BIBLIOTECA

escuela no rm al n ° 2
" 1 A R I A M 0 ACOSTA"

EL DÓNDE,
CUÁNDO
Y C Ó M O DE L
ORIGEN
DEL HOMBRE
FER N A N D O RAMÍREZ ROZZI

EDICIONES COLINDE
 Ramírez Rozzi, Fernando
El dónde, cuándo y cóm o del origen del hom bre. - 1 a.
ed. 10 reim p. - Buenos A ire s : C olihue, 2005.
152 p . ; 20x12 cm .- (Sin careta) A Clara, Camila y María Paz.
ISBN 950-581-679-0 Inexplicablemente ya las amaba
sin conocerlas.
1. Razas humanas. Etnología I. Título
CDD 572

DIRECTORES DE COLECCIÓN:
Dr. Gabriel M. Bilmes y Lie. Horacio L. Tignanelli

DISEÑO DE COLECCIÓN, TAPA E INTERIORES:

Julieta Ayllón, María Julia Colombo y Juana María Irigoyen

FONDO DE TAPA:
Lie. Pedro Luis Cazes Camarero

DIBUJOS Y VIÑETAS INTERIORES:

Didi Rodríguez

CARICATURA AUTOR:
Carlos Panichelli

ILUSTRACIÓN DE TAPA: "M ujer peinándose", de Pablo Picasso,

junio de 1940. Óleo sobre tela.

COMPOSICIÓN V ARMADO: Silvia O jeda y M a rc e lo C o lo m b in i

1a edición / 1a reimpresión

I.S.B.N. 950-581-679-0
§ Ediciones Colihue S.R.L.
Av. Díaz Vélez 5125 (C1405DCG)
Buenos Aires - Argentina
www.colihue.com.ar - ecolihue@colihue.com.ar
Hecho el depósito que marca la Ley 11.723
Impreso en la Argentina - Printed in Argentina
En todos los libros que he leído, los autores manifiestan
que es difícil agradecer a todos los que tuvieron que ver
con su concreción. Me parecía un poco exagerado, pero
ahora me doy cuenta de cuán cierto es.
Nombrar a toda la gente a la cual le estoy agradecido
porque de una manera u otra me posibilitaron escribir
este libro sería muy largo y seguro me olvidaré de
muchos.
Quiero agradecer a Gabriel Bilmes por haber hecho su
trabajo y por enseñarme a expresar las ideas de forma
clara para que todo el mundo (eso espero)
las comprenda.
A Claudia Tambussi por comentarme los proyectos de
difusión de la investigación y empujarme a escribirlo.
A Choni, que luego de leer la primera y más pesada
versión del manuscrito, se lim itó a regalarme un
diccionario de sinónimos.
A María Elena y Fernando, mis "viejos", por alentarme
constantemente a hacer lo que quería y por alegrarse
por cada cosa que hice.
A Inés, por soportar a Lucy y sus "fam iliares".
 i n t r o d u c c i ó n

a ^ g u n t a ¿cuál es el origen del hombre? debe haber

,m e c id o , me atrevo a decir, con el hombre mismo. En
“ documentos que provienen de las mas remotas y de
las más diversas civilizaciones, este interrogante ocupa
un lugar fundamental y hoy en día sigue dando vueltas
en la cabeza de todos nosotros.
Mitos leyendas y otros tipos de relatos que hoy
pódriámos llamar fantásticos, explicaron a través de los
siqlos el origen del hombre. Pero estas explicaciones
siempre dejaron insatisfechos a más de uno. En el sig
XVII comenzaron a buscarse respuestas sin recurrir
seres sobrenaturales, explicaciones basadas en leyes
naturales fundadas en los hechos y fenómenos
observados. Lo que hoy llamamos ciencia estaba, de es

9
 forma, naciendo. Son estas respuestas, las dadas por la C A P í T U L o
ciencia, las que trataremos en este libro. Aquellas que
explican el origen del hombre a partir de procesos i
naturales. La disciplina científica que estudia el oriqen
del hombre es la PALEONTOLOGÍA HUMANA O
PALEOANTROPOLOGÍA.
Para comprender el origen del hombre, es necesario
primero conocer la teoría que explica cómo cambian los
seres vivos a través del tiempo: LA TEORÍA DE LA
EVOLUCION BIOLÓGICA. Es con ese marco de referencia ¿EL HOMBRE
que se ha podido entender cómo y por qué, a lo larqo 1 VIENE DEL MONO?
de millones de años, se produce una transformación,
una evolución de un grupo particular de monos qué
desemboca, siguiendo un camino azaroso pero no por
eso inexplicable, en el hombre.
Un poco de teoría

i'.ira entender el cómo y el porqué del origen del

hombre, es necesario tener claro de qué manera se
produce la evolución de los seres vivos.
I teoría cuya contribución es fundam ental en la visión
nue hoy tenemos sobre la vida en la Tierra fue
enunciada por Charles Darwin (1809-1882) en 1859.
Propone que los seres vivos cambian gradualmente a
través del tiem po debido a la influencia del medio
ambiente. La acción de los factores externos determina
que un grupo de organismos con ciertas características
tenga mayor descendencia que otros con otras
características. Este proceso es azaroso y no se puede
predecir el curso de los cambios, ni el resultado final de

10 11
 la evolución. A este proceso se lo llama SELECCIÓN
NATURAL.
Para comprender la evolución, es necesario tener
presente además que en todo grupo de organismos h
diferencias entre sus individuos. La teoría de Darwin
su enunciación original no explicaba de forma
satisfactoria el origen de esta variación.
Los estudios de genética demostraron que las
características de un organismo están determinadas p<
eSt° S SOn parte de una molécula llamada j
ACIDO DESOXIRRIBONUCLEICO (ADN) que forma los
CROMOSOMAS, que se hallan en el núcleo de las cé ll
de todo organismo vivo. El cambio en la estructura de
un gen es lo que se denomina una mutación.
Las mutaciones pueden ser de tres tipos: las que dan
lugar a una novedad, como la aparición o desapariciói
de una estructura, las que modifican una estructura y¡
existente, o las que son neutras, es decir las que no
cambian nada. Lo importante es entender que las
mutaciones se producen al azar y explican la diversid
de los seres vivos.
La complementación de la teoría darwiniana con la
teoría genética se expresa en lo que se conoce
actualmente como SÍNTESIS MODERNA DE LA
EVOLUCION o NEODARWINISMO, que podría resumirse
de la siguiente forma:
12
Las m utaciones en los genes producen
variaciones al azar en los seres vivos. La
selección natural actúa sobre estas
variaciones haciendo que los individuos con
c a ra cte rístic a s más adaptadas al medio
ambiente dejen mayor descendencia.
El hombre es un primate
Hablar del hombre no es más que hablar de una especie
do PRIMATES. Los primates son los monos, o sea que el
hombre es un mono más. Esto significa que el hombre no
os visto por la ciencia en general, y la Teoría de la
Evolución en particular, como una especie peculiar sino
que se lo trata igual que a cualquier otra especie de seres
vivos. Las leyes naturales que rigieron la evolución de
cualquier ser vivo fueron las mismas que determinaron
que un mono que vivía hace millones de años se
transformara y diera origen a otro mono, el hombre.
Así y todo, la inclusión del hombre junto con los monos
en el grupo de los primates no fue siempre aceptada y
aún hoy hay quienes rechazan este agrupamiento.
los estudios de anatomía primero y por últim o los de
genética demostraron y fueron confirmando que el
13
 que todos los primates comparten una característica
común, por ejemplo que no tienen garras, ya que
algunos monos las poseen. La mejor forma de definir un
primate, por lo tanto, no es señalando la presencia de
una característica dada, si no por medio de aspectos más
generales (llamados tendencias) que en ellos
observamos. Hay tres tendencias que caracterizan a un
primate.
La primera es la capacidad de asir los objetos. Esto se
traduce en la presencia de uñas, el desarrollo de yemas
muy sensibles al tacto en los dedos y la movilidad
creciente de cada dedo.
La segunda tendencia es el desarrollo de lo visual en
desmedro del olfato, dado por el achicamiento del
hocico, el aplanamiento de la faz, la disposición anterior
de los ojos y el desarrollo en el cerebro del córtex y del
lóbulo occipital.
La tercera tendencia es la complejización de la
organización social. Esta tendencia es fácil de observar
en el hombre actual pero es mucho más difícil de
identificar a partir de los restos fósiles.
S S S ales v m E0UEÑOYELMÁS GRANDE El conjunto de los primates puede ser dividido en
subgrupos según sus características, siguiendo las
categorías jerárquicas usadas en la clasificación
biológica.
¿Qué es un primate?
En el cuadro siguiente se puede ver esquemáticamente
esta clasificación:

vuelve algo complicado. N o^odem oTdecir

15

PRIMATES
PROSIMIOS SIMIOS
MONOS DE AMÉRICA MONOS DE EURASIA
(Tití) Y ÁFRICA
CERCOPITECIDOS
(Mandril, Macaco, Babuino)
PÓNGIDOS HOMINIDOS
(Gorila, Chimpancé, Orangután)
El grupo de los Hominoideos comprende los
HOMÍNIDOS, los HYLOBÁTIDOS y los PÓNGIDOS o
GRANDES MONOS. Los hylobátidos son los monos
gibones y los siamang que habitan en el sudeste asiático.
Los grandes monos son el chimpancé, el bonobo (otro
tipo de chimpancé), el gorila y el orangután. El
orangután habita en Borneo y Sumatra (Asia) mientras
que el chimpancé, el bonobo y el gorila lo hacen en
África ecuatorial.
b ib l io t e c a
ESCUELA NORMAI N° 2
ÍKACOSTA'
BONOBO
(Hombre)
ORANGUTAN
Algunos científicos consideran que los homínidos están
representados en la actualidad solo por el hombre.
Otros reagrupan bajo el nombre de homínidos al
hombre, al gorila y al chimpancé. Esto se debe a que
comparten muchas características, tanto anatómicas
como genéticas; ¡el hombre se diferencia del chimpancé
en solo un 1% de su material genético!
17
 BIBLIOTECA

