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Presentación del módulo

El módulo: “Valoración de intangibles en litigios”, propone conocer el marco


conceptual del daño económico y reconocer la importancia de su demostración
en la determinación del daño y su incidencia en la aplicación de los métodos de
valoración, en el marco de un litigio. Asimismo, busca conocer y delimitar la
normativa nacional e internacional aplicable a la valuación de intangibles en el
escenario del litigio, reflexionando sobre los elementos fundamentales que debe
tener una opinión de valor en este ámbito.

Objetivos del módulo

• Conocer el concepto y elementos que conforman el daño


económico y reconocer la importancia de su demostración y alcance
en la valuación de intangibles realizada en el marco litigioso.
• Identificar el marco legal aplicable a la valuación de intangibles en
el escenario del litigio y los elementos que debe contener una opinión
de valor en este escenario.

Diagrama de temas

Marco legal de la
Conclusiones
valuación de
Daño económico y respecto de la
intangibles en
valuación de valuación de
casos litigiosos:
intangibles intangibles en
leguslación
casos de litigio
nacional y andina
Tema 1

Daño económico y valuación de intangibles

Resumen

En este tema usted conocerá el concepto de daño económico, los elementos que
lo conforman y su incidencia en la valuación de intangibles. Asimismo, entenderá
la importancia de su demostración en la determinación del daño y su incidencia
en la aplicación de métodos de valuación de intangibles, en el marco de un litigio.

Los intangibles y los casos de litigio

Figura 1

Fuente: freepik/11189438
Se debe dar una atención a la valuación de intangibles en casos de litigio, pues
resulta ser un escenario en el que se pueden estudiar con mayor interés los retos
adicionales que supone el ejercicio de valoración en sí mismo. El desarrollo y
extensión de la economía de intangibles ha dado lugar a un crecimiento
exponencial de los casos de litigio por infracción y defensa de los derechos de
propiedad intelectual, en esa medida se espera que estos casos sigan creciendo
a mediano plazo dado el hecho que el 70-80 % del valor de las empresas (sobre
el índice S&P-500) puede estar representado hoy por intangibles, con un impacto
igual para las PYME (en diferentes niveles de penetración dependiendo del
sector de negocios) (Rengifo & Pombo, 2015, p.159).

Simultáneamente al hecho descrito, esto es la importancia que cada vez más


tienen los intangibles en el valor de las empresas, vemos un aumento
exponencial de las aplicaciones de tecnologías patentadas, el uso comercial de
las marcas, la publicación y generación de creaciones de las que se derivan
derechos de propiedad intelectual, hasta el punto en que cada día aumenta el
número de empresas que utilizan en sus procesos productivos activos de
propiedad intelectual. Los montos de inversión en activos de propiedad
intelectual pueden ser mayores a 18% del PIB de Estados Unidos, por ejemplo,
con un volumen comercial anual transado de bienes y servicios asociados con
estos derechos hasta de US$5 trillones en 2013. Los montos de inversión y
volumen de negocios ponen en perspectiva la importancia de la defensa de los
derechos relacionados con activos intangibles, principalmente los derechos de
propiedad intelectual, con un impacto enorme a nivel global en el estado actual
de la economía (Rengifo & Pombo, 2015, p.160).

En principio, cuando un caso de infracción de derechos de propiedad intelectual


ingresa al sistema de administración de justicia, la valuación de los intangibles
se lleva a cabo bajo la presunción (antes de juicio) que, por la infracción como
tal, podría haber ocurrido un daño económico que debería ser indemnizado a
favor de la parte damnificada.

La presunción general de daño económico como efecto de los hechos que


originan la infracción de un derecho de propiedad intelectual es la razón que
conduce a determinar un monto de reclamación por medio de las herramientas
y modelos financieros específicos de medición de daño económico y activos
intangibles, que refleje el resarcimiento justo por la pérdida económica dentro del
marco definido en los estándares de valuación, ESPI, por ejemplo (Rengifo &
Pombo, 2015).
Daño económico y valuación de intangibles

Figura 1

Fuente: freepik/29510206

Desde el punto de vista económico, hay dos tipos de daños bajo el supuesto que
se ha configurado una infracción a un derecho de propiedad intelectual, también
consagrados desde el punto de vista legal y jurídico como el lucro cesante y el
daño emergente, contenidos en los artículos 1613 y 1614, del Código Civil,
respectivamente.

En ese sentido, vale la pena mencionar las definiciones otorgadas a este tipo de
daños por el autor Luis Carlos Pombo, en su libro: “Estándares de valuación de
activos intangibles de propiedad intelectual”, así:

• Daño emergente: corresponde al valor de un bien (activo económico),


que ha sufrido un daño en su capacidad de producir ingresos y beneficios
para su propietario. Puede ser total o parcial, en el segundo caso debe
ser puesto en el mismo estado y capacidad económica de producir
ingresos y beneficios que antes de sufrir el daño. En general, la
indemnización por daño emergente está representada por el valor (para
participantes del mercado y bajo el estándar de valor razonable) en dinero
que se requiere para poner el activo en capacidad de producir los mismos
ingresos y beneficios para su propietario que en el estado de cosas antes
de sufrir el daño, y para un futuro razonable de explotación del activo
como tal.
Claro lo anterior, se deben tener en cuenta las siguientes consideraciones
respecto a este tipo de daño en la valuación a realizar:

1. Desde el punto de vista legal el daño emergente existe si es


demostrado (probado).
2. A falta de prueba específica acerca de en qué consiste el daño
emergente, el mismo no existe como tal.
3. Desde el punto de vista económico, cuando se valúa el daño
emergente se valúa el daño emergente demostrado (o por demostrar).
4. El valuador tendrá especial cuidado en valuar un daño emergente al
menos sobre la base que sea plenamente definido previamente.
5. En este caso, el valuador valuará para un caso hipotético que después
podría ser probado.
6. El valuador revelará en su reporte la definición de daño emergente
como tal (en qué consiste) como referencia al objeto de la valuación.
7. El valuador definirá los procedimientos para calcular la compensación
en el tiempo, por pérdida del valor del dinero, o valor presente de flujos
de ingresos y beneficios, con el cuidado de no duplicar los factores
aplicados.
8. El valuador se debe guiar por la definición de daño emergente
establecida en el Código Civil.

• Lucro cesante: es una forma de pérdida de beneficios, por una parte,


debido a un daño ocurrido en el pasado y hasta una fecha actual que
impide la utilización económica plena de un activo productivo. El lucro se
refiere al dinero o beneficios netos que se dejan de percibir por una
empresa o persona como consecuencia de un daño ocasionado a un
activo productivo. Se indemniza a la empresa o persona cuando existe
prueba del daño como tal, así como la relación causal entre la pérdida de
ingresos y beneficios y el acto de infracción.

