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ÉGLOGA III

Unidad I: España áurea. La lírica renacentista y barroca.


Literatura Española II (Siglo de
Oro)
Prof. María Lorena Gauna Orpianesi
ÉGLOGA III DE GARCILASO
• Revisión del cuestionario de comprensión de la Égloga: ¿Dudas?

• Revisión de análisis crítico de Celina Sabor de Cortazar, Rafael Lapesa y


Elías Rivers
• Síntesis
Celina Sabor de Cortazar
La poesía de Garcilaso de la Vega
Algunas apreciaciones de Sabor de Cortazar
• Es la más rica y trabajada y su última producción (1536)

• Relación con los sonetos XI y XIII

• Paisaje natural aparece en tres oportunidades:


• vv. 57-80: Ribera del Tajo vista como locus amoenus bajo el alto sol del mediodía.
• vv. 209-216: Descripción del mismo ambiente pero que responde a una vivencia real y
referencia a Toledo.
• vv. 273-280: Descripción del atardecer: busca nuevas sensaciones, ahora a través del
movimiento (los peces que saltan sobre las ondas, azotándolas con sus colas, nos
transmiten el gozo de la hora exquisita)
Algunas apreciaciones de Sabor de Cortazar
• Fuentes: muy variadas
• Virgilio para lo pastoril
• Ovidio en lo mitológico
• Sannazzaro (Prosa XII)
• Ariosto
• Homero, tal vez.

• Égloga III: momento de mayor plenitud desde el punto de vista técnico:


nos sume en una lejanía sin tiempo, en un mundo idealizado y perfecto;
los amores del poeta y los de los dioses están en un mismo plano
temporal.
Rafael Lapesa
La trayectoria poética de Garcilaso (libro y artículo contenido en Rico)
Apreciaciones de Rafael Lapesa sobre la Égloga III
• El manantial primero de la obra de Garcilaso “es el sentimiento” (Rico,
2004, p. 127)
• Debemos hacer la salvedad que hicimos en las clases, de que López Bueno destaca que
el arte petrarquista es “altamente convencional” y por tanto gran parte de la obra de
Garcilaso no permite una lectura “autobiográfico modo”, aunque esta lectura
biográfica sí es aplicable a las églogas.

• Petrarca trazó el camino seguido por la poesía más íntima de Garcilaso;


guió a este en la exploración de su alma; le proporcionó temas poéticos y
hábitos formales; domó su vigorosa impetuosidad, haciéndola compatible
con la dulzura y la armonía; le ayudó a sacar partido de la propia
sensibilidad, impulsándole a describir la figura de la amada y a expresar el
sentimiento de la naturaleza” (Rico, p. 130)
Apreciaciones de Rafael Lapesa sobre la Égloga III
• Garcilaso ha aprendido a refugiarse en el arte; la poesía es un medio para
escapar de la realidad. Égloga III muestra en su perfección la habilidad
técnica.
• La muerte de Elisa está vista como un “lamentable cuento” de cosas
pretéritas y no arranca ya al poeta versos desgarradores: Garcilaso puede
entregarse plenamente a buscar la pura belleza.
• La técnica de los bordados es la misma que la pintura renacentista, atenta
a conseguir la impresión escultórica de los objetos (vv. 265-272)
Apreciaciones de Rafael Lapesa sobre la Égloga III
• Las historias de los bordados fueron cuidadosamente elegidas:
• Eurídice: toma esta historia de Sannazaro
• Dafne: también proviene de Sannazaro. Pero la historia de Siringa y Pan la sustituye
por la de Adonis, es decir, reemplaza una historia de metamorfosis (Siringa, la ninfa
perseguida por Pan) por una de muerte, para “volver a la nota fúnebre iniciada con
Orfeo y que culmina con Elisa tendida sobre la hierba”.
• Nombres:
• Dinámene: nombre homérico
• Filódoce: nombre virgiliano
• Nise y Climene: estos nombres aparecen en Homero y Virgilio
Apreciaciones de Rafael Lapesa sobre la Égloga III
• Égloga I influencia de Virgilio.
• Égloga III Virgilio y Sannazaro
• Cualidades de emoción contenida y acento de apasionada sinceridad
características de la poesía de Garcilaso
Elías Rivers
“La égloga III y la paradoja del arte natural” (Rico, t. II, pp. 144-149)
Apreciaciones de Elías Rivers sobre la Égloga III
• “Garcilaso, con ironía muy consciente, desenvuelve en su égloga III ciertas
implicancias paradójicas del arte natural, o sea, de la naturaleza arificial, y
las aplica directamente al doloroso misterio de la muerte, que siempre
amenaza, con su presencia en la naturaleza, a la felicidad del amor
pastoral. En esta égloga vemos redimida por las hermosas formas del arte
esta suprema crueldad de la naturaleza” (Rico, 2014, p. 145).

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