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Universidad Nacional de “San Cristóbal de Huamanga”

Facultad de Derecho y Ciencias Políticas


Escuela de Formación Profesional de Derecho

CURSO : DERECHO PENAL PARTE


ESPECIAL II

TEMA : DELITOS CONTRA LA FE PÚBLICA


FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTO (ART. 427)

PROFESOR : Javier Anaya Cardenas

INTEGRANTES :

LÓPEZ ARIAS, Edita

PALOMINO HINOSTROZA, Henry

RODRIGUEZ BONZANO, Wilber

SULCA VEGA, Cesar

SERIE : 400 – I

AYACUCHO – PERU

2009

1
INTRODUCCIÓN

Los delitos contra la fe pública, ha ocasionado en su desarrollo temas discutibles


como es el bien jurídico protegido, además de la polémica que genero en estos
últimos tiempos.
Este delito de Falsedad de Documentos ya se públicos o privados, establecido en
la descripción típica del artículo 427 del Código Penal de 1991, se encuentra
inscrito en el Título XIX del Código Penal, que alberga a los llamados delitos
contra la Fe Pública; esto manteniendo la línea que siguió el Código Penal de
1924, respecto al Código Penal Italiano de Zanardelli, que asumía esta rotulación
en un claro intento de institucionalizar el bien jurídico en boga en esos momentos,
la Fe Pública. Es indiscutible que este efecto también se dejó sentir en nuestra
legislación penal, de manera tal que hasta la actualidad se piensa que por ese
hecho ha de aceptarse, sin discusión alguna, a la Fe Pública como el bien jurídico
protegido en el Delito de Falsedad Documento, como si una simple nomenclatura
hecha por el legislador habría de constituirse en el único punto de referencia para
la Dogmática penal al momento de delimitar el bien jurídico.

La Falsedad Documento, ha generado concepciones como las de la inseguridad


y desconfianza con respecto al tráfico jurídico hasta la perspectiva que ve a la
funcionalidad del documento como el interés a proteger, expresado en la labor de
perpetuación de la declaración, de garantía del autor y de medio de prueba que el
documento desarrolla o debe presentar.

Este tipo de delito se ve cada vez más frecuente en nuestra actualidad por ello el
reconocimiento y sanciones de este tipo de delito anteriormente ya mencionado
se deben aplicar como corresponde.

2
CAPITULO I

FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTOS EN GENERAL

Consideraciones generales

El delito de falsificación de documentos es uno de los que con más frecuencia se


comete en nuestra sociedad, utilizándose en la mayoría de los casos el
documento como un instrumento para ejecutar o encubrir otros delitos.

Algunos autores manifiestan que el falsificador nunca quiere falsificar un


documento como hecho aislado, sino que acude a ello como una forma de
conseguir de manera más segura y rápida sus objetivos.

En las relaciones desarrolladas en el tráfico jurídico se observa dos fenómenos:


La confianza del público en una materialización de estas relaciones, como es el
documento; y la fragilidad que este presenta a la hora de ser alterado el contenido

3
que contribuye a fijar. Ello debido a que el documento se emplea como principal
medio de prueba de las relaciones jurídicas.

De ahí que el documento, en base a su relevancia probatoria, permite garantizar


un mínimo de seguridad jurídica en el tráfico. Con la intervención penal se
pretende compensar la alta seguridad que presenta el documento, frente a la
relativa facilidad con la que puede ser objeto de manipulación ilícita.

Desde un punto de vista de política criminal, con la tipificación de la falsificación


de documentos se tiende a la protección de aquellas acciones que, encontrando
su reflejo directo en el documento tiende indirectamente a perturbar el
desenvolvimiento cotidiano del mercado económico, esencial en los momentos
actuales.1

Evolución doctrinal del concepto bien jurídico protegido

El bien jurídico protegido en el delito de falsificación de documentos es uno de los


temas que han recibido menor atención, prefiriendo la doctrina ocuparse de temas
mas funcionales como el concepto de documentos diferencia entre falsedad y
falsificación, dolo e imprudencia.

Siguiendo la evolución doctrinal del concepto de bien jurídico en el delito de


falsificación de documento.2

Primero surge este delito como protección del derecho a la verdad, el cual es un
concepto abstracto posteriormente, se acoge como bien protegido la fe pública.
De ahí se pasa a una visión utilitaria del bien jurídico en la medida que el
documento desempaña un papel decisivo en la prueba d las relaciones jurídicas
las cuales debido al desarrollo del tráfico jurídico necesitan un instrumento de
aseguramiento del alcance las obligaciones y del derecho que constituyen su
contenido, instrumento que no puede ser otro que el documento, tradicionalmente
considerado como medio de prueba: es importante en este punto la tesis de
1
García Cantizano, “Falsedades documentales” Ed. TIRANT LO BLANCH, Valencia , 1994, págs.
33-39
2
García Cantizano, op. Cit. Págs. 45-48

4
BINDIG que sostiene el valor probatorio del documento como bien jurídico
protegido3.

En el código penal peruano los delitos de falsificación de documentos se


encuentran ubicados en el título XIX, “Delitos contra la fe pública”. De su
ubicación sistemática, la doctrina nacional deduce que el bien jurídico protegido
es la fe pública.

No obstante el bien jurídico protegido en realidad, es la funcionalidad del


documento en el tráfico jurídico, en la medida que desarrolla una triple labor: La
perpetuación documental, de garantía del autor del documento en el tráfico
jurídico, y finalmente de medio de prueba de la declaración documental 4

CONCEPTOS BÀSICOS DEL TIPO PENAL

Concepto Penal de documento

El documento tal como lo entiende actualmente la mejor doctrina, puede ser


definido como la materialización de una declaración de conocimiento o de
voluntad que permite el reconocimiento de su autor y que a la vez tiene aptitud
para la prueba de una relación jurídica o de un hecho relevante para el
ordenamiento jurídico.

Documentos públicos y documentos privados

Los documentos públicos son aquellos que han sido confeccionados o cuentan
con la intervención de un funcionario público competente (notarios federarios, o
una autoridad judicial o administrativa) cumpliendo los requisitos legales
establecidos.

3
García Cantizano, op. Cit. Págs. 110-118
4
García Cantizano, op. Cit. Págs. 133-134

5
La condición de documento público no depende de la finalidad ni del destinatario
que tiene el documento o de los efectos sociales del mismo, sino de su origen y
su intrínseca naturaleza.

El rol patagónico para determinar si un documento es público o no debe ser


asumido por el ordenamiento jurídico y específicamente por la ley y las normas
jurídicas pertinentes. De ello se deduce que no todo acto o documento en el que
participa o interviene un funcionario público, ya sea rubricando o firmando el
mismo, deberá ser reputado como documento público.

El documento privado se ocupa preferentemente de las relaciones entre


particulares. También se rigen por el Derecho privado las relaciones entre
particulares y el Estado cuando éste actúa como un particular, sin ejercer
potestad pública alguna (es, por ejemplo, el caso de las sociedades o empresas
con personalidad jurídica propia creadas según las normas de Derecho mercantil
y en las que el Estado o sus organismos autónomos ostenten un poder decisorio).

Endoso

Es una cláusula accesoria e inseparable del título de crédito, en virtud de la cual


el acreedor cambiario pone a otro en su lugar, transfiriéndole el título con efectos

La principal función del endoso es su función legitimadora: el endosatario se legíti-


ma por medio de una cadena ininterrumpida de endosos.

Titulo auténtico

Son actos indubitables de posición, pues cuentan con datos verdaderos que no
han sido alterados además se encuentran respaldados o reconocidos.

6
CAPITULO II

TITULO XIX

DELITOS CONTRA LA FE PÚBLICA

CAPITULO I

FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTO (ART. 427)

1. DESCRIPCIÓN GENERAL

Artículo 427.-Falsificación de documentos

El que hace, en todo o en parte, un documento falso o adultera uno verdadero


que pueda dar origen a derecho u obligación o servir para probar un hecho, con el
propósito de utilizar el documento, será reprimido, si de su uso puede resultar
algún perjuicio, con pena privativa de libertad no menor de dos ni mayor de diez
años y con treinta a noventa días-multa si se trata de un documento público,
registro público, título auténtico o cualquier otro transmisible por endoso o al
portador y con pena privativa de libertad no menor de dos ni mayor de cuatro

7
años, y con ciento ochenta a trescientos sesenticinco días-multa, si se trata de un
documento privado.

El que hace uso de un documento falso o falsificado, como si fuese legítimo,


siempre que de su uso pueda resultar algún perjuicio, será reprimido, en su caso,
con las mismas penas.

2. BIEN JURÍDICO PROTEGIDO

5
El bien jurídico protegido es la funcionalidad del documento en el tráfico jurídico.

Para Flavio García del Río la teoría de la fe pública advierte dos posibles
nociones: la primera entendida como una imposición del Estado o concepción
estatalista y la segunda como derivación de la confianza general sobre objetos,
formas y signos conocida como el valor social de la fe pública 6.

La Fe Pública como bien jurídico protegido plasma un criterio subjetivo, donde lo


primordial es la correspondencia del documento con la realidad, sea por estar
garantizado por el Estado o el consenso común. Es así, que genera una confianza
de los ciudadanos en los documentos que facilita las relaciones de convivencia.