De esta manera, para realizar un ejercicio de valuación acertado, se


deben tener en cuenta las siguientes apreciaciones:

1. Generalmente se exige la prueba inequívoca de la ocurrencia del


hecho, así como la prueba de la relación causal con la parte que
generó el daño, y de la disminución real o total de los ingresos y
beneficios por la parte que sufre el daño.
2. La configuración de lucro cesante requiere que este pueda ser
probado, junto con su relación directa con el daño causado.
3. En todos los casos, el valuador podrá calcular el valor del daño
emergente, antes del juicio, bajo el supuesto de que ocurrió y podrá
ser demostrado.
4. En todos los casos, es requisito que la cuantía pueda ser determinada
sin ambigüedad.
5. Cuando la parte que sufre el daño es una empresa, por lo general el
lucro cesante se refiere a beneficios económicos netos no percibidos
durante un periodo de tiempo hasta la fecha; cuando aplica a una
persona natural, en algunos casos, puede referirse a la pérdida de
unos ingresos dejados de percibir (menos algunas deducciones o más
adiciones al valor de los ingresos) desde una fecha en el pasado hasta
una fecha actual.
6. Cuando se trata de calcular un lucro cesante para un periodo desde
una fecha en el pasado hasta una fecha actual definida, la tasa de
interés puede ser un criterio para compensar la pérdida de valor de los
ingresos o beneficios dejados de percibir (la tasa de interés trae
implícita la inflación).
7. El valuador definirá el procedimiento para calcular la compensación en
el tiempo por perdida del valor del dinero, con cuidado de no duplicar
los factores aplicados.
8. Cuando se trate de un lucro cesante proyectado de una fecha futura
hasta una fecha actual el valuador considerará la opción de que una
vez calculado el monto/ valor, se descuenten los flujos futuros a valor
presente a una tasa de descuento que el valuador defina para cada
caso.
9. El valuador se debe guiar por la definición de lucro cesante establecida
en el Código Civil (Pombo, 2015).

La reclamación económica, en casos de litigio se refiere a los ingresos y


beneficios dejados de percibir por el activo intangible, objeto de reclamación, y
en algunos casos, a la disminución (total o parcial) de la capacidad de producir
beneficios económicos del activo como tal cuando se puede demostrar, por
medios formales financieros y comerciales la relación entre el monto de
reclamación y los actos de la supuesta infracción dentro de un marco legal.

Como en todos los casos relacionados con intangibles, particularmente los de


propiedad intelectual, por el hecho de su unicidad (originalidad), la primera
dificultad de valuación está dada por la forma del planteamiento de los procesos
de valuación, los cuales deben ser capaces de definir adecuadamente las
propiedades del activo que producen valor económico en las condiciones de
mercado, y las particularidades de cada uno de los casos, y de las condiciones
de infracción.
Los métodos de valuación de reclamación de daños económicos, después de los
proceso de investigación y análisis de las condiciones particulares de creación
de valor de un intangible objeto de litigio, para determinar el lucro cesante,
buscan medir el monto de los beneficios económicos perdidos (o dejados de
percibir), atribuibles específicamente, sin ambigüedad, al activo de propiedad
intelectual objeto como efecto de la infracción (causa), y para un periodo dado,
por medio de la combinación de técnicas de valuación de reclamación económica
propias de los activos de propiedad intelectual y de daño económico consistentes
con los procesos de descubrimiento y análisis de las condiciones de mercado
del intangible descritas arriba.

Por su parte, los métodos de valuación de daño emergente (en las condiciones
ya mencionadas) buscan medir un monto de reclamación que corresponda a la
pérdida de su capacidad (parcial / total) de producir ingresos y beneficios (valor)
como un activo, atribuibles específicamente, sin ambigüedad, y como efecto de
la infracción (causal), para un periodo dado, por medio de la combinación de las
técnicas de valuación de reclamación económica propias de activos de
propiedad intelectual y de daño económico. Daño emergente y lucro cesante son
tipos de daños diferentes, si bien, en algunos casos de reclamación económica
por infracción, los dos valores económicos se pueden sumar en la valuación final
de reclamación.

La estimación de daños económicos (lucro cesante y daño emergente), en los


casos de infracción de derechos de propiedad intelectual, por lo general, requiere
de la aplicación de principios y procedimientos económicos y financieros
específicos de valuación diferentes de métodos corrientes de valuación de
empresas, incluso de los propios de valuación de intangibles en general. Aparte
de la importancia del impacto del análisis jurídico de un intangible en casos de
litigio, la aplicación de las NIC y NIIF es de vital importancia a la hora de la
definición y selección de los enfoques y métodos de valuación a utilizar en estos
casos, esto, si perjuicios de la observancia de la normatividad especial y la
jurisprudencia relevante a aplicar sobre la materia.

De la misma forma en la que un fallo relacionado con la infracción de un derecho


de propiedad intelectual, o cualquier otro que tenga como sustento un derecho
surgido respecto de algún activo intangible, está sujeto a la demostración (o no)
de las condiciones que lo causaron como efecto inequívoco de los actos de
infracción, el criterio de pérdida de valor deberá ser el resultado de un proceso
demostrativo y causal bien determinado de relación entre los hechos
presentados en la demanda por infracción y el monto de la reclamación.
En todos los casos el daño económico, sea por lucro cesante o daño emergente,
deberá ser objeto de demostración como tal, se reitera, desde el punto de vista
económico, toda vez que, no es el producto simple de la aplicación automática
de un método de valuación fuera del contexto legal y jurídico del caso, de las
propiedades específicas propias de creación de valor del intangible objeto, y de
las condiciones específicas de la infracción” (Rengifo & Pombo, 2015, p. 161 y
162).

En ese orden, los procesos de valuación en casos de litigio, antes de establecer


los enfoques o métodos a utilizar, tienen como objeto, explicar los resultados de
los procesos de descubrimiento y de los análisis de las distintas condiciones de
la infracción, entre estas se encuentran: i) las condiciones de mercado dentro de
las que ocurre la infracción; ii) las propiedades específicas de creación de valor
del intangible objeto de infracción en relación con el mercado y la competencia
y, iii) la determinación de la relación causal entre las condiciones de infracción y
criterios que sostienen y justifican la aplicación del estándar de valor económico
para cada caso específico de reclamación de daños.

Identificados los factores mencionados, en particular, el relacionado con el


estándar de valor que se aplicará en el caso objeto de reclamación, se puede
proceder al establecimiento de los enfoques y métodos a aplicar al caso en
concreto, esto teniendo claro, que lo que va a definir el valor en los casos de
litigio, es el estándar de valor seleccionado y no los enfoques o métodos
aplicados, pues estos por sí mismos no pueden representar un valor económico,
antes del análisis de las condiciones jurídicas, económicas, de mercado y
financiera que permean el caso objeto de infracción.

