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ESPIGO - MUÑON

I. RESTAURACIÓN DEL DIENTE TRATADO ENDODÓNCICAMENTE:

El estudio de la restauración del diente endodonciado y su abordaje clínico han cambiado


radicalmente en estos últimos años. El denominador común de cualquier restauración
(directa, indirecta parcial o total) es la valoración biomecánica del comportamiento
mecánico de las partes remanentes del diente y de los materiales que, de un modo u otro,
están en interfase con ellas1. Las estructuras mineralizadas del órgano dental poseen
comportamientos físicos diferentes al ser sometidas a la acción de una carga.

En un diente desvitalizado, como lo son aquellos que han sido tratados endodónticamente,
están más expuestos a riesgo de fractura que los dientes vitales, y esto debido a que las piezas
privadas del aporte vascular y nervioso, sufren cambios estructurales que modifican sus
propias características mecánicas.

El acceso endodóncico, por sí solo, provoca una pérdida cuantitativa moderada de tejido
dentario, mientras que las causas patológicas que conducen en general a la desvitalización son
responsables de la pérdida de la mayor parte del tejido dentario. Se ha puesto de manifiesto
que la pérdida de tejido en algunas zonas cruciales de la corona (crestas marginales, dentina
interaxial del istmo oclusal, techo de la cámara pulpar) determina una alteración sustancial
de la arquitectura del diente, el cual se torna menos resistente a los estímulos mecánicos, y
más predispuesto a la fractura1.

La eliminación de la pulpa dental reduce la humedad dentinaria de 9% a 14% además de


provocar cambios en la cantidad del colágeno, el cual es responsable de la efectividad de los
sistemas adhesivos.2 Es por ello que se debería tomar en cuenta que en un diente tratado
endodónticamente, se pierden varios factores estructurales de resistencia, por lo que toda
restauración debería siempre respetar e intentar restablecer la modalidad de carga del diente
íntegro, ya que una restauración inapropiada, que altere el comportamiento mecánico y
arquitectónico del diente, estará condenada al fracaso.

1. Restauración en Piezas Anteriores:


1
Brenna F. La restauración del diente tratado endodóncicamente. Odontología restauradora: Procedimientos
terapéuticos y perspectivas de futuro. España: Elsevier; 2010.
2
Mezzomo E. Restauración de dientes previa a la corona protésica - Espigos y Núcleos. Rehabilitación Oral
Contemporánea. Venezuela: Amolca; 2010.
En el caso de estos dientes, no es necesario que sean sometidos a una restauración para
prolongar su duración, de hecho este tipo de restauración protésica indirecta no mejora su
supervivencia en comparación con una restauración directa con resinas de composite. Sin
embargo en los casos en que la destrucción del diente sea demasiado extensa y dificulte
realizar una restauración directa, entonces si se aconseja una restauración coronal total
indirecta.

2. Restauración en Piezas Posteriores:


Al estar estos sometidos a fuerzas oclusales con componente horizontal, corren mayor
riesgo de fractura. Es por ello que para conseguir una conservación más segura de
elementos poscaninos endodonciados, algunos autores aconsejan efectuar de manera
sistemática una cuspidectomía preventiva, seguida de rehabilitación con overlay o
coronas protésicas1. Algo que ha demostrado a un buen pronóstico de la pieza a largo
plazo, ya que los dientes de sectores posteriores sometidos a tratamiento del conducto, y
restaurados con recubrimiento cuspídeo, presentan un porcentaje de mayor éxito que los
dientes con restauraciones conservadoras sin recubrimiento cuspídeo.

Otra técnica que ha ganado importancia en los últimos años es una solución estética cuya
principal característica es la conservación de la mayor cantidad de dentina: el
recubrimiento coronal parcial con overlay (onlay) de resina. Siendo la principal ventaja de
esta técnica el no reducir el diente hasta el nivel gingival, preservando así estructura
dentaria sana, lo cual permite volver a intervenir años más tarde.

