Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Título
EN EL SISTEMA EDUCATIVO
INTEGRANTE:
CICLO: VIII
2021
LA PARTICIPACION FAMILIAR COMO PIEZA FUNDAMENTAL EN EL
SISTEMA EDUCATIVO
INTRODUCCION
Desde años anteriores, hasta hoy en día se viene observando y evidenciando que los
propios padres de familia siguen teniendo el concepto de que los encargados en manejar
y emitir enseñanzas, valores, formación conjunta son las instituciones educativas. Los
mismos padres de familia son quienes esperan que sus niños obtengan solo aprendizajes
dentro del centro educativo, por ende, someten a la escuela como actor y responsable
principal para que el niño cumpla una formación ejemplar, lo cual, es cierto pero la
responsabilidad no solo recae en la institución, sino tambien en la familia, sobre todo los
padres, porque son la primera escuela con la cual se relacionan sus hijos. Por lo cual
ellos sostienen que su única labor es solo mandarlos a la escuela, pero por medio de
nuestro ensayo manifestaremos que esta opinión anterior ya mencionada que tienen los
padres de familia es errónea.
Es por esto que comenzaremos en la primera parte, en explicar sobre el tema escuelas de
familias donde se manifiesta la familia y su relación con la educación, la segunda parte
se enfoca en las bases legales que sustentan la participación indispensable de la familia
en las escuelas; la tercera parte se mencionara la importancia de la participación familiar
en el sistema educativo; también se explicara sobre el rol educativo de la familia y
escuela
, por ultimo mencionaremos las conclusiones de todo lo redactado, así nos
informaremos más sobre lo que nuestros niños necesitan y poder también notar lo
necesario de que los padres de familia sepan su gran rol que tienen en la educación de
sus hijos, por lo tanto la escuela y la familia mantienen una relación totalmente directa y
deben mantenerse trabajando de forma conjunta.
DESARROLLO
Cano, R. & Casado, M. (2015) tambien nos dicen que la escuela son las instituciones
en donde maestros, alumnos y padres comparten y participan de la planificación
curricular; pero sobre todo que es un espacio de comunicación en donde se afianzan los
valores humanos y de convivencia ciudadana para una buena formación en todas las
dimensiones.
Podemos observar que la escuela y familia están muy relacionados, la escuela forma y la
familia educa; estas dos instituciones que, a pesar de tener asimetrías en sus roles para la
formación social e individual de las personas, tienen la tarea compartida del desarrollo.
En Aibi revista de investigación, administración e ingeniería (2018), nos dicen que
es importante que en el hogar se imparta una crianza democrática, para que el salón de
clases se vuelva un espacio de paz. Esto lo afirma la Revista Psicothema (2008)
diciendo que el estilo democrático en la educación familiar está bien calificado para una
mejor educación y crianza infantil, puesto que, favorece al crecimiento y elaboración de
los aprendizajes en el desarrollo evolutivo del niño y a la construcción de su
personalidad.
Nos dice que debemos tener en cuenta ciertos elementos para una buena relación entre
escuela y familia, los cuales son: primero tener intencionalidad educativa, es decir
planificar proyectos orientados a un logro educativo concreto; el segundo es tener
objetivos conocidos y comprendidos por las familias y como tercer elemento el
constituir un proceso de larga duración, en donde se pueda dar un encuentro entre la
familia y la educación.
Por consiguiente, podemos decir y afirmar que la escuela y la familia son dos
instituciones educativas fundamentales, encargadas de la formación integral de niños y
niñas a lo largo
de su desarrollo. Por lo tanto, la escuela y la familia no pueden trabajar
independientemente una de otra, al contrario, deben desempeñar su función de forma
conjunta, apoyándose y trabajando juntos en el proceso educativos de los niños.
Se cree que solo consta de participar en las reuniones, el realizar y organizar las
actividades que la docente plantea, o talvez, el ayudar a sus hijos en el cumplimiento de
las tareas, ignorando por completo la principal importancia de su participación en la
educación de sus niños. Participar implica el poder incidir, decidir, opinar, aportar,
actuar y discrepar en el ámbito educativo, en consecuencia, la familia deberá proponer
los propósitos curriculares que guiaran en las enseñanzas, dar ideas respecto a los
recursos requeridos y de cómo obtenerlos, fomentando así la participación de ellos.
o Cano, R. & Casado, M. Escuela y familia. Dos pilares fundamentales para unas
buenas prácticas de orientación educativa a través de las escuelas de padres.
Revista Electrónica Interuniversitaria de Formación del Profesorado, vol. 18,
núm. 2, mayo-agosto, 2015, pp. 15-28. Asociación Universitaria de Formación
del Profesorado. Zaragoza, España.
o Torío, S.; Peña, J. & Inda, M. Estilos de educación familiar. Psicothema, vol. 20,
núm. 1, 2008, pp. 62-70. Universidad de Oviedo. Oviedo, España.