La demostración en la determinación de daño económico de intangibles

Desde el punto de vista económico, la presunción del daño como resultado de la


infracción se tiene en cuenta como un presupuesto jurídico de valuación, toda
vez que, de facto, la existencia del daño económico solo se evidenciará al
momento de finaliza los procesos de valuación, quedando abierta la posibilidad
de que uno de los resultados del reporte sea la inexistencia de este.

En ese sentido, en el ejercicio de valuación de intangibles en casos de litigios no


es correcto presumir que se configura daño económico en la forma de lucro
cesante o daño emergente (pérdida de beneficios y pérdida de valor del activo),
pese al supuesto jurídico señalado (antes de juicio). De la misma manera, y
desde el punto de vista económico, la infracción (después de juicio), tampoco
implica necesariamente que de manera indefectible siempre haya lucro cesante
y daño emergente en forma concomitante.
En términos económicos en la valuación debe quedar demostrada la relación
causal, tanto de los montos por concepto de lucro cesante como de daño
emergente, con el monto de la reclamación por la infracción. Por lo tanto, la
aplicación de los métodos de pérdida de beneficios y de valor en los casos de
litigio tiene que ver con la identificación y reconstrucción de la prueba para
efectos de la demostración del monto económico con respecto a la infracción.

Los análisis de la valuación deben concluir de forma inequívoca que la infracción


ha causado pérdidas de beneficios para el propietario, o pérdida de valor del
activo intangible objeto de litigio, y que ambos montos (cuando aplica) se pueden
medir confiablemente por el análisis económico y financiero a partir de las
fuentes de información de los estados financieros oficiales de las partes (y los
análisis de mercado necesarios para el soporte de los métodos utilizados).

Si bien en la valuación de intangibles en casos de litigio los métodos de valuación


son importantes, tal como se había mencionado de manera previa, por sus
atributos inventivos propios, su naturaleza diferencial, dada por el derecho que
los define y sus propiedades económicas; desde el punto de vista de la
reclamación de daños económicos, el énfasis de la valoración debe estar
orientado a la identificación de los elementos que caracterizan el concepto de
valor para el intangible individualmente estudiado, de tal forma que se obtengan
criterios suficientes para identificar la existencia o no de daño económico. En ese
orden de ideas, obtenido el concepto de valor propio del intangible analizado
para el caso particular de reclamación, dicho criterio también debe orientar el
proceso de análisis que antecede a la identificación del daño, es decir:

1. El estudio de las condiciones de la infracción.


2. El planteamiento de los periodos pasados y futuros de la reclamación.
3. La especificidad de cada uno.
4. La investigación y profundización que cada método disponible permita
para poder reflejar adecuadamente la dimensión del daño económico en
cuestión.

Las partes en un caso de reclamación de daños económicos no deben caer en


la simplificación de los procesos con énfasis y foco casi exclusivo en la aplicación
y resultados de los modelos de valuación. Lo anterior, por cuanto hay muchos
factores importantes involucrados en un caso de litigio, evidencias y análisis,
necesarios antes de proceder a la selección de métodos propios para determinar
el daño económico.
“La prueba del daño económico no está nunca en el método como tal, pues es
este solo resume los procesos de investigación y análisis que conducen a la
demostración del daño económico, el método produce el resultado, más no la
prueba como tal. Es decir que, así como no se puede automatizar el juicio de un
juez en caso de litigio, tampoco se pueden automatizar los procesos de
determinación del monto de una reclamación por daños económicos, vía el
modelo de valuación” (Rengifo & Pombo, 2015, p. 170).

Así pues, desde el ámbito económico, la falta de demostración de la relación de


causalidad entre el monto de la reclamación económica y la infracción como tal,
da pie a la no configuración del lucro cesante y daño emergente. De tal suerte
que, la valuación de intangibles en casos de litigio debe estar acompañada de la
debida demostración, y del análisis de consistencia (razonabilidad de aplicación
de normas y estándares) y coherencia económica de los resultados de
reclamación, incluyendo el impacto de los análisis de riesgo.

Hay una doble necesidad de pruebas en los mentados casos: i) la prueba de la


comisión de la infracción y, ii) la prueba de la relación entre la infracción y los
montos económicos reclamados, ambas antes de juicio. La valuación en casos
de litigio debe procurar la prueba de la relación de los beneficios perdidos con la
infracción.

Sin perjuicio de lo anterior, se debe tener en cuenta que en la realidad el valuador


se puede encontrar frente a casos complejos, en los que a pesar de demostrarse
la infracción (después de juicio), este solo hecho no da lugar a la reclamación de
un monto, como daño económico.
Demostración y aplicación de métodos de valuación de intangibles en litigio

Figura 3

Fuente: freepik/28577459

La reclamación económica por activos de propiedad intelectual en litigio sebas


en el principio de compensación. La solución a la infracción busca que, por un
monto de compensación económico, el activo intangible objeto de litigio vuelva
al estado de capacidad de generación de beneficios, y de producir valor, tal como
estaba con anterioridad a la fecha de inicio de la infracción, sin más. Es por esto,
que desde lo económico la reclamación se funda en la noción de que el
propietario de un activo intangible ha sufrido una pérdida de beneficios y de valor
del activo en razón a las acciones de un tercero (causa), pérdida que debe poder
ser medida de forma razonable por métodos económicos y financieros que
apliquen para cada caso, en los términos ya definidos.

En punto a lo anterior, la determinación de un monto de reclamación tiene por


objeto compensar adecuadamente, y proporcionalmente, la infracción, la pérdida
de beneficios y de valor, por ejemplo, en términos de disminución de ingresos, o
aumento de costos, o disminución de valor, sufrida por el activo intangible objeto,
a causa de las acciones de un tercero. El principio de valuación de reclamación
económica por infracción de derechos propiedad intelectual establece que dicha
reclamación (y resarcimiento), determinada por los métodos de valuación
específicos para el caso, debe guardar relación y correspondencia con la
magnitud de la infracción (daño) causada, sin superar ese límite (Corte
Constitucional, sentencia C-840 de 2001).
Generalmente, el daño económico que es objeto de reclamación en un caso de
litigio de activos intangibles, donde estos son independientes, como parte del
proceso de demostración, es el monto económico establecido en dos escenarios
comparados:

i) El escenario durante las fechas definidas de la infracción, versus.


ii) El escenario durante el mismo periodo, pero “sin la infracción”.

La diferencia, debidamente soportada en la demostración de los hechos en


términos económicos -calculada por métodos de valuación-, que combina los
métodos específicos de valuación de activos de propiedad intelectual con los
métodos de daño económico, es un primer referente para determinar, y
demostrar, el monto de un daño económico sufrido en un caso de litigio por
infracción de derechos de propiedad intelectual dentro del contexto del estándar
de valor utilizado.

