Desnaturalización de los contratos modales Cuando hacemos mención al término
“desnaturalización” se alude a la idea de alteración de la sustancia de una cosa que hace inviable su uso; vale decir, en términos jurídicos, estamos ante supuestos donde la institución jurídica es alterada a tal punto de que no cumple la finalidad para la que fue creada.
En esa línea, la desnaturalización de los contratos modales supone la utilización de estos
negocios jurídicos para los fines que fueron creados, y supone como sanción de que estos sean considerados como contratos a plazo indeterminado. En ese sentido, observamos que la figura de la desnaturalización tiene una tenue diferencia con el principio de primacía de la realidad, cuya aplicación tiene el mismo efecto, pero que no guarda relación con esta figura jurídica. El principio de la primacía de la realidad importa que, en caso de discordancia entre lo que ocurre en la práctica y lo que surge de los documentos o acuerdos suscritos entre las partes, deba otorgarse preferencia a lo primero, es decir, a lo que sucede en el terreno de los hechos. Así, la aplicación de este principio supone un procedimiento de probanza que implica analizar los rasgos sintomáticos de un contrato de trabajo que, sumados a los elementos configurantes de este negocio jurídico, nos lleven a concluir que estamos ante una relación laboral. Un ejemplo clásico de la aplicación de este principio, son los casos en que un locador presta un servicio subordinado a una empresa. En este supuesto, en aplicación de este principio y previa demostración, la relación jurídica vigente se “laboraliza”. Distinta es la aplicación de la figura de la desnaturalización de los contratos modales, que no obedece a la aplicación de este principio, sino que es un efecto establecido por la propia norma jurídica: si se presenta un determinado supuesto de hecho o se verifica la existencia de requisito legal específico, la relación jurídica se considera como una relación laboral a plazo indeterminado. En esa línea, se observa que “en primacía de la realidad importa un procedimiento y una consideración probatoria, mientras que la desnaturalización es la aplicación automática de los supuestos previstos en las normas legales”(12).