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próximo 13 de Abril el Directorio de la Agen-
cia Nacional de Viviendas recibirá a represen-
tantes de nuestra Federación. En el encuentro
se discu rá la ac tud tomada por el organismo
Con la Resolución aprobada por la de in mar el pago a coopera vas pertenecien-
DINAVI, serán 10 las coopera vas tes al Fideicomiso 1, mientras éstas aguardan
integradas a COVIPRO que ingre- aún la respuesta a un documento que fue pre-
sarán al Sorteo de Préstamos del
sentado en Febrero 2022 donde se propone
mes de Diciembre 2023.
una solución defini va al pago de las hipotecas.
DEVENIR como nuevo proyecto de El artículo analiza el historial del conflic-
comunicación de la Federación COVI- to con la Administración en torno a la
PRO, busca posibilitar formas comu- problemática de las cooperativas perte-
nes de lecturas para pensar encuen- necientes al Fideicomiso 1
tros y debates sobre los contenidos
propuestos en los diferentes números.
Diseño:
Judit Cerf
Fotografia:
Mauro Tomasini
Archivo fotográfico de Federación COVIPRO
Iniciamos una serie de entrevistas Gentrificación, capitalismo y Seguimos desarrollando los prin-
sobre el quehacer cotidiano de procesos urbanos. En esta en- cipios cooperativos, proporcio-
nuestras cooperativas. En esta trevista a Mike Davis, desde su nando un material de debate en
oportunidad Matías Gerez integran- mirada crítica, nos trae y recu- cada edición.
te de la Cooperativa Futuro 2016 pera elementos para compren-
der los cambios que ocurren en
el centro del capitalismo mun-
dial, pero que, perfectamente
son trasladables a nuestra si-
tuación actual.
“Devenir” además de establecer un una narrativa política para otros. De lo
canal indirecto para hacer circular in- contrario podemos caer en el capaci-
formación institucional y noticias que tismo tan obturador como las mismas
definan posiciones, tensiones y con- políticas institucionales que pretende-
flictos entre Covipro y los actores esta- mos cuestionar.
tales pretende ser además un espacio
para la formación política. Las coyunturas favorables (aquellas
momentos en que las condiciones fa-
Siempre ocurrió, pero más aún hoy en vorecen al cambio. Ejemplo el 2%) son
día, que el acceso a la vivienda tiene sostenidas por discusiones, pensa-
aspectos internos y externos, sincróni- mientos colectivos, estrategias de lar-
cos y acrónicos, endógenos y exóge- go aliento. Pero sobre todo son respal-
nos. Hay otras algunas variables que dadas en los saberes que todo coope-
determinan -mucho más a veces- el rativista va construyendo a partir de su
acceso a la vivienda que las propias trayectoria individual y colectiva en
actividades formales que todo colecti- nuestro movimiento. La lectura de una
vo tiene que ejecutar al fin de llegar a revista, el intercambio y el debate son
mantener una cooperativa. No solo partículas que más tarde componen
basta la condición de socios, libros de una mirada político del todo. Y que
actas al día, certificados, inscripcio- permite adelantarse a acontecimien-
nes, orden administrativo, etc., para tos, dar respuestas a problemas e in-
lograr los objetivos planteados. Tam- terrogar lo establecido, aquellos lo que
bién hay que pensar acciones globales se nos muestra como válido y único.
y movimientos que provoquen res-
puestas y espacio para lograr coyuntu-
rales favorables.
Al cierre de esta edición de Devenir nos llega el oficio redactado por el Director Nacional de Vivienda, Ec. Jorge
Ceretta, acerca de una prórroga solicitada por la Intendencia de Montevideo, luego de convenirlo con COVIPRO,
y que involucran a cooperativas de nuestra Federación.
Como ha sido de público conocimiento el pasado 9 de marzo venció el plazo para ingresar las factibilidades que
permitan a las cooperativas participar del sorteo de diciembre del presente año.
Por distintas razones, a los grupos que menciona la resolución, el informe de OSE les fue negativo, lo que impli-
caba automáticamente, aguardar un nuevo llamado y sacarlos de la posibilidad del sorteo de préstamos. Más
allá de los diversos motivos, en todos los casos las observaciones se debían a la falta de obras menores que en
esos terrenos la IM debe realizar, los cuales -recordemos- han sido concedidos por la cartera de tierras.
La directiva de COVIPRO tomó el tema de inmediato y luego de distintas instancias de negociación con ambas
instituciones, planteó que se redactara la solicitud de excepción por parte de la IM ya que esta se comprometía a
culminar esas obras antes de la presentación de anteproyectos en setiembre. El mismo 9 de marzo se logró
acordar con el MVOT la aprobación de la mencionada excepción.
Por esa razón, se da una nueva fecha a estas cooperativas para que ingresen las factibilidades, las cuales esta-
rán condicionadas a que las obras estén culminadas..
De esta forma serán 10 las cooperativas de nuestra Federación que participarán del sorteo de diciembre.
Sigue siendo figura central de una disciplina en la intersección entre la
geografía, la sociología y la arquitectura conocida como La Escuela de
Urbanismo de Los Ángeles, pero se jubila ahora del Departamento de Es-
critura Creativa de la Universidad de California (Riverside). A comienzos
del pasado verano, invitó a la profesora de arquitectura y directora del La-
boratorio de la Ciudad de la Universidad de California (Los Ángeles), Dana
Cuff, y a la decana del Colegio de Diseño Medioambiental de la Universi-
dad de California (Berkeley), Jennifer Wolch, a su casa de San Diego para
hablar y entrevistarle sobre su carrera, sus escritos y sus tempranos y
continuados esfuerzos para entender Los Ángeles.