Tanto económica como legalmente, la tendencia en casos de litigio es tratar cada


clase de daño de acuerdo con las características propias de creación de valor de
cada tipo de intangible de PI, dentro de las condiciones dadas para cada caso y
de la jurisprudencia aplicable.

En ese sentido, si bien cada caso tiene sus propias condiciones, se puede decir
que hay un enfoque general para tener en cuenta (sin ser un límite) para
determinar daños económicos para cada tipo de activo intangible de propiedad
intelectual en casos de litigio, valga decir, los conceptos de lucro cesante y daño
emergente no son excluyentes. Es de anotar que, además de las definiciones
legales sobre el particular, la referencia a la jurisprudencia es una condición
indispensable para desarrollar adecuadamente una valuación de daños que
soporte mejor los análisis y aplicación de métodos de valuación en los de litigio.

Teniendo en cuenta que la definición de daño económico por pérdida de


beneficios puede ser diferente para cada tipo de intangibles de propiedad
intelectual, nos referiremos de manera sucinta a tres tipos de ellos, como lo son,
las patentes, las marcas y derechos de autor, fin de conocer el contexto general
de los daños y perjuicios que se suelen solicitar en cada uno de los escenarios
mentados.
1. En el caso de patentes: el derecho de patentes se vulnera cuando sin
autorización o consentimiento del titular la creación se reproduce,
distribuye, transforma o se cede total o parcialmente. El titular es pues el
legitimado para autorizar o prohibir cualquier forma de explotación de la
creación, por tanto, quien no es titular, ni cuenta con autorización de este,
tiene un deber de abstención o una obligación de no hacer frente al
cúmulo de derechos o prerrogativas que la ley le otorga al creador.

En ese sentido, si bien existen varias normas que consagran la


indemnización por infracción de patentes, nos referiremos a la
estadounidense (U.S. Patent Act, Part III, Chapter 29, Section 284),
debido a la importancia de su precedente judicial y los múltiples casos que
se han presentado en torno a esta materia. En esta se establece que, de
existir fallo favorable para el demandante, la Corte deberá condenar la
indemnización por daños de tal manera que se compense
adecuadamente por la infracción. Pero se precisa que en todo caso no
deberá condenar a una suma menor a la que correspondería por regalías
razonables por el uso de la invención por parte del infractor.

La misma disposición señala que cuando el jurado no fije el monto de los


daños, la corte deberá fijarlos. En cualquier caso, siendo el jurado o la
misma corte quien determine el monto, esta última podría aumentarlo
hasta en tres veces a los inicialmente fijados. Por último, se indica que la
corte podrá valerse del testimonio de un experto para determinar los
daños o para establecer qué regalía sería razonable dadas las
circunstancias.

El concepto de regalías razonables como parámetro para tasar la


indemnización a la cual la víctima de una infracción tiene derecho, fue
desarrollado en el caso Georgia-Pacific Corp v. United States Plywood
Corp., decidido por la Corte del Distrito de Nueva York en 1970, en el cual
el juez manifestó su desacuerdo con el experto al que se le encomendó
determinar el monto de indemnización, debido a que a juicio del juez el
criterio que se debía aplicar debía ser el de las regalías razonables que el
infractor hubiese pagado de haber contratado una licencia de uso con el
titular de la patente.

Para la fijación de las regalías razonables se señalaron un total de quince


(15) criterios, a saber:
1. Las regalías que percibe el titular de la patente por licencias que haya
concedido a terceros.
2. Las regalías que paga el infractor por el uso de otras patentes
similares.
3. La naturaleza y el alcance de la licencia (alcance, territorialidad y
exclusividad).
4. Las políticas y programas de mercadeo del titular de la patente para
mantener su monopolio.
5. La relación comercial entre el titular de la patente y el infractor (si son
competidores o si son inventor y promotor).
6. El efecto de la venta del artículo patentado sobre otros productos del
titular de la patente.
7. La duración de la patente.
8. La rentabilidad del producto patentado y su éxito comercial.
9. Las ventajas que ofrece el producto patentado en comparación con
otros artefactos o productos antiguos.
10. La naturaleza del producto patentado.
11. La extensión del uso de la patente por parte del infractor.
12. El valor que se acostumbra a pagar por licencias en el sector comercial
o en sectores similares.
13. La rentabilidad que debe atribuirse a los elementos patentados del
producto, distinguiéndola de la que puede atribuirse a los elementos
no patentados.
14. La opinión de expertos calificados.
15. El valor que el titular de la patente y el infractor hubieren acordado
para una licencia que ambos hubiesen celebrado voluntariamente.

Asimismo, las cortes también reconocen indemnización por los beneficios


perdidos con ocasión de la infracción de una patente. Para ello deben
verificarse dos condiciones, la primera es que, se demuestre que, si no se
hubiera presentado la infracción, el titular de la patente hubiera realizado
las ventas que fueron consumadas por el infractor y la segunda condición,
es que, la pérdida de beneficios debe tener como causa próxima la
infracción de la patente. (Rengifo, 2016, pp. 860-862)

Ahora bien, nos referiremos a lo previsto en la Decisión Andina 486 de


2000, siendo esta la que regula el régimen común de propiedad intelectual
a nivel regional y, por tanto, resulta aplicable a Colombia. En lo que
concierne a las acciones de infracción de patentes, el artículo 239 de la
Decisión Andina referenciada, establece lo siguiente:
“El titular de una patente tendrá derecho a ejercer acción judicial por
daños y perjuicios por el uso no autorizado de la invención o del modelo
de utilidad durante el período comprendido entre la fecha en que adquiera
carácter público y pueda ser consultada la solicitud respectiva y la fecha
de concesión de la patente. El resarcimiento sólo procederá con respecto
a la materia cubierta por la patente concedida, y se calculará en función
de la explotación efectivamente realizada por el demandado durante el
período mencionado”.

Respecto de lo anterior, es importante determinar sobre qué recae la


patente y cuál es el alcance de la misma, siendo este último punto un
problema recurrente en los juicios de infracción, ya que la discusión recae
en si la patente y específicamente sus reivindicaciones se deben
interpretar literal o funcionalmente, pues de una u otra forma causaría o
una desprotección o una extensión injustificada de sus derechos, lo cual
en cualquier sentido, sería injusto, de esta manera, hay que tener mucho
cuidado con la interpretación y aplicación de la norma relacionada con la
indemnización.

