La terapia breve ha ido tomando herramientas para llevar a cabo la intervención
cognitivo conductual con un enfoque centrado en soluciones, y esto ha sido posible ya que ambos enfoques coinciden en algunos elementos, sin dejar de lado que también difieren en otros, motivo por el cual se han visto buenos resultados en intervenciones donde se combinan, pero también han surgido algunos problemas en su aplicación. Considerando lo anterior, es importante mencionar que el eje central de esta combinación de enfoques es el análisis funcional, el cual es una serie de estrategias que de forma sistemática permite la toma de decisiones clínicas y terapéuticas, y dicho análisis hace especial hincapié en la importancia que tiene la investigación para poder comprender como funcionan y convergen los determinantes de la conducta, con el objetivo de poder realizar tratamientos que resulten efectivos en diversos comportamientos disfuncionales. De acuerdo con los autores, este análisis se ha definido como la identificación de las relaciones entre las características del comportamiento y eventos asociados; desde este enfoque, se considera que los problemas son situaciones que coinciden con eventos que permiten su ocurrencia, así como su duración e intensidad. Durante la intervención mediante el análisis funcional se intenta modificar las variables que influyen sobre dichos problemas. En este análisis funcional también se considera que la variables pueden modificarse y las relaciones entre las mismas son dinámicas, pudiendo incluso aparecer nuevas variables que determinen la variable de interés, además, se deben considerar variables de comportamiento, ambientales, fisiológicas, sociales y cognitivas (es decir, se considera el contexto amplio de la persona). De este modo, podemos decir que el análisis funcional tiene la intención de poner en evidencia cual es la secuencia mediante la que se da una conducta que se considera problemática y cuales son los procesos que preceden a dicha conducta. Es importante resaltar que dicho análisis funcional es diferente para cada persona y cada caso, aunque se tenga la misma conducta problemática que otros casos. Esta herramienta de la psicología clínica tiene sus bases epistemológicas en el conductismo y se centra en las contingencias ocurridas durante la primera sesión, tomando en cuenta el contexto de la persona, el ambiente y el clínico suele utilizar muy frecuentemente el moldeamiento, así como el reforzamiento natural. Diagnostico funcional Como ya se ha mencionado, el análisis funcional se basa en identificar las variables contextuales alineadas a la variable de interés, que en el caso de la terapia, será el problema o situación por el cual el paciente acude a consulta. Dado lo anterior, el modelo propone el empleo de la terapia breve cognitivo conductual centrada en soluciones, y fue el Dr. José Cruz Rodríguez Alcalá quien propuso los elementos que se deben considerar en dicho modelo. • Factores predisponentes: en estos aspectos se consideran las características de la personalidad, su historia, acceso a recursos, habilidades y otros elementos que lo pudieron haber puesto en una situación vulnerable para el problema que hoy le aqueja. Al ser un modelo de terapia breve, no se busca profundizar demasiado en al historia de la persona, pero si tomar en cuneta estos factores y experiencias previas.
• Factores desencadenantes: Se busca identificar los elementos que
permitieron el inicio y/o agravamiento del problema. Al inicio puede ser difícil identificarlos si el paciente no lo recuerda, pero el psicólogo clínico debe prestar atención para poder hacerlo.
• Factores de control: son aquellas situaciones en las que se manifiestan
actualmente los problemas que refiere el paciente. Para no confundirse con los factores desencadenantes, es importante saber que los factores de control se tratan de que, cuando, donde se agravan los síntomas, sin centrarse exactamente en cuando comenzaron dichos eventos.
• Situaciones problema: es necesario conocer los aspectos y variables
relevantes de las situaciones que se describen como problemáticas. Esto se logra conversando con el paciente y dejando que descriaba la situación.
• Factores de mantenimiento: son aquellos factores que hacen que la situación
problema siga ocurriendo, por lo que es importante conocerlos y describir la relación que tienen con el problema. Pueden ser pensamientos, creencias, cosas que ocurren en el ambiente, la influencia de otras personas, etc.
Cuadro social integrativo.
El cuadro secuencial integrativo, es conocido como E-O-R-C (E: estímulo antecedente; O: organismo: R: respuesta y C: consecuencias), e indica la forma en la que se va rastreando la información. A continuación pongo de ejemplo un cuadro social integrativo, tomado de la pagina de Unidad de Apoyo para el Aprendizaje de la UNAM, en colaboración con el SUAyED de la FES Iztacala. Conclusiones: Considero que la terapia breve centrada en soluciones, tiene un enfoque que en lo personal me agrada mucho, ya que si bien se interesa por conocer la historia del paciente, no se necesita profundizar tanto en ello, y se enfoca mucho más en buscar soluciones para las situaciones problemáticas actuales, a diferencia de otros enfoques donde la intervención se basa mucho en ahondar en detalles del pasado e historia de la persona, y pienso que si bien en algunos casos eso puede ser necesario, no en todos creo que deba ser así, y la terapia breve es una alternativa a mi parece muy funcional. Respecto al análisis funcional, me parece una herramienta muy valiosa, pues considera las factores necesarios para entender la conducta o las situaciones problemas por los que una persona asiste a consulta. Pienso que si es una estrategia muy valiosa, pero también una herramienta que necesita mucha práctica, ya que como terapeutas debemos entrenarnos bastante bien para lograr identificar los factores que conforman el análisis. Considero que el cuadro social integrativo, es una forma muy visual de poder integrar la información de las situaciones problema y todos los factores que han permitido su desarrollo y funcionamiento. Referencias bibliográficas:
González, K. (2018). Diseño de Análisis Funcional. Unidades de Apoyo para el
Aprendizaje. CUAED/FES Iztacala-UNAM. Consultado el 13 septiembre de 2020 de http://132.248.48.64/repositorio/moodle/pluginfile.php/1739/mod_resource/cont ent/4/contenido/index.html González Ramírez, M. T., y Juárez Carrillo, L. L. (2016). Análisis funcional en terapia breve cognitivo-conductual centrada en soluciones. Revista Electrónica de Psicología Iztacala, 20(2).
Terapia cognitivo-conductual (TCC) y terapia dialéctico-conductual (TDC): Cómo la TCC, la TDC y la ACT pueden ayudarle a superar la ansiedad, la depresión, y los TOCS
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