Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El arbitraje es un método de resolución de conflictos basado en la autonomía de la voluntad de las partes, por el
que uno o varios terceros designados por ellas directamente o siguiendo el procedimiento establecido en el
convenio arbitral suscrito entre ambas, resuelve la controversia surgidas en aquellas materias de su libre
disposición.
El convenio arbitral es el acuerdo entre las partes por el que designan de mutuo acuerdo el número de árbitros
que resolverá la controversia y los requisitos que deberán reunir, el lugar e idioma del arbitraje, el derecho
aplicable al fondo del asunto, y el procedimiento por el que se regirá el arbitraje, pudiendo someterse al
reglamento arbitral de alguna de las numerosas cortes arbitrales existentes en España y en el extranjero, o
establecerse ad hoc por ellas mismas. Este convenio puede incluirse en el clausulado del contrato que regule
las relaciones entre las partes, o suscribirse una vez que surja la controversia.
¿Qué es el arbitraje?
Es un proceso que resuelve una cuestión litigiosa entre dos o más partes sin recurrir a la jurisdicción ordinaria. Este
proceso está compuesto por un árbitro o tribunal de árbitros, nombrados por las partes de mutuo acuerdo (convenio
bilateral) que tiene que dictar una decisión sobre la controversia, laudo arbitral, que es obligatoria para las partes. En
definitiva, el arbitraje es un proceso de resolución de conflictos en el que la voluntad de las partes se somete a un tercero
llamado árbitro. El objeto del arbitraje son aquellas controversias de “libre disposición conforme derecho”.
Importancia del arbitraje: Se basa en el resultado del arbitraje porque conlleva una decisión final y
vinculante que tendrá el mismo valor a una sentencia judicial, por lo que las partes pueden hacerla
ejecutar coercitivamente.
Árbitros y jueces (semejanzas y diferencias)
Características
1. El arbitraje es un proceso de mutuo acuerdo.
2. El convenio arbitral deberá expresar la voluntad de las partes de someter todas a algunas de las controversias
a arbitraje. Deberá constar por escrito, firmado por las partes.
3. Las partes eligen libremente al árbitro/s, siempre que sea impar. A falta de acuerdo se designará sólo a un árbitro.
4. El arbitraje se basa en los principios de igualdad, audiencia y contradicción.
5. Las partes del arbitraje están obligadas a guardar la confidencialidad de la existencia del arbitraje, las
informaciones realizadas en el proceso y el laudo.
6. El laudo arbitral es ejecutable, produce efecto de cosa juzgada y es definitivo. Contra dicho laudo definitivo sólo
podría intentar que éste fuera anulado en un tribunal por un juez en los términos que la ley prevea.
Lugar del arbitraje
“Las partes podrán determinar libremente el lugar del arbitraje. A falta de acuerdo, lo determinarán los árbitros, atendidas
las circunstancias del caso y la conveniencia de las partes”. Previas consultas incluso podrían reunirse en cualquier lugar
que estimen apropiado para cualquier parte del proceso como oír a los testigos, a los peritos o a las partes, o para
examinar o reconocer objetos, documentos o personas. De igual modo, los árbitros podrán celebrar deliberaciones en
cualquier lugar apropiado.
Ventajas
Rapidez: El proceso arbitral es un proceso muy ágil y rápido. Salvo pacto contrario entre las partes, los árbitros
deberán dictar un laudo en un plazo de seis meses tras la contestación a la demanda.
Confidencialidad: Todos los procesos arbitrales son confidenciales.
Economía: El proceso arbitral es más económico para las partes que el proceso de la jurisdicción ordinaria y se
posee un conocimiento anticipado de los costos.
Especialización y neutralidad de los árbitros: Los árbitros suelen ser profesionales especialistas en las
materias objeto de los litigios que actúan con plena independencia e imparcialidad.