El artículo 243 de la Decisión, relativo a la manera de llegar a una


indemnización de daños y perjuicios, dispone:

Para efectos de calcular la indemnización de daños y perjuicios se tomará


en cuenta, entre otros, los criterios siguientes:

a) el daño emergente y el lucro cesante sufrido por el titular del derecho


como consecuencia de la infracción;
b) el monto de los beneficios obtenidos por el infractor como resultado de
los actos de infracción; o,
c) el precio que el infractor habría pagado por concepto de una licencia
contractual, teniendo en cuenta el valor comercial del derecho infringido
y las licencias contractuales que ya se hubieran concedido.

De lo anterior, se observa que la norma requiere un análisis cuidadoso,


pues los criterios mencionados no son taxativos y además desconocemos
en primer lugar, si pueden aplicarse de manera acumulativa o
concurrentemente.

Lo que sí es claro de los anteriores criterios, es que el mencionado en el


literal b) no puede ser interpretado como un enriquecimiento sin justa
causa, sino más bien este debe ser entendido bajo la idea de que los
frutos provenientes de la infracción del derecho de exclusiva no pueden
quedar en manos o en poder del infractor, sino que por el hecho de ser
frutos deben ser retornados a su verdadero dueño (Rengifo, 2016, p. 875).
De un análisis general de los tres criterios que conforman la norma
referenciada, debemos mencionar que los tres no pueden concurrir, y se
esperaría que los contenidos en el literal b) y c) no se puedan acumular,
porque son la expresión de lo que se conoce como lucro cesante. Ahora,
respecto a si los criterios a) y b) pueden concurrir, según el lineamiento
de la Directiva Europea sí podrían, sin embargo, se debe analizar si el
beneficio del infractor no fue incluido dentro del concepto de daño
emergente o lucro cesante. En cualquier caso, lo que se debe evitar es
violar la regla de non bis in idem, pues el infractor no podrá ser condenado
dos veces por un mismo rubro (Rengifo, 2016, p. 877).

En ese orden, esto es, acreditada la existencia del perjuicio y ante la


dificultad de precisar su monto, vemos que, a través de la norma referida,
lo que hizo el legislador comunitario fue colaborar con el juez y la víctima
demandante en la concreción o fijación de la cuantía del daño. Y estos
criterios no son daños preestablecidos sino parámetros de tasación que,
debidamente utilizados, facilitan la labor de entendimiento del juez para
llegar a la concreción del quantum del perjuicio. Pensemos, por ejemplo,
en cómo el beneficio del infractor y el valor de la licencia en el mercado
facilitan, sin duda, la estimación del daño ocasionado con la infracción de
una patente.

En suma, “el propietario de la patente usualmente debe demostrar, por


medio de los análisis de investigación de las condiciones de la valuación,
plasmados en los métodos económicos de la misma, que, debido a la
infracción, tuvo una reducción de ingresos y beneficios, los cuales
representan la base para el cálculo económico de los daños por infracción
de una de sus patentes” (Rengifo & Pombo, 2015, p.175).

2. En el caso de las marcas: para efectos de entender las diferencias entre


la infracción y las consecuencias derivadas de ella, es importante
mencionar la Sentencia 1600 del 27 de diciembre de 2018 emitida por la
SIC (Superintendencia de Industria y Comercio), en ella se hace una
distinción entre daño y perjuicio, sobre el primero se dice que, este se ve
materializado en la infracción del derecho de propiedad industrial, esto es,
en la vulneración de las prerrogativas exclusivas que ostenta el titular; en
lo que respecta al segundo, este corresponde a la consecuencia derivada
de la infracción, el cual para que sea indemnizable, debe ser demostrado
dentro del respectivo proceso, pues es esa la carga de quien lo alega
conforme al art. 167 del CGP (Código General del Proceso) y porque en
materia de PI (Propiedad Intelectual) ninguna norma establece una
presunción que avale la posibilidad de relevarse de tal prueba.
De otra parte, esta providencia señala las tipologías de perjuicio
indemnizables en asuntos de infracción a la propiedad industrial. Para
hacerlo, la entidad explicó los criterios contenidos en el artículo 243 de la
Decisión 486 del 2000, frente a lo cual precisó:

(…) Por tanto, los beneficios obtenidos por el infractor, así como el valor
de una licencia hipotética, son en sí mismos perjuicios indemnizables en
asuntos de especial relevancia como los que tienen que ver con la
protección de la propiedad industrial, los cuales, aunque resultan
disímiles a los que ordinariamente se conocen, lo cierto es que el
legislador fue quien estableció estas especiales categorías.

Si pensamos de manera detenida en estas categorías especiales de


perjuicios, podemos concluir que facilitan la obtención de la indemnización
al titular del derecho infringido (Ortega & Sandoval, 2022, pp.100-101).

Por último, y sin perjuicio de lo anterior, la norma citada establece que el


demandante puede reclamar, en forma de recuperación de daños:

a) Los beneficios del infractor.


b) Cualquier daño sufrido.
c) Los costos causados por la acción de la infracción.

El total de la reclamación económica puede estar dado por el monto de


los beneficios del infractor (como lucro cesante), más los daños al activo
como tal (daño emergente), o lo que, según la norma anterior, se podría
sumar como costos asociados, por ejemplo, para la recuperación del daño
emergente (gastos correctivos de publicidad), y los gastos y costos del
proceso.

Ahora bien, resta agregar que, una vez demostrado cualquiera de los
perjuicios reconocidos en el artículo 243 de la Decisión Andina de 2000,
o incluso otros distintos, el siguiente paso es su cuantificación. En
Colombia, se cuenta con tres sistemas distintos encaminados a lograr
este propósito.

El primero es el de juramento estimatorio, que aparece contemplado en el


artículo 206 del Código General del Proceso, en el que se señala que
“quien pretenda el reconocimiento de una indemnización, compensación
o el pago de frutos o mejoras, deberá estimarlo razonadamente bajo
juramento en la demanda o petición correspondiente, discriminando cada
uno de los conceptos. Dicho juramento hará prueba de su monto mientras
su cuantía no sea objetada por la parte contraria dentro del traslado
respectivo”. En este caso, con el cumplimiento de los requisitos del
artículo mencionado por parte del demandante, si su juramento no es
objeto por el infractor, se entiende probada la cuantía del perjuicio. Por el
contrario, si se objeta el juramento (segundo sistema, el demandante se
verá obligado a demostrar la cuantía del perjuicio utilizando para ello los
medios de prueba que le permite el Código General del Proceso.