1 Fuente: https://boomcalifornia.com/2016/12/29/a-boom-interview-in-conversation-with-jennifer-wolch-and-dana-cuff/
Traducción: Mínima Estrella
Dana Cuff: Nos dijiste que te preguntan demasiado por Si aceptas que la estabilización de los valores del suelo
tu libro Ciudad de Cuarzo, así que vamos a empezar de es condición necesaria de la planificación democrática a
otra manera. Como uno de los grandes contadores de largo plazo, hay dos grandes soluciones no revoluciona-
historias urbanas de California que eres, ¿qué crees que rias. La solución de [Henry] George fue la más expedita:
nos falta en nuestra comprensión de Los Ángeles? ejecuta a los monopolistas y a los especuladores del sue-
lo con un impuesto único del 100% sobre los incrementos
Mike Davis: La lógica económica de los bienes raíces y de los valores del suelo no mejorado. La otra alternativa
de la urbanización del suelo. Esta ha sido siempre la cla- no es tan radical, pero ha sido empleada con éxito en
ve capital para entender las políticas espaciales y racia- otros países capitalistas avanzados: municipaliza las par-
les en la California meridional. Como explicó por lo mag- tes estratégicas del inventario de suelos para vivienda
nífico el más influyente pensador radical del siglo XIX –y accesible, parques y cinturones verdes moldeadores.
no me estoy refiriendo a Marx, sino al californiano de San
Francisco Henry George—, no puedes reformar el espa- El uso de la expropiación para la reurbanización –hay
cio urbano sin controlar los valores del suelo. que recordarlo— fue originariamente concebido para
transformar barrios de vivienda privada pobre en vivienda
de titularidad pública. Al final de la II Guerra Mundial,
cuando los progresistas eran mayoría en el gobierno de
la ciudad, Los Ángeles adoptó planes verdaderamente
visionarios tanto para la vivienda pública como para creci-
miento suburbano racional. Lo que pasó luego es harto
conocido: una contrarrevolución municipal concebida por
[el periódico] Los Angeles Times. Resultado: los gobier-
nos locales siguieron usando la expropiación, pero las
más veces para transferir suelo de los pequeños propie-
La zonificación y la planificación urbana –los instrumen- tarios a las grandes empresas y a los bancos.
tos progresistas para crear la llamada Ciudad Hermosa
[de la Escuela urbanística de Chicago de finales del XIX] Saltemos a los 80. Apareció una nueva oportunidad. La
— han sido totalmente secuestradas para servir al merca- reurbanización del centro urbano devoraba centenares de
do o han experimentado la muerte de los mil cortes, es millones de impuestos desviados, pero su futuro era som-
decir, por acumulación de desviaciones. Yo fui brevemen- brío. Unos años antes, Reyner Benham había proclama-
te comisario de desarrollo urbano en Pasadena, a media- do la muerte o, al menos, la irrelevancia del centro ur-
dos de los 90, y tuve ocasión de observar la facilidad con bano.
que se dejaban de lado inveterados criterios de diseño y
planes comunitarios por la presión de los financiadores
de campañas electorales y de los grandes promotores
inmobiliarios.
Una vez le pregunté sobre esto a Kurt Meyer, un arquitec- Davis: Cuando me contrató por primera vez el Instituto
to de empresa que había sido presidente de la Agencia de en 1988 le confesé a su entonces director, Michael Roton-
Reurbanización Comunitaria. Vivía sobre el Beachwood di, que no tenía la menor idea de arquitectura. Me contes-
Canyon, debajo del cartel de Hollywood. Solíamos reunir- tó: “No te preocupes, eso corre de nuestra cuenta. Tu ta-
nos a la hora del desayuno, porque él disfrutaba contando rea es enseñar sobre Los Ángeles. Muéstrales a los estu-
historias de poder y propiedad en Los Ángeles, lo que le diantes la ciudad”. Fue una maravillosa tarea y, durante
convertía en un fuente única para mi investigación de la una década, participé en una buena cantidad de estudios
época. Me contó que las elites del centro urbano estaban notables trabajando con gentes de la talla de Michael Sor-
horrorizadas con la inesperada revitalización del corredor kin, Joe Day, Anthony Fontenot y otros arquitectos radica-
de Broadway que habían traído consigo los comercios les.
mexicanos, y que la última cosa que querían era un centro
urbano populista. Mi propio proyecto de vanidad, por así decirlo, consistía
en demostrar la factibilidad de un estudio comunitario de
También ofreció respuesta a una cuestión que hacía tiem- diseño que se enfrentara a los problemas de viejos barrios
po me intrigaba. “Kurt, ¿por qué esa prioridad absoluta y a y suburbios. Con el apoyo de un activista destacado de la
costa de todo para tener a la clase media viviendo en el comunidad centro-americana, Roberto Lovato –ahora, un
centro urbano” “Mike, sabes algo sobre espacios arrenda- conocido periodista—, nos centramos en distrito de
dos en edificios de gran altura?” “Realmente, no”. “Bueno, Westlake, lindante con el oeste del centro urbano.
la parte más difícil de alquilar es la planta baja: para sacar
el máximo valor, necesitas una población residente. No Yo conocía la zona bastante bien, porque a finales de los
puedes limitarte a tener trabajadores de oficina que vayan 60 había vivido allí mientras me ocupaba de la gestión de
a desayunar o almorzar; necesitas la noche, un tráfico de la librería del Partido Comunista en la Calle Siete, curiosa-
24 horas”. No sé si esa es realmente una explicación ade- mente cerca de la vieja oficina del FBI en Wilshire. Eso
cuada, pero desde luego me convenció de que los planifi- fue justo después de los deshaucios de Bunker Hill y de
cadores y los activistas necesitamos una comprensión que el grueso de sus residentes hubieran sido realojados
mucho más profunda del juego. en conventillos al lado de Parque MacArthur. Caminando
hacia la librería, me encontré muchas veces con los cuer-
Ello es que, finalmente, la clase media ha venido al centro pos de esos pobres viejos tirados en la acera: ¡quién sabe
urbano, pero sólo para convertirlo en un suburbio. Los qué sueños los habrían traído a Los Ángeles hacia 1910 o
hipsters creen que viven en el núcleo de la vida urbana, 1920!
pero se trata solo de un falso urbanismo, de un gran em-
plazamiento de compras residencial. El centro urbano no Nos centramos finalmente en estudiar Witmer Street, en-
es el corazón de la ciudad, es una vaina de estilo de vida tre la calle 3 y Wilshire, porque tenía un abanico casi com-
lujoso para las mismas gentes que dicen que Silverlake es pleto de tipos de edificios multifamiliares: una casa unifa-
el “Eastside” o que Venecia sigue siendo bohemia. miliar de 1890, un patio de bungalows de los años 20, un
edificio de apartamentos de los años 60 y hasta un edificio
Cuff: ¿Por qué los llamas suburbios? masónico de apartamentos que se usaba como esceno-
grafía para Hill Street Blues.
