Análisis Del Sistema Educativo Mexicano Como Reproductor o Aparato

Ideológico Del Estado

Instituto de Estudios Universitarios

Sociología de la Educación

Guadalupe Patricia Balderas León

Actividad 4. La Escuela en México: ¿Reproductora o aparato ideológico del

Estado?
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Introducción

El sistema educativo en México ha pasado por una serie de transformaciones a lo

largo del tiempo, distinguiéndose por las características que cada gobierno al frente de la
Nación tenga como prioridades de logro. Sin embargo, para comprender la evolución de la
misma habría que trasladarse a sus inicios con las primeras civilizaciones prehispánicas
en las que dos escuelas se destacaron durante ese entonces: el calmécac y el
telpochcalli, teniendo como objeto de ser, la educación basada en clases sociales, una
destinada para la sociedad común y otra específica para instruir a la nobleza.

Este hecho permite entender las influencias que aun presentan las actuales
escuelas mexicanas, haciendo referencia a las públicas y privadas, las cuales se conocen
por esa brecha que no está dicha abiertamente, sin embargo, existe; en la que las clases
sociales se hace evidente para acceder a las escuelas que son pagadas, mientras que
dentro de las escuelas subsidiadas por el gobierno también se caracterizan por la zona en
la que se encuentran, unas marginadas, otras rurales y urbanas, teniendo acceso a ellas
los niños de acuerdo al lugar donde radiquen.

En ambos casos, la finalidad del siguiente texto es analizar cómo esa educación
brindada en las escuelas actuales, es planteada en los planes y programas de estudio
vigentes con base a qué influencias y modelos de estudio internaciones que el Estado
considera relevante inculcar en los estudiantes desde la educación inicial hasta la
educación superior.

Teniendo en consideración que el Sistema Educativo de México se encuentra

integrado por la educación básica: integrada a su vez por el preescolar, primaria y
secundaria; la educación media superior integrada por el bachillerato general, tecnológico,
profesional técnico; y la educación superior que comprende Técnico Superior
Universitario, Licenciatura, Especialización, Maestría y Doctorado; estas a su vez cuentan
con ciertas modalidades: escolarizada, no escolarizada y mixta, con la finalidad de que
todos puedan tener acceso a la que mejor se acople a su estilo de vida.

Es importante mencionar que la postura presentada es un criterio personal basado

en el análisis de la bibliografía, así como de la experiencia propia del autor mediante la
observación y estudio en los niveles educativos.
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Análisis Del Sistema Educativo Mexicano Como Reproductor o Aparato

Ideológico Del Estado

La educación en México se encuentra fundamentada en el artículo tercero

constitucional el cual hace referencia las características que debe poseer, dentro de ellas
se marca el acceso que toda persona puede tener a ella, así como específica que es el
Estado el encargado de impartirla y garantizarla. En el caso específico de la educación
básica, es obligatoria, también se considera laica pues no debe tener influencia de religión
alguna, también es democrática, nacional, equitativa, inclusiva, intercultural, integral y de
excelencia.

Cabe mencionar que este, como muchos otros artículos de la Carta Magna, han
sido reformados con el paso del tiempo, adhiriendo, abrogando o derogando
características necesarias para el correcto funcionamiento de las leyes, en el caso de la
educación democrática, Ander- Egg menciona:

“Democratización de la educación se utiliza con tres alcances diferentes: a) como

forma de universalización de la enseñanza primaria y secundaria; b) como forma
de posibilitar el libre acceso a las instituciones públicas de enseñanza superior a
todas aquellas personas que tengan aptitudes, sin ninguna exclusión por razones
económicas, sociales, religiosas, raciales, políticas o de sexo; c) como forma de
organizar el funcionamiento de las instituciones educativas y el sistema de
enseñanza…”

Para entender el sistema educativo es importante partir desde la comprensión del

término ideología, de acuerdo con Louis Althusser tiene en cuenta el papel de la sociedad
como reproductora de elementos ideológicos, así como a los elementos reguladores y
represores del estado en una sociedad guiada por las instituciones de gobierno con sus
regímenes de recaudación y sanción, por otra parte, se encuentran las instituciones
formativas como la religión y la familia. Son considerados como aparatos ideológicos del
estado.

