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BENEDICTO XVI
SEGUNDA ESPECIALIDAD EN
NEUROPSICOLOGIA INFANTIL Y APRENDIZAJE
GRUPO 05
CASO CLINICO
Integrantes:
Daniel Angel Ramos Fuentes
Judith Zurita Velazque Farfan
Arturo Senador Otero
Elizabeth Sembrera Sembrera
Jhonnatan Seminario Ruiz
TRUJILLO, PERÚ
2023
ACTIVIDAD GRUPAL
CASO 5:
Niño de 6 años que presenta indicadores de no prestar atención a los detalles en los
estímulos que se le presenta, motivo por el cual comete errores y no mantiene la atención
en la actividad iniciada. Cuando llega a clase se percata de no tener lo que le solicitaron
y evita tareas que demandan mayor esfuerzo mental. En su historia sus hermanos
presentan similares dificultades.
RESPUESTA
Los lapsos de atención en los niños son, naturalmente, más cortos que los lapsos de
atención de los adultos, y por lo general se considera importante que los padres y maestros
desempeñen un papel activo en ayudar a mejorar la capacidad de los niños para prestar
atención. Una variedad de factores puede afectar la capacidad de atención de los niños.
La crianza, la comida y el descanso adecuado, al igual que deficiencias tales como el
trastorno de hiperactividad por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) pueden
afectar la capacidad de una persona joven para prestar atención.
Una forma de mejorar las habilidades de atención de los niños es que los padres trabajen
con sus hijos en el hogar. Los padres pueden exponer lentamente a sus hijos a situaciones
en las que es necesario prestar atención. Los adultos pueden enseñar a los niños desde
una edad temprana con ejercicios como hacer ruido o involucrarse en otras conductas de
distracción cuando una persona está hablando Los maestros también pueden ayudar con
la misión de hacer que los niños sean más atentos al hacer sus lecciones amigables y
divertidas. Los niños más pequeños son más propensos a prestar atención a una lección
interactiva que utiliza imágenes y objetos, mientras que en una lección de tipo conferencia
seguro les resultará aburrida.
Para el caso asignado:
1. Incluir otras posibles características que puedan hacer mención a las dificultades
atencionales presentes en el caso.
a. Dificultades para seguir instrucciones: El niño podría tener problemas para seguir
las instrucciones tanto en casa como en la escuela, lo que podría manifestarse en
errores frecuentes al realizar tareas simples o en la necesidad de que se le repitan
las instrucciones varias veces.
b. Olvido de tareas o responsabilidades: Podría olvidar sus tareas escolares o las
responsabilidades cotidianas, como hacer la cama o recoger sus juguetes, debido
a su dificultad para mantener la atención en las tareas asignadas.
c. Incapacidad para organizarse: Puede tener dificultades para organizar sus
pertenencias, como libros, útiles escolares o juguetes, lo que podría llevar a la
pérdida frecuente de objetos o a no encontrar lo que necesita cuando lo necesita.
d. Dificultades en las interacciones sociales: A veces, los niños con problemas de
atención también pueden tener dificultades en las interacciones sociales, como no
prestar atención a las conversaciones o interrumpir a los demás sin darse cuenta.
e. Impulsividad: Podría mostrar impulsividad en sus acciones, como actuar sin
pensar en las consecuencias o tener dificultades para esperar su turno en juegos o
actividades grupales.
f. Inquietud física: La hiperactividad puede acompañar a las dificultades de atención
en un trastorno como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad
(TDAH), lo que podría manifestarse en una inquietud constante, como mover las
manos o los pies, o levantarse de su asiento en momentos inapropiados.
Dadas las dificultades de atención y concentración descritas en el caso del niño de 6 años
y la presencia de dificultades similares en sus hermanos, una hipótesis diagnóstica que
podría considerarse es el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). El
TDAH es un trastorno neuropsiquiátrico que afecta la capacidad de un individuo para
mantener la atención, controlar los impulsos y regular su actividad.
Sin embargo, es importante destacar que un diagnóstico preciso del TDAH o cualquier
otro trastorno requeriría una evaluación exhaustiva por parte de un profesional de la salud
mental o un pediatra. Esta evaluación generalmente implica entrevistas con los padres y
maestros, observación del comportamiento del niño y la recopilación de información
sobre el historial médico y el desarrollo del niño.
El TDAH es solo una de las posibles hipótesis diagnósticas, y otras condiciones o factores
podrían estar contribuyendo a las dificultades de atención del niño. Por lo tanto, es
fundamental que se realice una evaluación adecuada para comprender completamente las
necesidades del niño y determinar la causa subyacente de sus problemas de atención.