Davis: Porque el regreso al centro expresa el deseo de
espacio urbano y de multitudes sin permitir la variedad Los estudiantes se dividieron en dos grupos entrenándose
democrática del igual acceso. Es oro para necios, y la por su cuenta como inspectores de edificios y de incen-
gentrificación ha tomado el relevo de la renovación urbana dios, y exploramos el vecindario molécula a molécula du-
a la hora de desplazar a los pobres. Piensa en el estudio rante dos semestres. Un grupo estudiaba cuestiones de
pionero que realizó Anastasia Loukaitou-Sideris sobre la seguridad antiincendios y otros riesgos, como tejados des-
privatización del espacio en la cumbre del cerro de Bunker protegidos convertidos en lugar de juego para los niños.
Observamos las necesidades de algunos obreros, costu- banismo y humanidades de la UCLA se centró en Boyle
reras y mecánicos de automóviles; estudiamos proble- Heights, que, como Westlake, está experimentando una
mas de recolección de basuras; observamos asuntos presión urbanizadora. Los instrumentos solicitados por la
relacionados con las rivalidades entre bandas y con los comunidad eran bastante directos, una suerte de manual
mayores alcoholizados. Con el apoyo de Lovato, entra- sobre cómo convertir en parques espacios abandonados.
mos en los apartamentos –normalmente, moradas para Fue un interesante diálogo sobre las respectivas actua-
entre tres y cinco personas— y analizamos cómo organi- ciones el que se desarrolló entre las humanidades, la
zaban las familias sus minúsculos espacios. Investiga- arquitectura y los estudiantes. ¿Se puede no suministrar
mos quiénes eran los propietarios de los edificios, calcu- lo pedido y seguir siendo un aliado socialmente respon-
lamos la rentabilidad de su alquiler, incluso visitamos y sable de los grupos comunitarios? La discusión fue in-
fotografiamos los hogares de los amos de esos tugurios teresante porque los estudiantes entraron en acción,
del centro urbano, que vivían en Beverly Hills y en la pla- desde estudiantes de arquitectura, siempre dispuestos a
ya de Newport. hacer algo aun no disponiendo de mucha información,
hasta los estudiantes de humanidades, renuentes a ac-
La única forma de vivienda que era generalmente popu- tuar si creen que no saben lo suficiente o no tienen dere-
lar, en donde los arrendatarios habían estado allí desde cho a intervenir.
hacía mucho tiempo –todos los demás iban y venían—
era el complejo de apartamentos del patio de bungalows, Davis: Ese tipo de consciencia puede venirles bien al-
con sus pequeños jardines y una fuente. Lo más detesta- gunos arquitectos veteranos de Los Ángeles, que con-
do no eran las escaleras de incendio de la vieja propie- templan la ciudad como una zona de tiro libre para cual-
dad de los años 20, sino el edificio de apartamentos con quier ocurrencia vanidosa que les venga a la cabeza,
aparcamiento subterráneo construido en los 50 o 60 en cualquiera que sea el contexto urbano o su historia. En
lotes unifamiliares. Esos edificios estaban diseñados pa- Ciudad de cuarzo critiqué a Frank Ghery por sus diseños
ra experimentar un rápido deterioro en pocas décadas y furtivos y por su excesiva preocupación por la seguridad.
representan un verdadero problema en toda la California Fue realmente como pisarle un callo, porque él viene de
meridional. Los otros tipos multiunidad eran duraderos, una tradición socialdemócrata y no le gustó nada mi des-
pero resulta difícil de imaginar una alternativa al estuco cripción de su obra a calzón quitado como “la arquitectu-
arruinado que no sea el derribo, lo que, en efecto, han ra de Harry el sucio”.
hecho las promotoras inmobiliarias, pero sólo para reem-
plazar ese tipo de edificios por “supercubos” de cuatro o Un día, unos años después, me llamó para ir a verle.
cinco plantas que no son sino versiones ampliadas de “Vale, tío importante, mira esto”, Y me mostró la última
los mismos problemas. entrega del diseño de su Disney Concert Hall, que tenía
un parque ajardinado alrededor de su perímetro no-
Nuestro objetivo era reunir todos nuestros descubrimien- euclidiano. “Me criticaste por hacer diseños antidemocrá-
tos en una suerte de Catálogo Completo subido a un ticos, pero ¿esto qué es?”. Y efectivamente, había una
portal web y luego invitar a todo el mundo a escribir y astuta integración del elitista Concert Hall con espacio de
aportar ideas sobre asuntos genéricos de los barrios juego para niños de la zona y de descanso para gentes
obreros como desperdicios, juego, trabajo, graffiti, ban- sin techo. Invitaba antes que excluía a los residentes del
das, espacio social, aparcamiento, etc. No nos proponía- barrio pobre Latino, como la Witmer Street que rodea al
mos crear un plan maestro en miniatura, sino levantar un centro urbano. Eso no tenía prácticamente precedentes,
arsenal de soluciones prácticas de diseño fundadas en y tuvo que librar una larga batalla con el condado, empe-
un análisis cuidadoso, realista que pudiera ayudar a los ñado en aislar Disney y ponerle límites. En esta ocasión
residentes a encuadrar sus reivindicaciones a los seño- al menos, una celebridad arquitectónica luchó del lado
res del suelo y a la ciudad. Imaginábamos colaboracio- bueno.
nes de arquitectos, artistas y artesanos que actuaran
como constructores de herramientas al servicio del acti- Jennifer Wolch: Desde luego. Sin embargo, es una
vismo y el autodiseño comunitario. Todavía creo en la cuestión importante particularmente para los estudiante
idea, mi contrato con el Instituto de Arquitectura terminó de humanidades: el asunto de la subjetividad les hace
cuando se fue Michael Rotondi, nuestro gozoso bromis- reticentes a hacer propuestas.
