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ENSEÑANZA CONFESIÓN DE FE

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1 Timoteo 3:15 para que, si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es
la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad.

Al llamar a la Iglesia columna y baluarte de la verdad, la Biblia nos enseña que la


revelación que Dios ha dado para la salvación de los hombres ha sido confiada a la Iglesia,
es decir, confiada a una institución que fue designada y planeada por Dios para conservar
pura la verdad, para defenderla contra el error y contra los ataques de sus enemigos, y
encomendarla a las generaciones futuras, sin diluir ni adulterar. La Iglesia fue creada como
una sociedad humana ordenada por Dios para el sostenimiento y la proclamación de la
verdad revelada en el mundo. Esto, desde luego, hace que la Iglesia sea indispensable, tan
indispensable como la columna o fundamento de una casa.

En el desempeño de su deber como columna y baluarte de la verdad, entre otras cosas, la


Iglesia ha publicado confesiones de fe, una actividad que históricamente ha considerado
como un medio legítimo para el cumplimiento de su deber.

¿Qué es una Confesión de fe? Una Confesión de Fe es una declaración exhaustiva


(profunda, minuciosa) de las doctrinas cristianas, expresadas cuidadosamente en un
lenguaje que puede ser reconocido y entendido por los cristianos de todas las épocas. Una
Confesión de Fe resume sistemáticamente la doctrina contenida en las Sagradas Escrituras.

Las confesiones de fe tienen una larga historia en la vida de la Iglesia de Cristo. En el


Antiguo Testamento, las palabras de Deuteronomio 6:4 (Oye, Israel: Jehová nuestro Dios,
Jehová uno es. Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con
todas tus fuerzas.) sirvieron de confesión básica para Israel. Los escritores del Nuevo
Testamento afirman esta verdad (véase por ejemplo 1 Cor. 8:6) para nosotros, sin
embargo, solo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos
para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por
medio de él. y la amplían hablando de la Persona y la obra de Jesucristo (Fil. 2:5-11 es una
muestra).
Tiene dos propósitos: en primer lugar, vincular a los cristianos con la Iglesia católica
(universal) de todos los tiempos. La iglesia debe tener en cuenta que su fe y práctica tienen
una historia. Esto es importante porque reconoce que los cristianos son parte de un Cuerpo
que ha confesado la verdad acerca de Dios y de Cristo por dos mil años.

La Iglesia de Cristo tiene 20 siglos de historia y nosotros no podemos desligarnos de ese


pasado. Pensemos en esto: Hay dos características primordiales que distinguen a una secta:
hacen hincapié en algunos puntos particulares por encima de todo el consejo de Dios; y, en
segundo lugar, claman ser los que descubrieron una verdad que la Iglesia nunca había visto
en el pasado. Por eso se niegan al estudio de la historia de la Iglesia y a las Confesiones de
Fe históricas. Debemos sospechar de todo ministerio o iglesia que diga haber descubierto
algo que nadie vio en 20 siglos de cristianismo.

No es que una doctrina sea verdadera por ser antigua. No. Una doctrina es verdadera sólo si
es la enseñanza de la infalible Palabra de Dios. Pero debemos recordar que el Espíritu Santo
no comenzó a guiar a los cristianos en el siglo XX. Tenemos un largo pasado que debemos
conocer.

Eso de ningún modo elimina la necesidad de nuestra propia tarea de pensar bíblica y
teológicamente, porque es indudable que la Iglesia de cada generación tiene que enfrentar
sus propias luchas y retos. Pero al hacerlo, debemos cuidarnos de no desconocer y
despreciar la labor de 20 siglos de historia.

En segundo lugar, una confesión expresa las doctrinas que caracterizan al grupo, iglesia o
congregación que la proclama, es decir, dice lo que cree tal iglesia. Aunque debe contener
la doctrina universal, tiene al mismo tiempo los postulados particulares. Aunque los
bautistas reformados y los paidobautistas (bautizan niños) reformados tienen mucho en
común, difieren, por ejemplo, en el tema del bautismo. Sus respectivas confesiones
describen estas áreas en que son diferentes. Cimentada cuidadosamente en la Escritura
según ha sido entendida por los creyentes desde la era apostólica hasta hoy, la Confesión de
Fe provee una identidad teológica importante a las iglesias que se adhieren a ellas.

Debemos aclarar que una confesión de fe nunca reemplaza la autoridad de la escritura. La


Biblia ocupa un lugar singular en la regulación de la fe y conducta de la Iglesia. Sin
embargo, se hace necesario establecer una confesión. Porque es ingenuo creer que la Iglesia
cumple plenamente su deber como columna y baluarte de la verdad proclamando que cree
en la Biblia. ¿por qué? Porque la mayoría de los herejes están dispuestos a decir lo mismo.
(Arrio)

Una confesión de nuestra lealtad a la Biblia no es suficiente. Las negaciones más radicales
de la verdad bíblica, con frecuencia, existen al mismo tiempo con un reconocimiento de la
autoridad y el testimonio de la Biblia. Es decir, alguien puede negar alguna o algunas
verdades bíblicas y al mismo tiempo confesar que cree fielmente a lo que dice la biblia.
Cuando los hombres utilizan las palabras mismas de la Biblia para promover la herejía,
cuando la Palabra de verdad es pervertida para servir al error, es muy útil una confesión de
fe para trazar las líneas que dividen la verdad y el error.

Habiendo hecha esta aclaración, nombremos algunas de las declaraciones de fe más


conocidas dentro del campo protestante: La confesión de Augsburgo (1530), La confesión
escocesa (1560), La confesión belga (1561), Los 39 artículos (1563), La segunda confesión
helvética (1566), y La confesión de Westminster (1646). La confesión bautista de Londres
de 1689.

¿Por qué son importantes las confesiones de fe?

1. Defiende las verdades del evangelio: No da lugar a ambigüedades, sino que declara
lo que la biblia claramente enseña. La trinidad es claramente enseñada en la biblia y
defendida por la confesión de fe protestantes, sin embargo, algunos por la misma
biblia creen en la unicidad. No somos mormones, no somos adventistas, no somos
unitarios, no somos católicos.
2. Resume el eje central de las escrituras: sirven como una especie de resumen del
libro Simplifican todo lo que la Palabra de Dios nos enseña, extrayendo las verdades
más fundamentales de la misma. En otras palabras, son una especie de síntesis,
ayudándonos a ver el cuadro completo de las Escrituras sin entrar en demasiados
detalles.
3. Nos protege de los falsos maestros: el Antiguo Testamento está repleto de
advertencias acerca de los falsos profetas. Y encontramos más de lo mismo en el
Nuevo. En los primeros siglos de la iglesia, varias sectas y falsas religiones querían
acabar con el cristianismo. Recordemos los gnósticos, que estuvimos estudiando
hace poco. Todas aquellas corrientes heréticas negaban una o varias verdades
centrales de la fe cristiana.
En nuestros días, sucede exactamente lo mismo. Nos encontramos rodeados de
falsos maestros. Algunos se han entregado a la mentira de la confesión positiva,
convirtiendo al Todopoderoso en un simple títere puesto para satisfacer los
caprichos de los “creyentes”. Por esta razón hay multitudes que ya no oran en
humildad delante del Señor, sino que atan, desatan, declaran, y decretan con
prepotencia. Otros enseñan una nefasta doctrina conocida como el evangelio de la
prosperidad o la teología de la prosperidad, dando a entender que los más ricos son
los que más fe tienen, y que si alguno está enfermo o pobre, es que le falta fe. Luego
hay otros que apoyan el movimiento LGTB en el nombre del Dios del evangelio,
levantando “iglesias” que celebran las relaciones homosexuales.
Ya que hay tantos engañadores, hace falta una buena confesión de fe para que
sepamos cómo detectar a los falsos maestros. Como nos exhortó el apóstol Juan:
“Amados, no crean a todo espíritu, sino prueben los espíritus para ver si son de
Dios, porque muchos falsos profetas han salido al mundo” (1 Juan 4:1).
4. Nos da identidad: Cuando estudiamos los grandes credos de la iglesia universal,
como El credo niceno, El credo apostólico, o El credo de Calcedonia, y las
confesiones de fe del protestantismo antes mencionadas, nos sentimos identificados
con la iglesia universal del Señor Jesucristo. Vemos que la iglesia es un fenómeno
mucho más grande que nuestra congregación local. Formamos parte de un cuerpo
que goza de dimensiones internacionales e históricas. Es importante recordar que la
iglesia no nació el día que se fundó nuestra asamblea local.
De esta manera aprendemos a tomar en serio las verdades no negociables por las
cuales nuestros antepasados espirituales estuvieron dispuestos a derramar su sangre.
En todos los tiempos Dios ha levantado a hombres valientes que fueron rechazados
porque no querían negar las verdades centrales de la Palabra. Muchos se vieron
obligados a salir de sus respectivas denominaciones por causa de la teología liberal.
Sufrieron mucho por su decisión, no obstante, sabían que es mejor sufrir por la
verdad de Dios que disfrutar de una falsa paz religiosa.
Una declaración de fe nos ayuda a apreciar las doctrinas tan valiosas defendidas por
los siervos de Dios a lo largo de los siglos.
5. Promueve la unidad: No podemos tener unidad con personas que niegan la
inspiración de la Escritura, o la divinidad de Cristo, o la salvación únicamente por
gracia por medio de la fe. La verdad es esencial para que haya unidad. Por tanto, es
necesario para promover la unidad que podamos declarar en una forma precisa y
ordenada, qué es lo que nosotros creemos que la Biblia enseña acerca de los temas
más importantes. Decir “yo creo en la Biblia” no es suficiente.
Ejemplo: Supongamos que un individuo ha comprado una casa en un barrio muy
seguro, tan seguro que él ha decidido no ponerle paredes o divisiones alrededor de
su terreno. Pero un día alguien compra el terreno de enseguida, y ahora dice que hay
un metro de su terreno que en realidad no le pertenece. ¿Qué debe hacer el
individuo de nuestra historia? Ir a Catastro, buscar su título de propiedad y
establecer claramente los límites de su terreno.
Algo similar ocurrió con la iglesia primitiva. Ellos creían en la inspiración de las
Escrituras, y que Cristo era Dios hecho hombre. Pero se vieron obligados a definir
con precisión estas doctrinas cuando se sintieron amenazados por las herejías.
Una iglesia puede tener una estructura externa unificada, pero si los miembros que
están en ella mantienen opiniones distintas respecto a los asuntos esenciales de la fe
cristiana, tal iglesia en realidad está dividida.

23 junio de 2022

Explicar que la confesión está dividida en lecciones, cada lección en capítulos, y los
capítulos en párrafos.

De las Sagradas escrituras

Las Sagradas Escrituras constituyen la única regla suficiente, segura e infalible de todo
conocimiento, fe y obediencia salvadores1. Aunque la luz de la naturaleza y las obras de la
creación y de la providencia manifiestan de tal manera la bondad, sabiduría y poder de
Dios que dejan a los hombres sin excusa2, no obstante, no son suficientes para dar el
conocimiento de Dios y de su voluntad que es necesario para la salvación3. Por lo tanto,
agradó al Señor, en distintas épocas y de diversas maneras, revelarse a sí mismo y
declarar su voluntad a su iglesia4; y posteriormente, para preservar y propagar mejor la
verdad y para un establecimiento y consuelo más seguros de la iglesia contra la
corrupción de la carne y la malicia de Satanás y del mundo, le agradó poner por escrito
esa revelación en su totalidad, lo cual hace a las Santas Escrituras muy necesarias5,
habiendo cesado ya las maneras anteriores por las cuales Dios revelaba su voluntad a su
pueblo6.

La base de la necesidad de las escrituras: hermanos el ser humano necesita de las Escrituras
porque necesita de la propia revelación de la redención. ¿Por qué? Porque la luz de la
naturaleza y la creación no son suficientes para dar aquel conocimiento que es necesario
para la salvación. Por tanto, la revelación redentora es necesaria para la salvación. En ese
orden de ideas, si hay necesidad absoluta de la revelación entonces se necesita de las
Escrituras. La Confesión nos recuerda que la revelación redentora tiene un propósito
redentor. Los hombres deben ponerse en contacto con ella para que se cumpla ese fin.

La presuposición de su necesidad: como acabamos de mencionar, si la escritura es el medio


necesario para colocar al ser humano en contacto con la revelación, entonces afirmamos
que ya han cesado o terminado aquellas maneras anteriores que tuvo Dios de revelar su
voluntad a la iglesia (Cristofanías, directa y audiblemente: Moisés veía a Dios cara a cara,
sueños y visiones). Si Cristo estuviera aún entre nosotros o sus apóstoles inspirados aún
anduvieran en la Tierra, entonces las Escrituras no serían tan necesarias, porque
recibiríamos de ellos la revelación. Pero algunos grupos enseñan que aun los otros modos
no han cesado (revelaciones del Espíritu, la profecía, sueños, etc.), de esta manera,
desvirtúan la necesidad de las escrituras. (enfatizar la necesidad de las escrituras).

Razones de su necesidad:

1. Conservación. La salvación de los seres humanos depende de que se tenga en un


registro confiable de la revelación redentora. La Confesión dice que la verdad que
es necesaria para la salvación fue puesta por escrito para conservar (guardar,
preservar) mejor la verdad, con el fin adicional de ser para un establecimiento y
consuelo más seguros de la Iglesia contra la corrupción de la carne y la malicia de
Satanás y del mundo.
Entonces, fue para la conservación de la verdad, fue para fortalecer la debilidad
humana, y fue para tomar conciencia de la malicia de Satanás y del mundo, por lo
que Dios nos dio las Escrituras. Tenemos indicaciones de este propósito en las
Escrituras mismas.
2. Publicación. La Confesión menciona también el propagar mejor la verdad. Los
apóstoles inspirados, aun cuando estaban vivos, no podían estar presentes al mismo
tiempo en varias partes. Por esa razón, escribieron cartas para la mejor publicación
de la verdad que enseñaban.
3. Selección. La escritura cumplió el propósito del Espíritu Santo al seleccionar de
entre la abundante revelación especial original solamente aquello que cumplía el
propósito de Dios con la escritura. La escritura se realizó con una selección
inspirada. Juan 20:30-31, 21:25.

Implicación de esta necesidad: Si Dios salva a los hombres por medio de la revelación
redentora, y si esta revelación ha quedado por escrito, entonces Dios soberanamente
asegurará que estas escrituras sean mantenidas puras a lo largo de todos los tiempos con su
cuidado y providencia. Por ser estrictamente necesaria la revelación redentora, una vez ha
quedado escrita, es protegida de la corrupción por la especial providencia de Dios.

30 de junio de 2022

Hace 8 días vimos la necesidad

La identidad. La confesión de fe no solo tiene doctrinas fundamentales para edificación de


la iglesia, sino que, como fue hecha en medio de la controversia, en el siglo XVI, con la
ICR que se había desviado de la palabra de Dios, también da respuesta a una contraparte de
una mala enseñanza de la ICR.

El capítulo 1, que estamos estudiando, tiene el propósito de contradecir los dogmas


católicos que había con respecto a las escrituras. Así que cada uno de los 10 párrafos da
respuesta y da claridad con respecto a las escrituras.
Dos párrafos contradicen las posiciones más radicales de los anabaptistas con respecto a la
palabra de Dios, aquellos que eran parecidos al carismatismo de hoy día (revelaciones
directas, don de profecía). Es importante tener esto presente, porque, aunque en la CF
vemos un orden, tal como el de una teología sistemática, sin embargo, da respuesta a
enseñanzas erradas y apartadas de las escrituras de la ICR y otros grupos,

¿El párrafo 2 que contradice? Dice claramente cuál es la palabra de Dios para que las
personas sepan que hace parte de la biblia y que no hace parte de la biblia.

La ICR afirma: el pueblo es incompetente para saberlo y que solo por el testimonio de la
iglesia las personas pueden saberlo, entendiendo iglesia como la institución jerárquica. En
otras palabras, dice: la gente no está capacitada para identificar la palabra de Dios, solo la
jerarquía, solo el magisterio, solo ellos pueden decir al pueblo que es y que no es palabra de
Dios. Por eso el catecismo de Baltimore (catecismo IC romana) en la pregunta 1327 dice:
es solo por medio de la tradición preservada en la iglesia católica que podemos saber
cuáles de las escrituras de los tiempos pasados son inspiradas y cuáles no.

Entonces el párrafo 2 contradice esta enseñanza errónea, da respuesta a esto.

Un teólogo católico dice lo siguiente: las escrituras necesitan una garantía de


autenticidad. Solo la iglesia como institución jerárquica les puede dar esa garantía, sin la
iglesia no puede existir. Esto es terrible. En otras palabras, si la iglesia católica no da su
señalamiento de que es palabra de Dios, entonces no puede haber seguridad de qué es
palabra de Dios.

Lo que la ICR está haciendo es poniéndose como autoridad por encima de las escrituras
para definir lo que es la escritura, pero esto no es así. La única autoridad es la misma
escritura.

ICR dice: Es competencia de la iglesia determinar cuáles son los libros inspirados y cuáles
no, porque tienen la autoridad recibida de Cristo con la asistencia del ES. Y esto fue lo
que hizo la ICR en el concilio de Trento de 1546. Que es el concilio que se reunió después
de la reforma protestante como respuesta a la reforma protestante, y ellos determinan que
hace parte y que no de la biblia. En el concilio de Trento la iglesia fijó el canon
declarándolo dogma (algo que no tiene discusión).
Párrafo 2 da su identidad diciendo cuales son los libros que componen la biblia. 66 en total,
39 AT y 27 NT.

Canon viene de una palabra griega que significa caña o vara, que era una medida, luego
vino a ser la regla o estándar para que algo sea. El canon de las escrituras es el estándar de
lo que es la biblia, es decir, que libros componen las escrituras. Entonces el párrafo 2 es un
listado, es una identidad que es definida positivamente.

¿Por qué estos libros? Serán respondidos en los párrafos 4 y 5. En cada biblia que tienen en
sus manos ustedes pueden corroborar que es así.

Párrafo 3 Los libros comúnmente llamados Apócrifos, no siendo de inspiración divina, no


forman parte del canon o regla de la Escritura y, por lo tanto, no tienen autoridad para la
iglesia de Dios, ni deben aceptarse ni usarse excepto de la misma manera que otros
escritos humanos.

¿Que son los libros apócrifos? Todas las traducciones son buenas menos las del nuevo
mundo (testigos de Jehová). Las versiones de la ICR contienen los libros apócrifos y estos
no hacen parte de lo que es la palabra de Dios, pues no son de inspiración divina. La ICR
cambio los nombres de libros apócrifos a libros deuterocanónicos.

Apócrifo significa cosas ocultas (falso, fingido). Fueron libros que se escribieron entre los
dos testamentos. Al finalizar la revelación de Dios en AT con Malaquías hay un silencio de
Dios, queda una expectativa, mirando al que iba a venir. Entre el AT y NT hay 400 años,
que se llaman los años de silencio. El mismo pueblo judío, y los mismos historiadores
judíos dan señal de que entendían de que había cesado la revelación de Dios, por eso no
había más añadiduras al canon de las escrituras inspiradas. En esos 400 años se siguieron
escribiendo otros libros, de carácter histórico, aplicativo y religioso, pero que el pueblo
judío que fue guardián de la palabra de Dios, no identificaba como inspirados. Esos libros
tienen esa característica: que fueron escritos en griego, no en hebreo. Son 1 y 2 Esdras,
Tobías, Judith, adiciones al libro de Ester, sabiduría de Salomón, eclesiástico, Baruc, el
cantico de los 3 jóvenes santos, Susana, Bel y el dragón, la oración de Manases, y 1 y2 de
Macabeos. Estos tenían buenos datos históricos, tenían datos en cuanto a la práctica, pero
no eran libros que el pueblo de Dios considero como inspirados.
Estos libros la ICR en el Concilio de Trento los añade al canon y determina que son palabra
de Dios, excepto 1 y 2 Esdras y la oración de Manases.

Los apócrifos no son de inspiración divina porque hay incongruencias doctrinales e


históricas en varios de estos libros. Aquí no hay armonía que se encuentra en la palabra de
Dios, los 66 libros.

Algunos errores: Judith y Tobías incluyen errores históricos, cronológicos y geográficos.


Justifican la falsedad y engaño como medio para llegar a los fines, y hacen que la salvación
sea por obra o mérito.

Eclesiástico y sabiduría de Salomón inculcan una moralidad basada en la conveniencia, es


decir, me comporto moralmente si me conviene o no. Sabiduría enseña la creación del
mundo con materia preexistente 11:17 Tu mano omnipotente que de la materia sin forma
creo el mundo. Esto contradice lo que dice la palabra de Dios que creó las cosas de la nada
(ex nihilo).

Esto tiene que ver con un pensamiento llamado dualismo en donde no solamente Dios ha
existido eternamente, sino que hay materia preexistente, y en el pensamiento griego lo
material es malo y esto finalmente nos lleva al dualismo, Dios es bueno, pero hay cosas que
han existido también eternamente y que son malas, entonces empieza el dualismo entre una
cosa y otra. (Dios vs Diablo como si fueran iguales)

Tobías 6:8 nos narra que un ángel dice que tome un pescado, lo abra, bote las tripas y
guarde corazón e hígado, si se quema el corazón o hígado del pez delante de un hombre o
mujer atacados por un demonio o espíritu maligno, cesan los ataques y desaparecen para
siempre. Vemos aquí como una especie de hechicería, vemos incongruencias doctrinales
que no se observan por ningún lado en las escrituras. La palabra de Dios es inerrante.

Eclesiástico enseña que dar limosnas hace expiación por el pecado. 3:30 el agua apaga el
fuego que arde y dar limosnas consigue el perdón de los pecados.

En 1 de macabeos hay errores históricos y geográficos. Entonces cuando se lee estos libros
apócrifos se observa una diferencia entre los libros inspirados y estos libros que el pueblo
judío nunca identificó como libros inspirados. Por eso el párrafo dice que no forman parte
del canon.
¿Entonces si tienen errores por qué algunas biblias lo incluyen? Veamos un poco de
historia. Ante una iniciativa de la biblioteca de Alejandría (siglo III a.c., Egipto) se empezó
a hacer la traducción de los libros sagrados de los diferentes pueblos al idioma griego para
tenerlo en la biblioteca de Alejandría. Cuando se fue a traducir el libro sagrado del pueblo
judío, existían todos estos libros apócrifos. Pero como el propósito de la biblioteca de
Alejandría no era preservar la palabra, sino de aumentar el volumen de libros de su
distinguida biblioteca, entonces decidieron que se hacia la traducción al griego del AT, pero
también incluyendo la traducción de los otros libros. Entonces surge la traducción de la
Septuaginta (70) porque se dice que 72 eruditos judíos (6 de cada tribu) fueron los que la
tradujeron. Entonces había esa recopilación de libros inspirados y no inspirados.

Luego, al pasar el tiempo, en el siglo V, por orden del papa se le encarga a Jerónimo que
haga una traducción al latín, que era el idioma utilizado en el imperio romano. Jerónimo
hace la traducción del griego al latín de la Septuaginta, pero Jerónimo no identifica los
apócrifos como parte de la escritura y decide no añadirlos, pero por presión del papa le toca
traducirlos e incluirlos y se crea la vulgata latina. Terminada en el 404. Pero el hecho de
que los apócrifos no tuvieron un original hebreo que los respaldara, el hecho de que fueran
excluidos del canon de las escrituras judíos, pues ellos no los identificaron como
inspirados, y la falta de cita de ellos en el NT (Jesús ni apóstoles), hizo que Jerónimo no los
considerara como parte del canon, pero por presión del papa que era un ignorante teológico,
tuvo que añadirlos.

Entonces, todo esto quedo a la mano, en un mismo libro estaban la palabra de Dios y libros
no inspirados. Jerónimo los pone aparte y se les da el nombre de deuterocanónicos (deutero
= segundo; canónico = canon) como canon secundario. Por eso estos libros aun hoy día
erradamente se relacionan con la palabra del Señor.

En el concilio de Trento, que es la reunión de los jerarcas de la iglesia, frente a lo que


ocurrió en la reforma protestante, se declara que los apócrifos son parte del canon ¿Por qué
lo hizo la ICR? Como una reacción contra el movimiento reformador, pues los teólogos
reformadores identificaban que estos libros, en la historia la iglesia, tenían un valor
histórico, tenían una riqueza literaria, pero nunca fueron considerados como inspirados. Por
eso los reformadores no los incluyen como la palabra de Dios.
Por otro lado, la ICR también los incluyó porque estos libros dan un respaldo a enseñanzas
erróneas de la ICR: oración por los muertos, justificación por la fe más las obras. Y por eso
le ponen un nombre más aceptable deuterocanónico.

Entonces la ICR dice que la iglesia tiene autoridad sobre la escritura. Ellos son los que
definen que es escritura. Eso es ponerse por encima de la palabra de Dios.

Podemos preguntarnos ¿luego los reformadores no hicieron los mismo, determinar que es
palabra de Dios? Luego vamos a estar viendo que la biblia da testimonio de sí misma, y esa
a través de ella que se puede ver que es la palabra de Dios.

Los protestantes dicen que la iglesia no puede determinar que es escritura, sino que la
iglesia solo puede reconocer lo que Dios ha dejado como escritura. No se determina que es
la palabra del Señor, sino que se identifica la inspiración divina cuando se lee la palabra
del Señor.

Los apócrifos no se deben considerar como parte de las escrituras. No tienen la misma
autoridad que tenían los libros del AT. No hay citas en el NT. El Señor ni apóstoles los
citaron. Por lo tanto, no tienen autoridad para la iglesia de Dios, ni deben aceptarse ni
usarse excepto de la misma manera que otros escritos humanos.

Entonces vimos la identidad, párrafo 2 cuales son los libros de la biblia (aspecto positivo),
y párrafo 3 (aspecto negativo) que es la negativa a la inclusión de los apócrifos, tal como lo
hizo ICR.

Veamos algunos versículos.

07 de julio de 2022

Hace 8 días vimos la identidad.

La autoridad. La autoridad es la facultad o derecho que tiene para gobernar o ejercer el


mando. Hermanos… dos preguntas nos podemos hacer acerca de la autoridad de la Biblia:
¿Por qué tiene autoridad la Biblia? y ¿Cómo sabemos que la Biblia es la Palabra de Dios y
que, por lo tanto; tiene autoridad?
La autoridad de las Sagradas Escrituras, por la que debe ser creída, no depende del
testimonio de ningún hombre o iglesia1, sino enteramente de Dios (quien es la verdad
misma), el autor de ella; por lo tanto, debe ser recibida porque es la Palabra de Dios2.

Respondámonos a la primera pregunta ¿Por qué tiene autoridad la Biblia? Si recordamos el


párrafo 3 nos decía que los libros apócrifos no fueron inspirados por Dios, por lo tanto, no
son autoritativos, es decir, no tienen autoridad divina para la iglesia. Entonces, podemos
decir que la biblia es autoritativa porque es inspirada por Dios. Nuevamente ¿Por qué tiene
autoridad la Biblia? Pues sencillamente porque Dios la inspiró, Dios es su autor, su autoría
es divina, porque son las mismas palabras de Dios plasmadas por escrito.

Wayne Grudem (teólogo, escritor y predicador) define la autoridad de la biblia así: la


autoridad de la biblia quiere decir que todas las palabras de la biblia son palabra de Dios,
de una manera tal que no creer o desobedecer alguna de ellas es no creer o desobedecer a
Dios mismo.

Entonces, hermanos, necesariamente, la autoridad de la biblia está ligada a su inspiración.

Lo que acabamos de leer de Grudem es lo que se conoce como la inspiración verbal y


plenaria de las escrituras. Esto significa: plenario es pleno, es todo, no en parte, es decir,
toda la escritura es inspirada por Dios. Inspiración verbal quiere decir que el ES guió
directamente las palabras exactas registradas por los escritores bíblicos en la medida en que
escribían las escrituras. Es decir, cada una de las palabras de los manuscritos originales,
cada una de ellas fueron las palabras que Dios quiso y no otras. En este sentido la escritura
es completamente inerrante.

Aclaración: si es cada palabra inspirada ¿qué podemos decir de las diferentes traducciones
que existen, ya que tienen diferentes palabras? La inspiración verbal hace referencia a los
manuscritos originales. Entonces ¿quiere decir que la biblia, la copia de las escrituras que
tenemos el día de hoy, no podemos decir que está inspirada plenaria y verbalmente? Por
supuesto que sí.

Lo que nos enseña el párrafo 4 es que la autoridad de la biblia depende de única y


exclusivamente de una razón: Dios es su autor.
Pasemos a nuestra segunda pregunta ¿Cómo sabemos que la Biblia es la Palabra de Dios y
que, por lo tanto; tiene autoridad?

¿de dónde surge la enseñanza de la inspiración divina? ¿Quién asegura que toda la biblia es
inspirada por Dios? ¿de quién depende la autoridad de la biblia? ¿a dónde podemos acudir?
La única que nos puede contestar es la biblia misma. Nadie más. Si otra autoridad aparte de
la biblia nos responde que ella es inspirada por Dios, entonces estamos depositando la
autoridad no en la biblia sino en la otra autoridad que nos dice que es inspirada.

La CF de fe en el párrafo que estamos estudiando nos dice: La autoridad de las Sagradas


Escrituras, por la que debe ser creída, no depende del testimonio de ningún hombre o
iglesia, sino enteramente de Dios (quien es la verdad misma), el autor de ella. Entonces,
hermanos, si alguien ha de creer que la biblia es la palabra de Dios inspirada de Dios y por
lo tanto autoritativa, no puede depender o descansar en la afirmación de un erudito o de un
argumento, por más elaborado que este sea, sino en el testimonio de Dios mismo.

¿De dónde surge esta doctrina de la inspiración verbal y plenaria? ¿De la CF?, no puede ser
de allí, ¿de un grupo de teólogos? Tampoco. Esta doctrina surge de la biblia misma, porque
no es la confesión de fe la que reviste a la biblia de autoridad. La CF simplemente está
diciendo lo que la biblia ya dice que ella es, que es la palabra de Dios. Entonces la
autoridad de la biblia no depende del testimonio de nadie, sino de su propio testimonio.

Para examinar lo que dice la biblia de sí misma, es importante dejar muy en claro que la
Biblia nunca se critica a sí misma contrariamente, es decir, la Biblia nunca afirma en sí
misma, en alguna declaración, que esté en error.

Miremos el testimonio propio de la biblia, examinando primero la evidencia de la autoridad


del Antiguo Testamento. Se pueden enumerar dos clases de evidencia de la autoridad del
Antiguo Testamento: primero, el testimonio que el Antiguo Testamento da del Antiguo
Testamento, y segundo, el testimonio que el Nuevo Testamento da del Antiguo Testamento.
Pero enfoquémonos en el testimonio que el Nuevo Testamento da del Antiguo Testamento,
el cual deja muy clara la autoridad del Antiguo Testamento como un todo orgánico (es
viva). Por lo tanto, el argumento para la autoridad de la Biblia comienza con su doctrina de
la autoridad del Antiguo Testamento que se halla en el Nuevo Testamento.
Veamos algunos aspectos en los cuales el NT da testimonio del AT:

1. El Antiguo Testamento es sagrado (2 Ti. 3: 15) y santo (Ro. 1:2) Al igual que el
templo (nótese la relación de ambas palabras con el templo), el Antiguo
Testamento, sus palabras están asociadas con Dios. Los escritos del Antiguo
Testamento son los escritos de Dios.
2. Los escritos del Antiguo Testamento son los oráculos de Dios (Romanos 3;2;
Hechos 7:38). La palabra traducida por oráculo designa universalmente una
declaración divina, significa los dichos de Dios. Romanos 3:2 se refiere a que
quedaron escritos todas las palabras que Dios dio al pueblo de Israel, a ellos fueron
dadas, y quedaron escritas.
3. Por esta razón, las frases “dice Dios” y “dice la Escritura” son equivalentes. En
Romanos 9:17 y Gálatas 3:8, lo que Dios dijo en el Antiguo Testamento se atribuye
a la Escritura, mientras que en Mateo 19:4,5, lo que la Escritura dijo en el Antiguo
Testamento se atribuye a Dios. Esto sólo puede explicarse sobre la suposición de
que a la Escritura se la considera como Dios mismo hablando.
4. Puesto que Dios es el autor de las Escrituras, éstas pueden estar, y de hecho están,
escritas con el futuro lejano en merite (Romanos 15:4; 1 Corintios 10:11).
5. Puesto. que la Escritura es divina, es, por así decirlo, el escrito del decreto de Dios.
Y una necesidad divina demanda su cumplimiento (Hechos 1:16; 13:34,35; Juan.
19:34-36; Lucas 22:37; Mateo 26:54; Juan. 13:18).
6. Los cinco pasajes clásicos que enuncian la autoridad divina del Antiguo Testamento
son 2 Timoteo 3:16; 2 Pedro 1:19-21; Mateo 5:17-18; Juan 10:34-36; Mateo 4:1-11.
Afirman que el Antiguo Testamento está inspirado por Dios; es el resultado de un
origen divino, y como está escrito, es perfectamente autoritativo.

En todos estos versículos hemos visto la inspiración plenaria de las escrituras, y hay
muchos más, los cuales nos muestran que el NT da claras evidencias de que el AT es
inspirado por Dios y por lo tanto de autoridad para la iglesia.

Entonces, ya hemos hablado de la autoridad del AT por cuanto es inspirado por Dios, pero
ahora hablemos del NT. Es necesario entender que el Nuevo Testamento posee la misma
autoridad. (inspirada por Dios) que el Antiguo.
La unidad orgánica de los dos testamentos (se refiere básicamente a ese tipo de unidad
donde cada parte es necesaria para explicar y completar el todo. Esto se debe a que en todas
sus partes son producto del Espíritu Santo) es el argumento para la autoridad tanto de AT
como del NT. Pues como hemos visto si el NT da testimonio del carácter inerrante del AT,
y si los dos testamentos son una unidad orgánica ¿cómo podría ser el NT diferente al AT?
Necesariamente la divinidad del NT debe ser la misma que la del AT. Si el AT es inerrante,
entonces el NT también es inerrante.

La autoridad del AT se extiende al NT debido a que son una unidad orgánica. Las profecías
del AT demandaban o hacían necesario un NT. El NT dice ser el cumplimiento del AT. Por
estas razones se debe atribuir autoridad e inspiración a los escritos del NT.

Un pasaje clásico que enseña la unidad orgánica del AT y NT hebreos 1:1-2.

Ahora pasemos a tratar el tema de la objeción referente a que la biblia fue escrita por seres
humanos, y que como estos actúan libremente (no inspirados) y cometen errores, entonces
se llega a la conclusión de que la biblia debe contener errores.

Que la Biblia fue escrita por hombres y es, por tanto, un libro tanto humano como divino no
puede ni debe negarse. Dos consideraciones, sin embargo, manifiestan la falsedad de la
conclusión que se deduce de este hecho por esta objeción.

La primera es el paralelo con la doctrina de la persona de Cristo. La humanidad de Cristo


no disminuye o niega su plena deidad. De igual forma, la humanidad de la Biblia no
significa que sea falible. Jesús fue un verdadero hombre sin ser falible. Así también, la
Biblia es un libro humano sin ser falible o menos divino.

La segunda es la doctrina de la inspiración orgánica. Esta doctrina contradice cualquier idea


mecánica o de dictado de la inspiración, en que se suspende la humanidad del autor
humano. Enseña la plena humanidad de la Biblia, es decir, que las personalidades propias y
la libertad de los escritores humanos estaban operando.

También enseña la divinidad completa y detallada de la Biblia, es decir, es precisamente


Dios hablando sin distorsión humana. Dios hizo las bocas de estos hombres mediante la
providencia general y la gracia especial creando los instrumentos precisos que deseaba. La
inspiración orgánica presupone bíblicamente que la misma actividad puede ser y es tanto
divinamente ordenada como el resultado de la libre actividad humana, Así pues, la Biblia
puede ser el producto de seres humanos que escriben y actúan libremente, mientras que al
mismo tiempo es divinamente inspirada e inerrante.

De manera pues que, si alguien rechaza la autoría divina de las escrituras por enfatizar su
autoría humana, entonces tiene que rechazar la completa inerrancia de la biblia. Esto es un
error. Pero es algo que hoy en día muchos enseñan.

Nosotros podemos y debemos confiar que tenemos un libro inspirado por Dios, tanto en el
AT como en el NT, y que esa es la razón suficiente para ser autoridad.

14 de julio de 2022

Hace 8 días hablamos de la autoridad de las escrituras. Y para hoy lo continuaremos


haciendo bajo el párrafo 5. Aunque los párrafos 4 y 5 hablan de la autoridad, hay una
diferencia entre los dos. El párrafo 4 habla de la autoridad de la biblia en sí misma,
mientras que el párrafo 5 habla de nuestra confianza en la biblia, nuestro reconocimiento
personal de la autoridad de la biblia. Podemos entonces decir que el párrafo 4 tiene un
énfasis objetivo y el 5 un énfasis subjetivo.

Lo que el párrafo 5 quiere enseñarnos es ¿cómo el creyente llega a ser persuadido de que la
escritura es autoritativa? Y es que como ya se estableció en el párrafo anterior (4) La
autoridad de las Sagradas Escrituras no depende del testimonio de ningún hombre o
iglesia. Entonces, es otro el modo en que llega a ser autoridad para el creyente.

Leamos el párrafo 5

El testimonio de la iglesia de Dios puede movernos e inducirnos a tener una alta y


reverente estima por las Sagradas Escrituras1; y el carácter celestial del contenido, la
eficacia de la doctrina, la majestad del estilo, la armonía de todas las partes, el fin que se
propone alcanzar en todo su conjunto (que es el de dar toda la gloria a Dios), la
revelación completa que dan del único camino de salvación para el hombre, y muchas
otras excelencias incomparables y la totalidad de perfecciones de las mismas, son
argumentos por los cuales dan abundante evidencia de ser la Palabra de Dios2 . Sin
embargo, nuestra plena persuasión y certeza de su verdad infalible y su autoridad divina
provienen de la obra interna del Espíritu Santo, quien da testimonio en nuestros corazones
por medio de la Palabra y con ella.

El párrafo 5 estaba dirigido contra el catolicismo romano. Recordemos que la CF fue


producida para contrarrestar las falsas enseñanzas de la época, en especial la de la ICR, y
fue producida para diferenciarse e identificarse como comunidad de fe.

La ICR afirma que la Iglesia puede dar un testimonio infalible de la Biblia. Pero sabemos
que esto no es cierto debido a que la iglesia al ser compuesta por hombres falibles no puede
dar un testimonio infalible.

Por esa razón la CF reconoce que el testimonio de la iglesia SI tiene cierto valor, y al
mismo tiempo reconoce que son las excelencias divinas de la Escritura misma aplicadas por
el Espíritu Santo al corazón las que constituyen la autenticación genuina y eficaz de la
Escritura.

Entonces, en primer lugar, la CF nos dice que la iglesia si puede dar testimonio, pero en la
forma de movernos, en la forma de inducirnos a tener una alta estima por la escritura. La
iglesia pueda mostrar desde la misma escritura, que ella es palabra de Dios, que ella tiene
coherencia, que ella se ha cumplido en sus profecías, en todo lo que se ha escrito. Ese es el
testimonio que puede dar la iglesia, pero no puede hacerlo de otra forma diferente, es decir,
que la escritura es autoritativa por esta, por esta, y por esta razón, NO, sino solo desde la
misma escritura. Sin embargo, a pesar de todo esto, a pesar de la influencia de la iglesia,
ella no puede hacer que la persona crea en la autoridad de la biblia y se someta a ellas.

2 Timoteo 3:14-15 Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de


quién has aprendido; 15 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las
cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Pablo
motiva al joven Timoteo a persistir en lo que ha aprendido ¿de quién ha aprendido? De su
madre y su abuela, pero ellas a su vez aprendieron de una comunidad de fe, finalmente,
Timoteo ha aprendido de la iglesia, ella influenció, persuadió a Timoteo.
En Segundo lugar, la segunda frase del párrafo nos dice que las escrituras por sí mismas
manifiestan que son auténticas. (leamos la segunda frase). La Biblia afirma en todas partes
que las Escrituras nunca deben considerarse como letra muerta, sino como la Palabra viva
de Dios. Jeremías 23:28-29  aquí se compara la palabra de Dios con un sueño, y se dice
que es poderosa, que es fuego, que quebranta la piedra. Lucas 16:27-31  aquí se puede
ver que la palabra de Dios es la que tiene el poder de persuadir, no por señales, o por otra
cosa. Juan 6:63  la escritura es espíritu y vida. 1 Pedro 1:23-25  la escritura es la que
hace nacer de la simiente de Dios, tiene el poder de dar vida espiritual, el segundo o nuevo
nacimiento. Hebreos 4:12-13 aquí vemos lo que es la palabra y lo que hace en la
persona.