II. PROCESO DE DECISIÓN DE RESTAURACIÓN EN RELACIÓN CON LA


PROBLEMÁTICA ENDODÓNCICA:

Este va a iniciar cuando el paciente acuda a su primera cita con el odontólogo, siendo este el
que deberá de ilustrar el proceso de decisión clínica y la relación costo-beneficio según el
tratamiento.

Brenna F. La restauración del diente tratado endodóncicamente. Odontología restauradora: Procedimientos


terapéuticos y perspectivas de futuro. España: Elsevier; 2010.
1. Reconstrucción Directa:
La restauración de la zona coronal debe considerarse juntamente con el sellado apical de
los conductos. Por ello debe realizarse lo antes posible, incluso en la misma sesión que el
tratamiento endodóncico.1 En caso de dientes asintomáticos la restauración deberá de
realizarse en el plazo de 7 a 10 días, mientras que hayan presentado sintomatología
dolorosa, se deberá esperar a que esta desaparezca o disminuya de 7 a 15 días.

2. Reconstrucción Preprotésica con o sin postes:


Se continúan aplicando las consideraciones de las reconstrucciones directas, siendo su
principio el sellado lo más precoz posible de la zona de acceso coronal. Si existe
sintomatología dolorosa, se deberá esperar a que esta desaparezca o disminuya de 7 a 15
días.
3. Restauración Protésica, Parcial o Total:
La complejidad del plan de tratamiento, que a menudo supone intervenciones quirúrgicas
periodontales, conduce automáticamente a una larga espera antes de dar por completada la
curación. Se recomienda realizar el tratamiento endodóncico de los dientes problemáticos
muy precozmente, con objeto de contar con el diente ya endodonciado y reconstruido
antes de la intervención periodontal, así como para disponer de más tiempo para valorar la
evolución hacia la curación completa.

III. RESTAURACIÓN:

1. Pre protésica:
Su objetivo será cerrar el acceso endodóncico y reconstruir parcial o totalmente la parte
coronal del diente, perdida por una patología cariosa o traumática. De esta manera se
optimiza la forma del diente para obtener la preparación protésica ideal 1. Además de
ofrecer retención a la parte más coronal de la propia restauración, extendiendo la adhesión
de la restauración a la superficie del conducto radicular.

En el caso de una restauración con preparación coronal parcial será necesario realizar una
reconstrucción con el fin de contar con grosores constantes en la mayor medida posible. Esta
no requerirá del uso de postes y se aconseja la utilización de composites autopolimerizables,
duales o fotopolimerizables de color claro, para facilitar una eventual reintervención.

Brenna F. La restauración del diente tratado endodóncicamente. Odontología restauradora: Procedimientos


terapéuticos y perspectivas de futuro. España: Elsevier; 2010.
1. Del Poste Rígido al Poste similar a la Dentina:
En los últimos años se está asistiendo al paso del uso exclusivo de materiales muy
rígidos y resistentes (acero, oro, dióxido de circonio) al de materiales con características
mecánicas muy similares a las de la dentina (resinas de composite, postes de fibras), en
la intención de crear un conjunto cuyos componentes tengan un comportamiento
mecánico parecido. Mediante el uso de materiales de rigidez similar a la de la dentina se
consigue una mejor distribución de la tensión inducida por la carga de dichos elementos
sobre las paredes dentinarias, en comparación con materiales más rígidos.

IV. ADHESIÓN EN EL DIENTE TRATADO ENDODÓNCICAMENTE:


1. Interfase dentina-cemento:
La dentina de la cámara pulpar y de los conductos radiculares presenta múltiples
diferencias respecto de la dentina de la corona, debido al reducido número de túbulos
dentinarios presentes, por lo que su capacidad de adhesión micromecánica se encuentre
probablemente disminuida.

