Afiche de propaganda oficial, característica del gobierno de Perón.
Durante el gobierno peronista el número de inscriptos en las
escuelas primarias y secundarias creció a tasas superiores a la de los años anteriores. En 1946 hubo 2 049 737 alumnos inscriptos en las escuelas primarias y 217 817 en las secundarias, en tanto que en 1955 fueron 2 735 026 y 467 199, respectivamente1920 El crecimiento más rápido de la escuela secundaria respecto de la primera indica que se produjo el acceso a la educación secundaria de la mayor parte de los hijos de clase media y de una parte significativa de los estratos altos de la clase trabajadora, lo que se ve confirmado por la circunstancia de que el mayor aumento se dio en la enseñanza comercial y técnica.21 Durante los nueve años de gobierno de Perón, el presupuesto destinado a la Universidad de Buenos Aires se multiplicó por siete. La ley 13031 (1947) incluyó 115 artículos que trataban temas como carrera docente, régimen de alumnado, tareas y objetivos universitarios, y financiamiento. Reconoció la autonomía universitaria para el fomento de la cultura, la investigación y la formación profesional (art. 1). Fue derogada tras el golpe de 1955 y se restituyó la Ley Avellaneda. (Broches, 2009) En relación con el desarrollo de la política científica es importante destacar que el 17 de mayo de 1951, Perón firmó el decreto de creación del CNICyT (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas), que fue un antecedente del CONICET. El 31 de mayo de 1951, Perón creó la CNEA (Comisión Nacional de Energía Atómica) y la DNEA (Dirección Nacional de Energía Atómica). Como parte de las innovaciones pedagógicas en materia de educación superior, se destaca la creación de la Universidad Tecnológica Nacional y el incentivo que el gobierno peronista brindó a las escuelas técnicas. En términos de matrícula, en esos nueve años se triplicó la cantidad de estudiantes en todas las universidades nacionales: pasó de 51 272 estudiantes (en 1947) a 143 542 en 1955 (según Mangone y Warley, 1984, pág. 28). Además, por primera vez se instauró un sistema de becas para estudiantes de bajos recursos a partir de un impuesto del 2 % sobre los sueldos establecido en los artículos 87 y 107 de la Ley n.º 13.013. Esto posibilitó que para el año 1956, Argentina fuera el país con mayor cantidad de estudiantes universitarios en toda América Latina (Buchbinder, 2005, pág. 161). La enseñanza religiosa fue ratificada por ley del Congreso el 14 de marzo de 1947 y se mantuvo durante casi todo el gobierno de Perón, hasta ser abolida el 16 de diciembre de 1954 en el marco del conflicto del gobierno con la Iglesia católica.22 La escuela argentina se había formado como un territorio neutral sin discriminación política, racial ni religiosa, pero durante el gobierno peronista no solamente los docentes estaban obligados a comentar los actos de gobierno más importantes sino que además los textos escolares comenzaron a incorporar dibujos, fotografías y textos laudatorios de Perón y Evita tales como «¡Viva Perón!», «Perón es un buen gobernante», y «Perón y Evita nos aman», y otros similares, que se constituyeron en uno de los motivos de irritación de los opositores.23 Artículo principal: Enseñanza primaria y secundaria en el primer gobierno de Perón Durante el gobierno peronista el número de inscriptos en las escuelas primarias y secundarias creció a tasas superiores a la de los años anteriores, mientras que en 1946 hubo 2.049.737 alumnos inscriptos en las escuelas primarias y 217.817 en las secundarias, para el año 1955 fueron 2.735.026 y 467.199 respectivamente. 