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UNIVERSIDAD TECNOLOGICA DE

LOS ANDES-FILIAL CUSCO


FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS, CONTABLES Y SOCIALES

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

TEMA: BÚSQUEDA DE MEDIOS PROBATORIOS Y RESTRICCIÓN


DE DERECHOS

ASIGNATURA: DERECHO PROCESAL PENAL I

DOCENTE: DR. GORKY ALBERTO ANDRADE TECSI

ALUMNOS:

 MILLER HUALLPA PUMAYALI

CUSCO – PERÚ

2022
INTRODUCCION

Con la investigación preparatoria el Ministerio Publico persigue reunir los elementos de


convicción y de cargo que permitan decidir si formula acusación. En virtud a ello
realiza actos de investigación necesarios de por si o con auxilio de la Policía Nacional
del Perú y otros entes especializados del Estado y también instituciones privadas.

En esta línea de realizar adecuadamente la investigación, el fiscal requerirá solicitar


restricciones de derechos. La base para solicitar dichas restricciones es la BUSQUEDA
DE PRUBAS las que tienen que estar previstas en la ley procesal, y si se otorgan, se
ejecuten con las debidas garantías para el afectado.

Las medidas que se dispongan deben realizarse con arreglo al PRINCIPIO DE


PROPORCIONALIDAD y en la medida que exista suficientes elementos de
convicción.

Los requerimientos de la Fiscalía, en la medida que implica afectación de derechos


fundamentales deberán estar sustentados. En caso que haya riesgo fundado de perdida
de la finalidad de la medida, el juez deberá correr traslado previamente a los sujetos
procesales, en especial al afectado, convocando a una audiencia, la que se realizara con
los que asistan.
BÚSQUEDA DE PRUEBAS Y RESTRICCIÓN DE DERECHOS

Aspectos preliminares

EL Código Procesal Penal Peruano, aprobado por el Decreto Legislativo N°957, del 29
de julio de 2004, regula en la Sección II de su Libro II todo el ámbito de la Prueba y
dentro de ella el título III está dedicado concretamente a la búsqueda de Pruebas y
restricción de derechos. Como se sabe, la investigación es una etapa del proceso penal
en la que se realizan diversos tipos de actuaciones de averiguación o de investigación
propiamente dichas, que buscan esclarecer la perpetración de los delitos, con todas las
circunstancias que puedan influir en su calificación y la culpabilidad de los
delincuentes. Ahora bien, esa noción, como apunta Martin y Martin comprende dos
órdenes de diligencias:

a) Las encaminadas a proporcionar por sí mismas las fuentes de investigación (ej.,


inspección judicial y declaraciones de imputados, testigos y peritos, entre otras).

b) Las encaminadas a la búsqueda y adquisición de las fuentes de investigación,


que tienen un carácter garantizador al afectar derechos fundamentales y su
actuación, siempre instrumental, permite por lo general pre constituir prueba.

El CPP acepta esta clasificación y en el Titulo II hace mención a los medios de prueba,
mientras que en el Titulo III prevé las actuaciones referidas a la búsqueda de pruebas y
restricción de derechos.

Como sabemos, el interés estatal en la investigación de un delito, constituye un bien


colectivo que merece tutela y que sin embargo en esta tarea puede colisionar derechos
fundamentales de los presuntos culpables del delito que hasta tanto no se demuestre en
juicio lo contrario, gozan de un estado jurídico de inocencia. Por ello, iniciado un
proceso penal determinado, ese estado de inocencia si bien funcionara como límite o
freno para el desmedido poder vulneraste de garantías que en su accionar el Estado
puede llegar a avasallar, ello no implica que se torne un obstáculo infranqueable que
impida, siempre y en todos los casos, que la justicia pueda afianzarse mediante la
realización de todos los actos conducentes a descubrir lo realmente sucedido. En esa
asunción el Estado regula una serie de medidas de búsqueda de pruebas, en donde
inevitablemente se restringirán derechos y garantías fundamentales de personas que si
bien aún no han sido declaradas culpables en juicio (y por ende son inocentes), esa
limitación se halla justificada en virtud de encontrarse con mayor o menor compromiso
procesal, dentro de una investigación.

Es por esa razón, que se regulan medidas de manera específica de búsqueda de pruebas
que restringen derechos fundamentales, pero que no violan o transgreden derechos
fundamentales, porque son medidas cuya adopción debe estar sometida a la
concurrencia de ciertos presupuestos, pues no podemos salir de un cauce garantista, en
la medida que la función general de la política criminal es la realización de los derechos
fundamentales, y el Derecho Procesal Penal se comprende también en esa
sistematización que refunda todos el Sistema Penal.

En consecuencia, podemos entender que la Búsqueda de Pruebas es el conjunto de


medios legítimos que permitan aportar información para el esclarecimiento de los
hechos. Por ello se puede afirmar que esta actividad probatoria se encuentra dirigida a
obtener la verdad. El Título III del Nuevo Código Procesal Penal está dedicado a las
Medidas Restrictivas de Derechos en la Búsqueda de Medios de Pruebas, así tenemos
dentro de este título las siguientes.

MEDIDAS DE BÚSQUEDA Y ASEGURAMIENTO DE LA PRUEBA:

1. Control de Identidad policial. (Art.205 y ss. del C.P.P)

2. Video-vigilancia. (Art.207 del C.P.P)

3. Pesquisas. (Art.208 y ss. del C.P.P)

4. Intervención corporal. (Art.211 y ss. del C.P.P)

5. Allanamiento. (Art.214 y ss. del C.P.P)

6. Exhibición e incautación de bienes y de documentos no privados. (Art.218 y ss.C.P.


P)

7. Control de las comunicaciones y documentos privados. (Art.226 y ss. del


C.P.P)

8. Levantamiento del secreto bancario y de la reserva tributaria. (Art.235 y ss. Del


C.P.P)

9. Clausura o vigilancia de locales e inmovilización. (Art.237 y ss. del C.P.P)

Por tanto, diremos que por este tipo medidas entendemos a aquellos mecanismos que,
mediante la restricción del ejercicio de un derecho constitucional, buscan hallar y
asegurar el material probatorio referido a la realización de un delito y sus presuntos
implicados. Es decir, diligencias de averiguación directa de fuentes de información
tendientes a la acreditación de las imputaciones e identidades, comportando limitaciones
a derechos constitucionales, definidos directamente por la Constitución y sometidos a
determinados principios.