ta, nuestra luz rectora. Davis: Pero ellos tienen competencias. La narrativa es
Cuff: La idea de construir herramientas en vez de hacer una parte importante a la hora de crear comunidades.
un plan maestro es útil. Un grupo de estudiantes de ur- Las historias de la gente son claves, especialmente las
de sus rutinas. A mí me parece que hay importantes
competencias y calificaciones en las ciencias sociales, Wolch: Mike vamos ahora a una cuestión completamen-
pero las humanidades son particularmente importantes te diferente. Uno de los libros tuyos más nos gustan es
por las historias. También creo que un coreógrafo sería Late Victorian Holocausts [Holocaustos victorianos tar-
un gran analista del espacio y un suerte de imaginador de díos]. No versa sobre ciudades, sino sobre Occidente.
usos del espacio. Cómo te decidiste a vincular la historia del cambio climáti-
co con las hambrunas y la ecología política? Es como si
Un día tuve una larga conversación con Richard Louv so- hubieras tomado una desviación…
bre Last Child in the Woods [El último niño en los bos-
ques], uno de los libros más profundos de nuestro tiempo, Davis: Luego de los disturbios de 1992, la editorial Knopf
una meditación sobre lo que significa para los niños per- me avanzó mucho dinero para escribir un libro sobre el
der contacto con la naturaleza, con el juego y la aventura apocalipsis urbano. A través de mis actividades políticas
nómada libres y no organizados. Una generación de ma- había llegado a conocer a las madres de muchos actores
dres obligadas a ser chóferes a tiempo completo, llevando clave en esos acontecimientos, incluida Theresa Allison,
a los niños de una distracción comercial a otra, de un cuyo hijo, Dewayne Holmes, fue uno de los primeros en
evento lúdico sobreorganizado a otro. Yo crecí en el este promover la Tregua de Watts de la banda. También cono-
del Condado de San Diego, en la frontera misma con las cí a la mamá de Demian Williams, que era el villano en
tierras del interior, y una vez hechos los deberes (una co- jefe, el chaval que golpeó casi hasta la muerte al camio-
sa seria en aquella época), podías montarte en la bici y nero en la esquina de Florence y Normandie. A través de
lanzarte a la acción como Huck Finn. Había una colonia sus ojos llegué a adquirir una perspectiva muy distinta de
nudista en Harbison Canyon, a unas doce millas, y noso- la relación entre causa y efecto, así como de lo que fue
tros cogíamos nuestras bicis y pedaleábamos cuesta arri- correcto y lo que fue incorrecto en el curso del estallido.
ba horas y horas en la esperanza de lograr ver algo a hur- Pero al final del día no podía hallar la menor justificación
tadillas a través de las verjas. Como todos mis amigos, real al tipo de periodismo que sostiene sus tesis con pre-
tuve una escopeta del 22 al cumplir los doce años. Hacía- tensión de autoridad a través de citas y retratos selectivos
mos cosas malas a los animales, lo confieso, pero éramos de gentes que por lo general no pueden controlar la ver-
espíritus libres, odiábamos la escuela, nos importaban un sión final. En los años 30, este tipo de documentación
higo las calificaciones, nos librábamos de nuestros padres social o narrativa existencial de segunda mano –las foto-
gracias a pequeños empleos a tiempo parcial y trabajos grafías de Dorothea Lange o el Dejadnos Ahora Alabar a
de jardinería y nos deleitábamos con todas y cada una de los Hombres Famosos, de James Agee, por ejemplo—
nuestras fechorías locas y aventureras. Desde que regre- podía presentarse como una parte integral de una cruza-
sé a San Diego en 2002, me reúno anualmente con los da, el New Deal o la [central sindical] CIO, que luchaban
cinco o seis chicos a los que conozco desde el segundo para mejorar las vidas de las víctimas populares, y que
grado en 1953. A pesar de las grandes diferencias de eran a menudo sus sujetos desconocidos. Pero ahora, en
convicciones políticas y religiosas, seguimos siendo la nuestra era posliberal, ese trabajo corre el peligro de re-
misma banda de los viejos tiempos. sultar simplemente sensacionalista y explotadoramente
ventajista. Francamente, por mucho que deseara escribir
Y las bandas eran lo que te mantenía seguro y la razón el libro, no podía hallar licencia moral alguna para sa-
de que las madres no se preocuparan de nuestras citas quear historias populares y miserias personales a mayor
lúdicas ni los acosadores de niños. Recuerdo que incluso gloria mía en tanto que voz losangelense del apocalipsis.
en el jardín de infancia –vivíamos entonces en el área de De modo que devolví el dinero avanzado y moví mi base
City Heights de San Diego— teníamos una banda que iba de operaciones a la biblioteca de ciencias de la Tierra del
junta a la escuela y jugaba cada tarde. Un grupo de nenes Cal Tech [Instituto Tecnológico de California] y me sumer-
y nenas, siete u ocho, que vagaba sin rumbo y mendigaba gí en la investigación de la historia y el desastre me-
unos centavitos para comprar chicles en el quisco de la dioambiental que generó mi libro Ecología del miedo.
esquina. Hoy, la idea de bandas de niños o adolescentes
sin vigilancia suena como un problema de ley y orden. Descubrí también otro asunto en el que no había ninguna
Pero así es como las comunidades funcionaban entonces ambigüedad ética, un proyecto en el que iban perfecta-
y podrían seguir funcionando ahora. Aparte de Louv, reco- mente de la mano mi conciencia y mi celo investigador.
miendo calurosamente el libro del anarquista inglés Colin Tom Hayden me contactó en 1995 o 1996 y me pidió co-
Ward The Child in the City [El niño en la ciudad]. Un pro- laborar en un volumen que él estaba compilando para 150
pósito capital de la arquitectura, sostiene él, debería ser aniversario del holocausto irlandés. Al principio puse repa-
diseñar ambientes aptos para las aventuras y los descu- ros. Había jóvenes y brillantes historiadores irlandeses
brimientos fortuitos, no programados. que estaban reinterpretando la Hambruna, y yo no tenía la
menor experiencia en esa área. Pero insistió: “Bueno, tal haciendo su tesis doctoral sobre pumas andinos en Yale.