2425 Se produjo el acceso a la educación secundaria de la mayor parte de los hijos de clase media y de una parte significativa de los estratos altos de la clase trabajadora, especialmente en la enseñanza comercial y técnica.26 La enseñanza religiosa en las escuelas primarias y secundarias que venía de la presidencia de Ramírez fue abolida el 16 de diciembre de 1954.27 El crecimiento más rápido de la escuela secundaria respecto de la primera indica que se produjo el acceso a la educación secundaria de la mayor parte de los hijos de clase media y de una parte significativa de los estratos altos de la clase trabajadora, lo que se ve confirmado por la circunstancia de que el mayor aumento se dio en la enseñanza comercial y técnica.28 En 1954, el Congreso con mayoría peronista derogó la enseñanza religiosa en las escuelas públicas (no así en las privadas). El Congreso aprobó el Estatuto para el Personal Docente de los Establecimientos de Enseñanza Privada y el Consejo Gremial de Enseñanza Privada que igualaba los derechos de los docentes de escuelas privadas a los que gozaban los públicos. Respecto a los Jardines de Infantes fue aprobada la ley Simini en 1946, que establece los lineamientos para la enseñanza preescolar destinada a los párvulos de tres a cinco años. En 1951, se sancionó la Ley de Estabilidad y Escalafón número 5651 que, fue aprobada por todos los sectores. En lo que respecta al salario docente, establecía que estaría determinado por la ley del presupuesto y que las bonificaciones periódicas corresponderían tanto a los titulares como a los suplentes. Sobre los ascensos, especificaba que los cargos superiores a vicedirector de primera categoría se designarían a través de concurso de oposición. A su vez, los docentes consiguieron integrar el tribunal de clasificaciones docentes. Enseñanza universitaria En materia de política universitaria, durante su primera presidencia Perón impulsó medidas que tendieran a acercar a los sectores populares a la universidad pública. En 1948 envió al Congreso un proyecto de ley para crear la Universidad Obrera Nacional (actualmente denominada UTN), que fue creada por Ley 13.229 y puesta en funcionamiento en 1952, con centros en Buenos Aires, La Plata, Bahía Blanca y Avellaneda. El objetivo de la Universidad Obrera fue orientarla hacia la ingeniería productiva con regímenes de estudios gratuitos y que facilitaran el acceso de los jóvenes trabajadores. Las principales medidas de su gobierno fueron el ingreso irrestricto, la gratuidad y las becas, a fin de abrir la Universidad al pueblo, lo cual representaba toda una revolución socio cultural para la época. La gratuidad fue receptada en el decreto 29337 de 1949 (Broches, 2009). Durante el primer gobierno de Perón se coordinaron los planes de estudio, se unificaron las condiciones de ingreso a la Universidad, se crearon 14 nuevas universidades, se elevó el presupuesto desde 48 millones (1946) a 256 millones (1950). La gratuidad universitaria permitió que de 49 mil alumnos en 1946 se llegase a 96 mil en 1950. Se estableció la dedicación exclusiva para permitir a los profesionales investigar. 29 Además, por primera vez se instauró un sistema de becas para estudiantes de bajos recursos a partir de un impuesto del 2 % sobre los sueldos establecido en los artículos 87 y 107 de la Ley n.º 13.013. Esto posibilitó que para el año 1956, Argentina fuera el país con mayor cantidad de estudiantes universitarios en toda América Latina (Buchbinder, 2005, pág. 161).