Para Schlűchter, son actos procesales con los cuales se interfiere o se interviene en el
derecho fundamental de una persona inculpado o tercero contra su voluntad, por causa
de la persecución penal.

PRINCIPIO DE LEGITIMIDAD EN LA BÚSQUEDA DE PRUEBA

Cuando se habla de principios se hace referencia a las ideas base de determinados


conjuntos de normas, ideas que se deducen de la propia ley, aunque no estén
expresamente formuladas en ella, su valor no es solo teórico; las repercusiones prácticas
de los principios pueden manifestarse en diversos campos:

1.- Como elemento auxiliar de la interpretación.

2.- Como elemento integrador de la analogía, para los supuestos de laguna legal.

3.- Como marco teórico para las discusiones de lego ferenda.

Los principios rectores son aquellos que consagran la filosofía y la orientación que el
procedimiento penal tiene en cada país. Por eso generalmente se encuentran en la
Constitución Política, señalados en forma expresa o tácita, y en el presente caso el
Principio de Legitimidad de la Prueba no obstante de tener base constitucional, ha sido
incluido en el CPP en su Título Preliminar como uno de los Principios Básicos que
orientan todo el Sistema de Justicia Penal (Sistema Acusatorio Garantista con rasgos
Adversariales). En efecto el Código Procesal Penal prescribe en su Título Preliminar el
Principio de Legitimidad de la Prueba que refiere lo siguiente:

“ARTÍCULO VIII. Legitimidad de la prueba. -

1. Todo medio de prueba será Valorado sólo si ha sido obtenido e incorporado al


proceso por un procedimiento constitucionalmente legítimo.

2. Carecen de efecto legal las pruebas obtenidas, directa o indirectamente, con


violación del contenido esencial de los derechos fundamentales de la persona.

3. La inobservancia de cualquier regla de garantía constitucional establecida a favor


del procesado no podrá hacerse valer en su perjuicio.

El cual nos señala que todo medio de prueba será valorado solo si ha sido obtenido e
incorporado al proceso por un procedimiento constitucionalmente legítimo. En esa
asunción es necesario distinguir entre obtención de la prueba (fuente) e incorporación de
la prueba, puesto que la primera se da cuando se afecta una norma de orden
constitucional por la afectación de un derecho fundamental del imputado y la segunda,
se produce cuando se viola una norma de carácter procesal en la incorporación de los
medios de prueba, y no de su obtención. Existiendo la diferencia entre la ilicitud en la
obtención de la prueba (con violación constitucional) lo que la doctrina y la
jurisprudencia la denomina la prueba prohibida, de la ilicitud en la incorporación de la
prueba (con violación de formalidad procesal) que se denomina la prueba irregular.

Como bien sabemos el Estado busca establecer un orden a través de su potestad


sancionadora del delito (ius imperium); dicho orden está destinado a salvaguardar
intereses de la colectividad y del suyo mismo. Pero dicho ius imperium tiene límites que
el Estado contempla, los cuales son los derechos individuales de la persona, en tanto
dignidad del ser humano se contemple. Dichos limites encuentran su mayor arraigo en
el proceso penal, pues no solo está en juego, por un lado el orden que el Estado debe
hacer prevalecer dentro de la sociedad, sino que por otro lado el respeto de la dignidad
del ser humano, y por ende de los demás derechos fundamentales del individuo.6 En esa
asunción, la necesidad de proteger los derechos fundamentales constituye un limite a la
actividad de búsqueda de la verdad de parte de la administración de justicia y en
especial del órgano persecutor del delito (Ministerio Publico y su colaborador la Policía
Nacional). Por tanto, nuestro sistema de prohibición De prueba se encuentra dirigido a
proteger derechos fundamentales, por lo que, en principio, existe el derecho del
procesado que le permite excluir la prueba que vulnere estos derechos y que impide al
juzgador valorarla, puesto que la reconstrucción de la verdad ya no es concebida como
un valor absoluto dentro del proceso penal, sino que frente a ella, se erigen
determinados barreras que el Estado no puede franquear, nos referimos a los derechos
fundamentales y a las garantías procesales. Estos frenos se convierten en el límite a la
actuación del Estado dentro del Proceso Penal. Cualquier actuación fuera de los límites
impuestos se convierten en ilegales, y cualquier medio de prueba que se recabe en el
proceso, violando dichos limites se convierte en prueba ilegitima o prueba prohibida. La
verdad que trata de descubrir el proceso penal, no puede conseguirse a cualquier precio,
sino solo al precio legítimo de lo que es viable y hacedero, de acuerdo con los altos
principios que gobiernan al Estado de Derecho, 7 y en un proceso penal garantista.

La constitución ha establecido que carecen de valor las declaraciones obtenidas por la


Violencia, quien la emplea incurre en responsabilidad, en el artículo 2° inciso 24
acápites h. A partir de ellos se debe entender que las pruebas dentro del proceso penal
deben ser obtenidas en el marco de lo que establece la Constitución, las leyes y el
respeto a los derechos fundamentales.

Este Principio importantísimo y de suma trascendencia, establece que tanto la policía


como el Ministerio Publico en su labor de investigación, no pueden obtener los medios
probatorios mediante actos ilícitos, violando por tanto las garantías del debido proceso
como señala el Art. 159° inc. 4 y 166° de la Constitución. Las pruebas así obtenidas, no
pueden ser utilizadas en forma alguna dentro de un proceso, y deben ser consideradas
como no realizadas. Lo resaltante es que este principio pone coto a cualquier abuso de
derecho, por parte de la autoridad, para obtener material probatorio, que no sea
respetando la integridad material de la persona, ya se inutilizando la prueba ilícita, o la
prueba prohibida.

