Está en la página 1de 3

Ambiente Terapéutico

Se define como “el conjunto de elementos físicos y humanos que comprende la


interacción del personal de la institución de salud con el paciente y familiares, para estimular
al primero hacia salud o rehabilitación”. Tiene por objetivos satisfacer las necesidades y
problemas de salud, desarrollar las relaciones interpersonales y de comunicación, ayudar al
paciente a integrarse al medio hospitalario, prevenir las Infecciones Asociadas a la Atención
de la Salud (IAAS) y reintegrar al paciente a su hogar en condiciones óptimas posibles de
vida, estudio y trabajo. Para que se lleve a cabo el ambiente terapéutico requiere de la
interacción del ambiente físico y el humano, el primero hace referencia a la planeación
arquitectónica de la institución, departamentos o servicios clínicos acorde con las
necesidades de salud los cuales deben proporcionar comodidad, seguridad y atención al
paciente, familiares y personal de salud, es considerado como un ambiente estático en
comparación con el ambiente humano que se considera dinámico, conformado por los
integrantes del equipo de atención a la salud quienes deben poseer actitudes de interés,
respeto, responsabilidad y llevar a cabo actividades específicas.
La interacción entre los integrantes del equipo y el paciente debe emplear los
principios de comunicación terapéutica los cuales constituyen la base para llevar a cabo
cuidados certeros, asesoría y la evaluación continua. La relación entre el personal de
enfermería y el paciente cobra vigencia a través de la escucha y la ayuda que se le proporciona
al paciente como su familia promoviendo la educación. Es necesario contemplar una serie de
factores como la edad, la cultura, el nivel de escolaridad entre otros, ya que el contenido de
un mensaje que es emitido influye directamente en la manera como el receptor lo percibe por
lo que tomarlos en cuenta logrará que se lleve una comunicación eficaz en la cual se
reconozca al individuo o paciente como un ser único con valores, emociones y necesidades
específicas las cuales se alteran durante la enfermedad. Es necesario reconocer que a pesar
de que existen mensajes cuyos significados son evidentes también se pueden encontrar
encubiertos ya que un individuo se puede comunicar de manera verbal o no verbal, por lo
tanto lo que se dice tanto como el silencio pueden poseer un contenido de valor de
información, la comunicación se volverá disfuncional cuando una persona no asume la
responsabilidad de su participación dentro de la comunicación. Por lo tanto podemos concluir
y definir que una relación de ayuda es aquella en la que el personal de salud facilita a una
persona o paciente medios para alcanzar su desarrollo personal, le apoya a madurar,
integrarse, adaptarse a sitios, situaciones especiales y descubrir sus propias experiencias. Así
mismo se una persona o paciente se define como un beneficiario directo de la atención médica
y de enfermería, usuario o cliente, aquel individuo que requiere y obtiene los servicios de
atención médica.
El personal de la salud incluyendo enfermería debe mantener actitud amable, centrar
la comunicación en el paciente o persona y no sólo en la actividad que se le realiza, tomar en
cuenta sus sentimientos, emociones, evitando considerarlos como objetos, administrar el
tiempo para realizar actividades técnicas, establecer comunicación con el paciente o persona,
escuchar al paciente o persona, permitir que el paciente amplíe la conversación, responder a
las preguntas del paciente o persona en forma clara, veraz y concisa, invitarlo a compartir su
responsabilidad en el tratamiento, reforzar conducta de independencia, fomentar actitudes de
autodeterminación, toma de decisiones y de competencia, reafirmar fuentes de motivación
para el logro de propósitos, identificar emociones así como sentimientos que comprometan
el equilibrio biopsicosocial y evitar situaciones estresantes.
La relación de ayuda consta de tres fases la de inicio y orientación, la de desarrollo y
trabajo y de final o de terminación. En la primera fase se pretende conocer y brindar confianza
al paciente mediante su presentación profesional, dedicar tiempo para la recepción de su
ingreso, orientar sobre los procedimientos que serán realizados, informar sobre los
reglamentos del departamento y del propio hospital, explicar las rutinas del servicio y se
deberá observar en todo momento su comportamiento. La segunda fase se determina como
el núcleo de interacción, aquí se llevan a cabo todos los procedimientos, desempeña la
interrelación del personal desde ingreso hasta el egreso del paciente. La tercera realiza
actividades de planeación de la atención que deberá llevar al momento de su egreso para
mejorar la condiciones de salud y reforzar su personalidad, es en ésta fase donde deberán
identificarse actitudes negativas como el no cooperar con el tratamiento, no querer luchar,
deseo constante de compañía, miedo o daños irreparables o muerte, el no desear integrarse al
hogar por temor a causar molestias para poder resolverlas a través de la búsqueda de
estrategias que disminuyan o controlen esas situaciones.
Berman, A., Snyder, S., Kozier, B., Erb, G. (2013). Fundamentos de enfermería: conceptos,
proceso y práctica. Madrid, España. Pearson.

Reyes, E. (2015) Fundamentos de Enfermería: Ciencia, metodología y tecnología. México.


El manual moderno.

Sorrentino, S., Remmert, L., Gorek, B. (2012). Fundamentos de enfermería práctica. España.
Elsevier.

También podría gustarte