BONOBO
CHIMPANCE

GORILA

El grupo de los Hominoideos comprende los

HOMÍNIDOS, los HYLOBÁTIDOS y los PÓNGIDOS o
Algunos científicos consideran que los homínidos están
GRANDES MONOS. Los hylobátidos son los monos
representados en la actualidad solo por el hombre.
gibones y los siamang que habitan en el sudeste asiático.
Otros reagrupan bajo el nombre de homínidos al
Los grandes monos son el chimpancé, el bonobo (otro
hombre, al gorila y al chimpancé. Esto se debe a que
tipo de chimpancé), el gorila y el orangután. El
comparten muchas características, tanto anatómicas
orangután habita en Borneo y Sumatra (Asia) mientras
como genéticas; ¡el hombre se diferencia del chimpancé
que el chimpancé, el bonobo y el gorila lo hacen en
África ecuatorial. en solo un 1% de su material genético!

16
Esta estrecha sim ilitud resulta de compartir un ancestro
común cercano. Que los hylobátidos se reagrupen con
los grandes monos y el hombre se debe a que todos ellos
comparten un antepasado común pero un poco más
lejano en el tiempo. Y así sucesivamente, llegamos de
esta forma a un grupo de individuos que vivió hace 70
millones de años, que es el ancestro común de todos los
primates.

Los homínidos

El único representante actual de los homínidos es el

hombre. Este se diferencia de los otros hominoideos por
presentar caninos pequeños, anchos premolares, muela
de juicio reducida, un mentón, una cara corta, un cráneo CHIMPANCÉ HOMBRE ACTUAL
redondeado, dedos de la mano cortos y delgados, un
Las características principales que separan a los
pulgar en posición extremadamente opuesta a los otros
homínidos de otros grupos de primates son
dedos y una serie de características en relación a la
su adaptación a la marcha bípeda y la morfología
marcha bípeda (sobre dos miembros). El largo relativo
de los dientes y del cráneo.
de los miembros anteriores a los miembros posteriores
permite también diferenciar al hombre actual de los
otros hominoideos. Comparados con el hombre actual,
los grandes monos
Los australopitecos
presentan una caja torácica
más grande y aplanada,
m iem bros posteriores Bajo el nombre de homínidos se agrupan también
más cortos y miembros formas extinguidas, como las especies de hombre fósil
anteriores más largos. y los australopitecos, grupo con características cercanas
a las del hombre, pero que conserva rasgos que
recuerdan a los grandes monos africanos.

18
Dentro de la historia de ia vida sobre la Tierra, los
homínidos son bastante recientes: aparecen en el
Plioceno, período geológico que se extiende entre
5 y 1,8 millones de años.

AÑOS
o

10.000

1.800.000

5.000.000

Los restos más antiguos de australopitecos que se han

encontrado han sido datados en 4,2 millones de años.
Entre esta época y 2,8 millones de años, se identifican
tres especies distintas: australopitecos anamensis,
australopitecos barehlgazhali y australopitecos
afarensis. Los restos de estas especies fueron
encontrados en Chad y principalmente en África
Oriental: Etiopía, Kenia y Tanzania.
PLANO DE ÁFRICA.

20 21
La especie más conocida de estas tres y con una mayor
I
dispersión espacial y temporal es el australopitecos
afarensis. A esta especie pertenecen los restos de un
esqueleto parcial denominado Lucy. Lucy es un individuo
que vivió hace más de 3 000 000 de años en Etiopía. El
nombre dado a estos restos, atribuidos a una hembra, se
debe a que sus descubridores pasaban los días de
campaña escuchando el tema de los Beatles "Lucy in the
sky w ith diamonds". La alegría del descubrimiento fue I
descripta detalladamente por Donald Johanson en su
libro Lucy; ¡y no era para menos! Era la primera vez que
se descubría un esqueleto tan completo, más del 40%
del cuerpo, de un australopiteco.

Historia de un encuentro

Durante muchos años se consideró al australopitecos

ESQUELETO DEL AUSTRALOPITECOS
AFARESIS "LUCY".
RECONSTRUCCIÓN DE "LUCY".
afarensis como la única especie de homínido que existió
entre los 4 y 2,8 millones de años atrás, y, por lo tanto,
se la tomaba como la especie ancestra de todos los
homínidos posteriores. O sea, el
ancestro del hombre.
En 1965, el paleontólogo
norteamericano B. Patterson se
dirigía a Kenia jun to con tres
estudiantes para realizar
estudios de campo. Su
interés era la fauna del
Mioceno, período geológico

22 23
 anterior al Plioceno. A su llegada a Kenia se entrevistó
con Louis Leakey (1903-1972), quien le indicó cuáles erai
los sitios que él podía visitar para buscar fósiles.
Patterson no buscaba homínidos; de haber sido así
seguramente no hubiera obtenido el permiso para
realizar estudios de campo en Kenia donde L. Leakey :
ejercía un m onopolio total. Los sitios que le fueron
asignados se hallaban al oeste del Lago Turkana.
Durante días prospectaron los sitios que se le habían
indicado, con escasos hallazgos (¿sabía acaso L. Leakey
que los sitios que él había asignado a Patterson no eran
muy interesantes?). Un domingo, día de descanso,
Patterson y los tres estudiantes deciden hacer un paseo
en dirección al lago. Luego de caminar algunas horas
descubren un valle que llama su atención. Deciden
entrar en él y recorrerlo. Eran alrededor de las cuatro di
la tarde, momento en que el sol del ecuador africano I
golpea con todas sus fuerzas. En África ecuatorial, las
salidas al campo en busca de fósiles se hacen temprano
por la mañana y al atardecer, pero nunca alrededor del
mediodía ya que el sol es aplastante, no permite ver
nada, pensar se hace difícil y las reacciones son lentas, i
En el momento menos indicado del día, Patterson y sus
estudiantes se hallaban en este valle. Había muchos
huesos. Patterson se inclina, recoge uno, lo mete en su I
bolsillo y sigue caminando. Trescientos metros adelante
y varios minutos después se detiene bruscamente y retir
apresuradamente el hueso que había guardado en su
bolsillo. Era como si todo ese tiem po transcurrido desde
la recolección hasta que se detuvo hubiera sido
necesario para que el cerebro, atacado por el sol
24
ecuatorial, procesara la información que se había
impregnado en la retina y que lentamente le iba
llegando. Al retirar el hueso de su bolsillo Patterson ya
sabía casi con certeza qué era lo que tenía y lo confirmó
al verlo nuevamente. ¡Lo que había recogido era parte
del húmero de un homínido! Tal vez había más restos,
pero, ¿cuál era el lugar exacto donde el hueso había
sido recolectado? Al térm ino del día tenían además del
húmero el fragm ento de una tibia.
De regreso a Nairobi, le mostraron su hallazgo a
Leakey, quien pareció manifestarse no muy contento,
ya que en teoría el grupo "no debía encontrar
homínidos".
De esta forma Patterson y los estudiantes habían
descubierto el sitio paleontológico de Kanapoi.
Los restos encontrados junto a otros hallados también
en Kenia fueron atribuidos a una especie distinta a Lucy:
el australopitecos anamensis que habría existido
alrededor de hace 4 000 000 de años y que sería la
especie de homínido más antigua.
Si bien no se conoce aún cómo era el tip o de movilidad
de estas dos especies, en base a los restos de los
miembros, se puede precisar que los australopitecos de
hace 4 millones de años podían desplazarse en forma
bípeda.
Una de estas dos especies de australopitecos dio origen
a los homínidos posteriores, pero no se sabe aún cuál de
ellas fue. Sin embargo, es cada vez más aceptado que el
australopitecos anamensis es el ancestro más antiguo
de los homínidos.
25

Los últimos australopitecos
Hace 2,8 millones de años atrás, nuevas especies de
australopitecos hacen su aparición. Suelen clasificarse en
dos tipos: las llamadas gráciles y las robustas. La
diferencia entre australopitecos robustos y gráciles haca
referencia solamente al desarrollo del aparato
masticador y no, como se creyó durante mucho tie m p o !
a una diferencia en peso o en tamaño.
CRÁNEO DE UN AUSTRALOPITECOS AFRICANUS (GRÁCIL).
En los australopitecos gráciles, la anatomía de los
dientes difiere poco de la de los grandes monos, excepto
que el esmalte dentario es espeso. Las proporciones de
las distintas partes del cráneo son más próximas a las de
los grandes monos que a las del hombre moderno, con
una faz ancha y un cerebro relativamente pequeño. Sin
embargo, el hocico es más corto y el foramen magnum
(agujero en el cráneo por donde pasa la médula espinal)
26
está ubicado en la base del cráneo. Varias características
de los miembros recuerdan las de los grandes monos, lo
que induce a pensar que otros tipos de locomoción
acompañaban al bipedismo. El régimen alimenticio
debió haber sido de tip o frugívoro incluyendo también
elementos coriáceos.
En los australopitecos robustos, la faz es más ancha y
presenta un aplanam iento anterior. Esto es acompañado
por una marcada reducción de los dientes anteriores
(incisivos y caninos) y un gran desarrollo en tamaño de
los dientes posteriores (premolares y molares), que
muestran un esmalte dentario hiper-espeso. Estas
características más el desarrollo de grandes crestas en el
cráneo y una mandíbula robusta indican una masticación
poderosa que se habría desarrollado como una
adaptación a una alimentación herbívora y coriácea. Es
muy probable que los australopitecos robustos se hayan
desarrollado como una adaptación a un medio ambiente
seco y abierto de tip o sabana. El origen de los
australopitecos robustos no es del todo claro.
CRÁNEO DE UN AUSTRALOPITHECUS BOISEI (ROBUSTO).
21