José Luis Castillo manifiesta que el bien jurídico protegido es la seguridad y la


fiabilidad del trafico jurídico que puede ser definido como conjunto de condiciones
que facilitan la comunicación entre los individuos y sus relaciones de derecho en
que se desenvuelve el conjunto de relaciones jurídicas como consecuencia de la
relación y de la autenticidad de los actos que las crean, modifican o extinga.

TESIS EN TORNO AL BIEN JURIDICO PENALMENTE TUTELADO EN LOS


DELITOS CONTRA LA FE PÚBLICA.
5
Bramont – Arias Torres, Luis Alberto y Dra. Maria del Carmen García Cantizano “Manual de
Derecho Penal Parte Especial” Ed. SAN MARCOS, Lima- Perú , 1994, págs. 445-446.
6
José Luis Castillo Alva, “La Falsedad Documental”, Jurista Editores. Lima. 2001. pag. 19.

8
Las tesis referidas son los siguientes7:

A).- TESIS QUE SOSTIENE QUE LO QUE SE PROTEGE MEDIANTE


ESTOS DELITOS ES LA FE PÚBLICA POR SÍ MISMA, para que se
configure el tipo delictivo sólo bastará que se ponga en riesgo el bien
jurídico, de esta manera nos encontramos ante un tipo de mera
actividad, de peligro abstracto, en donde será suficiente que el agente
altera o desfigure material o ideológicamente el documento. No será
necesario que se compruebe la idoneidad o eficacia de tal alteración,
pues bastará que la misma esté dirigida a defraudar la confianza de
los que participan en el tráfico jurídico. Tampoco se requerirá que el
documento falsificado ocasione perjuicio a terceros de manera
efectiva8.

B).- TESIS QUE SOSTIENE QUE LO QUE SE PROTEGE ES LA


CONFIANZA DE LOS INTEGRANTES DE LA SOCIEDAD EN LOS
INSTRUMENTOS A LOS CUALES LA LEY LE OTORGA A LA FE
PÚBLICA: SUS CONSECUENCIAS EN LA CONFIGURACIÓN DE
LOS TIPOS; la configuración de los tipos requerirá que el agente no
sólo ponga en peligro abstracto el bien jurídico fe pública, sino que
será necesario que la falsificación o alteración del documento sea
idónea para mantener la confianza que aquél merezca como portador
de la fe pública.

En base esta tesis, los tipos se configurarán, como mínimo,


recurriendo a la técnica legislativa de los delitos de peligro concreto o
bien el legislador tipificará estos ilícitos penales desde el resultado9.

El sentimiento de confianza es doble10:

7
Flavio Gracia del Río. Delitos Contra la Fe Pública. Ediciones Legales. Editorial San Marcos. Lima.
2007. Pág. 12
8
Flavio García del Río, Pág. 13.
9
Flavio García del Rió, Pág.14.
10
Luis Romero Soto. “La Falsedad Documental”. Temis. Bogota. 1995. Pág. 25.

9
a) En cuantos sólo determinados hechos que corresponde a otras
tantas necesidades de la sociedad pueden expresarse en las
formas establecidas en esta.

b) Para que siempre que se presente estas formas, se pueda creer


confiadamente que existen estos hechos.

Este sentimiento de creencia en la fe se convierte en un estado de


conciencia y se comprometa con la persona psíquica de cada uno de
nosotros, en forma de constituir una exigencia espiritual de nuestra
vida. Tal expresión sentimental se eleva a la categoría de un bien
inmaterial de la vida de relación social y se convierte en un motivo de
la conducta humana. Se tiene, entonces, el bien de la fe pública,
entendido como fe o creencia colectiva y que no es más que la
proyección de una forma sentimental, determinada por las condiciones
de la vida social.

A opinión de DONNEDIEU DE VABRES la fe pública es un bien


colectivo que consiste en un interés para todos en la autenticidad y
sinceridad de las formas escritas, esto no de cualesquiera, sino de
aquellas cuyo valor ha consagrado la ley al atribuirles una eficacia
jurídica. De este modo, la fe pública no es un sentimiento de confianza
que nace espontáneamente de los individuos que componen la
sociedad, sino una confianza dirigida, impuesta hecha obligatoria por
la autoridad social. Tampoco se trata de un interés jurídico que tenga
por sujeto a una persona determinada, ni siquiera al Estado, sino a
todos los miembros de la sociedad: la fe pública es un interés
colectivo.

C).- TESIS INTERMEDIA O ECLÉCTICA, la protección es en parte estricto


y en otra parte a la confianza de las personas respecto de ciertos
objetos o actos, cuya autenticidad o veracidad es necesario preservar
por la función social que desempeñan11.
11
Flavio García del Río, Pág.14

10
Según la legislación penal peruana vigente, el bien jurídico protegido
es la Fe Pública, definida como "la confianza que prestan los
ciudadanos a determinadas formas u objetos que juegan un papel
especial dentro de las relaciones sociales que se desenvuelven en el
tráfico jurídico; la falsedad ataca a la fe pública cuyo titular es la
colectividad, y que es identificado con un sentimiento respecto a
ciertos objetos y símbolos". Entonces, el titular del bien jurídico "Fe
Pública" es la sociedad y no necesariamente El Estado, entendido
como la organización política de la misma, siendo ello así, es la
sociedad la víctima o agraviada12.

D).- TESIS QUE CONSIDERA A LA FALSEDAD COMO UNA


INFRACCIÓN CONTRA LOS MEDIOS DE PRUEBA Y LOS SIGNOS
DE IDENTIFICACIÓN; vincula estrechamente la teoría de las
falsedades con la teoría de la prueba y, por otro lado, se considera que
resulta insuficiente vincular la actividad falsearia con la fe pública. Este
planteamiento teórico sostiene que lo que se tutela es la fe pública
sancionadora, es decir, las cosas, documentos y signos a los cuales el
Estado vincula la idea de autenticidad y de veracidad, y por otra parte,
de tomar en cuenta la alteración de la verdad en la medida en la que
aparece como medio para causar ulteriores lesiones, induciendo a
alguien en error acerca de un hecho en el cual fundará un juicio 13.

E).- TESIS QUE SOSTIENE QUE LA FE PÚBLICA ES UNA APARIENCIA


JURÍDICA14; de carácter objetivo que hace consistir este bien jurídico
no en un sentimiento, ni en una orden de la autoridad, sino en la
protección de la apariencia jurídica; es decir, de un hecho que se
conforma, en su aspecto, a ciertas normas jurídicas de cuya existencia
se tiene conocimiento y que permite inferir la existencia de otros

12
Gómez Basauri, Lucia.”La exigencia en la expedición de resoluciones. ministeriales autoritativas y
la intervención del procurador público cuando el interés del Estado lo requiera”. www.amag.edu.pe/ estafeta
juridica.
13
Flavio García del Río, Pág.15
14
Luis Romero Soto. ob.cit.. pag. 34.

11
hechos también de significación en derecho, esto es del aspecto de
determinados objetos como los documentos, sellos y monedas.

Entonces, el fenómeno de la apariencia como interés jurídico tutelado,


es doble:

Por un parte, tiene un aspecto objetivo de carácter material, que


consisten en un hecho manifestante, y por otra parte, un aspecto
objetivo inmaterial, que es el hecho manifestado.

3. TIPICIDAD OBJETIVA

3.1. FALSEDAD PROPIA (Art. 427 primer párrafo)

3.1.1. Sujeto activo

La creación de un documento falso puede ser cometida tanto por el funcionario


público, como el particular y puede recaer tanto par un documento público como
privado. Ello no supone, que la falsedad de documento público solo puede
acometerse por un particular y que la falsedad de documento privado puede ser
cometida por el funcionario público, en virtud que la comisión de la falsedad no se
encuentra condicionada a la calidad del autor.

Bramont Arias15 enseña con respecto al sujeto activo, dividiéndolo en lo siguiente

a. Hacer en todo en parte, un documento falso: Sujeto activo puede ser


cualquiera en principio, con excepción del autor del documento en los
supuestos de realización de un documento enteramente falso, puesto que en
este último caso estará haciendo un documento mentiroso, esto es
ideológicamente falso, ya que el documento en si será siempre genuino, en la
medida en que el documento recoge lo que efectivamente el autor apuesto ;
15
BRAMONT ARIAS TORRES, Luis Alberto y GARCÍA CANTIZANO, María del Carmen. “Manual de Derecho
Penal Parte Especial” Ed. SAN MARCOS, Lima- Perú, 1998, págs. 626 – 627.

12
no respondería por este delito , aunque si por ejemplo de estafa, de concurrir
los demás elementos típicos en este delito.

b. Adulterar uno verdadero: Sujeto activo puede ser cualquier persona.

3.1.2. Sujeto pasivo

Es la sociedad, en particular la colectividad.

3.1.3. Comportamiento

El objeto material del delito es el documento. El cual se entiende como toda


declaración materializada procedente de una persona que figura como su autor
cuyo contenido tienen eficacia probatoria en el ámbito del tráfico jurídico.

Entonces se puede deducir que los elementos básicos son : la mención del autor,
circunstancia que conecta directamente con la autenticidad del documento; la
forma (lo que nos llevaría a la interesante problemática en la actualidad se suscita
en torno a la posibilidad de incluir al documento informático como objeto material
de este delito); y el contenido que, según se deduce de lo dispuesto en el art. 427
consistiría en la constitución de un derecho u obligación o simplemente en
cualquier hecho para el cual el documento este destinado a probar ( en relación
con esto se habla de la veracidad del documento, de tal forma que documento
verdadero seria aquel cuyo contenido coincide el objeto serio, para cuya
constancia el documento ha sido realizado).

