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Monografía en Reforma Procesal Penal, Juicio Oral y Litigación

LA INVESTIGACIÓN CRIMINAL Y LOS MEDIOS


DE CONTROL
SUMARIO

I.- INTRODUCCIÓN

II.- CONCEPTOS BÁSICOS

1.- Ejercicio exclusivo de la investigación criminal


2.- Facultad de requerir la cooperación de órganos del estado de parte del Ministerio
Publico

III.- ANÁLISIS DE LA FUNCION DE DIRECCIÓN DE LA INVESTIGACIÓN

1.- Análisis critico del artículo 1 de la Ley 19.640, Orgánica Constitucional del
Ministerio Público
2.- Clasificación de los sistemas de Control de la investigación criminal.
3.- Análisis general de los sistemas de control externo o judicial
4.- Análisis general de los sistemas de control interno o administrativo.
5.- Análisis critico del artículo 19 inciso final de la ley 19.640 (Orgánica
Constitucional del Ministerio Público), que dice relación a la facultad entregada al
Fiscal Nacional, de poner en manos la investigación criminal por un sólo fiscal,
de delitos cometidos en territorios de distinta competencia.

IV.- ANÁLISIS DE NORMAS DE CONTROL JUDICIAL Y ADMINISTRATIVO


PROPIAMENTE TAL

1.- Análisis crítico del artículo 169 del Código Procesal Penal, referido al control
judicial de la facultad del ministerio público de no iniciar una investigación
2.- Análisis crítico del artículo 170 del Código Procesal Penal, referido al control
administrativo y judicial de la utilización del principio de oportunidad
3..- Análisis del artículo 170 inciso 4, referida a las facultades de las autoridades del
ministerio público, sobre la decisión del fiscal adjunto y juez de garantía
4.- Análisis crítico del artículo 247 del Código Procesal Penal, referido a la facultad
del juez de garantía a garantizar de que se cumpla el plazo máximo para
declarar cerrada la investigación de parte del ministerio público.

V.- NORMAS DE INTERVENCIÓN JUDICIAL EN LA INVESTIGACION


1.- Análisis critico del artículo 274 del Código Procesal Penal, referido a la facultad
del juez de garantía de poner límites de tiempo a la investigación criminal.
2.- Análisis critico del artículo 257 del Código Procesal Penal, referido a la facultad
del juez de garantía de reabrir una investigación criminal.
3.- Análisis critico del artículo 186 del Código Procesal Penal, referido a la facultad
del juez de garantía de forzar la formalización de la investigación criminal.

VI.- CONCLUSIÓN
1.- Sistemas de control internos o administrativos
a.- Control que no se inmiscuye en la investigación
b.- Control que se inmiscuye en la investigación
2.- Sistemas externos o judiciales
a.- Control judicial propiamente tal
b.- intervención en la investigación

VII.- BIBLIOGRAFÍA
MONOGRAFÍA REFORMA PROCESAL PENAL

I.- INTRODUCCIÓN

La reforma procesal penal, es la mayor modificación legal en materia procesal


en nuestros últimos tiempos. El Código Procesal Penal junto a otras normas legales, a
modo ejemplar, Ley Orgánica Constitucional del Ministerio Público, Ley de la
Defensoría penal Pública, establecen facultades y limitaciones de cada uno de los
intervinientes en el sistema procesal, entregando al Ministerio Público entre otras
facultades la del ejercicio EXCLUSIVO de la investigación criminal, ejercicio que si bien
la ley lo denomina exclusivo, no significa que sea excluyente de controles y limitaciones
por otros órganos de la reforma.

Al analizar las normas legales que regulan la estructura del proceso penal,
vemos que existe una serie de novedades, fundamentalmente en lo que se refiere al
control de las garantías y la forma en que puedan llegar a ejercerse, ya no de una
manera como se encuentra establecido en el sistema inquisitivo aún vigente en el país,
que asume que la superioridad jerárquica de un tribunal sobre otro unipersonal, otorga
por definición la facultad de reveer tanto los hechos como el derecho, si no que más
bien de un modo de proteger los derechos de todos y cada uno de los participes en la
reforma, llámese por esencialmente imputado y victima, por medio del control
jurisdiccional que efectúa el Juez de Garantía, fundamentalmente sobre el proceso de
investigación del Ministerio Público.