Por lo anterior se puede mencionar que en las relaciones de producción y en la

explotación de las clases sociales, nos encontramos inmersos en la división del trabajo
que se necesita llevar a cabo para el funcionamiento del estado, de manera que el
individuo debe acatar una postura acorde con su posición en el sistema donde se
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desarrolla. Como ejemplo claro se encuentra el docente quien es formador de la sociedad,

dentro de sus funciones debería estar crear ambientes de aprendizaje que promuevan el
reconocimiento y uso de las capacidades de los educandos como seres que poseen
habilidades y conocimientos, capaces de razonar críticamente sobre sus acciones y tomar
decisiones que convengan a su estilo de vida, sin embargo a esta función del docente se
alude que entra en los roles que deben cumplirse “Cada grupo está provisto de la
ideología que conviene al rol que debe cumplir en la sociedad de clases: rol de explotado,
de agente de la explotación, de agentes de la represión o de profesionales de la
ideología” (Altusser, 1998).

Hace alusión a que son pocos los maestros que con valentía intentan volcarse
contra el sistema cambiando la ideología en la enseñanza así como en el aprendizaje,
convirtiéndose en prisioneros de lo que deben enseñar pues es importante cumplir con los
planes de estudio y los contenidos que se encuentran en los libros de texto, siendo estos
un parámetro de logro, medibles en evaluaciones estandarizadas de las cuales el
resultado que se obtengan no causan ningún efecto en la reformación de los métodos de
enseñanza, por otra parte, si permiten medir el rezago educativo que se cubre con
adecuaciones a los acuerdos de evaluación en los cuales se elimina la posibilidad de
repetir un grado escolar ya que esto causaría un impacto en las estadísticas
gubernamentales.

De acuerdo con este autor la ideología, el Estado y las condiciones de producción,

son enfoques en los cuales la vida de la sociedad se ve reflejada. En toda producción
existe un ente dominante capaz de reproducir las condiciones de su producción mediante
la fuerza y las relaciones existentes.

En este caso la educación en la Nación debería ser capaz de implementar

métodos de enseñanza novedosos y actuales, que cumplan con la universalidad que se
requiere en donde los valores que se fomenten hacia la sociedad tengan un impacto de
cambio verdadero y con funcionalidad. Dista entonces de la actualidad en la que regida
por la Secretaría de Educación, encargada de los planes y programas de estudio,
proporcionan los contenidos como una ideología que debe transmitirse a los educando en
la sociedad que se está formando.

Libros de texto elaborados en algunos casos, basados en informaciones arcaicas y

poco verdaderas, vendiendo una historia de héroes nacionales ilustrándolos como
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modelos a seguir, sin hacer mención de las intenciones personales de cada uno de ellos.
Que deberían aportarse con la finalidad de crear un pensamiento crítico en los alumnos y
no memorizando hechos y fechas manejadas hasta cierto punto por el estado.

Por otra parte, aunque se considera que la educación no debe tener influencia
religiosa, se considera que es la familia quien ocupó el puesto de este rol social, ya que,
en el núcleo familiar también se generan ideologías que son transmitidas de generación
en generación. Valores éticos y morales, formas de comportarse en la sociedad también
implican una sumisión de las personas en la manera de pensar, pues llegan a ser
considerados como rebeldes al no seguir ese estilo de vida o pensamiento. Son la
escuela y la familia quienes conforman ese rol preponderante en las relaciones de
producción.

“El espíritu de una época se manifiesta por el pensamiento que predomina en ella,
por los valores que orientan la vida humana y por la conciencia que tiene el hombre del
tiempo en que vive” (Miranda Pacheco, 1978) en la modernidad la iglesia ya no tiene
inferencias en el sistema educativo, el papel que antes fue considerado como
evangelización a las masas, actualmente ya no es un eje rector del sistema educativo. Sin
embargo, los modelos educativos actuales aun requieren adaptaciones funcionales
acordes con la universalidad de la educación. Cabe mencionar que se han llevado a cabo
acciones encaminadas hacia el alcance de los objetivos, sin embargo, el impacto de los
mismos no ha sido visible en resultados palpables.

Los motivos son las ideologías que cada gobierno al mando del país propone cada
sexenio, las modificaciones que se van realizando, en lugar de darle seguimiento, hacen
que en cada mandato se deba comenzar de nuevo, ya sea con planes de estudio, libros
de textos o talleres docentes, de los cuales no hay un aterrizaje en términos medibles.
Ante estos cambios, los mas afectados son los estudiantes que no logran fundamentar
sus aprendizajes esperados. El desarrollo intelectual de los mismos, queda en manos de
los maestros que son sus propias herramientas tratan de subsanar un sistema que no
tiene claro a donde quiere llegar.