El código penal menciona distintas categorías de documento: documento público,


registro público, título autentico o cualquier otro transmisible por endoso o al
portador y documento privado. Todas estas categorías son reducibles a dos
básicas: documento público y privado.

El documento público es a que ha sido formalizado de acuerdo con los requisitos


legalmente establecidos por un notario por otro funcionario que ejerza las labores
de fedatario público. También debe incluirse el registro público.

13
Sin embargo el código penal equipara a documento público a testamento ológrafo
y cerrado, los títulos valores y los títulos de crédito transmisibles por endoso o al
portador, a efectos de pena, tales documentos quedan equiparados al documento
público, aunque en realidad, no lo sean.

Documento privado es todo aquel que no esta incluido dentro del concepto de
documento público.

En síntesis el comportamiento consiste en hacer, en todo o en parte, un


documento falso o adulterar uno verdadero que pueda dar origen a derecho u
obligación o servir para probar un hecho. Por tanto el comportamiento se puede
hacer de dos maneras:

1. Hacer en todo en parte, un documento falso:

Consiste en la realización de un documento falso.

Por realizar un documento falso se entiende la creación de un documento que no


existía anteriormente, en donde se hace constar los derechos, obligaciones o
hechos que no corresponden con el contenido cierto que el documento debería
constar. Sin embargo es necesario precisar que no puede identificarse realizar un
documento enteramente falso a la realización de un documento solo en parte
falso, puesto que esta última conducta estaría ya en abarcada por la segunda
modalidad típica comprendida en el artículo de análisis. Es decir, quien altera solo
una parte del contenido de un documento también esta realizando un documento
en parte falso16.

Asimismo, PIZARRO GUERRERO17, señala que: “el hacer, en todo o en parte, un


documento falso equivale a crear, fabricar o confeccionar un documento. El
documento falso, tal como se encuentra regulado en nuestra legislación, requiere

16
BRAMONT ARIAS TORRES, Luis Alberto y GARCÍA CANTIZANO, María del Carmen. Ob. Cit. Pág.
626.
17
PIZARRO GUERRERO, Miguel Angel. Derecho Penal V. Universidad Inca Garcilaso de la Vega. Sistema
a distancia. Lima 2008. pág. 359.

14
que su preparación o su confección corra a cargo de una persona y que él mismo
– al menos en su literalidad – no existe previamente. Si en caso el documento
tuviera una existencia previa o anterior a la acción material y solo se modificara
uno de sus elementos o signos de autenticidad, se habrá realizado la segunda
clase de conducta típica: la adulteración.

Un documento auténtico cuando las manifestaciones contenidas en el soporte


material pertenecen al sujeto que las emite y cuyo nombre, firma, rúbrica u otro
signo identificatorio está consignado. La autenticidad no depende, ni se encuentra
condicionada a si lo que se dice es verdad, toda vez que lo que se protege aquí
no es la confianza en el contenido, sino la confianza en la atribución o pertenencia
de la declaración. No interesa ni es relevante si lo que se afirma o niega es
verdad o es mentira, pues la coincidencia de la declaración documental con la
realidad no se toma en cuenta, sino la relación que existe entre la declaración,
como emanación y expresión del pensamiento con el sujeto que realmente lo
realizó.

La prueba que en la falsedad documental material se castiga la vulneración de la


función de autenticidad del documento y que se sanciona toda conducta que la
afecte a pesar de que signifique el respeto a la verdad o importe una coincidencia
de la declaración con la realidad lo da de manera clara el castigo de la llamada
falsedad veraz la cual supone la atribución de una declaración documental a la
persona que no la hizo a pesar que se respeta la verdad de los hechos.
No hay falsedad documental material cuando el documento se basa en un hecho
o acto jurídico inexistente siempre y cuando sea suscrito o declarado por el mismo
autor que así lo hace constar.

De modo abreviado se puede afirmar que un documento es inauténtico cuando


engaña o miente sobre la identidad del autor de la declaración o existe una
discrepancia entre el autor que figura como autor aparente y el verdadero autor de
la declaración, o la imputación o atribución de la autoría de la declaración es falsa
o mendaz”.

15
La vulneración de la función de autenticidad del documento puede ocurrir, según
Soler, de dos maneras: a) Atribuyendo la manifestación a alguien que no es su
autor, b) Atribuyendo la manifestación propia a una persona supuesta, ya sea
utilizando un nombre real o inventado18.

2. Adulterar uno verdadero:

A diferencia del comportamiento anterior, aquí es necesaria la previa existencia


de un documento verdadero. El comportamiento se realiza cuando se adultera,
esto se altera dicho documento.
Ejemplo: La alteración de la fecha o la cantidad en un contrato o en una letra de
cambio19.

PIZARRO GUERRERO20 señala que: “Según el diccionario de la Real Academia


de la Lengua, el significado de adulterar es “viciar, falsificar una cosa”. Desde el
prisma y ángulo del delito de falsedad documental la doctrina la ha considerado
como una modalidad típica intermedia entre la supresión del documento y la
creación o formación total del mismo. Se le define como la ejecución de cualquier
variación o modificación (parcial o total), en la declaración fijada en el soporte
material o en cualquier otro extremo o parte esencial del documento como la
fecha o el lugar. Para que exista alteración – o adulteración en palabras de la ley
– es necesario que el documento tenga existencia material, aunque sea nulo o
anulable, y que se encuentre concluido o terminado, a pesar que no es
indispensable que efectivamente haya ingresado al tráfico jurídico.

La creación o formación total se distingue de la adulteración porque en la primera


o bien se elabora completamente un documento nuevo, colocando una supuesta y
fingida declaración documental o bien sólo se afectan los signos de autenticidad
de la declaración documental, quebrantándose la necesaria identidad entre el
autor aparente y el autor real; mientras que en la segunda se requiere que el
documento ya exista, es decir se exige una determinada declaración de

18
Soler, Sebastián; Derecho Penal Argentino; TV; Pág. 323.
19
BRAMONT ARIAS TORRES, Luis Alberto y GARCÍA CANTIZANO, María del Carmen. Ob. Cit. Pág.
627
20
PIZARRO GUERRERO, Miguel Angel. Derecho Penal V. ob. Cit. Pág. 361.

16
pensamiento fijada en un soporte material; y que dicha autoría deba ser imputable
a una persona, natural o jurídica, manteniendo los signos (firma, nombre o
rúbrica) que permitan identificar a su autor.”

3.2. FALSEDAD IMPROPIA O FALSEDAD DE USO (ART. 427, SEGUNDO


PÁRRAFO DEL C.P)

3.2.1. Sujeto activo:

Bramont Arias señala que el sujeto activo puede ser cualquier persona, con
excepción del autor en el delito precedente o del partícipe en él.

3.2.2. Sujeto pasivo:

Es la colectividad.

3.2.3. Comportamiento:

El uso del documento falso: PIZARRO GUERRERO21 menciona que: “la ley
señala como verbo y conducta rectora del segundo párrafo el hacer uso de un
documento falso. Se debe entender por usar, tal como lo define el diccionario de
la Real Academia de la Lengua, “El hacer servir una cosa para algo o ejecutar una
cosa habitualmente o por costumbre”.

El hacer uso requiere desde el punto de vista gramatical y jurídico la realización


de una determinada actividad, intencional y externa, dirigida hacia un determinado
fin que en el caso de la segunda modalidad de la falsedad material será el
introducir el documento en el tráfico jurídico. La ley requiere un uso real y efectivo;
no basta con un uso potencial. La estructura típica del comportamiento sólo
permite abrazar y valorar jurídicamente a las conductas activas y no a la omisión,
sea propia e impropia.

21
PIZARRO GUERRERO, Miguel Angel. Derecho Penal V. ob. Cit. Pág. 361.

17
El delito se encuentra estructurado sobre la base de la acción de usar, y no de
tener.

Cuando la ley alude a la necesidad que se use o emplee el documento falso o


falsificado, se debe entender que comprende tanto a la creación de un documento
falso o la adulteración de uno verdadero, recogiéndose cualquiera de sus
modalidades típicas de la falsedad material”.

4. TIPICIDAD SUBJETIVA

4.1. FALSEDAD PROPIA (Art. 427 primer párrafo)

Se requiere el dolo, es decir, el conocimiento y voluntad de utilizar un documento


falso o falsificarlo, abarcando además la intención de emplearlo como si fuera
legítimo, circunstancia esta que no constituye elemento subjetivo del tipo, distinto
del dolo22.

PIZARRO GUERRERO23 enseña que: El tipo subjetivo del delito de falsedad


documental solo puede cometerse mediante la conducta típica dolosa,
excluyéndose cualquier modalidad de la culpa, sea consciente e inconsciente.

Existe un elemento subjetivo condicional en el tipo penal, la expresión “con el


propósito de utilizar el documento”. Como señala Castillo Alva, de esta expresión
se puede deducir tres consecuencias.