Como la Palabra viva de Dios, las Escrituras en y por sí mismas demandan ser creídas y
obliga todo el que las oye a creer. Hermanos, las Escrituras son suficientes para justificar la
confianza en su veracidad que se requiere para la fe salvadora. Deuteronomio 31:11-13 
las escrituras son útiles para que oigan, aprendan a temer, y aprendan a cumplir. Juan 20:31
 la escritura nos provee información para creer en Jesús como hijo de Dios, y para ser
nacidos de nuevo en su nombre. Gálatas 1:8-9  la escritura es el evangelio, es la buena
noticia de salvación, no hay otro.

Hermanos entonces vemos que, si no somos conscientes que las Escrituras son suficientes
para demandar fe en y por sí mismas, entonces afectamos gravemente la doctrina de la
suficiencia de las Escrituras, de que solo ellas es lo único que necesitamos para informarnos
para la salvación y el conocimiento de Dios.

En tercer lugar, vemos la tercera frase. (leerla) entonces aquí vemos el testimonio que da el
ES de las escrituras. Abordemos esta frase haciéndonos esta pregunta: Si las Escrituras se
autentican a sí mismas, ¿cuál es la necesidad del testimonio adicional del Espíritu Santo? Si
ellas demuestran ser autentica palabras de Dios y por lo tanto de autoridad, ¿Por qué
algunos no las creen o las niegan y rechazan? La respuesta clara es la necesidad del
testimonio del ES.

La causa o necesidad del testimonio es, en una palabra, el pecado. La depravación humana
pervierte el esfuerzo intelectual humano. Hace que los hombres detengan la verdad y, de
esa manera, los ciega a la luz de la revelación divina, romanos 1:21.
El testimonio del Espíritu Santo, por tanto, tiene por naturaleza la remoción de esa
naturaleza pecaminosa que ciega a los hombres a la luz de la revelación divina. El
testimonio es, pues, una operación ética (conducta humana), por decirlo así. No consiste en
alguna nueva revelación además de la contenida en las Escrituras.

La realidad del testimonio del Espíritu puede demostrarse mediante dos líneas de
argumentación bíblica. En primer lugar, la Biblia enseña que, si alguien piensa
correctamente, debe estar actuando correctamente o éticamente (salmo 111:10). La fe, el
temor, el hacer la voluntad de Dios, el arrepentimiento: todas estas cosas son producidas en
los pecadores por la obra regeneradora del Espíritu Santo.

En segundo lugar, hay un buen número de pasajes que afirman que es el Espíritu Santo
quien nos capacita para ver y entender la verdad espiritual 1 corintios 2:14-16. Estos
pasajes dejan claro que es el Espíritu Santo quien crea fe en las Escrituras.

Como conclusión es importante notar que todo el esfuerzo para descubrir algún testimonio
externo de la Biblia es erróneo, ya sea que ese testimonio se busque en una iglesia infalible
o en un erudito bíblico o un experto histórico. Esto es así por varias razones. En primer
lugar, puesto que Dios ha hablado y la Biblia misma es la Palabra viva de Dios, el más
elevado testimonio posible es el testimonio que da la Biblia de sí misma. En segundo lugar,
suponer que sea necesaria una revelación divina subsiguiente para atestiguar la revelación
bíblica requeriría que esta verificación divina subsiguiente fuera atestiguada por una tercera
revelación y así infinitamente. Si la Biblia, como la voz de Dios desde el cielo, no se
atestigua a sí misma, ninguna cantidad de voces desde el cielo será jamás suficiente para
atestiguarla. En tercer lugar, la entidad a la que se apela para atestiguar la Biblia tiende a
reemplazar la Biblia como nuestra autoridad práctica. En otras palabras, aquello a lo que se
apela para atestiguar la Biblia tiende a convertirse en el verdadero canon de los que apelan
a ello, en detrimento de la Biblia. Esta observación se ve claramente en la apelación del
ICR a su propia autoridad eclesiástica. La historia de esa iglesia (ICR) muestra que su
apelación a la Iglesia para atestiguar la autoridad de la Biblia afecto, socavó la autoridad de
la biblia.

Esto es así porque en cada una de tales apelaciones la Biblia deja de ser la norma absoluta.
En cada una, la Biblia ha de ser atestiguada mediante una apelación a una norma o canon
más elevados. De esta manera, cada una de las respuestas propuestas es prácticamente una
negación de la autoridad absoluta y divina de la Biblia. Por tanto, si bien es útil distinguir
lógicamente entre la autoridad de la Biblia para con nosotros y su autoridad en sí misma,
debe recordarse siempre que en ambos casos deriva su autoridad de una sola causa: es la
Palabra de Dios.

21 de julio

La suficiencia de las escrituras

Con suficiencia de las escrituras nos responderemos a la pregunta ¿Debemos buscar otras
palabras de Dios además de las que tenemos en la Biblia?

El párrafo 6 de la confesión de fe nos dice al respecto:

Todo el consejo de Dios tocante a todas las cosas necesarias para su propia gloria, la
salvación del hombre, la fe y la vida, está expresamente expuesto o necesariamente
contenido en las Sagradas Escrituras; a las cuales nada, en ningún momento, ha de
añadirse, ni por nueva revelación del Espíritu ni por las tradiciones de los hombres1. Sin
embargo, reconocemos que la iluminación interna del Espíritu de Dios es necesaria para
un entendimiento salvador de las cosas reveladas en la Palabra,2 y que hay algunas
circunstancias tocantes a la adoración de Dios y al gobierno de la Iglesia, comunes a las
acciones y sociedades humanas, que han de determinarse conforme a la luz de la
naturaleza y de la prudencia cristiana, según las normas generales de la Palabra, que han
de guardarse siempre.

Grudem en su teología sistemática define como que la Biblia contiene todas las palabras
de Dios que él quería que su pueblo tuviera en cada etapa de la historia de la redención, y
que ahora contiene todo lo que necesitamos que Dios nos diga para salvación, para
confiar en él perfectamente y para obedecerle perfectamente

Esta definición hace énfasis en que es solo en la Biblia donde debemos buscar las palabras
de Dios para nosotros. También nos recuerda que Dios considera que lo que nos ha dicho
en la Biblia es suficiente para nosotros.
La suficiencia de las escrituras no implica su omnisuficiencia o suficiencia en todo. La
suficiencia se define siempre con refiriéndose a algún propósito. La primera pregunta en
esta cuestión entonces debe ser ¿Suficiente para qué? debe quedar claro que la suficiencia
de la Escritura está definida muy cuidadosamente. La Biblia no es todo suficiente para todo
propósito que nos podamos imaginar. Las Escrituras, por ejemplo, no son suficientes como
libro de texto de matemáticas, biología o español. La suficiencia de las Escrituras no
significa que sean todo lo que necesitamos con el propósito de aprender geometría o
álgebra.

¿Cuál es, entonces, el propósito con que las Escrituras son suficientes? La suficiencia de las
Escrituras no es ni más ni menos que su suficiencia para conseguir el propósito de la
revelación de la redención para el hombre. Por eso la Confesión dice: todas las cosas
necesarias para su propia gloria, la salvación del hombre, la fe y la vida.

Las Escrituras no son un libro de texto de biología, pero son suficientes para proveer las
perspectivas éticas y religiosas básicas para Cualquier ciencia de la biología; La Biblia no
es suficiente para todo lo que hacemos, pero sí habla a todo lo que hacemos suficientemente
en cuanto a la gloria de Dios, el camino de la salvación y lo que debemos hacer.

Podemos tomar como ejemplo un día cualquiera en la vida de un universitario. Su Biblia, es


insuficiente como libro de texto para sus clases de cálculo, biología e inglés; pero sí le
muestra el camino del bien hacer a lo largo del día. Le enseña a orar y a leer su Biblia por la
mañana, a ser diligente y juicioso en sus estudios, y a desviar los ojos cuando una chica
vestida sensualmente anda por la biblioteca cuando él está estudiando. La Escritura le
provee de un testimonio infalible de la creación y la historia redentora. Este testimonio
establece ciertos límites que le guían en su estudio de biología e historia. Cualquier teoría
de historia o biología que contradice las declaraciones históricas de la Biblia él justamente
la rechaza. Este, entonces, es un ejemplo de que las escrituras no son suficientes para toda
área del conocimiento, pero son suficientes para darnos principios para la gloria de Dios y
lo que debemos hacer.

De otra parte, la suficiencia de la Biblia significa su sola suficiencia, es decir, es suficiente


para alcanzar el propósito de la revelación redentora sin ser suplementada con nuevas
revelaciones (pretendidas ·por algunos anabautistas y otros) o por las tradiciones de los
hombres (como esas tradiciones extrabíblicas pretendidas por la ICR). La ICR en su
catecismo dice: La revelación está contenida en la sagrada escritura y en la tradición de
los apóstoles. Una parte de la verdad revelada fue escrita, se llama sagrada escritura, otra
parte no fue escrita sino transmitida verbalmente y se llama tradición. En otras palabras, la
fuente de la revelación de la revelación de Dios para la ICR, la información para la
salvación, para le fe, para la conducta, está en dos fuentes: la biblia + la tradición. Con la
tradición hacen referencia no ala que siempre han creído, sino a la información que no está
escrita, sino que ellos la saben y se ha transmitido verbalmente. El problema es que no hay
ningún texto donde ellos digan que tal es esa revelación oral.

Pero sabemos por la historia que, debido al declive y a la corrupción de la iglesia ICR,
debido a la venta de indulgencias del siglo XVI, Dios permitió que hombres se levantaran
en contra de la manipulación de las escrituras, y declararon que solo la escritura y nada más
que ella es suficiente en cuestiones de fe y conducta. Por eso el principio de sola escritura.

¿Qué es la venta de las indulgencias? Indulgencia es un perdón de los pecados que sólo
puede ser otorgado por la Iglesia. En tiempos pasados, la Iglesia vendía Indulgencias. Eso
permitía a los ricos cometer pecados y comprarse una entrada al cielo.

Fue la venta de indulgencias para financiar la construcción de la Basílica de San Pedro en


Roma, lo que dio inicio a la Reforma protestante. De allí fue que nació el protestantismo,
no porque el cristianismo genuino no existiera, porque ya existía la palabra de Dios
inerrante, sino porque se volvió a la fuente real de la iglesia. La sola escritura.

Veamos 2 Timoteo 3:15-17 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las
cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. 16 Toda la
Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para
instruir en justicia, 17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado
para toda buena obra.

Hay tres declaraciones en este pasaje que son importantes. La primera declaración es del
versículo 15 las Sagradas escrituras, las cuales te pueden dar la sabiduría que lleva a la
salvación. Entonces la escritura asegura que ellas contienen toda la sabiduría necesaria para
la salvación. La segunda declaración está en el versículo 16 Toda la Escritura es útil para
enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia. La escritura es útil,
beneficiosa, provechosa. Esta utilidad implica que las Escrituras constituyen un manual
suficiente para el joven pastor Timoteo; Este enfrentaba un sinnúmero de necesidades en
Éfeso que demandaba muchas clases de ministerio. Con frecuencia debe de haberse
preguntado: ¿Cómo puedo hacer frente a estos múltiples retos?' La declaración de Pablo
viene a decir que las Escrituras pueden equipar a Timoteo para cada ministerio que se le
requiera ejercer. La tercera declaración está en el versículo 17 a fin de que el hombre de
Dios sea perfecto, enteramente preparado· para toda buena obra. Esto nos asegura que las
Escrituras no son moderadamente útiles para el hombre de Dios, sino plenamente
suficientes para todas sus necesidades como hombre de Dios.

Muchos otros textos de la Escritura dan testimonio de la suficiencia de la revelación


redentora escriturada. Deuteronomio 4:2 No añadiréis a la palabra que yo os mando, ni
disminuiréis de ella, para que guardéis los mandamientos de Jehová vuestro Dios que yo
os ordeno. Solo que proviene de la boca de Dios debe ser suficiente, no debemos añadir.
Salmos 19:7 La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová
es fiel, que hace sabio al sencillo. La escritura es suficiente para dar sabiduría al sencillo.

Continuando con la frase #2 encontramos la palabra, sin embargo, es decir, a pesar de lo


que se ha dicho. La CF esta entonces a punto de dar una aclaración de que es necesaria la
iluminación del Espíritu Santo.

En ese sentido debemos decir que:

La suficiencia de la Escritura no niega la necesidad de la diligencia del creyente. Esta


doctrina no es excusa para la indolencia mental, para la pereza intelectual. El creyente debe
ser responsable de usar sus facultades mentales y racionales para escudriñar, meditar,
estudiar, razonar, y apropiarse de las escrituras.

La suficiencia de la Escritura no niega la necesidad de la enseñanza del Espíritu. Esta


doctrina no es excusa para el orgullo intelectual. Si algún hermano tiene un mayor
conocimiento, una mejor comprensión, o una mejor vivencia del cristianismo, no debe ser
motivo de orgullo, pues todo es debido al Espíritu. Las Escrituras no son suficientes o
claras para el que está carente del Espíritu. La Confesión declara: Sin embargo,
reconocemos que la iluminación interna del Espíritu de Dios es necesaria para un
entendimiento salvador de aquellas cosas que están reveladas en la Palabra. Leamos 1
corintios 2:9-14 Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han
subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman. 10
Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña,
aun lo profundo de Dios. 11 Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino
el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el
Espíritu de Dios. 12 y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu
que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido, 13 lo cual también
hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el
Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual. 14 Pero el hombre natural no percibe
las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender,
porque se han de discernir espiritualmente. El hombre natural sin la acción del Espíritu
Santo pueda que entienda intelectualmente la información, pero no aceptarla, depositar su
confianza y entenderla en el sentido de que una verdad que se viva, solamente por la acción
del Espíritu Santo.

La suficiencia de la Escritura no niega la necesidad y la aplicación del sentido común del


creyente. Cuando debe tomar decisiones en aspectos que no están señalados
específicamente en las escrituras. La biblia es suficiente para salvación, para saber que
creer, y para saber cómo vivir, pero la suficiencia de las escrituras no contradice que la
persona redimida con su sentido común tome decisiones en armonía con los principios y
mandatos bíblicos, aunque la biblia no lo defina claramente. La Confesión da esto por
supuesto cuando en 1:6 reconoce que hay algunas circunstancias tocantes a la adoración
de Dios y al gobierno de la Iglesia, comunes a las acciones y sociedades humanas, que han
de determinarse conforme a la luz de la naturaleza y de la prudencia cristiana, según las
normas generales de la Palabra, que han de guardarse siempre.

Por ejemplo, en la biblia no dice el lugar ni la hora en que debe celebrarse el culto público
de adoración. La biblia nos dice que debemos guardar el día del Señor, y por eso los
cristianos nos reunimos el domingo que es el día del Señor. Pero la biblia no nos enseña la
hora ni el lugar, y eso no quiere decir que no sea suficiente, nos da los principios generales,
y la suficiencia no niega el sentido común y la prudencia en la cual podamos tomar
decisiones. En conclusión, el día de la adoración fue ordenado por Dios, pero las
circunstancias del lugar y la hora se les dejan a los hombres mientras no vaya en contra de
ningún principio y norma general de la palabra.

1 corintios 14:40 pero hágase todo decentemente y con orden. Entonces vemos aquí un
principio que llama al orden, ala decencia, a la prudencia que deben caracterizar a los hijos
de Dios.

28 de julio de 2022

La claridad de las escrituras

Es común escuchar a algunas personas que dicen que no leen las escrituras porque no las
entienden, otros dicen que solo la iglesia tiene la capacidad para decir cuál es su
interpretación, otros erradamente dicen que si las leen entonces los llevará a la locura.

El día de hoy hablaremos de la claridad de las escrituras. Leamos el párrafo:

No todas las cosas contenidas en las Escrituras son igualmente claras en sí mismas1 ni son
igualmente claras para todos; 2 sin embargo, las cosas que son necesarias saber, creer y
guardar para salvación, se proponen y exponen tan claramente en uno u otro lugar de las
Escrituras que no sólo los eruditos, sino los que no lo son, pueden adquirir un
entendimiento suficiente de tales cosas por el uso adecuado de los medios ordinarios.

Veamos un poco de historia para comprender mejor que sucedía cuando fue escrita esta
confesión de fe. Remontémonos al siglo XVI, en la reforma protestante, en el suceso donde
Martín Lutero fue citado a la Dieta de worms (una dieta era una reunión del emperador de
Alemania, y los príncipes de las diferentes zonas del imperio en esa época). Lutero fue
citado debido a que fue acusado de herejía debido a las enseñanzas que daba acerca de los
señalamientos de las malas enseñanzas de la ICR. Allí en la reunión, Lutero, frente al
emperador y los representantes del papado, después de ser acusado de error y ser
coaccionado a retractarse de lo que enseñaba y había escrito, después de eso, dice lo
siguiente: sino se me convence mediante testimonios de las escrituras y claros argumentos
de la razón, porque no le creo ni al papa ni a los concilios, ya que está demostrado que
frecuentemente han errado, contradiciéndose a sí mismos, por lo textos de las sagradas
escrituras que he citado, estoy sometido a mi conciencia y ligado a la palabra de Dios, por
eso no puedo ni quiero retractarme de nada, porque hacer algo en contra de la conciencia
no es seguro ni saludable, Dios me ayude.

En esta declaración de Lutero vemos lo que se conoce como el derecho de la interpretación


privada, es decir, que el creyente puede ir a las escrituras e interpretarlas, y que no es algo
de potestad del magisterio de la iglesia, porque la ICR decía y declaraba que era lo que
estaba enseñando y diciendo la biblia, es decir le daba su propia interpretación, y nadie
podía por sí mismo hacerlo.

Por eso, cuando Lutero dice: sino se me convence mediante testimonio de las escrituras y
claros argumentos de la razón, hace referencia a que no aceptaba testimonio de los papas y
concilios de la ICR porque sabía que ellos se habían contradicho entre sí en varias
ocasiones. Por eso era consciente que esa no era la fuente de autoridad para él. Decía: sino
me muestran por las escrituras yo no me puedo retractar, no puedo ir en contra de mi
conciencia, no acepto la autoridad de un papa o del magisterio de la iglesia, pues entonces
no me voy a retractar, no lo voy a hacer, que Dios me ayude. (él sabía que esto le
significaba su acta de ejecución).

En el concilio de Trento (antireforma 1545) la ICR declaró: decreta además con el fin de
contener los ingenios insolentes que ninguno fiado en su propia sabiduría se atreva a
interpretar la sagrada escritura en cosas pertenecientes a la fe, y a las costumbres,
violentando así la sagrada escritura para apoyar sus dictámenes, contra el sentido que le
ha dado y da la santa madre a la que privativamente toca determinar el verdadero sentido
e interpretación de los escritos sagrados.

Lo que la ICR está haciendo es evitando que los creyentes vayan a las escrituras para
creerlas, para entenderlas, para vivirlas. Lo que les proponen es: nosotros les vamos a decir
que es lo que deben creer, porque ustedes no tienen la capacidad de entender lo que dicen
las escrituras. En otras palabras, la ICR se reservaba para sí, el derecho exclusivo de la
auténtica interpretación de las escrituras.
En un tiempo no podían tener ni la biblia en sus casas, porque la ICR enseñaba que no
puede, no debe, y no está capacitado para leer la escritura, interpretarla y entenderla, eso le
corresponde solo a la estructura jerárquica de la iglesia.

Más adelante la ICR declaró lo siguiente: no se puede contradecir el unánime


consentimiento de los padres. ¿Que querían decir? La patrística es toda la enseñanza que
dieron los hombres que aprendieron de los apóstoles y que lideraban las iglesias en el
siglo II, III y IV. Pero lo que enseñaban no era autoritativo, no es inspirado, ellos mismos
lo decían, y algunas veces se contradecían entre sí. Así que, ellos no solamente dicen que
la gente no puede ir a la escritura e interpretarla, sino que cualquier cosa que se
contradiga contra lo que dice la patrística tampoco es permitido. Pero eso no es correcto,
porque los padres de la iglesia se equivocaron algunas veces. Sus enseñanzas no eran
autoritativas como la escritura, eran enseñanzas sabías, con carácter pastoral, pero no
eran inspirados.

De este punto es que surge un catecismo de la ICR en el siglo XVI (catecismo es


documentos que se hacen en forma de preguntas y respuestas para enseñar) que dice:
¿además del credo y los artículos creéis otras cosas? El catecismo responde: si, todo lo que
cree y enseña la santa madre iglesia católica, apostólica y romana. Entonces nuevamente
pregunta el catecismo ¿Qué cosas son esas? Nuevamente responde el catecismo: eso no me
lo pregunte a mí que soy un ignorante. Doctores tiene la santa madre iglesia que sabrán
responder.

Ósea en ese mismo catecismo del siglo XVI está claro lo que la ICR afirma, que el creyente
no puede interpretar las escrituras, porque las va a torcer, las va a malinterpretar, porque las
escrituras no son claras. Lo que es claro es lo que nosotros le enseñamos lo que las
escrituras dicen.

El catecismo de la ICR de 1992 en su numeral 85 dice: el oficio de interpretar


auténticamente la palabra de Dios, oral o escrita, ha sido encomendado solo al magisterio
vivo de la iglesia, el cual lo ejercitan en el nombre de Jesucristo, es decir, los obispos en
comunión con el sucesor de Pedro, el obispo de Roma.
El catecismo de Baltimore en la pregunta 1328 dice: ¿cómo podemos saber el verdadero
significado de las doctrinas contenidas en la biblia? Rta: podemos entender el verdadero
significado por medio de la ICR que ha sido autorizada por Jesucristo para explicar sus
doctrinas, la cual es preservada del error en sus enseñanzas por medio de la asistencia
especial por medio del Espíritu Santo. Entonces esto implica que Roma quiere que
confiemos en la palabra clara del hombre en lugar de la oscura palabra de Dios.

Entonces lo que vemos en el concilio de Trento es una reacción a lo que conocemos como
el derecho de la interpretación privada de las escrituras. ¿Qué es el derecho de la
interpretación privada? Que todo creyente, nacido de nuevo y con la presencia del Espíritu
Santo, puede ir a las escrituras y entenderlas si lo hace de una manera juiciosa, disciplinada
y con unos principios de interpretación que no tuerzan los textos.

Ahora esa declaración que dio Lutero, y que hablamos al inicio, dio lugar a dos cosas,
primero al derecho de la interpretación privada; y segundo, que si las personas deben ir a
las escrituras para leerlas y entenderlas ¿cómo lo van a hacer, sino tienen las biblias en sus
idiomas? Entonces el segundo resultado fue la traducción a la lengua vernácula, es decir, a
la lengua de los pueblos.

Y esto fue inmediatamente lo que hizo Lutero después de la dieta de Worms la traducción
de la biblia al alemán.

Pero hablando del derecho de interpretación privada, si leemos 2 Pedro 1:20 entendiendo
primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada. Entonces,
parece haber una contradicción ¿el derecho de interpretación privada no es contrario a este
versículo? NO. Este texto (2 pedro) no está hablando sobre que la biblia se pueda leer y se
pueda entender, sino que está hablando lo que dice el versículo siguiente porque nunca la
profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombre de Dios hablaron
siendo inspirados por el Espíritu Santo. Así que, cuando está hablando el verso 20 de que
ninguna profecía es de interpretación privada, no está haciendo referencia a leer y luego
entender y extraer el significado. No, sino que está hablando en el sentido de inspiración.
Nunca los profetas de Dios hablaron por cuenta propia, sino que hablaron siendo inspirados
por el Espíritu Santo. A eso se refiere la interpretación privada, que ninguna profecía la dio
el profeta porque quiso, sino porque inspirado por el Espíritu Santo, guiado por él, le
impulso a escribir lo que Dios le estaba revelando por medio del Espíritu Santo.

Entonces después de ver este trasfondo histórico, lo primero que vemos en el párrafo es lo
que no afirma la claridad de las escrituras.

Y ¿qué afirma la claridad de las escrituras? Que nosotros los creyentes con la presencia del
Espíritu Santo, de manera disciplinada, y ejerciendo unos principios de interpretación
bíblica correctos, podemos ir a la escritura y podemos entenderla.

Lo que no afirma es que no todas las cosas contenidas en las escrituras son igualmente
claras en sí mismas ni son igualmente claras para todos. Este párrafo enseña la claridad de
las escrituras, la perspicuidad de las escrituras, que la biblia puede ser entendida, que cada
creyente puede ir a ella disciplinadamente, utilizando los principios correctos de
interpretación, y la puede entender, además no solo la puede, sino que debe hacerlo. Sin
embargo, lo que NO afirma la claridad de las escrituras es que todo mundo la pueda
entender igual, y que todo lo que está en las escrituras sea de fácil comprensión. ¿eso es una
contradicción? NO. Las escrituras son claras, pero no todo mundo las entiende tan
fácilmente, y esto se debe, sobre todo, no a las escrituras, sino a la persona, a su condición
de pecado, lo que le lleva a una limitación en la comprensión intelectual debido a nuestra
condición caída, que hará que muchas veces, cuando se vaya a las escrituras, habrá
dificultad para poder entenderla, incluso algunas personas la tuercen.

La claridad de las escrituras tampoco afirma que absolutamente todo lo que está en la biblia
sea de una comprensión fácil. NO. En la escritura encontramos que un niño puede entender
la verdad de la esencia del evangelio, pero también hay cosas tan profundas que llevan a
una persona a dedicar su vida entera para poder extraer algo de la profundidad de lo que allí
está escrito.

2 pedro 3:15-16 Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación;
como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os
ha escrito, 16 casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales
hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como
también las otras Escrituras, para su propia perdición. Dice difíciles de entender, pero no
imposibles de entender. La misma biblia afirma que ella es clara, que es entendible. Sin
embargo, no todo lo que está en ella es igualmente entendible, sino que requiere un trabajo
aún más profundo. Y si se tiene una actitud de indisciplina, de menosprecio, sin formación,
y de arrogancia, cuando se va a las escrituras, pues va a suceder lo que hacían estos
hombres, tuercen las enseñanzas de Pablo que no son fáciles de entender y tuercen todas las
demás escrituras.

Entonces debe quedarnos claro, que en el párrafo cuando menciona lo que NO es la


claridad de las escrituras. La claridad de las escrituras no quiere decir que alguien llego a la
iglesia, creyó en el Señor Jesucristo, leyó la biblia y ya la entendió toda a la perfección, eso
no afirma la claridad de las escrituras. Lo que si afirma es que, aunque hay cosas que
requieren mayor diligencia, cuando se tuerce la interpretación de ellas, no se debe a que la
biblia no sea clara, sino que se debe a la responsabilidad del hombre, a su condición
pecaminosa.

El hecho que Dios ha hablado claramente de cosas difíciles, no las hace fáciles. Hay textos
que requieren estudio, meditarlos profundamente, ver el resto del contexto, para entonces
poder hacer una interpretación adecuada, correcta.

Ahora el principio de interpretación privada no significa que el pueblo de Dios tiene el


derecho de interpretar la biblia como se le antoje. Hermanos hay algo muy peligroso
(palabra rhema) que algunos hacen en las iglesias, al leer cualquier versículo lo interpretan
basándose en lo que sintió cuando lo leyó, lo que sintió lo que le dijo a sí mismo, pero sin
tener en cuenta el propósito por el que fue escrito, el sentido con el que fue escrito, que
realmente está diciendo el texto. Así prácticamente, se puede hacer que la biblia diga lo que
quiera, sin tener en cuenta el propósito con el que fue escrito.

Y entonces, este no es el derecho de interpretación privada. Nosotros tenemos el derecho y


el deber de ir a las escrituras y entenderlas, pero no torcerlas, ni hacer una interpretación
acomodada. El derecho de interpretar la escritura va junto con la responsabilidad para
interpretarla correctamente. ¿La biblia es clara? SI. ¿La biblia es clara para el creyente? SI.
Y tenemos el derecho de ir a ella, pero requiere estudio, dedicación, formación. Entender
que debemos prepararnos, porque hay cosas que se entienden a simple lectura, pero otras
que requieren mayor profundización de nuestra parte. Aunque tenemos ese derecho, ese
derecho no significa un derecho a torcerla y a decir que las escrituras digan lo que ella
realmente no dice.

La ICR afirmó y dijo: mire todo lo que ha pasado con el protestantismo, unos dicen una
cosa, otros dicen otra cosa, y eso generó confusión, por eso estábamos en lo cierto de
decir que nosotros debíamos decir lo que se debe creer y con eso haya unanimidad.

Ahora, ese derecho de interpretación privada si se usa mal, como cualquier derecho de
cualquier situación de la vida si se usa mal, pues entonces termina en una degradación. Lo
que no vio la ICR es que cuando ellos interpretaban mal la escritura, básicamente
institucionalizaron la mentira.

Sin embargo, las cosas que son necesarias saber, creer y guardar para salvación, se
proponen y exponen tan claramente en uno u otro lugar de las Escrituras que no sólo los
eruditos, sino los que no lo son, pueden adquirir un entendimiento suficiente de tales cosas
por el uso adecuado de los medios ordinarios.

La interpretación de las escrituras, el poder leer y entender que es lo que dice la escritura no
es un derecho exclusivo de unos pocos eruditos. Mucho menos un derecho que este
limitado al magisterio de la ICR, como ellos lo afirman: ud no puede ir a las escrituras, ud
no las va a entender, eso solo es potestad nuestra.

Pero tampoco debe ser entendido por los cristianos de que es una tarea solo de los eruditos.
Ir a las escrituras, leerlas, entenderlas, e interpretarlas no solo es un derecho, sino un deber
de todos y cada uno. Las escrituras son claras y las podemos entender, podemos tener un
entendimiento suficiente de lo necesario para la salvación, pero por el uso adecuado de los
medios ordinarios. ¿Qué significa por el uso adecuado de los medios ordinarios? No
significa que solo por tener la buena intención de entenderla lo voy a lograr, no significa
que por tenerla debajo del brazo entonces su sabiduría me va a ser transmitida. La biblia
cerrada en la casa, la biblia usada solo cuando viene al culto, no le garantiza que va a
entender las escrituras. Para poder entenderlas se debe leerlas, meditarlas, escudriñarlas. Y
orar para que el Espíritu ilumine la mente. Entonces, requiere estudio, investigación,
disciplina. Porque ninguna cosa que queramos aprender, cualquiera que sea, se puede lograr
son disciplina, constancia, perseverancia. Y por supuesto, mucho menos la palabra de Dios.
Entonces, aunque las escrituras son claras, requiere esfuerzo del creyente para poder
interpretarlas correctamente. Esto no es potestad solo de eruditos, no es potestad del
magisterio de la ICR, es un derecho que todos tenemos. Las escrituras son claras, pero
debemos interpretarlas correctamente con esfuerzo.

“Quienes se dedican a estudiar con diligencia y con estabilidad, no solo cuando se animan
repentinamente, sabrán la verdad aun de la inescrutable palabra de Dios”.

Lastimosamente en las iglesias hay muchos que, conociendo que las escrituras son claras,
no dedican tiempo, constancia, disciplina, lectura, oración para su correcta interpretación.

2 Timoteo 3:14-15 Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de


quién has aprendido; 15 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las
cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Hermanos
las escrituras son tan claras que aun un niño puede entender la verdad del evangelio.

Las escrituras son claras, un niño las puede entender, pero por el uso de los medios
ordinarios de la escritura y con la asistencia del Espíritu Santo.

Salmo 19:7-8 La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová
es fiel, que hace sabio al sencillo.8 Los mandamientos de Jehová son rectos, que alegran el
corazón. Sencillo es alguien que es fácilmente influenciado y que se equivoca fácilmente,
así que la escritura es tan clara que aun puede hacer sabio a una persona con esas
condiciones, y que por medio del Espíritu Santo y la palabra va transformando.

Proverbios 6:22-23 Te guiarán cuando andes; cuando duermas te guardarán; Hablarán


contigo cuando despiertes. 23 porque el mandamiento es lámpara, y la enseñanza es luz, Y
camino de vida las reprensiones que te instruyen. Las escrituras son tan claras que nos
permite entender cómo es que nosotros debemos vivir nuestra vida cristiana. Sino fueran
claras entonces tendríamos que acudir a otras normas impuestas por otros. Entonces al ir a
las escrituras podemos saber cómo debemos actuar, hablar, sentir, decidir, en el caminar
cristiano.

Deuteronomio 30:11-14 Porque este mandamiento que yo te ordeno hoy no es demasiado


difícil para ti, ni está lejos. 12 No está en el cielo, para que digas: ¿Quién subirá por
nosotros al cielo, y nos lo traerá y nos lo hará oír para que lo cumplamos? 13 Ni está al
otro lado del mar, para que digas: ¿Quién pasará por nosotros el mar, para que nos lo
traiga y nos lo haga oír, a fin de que lo cumplamos? 14 Porque muy cerca de ti está la
palabra, en tu boca y en tu corazón, para que la cumplas. La escritura es clara, la escritura
se puede entender, no tenemos excusa de ninguna manera. Hay cosas claras entendibles
como para un niño, y hay cosas claras y entendibles pero que requieren dedicación y
estudio.

Por último, la claridad de las escrituras no niega lo que el Señor mismo ha establecido para
su iglesia, el ministerio de pastores y maestros, que son parte de los medios ordinarios para
que nosotros podamos entender con claridad las escrituras. Pero esos maestros no se deben
tomar el derecho de interpretación y los demás no. Son maestros y pastores que con una
correcta interpretación de las escrituras ayudan al pueblo de Dios a su comprensión,
dándole principios de interpretación para que ellos mismos también lo puedan hacer. Esto
es importante tenerlo en cuenta, porque hoy en día se menosprecian los dones que Dios da a
la iglesia (pastores y maestros)

04 agosto de 2022

Disponibilidad de las escrituras

Con disponibilidad se hace referencia a que las escrituras puedan estar al alcance, en cuanto
al idioma se refiere, a todas las personas para que puedan leerlas, estudiarlas, meditarlas y
escudriñarlas, entenderlas, creerlas, y vivirlas.

El Antiguo Testamento en hebreo (que era el idioma del pueblo de Dios en la


antigüedad),1 y el Nuevo Testamento en griego (que en el tiempo en que fue escrito era el
idioma más generalmente conocido entre las naciones), siendo inspirados inmediatamente
por Dios y mantenidos puros a lo largo de todos los tiempos por su especial cuidado y
providencia, son, por lo tanto, auténticos;2 de tal forma que, en toda controversia
religiosa, la iglesia debe recurrir a ellos como autoridad determinante.3 Pero debido a
que estos idiomas originales no son conocidos por todo el pueblo de Dios, que tiene
derecho a las Escrituras e interés en las mismas, y se le manda leerlas16 y escudriñarlas 4
en el temor de Dios, han de traducirse a la lengua común de toda nación a la que sean
llevadas,5 para que morando abundantemente la Palabra de Dios en todos, puedan
adorarle de manera aceptable y para que, por la paciencia y consolación de las
Escrituras, tengan esperanza.6

Hace 8 días cuando hablábamos de la claridad de las escrituras, fuimos un poco atrás en la
historia en el siglo XVI y meditábamos en lo que le aconteció a Martín Lutero, el monje
alemán, al ser citado a la dieta de Worms para que se retractase de sus enseñanzas acerca de
que la iglesia católica estaba en ciertos errores doctrinales.

Precisamente después de salir de esta reunión, entendiendo que estaba condenado a muerte
por no haberse retractado, pues estaba convencido por las mismas escrituras de la verdad
que proclamaba, después de la reunión, empezó a traducir la biblia al alemán.

Hermanos, el pueblo puede leer las escrituras e interpretarlas, tal como lo vimos hace 8
días, porque las escrituras son claras. Pero ¿Cómo puede el pueblo acceder a ellas si están
en un idioma que nadie entiende?

Entonces la labor que emprendió Lutero después de salir de la dieta de Worms, siendo
ayudado por un príncipe para esconderse para que no lo mataran, fue muy importante.
¿Cuál labor? Traducir la escritura al idioma alemán, al idioma que entendiera el pueblo.

La historia nos dice que al salir de la dieta de Worms en la que comparece en abril de 1521
ante autoridades católicas y el emperador Carlos V, Lutero es secuestrado por enviados del
príncipe Federico el sabio protector de Lutero y conducido al castillo Wartburg. En el lugar,
a partir del 4 de mayo Lutero emprende la tarea de traducir el NT al alemán y lo hace a
partir del texto griego en agotadoras 10 semanas.

Mas adelante termina la traducción del AT con ayuda de Melanchton y con otros
compañeros, y después se imprime la biblia con el invento de Gutenberg (imprenta) para
que la gente la pudiera tener en el lenguaje que pudiera entender.

¿Cuál fue la reacción de los papistas ante la traducción de la biblia en la lengua del pueblo
que fue impulsado por los reformadores, no solo al alemán, sino que se empezaron
proyectos de traducción a todos los idiomas conocidos?
La reacción fue que en el concilio de Trento (antireforma) en la cuarta cesión escribieron lo
siguiente: Notando por experiencia que si los sagrados libros se permiten leer a todos en
lengua vulgar (es decir del pueblo) sin diferencia alguna por temeridad de los hombres, se
sigue de ahí, más daño que provecho. En otras palabras, critican directamente la traducción
de la biblia a la lengua vernácula, a la lengua de los diferentes pueblos.

A partir de allí la critica a la traducción, el señalamiento a la traducción y la persecución de


aquellos que traducían la biblia al pueblo fue enorme. Hombres fueron quemados, incluso
hombres traductores que no alcanzaron a empezar como John Wycliff, que después de
tiempo de muerto sus huesos fueron sacados, quemados y tirados al rio, ¿por qué? Por
traducir la biblia al lenguaje que pudiese entender las personas.

Esto es muy importante, porque hoy en día uno va a la librería cristiana y compra la biblia
en el idioma de uno, y nos parece de lo más normal.

Hermanos, este legado que nos ha sido dado debemos apreciarlo y defenderlo. Es triste que
el pueblo cristiano de hoy no entienda que es la reforma, que fue la reforma protestante, y
la importancia para que cada uno tenga la biblia en su idioma y la pueda leer. Gente murió
por ello, gente derramó su sangre por ello.

Un hombre de la ICR llamado Alfonso de Castro, que fue enviado por los reyes católicos al
concilio de Trento, fue un hombre muy importante. Este hombre en su libro tratado de las
herejías escrito en 1539 escribió lo siguiente: hay que alabar con toda justicia el edicto de
los esclarecidos y católicos reyes de España por el que prohibieron bajo severísimas penas
que nadie tradujera los libros sagrados a la lengua vulgar o que nadie retuviera lo traducido
por otro con cualquier autorización.

En Trento, entonces, no solo se condenó la traducción de la biblia a la lengua vernácula,


sino que hicieron algo más allá, no solo prohibieron que estuviera traducida y que estuviera
en un lenguaje que todos comprendieran, sino que también establecieron lo siguiente: que
esta misma, antigua y vulgata edición…

(Ellos prohíben traducir la biblia en sus idiomas originales y traducirla al idioma del
pueblo, pero aquí en esta declaración vamos a ver que una traducción, que es la vulgata
latina, que es una traducción al latín, la establecen como oficial, como autentica, como que
solamente esa es la única traducción valedera, y en las que la controversias doctrinales se
puede acudir, y eso es lo que hacen con esta traducción).

… que esta aprobada por el largo uso de tantos siglos en la iglesia misma, sea tenida por
autentica en las públicas lecciones, disputaciones, predicaciones y exposiciones y que nadie
por cual pretexto sea osado o presuma rechazarla.

Entonces, en Trento no solo se condena la traducción de la biblia a la lengua vernácula ósea


que es propio de una región, o de un país, a la lengua del pueblo, sino que se declara
oficialmente una traducción como la única autorizada, y se declara como autentica, ósea la
única traducción autorizada y de valor oficial.

Pero ¿Cuál es la intención al hacer esto? Primero, que la ICR mantenga el monopolio de la
interpretación, ¿por qué? Porque como vimos la semana pasada solo ellos tenían el derecho
de interpretar y el pueblo era ignorante para ello. Y no solo eso, sino que, al mantener una
traducción en latín, la mayoría de las personas no conocía el latín, mucho menos conocían
hebreo y griego. Ahora, mantener el monopolio de la interpretación les convenia, en otras
palabras, si el pueblo conoce la escritura, se darían cuenta que la ICR ha errado, así que
básicamente mantienen el monopolio de la interpretación, incluso aceptando una
traducción, pero solo una, pero está al latín, y la mayoría de las personas no conocían el
latín.

Pero tienen una segunda intención, la ICR dice: sea tenida por autentica la traducción de la
vulgata latina ¿Qué es lo que están haciendo? Cuando declaran que esa es la traducción
oficial o autentica para lección, disputas y exposiciones, pues los libros apócrifos que
estaban incluidos dentro de esta traducción, quedaban como único sustento en esa
traducción frente a las controversias. Y en esos libros apócrifos es donde la ICR encontraba
sustento a alguna de sus falsas doctrinas en la controversia.

