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Importancia de la
salud física para
prevenir la obesidad
Eduardo Gonzáles
Gerente Solutions & Consulting

El ejercicio físico realizado de manera regular es un gran camino para la

salud cardiovascular y en general, de todo el organismo.

Sus beneficios son:

Disminuye la
tensión arterial
y la mantiene
en normalidad.

Incrementa la
producción de
lipoproteínas de
alta densidad
(HDL o colesterol
bueno).
Regula y activa
el metabolismo.

Regula la
presencia de
azúcar en la
sangre.

Así mismo, mantiene el balance

energético del organismo, gastando el
exceso de calorías ingeridas con la
alimentación e impidiendo la acumulación
de grasa en el tejido adiposo. En concreto,
ayuda no sólo a disminuir peso, sino
también a no aumentarlo.

Una alimentación equilibrada y ejercicio físico son los dos

pilares primordiales de una vida saludable, siempre y cuando sean
hábitos adquiridos y permanentes, y no como una práctica de forma
ocasional, esta es también la diferencia entre prevenir la obesidad y
tener que tratarla. El único tratamiento eficiente para tratar la obesidad y
sobrepeso es cambiar los hábitos de vida y la única forma de evitar
recuperar el peso que se perdió con una dieta de adelgazamiento es
mantener esos nuevos hábitos de vida.

El ejercicio físico es crucial

para la prevención de la
obesidad, tanto en lo que se
refiere a la prevención primaria (no
llegar a sufrirla), como en la
secundaria (no volver a sufrirla).
Dedicándole preferiblemente unos
30 minutos como mínimo al día y al
menos tres días a la semana junto
con una correcta alimentación.

Fuente
Sanitas. (2023). El ejercicio en la prevención de la obesidad.
https://www.sanitas.es/sanitas/seguros/es/particulares/biblioteca-de-salud/ejercicio-deporte/consejos-actividad-fisica/
ejercicio-prevencion-obesidad.html