Ana Calderón Sumarriva, nos dice que se concluye que “están prohibidos aquellos
medios de prueba que van contra la dignidad o integridad de las personas, lo que
constituye una ilegitimidad de fondo; pero si se ha obtenido fuera de los cauces o
procedimientos preestablecidos, constituye una ilegitimidad de forma.” Así la
mencionada autora nos refiere que este principio consagrado en el Código Procesal
Penal acoge la Teoría de la Ponderación de intereses, la cual plantea que no todo
defecto, omisión o vulneración genera la invalidez de la prueba, sino aquella que afecta
la norma constitucional. Con los siguientes aspectos:

a) Legitimidad de Forma: Todo medio de prueba será valorado solo si ha sido


obtenido e incorporado en el proceso por un procedimiento constitucionalmente
Legitimo.
b) Legitimidad de fondo: Carecen de efecto legal las pruebas obtenidas con
violación del contenido esencial de los derechos fundamentales de la persona. Su
inobservancia genera la denominada prueba prohibida que puede ser: Directa
(Invalida por sí misma) o Indirecta (Invalida por derivación). Se aplica la teoría
americana del “árbol del fruto envenenado” o la teoría europea del “efecto
reflejo”.
c) La excepción a la exclusión del material probatorio ilegitimo: Es posible de
aplicar cuando la inobservancia de cualquier garantía constitucional establecida
a favor del procesado no pueda hacerse valer en su perjuicio.
Es así que el Principio de Legitimidad de la Prueba prescrito en el Código
Procesal Penal, como uno de los principios rectores del Sistema Penal
Acusatorio Garantista, regula lo que la doctrina conoce como LA PRUEBA
PROHIBIDA aquella prueba obtenida ilícitamente, es decir vulnerando los
derechos fundamentales del imputado a fin de adquirir fuentes de conocimiento.

PRESUPUESTOS

Como ya lo venimos afirmando, para que la restricción de un derecho fundamental sea


legitima y no trastoque el contenido esencial de los derechos fundamentales de la
persona sujeta a investigación, deberá actuarse bajo ciertos presupuestos que conllevan
criterios de razonabilidad, de ponderación y de necesidad; es decir, solo cuando sea
estrictamente necesario para el fin valioso, pues el Sistema Acusatorio Garantista, debe
combinar armoniosamente los dos fines que se encuentran en juego en un proceso penal
como son: La eficacia de la persecución penal y la plena habilitación de las garantías
constitucionales. En dicha asunción, el C.P.P de 2004, señala en forma expresa las
medidas restrictivas de derechos que puede utilizar el director de la investigación con su
colaborador la Policía Nacional en la búsqueda de pruebas, estableciendo a su vez
preceptos generales, que responden a verdaderos presupuestos a tener en cuenta en la
adopción de estas medidas, y que van a permitir distinguir cuando nos encontramos ante
un caso de restricción y cuando nos encontramos ante un caso de vulneración ( por no
haberse cumplido los presupuestos para su adopción), y con ello establecer las
consecuencias en uno u otro caso. Por tanto, los principios los tratamos a continuación:

El principio de legalidad:

El principio de legalidad, como límite a la restricción de derechos, esta

Establecido en el Art. 202° del C.P.P. 10“Cuando resulte indispensable restringir un


derecho fundamental para lograr los fines de esclarecimiento del proceso, debe
procederse conforme a lo dispuesto por la Ley y ejecutarse con las debidas garantías
para el afectado.

Es la delimitación de las atribuciones de cada uno de las instituciones u organismos


públicos; en el Derecho Procesal Penal, es la garantía en la incorporación de pruebas
que permite la vigencia del Estado de Derecho, limitando el control punitivo del Estado.

La aplicación de la legalidad es absolutamente predicable en el proceso penal, sin ella


dentro del proceso se produciría una serie de arbitrariedades. Por ende, la garantía de
legalidad señala que los medios de búsqueda de verdad deben encontrarse previamente
establecido en la ley, así como su procedimiento.

Entonces, el principio de legalidad debe prevalecer la ley sobre cualquier actividad o


función del poder público. Esto quiere decir que todo aquello que emane del Estado
debe estar regido por la ley, y nunca por la voluntad de los individuos.

Jurisdiccionalidad:

Esta garantía es de vital importancia en la obtención de medios de prueba, en donde se


restringen derechos fundamentales, porque a través de la función jurisdiccional se da un
punto de equilibrio entre dos intereses contrapuestos como son: El interés estatal en la
persecución del delito y los derechos de las personas sujetas a investigación. Esta
función judicial se activa con el requerimiento fiscal (no pueden adoptarse De oficio).
Sera pues el juez de la investigación preparatoria el encargado de decidir la procedencia
de las medidas de búsqueda de pruebas en determinados casos con la aplicación del
principio de proporcionalidad, por supuesto la orden judicial debe encontrarse
debidamente motivada y deberá sustentarse en suficientes elementos de convicción. En
atención a la naturaleza y finalidad de la medida y al derecho fundamental objeto de
limitación.

En los casos que no se requiere previa autorización judicial, el Código Procesal Penal en
el Art. 203.3, permite a la policía o al Ministerio Publico, ante supuestos de urgencia o
peligro por la demora y con estrictos fines de averiguación, restringir derechos
fundamentales de las personas, por lo que corresponde al Fiscal solicitar
inmediatamente la confirmación judicial.

El problema surge cuando en la medida restrictiva de derechos como el allanamiento no


se señala en forma expresa la solicitud de confirmatoria judicial para ciertos casos que
difieren de los que señala el CPP como los supuestos de urgencia o peligro por la
demora, sino excepciones constitucionales como la flagrancia delictiva y el grave
peligro de perpetración de delito y que son casos estrictamente diferentes y que en el
presente trabajo de investigación se pretende dilucidar.

El principio de proporcionalidad:

Este principio está regulado en el art. 203°.

“Las medidas que disponga la autoridad deben realizarse con arreglo al principio de
proporcionalidad y en la medida que existan suficientes elementos de convicción”.

Su eficacia se evidencia cuando en la aplicación e intensidad de las medidas que


restrinjan derechos fundamentales, estos guarden relación con la gravedad del delito
investigado, ya que toda medida de excepción debe ser proporcional a la situación que
se quiere afrontar. En lo que respecta a la gravedad del ámbito de aplicación, debe
responder a la magnitud y características del fenómeno al que se quiere hacer frente,
para limitar el peligro que se presenta para la sociedad y el Estado. El Tribunal
Constitucional establece el valor de los limites razonabilidad y proporcionalidad, de la
siguiente manera: “Los principios de razonabilidad, y proporcionalidad, previstos en el
último párrafo del artículo 200° de la Constitución son pues el parámetro de
determinación de validez de los actos (Normativos y no normativos) que establezcan
límites a los derechos Fundamentales.