En primer lugar resulta indispensable que el sujeto tenga la firme intención y la


voluntad de utilizar el documento en el tráfico jurídico. Lo que la ley pretende
enmarcar aquí es que el autor debe querer, después de la acción de falsificación,
introducir el documento falso en el tráfico jurídico. El verbo utilizar que apela
nuestra ley en la formulación de la falsedad documental supone la intención o el

22
BRAMONT ARIAS TORRES, Luis Alberto y GARCÍA CANTIZANO, María del Carmen. Ob. Cit. Pág.
628
23
PIZARRO GUERRERO, Miguel Angel. Derecho Penal V. ob. Cit. Pág. 362.

18
elemento subjetivo distinto del dolo dirigido a emplear e introducir el documento
en la amplia gama de relaciones jurídicas y sociales.

Cualquiera de las acciones típicas realizadas por el autor no basta ni es suficiente


para colmar la tipicidad del Art. 427 si no se buscan emplear el documento,
introduciéndolo en el tráfico jurídico.

En segundo lugar y en orden de la determinación del momento consumativo del


delito de falsedad material, es necesario subrayar que a la ley no le interesa ni
supedita el castigo y su operatividad al hecho que el autor introduzca, coloque o
involucre al documento dentro del tráfico jurídico (salvo la hipótesis del segundo
párrafo del Art. 427).

En tercer lugar si el autor de la falsificación no posee ni tiene el propósito de


utilizar el documento, es decir si no se pretende introducirlo en el tráfico jurídico,
no habrá delito ni oportunidad de fijar forma alguna de responsabilidad penal dado
que no se cumplirá con el elemento subjetivo distinto al dolo establecido por la
ley.
Uno de los aspectos más importantes de la problemática del tipo subjetivo de la
falsedad material representa la interpretación de la terminología legal de “si de su
uso puede resultar algún perjuicio”.

Aquellos que interpretan que la posibilidad de perjuicio o el perjuicio a modo de


una condición objetiva de punibilidad llegarán necesariamente a la conclusión,
como consecuencia lógica de asumir ese planteamiento, que el dolo no debe
abarcar dicha posibilidad de perjuicio. Bajo la mencionada premisa la conciencia y
la voluntad se dirigirá fundamentalmente hacia las acciones típicas de la falsedad
documental; la creación o el hacer un documento falso o el adulterar uno
verdadero.

4.2. FALSEDAD IMPROPIA O FALSEDAD DE USO (ART. 427, SEGUNDO


PÁRRAFO DEL C.P)

19
Bramont Arias24 señala que: “se requiere el dolo, es decir, el conocimiento y
voluntad de hacer un documento falso o adulterar uno verdadero. Además, se
exige un elemento subjetivo del tipo que es el propósito de utilizar el documento,
es decir, la finalidad de emplear dicho documento en el tráfico jurídico. Dada la
redacción de la conducta en el artículo 427 del Código Penal pareciera que no se
incluye dentro del elemento subjetivo del tipo la finalidad de causar un perjuicio
mediante el empleo del documento, sino que sería una condición objetiva de
punibilidad”.

5. GRADOS DE DESARROLLO DEL DELITO: TENTATIVA Y CONSUMACIÓN

5.1. FALSEDAD PROPIA (Art. 427 primer párrafo)

El delito se consuma con la realización de un documento falso o la adulteración


de uno verdadero. Por tanto, no se requiere que el sujeto activo emplee dicho
documento, es decir, que lo introduzca en el tráfico jurídico, siendo suficiente con
que tenga dicho propósito.

No hay inconveniente en admitir la tentativa, por ej., el cajero de un banco que


sorprende a una persona borrando la cantidad o la fecha de un cheque.

5.2. FALSEDAD IMPROPIA O FALSEDAD DE USO (ART. 427, SEGUNDO


PÁRRAFO DEL C.P)

El delito se consuma con el uso o el empleo del documento falso o falsificado,


esto es, con la introducción del objeto material en el seno del tráfico jurídico. La
posesión del documento, previo al uso, ya sería constitutiva de tentativa.

Condición objetiva de punibilidad

24
BRAMONT – ARIAS TORRES, Luis Alberto. Ob. Cit. Pág. 627.

20
Bramont Arias25 enseña que al incluirse una condición objetiva de punibilidad se
está indicando que el hecho es típico y antijurídico, y que el sujeto activo es el
culpable. Pero además, y por razones de política criminal, se exige para la
punibilidad que del uso del documento pueda resultar un perjuicio, en caso
contrario, el hecho no se castigará26.

En la práctica, la razón por la que los casos de falsificación de documentos llegan


al Poder Judicial estriba en la causación de un perjuicio, por lo que esta condición
objetiva de punibilidad no genera mayores problemas de aplicación.

CONSUMACIÓN

Para la doctrina, consumación formal es la plena realización del tipo en todos sus
elementos, significa que el agente alcance el fin típico planeando mediante los
medios que utiliza. La consumación material o terminación del delito, es aquella
en la que el autor no sólo realiza todos lo elementos típicos, sino que, además,
consigue satisfacer la intención que perseguía. En la medida en que esta
consumación material está más allá de las previsiones típicas carece de
relevancia jurídico penal; es el llamado delito agotado.

La consumación es una cuestión que afecta solamente a la tipicidad. Si el tipo


penal exigiera ocasionar un perjuicio efectivo (esto es el perjuicio como un
elemento del tipo), por tratarse de un delito de resultado, sí sería posible hablar de
tentativa, puesto que hay tentativa cuando el agente comienza la ejecución de un
delito que decidió cometer, sin consumarlo.

25
BRAMONT – ARIAS TORRES, Luis Alberto. Ob. Cit. Pág. 628.
26
En contra, Soler, Derecho Penal Argentino, T.V. OP. CIT. Ps. 343 – 352, quien indica que la posibilidad
del perjuicio es abarcada por el dolo. Bramont arias no comparte esta opinión puesto que si se parte de que el
conocimiento de que el dolo es el conocimiento de y voluntad de realizar el tipo objetivo de un delito, y no
se admite el perjuicio dentro de la tipicidad objetiva – así Soler – afirmar que la posibilidad del perjuicio es
abarcada por el dolo es caer en una contradicción; García Cantizano, Falsedades Documentales, quien
rechaza el perjuicio como contenido del Dolo falsario, en la medida en que desvirtúa el verdadero contenido
del bien jurídico protegido por este delito, cuya existencia quedaría supeditada a la efectiva lesión de otros
bienes jurídicos, que nada tienen que ver con aquel.

21
Por el contrario, si se tiene en cuenta que se exige dentro del tipo penal el peligro
potencial, por tratarse ahora de un delito de peligro, se considera que no cabe la
tentativa.

Se ha afirmado que en los delitos con condiciones objetivas de penalidad, la


consumación no se produce hasta que no se cumple la condición 27.

Para Luis Bramont-Arias y María García manifiestan que el delito se consuma con
la realización de un documento falso o la adulteración de uno verdadero. Por
tanto, no se requiere que el sujeto activo emplee dicho documento, es decir, que
lo introduzca en el tráfico jurídico, siendo suficiente con que tenga dicho
propósito28. Se requiere, entonces, por lo menos, la intención de introducir el
documento en el tráfico jurídico, para exigir la consumación del delito, situación
muy distinta a la posibilidad de causar algún perjuicio.
Gómez, señala que bastando el perjuicio potencial, el delito se produce cuando se
hace uso del documento falsificado 29. En este mismo sentido parece pronunciarse
Fidel Rojas para quien la consumación de la mayoría de estos casos se halla
condicionada a la verificación de elementos finalísticos condicionantes, es decir,
que del uso de los documentos puedan (sic) generar perjuicio. 30 Para este autor
el nivel de probabilidad del perjuicio no es necesariamente actual, sin embargo,
por la forma como se manifiesta, aparentemente, se requeriría de forma necesaria
la utilización del documento para consumar el delito.

Chauveau y Hélie señalan que la alteración se puede haber cometido a sabiendas


y voluntariamente y sin embargo no habrá todavía delito, pues hace falta que se
haya cometido con fraude, es decir, con el deseo de perjudicar a otro. En la
realidad, el delito de falsedad no se consuma nada más que por el uso de la pieza
en detrimento de otra persona. José Peco anota que la falsificación documental
se consuma no al ejecutar el acto público con la conciencia y la voluntad de hacer
un instrumento, sino además cuando concurre la representación de la posibilidad

27
Francisco Muñoz Conde; “Teoría General del Delito”; pag. 141.
28
Luis Alberto Bramont- Arias Torres y María del Carmen García Cantizano; “Manual de Derecho
Penal”; pag. 627.
29
Citado por Manuel Ossorio y Florit, “Falsificación de documentos en general en Enciclopedia
Jurídica Omeba, Tomo XI”, pág. 896.
30
Sebastián Soler; “Derecho Penal Argentino – Tomo V”, pag. 501.

22
del perjuicio. Si se ejecutase el acto con convencimiento de que no envuelve
peligro alguno, no habría delito.

6. PENALIDAD

La pena privativa de libertad no menor de do9s ni mayor de diez años y con


treinta a noventa días- multa si se trata de un documento público si se trata de
documento público, si se trata de documento privado pena principal privativa de
libertad no menor de dos ni mayor de cuatro años, y una pena accesoria de multa
de ciento ochenta días-multa.

CAPITULO III

FALSIFICACION DE DOCUMENTOS EN EL DERECHO COMPARADO

1. BOLIVIA

UBICACIÓN:

23
Título IV “Delitos contra la Fe Pública, en el Capítulo III bajo la denominación
“Falsificación de Documentos en General”, Artículos: 198,199, 200.