El bloque residencial de la Ciudad Universitaria, proyectado
en 1949 y comenzado a construir ese año. En 1949 decretó la gratuidad de la enseñanza pública universitaria (Decreto 29.337/1949); para 1955 la cantidad de estudiantes universitarios se triplicó.3031 Al anunciar el decreto Perón declaró: Desde hoy quedan suprimidos los actuales aranceles universitarios en forma tal que la enseñanza sea absolutamente gratuita y esté al alcance de todos los jóvenes argentinos que anhelan instruirse para el bien del país. Juan D. Perón Durante su mandato se construyó también el edificio de la nueva Facultad de Derecho y se crearon las de Arquitectura y de Odontología, siempre de la Universidad de Buenos Aires. Ya en su segunda presidencia Perón creó el Consejo Nacional de Investigaciones Técnicas y Científicas (CONITYC) antecedente inmediato del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y se abrió una nueva sede regional de la Universidad Obrera en Tucumán. La creación del Instituto de Minería y Geología de la U.N.T. en la Provincia de Jujuy, a lo que le seguirían la creación de institutos en el campo de las artes, el derecho, la economía y la investigación científica. De este modo, también planificó la construcción de la Ciudad Universitaria en la Sierra de San Javier, cuyas obras comenzaron en 1949.En el norte expandió la Universidad en la región, creando el Instituto de Geología y Minería, el Instituto de Biología de Altura y el Instituto de Medicina Popular, en Jujuy; la Escuela Técnica de Vespucio y el Instituto de Humanidades, en Salta; la Escuela de Agricultura en El Zanjón, en Santiago del Estero, por ejemplo. Incorporó a la UNT la Universidad Salesiana del Trabajo y creó el Servicio Médico Universitario.32 Tras 15 años de democracias restringidas e intervenciones militares sobre los gobiernos civiles, en 1946 el Congreso sancionó una nueva Ley de Educación Superior que puso a las universidades bajo la órbita de las reglas de una democracia sin proscripción. Para eso, y marcando un hito en la historia de la legislación sobre educación superior, el peronismo dictó en 1947 la Ley N.º 13.031, denominada Ley Guardo, en honor al diputado justicialista creador de su articulado. Esta legislación puso punto final a la larga vigencia de los cuatro artículos de la reducida Ley N.º 1.597 de 1885, “Ley Avellaneda”, que ofició de marco legal hasta entonces. En 1949 con la intención de atender a algunos planteos de los universitarios e incorporar avances de la ley sancionada en 1947 y sentar las bases para una nueva Ley, se incorpora un artículo en la Constitución Argentina de 1949. En el año 1954 se sanciona una nueva Ley, la 14.297. En ella se incorporan algunos otros postulados de la Reforma Universitaria, como la definición de la extensión y la participación directa de los estudiantes, esta ley profundiza la participación estudiantil en el gobierno de las Facultades, otorgándoles el derecho al voto. 3334 En la Universidad Nacional de Tucumán se realizó profunda transformación, a través de múltiples creaciones y una vasta expansión regional, como la construcción de la Ciudad Universitaria, en el cerro San Javier; la fundación del Gymnasium Universitario, en 1948.35 La creación en 194 del Instituto de Minería y Geología de la U.N.T. en la Provincia de Jujuy. Se planificó la construcción de la "Ciudad Universitaria" en la Sierra de San Javier, cuyas obras comenzaron en 1949. 36 Expandió la Universidad en en interior del país creando el Instituto de Geología y Minería, el Instituto de Biología de Altura y el Instituto de Medicina Popular, en Jujuy; la Escuela Técnica de Vespucio y el Instituto de Humanidades, en Salta; la Escuela de Agricultura en El Zanjón, en Santiago del Estero, por ejemplo. Incorporó a la UNT la Universidad Salesiana del Trabajo y creó el Servicio Médico. 32 En 1946, bajo la presidencia de Juan Domingo Perón, y debido a la creciente industrialización de la Argentina durante la Segunda Guerra Mundial, se creó la Comisión Nacional de Aprendizaje y Orientación Profesional (CNAOP) y se fundaron escuelas-fábricas destinadas a la capacitación de operarios. De esta manera, por medio de la Ley 13.229 del año 1948 se creó la Universidad Obrera Nacional (UON). Hacia 1955 ya tenía institutos en Capital federal, Córdoba, Mendoza, Santa Fe, Rosario, Bahía Blanca, La Plata y Tucumán. Los planes de estudio privilegiaban especialidades tales como las construcciones mecánicas, los automóviles, la industria textil, y las instalaciones eléctricas.37 El 22 de noviembre de 1949, el presidente Perón dispuso por decreto n.