El principio constitucional de proporcionalidad, se le conoce también como test de


proporcionalidad o test de razonabilidad, es un concepto jurídico que aparece cada vez
con mayor frecuencia en la motivación de las decisiones del Tribunal Constitucional , y
que es también cada vez más aplicada por los tribunales y jueces ordinarios, ya que, es
un instrumento jurídico valido en un Estado Democrático de Derecho, donde se
ponderan valores, principios, bienes y derechos teniendo como premisa fines
constitucionales legítimos.

El Tribunal Constitucional, en numerosas resoluciones ha establecido que el principio


de proporcionalidad es uno de naturaleza constitucional que se deriva de la cláusula del
Estado Democrático de Derecho, consagrada en el artículo 43 de la Carta de 1993, en
razón de la esencia misma de los derechos fundamentales que como expresión de la
libertad general de los ciudadanos frente al Estado, no pueden ser limitados por el Poder
público más allá de lo que sea imprescindible para la protección de los intereses
públicos.

Por tanto, el principio constitucional de proporcionalidad se legitima en la interpretación


constitucional, y este principio aparece como un conjunto articulado de tres sub
principios: idoneidad, necesidad y proporcionalidad en sentido estricto. Cada uno de
estos sub principios expresa una exigencia que toda intervención en los derechos
fundamentales debe cumplir. A continuación,

Brevemente, explicaremos estos subprincipios:

 La adecuación o idoneidad del medio escogido para lograr el fin u objetivo


perseguido, es decir si con la medida se puede conseguir dicho fin, por lo que es
conocida además como el juicio de idoneidad. Por ejemplo, en el caso que se
haya identificado al autor de una violación sexual y que la víctima lo haya
sindicado, no sería adecuado realizar registro de imágenes fotográficas de esta
persona.

 La Necesidad de la utilización de esos medios para el logro del fin. Es decir,


que no exista otra medida que pueda conducir al mismo fin o que la elegida sea
la menos gravosa, conocida como juicio de necesidad. Por ejemplo. No sería
necesario realizar un allanamiento de morada, si es que se observa que la
persona requisitoriada se encuentra de tránsito en dicho domicilio y que se
puede lograr el objetivo de detenerla, con una espera prudente hasta que salga
del mismo.

 La proporcionalidad en sentido estricto conocida como la ponderación, se


refiere a que la medida solicitada sea dada por la mayor importancia que tiene
el caso el interés estatal en la persecución, ya sea por la importancia de la
causa, el grado de imputación, la consecuencia jurídica o sea denegada por la
mayor importancia del interés ciudadano de mantener su libertad y el disfrute
de sus derechos.

La Constitución de 1993 ha establecido en el último párrafo del artículo 200º de manera


expresa el principio de proporcionalidad, al permitir a los jueces evaluar las medidas
restrictivas de los derechos fundamentales, dictadas en estados de excepción [estado de
emergencia y estado de sitio], a través de las acciones de garantía de amparo y habeas
corpus.

El Tribunal Constitucional, partiendo de los principios de unidad de la Constitución y


de concordancia práctica, ha precisado que:

El principio de proporcionalidad se constituye en un mecanismo jurídico de


trascendental importancia en el Estado Constitucional y como tal tiene por función
controlar todo acto de los poderes públicos en los que puedan verse lesionados los
derechos fundamentales, entre otros bienes constitucionales.

Principio de motivación:

Se refiere a la motivación necesaria del Ministerio Público y del Juez de la investigación


preliminar (203°. 2).

 Los requerimientos del Ministerio Público serán motivados y debidamente sustentados.


El Juez de la Investigación Preliminar, salvo norma específica, decidirá
inmediatamente, sin trámite alguno. Si no existiere riesgo fundado de pérdida de
finalidad de la medida, el Juez de la Investigación Preliminar deberá correr traslado
previamente a los sujetos procesales y, en especial, al afectado. Asimismo, para
resolver, podrá disponer mediante resolución inimpugnable la realización de una
audiencia con intervención del Ministerio Público y de los demás sujetos procesales,
que se realizará con los asistentes.

Este principio está reconocido en la Constitución en el artículo 139° inciso 5, para evitar
la arbitrariedad en la emisión de resoluciones. Este principio como garantía en la
restricción de derechos fundamentales en la búsqueda de pruebas se refiere a la
motivación necesaria del Ministerio Publico en solicitar la medida y del Juez de la
investigación preparatoria al adoptarla.

En la motivación lo determinante debe ser la demostración del vínculo existente entre el


hecho y el derecho vulnerado.

Principio de intervención indiciaria

Es una garantía constitucional de carácter implícito y transversal, inherente a la noción


de estado de derecho y anclada en cada derecho fundamental.

En sus dimensiones objetiva y subjetiva se fundamenta en la existencia de motivos


raciales bastantes (suficientes elementos de convicción) para creer en la existencia de un
hecho delictivo y motivos bastantes para suponer la participación del sujeto en él.

En ese sentido, no cabe intervenciones restrictivas aleatorias o indiscriminadas y que su


actuación en buena parte de ellas, requiere resolución judicial autoritativa.

Partimos del hecho de que ni siquiera un Estado Constitucional de Derecho puede


ofrecer a sus ciudadanos un régimen de libertades absolutas. El libre ejercicio de los
derechos fundamentales ha de ser compatibles con los demás. Es ahí donde ha de
encuadrarse la funcion constitucionalmente encomendada a los poderes públicos de
investigar los delitos y perseguirlos, precisamente para garantizar los derechos de todos.

A su vez, este límite tampoco puede ser absoluto, por cuanto que en dicha función el
Estado no puede restringir derechos fundamentales con carácter indiscriminado o
aleatorio, por si apareciese algún ilícito. Ello nos convertiría a todos en sospechosos y
haría quebrar uno de los ejes del Estado de Derecho el principio constitucional de
intervención indiciaria. Por ejemplo: La resolución judicial que autoriza la Intervención
telefónica requiere de la existencia de previos indicios delictivos.

Sin embargo, existen determinados supuestos de intervención carente de indicios de


ilicitud previa cuya justificación constitucional debe quedar fuera de toda duda, es decir
están constitucionalmente justificadas.

Impugnación:

1. Contra el auto dictado por el Juez de la Investigación Preparatoria en los supuestos


previstos en el artículo anterior, el Fiscal o el afectado pueden interponer recurso de
apelación, dentro del tercer día de ejecutada la medida. La Sala Penal Superior
absolverá el grado, previa audiencia, con intervención de los sujetos procesales
legitimados.

