La embriogénesis somática es el proceso por el cual se obtienen embriones
vegetales partiendo de células somáticas sin la necesidad de que células cigóticas estén implicadas (Williams & Maheswaran, 1985), Esto es posible porque las células madre (células en un estado indiferenciado) pueden ser manipuladas para crear células de interés a las cuales se les conoce como células especializadas (diferenciadas).El principio de la embriogénesis somática está basado en la teoría de la totipotencia celular, postulada por Haberlandt en 1902, en esta se estableció que cualquier célula viva aislada de la planta tiene el material genético para generar nuevas plantas completas; bajo condiciones de laboratorio controladas (Radice, 2004).
Aunque Haberlandt no pudo demostrar su hipótesis debido las limitaciones
tecnológicas de la época, los estudios sobre el cultivo de tejidos continuaron. Entre los años 1934 y 1948 se descubrió que los cultivos de tejidos establecidos en medios líquidos suplementados fitohormonas estimulaban el desarrollo de raíces y callos (Radice, 2004). Y a principios de los años 60 se demostró la hipótesis de Haberlandt (Roca & Mroginski, 1991). Para esto, las células debían ser capaces de llevar a cabo una reprogramación, es decir, responder a estímulos bioquímicos para completar procesos de desdiferenciación y diferenciación, dicha respuesta está influenciada por la cantidad de las hormonas de crecimiento contenidas en los tejidos de la planta (endógena) y la suministrada artificialmente (exógena). Por ejemplo, las auxinas y citoquininas (Cardoza, 2008; Thorpe, 2014).
El procedimiento permitió evitar el proceso de reproducir plántulas por métodos
sexuales para obtenerlas bajo condiciones controladas en un laboratorio. Aunque el nivel de precisión del proceso de embriogénesis a veces puede variar con respecto al cigótico, normalmente este no suele ser significativo. Aun así, un objetivo que se persigue permanentemente en la biotecnología vegetal es poder controlar con mayor detalle el desarrollo de las células aisladas, con el fin de emular perfectamente el comportamiento de células cigóticas (Roca & Mroginski, 1991).
Abohatem (2011), El proceso de embriogénesis somática es una técnica
especializada que se lleva a cabo en el cultivo de tejidos vegetales para la reproducción asexual y la mejora genética de plantas. A continuación, se describen los pasos clave de este proceso y cómo se lleva a cabo.
En primer lugar, se inicia con la selección cuidadosa del material vegetal. Es
fundamental elegir una planta madre que esté en óptimas condiciones, libre de enfermedades y con las características genéticas deseadas. Además, se debe considerar la parte de la planta que se utilizará, ya sea hojas, tallos o raíces, en función de la especie y los objetivos específicos. Una vez seleccionado el material vegetal, se procede al establecimiento de cultivos de tejidos. Para ello, se toman pequeños fragmentos de tejido vegetal y se colocan en un medio de cultivo in vitro. Este medio contiene nutrientes esenciales, hormonas de crecimiento y otros compuestos necesarios para el desarrollo celular. A partir de estos fragmentos de tejido, se generan callos, que son masas celulares no diferenciadas. La etapa siguiente involucra la inducción de callos. Para lograr esto, las células somáticas se someten a tratamientos específicos con hormonas de crecimiento, como auxinas y citocininas. Estas sustancias estimulan la formación de callos, que son ricos en células embrión, Una vez obtenidos los embriones somáticos, se transfieren a un medio de cultivo diferente que fomenta su germinación y desarrollo en plántulas. Esto se logra suministrando nutrientes y hormonas de crecimiento adecuados. Cuando las plántulas alcanzan un tamaño y desarrollo adecuados, se procede a su transferencia a un sustrato de cultivo, que puede ser tierra o un medio similar al suelo. Aquí, las plántulas continuarán su crecimiento y desarrollo. Finalmente, las plántulas son sometidas a un proceso de endurecimiento gradual para que se adapten a las condiciones del entorno exterior antes de ser trasplantadas al campo o al lugar donde se cultivarán definitivamente. Este proceso meticuloso de embriogénesis somática es esencial en la biotecnología vegetal y la propagación de plantas, permitiendo la producción de variedades mejoradas y la conservación de genotipos específicos. Es importante destacar que la embriogénesis somática es un proceso delicado y que requiere un control riguroso de las condiciones de cultivo, como la temperatura, la humedad, la iluminación y la composición del medio de cultivo. Además, este proceso es específico para cada especie vegetal y puede requerir ajustes en función de las características de la planta en cuestión.
Como se sabe la embriogénesis somática es asexual o adventicia, que no
proviene de la radícula del embrión, si no de otra parte de la planta, es un proceso en la cual se desarrolla embriones a partir de células que no provienen de una fusión por gametos, es por ello que tiene múltiples aplicaciones tanto en la naturaleza ya que está presente en más de 60 familias, por mencionar algunas se encuentra presente en las gramíneas, crucíferas, cucurbitáceas, rosáceas, leguminosas, palmáceas, entre otras como alfalfa y especies forestales.
Otras de las aplicaciones de la embriogénesis somática son la propagación de
plantas ya que ayuda a la conservación y mejoramiento genético del germoplasma, también en el saneamiento de enfermedades, y en ingeniería genética.
La embriogénesis somática también tiene un gran impacto en la biotecnología
forestal como la mejor vía de regeneración ya que está contribuyendo a la producción de plantas transgénicas y la obtención de silvicultura clonal de alta productividad con el fin de obtener forestales genéticamente mejorados y adaptados a la exigencia productivas de cierta área, obtener maderas de mejor calidad y reducir la propagación de enfermedades en especies de forestales.
Gracias a que la biotecnología ha tenido grandes avances podemos ver como la
embriogénesis a tenido aplicaciones en diferentes áreas como las mencionadas, y los avances seguirán con el paso del tiempo. Referencias Abohatem, M (2011). Low concentrations of BAP and high rate of subcultures improve the establishment and multiplication of somatic embryos in date palm suspension cultures by limiting oxidative browning associated with high levels of total phenols and peroxidase activities. Scientia Horticulturae 130: 344-348 Cardoza, V. (2008). Tissue Culture: The Manipulation of Plant Development. En Neal, C (Ed.), Plant Biotechnology and Genetics. (pp. 113-134). WILEY.
Radice, S. (2004). Morfogénesis. En Levitus, G., Echenique, V., Rubinstein, C.,
Hopp, E. & Mroginski, L (Eds.), Biotecnología y Mejoramiento Vegetal II, 1ra ed. (pp. 26-33). INTA. Roca, W. M. & Mroginski, L. A. (1991). Cultivo de Tejidos en la Agricultura. (pp. 104-105). CiAT. Thorpe, T. A. (2014). History of Plant Tissue Culture. En Loyola, V. M. & Vázquez, F (Eds.), Methods in Molecular Biology, vol. 318: Plant Cell Culture Protocols, 2th ed. (9-32). Humana Press Inc. Williams, E. G. & Maheswaran, G. (1985). Somatic Embryogenesis: Factors Influencing Coordinated Behaviour of Cells as an Embryogenic Group. Annals of Botany, 57, 443-462. DOI: 10.1093/oxfordjournals.aob.a087127.