Entre los controles que se encuentran dentro del ordenamiento jurídico nos
dedicaremos especialmente al análisis los que dicen relación con los plazos
establecidos a la investigación, y la facultad que posee el Juez de Garantía de poner
cotas a los mismos.
El control judicial de la investigación criminal, se nos muestra como una forma de
garantizar lo derechos de los participes en el proceso penal, fundamentalmente por que
trata, de alguna manera el evitar el exceso de tiempo que tarda una investigación
criminal en la actualidad, esta forma de ver la actuación del juez de garantía es la que a
las luces de lo expuesto en los textos legales que ilustran la reforma procesal, nos trata
de mostrar el legislador, al entregar atribuciones y establecer fines que a buscan lograr
con el ejercicio de estas facultades del juez de garantía, ya que si bien se nos muestra
como un control de los plazos de la investigación, se podría concluir que cuando existe
una ingerencia del sistema judicial en la investigación criminal del modo como se
contempla en el Código Procesal Penal, no hace preguntar, si esta intromisión de
alguna manera puede en definitiva, a un posible juzgador, como es el caso del juez de
garantía, a modo de ejemplo en el procedimiento abreviado, donde además de
controlar que la investigación siga los cursos que la constitución y la legislación vigente
establece, resuelve sobre el fondo del asunto puesto a su conocimiento, pudiendo ver
influenciada de alguna manera su decisión al prejuzgar sobre ciertos hechos, volviendo
de alguna manera a revivir ciertos vicios del sistema inquisitivo que con el sistema de
juicio oral se ha tratado de evitar, al diferenciar y determinar en forma expresa cual es el
rol de cada uno de los participes en el sistema procesal, diferenciando normas
eminentemente de control con otras que rayan en la interferencia de un órgano sobre
otro.

II.- CONCEPTOS BÁSICOS

1.- Ejercicio exclusivo de la investigación criminal

Dentro de las funciones que se ejercen en forma exclusiva el Ministerio Público,


se encuentra la que establece el artículo 1º de la 19.640, a saber, Ley Orgánica del
Ministerio Público, norma que entrega el ejercicio exclusivo de la investigación de los
hechos constitutivos de delito al Ministerio Público, lo que en definitiva significa a
exclusividad entendida como: “Privilegio o derecho adquirido en virtud del cual una
persona o corporación puede hacer algo prohibido a los demás.”. Exclusividad
que debe entenderse en este contexto, y no como situación que excluye a todo tipo de
control, sea interno o exógeno al Ministerio Público.

La exclusividad, que al primer análisis de determinadas normas del Código


Procesal Penal, se ven de alguna manera limitada por las facultades del Juez de
Garantía en relación a la investigación, facultades que al profundizar hemos podido
colegir, que si bien es cierto, que de alguna manera se podría llegar a entender como
una intromisión en la facultad de investigar del Ministerio Público, no es menos cierto,
que dicha potestad es un control jurisdiccional sobre un órgano del estado, que ejerce
la facultad persecutoria del mismo, conclusión que se analizará en forma posterior
durante el desarrollo del presente trabajo.

La exclusividad de la investigación, misma que entendida como la acción de


hacer diligencias para descubrir una cosa, y cuando esta cosa es la perpetración de
un hecho que reviste los caracteres de delito, nos encontramos frente a una
investigación criminal, y un órgano estatal llamado a efectuar en forma exclusiva las
diligencias concretas para descubrir el hecho punible y la participación punible de
determinadas personas, vemos el nivel de ingerencia y por tanto importancia que el
legislador le entrega al ministerio público. Al entregar en forma exclusiva la potestad
persecutoria criminal del estado a un sólo órgano en particular, ajeno e independiente
del poder judicial, mismo que históricamente ha detentado y ejercido dicha facultad,
exento de casi por completo de todo control externo.

2.- Facultad de requerir la cooperación de órganos del estado de parte del


Ministerio Publico

El ministerio público, al ejercer la principal labor encomendada por el legislador,


que es la de la investigación criminal, vemos que se le entrega determinadas
potestades sobre órganos de represión criminal, a saber, carabineros, investigaciones y
gendarmería, así como la potestad de servirse de otros órganos que cumplen funciones
de coadyuvantes de la investigación criminal, tales como el Instituto Médico Legal entre
otros, además de la facultad de requerir el apoyo de todo órgano del estado.
Frente a lo expuesto en el párrafo precedente, nos vemos enfrentados a un
enorme cúmulo de atribuciones, que deben necesariamente ser controladas a fin de
evitar posibles excesos en el ejercicio de las potestades mencionadas.