V. CEMENTACIÓN DEL POSTE DE FIBRA:

1. Número de postes en Dientes Monorradiculares y Multirradiculares:


En los premolares y molares inferiores los conductos de elección son aquellos que no
tienen paredes residuales, dentro de los límites de la dimensión del conducto a utilizar.
No obstante, en términos generales, en los molares inferiores el conducto distal es el
más seguro y, de los conductos mesiales, el mesiolingual parece tener paredes más
gruesas que el vestibular.1 Mientras tanto, si la restauración protésica contempla un solo
diente, el límite para no utilizar poste se encuentra en la existencia de tres paredes
residuales.

2. Limpieza de la Cavidad:
Tanto la cavidad cariosa como la cámara deben de limpiarse apropiadamente para
asegurarse de eliminar todo resto de tejido carioso, residuos de gutapercha, cemento y
material de obturación provisional.

3. Reapertura del Conducto:


Este procedimiento es de suma importancia, siendo su objetivo eliminar los residuos de
material de obturación, que de quedarse podrían obstaculizar la adhesión dentinaria.

Brenna F. La restauración del diente tratado endodóncicamente. Odontología restauradora: Procedimientos


terapéuticos y perspectivas de futuro. España: Elsevier; 2010.
4. Tallado del Remanente Coronario:
Debe ser realizado siguiendo las características del tipo de prótesis indicada,
removiendo el cemento temporario contenido en la cámara pulpar hasta el comienzo
del conducto3. Después de eliminar todas las retenciones de la cámara, las paredes de
la corona deberán presentar una base de sustentación para el muñon con un espesor
mínimo de 1mm. Es muy importante que se preserve el máximo de estructura dental
para mantener la resistencia del diente y aumentar la retención de la prótesis. 3

5. Preparación del Conducto:

 Extensión Longitudinal: Debe ser igual o mayor a la corona clínica, debe abarcar
2/3 de la extensión longitudinal total del remanente dental. Una extensión adecuada
proporcionara una distribución uniforme de las fuerzas oclusales a lo largo de toda la
superficie radicular, disminuyendo la posibilidad de fracturas por una sobrecarga.

 Inclinación de las Paredes: Se busca seguir la propia inclinación del conducto, de


lo contrario podrían presentar menor retención que los de paredes paralelas. En
casos extremos de destrucción, cuando el conducto está muy ensanchado y
consecuentemente las paredes están muy delgadas y el diente es estratégicamente
importante en la planificación de la prótesis, se pueden utilizar muñones artificiales
con espiga tallándolos de tal forma que reproduzcan totalmente un preparo para
recibir una corona protésica, protegiendo así a la raíz.3

 Diámetro de la Espiga: Es importante en la retención de la restauración y en la


habilidad para poder resistir a las fuerzas transmitidas durante la masticación.
Cuando mayor sea el diámetro de la espiga, mayor será su retención y resistencia.
Por ello se ha sugerido que el diámetro debe presentar 1/3 del diámetro total de la
raíz y que el espesor de la dentina debe ser mayor en la cara vestibular de los dientes
anteriores superiores, debido a que la fuerza es mayor en ese sentido.

 Característica Superficial de la Espiga: En aquellos muñones con superficies lisas,


pueden ser tornadas irregulares antes de la cementación, esto con el fin de aumentar
la retención.

3
Pegoraro L. Muñones Artificiales con Espiga. Prótesis Fija. Brasil: Artes Médicas; 2001.

6. Extensión del Poste:


Este deberá de extenderse a lo largo de la mitad del diente, o incluso más, haciendo que
su longitud guarde relación con la corona. Aquellos más largos representaran menor
riesgo ya que distribuyen la carga y la superficie de interfase adhesiva sobre una amplia
zona de la raíz. Sin embargo tampoco debe ser muy largo ya que podríamos causar
perforaciones.