El arbitraje es un proceso mediante el cual las personas someten consensualmente su controversia a un tercero imparcial,
que no tiene relación con el Estado y es seleccionado por las partes, para que emita una decisión que será vinculante
para los involucrados de conformidad con un procedimiento neutral en el cual las partes podrán presentar sus alegatos
y pruebas.
Es un procedimiento consensual en virtud que es necesario el acuerdo de las partes para someterse a este
método.
Este consentimiento usualmente se ve reflejado en una cláusula de arbitraje y no se puede someter a dicho
mecanismo cualquier otra controversia que no se haya aceptado.
Es un mecanismo hetero-compositivo ya que es un tercero quien toma la decisión para solucionar el conflicto.
Este tercero es llamado árbitro o tribunal arbitral en caso que sea más de uno.
Usualmente los árbitros son seleccionados por las partes o también pueden ser elegidos por la institución arbitral,
la cual estará encargada de la administración del arbitraje.
El resultado del arbitraje conlleva una decisión final y vinculante que tendrá el mismo valor a una sentencia
judicial, por lo que las partes pueden hacerla ejecutar coercitivamente.
En los métodos de solución de conflictos en relacion al arbitraje se pueden dar los siguientes sistemas:
Mediación-Arbitraje (Med-Arb)
Se utiliza en el caso que la mediación no pueda resolver la totalidad del conflicto. Se inicia con el proceso de mediación
aplicando todos sus principios y procedimientos. En caso que no se llegue a un arreglo, se continúa con un arbitraje
quedando el mediador facultado arbitrar la disputa. Una ventaja de este proceso es que motiva a las partes a resolver el
conflicto entre ellas mediante la mediación ya que saben que, si no lo logran, posteriormente el mediador-árbitro tomará
la decisión. Sin embargo, esto también puede representar una desventaja ya que las partes podrían tener más cautela
en cuanto a la información que desean revelar en la mediación y que posteriormente pueda ser usada en su contra.
Arbitraje-Mediación (Arb-Med)
El tercero neutral actúa en un inicio como árbitro, se realiza el procedimiento de arbitraje y se emite un laudo que no se
revela a las partes. Luego el árbitro actúa como mediador y si la mediación es exitosa, entonces el laudo nunca es
revelado. En caso no sea exitosa o no se resuelven todos los puntos del conflicto, entonces la decisión es revelada y
vinculante para las partes. La desventaja en este procedimiento es que, si la mediación es exitosa, el tiempo y dinero
invertido en el procedimiento de arbitraje fueron innecesarios.
Consiste como un último recurso dentro del proceso mediación. Es decir que cuando el mediador considera que las
negociaciones llegaron a un impasse, éste presenta una oportunidad más para llegar a un acuerdo ofreciéndose como
árbitro por el sistema de arbitraje tomando como base la última oferta de cada parte. Este método motiva a las partes a
intentar realizar nuevas concesiones y en último caso se utilizará el arbitraje.
El arbitraje delegado o arbitraje derivado
En los Estados Unidos, existe la posibilidad en que los asuntos de menor cuantía o por solicitud de alguna de las partes,
los jueces los pueden remitir a un abogado o a un tribunal arbitral. Este procedimiento es de carácter informal, económico
y rápido. Asimismo, la resolución final puede ser obligatoria y apelable ante los tribunales ordinarios.
Amigable Composición La amigable composición es una figura muy similar al arbitraje ya que consiste en un
mecanismo de solución de conflictos por medio del cual las partes en conflicto delegan en un tercero, denominado
amigable componedor, la facultad de decidir la solución de la controversia. Dicha decisión produce los efectos legales de
una transacción por lo que tiene fuerza vinculante.
Es importante resaltar que la amigable composición no es reconocida en todos los países y varía su función dependiendo
el país. En países como España y México, se encuentra regulada dentro del proceso de arbitraje, por otro lado, en
Colombia es un mecanismo de solución de conflictos independiente.