SUPUESTOS:
- El que forje en todo o en parte documento falso.
- El que altere uno verdadero.
- Que pueda resultar perjuicio.

Se agrava cuando es funcionario público que comete en ejercicio de sus


funciones.

PENAS:
- Cuando es documento público: pena de privación de libertad de 1 a 6 años.
- Cuando es documento privado: pena de privación de libertad de 6 meses a
2 años
Forma Agravada:
- Si el autor es funcionario público en ejercicio de funciones, falsea un
documento público pena de privación de libertad 2 a 8 años.

2. ARGENTINA

UBICACIÓN:

Título XII “Delitos contra la Fe Pública, en el Capítulo III bajo la denominación


“Falsificación de Documentos en General”, Artículo 292.

SUPUESTOS:

- El que hiciere un documento falso en todo o en parte.


- El que adultere uno verdadero.
- Que pueda resultar perjuicio.

24
Se agrava cuando para acreditar la identidad de una persona, la titularidad de
dominio, habitación para circular vehículos automotores.

PENAS:

- Cuando es documento público: pena de privación de libertad de 1 a 6 años.


- Cuando es documento privado: pena de privación de libertad de 6 meses a
2 años

Forma Agravada:

- Si es para acreditar la identidad de una persona, la titularidad de dominio,


habitación para circular vehículos automotores pena de privación de
libertad 3 a 8 años.
3. COLOMBIA

UBICACIÓN:

Título VI “Delitos contra la Fe Pública, en el Capítulo III bajo la denominación


“Falsedad en documentos”, Artículos: 218, 219, 220, 221.

SUPUESTOS:

- El que forje en todo o en parte documento falso.


- El que altere uno verdadero.
- Que pueda resultar perjudicial.

Se agrava cuando es funcionario público que comete en ejercicio de sus


funciones.

PENAS:

- Cuando es documento público: pena de privación de libertad de 2 a 8 años.

25
- Cuando es documento privado: pena de privación de libertad de 1 meses a
6 años

Forma Agravada:

- Si el autor es funcionario público en ejercicio de funciones, falsea un


documento público pena de privación de libertad 3 a 10 años.

4. CHILE

UBICACIÓN:

Título IV “DE LOS CRIMENES Y SIMPLES DELITOS CONTRA LA FE PUBLICA,


DE LAS FALSIFICACIONES, DEL FALSO TESTIMONIO Y DEL PERJURIO, en el
número 4 bajo la denominación de “De la falsificación de documentos Públicos o
Auténticos” Artículos 193,194.

SUPUESTOS:

El que comete falsedad:

- Contrahaciendo o fingiendo letra, firma o rúbrica.


- Suponiendo en un acto la intervención de personas que no la han tenido.
- Atribuyendo a los que han intervenido en él declaraciones o
manifestaciones diferentes de las que hubieren hecho.
- Faltando a la verdad en la narración de hechos sustanciales.
- Alterando las fechas verdaderas. Haciendo en documento verdadero
cualquiera alteración o intercalación que varíe su sentido.
- Dando copia en forma fehaciente de un documento supuesto, o
manifestando en ella cosa contraria o diferente de la que contenga el
verdadero original.
- Ocultando en perjuicio del Estado o de un particular cualquier documento
oficial.
26
PENAS:

- Cuando es empleado público: pena de presidio no menor en su grado


máximo a mayor en su grado mínimo.
- Cuando es particular: pena de presidio no menor en sus grados medio a
máximo.

5. ESPAÑA

UBICACIÓN:

Capítulo II “De las falsedades documentales” Sección 1, bajo la denominación


“DE LA FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTOS PÚBLICOS, OFICIALES, Y
MERCANTILES Y DE LOS DESPACHOS TRASMITIDOS POR SERVICIOS DE
TELECOMUNICACIÓN”, Artículos 390.391,392.

SUPUESTOS:

El funcionario público que:

- Alterando un documento en alguno de sus elementos o requisitos de


carácter esencial.
- Simulando un documento en todo o en parte, de manera que induzca a
error sobre su autenticidad.
- Suponiendo en un acto la intervención de personas que no la han tenido, o
atribuyendo a las que han intervenido en él declaraciones o
manifestaciones diferentes de las que hubieran hecho.
- Faltando a la verdad en la narración de los hechos.

PENAS:

27
- Cuando es autoridad o funcionario público pena de prisión de 3 a 6 años y
multa de 6 meses a 24 meses; inhabilitación de 2 a 6 años.
- Cuando es particular pena de prisión de 6 meses a 3 años y multa de 6 a 1
2 meses

6. MEXICO

UBICACIÓN:

Libro Segundo. Título Décimo Tercero “Falsedad” , en el Capítulo IV bajo la


denominación “Falsificación de Documentos en General”, Artículo 243,244.

SUPUESTOS:

La falsificación de documentos se comete por algunos de los medios siguientes:


- Poniendo una firma o rubrica falsa, aunque sea imaginaria, o alterando una
verdadera;
- Aprovechando indebidamente una firma o rubrica en blanco ajena,
extendiendo una obligación, liberación o cualquier otro documento que
pueda comprometer los bienes, la honra, la persona o la reputación de
otro, o causar un perjuicio a la sociedad, al estado o a un tercero;
- Alterando el contexto de un documento verdadero, después de concluido y
firmado, si esto cambiare su sentido sobre alguna circunstancia o punto
substancial, ya se haga añadiendo, enmendando o borrando, en todo o en
parte, una o más palabras o cláusulas, o ya variando la puntuación;
- Variando la fecha o cualquiera otra circunstancia relativa al tiempo de la
ejecución del acto que se exprese en el documento;
- Atribuyéndose el que extiende el documento, o atribuyendo a la persona en
cuyo nombre lo hace: un nombre o una investidura, calidad o circunstancia
que no tenga y que sea necesaria para la validez del acto;
- Redactando un documento en términos que cambien la convención
celebrada, en otra diversa en que varíen la declaración o disposición del

28
otorgante, las obligaciones que se propuso contraer, o los derechos que
debió adquirir; -
- Añadiendo o alterando cláusulas o declaraciones, o asentando como
ciertos hechos falsos, o como confesados los que no lo están, si el
documento en que se asientan, se extendiere para hacerlos constar y
como prueba de ellos; -
- Expidiendo un testimonio supuesto de documentos que no existen; dándolo
de otro existente que carece de los requisitos legales, suponiendo
falsamente que los tiene; o de otro que no carece de ellos, pero agregando
o suprimiendo en la copia algo que importe una variación substancial, y
- Alterando un perito traductor o paleógrafo el contenido de un documento, al
traducirlo o descifrarlo.-
- Elaborando placas, gafetes, distintivos, documentos o cualquier otra
identificación oficial, sin contar con la autorización de la autoridad
correspondiente.

PENAS:

- Cuando es documento público: pena de prisión de 4 a 8 años y 200 a 360


días multa.
- Cuando es documento privado: pena de prisión de 6 meses a 5 años y de
180 a 360 días multa.

Forma Agravada:

- Si es funcionario público aumenta la pena hasta en una mitad.

7. CUBA

UBICACIÓN:

29
Título VII “Delitos contra la Fe Pública, en el Capítulo III bajo la denominación
“Falsificación de Documentos” Sección primera falsificación de documentos
públicos .Artículo 250, 257.

SUPUESTOS:

El que:
 Confeccione, en todo o en parte, un documento público falso o altere uno
legítimo.
 Contribuya a consignar en un documento público, datos, declaraciones o
hechos inexactos relativos al acto de que el documento es objeto.
 Intercale cualquier documento en protocolo, registro o libro oficial sin
cumplir las formalidades legales.
 En perjuicio del interés nacional o de una persona, suprima, oculte o
destruya un documento de la clase expresada.
 El que, con conocimiento de su falsedad, haga uso de un documento
público falsificado por otro, o se aproveche de él en cualquier forma, o lo
tenga en su poder para usarlo.

Se agrava si el delito lo comete un funcionario público, con abuso de sus


funciones

PENAS:

- Cuando es documento público: pena de privación de libertad de 3 a 8 años.


- Cuando es documento privado: pena de privación de libertad de 3 meses a
1 año o multa de 100 a 300 cuotas.

Forma Agravada:

- Si el delito lo comete un funcionario público, con abuso de sus funciones la


pena es de 5 a 12 años.

30
- Están penados los actos preparatorios con la misma sanción cuando es
contra la Seguridad del Estado, el tribunal puede rebajarlo a sus límites
mínimos.