III.- ANÁLISIS DE LA FUNCION DE DIRECCIÓN DE LA


INVESTIGACIÓN

1.- Análisis critico del artículo 1 de la Ley 19.640, Orgánica Constitucional del
Ministerio Público

Dentro de las normas analizadas debemos iniciar por una breve exposición de
los artículos de los textos legales pertinentes, que dicen relación con la dirección de la
investigación.

El artículo 1 Ley 19.640, Ley Orgánica Constitucional del Ministerio Público


establece, “El Ministerio Público es un organismo autónomo y jerarquizado, cuya
función es dirigir en forma exclusiva la investigación de los hechos constitutivos de
delito, los que determinen la participación punible y los que acrediten la inocencia del
imputado y, en su caso, ejercer la acción penal pública en la forma prevista en la por la
ley. De igual manera, le corresponderá la adopción de medios para proteger a las
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victimas y a los testigos. No podrá ejercer funciones jurisdiccionales.” .Norma que se ve
complementada con lo expuesto en el artículo 77 del Código Procesal Penal, a
saber, “Facultades. Los fiscales ejercerán y sustentarán la acción penal pública en la
forma prevista por la ley. Con ese propósito practicará todas las diligencias que
fueren conducentes al éxito de la investigación y dirigirán la actuación de la policía,
con estricta sujeción al principio de objetividad consagrado en la Ley Orgánica
Constitucional del Ministerio Público”.
Lo expuesto en forma precedente, junto a contenido de otras normas legales
pertinentes, nos ilustra de manera expresa la intención de legislador de entregar la
investigación criminal a un órgano en particular de la reforma, este es, el ministerio
publico, institución que no sólo tiene la facultad y la obligación de llevar adelante la
investigación criminal, para lo cual se le dota de recursos humanos, logísticos y
fundamentalmente legales para ejercer dicha actividad.

2.- Clasificación de los sistemas de Control de la investigación criminal.

La investigación, como ya se mencionó, entendida como la acción de hacer


diligencias para descubrir un hecho que reviste los caracteres de delito, misma que se
ejerce en forma exclusiva por el ministerio público mediante las herramientas ya
descritas, esta investigación si bien es exclusiva, no es excluyente de controles,
controles que hemos dado en clasificar en los controles que hemos dado llamar en 1)
INTERNOS o ADMINISTRATIVOS y 2) EXTERNOS o JUDICIALES.

La clasificación expuesta, se hace atendiendo a quien es el llamado a efectuar el


control de la investigación, es decir, si dicho control proviene del ministerio público es
un control que se efectúa desde el mismo ente encargado de la investigación, si por
contrario, se efectúa por vía judicial, encontramos un control externo al encargado del
ejercicio de la investigación.

3.- Análisis general de los sistemas de control externo o judicial

Los controles externos o judiciales, son los que a nuestro parecer provocan una
mayor controversia, atendido a que una institución del estado con el poder que detenta
el ministerio público, no puede ni debe estar exento de control, pero a la vez cuando
esta vigilancia se transforma en una ingerencia de otro institución estatal, como es el
poder judicial sobre la investigación, nos encontramos con la afluencia de una
problemática que el nuevo sistema ha tratado de evitar, y éste es, el referido a una
posible doble labor de un solo actor, como es lo que ocurre con el sistema inquisitivo,
en que el juez del crimen pasa a ser investigador y juzgador de un mismo hecho, a
mayor abundamiento, dentro del Código Procesal Penal, existen diversas instancias en
que el juez de garantía actúa sobre la investigación a modo de control, pero existen
otras situaciones donde éste mismo garantizador puede llegar a actuar como un
juzgador, que el caso entre otros del JUICIO INMEDIATO, PROCEDIMIENTO
ABREVIADO etc.. La pregunta que surge a la luz de facultades descritas, es si en estos
procedimientos en que el juez de garantía tiene un papel de sentenciador, al intervenir
previamente en la investigación, como es el caso de la facultad de limitar los plazos de
la misma, forzar la acusación etc. no esta de alguna manera emitiendo un
prejuzgamiento y en definitiva, reeditando las falencias del sistema inquisitivo que el
nuevo procedimiento busca evitar.