2. El afectado también puede solicitar el reexamen de la medida ante el Juez de la


Investigación Preparatoria si nuevas circunstancias establecen la necesidad de un
cambio de la misma. El Juez, discrecionalmente, decidirá si la decisión la adopta previo
traslado a los demás sujetos procesales o mediante una audiencia que señalará al efecto.
Contra el auto que resuelve la solicitud de reexamen procede recurso de apelación,
según el trámite previsto en el numeral anterior.

3. Contra los autos expedidos por la Sala Penal Superior dictados en primera instancia
sólo procede recurso de reposición.

CAPÍTULO II: EL CONTROL DE IDENTIDAD Y LA VIDEOVIGILANCIA

SUBCAPÍTULO I: EL CONTROL DE IDENTIDAD POLICIAL

Artículo 205.- Control de identidad policial

1. La Policía, en el marco de sus funciones, sin necesidad de orden del Fiscal o del
Juez, podrá requerir la identificación de cualquier persona y realizar las
comprobaciones pertinentes en la vía pública o en el lugar donde se hubiere hecho el
requerimiento, cuando considere que resulta necesario para prevenir un delito u
obtener información útil para la averiguación de un hecho punible. El intervenido tiene
derecho a exigir al Policía le proporcione su identidad y la dependencia a la que está
asignado.
2. La identificación se realizará en el lugar en que la persona se encontrare, por medio
del correspondiente documento de identidad. Se deberá proporcionar al intervenido las
facilidades necesarias para encontrarlo y exhibirlo. Si en ese acto se constata que su
documentación está en orden, se le devolverá el documento y autorizará su alejamiento
del lugar.

3. Si existiere fundado motivo que el intervenido pueda estar vinculado a la comisión


de un hecho delictuoso, la Policía podrá registrarle sus vestimentas; equipaje o
vehículo. De esta diligencia específica, en caso resulte positiva, se levantará un acta,
indicándose lo encontrado, dando cuenta inmediatamente al Ministerio Público.

4. En caso no sea posible la exhibición del documento de identidad, según la gravedad


del hecho investigado o del ámbito de la operación policial practicada, se conducirá al
intervenido a la Dependencia Policial más cercana para exclusivos fines de
identificación. Se podrá tomar las huellas digitales del intervenido y constatar si
registra alguna requisitoria. Este procedimiento, contado desde el momento de la
intervención policial, no puede exceder de cuatro horas, luego de las cuales se le
permitirá retirarse. En estos casos, el intervenido no podrá ser ingresado a celdas o
calabozos ni mantenido en contacto con personas detenidas, y tendrá derecho a
comunicarse con un familiar o con la persona que indique. La Policía deberá llevar,
para estos casos, un Libro-Registro en el que se harán constar las diligencias de
identificación realizadas en las personas, así como los motivos y

5. Siempre que sea necesario para las finalidades del juicio o para las finalidades del
servicio de identificación, se pueden tomar fotografías del imputado, sin perjuicio de
sus huellas digitales, incluso contra su voluntad -en cuyo caso se requiere la expresa
orden del Ministerio Público-, y efectuar en él mediciones y medidas semejantes. De
este hecho se levantará un acta.

CONCEPTO:

Esta diligencia de control consiste en el requerimiento de identificación personal


realizado por efectivos policiales en la vía pública o en cualquier otro lugar donde se
realice la solicitud, cuando resulte necesario para prevenir un delito u obtener
información útil para la averiguación de un hecho punible. Para tal efecto el efectivo
policial podrá realizar las comprobaciones pertinentes.

Atribuciones y Funciones de la Policía:

La Policía en el marco de sus funciones y atribuciones podrá requerir a cualquier


persona cuando el caso lo amerite (principio de necesidad, proporcionalidad,
razonabilidad e idoneidad) su documento nacional de identidad o documento
identificatorio alternativo, así como realizar ciertas acciones destinadas a identificar al
requerido o a comprobar la exactitud del documento de identificación.

La realización de este acto de investigación le ha sido asignado a la Policía. El sustento


de este procedimiento, tal como está plasmado normativamente, es represivo –
preventivo en la medida que hay una injerencia en el espacio personal en una
ponderación con la seguridad pública a la que se le da mayor peso, y porque tiene como
finalidad la prevención de delitos. Si bien esta identificación se hace sin necesidad de
orden del fiscal o del juez, sin embargo, debe efectuarse con arreglo a criterios de
razonabilidad y proporcionalidad.

PROCEDIMIENTO
CONTROLES POLICIALES ART 206 NCPP ART 206 CPP

Artículo 206.- Controles policiales públicos en delitos graves

1. Para el descubrimiento y ubicación de los partícipes en un delito causante de grave


alarma social y para la incautación de instrumentos, efectos o pruebas del mismo, la
Policía -dando cuenta al Ministerio Público- podrá establecer controles en las vías,
lugares o establecimientos públicos, en la medida indispensable a estos fines, al objeto
de proceder a la identificación de las personas que transiten o se encuentren en ellos,
al registro de los vehículos y al control superficial de los efectos personales, con el fin
de comprobar que no se porten sustancias o instrumentos prohibidos o peligrosos.

2. La Policía abrirá un Libro Registro de Controles Policiales Públicos. El resultado


de las diligencias, con las actas correspondientes, se pondrá de inmediato en
conocimiento del Ministerio Público.

Para el descubrimiento y ubicación de los partícipes en un delito causante de grave


alarma social y para la incautación de instrumentos, efectos o pruebas del mismo, la
Policía -dando cuenta al Ministerio Público podrá establecer controles en las vías,
lugares o establecimientos públicos, en la medida indispensable a estos fines, al objeto
de proceder a la identificación de las personas que transiten o se encuentren en ellos, al
registro de los vehículos y al control superficial de los efectos personales, con el fin de
comprobar que no se porten sustancias o instrumentos prohibidos o peligrosos.
La Policía abrirá un Libro-Registro de Controles Policiales Públicos.