Es que se requiere la inversión de presupuesto para aplicar proyectos reales que

puedan funcionar en el ámbito vivencial de la sociedad actual. Mella Garay menciona que
“La educación debe asumir entonces, la misión de cultivar y potenciar en los sujetos,
nuevas competencias que hemos identificado como Tolerancia a la incertidumbre y
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Administración del riesgo” (2003) ya que estas son vistas como habilidades y capacidades
que el sujeto debe tener para prever los cambios personales, sociales o tecnológicos que
se le puedan presentar. El sistema educativo actual está fomentando la atención de las
áreas socioemocionales mediante asignaturas relacionadas a la salud física y mental. El
manejo de la ansiedad y las frustraciones de las generaciones actuales son un reto para
el cual se debe estar preparado. Debido a las situaciones sanitarias actuales fue
necesario hacer modificaciones a las prioridades en los contenidos para abordar con el
alumnado, procurando atender el aspecto socioemocional.
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Conclusión

Por lo anterior se puede mencionar que el Sistema Educativo Mexicano, ha sufrido

modificaciones de acuerdo con cada etapa de su historia, estas han sido con la finalidad
de proporcionar avances acordes a las necesidades de ese entonces.

Considerando que todos esos cambios no han podido establecerse por mas de un
sexenio se puede considerar que no cumple con todas las características de un aparato
ideológico ya que ningún plan de estudios ha podido florecer completamente. Misma
situación se presenta en la actualidad con la Nueva Escuela Mexicana, que sale a la luz
sin un claro objetivo de logro como un programa pobre del que se esperan pobres
resultados, pues una característica de cada gobierno es que la educación no es una
prioridad, tal es el caso de la inversión que se requiere en infraestructura y personal
académico.

La pandemia dejó a la vista las carencias existentes para llevar la educación a

distancia, pero también las desigualdades en las clases sociales, en donde solo algunos
tuvieron acceso a dispositivos electrónicos y red de internet para tener acercamientos con
sus docentes. Teniendo como resultado un rezago educativo a gran escala.

Por otra parte, la educación como reproductora se asemeja un poco mas a la

realidad actual en la que las escuelas se encuentran influenciadas por la sociedad que
impera. Dependiendo en entorno cultural, político y social donde se encuentre la
institución se manifiestan distintos comportamientos entre los involucrados en la
educación. Padres de familia que actualmente juzgan y critican la labor docente sin
respeto alguno, directivos procurando el cumplimento de actividades al pie de la letra para
entregar evidencias a las autoridades superiores, estas a su vez en la cadena de mando.

Donde los estudiantes son formados para cumplir con ciertos estándares de
acuerdo con la sociedad y la vida productiva que les espera, acatando reglas y normas de
conducta que forjen un carácter de obediencia funcional para la producción. Dejando atrás
sus propios intereses, capacidades, habilidades y valores, se tiende a coartar la libertad
de aprendizaje individual. El sistema educativo debería fomentar la innovación de
practicas educativas y fortalecer el magisterio otorgando las herramientas necesarias para
llevar a cabo su función procurando el desarrollo intelectual de los individuos, formando
futuros adultos competentes para la vida en sociedad a partir del reconocimiento de sus
propias capacidades.
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Bibliografía

Altusser, L. (1988). Ideología y aparatos ideológicos del Estado. Freud y Lacan, Buenos
Aires, Nueva Visión. (completo) Recuperado de:
http://perio.unlp.edu.ar/teorias2/textos/m3/althusser.pdf

ANDER-EGG, E. Diccionario de educación. ed. Córdoba: Editorial Brujas, 2014. 269 p.

Disponible en: https://elibro.net/es/ereader/ieu/78159?page=68. Consultado en: 19 Dec
2022
Arias Gago, A. (2010-2011). “La sociedad del conocimiento”. Recuperado de:
http://unileonmaster.wikispaces.com/file/view/LA+SOCIEDAD+DEL+CONOCIMIENTO.pdf
(completo)

Mella Garay, E. (2003). “La educación en la sociedad del conocimiento y el riesgo”, en

Revista Enfoque Educacionales, 5 (1) pp. 107-114.

Miranda Pacheco, M. (1978). “La sociedad moderna y el proceso de modernización”, en

La educación como proceso conectivo de la sociedad, la ciencia, la tecnología y política,
México, Editorial Trillas. Recuperado de:
http://publicaciones.anuies.mx/pdfs/revista/Revista36_S3A1ES.pdf (completo)

Pérez Gómez, A. (2009), “Las funciones sociales de la escuela, Buenos Aires. (completo)
Recuperado de: https://pedagogiaydidacticaunsa.files.wordpress.com/2013/06/perez-
gomez2.pdf