Alto-bajo (high-low)
Esta metodología está enfocada para situaciones en donde las partes tienen pendiente una cantidad adeudada y no se
ponen de acuerdo acerca de la calidad de acreedor y deudor. Por lo cual las partes proponen una cifra máxima y otra
mínima que puede obtener el acreedor y le dejan la decisión a un tercero neutral árbitro. Si quien pretende ser acreedor
resulta como tal, obtendrá la cifra mayor acordada, si no lo es entonces obtendrá la misma y aun así recibirá una
ganancia.
El arbitraje laboral se encuentra establecido en el Código de Trabajo (Artículos 293 y 294) como un mecanismo alterno
de resolución de controversias dentro de los conflictos de carácter económico social, pero para ello existe una
intervención directa de parte del Juez de Trabajo y Previsión Social, así como de las partes en controversia, por lo que
en cierta manera el arbitraje laboral, no tiene relación con el mecanismo de resolución de controversias contenido en la
Ley de Arbitraje de Guatemala que abarca necesariamente la esfera del Derecho Privado.
Importancia de la transacción
La transacción es un sistema autocompositivo de resolución de controversias, por el que los propios contendientes
pueden resolver su conflicto, incluso aunque hayan iniciado un proceso judicial o arbitral. Se basa en el principio general
de la libertad de contratación (art. 1251 del Código Civil), por el que las partes pueden disponer de todo aquello que
tengan por conveniente, en tanto no se vulneren normas de orden público.
Definición:
El contrato de transacción se caracteriza por ser consensual, ya que se perfecciona con el mero consentimiento de los
contratantes siempre que tengan capacidad suficiente para transigir, sin necesidad de formalidades externas especiales
para su validez inter partes. Es bilateral, aunque no hace falta que las contraprestaciones sean de la misma intensidad,
ni de la misma especie (unas pueden ser económicas y otras morales). Es oneroso, pues cada una de las partes ha de
dar, prometer o retener algo (aunque sea de carácter moral) para resolver el conflicto. Es obligatorio, porque las partes,
ante una relación conflictiva, deciden ponerle término, mediante la asunción de obligaciones recíprocas aunque no sean
equivalentes.
El contrato de transacción tiene por objeto evitar un proceso judicial o arbitral, o poner fin al ya iniciado, cuando por la
autonomía de la voluntad, los contendientes resuelven su conflicto, siempre que éste sea disponible (art. 2151 CC). El
contenido del citado contrato, queda fijado por las partes, dando, prometiendo o reteniendo cada una alguna cosa. (art.
2152 CC). Está integrado por cuatro elementos:
1. Que las partes tengan capacidad para disponer de lo que sea objeto de la transacción;
2. Que las cosas o cuestiones sobre las cuales se transige, sean dudosas o litigiosas;
3. Que las partes se prometan, cedan o den algo recíprocamente; y
4. Que, cuando se celebre por medio de mandatario, éste tenga facultad especial, no sólo para transigir, sino para
los actos y contratos derivados de la transacción que necesiten facultad especial.
Arbitraje de equidad:
En este tipo de arbitraje, el tribunal arbitral no aplica ni leyes ni reglamentos para resolver la disputa sino su entendimiento
de lo que es justo y equitativo. A manera de ejemplo, en una disputa sobre arrendamiento de inmueble, el tribunal arbitral
no tomaría en cuenta el Código Civil, sino que estudiaría los hechos del caso y la manera cómo han actuado las partes
para encontrar una solución justa. El laudo en equidad es precisamente aquél en el cual el árbitro no se funda en el
ordenamiento jurídico sino busca una solución que le parece justa
Es importante que quienes negocian las cláusulas arbitrales tomen en cuenta que la Ley de Arbitraje establece que si las
partes no indican si el arbitraje se resolverá en equidad o en derecho, el tribunal arbitral deberá resolver en derecho.
Dependiendo de las particularidades de cada contrato, los dos tipos de arbitraje pueden ser recomendables. En cada
caso particular, existen elementos específicos que le permiten al abogado recomendar a su cliente si le conviene utilizar
el arbitraje en derecho o el arbitraje en equidad.