El personal policial podrá establecer controles en las vías y lugares públicos a objeto
de:

a) Identificar personas
b) Registrar vehículos
c) Realizar el control de efectos personales para comprobar que no porten
sustancias o instrumentos prohibidos o peligrosos, respetando la dignidad

Al respecto el Fiscal verificará:

a) La comunicación al Fiscal competente, en la que se indique el motivo, lugar,


modo y tiempo de la intervención policial a que se refiere el inciso 1) del
artículo 206° del Código Procesal Penal.
b) El informe inmediato del resultado de la intervención con la copia del acta
respectiva, a efecto de disponer las acciones correspondientes.
c) La existencia de los instrumentos o efectos relacionados con la comisión de
delito o de las sustancias prohibidas o peligrosas, en caso de haberse incautado y
la medida de aseguramiento con indicación de la persona responsable.
d) El registro de la acción de control en el LIBRO – REGISTRO CONTROLES
POLICIALES PÚBLICOS, firmando y sellando como constancia de su revisión.

SUBCAPÍTULO II: LA VIDEOVIGILANCIA

Artículo 207.- Presupuestos y Ejecución

1. En las investigaciones por delitos violentos, graves o contra organizaciones


delictivas, el Fiscal, por propia iniciativa o a pedido de la Policía, y sin conocimiento
del afectado, puede ordenar:

a) Realizar tomas fotográficas y registro de imágenes; y,

b) Utilizar otros medios técnicos especiales determinados con finalidades de


observación o para la investigación del lugar de residencia del investigado.
Estos medios técnicos de investigación se dispondrán cuando resulten indispensables
para cumplir los fines de esclarecimiento o cuando la investigación resultare menos
provechosa o se vería seriamente dificultada por otros medios.
2. Estas medidas podrán dirigirse contra otras personas si, en el supuesto del literal a)
del numeral anterior, las averiguaciones de las circunstancias del hecho investigado se
vieran, de otra forma, esencialmente dificultadas o, de no hacerlo, resultaren
relevantemente menos provechosas. En el supuesto del literal b) del numeral anterior,
se podrá dirigir contra otras personas cuando, en base a determinados hechos, se debe
considerar que están en conexión con el investigado o cuando resulte indispensable
para cumplir la finalidad de la investigación, sin cuya realización se podría frustrar
dicha diligencia o su esclarecimiento pueda verse esencialmente agravado.

3. Se requerirá autorización judicial cuando estos medios técnicos de investigación se


realicen en el interior de inmuebles o lugares cerrados.

4. Las medidas previstas en el presente artículo también se pueden llevar a cabo si, por
la naturaleza y ámbito de la investigación, se ven irremediablemente afectadas terceras
personas.

5. Para su utilización como prueba en el juicio, rige el procedimiento de control


previsto para la intervención de comunicaciones.

CONCEPTO

Es un procedimiento audiovisual a través de medios técnicos como filmadoras, que


permite a los investigadores realizar lo que la policía denomina OVISE (observación,
vigilancia y seguimiento) muy útil en delitos en los que el camuflaje de la actividad
criminal es acentuado,

El resultado de la videovigilancia se constituye en evidencia puesto que, si esta es


realizada en lugares públicos y se detecta a los presuntos delincuentes, se pueden
imponer a estas otras medidas limitativas

Video vigilancia – Art 207 NCPP

El nuevo código procesal penal en su Artículo 207 establece que en las investigaciones
por delitos violentos, graves o contra organizaciones delictivas, el fiscal, por propia
iniciativa o a pedido de la Policía, y sin conocimiento del afectado, puede ordenar

a) Realizar tomas fotográficas y registros de imágenes,


b) Utilizar otros medio técnicos especiales determinados con finalidad de observación
o para la investigación del lugar de residencia del investigado.
c) Podrán dirigirse contra otras personas bajo determinadas circunstancias.
d) Se requiere autorización judicial si se realizan en el interior de inmuebles o en
lugares cerrados.

CAPÍTULO III: LAS PESQUISAS

Artículo 208.- Motivos y objeto de la inspección

1. La Policía, por sí dando cuenta al Fiscal o por orden de aquél, podrá inspeccionar o
disponer pesquisas en lugares abiertos, cosas o personas, cuando existan motivos
plausibles para considerar que se encontrarán rastros del delito, o considere que en
determinado lugar se oculta el imputado o alguna persona prófuga, procede a realizar
una inspección.

2. La pesquisa tiene por objeto comprobar el estado de las personas, lugares, cosas, los
rastros y otros efectos materiales que hubiere, de utilidad para la investigación. De su
realización se levantará un acta que describirá lo acontecido y, cuando fuere posible,
se recogerá o conservarán los elementos materiales útiles.

3. Si el hecho no dejó rastros o efectos materiales o si estos han desaparecido o han


sido alterados, se describirá el estado actual, procurando consignar el anterior, el
modo, tiempo y causa de su desaparición y alteración, y los medios de convicción de
los cuales se obtuvo ese conocimiento. Análogamente se procederá cuando la persona
buscada no se halla en el lugar.

4. De ser posible se levantarán planos de señales, descriptivos y fotográficos y toda


otra operación técnica, adecuada y necesaria al efecto.

LAS PESQUISAS

La pesquisa es una forma de indagar, o averiguar sobre actos o acciones realizadas por
algo o alguien; que nos permitirá corroborar o refutar dicho conocimiento vago o
incierto.

Artículo 209.- Retenciones

1. La Policía, por sí dando cuenta al Fiscal o por orden de aquél, cuando resulte
necesario que se practique una pesquisa, podrá disponer que durante la diligencia no
se ausenten las personas halladas en el lugar o que comparezca cualquier otra.

2. La retención sólo podrá durar cuatro horas, luego de lo cual se debe recabar,
inmediatamente, orden judicial para extender en el tiempo la presencia de los
intervenidos.

Artículo 210.- Registro de personas


1. La Policía, por sí dando cuenta al Fiscal o por orden de aquél, cuando existan
fundadas razones para considerar que una persona oculta en su cuerpo o ámbito
personal bienes relacionados con el delito, procederá a registrarla. Antes de su
realización se invitará a la persona a que exhiba y entregue el bien buscado. Si el bien
se presenta no se procederá al registro, salvo que se considere útil proceder a fin de
completar las investigaciones.

2. El registro se efectuará respetando la dignidad y, dentro de los límites posibles, el


pudor de la persona. Corresponderá realizarlo a una persona del mismo sexo del
intervenido, salvo que ello importe demora en perjuicio de la investigación.

3. El registro puede comprender no sólo las vestimentas que llevare el intervenido, sino
también el equipaje o bultos que portare y el vehículo utilizado.