Vemos absolutamente imprescindible que exista un control externo a la labor de


investigación, pero nos oponemos a que se el juez de garantía el llamado a la calificar
la forma de llevar la investigación criminal, siendo que de alguna forma éste es quien,
como ya se menciono, en un momento determinado se convierta en juzgador además
de garantizador, por lo que creemos que si se ve como necesario controlar la actividad
de investigación del ministerio público, opinamos que debe ser otro, en este punto en
particular, quien regule y no el juez de garantía, cuya labor se debe circunscribir a ser
un ente garantizador de los derechos de los intervinientes.

4.- Análisis general de los sistemas de control interno o administrativo.

Por otra parte, además del problema que surge con el control exógeno al
ministerio público, vemos necesario analizar la ingerencia de las autoridades del
ministerio público dentro de una investigación determinada, lo cual no significada entrar
a calificar el control que se ejerce de las investigaciones por los canales legales que
establece el Código Procesal Penal y la Ley Orgánica Constitucional del Ministerio
Público, a saber, entre otras las medidas que se puede adoptar frente al ejercicio del
llamado principio de oportunidad, facultad establecida en el artículo 170 del Código
Procesal Penal, si no que mas bien, nos referimos a la facultad establecida en el
artículo 18 y 19 de la Ley Orgánica del Ministerio Público, normas que en su parte
medular entregan al Fiscal Nacional, la posibilidad de asumir de oficio la dirección de
una investigación, o bien entregar a un Fiscal Regional en particular la dirección de una
determinada investigación.

Si bien estos artículos buscan, a una primera vista, que se respete la igualdad
ante la ley, atendido a la investidura de determinados iintervinientes, o la gravedad y
complejidad de los procesos, vemos necesario enfocarnos en la posibilidad de que esta
sea una herramienta para que un Fiscal Nacional, controle e interfiera en determinados
asuntos por distintos motivos que los enunciados en la ley.

Una forma de solucionar el problema recién planteado, es que se aplique de


alguna manera la intervención judicial en la designación de un Fiscal Ad-hoc, de esta
manera sustraer la carga de que una sola persona sea la llamada a determinar quien
debe llevar una investigación en concreto, ya que aunque la ley exija la investidura
especial o gravedad y complejidad, por la ambigüedad de los términos puede dársele
una interpretación antojadiza y caer en definitiva en el control de las investigaciones
criminales en un solo sentido, sin ningún tipo de contrapeso interno,

Otra forma de evitar esta excesiva concentración de poder, creemos que para
estos casos excepcionalísimos, podría designar el fiscal regional que tome a cargo la
investigación, el Consejo General, mediante un quórum especial.

5.- Análisis critico del artículo 19 inciso final de la ley 19.640 (Orgánica
Constitucional del Ministerio Público), que dice relación a la facultad entregada al
Fiscal Nacional, de poner en manos la investigación criminal por un sólo fiscal,
de delitos cometidos en territorios de distinta competencia
Finalmente frente inciso final del artículo 19 de la Ley 19.640, no encontramos
reparos en la misma y más bien nos parece una forma de optimizar el trabajo
investigativo y los ya sabidos escasos recursos, ya que la sobre posición de territorios
en que puede haberse cometido un hecho ilícito por un mismo delincuente, es una
situación que puede darse con bastante frecuencia, y esta norma en análisis, es a
nuestro parecer la que busca evitar la excesiva burocratización de la investigación
criminal.

IV.- ANÁLISIS DE NORMAS DE CONTROL JUDICIAL Y


ADMINISTRATIVO PROPIAMENTE TAL

1.- Análisis crítico del artículo 169 del Código Procesal Penal, referido al
control judicial de la facultad del ministerio público de no iniciar una
investigación

Dentro del esquema del presente trabajo, por una parte hemos tomado algunas
normas procedímentales, que hemos dado llamar, normas de control de la
investigación propiamente tal, que se contraponen a otras normas, que de alguna
manera producen una intervención mas allá de un control de garantías del poder
judicial en la investigación criminal.