En Guatemala, a falta de determinación, el arbitraje será de derecho pues para fallar en equidad se requiere de una
disposición expresa. El trámite es igual y solamente se diferencia en el fundamento en que los árbitros se van a apoyar
para emitir el laudo. Se estima que la postura de la ley guatemalteca es la adecuada debido a que sería muy complicado
obligar a las partes a un arbitraje de equidad si las mismas no lo acordaron, considerando que, no se puede predecir la
forma en que los árbitros fallarán y aunque la ley les favorezca, puede ser que, conforme a la equidad no sea el caso.
Arbitraje Técnico:
En materia de arbitraje técnico ha existido la discusión tradicional de si los árbitros pueden pronunciarse sólo sobre
aspectos técnicos o si pueden ir más allá. Así, por ejemplo, cabe preguntarse si además de determinar si una maquinaria
tiene un determinado rendimiento los árbitros técnicos pueden declarar que existe un incumplimiento del contrato y
deducir las consecuencias correspondientes. En principio los árbitros técnicos cuya decisión se debe extender a aspectos
jurídicos deben ser además abogados. Las partes podrían pactar expresamente que además de decidir la controversia
técnica los árbitros deben decidir sus consecuencias jurídicas. El laudo técnico es aquel que se funda en una ciencia o
técnica.
Arbitraje ad hoc:
Las partes no se someten a ninguna institución arbitral, sino que son ellas mismas quienes definen las reglas del arbitraje
y a falta de ellas, se rigen por lo que señala la ley de arbitraje.
Es aquél que se regirá por la voluntad de las partes, ya que estos deben escoger las normas aplicables al fondo y forma
mediante un convenio por escrito, y a falta de esto, se utilizará la ley. Las partes pueden establecer el procedimiento
específico que se utilizará y los árbitros están encargados del desarrollo, lo cual se puede considerar como una ventaja
sobre el arbitraje institucional, ya que los árbitros pueden adaptar el procedimiento a los intereses y exigencias de las
partes para que sea más ágil. El arbitraje independiente ofrece a las partes mayor flexibilidad y libertad en la elección
de árbitros y reglas de procedimiento; sin embargo, la falta de acuerdo de las partes puede resultar perjudicial, así como
causar incertidumbre porque no existe certeza de cuáles son las reglas aplicables.
Arbitraje Internacional:
El arbitraje internacional tiene presente al menos un elemento que rebasa las fronteras de un país. El criterio de la
internacionalidad regula entre otros:
el hecho de que los establecimientos de las partes que intervienen en el arbitraje se sitúen en países distintos
la internacionalidad se puede originar del hecho de que el lugar sede del arbitraje se encuentre en un país distinto
a aquel donde las partes tienen sus establecimientos.
puede ser definida por la función auxiliar en el desarrollo del comercio internacional, es decir en ciertas
características del asunto materia de la controversia.
La ley adjetiva aplicable al arbitraje internacional se basa en la voluntad de las partes plasmada en el acuerdo arbitral y
a falta de disposición sobre esto, el tribunal arbitral decidirá cuál es la ley aplicable al caso en concreto.
Arbitraje voluntario
Se deriva de la voluntad de las partes este arbitraje y se manifiesta al otorgar el acuerdo arbitral. La voluntariedad del
arbitraje se puede plasmar previo a que surja un conflicto y se conoce como cláusula compromisoria; o, una vez surgido
el conflicto, las partes acuerdan renunciar a la justicia ordinaria y someterse al arbitraje
Arbitraje forzoso
Lo impone la ley como medio para solucionar un conflicto. La legislación guatemalteca establece en el artículo 291 del
Código de Comercio de Guatemala que después de la terminación o rescisión del contrato o relación respectiva, las
partes no se pusieren de acuerdo sobre la cuantía de la indemnización que deba pagarse por los daños y perjuicios
causados, el monto se debe determinar en proceso arbitral o judicial en la vía sumaria. Esta disposición impone
relativamente el arbitraje y la excepción es si las partes deciden la vía común.