RECONSTRUCCIÓN DE UN GRUPO DE AUSTRALOPITECOS ROBUSTOS.
Restos de estas especies han sido hallados en África
Oriental y en África del Sur. En África del Sur encontram.
al Australopitecus africanus. En África Oriental, hallam
al Australopitecus garhi y Australopitecus aethiopicuí
Estas especies se extinguen hace alrededor de 2 millones
de años atrás. A partir de este momento, solo se han
encontrado restos de los robustos, una en África del Sur
(Australopitecus robustus) y otra en África Oriental
(Australopitecus boisei).
Los últimos australopitecos se extinguieron hace
alrededor de 1 millón de años.
28
El DÓNDE DEL
ORIGEN DEL HOMBRE
La respuesta a la pregunta del dónde del origen del
hom bre ha ido cambiando a medida que se fueron
realizando los descubrimientos de homínidos fósiles.
Un aspecto llamativo es que los hallazgos de restos
fósiles han sido realizados en sentido inverso a la
evolución de los homínidos: las especies más antiguas
son las que se han encontrado más recientemente y las
más parecidas al hombre actual fueron las primeras en
ser descubiertas.
Otra cuestión a tener en cuenta, para responder a la
pregunta del dónde, es que los estudios sobre la
evolución de los homínidos comportan una carga
subjetiva mayor que cualquier otro tema de la ciencia,
subjetividad que llevó a graves excentricidades. Además,
la paleoantropología fue pasando por modas que
29
 reflejan en definitiva los intereses particulares de la
sociedad en un momento dado.
Por lo tanto, la evidencia tuvo que ir imponiéndose no solo
a los datos previos sino también, y más difícil aún, a ideas
socialmente aceptadas que no tenían ningún fundamento
científico. Estas, que aún hoyjuegan un rol importante,
pesaron mucho más a fines del siglo pasado, momento en
que la paleoantropología nacía como ciencia, como veremo!
a continuación.
¿Europa fue la cuna del hombre?
A fines del siglo XIX, ya se había impuesto la idea de
que el hombre y el mono tenían un ancestro común
cercano. Pero, ¿dónde había ocurrido el origen del
hombre? Como veremos, la respuesta fue y tenía que
ser: Europa.
En esa época se encontraron vestigios que probaban una
antigüedad im portante del hombre en esa región del
planeta. En 1856, entre los desechos de una cantera en
el valle del río Neander, en Alemania, un maestro
encontró unos restos humanos. En pleno debate
desatado por la publicación del libro Sobre el origen de
las especies (1859) de Charles Darwin, el británico
W. King (1809-1886) asigna estos restos a una nueva
especie de hombre, dándole el nombre de Homo
neandertalensls.
30
Si bien ciertos investigadores aceptaron la existencia del
Hombre de neándertal, la comunidad científica en
general no estaba aún preparada para aceptar un
hombre fósil con características distintas a las del hombre
moderno. Este rechazo dio origen a una serie de
interpretaciones y/o justificaciones de los rasgos del
hombre del valle del Neander. Así, los restos fueron
indistintamente atribuidos a un soldado cosaco muerto
en 1814 o a un individuo que sufrió de raquitismo en su
infancia y de artritis en su adultez.
11 descubrimiento, a fines del siglo XIX y a principios
del XX, de nuevos restos con m orfología similar al
Hombre de neándertal en Bélgica, Yugoslavia y
principalm ente Francia descartó la interpretación de
seres patológicos y confirm ó que estos individuos
pertenecían a una "raza" o especie desaparecida. Sin
embargo, el parentesco con el hombre moderno seguía
siendo difícilm ente aceptado ya que aquellos que
describían estos restos, como el francés Marcelin Boule
(1861-1942), los presentaban como seres brutos,
bestiales y miserables. Esta descripción era ampliamente
compartida en la sociedad de esa época.
Lamentablemente, esta imagen totalmente falsa del hombre
prehistórico en general y del de neándertal en particular
perdura todavía en el imaginario colectivo e influyó en la
comunidad científica hasta 1950.
Todavía hoy podemos
encontrar imágenes de un
hombre prehistórico
31
 p,el de osa llevando en ™ mismas en una clasificación jerárquica. Así,
mujer tomada de los pelos'™ 3rrdStmdo por el Plso a ™ la raza negra era considerada como inferior
y la más cercana al ancestro común con
el mono.
La raza amarilla era vista con
mayor benevolencia por parte de
los europeos, pero igual se la
ubicaba por debajo de la raza blanca, la raza superior.
De esta forma, los investigadores de esa época, que eran casi
en su totalidad europeos, razonaban lo siguiente: siendo los
europeos de raza blanca, la raza superior, era inaceptable que
otra raza europea presentara los rasgos bestiales atribuidos a
los neandertales. Por lo tanto se trataba, o de casos
patológicos, o no tenían nada que
ver con el hombre moderno.
Al mismo tiem po que se iban encontrando los restos de
los neandertales, iban apareciendo en Europa otros
vestigios fósiles de hombres que no presentaban la
"bestialidad" de los neandertales. Estos hombres fósiles
mostraban una morfología bastante similar a la del
hombre moderno y podían entonces ser aceptados como
ancestros del hombre.
Sin embargo, hacia fines del siglo pasado, la teoría que
proponía que el origen del hombre tuvo lugar en
Europa empezó a tener problemas. Restos humanos
51 « S s “ "EÁ* £,TAl ro“ ™ * « libro | fósiles empezaron a encontrarse también en otros
continentes, al mismo tiem po que algunos naturalistas

^sssssssssssr
como Ernst Haeckel (1834-1919) sostenían que el mono-
hombre había vivido en un continente llamado Lemuria
que se extendía de África a Indonesia.

32
33
 teoría fue recibida con gran escepticismo y posteriormente
El médico holandés Eugéne Dubois (1858-1940), que
se demostraría que era incorrecta.
había leído las obras de Haeckel, se enrola en 1887 en el
cuerpo médico del Ejército de las Indias Holandesas La comunidad científica de esa época no aceptó que los
Orientales, para ir a Indonesia y buscar este hombre fósil hallazgos realizados por Dubois y Ameghino
¡Y lo encontró! correspondieran a hombres fósiles, descartó sus teorías y
mantuvo la idea de que el hombre había tenido su
Entre 1890 y 1891, Dubois halla en la isla de Java restos
origen en Europa.
humanos que atribuye a un hombre fósil. Se trataba de la
parte superior de un cráneo mucho más aplanado que el
del hombre actual y de un fém ur apenas distinguible del
fém ur del hombre moderno. Dubois bautizó a este
Un fraude histórico
hombre fósil con el nombre de Pithecanthropus erectus, el
mono-hombre deposición erguida.
A comienzos del siglo XX, Alemania, Bélgica y Francia
A su regreso a Europa en 1895, Dubois presenta sus
tenían restos fósiles encontrados en sus territorios,
descubrimientos en congresos y reuniones científicas, pero mientras que la ausencia de los mismos en Inglaterra
éstos son descalificados con el argumento de que los restos
provocaba un cierto malestar... en los ingleses. En
encontrados pertenecían a un individuo patológico o a un
diciembre de 1912, en una reunión de la Sociedad
tonto. Los relacionaban con casos estudiados de retrasados Geológica de Gran Bretaña, un hallazgo importantísimo
mentales cuya capacidad craneana era similar a la del
lúe presentado por Charles Dawson (1846-1916), su
Pithecanthropus.
descubridor, y A. Smith Woodward (1864-1944), el
Mientras tanto en América, más particularmente en científico encargado de estudiar los restos. Se trataba del
Argentina, Florentino Ameghino (1853-1911) comienza a descubrimiento de restos fósiles humanos en la localidad
interesarse por el origen del hombre. Restos humanos de Piltdown, que fueron bautizados con el nombre de
encontrados en la región pampeana, que consideró muy Eoanthropus dawsoni, más popularmente conocido
antiguos, lo llevaron a sugerir que el origen del hombre como el Hombre de Piltdown.
había tenido lugar en las pampas argentinas. Estos
I n 1911, Dawson, que trabajaba en la región de Sussex
vestigios presentaban una anatomía similar a la del
en el sur de Inglaterra, encontró en Piltdown la parte
hombre actual, pero Ameghino interpreta erróneamente
superior de un cráneo y parte de la mitad derecha de
la antigüedad de los depósitos en donde fueron
una mandíbula que conservaba todavía dos dientes.
encontrados y por lo tanto la edad de los restos. Su
Dawson llevó los restos al geólogo del British Museum