La norma que de alguna manera, a nuestro entender, mejor refleja el control


jurisdiccional de la garantías en la investigación criminal, es la que establece el Artículo
169 Código Procesal Penal “Facultad de no iniciar la investigación. En tanto no se
hubiere producido la intervención del Juez de garantía en el procedimiento, el fiscal
podrá abstenerse de toda investigación, cuando los hechos relatados en la denuncia no
fueren constitutivos de delito o cuando los antecedentes y datos suministrados
permitieren establecer que se encuentra extinguida la responsabilidad penal del
imputado. Esta decisión será siempre fundada y se someterá a la aprobación del juez
de garantía”.

Es en esta última frase, donde se revela el contenido del control judicial en la


investigación, cual es la posibilidad de que el juez de garantía revise la decisión
fundada que debe emitir el ministerio público en relación a la facultad de no iniciar la
investigación, es en esta norma en comento donde vemos plasmado una de las formas
más importantes en que el juez de garantía cumple con su papel de garante de los
derechos de los intervinientes, toda vez que una decisión de ministerio público, la cual
no es de investigación propiamente tal, se somete a un control judicial, a fin de que se
respete los más importantes derechos y actividades procedímentales de los sujetos que
intervienen en el proceso criminal en concreto.

2.- Análisis crítico del artículo 170 del Código Procesal Penal, referido al
control administrativo y judicial de la utilización del principio de
oportunidad

Otra norma que plasma de una manera evidente el control que ejerce el juez de
garantía, sobre las decisiones no investigativas del ministerio público, es la facultad
deber que establece el artículo 170 Código Procesal Penal “Principio de oportunidad.
Los fiscales del ministerio público podrán no iniciar la persecución penal o abandonar la
ya iniciada, cuando se tratare de un hecho que no comprometiere gravemente el interés
público, a menos que la pena mínima asignada al delito excediere de presidio o
reclusión menores en su grado mínimo o que se tratare de un delito cometido por un
funcionario público en el ejercicio de sus funciones.

Para estos efectos, el fiscal deberá emitir una decisión motivada, la que
comunicará al juez de garantía. Éste a su vez, la notificará a los intervinientes, si los
hubiere.
Dentro de los diez días siguientes a la comunicación de la decisión del fiscal, el
juez, de oficio o a petición de cualquiera de los intervinientes, podrá dejarla sin
efecto cuando considerare que aquél ha excedido sus atribuciones en cuanto a la
pena mínima prevista para el hecho de que se tratare excediere la de presidio o
reclusión menores en su grado mínimo, o se tratare de un delito cometido por un
funcionario público en el ejercicio de sus funciones. También dejará sin efecto cuando,
dentro del mismo plazo, la víctima manifestare de cualquier modo su interés en el inicio
o en la continuación de la persecución penal.

Una vez vencido el plazo señalado en el inciso tercero o rechazada por el juez la
reclamación respectiva, los intervinientes contarán con un plazo de diez días para
reclamar de la decisión del fiscal ante las autoridades del ministerio público.

Conociendo esta reclamación, las autoridades del ministerio público deberán


verificar si la decisión del fiscal se ajusta a las políticas generales del servicio y a las
normas que hubieren sido dictadas al respecto. Transcurrido el plazo previsto en el
inciso precedente sin que se hubiere formulado reclamación o rechazada ésta por
parte de las autoridades del ministerio público, se entenderá extinguida la acción
penal respecto del hecho de que se trate.

La extinción de la acción penal de acuerdo a lo previsto en este artículo no


perjudicará de modo alguno el derecho a perseguir por la vía civil las responsabilidades
pecuniarias derivadas del mismo hecho”

Esta norma contiene dos tipos de control a la decisión del fiscal, por una parte un
control interno que ejerce las autoridades del ministerio público, y por otra parte el
control externo que ejerce el juez de garantía, al otorgar la facultad de actuar de oficio o
a petición de cualquiera de los intervinientes, para dejar sin efecto la decisión del
ministerio público de no iniciar o abandonar la investigación, cuando el fiscal ha
excedido sus atribuciones en cuanto a tratarse de ilícitos cometidos por funcionario
público en su calidad de tal, o esta excediere el límite fijado por la ley, de ser inferior a
la pena en concreto de presidio menor en su grado mínimo, en este caso el juez de
garantía entra a velar por el cumplimiento de la normativa legal vigente, a fin de evitar
decisiones arbitrarias de los fiscales del ministerio público.

