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Aristóteles planteaba la interrogante ¿Cómo es la persona?, identificó que hay dos tipos de
accidentales (que corresponden a cada persona en concreto. Aristóteles planteó que las cosas
en el mundo, los entes, están determinados por principios que los hacen ser de la manera que
son, tres clases distintas de principios: según el ser, según la constitución y según la forma.
Para Aristóteles cada uno de los entes esta compuesto por una sustancia, que es aquello que
le hace ser lo que es y no otra cosa. La sustancia existe y no va a dejar de existir cuando
desaparezca su expresión en el ente. La muerte de una persona no implica que también deje
dinamis, es decir en cuento a la capacidad de acción. Los principios son el acto y la potencia,
el acto corresponde a lo que es perfecto y acabado en el ente, es decir, a lo que ya es. Por su
lo que eres en acto, pues potencia también implica la capacidad de un ente para perfeccionarse
Una de las características del hilemorfismo aristotélico consiste en que intenta explicar el
cambio y movimiento. El origen del ente, la manera en que llego a ser, se comprende en función
de cuatro causas. Las dos primeras son intrínsecas, es decir, propias del ente, están, por decirlo
dentro de un grupo determinado de entes, como la especia humana, el reino vegetal, los objetos
inertes, etc.
Causa eficiente: Es la que produce el ente. La flor se origina de la
Causa final: Es lo que cada ente debe llegar a ser; dicho, en otros términos, es aquello para lo