31
FALSIFICACION BOLIVIA ARGENTINA COLOMBIA CHILE ESPAÑA MEXICO CUBA
MATERIAL

Pena privativa Pena privativa Pena privativa Pena privativa Pena Multa Pena Multa Pena privativa
Libertad Libertad Libertad Libertad privativ privativ Libertad
a a
Liberta Liberta
d d
NO MENOR EN
DOCUMENTO 1 A 6 AÑOS 1 A 6 AÑOS 2 A 8 AÑOS SU GRADO 3 A 6 6 A 4 A 8 200 A 3 A 8 AÑOS
PÚBLICO MÁXIMO A AÑOS 24 AÑOS 360
MAYOR EN SU MESE DIAS
GRADO S MULTA
MÍNIMO

DOCUMENTO 6 MESES A 2 6 MESES A 2 1 A 6 AÑOS NO MENOR EN 6 180 A 3 MESES A 1


PRIVADO AÑOS AÑOS SU GRADO MESES 360 AÑO O
MEDIO A A 5 DIAS MULTA 100 A
MÁXIMO AÑOS MULTA 300 CUOTAS

FORMA 2 A 8 AÑOS 3 A 8 AÑOS 3 A 10 AÑOS AUMENTA 5 A 12 AÑOS


AGRAVADA HASTA EN UNA
MITAD

CUADRO COMPARATIVO DEL TRATAMIENTO DE FALSIFICACION DE DOCUMENTOS EN EL DERECHO COMPARADO

32
CAPITULO IV

CASO REAL Y JURISPRUDENCIA

4.1. CASO: FALSIFICACION DE FIRMAS DE PERU 2000

El caso

Hacia fines de enero del año 2000, un joven que se negaba a revelar su nombre,
llamó a El Comercio. Julia María Urrunaga, encargada de investigaciones
económicas, atendió el teléfono. Era un electricista desempleado, ofreciendo
información sobre la propaganda urbana de Fujimori. Las paredes de Lima habían
sido monopolizadas por el lema oficialista "Perú País con Futuro", difundido con
recursos del Estado. El informante, decía pertenecer a la red clandestina de
pintadores. Los había conocido hacía unos meses, dijo, dando un dato al paso,
durante la falsificación de firmas para inscribir a uno de los movimientos que
postularía a Fujimori como candidato para un tercer período presidencial.

Urrunaga indagó más sobre esto último, y Carlos Rodríguez, el informante, mostró
la pólvora: "El año pasado más de 400 personas trabajamos diariamente 24
horas, en tres turnos, falsificando firmas para Fujimori", explicó. No conocía la
cifra exacta, pero un cálculo rápido indicaba que, si la información era correcta, se

33
había adulterado más de un millón de firmas. La ley exige a cada partido que
acredite 600.000 adherentes para postular a un candidato.

Nos encontramos con Rodríguez en un restaurante de Pueblo Libre, donde


comimos pollo a la brasa mientras tratábamos de estudiar su personalidad. Su
hablar entrecortado y su miedo evidente, nos hizo inclinarnos a creer en sus
palabras. Además de Julia María y yo, en la reunión estuvieron Miguel Ramírez,
que cubre el área de seguridad, y Enrique Flor, a cargo de asuntos políticos. Sólo
faltaba Javier Casas, el abogado del equipo, quien disfrutaba de unas vacaciones
en una playa del norte.

Había que grabar su testimonio e ir verificándolo punto por punto. Decía que en
un edificio de cuatro pisos en Bellavista, y con apoyo logístico de Oscar Medelius
(representante oficioso del asesor presidencial Vladimiro Montesinos, para
muchos el hombre más poderoso del país) se había falsificado la mayoría de las
firmas de Perú 2000, el principal movimiento que postulaba a Fujimori. Rodríguez
desconocía a la mayoría de las personas reunidas allí, pero recordaba la
fisonomía y los seudónimos de los coordinadores. Sobre todo tenía información
sobre la participación directa en el fraude de Luis Navarrete, brazo derecho del
brazo derecho de Fujimori: Absalón Vásquez.

Durante un mes, Rodríguez, de 23 años, caminó Lima de arriba abajo con los
periodistas de la unidad, reconociendo locales, señalando personajes, y
entablando conversaciones, algunas de ellas grabadas, con sus antiguos
compañeros.

En uno de estos diálogos, un exfalsificador contestó con elocuencia la llamada del


informante.

-Hola. Soy Carlos Rodríguez.

-¿Rodríguez?

-Claro, el de la falsificación de firmas.

-Ah, hola.

34
-Oye, ¿no habrá más trabajo?

-No, ¿para qué? El movimiento ya está inscrito.

Fueron estos diálogos, insospechables de simulación, los que terminaron de


convencer a los periodistas. El 28 de febrero, un día antes de que el informe
apareciera, 15 periodistas tocaron las puertas de igual número de supuestos
falsificadores para preguntarles si, efectivamente, habían participado en el fraude.
Todos, salvo uno, contestaron que no.

Para entonces Carlos Rodríguez se hallaba en Costa Rica con sus hermanos
Marita y Denis, de 22 y 19 años. Marita había participado en la falsificación por un
tiempo y también se animó a declararlo abiertamente, de modo que corría tanto
riesgo como su hermano. Para acompañarlos, el abogado del periódico suspendió
sus vacaciones, regresó a Lima, se puso al tanto de las cosas en el aeropuerto y
partió de inmediato a San José.

Abastecida por el gobierno, la prensa oficialista desató un aluvión de ataques y


supuestos desmentidos. Pero a cada refutación correspondió una réplica
imbatible, extraída del arsenal de evidencias obtenidas durante la etapa de
investigación. Declaraciones, filmaciones, diálogos grabados y documentos, eran
mostrados a medida que la artillería fujimorista se alejaba del tema mismo de la
falsificación y se concentraba en Carlos Rodríguez, cuya identidad había sido
revelada por la Fiscalía, y a quien se acusaba, sin prueba alguna, de ser asesino,
ladrón, homosexual y drogadicto. La campaña estaba en su apogeo cuando Erika
Martínez Liñán, de 23 años, egresada de Derecho, decidió contar abiertamente su
experiencia como falsificadora de firmas.

El caso dio un vuelco. Los hermanos Rodríguez volvieron de Costa Rica y


declararon oficialmente en la Fiscalía. Fujimori calló a su prensa adicta y
desautorizó cualquier maniobra judicial contra El Comercio. Prominentes
oficialistas renunciaron a sus candidaturas al Congreso por su implicación con el
fraude. Sólo faltó, a decir verdad, que dimitiera Absalón Vásquez (número uno en
esa lista de postulantes y presunta eminencia gris de las adulteraciones) para que
pudiera decirse que los principales sospechosos se sometían a la investigación.

35
Pero eso no ocurrió, como tampoco hubo una actitud imparcial del Ministerio
Público, controlado por Montesinos. Lo cual explica el estado actual de las cosas:
mientras la investigación periodística halla nuevas vetas, la del Estado recurre a
sus viejas maniobras. La eterna Fiscal de la Nación, Blanca Nélida Colán, declaró
inverosímil la posibilidad de falsificar un millón de firmas 31.

Archivamiento del caso de falsificación de firmas de Perú 2000

Nueve años después de haberse descubierto la falsificación de firmas de la


agrupación fujimorista Perú 2000, la Corte Suprema de Justicia decidió archivar el
expediente judicial y dejar limpio de polvo y paja al ex parlamentario de las filas
fujimoristas Oscar Medelius. Igualmente, esta decisión se hace extensiva al ex
asesor de Alberto Fujimori, Vladimiro Montesinos, a Daniel Chuan, a José Portillo,
a Migdonio Bellota y a los más de 230 procesados por dicho caso.

La medida, inapelable a nivel del Poder Judicial, fue tomada por la Primera Sala
Penal Transitoria de la Corte Suprema que, a través de su resolución, declara que
ni Montesinos, ni Medelius, ni otras 230 personas deben ser enjuiciadas por los
presuntos delitos de falsificación de documentos y falsedad ideológica.

La decisión del tribunal supremo, presidido por el vocal Duberlí Rodríguez e


integrado por Julio Biaggi, Elvia Barrios, Roberto Barandiarán y José Neyra,
respalda a su vez el dictamen que, meses atrás, asumió la Sexta Sala Penal
Anticorrupción del 11 de mayo del 2007, que, de manera inexplicable, convalidó la
resolución que el 4 de octubre del 2000, en pleno régimen fujimorista, emitió la
desaparecida Sala de Delitos Tributarios y Aduaneros, cuando el Poder Judicial
era digitado por Vladimiro Montesinos.

Según esta resolución no existía ninguna falsificación en el caso de Perú 2000,


pues los planillones de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) sobre

31
UCEDA, Ricardo. ¿Cómo falsificar un millón de firmas? Unidad de Investigación de El Comercio. Pulso
del Periodismo. En www.pulso.org.pe

36
los cuales fueron colocadas más de un millón de firmas falsas nunca fueron
adulterados32.

Recurso de nulidad

La Primera Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema resolverá si declara


procedente o no un recurso de nulidad que presentó la Procuraduría
Anticorrupción para que el ex congresista fujimorista Oscar Medelius, sea
procesado por el delito de falsificación de documentos, en el caso que se le sigue
por la masiva falsificación de firmas de Perú 2000.

La Procuraduría busca que se deje sin efecto la decisión de la Sexta Sala


Anticorrupción, que en primera instancia ordenó abrir juicio oral a Medelius solo
por los delitos de peculado y asociación ilícita, descartando el delito de
falsificación de documentos.

El procurador anticorrupción, Ricardo Melgar, aclaró que si la Primera Sala Penal


Transitoria de la Corte Suprema revoca la resolución de la Sexta Sala, entonces
Medelius podrá también ser procesado por el delito de falsificación de
documentos.

Previamente, señaló, deberá presentarse al gobierno de Estados Unidos la


ampliación del pedido de extradición por dicho cargo, a fin que este país tome la
última decisión. “Si la Corte Suprema nos da la razón y resuelve haber nulidad, se
le abre juicio oral a Medelius por falsificación de documentos, y recién se
procedería la ampliación del trámite de extradición. Estamos a la espera que se
resuelva en ese extremo”, señaló el abogado del Estado peruano.