vez haya alguna otra cosa coetánea sobre la que podrías Estoy muy orgulloso de haberla convertido en la guerrera
escribir”. Entonces descubrí las hambrunas en China y -científica heroína de las novelas, porque mi intuición
en la India durante las décadas de 1870 y 1890, que ma- sobre su carácter se ha hecho plena realidad. Una joven
taron a cerca de 20 millones de personas pero que no muy notable.
habían recibido la menor mención en la historiografía
convencional de la Era Victoriana. El resultado fue Holo- Escribir estos cuentos fue pura diversión. La inspiración
caustos victorianos tardío, una especie de “Libro Negro” original fue un viaje que hicimos con mi hijo al este de
del capitalismo que versa sobre los millones de muertes Groenlandia cuan él tenía siete años. Eso se convirtió en
innecesarias que ocurrieron cuando las potencias euro- El país de los mamuts perdidos. Historias como esta se
peas –sobre todo, Inglaterra— forzaron el ingreso a toda escriben solas, especialmente porque se trata de niños
marcha en el mercado mundial de las grandes econo- reales y tu estás proyectando sus caracteres morales en
mías campesinas de subsistencia de India y China. Con situaciones de aventura y peligro fantásticos (aunque
resultados desastrosos. algunas de las partes más estrafalarias de los libros son
verdaderas y están basadas en mi obsesión de toda la
Wolch: Tenemos un última cuestión sobre tus novelas vida por las islas misteriosas). En cierto modo, fue como
para jóvenes adultos. Cuando damos en clase tu Ciudad si los cuatro hubiéramos realmente hecho una expedi-
de cuarzo u otra de tus descorazonadores piezas sobre ción a Groenlandia y a la extraña y embrujada isla de
Los Ángeles, uno siempre está tentado a pensar que al Socotra.
salir de clase los alumnos se tirarán de un peñasco. Pero
tus novelas para adultos jóvenes parecen abiertas a al- Pero dejemos a los chicos continuar la aventura. Yo me
gún tipo de futuro alternativo esperanzador. he convertido en un jubilado muy casero, centrado ahora
en aprender todo lo que pueda sobre la naturaleza y la
Davis: ¡Eh! No deberíais sentiros descorazonadas por geología de la California meridional. La única organiza-
mis libros sobre Los Ángeles. Son precisamente polémi- ción a la que pertenezco (de grupos no subversivos, se
cas apasionadas sobre la necesidad de una izquierda entiende) es la Unión Geofísica Americana. Mi mujer
urbana. Y mi tercer libro sobre Los Ángeles, Urbanismo disfruta de una buena novela en la cama. Yo leo extra-
mágico, irradia literalmente optimismo sobre el renaci- ños volúmenes sobre petrología ígnea y paleoclimatolo-
miento de los movimientos de base en nuestros barrios gía. Tengo incluso en algún lado un texto à la Stephen
de inmigrantes. Pero, para volver a las dos novelas de King [sobre la calle en la que vivo] llamado Ecología de
“ciencia aventura” para adolescentes: las escribí para la la calle 33, porque no hay nada natural en este barrio,
espléndida editorial de Viggo Mortensen, Perceval Press. desde los arundos hasta los caracoles sicilianos, que si
Son, sobre todo, manifestaciones de nostalgia por mi hijo llegaran a invadir el Valle Central podrían dañar las cose-
mayor, luego de que su madre se lo llevara de vuelta a chas y provocar unos cuantos miles de millones de dóla-
su Irlanda natal. Los héroes son tres niños reales: mi res de pérdidas. No existen cuervos aquí, ni tampoco la
hijo, su hermanastro y la hija de nuestros mejores ami- siniestra araña viuda negra que ahora vive en el mobilia-
gos cuando yo impartía docencia en Stony Brook en rio de mi patio. Para mí este es un gran material de no-
Long Island. El nombre de la niña es Julia Monk, y ahora vela negra: el barrio tomado por aliens sin que sus habi-
es una bióloga especializada en vida salvaje que está tantes se enteren.
Mike DAVIS
1946 Fontana (USA)
Sociólogo estadounidense, teórico e historiador urbano, creció en Bostonia, una aldea ahora
desaparecida al este de San Diego. Antes de desarrollar su actividad política e intelectual, traba-
jó en mataderos y como camionero. En la actualidad, es profesor de teoría urbana en el Instituto
de Arquitectura del Sur de California y miembro del comité de redacción de New Left Review y
Sin Permiso, entre otras publicaciones. También se le considera precursor del pensamiento ci-
berpunk. Entre sus ensayos destacan Control urbano: la ecología del miedo. Más allá de Blade
Runner (2001), Ciudades Muertas (2002), Ciudad de cuarzo (2003), El monstruo llama a nues-
tra puerta (2006), El coche de Buda (2007), Urbanismo mágico (2012) y Planeta de ciudades
miseria (2014)
Extraído de Notas de Orientación para los Principios Coopera vos
La lucha por los derechos democráticos a nivel político es un tema habitual en la historia
de la Alianza Coopera va
de los dos últimos siglos, y hoy en día lo sigue siendo en muchas partes del mundo. La
democracia puede considerarse como un conjunto de derechos: derechos a participar
en el gobierno de un estado o de una organización. El principio del control democrático
por parte de los miembros resultaba muy radical cuando se fundaron las primeras coope-
rativas a mediados del siglo XIX, especialmente en lo que concernía a su aplicación uni-
versal a todos los miembros, incluidas las mujeres. Es anterior a la extensión del sufragio
y no estávinculado con el género o la posesión de propiedades.
GOBERNANZA Y COMPROMISO
DEMOCRÁTICOS
Es importante que la democracia cooperativa aproveche
las evoluciones tecnológicas. Los avances de las tecnolo-
gías de la comunicación a través de Internet y el móvil
están facilitando el desarrollo de estrategias que impli-
quen de forma activa a los miembros en los procesos
democráticos de una cooperativa.