3..- Análisis del artículo 170 inciso 4, referida a las facultades de las
autoridades del ministerio público, sobre la decisión del fiscal adjunto y
juez de garantía

El inciso 4 del artículo 170 del Código Procesal Penal, no muestra un control
directo que puede ejercer las autoridades del ministerio público sobre la
investigación, no sólo sobre la posibilidad de actuar sobre la decisión de un
subalterno, fiscal adjunto, si no que además sobre la decisión del juez de
garantía, cuando esté rechazare la reclamación planteada ante él, por alguno de
los intervinientes en el proceso.

4.- Análisis crítico del artículo 247 del Código Procesal Penal, referido a la
facultad del juez de garantía a garantizar de que se cumpla el plazo máximo
para declarar cerrada la investigación de parte del ministerio público.

Finalmente podemos mencionar, como un deber eminentemente garantísta de


los derechos tanto de las victimas como del inculpado, la facultad del juez de garantía
establecida en el artículo 247 del Código Procesal Penal “Plazo para declarar el cierre
de la investigación. Transcurrido el plazo de dos años desde la fecha en que la
investigación hubiere sido formalizadas, el fiscal deberá proceder a cerrarla.

Si el fiscal no declarare cerrada la investigación en el plazo señalado, el


imputado o el querellante podrán solicitar al juez que aperciba al fiscal para que
proceda a tal cierre.
Para estos efectos el juez citará a los intervinientes a una audiencia y, si el fiscal
no compareciere a la audiencia o si, compareciendo, se negare declarar cerrada la
investigación, el juez decretará el sobreseimiento definitivo de la causa. Esta resolución
será apelable.

Si el fiscal se allanare a la solicitud de cierre de la investigación, deberá formular


en la audiencia la declaración en tal sentido y tendrá el plazo de diez días para deducir
acusación.

Transcurrido este plazo sin que se hubiere deducido la acusación, el juez, de


oficio o a petición de alguno de los intervinientes, citará a la audiencia prevista en el
artículo 249 y dictará sobreseimiento definitivo en la causa.”

Vemos que en definitiva el juez de garantía, en ausencia de decisión de cierre de


la investigación de parte del ministerio público, interviene a fin de garantizar el accionar
de la misma, velando por que se cumpla con la exigencia de plazo que establece la ley,
es decir resguarda el derecho del imputado a ser juzgado en un proceso justo y que no
sea excesivamente largo y, por su parte el derecho de la victima a que se efectúe un
juicio y sentencia dentro de un tiempo de espera razonable, que la ley lo limita a dos
años como máximo, como un plazo razonable para que cualquier investigación criminal,
se encuentre concluida.

V.- NORMAS DE INTERVENCIÓN JUDICIAL EN LA


INVESTIGACION

1.- Análisis critico del artículo 274 del Código Procesal Penal, referido a la
facultad del juez de garantía de poner límites de tiempo a la investigación
criminal.
Normas que de alguna manera parecieren limitar el ejercicio exclusivo en la
investigación, encontramos en los artículos que pasamos a analizar, mismos que nos
muestran como la intervención judicial, es buscada por el legislador procesal como una
forma de garantizar los derechos de los participes en el proceso de investigación
criminal, pero que al profundizar sobre sus alcances se puede concluir que la garantía
dentro de la investigación, puede pasar a ser una intervención del poder judicial sobre
el accionar del ministerio público:

El artículo 274 del Código Procesal Penal, establece lo siguiente “Plazo


Judicial parta el cierre de la investigación. Cuando el Juez de garantía, de oficio a
petición de alguno de los intervinientes y oyendo al ministerio público, lo considerare
necesario con el fin de cautelar las garantías de los intervinientes y siempre que las
características de la investigación lo permitieren, podrá fijar en la misma audiencia
un plazo para el cierre de la investigación, al vencimiento del cual se producirá los
efectos del artículo 247.”
Si bien esta norma legal, establece ciertos requisitos a la intervención del juez,
esto es, oír al ministerio público, la intervención debe tener como objeto cautelar las
garantías y finalmente exige que las características de la investigación lo permitieren,
nos vemos enfrentados a una situación en que el juez de garantía pone un coto al
accionar investigativo del ministerio público, detenta la facultad de limitar en el tiempo el
período de investigación, norma que de alguna manera se contrapone con lo dispuesto
en el artículo 247 del Código Procesal Penal, mismo en que el legislador ya limitó a un
máximo de dos años el tiempo de investigación con que cuenta el ministerio público.