34 35
 A. Smith Woodward, quien
considerando ambos restos como
pertenecientes a un mismo individuo
realizó una reconstrucción del
cráneo que fue presentado en la
famosa reunión de la Sociedad
Geológica.
Al año siguiente, Dawson y Woodward
volvieron al sitio acompañados por el
estudiante Pierre Teilhardde Chardin
(1881-1955), futuro jesuíta y
paleontólogo. En el lugar encontraron restos de
mastodontes y otros animales extinguidos, lo que les HOMBRE DE PILTDOWN.
permitía inferir que la antigüedad del hombre de Piltdoi
era de 250.000 a 500.000 años.
11 hombre de Piltdown se caracterizaba por un cráneo de
En 1913, Dawson encuentra en el mismo sitio huesos tipo humano, o sea presentaba una gran capacidad
nasales y Teilhard de Chardin un canino muy gastado. Es craneana y una anatomía cerebral semejante a la del
mismo año, Dawson halla un hueso frontal en otro sitia hombre actual, mientras que la mandíbula tenía
cercano a Piltdown, y en 1915, da a conocer la existencia taracteres simiescos. Basándose en estas evidencias, el
de un tercer sitio, también cercano a Piltdown, donde i antropólogo británico Arthur Keith (1866-1955) propuso
había recogido las partes frontales y occipitales de un I que un resto fósil solo debía considerarse humano
cráneo. Este descubrimiento indicaba la presencia de un cuando su capacidad craneana superara los 750 cm3. De
segundo individuo, lo que dispersó totalm ente las duda) esta forma y durante 30 años, el hombre de Piltdown
que algunos científicos, como
fue tom ado como el fósil de referencia para aceptar o
M. Boule, tenían acerca de la real existencia de esta espel rechazar cualquier otro fósil en la línea que condujo al
fósil. Dawson muere en 1916 y aunque Woodward realiz hombre.
posteriores excavaciones en la región nunca más fueron
encontrados restos en Piltdown. En los últimos años de la década de 1940, el hombre de
Piltdown empezó a tener problemas. Gracias al impulso
dado a los estudios de la radioactividad durante la
segunda guerra mundial, las técnicas de datación por

37
medio de la desintegración de ciertos compuestos en 1
otros tuvieron un gran avance. Estas técnicas permitían
por primera vez dar edades precisas a los fósiles (edade
absolutas). Un grupo de investigadores norteamericano
trabajando en técnicas de datación absoluta estudió loj
restos provenientes de Piltdown. Sus primeros resultadc
sugerían que este fósil no era tan antiguo como se habí
creído hasta entonces. En vez de una antigüedad de
250.000 a 500.000 años, como se le había atribuido, su;
edad no pasaba en el mejor de los casos de los 50.000 j
años.
Pero las cosas no term inaron ahí. En ju lio de 1953,
durante un congreso sobre el hombre prim itivo en
África, sus participantes visitan el Museo de Historia
Natural de Londres y tienen la posibilidad de observar
los restos de Piltdown. Entre los visitantes se encuentra I
Joseph Weiner(1915-1982), quien queda tan
impresionado por el hombre de Piltdown que no puede
dorm ir durante varios días. Hay algo en esos restos que
no encaja. Se propone entonces analizarlos en
colaboración con WilfridLe Gros Clark (1895-1971) y
K. Oakley (1911-1981), investigadores de Oxford y del
Museo Británico, respectivamente.
Los análisis resultaron demoledores. En prim er lugar el
grado de desgaste de los molares era el mismo,
fenómeno totalm ente extraño ya que como dos molares
no hacen su erupción en el mismo momento, deben
presentar siempre desgastes distintos. Por otra parte los
exámenes químicos de los huesos demostraron que la j
mandíbula era reciente mientras que el cráneo era un
38
poco más viejo. Weiner y sus colaboradores descubren
,tdemás que los fósiles habían sido teñidos para que todos
parecieran provenir de un mismo sitio. Un análisis posterior
dr la mandíbula demostró que esta era de un orangután,
de ahí su aspecto simiesco. Finalmente se determinó que los
restos de mastodontes y rinocerontes "encontrados en^
Piltdown provenían de otra región de Inglaterra o de Túnez.
Así, en 1953 Weiner, Clark y Oakley
revelaron que el hombre de
Piltdown era un fraude,
,i tribuido por unanimidad a
( Dawson, el descubridor. Sin
embargo, lo bien montado del caso indica que el individuo
que lo preparó debió tener vastos conocimientos de
antropología, paleontología, geología y arqueología,
conocimientos que Dawson no poseía. Las dudas sobre
quién fue el responsable del fraude recayeron sobre varias
personalidades científicas. Uno de los inculpados fue P.
Tcilhard de Chardin ya que él fue el único, además de
Dawson, en encontrar un resto. Sin embargo, quien figura
,>n el centro de las sospechas es el antropólogo Arthur Keith,
j quien durante años atacó crudamente los descubrimientos
de los australopitecos realizados en África, probablemente
con la intención de imponer el fraude. La polémica sigue
abierta y es muy probable que nunca sepamos con certeza
quién o quiénes fueron responsables de tamaño engaño.
39

La respuesta viene de África
Mientras los restos de Piltdown captaban todo el interés
científico, nuevos descubrimientos eran realizados en Asia,
esta vez en China. Desde principios del siglo XX, científicos
europeos de paso por China estaban interesados por lo que
chinos llamaban "dientesde dragón", a los que atribuían
poderes curativos. El
interés de los europeos no era por su poder medicinal sino
porque estos dientes de dragón eran en realidad dientes y,
huesos fósiles molidos, que se podían
conseguir en las farmacias
antes de ser
triturados. De esta
forma, fueron
apareciendo dientes
de hombres fósiles.
El interés paleontológico se fue trasladando así al
extremo oriente. En 1927, el canadiense Davidson
(1884-1934) dirige las primeras excavaciones en el siti
de Zhoukoudien, cerca de Beijin, en China. El
descubrimiento de nuevos dientes cuyas características!
no eran ni las del hombre actual ni
la de los neandertales perm itieron proponer una nuevá
especie de hombre fósil. Así nacía el Sinanthropus u \
Hombre de Pekín. Para dar a conocer su descubrimient
y conseguir también más recursos para continuar su
campaña, Black recorre Europa y Norteamérica con una
cajita de latón atada a su malla de reloj. En ella llevaba
los dientes del Sinanthropus.
40
En 1934, luego de la muerte de Black, Franz Weidenreich
(1873-1948) lo reemplaza en la dirección de las
excavaciones, y a finales de la década del 30 se hablan
recolectado 14 cráneos, 11 mandíbulas, 147 dientes y
algunos huesos postcraneanos del Sinanthropus.
Afortunadamente, Weidenreich describió en una
monografía todos los restos del hombre de Pekín
encontrados hasta esa fecha, ya que desaparecieron
durante la segunda guerra mundial, a pesar de los vanos
esfuerzos realizados por el servicio geológico Chino y la
embajada norteamericana por salvarlos. En realidad no
sabemos si los restos del Sinanthropus fueron destruidos
por un bombardeo o si pasaron a ser "dientes de
dragón".
ti Pithecanthropus de Dubois y el Sinanthropus de Black
fueron posteriormente agrupados bajo el nombre de
Homo erectus.
Si bien el Homo erectus fue reconocido como hombre
fósil, su parentesco con el hombre actual no era
aceptado ya que todavía era visto como un ser muy
inferior y bestial. Sin embargo, el hallazgo de utensilios
asociados a los restos del Sinanthropus desafiaba esta
interpretación.
Desde la década de 1920 hasta un poco después de la
segunda guerra mundial, el continente asiático y en
especial Asia Central comenzó a ser considerada como la
región donde probablemente habría tenido origen la
humanidad. Mientras tanto, otros hallazgos también tenían
lugar en el extremo meridional de África.
41
En 1924, guiado por un cráneo fósil que le había mostrado pertenecía a un primate pero no a cualquier mono. Su
una alumna, Raymond Dart (1893-1988) se dirigía con su tamaño era mucho mayor que el de un chimpancé. Estimó
Ford T hacia las canteras de Taung, en el antiguo que el cerebro de ese primate debió ser abombado y muy
protectorado británico de Bechuanalandia (hoy Botswana), extendido hacia atrás, pero que no era lo suficientemente
junto con un amigo geólogo que conocía al administrador grande como para atribuirlo a un hombre primitivo.
de las mismas. Este último comentó al administrador el interf
Dart siguió revolviendo los bloques y encontró lo que
de Dart por los fósiles, logrando que le enviara enseguida po
buscaba, una roca con una cavidad donde el molde
tren una gran cantidad de bloques que presuntamente
endocraneano encajaba perfectamente. Probablemente,
contenían fósiles.
dentro de este bloque estaba conservada la cara del
Dart, mientras luchaba con el cuello de su camisa, ve "dueño" del cerebro que tenía entre sus manos. Estaba
llegar personal del ferrocarril trayendo las cajas con los tan ensimismado por estos descubrimientos que no se
bloques, justo el día que él era dio cuenta de que su esposa lo reclamaba
padrino de una boda que ademai insistentemente y sólo reaccionó cuando el novio mismo
se celebraba en su casa. le pidió que terminara de vestirse. Con muy pocas ganas,
Su curiosidad pudo participó de la ceremonia, y ni bien se fue el últim o
más que el invitado volvió a zambullirse en sus bloques con fósiles.
compromiso y se
Los siguientes setenta y tres días los dedicó a liberar del
abalanzó paravere
sedimento el hueso incluido en el bloque, a fuerza de
contenido de las
martillo, cincel y una aguja de tejer, hasta que el 23 de
^ cajas. Si bien la
diciembre de 1924 pudo por fin ver la cara del dueño
primera no lo
del cerebro enigmático. Se trataba de un niño con la
sorprendió en
dentición de leche y el primer molar permanente
absoluto ya que las cosas eran de poco interés para él, a
haciendo erupción. Nacía así el Niño de Taung.
abrir la segunda quedó pasmado. Tenía delante un mol
endocraneano (luego que un animal muere y su cerebr
se descompone, la cavidad craneana se llena de
sedimento que después de consolidarse forma un moldi
llamado endocraneano porque reproduce la morfología
externa del cerebro). Dart se dio cuenta, por los surcos
las circunvoluciones, que el molde endocraneano