En síntesis, hemos visto lo que hace Martín Lutero en la traducción de la biblia, y cuál es la
respuesta de la ICR en el concilio de Trento frente a la prohibición de traducir la biblia para
que sea entendida por el pueblo, y además de eso estableciendo una traducción o versión
como oficial, y es la única en la que se puede acudir en la controversia, y resulta que esa
biblia tiene incluidos que no son inspirados y que son los apócrifos. Esa es la respuesta de
la ICR, eso es lo que se conoce como la contrareforma.

El párrafo de hoy enseña el hecho de su disponibilidad, que Dios providencialmente ha


conservado las sagradas escrituras en sus idiomas originales hebreo y griego hasta este
momento. Hoy en día no existen los textos originales escritos de mano de los apóstoles
porque fueron hechos en materiales que se deterioraron con el tiempo, pero la iglesia y el
pueblo judío en cuanto al AT copio una y otra, y otra, y otra vez. Asi Dios preservaba las
sagradas escrituras de manera providencial para que tuviésemos nosotros la fuente, que
fuésemos nosotros a aquello que fue escrito, la palabra del Señor.

Entonces, lo primero que señala el párrafo es su disponibilidad, y ¿Cómo está disponible la


palabra de Dios para el pueblo? Porque el señor providencialmente guardo, permitió que
llegaran hasta el pueblo sus escritos en formas originales.

El párrafo afirma categóricamente en que idiomas fue escrita originalmente la biblia en


hebreo y en griego. ¿Y esto como suena frente a lo que hizo la ICR? que decían que a lo
único que ellos podían ir en la controversia era a la traducción de la vulgata latina que era la
oficial. La CF al decir que la biblia fue escrita en hebreo y en griego están diciendo que
para la controversia deben ir a las escrituras en los idiomas originales, y esto implica
tajantemente que se deben sacar a los apócrifos ¿Por qué? Porque los apócrifos que fueron
incluidos en el AT en la traducción vulgata latina no fueron escritos en hebreo.

Entonces podemos ver que el párrafo de la CF tiene la intención de que en la controversia


que haya siempre se vaya a la verdad. ¿Se acudirá a una traducción que nadie entiende y
que tiene libros incluidos que no son inspirados? NO. Vamos a ir a los textos originales,
vamos a ir al antiguo AT que fue escrito en hebreo, y se sacan los apócrifos, y al NT escrito
en griego.

Pero al escribir AT en hebreo la CF afirma que era el idioma del pueblo de Dios en la
antigüedad, lo que quiere decir que la gente lo entendía; y después cuando dice el NT en
griego y que en el tiempo en que fue escrito era el idioma más generalmente conocido entre
las naciones, está queriendo decir que la gente lo entendía. En otras palabras, la CF está
señalando lo que dijo la ICR en el concilio de Trento, en donde tenían el monopolio de las
escrituras, y que no querían dejarlas traducir para que nadie las entienda. Y la única
traducción oficial, tiene libros no inspirados, y nadie la entiende porque está en latín.

El párrafo continúa diciendo que fueron inspirados por Dios, lo que ya vimos en anteriores
estudios. Sigue diciendo mantenidos puros a lo largo de todos los tiempos por su especial
cuidado y providencia, esto ya lo comentamos hace un momento que el pueblo de Dios
hacia copias y copias y copias de las escrituras a lo largo del tiempo, esa es su preservación.

Esto es muy importante dentro de este párrafo porque aún puede haber personas que lean
este párrafo y digan que están de acuerdo con al CF, pero que hagan lo que hizo la ICR,
tratar de declarar una traducción como la auténtica y oficial, menospreciando otras
traducciones.

¿Qué fue lo que se preservo? La palabra de Dios escrita en hebreo y en griego, y de allí es
que debe ser traducida. ¿Qué fue lo que hizo ICR? Declarar como oficial una traducción.
Que hoy en día una persona declare como la traducción oficial de la iglesia una traducción,
entonces ha perdido todo el sentido del párrafo y ha caído en el error de los papistas.
Entonces, no es bueno preguntar cual traducción es mejor, porque cualquiera que no sea la
traducción de los testigos de Jehová. Porque todas las traducciones tienen su riqueza
exceptuando los apócrifos. Toda traducción es importante en la medida que se pueda
entender. Unas son traducciones más literales, más apegadas al texto original, y otras son
más dinámicas para que podamos entender un poco, porque los idiomas van cambiando.
Así que cuando alguien se para a defender radicalmente una traducción, casi que señalando
que esa es la traducción autentica, ¿Qué es lo que está haciendo? Lo mismo que hizo roma.

Por eso en toda controversia a gran nivel se va directamente a los idiomas originales.

Continua el párrafo son, por lo tanto, auténticos; de tal forma que, en toda controversia
religiosa, la iglesia debe recurrir a ellos como autoridad determinante. Esto hermanos
tiene una intención, decir que estos idiomas son los auténticos, no como ICR decía que era
la vulgata latina, y que allí estaban los apócrifos para sustentar varias de sus falsas
doctrinas, como el purgatorio, como la salvación por obras, como dar dinero para pagar por
los pecados. Estos textos son auténticos en el sentido en que son a ellos a donde se debe
acudir para toda controversia religiosa, y la iglesia debe recurrir a ellos como autoridad
determinante.

Continua el párrafo mencionando otro aspecto y es de la necesidad de su disponibilidad y


es necesario ser traducido en un idioma que todos entiendan. Dice: Pero debido a que estos
idiomas originales no son conocidos por todo el pueblo de Dios, que tiene derecho a las
Escrituras e interés en las mismas, y se le manda leerlas y escudriñarlas en el temor de
Dios, han de traducirse a la lengua común de toda nación a la que sean llevadas. aquí
podemos ver 4 aspectos.

1. La necesidad de la traducción: cuando hablamos de la disponibilidad de las


escrituras es que el pueblo pueda ir a ellas para poder leerla, entenderla y vivir su
vida en Cristo. Como la mayoría no conoce esos idiomas originales, entonces es
necesaria la traducción.
2. La garantía de la traducción: CF dice han de traducirse a la lengua común, pero que
dijo la ICR en Trento no se puede traducir por nadie.
3. La extensión de su traducción: ¿a qué idiomas debe ser traducida la biblia? A toda
nación a la que sean llevadas. La biblia debe traducirse porque debe ser entendida.
Pero como ya dijimos, aunque nos parezca ahora muy normal, en siglos anteriores
fue prohibido y algunos murieron por ello.
4. El propósito de su traducción: ¿para qué traducirla? Para que, morando
abundantemente la Palabra de Dios en todos, puedan adorarle de manera aceptable y
para que, por la paciencia y consolación de las Escrituras, tengan esperanza. No hay
manera en que pueda morar abundantemente la palabra de Dios en nosotros, sino
nosotros no podemos leerla en un idioma que pueda ser entendido.

Las escrituras NO deben tenerse en casa abiertas en algún salmo especifico sin nunca
leerlas como si fuera un amuleto. NO. La biblia debe ser leída y entendida, y para ser
entendida debe estar en nuestro idioma, y es por eso que debe traducirse.

Colosenses 3:16 a palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y


exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones
al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales. ¿Cómo podria hacerse si no
tuviéramos acceso a la palabra de Dios en nuestro idioma?
Romanos 15:4 Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se
escribieron, a fin de que, por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos
esperanza.

11 de agosto

La analogía de la fe

En estudios anteriores meditamos acerca de claridad de las escrituras y la disponibilidad de


las escrituras. La claridad de las escrituras, básicamente, se refiere a que la biblia es clara y
cualquier persona puede entenderla cuando hace un estudio profundo y disciplinado. Con la
disponibilidad de las escrituras, la CF hace referencia a que, como los idiomas originales en
que fue escrita la biblia, el griego y el hebreo, no son entendidos por todo el pueblo de
Dios, entonces se hace necesario que se traduzca al idioma de cada nación para que el
pueblo pueda leerla y escudriñarla.

Recordemos que la CF cuando fue escrita buscaba identificar a una comunidad de fe,
mencionando claramente en que creían. De tal manera, que, a la misma vez, debían
mencionar en que no creían. Específicamente debían mencionar que no creían en algunas
doctrinas que la ICR enseñaba. Para ese tiempo la ICR mantenía el monopolio de la
interpretación de las escrituras, afirmando que solo la iglesia en su jerarquía podía
interpretar la escritura y que el pueblo no tenía la capacidad para interpretarla.

Lo que la ICR estaba haciendo era evitando que los creyentes fueran a las escrituras para
creerlas, para entenderlas, para vivirlas. Lo que la ICR le proponía al pueblo era: nosotros
les vamos a decir que es lo que deben creer, porque ustedes no tienen la capacidad de
entender lo que dicen las escrituras. En otras palabras, la ICR se reservaba para sí, el
derecho exclusivo de la auténtica interpretación de las escrituras.

Pero Dios permitió que hombres valientes se levantaran en contra de esta falsa enseñanza y
enseñaran que la escritura puede ser interpretada por el pueblo de Dios con la ayuda del
Espíritu Santo. Esto dijimos que se llama el derecho de la interpretación privada.
La ICR al ver esto que enseñaban los reformadores, entonces astutamente sacaron el
argumento de que debido a que ahora la gente estaba leyendo la escritura en su idioma e
interpretándola, entonces había muchas interpretaciones, y unos creían una cosa y otros
otra, y esto estaba haciendo más daño que provecho. La ICR dijo el concepto de
interpretación privada de los protestantes es lo que precisamente a dado origen a la
aparición de miles y miles de sectas, cada cual llamándose a sí misma cristiana y
arrogándose el derecho de poseer la interpretación verdadera de la escritura.

Muchos actualmente creen este argumento de la ICR, de que se acusa a los reformadores de
promover el error al poner en las manos del pueblo ignorante el poder tener las escrituras e
interpretarlas. Se acusa a los reformadores de promover el desenfreno y apartarse de la
verdadera fe.

Pero preguntémonos ¿promovieron los reformadores el desenfreno? ¿significa el derecho


de la interpretación privada de la biblia, que la persona puede interpretar la biblia de
manera antojadiza, caprichosa y sin ninguna restricción? ¿fue eso lo que realmente sucedió
en la reforma protestante? ¿trajo esto el daño que la ICR dijo que traería? ¿promovían los
reformadores la interpretación amañada de las escrituras, como a cualquier persona se le
antojara interpretarla?

NO. Los reformadores también se preocupaban por las formas y los medios de controlar la
anarquía mental, el desorden en la interpretación. Todo lo que los reformadores enseñaban
de ninguna manera promovía a que las personas interpretaran de cualquier manera las
escrituras. Entonces, los reformadores se preocuparon por enseñar lo que ya vimos, la
necesidad, la identidad, la autoridad, la suficiencia, la claridad y la disponibilidad de las
escrituras, pero además se preocuparon también por enseñar los principios solidos de
interpretación bíblica, es decir, se preocuparon por formar al pueblo para que a la hora de
interpretar las escrituras no lo hiciera amañadamente, no torciera las escrituras, no hicieran
una interpretación errada.

Entonces, los reformadores trabajaron también en los principios de interpretación bíblica


para que el pueblo al leer las escrituras no hiciera de ellas lo que bien le pareciera. Los
reformadores enseñaron al pueblo estos principios de interpretación. Cosa contraria lo que
hizo la ICR argumentando querer proteger la sana doctrina: nadie se atreva a interpretar la
misma sagrada escritura contra el sentido que le ha dado y da la santa madre iglesia a la
que privativamente toca determinar el verdadero sentido e interpretación de las sagradas
letras.}

Entonces, la forma que la ICR pretendió refrenar el pensamiento anárquico o el desorden en


la interpretación, no fue enseñar principios de interpretación, sino prohibir el acceso del
pueblo a las escrituras y prohibir su interpretación, y declarar que la interpretación que ellos
le daban era infalible.

Cuando interpretamos las escrituras no se debe olvidar jamás que la Biblia no fue un regalo
que nos llegó repentinamente del cielo; sino que es el producto lento y gradual de muchos
siglos. La biblia se halla compuesta de gran diversidad de partes, las que se produjeron en
muchas épocas distintas. Por consiguiente, hay que reconocer que el actual canon de las
escrituras son un registro progresivo de revelación de Dios, es decir, Dios fue revelando
cada vez más a medida que pasaba el tiempo acerca de su plan redentor a través de Cristo.
Al principio los creyentes no entendían muy bien como era que Dios los salvaría, pero cada
vez revelaba más de Cristo a su pueblo. El mismo Dios que en los últimos días nos habló en
la persona de su Hijo también habló en las revelaciones más antiguas (Hebreos 1:1) y
podemos, entonces, escudriñar su Palabra con la confianza de que hallaremos en ella orden
y sabiduría desde el principio hasta el fin.

Hermanos debemos tener en cuenta que las porciones de biblia que Dios reveló a través del
tiempo estaban de acuerdo a las variantes condiciones y necesidades de su pueblo de cada
tiempo en específico. A veces la palabra fue dejada en condición imperfecta, a causa de la
dureza del corazón del pueblo (Marcos 10:5 Y respondiendo Jesús, les dijo: Por la dureza
de vuestro corazón os escribió este mandamiento). Aquí vemos que debido a la condición
del pueblo Dios reveló por medio de Moisés un mandamiento, es decir, se afirma que la
revelación obedeció a las circunstancias específicas de lo que estaba sucediendo. A veces el
progreso fue lento e interrumpido por largos períodos de decadencia espiritual, surgiendo
luego, nuevamente, en nuevos desarrollos de vida nacional. Para interpretar bien las
Escrituras y emplearlas eficazmente es necesario prestar atención a este carácter progresivo
de la revelación de Dios. Esto nos ayudará a evitar errores en la interpretación.
La afirmación de que el Nuevo Testamento contradice al Antiguo es errónea tan pronto
como entendemos que las más antiguas revelaciones fueron, necesariamente, imperfectas
(incompletas) y que, evidentemente, no tenían el propósito de presentar toda la verdad de
Dios. Cosas que, contempladas desde un punto de vista parecen ser contradictorias desde
otros puntos de vista, se ve que no son más qué porciones separadas, porciones de un todo,
las que una vez unidas se ve que forman una armonía grandiosa.

Entonces, hermanos, la analogía de la fe es la afirmación de que la Biblia se interpreta a sí


misma y que lo que los pasajes o versículos oscuros pueden ser iluminados o aclarados por
otros más claros. Debemos dejar que la escritura interprete la misma escritura. Ninguna
interpretación debe contradecir la teología general de la Escritura. Alguna interpretación
especifica no puede contradecir la doctrina general de la escritura (ejemplo algunos pasajes
parecen decir que la salvación es por lo que el hombre haga u obedezca, pero la salvación
es por fe en Cristo y nada más, entonces no debemos afirmar que la salvación es por obras
porque uno u otro versículo parece decirlo, porque en el contexto amplio de las escrituras
nos dice que la salvación es solo por fe).

Entonces, nuevamente, la analogía de la fe significa básicamente que la Sagrada Escritura


es su propio intérprete. En otras palabras, debemos interpretar la Escritura según la
Escritura. Es decir, el árbitro supremo a la hora de interpretar el significado de un versículo
concreto de la Escritura es la enseñanza global de la misma.

Detrás del principio de la analogía de la fe está la confianza previa en que la Biblia es la


Palabra inspirada de Dios. Si es la Palabra de Dios, debe ser, por tanto, consistente y
coherente. Suponemos que Dios, debido a Su omnisciencia, nunca sería culpable de
contradecirse. Por lo tanto, es una calumnia al Espíritu Santo elegir una interpretación de un
pasaje en particular que ponga innecesariamente ese pasaje en conflicto con lo que Él ha
revelado en otro lugar.

Teniendo esto en mente leamos el párrafo 9: La regla infalible de interpretación de las


Escrituras la constituyen las propias Escrituras; y, por consiguiente, cuando surge una
duda respecto al verdadero y pleno sentido de cualquier pasaje bíblico (que no es múltiple,
sino único), éste se debe buscar en otros pasajes que se expresen con más claridad.
Cuando se afirma que la escritura interpreta la escritura, se pone la escritura en el nivel que
debe estar, es la palabra de Dios, y por lo tanto, es la norma de verdad, es la norma de
autoridad para la iglesia. Pero si alguien afirma somos nosotros los que interpretamos que
dice la escritura, entonces ese alguien se está poniendo por encima de la escritura, y por lo
tanto por encima de la palabra de Dios, poniéndose en un lugar que no le corresponde. Por
eso en cuanto a la interpretación de la escritura, solo la escritura puede interpretarse a sí
misma.

Si hay un versículo que es difícil de entender no se debe ir a un estamento jerárquico para


que nos diga infaliblemente que es lo que dice ese versículo, sino que la escritura de
manera global y en otros pasajes un poco más claros, permitirán darles un sentido adecuado
y correcto a las escrituras.

Lastimosamente todo esto que en siglos pasados se logró con la muerte de algunos hombres
valientes que tradujeron la biblia a otros idiomas del pueblo, se ha desechado, despreciado
y olvidado. Y es que hoy en día podemos ver en algunas iglesias a algunos creyentes que
toman su biblia, la abren, leen un versículo, y lo interpretan como creen que en ese
momento entendieron, sin tener en cuenta el propósito con el que fue escrito ese versículo,
cual situación esta narrando, cual es el contexto cultural e histórico, cual es la condición de
los oyentes originales de la carta. Sin tener en cuenta si lo que está interpretando en ese
momento está en armonía con el resto de la escritura.

Lamentablemente hoy en día hay una enseñanza que llaman palabra rhema, que
básicamente es abrir la escritura y tomar para si una interpretación subjetiva. Como cuando
leen el versículo promesa dado al Señor Jesús en Salmo 2:8 pídeme y te daré por herencia
las naciones, y como posesión tuya los confines de la tierra. Y al escucharlo se emocionan
porque creen que es para ellos esa promesa, y ya se imaginan viajando por las naciones. Y
no ven el contexto, no ven que es una referencia al siervo de Dios en cuanto a su labor de
salvación a toda nación. Entonces leen la escritura, la interpretan a conveniencia, sin tener
en cuenta unos principios de interpretación bíblicos, y se toma de allí cualquier cosa que a
la persona se le ocurrió que Dios le dijo, llegando a una interpretación fallida. Y luego
cuando Dios supuestamente no les cumple la promesa de viajar a las naciones, entonces su
fe mengua, reniegan contra Dios, o hasta dejan de leer la biblia y creer en ella.
Otra consideración a tener en cuenta es que a algunos se les dice que la escritura en un
versículo especifico significa esto, pero respondiendo dicen ese es tu punto de vista en
cambio mi punto de vista es este otro. NO. La escritura en su sentido es único, hay un solo
sentido pero que puede tener múltiples aplicaciones. Por ejemplo: no te unas en yugo
desigual. Tiene un solo sentido. Pero tiene aplicación a la vida de matrimonio, al buscar a
una persona para unirse a ella, a los negocios, a la amistad con el mundo, a la intimidad con
todo aquel que no es de Dios. Entonces, un sentido, pero múltiples aplicaciones. Las
multiples interpretaciones o la pluralidad que esta de moda, tu tienes tu punto yo tengo el
mio y debemos respetarnos, eso no tiene sentido. La verdad es una sola. Y las variadas
interpretaciones se deben no por la biblia, sino por el pecado del hombre, y por no tener en
cuenta los principios bíblicos de interpretación.

Entonces, para no dar de que hablar a la ICR que dicen que ellos si dan un solo sentido a la
escritura, y los protestantes dicen una cosa y otros otra, entonces, para evitar esto, así como
tenemos el derecho de interpretar las escrituras, tenemos el deber de usar los principios de
interpretación. Y la regla de oro, la analogía de la fe, es lo primero que el creyente debe
tener en cuenta a la hora de interpretarla. Si estas leyendo un pasaje y lo interpretas de tal
manera que contradice al resto de las escrituras, entonces, de manera sencilla se puede
afirmar que lo estas interpretando mal (ejemplo de no juzgar).

La sagrada escritura es su propia intérprete. Ninguna parte de la escritura puede ser


interpretada de tal forma que cree un conflicto con lo que esta claramente enseñado en otra
parte de la escritura.

R. C Sproul dijo: si la biblia es la palabra de Dios inspirada entonces la analogía de la fe no


es una opción, sino un requisito para la interpretación.

Isaías 8:20 ¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha


amanecido. Aquí Isaías le dice al pueblo que es lo que deben responder cuando alguien le
diga vayan y consulten otras fuente para saber que hacer, y eso es lo que deben responder
a la ley y al testimonio, es decir, vayan a la escritura, no hay otro lugar.

Juan 10:34-36 Jesús les respondió: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois? Si
llamó dioses a aquellos a quienes vino la palabra de Dios (y la Escritura no puede ser
quebrantada), 36 ¿al que el Padre santificó y envió al mundo, vosotros decís: Tú
blasfemas, porque dije: Hijo de Dios soy? Aquí vemos que en las controversias que se le
presentaban al Señor Jesús el siempre recurría a las escrituras.

Hechos 15:15-16 Y con esto concuerdan las palabras de los profetas, como está escrito:
Después de esto volveré Y reedificaré el tabernáculo de David, que está caído; Y repararé
sus ruinas, Y lo volveré a levantar. En este relato de hechos Pedro va a la escritura para
sustentar que la salvación vendría a los gentiles, que lo que estaba sucediendo estaba de
acuerdo con la escritura.

Y el párrafo 10 es una conclusión de todos los anteriores párrafos. (leámosla). No debemos


ir sino ala escritura para resolver cualquier controversia, para examinar cualquier doctrina
que este enseñando cualquier grupo o persona, para examinar las opiniones de las diferentes
personas en cuanto a teología se refiere.

Pero ir a la escritura, no significa que vamos a menospreciar lo que ha ocurrido en mas de


2000 años de historia de la iglesia, no es menospreciar lo que se ha afirmado de manera
correcta en los concilios de la iglesia. Todo ello es valorado en la manera en que estén en
armonía con la escritura.

Mateo 22:29 Entonces respondiendo Jesús, les dijo: Erráis, ignorando las Escrituras y el
poder de Dios. 31-32 Pero respecto a la resurrección de los muertos, ¿no habéis leído lo que
os fue dicho por Dios, cuando dijo: 32 Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el
Dios de Jacob? Dios no es Dios de muertos, sino de vivos. El Señor respondiendo a unos
que dudaban de la resurrección y que le hacían preguntas para hacer caer al Señor, y el
señor les dice erráis porque no tienen en cuenta la escritura. Es la escritura la que en medio
de una controversia nos dice o juzga quien está en error.

Efesios 2:20 edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal
piedra del ángulo Jesucristo mismo. Esto quiere decir que la iglesia se sostiene sobre el
fundamento de lo que Dios hablo por medio de los apóstoles y profetas, que es lo que
compone la escritura.

Hechos 28:23-25 Y habiéndole señalado un día, vinieron a él muchos a la posada, a los


cuales les declaraba y les testificaba el reino de Dios desde la mañana hasta la tarde,
persuadiéndoles acerca de Jesús, tanto por la ley de Moisés como por los profetas. 24 Y
algunos asentían a lo que se decía, pero otros no creían. 25 Y como no estuviesen de
acuerdo entre sí, al retirarse, les dijo Pablo esta palabra: Bien habló el Espíritu Santo por
medio del profeta Isaías a nuestros padres, diciendo. Aquí vemos nuevamente que se
recurre a las escrituras como juez supremo en medio de la controversia.

08 de septiembre de 2022

Hermanos este nuevo capítulo nos hablará acerca de la trinidad, de los atributos de Dios, y
de las relaciones de Dios con sus criaturas. Estudiar la doctrina de Dios o como se llama en
teología la teología propia es importante, ya que el ser humano tiene un bajo concepto de
Dios y un alto concepto de sí mismo, por eso al estudiarla logra concientizar al ser humano
de quien es Dios, su grandeza y majestad, sus atributos perfectos, y de esta manera logra
verse como lo que es, finito, creado, imperfecto.

Entonces comenzaremos con el párrafo 1: El Señor nuestro Dios es un Dios único, vivo y
verdadero;1 cuya subsistencia está en él mismo y es de él mismo, infinito en su ser y
perfección;2 cuya esencia no puede ser comprendida por nadie sino por él mismo;3 es
espíritu purísimo, invisible, sin cuerpo, miembros o pasiones, el único que tiene
inmortalidad y que habita en luz inaccesible;4 es inmutable, inmenso, eterno, inescrutable,
todopoderoso, infinito en todos los sentidos, santísimo, sapientísimo, libérrimo, absoluto;5
que hace todas las cosas según el consejo de su inmutable y justísima voluntad, para su
propia gloria;6 es amantísimo, benigno, misericordioso, longánimo, abundante en bondad
y verdad, perdonando la iniquidad, la transgresión y el pecado;7 galardonador de los que
le buscan con diligencia, y sobre todo, justísimo y terrible en sus juicios, que odia todo
pecado y que de ninguna manera dará por inocente al culpable 8.

Lo primero que vemos es que la CF nos habla de la singularidad de Dios, solo hay un
Dios, y es el que se revela a través de las sagradas escrituras.

Es muy importante este inicio acerca de quién es nuestro Dios, porque cuando se estudian
las escrituras se debe tener presente que el pueblo de Dios siempre se desarrolló en medio
de naciones paganas que tenían muchos dioses, eran politeístas, y no solo en el antiguo
testamento, sino en el NT la iglesia también estaba en medio de pueblos paganos.

Algo curioso es que a los cristianos primitivos se les llamo ateos por parte de los pueblos,
porque ellos nos creían en la variedad de dioses.

Deuteronomio 6:4 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. Esta es, por así decirlo,
la confesión de fe del pueblo del antiguo testamento, que el pueblo debía proclamar y debía
enseñarla a sus hijos. Era importante que esta verdad pasara de generación en generación,
que los padres enseñaran esto a sus hijos, para que los hijos llegaran a tener conocimiento
del verdadero Dios, pues alrededor de ellos había pueblos politeístas. (esa misma es la
responsabilidad de los padres el día de hoy).

Jeremías 10:10 Mas Jehová es el Dios verdadero; él es Dios vivo y Rey eterno; a su ira
tiembla la tierra, y las naciones no pueden sufrir su indignación. Esto es lo que nos dice la
CF: nuestro Dios es único, vivo y verdadero.

1 corintios 8:4,6: Acerca, pues, de las viandas que se sacrifican a los ídolos, sabemos que
un ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un Dios. 6 para nosotros, sin
embargo, solo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos
para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por
medio de él. Pablo entonces reafirma esta verdad del AT.

1 tesalonicenses 1:9 porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos
recibisteis, y cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y
verdadero. Pablo afirma entonces, que el Dios nuestro no solo es único, sino vivo, no como
los otros dioses o ídolos que están muertos, no como los ídolos que son falsos y son un
engaño para los que creen en ellos.

Entonces estos versículos nos hablan del atributo de la singularidad de Dios la cual enfatiza
que solo hay un ser al que se debe adorar y ese es nuestro Dios, el que se revela a través de
las sagradas escrituras.

Continua la CF: cuya subsistencia está en él mismo y es de él mismo, infinito en su ser y


perfección. Dios no necesita absolutamente nada de lo que hay para ser Dios, ni los
hombres ni ninguna otra cosa, él es Dios eternamente. Fue gloriosos antes de la creación, y
seguiría siendo glorioso si la creación no existiera, seguiría siendo un Dios feliz en su ser.
Él no necesita de la creación para ser Dios. Su ser no depende de nada, sino de sí mismo. A
este atributo se le conoce como la aseidad o independencia.

Hechos 17:24-25 El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor
del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, 25 ni es honrado
por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y
aliento y todas las cosas. Pablo habla a los grandes filósofos de Atenas. Esta es la
independencia de Dios que Pablo habla a una sociedad que creía en dioses que dependían
de la acción del hombre. Dios no depende de nada, no necesita de nadie. Es el único ser que
tiene vida en sí mismo. Su existencia no depende de nada ni de nadie, sino que tiene vida en
sí mismo, es subsistente en sí mismo. No existe una criatura que tenga esta característica,
las demás criaturas, todo lo que existe en la creación depende del sustento de Dios, pero
Dios no depende de nadie para subsistir. Dios es la causa de todas las cosas creadas, pero el
no es causado por nada ni nadie, entonces Dios es la causa no causada.

El nombre Jehová o Yahvé, por medio del cual se revela al hombre, quiere decir
precisamente eso el ser, yo soy el que soy. Él no depende de nada para ser él mismo.

Isaías 48:12 Óyeme, Jacob, y tú, Israel, a quien llamé: Yo mismo, yo el primero, yo
también el postrero. Aquí este versículo muestra la aseidad de Dios, la independencia de
Dios, su auto existencia. No depende de nada, no depende de la creación.

La CF continúa diciendo: cuya esencia no puede ser comprendida por nadie sino por él
mismo. A nuestro Dios no se le puede entender plenamente ni exhaustivamente, aunque si
podemos conocer verdad acerca de Dios cuando él mismo la ha revelado. A este atributo se
le conoce como la incomprensibilidad de Dios. Y ¿porque no podemos comprender
plenamente y exhaustivamente al ser de Dios? Sencillamente porque el es infinito y
nosotros somos finitos.

Pensemos en una ilustración: un teólogo yendo por una playa y pensando en el atributo de
la trinidad, vio a un niño que abría un huequito con un objeto en la playa, y se acercó al
niño y le pregunto ¿Qué haces? El niño le responde: estoy abriendo un hueco para meter
todo el océano en él. Esta es una ilustración de porque nosotros no podemos entender
plenamente a Dios, porque él es infinito y nosotros somos finitos. Así como no se puede
meter el océano en hueco que se haga en la playa, de la misma forma nosotros no podemos
entender a un Dios infinito con nuestra capacidad finita.

Salmo 139:17-18 ¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán grande es la
suma de ellos! 18 Si los enumero, se multiplican más que la arena; Despierto, y aún estoy
contigo. Si nos propusiéramos entender a Dios, no podríamos, son infinitos como la arena.

Job 11:7-8 ¿Descubrirás tú los secretos de Dios? ¿Llegarás tú a la perfección del


Todopoderoso? Es más alta que los cielos; ¿qué harás? Es más profunda que el Seol;
¿cómo la conocerás? Zofar el amigo de Job describe una expresión de la grandeza de Dios,
pero también una expresión de nuestra incapacidad de poder entenderlo plena y
exhaustivamente.

Salmo 145:3 Grande es Jehová, y digno de suprema alabanza; Y su grandeza es


inescrutable. David declara la grandeza de nuestro Dios, tal que no es posible ser escrutado
(averiguado o comprendido).

Romanos 11:33-34 ¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de


Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién
entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? Pablo al terminar de exponer el
evangelio de la gracia de Dios, para, y explota en alabanza en la doxología del capítulo 11
alabando la sabiduría de Dios.

La doctrina de la incomprensibilidad nos enseña la verdad de que conocemos verdades


acerca de Dios que él mismo nos ha revelado, pero no podemos conocer exhaustivamente
ni completamente, ni ahora ni en la eternidad acerca de quién es nuestro Dios. Lo que Dios
nos ha revelado es verdadero, pero no podemos conocer exhaustivamente el ser de Dios.

Esta doctrina nos da una advertencia y una motivación, en cuanto a la advertencia es que el
ser humano al expresar quien es Dios, no puede confiar en su lógica y razonamiento, sino
que tiene que estar sometido a la verdad revelada de la bendita palabra de Dios.
Adicionalmente, nos motiva a estudiar quien es Dios, porque a nuestro Dios nunca
llegaremos a conocerlo plenamente. Así que en nuestro peregrinaje en esta vida y aun en la
eternidad, seguiremos sorprendiéndonos y maravillándonos acerca de quién es el ser de
Dios.

Continua la CF: es espíritu purísimo, invisible, sin cuerpo, miembros o pasiones, el único
que tiene inmortalidad y que habita en luz inaccesible. A esta expresión se le conoce como
el atributo de la espiritualidad de Dios.

Juan 4:24 Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que
adoren. Nuestro Señor Jesús afirma que Dios es Espíritu. Esta afirmación la hace a una
mujer que le habían enseñado que a Dios se debía adorar en un monte en específico, y los
judíos decían que a Dios se debía adorar en Jerusalén. En medio de esta controversia que
tenían los samaritanos y los judíos, el Señor le da esta verdad a esta mujer Dios es espíritu.
Y podemos entender que Dios no tiene ni partes ni dimensiones espaciales, no tiene cuerpo.

Lucas 24:39 Mirad mis manos y mis pies, que yo mismo soy; palpad, y ved; porque un
espíritu no tiene carne ni huesos, como veis que yo tengo. Cuando el Señor Jesús se
presenta resucitado ante los apóstoles y ellos creen que es un espíritu y no un cuerpo
resucitado el Señor les dice que un espíritu no tiene cuerpo. Entonces, si Dios es espíritu, si
tratamos de formar una imagen acerca de cómo es nuestro Dios, es tergiversar la verdad de
quien es nuestro Dios. No importa las intenciones que haya en el corazón, Dios prohíbe
hacer imagen, porque cualquier imagen que se haga acerca de quién es Dios, lo que hace es
tergiversar o reducir quién es nuestro bendito Dios.

Deuteronomio 4:15-16 Guardad, pues, mucho vuestras almas; pues ninguna figura visteis
el día que Jehová habló con vosotros de en medio del fuego; 16 para que no os corrompáis
y hagáis para vosotros escultura, imagen de figura alguna, efigie de varón o hembra. El
pueblo de Israel dirigido por Aaron trato de hacer un homenaje a aquel que los había sacado
de la esclavitud de Egipto, pero hicieron un becerro de oro tratando e expresar la potencia
de Dios, pero esto desagradó mucho al Señor que se llenó de ira contra ellos. Entonces esto
es una advertencia contra ese deseo de hacer una imagen de Dios.

1 Timoteo 1:17 Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios,
sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén. Dios es invisible, por lo tanto, no se
puede hacer imagen de él. Jamás podremos ver la esencia total de Dios, porque Dios es
espíritu. Por eso Pablo enfatiza que Dios es invisible. Pero nosotros hemos recibido la
revelación maravillosa de quien es Dios a través de que él mismo se encarna y vive en
medio de nosotros.

Entender de que Dios es invisible nos permite entender que aquellos pasajes de la escritura
donde se le da una forma humana a Dios son pasajes expresados de esa manera para que
nosotros podamos entender algo acerca de quién es nuestro Dios.

El teólogo Hodge dijo: cuando las escrituras en condescendencia con nuestra debilidad
expresan el hecho de que Dios escucha diciendo que él tiene oído o que ejerce su poder
atribuyéndole una mano, evidentemente hablan metafóricamente, porque en el caso de los
hombres las facultades espirituales se ejercen por medio de órganos corporales. Cuando
hablan de su arrepentimiento, de su lamento, de sus celos, esto también es un lenguaje
metafórico que nos enseña que el actúa hacia nosotros como lo haría un hombre al agitarse
por tales pasiones.

Así que cuando encontremos esas figuras humanas refiriéndose a Dios no es porque Dios
tenga esas figuras humanas, no es porque Dios tenga un brazo, tenga un ojo, o un oído, sino
porque la escritura nos habla de esa manera para que nosotros de alguna manera podamos
entender acerca de quién es nuestro Dios.

Continua la CF: es inmutable, inmenso, eterno, inescrutable, todopoderoso, infinito en


todos los sentidos, santísimo, sapientísimo, libérrimo, absoluto. Este grupo de atributos los
conocemos como el atributo de la infinitud de Dios que significa que Dios es sin límites.

Dios es inmutable, es decir, no cambia. Malaquías 3:6 Porque yo Jehová no cambio; por
esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos. A esto lo conocemos como inmutabilidad.
Dios no cambia, no es voluble. Ahora, conocer que Dios no cambia, que él es el mismo en
su ser, en sus preceptos, en su voluntad, es grandioso porque nos permite tener confianza en
Dios, porque si tuviésemos un ser que fuera voluble, entonces no podríamos confiar en él,
porque tendríamos la duda en algún momento de nuestra vida de que el cambiase de
opinión en torno a la salvación.

Santiago 1:17 Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de
las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación. Un pasaje más que nos habla
de que Dios no cambia, porque si cambiará entonces es porque mejoraría o empeoraría,
pero eso no puede suceder porque Dios es perfecto. Si mejorara es porque antes no era
perfecto, y si empeorara entonces sería algo no digno de un Dios perfecto.

Dios es inmenso, tiene que ver con la infinitud de Dios en cuanto al espacio. Dios no tiene
dimensiones espaciales. 1 reyes 8:27 Pero ¿es verdad que Dios morará sobre la tierra? He
aquí que los cielos, los cielos de los cielos, no te pueden contener; ¿cuánto menos esta
casa que yo he edificado? Aquí es cuando el rey Salomón va a inaugurar el templo, pero el
mismo Salomón empieza a hacerse ese cuestionamiento ¿Dios morará sobre esta tierra?
¿Dónde podrá caber? Entender la infinitud de Dios en cuanto al espacio nos permite
entender su omnipresencia, es decir, que está presente en todas partes.

Jeremías 23:23-24 ¿Soy yo Dios de cerca solamente, dice Jehová, y no Dios desde muy
lejos? ¿Se ocultará alguno, dice Jehová, en escondrijos que yo no lo vea? ¿No lleno yo,
dice Jehová, el cielo y la tierra? Dios no tiene dimensiones espaciales, el es inmenso, él es
infinito en torno al espacio. ¿dónde es que podremos estar nosotros donde no esté Dios?
Hermanos el es omnipresente.

Salmo 139:7-8 ¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? Si


subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás.
Cuando se piensa acerca de la omnipresencia de Dios, de la inmensidad de Dios, se debe
entender que Dios está presente en todo lugar de manera plena, no quiere decir que un
pedacito de Dios este en este lugar y otro pedacito de Dios este en otro lugar, porque eso
sería pensar en Dios en dimensiones espaciales, pero nuestro Dios es infinito, inmenso,
omnipresente, esta presente plenamente en todo lugar.

Cuando decimos que Dios es omnipresente afirmamos que el entero o completo e infinito
Dios se puede encontrar en todo lugar a la misma vez.

Dios es eterno. Es la infinitud de Dios en cuanto al tiempo. Salmo 90:2 Antes que naciesen
los montes Y formases la tierra y el mundo, Desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios. El
trasciende el tiempo, porque el tiempo fue creado por él. En Genesis 1:1 dice en el
principio, es decir, el principio del tiempo. El tiempo hace parte de la creación, y la
creación toda fue creada por Dios. Dios creó el tiempo, él es un ser atemporal, no tiene una
relación de sometimiento al tiempo. Cuando encontramos en las escrituras estas
expresiones se debe entender que están haciendo referencia a esta verdad.

2 Pedro 3:8 Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil
años, y mil años como un día. Aquí no es que se tenga que pensar en una operación
matemática para hallar la edad de Dios, o hacer una operación para interpretar otros pasajes
donde se nombran mil años, o un día, y así interpretar cuanto tiempo se refiere la escritura,
NO, sino que es una expresión del pueblo de Dios acerca de la eternidad de Dios. Dios no
está regido por el tiempo, porque él lo creó, él es infinito en relación con el tiempo, porque
él es eterno.

Él es todopoderoso. Es infinito en relación al poder, es omnipotente, todo lo puede.


Genesis 17:1 Era Abram de edad de noventa y nueve años, cuando le apareció Jehová y le
dijo: Yo soy el Dios Todopoderoso; anda delante de mí y sé perfecto. Esto no quiere decir
que Dios puede hacer cualquier cosa, sino que puede hacer cualquier cosa referente a su
voluntad. Por ejemplo, Dios no puede mentir, porque como dice 2 Timoteo 2:13 Si
fuéremos infieles, él permanece fiel; Él no puede negarse a sí mismo. Dios no puede
negarse a sí mismo. Él puede hacer todo lo que está conforme a su bendita voluntad.

Daniel 4:35 Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada; y él hace según
su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay quien detenga
su mano, y le diga: ¿Qué haces? Es la expresión de Nabucodonosor el hombre más
poderoso de la tierra en el momento en que se escribió esto. Este hombre poderoso declara
el poder de Dios. Dios es todopoderoso en referencia a su santa voluntad.

Dios es santísimo. Isaías 6:3 Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, santo, santo,
Jehová de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria. Isaías en una visión cuando
Dios le hace el llamado a ejercer el ministerio dijo que vio seres maravillosos, serafines en
la presencia de Dios que decían santo, santo, santo. Entonces Dios es santísimo, y cuando
lo decimos nos referimos a que es separado. Santo significa básicamente separado tanto en
griego como en hebreo. Dios es santo, Dios es el otro (no es como nosotros), Dios está
separado. Pero principalmente cuando decimos que Dios es santo, lo decimos en relación
con el pecado, Dios está separado del pecado, el pecado no tiene nada que ver con el Dios
santísimo.
Dios es sapientísimo. Es infinito en torno al conocimiento. Este atributo es conocido como
la omnisciencia de Dios. Romanos 16:27 al único y sabio Dios, sea gloria mediante
Jesucristo para siempre. Amén. Salmo 147:5 Grande es el Señor nuestro, y de mucho
poder; Y su entendimiento es infinito. Nunca ha existido un tiempo donde Dios no
conociera todo, nunca existió un momento donde Dios no conociera todo lo que es y todo
lo que será. Cuando hablamos de la omnisciencia de Dios en torno a los eventos que
vendrán debemos tener el cuidado de no pensar que hay un universo paralelo que Dios
puede ver a la misma vez del tiempo presente en el cual nosotros estamos viviendo, sino
que Dios es omnisciente, puede entender, conocer todo lo que fue, lo que es, y lo que será,
simplemente porque Dios ha decretado lo que fue, lo que es, y lo que será.