REVOCACIÓN Y DESTITUCIÓN
DE REPRESENTANTES ELECTOS
Las normas y procedimientos democráticos de una
cooperativa también deben regular la revocación y desti-
tución por parte del conjunto de miembros –mediante el
debido proceso democrático– de representantes electos
que se aprovechen de su posición o que no cumplan su
Siguiendo la tradición de las cooperativas pioneras, los cometido en tanto que representantes electos.
representantes electos deberán poner a disposición de
los miembros con regularidad estados de cuentas, infor-
mes financieros e informes de resultados del “estado em-
presarial”, presentándolos de manera comprensible para
los miembros que no han recibido formación financiera
formal. Asimismo, también con cierta periodicidad, los
representantes electos deberán informar a los demás
miembros y rendir cuentas sobre su trabajo y acciones en
tanto que cargos electos en las Asambleas generales y
en otras reuniones de miembros. Los órdenes del día y
cualquier otra información necesaria para las reunio-
nes de la asamblea general deberán producirse por ade-
lantado y puntualmente, como exigen las normas y los
LA FUNCIÓN DEL DEFENSOR/A ma sobre conflictos de interesessi su interés personal con-
duce a la obtención de un beneficio que los demás miem-
Las cooperativas de mayor envergadura podrían nombrar a bros no obtienen de manera equitativa.
un defensor o defensora independiente que se encargue
de atender las quejas de los miembros. Los miembros de- Un problema de gran importancia que ha surgido al elabo-
ben tener derecho a presentar quejas sobre la falta de rar los códigos de gobernanza corporativa es la responsa-
oportunidades de participación democrática o sobre irregu- bilidad que tienen los consejos rectores a la hora de con-
laridades en el proceso democrático, así como quejas sobre sultar a sus miembros acerca de decisiones comerciales
la prestaciónde servicios de la cooperativa a los miembros. clave, como adquisiciones, ventas o recibos de transferen-
cias de obligaciones de otras cooperativas, que pueden in-
CÓDIGOS DE BUENA GOBERNANZA fluir sobre lapropia naturaleza de una cooperativa. Las nor-
mas y reglamentos que rigen dichas decisiones y los requi-
Y BUENAS PRÁCTICAS sitos para obtener la autorización de los miembros o para
Durante los años 1990, tras una serie de sonados escán- consultarles deberán estar recogidos y formulados en los
dalos de gobernanza en grandes empresas, se acabó por estatutos o bases de la cooperativa. Si por razones prácti-
reconocer la importancia de una buena gobernanza corpo- cas o pragmáticas los consejos rectores están autorizados
rativa. Esto dio lugar a la constitución de la Comisión a tomar tales decisiones comerciales clave, estas se to-
Cadbury sobre Gobernanza Corporativa en 1992, seguida marán bajo una estrategia comercial y de gestión de ries-
por la Comisión Greenbury en 1995 y el Informe Hampel en gos aprobada por los miembros.
1998; todos ellos consiguieron una mejora global de las
buenas prácticas en la gobernanza corporativa. El control
democrático por parte de los miembros está protegida y
refrendada por una legislación cooperativista en vigor. En
los lugares donde no exista una legislación de este tipo, es
importante que las cooperativas dispongan de estatutos
elaborados para garantizar unas buenas prácticas de go-
bernanza corporativa. Dichos estatutos incluirán normas
sobre conflictos de intereses para miembros y gerentes, re-
gistros de intereses, registros de obsequios y muestras de
hospitalidad ofrecidos y recibidos, valoraciones anuales y
auditorías de competencias del consejo rector.
COMPETENCIAS
DEL CONSEJO RECTOR Y AUDITORÍAS
DE COMPETENCIAS
El proceso democrático, en sí mismo, no garantiza que el
consejo rector de una cooperativa sea competente y cuen-
te con el conjunto de aptitudes y conocimientos necesarios
para asegurar la gobernanza correcta y efectiva de una
cooperativa, ni que tenga capacidad para exigir responsa-
bilidades a los directivos.
CUALIFICACIONES Y OPORTUNIDADES
DE EDUCACIÓN Y DESARROLLO
Los medios de comunicación económicos dominantes ha-
blan a menudo sobre lo que se percibe como una falta de
sofisticación en la gobernanza cuando una empresa coope-
rativa quiebra o pasa por dificultades. Con frecuencia suele
atribuirse a una falta de conocimientos empresariales de
los consejos rectores electos. Si bien esto puede ser un
factor causal, notiene por qué ser así necesariamente y no
deberá utilizarse para socavar el control democrático por
parte de los miembros. Para evitar ser tachados de falta de
sofisticación, las cooperativas deberán asegurarse de que
se ofrece una formación apropiada a todos los responsa- Históricamente algunas cooperativas han incluido una cua-
bles y miembros de comités. Todas las cooperativas, pero lificación en comercio o compras,concebida para demostrar
especialmente las que operanen sectores sujetos a la regu- que un candidato es un miembro comercial habitual de la
lación del gobierno –como son las cooperativas bancarias o cooperativa. Otras han sustituido este requisito por el de la
deseguros– podrían exigir –siempre con motivos fundados tenencia de capital, pero eso entraña el riesgo de discri-
– a los miembros candidatos, que demuestren tener las minar a miembros que disponen de poco capital. Otras
cualificaciones adecuadas para el cargo al que se presen- cualificaciones necesarias para un cargo son, a menudo,
tan, y quedemuestren su compromiso con los principios y la antigüedad de la afiliación a una cooperativa
valores cooperativos. –por ejemplo, un mínimo de dos años– antes de poder
Todas las cooperativas deberán considerar si es correcto presentarse a elecciones. Si bien esto último puede ser útil
desarrollar cualificaciones que resulten adecuadas de exi- para impedir una toma de poder de manera hostil, es ne-
gir a los miembros antes de presentarse a un cargo electo. cesario encontrar un equilibrio a la altura de la justificación
Hayque fomentar y aprobar, en junta o asamblea general, de tales normas. Si dichas normas existen tienen que ser
el que los candidatos a las elecciones cuenten con cualifi- justificables y haber sido aprobadas por el conjunto de
caciones específicas antes de presentarse a las eleccio- miembros enasamblea general.