Por último, el tercer sistema se encuentra en la Ley 1648 de 2013 y en el


Decreto 1074 de 2015, en los cuales se establece un sistema de
indemnizaciones preestablecidas, únicamente aplicable a la infracción de
marcas. Bajo dicho sistema, al titular le basta expresar en su demanda
que se acoge a él para quedar relevado de demostrar la cuantía del
perjuicio. En tal caso, será el juez quien proceda a hacer las
cuantificaciones sin establecerla en menos de tres (3) SMLMV y sin
sobrepasar, en ningún caso, los doscientos (200) SMLMV por cada marca
infringida. A fin de determinar la cuantía del perjuicio que otorgará como
indemnización, el juez deberá analizar circunstancias como la duración de
la infracción y su amplitud, entre otros. (Ortega & Sandoval, 2022, p.103-
104)

3. En el caso de derecho de autor: el artículo 57 de la ley 44 de 1993


menciona que, para la tasación de los perjuicios materiales causados por
el hecho infractor, se tendrá en cuenta: i) El valor comercial de los
ejemplares producidos o reproducidos sin autorización; ii) El valor que
hubiere percibido el titular del derecho de haber autorizado su explotación
y, iii) El lapso durante el cual se efectuó la explotación ilícita.

En ese sentido, es claro que el mentado artículo tiene la naturaleza y


propósito de establecer criterios objetivos para facilitar la prueba del lucro
cesante por infracciones al derecho de autor y derechos conexos, dada la
dificultad que se tendría al pretender probar de otra manera este daño, en
tanto se exige que dicha prueba ha de ser cierta y directa, condiciones
que difícilmente se podrían demostrar al tratarse de unos eventuales
ingresos futuros que -lejos de ser ciertos- dependerán de una hipotética y
aleatoria explotación económica de la obra en el mercado.

Ahora bien, la regalía hipotética (ingresos que hubiera percibido el titular


de haber autorizado o licenciado el uso infractor) se puede probar por
medio de la cuantía de las licencias que el mismo titular ha otorgado en el
pasado para esa misma forma y modalidad de uso o, de manera indirecta,
por lo que represente el valor económico de ese derecho en el mercado,
lo que abre la posibilidad de acudir a otros referentes indirectos. Esto es
válido al hacer una analogía de lo que se dispone en materia de propiedad
industrial para esta regalía hipotética.

El lucro cesante por la infracción a los derechos de autor bien puede ser
indemnizado por medio del valor comercial de los ejemplares infractores
(si bien este criterio parece estar asociado no a cualquier modalidad de
infracción sino a aquella que consiste en la fabricación de ejemplares
apócrifos de la obra con destino a su comercialización), o el detrimento
económico de la víctima por el valor de la licencia que se le dejó de pagar
para autorizar el uso de la obra.

La tasación del perjuicio mediante la estimación del beneficio del infractor


no está contemplada dentro de los criterios indemnizatorios mencionados
en el artículo 57 de la Ley 44 e 1993, no obstante, la misma tiene
fundamento – y así puede ser reconocida por los operadores de justicia
en Colombia- en el artículo 1614 del Código Civil, que entiende por lucro
cesante la ganancia o provecho que potencialmente deja de reportarse
para la víctima de la infracción, y que tiene correlación con la ganancia o
provecho que le ha usurpado en su mercado potencial el infractor de sus
derechos (Ortega & Sandoval, 105, p. 214-215).

En mérito de lo expuesto, en materia de derechos de autor por lo general


se determina el lucro cesante -de la forma expuesta-, y también por el
monto dado por una licencia, dependiendo de cada caso y dentro de las
condiciones del sector de negocios, más el monto del daño emergente
sufrido.

Complementando lo expuesto, nos referiremos a la pérdida de oportunidad como


criterio que compone el lucro cesante y puede ser aplicable en la indemnización
de daños causados con ocasión de una infracción a los derechos exclusivos
respecto de los activos de propiedad intelectual mencionados (marcas, patentes
y derechos de autor, por ejemplo). En ese sentido, debemos decir que “la
‘pérdida de oportunidad’ puede definirse como la desaparición de la probabilidad
de un evento favorable, siempre y cuando esta oportunidad aparezca
suficientemente seria. Pero este se limita a dicha pérdida; sólo la pérdida de la
oportunidad será compensada, y no la totalidad del beneficio que la víctima había
obtenido en caso de que hubiese ocurrido el evento cuya realización ha sido
impedida por culpa del infractor” (Philippe Le Torneau, 2006).

Pues bien, en materia de propiedad intelectual lo que daría lugar a la reparación


serían las consecuencias que resultan de la privación de una oportunidad para
que un acontecimiento pueda producirse, como sería, por ejemplo, la pérdida de
oportunidad para el titular de una patente de no ser contratado -habiéndose así
estipulado en el contrato- para realizar o ejecutar las implementaciones o los
nuevos proyectos relacionados con su invención. O mejor: la pérdida de
oportunidad puede consistir en el perjuicio derivado por la utilidad no recibida por
el titular de la patente al habérsele contratado para realizar los proyectos
relacionados con si derecho de exclusiva y a los cuales el explotador de la
patente se había obligado a contratarlo. La pérdida de oportunidad
correspondería a la utilidad que hubiese derivado si la oportunidad de ser
contratado no hubiese sido frustrada (Rengifo, 2016, p.884-885).

En conclusión, los anteriores ejemplos, de manera general, no van en contra del


régimen local, en algunos casos ofreciendo ampliar los conceptos, en otros
circunscribiéndolos a condiciones específicas. A modo de resumen, después del
análisis de las condiciones propias del caso de infracción para estimar daño
emergente y lucro cesante en casos de litigio, se deben considerar como mínimo
los siguientes aspectos:

1. Análisis de perdida de beneficios de la diferencia comparada de


desempeño del negocio en el escenario del propietario del derecho de
propiedad intelectual sin la infracción, versus el escenario con la
infracción.
2. El análisis de los beneficios económicos del infractor (diferenciales,
incrementales).
3. El análisis de los beneficios económicos representados en una tasa de
regalía razonable (licencia) aplicada a los ingresos del infractor.
4. El análisis de la pérdida de valor del activo intangible objeto (menor valor
del activo intangible dado por la pérdida de su capacidad de generación
de valor), y los gastos de recuperación a su estado anterior a la infracción.
5. Otro tipo de daños que se identifiquen, como por ejemplo, los punitivos o
los no pecuniarios, siempre y cuando no vayan en contravía del régimen
legal especial respectivo.

Los procedimientos anteriores son todos, en su aplicación, relativamente


complejos. En todos los casos de valuación de intangibles para reclamación se
deben utilizar procedimientos soportados en fuentes reconocidas de modelos y
métodos de valuación, incluyendo explícitamente la referencia original, y las
similitudes y diferencias con el original que cada caso puede requerir (Rengifo &
Pombo, 2015, p. 175).
Tema 2

Marco legal de la valuación de intangibles en


casos litigiosos

Resumen

El objetivo el presente tema es conocer y delimitar la normativa tanto nacional,


como internacional aplicable a la valoración de intangibles, específicamente en
lo que atañe al escenario litigioso.