Dios es libérrimo. Esto es un superlativo de libertad. Dios es libre inmensamente, no está


sometido a nada ni a nadie. Salmo 115:3 Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso
ha hecho. Él es el Altísimo, el Señor del cielo y de la tierra. No está sujeto a nadie, ni
influenciado por nadie, absolutamente independiente; Dios hace como le place, sólo como
le place y siempre como le place. Nadie puede frustrarlo, nadie puede obstaculizarlo. De
modo que su propia Palabra declara, expresamente en Isaías 46:10 Mi consejo
permanecerá, y haré todo lo que quiero; Daniel 4:35. él hace según su voluntad en el
ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay quien detenga su mano.

Dios es absoluto. Éxodo 3:14 Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo:
Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros. Dios es un Ser absoluto. Esto
significa que Él no depende de nada fuera de sí mismo. Nosotros para vivir requerimos de
alimentos, aire y otras condiciones que permiten nuestra vida, sin embargo, Él se basta a sí
mismo porque Él es la Vida. Los humanos y los animales requerimos de otro, hembra o
macho, para reproducirnos; Él no necesita otro dios o diosa para multiplicarse, pues no
necesita la reproducción de otro Dios o dioses, ya que es Dios y se basta a Sí mismo. Él
tiene la comunión que necesita en la Trinidad. Esto no significa que sea indiferente, sino
que no requiere de otros para existir. Sus relaciones con lo creado no son necesarias de su
parte. Podemos entender esto si observamos a un artista, quien puede seguir existiendo a
pesar del deterioro de su obra o desentenderse de ella después de venderla. Dios, el Gran
Artista del universo, no tiene que depender del mundo, pero sí el mundo depende de Él.
Puede existir perfectamente sin el mundo, pero éste no existe sin Dios.

Entonces, hasta donde vamos podemos ver la grandeza de nuestro Dios, lo inmenso, lo
maravilloso, lo eterno, lo glorioso, lo poderoso.

Continua la CF: que hace todas las cosas según el consejo de su inmutable y justísima
voluntad, para su propia gloria. Esto es lo que se conoce como la soberanía de Dios. La
soberanía de Dios puede definirse como el ejercicio de su Supremacía. Dios creó todas las
cosas, conserva todas las cosas, redime a los elegidos y castiga los impíos; y, por lo tanto,
tiene un dominio supremo y absoluto sobre Su creación. Por eso lo llamamos Soberano.
Efesios 1:11 En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al
propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad. Decir que Dios es
soberano es decir que Él es supremo sobre todas las cosas, que no hay nadie por encima de
Él, que Él es Señor absoluto sobre la creación. Es decir que su señorío sobre la creación
significa que no hay nada fuera de su control, nada que Dios no haya previsto y planeado.
Significa que aun la ira del hombre en última instancia alabará a Dios y Él reprimirá el
resto de las iras (Salmos 76:10). Significa que cada criatura en la tierra, en el cielo y en el
infierno finalmente doblará la rodilla y confesará que Jesucristo es el Señor para gloria de
Dios Padre (Filipenses 2:10).

La soberanía de Dios lógicamente implica su absoluta libertad para hacer todo lo que quiera
hacer. La soberanía de Dios no significa que Él puede hacer cualquier cosa, sino que puede
hacer cualquier cosa que desee hacer. La soberanía de Dios y la voluntad de Dios están
íntimamente ligadas.

La soberanía de Dios significa que, si en este mundo de hombres pecadores hay alguien que
debería estar tranquilo y con paz en un tiempo como este, deberíamos ser los cristianos. No
deberíamos estar bajo la carga de la ansiedad y la preocupación porque somos hijos de un
Dios que es siempre libre de hacer como le plazca. No hay ni cuerda, ni cadena, ni estorbo
sobre Él, porque Él es absolutamente soberano.

Proverbios 16:4 Todas las cosas han hecho Jehová para sí mismo, Y aun al impío para el
día malo. Dios es libre para llevar a término sus propósitos eternos. Dios no hace las cosas
a la deriva, o improvisadamente, no se guía por cualquier cosa que le venga a la mente, ni
deja que ninguna idea le sugiera otra. Dios obra conforme a los planes que se propuso en
Cristo Jesús antes de la fundación del mundo. Dios ha controlado, controla y controlará los
tiempos, porque está llevando a cabo sus propósitos eternos. Como dice en romanos 11:36
porque de él, y por él, y para él son todas las cosas.

Continua la CF: es amantísimo, benigno, misericordioso, longánimo, abundante en bondad


y verdad, perdonando la iniquidad, la transgresión y el pecado. Este grupo de atributos se
conoce como el amor de Dios.

Dios es amantísimo. ¿Qué es el amor de Dios? Es aquel atributo divino que mueve a Dios
a darse libre y desinteresadamente a otros para el beneficio o bienestar de ellos. Las
Escrituras nos enseñan que el amor divino (i. e., el amor de Dios) es mucho más que una
actitud, una emoción o una obra. Es un atributo de Dios, una parte de Su mismo ser o
naturaleza. Dios ama de verdad, pero Él también es amor. Él es la esencia misma de lo que
el amor verdadero es, y todo amor verdadero fluye de Él como su fuente originaria.

El amor de Dios no está influenciado. Esto significa que no había nada en los objetos de su
amor que movieran a Dios a amarlos, no existía nada en la criatura que lo atrajera o lo
impulsara a amar. El amor que una criatura siente por otra se debe a algo en el objeto
amado; pero el amor de Dios es libre, espontáneo, sin causa. La única razón por la que Dios
ama a alguien, se encuentra en su propia voluntad soberana: Deuteronomio. 7:7-8a No por
ser vosotros más que todos los pueblos os han querido Jehová y os ha escogido, pues
vosotros erais el más insignificante de todos los pueblos; sino por cuanto Jehová os amó.

Dios es benigno. No es que Dios tenga gestos bondadosos, como podría darse entre
nosotros, sino que él es bondadoso de manera absoluta y constante. Es decir, que todo lo
que él es y hace, es y desprende bondad. La norma del bien más alta solo la podemos
encontrar en Dios. Si algo es bueno es porque así él lo ha decidido y algo es malo, dañino o
pecaminoso es porque de la misma manera lo ha dictaminado.

Dios es misericordioso. la pronta inclinación de Dios a aliviar la miseria de las criaturas


caídas. Así, la misericordia presupone el pecado y las consecuencias que sufren los
pecadores. El salmo 136 es un salmo de alabanza a Dios por su misericordia eterna.
Dios es longánimo. “Longanimidad” en griego es la palabra makrothumía, que significa
“larga paciencia, lentitud para ajusticiar los agravios”. Romanos 2:4 ¿O menosprecias las
riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía
al arrepentimiento? El apóstol Pablo es claro al decir que si Dios no castiga
inmediatamente es porque tiene un propósito, y el propósito es guiar al arrepentimiento. A
Dios le importa más que las personas vivan eternamente que aplicar rápidamente su
justicia. Tiene todo el derecho de hacerlo, pero ha preferido la misericordia sobre el juicio
para que muchos alcancen salvación.

Éxodo 34:6-7 Y pasando Jehová por delante de él, proclamó: ¡Jehová! ¡Jehová! fuerte,
misericordioso y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad; que
guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelión y el pecado, y que de
ningún modo tendrá por inocente al malvado; que visita la iniquidad de los padres sobre
los hijos y sobre los hijos de los hijos, hasta la tercera y cuarta generación. Dios es amor y
manifiesta su amor mediante la bondad, la misericordia y el perdón de los pecados.

1 Juan 4:8 El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. Aquí se haya una
verdad que nos confronta y a la vez nos permite ver si conocemos a Dios, solo si amamos a
los demás. Dios es amor, porque ama, es benigno, misericordioso, longánimo, abundante en
bondad y verdad, perdonando la iniquidad.

Continua la CF: galardonador de los que le buscan con diligencia, y sobre todo, justísimo
y terrible en sus juicios, que odia todo pecado y que de ninguna manera dará por inocente
al culpable. Esto se conoce como la justicia de Dios. Las palabras originales del hebreo y
griego denotan la justicia, rectitud o excelencia moral de Dios. Según las Escrituras, Dios
es un Ser absolutamente justo y siempre actúa de una manera que es perfectamente
consistente con quien Él es. No hay nada malo o incorrecto en la naturaleza de Dios o Sus
obras. Él nunca será o hará nada que justifique una acusación de fechoría. Sus obras,
decretos y juicios son absolutamente perfectos. ¡En aquel día, cuando Dios juzgue a todos
los hombres según sus obras, aun los condenados inclinarán la cabeza y declararán que
Dios es justo!

En la CF primero se menciona la justicia de Dios descrita positivamente, al decir que Dios


recompensa a los que le buscan. Hebreos 11:6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios;
porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de
los que le buscan. Meditemos aquí en algo, como seres humanos inmersos en un mundo
materialista somos influenciados sutilmente por su pensamiento terrenal. Cuando Dios
habla de recompensas y galardones inmediatamente pensamos en comodidades, dinero,
bendiciones terrenales, una casa más grande, un carro más nuevo, viajes, etc. Y no es que
este mal querer disfrutar del fruto del trabajo, sino lo malo es en donde está el corazón, cuál
es mi orden de prioridades ¿está mi pensamiento y mi deseo más en lo material o en lo
espiritual? Ahora… Dios se preocupa por lo material por eso nos promete que, si buscamos
primero el reino de Dios y su justicia, entonces nos dará lo que necesitamos terrenalmente,
pero los mayores galardones y recompensas son las espirituales: nuestro galardón es Cristo
mismo, una vida eterna junto a él. Porque aquí estamos de paso, realmente estamos en el
mundo, pero no somos del mundo, nuestra ciudadanía está en los cielos. Podemos leer el
capítulo 11 de hebreos.

En segunda instancia la CF menciona la justicia descrita negativamente cuando Dios


castiga al culpable. Nehemías 9:32-33 Ahora pues, Dios nuestro, Dios grande, fuerte,
temible, que guardas el pacto y la misericordia, no sea tenido en poco delante de ti todo el
sufrimiento que ha alcanzado a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros sacerdotes,
a nuestros profetas, a nuestros padres y a todo tu pueblo, desde los días de los reyes de
Asiria hasta este día. Pero, tú eres justo en todo lo que ha venido sobre nosotros; porque
rectamente has hecho, mas nosotros hemos hecho lo malo. Dios hace justicia sobre la
desobediencia de su pueblo.

Salmo 5:5-6 Los insensatos no estarán delante de tus ojos; Aborreces a todos los que
hacen iniquidad. Destruirás a los que hablan mentira; Al hombre sanguinario y engañador
abominará Jehová. Dios hará justicia en el día del Señor, cuando dará el pago según sus
obras.

Nahum 1:2-3 Jehová es Dios celoso y vengador; Jehová es vengador y lleno de


indignación; se venga de sus adversarios, y guarda enojo para sus enemigos. Jehová es
tardo para la ira y grande en poder, y no tendrá por inocente al culpable. Jehová marcha
en la tempestad y el torbellino, y las nubes son el polvo de sus pies. Dios, aunque es
longánimo, es decir tardo para airarse, dará el pago a sus enemigos, a aquellos que no
quisieron recibir y adorar a Cristo.

29 de septiembre de 2022

En el capítulo estamos meditando en el tema de Dios y de la Santa trinidad, y en el párrafo


1 hemos meditado brevemente, porque se podría meditar mucho más, en los grandiosos
atributos de Dios. Yo los animo a que individualmente se propongan a profundizar en este
estudio de quien y como es nuestro majestuoso Dios. Les aseguro que quedaran
asombrados de todo lo que la escritura revela acerca de él.

Pero habiendo abordado lo que él es, ahora pasemos al párrafo 2, el cual trata acerca del
tema de Las relaciones de Dios con sus criaturas. El párrafo enseña quien es Dios y
quiénes son sus criaturas.

Leamos el párrafo 2: Teniendo Dios en sí mismo y por sí mismo toda vida, gloria, bondad y
bienaventuranza, es todo suficiente en sí mismo y respecto a sí mismo, no teniendo
necesidad de ninguna de las criaturas que ha hecho, ni derivando ninguna gloria de ellas,
sino que solamente manifiesta su propia gloria en ellas, por ellas, hacia ellas y sobre
ellas;1 él es la única fuente de todo ser, de quien, por quien y para quien son todas las
cosas, teniendo sobre todas las criaturas el más soberano dominio para hacer mediante
ellas, para ellas y sobre ellas todo lo que le agrade;2 todas las cosas están desnudas y
abiertas a sus ojos; su conocimiento es infinito, infalible e independiente de la criatura, de
modo que para él no hay ninguna cosa contingente o incierta.3 Es santísimo en todos sus
consejos, en todas sus obras y en todos sus mandatos;4 a él se le debe, por parte de los
ángeles y los hombres, toda adoración, todo servicio u obediencia que como criaturas
deben al Creador, y cualquier cosa adicional que a él le placiera demandar de ellos.5

1. Su independencia referente a ellas.


2. Su dominio soberano sobre ellas.
3. Su conocimiento absoluto de ellas.
4. Su santidad total ante ellas.
5. Sus derechos intrínsecos sobre ellas
En la primera frase se enfatiza la independencia de Dios respecto a sus criaturas.
Básicamente lo que se refiere es que Dios no depende en nada de su creación, recordemos
que en el párrafo anterior ya habíamos estudiado el atributo de la aseidad o autoexistenica
de Dios, él no necesita de la creación para ser Dios. No necesita de nada ni de nadie para su
existencia. Dios es el único ser que tiene vida en sí mismo. No hay otro ser como Dios, los
demás seres creados dependen de Dios para su existencia, no tienen vida en sí mismos. En
Este momento estamos aquí reunidos en esta sala, estudiando, meditando, leyendo las
escrituras, es porque sencillamente Dios nos ha dado la vida, nos mantiene con vida. Sin él
no existiríamos, ni tampoco nada de lo que hay en el universo.

Juan 5:26 Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha dado al Hijo el
tener vida en sí mismo. Es un atributo divino, no existe otro ser que tenga vida en sí mismo.
Nosotros no vivimos porque estemos sanos o porque estemos jóvenes, o porque nos
cuidemos en nuestra salud, porque vemos que los jóvenes y los sanos mueren, sino que
tenemos la vida porque Dios nos la está dando. El universo existe porque Dios lo sostiene.
Nada hay en la creación que no dependa de él.

Cuando hablamos de este atributo de Dios debemos ver en contraste quienes son sus
criaturas, entonces vemos que las criaturas de Dios no tienen vida en sí mismos, sino que
dependen de Dios para existir. Salmo 104:29 Escondes tu rostro, se turban; Les quitas el
hálito, dejan de ser, Y vuelven al polvo. Hay un infinito contraste entre quien es Dios y
quienes son sus criaturas en referencia a su existencia y dependencia. El ser humano no es
independiente de Dios en cuanto a su existencia, si vive es porque Dios le da esa capacidad
de vivir.

Hechos 17:24-25 El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor
del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, 25 ni es honrado
por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y
aliento y todas las cosas. El apóstol Pablo a los filósofos de Atenas les aclara que Dios no
necesita de la creación para existir, pero la creación si necesita de Dios para su existencia.

Colosenses 1:17 Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten. Pablo
hablando de nuestro Señor Jesucristo, hablando de que él es eterno, y de que todas las cosas
en él subsisten, es decir, dependen de Dios para existir, para subsistir.
Hebreos 1:3 el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia,
y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la
purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la
Majestad en las alturas. Si Dios quitara ese sustento toda la creación, absolutamente toda
dejaría de ser, en cambio Dios tiene subsistencia en sí mismo. La criatura depende de Dios,
pero Dios no depende de la criatura para su existencia. Dios era Dios antes de que la
criatura existiera, era glorioso, maravilloso, antes de la creación. Muchos piensan que Dios
hizo la creación porque se sentía solo, porque necesitaban que alguien lo adorase, y por eso
creó el universo. Pero eso no es verdad, porque Dios es glorioso antes de la creación, es
eternamente glorioso, si Dios necesitara de la creación para ser bendito, glorioso y
majestuoso, entonces Dios no era un ser perfecto, pero la escritura enseña que él es un ser
perfecto, inmutable, sus perfecciones son eternas.

Dios no depende de nada en referencia a su existencia, pero también en referencia a su


gloria. En la parte inicial del párrafo dice teniendo Dios en sí mismo vida, pero también
habla de gloria, y luego dice no teniendo necesidad de sus criaturas para ser glorioso. Antes
de ser muerto Esteban llama a Dios el Dios de la gloria. La expresión gloria enseña que
Dios es pleno en sí mismo, no necesita de nada ni de nadie para ser feliz, para ser bendito.
No necesita de la creación para ser pleno en si mismo, si necesitara de la creación para ser
pleno en sí mismo, entonces es porque no fue perfecto en algún momento en su existencia,
pero el es inmutable, él no cambia, Dios no necesita de la creación para ser bendito,
glorioso, majestuoso, feliz.

Juan 17:5 Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve
contigo antes que el mundo fuese. Dios no creo el universo porque estuviera solo o porque
no era pleno, sino que lo creó porque le plació hacerlo, se trazó un objetivo con ello, pero
no porque le era necesario el universo para que él fuese glorioso. La gloria de Dios ni
aumenta ni disminuye por la acción de los hombres, la gloria de Dios es perfecta antes de la
creación, después de la creación, y será perfecta por toda la eternidad. Así que el ser
humano no aumenta la gloria de Dios.

Job 22:2-3 ¿Traerá el hombre provecho a Dios? Al contrario, para sí mismo es provechoso
el hombre sabio.3 ¿Tiene contentamiento el Omnipotente en que tú seas justificado, O
provecho de que tú hagas perfectos tus caminos? La respuesta claramente es NO,
NINGUNA. Y aunque algún creyente pudiera pensar y decir que con alguna cosa que
hiciese contribuiría a aumentar la gloria de Dios, es un error. Lo cierto es que la gloria de
Dios no aumenta ni disminuye con las acciones de los hombres. La gloria de Dios no
depende de ninguna de sus criaturas.

Jeremías 9:23-24 Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se


alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. 24 Mas alábese en esto el que se
hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia,
juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová. Si alguna criatura, si
el hombre quiere gloriarse en algo, debe gloriarse en conocer a Dios. Dios no depende de
nada ni de nadie en referencia a su bendita gloria.

Teniendo esto en cuenta debemos preguntarnos ¿hay alguna manera en que podemos
glorificar a Dios? La respuesta es que podemos agradar a Dios de alguna manera. Vimos
hace un momento en Job que en ninguna manera quitamos o aumentamos la gloria de Dios,
pero si de alguna manera podemos agradar a Dios, y ese debe ser el objetivo de nuestra
existencia.

Pensemos en lo siguiente ¿Por qué Dios creó al ser humano a su imagen y semejanza? ¿Qué
propósito se trazó Dios con esto? El objetivo era que en medio de su creación hubiese una
criatura que mostrará los atributos divinos. Así que, si hay formas de ser agradables a Dios,
obedeciéndolo, reflejando sus atributos divinos.

Pablo en Efesios enseña y exhorta a los creyentes a que deben cambiar sus vidas, deben
despojarse de su viejo hombre que esta viciado de los deseos engañosos y revestirse del
hombre de justicia creado según Dios, que refleje quien es Dios. Efesios 5:1-2 Sed, pues,
imitadores de Dios como hijos amados. 2 Y andad en amor, como también Cristo nos amó,
y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante. Entonces
a la pregunta podemos de alguna manera glorificar a Dios, la respuesta es podemos ser
agradables a Dios con una vida que refleje los atributos de Dios en medio de la creación.

Comentarista: Dios es el gran original, todo lo demás, de una forma u otra, es un mero
reflejo de él. Tan simple es esta gran realidad, pero rara vez vemos que el hombre la capte
conscientemente en su pensamiento, como si necesitase de algo, por el contrario él es quien
da vida a todos y aliento a todas las cosas como dice Pablo en hechos 17:25, como si
alguien pudiera hacer algo que le beneficiara. ¿no es perfectamente evidente que la criatura
nunca podría aspirar algo más excelente que el reflejar a Dios como su imagen? ¿Cómo
puede una imagen añadirle algo a lo que refleja? La verdad inevitable es que solo Dios es
de por si realmente algo y el hombre es de por sí nada, depende completamente de Dios.

Así que el inicio de este párrafo 2 Dios es maravilloso, pues coloca en la posición que debe
colocar a Dios y a la criatura. Tristemente la enseñanza de hoy es centrada en el hombre y
no en el magnífico Dios que nos revela las escrituras.

El hombre común piensa: voy a vivir para mi gloria, ese es el pensamiento común de los
hombres. El pensamiento común de los hombres no es como agrado a Dios, como puedo
glorificar con mi vida a Dios, ese no es el pensamiento de los hombres, sino el pensamiento
de los hombres es voy a vivir para mi gloria, como puedo aumentar el gozo en ni vida, ese
es el pensamiento común de los hombres.

Hermanos, el ser humano a olvidado algo: que es una criatura, esto no es algo que esta en el
pensamiento común de los seres humanos. Cuando decimos que es una criatura lo que se
enfatiza es que tiene un creador. Y esa criatura no se ha puesto a pensar que el creador tiene
un objetivo con su creación. Si la criatura no vive bajo el objetivo por el cual fue creado
entonces se convierte en un completo desastre. La criatura no se ha detenido a pensar que
es: es una criatura, hay un creador que tiene un objetivo con su vida.

Continuando con la CF, la segunda frase nos deja ver un segundo aspecto: el dominio de
Dios sobre sus criaturas. Él es la única fuente de todo ser, de quien, por quien y para
quien son todas las cosas, teniendo sobre todas las criaturas el más soberano dominio
para hacer mediante ellas, para ellas y sobre ellas todo lo que le agrade. Como criaturas
tenemos un creador y el creador tiene un objetivo con nuestra existencia. La creación entera
tiene un objetivo: manifestar la gloria de Dios, reflejar la gloria de Dios, ese es el objetivo
que tiene la creación.

Romanos 11:34-36 Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su
consejero? 35 ¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado? 36 Porque
de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén. El
apóstol Pablo al llegar al fin de la exposición de lo que es el evangelio, en la carta a los
romanos, después de volver a colocar al hombre en el objetivo, en esa imagen que perdió,
expresa que todo es de él (el creador), todo es por él (es el sustentador) y para él (el
objetivo de la creación que es manifestar su bendita gloria).

Apocalipsis 4:11 Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú
creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas. Dios es el creador, él
tiene un objetivo con su creación: manifestar en su creación su bendita gloria.

Daniel 4:25,34-35 Que te echarán de entre los hombres, y con las bestias del campo será
tu morada, y con hierba del campo te apacentarán como a los bueyes, y con el rocío del
cielo serás bañado; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que conozcas que el Altísimo
tiene dominio en el reino de los hombres, y que lo da a quien él quiere. 34 Mas al fin del
tiempo yo Nabucodonosor alcé mis ojos al cielo, y mi razón me fue devuelta; y bendije al
Altísimo, y alabé y glorifiqué al que vive para siempre, cuyo dominio es sempiterno, y su
reino por todas las edades. 35 Todos los habitantes de la tierra son considerados como
nada; y él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y
no hay quien detenga su mano, y le diga: ¿Qué haces? El hombre más poderoso de una
época determinada en la tierra: Nabucodonosor confeso esas palabras. Dios tiene el
dominio, él es el creador, de él depende la existencia de las criaturas y él tiene un objetivo
con su creación. Así que esto nos coloca en la posición real, de el objetivo de nuestra
existencia. Cada persona, cada ser que vaya no tras ese objetivo de la existencia va a
encontrar una insatisfacción dentro de su ser.

Continuando con la CF, la tercera frase nos deja ver un tercer aspecto: El conocimiento
absoluto de Dios de sus criaturas. Todas las cosas están desnudas y abiertas a sus ojos; su
conocimiento es infinito, infalible e independiente de la criatura, de modo que para él no
hay ninguna cosa contingente o incierta. Hermanos no hay nada que tome por sorpresa a
Dios, como si él no supiese que fuese a suceder, eso es imposible porque todo el universo
depende de él.

Hechos 17:28a Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos. Pensemos por un momento
en esto: en Dios vivimos, nos movemos y somos. De él dependemos para existir, él es
nuestro creador y tiene un objetivo con sus criaturas: manifestar su gloria. ¿habrá algo que
Dios no conozca de su creación? ¿habrá algo que Dios no conozca de sus criaturas? ¿puede
el ser humano tener algún pensamiento que este oculto a Dios? ES IMPOSIBLE. La
creación no podría existir sin él, en él vivimos, nos movemos y somos. Hermanos…
tristemente se enseña en algunas iglesias una independencia en el pensamiento del hombre
en torno a Dios, pero eso es imposible porque Dios es omnisciente, él lo conoce
absolutamente todo.

Hebreos 4:13 Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas
las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
Hermanos no podemos decir que Dios no conoce las decisiones que podamos llegar a
tomar, eso es imposible, en un universo creado por Dios es imposible. Todas las criaturas
dependen de él, de su existencia.

Salmo 147:5 Grande es el Señor nuestro, y de mucho poder; Y su entendimiento es infinito.


Dios es sin límites, Dios no tiene límites en su conocimiento. Ahora mismo el conoce lo
que hay en tus pensamientos, ahora mismo él conoce lo que vas a hacer inmediatamente
terminemos el estudio. Tu no sabes lo que pasará ahora que terminemos el estudio, pero
Dios si lo sabe. Eso nos debe dejar asombrados del poder y de la sabiduría del Dios que ha
tenido misericordia con nosotros y se nos ha revelado.

Hechos 15:18 Dice el Señor, que hace conocer todo esto desde tiempos antiguos. En ese
concilio de Jerusalén se habla acerca de lo que para los judíos era un gran misterio, que los
gentiles también serían llamados pueblo de Dios. NO hay nada oculto para él.

Juan 2:24-25 Pero Jesús mismo no se fiaba de ellos, porque conocía a todos, y no tenía
necesidad de que nadie le diese testimonio del hombre, pues él sabía lo que había en el
hombre. Algunos decían creer en Jesús por las maravillas que hacía, pero él los conocía a
todos y no necesitaba que nadie le informara nada acerca de ellos, pues él conoce siempre,
en todo momento el interior del ser humano.

¿por que no hay nada que Dios no conozca? ¿será que Dios es como un clarividente? ¿será
que ve el futuro como si estuviera viendo el presente? ¿hay un universo paralelo donde
puede ver el futuro? Muchas veces se afirma esto cuando se habla de la omnisciencia de
Dios, pero eso es incorrecto, porque Dios sabe absolutamente todo sencillamente porque
Dios ha decretado todo (eso lo veremos con mayor detenimiento en el capítulo 3 de la CF:
el decreto de Dios). Lo que ha acontecido, lo que está aconteciendo, y todo lo que va a
acontecer, es porque Dios lo ha decretado. Así que Dios puede hablar de lo que va a
acontecer porque el simplemente lo decretó.

Isaías 46:9-11 Acordaos de las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy
Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí, que anuncio lo por venir desde el
principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho; que digo: Mi consejo
permanecerá, y haré todo lo que quiero; que llamo desde el oriente al ave, y de tierra
lejana al varón de mi consejo. Yo hablé, y lo haré venir; lo he pensado, y también lo haré.
Hermanos, NO HAY NADA OCULTO, NO HAY NADA QUE DIOS NO SEPA, porque
todo lo que acontece en su creación, en su universo, es porque Dios lo ha decretado.

Continuando con la CF, la cuarta frase nos deja ver un cuarto aspecto: su santidad total ante
su creación. Es santísimo en todos sus consejos, en todas sus obras y en todos sus
mandatos. La palabra santísimo tiene una especial connotación y significa separado, esa es
la principal connotación. Separado principalmente del pecado, pero también, referente a los
decretos divinos, significa que el no ha decretado lo que ha de acontecer, las cosas que van
a suceder, siendo presionado o influenciado por algo en referencia a sus criaturas, pues la
Cf dice que Dios es santísimo en todos sus consejos, obras y mandatos. Él lo ha hecho
porque así ha querido, así le ha placido, que sucediera de esa manera. Por esa razón
encontramos versículos que hablan de esa independencia en sus actos y también que hablan
de que todo lo que hace es bueno.

Deuteronomio 32:4 Él es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son
rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto. Todos los
decretos, acciones, decisiones, determinaciones de Dios son correctas, son perfectas. ¿Los
seres humanos podrían en algún momento poner en duda las determinaciones de Dios? De
ninguna manera.

Isaías 45:19b Yo soy Jehová que hablo justicia, que anuncio rectitud. Dios es justo y recto
hermanos.
Romanos 7:12 De manera que la ley a la verdad es santa, y el mandamiento santo, justo y
bueno. Todos los mandamientos de Dios son buenos, son para nuestro bien, y para su
gloria. Tristemente en algunas iglesias se enseña que el ser humano se puede quejar delante
de Dios por lo que sucede. A veces por ignorancia se escucha decir estuve peleado con
Dios, estuve bravo con Dios por lo que sucedió, pero ya me reconcilié. HERMANOS…
eso es no conocer quien es nuestro majestuoso Dios, nuestro bondadoso Dios, nuestro sabio
Dios.

Samuel Waldron: Cuestionar las decisiones de Dios es profanar con mentes y manos
impuras las obras de lo absolutamente santo.

Ante los reclamos de injusticia por los decretos divinos Dios da evidencias en la escritura
de su respuesta. Job siendo un hombre temeroso, en un momento de su vida pierde todo, y
Dios responde a Job de la siguiente forma (en el final del libro): coloca a Job delante de él y
le dice yo soy Dios y tu eres una criatura, y Job estuvo satisfecho con esa respuesta.

Job 40:2,8 ¿Es sabiduría contender con el Omnipotente? El que disputa con Dios,
responda a esto. 8 ¿Invalidarás tú también mi juicio? ¿Me condenarás a mí, para
justificarte tú? Y Job responde sabiamente de oídas te había oído, como dicen algunas
personas, que dicen adorar a Dios, pero no conocen la majestuosidad de Dios y sin pensar y
meditarlo bien abren su boca contra Dios. De odias te había odio, pero ahora te veo con
mis propios ojos, por lo tanto me retracto de lo que he dicho y me arrepiento en polvo y
ceniza.

Romanos 9:19-20 Pero me dirás: ¿Por qué, pues, inculpa? porque ¿quién ha resistido a su
voluntad? 20 Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el
vaso de barro al que lo formó: Por qué me has hecho así? ¿O no tiene potestad el alfarero
sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra?
Pablo hablando en romanos de la verdad de la elección y predestinación, medita en que
alguna persona al escucharlo puede surgirle preguntas, y este versículo es una de esas
preguntas que pueden surgir, pero Pablo se adelanta a aquellos que pueden decir que no es
justo que Dios elija a unos para salvación y a otros solamente los deje en su camino de la
condenación. Pablo les responde ¿Quién eres tu para pedirle cuentas a Dios? ¿no tiene
derecho el alfarero para hacer unas vasijas para un uso especial y otras vasijas para usos
ordinarios? Cuando alguien cuestiona los decretos divinos, los acontecimientos de la vida,
Dios responde tu eres una criatura, yo soy Dios todopoderoso y bueno, y no da otra
explicación.

Así que, la respuesta apropiada al entender quien es Dios, su majestuosidad, su grandeza, su


soberanía, su sabiduría infinita, es que los hombres le adoren. Por esa razón la CF continua
y con la última frase nos deja ver: los derechos de Dios intrínsecos sobre las criaturas. a él
se le debe, por parte de los ángeles y los hombres, toda adoración, todo servicio u
obediencia que como criaturas deben al Creador, y cualquier cosa adicional que a él le
placiera demandar de ellos.

Entonces, recordemos que el Señor Jesucristo enseña que cuando alguien hace la voluntad
de Dios recibe el rotulo de siervo inútil ¿Por qué? Porque lo que debías hacer hiciste.
Entonces, ante nuestro Dios debemos obediencia y adoración.

Job al inicio, antes de la llegada de sus amigos, expresa las palabras más perfectas de como
se debe responder a Dios en medio del dolor. 1:21 y dijo: Desnudo salí del vientre de mi
madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová
bendito.

Antes de morir el hijo de David, él ruega a Dios antes de que muriese para que el Señor le
conceda la vida, pero muerto el niño, David se levanta y va a dorar a Dios. Esta debe ser la
respuesta apropiada de la criatura que conoce la majestuosidad de Dios.

Apocalipsis 5:12-14 que decían a gran voz: El Cordero que fue inmolado es digno de
tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza. Y
a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y
a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero,
sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos. Los cuatro seres
vivientes decían: Amén; y los veinticuatro ancianos se postraron sobre sus rostros y
adoraron al que vive por los siglos de los siglos. Así debemos responder a ese asombroso
Dios, nuestro Dios, nuestro Padre, nuestro salvador.

Entonces hermanos así la Cf en el párrafo 2 presenta la correcta posición entre Dios y su


creación que ha sido tergiversada el día de hoy.
13 de octubre de 2022

Hermanos continuamos con el estudio de la confesión de fe en el capítulo 2 que nos habla


acerca de Dios y de la santa trinidad. Ya hemos abordado el párrafo 1 en el cual vimos los
atributos de Dios que son aquellas perfecciones de la esencia de Dios; y también vimos el
párrafo 2 que nos habla de la relación de Dios con sus criaturas, que nos ayuda a tener la
perspectiva correcta de quien es Dios y quienes somos nosotros. Dios es el creador, y
nosotros sus criaturas, lo cual implica que él es independiente de nosotros sus criaturas, el
domina absolutamente sus criaturas, las conoce totalmente, es totalmente diferente en
cuanto a santidad de sus criaturas, y por ello tiene el derecho de recibir adoración y
obediencia.

Ahora, este capítulo finaliza en el párrafo 3 que nos habla acerca del grandioso tema de la
trinidad de Dios. Leamos el párrafo: En este Ser divino e infinito hay tres subsistencias, el
Padre, el Verbo o Hijo y el Espíritu Santo,1 de una sustancia, un poder y una eternidad,
teniendo cada uno toda la esencia divina, pero la esencia indivisa:2 el Padre no es de
nadie, ni por generación ni por procesión; el Hijo es engendrado eternamente del Padre, y
el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo;3 todos ellos son infinitos, sin principio y,
por tanto, son un solo Dios, que no ha de ser dividido en naturaleza y ser, sino distinguido
por varias propiedades relativas peculiares y relaciones personales; dicha doctrina de la
Trinidad es el fundamento de toda nuestra comunión con Dios y nuestra consoladora
dependencia de él.

Dividiremos nuestro estudio en 4 puntos:

1. La unidad de las tres personas.


2. Las distinciones entre las tres personas.
3. Explicación.
4. Propósito de la doctrina.

Cuando estudiamos la doctrina de la Trinidad debemos tener como base que la doctrina de
la Trinidad es y será por siempre un misterio. Nuestra finitud no puede abarcar plenamente
la esencia de Dios, un ser infinito. Así que cuando nosotros nos acercamos a estudiar la
doctrina de Trinidad nos acercamos entendiendo que no vamos a poderla entender
plenamente, porque es un misterio. No vamos a poderla entender ahora ni nunca. Nosotros
somos un ser infinito, y en nuestra finitud no tenemos la capacidad de poder abarcar lo
infinito.

Es por eso que las diferentes confesiones de fe no tratan de explicar la doctrina de la


Trinidad. Ningún credo, ninguna confesión de fe, trata de explicar la doctrina de la
Trinidad. Es imposible. Los diferentes concilios de la historia de la iglesia, los diferentes
credos que se han desarrollado en la historia de la iglesia, las diferentes confesiones que se
han dado en el transcurrir de la historia de la iglesia, ninguno ha tratado de explicar Qué es
la doctrina de la Trinidad, eso es imposible.

Entonces, ¿qué hacen las confesiones de fe, que hacen los credos, que ha hecho la iglesia en
torno a la verdad que se observan en las escrituras? lo que ha hecho es Definir la doctrina,
expresar de una manera concisa lo que la Biblia enseña acerca de la doctrina de la Trinidad.
Define la doctrina y al hacer esto evita llegar a tratar de dar expresiones tan simples que
caen en las herejías.

Aquellos que han tratado de explicar la doctrina de la Trinidad han caído en herejías. Así
que cuando nosotros estudiamos misterios de Dios, como lo es la doctrina de la Trinidad,
debemos entender que se va a expresar lo que la escritura enseña, pero nunca vamos a
entender plenamente un misterio cómo lo es la doctrina de la Trinidad.

Esta doctrina de la trinidad es una razón más para refutar a aquellos que dicen que el
cristianismo es una invención humana, que la biblia fue inventada por hombres, pues la
trinidad, humanamente hablando, parece contradictoria y nadie se atrevería a inventarla,
formularla y proclamarla. La trinidad es una verdad revelada por Dios y no de invención
humana. No creemos la doctrina de la Trinidad porque es evidente o lógicamente
convincente por sí misma. La creemos porque Dios ha revelado que es así. Como alguien
ha dicho de esta doctrina: Trata de explicarla, y perderás la cabeza; pero trata de negarla,
y perderás el alma.
Vamos, entonces a iniciar con la primera frase que nos indica la unidad de las tres
personas, dice: En este Ser divino e infinito hay tres subsistencias, el Padre, el Verbo o
Hijo y el Espíritu Santo.

Nosotros podemos ver tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento una
confesión entorno a quién es nuestro Dios. En el AT la vemos en Deuteronomio 6, que es lo
que se conoce como el Shemá de Israel, el Oye Israel, el cual es una comprensión acerca de
quién es Dios. Deuteronomio 6:4 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es.
Encontramos claramente en el Antiguo Testamento una exposición de que solo existe un
Dios, los demás que se hacen llamar dioses son falsos, son ídolos, no existen.

1 corintios 8:4-6 Acerca, pues, de las viandas que se sacrifican a los ídolos, sabemos que
un ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un Dios. 5 Pues aunque haya algunos
que se llamen dioses, sea en el cielo, o en la tierra (como hay muchos dioses y muchos
señores), 6 para nosotros, sin embargo, solo hay un Dios, el Padre, del cual proceden
todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son
todas las cosas, y nosotros por medio de él. Pablo hace esta misma confesión que
encontramos en Deuteronomio 6.

Entonces encontramos tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento la


verdad expresada de la existencia de un solo Dios. No existe sino un solo Dios. Ahora con
la venida de nuestro señor Jesucristo que se le llamaba Emanuel, Dios con nosotros, la
doctrina de la Trinidad se hace clara, evidente, y no solo con la venida de nuestro señor
Jesucristo, sino también con el derramamiento del Espíritu Santo se hace clara la realidad
de la doctrina de la Trinidad.

Mateo 3:16-17 Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los
cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía
sobre él. Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo
complacencia. En el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento hay una confesión que
Dios es uno, solo existe un Dios, no existen diferentes dioses, y ahora vemos que en el
nuevo testamento se da una clara expresión acerca de la Trinidad de Dios Y esto es posible
porque la doctrina Trinidad se hace visible con la Encarnación, con la venida del Señor
Jesucristo, Emmanuel, Dios con nosotros. Y también por el derramamiento del Espíritu
Santo. En este pasaje vemos que solamente Dios puede hablar desde los cielos. También
vemos que quién puede capacitar la naturaleza humana del señor Jesucristo para cumplir su
ministerio sólo es Dios.

El teólogo Warfield dice: no podemos decir que la doctrina de la Trinidad, sí estudiamos la


exactitud del idioma original, se revele de modo más evidente en el Nuevo Testamento que
el Antiguo, pues el Antiguo Testamento fue escrito antes de su revelación, el nuevo
después. La revelación en sí fue hecha, no en palabras, sino en hechos. Fue hecha en la
encarnación del Hijo de Dios y el derramamiento del Espíritu Santo. La revelación de los
dos testamentos respecto a esta revelación es que el Antiguo Testamento es preparatorio
antes de su llegada y el nuevo es el producto.

