tierra y por
eso realizan el hoyo, de donde se alimenta, y el montículo es debido a que la región andina es todo
monte. Progresivamente todo esto se va quemando, y es muy importante quemar palo de santo
también, que huele muy bien y bendice todo. El Pacoc más importante de Cuzco, es el que se
encarga de la quema y las oraciones finales.
La Pachamama es universal y se le hacen ofrendas en muchísimas tierras y se adaptan los elementos
del despacho a la tierra en la que se realiza. Los curas doctrineros querían que todos estos cultos
desaparecieran, pero no lo consiguieron, estaban en el sustrato, los indígenas, los mestizos e incluso
los blancos seguían llevando a cabo este tipo de rituales. Para ocultar esta ritualidad se llevaba a
cabo un sincretismo con la religión cristiana, de manera que se pudieran mantener las creencias
indígenas.

ALTOMISAYOQ
Según la cosmovisión andina, cuyo origen es anterior a la invasión de América, el mundo es dual y
el ser humano se entiende en relación con la naturaleza. Los lugares sagrados los proporciona la
propia naturaleza y se llaman apus, como es el caso del Monte Huascarán en Perú. La relación entre
el ser humano y la naturaleza se manifiesta en ceremonias, rituales, consumo de plantas
alucinógenas, comunicación con la naturaleza a través de un intermediario, mujer u hombre,
diferentes dependiendo del proceso (chamán hombre cunado se consumen plantas alucinógenas y
mujer cuando se quiere comunicar con la Pachamama). Hoy en día se ha desarrollado cierto
neoindigenismo que tiene sus diferencias.
Un altomisayoq es la persona (hombre o mujer) con el privilegio o don de comunicarse con los
apus (don recibido de ellos) y que tiene la responsabilidad y el deber de compartir ese don con los
demás que no se pueden comunicar con los apus. La persona hará una consulta al apu y el apu
contestará a través del altomisayoq.
Un altomisayoq en condiciones no recibe sin referencias, es difícil dar con ellos y que quieran
recibirte. La consulta se puede hacer individualmente o en grupos. No son gratis, en el mundo
andino todo es recíproco y equilibrado.
En la consulta en grupo varias personas tienen sus preguntas y el altomisayoq organiza un grupo de
unas 6 personas para que sea más barato. Los altomisayoq tienen ayudantes e incluso sala de espera,
donde se dejan los móviles, objetos reflectantes, bolsos, etc. Después de entrar en la habitación
donde se realiza el ritual nos encontramos con una mesa con distintos productos de alimentación y
los que van a consultar se sientan, mientras que el altomisayoq apunta sus nombres en papeles y el
ayudante cierra la puerta.
Cuando se hace una consulta, el altomisayoq, sea hombre o mujer, comenzará a hablar con la voz
del apu, o más bien el apu habla a través de él o ella. Por ejemplo, si el apu es el Monte Huascarán,
entonces la voz será muy grave porque es un ente masculino. Lo que se expone en las consultas es
respetado por el resto y si se hace una consulta sin creer plenamente en el poder de los apus, estos te
pueden castigar con sensaciones de mareo y desvanecimiento.

También podría gustarte