El gobierno de los Estados Unidos aprobó la extradición de Medelius Rodríguez


solo por los delitos de asociación ilícita para delinquir y peculado, en el caso de la

32
Diario Perú 21. Archivan falsificación de firmas de Perú 2000. En www.peru21.com del martes 16 de junio
del 2009.

37
masiva falsificación de firmas de Perú 2000, las cuales avalaron la segunda
reelección del ex presidente Alberto Fujimori 33.

Sin embargo, la Primera Sala Penal Transitoria desestimó el recurso de nulidad y


confirmó la decisión de la Sexta Sala Anticorrupción.

4.2. JURISPRUDENCIA

LLENADO DE PADRONES ELECTORALES CON FIRMAS FALSAS


R.N. Nº 2393-2004
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA
POCESADOS: Luis Alejandro Navarrete Santillán y otros
AGRAVIADO: EL Estado
DELITO: Falsificación de documentos
FECHA: 2 de marzo del 2005
Constitución Política del Estado: arts. 139 num. 6, 141 Código Penal: art. 427
Código de Procedimientos Penales: art. 5

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA


SEGUNDA SALA PENAL TRANSITORIA
R.N. EXP. N° 2393-2004
LIMA
Lima, dos de marzo de dos mil cinco
VISTOS: con lo expuesto por el señor fiscal supremo en lo Penal; y
CONSIDERANDO: Primero: Que viene en recurso de nulidad, interpuesto por la
señora representante del Ministerio Público y la parte civil, la resolución de fojas
ciento setentiséis, su fecha cuatro de octubre de dos mil, que revocando la apelada
declara fundada la excepción de naturaleza de acción deducida por la defensa del
procesado Luis Alejandro Navarrete Santillán, y además fundada de oficio la
excepción de naturaleza de acción a favor de los encausados Carlos Armando
Rodríguez Iglesias, María Elena Rodríguez Iglesias, María Elena Iglesias

33
Agencia de Noticias Andina. Suprema resolverá pedido para que Medelius sea procesado por falsificación
de documentos. En www.andina.com.pe del 23 de abril de 2008.

38
Rengifo y Erika Milagros Martinez Luján en el proceso penal que se les sigue por
el delito contra la fe pública - falsificación de documentos en general en
agravio del Estado. Segundo: Que el artículo doscientos noventidós acápite "c" del
Código de Procedimientos Penales, modificado por el Decreto Legislativo
novecientos cincuentinueve, establece que procede el recurso de nulidad contra
los autos definitivos dictados por la Sala Penal Superior que, en primera instancia,
extingan la acción o pongan fin al procedimiento o a la instancia. Tercero: Que la
Constitución Política del Estado, garantiza la penalidad de instancias y que por
tanto le corresponde a la Corte Suprema de Justicia de la República fallar en última
instancia, cuando la decisión impugnada se ha emitido por una Sala Penal
Superior; o por la propia Corte Suprema. Cuarto: Que en este sentido los
mencionados supuestos no se dan en el caso sub júdice toda vez que cuando se
impugna la resolución del ex Juzgado Penal Especializado en Delitos Tributarios y
Aduaneros de la Corte Superior de Lima y la ex Sala Penal Superior Especializada
en Delitos Tributarios y Aduaneros Especial de la misma Corte resuelve en ape-
lación este órgano jurisdiccional actúa en segunda instancia, por lo que se
encontraría agotada la instancia plural cumpliéndose así con lo exigido en los
artículos ciento treintinueve inciso seis y ciento cuarentiuno de la Constitución
Política del Estado; por esos fundamentos: Declararon NULO el concesorio de
fojas cuatrocientos sesentiséis su fecha diecisiete de mayo de dos mil cuatro e
IMPROCEDENTE el recurso de su propósito en la instrucción seguida contra Luis
Alejandro Navarrete Santillán, Carlos Armando Rodríguez Iglesias, María Elena
Rodríguez Iglesias, María Elena Iglesias Rengifo y Erika Milagros Martínez Luján
por el delito contra la fe pública falsificación de documentos en general en
agravio del Estado; y los devolvieron.

SS. VILLA STEIN; PONCE DE MIER; PRADO SALDARRIAGA

LA SECRETARÍA DE LA SEGUNDA SALA PENAL TRANSITORIA DE LA


CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPUBLICA, CERTIFICA QUE
EL VOTO EN MINORÍA DE LOS SEÑORES VOCALES RAUL VALDEZ ROCA
Y VICTORIANO QUINTANILLA QUISPE, ES COMO SIGUE:

VISTOS; El recurso de nulidad interpuesto por el representante del Ministerio


Público y el procurador público, encargado de los asuntos judiciales de la
39
Oficina Nacional de los Procesos Electorales - ONPE y del Jurado Nacional de
Elecciones - JNE; de conformidad con el dictamen del señor fiscal supremo en lo
penal interviniendo como vocal ponente el doctor Victoriano Quintanilla Quispe; y
CONSIDERANDO además. Primero: Que, el representante del Ministerio
Público, funda su recurso de nulidad, sosteniendo que la acción cometida por el
procesado Navarrete Santillán se encuentra prevista en nuestro ordenamiento
penal al haber utilizado el padrón con las firmas falsificadas para perjudicar la
inscripción de otros movimientos políticos que tramitaban su reconocimiento; que
asimismo, el delito imputado al recurrente –falsificación de documentos en
general– consiste en elaborar un documento falso o introducir datos falsos en
un documento verdadero y eminentemente doloso, lo cual en el caso de autos
los inculpados conocían plenamente de ello, no siendo correcta la apreciación
del Colegio para declarar que no existe delito al haber sido utilizado padrones
de inscripción verdaderos, más aún que no hubo perjuicio al haberse desistido la
agrupación para su inscripción ante el organismo electoral, Segundo: Que por su
parte el procurador público, señala los hechos imputados al procesado
Navarrete Santillán se adecuan al artículo cuatrocientos veintisiete del código
penal; que, el citado pro cesado funda su excepción sosteniendo que la
acción ilícita debe generar, elaborar o crear un nuevo documento falso, lo cual no
ha ocurrido, precisando que no es materia de cuestionamiento la autenticidad de
los planillones ni la falsificación de estos; sin embargo de los actuados se colige
que si bien los formatos utilizados por los denunciados al parecer son
documentos auténticos, no es menos cierto que al haberse consignado en ellos
datos falsos, así como huellas y firmas que no corresponden a sus titulares, di -
cho documento deviene en falso y por ende se encuentra consumado el delito.
Tercero: Que, en efecto se imputa al inculpado Luis Alejandro Navarrete
Santillán, el delito contra la fe pública en su modalidad de falsificación de
documentos en general, al haber organizado en los meses de setiembre,
noviembre y diciembre del año mil novecientos noventinueve, el llenado de
listas adherentes del Movimiento Independiente "Perú dos mil", el cual se llevó a
cabo con la participación activa de sus coprocesados y consistió en transcribir a
los formularios obtenidos de la Oficina de Procesos Electorales (ONPE), los
nombres número de libretas electorales de las personas que figuraban en
papeles membretados de la agrupación "Vamos Vecino" y de algunos padrones

40
originales en la ONPE correspondientes a la anterior elección municipal; labor
que fue complementada con la falsificación de las firma: y huellas digitales de
dichas personas; habiendo finalmente usado dichos documentos para solicitar la
inscripción de la citada agrupación (Movimiento Independiente Perú 2000) ante
la ONPE, con el consiguiente perjuicio de otras agrupaciones o movimientos
políticos que tramitaron con posterioridad su inscripción. Cuarto: Que, frente a
estos cargos, el inculpado en mención ha deducido la excepción de naturaleza
de acción, al sostener que no ha falsificado el documento consiste en el Padrón
de adherentes, ni ha creado un documento nuevo, toda vez que dichos for-
mularios fueron obtenidos de la propia entidad autorizada, por lo que no ha
incurrido en ningún ilícito penal. Quinto: Que, la excepción, de naturaleza de
acción prevista en el artículo quinto del Código de Procedimientos Penales,
modificado por el secreto legislativo número ciento veintiséis, es un medio de
defensa cuyo fundamento radica en la aplicación del principio de legalidad y
procede solo cuando el hecho denunciado no constituye delito, esto es cuando la
conducta terminada es atípica o cuando es justiciable penalmente, vale decir
cuando el hecho tiene una connotación distinta a la naturaleza pe nal. Sexto:
Que, en el caso de autos, los argumentos esbozados no guardan relación con el
objeto y esencia de la excepción de naturaleza de acción deducida, sino que tien-
den más bien a sustentar su irresponsabilidad en los hechos que se le imputan,
elementos que tendrá en cuenta el juez en el estadio correspondiente y no a
través de este medio de defensa técnica; por tales fundamentos; NUESTRO
VOTO es por que se declare HABER NULIDAD en el auto recurrido de fojas
ciento setentiséis, su fecha cuatro de octubre de dos mil, que revocando el
apelado de fojas ciento cincuentisiete, declara fundada la excepción de
naturaleza de acción deducida por el procesado Luis Alejandro Navarrete
Santillán, en la instrucción que se le sigue por delito contra la fe pública –
falsificación de documentos– en agravio del Estado, con lo demás que contiene,
reformándola declararon INFUNDADA dicha excepción: MANDARON que
continúe el trámite del proceso según su estado; y los devolvieron.