Contenido

Marco legal de la valuación de intangibles en casos litigiosos

Las valuaciones que tienen como fin la reclamación económica de perjuicios por
uso indebido de derechos relacionadas con activos intangibles, entre los cuales
se encuentran los de propiedad intelectual, tienen como marco de referencia
legal y jurídico a nivel local, regional e internacional, las normas que se
encuentran contenidas en el siguiente de cuadro, de las cuales se dará una breve
reseña sobre su aplicación en el ejercicio de valuación en casos de litigio,
principalmente.

Tabla 1

Norma Aplicación Materia que regula


Ley 1915 de 2018 Nacional Incorpora a la legislación interna el
sistema de indemnizaciones
preestablecidas como “consecuencia
de la infracción a los derechos
patrimoniales de autor y los derechos
conexos o por las conductas descritas
en la presente ley, relacionadas con las
medidas tecnológicas y la información
para la gestión de derechos”, artículo 3.
*Sin embargo, este mecanismo se
encuentra supeditado a la
reglamentación que expida el Gobierno
nacional, cosa que no ha ocurrido aún.
Decreto 1074 de Nacional En los artículos 2.2.2.21.1 y 2.2.2.21.2
2015 regula el mecanismo de
indemnizaciones preestablecidas para
los casos de infracción marcaria, fija los
topes de dicha indemnización y
establece los criterios para tener en
cuenta para su determinación.
Ley 1673 de 2013 Nacional Regula y establece las
responsabilidades y competencias de
los avaluadores en Colombia;
principalmente en lo que atañe al marco
de responsabilidad del valuador en
casos de valuaciones para procesos
judiciales.
Ley 1648 de 2013 Nacional Por medio de la cual “se establecen
medidas de observancia a los derechos
de propiedad industrial”, que incorpora
al ordenamiento nacional el mecanismo
de las indemnizaciones
preestablecidas para los eventos de
infracción marcaria (artículo 3).
Ley 610 de 2000 Nacional Regula lo relacionado con
responsabilidad fiscal, la cual tiene por
objeto el resarcimiento de los daños
ocasionados al patrimonio público
como consecuencia de la conducta
dolosa o culposa de quienes realizan
gestión fiscal mediante el pago de una
indemnización pecuniaria que
compense el perjuicio sufrido por la
respectiva entidad estatal.
Decisión 486 de Regional Regula el régimen común de la
2000 Propiedad Industrial. No obstante, para
efectos de la valuación de intangibles
en litigios se debe tener en cuenta lo
dispuesto en el título “De las acciones
por infracción de derechos”, artículos
238, 241 y 243.
Decisión 351 de Regional Regula el régimen común sobre
1993 derecho de autor y derechos conexos.
Para el caso de valuación en litigios, se
debe tener en cuenta el artículo 57 el
cual reconoce el derecho del titular a
ser adecuadamente reparado.
Ley 44 de 1993 Nacional Regula derechos de autor,
específicamente para la valuación de
intangibles en casos de litigio se deben
tener en cuenta los artículos 56 y 57, ya
que estos mencionan los criterios que
se deben aplicar para la tasación de los
perjuicios materiales derivados de la
infracción de los derechos de autor y la
posibilidad de adjudicarle al afectado,
por cuenta de la indemnización los
bienes incautados destinados “directa o
indirectamente” a la infracción
Código de Nacional Arbitrajes sobre derechos y contratos y
Comercio en su artículo 615 faculta a los
colombianos y extranjeros domiciliados
en el país para solicitar, en los asuntos
judiciales, la aplicación interna de los
tratados de propiedad intelectual.
Código Civil Nacional En sus artículos 1613 y 1614,
relacionados con daño emergente y
lucro cesante, y los demás que
apliquen.
Normas Contables Internacional Estas normas contables y financieras
y de Reporte van a ser aplicadas durante todo el
Financiero (NIC y desarrollo de un estudio de valuación,
NIIF) según el fin que este persiga. Sin
embargo, para efectos de la valuación
en casos de litigio se deberá tener en
cuenta la NIIF 13.

Fuente: propia

E
Tema 3

Conclusiones respecto de la valuación de


intangibles en casos de litigio

Resumen

Una vez estudiados los conceptos vistos en los temas anteriores, el tercer tema
de este módulo propone reflexionar sobre los elementos fundamentales que
debe contener una opinión de valor que será utilizada dentro de un litigio.

Conclusiones respecto de la valuación de intangibles en caso de litigio

En caso de reclamación económica por infracción de un activo intangible debe


tenerse especial cuidado en no duplicar daños en el monto final de reclamación,
no duplicar lucro cesante, ni daño emergente. Los estándares de valuación
(ESPI), por ejemplo, definen los procedimientos que se deben considerar para
no duplicar los montos de reclamación que se obtienen de diferentes métodos.

La estimación de daños económicos en casos de infracción de derechos de


activos de PI generalmente requiere la aplicación de principios y procedimientos
económicos y financieros específicos de valuación activos de PI, diferentes de
los métodos corrientes de valoración de empresas.

La valuación de reclamación económica de intangibles en casos de litigio deberá


ser llevada a cabo por un valuador profesional independiente de acuerdo con el
conjunto de provisiones específicas de la Ley 1673 de 2013.

Para la justificación de los criterios de valuación utilizados, el valuador presentará


sus análisis tomando en cuenta la opinión especializada en cada caso, sea
contable, financiera, entre otros, así como jurisprudencia local e internacional.

La valuación de activos de PI en litigio debe ser consistentes con las normas


contables de identificación y reconocimiento de intangibles como activos y de
reporte financiero (NIC), y el estándar de valor razonable (NIIF), que pueden
aplicar para cada caso particular.

Finalmente, y a modo práctico para quienes estén interesados en la valuación


de intangibles en casos de litigio, mencionaremos algunos factores que hacen
parte del marco regulatorio especial sobre estándares que debe contener un
dictamen, como por ejemplo el de los ESPI que se cita a continuación:
i) Descripción y definición del activo objeto (jurídica, contable y
financiera).
ii) Planteamiento económico del caso y análisis de su consistencia en el
marco legal y jurisprudencial si a ello hubiere lugar.
iii) Definición de los montos de reclamación presentados, si se trata de un
lucro cesante o daño emergente, y demostración económica.
iv) Definición de los principios fundamentales de valuación que aplican
para el caso.
v) Análisis de riesgos específicos para el intangible en el contexto de las
condiciones de la infracción (de negocio, financieros, económicos).
vi) Modelo de cálculo de beneficios perdidos y/o pérdida de valor del
activo, y el tiempo considerado de reclamación (modelos primarios y
secundarios de valoración).
vii) Alcance de la investigación de mercado y propiedades comparadas de
creación de valor del activo y análisis de su expectativa de vida útil,
funcional y económica.
viii) Referencia a indicadores y múltiples utilizados de fuentes frecuentes
secundarias y análisis de revisión y adecuación a las condiciones de
mercado del activo objeto (p. ej., tasas de regalías).
ix) Tasas de retorno y justificación, específicas para el intangible (análisis
de factores de riesgo e impacto de la volatilidad de los mercados de
valores).
x) Modelo y justificación de proyecciones de beneficios dentro del tiempo
que se ha determinado de vida útil del activo dentro del marco de la
infracción.
xi) Justificación y procedimientos de utilización de la tasa de descuento y
los modelos seleccionados para su determinación y soportes (análisis
y justificación de premiums y descuentos).
xii) Modelo de análisis de proyecciones utilizadas en algunos métodos
para los dos tipos de daos y relación con los análisis de riesgos
presentados
xiii) Conclusiones y certificación como soporte de consistencia y
coherencia (garantía financiera para evitar el cálculo de una doble
indemnización).