7. Elección del Poste:


Es necesario seleccionar un poste que se adapte al conducto y no adaptar nunca el
conducto al poste. La prioridad es conservar en la mayor medida posible la estructura
dentaria sana, limitando el grosor del cemento entre poste y pared del conducto, tanto
para reducir al mínimo el estrés por polimerización como porque la fibra debe ocupar el
mayor espacio posible.

8. Introducción del Poste:


El poste ha de ser simplemente introducido en el conducto. No es necesario extender
cemento sobre el poste.

9. Preparación Protésica:
Al cabo de unos minutos y una vez terminada la fotopolimerización de la porción
coronal, se puede proceder a preparar protésicamente el diente.

VI. CLASIFICACIÓN:
Existen una gran variedad, pudiendo ir desde enroscables en la dentina, colados, obtenidos
por técnica directa o indirecta, prefabricados metálicos y prefabricados no metálicos.

1. Enroscables en Dentina:
Excelente alternativa cuando hay pérdida extensa del tejido o cuando el remanente
dentinario no ofrece ninguna pared para retención. Sin embargo ofrece limitaciones
como el riesgo de perforación cervical que invada el espacio biológico o perforación
del techo de la cámara pulpar.2
Cualquier material como iónomero de vidrio, amalgama y resina son aceptables. Sin
embargo se da preferencia a la resina compuesta debido a su fuerte unión adhesiva con
los pines y mayor resistencia a la tracción.

2
Mezzomo E. Restauración de dientes previa a la corona protésica - Espigos y Núcleos. Rehabilitación Oral
Contemporánea. Venezuela: Amolca; 2010.
2. Espigo Muñon Colado:
Fueron desarrollados para sustituir al pin corona de pieza única, mejorando la adaptación
marginal y permitiendo una variación en la vía de inserción de la corona. Son
considerados como ideales por su resistencia, versatilidad, y porque pueden ser
confeccionados de manera que encajen en el espacio radicular disponible en
comparación con el espigo prefabricado.

La confección de estos espigos puede realizarse directamente en la boca con resina


acrílica autopolimerizable o indirectamente (mediante impresión de canal y
reproducción en modelo de yeso) en laboratorio2.

3. Pernos Prefabricados:
Desarrollados como alternativa al espigo muñón colado, simplificando el proceso de
restauración al ser elaborados en una sola sesión, permitiendo agilizar el tratamiento y
reduciendo el riesgo de contaminación bacteriana.

Existen gran variedad de sistemas de pernos prefabricados, donde cada fabricante


presenta un kit de pernos en varias longitudes, formatos, diámetros, regla milimetrada,
cursores y fresas calibradas específicas para la preparación del canal. Las fresas están
numeradas teniendo un diámetro compatible con el perno del número correspondiente.
De tal forma que el canal recibe la conformación ideal, donde el perno es alojado
pasivamente.2

VII. CEMENTACIÓN:

Se recomienda utilizar los cementos resinosos para fijar pernos intraradiculares, modelado o
prefabricados; y como una segunda opción el cemento de fosfato de zinc.

1. Secuencia Operatoria:
a) Remoción de la corona provisional o del cemento sellador de la entrada del canal
b) Aislamiento Absoluto
c) Limpieza del Canal
d) Enjuagar con agua por 30 segundos
e) Secar levemente con jeringa y conos de papel absorbente

2
Mezzomo E. Restauración de dientes previa a la corona protésica - Espigos y Núcleos. Rehabilitación Oral
Contemporánea. Venezuela: Amolca; 2010.
f) Acondicionamiento de la superficie del perno
g) Acondicionamiento ácido del canal con ácido fosfórico al 37% por 60 segundos
h) Aplicación del sistema adhesivo
i) Dosificación y preparación del agente cementante
j) Aplicar cemento sobre el perno
k) Aplicar cemento en el canal con una fresa lentulo
l) Asentamiento del perno en el canal
m) Realizar moderada presión digital por un minuto

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