SS. VALDEZ ROCA; QUINTANILLA QUISPE

41
LA SECRETARÍA DE LA SALA PENAL TRANSITORIA DE LA CORTE
SUPREMA, CERTIFICA EL VOTO SINGULAR DEL SEÑOR VOCAL
SUPREMO TITULAR DOCTOR ANTONIO PAJARES PAREDES:
Lima, treinta de mayo del año dos mil cinco
VISTOS; con lo expuesto por el señor fiscal supremo en lo penal; y
CONSIDERANDO: Que, la excepción de naturaleza de acción ha sido resucita
por el juez penal, la misma que fue revocada por la Sala Penal Superior la cual la
declaró fundada, por lo que se ha agotado la instancia plural establecida en los
artículos treintinueve inciso seis y ciento cuarenta y uno de la Constitución
Política del Estado: por lo que adhiriéndome al pronunciamiento de los votos
de los señores Villa Stein, Ponce Mier y Prado Saldarriaga; MI VOTO es por que
se declare NULO el concesorio de fojas cuatrocientos sesentiséis, su fecha die-
cisiete de mayo de dos mil cuatro; e IMPROCEDENTE el recurso de su
propósito, en la instrucción seguida contra Luis Alejandro Navarrete Santillán,
Carlos Armando Rodríguez Iglesias, María Elena Rodríguez Iglesias, María
Elena Iglesias Rengifo y Erika Milagros Martínez Luján, por el delito contra la fe
pública –falsificación de documentos en general – en agravio del Estado; y, los
devolvieron.

SS. PAJARES PAREDES

Lima, treinta de mayo de dos mil cinco

VISTOS; con lo expuesto por el señor fiscal supremo en lo penal; habiendo


emitido su voto dirimente el señor vocal supremo doctor Antonio Pajares
Paredes; adhiriéndose al pronunciamiento de los señores Villa Stein, Ponce de
Mier y Prado Saldarriaga; en concordancia con el artículo ciento cuarentiuno de
la Ley Orgánica del Poder Judicial y CONSIDERANDO: Primero: Que, viene
en recurso de nulidad, interpuesto por la señora representante del Ministerio
Público y la parte civil, la resolución de fojas ciento setentiséis, su fecha
cuatro de octubre de dos mil, que revocando la apelada declara fundada la
excepción de naturaleza de acción deducida por la defensa del procesado Luis
Alejandro Navarrete Santillán, y además fundada de oficio la excepción de
naturaleza de acción a favor de los encausados Carlos Armando Rodríguez
Iglesias, María Elena Rodríguez Iglesias, María Elena Iglesias Rengifo y Erika

42
Milagros Martínez Luján en el proceso penal que se les sigue por el delito
contra la fe pública - falsificación de documentos en general en agravio del
Estado. Segundo: Que, el artículo doscientos noventidós acápite "c" del
Código de Procedimientos Penales, modificado por el Decreto Legislativo
novecientos cincuentinueve, establece que procede el recurso de nulidad
contra los autos definitivos dictados por la Sala Penal Superior que, en
primera instancia, extingan la acción o pongan fin al procedimiento o a la
instancia. Tercero: Que la Constitución Política del Estado, garantiza la
pluralidad de instancias, y que por tanto le corresponde a la Corte Suprema
de Justicia de la República fallar en última instancia, cuando la decisión
impugnada se ha emitido por una Sala Penal Superior; o , por la propia Corte
Suprema. Cuarto: Que en este sentido los mencionados supuestos no se dan
en el caso subjúdice, toda vez que cuando se impugna la resolución del ex -
Juzgado Penal Especializado en Delitos Tributarios y Aduaneros de la Corte
Superior de Lima, y la ex-Sala Penal Superior Especializada en Delitos
Tributarios y Aduaneros Especial de la misma Corte resuelve en apelación,
este órgano jurisdiccional actúa en segunda instancia, instancia, por lo que se
encontraría agotada la instancia plural cumpliéndose así con lo exigido en los
artículos ciento treintinueve inciso seis y ciento cuarentiuno de la Constitución
Política del Estado; por estos fundamentos; por mayoría Declararon NULO el
concesorio de fojas cuatrocientos sesentiséis, su fecha diecisiete de mayo de
dos mil cuatro, e IMPROCEDENTE el recurso de su propósito, en la
instrucción seguida contra Luis Alejandro Navarrete Santillán , Carlos
Armando Rodríguez Iglesias, María Elena Rodríguez Iglesias, María Elena
Iglesias Rengifo y Erika Milagros Martínez Luján por el delito contra la fe
pública - falsificación de documentos en general en agravio del Estado; y los
devolvieron

SS. PAJARES PAREDES; VILLA STEIN; PONCE DE MIER; PRADO


SALDARRIAGA

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INDICE

INTRODUCCIÓN …………………………………………………… 2
CAPITULO I
FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTOS EN GENERAL
Consideraciones generales ………………………………………..… 3
Evolución doctrinal del concepto bien jurídico protegido …… 4
CONCEPTOS BÀSICOS DEL TIPO PENAL ……………………... 5
CAPITULO II
TITULO XIX DELITOS CONTRA LA FE PÚBLICA
CAPITULO I
FALSIFICACIÓN DE DOCUMENTO (ART. 427) …………………. 7
DESCRIPCIÓN GENERAL ………………………………………….. 7
2. BIEN JURÍDICO PROTEGIDO …………………………………………. 8
TESIS EN TORNO AL BIEN JURIDICO PENALMENTE TUTELADO EN LOS
DELITOS CONTRA LA FE PÚBLICA ……………………………… 9

3. TIPICIDAD OBJETIVA ……………………………………………. 12


3.1. FALSEDAD PROPIA (Art. 427 primer párrafo)
3.1.1. Sujeto activo
3.1.2. Sujeto pasivo ……………………………………………… 13
3.1.3. Comportamiento ……………………………………………. 13
3.2. FALSEDAD IMPROPIA O FALSEDAD DE USO
(ART. 427, SEGUNDO PÁRRAFO DEL C.P) …………………….. 17
3.2.1. Sujeto activo
3.2.2. Sujeto pasivo
3.2.3. Comportamiento
4. TIPICIDAD SUBJETIVA ………………………………………….. 18
4.1. FALSEDAD PROPIA (Art. 427 primer párrafo)
4.2. FALSEDAD IMPROPIA O FALSEDAD DE USO (ART. 427, SEGUNDO
PÁRRAFO DEL C.P) ……………………………………………….. 20
5. GRADOSDE DESARROLLO DEL DELITO
5.1. FALSEDAD PROPIA (Art. 427 primer párrafo) …………… 20
5.2. FALSEDAD IMPROPIA O FALSEDAD DE USO (ART. 427, SEGUNDO
PÁRRAFO DEL C.P) ……………………………………………….. 21
CONSUMACIÓN ………………………………………………... 22

44
6. PENALIDAD …………………………………………………. 23
CAPITULO III
FALSIFICACION DE DOCUMENTOS
EN EL DERECHO COMPARADO …………………………… 24
CUADRO COMPARATIVO …………………………… 32
CAPITULO IV
CASO REAL Y JURISPRUDENCIA …………………………. 33
BIBLIOGRAFÍA ………………………………………………... 44

45
BIBLIOGRAFÍA

 García Cantizano, “Falsedades documentales” Ed. TIRANT LO BLANCH,


Valencia , 1994.

 Bramont – Arias Torres, Luis Alberto y Dra. Maria del Carmen García
Cantizano “Manual de Derecho Penal Parte Especial” Ed. SAN MARCOS,
Lima- Perú , 1994.

 José Luis Castillo Alva, “La Falsedad Documental”, Jurista Editores. Lima.
2001.

 Flavio Gracia del Río. Delitos Contra la Fe Pública. Ediciones Legales.


Editorial San Marcos. Lima. 2007.

 Luis Romero Soto. “La Falsedad Documental”. Temis. Bogota. 1995. Pág.
25.

 Gómez Basauri, Lucia.”La exigencia en la expedición de resoluciones.


ministeriales autoritativas y la intervención del procurador público cuando el
interés del Estado lo requiera”.

 PIZARRO GUERRERO, Miguel Angel. Derecho Penal V. Universidad Inca


Garcilaso de la Vega. Sistema a distancia. Lima 2008.

 Francisco Muñoz Conde; “Teoría General del Delito”.

 Citado por Manuel Ossorio y Florit, “Falsificación de documentos en


general en Enciclopedia Jurídica Omeba, Tomo XI”.

 Sebastián Soler; “Derecho Penal Argentino – Tomo V”.

46
 UCEDA, Ricardo. ¿Cómo falsificar un millón de firmas? Unidad de
Investigación de El Comercio. Pulso del Periodismo.

 Código Penal, Edición abril 2009. Jurista editores. E.I.R.L. Lima, Perú.

Páginas Web:

www.amag.edu.pe/ estafeta juridica.

En www.pulso.org.pe

Diario Perú 21. Archivan falsificación de firmas de Perú 2000. En


www.peru21.com del martes 16 de junio del 2009.

Agencia de Noticias Andina. Suprema resolverá pedido para que Medelius sea
procesado por falsificación de documentos. En www.andina.com.pe del 23 de abril
de 2008.

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