Los mismos criterios de valuación aplican cuando el valuador es requerido para


presentar testimonio como experto, y para la contradicción de la valuación de
reclamación presentada.
En la práctica

Dentro de los recursos adicionales de este módulo encontrará el documento


Relatoría N.º 36 emitido por la DNDA dentro del proceso verbal iniciado por el
señor Carlos Massó (artista plástico) contra Caracol TV S.A., debido a que este
consideró infringidos sus derechos morales de paternidad e integridad y
patrimoniales de reproducción, comunicación pública y distribución, cuando la
demandada sin previa autorización incorporó sus obras tituladas “Tres caballos
en la playa”, “composición para expresiones en movimiento” “Cabeza de caballo
III” en la obra audiovisual “La Selección”. Dicha obra fue presentada en diversos
países y actualmente se presenta en Caracol Play y en Netflix.

Como parte de las pretensiones de tipo indemnizatorio, el demandante solicitó lo


siguiente:

“Que se condene a Caracol, a reparar en forma integral los daños pecuniarios y


no pecuniarios, por el uso no autorizados de sus obras, así:
5.1. Daño Pecuniario.
Por concepto de daño pecuniario, la suma de cuatrocientos noventa y dos
millones quinientos ochenta y cuatro mil doscientos pesos colombianos
($492.584. 200.oo).
5.2. Daño no pecuniario:
5.2.1 Por concepto de afectación a bienes jurídicos constitucionalmente
protegidos y daño moral, la suma equivalente 60 SMMLV”.

Como parte de la contestación el demandado fundamentó esto:

“Que no es cierto que los comportamientos adelantados por la sociedad


demandada vulneraron, entre otros, los derechos patrimoniales de reproducción,
comunicación pública, puesta a disposición y distribución, y los derechos morales
de paternidad e ineditud, de los que es titular el señor Carlos Alberto Massó
Vasco.

Tampoco es cierto que el señor Massó quería solucionar las diferencias surgidas,
pues simplemente quería que se le pagara una suma de dinero por una supuesta
usurpación de propiedad intelectual y violación del derecho moral.

Finalmente, señala que no es cierto que las acciones desplegadas por la


demandada han generado perjuicios al demandante que deban ser
indemnizados”.

Ahora bien, el demandado presentó dentro del traslado respectivo una objeción
razonada al juramento estimatorio que especificaba la inexactitud de la
estimación, por lo tanto, este no fue tomado como prueba del monto que se
pretendía, razón por la cual el Despacho entró a valorar las pruebas obrantes en
el expediente para cuantificar al daño.

Después de adelantar toda la etapa probatoria se determinó que, entre el valor


probado, y la suma originalmente estimada -por el demandante- había una
diferencia abismal, en consecuencia, al exceder la cantidad estimada en más del
50 % a la que se encontró probada, se condenó al demandante a pagar el 10 %
de la diferencia, es decir la suma de $43’296.912 m/cte.

Después de analizar el presente caso responda las siguientes preguntas:

1. ¿Cómo se calculó la indemnización en este caso?


2. ¿Qué incidencia tuvo la aplicación del juramento estimatorio en el caso?
ABC

Glosario

Daño: es el perjuicio o menoscabo que sufre el patrimonio o los intereses de un


agente económico.

Daño emergente: hace referencia a la pérdida real, inmediata, constatable y


verificable que se produce en los bienes o derechos del perjudicado.

Demostración: razonamiento, acción o cosa con que se demuestra que


determinada cosa es verdad.

Derecho de autor: es un conjunto de normas jurídicas y principios que afirman


los derechos morales y patrimoniales que la ley concede a los autores, por el
simple hecho de la creación de una obra literaria, artística, musical, científica o
didáctica, esté publicada o inédita.

Estimación: aprecio y valor que se da y en que se tasa y considera algo.

Indemnización: compensación económica destinada a reparar, garantizando su


indemnidad, al afectado por la privación (expropiación) de un bien o derecho, por
un perjuicio provocado por un tercero (en concepto de responsabilidad) o por un
gasto en que ha incurrido por razón ajena a su voluntad.

Infracción: acción con la que se infringe una ley, norma o pacto.

Jurisprudencia: conjunto de las sentencias, decisiones o fallos dictados por los


tribunales de justicia o las autoridades gubernativas.

Litigio: enfrentamiento o disputa entre dos personas o partes en un juicio.

Lucro cesante: es una forma de daño patrimonial que consiste en la pérdida de


una ganancia legítima o de una utilidad económica por parte de la víctima o sus
familiares como consecuencia del daño, y que ésta no se habría producido si el
evento dañino no se hubiera verificado.

Marca: es una identificación comercial primordial o el conjunto de varios


identificadores con los que se relaciona y ofrece un producto o servicio en el
mercado.
Patente: es un conjunto de derechos exclusivos concedidos por un Estado al
inventor de un nuevo producto o tecnología, susceptibles de ser explotados
comercialmente por un período limitado de tiempo, a cambio de la divulgación
de la invención.

Perjuicio: daño moral o material que una persona o una cosa causa en el valor
de algo o en la salud o el bienestar de alguien.
http//:

Bibliografía

Rengifo & Pombo (2015). Valuación de Activos Intangibles de Propiedad


Intelectual: Fundamentos económicos, jurídicos financieros y contables.

Pombo (2015). Estándares de valuación de activos intangibles de propiedad


intelectual.

Salinas (2007). Valoración de marcas. Revisión de enfoques, metodologías y


proveedores.

Frye, D. (2023). Where Do We Go From Here?


http://www.sfandllaw.com/Articles/Frye-Daubert-and-Where-Do-We-Go-From-
Here.shtml.

Boos, M. (2203) International Transfer Pricing: The Valuation of Intangible


Assets, Kluwer Law International, La Haya, Holanda.

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