4. Antes de iniciar el registro se expresará al intervenido las razones de su ejecución, y


se le indicará del derecho que tiene de hacerse asistir en ese acto por una persona de
su confianza, siempre que ésta se pueda ubicar rápidamente y sea mayor de edad.

5. De todo lo acontecido se levantará un acta, que será firmada por todos los
concurrentes. Si alguien no lo hiciera, se expondrá la razón.

DEFINICION

La corte constitucional reconoció que la PNP tiene la facultad de practica de registros


de personas, afirmando que se trata de “requisas, cacheos realizados en lugares
públicos, que implica la inmovilización momentánea de la persona y una palpación
superficial de su indumentaria para buscar armas o elementos prohibidos con el fin de
prevenir la comisión de delitos, o para garantizar la seguridad de los lugares y de las
personas”.

La misma corte define el termino registrar “como sinónimo de tantear, cachear,


auscultar, palpar lo cual indica que la exploración que se realiza en el registro personal
supone una revisión superficial del individuo y de la indumentaria misma que porta y
excluye cualquier exploración de cavidades u orificios corporales.

Este registro puede comprender además el área física inmediato y bajo control de la
persona donde pueda ocultar armas o esconder evidencia.
EXAMEN CORPORAL ART 211 Y ART 212 NCPP

El Juez de la Investigación Preparatoria, a solicitud del Ministerio Público, puede


ordenar un examen corporal del imputado para establecer hechos significativos de la
investigación, siempre que el delito esté sancionado con pena privativa de libertad
mayor de cuatro años.

El Ministerio Público, o la Policía Nacional con conocimiento del Fiscal, sin orden
judicial, podrán disponer mínimas intervenciones para observación, como pequeñas
extracciones de sangre, piel o cabello que no provoquen ningún perjuicio para su salud,
siempre que el experto que lleve a cabo la intervención no la considere riesgosa. En
caso contrario, se pedirá la orden judicial, para lo cual se contará con un previo
dictamen pericial que establezca la ausencia de peligro de realizarse la intervención.

ALCOHOLEMIA - ART. 213 NCPP

Artículo 213.- Examen corporal para prueba de alcoholemia

1. La Policía, ya sea en su misión de prevención de delitos o en el curso de una


inmediata intervención como consecuencia de la posible comisión de un delito
mediante la conducción de vehículos, podrá realizar la comprobación de tasas de
alcoholemia en aire aspirado.

2. Si el resultado de la comprobación es positiva o, en todo caso, si se presentan signos


evidentes de estar bajo la influencia de bebidas alcohólicas u otro tipo de sustancia
prohibida, el intervenido será retenido y conducido al centro de control sanitario
correspondiente para realizar la prueba de intoxicación en sangre o en otros fluidos
según la prescripción del facultativo.

3. La Policía, cuando interviene en operaciones de prevención del delito, según el


numeral 1) del presente artículo, elaborará un acta de las diligencias realizadas,
abrirá un Libro-Registro en el que se harán constar las comprobaciones de aire
aspirado realizadas, y comunicará lo ejecutado al Ministerio Público adjuntando un
informe razonado de su intervención.

4. Cuando se trata de una intervención como consecuencia de la posible comisión de


un delito y deba procederse con arreglo al numeral 2) del presente artículo, rige lo
dispuesto en el numeral 4) del artículo 210.

Prueba de alcoholemia
Es una prueba que determina qué tanto alcohol hay en su sangre. La prueba mide la
cantidad de alcohol en el aire que uno expulsa (exhala).

Forma en que se realiza el examen

Existen diversas marcas de pruebas de alcoholemia. Cada una utiliza un método


diferente para evaluar el nivel de alcohol en el aliento. El dispositivo puede ser
electrónico o manual.

CAPÍTULO V: EL ALLANAMIENTO

Artículo 214.- Solicitud y ámbito del allanamiento

1. Fuera de los casos de flagrante delito o de peligro inminente de su perpetración, y


siempre que existan motivos razonables para considerar que se oculta el imputado o
alguna persona evadida, o que se encuentran bienes delictivos o cosas relevantes para
la investigación, el Fiscal solicitará el allanamiento y registro domiciliario de una casa
habitación, casa de negocio, en sus dependencias cerradas, o en recinto habitado
temporalmente, y de cualquier otro lugar cerrado, siempre que sea previsible que le
será negado el ingreso en acto de función a un determinado recinto.

2. La solicitud consignará la ubicación concreta del lugar o lugares que habrán de ser
registrados, la finalidad específica del allanamiento, las diligencias a practicar, y el
tiempo aproximado que durará.

3. Los motivos que determinaron el allanamiento sin orden judicial constarán


detalladamente en el acta.

El Fiscal solicitará el allanamiento y registro domiciliario de una casa habitación, casa


de negocio, en sus dependencias cerradas, o en recinto habitado temporalmente, y de
cualquier otro lugar cerrado, siempre que sea previsible que le será negado el ingreso en
acto de función a un determinado recinto.

La orden tendrá una duración máxima de dos semanas, después de las cuales caduca la
autorización, salvo que haya sido expedida por tiempo determinado o para un período
determinado, en cuyo caso constarán esos datos.

LA EXHIBICIÓN FORZOSA Y LA INCAUTACIÓN

El artículo 218º del C.P.P. dispone la exhibición forzosa e incautación de bienes


“cuando el propietario, poseedor, administrador, tenedor u otro requerido por el Fiscal
para que entregue o exhiba un bien que constituye cuerpo del delito y de las cosas que
se relacionen con él o que sean necesarias para el esclarecimiento de los hechos
investigados se negare a hacerlo o cuando la ley así lo prescribiera, el Fiscal solicitará al
Juez de la investigación preparatoria ordene su incautación o exhibición forzosa. La
petición será fundamentada.

Es importante resaltar que ahora es el Fiscal quien conserva los bienes incautados.

A) Exhibición e incautación de actuaciones y documentos no privados

- Las actuaciones y documentos no privados también pueden ser objeto de


exhibición forzosa o incautación.

- Se deben realizar las investigaciones para determinar la calidad de los objetos


como de no privados.