nes. Sinembargo, la exigencia de cualificaciones no debe-
rá utilizarse como un medio para descalificar a miembros
COMITÉS ELECTORALES
que aspiren a un cargo electo. Si se trata de cualificacio- Las cooperativas –en especial las que tienen un conjunto
nes exigidasy aprobadas por el conjunto de los miembros, híbrido de miembros o las de mayor envergadura con sis-
los afiliados que deseen presentarse a las elecciones de- temas electorales complejos o con estructuras democráti-
berán tener la oportunidad de obtener las cualificaciones cas en distintos niveles– podrían optar por constituir comi-
necesarias. tés electorales independientes de miembros que supervi-
En caso de exigir cualificaciones, es más fácil que – sen el proceso electoral. Se trata de emular a las eleccio-
especialmente en las cooperativas reguladas o de mayor nes nacionales, en las que suele haber unas comisiones
electorales independientes que supervisan las elecciones
y validan la votación. En caso de constituir comités electo- cúpula nacionales y organizaciones sectoriales de la
rales, es importante que sean estos los que determinen las Alianza han elaborado recomendaciones y procedimien-
cualificaciones exigidas a los miembros que se presentan tos estándarpara realizar auditorías de gobernanza y con-
a un cargo, en lugar de dejarlo en manos del consejo rector troles de salud democrática adaptados a las circunstan-
electo. El que los actuales cargos de los consejos rectores cias de sus cooperativas miembros. La ventaja de utilizar
o de otros comités tengan la facultad de determinar y apro- estos procedimientos estándar para realizar auditorías de
barlas cualificaciones exigibles para optar a su propio cargo gobernanza es que permiten comparar la gobernanza de
es uno de los principales mecanismos utilizados por las éli- una determinada cooperativa con el de otras similares.
tes para aferrarse a sus puestos. También es el mecanismo
utilizado por quienes pretenden desmutualizar una coope- No se ha establecido con qué periodicidad deben realizar-
rativa o privatizar sus activos . se las auditorías de gobernanza. Algunas cooperativas
que reconocen la necesidad de examinar sistemáticamen-
Los comités electorales no deberán ser designados por el te la transparencia de su gestión y los procesos democrá-
consejo rector ni por los comités electos existentes ni estar ticos de gobernanza realizan auditorías de gobernanza
supeditados a estos últimos. Los miembros que ejerzan en cada dos años. No obstante, las cooperativas deben
comités electorales deberán ser elegidos o aprobados por preocuparse si en los últimos cinco años no se ha reali-
todos los afiliados y responderán ante ellos con el fin de zado ninguna auditoría específica para cooperativas que
garantizar que las elecciones son abiertas y transparentes incluya una revisión de la gobernanza democrática.
y representanla voluntad soberana de todos los miembros
UNA VOZ PARA LOS EMPLEADOS
AUDITORÍAS QUE INCLUYEN
LA GOBERNANZA DEMOCRÁTICA Hay buenas razones empresariales por las que las coope-
rativas pueden querer plantearse dar voz a los empleados
Se aconseja a las cooperativas que lleven a cabo audito-
en su gobernanza democrática, especialmente si no se
rías internas y externas con regularidad en las que se in-
permite a los empleados afiliarse. Con ello se logra una
cluya un examen de los procesos de gobernanza democrá-
mejor comprensión por parte de los emplea-dos acerca de
tica. Con ello se contribuye a proteger los derechos
la naturaleza cooperativa de la empresa de su empleador y
democráticos de los miembros y se garantiza que la go-
hará que aumentesu dedicación y compromiso con el éxi-
bernanza democrática se ajusta a las buenas prácticas y
to de la compañía. Los empleados son partes interesadas
es capaz de soportar un escrutinio externo y de los
cruciales que quieren contribuir a la cooperativa y verla
miembros.
prosperar. Por lo tanto, esimportante que tengan voz den-
No existe ninguna recomendación preceptiva en cuanto a tro de las estructuras democráticas de la cooperativa, pe-
cómo deben efectuarse dichas auditorías ni sobre quién ro, por supuesto, sin que dicha voz pueda dominar los
debe hacerlas. En algunos países –como Alemania, Fran- derechos democráticos de los demás miembros y partes
cia y Austria– existen disposiciones legales y una larga y interesadas.
exitosa tradición de auditorías especiales obligatorias de
las cooperativas. No obstante, y como norma general, la En las cooperativas mixtas donde los empleados son
manera en que selleve a cabo la auditoría la determinará miembros, la voz de los empleados seescuchará a través
el tamaño de la cooperativa y la naturaleza de la actividad de su derecho democrático a participar en las elecciones al
de la cooperativa. consejo rector. Otras cooperativas pueden decidir habilitar
comités de empresa de empleados o secciones sindicales
Tanto si se encargan los propios miembros como si la reali- para elegir representantes de los empleados para partici-
zan auditores escogidos, la auditoría deberá adoptar co- par en el consejorector. Otra posibilidad es que las coope-
mo referencia los códigos y normas de buena gobernan- rativas prefieran que los miembros se reserven lafacultad
za que resulten pertinentes. El informe de auditoría y las de elegir a los representantes de los empleados, según el
recomendaciones contenidas en el mismo deberán poner- principio de “un miembro, un voto”, entre los empleados
se a disposición de todos los miembros en junta general y que deseen presentarse a las elecciones.
deberán ser sometidos a consideración.
No existen mecanismos preceptivos para garantizar que
Algunas federaciones cooperativas u organizaciones de los empleados tengan voz, perocon ella la actividad de la
empresa cooperativa será más fuerte y resistente.
GARANTÍA DE QUE SE ESCUCHA puedan entenderlo y así ejercer sus tareas de gobernan-
za, detallando y presentando opciones y estrategias alter-
A TODO EL MUNDO nativas. Los riesgos empresariales inherentes a las decisio-
Una cooperativa se expone al riesgo de fragmentación de nes que los miembros electos tengan que tomar deberán
su negocio y de pérdida de miembros si algunos de éstos aparecer detallados, junto con una descripción de las es-
tienen la impresión de que no se les presta atención y no trategias de gestiónde los riesgos.
están representados en el proceso democrático.