Muchas personas se preguntan ¿el Antiguo Testamento realmente no revela la doctrina de


la Trinidad?, pues entendiendo, como bien lo expresa este teólogo Warfield, con la venida
del Señor Jesucristo y el derramamiento del Espíritu Santo se hace mucho más patente y
con potencia la verdad de la doctrina de la Trinidad en el Nuevo Testamento, pero cuando
leemos el Antiguo Testamento con la luz del nuevo testamento, y de esa verdad revelada,
podemos ver pasajes del Antiguo Testamento que claramente exponen la verdad de la
doctrina de la Trinidad, es decir, que con la luz del NT y del hecho histórico de la venida
del Señor Jesucristo y el derramamiento del Espíritu Santo podemos ver y entender, y hacer
claros pasajes del AT que nos muestran la doctrina de la Trinidad.

Genesis 1:1-3 se ve manifestada la presencia de las tres personas divinas. En el principio


creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas
estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas. Y
dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz.

Juan 1:1-3 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. 2
Este era en el principio con Dios. 3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de
lo que ha sido hecho, fue hecho.

Cuando nosotros leemos Génesis 1:1-3 a la luz de Juan 1:1-3 podemos ver y entender la
presencia de las tres personas divinas. Claramente Génesis 1 habla acerca de Dios el padre,
en el principio creó Dios los cielos y la tierra, pero también habla de la presencia del
Espíritu Santo como manteniendo la creación, sustentando la creación, pero también nos
habla que Dios dijo, esas palabras las toma el apóstol Juan para expresar en el capítulo 1 en
el principio era el verbo y el verbo era con Dios y el verbo era Dios y en el principio estaba
el verbo con Dios y todo fue hecho por él y todo lo que existe, existe por medio de él, del
verbo. Así que desde Génesis 1:1-3 podemos ver la presencia de la Trinidad en acción en
referencia a la creación, pero eso gracias a la luz que nos da el Nuevo Testamento con la
Encarnación de nuestro señor Jesucristo y la venida del Espíritu Santo.

En Génesis 1:26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a
nuestra semejanza. Claramente se observa que hay un consejo divino para crear al hombre,
pues el verbo hacer está en plural (hagamos) ¿cómo puede ser esto si Dios no fuera 3 y 1 a
la vez? sería imposible poder entender estos pasajes. Muchas personas haciendo una
interpretación incorrecta dicen que aquí Dios está hablando con los Ángeles, y esto es
imposible porque nosotros no somos creados a imagen y semejanza de los Ángeles, sino
que somos creados a imagen y semejanza de Dios. Así que estás referencias plurales que
encontramos por ejemplo en este pasaje de Génesis 1:26 con la luz de la verdad acerca de la
Trinidad de Dios podemos entender que aún el Antiguo Testamento hablaba acerca de Dios
de una manera trina.

Es más, en Génesis 11:5,7 cuando Dios decide juzgar a aquellos hombres que tenían el
propósito de ir en contra de la voluntad de Dios, dice: Y descendió Jehová para ver la
ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres. 7 Ahora, pues, descendamos, y
confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero. Se
habla de una manera singular y después de una manera plural, y entonces podemos ver toda
la potencia que tiene la luz de la realidad de la Trinidad de Dios expresada con la
Encarnación de nuestro señor Jesucristo y con el derramamiento del Espíritu Santo.

Y nosotros encontramos en muchas partes del Antiguo Testamento que nos habla acerca del
ángel de Jehová, la presencia física de un enviado de Dios. Pero es llamativo que muchos
pasajes que hablan del ángel de Jehová se hace referencia a que es el Señor mismo en
presencia, y es el Señor mismo, pero a la vez es un enviado del Señor. Así que,
básicamente, lo que se nos presenta es que no hay otra posibilidad, sino que aun desde el
AT se nos venía hablando de la pluralidad, de la trinidad.
Así que con la luz que nos da la Encarnación de nuestro señor Jesucristo y el
derramamiento del Espíritu Santo podemos entender que aún en el Antiguo Testamento, y
Estos son solo algunos pasajes de muchos pasajes que encontramos en el Antiguo
Testamento, que el mismo Antiguo Testamento hablaban acerca de nuestro Bendito Dios, el
Dios trino.

El comentarista bíblico James williamson dice lo siguiente: así que mientras el creyente del
Antiguo Testamento no veía una manifestación tan clara de las tres personas como hemos
podido ver nosotros en Cristo encarnado y el Espíritu Santo derramado en Pentecostés,
aún así, innegablemente, el Dios que se revela progresivamente en la historia del Antiguo
Testamento es el mismo Dios y no otro. Conociendo como tal cómo lo hacemos ahora,
estos relatos del Antiguo Testamento tienen perfecto sentido, lo cual de otra manera no lo
tendrían. Entonces es claro que en el AT se revela la doctrina de la Trinidad. Nosotros
ahora después de la Encarnación del señor Jesucristo y la venida del Espíritu Santo
podemos leer pasajes del AT y entender lo que allí se expresaba gracias a la luz de esa
verdad.

Entonces no es raro que cuando llegamos al nuevo testamento encontremos referencias


directas acerca de la pluralidad de Dios cómo son los casos de lo que se conoce como las
fórmulas trinitarias (es la mención de cada una de las personas de la Santísima Trinidad),
que son aquellos pasajes donde los apóstoles nombraban las tres personas de la Trinidad en
una misma expresión.

Mateo 28:19 Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Aquí se ve en singular la palabra
nombre, no dice nombres. Entonces hay una singularidad en el nombre y después se ve una
pluralidad de personas que componen ese nombre.

Tengamos en cuenta qué dentro de las culturas del siglo primero, de las regiones del medio
oriente, el nombre no era lo mismo que es el nombre para nosotros hoy en día. Para
nosotros el nombre es la identificación de alguien, es un nombre que se le colocó porque
nos gustó, pero en el siglo primero y en esas culturas antiguas el nombre hacía referencia a
lo que era el ser. Así que cuando el Señor Jesucristo dice bautizándolos en el nombre, es
decir, quién es ese ser y empieza nombrar la pluralidad de las personas, es una referencia
directa al carácter trino de nuestro Dios, en el nombre del Padre, y del hijo, y del ES, y no
dice en el nombre del Padre, en el nombre del hijo, y en el nombre del ES, sino en un solo
nombre porque es un solo ser.

2 corintios 13:14 La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del
Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén. El apóstol Pablo no tiene problema en
colocar a la persona del señor Jesucristo antes de nombrar a la persona del Padre. Eso sería
imposible dentro de la mente de los judíos, de colocar a un mismo nivel y mucho más
colocar con antelación el nombre de cualquier persona antes de Dios, en este caso de Dios
padre, sino fuese porque corresponden al mismo ser, a la misma importancia.

Judas 1:20-21 Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en
el Espíritu Santo, conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro
Señor Jesucristo para vida eterna. Lo que conocemos como formulas trinitarias son
expresiones donde están colocados a un mismo nivel, en un mismo nombre, las benditas
tres personas que componen la trinidad. Así que no es casualidad, no es sorpresa, que
encontremos esa referencia directa en el NT claramente tenían la potencia del Dios
encarnado y del derramamiento del ES en la vida de las personas.

Volviendo a leer el párrafo 3 en este ser divino e infinito hay tres subsistencias, el Padre, el
verbo Hijo, y el Espíritu Santo, de una sustancia, un poder y una eternidad, teniendo cada
uno toda la esencia divina, no nos encontramos con sorpresas de las manifestaciones
directas que tienen el NT a esta verdad.

Nunca en la historia de la iglesia se ha colocado en duda que el Padre es plenamente Dios,


pero si se ha colocado en duda a través de aquellos que tratan de explicar la composición
divina de Dios, se ha colocado en duda la divinidad del hijo, pero la escritura enseña que el
hijo es plenamente Dios.

Juan 1:1-3 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este
era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que
ha sido hecho, fue hecho. El apóstol Juan inicia su evangelio con la intención de que
aquellos que leían ese pasaje recordaran el inicio de las escrituras que ellos ya poseían
(génesis). Juan 1 está muy asociado a Génesis 1 en sus expresiones por eso inicia con la
misma palabra en el principio. Pero empieza a decir algo revelador para aquellos que
venían a leer y a entender, entonces quién era nuestro Dios. Dice en el principio era el
verbo, es decir, el verbo es eterno está desde siempre, desde el principio; pero sigue
diciendo y el verbo era con Dios, así que esta persona está a la par del ser divino de Dios de
la persona del Padre está a la par, no está hablando de una persona misma, sino de una
pluralidad de personas. En el principio era el verbo y el verbo era con Dios y ese con Dios
es una preposición que nos indica como una persona al lado de otra, esa es la fuerza que
tiene esta expresión. En el principio era el verbo y el verbo era con Dios nos indica una
pluralidad, y el verbo era Dios es una expresión directa, nos muestra una pluralidad de
personas y después una expresión directa en torno a quien es Dios. Continúa diciendo este
era en el principio con Dios cuando habla con Dios, en el Nuevo Testamento, es para hacer
referencia a Dios Padre principalmente, ya que al Señor Jesucristo casi siempre se le llama
como el Señor y al Espíritu Santo como el Espíritu Santo, esa era la forma que tenían los
apóstoles para hacer la distinción de las personas de la Trinidad. Continua todas las cosas
por el fueron hechas y sin él nada de lo que ha sido hecho fue hecho, como Juan tenía la
intención de que estas palabras se relacionaran con Génesis capítulo 1, por eso Inicia con la
misma expresión en el principio, claramente alguien que leyera Génesis 1 y Juan 1 entendía
lo que estaba haciendo referencia el apóstol Juan, que el Señor, el verbo es el que creó, en
esa pluralidad de la Trinidad y que Juan 1:1-13 una referencia del carácter divino del verbo,
del hijo, de la segunda persona de la Trinidad.

Cuando Juan está finalizando su evangelio, finaliza con la cúspide de la manifestación de


confesión en torno a quien es el Señor Jesucristo. Tomas, aquel discípulo incrédulo porque
no había visto la primera manifestación en resurrección del Señor, después de verlo, cuando
el señor vuelve y se les manifiesta, expresa la cumbre del evangelio de Juan, allí podríamos
decir termina el evangelio de Juan, Tomás dice Señor mío y Dios mío, inmediatamente el
apóstol Juan empieza a decir el Señor Jesucristo hizo muchas otras señales pero estás se
han escrito para que tú creas que Jesús es el hijo de Dios, El Mesías, El Salvador, y para
qué creyendo en él tengas vida en su nombre, prácticamente aquí termina el evangelio, ya
que el capítulo 21 básicamente es la exposición de lo que acontece después a sus discípulos.
Romanos 9:5 de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el
cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén. Pablo también da una
referencia directa en torno a la divinidad de la segunda persona de la Trinidad, la divinidad
del verbo, la divinidad de nuestro señor Jesucristo. Es una referencia directa y clara que
encontramos en el Nuevo Testamento en referencia a la verdad de la doctrina de la
Trinidad. Entonces, no es que en el Antiguo Testamento no existiesen tales declaraciones,
sino que, con la luz de la Encarnación y el derramamiento del Espíritu Santo, cuando
leemos pasajes como los que leímos podemos entender que aún desde el Antiguo
Testamento se nos manifestaba la pluralidad en las personas de nuestro Dios, un solo Dios,
tres personas. pero en el NT vemos referencias directas y entendemos que fue porque
vieron y palparon a aquel maravilloso ser divino que se encarnaba.

Hermanos… también algunos han colocado en duda la divinidad y la personalidad del


Espíritu Santo, pero el NT también habla fuertemente acerca de la personalidad, es decir,
qué el Espíritu Santo es una persona divina. Ya lo meditamos en esto cuando dijimos que
los escritores del nuevo testamento no tienen ninguna restricción para colocar al mismo
nivel al Padre, al Hijo, y al Espíritu Santo, en lo que conocemos como las fórmulas
trinitarias. Sería impensable colocarlos a un mismo nivel si no fuesen Dios y si no fuesen
personas. Así que dentro de las formulaciones trinitarias podemos ver aún la manifestación,
la confesión que nos da el Nuevo Testamento de la personalidad y deidad del Espíritu
Santo.

Hechos 5:3 Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses
al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Aquí vemos una manifestación
directa de la divinidad del Espíritu Santo cuando Ananías y Safira, aquellos falsos
discípulos de Cristo, trataron de engañar a los apóstoles acerca de una heredad que habían
vendido y no habían traído el precio correcto a los pies de los Apóstoles.

Mentir al Espíritu Santo es una referencia a su personalidad, porque básicamente nosotros


no podemos mentirle a una energía o a una, sino a una persona. Pero más adelante en este
mismo pasaje el apóstol Pedro sigue diciendo Por qué pusiste esto en tu corazón no has
mentido a los hombres sino a Dios. Pedro acaba de decir que Ananías había mentido al
Espíritu Santo y después directamente dice que ha mentido a Dios, entonces estos es una
referencia directa a la deidad de la persona del Espíritu Santo.

Así que encontramos manifestaciones directas y claras acerca de la divinidad de la persona


del señor Jesucristo y de la persona del Espíritu Santo, pero también encontramos una
manifestación, una confesión acerca de que Jehová, nuestro Señor uno es, Y también
encontramos también manifestaciones acerca de la pluralidad que existe en nuestro Dios.

La confesión sigue diciendo (2) de una sustancia, un poder y una eternidad, teniendo cada
uno toda la esencia divina, pero la esencia indivisa.

A qué hace referencia la confesión cuando después de decir que cada una de las personas es
plenamente Dios dice la esencia indivisa. Colosenses 2:9 Porque en él habita
corporalmente toda la plenitud de la Deidad. El apóstol Pablo, hablando del señor
Jesucristo, dice toda la plenitud. Y esto es importante, el apóstol Pablo no dice en Jesucristo
habita una parte de lo que es Dios, sino que dice que en Jesucristo habita o está toda la
plenitud de la deidad. Así que nosotros no podemos pensar que el Padre sea una parte de
Dios, no que el hijo sea una parte Dios, y no que el Espíritu Santo sea una parte de Dios, y
que al unirse los tres entonces es plenamente Dios. NO. Este pasaje nos permite a nosotros
afirmar que cada persona es plenamente Dios. Cuando Pablo dice que Jesucristo está
TODA, no una parte, sino TODA la plenitud de la deidad, entonces nos permite eliminar
esa idea que naturalmente y racionalmente se viene a nuestra mente, de pensar acerca de la
Trinidad de que Dios es pleno cuando vemos que está en reunidos Padre, Hijo y Espíritu
Santo, pero la escritura dice que cada persona es plenamente Dios.

Juan 10:30 Yo y el Padre uno somos. Esta es una verdad de la esencia indivisa de Dios.
Nosotros podemos distinguir las personas de la Trinidad, pero es un error tratar de dividir a
las personas de la Trinidad.

Juan 14: 8-11 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta. Jesús le dijo: ¿Tanto
tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a
mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre? ¿No crees que yo soy
en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia
cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras. Creedme que yo soy en el
Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras. La CF después de
mostrar la pluralidad del ser divino, afirma que no podemos dividir la esencia del ser
divino. Eso es lo que nos muestra la escritura. Que no podemos entender plenamente
porque es un misterio.

Entonces podemos confesar que la escritura dice acerca de nuestro Dios, pero llegar a
entender plenamente como es la esencia de nuestro Dios es algo que no tenemos la
capacidad de entender plenamente.

¿Por qué es importante confesar al unidad y pluralidad de nuestro Dios? Porque muchas
personas en la historia de la iglesia han tenido la inquietud de tratar de explicar la doctrina
de la trinidad o lo que se expresa en la doctrina, unos para negarla y otros para corregir lo
que ella expresa. Por ejemplo, en la historia de la iglesia se conoce a un señor llamado
Sabelio que decía: no es que sean tres personas, sino que Dios sea manifestado de 3 formas
distintas en la historia. En el Antiguo Testamento se manifestó como Padre, en el Nuevo
Testamento en la Encarnación del señor Jesucristo como Hijo y después de la Ascensión
del señor Jesucristo sea manifestado como el Espíritu Santo, eso es lo que ha sucedido, pero
no es que sean tres personas. Esto lo escribió Sabelio en el año 200, y fue condenado por la
iglesia. Esta herejía se conoce como el sabelianismo, modalismo, monarquianismo, pues va
en contra de lo que la escritura enseña. Pero estos hombres cómo Sabelio tratan de dar una
explicación a lo que la escritura enseña, pero una vez más, nosotros no estamos llamados a
explicar un misterio, nosotros estamos llamados a exponer lo que la escritura enseña, pero
aquel que trata de explicar un misterio cae, como Sabelio, en errores que van en contra de
lo que la escritura enseña.

Nosotros estamos sometidos a la escritura así no la podamos entender plenamente. Hay


peligro cuando se pasa esa barrera.

En la doctrina de la Trinidad podemos pasar la eternidad tratando de entender ese misterio


maravilloso y no lo vamos a comprender plenamente, porque no tenemos la capacidad,
porque somos seres finitos. Así que es muy importante enfatizar la unidad y pluralidad de
nuestro Dios tal cual como la escritura lo enseña. Pero también es importante enfatizar que
las tres personas son de una misma sustancia y plenamente Dios como vimos que la
escritura enseña.
Hermanos esta herejía del sabelianismo no ha desaparecido de la iglesia cristiana, se
encuentra el día de hoy, por ejemplo, en la Iglesia Pentecostal unida (unicitaria), la cual es
modalista, son los que se conocen como solo Cristo, son modalistas en su concepción de
Dios. Esto no se puede considerar una iglesia cristiana, sencillamente porque no tiene
nuestro mismo Dios, nuestro Dios es un ser trino, el Dios de ellos no es un ser trino, sino
que es algo totalmente diferente. Entonces, no es correcto considerarla una iglesia cristiana
porque no tienen nuestro mismo Dios. Nuestro Dios es un ser trino. Así que es importante
confesar esto que nuestro Dios es un ser trino.

También es importante manifestar la plena deidad de cada una de las personas de la


Trinidad, porque en la historia de la iglesia nos hemos encontrado con personajes que han
tratado de explicar la doctrina de la Trinidad, tergiversándola, uno de ellos y muy famoso el
obispo Arrio de Alejandría del siglo IV, que decía lo siguiente: Se puede decir que el Hijo
es como el Padre o similar al Padre en su naturaleza, pero no se puede decir que sea de la
misma sustancia como el Padre. Dios Padre en cierto momento creó al Hijo y antes de ese
tiempo el Hijo no existía, ni tampoco el Espíritu Santo. Hermanos… esto es herejía, porque
como vemos claramente el Nuevo Testamento no solo manifiesta directamente la deidad de
cada una de las personas de la Trinidad, sino que se reconocen los atributos divinos en cada
una de las personas de la Trinidad.

Es importante manifestar esto, porque aún están en medio de nosotros las ideas y herejías
de Arrio, por ejemplo, los Testigos de Jehová, que tienen estas mismas posiciones que tenía
Arrio desde el siglo IV. Así que es fundamental manifestar la verdad que expresa la
escritura en torno a la doctrina Trinidad así no tengamos la capacidad de entender
plenamente, porque no somos llamados a explicar un misterio, porque no tenemos esa
capacidad, sino que somos llamados a exponer lo que la bendita palabra del Señor dice.

Entonces, podemos resumir la enseñanza de la Biblia en torno a la doctrina de la Trinidad


con tres aspectos que podemos defender con total convencimiento:

1. La escritura nos enseña que Dios es tres personas, a las 3 personas, al Padre al Hijo
y al Espíritu Santo se le llama a Dios. Dios es tres en cierto modo y es uno en
distinto modo. Tres en persona y uno en esencia.
2. La escritura enseña que cada persona es plenamente Dios. Al Padre se dan todos los
atributos divinos, al Hijo se le dan todos los atributos divinos, y al Espíritu Santo se
le dan todos los atributos divinos. Se debe afirmar la deidad de las tres personas,
Padre, Hijo y Espíritu Santo. Cada una de ellas es cualitativamente igual. El Hijo es
divino de la misma manera y en el mismo grado que el Padre, y lo mismo ocurre
con el Espíritu Santo.
3. La escritura enseña que Dios es uno. La unidad de Dios es básica. El monoteísmo
está profundamente implantado dentro de la tradición hebreo-cristiana. Dios es uno,
no varios.

Estos son los tres aspectos fundamentales para defender la doctrina Trinidad, y si los
tenemos presentes tendremos la capacidad de defender Bíblicamente la verdad expuesta de
la doctrina de la Trinidad.

Así que lo que nos dice el párrafo: en este ser divino e infinito hay tres subsistencias el
Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, de una sustancia, un poder y una eternidad, teniendo cada
uno toda la esencia divina, pero la esencia indivisa, ante esto podemos decir si, la Biblia
nos enseña esto acerca de nuestro Dios. Dios es un Dios trino. pero sí quedara así el párrafo
quedaríamos con un problema porque diríamos bueno Dios es uno cada personalidad es
plenamente Dios, ¿Cómo puedo distinguir a cada persona de la Trinidad? Pues
precisamente la parte B del párrafo los va a hablar de que Dios es uno y trino Pero que sea
manifestado de una manera que nosotros podemos distinguir a cada una de las personas de
la Trinidad.

Síntesis

¿Qué significa, entonces, la palabra Trinidad? Significa que Dios es una pluralidad dentro
de la unidad (solo hay un Dios, que está formado por una esencia simple (no compuesta e
indivisible). Dios tiene una pluralidad de personas (subsistencias o hipostasis) y una unidad
de esencia; Dios es tres personas en una naturaleza. Hay solo un "Qué" (esencia) en Dios,
pero hay tres "Quienes" (personas) en ese Qué. Dios tiene tres "Yo" en Su único "Es": hay
tres Sujetos en un Objeto.
El Antiguo Testamento no nos revela plenamente la divina trinidad, aunque la anuncia
implícitamente con varios pasajes. Está doctrina no se reveló completamente a Israel
porque primero era necesario enseñar al pueblo la unidad y unicidad divina, a fin de
prevenirlo contra el politeísmo y la idolatría de ese tiempo.

El nuevo testamento revela claramente la verdad de la trinidad, allí se pueden apreciar las
fórmulas trinitarias. Entonces con la luz del NT se puede entender pasajes del AT donde se
hace alusión a la pluralidad.

Herejías:

1. Modalismo, sabelianismo, monarquismo: El modalismo también se llama


sabelianismo por su fundador, Sabellius (fl. C. 217 – c. 220). El modalismo trata de
defender el monoteísmo (un solo Dios), y por eso sostiene que Dios es solo una
persona que aparece en diferentes modos o roles en diferentes momentos de la
relación de Dios con la humanidad. Dios es definido como un Espíritu único e
indivisible, que se manifiesta al hombre de diversos modos. Creen que en el
Antiguo Testamento Dios se manifestó como Padre, en el Nuevo Testamento
durante su encarnación se manifestó como Hijo y desde pentecostés como Espíritu
Santo. De la cual obtiene el título de "Trinidad económica", en oposición a la
Trinidad ontológica de la teología ortodoxa.
2. Arrianismo: afirma que Jesús fue un ser creado con atributos divinos, pero no
divino en y por Sí mismo. Es decir, es la negación de la consustancialidad del Hijo
con el Padre; en otras palabras, su afirmación de que el Padre solo y en un sentido
absoluto es el único Dios verdadero. Por lo tanto, el Hijo es un ser de rango inferior;
que no participa de la naturaleza divina. Ario (c.250–336), su fundador, esta herejía
niega que Jesús sea completamente Dios, permitiéndole un estado creado por debajo
de Dios. El arrianismo fue condenado como herejía en el Concilio de Nicea ( 325).
3. Parcialismo: Enseña que las 3 personas de la Trinidad son totalmente Dios sólo
cuando se combinan juntas. El parcialismo es una visión defectuosa de Dios que
sugiere que los tres miembros de la Trinidad son cada uno "100% Dios" pero no el
"100% de Dios" Como analogía, el parcialismo señalaría que el Océano Atlántico es
100% agua, y el Océano Pacífico es 100% agua, pero el Océano Atlántico por sí
solo no es el 100% de toda el agua que existe. Según el parcialismo, cada Persona
de la Trinidad es 100% divina por naturaleza, pero Dios sólo es Dios cuando, donde
y si las tres Personas están unificadas. Algunos parcialistas -pero no todos-
ampliarían esta idea, afirmando que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son cada
uno "1/3 de Dios". Si la esencia de Dios se dividiera entre las tres personas,
entonces ninguna de ellas sería divina, y si la esencia fuera replicada en las tres
personas, el resultado sería tres dioses.
4. Subordinacionismo: Esta herejía fue sostenida por Justin Martyr (c. 100 – c. 165) y
Orígenes (c. 185 – c. 254) y condenada en el Concilio de Constantinopla (381).
Afirma que el Hijo está subordinado en naturaleza al Padre. El subordinacionismo
no debe confundirse con la creencia ortodoxa de que el Hijo (Cristo) está
subordinado funcionalmente (es decir, sujeto a) al Padre, aunque esencialmente
igual a Él.
5. Triteísmo: la creencia de que hay tres dioses o tres seres separados en la Deidad. Al
enfatizar correctamente a las tres personas como distintas, es fácil deslizarse en el
lenguaje del triteismo, que erróneamente postula a tres seres separados. Una de las
críticas más comunes a la doctrina bíblica de la Trinidad es que enseña que hay tres
dioses. Esto es falso. La Biblia enseña claramente que hay un solo Dios (Dt. 6:4), y
también enseña claramente que el Padre es Dios (Ef. 4:6; Filip. 4:20; Sant. 3:9;
etc.), el Hijo es Dios (Jn. 1:1-4; 20:28; Heb. 1:3, 8), y que el Espíritu es Dios (Jn.
3:5-7; Hech. 5:3-4; Sal. 139:7-8).
Es importante que quede claro que creemos que hay un solo Dios. Las tres personas
de la Trinidad son Dios, pero no son tres dioses.
Más bien, ellos comparten la misma sustancia divina. Tres personas, una sola
sustancia divina. Ese es el lenguaje aprobado por la Iglesia.

Analogías

1. Agua: modalismo. los tres estados de la materia del H2O. En estado sólido, el H2O
es hielo; en estado líquido, es agua; y en su estado gaseoso, el H2O se convierte en
vapor. Independientemente de la forma en que se encuentre, la composición
química sigue siendo la misma. Sin embargo, la ilustración de los tres estados de la
materia no se ajusta a la realidad porque el hielo, el agua y el vapor no pueden
coexistir en el mismo espacio y tiempo. El Padre, el Hijo y el Espíritu sí coexisten y
están en comunión. También pueden permanecer distintos, mientras que el hielo se
convierte en agua y el agua se convierte en vapor y viceversa. Ahora bien, el Padre
nunca se convierte en el Hijo, ni el Hijo se convierte en el Espíritu; ese
malentendido se llama modalismo. Por lo tanto, el ejemplo de los tres estados de la
materia queda totalmente descartado.
2. Persona con tres roles: modalismo (tres modos)
3. Trebol: parcialismo. Una historia popular cuenta que San Patricio utilizó un trébol
para enseñar a los irlandeses la naturaleza trina de Dios. El trébol tiene tres hojas
que se desprenden de un tallo. Explicó que, al igual que el trébol es una planta con
tres hojas, así también Dios es un Dios con tres personas. Sin embargo, una hoja de
trébol por sí sola no es la planta completa, a diferencia de las Escrituras que enseñan
que cada una de las personas de la Trinidad es completamente Dios en sí misma.
Así que la planta de trébol, aunque resulta útil como ilustración, no es una réplica
exacta de la naturaleza trina de Dios. Otras ilustraciones populares de la Trinidad
que siguen el mismo patrón son una manzana con su cáscara externa, su pulpa
interna y las semillas en el centro; o un huevo con su cáscara, su clara y su yema.
Estas ilustraciones se refieren a un elemento, formado por tres partes; pero cada
parte por sí sola no constituye ese elemento, de modo que estas ilustraciones
también se quedan cortas, ya que se prestan al malentendido llamado parcialismo.
4. Huevo: parcialismo
5. El sol: igualmente, se ha utilizado el sol como ejemplo gráfico de la Trinidad ya que
emite tres tipos diferentes de rayos que proporcionan luz, calor y radiación. Todos
estos rayos proceden del mismo sol y sin alguno de los tres, el sol dejaría de ser el
sol. Sin embargo, los rayos de luz, de radiación o de calor por sí mismos no
constituyen el sol, así que este ejemplo es igual que el del trébol, el huevo y la
manzana. Lo mismo ocurre con el ejemplo del universo formado por el espacio, el
tiempo y la materia puesto que cada elemento por sí solo no es el universo.
27 de octubre

Hasta este momento hemos estudiado en la doctrina de la Trinidad tres verdades que,
aunque no podemos entender, si podemos encontrar en las escrituras:

1. Dios es tres personas, a las 3 personas, al Padre al Hijo y al Espíritu Santo se le


llama Dios. Dios es tres en cierto modo y es uno en distinto modo. Tres en persona
y uno en esencia.
2. Cada persona es plenamente Dios. Al Padre se dan todos los atributos divinos, al
Hijo se le dan todos los atributos divinos, y al Espíritu Santo se le dan todos los
atributos divinos. Se debe afirmar la deidad de las tres personas, Padre, Hijo y
Espíritu Santo. Cada una de ellas es cualitativamente igual. El Hijo es divino de la
misma manera y en el mismo grado que el Padre, y lo mismo ocurre con el Espíritu
Santo.
3. La escritura enseña que Dios es uno. La unidad de Dios es básica. Dios es uno, no
son tres Dioses.

Entonces, si Dios es uno de un modo, y tres de otro modo ¿Cómo podemos distinguir a las
personas de la trinidad? Cada una de ellas es plenamente Dios, cada una de ellas tiene los
atributos divinos, tendríamos que decir que no hay diferenciación en las personas, pero esto
no es así, entonces ¿cómo podríamos distinguir a cada una de las personas de la trinidad, ya
que ninguno es menos Dios que otro? (ejemplo de tres gemelos, como puedo distinguirlos).

La doctrina de la trinidad después de afirmar la igualdad en cuanto a esencia (divinidad,


poder y gloria) pasa a declarar, en cuanto a sus personas, que eternamente se han
relacionado como Padre, Hijo, y Espíritu Santo. Después de enfatizar la doctrina que cada
persona es plenamente Dios, históricamente los concilios, las confesiones de fe, han
entrado a enfatizar que eternamente, siempre se han relacionado, como Padre, Hijo, y
Espíritu Santo.

No es como algunos por error piensan que la segunda persona de la trinidad se hizo Hijo
para cumplir su papel en la redención humana. NO. Sino que eternamente ha sido Hijo.
Eternamente han sido Padre, Hijo, y Espíritu Santo. Entonces hermanos esto es lo que dice
la CF en su frase 3, leámosla: el Padre no es de nadie, ni por generación ni por procesión;
el Hijo es engendrado eternamente del Padre, y el Espíritu Santo procede del Padre y del
Hijo;3 todos ellos son infinitos, sin principio y, por tanto, son un solo Dios, que no ha de
ser dividido en naturaleza y ser, sino distinguido por varias propiedades relativas
peculiares y relaciones personales.

El Padre ha sido Eternamente Padre, el Hijo ha sido Eternamente Hijo, el Espíritu Santo ha
sido Eternamente Espíritu Santo en torno a sus relaciones dentro de la Trinidad. Nunca ha
habido un momento en que el Padre no fuera el Padre para el Hijo o el Hijo no fuera el Hijo
para el Padre

Algunos han malentendido la doctrina de la Trinidad y se han expresado, en cuanto a la


distinción de las personas, de una manera incorrecta.

Entonces, en primer lugar, hablemos del mal entendimiento histórico en torno a las
relaciones trinas como Padre, Hijo, y Espíritu Santo. Siempre hemos dicho que cuando se
va más allá de lo que la escrituras exponen, siempre se cae en herejías, y efectivamente en
la historia de la iglesia se ha caído en herejías en cuanto a está verdad de la generación o
procesión eterna, así se conoce esta doctrina: la generación o procesión eterna. La
generación eterna del Hijo y la procesión eterna del Espíritu. El Padre engendra, el Hijo es
engendrado y el Espíritu procede del Padre y del Hijo.

Una herejía se conoce con el nombre de subordinacionismo (sub=debajo, y ordin=orden.


Regido o gobernado por otro, que está más abajo en orden que otro). Recordemos que
cuando hablamos hace 8 días de las herejías la mencionamos. En la herejía del
subordinacionismo se exponía que el Hijo es inferior en esencia (no es posible porque es
una misma esencia, una sola esencia), atributos, dignidad al Padre, que el Espíritu Santo es
inferior en esencia, atributos, dignidad que el Padre y el Hijo.

Eso es lo que llegaron a expresar muchas personas debido a que se enfatizaban en pasajes
bíblicos como el de Juan 14:28 el Señor Jesucristo dice: Habéis oído que yo os he dicho:
Voy, y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al
Padre; porque el Padre mayor es que yo. Debido a pasajes como este muchos llegaron a
exponer que lo que la escritura enseña entonces es que el Hijo es inferior en esencia,
atributos importancia y dignidad que el Padre, y que el Espíritu Santo es inferior en esencia,
atributos e importancia y dignidad que el Padre y el Hijo. Eso es lo que comúnmente
tradicionalmente o históricamente se conoce como la herejía del subordinacionismo.

Esto claramente es una herejía porque malinterpretan precisamente como la escritura nos
permite distinguir a las personas de la Trinidad en sus relaciones trinas. La escritura no sé
contradice, nunca iría en contra, pues enseña que cada una de las personas de la Trinidad es
plenamente divina. Recordemos Colosenses 2:9 Porque en él habita corporalmente toda la
plenitud de la Deidad. Las escrituras nos enseñan que cada una de las personas poseen
plena y perfectamente los atributos divinos.

Muchas personas entonces leyendo estos pasajes trataron de llegar a explicar, sin tener en
cuenta toda la luz de la bendita palabra del Señor, sin tener en cuenta todos los otros pasajes
bíblicos.

Mal entendiendo entonces las relaciones perfectas y eternas trinas, entonces llegaron a
enfatizar o a decir que había una inferioridad en la segunda persona de la Trinidad y en la
tercera persona de la Trinidad.

Ahora ¿Cuál ha sido el detonante principal para llegar a esta posición subordinacionista
además de malinterpretar pasajes bíblicos? Todo se debe a una palabra en griego que
aparece en el Nuevo Testamento (Juan 1:14, 18; 3:16, 18; 1 Juan 4:9), la palabra
monogenes (mono=uno, unico. Genos=descendiente o nacido).

En la historia de la iglesia se llegó a pensar o a decir que la palabra monogenes era una
palabra que quería decir único engendrado. Cuando nosotros escuchamos la palabra
engendrar inmediatamente lo que hacemos es pensar en lo relacionado con el inicio de una
existencia.

Esta palabra (monogenes) la encontramos en Juan 1:14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y
habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito (único hijo)
(monogenes) del Padre), lleno de gracia y de verdad.

Juan 1:18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito (monogenes) Hijo, que está en el seno del
Padre, él le ha dado a conocer.
Se pensaba, entonces, que monogenes venía de la raíz griega mono genao, es decir, único
engendrado. Y como ya lo dijimos cuando escuchamos engendrar nuestra mente
inmediatamente la relaciona con cómo se engendra un ser en el vientre de una madre, o sea
lo relacionamos con tiene un tiempo de inicio. Entonces, muchas personas pensaron que la
escritura ahí está enseñando que la segunda persona de la Trinidad tuvo un tiempo en que
fue engendrado, que Cristo hubo un momento en que no existía.

Ahora al pasar el tiempo y profundizar en el significado de esa palabra, se llegó a


comprobar que esa palabra no venía de esa raíz, sino que venía de la raíz monogenos qué
significa único en su clase. Así que si nosotros leyéramos y parafraseáramos lo que dice
Juan 1:14 es Y aquel verbo fue hecho carne y hábito entre nosotros y vimos su gloria, gloria
como aquel que es único en su clase.

Las nuevas traducciones de las biblias, principalmente en el inglés, ya están traduciendo


único en su clase, de la misma clase, y ya no la palabra unigénito en el sentido que ya
mencionamos.

A pesar de este cambio de acepción en el tiempo de esta palabra monogenes, aún los
cristianos de tiempos pasados aún cuando creían que la palabra venía de El único
engendrado, a pesar de esto tenían claro a través de la exposición de TODA la Biblia que
Jesucristo es plenamente Dios y que el Espíritu Santo es plenamente Dios, que no tuvieron
un tiempo en que no existían, sino que existieron y eternamente al lado del padre cómo nos
enseña Juan 1:1.

Tal fue la convicción entonces de la iglesia en la historia, que las confesiones de fe y los
concilios históricos, a pesar de que tenían que luchar con el término, siempre que decían
que el Señor procedía del Padre o venía del Padre o era engendrado del Padre, a pesar de
eso siempre enfatizaban su completa deidad.

Esta confesión que estudiamos es de 1689, pero temprano en la historia también vemos la
convicción que tenía la iglesia acerca de esto. El concilio de Nicea en el año 325 dijo:

Creemos en un Dios padre todopoderoso hacedor de todas las cosas visibles e invisibles y
en un señor Jesucristo hijo de Dios engendrado del Padre el unigénito (y dice después de
exponer el unigénito), es decir, de la esencia del Padre, Dios de Dios luz de luz, el mismo
Dios del mismo Dios, engendrado, no he hecho, pues es de una sustancia con el Padre.

A pesar de que tenían esa lucha con el término unigénito (hijo unico), qué era lo que ellos
creían de dónde venía la raíz etimológica, hacían la aclaración acerca de que la segunda y
tercera persona de la Trinidad era plenamente Dios.

¿qué es lo que quieren expresar entonces las confesiones de fe en torno a ese engendrar
eterno de Dios? claramente NO está hablando del inicio de la existencia, NO, sino lo que
está hablando es que eternamente ha existido sus relaciones trinas como Padre, como Hijo y
como Espíritu Santo. Eso es lo que quiere enseñar ese término que se traducía cómo
engendrado o unigénito, eso es lo que quiere enfatizar las confesiones de fe y los concilios.

Así que cuando nosotros encontramos en los libros históricos teológicos acerca de el
engendramiento eterno del Hijo, del Espíritu Santo, tenemos que pensar NO en el
engendramiento de su esencia, sino en su procedencia o relaciones.

Ese fue el problema cuando las personas trataban entonces de explicar el término unigénito,
según el concepto que tenían, hablando del Hijo y el Espíritu, en relación con el Padre, con
una posición inferior o subordinada en esencia. Y eso es lo que se conoce como la herejía
del subordinacionismo. Cuando estamos hablando de esencia o sustancia nos estamos
refiriendo a lo que Dios es.

La CF dice el Padre no es de nadie, ni por generación ni por procesión; el Hijo es


engendrado eternamente del Padre, y el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo.
Cuando la confesión dice esto NO está hablando de lo que es en su esencia o sustancia, sino
que está hablando de cómo se ha relacionado Dios Eternamente en las personas de la
trinidad. Y eso es lo que nos a nosotros nos permite distinguir a las personas de la Trinidad.

Podemos encontrar en las escrituras que el Hijo procede del Padre, y que el Espíritu Santo
procede del Padre y del Hijo, por ejemplo, que el Hijo procede del Padre podemos
encontrarlo en Juan 3:16-17. Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su
Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. 17
Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el
mundo sea salvo por él. Esas relaciones de la trinidad con la creación muestran las
relaciones eternas que ha tenido Dios en su trinidad, Dios es inmutable, no cambia, así que
al ver la relación que tiene la trinidad con la relación, podemos entender la distinción de las
personas de la trinidad.

Juan 5:24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene
vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida. Juan 16:28 Salí
del Padre, y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, y voy al Padre. Vemos que
eternamente el hijo procede del Padre. El Padre envía al hijo, el hijo procede del Padre.

También encontramos que la escritura enseña que el Espíritu Santo procede del Padre y del
Hijo. Juan 14:26 Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi
nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho. Así que
la escritura nos enseña que el ES procede del Padre, pero veamos simultáneamente Juan
16:7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el
Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré. ¿Qué está pasando aquí?
El Señor habla del ES, como quien él mismo envía, entonces Dios en su palabra dice que el
ES también procede del Hijo, por eso se dice que el Espíritu Santo procede tanto del Padre
como del Hijo. Veamos esta verdad en un solo versículo Juan 15:26 Pero cuando venga el
Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del
Padre, él dará testimonio acerca de mí.

A estos pasajes es lo que se conoce como subordinación económica (si hay subordinación
en las formas de operación), pero debe diferenciarse del subordinacionismo que es una
herejía que habla de subordinación en esencia, en lo que es Dios, diferente de lo que se
habla aquí con la subordinación económica, entendiéndose económica como ordenamiento
de actividades.

Veamos algunos versículos que hablan de las actividades de las personas de la trinidad en
la creación. Genesis 1:3 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. En la creación es el Hijo quien
realiza los decretos de creación, veamos esta verdad en Juan 1:3 Todas las cosas por él
fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. Colosenses 1:16 Porque en
él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra,
visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo
fue creado por medio de él y para él. Dios Padre decreta, Dios hijo realiza, y Dios ES está
en medio de la creación sosteniendo y manteniendo la presencia inmediata de Dios, como
lo podemos ver en Genesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas
estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.
Así que cuando vemos como la trinidad se relaciona en la creación, podemos ver que la
escritura nos enseña acerca de como es esa relación trina eterna, hay una distinción eterna,
es decir, el Padre siempre ha sido el Padre, el hijo siempre ha sido el Hijo, y el ES siempre
ha sido el ES.