43

DEL NIÑO DE TAUNG.
En 1925 Dart publica su descubrimiento en la prestigiosa
revista británica Nature. A diferencia de los hallazgos
anteriores, hombres con ciertas características que recordabai
al mono antropoide, el niño de Taung era un mono que se
asemejaba al hombre, ya que presentaba los rasgos generales!
de los grandes monos pero con ciertas características propias I
de los hombres, como la frente redondeada, un cráneo
elevado y un canino pequeño. Las características de este
cráneo llevaron a Dart a bautizar este fósil con un nuevo
nombre: Australopitecus africanus, el mono del sur africana
Dart se dio cuenta de que el australopitecos no era un mono
más, pertenecía a un grupo distinto, un grupo más
emparentado con el hombre que con el gorila y el
chimpancé. Pensó entonces que se trataba del eslabón
perdido, la forma de transición entre el hombre y su
44
antepasado simiesco. Por eso tituló su presentación en la
Exposición del Imperio Británico de 1925: África, cuna de la
humanidad.
l as interpretaciones de Dart fueron recibidas críticamente
por los anatomistas británicos Arthur Keith, ElliotSmith
(I87M 937) y ArthurSmith Woodward. Ellos rechazaron
duramente las afirmaciones de Dart en relación al parentesco
del australopitecos con el hombre como así su lugar
privilegiado en la galería de ancestros de la humanidad.
Según Keith, el Niño de Taung presentaba ciertos rasgos de
icfinamiento en la cara y en los dientes que no son comunes
en los grandes monos africanos; sin embargo, las
características craneanas a las que también alude Dart no
eran diferentes de las del chimpancé o gorila juvenil.
En 1932, después de presentar el cráneo en una reunión
científica, Dart vuelve a África del Sur mientras que su
esposa permanece en Londres para realizar moldes en
yeso del cráneo del Niño de Taung. Y aquí sucede un
hecho para cortar la respiración a cualquiera. Una vez
finalizados los moldes y mientras estaba la esposa de
Dart a punto de regresar a África, se reúne con el
anatomista Elliot Smith quien le devuelve el cráneo. El
gentleman británico acompaña a la esposa de Dart en
taxi hasta el hotel donde continúan conversando por un
momento. Luego de despedirse, la esposa de Dart se
instala en su habitación. En ese instante comprueba que
no tiene el cráneo... ¡lo había olvidado en el asiento del
taxi! Como era bastante tarde no se animaba a pedir
ayuda, pero sabiendo lo importante que era el cráneo
45
para su esposo llamó finalmente a Smith, quien aunque no
le daba mucho valor al fósil aceptó ayudarla. Se reunieron
en la casa del anatomista británico y comenzaron la
búsqueda del “niño". Fueron a la comisaría más cercana
donde el policía de turno pasó el mensaje a las otras
comisarías. Porsu parte, el taxista realizó varios viajes más cc
la caja en su asiento posterior y mucho después se dio cuent
del olvido de algún pasajero. Entregó la caja a las cuatro de
mañana en la comisaría de Fulham. Recién durante la manan
la policía se dio cuenta de que se trataba déla caja buscada
por la esposa de Dart, quien con el fósil a salvo pudo
finalmente tomar el tren que se dirigía al puerto de
Southampton luego de pasar una noche de infierno.
No todos los investigadores compartían
las críticas hacia los trabajos de
Dart. RobertBroom (1866-1951),
paleontólogo del Museo de Transvaal e
Pretoria, desvió su interés por los
reptiles mamiferoides sudafricanos
hacia el de los australopitecos y realizó
entre 1936 y 1949 importantes
descubrimientos en África del Sur.
Particularmente en tres sitios que son
actualmente unos de los más famosos en los que se haya
encontrado homínidos fósiles: Sterkfontein, Swartkransy
Kromdraai.
Broom se convirtió así en el defensor más ferviente de la
hipótesis del origen africano del hombre propuesta por
Dart. En 1950 publica el libro Encontrando el eslabón
perdido. En el mismo pone de manifiesto que las duras I
46
críticas de la comunidad
científica hacia los
australopitecos produjeron graves
consecuencias. Entre ellas que las
canteras de Sterkfontein
funcionaran sin ningún control
sobre lo extraído y estuvieran
abiertas a la depredación del público durante más de 10 años,
perdiéndose material de gran importancia. El propietario, de
forma muy profética, había puesto a la entrada un cartel que
decía "Venga a Sterkfontein y encuentre el eslabón perdido".
En los años posteriores a la segunda guerra mundial, la
paleoantropología sufre una revolución. Con el
descubrimiento de lo que desde ese momento se
llamaría el fraude de Piltdown, el últim o y principal
escollo para la aceptación de los australopitecos como
parientes cercanos del hombre, era derribado. Los
australopitecos eran aceptados como los homínidos
fósiles más antiguos. Los descubrimientos de Dart y de
liroom tomaban así un rol importantísimo en la historia
de la evolución de los homínidos. El hallazgo del Niño
de Taung, realizado en el año 1924, fue tomado
posteriormente como la piedra fundamental de la
paleoantropología, y dada la modificación que produjo
en el pensamiento del hombre, es considerado como
uno de los hallazgos más importantes del siglo.
En la década de 1950, África se transforma en el
(ontinente con más probabilidad de haber sido el
escenario donde ocurrió el origen del hombre, tal como
Darwin lo había imaginado un siglo antes.
47
En 1939 el alemán KohILarsen descubre los primeros rest
Hoy se cree que esto ocurrió en África del Este. Sin
de homínidos en África Oriental en el sitio de Laetoli, en I
embargo, algunos investigadores sostienen que puede
actual Tanzania. Cerca de allí, en la Garganta de Olduvai,
haber ocurrido en África del Sur. Otros sugieren que en
matrimonio británico Mary (1913-1996) y Louis Leakey
estas dos regiones se han encontrado homínidos fósiles
(1903-1972) excavaban desde 1931 a la búsqueda de nuev
gracias a las condiciones de conservación de los mismos,
restos de homínidos. Por fin en 1954, encuentran dos
pero esto no quiere decir que los primeros homínidos
dientes. Comenzaba así una serie de hallazgos que se
habitaran solo en esos lugares, como se demostró
continúan hasta la actualidad.
recientemente con el descubrimiento de un
El primer gran éxito de los Leakey en la Garganta de australopitecos en Chad, África Central. En definitiva, no
Olduvai tiene lugar recién en 1959. Se trata de un hay un consenso general para responder a esta pregunta,
cráneo de australopitecos con características muy aunque la mayor cantidad de evidencia indica que el
distintas a las de los encontrados en África del Sur. origen del hombre tuvo lugar en África del Este, en la
En 1960, en capas más profundas, y por lo tanto más región que actualmente comprende los países de Etiopía,
antiguas, los Leakey descubren nuevos restos de Kenia y Tanzania.
homínidos y utensilios. Por más que ellos tenían cierta
certeza de la importancia de estos hallazgos, esperaro
realizar nuevos descubrimientos antes de darlos a /
conocer. En 1964, Louis Leakey y sus colaboradores El hombre tuvo su origen en Africa,
anuncian al mundo un gran descubrimiento: los fósilei probablemente en la región que
de homínidos encontrados en la capa más profunda actualmente abarcan Etiopía,
pertenecían a un hombre fósil más antiguo que los de
Kenia y Tanzania,
australopitecos encontrados en las capas superiores.
evidencia clave eran los utensilios encontrados cerca d
los restos. Louis Leakey pensaba que solo el hombre es
capaz de modificar un objeto con la intención de
utilizarlo posteriormente, por esta razón este homínid
debió haber sido un hombre. Sus descubridores llamar
a este primer hombre Homo habilis, ya que éste era el
habilidoso ser que había realizado los utensilios.
Pero, ¿en qué región de África apareció el hombre?

49
 C A P Í T U L O

EL CUÁNDO DEL
ORIGEN DEL HOMBRE

Responder a la pregunta ¿en qué momento se originó el

hombre? parece hoy algo sencillo. La respuesta más
simple sería: en el momento en que los primeros restos
de hombre aparecen en el registro fósil.
Pero esto no fue fácil de resolver. La asignación de restos
humanos a períodos muy antiguos solo pudo aceptarse
cuando se tuvo real conciencia de la gran antigüedad de
la Tierra y de que los fósiles eran los vestigios de seres
vivos que la habitaron en tiempos remotos.
Actualmente, la determinación de la antigüedad de un
resto fósil se realiza mediante su datación. Veamos de
qué se trata.