- Recursos de los afectados por esta medida

El ART. 224º establece la incautación de documentos no privados y el deber de


exhibición, sosteniendo que también pueden ser objeto de exhibición forzosa o
incautación las actuaciones y documentos que no tienen la calidad de privados, pero
cuando se trate de un secreto de Estado, el Fiscal acudirá al Juez de la Investigación
Preparatoria a fin de que proceda de conformidad con lo dispuesto por el art. 165º es,
decir, respetar el secreto profesional, enfatizando que quien tenga en su poder
documentos requeridos está obligado a exhibirlos o entregarlos inmediatamente al
Fiscal, incluso su original y todo objeto que detenten por razones de su oficio, encargo,
ministerio o profesión, salvo que expresen que se trata de un secreto profesional o de
Estado.

EL CONTROL DE COMUNICACIONES DOCUMENTOS PRIVADOS

Interceptación e incautación postales

La nueva Ley establece la posibilidad de que se pueda interceptar, incautar y abrir


documentación pública o privada que se dirija al imputado de manera directa o
indirecta, siempre que sea indispensable para el debido esclarecimiento de los hechos
que se investigan.

Se requiere d pedido formal y sustentado del Fiscal al Juez de la Investigación


Preparatoria para la interceptación, incautación y apertura. Si el Juez acepta el pedido,
se ordenará su ejecución por el Fiscal o éste podrá delegarla en un efectivo policial
También se ha considerado al tercero que tiene en su poder tales documentos, debiendo
ser requerido para que las entregue, bajo apercibimiento de ser sometido a investigación
preliminar, salvo en los casos de estimarse secretos del Estado o se alegare inmunidad
diplomática.

INTERVENCIÓN DE COMUNICACIONES Y TELECOMUNICACIONES

Se trata de una de las diligencias de investigación que requiere de un seguimiento


puntual de los operadores para su debida aplicación, siguiendo las formas establecidas
por la Ley. Esta medida restrictiva de derecho fundamental debe ser excepcional y
cuidadosa de no afectar el derecho a la intimidad de las personas en los aspectos no
sometidos a investigación.

ASEGURAMIENTO E INCAUTACIÓN DE DOCUMENTOS PRIVADOS

Durante las diligencias de registro personal o del lugar o con ocasión de la investigación
misma, asegurar e incautar los documentos privados, incluyendo documentos contables
y administrativos. Lo que favorece la investigación y cuida la reserva de la información
contenida en los documentos.

LEVANTAMIENTO DEL SECRETO BANCARIO Y DE LA RESERVA


TRIBUTARIA

Artículo 236.- Levantamiento de la reserva tributaria

1. El Juez, a pedido del Fiscal, podrá levantar la reserva tributaria y requerir a la


Administración Tributaria la exhibición o remisión de información, documentos y
declaraciones de carácter tributario que tenga en su poder, cuando resulte necesario y
sea pertinente para el esclarecimiento del caso investigado.

2. La Administración Tributaria deberá exhibir o remitir en su caso la información,


documentos o declaraciones ordenados por el Juez.

3. Rige, en lo pertinente, lo dispuesto en los numerales 3 y 4 del artículo anterior.

En cuanto al Secreto Bancario el pedido fundamentado lo hace el Fiscal al Juez de la


Investigación Preparatoria, quien lo ordena y recibido el informe que emitan las
instituciones bancarias, se podrá disponer la incautación de documentos, títulos valores,
sumas de dinero u otro bien o el bloqueo o inmovilización de cuentas, siendo el
presupuesto indispensable la existencia de una relación del bien con los hechos
delictivos que se investigan. El mandato judicial puede recaer en los bienes del
imputado o en aquellos bienes que se encuentren registrados a nombre de otras personas
(Art. 235.2). Igual procedimiento se sigue en los casos de levantamiento de la
reserva tributaria, mediante el cual se podrá requerir a la administración tributaria para
que exhiba o remita la información, documentos o declaraciones tributarias, siempre
que sean necesarios para el esclarecimiento de los hechos que se investigan

CLAUSURA O VIGILANCIA DE LOCALES E INMOVILIZACIÓN

Diligencia de naturaleza policial con una finalidad probatoria. La clausura busca


impedir que sean alterados las huellas o rastros que el delito hubiere dejado en el lugar,
o evitar la destrucción o adulteración de las pruebas de su comisión allí existentes. La
misma finalidad tiene la vigilancia de los locales. Esta diligencia tiene características
particulares:

 Motivación. Pedido fundamentado del Fiscal.


 Excepcionalidad. Medida excepcional, aplicable para la investigación del delito.
 Gravedad de la infracción. El delito debe ser sancionado con pena superior a
cuatro años, priorizándose la medida para casos graves, excluyendo su adopción
en los casos de bagatela.
 Temporalidad. La medida no debe durar más de quince días, prorrogables por un
tiempo igual.

CONCLUSION

Sobre la base de los fines de un procedimiento penal, se analiza la búsqueda de la


verdad como un objetivo esencial, que sirve como criterio de legitimación en el Estado
en el ejercicio del derecho de castigar. Sin embargo, mirando bajo un punto de vista
crítico, es imposible que lo haga por las múltiples restricciones por el propio sistema y
las diversas teorías que existen en torno a la verdad.

A partir del reconocimiento de que el proceso penal demanda la restricción de


determinados derechos fundamentales, en aras de lograr el esclarecimiento de los
hechos sujetos a investigación y sus autores, se analiza el alcance que puede tener esta
restricción, bajo el cumplimiento de los requisitos de justicación teleológica,
habilitación legal para ello, resolución judicial que lo autorice, apariencia del delito y de
proporcionalidad. Por lo signicativo que resultan, se analizan las medidas de in-
tervención de comunicaciones privadas, tanto telefónicas como postales, así como el
registro de libros y papeles, la entrada y registro en lugar cerrado y la infilltración
policial.

BIBLIOGRAFIA

 https://lpderecho.pe/nuevo-codigo-procesal-penal-peruano-actualizado/
 https://www.revistaius.com/index.php/ius/article/view/198/377
 https://www.corteidh.or.cr/tablas/r32676.pdf
 https://es.slideshare.net/fafelito/busqueda-pruebas-restriccion-derechos
 https://es.scribd.com/document/431921778/Restriccion-de-Derechos-y-
Busqueda-de-Pruebas-Trabajo
 https://www.corteidh.or.cr/tablas/r33626.pdf
 https://static.legis.pe/wp-content/uploads/2019/11/Manual-de-la-
investigaci%C3%B3n-preparatoria-del-proceso-com%C3%BAn-LP.pdf

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