Así como vemos la subordinación económica en la creación, también la vemos en la


redención. La escritura enseña que el Padre planea y envía al Hijo al mundo, nuevamente
Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito,
para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Galatas 4:4 Pero
cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido
bajo la ley. Vemos entonces que la economía en la redención se presenta igual que en la
creación.

En la economía de la redención el hijo obedece al Padre y realiza la redención por nosotros,


esto lo vemos claramente en la escritura en Juan 6:38 Porque he descendido del cielo, no
para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió. Hebreos 10:7 Entonces dije: He
aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, Como en el rollo del libro está escrito de
mí. Así que vemos en la economía de la redención el Padre, el Hijo, y el ES realizan sus
propias actividades.

En la redención es el ES quien nos da vida espiritual. Juan 3:5-6 Respondió Jesús: De


cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el
reino de Dios. 6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu,
espíritu es. El ES en la economía de la redención aplica la obra realizada por el Señor
Jesucristo, obra decretada y planeada por el Padre.

Pero también en la redención el ES nos santifica Romanos 8:13-14 porque si vivís


conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne,
viviréis. 14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, estos son hijos de
Dios. Entonces vemos en la biblia las relaciones de la trinidad en la creación y también en
la redención. La escritura enseña cómo han sido esas relaciones trinas eternas, y cómo
podemos distinguir a cada una de las personas de la trinidad, Dios Padre ha sido
eternamente Padre, Dios Hijo ha sido eternamente Hijo, Dios ES ha sido eternamente ES.

¿Cuál es la aplicación práctica? Debemos entender las funciones o roles de cada persona de
la trinidad en sus relaciones trinas, las cuales han sido siempre las mismas desde la
eternidad.

El evangelio de Juan enfatiza que la obra del Hijo la hace principalmente para glorificar al
Padre. Ese es el énfasis de Juan en torno a la obra del señor Jesucristo. Este énfasis no
cambia en ningún momento, siempre ha sido esa la función o rol del Hijo, glorificar al
Padre. En cuanto a la persona del ES, su función o rol ha sido siempre glorificar al Padre y
al Hijo.

Esto es importante porque sino se tiene en cuenta esta verdad doctrinal de las funciones o
roles eternos de las personas de la trinidad, entonces se cae en un mal entendimiento de
cual es la obra del ES en referencia a su pueblo. Juan capítulo 14 y 16 habla del rol del ES,
principalmente la obra es glorificar a la persona del Señor Jesucristo, recordemos lo que
dice en Juan: él tomara de lo mío y os lo hará saber, él les recordara todas mis palabras y
les permitirá entenderlas.

En síntesis, el párrafo enseña que las personas de la trinidad son una misma esencia, poder
e importancia, pero con diferentes roles en su relación trina. Eso lo vemos también ilustrado
en los roles que Dios da al hombre y a la mujer, tanto en el hogar como en la iglesia.

La CF enseña que el Hijo y el ES son iguales en deidad al Padre, pero subordinado en


funciones en la redención. Es fundamental entender que la escritura enseña las relaciones
trinas que permiten distinguir a las personas de la trinidad.

La CF termina el párrafo así: dicha doctrina de la Trinidad es el fundamento de toda


nuestra comunión con Dios y nuestra consoladora dependencia de él. Hermanos cada vez
que aprendemos acerca de quién es nuestro Dios, entonces lo podemos adorar de mejor
manera, nos podemos relacionar con él de mejor manera, de una manera que surge de la
verdad y no como pensamos que debemos relacionarnos con Dios.

Samuel Waldron: Sin la doctrina de la generación eterna y la procesión eterna, sería


imposible distinguir las diferentes personas de la Trinidad, porque no se revelan
relaciones o cualidades personales. Aun una terminología como la Primera, la Segunda o
la Tercera Persona de la Trinidad se vuelve ilegítima. Se nos deja con tres personas
incoloras, sin variación e indistinguibles en la Trinidad. Este resultado huele a la
esterilidad de la filosofía humana, no a la riqueza de la revelación bíblica.

Pensemos en lo siguiente: sin la doctrina de la trinidad, si Cristo no fuera divino, de la


misma esencia del Padre, entonces la expiación de nuestros pecados estaría en juego,
significaría que Jesucristo no era plenamente Dios, sino una criatura de Dios, y ninguna
criatura de Dios por grande que fuera sería capaz de salvarnos, porque solo un ser infinito
es capaz de salvar a todos los elegidos del Padre.

También estaría en juego la doctrina de la justificación por la fe. Si Jesucristo fue un ser
creado en algún momento del tiempo, entonces no podríamos depositar nuestra fe en él, no
podríamos depositar nuestra fe para la salvación en una criatura, no podríamos depender de
una criatura para ser salvos. Por eso los testigos de Jehová no aceptan la doctrina de la
justificación por la fe sola, porque consideran a Jesucristo como alguien creado en algún
momento del tiempo.

Tampoco podríamos adorar al Señor Jesucristo, porque la escritura enseña que no debemos
a adorar a alguien distinto, sino solamente a Dios. Pero la escritura dice que debemos
adorar al Señor Jesucristo, por ejemplo, en filipenses 2:10-11 para que en el nombre de
Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la
tierra; 11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
Juan 20:28 Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío! No podríamos
adorar al Señor Jesucristo, porque le estaríamos atribuyendo nuestra salvación a una
criatura y no a Dios, y esto es inaceptable, porque Dios no comparte su gloria con nadie.
Hay unas implicaciones grandes en la doctrina de la trinidad.

La independencia y naturaleza de Dios también estaría en juego, porque si Dios no ha


tenido eternamente una relación trina, sino que tuvo que crear para poder relacionarse con
algún otro ser, entonces estaríamos poniendo en juego su independencia, su aseidad, Dios
no necesita de la creación para ser plenamente Dios, porque él eternamente ha sido glorioso
en la trinidad.
Así que la doctrina de la Trinidad es fundamental, por eso termina así la CF dicha doctrina
de la Trinidad es el fundamento de toda nuestra comunión con Dios y nuestra consoladora
dependencia de él. Es por eso que no podemos decir que tenemos el mismo Dios que
proclaman los judíos, el Dios de ellos no es un Dios trino, pero nuestro Dios es un Dios
trino. Y al entender los roles y funciones de las personas de la trinidad, podemos adorarlo
de una manera plena. Así que la doctrina de la trinidad es un misterio, sin embargo,
conociendo lo que enseña las escrituras podemos adorar de mejor manera a nuestro Dios.

24 de noviembre

Del decreto de Dios

La palabra decreto significa una decisión tomada por una autoridad, de modo que con los
decretos de Dios hablamos de las decisiones de Dios como máxima autoridad en el
universo. Los decretos de Dios son cosas que Él ha dispuesto, son propósitos declarados
por Dios desde la eternidad, de tal forma que Él conoce, ha organizado, y ha orquestado,
desde siempre, todo cuanto ha de ocurrir, ya sea eficazmente (esto implica que Él
directamente hizo que ocurriera) o permitiéndolo.

Mis hermanos este nuevo capítulo que comenzaremos a estudiar está compuesto de 7
párrafos que hablan del decreto de Dios, sus párrafos inician enseñando de lo general para
luego pasar a lo particular, es así como en los dos primeros enseñan el decreto general de
todos los acontecimientos, y del párrafo 3 al 7 enseñan el decreto específico de la
predestinación.

Iniciemos entonces con el decreto general de los acontecimientos con el párrafo 1 que dice:
Dios, desde toda la eternidad, por el sapientísimo y santísimo consejo de su propia
voluntad, ha decretado en sí mismo, libre e inalterablemente,1 todas las cosas, todo lo que
sucede;2 sin embargo, de tal manera que por ello Dios ni es autor del pecado ni tiene
comunión con nadie en el mismo;3 ni se hace violencia a la voluntad de la criatura, ni se
quita la libertad o contingencia de las causas secundarias, sino que más bien las
establece;4 en lo cual se manifiesta su sabiduría en disponer todas las cosas, y su poder y
fidelidad en llevar a cabo sus decretos.
En este primer párrafo en la frase 1 y 2 se declara la doctrina de los decretos de Dios, y a
partir de la frase 3 hasta la 5 se hacen unas aclaraciones para salvaguardar la santidad de
Dios, y para no caer en el error del fatalismo (fatalismo viene del latin fatum que era el
nombre que se le daba al destino. Esta doctrina responsabiliza al destino de lo bueno o malo
que ocurre a las personas o a las cosas, pero a la vez niega la libertad humana y la
capacidad de obrar el bien y el mal).

Entonces iniciemos con la frase 1 y 2 para observar la afirmación de la CF de los decretos


de Dios.

En la primera frase vemos que Nada frustra el decreto de Dios Dios, desde toda la
eternidad, por el sapientísimo y santísimo consejo de su propia voluntad, ha decretado en
sí mismo, libre e inalterablemente. La teología distingue en Dios la voluntad prescriptiva o
voluntad revelada (mandamientos que pueden ser rechazados o resistidos) y la voluntad
decretiva o voluntad secreta y soberana (sus decisiones eternas e inmutables) que no puede
ser resistida y que, sin duda, logra todos sus propósitos.

La frase nos habla que este decreto de Dios es hecho desde la eternidad pasada, de manera
que no corresponde a decisiones tomadas en el transcurso del tiempo, debido a alguna
circunstancia que obligue a Dios a tomar cierta decisión, NO, sino que son decretos
realizados libremente, sin la coacción o motivación de causas externas a Dios. Su sabiduría
infinita decretó los eventos a ocurrir mediando su infinita santidad, de manera que los
decretos son sabios, buenos y santos.

Proverbios 19:21 Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; Mas el consejo de
Jehová permanecerá. Aquí vemos que aunque haya planes humanos, solo los de Dios
permanecerán o se cumplirán, y aunque se cumplan los planes humanos, esto significa que
en todo caso los planes humanos estaban en concordancia con los de Dios, o eran los planes
de Dios.

Isaías 14:24-27 Jehová de los ejércitos juró diciendo: Ciertamente se hará de la manera
que lo he pensado, y será confirmado como lo he determinado; 25 que quebrantaré al
asirio en mi tierra, y en mis montes lo hollaré; y su yugo será apartado de ellos, y su carga
será quitada de su hombro. 26 Este es el consejo que está acordado sobre toda la tierra, y
esta, la mano extendida sobre todas las naciones. 27 Porque Jehová de los ejércitos lo ha
determinado, ¿y quién lo impedirá? Y su mano extendida, ¿quién la hará retroceder? Las
cosas suceden como Dios lo ha pensado y lo ha determinado. Antes un Dios infinitamente
poderoso y sabio quien podrá impedirlo. Es imposible.

Isaías 46:10-11 que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que
aún no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quiero; que
llamo desde el oriente al ave, y de tierra lejana al varón de mi consejo. Yo hablé, y lo haré
venir; lo he pensado, y también lo haré. Dios es el único ser que puede anunciar lo porvenir
porque sencillamente él lo decreta. Sus decretos son desde la eternidad pasada, son desde el
principio, y no son improvisados, por eso se habla de un plan eterno.

Salmo 115:3 Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso ha hecho. Este versículo
muestra la superioridad de Dios frente al ser humano, nosotros no tenemos el poder de
hacer todo cuanto queramos, hay situaciones que se salen de nuestro control que pueden
cambiar nuestros planes, por el contrario, Dios, infinitamente poderoso, teniendo el control
de todo, puede hacer lo que quiere.

Salmo 135:6 Todo lo que Jehová quiere, lo hace, En los cielos y en la tierra, en los mares y
en todos los abismos. Su gobierno y su poder es tanto en los cielos como en la tierra.

Romanos 9:19 Pero me dirás: ¿Por qué, pues, inculpa? porque ¿quién ha resistido a su
voluntad? Pablo, respondiendo a las posibles preguntas que hagan los lectores de la carta
acerca de cómo Dios inculpará a aquellos que endurece (a quien quiere endurece a quien
quiere tener misericordia), entonces responde ¿Quién ha resistido a su voluntad? Nadie
puede interponerse entre la voluntad de Dios y su realización, ni aun mi propia voluntad.

En la segunda frase vemos Nada escapa al decreto de Dios: todas las cosas, todo lo que
sucede. Aquí podemos observar que todo lo que ocurre está incluido en el decreto de Dios.
Esto lo podemos ver de dos formas: universal y especifico. En primer lugar, la biblia afirma
que el decreto de Dios es universal: Daniel 4:34-35 Mas al fin del tiempo yo
Nabucodonosor alcé mis ojos al cielo, y mi razón me fue devuelta; y bendije al Altísimo, y
alabé y glorifiqué al que vive para siempre, cuyo dominio es sempiterno, y su reino por
todas las edades. 35 Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada; y él
hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay
quien detenga su mano, y le diga: ¿Qué haces? El hace su voluntad en el cielo y en la
tierra, él reina por todas las edades, nada en ningún tiempo se ha escapado a su decreto.

Romanos 8:28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien,
esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. Todas las cosas obran de acuerdo
al propósito de Dios.

Romanos 11:36 Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por
los siglos. Amén. Vemos que Dios gobierna absolutamente sobre todo, no hay nada ni nadie
que escape a su control y a sus decretos.

Efesios 1:11 En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al


propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad. Universales son
los decretos de Dios, todas las cosas son hechas según su voluntad.

En segundo lugar, cuando se habla que nada escapa a los decretos de Dios, la biblia lo
muestra en acontecimientos específicos.

En acontecimientos buenos y malos. Isaías 45:7 que formo la luz y creo las tinieblas, que
hago la paz y creo la adversidad. Yo Jehová soy el que hago todo esto. Hermanos Dios
decreta tanto acontecimientos buenos como malos, luz y tinieblas, paz y adversidad.

Amos 3:6 ¿Se tocará la trompeta en la ciudad, y no se alborotará el pueblo? ¿Habrá


algún mal en la ciudad, el cual Jehová no haya hecho? En contexto, Dios anunciando
castigo a Israel, anunciando acontecimientos malos.

Job 1:21 y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio,
y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito. Si decimos que cuando Dios da es algo
bueno, en consonancia decimos que cuando quita es algo malo, entonces Dios decreta lo
bueno y lo malo.

Jeremías 15:2-4 Y si te preguntaren: ¿A dónde saldremos? les dirás: Así ha dicho Jehová:
El que a muerte, a muerte; el que a espada, a espada; el que a hambre, a hambre; y el que
a cautiverio, a cautiverio. Y enviaré sobre ellos cuatro géneros de castigo, dice Jehová:
espada para matar, y perros para despedazar, y aves del cielo y bestias de la tierra para
devorar y destruir. 4 Y los entregaré para terror a todos los reinos de la tierra, a causa de
Manasés hijo de Ezequías, rey de Judá, por lo que hizo en Jerusalén. El castigo es
decretado por Dios, aunque son acontecimientos malos, todos obran de acuerdo al plan
eterno de Dios.

En acciones pecaminosas. Genesis 50:20 Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo
encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo.
Dios decretó que los hermanos de José, en su libre voluntad, hicieran lo malo, con el
propósito de mantener con vida al pueblo, es decir con un propósito bueno.

2 Samuel 24:1 Volvió a encenderse la ira de Jehová contra Israel, e incitó a David contra
ellos a que dijese: Ve, haz un censo de Israel y de Judá. 1 Cronicas 21:1 Pero Satanás se
levantó contra Israel, e incitó a David a que hiciese censo de Israel. Se trata de un mismo
relato del censo que ordena David. Algunos toman estos dos relatos para decir que la
escritura se contradice, sin embargo, aunque relatan lo mismo, revelan que es Satanás quien
lo incita a realizar lo malo a David, pero Dios lo permite.

Hechos 4:27-28 Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo
Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, 28
para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera. El Señor
decreto con anticipación el acto pecaminoso de entregar y matar a Cristo. Las acciones
más pecaminosas de los hombres aun cuando no son realizadas por Dios, sino que los
hombres deliberada y voluntariamente obran inicuamente, son decretadas por Dios.

Las acciones libres de los hombres. Proverbios 16:1,9 Del hombre son las disposiciones del
corazón; Mas de Jehová es la respuesta de la lengua. El corazón del hombre piensa su
camino; Mas Jehová endereza sus pasos. El hombre puede tener muchos planes, pero Dios
es quien permite hacerlos o no, como se dice: el hombre propone y Dios dispone. De
manera. Que los hombres actúan libremente sin que por ello se percaten que Dios está
detrás de todo.

Proverbios 21:1 Como los repartimientos de las aguas, Así está el corazón del rey en la
mano de Jehová; A todo lo que quiere lo inclina. En las manos del Señor el corazón del rey
es como un río: sigue el curso que el Señor le ha trazado. El rey actúa libremente sin saber
que Dios lo ha influenciado.

Cosas que ocurren por azar. 1 reyes 22:28-34 Y dijo Micaías: Si llegas a volver en paz,
Jehová no ha hablado por mí. En seguida dijo: Oíd, pueblos todos. 29 Subió, pues, el rey
de Israel con Josafat rey de Judá a Ramot de Galaad. 30 Y el rey de Israel dijo a Josafat:
Yo me disfrazaré, y entraré en la batalla; y tú ponte tus vestidos. Y el rey de Israel se
disfrazó, y entró en la batalla. 31 Mas el rey de Siria había mandado a sus treinta y dos
capitanes de los carros, diciendo: No peleéis ni con grande ni con chico, sino solo contra
el rey de Israel. 32 Cuando los capitanes de los carros vieron a Josafat, dijeron:
Ciertamente este es el rey de Israel; y vinieron contra él para pelear con él; mas el rey
Josafat gritó. 33 Viendo entonces los capitanes de los carros que no era el rey de Israel, se
apartaron de él. 34 Y un hombre disparó su arco a la ventura e hirió al rey de Israel por
entre las junturas de la armadura, por lo que dijo él a su cochero: Da la vuelta, y sácame
del campo, pues estoy herido. El profeta Micaías anuncio la muerte del rey Acab, pero este
no creyó a sus palabras. Él pensó esconderse para que no lo atraparan, pues iban
específicamente por él, pero las palabras del profeta se cumplieron, un evento al azar
ocurrió, alguien disparo una flecha como al aire, sin destino específico, y aunque con
armadura, esta dio exactamente en el lugar que era, en el pliegue de la armadura. Esa flecha
era guiada por la mano de Dios.

Proverbios 16:33 La suerte se echa en el regazo; Mas de Jehová es la decisión de ella.


Podremos tirar los dados, pero el Señor decide cómo caen. La gente mete fichas en un bolso
y las agita, pero el SEÑOR decide cuál es la que sale.

Los detalles de nuestra vida. Job 14:5 Ciertamente sus días están determinados, Y el
número de sus meses está cerca de ti; Le pusiste límites, de los cuales no pasará. Todo está
decretado por Dios. Cuando nacemos, cuando morimos.  ¿Qué ocurre si me enfermo de
muerte y en oración Dios me escucha y me sana?  como por ejemplo el rey Ezequías
relatado en Isaías 38 cuando por el profeta Isaías, Dios le dice que morirá y no vivirá,
inmediatamente en gran lamento ora a Dios, y luego el profeta Isaías es enviado a decirle:
he oído tu oración, y visto tus lagrimas; he aquí que yo añado a tus días quince años (5).
Hechos 17:26-28 Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten
sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su
habitación; para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle,
aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros. Porque en él vivimos, y nos
movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque
linaje suyo somos ¿Acaso mis padres no decidieron dónde y cuándo nací? Bueno, sí, lo
hicieron. Pero detrás de la causa secundaria de tus padres dándote vida y decidiendo dónde
nacerías, había una causa primaria, Dios. Él da la vida y decide cuándo y dónde habitas en
esta tierra. En Dios vives, te mueves y eres.

Salmo 139:16 Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas
cosas Que fueron luego formadas, Sin faltar una de ellas. En el desarrollo de nuestro
cuerpo en el vientre de nuestra madre se hizo y formo tal cual como estaba decretado sin
faltar nada.

Mateo 10:29-30 ¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae
a tierra sin vuestro Padre. 30 Pues aun vuestros cabellos están todos contados. Todo está
controlado por nuestro buen y poderoso Dios. No podemos contar nuestros cabellos y
mucho menos retenerlos ahí donde están, pero Dios si puede.

Los asuntos de las naciones. Daniel 2:21 Él muda los tiempos y las edades; quita reyes, y
pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos. En las naciones hay
un orden y no un caos total debido a que Dios permite que haya un gobierno que, aunque
ejercido por hombres pecadores, avaros y corruptos, es mejor que sí no hubiese gobierno.
Él pone los gobernantes, los ciudadanos ejercemos el derecho al voto, pero él es quien
decide quien gobierna, y aunque el gobernante elegido sea malo y perverso, puede que sea
como un castigo a la nación, o para cumplir sus planes eternos. Por ejemplo, sino hubiese
estado el gobernador impío Poncio Pilatos, no hubiese muerte del Señor. Él fue puesto por
decreto de Dios, aunque por elección humana, en ese tiempo para que, con su indiferencia
ante la injusticia, se lavase las manos para crucificar indirectamente al Señor.

Proverbios 21:31 El caballo se alista para el día de la batalla; Mas Jehová es el que da la
victoria. Las victorias de las naciones o los destinos de ella, no son tanto por la astucia de
los gobernantes, o fuerza de los guerreros, sino por Dios. En el antiguo testamento, vemos
que era Dios quien permitía la derrota de su pueblo ante las demás naciones, o la victoria,
aunque los demás los superasen en armas y soldados.

La destrucción final de los inicuos. 1 Samuel 2:22-25 Pero Elí era muy viejo; y oía de todo
lo que sus hijos hacían con todo Israel, y cómo dormían con las mujeres que velaban a la
puerta del tabernáculo de reunión. 23 Y les dijo: ¿Por qué hacéis cosas semejantes?
Porque yo oigo de todo este pueblo vuestros malos procederes. 24 No, hijos míos, porque
no es buena fama la que yo oigo; pues hacéis pecar al pueblo de Jehová. 25 Si pecare el
hombre contra el hombre, los jueces le juzgarán; mas si alguno pecare contra Jehová,
¿quién rogará por él? Pero ellos no oyeron la voz de su padre, porque Jehová había
resuelto hacerlos morir. Los hijos del sacerdote Elí eran hombres impíos y no conocían a
Dios, aunque su padre los reprendió tardíamente, ellos no le oyeron sus consejos, porque
Dios había decido castigarlos haciéndolos morir.

Proverbios 16:4 Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, Y aun al impío para el
día malo. Dios ha decretado todo. El pecador a sido hecho para el día del juicio, para el
castigo en el día malo.

Romanos 9:17 Porque la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he levantado, para
mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra. Dios puso
al faraón en ese lugar de preeminencia, pero con un objetivo, le había permitido que su
corazón se endureciera, para mostrar el poder de Dios.

Judas 4 Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían
sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la
gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.
Dios ha destinado el castigo de los impíos, los ha destinado para condenación.

Volviendo a la primera frase donde afirma que Dios decreta libremente, debemos decir que
Nada condiciona el decreto de Dios. Dios no fue condicionado por nada ni nadie en sus
decretos. Tres razones podemos dar para esto. Primero, No había nadie, no existía nada,
cuando Dios decretó. Por lo tanto, Dios no pudo haber tomado en consideración nada
excepto su propia voluntad cuando decreto todas las cosas. Segundo, si Dios decretó todas
las cosas, entonces él no es determinado por ninguna de aquellas cosas que determinó.
Tercero, versículos bíblicos. Romanos 11:34 Porque ¿quién entendió la mente del Señor?
¿O quién fue su consejero? 1 corintios 2:16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor?
¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.

Hasta aquí hemos considerado la afirmación de la CF de los decretos de Dios, pero es útil y
necesario entrar a considerar las aclaraciones acerca de la soberanía de Dios y la libertad
humana, que veremos en las siguientes frases del párrafo.

Sin embargo, de tal manera que por ello Dios ni es autor del pecado ni tiene comunión con
nadie en el mismo. La frase 3 habla de la aclaración de que, aunque Dios decreta todas las
cosas en su soberanía (aun las malas) él no es el autor del pecado. Esta aclaración defiende
la santidad de Dios, la cual, por toda la escritura, anuncia que Dios es apartado del pecado,
no tiene nada que ver con él.

ni se hace violencia a la voluntad de la criatura, ni se quita la libertad o contingencia de


las causas secundarias, sino que más bien las establece. La frase 4 evita caer en el error del
fatalismo. Donde todo ocurre debido al destino y niega totalmente la libertad y capacidad
de hacer bien o mal.

Antes de ver los versículos que soportan estas dos aclaraciones, veamos algunas
consideraciones de dos doctrinas que vemos aquí la soberanía de Dios y la responsabilidad
del hombre. Dios es soberano, el hombre es responsable. Ambas verdades son reveladas
claramente en la Biblia. Eliminar una de las dos para solucionar esta aparente paradoja no
solo es torcer las Escrituras, sino confiar más en nuestro intelecto que en la sabiduría de
Dios.

La Confesión afirma tanto la soberanía absoluta de Dios como la realidad de la libertad


humana. Si se niega o disminuye cualquiera de estas verdades, el cristianismo se secará y
morirá. Entonces, hay dos opiniones extremas que son incorrectas y hacen violencia a la
verdad bíblica.

1. Existe la minimización o negación de la realidad de la libertad humana con el


interés de defender la soberanía de Dios.
2. Existe la minimización de la soberanía de Dios para defender la libertad humana.
Los que se encuentran en estas dos posiciones asumen que la soberanía divina y la libertad '
humana son principios que no pueden permanecer juntos y mutuamente exclusivos, que no
pueden ser simultáneos. Unos escogen resolver este problema negando la realidad de la
libertad humana, y los otros escogen limitar la soberanía de Dios y, por decirlo así, pierden
a Dios del panorama.

A pesar de esto, las Confesiones de fe reformadas, enseñan que la libertad de Dios y la


libertad del hombre no están en conflicto. Ninguna de las dos debe ser limitada para darle
espacio a la otra. La verdad de la escritura enseña la existencia simultanea de las dos, de
modo que debemos someter nuestra mente a la clara enseñanza de la palabra de Dios.

Consideremos algunos asuntos necesarios de lo que hemos meditado hasta ahora.

1. El decreto de las acciones pecaminosas: En cuanto a este decreto, que ya aceptamos


como verdad por varios versículos de la escritura, puede asaltarnos inmediatamente
la pregunta ¿No hace esto a Dios el autor del pecado? Si no lo hace, entonces ¿sobre
qué base afirma la Confesión que, aunque Dios ordene todas las cosas, no es, sin
embargo, el autor del pecado?
Para responder con precisión primero hablemos de lo que en teología es llamada la
providencia de Dios que habla de que Dios cuida, atiende o está pendiente de su
creación (supervisa). Dios gobierna todas las cosas en el universo, lo hace
cumpliendo sus propósitos y su voluntad, y todo esto lo hace directamente o
indirectamente. Cuando hablamos de directamente podríamos hablar de un milagro,
y cuando hablamos de indirectamente es que lo hace a través de leyes naturales o
decisiones humanas (las causas secundarias). Cuando hablamos de causa se hace
referencia al origen, el principio, o el motivo por el que suceden las cosas. La causa
primaria o principal de todas las cosas es Dios. Las causas secundarias son acciones
de la naturaleza o acciones libres de los seres humanos.
Hay una concurrencia entre las causas, Dios trabaja en todas cosas y trabaja a través
de todas las cosas, entonces la voluntad divina y la voluntad humana se realizan
juntas o una junta a la otra. La causa divina de cada acontecimiento trabaja como
una causa invisible, detrás de escenas, que dirige y, por tanto, puede ser llamada
«causa primaria» que planifica e inicia todo lo que sucede. Pero lo creado produce
acciones propias y libres. Por tanto, estos factores y propiedades de las criaturas
pueden denominarse causas «secundarias» de todo lo que sucede. Ejemplo. La
lluvia permite que haya cosecha de alimentos para el sustento, entonces la lluvia es
una causa secundaria, pero detrás de esta causa secundaria esta la primaria que es
Dios, porque fue Dios que en su bondad permitió las lluvias y las cosechas de
alimentos.
Volviendo al tema, aunque la Confesión, basándose en la escritura, enseña que Dios
decreta el pecado, niega que Dios sea el autor del pecado. Esta negación se afirma
teniendo en cuenta la libertad de las causas secundarias mencionada en el párrafo.
Dios no es el autor del pecado, porque no hace que ocurra mediante su propia
causalidad inmediata. Es la responsabilidad de las causas secundarias que
voluntariamente se implican en él. Esto se ilustra en el caso en que Dios decretó que
David censara pecaminosamente a Israe1(2 Samuel 24:1; 1 Cronicas 21:1) este
decreto no se llevó a cabo mediante el Espíritu Santo moviendo a David, sino
mediante Satanás.
2. Habiendo afirmado que Dios gobierna por medio de causas secundarias, entonces
hablemos de la libertad de las causas secundarias: La libertad a la que se refiere la
CF puede definirse como "la ausencia de coacción externa''. Si alguien no es
forzado por un poder fuera de sí mismo para hacer lo que es contrario a “lo que él
quiere hacer", entonces podemos decir con propiedad que es "libre", es decir, si
alguien no es forzado por algo o alguien externo a él mismo a hacer algo, entonces
actúa libremente. La maravilla de la predestinación de Dios es que Dios deja a los
hombres libres en este sentido, aun cuando predestina todo lo que todo hombre hará
jamás.
3. La voluntad permisiva: Los conceptos de decreto permisivo o voluntad permisiva se
usan con frecuencia con relación a una consideración del decreto divino. ¿Habla la
Biblia de una voluntad divina permisiva? ¿Permite Dios ciertas cosas? ¿Permitió Él
que José fuera vendido o que Cristo muriera? Como se afirmó anteriormente, es
cierto que Dios no está involucrado activamente en la realización del pecado del
hombre de la misma manera en que si está involucrado en la realización de la
justicia y la salvación. En este sentido, podemos hablar del permiso divino de
ciertas acciones. Por otro lado, no podemos hablar de un mero permiso,
involuntario o forzado con respecto a Dios. Dios sólo permite en la historia lo
que ya ha decretado antes de la historia que ocurra con certeza. Como se probó
anteriormente, nada hay que condicione el decreto de Dios. El concepto de
permiso, sin embargo, da por sentado que hay una voluntad opuesta. Puesto
que tal voluntad no estaba presente cuando. Dios decretó. todo lo que debía
ocurrir, es absurdo hablar de un decreto permisivo. El decreto de Dios es, por
definición, no permisivo, simplemente porque no es condicional ni está
condicionado.
4. La presciencia divina: es el atributo de Dios por el cual tiene el conocimiento pleno
de lo que ocurrirá en el futuro. Puede entonces salir la pregunta ¿Puede Dios prever
que ocurrirá algo antes de que Él decrete que ocurra? La respuesta clara es ¡No!
Sólo aquello que ha de ocurrir con seguridad puede ser previsto o preconocido.
Prever algo es tener la seguridad de que ocurrirá. Puesto que, sin embargo, es el
decreto de Dios lo que hace que todo ocurra con seguridad, nada puede preverse que
vaya a ocurrir con seguridad hasta que Dios decrete que ocurra.
La idea de que alguien pueda responder a las objeciones relacionadas con el decreto
divino recurriendo a la presciencia divina no tiene fundamento. La presciencia da
por sentado que un acontecimiento futuro va a ocurrir con seguridad. Queda la
pregunta: ¿Qué hizo que ese acontecimiento ocurriera con certeza? La única
respuesta posible es el decreto de Dios.
En la Biblia, las profecías y predicciones de acontecimientos futuros no se
consideran como basadas meramente en la presciencia divina, sino como basadas en
el decreto divino (Isaías 46:10; Hechos 3:18; 4:27,28; 15:15.-18).
Isaías 46:10 que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo
que aún no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que
quiero. Lo que Dios quiere hará, es su decreto lo que ocurrirá, por eso puede
anunciar de antemano el futuro, no porque lo previo, sino porque lo decreto.

La profecía de la Escritura se considera, por tanto, por así decirlo, la narración no de


lo que Dios prevé, sino de lo que Dios decreta. Cuando Dios da una profecía no está
tanto contando de antemano lo que va a ocurrir, sino contando lo que va a hacer que
ocurra (Mateo 26:54; Le. 22:37; Juan. 13:18; 19:24,34-36; Hechos 1:16; 2:24-31;
13:34,35).
Juan 13:18 No hablo de todos vosotros; yo sé a quienes he elegido; mas para que se
cumpla la Escritura: El que come pan conmigo, levantó contra mí su calcañar.
Dios había elegido, había decretado, y por eso se cumpliría.
Juan 19:24 Entonces dijeron entre sí: No la partamos, sino echemos suertes sobre
ella, a ver de quién será. Esto fue para que se cumpliese la Escritura, que dice:
Repartieron entre sí mis vestidos, Y sobre mi ropa echaron suertes. Y así lo
hicieron los soldados. Aquí podemos ver como concurre la voluntad de Dios y la de
los hombres. Dios lo había decretado, y los verdugos de Cristo sin ser obligados por
nadie, libremente actuaron y repartieron la ropa del Señor. Dios fue la causa
primaria de este evento, así había sido decretado en la eternidad pasada, pero
llegado el momento los hombres actuaron bajo su libre albedrio y así se cumplió
con la escritura.

Frase 3: aclaración de la santidad de Dios. Sin embargo, de tal manera que por ello Dios ni
es autor del pecado ni tiene comunión con nadie en el mismo.

Genesis 18:25 Lejos de ti el hacer tal, que hagas morir al justo con el impío, y que sea el
justo tratado como el impío; nunca tal hagas. El Juez de toda la tierra, ¿no ha de hacer lo
que es justo? Dios siempre hace lo correcto, él es el estándar de lo bueno, él es quien
declara que es bueno y que es malo. Siempre sus acciones esta n enmarcadas dentro de sus
perfecciones, dentro de sus atributos, él es bueno, es santo, es misericordioso, es
bondadoso; por lo tanto, sus decisiones son buenas, santas, misericordiosas, bondadosas.
Dios no tiene nada que ver con lo malo.

Santiago 1:13 Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque
Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie. Dios no está involucrado en el
pecado de los hombres. Actuamos libremente cuando pecamos, pecamos porque en nuestro
interior hay residuos de pecado que nos impulsan a pecar, nos seducen, nos atraen.
1 Juan 1:5 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay
ningunas tinieblas en él. La escritura declara el carácter santo de Dios, es el único atributo
que se hace énfasis, tres veces santo, al grado superlativo. Dios no tiene comunión con el
pecado, ni lo produce.

Frase 4 ni se hace violencia a la voluntad de la criatura, ni se quita la libertad o


contingencia de las causas secundarias, sino que más bien las establece.

Genesis 50:20 Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para
hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo. Los hermanos de José
pensaron en hacerle el mal, efectivamente lo hicieron de esa manera, pecaron cuando lo
hicieron, no debieron actuar de esa manera con su propio hermano, separándolo de su
padre, trayendo un dolor a su hermano y a su padre. Ellos libremente actuaron
pecaminosamente, pero Dios obro para bien.

2 Samuel 24:1 Volvió a encenderse la ira de Jehová contra Israel, e incitó a David contra
ellos a que dijese: Ve, haz un censo de Israel y de Judá.

Isaías 10:5-7 Oh Asiria, vara y báculo de mi furor, en su mano he puesto mi ira. 6 Le


mandaré contra una nación pérfida, y sobre el pueblo de mi ira le enviaré, para que quite
despojos, y arrebate presa, y lo ponga para ser hollado como lodo de las calles. 7 Aunque
él no lo pensará así, ni su corazón lo imaginará de esta manera, sino que su pensamiento
será desarraigar y cortar naciones no pocas. Asiria actuará como causa secundaria para
Dios castigar a su pueblo, actuaran libremente, ellos no se imaginan que Dios lo está
permitiendo, solo actúan como destructores de lo que se ponga en su camino.

Mateo 17:12 Mas os digo que Elías ya vino, y no le conocieron, sino que hicieron con él
todo lo que quisieron; así también el Hijo del Hombre padecerá de ellos. Tanto Juan el
bautista, como el Señor Jesucristo padecieron de parte de los religiosos de la época. Estos
hicieron lo que ellos mismos quisieron, no fueron obligados por nadie, nadie los coacciono,
actuaron libremente.

Juan 19:11 Respondió Jesús: Ninguna autoridad tendrías contra mí, si no te fuese dada de
arriba; por tanto, el que a ti me ha entregado, mayor pecado tiene. Este pasaje narra la
respuesta del Señor a Pilato. El señor le dice que lo que ha hecho Judas al entregarlo es un
pecado grande. El mismo Señor no deja sin responsabilidad a Judas. Ha actuado libremente
en su pecado.

Hechos 2:23 a este, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de


Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole. Aquí en este pasaje se
observa claramente que concurren la causa primaria y la secundaria Mataron al Señor
inicuamente, con pecado actuaron. La escritura responsabiliza la actuación libre de los que
crucificaron al Señor.

Hechos 4:27-28 Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo
Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, 28
para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera.
Nuevamente se observa la concurrencia de las causas. Lideres del imperio, lideres
religiosos, pueblo de Dios, y pueblo gentil actuaron sin que nadie los obligara, mataron al
Señor injustamente.

Frase 5 en lo cual se manifiesta su sabiduría en disponer todas las cosas, y su poder y


fidelidad en llevar a cabo sus decretos.

Números 23:19 Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre para que se
arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará? Lo que Dios ha decretado desde
la eternidad pasada se cumplirá, Dios tiene todo el poder para hacerlo, y es fiel a su palabra.
Por lo tanto, se hará tal cual como lo ha decretado.

Efesios 1:3-5 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con
toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, 4 según nos escogió en él
antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, 5
en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de
Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad. El señor ya tiene decretado su plan desde la
eternidad pasada, antes de traer todo a la existencia, antes de crear el mundo y sus
habitantes. Ya ha hecho su elección de todos los que llegaran a ser hijos suyos por medio de
Cristo. Nosotros los creyentes somos una muestra de su plan, ha empezado una obra de
santificarnos, y lo logrará hasta el fin, nos presentará santos y sin mancha en las bodas del
cordero en la eternidad futura. Hemos sido predestinados por el Padre para vivir en Cristo,
por Cristo, y para Cristo.

Ahora pasemos al siguiente párrafo. Leamos el párrafo 2: Aunque Dios sabe todo lo que
pudiera o puede pasar en todas las condiciones que se puedan suponer,1 sin embargo
nada ha decretado porque lo previera como futuro o como aquello que había de suceder
en dichas condiciones. El párrafo 2 nos habla de algo que ya hemos comentado con
anterioridad. Se trata del decreto de Dios y la presciencia de Dios. Cuando tratamos el tema
dijimos que todo sucede porque Dios lo ha decretado. De manera que los eventos futuros
son anunciados por Dios de antemano, no porque el los previó, sino más bien porque él los
decretó.

Frase 1. Aunque Dios sabe todo lo que pudiera o puede pasar en todas las condiciones que
se puedan suponer.

1 Samuel 23:11-12 ¿Me entregarán los vecinos de Keila en sus manos? ¿Descenderá Saúl,
como ha oído tu siervo? Jehová Dios de Israel, te ruego que lo declares a tu siervo. Y
Jehová dijo: Sí, descenderá. Dijo luego David: ¿Me entregarán los vecinos de Keila a mí y
a mis hombres en manos de Saúl? Y Jehová respondió: Os entregarán. Estamos en el
contexto de que el rey Saul buscaba la muerte de David. En su huida, David se encontraba
en la ciudad de Keila, y entendiendo que Saul lo buscaría allí para matarlo. Por eso, se
apresuró a preguntar a Dios, a quien todo lo sabe, si Saúl lo vendría a buscar, y si los
ciudadanos de Keila lo entregarían. El Señor efectivamente le dice que sí lo harán. Vemos
aquí Dios le dice lo que pasaría si se quedase allí, pero esto no fue efectivamente lo que
pasó. Dios sabe todas las diferentes formas en que sucederán los eventos si se combinan de
diferentes formas las cosas que se implican en ellos.

Mateo 11:21,23 ¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se
hubieran hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, tiempo ha que se hubieran
arrepentido en cilicio y en ceniza. 23 Y tú, Capernaum, que eres levantada hasta el cielo,
hasta el Hades[a] serás abatida; porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que
han sido hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy. Nuevamente aquí Dios sabe
con certeza lo que hubiese acontecido en el futuro, si se hiciesen cosas antes. Si Tiro,
Sidón, y Sodoma hubiesen visto los milagros que, si se hicieron en las otras ciudades,
entonces se habrían arrepentido. Dios conoce todo, su omnisciencia es maravillosa y
asombrosa. Porque quien de nosotros puede decir que sucederá algo con certeza, si se hace
algo en el presente, solo podríamos hablar de probabilidad, una alta probabilidad, pero
nunca podríamos asegurarlo.