51
 La datación
Existen dos formas de datación, la DATACIÓN
RELATIVA y la DATACIÓN ABSOLUTA. En la datación
relativa no se le asigna al fósil una edad en años, sini
que su antigüedad se establece
en relación con otros restos.
Este tip o de datación se realiza
analizando su ubicación en los
sedimentos en que se
encuentran. Las rocas donde se
hallan fósiles han sido
acumuladas durante miles de
años por la depositación de
sedimentos. Los encontrados
en sedimentos más profundos
han sido sepultados prim ero y
son por lo ta n to anteriores a los
que se encuentran por encima.
Los métodos de datación absoluta
aparecen después de 1950 como
consecuencia del descubrimiento
de la radioactividad algunas décadas antes.
La datación absoluta fue toda una revolución en
paleontología ya que por primera vez se podía conocei
con un cierto margen de error la edad exacta de un fós
Las repercusiones que tuvo fueron enormes. Entre otras
cosas, permitió desenmascarar el fraude de Piltdown que
había guiado los estudios en paleoantropología durante
casi 50 años y posibilitó datar los restos del hombre fósil
hallado por los Leakey en Olduvai en alrededor do
1 750 000 años, en momentos en que nadie imaginaba
tal antigüedad para la existencia del hombre.
Existen varios métodos de datación absoluta. Entre ellos
el de carbono 14, el del potasio-argón, el del uranio-
torio y el del uranio-protactinio. Estos métodos se basan
en la transformación de un elemento en otro. Por
ejemplo, el átomo de carbono (C) se presenta en
distintos estados (ISÓTOPOS), llamados Carbono 12 (C12)
y Carbono 14 (C14). Solo el C12 es estable, en cambio el
C14 es inestable o radioactivo y se transforma con el
tiempo en C12.
En los seres vivos, la proporción entre carbono estable
(C12) y carbono radioactivo (C14) es constante. A
medida que el C14 se transforma o decae en C12, el C14
es renovado para mantener la proporción. Pero, cuando
un organismo muere, el decaimiento del C14 ya no se
equilibra más, poniéndose así en marcha un mecanismo
de reloj. El porcentaje de C14 es cada vez menor a
medida que pasa el tiem po. El tiem po necesario para
que el 50% de C14 se transforme en C12, llamado
PERÍODO DEL CARBONO, es de 6 000 años. Esto quiere
decir que cada 6 000 años el porcentaje
de C14 de un ser que estuvo vivo
decaerá en un 50%. Conociendo
entonces la proporción inicial entre
C14 y C12 (que es la de todo ser vivo) y
midiendo la proporción presente en un
fósil, podemos conocer la edad del
fósil (la cual corresponde al

52 53
momento de su muerte, en que la concentración de C141
comenzó a decaer).
La datación con C14 tiene el problema de que su
período es demasiado corto, lo que significa que al cabo
de 40 000 años el carbono radioactivo que aún queda en
el fósil es ínfimo y muy difícil de medir. Por lo tanto, el
método del carbono sólo puede ser utilizado para datar J
fósiles cuya antigüedad no sobrepase los 40 000 años, es
decir que este método ha resultado solo útil para la
datación de la última etapa de la evolución de los
homínidos.
A diferencia del carbono, la desintegración del potasio
en argón o del uranio en otros elementos se mide no
en el resto fósil sino en las rocas y sedimentos en los
que éstos se encuentran. Este tip o de desintegración
es más lenta que la del carbono y por lo tan to su
período es mayor, lo que perm ite datar restos de más
antigüedad. El problema en estos casos es que la
acumulación del elemento estable (argón, torio,
protactinio) se efectúa lentam ente y, por lo tanto,
debe transcurrir un tiem po mínimo para poder medir
con precisión su presencia. Por ejemplo, el método del
potasio-argón no puede ser utilizado en rocas con una
antigüedad menor a 500.000 años.
Existen otros métodos de datación, como el de la
RESONANCIA DE SPIN ELECTRÓNICO (ESR) y el de
TERMOLUMINISCENCIA, que están basados en otros
principios físicos. Permiten datar elementos y objetos, do
una antigüedad reciente, que hayan sido calentados.
54
Todos estos métodos son utilizados en estudios de
paleoantropología. Ellos han perm itido en solo cuarenta
años establecer una secuencia cronológica bien precisa
de la evolución de los homínidos.
El primer hombre
Dentro del grupo de los australopitecos
se halla la especie que dio origen al
hombre (Homo), pero no hay acuerdo
todavía sobre cuál es esta especie ni tampoco cuándo
aparece el hombre.
Esto se debe principalmente a dos factores: la evolución
en mosaico y la continuidad morfológica.
Evolución en mosaico significa que la evolución de las
características de los individuos a lo largo del tiem po se
efectúa a velocidades distintas. Por ejemplo, pueden
cambiar más rápidamente la forma de los miembros que
los rasgos de la cara. De esta forma encontramos fósiles
que presentan algunos rasgos propios del hombre pero
otros que son totalm ente simiescos. Por ejemplo, los
miembros inferiores (las piernas) de los australopitecos
indican una postura más bien erecta, característica
propia del hombre; sin embargo, la capacidad craneana
es baja, rasgo que recuerda al chimpancé y al gorila.
La continuidad morfológica quiere decir que los
cambios en las formas son graduales. No existe ningún
salto abrupto en la morfología, ésta se presenta en un
55
continuo. Por ejemplo, los homínidos no se diferenciar
por la aparición de una nueva característica, sino por el
desarrollo mayor o menor de un rasgo.
Considerando estos dos factores, el problema a resolvei
es cómo se establece que un fósil es Homo o
Australopitecus, para poder determinar así el
momento de la aparición del hombre.
Para resolver este problema es necesario primero
caracterizar al grupo Homo.
En la década de 1950, el grupo Homo fue definido a
partir de las características del hombre actual y de los I
restos del Homo erectus y del Homo neandertalensis. Li
identificación de una nueva especie, el Homo habilis, a
principios de 1960, mucho más cercana a los
australopitecos, determinó una revisión de esta
definición.
Si bien los estudios más recientes proponen que el gru
Homo se define por ocho características, éstas lo
'
diferencian del Australopitecus por el grado de
desarrollo de estas características y por variaciones de
tamaño en la morfología de los huesos. En definitiva,
*
grupo Homo sólo puede ser separado de los monos poi3!
diferencias mínimas.
Actualmente, más allá de las diferencias en las
características, el criterio empleado para definir al gru¡
Homo se basa en tres tendencias:
El aumento de la capacidad craneana.
La reducción del aparato masticatorio.
El perfeccionamiento de la marcha bípeda.
56
Por lo tanto, determinar el momento de la aparición
del grupo Homo, es decir el origen del hombre, solo se
puede realizar con tendencias. De manera que la
identificación de los primeros hombres se vuelve
complicada. No es de extrañar entonces que el momento
preciso de la aparición del Homo sea aún discutido.
Los paleoantropólogos todavía no se ponen de acuerdo
sobre el cuándo de este origen. Para algunos apareció
hace 2 500 000 años y para otros hace 3 500 000 años.
¿Por qué esta diferencia de 1 millón de años?
Los investigadores que creen que el hombre apareció
hace 2,5 millones de años se basan en que los fósiles más
antiguos de Homo, encontrados hasta la fecha, son de
•■sta antigüedad. Sostienen además que la especie que
dio origen al hombre fue el Australopitecus afarensis,
o sea la especie de Lucy que vivió entre 4 y 2,8 millones
de años atrás. Sin embargo, no explican qué pasó entre
los 2,8 millones de años en que desapareció el
Australopitecus afarensis y los 2,5 millones de años,
momento en que aparecería el hombre. Recordemos que
os muy difícil asegurar si un fósil ya es hombre o todavía
no, sobre todo p o rque los
restos encontrados son
incompletos. Por
ejemplo, vestigios de
'".u última antigüedad,
que muchos estiman
57
como de hombre, corresponden a una mandíbula Australopithecus afarensis, conocemos la especie
encontrada en Malawi, un hueso de la cabeza hallado ancestra del hombre, la de Lucy, pero no todavía a los
en Kenia y un maxilar proveniente de Etiopía. Estos primeros representantes del hombre que habrían vivido
restos tan exiguos no permiten asegurar que ellos sean hace 2,5 millones de años. En cambio, si estos individuos
de un hombre. de hace alrededor de 3,5 millones de años corresponden
Por el momento, los únicos restos que pueden ser al grupo Homo, conoceríamos a los primeros hombres
atribuidos al grupo Homo sin ambigüedad tienen una pero no a la especie que le dio origen.
antigüedad de alrededor de 2 millones de años.
Los paleoantropólogos que sostienen que el hombre
apareció hace 3,5 millones de años descartan a la
especie de Lucy como la ancestra del hombre. Ellos
sostienen que Lucy y sus "fam iliares" no dieron lugar al I
hombre sino a los australopitecos robustos que se
extinguieron hace 1 millón de años, sin dejar
descendencia.
Como muchos restos fósiles de hasta 3,5 millones de
años de antigüedad, clasificados como de
Australopithecus afarensis, presentan un tamaño y una I
morfología particulares, estos investigadores sostienen I
que pertenecerían a individuos del grupo Homo.
Proponen entonces que debió haber existido otra
especie que vivió al menos hace 3,5 millones de años,
que dio origen al hombre. El problema es que esta
especie, ancestra todavía no ha sido encontrada. Tal vez
la clave se encuentre en la tibia y el húmero encontradoij
por Patterson y sus estudiantes en Kanapoi.
En conclusión, la diferencia de 1 millón de años entre lai
dos posturas resulta principalmente de cómo clasificar
los restos de ciertos individuos que vivieron hace
alrededor 3,5 millones de años. Si los incluimos como