Los directivos senior, sean o no miembros del consejo rec-
Unas elecciones dominadas por una fracción –en las que tor, tienen el deberde asesorar a los órganos de dirección
triunfan los representantes de unaúnica sección dominante sobre las decisiones y medidas empresariales queconsi-
de los afiliados– puede resultar en la desatención de las deran más adecuadas, pero no deben esperar que los
necesidades y aspiraciones de una minoría de miembros. miembros electos se limiten aautorizar sin más las decisio-
Para evitarlo, lo mejor es que los consejos rectores electos nes que ellos recomiendan. Tiene que existir un respeto
representen la diversidad de visiones de los miembros. mutuoentre las dos funciones distintas que son la respon-
sabilidad de la gobernanza estratégicadel consejo rector y
No existe ninguna forma sencilla de garantizar que esto
las labores de gestión comercial cotidiana de los directivos
ocurrirá así en un sistema democrático abierto. Los miem-
senior.
bros tienen la responsabilidad de percibir el riesgo que
existe de privar de su derecho al voto a determinadas mino- HONORARIOS DE LOS DIRECTIVOS SE-
rías al emitir sus votos. Los consejos rectores también po-
drían utilizar sus facultades de cooptación para garantizar
NIOR Y DE LOS MIEMBROSELECTOS
que las minorías son escuchadas. Los miembros electos DEL CONSEJO RECTOR
tienen que aceptar su responsabilidad de representarlos
Los honorarios de los directivos senior y de los miembros
intereses de la totalidad de los miembros, no solo del gru-
del consejo rector estarán, en última instancia, bajo el
po mayoritario que los eligió.
control democrático por parte de los miembros. Así se evita
una retribución excesiva de los directivos y el consejo rec-
DIRECTIVOS SENIOR
tor, que supondría una mayor desigualdad en términos de
Deben estar muy claros los derechos democráticos y las riqueza y reduciría el excedente obtenido por la empresa
responsabilidades del consejo rector electo de una coope- cooperativa parasus miembros.
rativa –cuyo foco de atención es la estrategia empresarial a
largoplazo– y el papel de la dirección senior profesional –
que es responsable ante el consejo rector y se encarga
de la gestión cotidiana. Los directivos senior tienen que
demostrar sucompromiso práctico y su respeto del princi-
pio de control democrático por parte de los miembros me-
diante la forma en que respaldan y trabajan en la toma de
decisiones comerciales de su cooperativa. Las decisiones
estratégicas clave sobre políticas deberán explicarse con
claridad a los miembros, de manera concisa y de forma
que todos los miembros pueden entenderlo, ofreciendo
opciones alternativas cuando proceda.
RENOVACIÓN DEMOCRÁTICA
Y LÍMITES DE MANDATO
Una continua renovación democrática en las cooperati-
vas, con nuevos candidatos que se presentan a cargos
electos, es algo saludable y debe verse con buenos ojos.
Las cooperativas con consejos rectores estáticos, compues-
tos por los mismos miembros durante períodos de tiempo
prolongados, corren el riesgo de hacerse reacias al cambio
y perder la capacidadde tomar la iniciativa para adaptarse a LA FUNCIÓN DE LAS FEDERACIONES
los cambios en el entorno económico. Competir en las elec-
ciones con miembros que han ocupado un puesto durante
COOPERATIVASNACIONALES Y LAS
mucho tiempo no deberá considerarse una crítica implícita o ORGANIZACIONES SECTORIALES
una desacreditación del actual titular, sino que deberá ver-
se como una actitud positiva por parte de otros miembros Las federaciones cooperativas nacionales o las organiza-
que desean contribuir a mantener la prosperidad de la ciones de cúpula nacionales tienenuna función y responsa-
cooperativa. bilidad especiales a la hora de proteger la efectividad y la
reputacióndel movimiento cooperativo en sus países me-
Deberán fomentarse sistemas electorales abiertos y compe- diante la promoción de prácticas de gobernanza correctas
titivos para incentivar a los miembros con mayor talento a y democráticas. Las organizaciones sectoriales mundiales
que se presenten a las elecciones. Las declaraciones y y regionales, así como las delegaciones regionales de la
campañasde los candidatos ayudarán a poner de manifies- Alianza, tienen una función y responsabilidad similares de
to sus aptitudes y el compromiso que mantendrán con el cara a promover normas de buena gobernanza comunes a
cargo y permitirá a los miembros decidir a qué candidato(s) los sectores económicos de sus empresas cooperativas.
votar. Los códigos, consejos, formación y apoyo de las organiza-
ciones sectoriales nacionales, regionales y de la Alianza
Se recomienda establecer mandatos fijos en cada cargo, de
son particularmente importantespara las nuevas coopera-
tres o cuatro años, por ejemplo,y obligar a un tercio o un
tivas.
cuarto del consejo rector electo a ser revocado y reelegi-
do cada año, con el fin de alcanzar un equilibrio entre la La mejor forma de cumplir con esta responsabilidad es
renovación democrática y el mantenimientode la experien- mediante el desarrollo de recomen-daciones de buenas
cia. Para asegurar la renovación democrática, es una bue- prácticas democráticas, sistemas de auditoría y códigos
na práctica fijar límites de mandato a los responsables elec- de modelos de gobernanza acordes a la legislación nacio-
tos, que establezcan un máximo de años de ejercicio del nal. Las recomendaciones sobre buenas prácticas demo-
miembro electo. Dichas restricciones se han convertido cráticas y códigos de gobernanza fijan una norma respec-
en norma para los cargos no ejecutivos de las compañías to a la cual se puedenmedir y juzgar las prácticas en cada
que cotizan en bolsa, y las cooperativas deberían dar cooperativa miembro. También ofrecen un medio con elque
ejemplo adoptándolas como buena práctica democrática los miembros pueden comparar el rendimiento de su
cooperativa con el de otras simila-res e implantar políticas
que aspiren a la excelencia en gobernanza democrática