Hechos 15:18 Dice el Señor, que hace conocer todo esto desde tiempos antiguos. Solo el
Señor se puede anticipar a decir lo que ocurrirá luego. Solo él sabe todas las cosas posibles.

Frase 2: sin embargo nada ha decretado porque lo previera como futuro o como aquello
que había de suceder en dichas condiciones.

Isaías 40:13-14 ¿Quién enseñó al Espíritu de Jehová, o le aconsejó enseñándole? 14 ¿A


quién pidió consejo para ser avisado? ¿Quién le enseñó el camino del juicio, o le enseñó
ciencia, o le mostró la senda de la prudencia? La sabiduría infinita de Dios decretó sin
basarse en algo que iba a ocurrir. Su mente no necesita ser avisada de algo para que se
percate. Dios no necesita que se le enseñe, Dios no necesita que las circunstancias le
indiquen por donde es mejor ir. Su conocimiento es perfecto e infinito en todo momento.

Romanos 9:11-18 (pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para
que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el
que llama), se le dijo: El mayor servirá al menor. Como está escrito: A Jacob amé, mas a
Esaú aborrecí. ¿Qué, pues, diremos? ¿Que hay injusticia en Dios? En ninguna manera.
Pues a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré
del que yo me compadezca. Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de
Dios que tiene misericordia. Porque la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he
levantado, para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la
tierra. De manera que de quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer,
endurece. Antes de que Esaú y Jacob nacieran, antes de que hicieran algo que mereciera el
favor de Dios o el pasar por alto, Dios ya había decretado que el mayor serviría al menor,
que tendría misericordia de Jacob. No es que Dios vio que Jacob hiciera algo en el futuro
que mereciera el don de Dios y entonces por esa razón decreto favorecerlo. NO. Como dice
el versículo, no depende de las obras, sino del que llama, no depende del que quiere sino de
Dios que tiene misericordia, no depende de las acciones del hombre, sino del decreto de
Dios.

1 corintios 2:16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas
nosotros tenemos la mente de Cristo. Nuevamente, la mente infinita de Dios conoce todo
porque sabiamente lo ha decretado. Nosotros conocemos en teoría lo que mañana haremos
porque lo planeamos así, pero no sabemos de circunstancias que se escapan de nuestro
control y que pueden modificar lo que planeamos, finalmente, entonces, no conocemos que
ocurrirá. Pero Dios en su poder planea todo, decreta todo, controla todo, permite que estén
las circunstancias, por eso con seguridad ocurren. No porque las previó, sino porque
decreto que así fuese.

22 DE DICIEMBRE

Hasta aquí hemos visto la doctrina del decreto de Dios, donde pudimos meditar
ampliamente en que Dios decretó en la eternidad pasada absolutamente todas las cosas, de
modo que nada frustra el decreto de Dios, nada se escapa del decreto de Dios y nada
condiciona el decreto de Dios.

Al hablar de esto fue necesario hacer la aclaración de que, aunque Dios decretó la caída del
ser humano, él no es el autor del pecado, porque Dios es santísimo y no tiene nada que ver
con el pecado. También fue necesario aclarar que Dios decretó todo, aun los detalles de
nuestras vidas y nuestras acciones libres, y sin embargo no hace violencia a libertad
nuestra, sino que actuamos libremente. Esto ultimo nos previene de caer en la falsa idea del
fatalismo (fatalismo viene del latin fatum que era el nombre que se le daba al destino. Esta
doctrina responsabiliza al destino de lo bueno o malo que ocurre a las personas o a las
cosas, pero a la vez niega la libertad humana y la capacidad de obrar el bien y el mal).

Ahora en los párrafos siguientes de este tercer capítulo nos moveremos de lo general a lo
especifico, pues nos antes vimos el decreto general de todos los acontecimientos y ahora
nos adentraremos en un decreto especifico de Dios, el cual es la predestinación a vida o
elección para salvación de algunas personas.
La predestinación es un tema que debe ser tratado con sabiduría y reverencia, pero también
podemos estudiarlo con alegría y confianza. La doctrina de la elección destaca una verdad
que todos nosotros los cristianos conocemos: que nuestra salvación es completamente de la
gracia de Dios. Cuando nos preguntamos: "¿Por qué me arrepentí de mi pecado y confié en
Cristo, aunque mucha gente no lo hace? ¡Alabamos el nombre de Dios!" No nos atrevemos
a darnos crédito a nosotros mismos, porque sabemos que lo amamos porque él nos amó
primero, y por eso toda la gloria debe ir a él.

Párrafo 3: Por el decreto de Dios, para la manifestación de su gloria, algunos hombres y


ángeles son predestinados, o preordenados, a vida eterna por medio de Jesucristo, para
alabanza de la gloria de su gracia; a otros se les deja actuar en su pecado para su justa
condenación, para alabanza de la gloria de su justicia.

Este párrafo nos muestra una elección distintiva de Dios de algunos, y un pasar por alto de
otros (reprobación, rechazo). Dejemos que la escritura nos hable la respecto de estas dos
verdades del decreto de Dios.

Frase 1: Por el decreto de Dios, para la manifestación de su gloria, algunos hombres y


ángeles son predestinados, o preordenados, a vida eterna por medio de Jesucristo, para
alabanza de la gloria de su gracia.

Ya vimos con anticipación que al decreto de Dios no se escapa nada. Un Dios perfecto,
todopoderoso, tiene el control de todas las cosas. Nada lo toma por sorpresa. Todo obedece
a un plan eterno, y no a la improvisación en medio de las circunstancias presentes. La vida
eterna de algunos hombres y ángeles ha sido preordenada, predestinada, ordenada de
antemano. Pero, así como Dios ha predestinado los fines, también a predestinado los
medios. Así pues, la salvación no es por medios humanos, nadie puede venir a la salvación
por sus propios méritos, sino por medio de Cristo. Y la CF nos dice que la elección de
algunos tiene un propósito: la alabanza de la gloria de su gracia. Su gracia no puede brillar
más, ser mejor apreciada, sino cuando se dispone a salvar a aquellos que realmente no lo
merecían.

Salmo 147:19-20 Ha manifestado sus palabras a Jacob, Sus estatutos y sus juicios a Israel.
No ha hecho así con ninguna otra de las naciones; Y en cuanto a sus juicios, no los
conocieron. Aleluya. En la selección, se observa que una nación si y otras no. Se observa
selectividad, preferencia.

Amos 3:2 A vosotros solamente he conocido de todas las familias de la tierra; por tanto,
os castigaré por todas vuestras maldades. ¿Acaso Dios no conoce las demás naciones?
Claro que sí. Aquí hace referencia a un conocimiento en cuanto a una relación íntima. Con
unos tiene relación íntima con otros no.

Deuteronomio 7:7-8 No por ser vosotros más que todos los pueblos os ha querido Jehová y
os ha escogido, pues vosotros erais el más insignificante de todos los pueblos; sino por
cuanto Jehová os amó, y quiso guardar el juramento que juró a vuestros padres, os ha
sacado Jehová con mano poderosa, y os ha rescatado de servidumbre, de la mano de
Faraón rey de Egipto. El amor eterno es la base por la cual hemos sido escogidos. No por
nuestros propios metritos. La salvación no descansa en que sea mejor o menos pecador que
otro, sino en el amor de Dios. Dios ama a toda su creación, la sustenta y la cuida, pero tiene
un amor salvífico y especial con algunos.

1 Timoteo 5:21 Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, y de sus ángeles
escogidos, que guardes estas cosas sin prejuicios, no haciendo nada con parcialidad.
Vemos aquí la mención de los ángeles escogidos, elegidos. De manera, que vemos un
lenguaje que denota la elección de algunos ángeles de sobre la totalidad de ellos. Unos son
elegidos, otros simplemente no.

Mateo 25:34 Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre,
heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. antes de que todo
fuese creado, se prepararon todas las cosas, fueron elegidos los benditos del Padre, estos
son los que vendrán a la vida eterna.

Efesios 1:5-6 en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio
de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, para alabanza de la gloria de su gracia,
con la cual nos hizo aceptos en el Amado. Nuevamente vemos que es el amor la base de
nuestra predestinación, no es nuestros méritos, no soy elegido porque soy mejor, es por su
voluntad, como él quiere, y todo para alabanza de la gracia de Dios.
Entonces, si la primera frase habla de los predestinados para vida eterna, la segunda nos
habla de los que irán a justa condenación eterna. Frase 2: a otros se les deja actuar en su
pecado para su justa condenación, para alabanza de la gloria de su justicia.

Aquí, en este tema, hay mucho de que hablar. ¿Dios predestina a algunos a condenación,
así como son predestinados algunos a vida eterna? ¿Dios obra internamente, en el corazón,
para salvación en algunos, y obra en algunos en su interior para que condenen? Bueno.
Hermanos, primero tenemos que empezar entendiendo que todos somos merecedores del
castigo eterno, de la condenación a causa de nuestra impiedades, pecados y rebeliones.
Pero, Dios es quien da vida cuando estábamos muertos en delitos y pecados. Dios obra en
el corazón humano para que pueda ser traído a la salvación. No buscamos nosotros primero
a Dios para amarlo, al contrario, Dios nos amó primero. El coloca dentro de nosotros no
solo querer hacerlo, sino también hacerlo. Todo esto que hablamos es el decreto de Dios
para salvación. Lo decreto en la eternidad pasada, y luego en el desarrollo de nuestras
vidas, a su tiempo, Dios va permitiendo. Pero y ¿cómo es el asunto con los que se
condenan? Bueno, así como Dios obra activamente en el corazón del preordenado para
salvación, NO es la misma forma como obra en que va a justa condenación, es decir, Dios
no obra para que la maldad se geste en su interior, simplemente porque ya se encuentra el
pecado en ellos. Dios NO anda produciendo la incredulidad en sus corazones. Esa
incredulidad está ya allí. No los fuerza a pecar. Pecan por gusto, inclinación y elección
propia. La manera en que Dios interviene en ellos, es que simplemente los pasa por alto, no
obra en ellos, al contrario los deja o abandona en su propia naturaleza pecaminosa. En otras
palabras quita el freno que los contiene de pecar, los deja actuar en sus libres acciones
pecaminosas. En lugar de refrenar su libertad humana, la incrementa. Les deja seguir su
propio camino (ya controlado). No es que Dios ponga su mano en ellos para crear nueva
maldad en sus corazones; solamente, su santa mano deja de refrenarlos y les permite hacer
su propia voluntad.

El endurecimiento de Dios de los pecadores no consiste en inducirlos o motivarlos a pecar,


porque Dios sólo da buenos dones y no puede tentar a nadie al mal (Santiago 1:13, 17).
Más bien, el endurecimiento divino implica el retiro de Dios de aquellas bendiciones que
refrenarían a un pecador de ciertos pecados, tales como la actividad ordinaria de su mente y
conciencia. Dios no endurece por la suma del mal, sino por la sustracción del bien, dejando
a los pecadores a sus propias elecciones malvadas (Salmo 81:11-12).45 Sin embargo, él
permanece en control soberano de los acontecimientos (Prov. 21:1)

Juan 12:37-40 Pero a pesar de que había hecho tantas señales delante de ellos, no creían
en él; para que se cumpliese la palabra del profeta Isaías, que dijo: Señor, ¿quién ha
creído a nuestro anuncio? ¿Y a quién se ha revelado el brazo del Señor? Por esto no
podían creer, porque también dijo Isaías: Cegó los ojos de ellos, y endureció su corazón;
Para que no vean con los ojos, y entiendan con el corazón, Y se conviertan, y yo los sane.
Aquí vemos un pasaje donde observamos que las señales no tienen la capacidad de traer a
la salvación, ningún milagro que la gente vea producirá que sea traído a la salvación. Las
personas del tiempo del Señor vieron todos sus milagros, y a pesar de ello, algunos no
creyeron. Judas vio y aprendió de él y no fue salvo. El ser humano no tiene la capacidad por
sí mismo de venir al Señor, porque, aunque tenga vida física, no tiene vida espiritual. Es
necesario que Dios obre en el corazón para ser traído a la salvación, necesita un nuevo
corazón, necesita nacer de nuevo, nacer del Espíritu. La gente no creyó en el Señor, no
porque Dios les quito la visión espiritual, no porque los cegó, no pudo ser así porque ellos
no veían, simplemente no creyeron porque Dios nos les alumbro los ojos de su
entendimiento. Así debe entenderse el endurecimiento del corazón. Dios los dejo actuar en
su propia incredulidad. Por eso es que la fe es un don de Dios, no es del ser humano.

Romanos 9:6-24 No que la palabra de Dios haya fallado; porque no todos los que
descienden de Israel son israelitas, ni por ser descendientes de Abraham, son todos hijos;
sino: En Isaac te será llamada descendencia. Esto es: No los que son hijos según la carne
son los hijos de Dios, sino que los que son hijos según la promesa son contados como
descendientes. Porque la palabra de la promesa es esta: Por este tiempo vendré, y Sara
tendrá un hijo. Y no solo esto, sino también cuando Rebeca concibió de uno, de Isaac
nuestro padre (pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el
propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que
llama), se le dijo: El mayor servirá al menor. Como está escrito: A Jacob amé, mas a Esaú
aborrecí. ¿Qué, pues, diremos? ¿Que hay injusticia en Dios? En ninguna manera. Pues a
Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del
que yo me compadezca. Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios
que tiene misericordia. Porque la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he
levantado, para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la
tierra. De manera que de quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer,
endurece. Pero me dirás: ¿Por qué, pues, inculpa? porque ¿quién ha resistido a su
voluntad? Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá el
vaso de barro al que lo formó: Por qué me has hecho así? ¿O no tiene potestad el alfarero
sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra? ¿Y
qué, si Dios, queriendo mostrar su ira y hacer notorio su poder, soportó con mucha
paciencia los vasos de ira preparados para destrucción, y para hacer notorias las riquezas
de su gloria, las mostró para con los vasos de misericordia que él preparó de antemano
para gloria, a los cuales también ha llamado, esto es, a nosotros, no solo de los judíos,
sino también de los gentiles? En este pasaje tenemos la expresión bíblica más clara acerca
de los predestinados a vida eterna y los que van a justa condenación. "De manera que de
quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer, endurece." Algunos reciben
misericordia, otros reciben justicia. La decisión en cuanto a esto está en la mano de Dios.

Pablo ilustra el carácter doble de la predestinación mediante su referencia a Jacob y Esaú.


Estos dos hombres eran hermanos gemelos. Estuvieron en el mismo vientre y al mismo
tiempo. Uno recibió la bendición de Dios y el otro no. Uno recibió una porción especial del
amor de Dios, el otro no. Hubo una preferencia de Dios por Jacob y no por Esaú. La
elección de Dios no excluye a nadie: su pecado es lo que los excluye. La elección incluye a
millones.

Dios no tomo a un tierno niñito y dijo voy a endurecer tu corazón y luego voy a lanzarte al
infierno. Cuando una persona tiene su corazón endurecido contra Dios, todo lo que hace es
rebelarse contra Dios y su corazón se endurece aún más.
La frase de Pablo en el versículo 11 es crucial. "Pues no habían aún nacido, ni habían hecho
aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no
por las obras sino por el que llama". ¿Por qué dice esto el apóstol? El énfasis aquí se pone
claramente en la obra de Dios. Niega claramente que la elección sea resultado de la obra del
hombre, prevista o de cualquier otra forma. Es el propósito de Dios conforme a su elección
lo que aquí se considera.

1 Pedro 2:8-10 Piedra de tropiezo, y roca que hace caer, porque tropiezan en la palabra,
siendo desobedientes; a lo cual fueron también destinados. El pueblo de Dios Mas vosotros
sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que
anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; vosotros
que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro
tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.
Aquí la biblia nos habla de destinados a la desobediencia, la palabra le es difícil, estorbo,
carga, tropiezan en ella, no pueden obedecerla. Y vemos el contraste de la elección para ser
santos, para obedecer a la palabra de Dios. Unos no alcanzaron misericordia, y otros
alcanzaron misericordia en Cristo.

Judas 4 Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían
sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la
gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.
Destinados a condenación. No recibieron misericordia de Dios, pero Dios no es injusto al
no hacerlo, porque de quien quiere tenerla la tiene. En cambio, recibirán justicia de Dios,
cuando se les juzgue según su extravío.

Párrafo 4: Estos ángeles y hombres así predestinados y preordenados están designados


particular e inalterablemente, y su número es tan cierto y definido que no se puede
aumentar ni disminuir.

Aquí vemos que se habla de la particularidad, es decir, que Dios determino específicamente
quien si o quien no. Ejemplo: no es que Dios desde la eternidad pasada decreto vida eterna
para 100 millones de personas, y que luego en el transcurso de la historia iría salvando a
algunos hasta completar esa cifra. NO. Sino que Dios específicamente sabe cuales son los
elegidos. Dios no eligió un grupo, sino personas, individualmente.
Mateo 22:1-14 Respondiendo Jesús, les volvió a hablar en parábolas, diciendo: El reino de
los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo; y envió a sus siervos a
llamar a los convidados a las bodas; mas estos no quisieron venir. Volvió a enviar otros
siervos, diciendo: Decid a los convidados: He aquí, he preparado mi comida; mis toros y
animales engordados han sido muertos, y todo está dispuesto; venid a las bodas. Mas
ellos, sin hacer caso, se fueron, uno a su labranza, y otro a sus negocios; y otros, tomando
a los siervos, los afrentaron y los mataron. Al oírlo el rey, se enojó; y enviando sus
ejércitos, destruyó a aquellos homicidas, y quemó su ciudad. Entonces dijo a sus siervos:
Las bodas a la verdad están preparadas; mas los que fueron convidados no eran dignos.
Id, pues, a las salidas de los caminos, y llamad a las bodas a cuantos halléis. Y saliendo
los siervos por los caminos, juntaron a todos los que hallaron, juntamente malos y buenos;
y las bodas fueron llenas de convidados. Y entró el rey para ver a los convidados, y vio allí
a un hombre que no estaba vestido de boda. Y le dijo: Amigo, ¿cómo entraste aquí, sin
estar vestido de boda? Mas él enmudeció. Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de
pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.
Porque muchos son llamados, y pocos escogidos. Dios sabe quienes son sus elegidos,
ninguno puede, por decirse así, entrar colado, Dios sabe quienes son. Muchos son llamados
a la salvación, pero pocos son elegidos. Dios sabe quiénes son sus elegidos. Lo sabe por su
nombre. Muchos escuchan el evangelio porque esta abierto para todos, pero solo algunos
son elegidos. Esa es la verdad bíblica. La salvación no depende del ser humano. Sin
embargo, esto no quiere decir que no tenga que obedecer a Dios. Una cosa es la salvación y
otra la santificación. La salvación es solo por obra de Dios, la santificación nace de Dios, es
propiciada por Dios, y a la misma vez el ser humano debe cooperar. Debe mortificar sus
pasiones y someterlas a la voluntad de Dios.

Juan 13:18 No hablo de todos vosotros; yo sé a quienes he elegido; mas para que se
cumpla la Escritura: El que come pan conmigo, levantó contra mí su calcañar. En este
contexto, el Señor sabía quiénes son sus elegidos, Pedro, Juan, Santiago, Tomas, Felipe,
pero sabía que Judas aunque estaba entre ellos nos era elegido. Así mismo, en un contexto
más general, él sabe quiénes en la iglesia son elegidos.
Romanos 11:5-6 Así también aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido por
gracia. Y si por gracia, ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si
por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra. Hay un remanente
(reserva) de personas elegidas dentro de la totalidad de seres humanos. Dios sabe quiénes
específicamente dentro del universo son elegidos. Gracia y obras son excluyentes, o es una
o es la otra. La salvación no es por que soy mejor que otro, o mas moral que otro, NO, no
es por obras. Es por la gracia, pero la gracia incluye el propósito de llevar a la persona
elegida a ser como Cristo, es decir, a ser santos y sin mancha.

1 corintios 7:20-22 Cada uno en el estado en que fue llamado, en él se quede. ¿Fuiste
llamado siendo esclavo? No te dé cuidado; pero también, si puedes hacerte libre,
procúralo más. Porque el que en el Señor fue llamado siendo esclavo, liberto es del Señor;
asimismo el que fue llamado siendo libre, esclavo es de Cristo. Aquí vemos el llamado de
Dios que tiene ocasión en el desarrollo del tiempo, pero este corresponde a una elección en
el pasado eterno. Son llamados individualmente, personalmente, solo los que han sido
elegidos. Si el llamamiento es individual, personal y específico, entonces debe serlo
también la elección.

2 Timoteo 2:19 Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el
Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de
Cristo. Hay una base firme, Dios sabe quienes son elegidos, eso es firme, él ya lo sabe, no
es que lo este conociendo mientras que la gente se está convirtiendo al Señor. Lo sabe de
antemano porque ya hubo una elección, ya hubo una preordenación, una predestinación.

Párrafo 5: A los humanos que están predestinados para vida, Dios (antes de la fundación
del mundo, según su propósito eterno e inmutable y el consejo secreto y beneplácito de su
voluntad) los ha escogido en Cristo para gloria eterna, meramente por su libre gracia y
amor,1 sin que ninguna otra cosa en la criatura, como condición o causa, le moviera a
ello.2

Este párrafo enseña que cuando Dios eligió, realizó la elección, no lo hizo poniendo alguna
condición obligatoria para elegir a las personas, sino que fue sin ninguna condición. Hay
una elección incondicional.
Cuando nosotros elegimos algo, por ejemplo, las elecciones de candaditos a la presidencia,
hacemos la elección de un candidato determinado por lo que él es, por lo que representa, o
por lo que ha prometido. Entonces nuestra elección está basada en las promesas que ha
hecho el candidato o lo que él es, es una elección condicional.

Pero mis hermanos en la elección de Dios no hay condición previa, es una elección
incondicional. Dios nunca basa su elección en lo que el ser humano piense, dice, hace o es.
No sabemos en que basa Dios su elección, pero no es algo que este en el hombre. No es que
ve algo bueno en un ser humano especifico, algo que induce a Dios a decidir elegirlo.

Si la elección de Dios se basará en algo que teníamos que ser, pensar o hacer, entonces
¿Quién se salvaría? La escritura nos da testimonio que todos estamos muertos en delitos y
pecados (efesios 2), nos da testimonio de que no hay nadie quien entienda, no hay quien
busque a Dios, no hay quien haga el bien (romanos 3). Entonces, si la elección de Dios se
basara en alguna cosa buena que hubiese en nosotros, entonces nadie sería elegido. Nadie
iría al cielo, todos iríamos al infierno. Porque nadie es bueno.

Veamos estas verdades en la escritura:

Romanos 8:30 Y a los que predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó, a estos
también justificó; y a los que justificó, a estos también glorificó. Este versículo es el que se
le llama el orden de la salvación. En él podemos ver algunos sucesos o eventos que ocurren
en el creyente, y los podemos ver en orden. Si hay una predestinación, necesariamente
habrá un llamamiento, una justificación y una glorificación. Hay una predestinación antes
de que todo ser humano hubiese sido creado, luego viene un llamamiento particular a cada
predestinado, luego hay una justificación que es el acto de considerar como justo al
pecador, como si nunca hubiese pecado, aunque sigue siendo pecador, y por último la
glorificación futura. Vemos un evento inicial en la eternidad pasada, y un evento final en la
eternidad futura.

Estos eventos no dependen de algo del ser humano, no es el ser humano el que se
predestina, no es el que se llama, no es el que se justifica, no es el que se glorifica, sino que
Dios activamente lo hace en el ser humano. Dios lo hace aun entendiendo que es un
pecador, no depende de la bondad del hombre.
Efesios 1:4-6,9 según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que
fuésemos santos y sin mancha delante de él, 5 en amor habiéndonos predestinado para ser
adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, 6 para
alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado. 9 dándonos a
conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí
mismo. Entonces, vemos nuevamente que Dios nos escogió, no que nosotros escogimos a
Dios. Dios nos escogió en Cristo, es decir, no debido a nosotros mismos, sino por causa de
Cristo. Dios nos escogió para que fuésemos santos y sin mancha, no porque fuésemos
santos y sin mancha.

Esta elección y predestinación fueron según el puro afecto de su voluntad. Dios no escogió
al hombre porque previera en el algo que valiera la pena. Todo lo contrario, se omite algún
merito al ser humano y dice que la razón se encuentra solamente en el puro afecto de su
voluntad.

En amor nos predestino (5). El amor especial de Dios por sus elegidos, o si se quiere decir,
el amor salvífico, fue la razón de su elección. No fue por algo del ser humano, sino por su
amor.

2 Timoteo 1:9 quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras
obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de
los tiempos de los siglos. Según el propósito de Dios, no porque yo haya tenido buenas
obras, ni siquiera porque haya tenido fe, porque la fe es un regalo que Dios da. Fue solo por
gracia que se nos otorgo desde la eternidad pasada. Somos parte de un plan eterno. La
gracia nos ha sido dada en Cristo.

Romanos 9:11-16 ya meditamos en él.

Romanos 11:5-6 Así también aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido por
gracia. 6 Y si por gracia, ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia. Y
si por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra. La gracia es recibir lo
que no merecemos, recibir el perdón de Dios, la salvación. Entonces no es por obras, no es
por algo que Dios vio en nosotros, no es porque éramos mejores que los demás, no era
porque éramos menos infractores de la ley de Dios que los demás, no porque yo si creía en
Dios y los otros no (la regeneración precede a la fe, recibo gracia y luego recibo fe). La
gracia y las obras son excluyentes en este aspecto de la elección. Elegidos por gracia no por
obras.

Párrafo 6: Así como Dios ha designado a los escogidos para la gloria, de la misma
manera, por el propósito eterno y libérrimo de su voluntad, ha preordenado todos los
medios para ello;1 por lo tanto, los que son escogidos, habiendo caído en Adán, son
redimidos por Cristo,2 eficazmente llamados a la fe en Cristo por su Espíritu obrando a su
debido tiempo, son justificados, adoptados, santificados3 y guardados por su poder,
mediante la fe, para salvación;4 nadie más es redimido por Cristo, o eficazmente llamado,
justificado, adoptado, santificado y salvado, sino solamente los escogidos.5

Este párrafo nos habla que Dios no solo elige a los que han sido destinados para vida
eterna, sino que organiza como se llevará a cabo esto. NO solo da el objetivo final, sino
también como se va a alcanzar ese objetivo. Dios traza todo un plan. No hay nada que se
quede por fuera del gran plan eterno. Este no fue un plan de último minuto, algo que a Dios
se le ocurrió de repente hacer. Todo esto fue hecho conforme a la intención eterna de Dios.
Entonces Dios Preordenó el fin (elegidos para vida eterna) y preordenó los medios (Cristo
medio de redención, Espíritu medio del llamado)

1 Pedro 1:2 elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para
obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.
En este versículo vemos la trinidad actuando según cada rol para la salvación del ser
humano. Se menciona la elección del Padre, la santificación del Espíritu, el rociamiento de
la sangre de Jesucristo. Entonces el Padre elige libremente a los que han de venir a la
salvación (objetivo), pero debido a nuestros pecados y debido a su justicia no puede haber
vida eterna, sino muerte eterna, por esa razón, para superar esto estableció el medio para ser
perdonados de nuestros pecados, con la vida, obra y muerte de nuestro Señor Jesucristo;
pero debido a que en nuestras vidas, aún después de perdonados aún tenemos residuos de
pecado en nuestro ser, entonces estableció al Espíritu para que, en su obra eficaz, produzca
en nosotros el querer como el hacer y hacer morir en nosotros las obras de la carne.
2 tesalonicenses 2:13 Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a
vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio
para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad. Nuevamente
vemos que Dios (Padre) eligió para salvación desde el principio, es decir, desde cuando el
plan se trazó en la eternidad pasada cuando nada había sido creado, cuando no existía el
tiempo, pero para cuando ya existiera tiempo y existieran los elegidos, pues estableció que
el Espíritu obrara en ellos para lograr la santificación, y la fe en Jesucristo.

Efesios 1:3-4 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con
toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo, según nos escogió en él antes
de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él. El padre
nos escogió, pero no en nosotros, no por algo que hicimos nosotros, NO, sino que escogió
un medio para llegar a la vida eterna, escogidos en Cristo. Nuevamente vemos que la
elección fue hecha desde la eternidad pasada, cuando no existía nada. Alla cuando no
existía nada fuimos preordenados no solo a salvación, no solo elegidos, sino con un
propósito para ser santos y sin macha. Ya estábamos predestinados a ser santos, y como ya
vimos esta es la obra que hace el Espíritu en cada uno de nosotros. De manera que,
nuevamente, vemos elección y medios para llegar al propósito eterno.

Efesios 2:10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las
cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas. Hacer a un pecador, que
solo puede pecar, que rechaza a Cristo, que no solo no puede, sino que no quiere venir a
Cristo, hacerlo santo, recibir a Cristo, obedecer sus mandamientos, eso solo puede ser obra
de Dios, pero hay un medio sobre el cual podemos ser un nuevo ser que ame a Dios, el
medio es Cristo. Solo en él podemos hacer esas buenas obras que son la obediencia a sus
mandamientos. Dios ya había preordenado los medios y también los resultados, preordenó,
preparó las buenas obras, que obedeciéramos sus mandamientos.

Frase 2: por lo tanto, los que son escogidos, habiendo caído en Adán, son redimidos por
Cristo. Esta frase es una aclaración. Los elegidos para vida eterna fueron creados rectos,
pero ellos mismos buscamos muchas perversiones. Fuimos creados perfectos pero el medio
para la caída fue Adán, y el medio para ser redimidos es Cristo.
1 tesalonicenses 5:9-10 Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar
salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, 10 quien murió por nosotros para que ya
sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él. Pablo, hablando a la iglesia
de Tesalónica, les dice que no han sido puestos o elegidos para recibir la ira de Dios, sino
que han sido puestos o elegidos para alcanzar salvación, para vivir junto con Cristo, y
¿Cuál es el medio? el medio es la muerte de nuestro Señor Jesucristo.

Tito 2:14 quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y
purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras. Nuestro señor Jesucristo
libremente se ofreció por los elegidos para liberarnos de la esclavitud del pecado y hacernos
cada vez mas santos y sin mancha, con muchos deseos de hacerlas buenas obras que son
obediencia a sus mandamientos.

Frase 3: eficazmente llamados a la fe en Cristo por su Espíritu obrando a su debido


tiempo, son justificados, adoptados, santificados. El Espíritu es quien permite venir a la fe
en Cristo. Según el plan intratrinitario por medio del Espíritu las personas son llamadas a la
fe en Cristo. La fe no es un merito del ser humano, no es una obra del ser humano, sino es
un regalo de Dios. No es correcto considerar la fe como una obra humana que suplante la
justicia de Dios en Cristo, pues no hay nada en el ser humano, ni puede hacer nada para ser
salvado, sino por Cristo únicamente.

Cuando se habla de fe es igual a hablar del contenido de la fe, es decir, a los méritos o a la
justicia de Cristo. Cuando se habla de fe como medio o instrumento que salva, no se habla
del instrumento por el cual Dios salva, sino el instrumento por el cual se recibe a Cristo.

Cuando se recibe a Cristo mediante la fe, entonces el creyente pasa por una serie de
eventos, unos de los cuales son la justificación delante de Dios, la adopción como hijos, y
la santificación como un proceso progresivo.

Romanos 8:30 Y a los que predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó, a estos
también justificó; y a los que justificó, a estos también glorificó. Esto es lo que se conoce
como el ordu salutis que es una frase en latín que significa orden de la salvación. Vemos
una serie de pasos o eventos que son como eslabones, uno lleva al otro. Los predestinados
en la eternidad pasada por el Padre, son llamados en la actualidad llamados por el Espíritu,
justificados por la obra de Cristo hace 2000 años, y glorificados finalmente en la eternidad
futura.

Efesios 1:5 en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio
de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad. La obra eficaz del Espíritu, y cuando
decimos eficaz es que su obra alcanza el objetivo propuesto, lo hará posible a pesar de todo
la adversidad. Gracias a la obra eficaz del Espíritu, los que son elegidos por el Padre en la
eternidad pasada, a su debido tiempo, si o sí, son adoptados hijos suyos gracias a la obra
redentora de Cristo. Toda la trinidad está involucrada en el acto de redención del ser
humano.

2 tesalonicenses 2:13 Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a
vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio
para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad. Los elegidos
por el Padre para salvación, serán traídos a la fe en su debido tiempo por el Espíritu, por su
obra eficaz que los hace nacer de nuevo, les implanta la fe y los conduce a la santificación.

Frase 4: y guardados por su poder, mediante la fe, para salvación. No es nuestro poder,
nuestra astucia, no es nuestra confianza en nosotros mismos, por la cual nos sostenemos,
sino es por el poder del Espíritu, quien nos preserva en la fe para salvación.

1 Pedro 1:5 que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la
salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero. Por esta razón
nuestras fuerzas, aunque son necesarias, es nuestro deber actuar y ejercitarnos en la piedad,
en realidad es el poder de Dios en el Espíritu, quien nos sostiene. debemos cooperar con
nuestras fuerzas y descansar en el poder de Dios, porque la salvación ya está preparada
desde la eternidad.

Frase 5: nadie más es redimido por Cristo, o eficazmente llamado, justificado, adoptado,
santificado y salvado, sino solamente los escogidos. ¿Puede salvarse alguien aparte de los
elegidos? La respuesta a esta pregunta, según el párrafo 4 (y su número es tan cierto y
definido que no se puede aumentar ni disminuir.), es: 'No'. La razón de esto, sin embargo,
no es que Dios impida activamente que se salven, sino qué solamente por la gracia
preordenada de la elección vendrán a buscar la salvación. En otras palabras, los que Dios ha
elegido, por la obra del Espíritu, ellos buscaran y querrán la salvación, y los que no han
sido elegidos no buscaran la salvación, porque el ser humano en su pecado, sin que Dios
obre en él, huye de Dios, le aborrece. En otras palabras, fuera de la misericordia electiva,
nadie quiere ser salvo.

Juan 6:64-65 Pero hay algunos de vosotros que no creen. Porque Jesús sabía desde el
principio quiénes eran los que no creían, y quién le había de entregar. Y dijo: Por eso os
he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado del Padre. El Señor conoce
desde el principio el fin. El Señor conoce quienes creen ¿por qué? Porque él conoce quienes
el Padre ha elegido, solo esos vienen a Cristo en arrepentimiento y fe, porque el Espíritu si
obrará en ellos. Él conoce quienes no creen y quienes si creen, porque el sabe quienes son
los elegidos.

Juan 8:47 El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto no las oís vosotros, porque
no sois de Dios. Unos escuchan la palabra de Dios y la obedecen, otros no la obedecen. El
que ha sido elegido por Dios, es de Dios, es pertenencia de Dios, él es hijo del Padre y el
Padre es de él. En contraste, los que no han sido elegidos no son de Dios, no son de
pertenencia de Dios, por eso no obedecen a la palabra de Dios.

Juan 10:26 pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho. El
Señor es el pastor, solo sus ovejas pueden creer porque han recibido la fe como un don,
como un regalo. Las que no son sus ovejas no pueden creer, persisten en la incredulidad
que ya tienen en sí mismos.

Juan 17:9 Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque
tuyos son. El Señor Jesucristo oró al Padre solo por los que el Padre le había dado, no por
todo el mundo, sino por los que el Padre le dio. Solo ellos, los que el Padre eligió, a su
debido tiempo vendrán al conocimiento y a la fe en Cristo, según la oración del Señor.

Romanos 8:28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien,
esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. ¿Quiénes son los que aman a
Dios? El ser humano, en su estado natural, no ama a Dios, sino se ama a sí mismo, se sirve
a sí mismo, el es su propio dios, es necesario que Dios obre primero en el corazón, le
otorgue el nuevo nacimiento para que pueda amar a Dios. Entonces, solo los elegidos por el
Padre antes de la fundación del mundo, en algún momento de sus vidas serán nacidos de
nuevo, serán convertidos a Cristo. Solo a estos todas las cosas que suceden, buenas o malas,
ayudan para el propósito de Dios en nuestras vidas, glorificar a Dios, y ser hechos a la
imagen de Cristo.

1 Juan 2:19 Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de
nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que
no todos son de nosotros. Hermanos nosotros somos conscientes, por que hemos vistos
casos, que en las iglesias hay falsos creyentes, falsos cristianos que de repente no vuelven a
la iglesia, se alejan, no se vuelven a congregar, o están, pero no obedecen a la palabra de
Dios que se instruye en la iglesia. Esto es así, como dice el versículo, porque no son de
nosotros, no son de la salvación, no son de los escogidos. NO todos son de nosotros. Y no
es que ellos quieren entrar a la salvación y Dios no les quiere dejar entrar, les cierre la
puerta, NO. Ellos simplemente quieren huir de la ira venidera, pero no quieren obedecer al
Señor de gloria. Ellos solos se descalifican por su pecado. Recordemos, Dios no endurece a
quienes no han sido elegidos para salvación, Dios no hace que ellos pequen más, sino que
en ellos ya hay incredulidad y maldad.

12 de enero de 2023

Hemos llegado a la conclusión del decreto de la predestinación que, recordemos, es una


parte del decreto de Dios, específicamente el que trata de los elegidos para vida eterna.

Hasta este momento entonces meditamos en que algunos hombres y ángeles son
predestinados, o preordenados, a vida eterna y a otros se les deja actuar en su pecado para
su justa condenación; hemos meditado en que son particularmente elegidos, es decir, que
Dios conoce quienes son sus elegidos; hemos meditado en que la elección para vida eterna
no obedece a algún merito de la persona, sino que fue una elección incondicional; y hemos
meditado en que así como Dios preordeno el fin (elección para vida eterna), también
preordeno los medios (redimidos por Cristo y eficazmente llamados por el Espíritu).
Y entonces para continuar y concluir leamos el párrafo 7: La doctrina del profundo
misterio de la predestinación debe tratarse con especial prudencia y cuidado, para que los
hombres, al ocuparse de la voluntad de Dios revelada en su Palabra y, al obedecerla,
puedan, por la certidumbre de su llamamiento eficaz, estar seguros de su elección eterna;
de este modo, esta doctrina proporcionará motivo de alabanza, reverencia y admiración a
Dios, y de humildad, diligencia y abundante consuelo a todos los que sinceramente
obedecen al evangelio.

Iniciemos con la frase 1: La doctrina del profundo misterio de la predestinación debe


tratarse con especial prudencia y cuidado. Esta doctrina que encontramos en la escritura
debe ser creída y aceptada tal y como Dios la ha dejado en la escritura. No debemos
ignorarla y tampoco menospreciarla, sino darle el lugar en nuestro cuerpo de fe o nuestras
creencias.

Deuteronomio 29:29 Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las
reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos
todas las palabras de esta ley. Dios nos ha revelado, por su testimonio de la escritura, esta
gran verdad de la predestinación. Si la salvación no es obra del hombre debido a su
incapacidad (muerto en delitos y pecados) entonces es una obra de Dios, una obra planeada
desde la eternidad pasada. Hemos sido predestinados para salvación. Dios nos revela
entonces desde el principio el fin.

Romanos 9:20 Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? ¿Dirá
el vaso de barro al que lo formó: Por qué me has hecho así? Este versículo se encuentra en
el contexto de la elección de unos para salvación (Jacob y Esau), según él quiera tener
misericordia de algunos y de otros los deja en su propio endurecimiento. NO sabemos
porque unos si y otros no, si ambos son igualmente pecadores y merecedores de un justo
castigo, lo que SI sabemos es que es por amor en Cristo, un amor especial para unos, y un
pasar por alto a otros. NO es injusticia, es misericordia que Dios quiere mostrar. Por eso no
podemos altercar con Dios, porque no esta obligado a salvar a nadie. Nuestra vida es de él.
Estamos muy bendecidos en recibir su misericordia. Su misericordia y gracia brilla en su
esplendor cuando se da sin merecerse. La predestinación es de Dios, nos la ha dado, la ha
dejado como un testimonio de su soberanía absoluta, y por eso la aceptamos.
Romanos 11:33 ¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios!
¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! La doctrina de la
predestinación es un profundo misterio. Su decreto es imposible entenderlo desde nuestra
finitud. Aceptamos que Dios es infinitamente sabio, infinitamente bueno, infinitamente
justo, por eso todo lo que haga no solo es bueno, sino perfecto. De otra manera no sería
perfecto, así a nosotros nos parecería que si pudiese haber otra forma (solo son
percepciones de nuestra mente finita). LA predestinación de Dios es sabiduría pura de Dios
que podemos tal vez saborear, pero jamás entender en su perfecta dimensión.