58 59
 C A P I T U L O

II
SI

EL PORQUÉ Y CÓMO
DE LA EVOLUCIÓN
DE LOS HOMÍNIDOS

Uno de los problemas más apasionantes de la

paleoantropología es cómo explicar que un mono que
vivió hace millones de años se transformó y convirtió en
hombre y por qué los primeros hombres fueron
cambiando hasta llegar a ser lo que somos. Este
problema requiere entender cuáles fueron los factores
externos que influyeron en tal cambio y cuáles los
procesos internos que respondieron a esa presión
externa, llamada PRESIÓN DE SELECCIÓN. Sucede que los
procesos de cambio en los organismos vivos y las
presiones del medio no son-más que las causas internas y
externas de la evolución.
Por ello el cómo y el porqué de la evolución del hombre
están íntimamente ligados. El PORQUÉ tiene que ver con
los procesos de cambio internos que tienen lugar en los
organismos vivos. Esos procesos tratan de mantener el

61

equilibrio del organismo con el medio externo, el cual se
modifica a través del tiempo. Son estas modificaciones
del medio las que producen las presiones de selección,
que determinarán en definitiva el curso de la evolución,
o sea, las presiones del medio son el CÓMO de la
evolución.
El porqué de la evolución del hombre
Las respuestas al porqué de la evolución de los
homínidos provienen principalmente del estudio del
material genético. El principal objetivo de estos
estudios, llamados también de BIOLOGÍA MOLECULAR,
fue estimar la diferencia entre las especies o poblaciom
y sugerir un origen en tiem po y en espacio de dicha
diferencia. Por ejemplo, el grado de diferencia en el
material genético entre dos especies o poblaciones
depende de la cercanía entre ellas. La diferencia será
menor en especies (o poblaciones)
que comparten un antepasado
común cercano, y mayor entre
aquellas que tengan un antepasado
común lejano.
Los estudios de biología molecular,
en relación a la evolución de los
homínidos, han sido realizados en
organismos vivos, o sea en los
grandes monos y en el hombre.
62
En particular se han estudiado los cromosomas de estas
especies, el ADN del núcleo de sus células, el ADN
mitocondrial y el ADN del cromosoma Y. También se han
estudiado sus grupos sanguíneos, las proteínas y los
aminoácidos.
Los estudios de los cromosomas han sido muy útiles
para comparar las especies de los hominoideos. Estos
análisis muestran que las principales diferencias entre
los cromosomas del hombre actual y los de los grandes
monos son poco importantes, lo que dificulta, por
ejemplo, determinar qué mono es el más cercano al
hombre, si el gorila o el chimpancé.
Los estudios del ADN han sido los más interesantes. Si
se comparan los ADN del núcleo de las células de
distintas especies, cuanto más semejantes sean más
emparentadas estarán. El ADN mitocondrial es más fácil
de caracterizar, ya que es mucho más corto que el ADN
nuclear. Además, se modifica a lo largo del tiem po más
rápidamente que éste, por lo que ha sido empleado
principalmente en el estudio de poblaciones del
hombre actual.
Inicialmente, los resultados de los estudios de biología
molecular parecían poder responder a la mayoría de los
interrogantes que planteaba la evolución de los
homínidos. Sin embargo, pasadas las euforias de los
primeros años, comenzaron a surgir los problemas.
Uno de ellos es que, si bien se pueden reconocer
similitudes entre el ADN de dos especies, no se puede
diferenciar si éstas son consecuencia de un ancestro
(omún, o si una especie deriva de la otra.
63

Otro punto crítico de estos estudios es que suponen que
la cantidad de los cambios ocurridos en un cierto
intervalo de tiem po (tasa de cambio) es el mismo para
todas las especies. Pero ocurre que hasta el momento
ese criterio es solo una suposición aún no verificada.
Además de estos inconvenientes
generales de los métodos de la
biología molecular, debemos
considerar los problemas particulares
que tiene cada tipo de análisis. Por
ejemplo, el estudio del ADN
mitocondrial de un gran número de
poblaciones del hombre actual ^
perm itió aventurar la hipótesis de
que el hombre moderno se originó a partir de una
única población que vivió en África, entre 290 000 y
140 000 años atrás, y que desde allí se extendió por
todo el mundo. Esta hipótesis es conocida bajo el
nombre de la EVA AFRICANA. Sin embargo, estas
conclusiones son muy discutidas y muchos
investigadores las consideran incorrectas, porque el
estudio realizado del ADN mitocondrial asume
condiciones y suposiciones que aún no han sido
demostradas.
64
-----------
Los estudios de biología molecular permitieron
conocer las diferencias genéticas entre el hombre
y los grandes monos africanos. Mostraron que
son muy pocas: el hombre sería diferente del
chimpancé ¡solo en un 17» de su material genético!
Viva la diferencia
Si la sim ilitud genética entre el hombre y los grandes
monos es tan grande, ¿cómo se puede explicar entonces
que estas especies sean tan distintas?
Como mencionamos en el capítulo 1, la teoría de la
rvolución en su enunciado original suponía que la
transformación de una especie en otra se producía por
modificaciones graduales en los individuos. Vimos
también que estas modificaciones tienen origen en las
mutaciones al azar de los genes. Lo que no está resuelto
todavía es si la transformación de una especie en otra se
produce siempre como propuso Darwin, en forma
gradual, o si en algunos casos el cambio puede
producirse violentamente, de a saltos, por ejemplo de
una generación a otra. Quienes sostienen esta postura
65
suponen que es muy probable que el principal El cómo
mecanismo evolutivo sean las mutaciones en los
llamados GENES REGULADORES, aquellos que modifican]
Determinar en qué forma han interactuado las
el crecimiento de un individuo. Una mutación en un gcij
presiones de selección para explicar cómo una especie se
regulador provoca cambios en cascada que se traducen]
convierte en otra no es nada sencillo. Requiere entender
en importantes modificaciones de la morfología. Así, /j|
cómo fueron las condiciones de vida y el medio
diferencia cuantitativa del material genético no sería ít
ambiente en que se desenvolvieron las especies
realmente importante para explicar las diferencias enlrt
estudiadas. Para este tip o de estudios es imprescindible
una y otra especie, sino el tipo de gen que ha mutado,
efectuar una síntesis de los conocimientos de diversas
Por lo tanto, los genes diferentes entre el hombre y el
chimpancé deben ser genes reguladores, que explicaría]
una gran similitud genética con una amplia diferencia j
morfológica.
Í
disciplinas, como la climatología, la sedimentología, el
paleomagnetismo, la ecología, la paleontología de
vertebrados y de invertebrados, la paleobotánica, la
antropología, la anatomía comparada, etcétera.
Veamos cómo los cambios en el desarrollo podrían Sobre esta base se construye una representación del
explicar las diferencias en la morfología del hombre medio ambiente, de sus cambios y de la influencia que
moderno y de los grandes monos, en particular el éste tuvo sobre las especies. A esta representación se la
chimpancé. Tomaremos como ejemplo el cráneo. La llama en paleoantropología ESCENARIO.
forma del cráneo del hombre actual adulto es muy
Para explicar la aparición de los homínidos y el origen
diferente a la de un gran mono adulto. Sin embargo, J
del grupo Homo se han construido escenarios para cada
se compara con el cráneo de un gran mono juvenil
uno.
resultan muy similares.
El resultado de esta comparación nos permite pensar quj
en alguna especie antecesora del
hombre (un mono), el desarrollo El escenario para la aparición
del individuo comenzó a hacerse de los homínidos
más prolongado, produciendo
una retención de los caracteres
Id TEORÍA DE LA TECTÓNICA DE PLACAS (ver libro
juveniles en la morfología del
Dinosaurios de aquí, de allá, de verdad y de mentira de
estado adulto.
( lambussi y G. López en esta colección) sostiene que la
(orteza terrestre está compuesta de placas que se

66 67
desplazan y con ellas los continentes (deriva
continental). Las placas en su desplazamiento pueden
chocar o separarse. Así, las placas correspondientes a
África y a América del Sur se separan alrededor de
2 centímetros por año mientras que la placa
correspondiente a India choca con la placa asiática
produciendo el levantamiento y el plegamiento del
Himalaya y del macizo tibetano.
La zona donde dos placas se separan se conoce como
RIFT. El rift es una zona de inestabilidad geológica,
donde el continente se hunde y existen numerosos
volcanes.
Hace 17 millones de años, comenzó a desarrollarse un
rift en el este de África. Actualmente sumergido en el
Mar Rojo, se prolonga por Etiopía atravesándola de
noreste a sudoeste y se continua hacia al sur, donde di
lugar a una serie de lagos: Turkana, Tanganika, Victori
Alberto y finalm ente Malawi. Este rift, denominado Rl
VALLEY, separa el África Oriental o cuerno de África d
resto del continente.