Concepto y elementos:
Cada persona decide de qué manera resolverá su conflicto. La autonomía, significa que cada quien decide cuál es su
ley, pero el Estado no puede dar una libertad tan plena a todos en todo sentido, por eso tiene una función de regulador.
La voluntad tiene que ser libre, no se debe de obligar a alguien a realizar ciertos actos, que de ser así se encuadraría en
una coacción o amenaza.
Reconocimiento en nuestro ordenamiento jurídico:
Artículos 1251-1254,1257-1258,1268,1272 Código Civil entre otros, sobre todo en declaraciones bilaterales como los
contratos, pero también en la unilaterales, como son los testamentos.
Límites a la autonomía de la voluntad
La ley:
Las personas no pueden hacer lo que la ley le prohíbe, por ejemplo, lo regulado en el Código Penal o ciertos
aspectos del Código Civil.
La moral y las buenas costumbres: Ambos son relativos, según las características culturales de una región o
ciudad.
El orden público: El Estado exige a sus ciudadanos, mantener cierto orden con el objetivo de lograr la paz social.
Procedimientos
En el arbitraje se han desarrollado reglas y contenido propio, procedimientos propios, que no afectan ni alteran el
contenido ni el sentido del objeto principal del contrato. Ya sea del contrato que lo contiene o el contrato al que hace
referencia el documento que plasme la cláusula arbitral. Por lo que dentro de los procedimientos permitidos se
encontraran los que acuerdan las partes por voluntad propia, las instituciones en sus normativas y en el caso de
Guatemala, también la Ley de Arbitraje.
Cumplimiento
El cumplimiento consiste, en realizar el programa de prestación establecido en el vinculo obligatorio. Es garantizar el
cumplimiento de la voluntad de las partes, en el momento que eligen la vía arbitral y se comprometen al cumplimiento
del laudo, resolviendo los conflictos y dando punto final al origen del mismo, porque la vía arbitral fue elegida en términos
sanos, al realizar el acuerdo de arbitraje y la cláusula compromisoria
Renuncias:
La renuncia al arbitraje será válida únicamente cuando concurra la voluntad de todas las partes, hasta antes del
laudo arbitral, de la siguiente forma:
I. Renuncia expresa, será mediante comunicación escrita cursada a la o el Árbitro Único o al Tribunal Arbitral en
forma conjunta, separada o sucesiva, en cuyo caso podrán recurrir a la vía jurisdiccional o a otros medios
alternativos de solución de controversias que consideren convenientes.
II. Renuncia tácita, será cuando una de las partes es demandada judicialmente por la otra y no opone una
excepción de arbitraje conforme la normativa procesal correspondiente.
III. No se considerará renuncia tácita al arbitraje, el hecho que cualquiera de las partes, antes o durante el
procedimiento arbitral, solicite de una autoridad judicial competente la adopción de medidas preparatorias de
demanda o cautelares, o que dicha autoridad judicial conceda el cumplimiento de las mismas.
ARBITROS
En el ámbito del derecho, un árbitro es una autoridad que, elegida o aceptada por las partes de un litigio, se encarga
de resolver un conflicto. El árbitro debe ser imparcial y emitir su fallo según criterios legales o de equidad.
Lo habitual es que las partes decidan someterse a un árbitro para resolver el problema con mayor celeridad. Si, en
cambio, recurren a un proceso legal, es probable que el litigio se extienda mucho más en el tiempo hasta que un tribunal
o un juez se pronuncien al respecto.
SOLICITUD DE ARBITRAJE
Es la forma en que las partes involucradas en un conflicto que puede ser llevado a arbitraje, solicitan la intervención de
un tercero que resolverá el conflicto y sus resoluciones tienen carácter vinculante y ejecutivo para ambas partes.