Continuemos con la frase 2: para que los hombres, al ocuparse de la voluntad de Dios
revelada en su Palabra y, al obedecerla, puedan, por la certidumbre de su llamamiento
eficaz, estar seguros de su elección eterna. Cuando la estudiamos, meditamos y apropiamos
en nuestra vida. Cuando vemos que Dios en su palabra nos muestra que es una verdad
eterna, entonces la doctrina de la predestinación nos dará seguridad en cuanto al
llamamiento de parte de Dios y la elección que Dios nos hizo en la eternidad pasada.

1 tesalonicenses 1:4-5 Porque conocemos, hermanos amados de Dios, vuestra elección;


pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en poder,
en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos entre vosotros
por amor de vosotros. Pablo, cuando le escribió a los santos de tesalónica, tenía la plena
certidumbre de la elección de ellos ¿Cómo lo sabía? Porque habían oído las palabras del
evangelio y porque el Espíritu Santo estaba obrando con poder en ellos ¿Cómo?
Llevándolos cada vez más a la imagen de Cristo, llevándolos a la purificación de sus
pecados y la mortificación de los pecados, dejando cada vez más atrás aquella vieja vida.
Debemos estar convencidos de nuestra elección y llamamiento cuando veamos que
eficazmente el Espíritu obra en nosotros, y estamos siendo llevados al arrepentimiento y
santificación. La doctrina de la predestinación es de gran bendición cuando la meditamos.

2 Pedro 1:10 Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y
elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás. Si sabes que eres elegido, si
tienes esa plena certidumbre entonces eso te llevara a esforzarte por mejorar en tu vocación,
en tu llamado. Con la elección en tu mente, eso te comprometerá en corresponder con la
bendición que Dios te ha dado, Dios te eligió, tu haces lo que te corresponde, meditar en la
palabra, orar, servir a Dios, dejar tu vieja vida pasada, dejar las obras de la carne, y
revestirse más del nuevo hombre para que la imagen de Cristo sea cada vez más perfecta en
ti, y así los demás vean a Cristo a través de ti (ya no vivo yo, más vive Cristo en mi).

Continuemos con la frase 3: de este modo, esta doctrina proporcionará motivo de


alabanza, reverencia y admiración a Dios. Entonces hermanos, meditar y vivir esta
doctrina que encontramos en la escritura, no solo me da seguridad de mi salvación, de mi
elección, de mi llamamiento, sino que también brinda motivos para dar gloria a Dios.
Alabanza por aquel que me eligió, respeto profundo porque lo merece, y admiración de su
infinita sabiduría, amor y gracia al elegirme. Tu mi querido hermano has sido creado por
Dios para que le glorifiques en toda tu vida, en toda tu manera de vivir. Ese es el propósito
mayor del ser humano darle la gloria a quien lo merece, no hay otro más grande, no hay
otro más digno. Cumpliendo este propósito te sentirás pleno en tu vida. Po eso, entonces,
medita en esta verdad de la predestinación y serás lleno de gran motivación para
glorificarle.

Efesios 1:5-6 en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio
de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, para alabanza de la gloria de su gracia,
con la cual nos hizo aceptos en el Amado. La predestinación a hijos por medio de Cristo es
para alabanza de la gracia de Dios. Ese es nuestro destino planeado desde antes, antes de
que nacieras, antes de que nacieran tus padres, ya estabas destinado para alabar la gloria de
su gracia. Por eso debes esforzarte en glorificarlo, para eso fuiste creado, para eso fuiste
elegido, para eso fuiste llamado. No tienes otro fin, solo ese. El Espíritu te asiste en esta
noble meta (coloca en ti el querer como el hacer), pero debes ser responsable de hacerlo.

Romanos 11:33 ¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios!


¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Bendita es nuestra
elección, hecha en Cristo, aplicada en nosotros por el Espíritu. La escritura nos da
evidencias de las riquezas de su sabiduría. Estamos en un gran propósito, no solo un gran,
sino el mejor, el mas alto, el más sublime. Como dice Pablo Todo aquel que lucha, de todo
se abstiene; ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible, pero nosotros, una
incorruptible. Los que no creen en Dios se esfuerzan por sus metas, sus objetivos
personales o de su empresa, nosotros, nos esforzamos mayormente por el gran propósito de
nuestras vidas, glorificarle en todo. Ese debe ser nuestro pensamiento, ese debe ser nuestro
mayor deseo. Luchamos, absteniéndonos de cosas que no nos permiten alcanzar el gran
noble propósito glorificar la grandeza de su nombre.

Continuamos con la frase 4: y de humildad. La doctrina de la predestinación también nos


proporciona humildad. Si sabes que fuiste elegido desde antes, entonces afirmas que no te
elegiste a ti mismo, no fue que tu eligieras a Cristo, sino que fuiste elegido para creer en
Cristo, entonces ¿Dónde queda el orgullo humano? ¿de que me puedo jactar? Como dice
Pablo aprended a no pensar más de lo que está escrito, no sea que por causa de uno, os
envanezcáis unos contra otros. Porque ¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas
recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido

Romanos 11:5-6 Así también aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido por
gracia. Y si por gracia, ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si
por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra. Elegidos por gracia, por
que Dios lo quiso, no por algún merito o alguna obra nuestra. La obras merecerían un pago,
una recompensa, en este caso que Dios nos salvará, pero no es así, ninguna obra nuestra
sirve, porque no da en el estándar de perfección de Dios, por eso es por obras, para que
nadie se gloríe. La predestinación nos lleva a la humildad.

Romanos 11:20 Bien; por su incredulidad fueron desgajadas, pero tú por la fe estás en pie.
No te ensoberbezcas, sino teme. El ser humano por sí mismo no puede creer en Cristo, por
eso la fe es dada como un regalo, como un don de Dios. La incredulidad es nuestra, la fe en
Dios nos ha sido dada porque habíamos sido elegidos para ello, por eso no debemos
ensoberbecernos, sino temer a Dios.

Colosenses 3:12 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable
misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia. Los elegidos por
Dios, son santos (apartados del mundo con un fin), son misericordiosos, son bondadosos,
pacientes, pero también son humildes. Eso son los elegidos de Dios, a eso llevará el Señor a
cada elegido, a la humildad, a reconocer que todo es recibido de parte de Dios y no es
gracias a él mismo.
Frase 5: diligencia. Esta es una virtud más a la cual nos conduce la meditación y
apropiación de la verdad de la predestinación.

2 Pedro 1:10 Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y
elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás. Si soy elegido debo saber para
que, debo interesarme en averiguar para que, es decir, debo profundizar en la doctrina
cristiana, pero no de una forma superficial, pues en la escritura hay abundante riqueza de
conocimiento, como dice la biblia en Cristo están escondidos los tesoros de la sabiduría y
el conocimiento, si esto es así debo ser diligente en conocer más de Cristo para así
obedecerlo más.

Frase 6: y abundante consuelo 6 a todos los que sinceramente obedecen al evangelio.


Consuelo es parte de las virtudes que nos otorga entender y experimentar vivencialmente la
doctrina de la predestinación. Consuelo es recibir ayuda de pate de otro cuando se pasa por
alguna pena o aflicción.

Lucas 10:20 Pero no os regocijéis de que los espíritus se os sujetan, sino regocijaos de que
vuestros nombres están escritos en los cielos. El Señor nos aseguró que en esta vida
afrontaríamos aflicciones. Eso es lo que este mundo lleno de injusticias y pecados nos
brinda. Pero el Señor fue más allá en su enseñanza, él nos concientizó de que todo aquel
que quisiera vivir piadosamente en Cristo afrontaría persecución. Como enseñó el Señor: Si
alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame. Porque
todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí,
la hallará. Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su
alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma? Esta vida no lo es todo, hay una
venidera, eterna, debemos esforzarnos por ella, no para ganarla (porque es un regalo de
Dios), sino esforzarnos por glorificar a Cristo aquí, pero vendrán aflicciones de todo tipo.
Entonces, saber que he sido predestinado para vida eterna, me consuela saber que todo lo
que me suceda, no está fuera del control de Dios, al contrario tiene un propósito en Dios,
hasta la más pequeña de las circunstancias están a favor de los que aman a Dios. Si estoy
predestinado para vida eterna, nada ni nadie podrá desviarme de ese objetivo, porque todo
depende de Dios, Dios me guardará, Dios me ayudará. Eso es de gran consuelo. No importa
que tan oscuro me parezca el día, no importa que tanta aflicción afronte, algún día Cristo
alumbrará en mí.

Todo esto se dará a todos los que sinceramente obedecen el evangelio. Esto es una gran
aclaración, porque no es correcto pensar que el predestinado recibirá todas estas
bendiciones siendo desobediente al evangelio, eso no es correcto. Porque un desobediente
al evangelio claramente esta dando muestras de que no es un elegido. Un elegido
necesariamente será un obediente. Es un orden, es parte del orden de la salvación. Todo el
que es elegido necesariamente experimentara el proceso de obediencia es decir la
santificación.

¿es posible conocer si he sido elegido? Romanos 8:14,16 Porque todos los que son guiados
por el Espíritu de Dios, estos son hijos de Dios. 16 El Espíritu mismo da testimonio a
nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.

¿Cómo puedes saber si eres elegido? Puedes saber que eres elegido observando los frutos
de la elección en tu vida (nótese el párrafo 6). Si ves que tienes fe en Cristo,
arrepentimiento, santificación, obediencia a la palabra, perseverancia en la vida cristiana,
entonces es porque las tienes debido a la gracia de Dios, porque te ha elegido. Sólo los
elegidos poseen tales cosas genuinamente. De esta manera, si las tienes en tu vida, puedes
estar seguro de que eres elegido.

Sino están en tu vida entonces examínate muy bien si estas en la fe, pruébate a ti mismo.

DE LA CREACION

09 de febrero de 2023

Ahora comenzamos este 4 capitulo de la CF con el tema de la creación. Como podemos


observar el capitulo está compuesto por 3 párrafos. El primero nos habla de la creación de
forma global. El segundo nos habla de la creación del ser humano. Y el tercero nos habla de
la ley que recibieron acerca de no comer del árbol de la ciencia del bien y del mal.

El día de hoy nos centraremos en el primer párrafo:

En el principio agradó a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo,1 para la manifestación de la


gloria de su poder, sabiduría y bondad eternos,2 crear o hacer el mundo y todas las cosas
que en él hay, ya sean visibles o invisibles,3 en el lapso de seis días,4 y todas muy buenas.

Este párrafo está compuesto por 5 frases. De manera que dividiremos nuestro estudio
tomando cada frase, pero la primera frase la dividiremos en dos. En este orden de ideas nos
resultaran 6 puntos en nuestro estudio.

1. El tiempo de la creación.
2. El autor de la creación.
3. El propósito de la creación.
4. La dimensión de la creación.
5. La duración de la creación.
6. El resultado de la creación.

Iniciemos entonces con el tiempo de la creación. El párrafo nos dice: En el principio. Estas
palabras ¿que nos recuerdan automáticamente? el comienzo de las escrituras.

Las escrituras comienzan con el principio de la creación, no con el principio de Dios,


porque Dios es eterno.

Isaías 40:28 ¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los
confines de la tierra? No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay
quien lo alcance.

El principio, entonces, es el principio, pero de la creación.

En segundo lugar, veamos el autor de la creación: agradó a Dios Padre, Hijo y Espíritu
Santo. La CF declara su creencia en la autoría de Dios de la creación. Con esto se aparta
firmemente de las demás teorías que se tienen de la creación, como es la de la explosión o
Bing bang.
Como siempre hemos visto, la CF basa sus declaraciones totalmente en la escritura, por esa
razón afirma la autoría de la creación de parte del Dios manifestado en tres personas,
porque lo toma de las escrituras.

Hebreos 1:2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó
heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo. Este versículo nos habla de la
participación en la creación por parte de la persona del Padre y del hijo. El versículo nos
viene hablando del Dios el Padre, él es el sujeto de la oración, él fue quien constituyó como
heredero al hijo, y también fue él quien hizo el universo, y aquí es donde menciona al hijo
como participante de la creación.

Juan 1:2-3 Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él
nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. El evangelio de Juan comienza hablando del hijo.
Y nos hace una mención de su eternidad, es decir, que el hijo tiene el mismo atributo del
padre de la eternidad. En el principio nos transporta inmediatamente al génesis, al momento
de la creación, el evangelio de Juan concuerda con Genesis, y amplia un poco más la
información que se dio en el libro de génesis. Genesis 1:1 menciona que Dios creo los
cielos y la tierra, pero Juan da una mayor información, menciona que allí estaba el hijo, y
que el fue creador de todas las cosas.

Concluimos que el hijo participó en la creación, por cuanto es Dios, y con esto nos
apartamos de la idea de que él no estuvo en la creación, sino que fue parte de la creación
(algunos dicen que fue creado).

Genesis 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del
abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas. Este versículo esta justo
después de la mención de Dios como creador del cielo y de la tierra, lo que hace que se
pueda afirmar que el Espíritu Santo, la tercera persona de la trinidad, participó de la
creación, por cuanto es Dios.

Job 26:13 Su espíritu adornó los cielos; su mano creó la serpiente tortuosa. Este versículo
es tomado por la CF para afirmar la participación del Espíritu como creador. El Espíritu fue
el creador de todo los que podemos observar en el universo, en los cielos.
Job 33:4 El espíritu de Dios me hizo, Y el soplo del Omnipotente me dio vida. Estas
palabras son pronunciadas por Eliú el amigo de Job. Su mención es que el Espíritu es quien
hizo, no solo los cielos, sino también al ser humano.

Concluimos que la CF declara no solo que Dios hizo el universo, sino que la CF aclara que
fue la trinidad quien lo hizo. Esto de acuerdo a los pasajes de la escritura que revelan
claramente esta verdad.

En tercer lugar, veamos el propósito de la creación: para la manifestación de la gloria de


su poder, sabiduría y bondad eternos. Si la creación tiene un propósito es porque hace parte
de un plan, por lo tanto, no son acciones sueltas o al azar de parte de Dios. La creación es
parte de lo que Dios decretó desde la eternidad. Todos los actos de Dios hacen parte de un
plan realizado en la eternidad pasada.

La CF menciona que el propósito de la creación es el despliegue de glorioso de su poder, su


sabiduría y su bondad. No es que sin la creación Dios no sea poderoso, infinitamente sabio,
y bondadoso, NO. Dios siempre ha sido y será glorioso en todos sus atributos. Lo que se
quiere decir es que por medio de la creación se ve materializado sus atributos perfectos, al
ver la creación es posible ver el poder, sabiduría y bondad de Dios. Entonces, la creación
manifiesta, muestra, exhibe, declara, habla, de la gloria de Dios.

Tres atributos se nombran. El poder, porque nadie puede igualarlo en sus obras, ningún ser
humano tiene el poder para hacer la infinitud del universo, en cuanto a lo macro y lo micro.
También se nombra la sabiduría, pues todo está coordinado, dispuesto u organizado de tal
manera que es perfecto. Y bondad por cuanto la perfección de la creación, aunque es para
mostrar su gloria, es compartida y puesta al servicio y administración del ser humano.

Romanos 1:20 Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen
claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas
hechas, de modo que no tienen excusa. Este pasaje pone de manifiesto que, aunque no
tenemos la capacidad de verlo, la creación hace visible a Dios. Es una bondad para con el
ser humano caído que, pueda ver a Dios por medio de la naturaleza, por medio de su
familia, por medio de sí mismo.
Jeremías 10:12 El que hizo la tierra con su poder, el que puso en orden el mundo con su
saber, y extendió los cielos con su sabiduría. Al observar como es que nuestro planeta se
sostiene, y nos puede sostener, podemos ver el poder de Dios; al ver como es que cada
sistema del planeta puede funcionar debido a que cada elemento tiene una función que
contribuye al todo podemos ver que Dios es infinitamente inteligente. Los cielos muestran
sabiduría no solo en su existencia, sino también en su funcionamiento.

Salmo 104:24 ¡Cuán innumerables son tus obras, oh Jehová! Hiciste todas ellas con
sabiduría; La tierra está llena de tus beneficios. Nuevamente se habla de la sabiduría de
Dios en todas las obras de la creación de Dios, pero también el pasaje habla de los
beneficios. Dios otorga bondad al ser humano con todos los beneficios que encontramos en
el planeta. Tenemos todo lo necesario en el planeta para vivir, y lo tenemos en grandes
cantidades, más de lo que realmente necesitamos. El Señor es bueno con el ser humano.

Salmo 33:5-6 Él ama justicia y juicio; De la misericordia de Jehová está llena la tierra.
Por la palabra de Jehová fueron hechos los cielos, Y todo el ejército de ellos por el aliento
de su boca. La palaba de Dios es de gran autoridad y de gran poder. Él habló y las cosas
fueron hechas. Ningún ser creado, ni humano ni angelical tiene el poder de crear de la nada.
Podemos transformar un trozo de madera en una obra de arte, una piedra en una escultura, y
así muchas cosas, pero con alguna materia prima. Solo Dios es creador con gran poder. Por
eso la biblia, la escritura, su palabra, debe ser estimada como de gran autoridad para la
iglesia, debe ser obedecida. Lo que el Señor dice que debemos hacer, eso mismo debemos
corresponder.

Proverbios 3:19 Jehová con sabiduría fundó la tierra; Afirmó los cielos con inteligencia. A
nosotros los seres humanos, la creación nos habla de la sabiduría, de la inteligencia. Nadie
puede decir lo contrario. Nadie puede decir que hay perfección en la creación. Dios ha
mostrado su gloriosa sabiduría a través de la creación.

Hechos 14:15-16 y diciendo: Varones, ¿por qué hacéis esto? Nosotros también somos
hombres semejantes a vosotros, que os anunciamos que de estas vanidades os convirtáis al
Dios vivo, que hizo el cielo y la tierra, el mar, y todo lo que en ellos hay. En las edades
pasadas él ha dejado a todas las gentes andar en sus propios caminos. Estas palabras están
en el contexto de que algunos hombres al ver que Pablo y Bernabé sanaban a algunos,
entonces creían que eran dioses. Pero Pablo y Bernabé les dicen que ellos no son dioses,
sino hombres como cualquier otro, hombres que no tienen ningún poder, pero lo que si
hacen es anunciar arrepentimiento al Dios vivo, el cual, si tiene poder no solo para sanar,
sino para crear los cielos y la tierra.

En cuarto lugar, meditemos en la dimensión de la creación: crear o hacer el mundo y


todas las cosas que en él hay, ya sean visibles o invisibles. Nuestro Dios es el ser supremo,
no hay nadie por encima de él, todos, absolutamente todos los seres son creados por él
(humanos y angelicales), y de la misma forma todas las cosas son creadas por él, las que
podemos observar, y las que no son visibles al ojo humano.

Todas las cosas tienen una causa, Dios es la causa primaria de todas las cosas. De modo
que, si afirmamos que él mismo es la causa de todas las cosas, entonces tenemos que decir
que Dios no tiene una causa. Él es la causa no causada.

Genesis 1:1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Este pasaje menciona la autoría
de Dios acerca de los cielos y la tierra. Aunque aquí solo se menciona el cielo y la tierra, en
los versículos siguientes se observa que Dios crea todo el ejercito que habitan tanto los
cielos como la tierra. De manera que Dios es el creador de todas las cosas.

Juan 1:2-3 Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él
nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. Este pasaje también afirma que la creación se
extiende a todas las cosas. las cosas no vienen a la existencia por si solas, eso es imposible,
todas las cosas tienen una causa. Dios es la causa de todas las cosas.

Colosenses 1:16 Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y
las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados,
sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Este pasaje, en cierta parte, fue
tomado literalmente para declarar la frase 3, en la parte que nos dice: todas las cosas que
en él hay, ya sean visibles o invisibles. Dios es el autor de lo que se observa, pero también
de lo que no se observa, su poder trasciende nuestra realidad, va mucho más allá de lo que
nosotros conocemos. De manera que su poder y soberanía no puede ser calculado por
nosotros, ya que hay cosas que no podemos escrutar ni podemos conocer.
En quinto lugar, meditemos en la duración de la creación: en el lapso de seis días.
Algunos interpretes bíblicos afirman que los días de la creación se pueden tomar como eras
completas, es decir, un día de la creación pueden ser muchos años. Con esta declaración
intentan acomodar la Biblia a lo que propone la ciencia moderna cuando afirman la gran
antigüedad de la Tierra. Pero la única interpretación sana de la Biblia es que realmente Dios
hizo el mundo en una semana literal de creación.

Genesis 2:1-3 Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y
acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que
hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que
había hecho en la creación. Aquí hay una mención de que Dios reposa en un día de toda la
obra que hizo, y bendice Dios a un día, no una era, sino un día y ese mismo día lo santificó.
No santificó una era, sino un día.

Éxodo 20:8-11 Acuérdate del día de reposo para santificarlo. Seis días trabajarás, y harás
toda tu obra; mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra
alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que
está dentro de tus puertas. Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y
todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el
día de reposo y lo santificó. Con este pasaje se puede afirmar lo que acabamos de declarar
en el pasaje de génesis. Dios llama al séptimo día de la creación día de reposo. El
significado de día de reposo entonces no es discutible. El día de reposo en este pasaje es un
día literal. Significa cada séptimo día de la semana, de cada semana, literalmente.

En sexto lugar, meditemos en el resultado de la creación: y todas muy buenas. Dios es


perfecto en todos sus atributos, por lo tanto, todas sus obras no pueden ser sino perfectas.
Nada de lo que él haga esta incorrecto. Dios no se equivoca, Dios hizo todo muy bueno.

Sin embargo, vemos que la creación de Dios, en especial los seres humanos, no obran de
acuerdo a su voluntad, a sus mandamientos. Aunque esto es una realidad, no podemos
culpabilizar a Dios de hacer cosas malas, sino que la culpabilidad recae sobre el ser
humano.

Todo fue creado muy bueno, pero los seres humanos han pervertido la creación de Dios.
Genesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera.
Y fue la tarde y la mañana el día sexto. En su totalidad, la creación de Dios era buena. Al
finalizar de cada día, Dios exclamaba que era bueno lo que había creado; pero al finalizar el
día sexto, después de crear al ser humano, exclamo que todo era bueno, pero bueno en gran
manera.

Eclesiastés 7:29 He aquí, solamente esto he hallado: que Dios hizo al hombre recto, pero
ellos buscaron muchas perversiones. El Señor hizo al primer hombre recto delante de él, e
inocente; pero la serpiente lo sedujo para que comiera del fruto del árbol, que daba el poder
de discernir entre el bien y el mal; y fue esta la causa de que la muerte viniera sobre él y
sobre todos los habitantes de la tierra.

Dios ha dado al hombre facultades maravillosas; y las han utilizado en algunas ocasiones
para cosas malas. De manera que lo que Dios les dio a los seres humanos para lo bueno,
nosotros lo hemos utilizado para lo malo.

Romanos 5:12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el
pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron. Esto
es conocido como el pecado original, esa naturaleza pecaminosa que esta arraigada en lo
profundo del ser humano, y que fue adquirida por la desobediencia de Adán. El pecado y la
muerte entraron a la humanidad en un momento determinado en el Edén, antes de ello todo
estaba perfecto en el hombre, gozaba de su inocencia y su relación con Dios.

16 de febrero de 2023

Hace 8 días iniciamos el estudio de este capítulo 4 de la creación y básicamente lo que


meditamos fue en la creación de forma global o general, recordemos que dividimos nuestro
estudio en 6 partes:

1. El tiempo de la creación: la eternidad pasada.


2. El autor de la creación: la trinidad
3. El propósito de la creación: para la manifestación de la gloria de su poder,
sabiduría y bondad
4. La dimensión de la creación: crear o hacer el mundo y todas las cosas que en él
hay, ya sean visibles o invisibles
5. La duración de la creación: en el lapso de seis días
6. El resultado de la creación: todas muy buenas.

El día de hoy, dando continuación al capitulo de la creación, meditaremos en la creación,


pero ya de manera específica, hablando de la creación del ser humano.

Párrafo 2 dice: Después que Dios hubo creado todas las demás criaturas, creó al hombre,
varón y hembra, con almas racionales e inmortales, haciéndolos aptos para la vida con
Dios para la cual fueron creados;1 siendo hechos a imagen de Dios, en conocimiento,
justicia y santidad de la verdad;2 teniendo la ley de Dios escrita en sus corazones, y el
poder para cumplirla y, sin embargo, con la posibilidad de transgredirla, por haber sido
dejados a la libertad de su propia voluntad, que era mutable.3

1. La constitución del hombre.


2. La identidad del hombre.
3. La integridad del hombre

Veamos en primer lugar la constitución del hombre. La frase 1 dice: Después que Dios
hubo creado todas las demás criaturas, creó al hombre, varón y hembra, con almas
racionales e inmortales, haciéndolos aptos para la vida con Dios para la cual fueron
creados.

Cuando se habla de la creación del ser humano, el testimonio de la escritura es que fue
creado en el último día, es decir, el día sexto; esto lo podemos observar en el primer
capítulo de Genesis, donde se observa que el ser humano fue lo último que creó. Dios creó
todas las criaturas que habitan los cielos, la tierra, y las aguas, y por último creó Dios al ser
humano. La creación del ser humano es como un acto separado de la creación de los
animales, como una especie de culminación de la creación.

Genesis 1:27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y
hembra los creó. Ninguna criatura tiene la imagen de Dios, solo el ser humano es su
imagen. Y aunque Dios es espíritu, Dios creó al ser humano en dos géneros, varón y
hembra. No existen más géneros, como ahora el pensamiento progresista de la sociedad
quiere hacer creer a los demás y a nuestros niños. La| perversión ha crecido demasiado, aún
existen iglesias que defienden este tipo de desviaciones de lo natural. Solo varón y hembra
fueron creados para cumplir los propósitos de Dios.

Genesis 2:7 Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su
nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente. Aunque en el párrafo no es explicita
la mención de la composición del ser humano, si implícitamente lo hace. La composición se
hace referencia a las diferentes partes que componen el ser humano. El párrafo solo
menciona que Dios nos creó con almas raciones e inmortales, pero parte de la evidencia
clara de que todos tenemos una parte física que es el cuerpo. En este sentido, podemos
observar en los diferentes pasajes de la escritura que el ser humano tiene una parte física,
llamada generalmente nuestro cuerpo; Y una parte inmaterial, típicamente llamada nuestra
alma; o espíritu. Este versículo nos muestra que Dios tomó un elemento material, el polvo,
y le infundio la parte inmaterial, el espíritu (aire=neuma=neumatico), o alma.

Santiago 2:26 Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras
está muerta. EL ser humano fue creado para tener un cuerpo siempre, porque es inherente a
la naturaleza humana, pero en la muerte sucede una separación entre la parte material,
cuerpo y la parte inmaterial, alma o espíritu. La palabra muerte significa separación. Este
versículo nos afirma entonces que hay solo dos partes, en la muerte se separan esas dos
partes que fueron dadas al hombre en la creación.

Mateo 10:28 Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed
más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno. Aquí nuevamente
vemos la mención de cuerpo, parte material (se puede matar), y alma, parte inmaterial (no
se puede matar). Si en el versículo anterior se usó espíritu para la parte inmaterial, y aquí
alma para la parte inmaterial, entonces debemos afirmar que el Espíritu y el alma hacen
referencia a lo mismo, se usan sin distinción, son intercambiables.

Eclesiastés 12:7 y el polvo vuelva a la tierra, como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo
dio. No se desconoce que algunos hermanos en la fe, afirman el hecho de que el ser
humano está compuesto de tres partes, lo que comúnmente se denomina como el
tricotomismo o tripartismo, el cuerpo, el alma, y el espíritu. Y aunque ya vimos que alma y
espíritu se utilizan somo sinónimos; aquí podemos observar de nuevo que solo son dos
partes: el polvo, el cuerpo, la parte material vuelve a la tierra, y el espíritu, parte inmaterial,
vuelve a Dios. No vemos ninguna mención que el alma vuelva a ningún lugar.

Hablando del tricotomismo, debemos ver que en los filósofos griegos hablaban de un
dualismo en el ser humano, es decir, que el ser humano estaba compuesto de cuerpo y alma,
que el cuerpo es todo lo mortal y corruptible que nos impulsa al mal, y lo puro que es el
alma, inmaterial, inmortal. Para los griegos, el cuerpo era en el mejor de los casos
despreciable y, en el peor, esencialmente pecaminoso. El espíritu, por otro lado, era casi (o
realmente era) divino y eterno; Ellos consideraban que el cuerpo era la cárcel del alma
(gnósticos). Algunos cristianos tomaron esto de los griegos y afirmaron entonces que como
el alma se juntaba con el cuerpo entonces era contaminada, y necesitaban una parte que se
comunicara con Dios, una parte que no estuviese manchada, es decir, afirmaron que había
una tercera parte el espíritu.

Sin embargo, vemos por varios versículos que solo se habla de dos partes que componen el
ser humano.

La composición de nuestro ser nos muestra que tanto nuestros cuerpos como nuestras almas
son importantes. A veces podemos estar tan enfocados en el espíritu que no cuidamos de
nuestras propias necesidades físicas, ni de las necesidades físicas de los que nos rodean. O,
con más frecuencia nos ocurre, que enfatizamos la importancia de la vida física en la tierra
hasta el punto de que dejamos de prestar la debida atención a nuestro desarrollo espiritual.
Pero nuestra composición como seres de cuerpo-alma nos anima a reconocer la importancia
- y la interrelación - de ambos. Si somos verdaderamente espirituales, entonces honraremos
a Dios con nuestros cuerpos y cuidaremos de las necesidades físicas de los demás. Y si
verdaderamente buscamos usar nuestros cuerpos para glorificar a Dios y hacer su obra,
producirá crecimiento espiritual en nuestros corazones y almas.

Vamos al segundo punto la identidad del hombre. Leamos la frase 2: 1 siendo hechos a
imagen de Dios, en conocimiento, justicia y santidad de la verdad. La Confesión se refiere
en esta frase al hecho de que el hombre está creado a imagen de Dios. Esa es su identidad;
cuando ve a Dios puede verse en cierta manera, y cuando se ve, puede ver a Dios en cierta
manera. Ser hechos a imagen de Dios es entender que de alguna manera somos parecidos a
Dios, no en su deidad, sino en algunos atributos de Dios morales, racionales, espirituales).
Mostramos de alguna manera el poder, la autoridad y la bondad de Dios. Sin lugar a dudas,
nuestro poder, autoridad y bondad son muy pequeños en comparación con los suyos. Pero
todavía apuntan a él. Cuando Dios quiso hacer un ser que lo representara, hizo a la
humanidad.

Genesis 1:26-27 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a
nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias,
en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a
su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Dios delegó autoridad a los
seres humanos por sobre toda la demás creación. Dios designó a los seres humanos para
gobernar sobre su creación en su nombre. Dios en este pasaje dice que somos imagen de
Dios e inmediatamente dice que gobernamos la creación. Por lo tanto, un aspecto
importante de ser la imagen de Dios es que tenemos el oficio de gobernante. Podemos decir
que somos sus subgerentes, somos sus directores administrativos, o sus reyes servidores.

Genesis 5:1-3 Este es el libro de las generaciones de Adán. El día en que creó Dios al
hombre, a semejanza de Dios lo hizo. 2 Varón y hembra los creó; y los bendijo, y llamó el
nombre de ellos Adán, el día en que fueron creados. 3 Y vivió Adán ciento treinta años, y
engendró un hijo a su semejanza, conforme a su imagen, y llamó su nombre Set. Aquí, se
dice que Seth es a la vez la imagen y semejanza de su padre Adán. Por supuesto, ser la
imagen y la semejanza de un padre terrenal es considerablemente diferente de ser la imagen
y semejanza de Dios. Sin embargo, la semejanza entre Adán y Seth nos lleva a vernos a
nosotros mismos como algo más que sólo reflejos de las características de Dios.

Genesis 9:6 El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será
derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre. Esta es la razón por la cual
debemos respetar la vida de los demás, porque somos hechos a imagen de Dios. Aunque, a
causa del pecado, la imagen a quedado desdibujada, manchada, afectada, aun así seguimos
siendo imagen de Dios.

Eclesiastés 7:29 He aquí, solamente esto he hallado: que Dios hizo al hombre recto, pero
ellos buscaron muchas perversiones. Dios nos hizo perfectos, su imagen fue hecha en
nosotros. Dios es perfectamente bueno, santo y justo, él no tiene nada que ver con el
pecado. Así que, cuando Dios nos creó no nos hizo pecadores, Dios nos hizo a su imagen,
pero el ser humano decidió desobedecerlo, y a partir de allí se implanto el pecado, la
desobediencia, la maldad, la iniquidad en el corazón del ser.

1 corintios 11:7 Porque el varón no debe cubrirse la cabeza, pues él es imagen y gloria de
Dios; pero la mujer es gloria del varón. Otro versículo donde podemos ver que el varón y
la mujer son imagen de Dios, y reflejan la gloria de Dios.

Santiago 3:9 Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres,
que están hechos a la semejanza de Dios. Esta es una incongruencia en la cual caemos
algunas veces. Como podemos bendecir a Dios, y maldecirlo a la misma vez (maldiciendo a
su imagen), esto es incongruente. O lo bendecimos o lo maldecimos. Pero como el deseo de
un hijo de Dios es obedecerlo en todo, el deseo de un hijo de Dios es bendecirlo, esto
implica que debemos tener en cuenta que debemos bendecir también la imagen de Dios.
(ejemplo de una foto que nos produce sentimientos).

Colosenses 3:10 y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va
renovando hasta el conocimiento pleno. Los creyentes hemos sufrido un nuevo nacimiento,
Dios, por decirlo así, nos creo nuevamente, somos un nuevo ser humano, vamos
adquiriendo cada vez más la imagen del Señor.

Efesios 4:24 y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la
verdad. El ser humano fue hecho con conocimiento de la verdad, em justicia y santidad,
pero decidió desviarse y desobedecer, pero Dios por medio del Señor desea volver a la
humanidad a su condición anterior, en comunión con Dios, pero mejorada. De manera que
vamos recuperando el conocimiento, la justicia y la santidad que se perdió en la caída.

Como tercer punto, vemos la integridad del hombre. La frase 3 dice: teniendo la ley de
Dios escrita en sus corazones, y el poder para cumplirla y, sin embargo, con la posibilidad
de transgredirla, por haber sido dejados a la libertad de su propia voluntad, que era
mutable. Dios creo al ser humano con una conciencia que le dice que esta bien o que está
mal, de manera que la ley esta escrita en su corazón. Podía cumplirla (Adán y Eva), no
residía el pecado en su ser aún, Dios lo había creado bueno; como dice Agustín de Hipona
tenía la capacidad de no pecar (latín posse non pecare), pero además tenía la capacidad de
pecar (posse pecare), podía transgredir la ley de Dios. Se puede decir de Adán que era el
único, aparte de Jesús, que tenía la capacidad libre de escoger entre pecar y no pecar,
porque el pecado aun no estaba en su ser y por lo tanto no podía ser impulsado por él. No
tenia un corazón pecaminoso. Asi fue creado el hombre en integridad.

Romanos 1:32 quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales
cosas son dignos de muerte, no solo las hacen, sino que también se complacen con los que
las practican. El capítulo 1 de romanos nos menciona que la creación habla al ser humano
del poder de Dios, da muestras de su existencia, de modo que ninguna persona tiene excusa
acerca del conocimiento de Dios. Aunque el ser humano ha caído en pecado, y ha afectado
todas sus áreas, aun así entiende naturalmente que hay un juicio de Dios, sin embargo, hay
un momento en que a causa de cerrar sus oídos a esa verdad y pecar y pecar, pierde la
sensibilidad al pecado. El ser humano entiende que la maldad merece una retribución, que
Dios ejecutara justicia en algún momento.

Romanos 2:12ª, 14-15 Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán.
14 Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley,
estos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos, 15 mostrando la obra de la ley escrita
en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus
razonamientos. Dios ha dado la conciencia al ser humano que le atestigua acerca de su
comportamiento, le habla si estuvo bien o mal. Entonces, la conciencia es la facultad que
permite a los hombres juzgarse a sí mismo, se puede decir que en cierto sentido es un juez,
o el representante de la Ley Moral del Creador dentro de uno. Es un juez, ya que dicta
sentencia. Aunque el ser humano no conozca los mandamientos de Dios, si tiene esta
conciencia que evalúa constantemente sus acciones. Esta es la ley de Dios escrita en los
corazones. De modo que los que vienen al evangelio, reciben una mejor instrucción,
reciben una ampliación de la información, reciben mas luz, acerca de la ley que estaba en
sus corazones. De manera que en Cristo los seres humanos son perfeccionados en
conocimiento para obrar de acuerdo a la justicia y santidad de la verdad.

Genesis 3:6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los
ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio
también a su marido, el cual comió así como ella. el ser humano fue creado bueno, en
integridad, pero como ya mencionamos tenía una doble capacidad, tenia una libre elección,
nada lo impulsaba a hacerlo, era libre, o pecaba o no pecaba. Su voluntad tenía la capacidad
de ser cambiada, y así sucedió, engañada por la serpiente, Eva comió y desobedeció.
Conocía el mandamiento, podía obedecerlo, pero se dejó engañar, recibió el engaño en las
palabras de la serpiente que pervirtió el mandamiento bueno que Dios había dado. Su
voluntad le sirvió para desobedecer, su voluntad libre la llevo al pecado, a partir de allí la
voluntad quedo esclavizada al pecado. Pensemos… si siendo libre para no pecar,
desobedeció, ¿por qué ahora el ser humano con una voluntad esclavizada podrá buscar de
Dios para obedecerle? No puede, necesita que Dios obre en su corazón primero.

Eclesiastés 7:29 He aquí, solamente esto he hallado: que Dios hizo al hombre recto, pero
ellos buscaron muchas perversiones. Dios nos hizo íntegros, su imagen fue hecha en
nosotros. Dios es perfectamente bueno, santo y justo, él no tiene nada que ver con el
pecado. Así que, cuando Dios nos creó no nos hizo pecadores, Dios nos hizo a su imagen,
pero el ser humano decidió desobedecerlo, y a partir de allí se implanto el pecado, la
desobediencia, la maldad, la iniquidad en el corazón del ser.

Romanos 5:12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el
pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.
Nuestros primeros padres les aconteció así, acerca de que perdieron su libre voluntad, para
quedar en esclavitud del pecado. Pero ¿cómo es que nos sucede a nosotros los demás seres
humanos, que no hemos sido puestos en esa misma situación de la prueba en el paraíso?
Tenemos que decir que Adán nos estaba representando a todos allá en el Edén, cuando
Adán pecó, entonces todos pecamos. Él era nuestro representante, y fracasó. Por esa razón,
la integridad en que fuimos creados se perdió, y ahora todo ser humano descendiente de
Adán nace en la misma situación de pecado, nace esclavizado al pecado, nace muerto
espiritualmente, nace fuera del paraíso, nace lejos de la presencia de Dios, nace muerto en
delitos y pecados.

Y el último párrafo 3 es corto: Además de la ley escrita en sus corazones, recibieron un


mandato de no comer del árbol del conocimiento del bien y del mal; y, mientras lo
guardaron, fueron felices en su comunión con Dios y tuvieron dominio sobre las criaturas.
Realmente la escritura no da información acerca de cuanto tiempo transcurrió desde el
momento en que se dio el mandamiento hasta el momento de la caída en pecado. Lo que
podamos decir son simplemente conjeturas, pero que pueden a llevar a pensar
teológicamente. Por esa razón, aunque la biblia no lo dice, si se infiere correctamente que
mientras hubo obediencia a un mandamiento santo, puro y bueno, pues hubo vida,
felicidad. Comunión con Dios y dominio sobre la creación, es decir, sucedió todo lo
contrario a lo que sucedió cuando se cayó en pecado.

Genesis 1:26,28 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a
nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias,
en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 28 Y los bendijo Dios, y
les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces
del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. El
ser humano recibió bendición de Dios. Dios los creó, y creó todo un universo, y todo un
planeta para que lo administraran. Recibieron un corazón donde discernían entre lo bueno y
lo malo, además recibieron más instrucción, un mandamiento claro, dado con la voz de
Dios. El ser humano tenia todo para ser feliz, porque Dios siempre ha deseado lo bueno
para el ser humano, lo cual no es más que la propia presencia de Dios.

Genesis 2:17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que
de él comieres, ciertamente morirás. Este es un mandamiento bueno, porque no restringía
la posibilidad de comer, no era el propósito de Dios que aguantaran hambre, porque tenían
una riqueza y variedad en cuanto a opciones de comer. Pensemos… Adán y Eva tenían no
solo las frutas, verduras, vegetales, que conocemos en nuestro país, sino que también tenían
los muchos otros que aquí no conocemos, y además los tenían a la mano, pues la tierra no
había sido maldita por el pecado, es decir, les daba de sus frutos de manera fácil, sin
espinas ni cardos, sin el sudor de la frente. Además el mandamiento era bueno porque
mencionaba la advertencia, de manera que el castigo de Dios no fue arbitrario.

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