En definitiva al facultar al juez de garantía, con la posibilidad de limitar el tiempo


de investigación, vemos que este garantizador debe de alguna manera imbuirse en la
investigación criminal y hacer una análisis más allá de sí se han respetado las garantías
en la investigación, y emitir una opinión sobre el progreso la dirección y los limites de la
investigación, de lo cual emana el problema, de un posible prejuzgamiento, frente a la
posibilidad que este juez de garantía se transforme en un juez de fondo
El límite a la investigación recién analizado, de alguna manera se relaciona con
la norma del artículo 247 del C.P.P. ya vista, pudiendo argumentar que es una forma
como el legislador nos muestra que ve con malos ojos las investigaciones
excesivamente largas cuando no se requiere. Por lo que a nuestro entender, no se
justifica los límites judiciales, si ya existe un límite legal, debiendo concluir que la
intervención judicial que establece la norma en comento, es innecesaria.

2.- Análisis critico del artículo 257 del Código Procesal Penal, referido a la
facultad del juez de garantía de reabrir una investigación criminal.

Aún mas patente la intervención judicial en la investigación, que la del artículo


274, es la facultad que se le otorga al juez de garantía cuando una investigación se
hubiere cerrado por el ministerio público, en el ejercicio de las facultades que le otorga
la ley, pueda reabrirse la investigación, esto es lo que establece el artículo 257 Código
Procesal Penal “Reapertura de la investigación. Hasta la realización de la audiencia a
que se refiere el artículo 249 y durante la misma, los intervinientes podrán reiterar la
solicitud de diligencias precisas de la investigación que oportunamente hubieren
formulado durante la investigación y que el ministerio público hubiere rechazado.

Si el juez de garantía acogiere la solicitud, ordenará al fiscal reabrir la


investigación y proceder al cumplimiento de las diligencias, en el plazo que le fijará.
Podrá el Fiscal, en dicho evento y por una sola vez, solicitar ampliación del mismo
plazo.

El juez no decretarán ni renovará aquellas diligencias que en su oportunidad se


hubieren ordenado a petición de los intervinientes y no se hubieran cumplido por
negligencia o hecho imputable a los mismos, ni tampoco las que fueran
manifiestamente impertinentes, las que tuvieran por objeto acreditar hechos públicos y
notorios ni, en general, todas aquellas que hubieren sido solicitadas con fines
puramente dilatorios.
Vencido el plazo o su ampliación, o aun antes de ello si se hubieran cumplido las
diligencias, el fiscal cerrará nuevamente la investigación y procederá en la forma
señalada en el artículo 248”.

Lo que esta norma nos muestra, es que no sólo el juez puede fijarle plazos a la
investigación, si no que permite que efectúe un análisis del fondo a la misma, para
poder establecer que las diligencias solicitas y rechazadas por el ministerio público,
son conducentes al esclarecimiento de los hechos, esta última situación en la que se
observa una clara intromisión en el ámbito de la investigación criminal.

La intromisión que se acaba de mencionar, atenta contra todo el espíritu del


nuevo procedimiento, que busca diferenciar los distintos actores que participan en el
proceso penal, no acumulando toda la carga procesal en una sola persona y, por lo
tanto, una concentración de facultades que el procedimiento inquisitivo mantenía como
una verdad incuestionable.

3.- Análisis critico del artículo 186 del Código Procesal Penal, referido a la
facultad del juez de garantía de forzar la formalización de la investigación
criminal.

Finalmente una clara intervención en los procedimientos de una investigación


criminal, lo vemos expuesto en el artículo 186 Código Procesal Penal “Control
judicial anterior a la formalización de la investigación. Cualquier persona que se
considerare afectada por una investigación que no se hubiere formalizado
judicialmente, podrá pedir al juez de garantía que le ordene al fiscal informar acerca de
los hechos que fueren objeto de ella. También podrá el juez fijarle un plazo para que
formalice la investigación.”