º 29.337 la gratuidad de la enseñanza pública universitaria.38Por esta razón, en 2007, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner declaró que el 22 de noviembre fuera considerado como Día Nacional de la Gratuidad Universitaria. 38 La reforma constitucional de 1949 dispuso que Las universidades tienen el derecho de gobernarse con autonomía, dentro de los límites establecidos por una ley especial que reglamentará su organización y funcionamiento. Según Susana Roldán,39 tras 15 años de democracias restringidas e intervenciones militares sobre los gobiernos civiles, en 1946 el Congreso sancionó una nueva Ley de Educación Superior que puso a las universidades bajo la órbita de las reglas de una democracia sin proscripción. Para eso, y marcando un hito en la historia de la legislación sobre educación superior, el peronismo dictó en 1947 la Ley N.º 13.031, denominada Ley Guardo, en honor al diputado justicialista creador de su articulado. Esta legislación puso punto final a la larga vigencia de los cuatro artículos de la reducida Ley N.º 1.597 de 1885, “Ley Avellaneda”, que ofició de marco legal hasta entonces.33 En 1949 con la intención de incorporar avances de la ley sancionada en 1947 y sentar las bases para una nueva ley, se incorporó un artículo en la Constitución argentina de 1949. En el año 1954 se sancionó una nueva ley, la 14.297. En ella se incorporaron algunos otros postulados de la Reforma Universitaria, como la definición de la extensión y la participación directa de los estudiantes. Según Susana Roldán esta ley profundizó la participación estudiantil en el gobierno de las facultades, otorgándoles el derecho al voto.33 Según el historiador Félix Luna4041 continuó vigente la ley 13.031, aprobada en 1947, para regir el gobierno de las universidades, a las que convertía en una dependencia del Poder Ejecutivo: desde el rector hasta el último titular de cátedra eran designados por decreto, se suprimía la autonomía funcional y financiera y establecía la pena de expulsión a quienes actuaran «directa o indirectamente en política» pero en la práctica esta norma no se aplicaba a quienes militaban en el Partido Peronista, lo que se evidencia en los muchos funcionarios y legisladores del mismo que ocuparon puestos en las universidades. La representación estudiantil fue eliminada de los consejos, se introdujo la exigencia de un certificado policial «de buena conducta» sin el cual no se podían proseguir los estudios y comenzó a haber policías de civil omnipresentes en aulas y oficinas universitarias.42 Hubo una mejora notable en la infraestructura ya que en Buenos Aires se construyó el edificio de la nueva Facultad de Derecho y se crearon de Arquitectura y de Odontología así como la Universidad Tecnológica, además de remodelar sedes en el interior del país. Se estableció por decreto 22/1949 la gratuidad de la enseñanza y ello fue un factor que coadyuvó a que entre 1945 y 1955 se triplicara el número de alumnos si bien la cantidad de graduados tuvo escasa variación.43El 17 de mayo de 1951, por Decreto 9695/1951, creó el Consejo Nacional de Investigaciones Técnicas y Científicas (CONITYC) antecedente inmediato del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas). Por otro lado, el gobierno aprobó el Plan Analítico de Construcciones Universitarias en 1948 con el objetivo de centralizar y unificar las obras ―la Facultad de Derecho― y se creó la Subsecretaría Universitaria dependiente de la Secretaría de Educación en 1949. Se crearon 14 nuevas facultades en las 5 universidades existentes, en la Universidad de Buenos Aires se crearon la carrera de Odontología, Arquitectura y Urbanismo. Se crearon una innumerable cantidad de Institutos en todas las facultades. En la Facultad de Filosofía y Letras se creó el Instituto de Filosofía (1947), el Instituto de Geografía (1947) y el Instituto de Ciencias Antropológicas (1948). En la misma facultad, el Consejo Directivo aprobó el 24 de noviembre de 1952 la creación de una Comisión Honoraria Pro-Restauración del Pucará de Tilcara, con el objetivo de instalar un museo arqueológico y una residencia para estudiantes y profesores (Archivos de la Facultad de Filosofía y Letras, 24 de noviembre de 1952).44