Hace 10 millones de años, el rift Valley sufrió numeroiB
cambios que dieron lugar a la elevación de toda el Áfrflj
Oriental. Hasta ese entonces, la selva ecuatorial se
extendía como una banda continua de vegetación e n tll
los trópicos, cruzando todo África, desde el golfo de I
Guinea hasta el Océano índico. La elevación del ÁfricaH
;
Oriental provocó que esta selva haya sido cortada en I
dos. La parte ubicada en África Central continuó
recibiendo las abundantes precipitaciones provenientijH
del Golfo de Guinea, conservando sus características
originales. En cambio, la parte ubicada en África del El I
dejó de recibir las lluvias, produciéndose un cambio
paulatino en la vegetación. El resultado fue que la selvj I
tropical desapareció dejando lugar a una vegetación |
cada vez más abierta y la flora herbácea fue tomando I
más y más importancia en desmedro de la arbórea.
En esa banda continua de selva tropical que existió [
antes de la elevación de África Oriental, vivió el
ancestro común de los homínidos y de los grandes
monos africanos.
Luego de la elevación de la región oriental de África, I
esta especie ancestra quedó dividida en dos grupos d r i l
poblaciones, que evolucionaron independientemente, I
influenciados por cada uno de los ambientes que
habitaban. El grupo de poblaciones ubicado en África [I
Central, al oeste del rift Valley, habría dado origen al I
gorila y al chimpancé, especies que habitan acfua/mcrtl
esa región. Por otro lado, el grupo de poblaciones
ubicado en África Oriental, al este del rift, habría
evolucionado dando origen a los homínidos.
70
El escenario para la aparición
del grupo Hom o
11 ambiente de África del Este siguió modificándose
gradualmente a través del tiempo, hasta que hace
aproximadamente 3 millones de años se produce un
período de bruscas alteraciones que duró casi un millón
de años. El estudio de la fauna y de la flora fósil de esa
región ha perm itido describir
estos cambios en el ambiente.
En lo que se refiere a la fauna,
el análisis de los dientes de los
grupos de mamíferos fósiles
indica que las especies con
dientes cuyo crecimiento era
continuo se hicieron cada vez más abundantes, en
particular hace 2,3 millones de años. El crecimiento
continuo de los dientes en una especie está asociado a
una alimentación muy dura, de tip o herbáceo.
Respecto de la flora, el estudio de los pólenes fósiles
muestra que el número de especies arbóreas disminuyó
a través del tiem po, mientras que el de especies
herbáceas aumentó, particularmente hace 2,3 millones
I stos datos indican que en Á fric a d e l Este, hace
a p ro x im a d a m e n te 3 m illo n e s de años, un hábitat
h ú m e d o y a rb ó re o fu e re e m p la z a d o p o r un medio más
seco y a b ie rto co n u n p a is a je de tip o estepa. Este cambio
lúe n o to r io h a ce 2 ,3 m illo n e s de años.
71
La desertificación de África del Este está en relación cd
el desarrollo del rift Valley. Sin embargo, esto no explkj
todos los fenómenos observados, como por ejemplo el
cambio abrupto de hace alrededor de 2,3 millones de
años. El medio depende en gran medida de las
condiciones climáticas, y la evolución del clima es de
suma importancia para conocer las modificaciones del
hábitat.
La evolución del clima puede ser estudiada a partir del
concentración de los isótopos del átomo de oxígeno en
las conchas de animales marinos fósiles.
Estos estudios perm itieron determinar una tendencia
general en el clima del planeta que comenzó hace
alrededor de 50 millones de años. Desde esa época hasJ
ahora ha habido un enfriam iento progresivo de la Tierf
con ciertos períodos de oscilación.
Los estudios de las conchas fósiles del período Plio-
Pleistoceno muestran que el clima de la Tierra en el
período comprendido entre 3 y 2,5 millones de años
tuvo oscilaciones con temperaturas templadas, y que
entre los 2,5 y 2,3 millones de años hubo un descenso
abrupto en la temperatura global. A este evento se lo I
denomina CAMBIO DE ENFRIAMIENTO GLOBAL O PULsd
DE CAMBIO.
¿Cuál fue el impacto de estos cambios en los
homínidos?
Hemos visto que en el caso de la flora y de la fauna
hubo un im portante reemplazo de especies. Es
razonable pensar que el cambio de clima y de medio I
produjo la aparición de nuevas especies de homínidos I
72
Se considera que EL CAMBIO DE ENFRIAMIENTO
GLOBAL es el fenómeno responsable de la aparición de
los australopitecos robustos, en África del Este y del Sur,
y el origen del grupo Homo en África del Este, hace
alrededor de 2,5 millones de años.
En el caso de los australopitecos robustos, la evidencia
del impacto de este fenómeno está dada por la
presencia de un aparato masticatorio poderoso propio
de una adaptación a una alimentación dura, muy
probablemente herbácea, típica del paisaje de África del
Este y del Sur en ese momento.
Por otro lado, en el caso del grupo Homo, los efectos del
pulso de cambio se observan en la aparición del
desarrollo del cerebro.
Luego de este fenómeno, la vida en un ambiente abierto
en busca de alimentos o cualquier otra intensa actividad
(recolección, caza, transporte) expuso a ciertos
homínidos a nuevas presiones de selección. En particular,
una mayor exposición al sol y al riesgo de HIPERTERMIA
(aumento de la temperatura corporal), tanto más
probable cuanto más grandes son los organismos.
En estas nuevas condiciones, el
mantenimiento de la temperatura <
cerebro fue seguramente un factor
limitante del desarrollo del mismo.
Un cerebro voluminoso sólo podía
evolucionar si contaba con un
sistema capaz de asegurar una
temperatura adecuada.
73
Con el bipedismo y la postura erecta, la circulación
sanguínea del cerebro, ubicado en posición más elevad
que el corazón, necesitó de mecanismos para vencer li
fuerza de gravedad. Uno de éstos fue el desarrollo dr
un amplio sistema de pequeñas venas emisarias que
conectan las venas subcutáneas con las venas
del interior del cráneo.
Estudios de HIPOTERMIA (baja
temperatura corporal) e
HIPERTERMIA realizados en el
hombre actual mostraron que la
sangre en las venas emisarias del
cráneo fluye del cerebro hacia
afuera en los casos de hipotermia
mientras que ante una hipertermia fluye del exterior al
interior del cráneo. En este último caso, la sangre del
El sistema de venas emisarias continuó modificándose a
exterior del cráneo enfriada por vasodilatación y
través del tiem po posibilitando un aumento del tamaño
evaporación de la transpiración sirve para enfriar y
del cerebro. Así, las p re sio n e s de selecció n de un
mantener una temperatura adecuada del cerebro. El
A m b ie n te a b ie rto e x p lic a ría n cóm o se h a b ría fa v o re c id o
sistema de venas emisarias tiene entonces dos funcionr
la te n d e n c ia hacia un ce re b ro v o lu m in o s o en e l g ru p o
por un lado asegurar la circulación venciendo la fuerz.i
Homo.
de gravedad; por el otro enfriar el cerebro en
condiciones de hipertermia.

74 75
 C A P Í T U L O

DE LOS PRIMEROS
HOMBRES AL
HOMBRE MODERNO

Los paleoantropólogos aún no se han puesto del todo

de acuerdo acerca del número de especies de hombre
que existieron a lo largo de la historia del Grupo Homo.
Además de las limitaciones ya mencionadas para realizar
una clasificación (evolución en mosaico, continuidad
morfológica, estado fragm entario de los restos) hay que
agregar las modas o tendencias del momento. Éstas no
son un mero capricho subjetivo de los investigadores,
sino que responden a la comprehensión de los diferentes
aspectos de la evolución (variación, adaptación,
desarrollo) que se tiene en un momento dado.
Hasta 1970 los conocimientos eran muy limitados y cada
resto fósil que aparecía era atribuido a una especie
distinta, generando una maraña de nombres.

11
En ese mismo año, quizás como reacción a esta
tendencia, se desarrolla la teoría de la especie única, I
que llegó al extremo de proponer que todos los restos!
humanos, fósiles y actuales, no pertenecen a diferenlui
especies, sino a una sola especie representada a travósl
del tiem po por subespecies sucesivas. Así, el Homo
habilis y el Homo erectus no serían especies sino
subespecies de la única especie Homo sapiens, y
deberían llamarse Homo sapiens habilis y Homo sapim
erectus, respectivamente.
Sin embargo, la cantidad enorme de restos fósiles de I
homínidos descubiertos entre 1970 y 1980, mostraban I
una variación morfológica cada vez más amplia, que lil
teoría no podía explicar, y ésta fue perdiendo peso a
partir de 1980, dejando como principal contribución di
reconocimiento dado a la variación en la evolución d tl
los homínidos.
Actualmente, la tendencia que se está imponiendo es
aceptar que el número de especies fósiles de homínidml
es elevado. Sin llegar al extremo de atribuir cada resto!
una especie distinta, el número de especies actualmenl*
reconocidas duplica el de las aceptadas en los 80.
78
Los primeros hombres
La identificación de los primeros representantes del grupo
Homo ha sido recientemente reconsiderada. La
reevaluación de los restos encontrados en África del Este
demostró que varias especies de homo parecen haber
coexistido antes de 2 millones de años atrás: una de ellas
es el Homo rudolfensis.
El reconocimiento de la existencia del Homo rudolfensis
cambió la visión de lo que sucedió en África del Este
entre 2,5 y 2 millones de años atrás. Puso además en
evidencia que la evolución de los homínidos fue más rica
de lo que se pensaba anteriormente.
Homo rudolfensis
I os restos fósiles encontrados hasta la fecha atribuidos al
Homo rudolfensis han sido hallados en África Oriental. El
Homo rudolfensis sería una especie más robusta que el Homo
habilis, con una cara muy ancha a la altura media, una
mandíbula robusta con un marcado relieve en la superficie y
dientes posteriores anchos. A pesar de poseer esta
morfología en la faz y en la dentición, el esqueleto
poscraneano de esta especie es más cercano al del hombre
actual que el del Homo habilis. La morfología general de la
bóveda craneana es primitiva y la protuberancia ósea por
encima de las cavidades de los ojos (TORUS
SUPRAORBITARIO) que caracteriza las especies posteriores de
79