Artículo que busca una intervención judicial, que relacionado con los artículos 9 y
236 del Código Procesal Penal, que exigen que toda actuación del procedimiento que
prive al imputado o a un tercero del ejercicio de los derechos que la Constitución
asegura, o lo restrinjan o perturben, requerirá de autorización judicial previa, dado
que si se ve afectado en sus derechos puede recurrir a las instancias judiciales
pertinentes y no necesariamente obligar al ministerio público a formalizar una
investigación a la cual no se encuentra en la necesidad de realizar, y toda vez, que de
alguna manera el fiscal a cargo de una investigación, requiera efectuar una acción que
prive o perturbe o restrinja, como ya se menciono, requerirá necesariamente la
intervención del juez de garantía, por lo que volvemos al análisis previo, de criticar el
artículo 186 del Código Procesal Penal, en el sentido de ser innecesario, atendido a
que los derechos de todo ciudadano frente a una posible intromisión del ministerio
público, en ámbitos que no sean de su competencia, son resguardados por canales
diferentes a los que establece la norma legal en comento,

VI.- CONCLUSIONES

A la luz de las disposiciones y principios que informan el nuevo proceso penal,


hemos podido concluir que la existencia de la normativa vigente requiere de ciertos y
necesarias modificaciones en lo que dice relación al control judicial e interno a la
investigación criminal, ya que si bien, existen normas que tienen un fondo
eminentemente garantista, existen otras que, a nuestro parecer, rayan en la
intervención de la facultad exclusiva de investigación del ministerio público.

Los sistemas de control tanto internos o administrativos, como externos o


judiciales a la investigación criminal, podemos concluir lo siguiente:

1.- Sistemas de control internos o administrativos

a.- Control que no se inmiscuye en la investigación


Este tipo de control de la investigación, son aquellos que al ser analizados,
vemos que en definitiva son los que de alguna manera provocan mediante una
estructura jerarquizada, velar por el cumplimiento de las políticas institucionales dentro
del ministerio publico, situación en la cual no encontramos reparo alguno, toda vez,
que como institución jerarquizada donde existen competencias delimitadas, legal y
administrativamente, deben auto fiscalizarse a fin de evitar fallas en el proceso de
investigación y de esta manera mantener una política homogénea institucional.

b.- Control que se inmiscuye en la investigación

Este control, es el que detenta el Fiscal Nacional, mediante las atribuciones que
le confiere los artículos 18 y 19 del la Ley Orgánica del Ministerio Público, que en
definitiva es la situación que entrega a una sola persona, la posibilidad de inmiscuirse
en determinadas investigaciones, lo cual según ya se analizó no parece del todo
inadecuado, atendido a la excesiva concentración de poder en un solo actor del
sistema, pudiendo llegar a convertirse de alguna manera, en una forma de manejo de la
investigaciones criminales por una sola persona.

2.- Sistemas externos o judiciales

a.- Control judicial propiamente tal

Este control, es el que ejerce por esencia el juez de garantía dentro del marco de
sus atribuciones, que es el ente fiscalizador de la investigación por esencia, buscando
que se respeten los derechos de los intervinientes, en el marco de una investigación
criminal, lo cual no parece un lógico garantizador frente a posibles faltas legales de los
actores del nuevo sistema.

b.- intervención en la investigación


El último punto a tratar que es el caso expuesto precedentemente, por medio del
cual el juez de garantía interviene de una manera no adecuada, a nuestro entender,
dentro de la investigación criminal, reeditando los antiguos vicios del sistema inquisitivo,
al tener que prejuzgar sobre asuntos sometidos a su control.

El prejuzgamiento, es la crítica más importante que podemos mencionar dentro


del ámbito que consideramos intervencionista, ya que es uno de los principales
cuestionamientos que se le hace al sistema inquisitivo aún vigente en Chile, y que el
juicio oral vino a reemplazar
BIBLIOGRAFÍA

1.- Ley 19.696, que establece el Código Procesal Penal.

2.-Ley 19.640, que establece la Ley Orgánico Constitucional.

3.-Ley 19.718, que crea la Defensoría Penal Pública.

4.-Historia de la Ley 19.640

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